Hoy vamos a preparar un plato típico de la cocina gallega, cuyo principal
ingrediente es la merluza blanca. La preparación de la merluza a la gallega no
puede ser más sencilla, se cuece en agua más bien salada, acompañada de patatas
cocidas y en algunas ocasiones se les añade almejas. Esta merluza suele ir
acompañada de lo que se conoce como ajada, que simplemente es, simplemente unos
ajos fritos, con un poco de pimentón y caldo de cocer las patatas y el pescado.
Un truco para que nuestra merluza nos salga de maravilla, es cocer las patatas
en agua convenientemente salada. La merluza a la gallega es un clásico en los
platos de los restaurantes españoles, por lo buenos que es y por su sencillez.
INGREDIENTES:
- 1,5 k
Merluza
- 3 o 4
Patatas medianas
- 1
Cebolla
- 8
Ajos
- 1
Hoja laurel
- 5
Granos pimienta
- 1
Cucharada de pimentón
- Aceite
de oliva
- Chorrito
vinagre (unos 15 ml)
- Sal
PREPARACIÓN:
Lo primero que hacemos es lavar y limpiar bien nuestra
merluza, que la tendremos cortada en rodajas gruesas (esto no lo puede partir
nuestro pescadero a la hora de comprarla).
Seguidamente ponemos en una cacerola amplia abundante agua fría, la hoja
de laurel, la cebolla pelada y partida en dos, los 5 granos de pimienta, un
chorrito de aceite, un poco de sal (os recomiendo que si tenéis utilicéis sal
gorda), que este el agua más bien sabrosilla.
A continuación llevamos la
cacerola al fuego, añadimos a la cacerola la cabeza de la merluza y dejamos en
el fuego hasta que hierva un par de minutos. Mientras se cuece el agua vamos
pelando nuestras patatas, y las partimos en rodajas de aproximadamente 1 o 1,5
cm de grosor. Una vez que el agua haya empezado a hervir, retiramos la cabeza
de la merluza y añadimos las patatas, que hemos partido en rodajas, dejándolas
cocer a fuego suave, unos 10 minutos dependiendo del grosor que las hayamos
partido, vamos probando que estén en su punto, procurando que no se partan.
Mientras
se cuecen las patatas vamos a preparar la ajada, para ello pelamos nuestros ajos
y los partimos en láminas. Seguidamente ponemos un poquito de aceite en una sartén,
la llevamos al fuego y añadimos los ajos y sofreímos un poco, hasta que se
doren, teniendo cuidado de que no se quemen, pues entonces para que no
amarguen. Una vez que los ajos están doraditos, retiramos un poco la sartén del
fuego y añadimos la cucharada de pimentón (retiramos la sartén del fuego para
añadir el pimentón, porque este se quema enseguida). Acto seguido añadimos el
vinagre damos unas vueltas y añadimos un cazo del caldo, donde tenemos cociendo
las patatas, dejándolo en el fuego muy bajito para que mantenerlo caliente.
Una
vez que las patatas estén cocidas, añadimos a la cacerola la merluza, que
previamente hemos salado un poquito y dejamos cocer todo junto, unos 4 o 5
minutos más, lo necesario para que el pescado se cueza.
Pasado este tiempo
sacamos la merluza y las patatas de la cacerola, que estén escurridas, con
mucho cuidado para que no se rompan, poniéndolas en una fuente o plato,
procurando poner las patatas en la parte de abajo. Seguidamente añadimos por
encima la ajada, repartiéndola por toda la superficie.
Con esto solo nos falta
llevar a la mesa y disfrutar de este sencillo, pero delicioso plato de pescado.