La receta de hoy es una rica tarta de peras en almíbar
y queso mascarpone, muy fácil de preparar. La receta se la tenemos que
agradecer a nuestra amiga Mercedes Martínez, que ha tenido la amabilidad de
dármela, para poder compartirla con todos vosotros. Si nos gusta más podemos
sustituir las peras en almíbar, por macedonia de frutas, dependiendo de los
gustos de cada uno. La base de la tarta también la podemos hacer de galletas
trituradas con un poco de mantequilla derretida, utilizando un molde
desmontable. El resultado es muy bueno, tanto si optamos por el hojaldre o las
galletas.
INGREDIENTES:
- 1
Lámina de hojaldre
- 250
g Queso mascarpone
- 200
ml Nata
- 3 Cucharadas de azúcar
- 1
Cucharada colmada de maicena
- 1
Huevo
- 1 Lata de peras en
almíbar (850 g)
- 3 Cucharadas de mermelada
de melocotón o albaricoque
- 1 Cucharada rasa de azúcar
glasé
- 1 Cucharadita de azúcar avainillado
- Virutas de chocolate para decorar (opcional)
PREPARACIÓN:
Antes de empezar a preparar nuestra rica
tarta, lo primero que hacemos es encender el horno, con una temperatura de
180º, por arriba y por abajo, para que se vaya precalentando. Seguidamente
forramos nuestro molde, acto para el horno con papel de hornear. A continuación
abrimos y extendemos un poquito, nuestra lamina de hojaldre, depositándola en el
molde que hemos forrado con el papel de horno. A continuación con ayuda de un
tenedor pinchamos nuestra lámina de hojaldre.
Para evitar que nuestra masa suba
demasiado, le ponemos algo de peso, como puede ser garbanzos, judías, etc. Seguidamente
metemos en el horno, que ya estará precalentado a 180º, entre 10 o 15 minutos,
hasta que se dore un poquito. Una vez dorada sacamos del horno le quitamos el
peso que le hemos puesto y reservamos.
Seguidamente abrimos nuestro bote de
peras y las escurrimos con ayuda de un colador, reservando el almíbar que viene
en el bote.
A continuación en un bol (lo suficientemente grande para poner
todos los ingredientes), ponemos nuestro huevo y con ayuda de un tenedor o
varillas lo batimos, una vez batido añadimos al bol, las 3 cucharadas de azúcar
y volvemos a batir todo bien, a continuación añadimos los 200 ml de nata, y
seguimos mezclando, añadimos a continuación los 250 g de queso mascarpone y
seguimos mezclando todo muy bien hasta que el queso quede bien integrado, por
ultimo añadimos al bol la cucharada de maicena, bien colmada y seguimos
batiendo todos los ingredientes, hasta que no tengamos ningún grumo.
Seguidamente
partimos nuestras peras que ya estarán escurridas, en cuadraditos pequeños. Una
vez partidas las agregamos al bol, donde tenemos nuestra masa que hemos
preparado con el resto de ingredientes, mezclando todo un poco con ayuda de una
espátula de silicona o una cuchara.
A continuación vertemos la mezcla en el
molde donde tenemos nuestra base de hojaldre, metemos en el horno, que tenemos
precalentado previamente a 180º, por
arriba y por abajo, durante aproximadamente 40 minutos, dependiendo de cada
horno, porque como se suele decir cada horno es un mundo. De todas formas para
estar seguros, pinchamos con una aguja de punto o con la punta de un cuchillo y
cuando esta salga limpia, estará lista nuestra tarta. Una vez cocida sacamos
del horno y dejamos enfriar.
Mientras tanto vamos a preparar un jarabe o almíbar
para pintarla, para ello ponemos en un cazo, el almíbar que hemos reservado de
las peras, la cucharada de azúcar glasé, la cucharadita de azúcar avainillado y
las 3 cucharadas de mermelada de albaricoque o melocotón, llevamos el cazo al
fuego y dejamos cocer hasta que reduzca y espese un poco, dándole vueltas de
vez en cuando.
Cuando se haya enfriado nuestra tarta por completo, pintamos con
este almíbar toda la superficie, para darle brillo y dulzor. Si hemos optado
por utilizar chocolate, rallamos este un poco y lo espolvoreamos por toda la
superficie, también podemos utilizar virutas de chocolate.
Con esto solo nos
queda meterla en el frigorífico, hasta la hora de servir.