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Los Recuerdos Encubridores - Verseprint

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Doctorado en Fundamentos y Desarrollos Psicoanalíticos. Facultad de Psicología, Universidad Complutense.

Curso 2004-2005

“LOS RECUERDOS ENCUBRIDORES (1899): LA OBRA MÁS


LITERARIA DE SIGMUND FREUD” (Estudio crítico)

FEDERICO GARCÍA SERRANO


Universidad Complutense, Madrid, 2005

Freud: "Los recuerdos encubridores". Página 1 de 24


Doctorado en Fundamentos y Desarrollos Psicoanalíticos. Facultad de Psicología, Universidad Complutense. Curso 2004-2005

Índice:

1. Los recuerdos encubridores.


1.1. La importancia de estos “olvidos”.
1.2. Referencia a un estudio de C. y V. Henri.
1.3. Recuerdos irrelevantes y neurosis.

2. La aparente inocencia puede encubrir sentidos insospechados: un caso


particular (autobiográfico).
2.1. Tres tipos de recuerdos de primera infancia.
2.1.1. Recuerdos del tipo 1: imágenes mnémicas constituidas con
recuerdos posteriores de relatos de los padres.
2.1.2. Recuerdos del tipo 2: imágenes mnémicas directas asociadas a
hechos relevantes.
2.1.3. Recuerdos del tipo 3: imágenes mnémicas (fantasías)
aparentemente incomprensibles: los recuerdos encubridores.

2.2. La interpretación del sueño de la pradera (un recuerdo encubridor).


2.2.1. Las interrogantes: ¿Desde cuándo?
2.2.1.1. El sentimiento de añoranza de esos primeros años de
infancia.
2.2.1.2. La sensación de libertad perdida representada en los
paseos por el bosque.
2.2.1.3. La sensación de opresión de la vida en la ciudad.
2.2.2. ¿Quién?: un amor de adolescencia.
2.2.2.1. El descubrimiento del primer amor adolescente como
elaboración de una fantasía.
2.2.2.2. La duda sobre el destino (si los negocios de mi padre
no hubieran declinado
2.2.2.3. Años después al reencontrarla en la realidad me es
indiferente.
2.2.2.4. Durante mucho tiempo no podía ver nada de color
amarillo sin emocionarme profundamente.
2.2.2.5. Paralelismo entre la aversión a la flor después de la
infancia y la indiferencia en el reecuentro con la que fue su
primer amor

2.3. El recuerdo de unas vacaciones y un plan familiar de boda con su


prima.
2.4. La interpretación .
2.5. El amor de adolescencia como fantasía reprimida.

3. Conclusiones.

Anexos:
El Freud de 1899
Esquema biográfico, obra y contexto histórico

Freud: "Los recuerdos encubridores". Página 2 de 24


Doctorado en Fundamentos y Desarrollos Psicoanalíticos. Facultad de Psicología, Universidad Complutense. Curso 2004-2005

1. Los recuerdos encubridores (1899) 1

Comienza Freud por recordar que no es la primera vez 2 (1899) que se ocupa de los
recuerdos fragmentarios de los primeros años de la memoria de la infancia, significando
su gran importancia desde el punto de vista de las patologías psicológicas. A modo de
introducción, comienza por plantear algunas ideas generales referidas a los primeros
recuerdos infantiles, que podemos sintetizar en tres:

1. En ellos se hace patente la diferencia entre la conducta psíquica del


niño y la del adulto, lo cual permite deducir lo que de aquel queda en
éste.

2. Los sucesos de los primeros años de la infancia dejan en nuestra mente


unas huellas indelebles; pero sin embargo, son muy pocos los recuerdos
que quedan conscientemente en nosotros, y estos son frecuentemente
fragmentarios, aislados, inconexos.

3. La memoria plenamente consciente, en la que se da una concatenación


coherente de recuerdos, no suele comenzar hasta los seis, siete, o a veces
incluso diez años de vida. A partir de este momento se establece una
relación constante entre la importancia psíquica de un suceso y su
adherencia en la memoria, actuando selectivamente para conservar lo
esencial y olvidar lo secundario, de tal manera que una forma de valorar
la importancia de los grandes acontecimientos de nuestra vida se cifra en
esa capacidad para quedar incorporados a nuestra memoria consciente.

1.1. La importancia de estos “olvidos”.


En los estados anímicos patológicos, la mente pierde la capacidad de selección racional
de fijar acontecimientos en la memoria, actuando como en los primeros años de la
infancia, de forma irracional o pre-consciente, de ahí que para la comprensión de estos
estados anímicos resulte de gran interés la comprensión de los razonamientos infantiles.

“Así el histérico presenta una singular amnesia, total o parcial, en lo


que respecta a aquellos sucesos que han provocado su enfermedad, los
cuales, por esta misma causa, e independientemente de su propio
contenido, han adquirido para él sin embargo la máxima importancia.
En la analogía de esta amnesia patológica con la amnesia normal, que
recae sobre nuestros años infantiles, quisiéramos ver un significativo
indicio de las íntimas relaciones existentes entre el contenido psíquico
de las neurosis y nuestra vida infantil” 3 .

La importancia de este “olvido” de los recuerdos infantiles es puesta de relieve por


Freud. Es una forma de olvido natural, a la que estamos tan acostumbrados que no nos
llama la atención, no advertimos el problema que hay tras él ni atribuimos la
complejidad que tienen a los procesos psíquicos infantiles.

1
Artículo escrito en 1899, se recoge en el capítulo IV de Psicopatología de la vida cotidiana, publicado
en 1904.
2
Se refiere Freud a sus trabajos psicoanalíticos referidos a la histeria y a las neurosis obsesivas.
3
Cita literal del texto de Freud.

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“En realidad, un niño normalmente desarrollado nos muestra ya a los


tres o cuatro años una respetable cantidad de rendimientos psíquicos
muy complicados, tanto en sus comparaciones y deducciones como en la
expresión de sus sentimientos, no existiendo razón visible alguna para
que estos actos psíquicos, plenamente equivalentes a los posteriores,
hayan de sucumbir a la amnesia” 4

1.2. Referencia a un estudio de C. y V. Henri.


La ausencia de un trabajo de recopilación de material, indispensable para el estudio,
lleva a Freud a apoyarse en un trabajo de referencia de C. y V. Henri 5 , publicado muy
poco antes.

La observación inicial se refiere a la edad a la cual podemos remitirnos para encontrar


en la mente la capacidad de retener en la memoria recuerdos conscientes. Citando a C. y
V. Henri, Freud señala que por lo general estos primeros recuerdos encubridores
aparecen entre los dos y los cuatro años 6 , si bien determinados individuos pueden
relatar recuerdos antes de haber cumplido un año, mientras que otras personas no
pueden hacerlo hasta los seis e incluso ocho años de edad. A partir de la fecha de un
primer recuerdo, la memoria puede desvelar fragmentos, recuerdos inconexos entre si,
asociaciones diversas, pero no un verdadero relato secuencial de acontecimientos, pese
a lo cual puede observarse que lo que se adelanta o se retrasa de unos individuos a otros
no es simplemente el momento del primer recuerdo, sino el origen de la función
mnémica en su conjunto.

Lo esencial no es tanto la fecha del primer recuerdo, como su contenido. ¿Qué


contenidos son los primeros que generalmente retenemos en la memoria en proceso de
formación? ¿Que relación tienen estas primeras impresiones con la capacidad de
racionalizar e interpretar conscientemente esos acontecimientos? ¿Existe una relación
directa entre el impacto emocional de esas escenas y su huella en la memoria? Estas
cuestiones esenciales son planteadas por Freud, quien manifiesta que las normas de
selección mnémica de la infancia no parecen diferir de las de la edad adulta, tal como
parece deducirse del estudio de los Henri, en el que aparecen relatados como primeros
recuerdos aquellos que fueron seleccionados por el niño por su impacto emocional:
enfermedades, muertes, incendios, nacimiento de un hermano, situaciones de miedo,
vergüenza, dolor físico, etc... Lo diferente en realidad es la sensibilidad infantil, de tal
manera que acontecimientos tal vez irrelevantes para un adulto son los que por una u
otra causa puedan impactar más en el niño, como puedan ser lo referido a sus juegos y
entorno familiar y afectivo.

1.3. Recuerdos irrelevantes y neurosis.


Sin embargo, Freud subraya y corrobora una observación de los Henry: una parte de los
sujetos estudiados refiere unos primeros recuerdos cuyos contenidos parecen cotidianos
e indiferentes, que desde luego no explican en si mismo ningún impacto emocional: por
ejemplo, en los casos referidos, un plato de hielo sobre una mesa dispuesta para una

4
Aunque puestas de relieve desde un principio en sus trabajos sobre la teoría psicoanalítica, las
observaciones de Freud referidas a la psicología infantil fueron realmente desarrolladas por su hija Anna.
5
HENRI, C. y V. “Enquête sur les premiers souvenirs de l´infance”, en “L´Année psychologique”, tomo
III, 1897.
6
En el 88 % de los casos en el trabajo de C. y V. Henri.

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comida, o una ramita tronchada de un árbol durante un paseo... Freud apunta una
explicación que deduce de su experiencia clínica: tales casos excepcionales se
corresponden con sujetos enfermos de neurosis. La solución apuntada es que estas
escenas aparentemente irrelevantes no lo son en realidad, sino simplemente en ellas se
omiten los detalles significativos de la escena, cuyo olvido apunta hacia su verdadero
significado. En otras palabras, los elementos de la escena recordados no hacen sino
encubrir los detalles significativos de la escena, inconscientemente omitidos por alguna
razón que los convierte en verdaderamente significativos. Para explicar este enigmático
proceso, Freud apunta la hipótesis de dos fuerzas psíquicas que se oponen en la
constitución de los recuerdos. Estas fuerzas no se anulan una a la otra, sino que se
produce una transacción, un desplazamiento asociativo en el cual el contenido
rechazado queda anclado al contenido retenido, aparentemente irrelevante.

En la explicación del proceso, Freud recurre a un caso de paranoia por él estudiado: una
paciente que en sus alucinaciones escuchaba voces que recitaban pasajes enteros de la
Heiterethei de O. Ludwing cuyos contenidos parecían no tener nada que ver con las
propias circunstancias del enfermo. El análisis demostró que los pasajes omitidos en el
recuerdo eran los que realmente producían sensaciones muy penosas en el enfermo, de
tal manera que habían sido sustituidos en el recuerdo por otros pasajes de contenido
neutro, estableciendo un proceso propio de la neurosis: conflicto, represión y sustitución
transaccional. La conclusión de todo ello subrayada por Freud es la de la íntima relación
existente entre la vida anímica en la primera infancia y la neurosis.

2. La aparente inocencia puede encubrir sentidos insospechados: un caso


particular (autobiográfico).
El siguiente paso es establecer como la aparente inocencia de los recuerdos de infancia
suele encubrir sucesos de gran relevancia en la vida psíquica. Hecha esta afirmación,
Freud recurre a un ejemplo para explicarla, de evidente contenido autobiográfico 7

“... el más instructivo de los ejemplos por mi reunidos, que inspirará


además una mayor confianza por corresponder a un sujeto nada o muy
poco neurótico.
Tratase de un hombre de treinta y ocho años, y de formación
universitaria, que, a pesar de ejercer una profesión completamente ajena
a nuestra disciplina, se interesa por las cuestiones psicológicas desde
que conseguimos curarle una pequeña fobia, con ayuda del
psicoanálisis 8 . Habiendo leído la investigación de C. y V. Henri, me
comunicó la siguiente exposición de sus recuerdos infantiles, que ya
habían desempeñado cierto papel en el análisis:...”

7
Es comúnmente aceptado que tras el paciente de treinta y ocho años que relata sus recuerdos se esconde
el propio Freud, como apuntó S. Bernfeld. “Los personajes son fácilmente identificables: el primo y la
prima son sus sobrinos John y Pauline, la niñera Nannie y la otra mujer podría ser su madre” (GÓMEZ
SÁNCHEZ, Carlos. “Freud y su obra”, Biblioteca Nueva, Madrid, 2002, pág. 138.
8
Ante esta hipótesis, Freud se autodescribe como sujeto muy poco o nada neurótico; para avalar la
validez del testomonio aclara además que el testimonio corresponde a un hombre de formación
universitaria interesado por la psicología desde hace varios años. La referencia a la curación de una
pequeña fobia puede tener relación con alguna experiencia propia en los orígenes del psicoanálisis, que se
remontan cuatro o cinco años atrás, aproximadamente a los treinta y ochos de Freud, edad del paciente
referido. En 1989, fecha de este texto, Freud cumplía los cuarenta y tres años.

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Ante este tema es difícil no recurrir a la experiencia introspectiva, pues todos podemos
contrastar con nuestra propia experiencia las afirmaciones mantenidas por Freud, que
podría así haber querido refrendarlas con datos referidos a su propia experiencia
personal, pero sin desvelarlo de una forma explícita.

“Conservo numerosos recuerdos infantiles muy tempranos, cuyas fechas


puedo indicar con gran seguridad, pues al cumplir los tres años
abandonamos mi lugar de nacimiento para establecernos en una
ciudad. 9 Los recuerdos a que me refiero se desarrollan todos en mi
ciudad natal y corresponden por tanto al segundo y tercer año de mi
vida. Son en su mayoría escenas muy breves, pero claramente retenidas
con todos sus detalles de la percepción sensorial, contrastando así con
los recuerdos de épocas posteriores, carentes en mí de todo recuerdo
visual. A partir de los tres años se hacen mis recuerdos más raros e
imprecisos, mostrando lagunas que comprenden a veces más de un año.
Sólo desde los seis o siete años comienzan a adquirir continuidad.

En tales observaciones, Freud refrenda las observaciones de los Henri sobre la edad de
los primeros recuerdos, y el carácter inconexo e impreciso de los mismos hasta alcanzar
la edad en la que pueden ordenarse y relacionarse secuencialmente. El momento de
ubicarlos, coincidiendo con un cambio de residencia familiar y el alejamiento del
paisaje de la primera infancia sin duda es un elemento emocional suficientemente
poderoso para provocar la existencia del recuerdo, aun cuando no sean precisamente los
momentos más relevantes los recordados y su análisis presente detalles aparentemente
insignificantes que sin embargo adquieren toda su significación desde la interpretación
psicoanalítica.

2.1. Tres tipos de recuerdos de primera infancia.


En su interpretación analítica, Freud establece tres tipos de recuerdos referidos a esta
edad temprana:

2.1.1. Recuerdos del tipo 1: imágenes mnémicas constituidas con


recuerdos posteriores de relatos de los padres. En ellos parece imposible
precisar una imagen mnémica original o constituida después de relatos
posteriores a la experiencia vivida. Se sitúan junto a otro tipo de “recuerdos”
de los que no se tienen imagen mnémica alguna, pero que han sido elaborados
exclusivamente a partir de tales relatos posteriores.

2.1.2. Recuerdos del tipo 2: imágenes mnémicas directas asociadas a


hechos relevantes. Es decir, aquellos recuerdos que se corresponden
directamente con la experiencia vivida y retenida en la memoria, tal y como
puede acreditarse cuando se trata de hechos no relatados, o no recordados, por
otras personas y cuya interpretación resulta sencillamente deducible. Sin duda
estas presentan más valor que las primeras. Respecto de ellas, Freud advierte
que no se corresponden con los sucesos objetivamente más importantes de su
vida familiar (por ejemplo, el nacimiento de su hermana dos años y medio

9
Afirmación que se corresponde con la propia experiencia de Freud, cuya familia se traslada cuando él
tiene poco más de tres años desde su pequeña localidad natal de Freiberg (hoy Príbor) en Moravia, a
Viena.

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menor que él, la partida de su ciudad natal o una herida en la cara que le dejó
una cicatriz, hechos de los que no quedó recuerdo alguno en su memoria),
quedando retenidos en cambio detalles nimios del viaje en ferrocarril (en
referencia al caso de fobia ya citado). En cualquier caso, los recuerdos de estos
dos primeros grupos no causan extrañeza, pues su recuerdo está claramente
asociado al impacto de una situación vivida sobre la sensibilidad infantil. No
es el caso de los recuerdos del tercer tipo.

2.1.3. Recuerdos del tipo 3: imágenes mnémicas (fantasías) aparentemente


incomprensibles: los recuerdos encubridores. Se corresponden con aquellos
recuerdos que suscitan extrañeza pues no parecen estar ligadas a los
acontecimientos conocidos, “de las que no se sabe qué pensar”. No se trata
propiamente de recuerdos infantiles, sino de fantasías retraídas a la infancia
pero que dejan la impresión de ser verdaderos recuerdos, de tal manera que
nos dejan una huella indiferente y de incomprensible fijación. Para ilustrar este
tipo de recuerdos, Freud, recurre a un ejemplo, el recuerdo de una pradera
cuadrangular...

“Veo una pradera cuadrangular, algo pendiente, verde y muy densa.


Entre la hierba resaltan muchas flores amarillas, de la especie llamada
vulgarmente diente de león. En lo alto de la pradera, una casa
campestre, a la puerta de la cual conversan apaciblemente dos mujeres:
una campesina, con su pañuelo a la cabeza, y una niñera. En la pradera
juegan tres niños: yo mismo, representando dos o tres años; un primo
mío, un año mayor que yo, y su hermana, casi de mi misma edad.
Cogemos las flores amarillas, y tenemos ya un ramito cada uno. El más
bonito es el de la niña: pero mi primo y yo nos arrojamos sobre ella y se
lo arrebatamos. La chiquilla echa a correr, llorando, pradera arriba, y
al llegar a la casita la campesina le da para consolarla un gran pedazo
de pan de centeno. Al advertirlo mi primo y yo tiramos las flores y
corremos hacia la casa, pidiendo también pan. La campesina nos lo da,
cortando las rebanadas con un largo cuchillo. El resabor de este pan en
mi recuerdo es verdaderamente delicioso, y con ello termina la escena”.

2.2. La interpretación del sueño de la pradera (un recuerdo encubridor). Se


pregunta Freud por las razones que puedan haber existido para retener en la memoria un
recuerdo de apariencia tan inocente e irrelevante. Hace un repaso de causas
improbables: tal vez su mal comportamiento para con la niña, tal vez la impresión
producida por el color amarillo sobre la pradera, el delicioso sabor del pan de centeno...;
pero tales explicaciones resultan poco convincentes. Para encontrar un significado más
profundo, Freud recurre a la estrategia psicoanalítica, desarrollada a partir de
determinadas interrogantes:

2.1.1. Las interrogantes: ¿Desde cuándo?


La pregunta inicial sitúa a Freud en la pista de la resolución del problema, al
advertir que este primer recuerdo de la infancia cobra presencia en la memoria
a raíz de un hecho muy posterior.

“Cumplidos ya los diecisiete, volví durante unas vacaciones por primera


vez a mi lugar natal, alojándome en casa de una familia con la cual

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manteníamos relaciones de amistad desde aquellos primeros tiempos. Sé


muy bien qué plenitud de emociones me invadieron esta temporada. Mas
para contestar a su pregunta debo relatarle toda una parte de mi vida.
En la época de mi nacimiento gozaban mis padres de una regular
posición económica. Pero al cumplir yo los tres años, el ramo industrial
al que mi padre se dedicaba experimentó una tremenda crisis que dio al
traste con la fortuna familiar, obligándonos a trasladarnos de ciudad.
Vinieron luego largos años difíciles, en los que nada hubo digno de ser
retenido. En la ciudad no me sentía yo a gusto. La añoranza de los
hermosos bosques de mi lugar, a los cuales me escapaba cuando aprendí
a andar, según testimonia uno de mis recuerdos de entonces, no me ha
abandonado nunca. ... Tuve pues ocasión de comparar el bienestar que
en ella reinaba con la estrechez de nuestra vida en la ciudad.

Este preámbulo para la respuesta nos ofrece, pues, información previa de tres datos que
sirven de contexto interpretativo:

- 2.1.1.1. El sentimiento de añoranza de esos primeros años de infancia. En


el texto subyace este sentimiento de añoranza que sin duda tiene más que ver
con las visitas posteriores al lugar donde vivió su infancia que a los
presumiblemente endebles recuerdos de un niño de tres años de edad.

- 2.1.1.2. La sensación de libertad perdida representada en los paseos por el


bosque. En este sentido, el recuerdo narrado pueda ser una amalgama de
situaciones vividas y recreadas por la fantasía.

- 2.1.1.3. La sensación de opresión de la vida en la ciudad. Es precisamente el


contraste con la nueva vida urbana llena de penalidades económicas la que
acentúa el valor idílico del escenario de la primera infancia.

Sin embargo hemos de leer unas líneas más para que se presente al fin la clave del
enigma:

“Pero además he de confesarle otra circunstancia que me produjo vivas


emociones...

2.1.2. ¿Quién?: un amor de adolescencia.

“Mis huéspedes tenían una hija de quince años, de la que me enamoré


en el acto. Fue éste mi primer amor 10 , bastante intenso, pero mantenido
en el más absoluto secreto. La muchacha marchó a los pocos días a un
establecimiento de enseñanza, cuyas vacaciones terminaban antes que
las mías, y esta separación, después de tan breve conocimiento,
contribuyó a avivar mi pasión. Durante largos paseos solitarios por los
bellos bosques de mi infancia, vueltos ahora a encontrar, me complacía
en imaginar dichosas fantasías, que rectificaban mi pasado. Si los
negocios de mi padre no hubieran declinado, hubiéramos seguido
viviendo en aquel lugar, yo me habría criado tan sano y robusto como

10
Identificada por sus biógrafos como Gisela, hermana de su amigo Emil Fluss.

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los hermanos de la muchacha, habría continuado las actividades


industriales de mi padre y hubiera podido, al fin, casarme con mi
adorada. Naturalmente no dudaba ni un instante que en las
circunstancias creadas por mi fantasía la hubiera amado también con el
mismo apasionamiento. Lo singular es que al verla ahora alguna vez,
pues ha contraído matrimonio aquí, me es absolutamente indiferente y,
sin embargo, recuerdo muy bien que durante mucho tiempo después no
podía ver nada de un color amarillo, parecido al del traje que llevaba en
nuestra primera entrevista, sin emocionarme profundamente”

Nuevos y significativos datos para la interpretación:

- 2.1.2.1. El descubrimiento del primer amor adolescente como


elaboración de una fantasía. Como se verá, algo más complejo de lo que
puede aparecer a primera vista, puesto que no se trata de la elaboración
consciente de hechos vividos sino de la reelaboración de una fantasía a partir
de los datos conocidos de una realidad anterior.

- 2.1.2.2. La duda sobre el destino (si los negocios de mi padre no hubieran


declinado...). Una idea que sin duda forma parte de las preocupaciones
normales de un joven en la encrucijada de decidir sobre su futuro.

- 2.1.2.3. Años después al reencontrarla en la realidad me es indiferente.


Lo cual avala la idea de que realmente se enamoró de su fantasía y no de una
realidad.

- 2.1.2.4. Durante mucho tiempo no podía ver nada de color amarillo sin
emocionarme profundamente. Luego lo que se retiene en la memoria no es
tanto una flor o un color, sino las emociones y las fantasías encubiertas que se
asocian al recuerdo de ese color (por cierto, conviene advertir cuán imprecisa
es nuestra memoria para retener y expresar las tonalidades cromáticas).

La duda sobre la relación entre el color amarillo de las flores diente de león del primer
recuerdo de la infancia y el color del vestido de la muchacha el día de su
enamoramiento, sitúa a Freud ante la ambigüedad de una relación difícil de establecer.
“Quizá; pero no es el mismo color” Una representación intermedia, otra flor parecida en
los valles de los Alpes, podría servir de nexo de relación.

- 2.1.2.5. Paralelismo entre la aversión a la flor después de la infancia y la


indiferencia en el rencuentro con la que fue su primer amor. Como en el
caso anterior, esta aversión a la flor indica que no es la planta en si misma,
sino la asociación, lo que produce una huella en la sensibilidad, en la memoria

Cuestión que lleva a Freud a una nueva senda, otro recuerdo encubridor.

2.3. El recuerdo de unas vacaciones y un plan familiar de boda con su prima.


Se trata de un segundo episodio de su juventud, ligado a su vida sentimental:

“Tres años después de mi primer retorno a los lugares de mi


infancia fui a pasar las vacaciones a casa de mi tía, en las que

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encontré de nuevo a mis camaradas infantiles... Esta familia 11


había abandonado al mismo tiempo que nosotros nuestra primera
residencia, y había logrado rehacer su fortuna en una ciudad
lejana... creo que mi padre y mi tío habían formado el proyecto de
hacerme sustituir mis estudios abstractos por otros más prácticos:
establecerme después en la ciudad donde mi tío residía y casarme
con mi prima 12 ; proyecto al que renunciaron, quizá, al verme tan
absorbido en mis propios planes. Sin embargo yo debí de adivinar
algo de él, y cuando al terminar mi carrera universitaria pasé por
un periodo difícil, teniendo que luchar mucho tiempo para
conseguir un puesto que me permitiera hacer frente a las
necesidades de la vida, debí de pensar muchas veces que mi padre
hubiera querido compensarme con aquel proyecto matrimonial del
trastorno originado en mi vida por sus pérdidas económicas.

Con este segundo recuerdo, Freud completa un mosaico de elementos asociados a su


vida en los Alpes y sus excursiones juveniles por la montaña, cuya conexión no parece
muy clara, más allá del hecho de que se trata de recuerdos ligados a un paisaje, a la
familia, a una etapa de su vida en la que se unen la infancia y la juventud, la idea de
prosperidad truncada por los azares de la vida familiar y la inquietud de quien ha
elegido un camino para sus estudios que lleno de incertidumbres desde el punto de vista
práctico. Falta, pues, la interpretación, y en ello se ocupa Freud después de haber
finalizado su informe preliminar en el que asocia dos sucesos separados por tres años en
el tiempo, pero que ambos remiten a los mismos recuerdos de la primera infancia.

2.4. La interpretación.
El sabor del pan y las flores amarillas son los elementos simbólicos que prevalecen en la
interpretación que realiza Freud:

“El elemento más intenso de la escena infantil es el buen sabor del


pan.... esta representación, de la que emana una sensación casi
alucinante, ¿corresponde a la idea fantaseada... de que si hubiera
permanecido en aquel lugar se hubiera casado con la muchacha y
hubiera llevado una vida serena? Esta vida queda simbólicamente
representada por el buen sabor del pan... El color amarillo de las
flores es también una alusión a la misma muchacha... Arrojar las
flores para cambiarlas por un pedazo de pan me parece una clara
alusión al proyecto paterno de hacerle renunciar a sus estudios
abstractos para sustituirlos por una actividad más práctica que le
permitiera ganarse el pan”

Sobre estos elementos simbólicos se asociaron dos fantasías de la juventud que fueron
proyectadas la una sobre la otra, formando a partir de ellas una especia de recuerdo de
infancia, de una fantasía retrotraída a la infancia a partir de la cual se ha formado un
recuerdo infantil, tal vez a partir de una serie de escenas análogas.

11
Se trata de su padre, su hermanastro Emmanuel y sus sobrinos John y Pauline
12
En sus recuerdos, Freud asocia los recuerdos de Gisella y Pauline, personajes ligados a su vida
sentimental de adolescencia.

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“A tales recuerdos, que adquieren un valor por presentar en la


memoria impresiones y pensamientos de épocas posteriores, cuyo
contenido se haya enlazado al suyo por relaciones simbólicas, les
damos el nombre de recuerdos encubridores. 13 ”

La aparente extrañeza de los elementos de la escena infantil se diluye al observar que


realmente contienen los elementos necesarios para simbolizar o ilustrar los dos azares,
los dos impulsos más poderosos, en esa vida juvenil a la que pertenecen los recuerdos
asociados: el hambre (la necesidad de ganarse la vida y forjarse un futuro) y el amor.

2.5. El amor de adolescencia como fantasía reprimida.


A este último aspecto, al amor en sus primeras manifestaciones infantiles y
adolescentes, dedica Freud su reflexión final, en la que subraya que lo esencial de la
escena es la simbolización del amor.

“...el acto de quitar las flores a la muchacha es, en definitiva,


desflorarla... tales osadas fantasías constituyen un complemento
regular de la timidez juvenil”

De este modo, lo que se ha transformado en recuerdo infantil no es sino una fantasía


inconsciente, que es prolongación o manifestación de pensamientos conscientes
reprimidos, en los que se debate la duda sobre el destino, representado en la
incertidumbre ante la vida profesional en ciernes y en el debate sobre la elección del
amor como determinante de la vida futura, que son normalmente preocupaciones
esenciales en la juventud.

El último párrafo del texto apunta hacia las razones de esa represión, que les condena a
permanecer en el inconsciente como recuerdos encubridores:

“... el carácter groseramente sensual de la fantasía es la que


impide llegar a constituirse en una fantasía consciente”

3. Conclusiones.

En este texto (1899), Freud anticipa algunos de los temas que serán el caballo de batalla
de futuros trabajos, y algunos de los referentes fundamentales sobre los que gravitará la
teoría psicoanalítica. Lo esencial es la formación transaccional entre las fuerzas de
diferentes sistemas psíquicos, que sitúa a los recuerdos encubridores en el mismo
universo de lo onírico, de los actos fallidos, los lapsus o los chistes, esto es, el universo
en el que afloran las fuerzas del inconsciente, en este caso como formación de
compromiso o transaccional.

13
Recuerdo infantil que se caracteriza a la vez por su singular nitidez y la aparente insignificancia de su
contenido. Su análisis conduce al descubrimiento de experiencias infantiles importantes y de fantasías
inconscientes. Al igual que el síntoma, el recuerdo encubridor constituye una formación de compromiso
entre los elementos reprimidos y la defensa. LAPLANCHE, J y PONTALIS, J.B. “Diccionario de
Psicoanálisis”, Paidós, Barcelona, 1996, pág. 354.

Freud: "Los recuerdos encubridores". Página 11 de 24


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Y, más concretamente, anticipa algunos conceptos que se convertirán en fundamentos


de su teoría en ciernes:

- La represión de aquello que conscientemente nos perturba o incomoda (en este


caso, el despertar de la sexualidad)

- la presentación del mundo de la infancia como forjador de nuestra personalidad


y como campo de fuerzas inconscientes que regulan y establecen las bases de la vida
psíquica (el complejo de Edipo, la conciencia de la morfología sexual, la castración...

- La transferencia, el paso de lo inconsciente a lo consciente en la elaboración de


la vida psíquica, y por consiguiente, el papel de la escucha, de la transferencia, del
análisis y la interpretación...

- El papel del inconsciente como elaborador de relaciones psíquicas, que aquí


aparecen en forma de recuerdos nacidos del universo indiferenciado de la infancia.

- La articulación de la memoria a través de recuerdos que hacen referencia a


hechos fundamentales de la vida del sujeto, que permanecen en la memoria debido a su
impacto sobre la sensibilidad; pero también a partir de elementos aparentemente
irrelevantes e inconexos, elementos de elaboración inconsciente, que sin embargo
afloran con fuerza en nuestra conciencia, muchas veces en forma de significados
enigmáticos.

- O lo que es lo mismo, la articulación de dos fuerzas psíquicas en pugna: una


que intenta retener los sucesos importantes y otra que se resiste a tal propósito,
resultando de su oposición un producto transaccional, un elemento psíquico enlazado
por asociación, del que surge el concepto de recuerdos sustitutivos que se corresponden
con el esquema: conflicto-represión-sustitución.

En la interpretación que algunos especialistas han hecho de los recuerdos


encubridores, se distinguen en Freud recuerdos de diferentes tipos: positivos o
negativos, según su contenido se encuentre o no en oposición al contenido reprimido; o
de significación regresiva o prospectiva, según que la escena que representan se
relacione con elementos anteriores o posteriores al recuerdo. A éste último
pertenecerían los recuerdos referidos en este texto.“El valor de tales recuerdos se debe
a que representan en la memoria impresiones y pensamientos ulteriores, cuyo
contenido se halla en estrecha relación, simbólica o analógica, con aquel... Los
recuerdos encubridores contienen no sólo algunos elementos esenciales de la vida
infantil, sino verdaderamente todo lo esencial. Sólo es necesario saber dilucidarlos
mediante el análisis. Representan los años olvidados de la infancia, del mismo modo
que el contenido manifiesto de los sueños representa los pensamientos” 14

Personalmente, para mi el texto ofrece algunas lagunas, que sin duda responden
a su carácter de artículo breve o estudio parcial de un problema que se apoya en un
trabajo de otros autores y cuyo interés fundamental reside en los elementos potenciales
y posteriormente desarrollados que ya son aquí recogidos. Al margen de toda polémica
que pueda derivarse de la particular interpretación de Freud (el simbolismo de las flores
14
LAPLANCHE, J y PONTALIS, J.B. “Diccionario de Psicoanálisis”, Paidós, Barcelona, 1996, pág.
354-355

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y la desfloración sexual o el simbolismo del pan: ¿no es contradictorio o confuso que el


niño lo prefiriera a la flor si en definitiva no opta por la vida acomodada?, ¿no es
forzado o discutible suponer que quitarle las flores a la niña tenga un valor de
equivalencia a la desfloración, sin que existan otros datos que apoyen esta
interpretación?), la principal indefinición que ofrece el texto es que deja sin aclarar si
los recuerdos encubridores son realmente recuerdos mnémicos de situaciones vividas,
elaboraciones de la fantasía que se perciben como recuerdos 15 , o tal vez una mezcla de
ambas, aunque sospecho que cualquier posición a este respecto es puramente
especulativa.

Pero más allá de creer o descreer cada detalle interpretado en el texto, lo


verdaderamente singular es el valor interpretativo de estos elementos, aparentemente
irrelevantes, que son puestos de relieve por Freud, y cuyas conexiones pueden llegar a
constituir un sistema de interpretación.

Por último, lo más destacable, para mi, es la sensibilidad del texto y su valor
testimonial y documental de la propia personalidad de Freud, tan púdicamente
encubierta como si de un juguete literario se tratase. El encubrimiento de la experiencia
propia, de las referencias a personajes reales como Gisella o Pauline, o las confesiones
sobre los azares de la fortuna del padre, sin duda responden a un intento de preservar la
intimidad de algo tan elementalmente íntimo como es un episodio de un primer amor,
de la infancia, el despertar de la sexualidad o los avatares de la vida familiar (¿ante el
que atentamos cuando queremos hacer historia?), pero sin duda también responde a su
intención de presentarlo como un texto de interés científico, que podría quedar
devaluado como simple experiencia personal o anécdota particular.

En definitiva, un texto tal vez poco divulgado pero de gran trascendencia en la


génesis de la teoría psicoanalítica, que se lee con facilidad, que se disfruta con el
análisis y del que, coincido y suscribo la apreciación del profesor que motivó mi interés
hacia el mismo, se puede decir que es uno de los más bellos y personales que escribiera
Freud.

15
Freud llega a aceptar la posibilidad de los primeros.

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ANEXOS

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ANEXO A:

EL FREUD DE 1899

Como en cualquier proceso cultural, los trabajos de Freud han ser ubicados en su
contexto histórico y sociocultural; para ello se hace indispensable prestar atención a la
cronología, incluso a la geografía, de su obra, y a la propia repercusión que la misma
tiene no sólo en su momento, sino también a lo largo del siglo XX, en el que se
consolida, por así decirlo, tanto la trascendencia de sus aportaciones como la
ambigüedad y el carácter polémico de las mismas.

Tal vez sea materia de discusión el hecho de si ha sido precisamente la propia génesis
en ocasiones metamórfica de la obra de Freud la que más ha contribuido a su
tergiversación. Un tributo seguramente inevitable, acorde con las renovadoras
perspectivas y la polémica que la misma suscitó en su tiempo; no por ello debemos
renunciar, en la distancia y a la luz de los numerosos trabajos científicos a los que su
obra ha dado lugar, a una valoración rigurosa y contextualizada, que en este caso remito
a las ideas planteadas por el profesor Gómez Sánchez.

No es tarea simple abarcar la génesis del pensamiento de Freud, tanto por lo extenso
producción como por la propia complejidad de un proceso intelectual en el que se va
fraguando su pensamiento, que abre tres líneas de análisis, que han generado una triple
perspectiva, a la que el propio Freud se refirió: como método terapéutico, como una
teoría del psiquismo, en la que el trabajo de Gómez Sánchez se centra de manera
fundamental (y que choca abiertamente con el racionalismo y el positivismo que
amplios sectores universitarios tratan de imponer el la formulación de una Psicología
Científica) y como un método aplicado al análisis de procesos y productos culturales (en
los que no ha llegado a constituir una metodología precisa, ni tan siquiera muy uniforme
ante las numerosas críticas que ha suscitado). Tres dimensiones de una misma teoría, a
cada cual más controvertida. Pero tal vez esta controversia es la que la convierte en
potencialmente más rica, inexplorada y fructífera para el debate, al menos en lo que se
refiere a las interesantes expectativas que ha sido capaz de generar y que la convierten
en una posición teórica de enorme vitalidad.

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Ofrece la propuesta de Gómez Sánchez un enfoque muy sistemático, con un singular


sentido del orden, no exento de vitalidad pese a ser trazado dentro de un riguroso
esquema cronológico, muy de agradecer en un panorama historiográfico donde abundan
los estudios a salto de mata, las interpretaciones fragmentarias e inconexas, y los
enfoques que carecen de la necesaria amplitud de miras para constituir un panorama
general. Pero el análisis exige ver algo más que árboles en el bosque inmenso que
descubre una mirada tan amplia como la que se proyecta a partir de Freud, en ese
intento de comprender al ser humano a través de sus neurosis, de su mundo interior
enmascarado en su propia subjetividad, y de todo lo que de ella aflora en sus
manifestaciones inconscientes, en sus sueños, en sus delirios, en sus neurosis y,
naturalmente, en sus obras; entre las que las realizaciones artísticas adquieren la
hermosa categoría de sueños nunca soñados 16 , con lo que la teoría psicoanalítica se
convierte no sólo en una teoría científica, sino que también se inscribe en la historia de
la cultura al constituir una toma de posición, una perspectiva, y una propuesta
metodológica.

Creo que las aplicaciones críticas al análisis de la cultura han servido hasta esta fecha
más para el intento de definir los conceptos fundamentales del psicoanálisis que para
cimentar (o consensuar) el propio análisis cultural sobre unas bases sólidas. Tal vez, tal
hecho deriva de las propias propuestas de Freud, para el que el análisis cultural no
parece suscitarse como un objetivo en si mismo, sino como pretexto para desarrollar sus
propias ideas sobre el psiquismo. Lo cual no quiere decir necesariamente, como señala
Gómez Sánchez, que fuesen un complemento o adorno, sino que actúan desde el
principio en la forja de los conceptos psicoanalíticos (p. 18).

Otra de las cuestiones importantes para interpretar a Freud es la de no oscurecer su


prosa, pues a las lógicas imprecisiones que puedan derivarse de cualquier trabajo de
traducción 17 , (lamentablemente en nuestro panorama cultural han sido muy pocos los
que se han podido permitir leerle el su lengua original), y pese a que su lenguaje es
muy brillante y preciso, es inevitable el uso de una terminología muy especializada,
categorías taxonómicas y conceptos técnicos de uso a veces infrecuente, y una riqueza
semántica no exenta de desplazamientos, giros y préstamos terminológicos. Esta
extraordinaria riqueza de expresión en Freud convierte la lectura de su obra, también, en
un deleite de cualquier persona que aprecie el dúctil manejo del lenguaje; o en un
laberinto para aquellos que no acierten a interpretar con claridad sus ideas, no desde
luego porque sean opacas, sino muy al contrario, por su variedad semántica y su
precisión exacta. En este sentido, también destaca el trabajo del profesor Gómez
Sánchez, por el esfuerzo en interpretar con sencillez ideas complejas, sin caer en la
burda torpeza de reducirlas o hacerlas simples.

Antes de situarnos en el año 1899, en el que se publica "Los recuerdos encubridores",


un año antes de la emblemática "La interpretación de los sueños", hemos de considerar
brevemente la trayectoria anterior, que constituye un sólido punto de partida para el
nacimiento de la teoría psicoanalítica, fundamentada en una formación independiente
dentro de las doctrinas científicas de su tiempo, una inquietud humanística, y el
progresivo influjo de Charcot y Breuer en la elaboración de posiciones propias respecto
a la asociación libre, la histeria, la neurosis, la psicología neurológica, etc, que le

16
Expresión que utiliza el propio Freud en su análisis de la Gradiva de Jensen.
17
Cuestión que la lectura de Freud ha sido facilitada por excelentes traducciones, como la de Luis López-
Ballesteros (ediciones Biblioteca Nueva) o la de Etcheverry (Amorrortu)

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llevaron a formular su estudio sobre los sueños, la obra esencial en la formulación de la


teoría psicoanalítica.

El nacimiento del psicoanálisis: Viena y la cultura del último tercio del siglo XIX.
Las primeras huellas en la infancia de Freud se enmarcan en el paraíso perdido de
Freiberg, que posiblemente dejó en él la huella nostálgica pre-consciente de un entorno
natural idílico. Pero su familia se traslada a Viena cuando tiene solo cuatro años de
edad, por lo que el proceso de formación de la personalidad de Freud está sin duda
determinado por el ambiente vivido en el barrio judío de Leopoldstadt de la ciudad
vienesa.
Pero como señala muy bien Gómez Sánchez, Freud no veía en Viena la dulce ciudad
del Danubio azul, los valses y la ópera, sino el ambiente encorsetado de gentes
encerradas en sus prejuicios 18 . Los medios científicos vieneses también fueron
particularmente hostiles a sus teorías, pero la resistencia de Freud a abandonar la ciudad
hasta 1938 debe disipar cualquier duda sobre el amor que siempre sintió por Viena, sin
duda un entorno fascinante pese a sus contradicciones.
El modesto entorno familiar y las dificultades económicas de una familia muy numerosa
parecieron estimular la laboriosidad y dedicación del joven Freud a sus estudios en unos
años difíciles, marcados por una situación social de cierta marginalidad tanto por la
crisis económica como por el sentimiento antisemita.
Se ha considerado que la etapa de formación del pensamiento de Freud comprende un
largo de periodo de 44 años, hasta el cambio de siglo y su trabajo fundamental de la
Interpretación de los sueños y los Tres ensayos para una teoría sexual. Son los años
donde se sientan los pilares de una teoría que tuvo un lento y trabajado proceso de
maduración.

La etapa de formación universitaria, su formación científica positivista y su interés por


las humanidades. Una formación científica de corte intelectual, en la que cabe citar sus
conocimientos del idioma español y su interés por clásicos de la literatura como
Cervantes, Shakespeare, Goethe y Schiller, la asistencia a cursos de Franz Brentano, su
profunda dedicación a la filosofía en las lecturas de Fuerbach 19 de quien pudo tomar la
idea de la reducción antropológica de la teología 20 , y su admiración por Schopenhauer
y Nietzsche, su interés por los descubrimientos en arqueología que en su época
capitalizaba Winckelmann.

Trabajos en el laboratorio de Brücke y El estudio sobre la coca. Después de sus


primeros trabajos sobre los caracteres sexuales de las anguilas (1876), Freud pasa a
trabajar en el laboratorio de Brücke, donde se relaciona con dos personas que ejercen
gran influencia en él, Fleischl-Marxow y Breuer, donde desarrolla estudios sobre el
funcionamiento de las células nerviosas y sobre las propiedades de la cocaína, y en
donde continúa trabajando, después de la obtención del título de médico, hasta el año
1882, en el que buscando mayor respaldo económico, obtuvo una plaza en el Gran

18
Obra de referencia. pág. 28
19
"Un error demasiado frecuente es el de leerlo como un filósofo del ateísmo o como un crítico de la
religión: Es más fecundo considerarlo como un antropólogo o como un crítico de la ontología hegeliana.
Su crítica a la religión es, tal vez, una excusa para plantear una antropología filosófica pensada desde la
autonomía. Y en todo caso, la religión debe ser a la vez denunciada y convertida en un síntoma o un
indicio del malestar de lo humano, por lo que no tiene demasiado sentido luchar contra ella sin
comprender, previamente, la profunda miseria que la propia humana necesidad de consuelo lleva
implícita". En Elias Canetti: Apuntes Nubes de palabras usadas ¿Qué lluvia van a dar?
20
Obra de referencia, pág. 36

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Hospital de Viena, decisión en la que sin duda debió de tener gran influencia su
noviazgo con Martha Bernays.

El paso por el Hospital General de Viena y la clínica psiquiátrica Meynert, antes de


disfrutar de una beca en París durante seis meses. Charcot: de la hipnosis a la asociación
libre. El paso de Freud por el Gran Hospital no dejó de ser una anécdota, una etapa de
transición hasta la obtención de una beca que le llevó a París, donde conoció a Charcot,
en cuya casa tuvo oportunidad de relacionarse con la sociedad intelectual parisina.

De la hipnosis a la asociación libre. El viaje a Paris realizado en 1885 supone el inicio


de la etapa de formación preliminar, marcado por el influjo que Jean-Martin Charcot y,
de regreso a Viena, la apertura de una clínica privada y la colaboración con Breuer.
Previamente a sus trabajos sobre los sueños, Freud realiza dos trabajos capitales:
"Estudios sobre la histeria" y los trabajos de conceptualización sobre psicopatología y
psicología neurológica, que sirven de cimientos a la formulación de la teoría
psicoanalítica, en la que resulta también decisiva la influencia de Willhelm Fliess.

En este sentido, el pequeño artículo "Los recuerdos encubridores" forman parte de esta
génesis, que completa el proceso que podríamos llamar de iniciación o de formulación
de las bases, mediante un proceso de auto-análisis y el abandono de la teoría de la
seducción.

Es interesante hacer notar que estamos ante el nacimiento de una nueva forma de
pensar, que bien puede definirse como el final de una etapa surgida del pensamiento
ilustrado del XVII, o postura crítica de la burguesía frente al orden establecido. En este
sentido, reproduzco una cita de este proceso, que creo queda muy bien enmarcado:

Denominaciones como neorromanticismo, irracionalismo, o antiintelectualismo


son sólo parcialmente válidas; adecuadas en cuanto expresan la vuelta a la
imaginación, o el desprecio por el razonamiento abstracto, alejado de la
realidad; pero equivocadas en la medida que sugieren un distanciamiento del
pensamiento ilustrado -de la corriente racionalista del pensamiento europeo-
mucho mayor de lo que fue en realidad. Junto a otras cosas, el nuevo
pensamiento tenía también una considerable dosis de abstracción, al mismo
tiempo que contenía abundantes elementos críticos; sus impulsores, "lejos de ser
" irracionalistas" se esforzaban por reivindicar los derechos de la investigación
racional. Alarmados por la amenaza de un determinismo férreo, buscaron
restituir a la mente libremente especulativa la dignidad de que había gozado un
siglo antes"…. En definitiva, se pasó del estudio de lo evidente y objetivamente
observable -cuya superficialidad e insuficiencia les parecían manifiestas- a
otras esferas, íntimamente relacionadas con lo subjetivo, que requerían nuevos
instrumentos de análisis. Son muchos los protagonistas de este viraje del
pensamiento europeo, cuyo antecedente próximo es el romanticismo de
comienzos del siglo XIX. Entre ellos, por su carácter pionero, es preciso señalar
a Nietzsche, Durkheim y Freud. Los dos últimos continuaron trabajando y
desarrollando su pensamiento en las primeras décadas del siglo XX, pero en su
obra de finales del siglo XIX está ya el núcleo de lo que será su principal
contribución a la historia intelectual europea…. La influencia ejercida por
Sigmund Freud en las ideas de su tiempo fue extraordinaria, con difícil
parangón en la historia, por su profundidad, su extensión y la rapidez con que

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se produjo. Como ha escrito R. Wollheim, "contradijo, y en algunos casos


invirtió completamente, las opiniones dominantes sobre muchos de los temas de
la existencia y la cultura humanas, tanto las del especialista como las del
hombre de la calle. Hizo que la. gente pensara en sus apetitos y en sus poderes
intelectuales, en el conocimiento de uno mismo y de sus autoengaños, en los
fines de la vida y en las profundas pasiones del hombre, y también en sus
deslices más íntimos y triviales, de un modo que hubiera parecido a
generaciones anteriores escandaloso y, al mismo tiempo, necio" 21 .

En tal sentido, la obra de Freud se inscribe en el proceso de renovación de la ideología


surgida del racionalismo impuesto por el pensamiento ilustrado. Destruir los cimientos
de la razón desde la propia racionalidad, haciendo que asomen los componentes
irracionales del pensamiento, supuso cuestionar la lógica como principio de
conocimiento, para abrir una brecha en el pensamiento instaurado desde el siglo XVII.

"… Freud puede ser considerado crítico de la Ilustración en el doble sentido -


genitivo subjetivo y objetivo- de realizar su crítica desde los supuestos
ilustrados y de someter esos mismos supuestos a crítica. Y es que, aunque Freud
comparta muchos de los motivos, postulados e intenciones que animaron a la
Ilustración, los dota de nuevos giros y contrastes que desarraigan su crítica de
carriles tradicionales en el pensamiento moderno… En el enjambre de
problemas que ahí se abren, vamos a considerar tres cuestiones: la crítica a la
filosofía de la conciencia, las relaciones del Psicoanálisis con la Ética y el tema
del progreso" 22 .

21
En "www.antehistoria.com, Desarrollo de las ciencias sociales / Cultura de fin de siglo"
22
Obra de referencia, pág. 325

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ANEXO B
ESQUEMA BIOGRÁFICO, OBRA Y CONTEXTO HISTÓRICO.

Con el único objetivo de situar en panorámica el desarrollo de los trabajos de Freud en


un marco de referencias socio-culturales, se ofrece este esquema surgido de la
confrontación de los datos de Freud con ecos sociales, sucesos y referencias
periodísticas de su tiempo 23 .

No se trata con ello de establecer nexos que justifican o explican la génesis de su obra,
sino de ofrecer esquemáticamente unos hechos que puedan servir para reconstruir un
contexto histórico independiente, que tampoco quiere ser exhaustivo ni complejo, sino
aportar algunas pinceladas para encuadrar el análisis, aún cuando los hechos generales
de una época no necesariamente tienen una correspondencia con los hechos particulares
referidos a un autor y su obra. Lo entiendo más como una forma de contextualizar la
perspectiva histórica del análisis.

FREUD CONTEXTO

Datos biográficos: Efemérides:


1856. 6 de mayo. En este mismo año (1856) nacieron: George Bernard
Nace Scholomo Sigismund Freud, en Freiberg (Moravia, Shaw, Woodrow Wilson (el presidente de los Estados
hoy Pribor, Rep. Checa) Unidos que sucedió a Roosevelt en 1913), Emil Kraepelin
Hijo de judios, su padre (Jacob) era comerciante, casado (psiquiatra alemán), Marcelino Menéndez y Pelayo
en segundas nupcias (Amalia). En la infancia será (Historiador español)
educado en el culto católico. La familia emigra a Leipzig
(1859) Contexto sociopolítico: 1856
A los tres años su familia se traslada a Leipzig y un año La República Checa pertenecía al Imperio Austro-
después a Viena, donde se instalan en el barrio judío de Húngaro, integrado en la Confederación Germánica y el
Leopoldstadt. influjo socio-cultural del imperio de los Habsburgo. Está a
Las dificultades económicas de una familia numerosa y punto de estallar la guerra austroitaliana (1859) que
las secuelas del antisemitismo en la sociedad vienesa acentúa la crisis económica y despierta el nacionalismo
marcan sus años de formación, en los que destacó por checo
su disciplina, y sentido ético y humanista. 1866. Guerra austroprusiana.
Liberalización de las medidas antisemitas.
1872. Comienza los estudios de Medicina
1875. Investigación sobre las glándulas sexuales de las Panorama científico:
anguilas, en Trieste. Formación universitaria en el círculo Influjo alemán, donde Brücke, Du Bois-Reymond y
de Brücke Helmholtz había fundado la sociedad berlinesa de Física
1878-79. Investigaciones sobre las neuronas y las células de inspiración netamente positivista. Freud trabajó con el
nerviosas del cangrejo de río. propio Brücke, que le influyó en su rigor científico y
1880. Servicio militar y traducción de las obras de J.S.Mill disciplina de trabajo. Junto a él, coincide en los trabajo0s
1881. Finaliza sus estudios de Medicina. en laboratorio con Fleischl-Marxow y Breuer, quien
1882. Trabaja en el Hospital General de Viena. Se resultará decisivo en los orígenes del psicoanálisis.
enamora de Marta Bernays. Ayudante de Nothnage,
Breuer le habla del caso de Ana O. Panorama cultural:
1883. Colabora en psiquiatría con Maynert. Viaja a En su nivel más profundo, la historia intelectual de las
Salzburgo y Hungría. tres últimas décadas del siglo XIX, puede resumirse en la
1884. Estudio sobre la coca. Trabaja la electroterapia de pervivencia y difusión de una actitud positivista acrítica -
Erb, para acabar rechazando el método. una especie de fundamentalismo científico- y el
1885. Trabaja sobre el hipnotismo y la histeria. Beca en surgimiento de una reacción contra la misma, que sin
París. Traduce las Lecciones sobre las enfermedades del negar las posibilidades de la razón y la ciencia,
sistema nervioso de Charcot. subrayaba sus límites. Esta última corriente indicaba una
1886. Tras breve estancia en Berlín, vuelve a Viena y nueva orientación del pensamiento que no haría sino
abre un consultorio privado. Boda con Marta. acentuarse a lo largo del siglo XX. Tanto el positivismo
1887. Miembro de la Sociedad Médica de Viena, conoce como su revisión crítica afectaron a los más diversos
a Fliess, traduce a Bernheim. Practica la hipnosis. campos del pensamiento: ciencia, teoría política, filosofía,
1891. Sobre la concepción de la afasia. psicología, literatura e historiografía. Contra la actitud

23
Extraídos de "Crónica del siglo XX" (traducción de Harenberg Kommunication, Dormunt), Ed.
Plaza&Janés, Barcelona, 1992.

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1893. Estudio comparativo de las parálisis… Charcot positivista acrítica predominante desde mediados de
1894. Las neurosis de defensa siglo, surgió una reacción que en los años noventa
1895. Estudios sobre la histeria comenzó a adquirir peso en el ambiente intelectual
1896. Neurosis… Etiología de la histeria. europeo. Esta reacción supuso un cambio radical en la
1897. Comienza su autoanálisis sistemático. forma de pensar acerca del hombre y la sociedad.
1899. Los recuerdos encubridores

1900. 1900. Tres científicos redescubren a Mendel (trabajos de


La interpretación de los sueños Tschermak, de Vries y Eric sobre las leyes de
Desencuentro con Fliess. Teoría de la bisexualidad. transmisión genética)
Comienza el tratamiento de Dora Exposición Universal en París
Mueren F.W. Nietzsche y Oscar Wilde
Teoría cuántica de Panck
1901. 1901. Exposición reivindicativa en París de la obra de
Redacta Los sueños (Resumen) y El caso Dora (que no Van Gogh
aparecerá hasta 1905) Investigaciones de Becquerel sobre la radioactividad
Psicopatología de la vida cotidiana (1904) Primer vuelo a motor de los hermanos Wright
Viaje a Roma con su hermano Alexander Muere en atentado el presidente McKinley
Gillette lanza al mercado la hoja de afeitar
Marconi consigue hacer cruzar el Atlántico las señales de
morse sin hilos.
1902 1902. En Alemania, se logra la síntesis del ácido
Profesor asociado en la universidad barbitúrico.
Ruptura con Fliess Coronado Eduardo VII en Gran Bretaña
Funda la Sociedad de Psicología de los Miércoles Roosevelt consigue poner fin a las huelgas de mineros
Viaja con Minna y Alexander a Pompeya y al sur de Italia en Estados Unidos
Enrique Caruso vende un millón de ejemplares
fonográficos de un aria de Pagliacci.
1903 1903. París y Roma unidas por teléfono.
Colaboraciones para Neue Freire Presse Auge del modernismo. Muere el papa León XIII, le
El método psicoanalítico de Freud sustituye Pío X.
Fabricación de automóviles de serie en Usa y Suiza
En Berlín, una locomotora alcanza los 200 kmts hora.
Chamberlain afronta serios problemas coloniales
Acuerdo para la construcción del Canal de Panamá
El matrimonio Curie premios Nobel de física.
1904 1904. Guerra ruso-japonesa
Psicopatología de la vida cotidiana. Congreso internacional de mujeres en Berlín, promovido
Viaje a Atenas con Alexander por la Federación Abolicionista Internacional.
Iván Pavlov premio Nobel de medicina
1905 1905. Revolución rusa. Motin en el Potemkim.
Tres ensayos para una teoría sexual Conversaciones entre el zar Nicolás II y el káiser
El chiste y su relación con lo inconsciente Guillermo II
Análisis fragmentario de una histeria (el caso Dora) El Salón de París presenta los maestros del fauvismo.
Se presenta en Ginebra un automóvil con motor de ocho
cilindros capaz de alcanzar los 156 kilómetros hora.
1906 1906. Año de gran activismo sufragista.
Inicia la correspondencia con Jung Revolución arquitectónica funcional y utilitaria de Otto
La indagatoria forense y el psicoanálisis. Wagner y Meter Behrens.
Escritos breves (1906-1909) Terremoto en San Francisco, más de 1000 muertos y
250.000 personas sin hogar.
1907 1907. Picasso expone Las señoritas de Avignon.
El delirio y los sueños en la Gradiva de Jensen Rudtard Kipling premio Nobel de literatura
Comienza el análisis del Hombre de las ratas El Congo cedido a Bélgica por Leopoldo II
Acciones obsesivas y prácticas religiosas Strimberg estrena El pelícano
El esclarecimiento sexual del niño (Carta abierta a Fürst)
1908 1908. En Salzburgo, primer congreso internacional de
Lee El hombre de las ratas en el Congreso de Salzburgo Psicoanálisis, organizado por Jung.
Segundo viaje a Inglaterra Se pone a la venta el mítico Ford T
El creador literario y el fantaseo Hallazgo arqueológico de la venus de Willendorf
Fantasías histéricas y su relación con la bisexualidad
Carácter y erotismo anal
La moral sexual cultural y la nerviosidad moderna
Sobre las teorías sexuales infantiles
1909 1909. Tensión política en los Balcanes después de la
Análisis de la fobia de un niño de cinco años (Juanito) independencia de Bulgaria. Los serbios presionan a
Análisis de un caso de neurosis obsesiva (El hombre de Austria reclamando independencia.
las ratas) Semana trágica en Barcelona.
Apreciaciones generales sobre el ataque histérico Bleriot atraviesa el Canal de La Mancha en vuelo
A propósito de un caso de neurosis obsesiva Muere Leopoldo II y coronación de Alberto I
Recibe la visita de Oskar Pfister
Viaje a Estados Unidos con Jung y Ferenczi
1910 1910. Proyecto de Fundación Rockefeller
El hombre de los lobos Abolición de la esclavitud en China

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Segundo Congreso Internacional en Nuremberg Aparición del cometa Halley


Se crea la IPA Japón invade Corea
Un recuerdo infantil de Leonardo da Vinci
Las perspectivas futuras d ela terapia psicoanalítica
Sobre el sentido antitético de las palabras primitivas
Gustav Mahler. Viaje a París e Italia con Ferenczi
Cinco conferencias sobre psicoanálisis
1911 1911. Muere Gustav Mahler
Disidencia de Shekel y Adler Francia, apoyada por Alemania, invade Marruecos
Caso Schreber La Gioconda, robada del Louvre
Puntualizaciones psicoanalíticas sobre un caso de Movimientos revolucionarios en China
paranoia descrito autobiográficamente
Trabajos sobre técnica psicoanalítica
Formulaciones sobre dos principios del acaecer psíquico
1912 1912. Tensión política Gran Bretaña-Alemania
Amistad con Lou Andreas-Salomé Primer Rallye de Montecarlo
Sobre la más generalizada degradación de la vida Naufragio del Titanic
amorosa Guerra en los Balcanes
Sobre los tipos de contracción de la neurosis
Contribuciones para un debate sobre el onanismo
Nota sobre el concepto del inconsciente en psicoanálisis
1913 1913. El Rey de Grecia muere en atentado
Escritos sobre técnica analítica. El Reichstang refuerza su ejército, reclutando un total de
Ruptura con Jung 5.000.000 de soldados.
Tótem y Tabú Nueva guerra en los Balcanes
Múltiple interés del psicoanálisis Se consolida la Triple Alianza
El sueño como pieza probatoria
El motivo d ela elección del cofre
Dos mentiras infantiles
1914 1914. Enfrentamientos callejeros en Londres entre
El Moisés de Miguel Ángel sufragistas y policia.
Dimisión de Jung Una sufragista daña La Venus del espejo de Velásquez
Historia del movimiento psicoanalítico El archiduque Francisco Fernando, heredero al trono
Introducción al narcisismo austro-húngaro, asesinado en Sarajevo
Sobre la psicología del colegial Estalla la Primera Guerra Mundial
Acerca del fausse reconnaissance en el curso del trabajo
psicoanalítico
1915 1915. Violentos enfrentamientos navales. Bélgica
Redacción de artículos de metapsicología ocupada. Victoria alemana en Masuria. París
Un caso de paranoia que contradice la teoría bombardeado. Los rusos toman Przemysl. Polonia
psicoanalítica ocupada. Desembarco aliado en Grecia.
De guerra y de muerte. Temas de actualidad
La transitoriedad
1916 1916. Batalla de Verdúm. Un barco de pasajeros inglés,
Conferencias de introducción al psicoanálisis el Sussex, bombardeado por un submarino alemán.
Parte III. Doctrina general de la neurosis 9000 serbios mueren degollados por el ejército austro-
Una dificultad del psicoanálisis húngaro. Pascua sangrienta en Dublín. Batalla naval de
Jutlandia. Rumanía entra en la guerra. Independencia de
Polonia. Asesinato de Rasputín.
1917 1917. Invasión británica sobre Bagdad.
Duelo y melancolía Revolución rusa. Asalto al Palacio de Invierno.
Lecciones introductorias al psicoanálisis Estados Unidos entra en la guerra
Un recuerdo de la infancia en Poesía y verdad Apariciones en Fátima. Mata-Hari fusilada.
De la historia de una neurosis infantil Polonia avasallada por los alemanes
El tabú de la virginidad

1918 1918. Troski organiza el ejército rojo, guerra sangrienta.


Historia de una neurosis infantil (el caso de los lobos) Ejecución del zar y su familia.
Nuevos caminos de la terapia psicoanalítica Guerra civil en Finlandia.
Ofensiva y derrumbe del frente alemán.
Von Richthofen, el barón rojo, derribado en Francia.
Fin del imperio austro-húngaro. Fin de la Guerra.
1919 1919. La guerra ha cambiado el mundo. Nuevo mapa.
Pegan a un niño Firma del Tratado de Versalles.
Lo siniestro Semana trágica en Buenos Aires, violentas huelas.
Lo ominoso Nace el movimiento fascista de Mussolini
Escritos breves Fundación de la Bauhaus
Hitler ingresa en el Partido Obrero alemán
1920 1920. Estreno del Gabinete del doctor Caligari
Muere su hija Sofía Hitler presenta su programa
Más allá del principio del placer Movimiento Dadá
Sobre la psicogénesis de un caso de sexualidad Pancho Villa depone las armas
femenina Muere Eugenia de Montijo

Freud: "Los recuerdos encubridores". Página 22 de 24


Doctorado en Fundamentos y Desarrollos Psicoanalíticos. Facultad de Psicología, Universidad Complutense. Curso 2004-2005

1921 1921. Guerra civil en Irlanda, independencia


Psicología de las masas y análisis del yo Max Ernst expone en París
Psicoanálisis y telepatía Derrota española en la Guerra de Marruecos
Sobre algunos mecanismos neuróticos de los celos, la Irresistible ascensión de Hitler
paranoia y la homosexualidad Mussolini ya es el Ducce
1922 1922. Pío XI, nuevo Papa
Publicada en París la entrevista que le hace André Estreno de Nosferatu (Murnau) y El doctor Mabusse
Bretón (en Litterature) (Fritz Lang)
Sueño y telepatía Einstein y Benavente, premios Nobel
Una neurosis demoníaca en el siglo XVII El psicoanálisis de moda en la literatura
1923 1923. La economía alemana en quiebra total.
Primera operación de su cáncer de mandíbula. Lenin presidente en Rusia.
Muere su nieto Heinerle Pronunciamiento de Primo de Rivera en España
Segunda operación (de 31) y prótesis Crisis del Reich
El yo y el ello
La organización genital infantil
Neurosis y psicosis
Josef Popper-Lynkeuus y la teoría del sueño
1924 1924. Hitler condenado a cinco años de cárcel.
Ruptura con Otto Rank. Olimpiadas en París
Se inica el debate entre Anna Freud y Melanie Klein Un zepeling llega a Nueva York atravesando el Atlántico.
El problema económico del masoquismo Mussolini decreta el partido único en Italia
El sepultamiento del complejo de Edipo
La pérdida de la realidad en la neurosis y la psicosis
Nota sobre la pizarra mágica
1925 1925. Hitler reorganiza el partido nazi. Hindenburg
Presentación autobiográfica presidente.
Algunas notas adicionales a la interpretación de los Primer congreso del Ku Klux Klan
sueños en su conjunto Triunfa el surrealismo en París
La negación El acorazado Potemkin
Algunas consecuencias psíquicas de las diferencias
anatómicas entre los sexos
Inhibición, síntoma y angustia
1926 1926. El charlestón, de moda
¿Pueden los legos ejercer el psicoanálisis? Diálogos con Vuelo del Plus Ultra
un juez parcial Pacto de amistad germano-soviético
Psicoanálisis Mueren Antonio Gaudí y Rodolfo Valentino
Alocución ante los miembros de la Sociedad B´nai B´rinth Huelga del carbón en Gran Bretaña
Escritos breves

1927 1927. La Bauhaus se afinca en Dessau


El porvenir de una ilusión Chan Kai-chek libera China
Fetichismo Ley Seca en Estados Unidos
El humor Estreno del Napoleón de Abel Gance
Insurrección de obreros en Viena
1928 1928. Estrenos de Berltolt Brech en París
Una vivencia religiosa Fleming descubre la penicilina
Dostoievski y el parricidio (1927-1928) Fundación del Opus Dei
El perro andaluz
Salón del automóvil en París
1929 1929. Primeros Oscars de Hollywood
Max Schur, médico personal de Freud Crac en Wall Stret: se hunde la bolsa
Escritos breves (1919-1931) El Graf Zeppelín da la vuelta al mundo
Nace Popeye

1930 1930. Guerrea civil en China


El malestar de la cultura Gandhi inicia la marcha de la sal
Premio Goethe Elecciones en Alemania: crisis del sistema democrático
Muere su madre a los 95 años Diputados nacionalsocialistas de uniforme en el
parlamento de Berlín.
1931 1931. En España se proclama la República.
Tipos libidinales Crisis bancaria en Alemania
Sobre la sexualidad femenina Aventura del Nautilus
Muere Thomas Alva Edison
Triunfa el arte abstracto
1932 1932. Jacques Lacan termina su tesis de Medicina
Sobre la conquista del fuego Los japoneses entran en Shanghai
¿Por qué la guerra?(Carta a Albert Einstein) El presidente francés, Paul Doumer, asesinado
Mi contacto con Josef Popper-Lynkeus Dollfuss canciller de Austria
Los nazis, primera fuerza política en Alemania
Huelga de hambre de Gandhi
Roosvelt presidente de USA
1933 1933. Adolf Hitler, canciller del Reich
Nuevas conferencias de introducción al psicoanálisis Incendio del parlamento alemán. Quema pública de
libros, entre ellos las obras de Freud

Freud: "Los recuerdos encubridores". Página 23 de 24


Doctorado en Fundamentos y Desarrollos Psicoanalíticos. Facultad de Psicología, Universidad Complutense. Curso 2004-2005

Comienzan los campos de concentración


Muere Ferenczi
1934 1934. Asesinado Ion Duca, jefe de gobierno rumano
Moisés y la religión monoteísta (1934-1939) Trotski expulsado de Francia
La "noche de los cuchillos largos"
Frente popular en Francia contra el fascismo
El Rey Alejandro de Yugoslavia asesinado en Marsella

1935 1935. Las SS controlan 7 campos de concentración


Escritos breves (1932-1936) Fallece en accidente Carlos Gardel
Moisés y la religión monoteísta (1934-1939) En Alemania se prohiben los matrimonios fuera de la
raza aria. Disolución y confiscación de bienes de las
logias masónicas. Leyes de Nuremberg
Mueren 200.000 personas en una inundación en China
1936 1936. Aparece el Volswagen escarabajo
Carta a Romaní Rolland (Una perturbación del recuerdo Muere Iván Pavlóv. Hitler ocupa Renania. En Francia
en la Acrópolis) triunfa el Frente Popular .Guerra Civil en España. García
Escritos breves (1932-1936) Lorca fusilado. Congreso nazi de Nuremberg.
1937 1937. Persecución de judíos en Alemania
Análisis terminable e interminable Bobardeo de Guernica. Muere el magnate Rockefeller.
Construcciones en el análisis Arde el dirigible Hindenburg. Desembarco japonés en
Escritos breves (1937-1938) Shanghai. Japón invade China.
1938 1938. El Reich se anexiona Austria. Depuración de
Con ayuda de Bullit y María Bonaparte, la familia Freud trotskistas en Moscú. Enfrentamientos entre árabes y
huye a Paris y se instala en Londres. judíos en Palestina. Armisticio entre Japón y la URSS.
Esquema del psicoanálisis Pacto de Munich. Acción política de Hitler sobre
La escisión del yo en el proceso defensivo Checoslovaquia. Informe sobre la fisión nuclear.
Algunas lecciones elementales sobre el psicoanálisis
Comentario sobre el antisemitismo
1939 1939. Los alemanes entran en Praga. Persecución
Moisés y la religión monoteísta (1934-1939) indiscriminada de judios. Finaliza la Guerra Civil
El último año de su vida, tras la anexión alemana de española. Pío XII nuevo Papa. Italia invade Albania.
Austria y las persecuciones de los judíos, vivió refugiado
en Londres junto a su familia.
3 de septiembre: estalla la Segunda Guerra Mundial.
23 de septiembre. Muere en Londres Sigmund Freud.

Freud: "Los recuerdos encubridores". Página 24 de 24

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