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Cerebro Adolescente Clase

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EL CEREBRO

ADOLESCENTE
¿Por qué sabemos tan poco acerca
del desarrollo cerebral durante la
adolescencia?
◦ Por dos motivos:
◦ Primero, la idea de que el cerebro sigue desarrollándose después de la infancia es relativamente nueva. A
finales de la década de 1960 y la de 1970 cuando los estudios con cerebros humanos obtenidos en autopsias
revelaron que ciertas áreas cerebrales, en especial la corteza frontal, siguen desarrollándose bien entrada la
infancia. La corteza frontal es el área responsable de las denominadas funciones ejecutivas, como la capacidad
de inhibir conductas inapropiadas, planificar, seleccionar acciones, guardar información en la mente o hacer
dos cosas a la vez.
◦ Huttenlocher descubrió la segunda diferencia entre el cerebro de los niños prepúberes y el de los pospúberes.
Sus estudios pusieron de relieve un gran aumento en la densidad de las sinapsis de la corteza frontal tras la
pubertad.
◦ La segunda razón por la que ignoramos tanto
sobre los cambios cerebrales durante la
adolescencia es que, hasta hace poco, sólo se
pod/a estudiar la estructura del cerebro
humano después de la muerte. Actualmente,
determinadas técnicas no invasivas, en
especial las imágenes de Resonancia
Magnética, pueden generar imágenes del
cerebro humano vivo de gran calidad.
◦ La sustancia gris y la sustancia blanca se
desarrollan de forma diferente a lo largo de
la vida. Los niños y adolescentes tienen más
sustancia gris y sinapsis que los adultos,
porque, a medida que envejecemos, el
cerebro elimina las conexiones
innecesarias para conseguir una mayor
eficacia. Sin embargo, en la vejez también
disminuye la sustancia blanca, lo cual incide
en los problemas cognitivos relacionados con
la edad, como la pérdida de la memoria y
estados anormales como la demencia
EL SUEÑO
◦ El sueño es uno de los aspectos más importantes de la vida diaria,
y también uno de los que menos se comprenden. Lo que sabemos del
sueño es que es fundamental para la salud de todo ser humano.
◦ Los patrones del sueño, o cronotipos, cambian a lo largo de la vida y del
mismo modo en todas las especies. Los bebés y los niños son
«alondras», es decir, se levantan pronto y se duermen pronto. Los
adolescentes son «búhos»: se despiertan tarde y se acuestan de
madrugada.
◦ Dormir no sirve solo para que el cuerpo se relaje y se recupere después
de un día de mucho trabajar, estudiar o jugar. Es el adhesivo con el que
unimos todas las experiencias y a la vez recordamos todo lo que hemos
aprendido a lo largo del día.
◦ la memoria y el aprendizaje se consolidan durante el sueño, de modo
que este es necesario para el adolescente, y tan fundamental para su
salud como respirar y comer.
◦ el sueño ayuda al adolescente a comer mejor. También gracias a él, los
adolescentes pueden gestionar el estrés
◦ está demostrado que los estados de vigilia/descanso, al igual que el sueño, también refuerzan el aprendizaje.
¿Qué ocurre, pues, cuando el adolescente
no duerme lo suficiente?
◦ Y la falta de unos buenos hábitos de sueño no solo provoca cansancio del cuerpo y la mente.
◦ Puede tener efectos profundos y duraderos en el adolescente y contribuir a muchas cosas, desde
la delincuencia juvenil hasta la depresión, obesidad, hipertensión y enfermedades cardiovasculares.
◦ Diversos estudios demuestran que los adolescentes que dicen tener problemas para dormir consumen con
mayor frecuencia bebidas edulcoradas, alimentos fritos, dulces y cafeína.
◦ Realizan menos actividad física y se pasan más tiempo delante del televisor o el ordenador.
◦ Los adolescentes con problemas de sueño entre los doce y los catorce años tenían, entre los quince y los
dieciséis, el doble de probabilidades de pensar en el suicidio que los adolescentes con buenos hábitos de
sueño
En el ámbito fisiológico, las consecuencias
de la falta de sueño pueden ser:
◦ problemas dermatológicos que se agravan con el estrés, como acné o
◦ psoriasis;
◦ comer en exceso o mala alimentación;
◦ lesiones en la práctica de deportes;
◦ subida de la tensión arterial, y
◦ vulnerabilidad a enfermedades graves.
◦ agresividad;

En el ◦ impaciencia;

emocional: ◦ impulsividad y conducta impropia;


◦ tendencia a la baja autoestima, y
◦ inestabilidad anímica.
En lo cognitivo:

menor capacidad para el aprendizaje;

inhibición de la creatividad;

lentitud en la resolución de problemas, y

más despistes y olvido.


¿Qué podemos hacer?

◦ antes de acostarse hagan actividades que no exijan demasiada concentración


técnica y que hagan el mismo tipo de actividades a la misma hora todas las
noches, no solo para evitar la supresión de la melatonina por culpa de la luz
artificial de la pantalla del ordenador, el iPad o el móvil, sino también para
acostumbrar al cuerpo a que se relaje a la misma hora todas las noches.
◦ Elaborar una lista de trabajos pendientes propicia la planificación previa de la
tarde, y puede mitigar la ansiedad y, con ello, la falta de sueño.
◦ Además, la cama ha de servir solo para dormir; evitemos que se asocie con
comer, ver la televisión o incluso con los deberes.
◦ Evitar las discusiones antes de acostarse
CONDUCTAS DE
RIESGO
los adolescentes son impulsivos y más dados que los niños y
los adultos a correr riesgos.

si no son riesgos, es rebeldía: contra los padres, contra los


profesores, contra cualquier figura de autoridad.

Desde un punto vista evolutivo, es una conducta


comprensible. La adolescencia es la época de la vida en que
el joven abandona la comodidad y la seguridad de los padres
para explorar el mundo e independizarse.

El problema del adolescente es la inmadurez de su corteza


frontal, que le impide prever o entender posibles
consecuencias de sus actos independientes, de modo que
está mal equipado para sopesar los posibles perjuicios de
las conductas de riesgo.
Los adolescentes son muy vulnerables al poder de la
sugestión, y hoy, a través del ordenador, las sugestiones
están al alcance de cualquiera.

las estadísticas demuestran que hoy se puede acceder a


sustancias nocivas con mucha mayor facilidad que en el
pasado, y los adolescentes actuales, a diferencia de
generaciones anteriores, no tienen más que enviar un texto
por el móvil para obtener de inmediato drogas ilegales.

Los científicos llaman a ese correr riesgos «conducta de


decisión subóptima», y la mayoría de los adultos atribuyen
las decisiones subóptimas de los adolescentes a su
impulsividad, su irracionalidad, el egocentrismo propio de la
juventud o el omnipresente sentido de invulnerabilidad.
El tabaco

◦ El consumo de tabaco como forma más común de


abuso de sustancias nocivas ha disminuido en los
últimos diez años,
◦ Los adolescentes se hacen adictos a cualquier
sustancia con mayor facilidad que los adultos,
◦ Una cuestión importante, es que el
cerebro adolescente, al ser más plástico y estar en el
mejor momento para aprender, también,
desgraciadamente, es más propenso a las
adicciones.
Puede aliviar el estrés, el
Además, el adolescente piensa
para el adolescente que no cual, se produce en grandes
que las consecuencias nocivas
ha fumado nunca, es que es un dosis durante la adolescencia,
están muy lejos y, por ello, las
estimulante. y fumar es algo que se puede
pierde de vista.
hacer con los amigos.

cuanto más fuma el


los lóbulos frontales del
adolescente, menos actividad
cerebro adolescente, que
hay en su corteza prefrontal. El
controlan las conductas de
desarrollo escaso o dañado de
riesgo, están menos
la corteza prefrontal es
conectados que los del
una causa de las malas
cerebro adulto.
decisiones de los adolescentes.
◦ El adolescente no solo tiene menos
capacidad para utilizar los lóbulos
frontales, sino que, a su edad,
determinadas experiencias
y sustancias interfieren realmente en el
desarrollo normal y, en
consecuencia, provocan al
adolescente problemas para toda la
vida.
◦ Dos ideas erróneas en torno al consumo de
alcohol en torno a la adolescencia:
◦ Primero, que el cuerpo y el cerebro jóvenes del
adolescente no están tan maduros como los del

El alcohol adulto y, por consiguiente, no están tan bien


equipados para ocuparse de los
efectos fisiológicos inmediatos del alcohol.
◦ Segunda, debido a esa juventud e inexperiencia,
pensamos que el adolescente se puede recuperar
antes que el adulto del exceso de alcohol.
En primer lugar, el cerebro adolescente, en comparación con el adulto, puede manejar mejor los aspectos sedantes de la bebida,
entre ellos, el mareo, la resaca y la falta de coordinación.

El alcohol excita el neurotransmisor GABA, que inhibe el disparo sináptico, y se ha descubierto que a lo largo de la adolescencia
aumenta la cantidad de receptores GABA de varias estructuras cerebrales, incluido el cerebelo (que controla la
coordinación motora).

Sin embargo, los adolescentes, y en especial los más jóvenes, tienen menos receptores totales GABA que los adultos, por lo que
sienten menos los efectos inhibidores, unos efectos que en los adultos son acrecentados por los mayores niveles de GABA.

Una menor inhibición de la actividad en zonas fundamentales del cerebro como el cerebelo significa menos sedación,
menor disfunción de las habilidades motoras y menos problemas de coordinación.

Menos inhibición significa más tolerancia, y la mayor tolerancia puede impulsar a beber más. Si le sumamos la presión de los
iguales y el hecho de que los adolescentes pasen tanto tiempo en situaciones sociales y que son más propensos a beber en grupo,
la receta del abuso del alcohol queda completa.
◦ en los adolescentes, el consumo de alcohol
está relacionado con el déficit de atención, la
depresión, los problemas de memoria y la
disminución de la conducta orientada a
objetivos. Parece que el daño es peor en las
chicas, tal vez porque su cerebro se
desarrolla un poco antes que el de los chicos.
◦ el alcohol afecta al tamaño y la eficacia de la
corteza prefrontal, la sede del
funcionamiento ejecutivo, y al hipocampo,
de importancia capital para el aprendizaje y
la memoria.
Alcohol y memoria
◦ El hipocampo es una de las dos únicas estructuras cerebrales que fabrican nuevas
neuronas desde la infancia y a lo largo de la madurez. La neurogénesis hipocampal es
importante para el aprendizaje, y el alcohol afecta al aprendizaje.
◦ los efectos del alcohol sobre la memoria forman un continuo relacionado con la dosis.
En un extremo del continuo, con dosis bajas de alcohol, la incapacidad es leve. En el
otro extremo, con intoxicación grave, los déficits y discapacidades son profundos. En
cualquier punto del continuo, el alcohol afecta a la capacidad del hipocampo de
convertir los recuerdos inmediatos en permanentes.
◦ Los daños que provoca el consumo excesivo de alcohol no desaparecen
necesariamente con la resaca. Los científicos han descubierto que el alcohol daña una
porción específica del hipocampo, la llamada área CA1, que contiene neuronas
piramidales, así llamadas por su forma triangular.
◦ Estas células ayudan específicamente al hipocampo a enviar recuerdos autobiográficos
—recuerdos de las propias vivencias— al almacén de largo plazo.
◦ El alcohol bloquea la capacidad de trabajo de estas células piramidales del hipocampo
e impide que el cerebro forme recuerdos autobiográficos. En estudios con animales se
ha observado de forma repetida que la incapacidad de la memoria es mayor en
los adolescentes que en los adultos.
◦ En los adolescentes con trastornos de consumo de alcohol, la sustancia blanca del cuerpo calloso, las fibras que
conectan los dos hemisferios del cerebro y permiten que se comuniquen mutuamente, queda dañada, sobre
todo en una zona llamada el «esplenio» o «rodete». El rodete tiene forma redonda y gruesa, y se solapa con el
cerebro medio, que es la parte del sistema nervioso central relacionada con el oído, la visión, el control motor y
el ciclo de sueño/vigilia.
El estrés
◦ La vida emocional de todos los seres humanos está estrechamente ligada al funcionamiento de la amígdala, de la
que nacen nuestros sentimientos y reacciones más primarios: el miedo, la ira, el odio, el pánico, la pena.
◦ Desde el punto de vista emocional, la principal diferencia entre el adolescente y el adulto es que en los lóbulos
frontales del primero hay mucha menos actividad, lo cual le dificulta el control de los sentimientos, sobre todo en
situaciones de crisis.
◦ El adolescente no puede acceder plenamente a sus lóbulos frontales, lo cual hace que otras zonas del cerebro
puedan escapar un poco a su control y generar impresiones exageradas sobre peligros exteriores.
◦ Los sentimientos primarios, como el de miedo, son obra del llamado eje hipotalámico-pituitario-adrenal (HPA).
◦ Ante una situación de estrés, la amígdala es la primera en reaccionar, y, una vez estimulada, libera hormonas del
estrés que indican a la glándula pituitaria que libere determinadas sustancias químicas, las cuales a continuación
hacen que la glándula adrenal libere adrenalina
Además de la adrenalina, hay otra sustancia neuroquímica, el cortisol, que contribuye a esa
ebullición emocional del adolescente. Normalmente, el cortisol fluctúa a lo largo de un ciclo de
veinticuatro horas, con un alto nivel por la mañana, una vez que la persona se ha despertado.

Este nivel sube entre un 50 % y un 60 % a lo largo del día, para después empezar a bajar,
primero muy deprisa y después más despacio, a partir del mediodía y durante varias horas, hasta
llegar al nivel más bajo a medianoche.

La emoción más aguda va de la mano del estrés, y para el adolescente las circunstancias que lo
provocan son omnipresentes: desde hablar delante de los compañeros de clase hasta el rechazo y
el acoso escolar. El efecto que las experiencias estresantes y los traumas emocionales producen en
el adolescente puede tener después graves consecuencias para la salud mental y emocional.
◦ La Asociación Psicológica Americana señala una serie de medidas para ayudar al adolescente que vive las consecuencias inmediatas de un trauma que
pasa a ser público:

◦ Crear un espacio seguro para el adolescente, alejado de curiosos y de los medios de comunicación.

◦ Con mucho tacto pero con firmeza, alejar al adolescente del lugar donde se haya producido la violencia, la destrucción, o en el que haya heridos graves
o exista aún algún tipo de peligro.

◦ Facilitar ayuda al adolescente que muestra signos de pánico y pena profunda, por ejemplo, temblores, agitación, mutismo, llanto fuerte o rabia.
Permanecer con él hasta que se tranquilice.

◦ Ayudar al adolescente a que se sienta seguro, con palabras o gestos de apoyo y comprensión. La reafirmación es de suma importancia.

◦ Informar del suceso traumático al adolescente en un lenguaje que pueda entender. Le ayudará a comprender qué ha sucedido y se sentirá
más tranquilo.
los adolescentes, aunque son particularmente vulnerables a los
efectos negativos del estrés, también están mejor equipados
que la mayoría de los adultos para aprender a reaccionar
positivamente al estrés.

resiliencia
DINÁMICA
FAMILIAR
◦ La for ma en que los pa dres in te rac
túan con los ado les cen tes influye
de modo decisivo en la forma en que
és tos avan zan a la adul tez.
◦ Los sistemas familia res son di ná mi
cos: los cam bios con duc tua les de
un miem bro de la familia inciden en
los de más.
Estilos de crianza
◦ los estilos de crianza ejercen en la es truc tura psicológica del niño, influjos que se prolongan en la
adolescencia.
◦ El estilo autoritativo es el que propicia una conducta más sana en el adolescente, caracterizada por acciones
responsables e independientes, por una buena autoaceptación y autocontrol.
◦ Por el contrario, los jóvenes que han sido criados por progenitores autoritarios tal vez sean dependientes y
sientan ansiedad en presencia de figuras de autoridad o se vuelvan rebeldes y rencorosos.
◦ Este impacto negativo también se da en los grupos raciales y étnicos, como sucede con el impacto positivo de
la crianza autoritativa
Alianzas familiares
◦ Las alianzas familiares desempeñan un rol decisivo en la comunicación.
◦ A semejanza de los estilos de crianza, comienzan a moldear el comportamiento mucho antes de la
adolescencia.
◦ Las alianzas entre los miembros de una familia son naturales y sanas; pero es importante que los padres hagan
un frente común y establezcan una clara línea divisoria con sus hijos. También deben colaborar para criarlos y
corregirlos; un vínculo estrecho de un hijo y un progenitor puede resultar no ci vo si ex clu ye al otro pro ge ni
tor. El excluido pierde influencia como agente socializador y figura de autoridad. También pueden surgir
problemas de otras clases de desequilibrio, como la ausencia de uno de los padres por divorcio o separación.
◦ Cuando un adolescente está probando nuevos roles y lucha por alcanzar otra identidad personal, la autoridad
de los padres puede que se someta a una prueba difícil en un hogar de un solo progenitor.

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