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Aisiazko Ikaskuntzak
Deusto ocio: una mirada
científica desde los
Estudios de Ocio
María Jesús Monteagudo Sánchez (ed.)
Documentos
de Estudios de Ocio
núm. 35
La experiencia de ocio:
una mirada científica
desde los Estudios de Ocio
María Jesús Monteagudo Sánchez (ed.)
La experiencia de ocio:
una mirada científica
desde los Estudios de Ocio
2008
Universidad de Deusto
Bilbao
Documentos de Estudios de Ocio, núm. 35
Dirección
Manuel Cuenca
Consejo de Dirección
M.ª Luisa Amigo
Cristina de la Cruz
Susana Gorbeña
Roberto San Salvador del Valle
M.ª Luisa Setién
Introducción
por Monteagudo Sánchez, M. J. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 9
Autores . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 337
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1 El presente texto se enmarca en el proyecto de tesis «La globalización ante sus dese-
chos. Orden y exclusión en Zygmunt Bauman», financiado con una beca predoctoral del
Gobierno Vasco desde el curso 2005-2006.
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El paradigma laboralista
La conquista de la naturaleza
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para escándalo del público burgués, que había asimilado la férrea separación entre una vida
cotidiana regida por el paradigma laboralista y una esfera del arte opuesta al mismo y so-
cialmente impotente.
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Modernidad líquida
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de degradar la gratificación de los deseos como móvil de todos los esfuerzos, el precepto
que ordenaba su postergación la colocaba entre los propósitos supremos de la vida.» (Bau-
man, 2002: 168)
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Consumo de experiencias
¿Qué forma puede decirse que adoptan hoy en día nuestras acciones
y esfuerzos, si no es ya la del trabajo? Recordemos que la nuestra es una
Modernidad privada, desregulada y compulsiva. La tarea colectiva de
construir un mundo nuevo para todos se ha fragmentado hasta el infinito
y se emprende ahora en el interior de cada individuo. Cada uno de noso-
tros, sometido a constante autocrítica, debe demostrar su capacidad para
renovarse, su agilidad para no quedarse nunca atrás en la carrera de la
reconstrucción identitaria. La obligada elección entre diferentes ofertas,
la pronta pérdida de su frescura, la inevitable soledad de nuestra tarea,
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Reflexiones finales
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Bibliografía
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Introducción
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derada por Tinsley y Tinsley (1986) y Baldwin y Tinsley (1988) quienes, influenciados
por Neulinger (1974, 1980), Csikszentmihalyi (1975) o Mannell (1980) propusieron la
teoría de la experiencia subjetiva de ocio, hoy comúnmente aceptada (Mannell y Klei-
ber, 1997; Cikszentmihalyi, 1993, 1997, 1998, entre otros), aunque amplía su perspec-
tiva de análisis. Así, mientras en USA se propone la teoría de la experiencia subjetiva de
ocio desde una perspectiva eminentemente psicológica, nosotros entendemos que la vi-
vencia del ocio tiene implicaciones tanto personales como sociales.
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OUT IN
Gráfico 1
Proveedores de experiencias
Fuente: De Bruyn, 2002: 21.
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Gráfico 2
Definición psicosocial de la experiencia de ocio
Fuente: Iso-Ahola, 1980a:185
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Imagen 1
Mercados para el disfrute de experiencias de ocio
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Imagen 2
Ejemplo de personalización y protagonismo en Barceló Viajes
6 Barceló Viajes ha puesto en marcha “Viajeros Barceló”, una nueva publicación «he-
cha por y para viajeros, innovadora e inspiradora, entre el catálogo y el magazine de via-
jes». La compañía destacó que “Viajeros Barceló” es uno de los elementos «clave» de la
nueva estrategia de posicionamiento de marca e imagen de Barceló Viajes. Pretende «crear
nuevos viajeros», transmitirles experiencias y emociones y comunicarles los contenidos
comerciales de una forma «sugerente y amena».
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Gráfico 3
El protagonismo minoritario de las experiencias de ocio en la curva de demanda
Fuente: Elaboración propia a partir de Anderson, 2006
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CALIDAD EN
VALOR EXPERIENCIAS SENSACIONES
PROCESOS DE
SERVICIO
=
ESFUERZOS INCOMODIDADES INSEGURIDADES PRECIO
Gráfico 4
El valor de las experiencias
Fuente: Bordas, 2003:6
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7 Bajo el título «Ocio y Calidad de vida. El impacto del ocio en el desarrollo social eco-
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Imagen 3
Ejemplo de disfrute de la vida en la oferta turística de Viajes Barceló
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Clave 6. Edutaiment
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Imagen 5
Ejemplo de experiencia a la carta
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Gráfico 5
Un modelo de negocio centrado en el cliente
Fuente: Buhalis, 1999
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Bibliografía
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Introducción
Hoy en día existe una sensación de vacío sobre todo cuando hablamos
del tiempo libre; tal parece que hay un reloj interno que ha transformado
nuestro espacio de manera tal que ya no es claro que el tiempo nos per-
tenece. Los individuos son esclavos del tiempo y tienen menos control
sobre él. Ocio es algo que se compra y compramos ocio para compensar
la falta de él. Ocio ya no es espontáneo y genuino, pasó a ser un ocio de
consumo ¿Por lo tanto, cuál ha sido el efecto que todo lo señalado ante-
riormente ha provocado en el ocio? La presión en nuestras vidas, reforza-
da por los lugares de trabajo y por el clima económico, social, y político
ha reducido nuestra calidad de vida. El objetivo de este ensayo es analizar
la relacion de la globalización desde la influencia económica, tecnológica,
y social en el ocio y en el bienestar de las personas y explorar alternativas
que nos ayuden a recuperar la esencia filosófica de lo que es el ocio. Los
temas emergentes incluyen el ocio moderno, el consumo del ocio, el im-
pacto de la tecnología en el ocio, la transformación de las redes sociales,
ocio y calidad de vida, y el ocio como un derecho.
Comprender el Ocio
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Tabla 1
Perspectiva Histórica
Revolución
Periodo Antigua
Roma Edad Media Puritanismo
Histórico Grecia
Industrial Post-Industrial Digital
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Consumo de ocio
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«El tiempo se percibe socialmente como algo que debe llenarse has-
ta el límite eliminando «los aspectos positivos del tiempo perdido» que
«puede también llenarse de reflexión, aventuras posibles, observación
de acontecimientos, reducción de la uniformidad de nuestra existencia,
etc.» (Fortunati).
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Presión
Producción
Progreso Influencia negativa
Cambio en Prioridades Calidad de vida
Actividades
relacionadas al
Trabajo
Ocio comparte
elementos del trabajo
Figura 1
Las 4 Pes del Ocio Actual
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Presión Pasión
Influencia Influencia Placer
Producción Calidad de vida
negativa positiva Paz
Progreso
Cambio en Propósito
Prioridades
Disposición
Disposición
de la mente
de la Sociedad
Figura 2
Las 4 Pes del Ocio Futuro
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Introducción
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Desde sus inicios a finales de la década de los 60, uno de los princi-
pales objetivos de los Estudios de Ocio ha sido desentrañar la naturaleza
de los procesos personales que subyacen al fenómeno del ocio para así
entender mejor las conductas humanas. Sabido es también que aunque
la esencia del ocio haya sido siempre idéntica, la relevancia, significa-
dos y funciones, tanto individuales como sociales, atribuidas al ocio y a
sus manifestaciones, han variado en cada época, de la misma forma que
lo han hecho las teorías, los enfoques y las hipótesis con las que se ha
abordado científicamente este concepto. Lejos queda la aproximación al
estudio del ocio entendido como tiempo libre y cuyo resultado era una
detenida descripción de los tiempos empleados para el ocio (estudios de
presupuestos de tiempo) o, como actividad, caso en el que su estudio daba
lugar a un análisis de los comportamientos de ocio de la población (qué
hacen, cuándo, con quién, dónde, con qué frecuencia...) destinado a per-
filar los hábitos de ocio de un colectivo o sociedad. Un tercer enfoque de
aproximación al estudio del ocio es el de carácter económico, que aunque
ciertamente interesante para ratificar el poder del ocio como motor de
desarrollo económico, no hace sino descifrar una de las vertientes de este
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— Apropiación/Asimilación
Supone un ejercicio de apropiación, en el sentido de hacer propio lo
que está sucediendo, lo que se está sintiendo, conociendo, presenciando
o provocando. Subyace a esta asimilación, una actitud manifiesta en la
voluntad de querer ser protagonista, de querer vivir, pero se diferencia del
protagonismo al que nos referíamos en toda vivencia en que ésta última,
no la elegimos voluntariamente, sino que nos viene dada por el mero he-
cho de «ser» y de «estar» ante las cosas; es la misma inercia de la vida. En
el ámbito del ocio, y especialmente, en el caso de las experiencias de ocio,
esta asimilación tiene mucho que ver con la actitud que el ocio requiere;
una actitud de apertura y receptividad, inevitablemente asociada al grado
de implicación; en palabras de Pine y Gilmore (2000), a la capacidad de
inmersión, que la persona muestra en cada práctica y al sentimiento de li-
bertad que la persona percibe que respalda su implicación e interés.
— Significación
Estrechamente ligado al rasgo anterior, la significación se refiere a la
necesidad de que la vivencia adquiera sentido para la persona; la vivencia
debe ser valiosa e imbricarse en la historia de vida del protagonista. Úni-
camente si la persona vislumbra este significado, puede tomar la decisión
de asimilar su contenido. A priori, las decisiones que tomamos en torno a
nuestro ocio deben respetar este supuesto; esto es, si decidimos realizar
una práctica es porque consideramos que tiene sentido para nosotros; sin
embargo, en ocasiones, esta significación que se presupone en la elección
de la práctica no se materializa en el desarrollo de la acción, al alejarse el
proceso y/o el resultado de nuestros pronósticos y defraudar así nuestras
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— Transformación
Si bien no todas las vivencias consiguen marcar nuestra existencia,
algunas se convierten en motores de cambio, en el origen de pequeñas o
grandes transformaciones que nos permiten crecer, transformarnos como
personas. Estas transformaciones solo pueden apoyarse en vivencias
asimiladas, profundamente significativas para la persona. Como afirma
Manuel Cuenca «el ocio, en cuanto acción satisfactoria de nuestra exis-
tencia, es algo dinámico: o se practica y obtenemos sus beneficios, o no
se practica, y como mínimo, dejamos de avanzar en el autoperfecciona-
miento que nos proporciona» (2006:15). Desafortunadamente, no todas
nuestras prácticas de ocio o al menos, no todas las ocasiones en las que
practicamos alguna actividad de ocio, nos permiten ser protagonistas de
estas transformaciones.
La idea de cambio a la que aludimos se muestra especialmente unida
a la consideración del ocio como proceso; el ocio de cada persona adquie-
re la dimensión de itinerario en la medida en que nos acompaña a lo largo
de distintos momentos y circunstancias de la existencia. Nuestros estilos
de ocio no se componen de acciones aisladas (aunque también las halla),
sino de elecciones y actuaciones concretas unidas entre sí por un hilo con-
ductor que es la persona y que otorga sentido a este proceso. Por tanto, la
transformación de la que hablamos puede explicitarse para la persona en
un momento determinado como consecuencia de una experiencia con-
creta, pero también puede ser el resultado de un proceso, de un camino
previo que es el ocio. Un camino en el que se van acumulando experien-
cias, que van dejando su poso en forma de recuerdos, conocimientos, ha-
bilidades y destrezas que finalmente pueden dar sus frutos en este proceso
transformador.
— Emoción
Toda experiencia encierra un fuerte componente emocional que la
convierte en un hecho singular, personal e intransferible. A pesar de los nu-
merosos estudios realizados en torno a las emociones, poco se ha llegado a
esclarecer acerca del proceso que encierra una emoción y los factores que la
desencadenan. Existe consenso sin embargo, acerca de uno de los elementos
que contribuyen al éxito y a la actual puesta en valor del ocio como promo-
tor de experiencias: su capacidad para llegar a las personas a través de las
emociones. Emociones que afloran invocadas por estímulos de naturaleza
diversa (recuerdos, sensaciones, deseos no alcanzados…); estas emocio-
nes pueden ser provocadas por agentes, escenarios, situaciones o acciones
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— Carácter memorable
Memorable significa ser «digno de memoria» (RAE, vigésimo segunda
edición, 2004). Es decir, digno de ser recordado. Efectivamente, la memoria
humana almacena en un lugar preferente, aquello que nos ha marcado de
manera positiva, que nos ha resultado significativo, que nos ha transforma-
do. Entre todas nuestras vivencias, nuestra memoria selecciona y tiende a
recordar con especial nitidez aquéllas que han dejado una huella memora-
ble en nuestro ser, aquellas cuyo legado permanece como algo inherente a
nuestra historia de vida. Así sucede también con las experiencias de ocio.
Además, la palabra memorable posee una connotación positiva que, en este
caso, interesa subrayar. Aunque la memoria puede almacenar vivencias
tanto positivas como negativas, el calificativo memorable es atribuido a
aquellas vivencias cuyo recuerdo evoca la grata emoción entonces experi-
mentada. De la misma forma, el término experiencia de ocio memorable
se asocia a aquellas vivencias de ocio de direccionalidad positiva que han
resultado especialmente significativas, fuertemente emotivas y promotoras
de algún cambio o mejora para la persona protagonista.
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Principio de Alteridad
Condiciones de posibilidad:
Exterioridad, Atracción y Potencialidad equilibrada
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Principio de Reflexividad
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Principio de Incertidumbre
Condiciones de posibilidad:
Aventura, Dinamicidad, Relacionalidad emocionada
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Principio de Individualidad
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Bibliografía
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¿Qué es la estetización?
En las últimas décadas del siglo XX, se puede observar una revaloriza-
ción de lo estético. Podríamos cifrarlo en un aspecto fácilmente compro-
bable: la transformación estética de las ciudades. Pensemos en mi ciudad.
La ciudad de Bilbao se destacó desde hace siglos por su función de puerto
del norte de España. Esta actividad trajo consigo la implantación de una
potente industria naval, llegando a considerarse uno de los lugares astille-
ros más importantes de la península. A esta labor se sumó, en el siglo XIX,
el desarrollo industrial del hierro y el acero, que se vinculó a una vieja
tradición de ferrerías. La crisis de finales de los pasados años setenta y
ochenta, sumada al envejecimiento de las instalaciones, trajo una gran cri-
sis para el sector que arruinó gran parte del tejido industrial. El cambio es-
tético de Bilbao, iniciado en el década de los ochenta, se aprecia a simple
vista. La oscura y sucia villa industrial ha dado paso a una urbe muy agra-
dable en la que se cuidan todos los aspectos, desde la limpieza de la ría y
la jardinería hasta los detalles mínimos del mobiliario urbano. ¿Favorecen
estas transformaciones la realización de experiencias de ocio estético?
A diferencia de otros momentos anteriores, el fin de siglo parece haber
privilegiado el ámbito estético. Esta distinción vendría dada por una nue-
va sensibilidad, un cultivo del cuerpo como parte integral de lo humano
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Goce
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EL ASOMBRO O ADMIRACIÓN
La experiencia de ocio estético se inicia en el asombro. Caigamos en
la cuenta, desde el primer momento, de algo elemental: algo nos asom-
bra. La imagen óptima que representa este primer momento podría ser
la del niño totalmente entregado en su mirada a la realidad que llama su
atención. Quizá en los niños se dé de forma extraordinaria, pero todos
nosotros la experimentamos en uno u otro momento. Algo nos sorprende,
nos cautiva y nos retiene, a veces de una manera intensa. Sabemos que
el arte nos llega en muchas ocasiones de este modo, sin haberlo buscado,
sorprendiéndonos. Así ocurre cuando una melodía alerta nuestros oídos y
nos concentra en ella, haciéndonos olvidar lo que teníamos entre manos.
Visitamos una exposición y un cuadro nos paraliza en sus colores o en
sus formas. Leemos un poemario y, de pronto, un poema parece penetrar
hasta lo más hondo de nuestra intimidad. Sabemos que esta admiración
no se restringe al arte; también la vivimos muchas veces en la naturaleza
o en la ciudad. El arte nos proporciona, en muchas ocasiones, la imagen
que nos ayuda a disfrutar de ellas. Orhan Pamuk recoge este sentimiento
cuando valora la mirada poética y selectiva que realizan los escritores. Se
refiere concretamente al viejo Estambul y a su belleza del pasado, desapa-
recida y rescatada literariamente. Esas páginas «nos permiten disfrutar
como placer estético la ilusión efímera de cómo podría seguir vivo ahora
el pasado»(Pamuk, 2006: 136). La literatura, la pintura, el arte en general
tienen la capacidad de condensar en sus formas mundos que nos producen
admiración por diversas razones y, entre ellas, porque desaparecieron de
la historia y son capaces de vivificarlos. Admiramos también la maestría
de su hacer y reconocemos el valor de la acción artística.
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PARTICIPACIÓN CO-CREADORA
El adentrarnos en el objeto estético, que ha cautivado nuestra aten-
ción, no es una tarea que se pueda llevar a cabo sin la participación de
nuestra subjetividad. Como han destacado ya algunos pensadores, en esta
experiencia nuestro yo se hace activo y vuelca en el objeto su mundo per-
sonal. Lo que contemplamos en esa forma es un cúmulo de datos sensi-
bles que percibimos e imaginamos. Inmediatamente asociamos imágenes,
referencias de otras obras similares que hemos conocido, situaciones que
recordamos...Nuestro yo se hace activo, observa, recuerda, asocia, relacio-
na... «Así vamos formando el objeto estético de nuestra contemplación.»
(Plazaola, 1991:303).
La experiencia nos implica y se enriquece con nuestra aportación ac-
tiva. El receptor tiene que ayudar a crear su propia experiencia, tiene que
constituir el objeto sobre el que va a desplegar su creatividad y en el que
va a encontrar una fuente de disfrute. Así como la experiencia del artista
se condensa en la forma que crea, la experiencia del receptor se concreta
en una participación co-creadora en la obra dada. La experiencia es crea-
ción y recreación. Observemos cómo lo expresa el Premio Nóbel de Lite-
ratura O. Pamuk. Recordábamos antes la capacidad del arte para recons-
truir mundos que ya no existen y, concretamente el escritor se refería al
esplendor pasado de la ciudad de Estambul. Destaco, ahora, cómo alude a
la recreación estética: «Aprendí que el precio que hay que pagar para po-
der elogiar Estambul sin límites y con un entusiasmo lírico es no vivir ya
en ella u observar desde fuera aquello que se considera hermoso»(Pamuk,
2006: 75).
En esta línea U. Eco, Lopez Quintás y otros autores han insistido en la
participación como complemento necesario de la obra. En la experiencia
de ocio estético el ser humano tiene un campo de posibilidades para en-
cauzar su capacidad creadora y co-creadora.
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GOCE
La experiencia de ocio estético es gozosa o, en otros términos, nos
proporciona placer. También aquí observamos una gradación que iría del
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Reflexión final
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Bibliografía
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LÓPEZ QUINTÁS, A., (1998). Estética de la creatividad. Madrid: Rialp.
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Introducción
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La existencia en horas
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El vivir en 24 horas
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Esta visión nos sitúa en el carácter experiencial del ocio que se inserta
en la existencia por las actitudes que genera frente a la vida. Habla de rea-
lización personal, identificación, conocerse a uno mismo y al otro, huir de
la monotonía, cuidar de la salud.
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Tabla 1
Las dimensiones del ocio autotélico
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Consideraciones finales
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Introducción—algunas preguntas
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Evolución de los escenarios recreativos, según Botterill (1993)
Tabla 2
Principales magnitudes sobre parques temáticos, 2000
Mio$
N.º Mio Mio$ Inversiones
% % % %
Parques Visitas Ingresos nuevas
atracciones
EEUU-
112 33 226 41 6.762 49 11 35
Canadá
Europa 83 24 101 19 2.208 16 55 17
Asia/Pacífico 119 35 188 34 4.416 32 145 46
Resto del
28 8 30 6 414 3 10 3
Mundo
Total 342 545 13.800 321
Fuente: Antón, S. (2005:70)
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Diferenciación
Mirar al pasado y explicarlo es mucho más fácil que decidir hoy, aquí
y ahora las tendencias y nuevos mercados/hábitos que pueden ser clave
en varios años. Veamos dos ejemplos diferentes entre sí, dos dimensiones
distintas del ocio: Bilbao y Nokia:
1. «Bilbao is home to some 1 million Basque-nearly half the inha-
bitants of the surrounding Basque Country. It was once thriving, but by
1989 it was in state of deterioration. That year, the Basques hatched an
ambitious urban-renewal program to transform the city into a modern-day
commercial, cultural, and recreational center that would attract business
and tourists from around the world. Part of this plan was to create a mu-
seum of contemporary art, designed by one of the world’s great architects.
Who did the leaders of Bilbao want to run the museum? Thomas Krens.
When the invitation came, Krens had been looking at locations for a sate-
llite museum in Spain. But Bilbao wasn’t one of them. He wasn’t interes-
ted. Still, he met with the president of the Basque country-and gave him
a list of condition she never thought would be accepted. For openers, the
president would have to agree in advance to build the greatest building of
the twentieth century-and not only would be the Guggenheim get to pick
the site, Krens would submit the names of three architects from among
which the president could choose. In additions, the Basques would have
to subsidize the cost. The Guggenheim would loan part of the collection,
but Krens would need a multi-dollar acquisition fund to buy new works
of art. And he’d need $20 million to go forward, non-refundable. When
Krens was finished, he got up to leave. Suddenly, the president reached
across the table and said, «you’ve got a deal». It happened just like that.
At the initial meeting, Kresn had told the Basque president to ‘think big’.
The Guggenheim Bilbao, designed by Frank Ghery, is nearly double the
height and length of the Centre Georges Pompidou. A single gallery is
large enough to hold two 747’s. Krens always believed that if the museum
where interesting enough, people would go to it-wherever it was. The
Guggenheim Bilbao has proved that theory. The Guggenheim had projec-
ted 485.000 visitors in the first year-it lured 1.50 million. In one stroke,
it changed the fortunes of the Basque country. In the first year alone, the
museum brought in $250million in increased tourist spending and $45
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Halloween en Portaventura
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Objetivo:
Reinventar el atractivo de PortAventura para los jóvenes, a través de un
código original y atrevido «PortAventura Mola!!! yo hago PortAventura»
Estrategias:
1. Crear un personaje joven real «KE LO FLIPAS» y un punto de en-
cuentro para todos los jóvenes, la web: www.keloflipas.com
2. Transmitir los valores de PortAventura Æ Las emociones más ca-
ñeras: Diversión, adrenalina, aventura… todo mediante historias.
Resultados:
Visitas 912.000
Visitas únicas 526.000
Total registros 11.400
Páginas vistas 4.964.000
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Premios publicitarios:
Campaña ganadora de los premios IMAN 2006
Campaña ganadora en el Festival El SOL 2006
Campaña finalista para de los Premios Eficacia 2006
Tabla 3
Conocer la generación Einstein: más listos, más rápidos y más sociales
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«La gente no quiere dejar su ciudad para irse a otra, incluso aunque le
ofrezcan más dinero y mejor calidad de vida.» (Ergo, 1999:42).
«En España se tiene mucho apego a la tierra. Hay algo a lo que segui-
mos estando conectados: me puedo cambiar de casa, pero mi pueblo si-
gue estando allí y sólo lo puede mover un terremoto.» (Ergo, 1999:51).
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Conclusiones
¿Nos arriesgamos un poco en los inicos del siglo XXI?, ¿somos ca-
paces de acertar al menos ‘un par de tendencias’ que marcarán el futuro,
nuestro futuro?
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170
Introducción
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172
INFLUENCIA DEL
CONTEXTO ECOLÓGICO-INTEGRAL
Condiciones Sociales
de existencia
Gustos
Prácticas de ocio
Individuo y
Valores,
Proceso de conocimientos
socialización habilidades Funciones macro-
y creencias
estructurales:
Motivaciones —Económicas
—Sociales
—Políticas
Funciones psicosociales
—Etc.
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11 En este aspecto sigue Dumazedier el esquema que Durkheim establece para diferen-
ciar entre la solidaridad mecánica y la solidaridad orgánica. Cf. DURKHEIM, E., La división
del trabajo social, Madrid, Akal, 1982, pp. 151-154.
12 DUMAZEDIER, J., «Ocio», en Enciclopedia Internacional de las Ciencias Sociales,
174
El contexto socioestructural
175
véase cuando enuncia la primera regla que nos enseña la imaginación sociológica.
176
Tabla 1
Diferencias entre los gustos y las prácticas de ocio
Practica de actividad x
SI NO
SI
Gusto de práctica x
NO
100
177
178
179
Gusto
La primera conclusión que sacamos de los datos del gráfico es que no
existe ninguna actividad de ocio que sea del gusto de la mayoría de la po-
blación. Incluso la más puntuada, «estar con la familia» no llega al 50% de
la población. Le siguen pasear y estar con los amigos que tienen una pun-
tuación próxima al 40%. Como vemos son tres actividades sociales, incluso
la de pasear que aún siendo una actividad física, las personas, por lo que
nos dijeron en las entrevistas en profundidad, lo suelen hacer en grupos de
familia o de amigos-vecinos.
El siguiente grupo, del 36 al 26%, lo ocupa el gusto por ir al cine, de
excursión, ver la televisión, hacer deporte, escuchar música y leer libros y
revistas. Son actividades que bien espacialmente —ir de excursión— o bien
mentalmente —cine, televisión, música, lectura e incluso deporte— tienen
una función de evasión de la realidad, cumplen la función de llevarnos a
una realidad distinta de la problemática cotidiana. Nos llama la atención que
la más importante sea ir al cine, por encima incluso de ver la televisión, al
tener un componente más imaginario. Esto no debe de confundirnos con la
práctica de la actividad, que en la realidad será distinto y se ve más la televi-
sión que se va al cine, lo cual como explicaremos no quiere decir que guste
más, de ahí la necesidad de analizar el desajuste entre gusto y práctica.
El siguiente grupo está formado por una serie de actividades que en
su mayoría se practican semanalmente como ir a bailar, ir de copas, ir de
compras a centros comerciales, etc.
Finalmente está un grupo de actividades que son propias de un grupo
de personas que bien por su edad o por su formación se diferencian de los
demás como son el teatro, las nuevas tecnologías, etc.
La tendencia de los españoles es a incrementar su ocio, tanto el ocio
activo como el ocio pasivo donde la respuesta más pasiva es el «no hacer
nada en especial», que como vemos pasó de un 15 a un 20% del año 2000
al año 2005.
180
39,2
Salir al campo, ir de excursión 29,8
38,9
Ir al cine 32,5
37,6
Ver deporte 29,1
33,3
Hacer deporte 30,7
32,7
Ir de copas
25,5
Salir con mi novio/a o algún/a chico/a 15,8
Navegar por Internet 24,6
Ir a bailar 19,1
17,6
Ir al teatro 11,1
7,0
0 10 20 30 40 50 60 70 80 90
181
Ir de compras a centros
comerciales 11,1 87,6
% 0 20 40 60 80 100
182
Ir de compras a
20,1 79,9
centros comerciales
Ir al teatro 20,0 80,0
% 0 10 20 30 40 50 60 70 80 90 100
183
184
185
186
LA INFLUENCIA DE LA EDAD
En general a medida que avanza la edad las personas realizan menos
actividades de ocio. Sin embargo, podemos diferenciar algunas activida-
des que son realizadas con mayor probabilidad por las personas de mayor
edad, como son pasear, ocuparse del jardín, trabajos manuales, escuchar
la radio, ver la televisión…
Hay otras que son típicas de edades intermedias, quizás por lo que fue
la situación de las personas en la sociedad española como es el leer libros
y revistas. Los grupos que más la practican son los que tienen edades entre
los 25 y los 55 años. Los jóvenes no están siendo socializados en métodos
de lectura, sino más bien en otros medios de información. Los más jóvenes
destacan por ir de copas, navegar por Internet, chatear, practicar deportes,
musicales (escuchar música, asistir a conciertos, tocar instrumentos).
187
Ir a reuniones políticas
conferencias
Ir al teatro
musicales
Ir al cine
chico/a
NIVEL DE ESTUDIOS
Básicos o menos –12,8 –13,4 –6,8 –21,4 –15,4 –17,3 –20,6 4,0 –10,7 –6,4 –5,9 –13,8 –15,4 –10,8
Medios 8,3 4,6 10,5 2,3 2,4 8,1 –2,7 6,2 2,9 10,0 8,5 8,5
Superiores 6,8 11,9 7,8 15,3 17,2 19,5 17,1 –2,1 6,5 7,3 4,3 6,0 9,9 4,1
SITUACIÓN SOCIOLABORAL
Directivos y profesionales
superiores 2,4 2,3 4,5 2,3 2,6 2,8 2,4
Técnicos y cuadros medios 5,6 8,5 5,8 10,6 11,4 12,4 11,6 3,6 3,3 4,0 7,9
Pequeños empresarios –1,8 –2,3 –2,6 –3,4
Agricultores –5,4 –3,0 –4,4 –3,4 –2,4 –3,9 0,3 –1,8 –2,9
Empleados de oficina y
servicios 6,6 5,3 11,0 4,6 5,6 7,7 6,0 1,9 8,3 4,3 6,8
Obreros cualificados –2,1 –1,9 –2,5 –4,8 –5,9 –8,2 2,0 2,6 –3,0
Obreros no cualificados 1,8 –1,8 –2,0 –4,4 –1,8 1,8
Jubilados y pensionistas –16,6 –7,0 –3,6 –18,9 –4,4 –2,5 –5,7 2,2 –10,8 –16,9 –13,0 –15,5
Parados 4,8 2,7 –2,2 2,5 –2,7 4,8 3,2
Estudiantes 12,9 6,8 6,5 14,8 –13,4 15,2 3,0 13,1 24,0 24,5
Sus labores –8,6 –5,8 –4,8 –10,6 –2,9 –3,2 6,9 –11,1 –11,1 –11,3 –12,0
No clasificables 1,8
SEXO
Hombre 7,6 –1,9 –4,5 –2,3 –9,8 –5,2 5,5 3,0 4,7 1,6 3,9
Mujer –7,6 1,9 4,5 2,3 9,8 5,2 –5,5 –3,0 –4,7 –1,6 –3,9
EDAD
15-24 años 17,5 7,6 5,5 17,1 –3,9 –3,3 –2,1 –15,8 17,7 24,3 25,2 31,1
25-34 años 11,7 5,8 4,3 13,7 2,8 –2,0 9,2 15,5 8,8 12,4
35-44 años 2,8 1,8 5,1 6,4 –2,2 –6,2 –5,0 –6,9
45-54 años –5,2 –3,7 –2,8 –6,2 2,0 2,0 2,5 4,6 –7,9 –10,4 –9,4 –13,2
55-64 años –12,6 –4,0 –2,8 –11,7 –3,3 4,3 –9,8 –12,8 –11,0 –13,6
65-74 años –17,5 –5,5 –5,0 –19,1 –4,0 –3,1 –6,9 3,2 –10,2 –15,2 –12,3 –14,3
TAMAÑO HÁBITAT
Menos de 2000 habitantes –5,7 –3,4 –2,6 –7,3 –4,4 –4,2 –2,8 –7,4 –4,1 –3,8
2.001 a 10.000 habitantes –7,2 –3,4 –6,2 –5,2 –3,7 –7,6 –2,7 –3,0
10.001 a 50.000 habitantes –2,5 –4,2 –2,9 –3,0 4,1 0,9 2,6
50.001 a 100.000 habitantes 3,0 –3,0 –0,1 2,6 3,6
100001 a 400000 habitantes 4,2 2,1 5,1 –1,9 –2,1 –3,6 2,0 –0,9 –2,6
400001 a 1.000.000
188
habitantes 2,6 4,2 6,6 7,1 8,4 4,2 –2,5 4,2 2,0 3,2 7,0 2,6 1,8
Más de 1.000.000 habitantes 4,6 5,7 2,5 6,5 10,8 7,4 9,1 –3,5 2,5 –3,0
Frecuentar establecimientos
Salir al campo, excursión
Ir de compras a centros
Navegar por Internet
ce comida rápida
Ver la televisión
Hacer deporte
comerciales
Ver deporte
Oír la radio
Ir de copas
Ir a bailar
Pasear
NIVEL DE ESTUDIOS
–7,8 –18,1 –2,4 –6,6 2,5 10,6 –25,7 1,4 –0,2 –4,7 –16,5 –5,0 Básicos o menos
8,9 10,2 2,7 3,2 –3,6 –3,9 11,4 –1,6 –1,7 5,6 11,7 6,5 Medios
11,4 –0,1 4,8 –9,1 19,9 0,1 2,1 –0,4 7,6 Superiores
SITUACIÓN SOCIOLABORAL
Directivos
3,0 2,2 1,9 –2,2 3,4 3,4 y profesionales superiores
10,7 5,4 2,0 –6,8 13,8 5,2 2,5 Técnicos y cuadros medios
–1,8 2,0 –3,5 –2,3 –1,8 Pequeños empresarios
–3,3 –3,1 3,1 –3,7 2,7 –2,5 –3,0 Agricultores
Empleados de oficina y
5,2 3,1 4,5 2,1 7,3 –3,4 –1,8 3,8 7,2 6,4 servicios
3,4 9,6 –4,2 –2,9 –1,9 –3,0 2,9 7,8 Obreros cualificados
–2,4 –2,9 2,4 2,2 Obreros no cualificados
–10,9 –14,0 –6,5 6,5 4,3 2,3 –17,1 3,9 5,7 –11,8 –19,6 –10,6 Jubilados y pensionistas
3,7 –2,4 –1,9 2,3 3,8 Parados
15,4 16,5 3,4 –3,2 –9,4 –2,9 –5,4 22,6 –5,1 –8,2 13,8 12,0 1,9 Estudiantes
–8,3 –13,0 –13,8 –2,3 7,1 4,6 1,1 –15,5 8,8 4,4 –7,9 –15,3 Sus labores
–2,3 2,4 No clasificables
SEXO
–8,3 15,4 28,7 –10,7 9,1 –8,7 –3,5 2,8 11,5 –11,7 Hombre
8,3 –15,4 –28,7 10,7 –9,1 8,7 3,5 –2,8 –11,5 11,7 Mujer
EDAD
23,1 17,4 3,4 –3,2 –11,0 –2,1 –4,9 23,2 –7,4 –11,1 21,3 20,2 3,9 15-24 años
5,1 8,7 2,0 3,5 –3,1 –3,3 12,9 –3,3 –5,2 8,8 17,4 7,0 25-34 años
–6,3 5,1 –1,8 –0,3 –4,0 4,0 35-44 años
–7,3 –5,9 1,9 4,3 –9,6 3,1 5,1 –9,4 –10,0 –2,1 45-54 años
–6,3 –10,0 –1,9 –1,2 6,2 3,2 2,3 –14,4 5,6 6,1 –9,6 –14,4 –4,7 55-64 años
–10,6 –14,7 –5,7 –8,1 5,4 4,0 1,5 –17,2 3,3 5,3 –10,3 –19,1 –11,2 65-74 años
TAMAÑO HÁBITAT
–2,1 –3,9 2,4 4,9 2,7 –7,0 3,3 6,6 –4,1 –2,8 –2,4 Menos de 2000 habitantes
–2,1 –5,0 –3,0 –5,0 5,2 –2,4 –3,4 2.001 a 10.000 habitantes
3,2 4,8 –2,1 2,3 3,6 10.001 a 50.000 habitantes
1,8 2,8 –2,0 –3,4 3,1 3,6 50.001 a 100.000 habitantes
–2,4 –3,8 1,9 –6,5 –0,4 100001 a 400000 habitantes
400001 a 1.000.000
3,3 3,6 4,7 –3,8 3,6 3,1 2,3 habitantes
3,2 2,0 –2,6 2,8 3,8 –3,7 Más de 1.000.000 habitantes
Introducción
191
Tabla 1
Porcentajes de gasto en ocio sobre el presupuesto familiar
192
10 y = 0,0536x + 9,1782 EU
R2 = 0,6086 (25
countries)
9,5 Spain
Lineal
9 (Spain)
y = 0,0855x + 8,3782
R2 = 0,7514 Lineal
(EU) (25
8,5 countries))
7,5
1995 1996 1997 1998 1999 2000 2001 2002 2003 2004 2005
Gráfico 1
Porcentaje de gasto en ocio en los presupuestos de las familias españolas
y del resto de Europa
193
EU
(25 países) 9,1 9,1 9,3 9,5 9,7 9,7 9,6 9,6 9,6 9,7 9,6
España 8,3 8,4 8,5 8,9 9,0 9,1 9,1 9,1 9,2 9,1 9,1
Fuente: Household Budget Survey, Eurostat
194
195
196
23 Different constraints are decisive for different situations, but the most fundamental
constraints is limited time. Economic and medical progress have greatly increased length
of life, but not the physical flow of time itself, which always restricts everyone to 24 hours
per day. So while goods and services have expanded enormously in rich countries, the total
time available to consume has not.
197
24 Dentro del «tiempo libre» se incluyen las actividades de vida social, diversión, cul-
198
Reino
Mujeres Bélgica Alemania Estonia Francia Hungría Eslovenia Finlandia Suecia Noruega
Unido
Tiempo Libre 4:50 5:24 4:36 4:08 4:38 4:29 5:29 5:03 5:05 5:52
Comida
2:43 2:43 2:08 3:02 2:19 2:08 2:06 2:28 2:16 1:58
y cuidados personales
Dormir 8:29 8:19 8:35 8:55 8:42 8:24 8:32 8:11 8:27 8:10
Transporte 1:19 1:18 1:06 0:54 0:51 1:02 1:07 1:23 1:25 1:11
Trabajo Doméstico 4:32 4:11 5:02 4:30 4:57 4:57 3:56 3:42 4:15 3:47
Trabajo o estudio 2:07 2:05 2:33 2:31 2:32 2:59 2:49 3:12 2:33 3:03
Reino
Hombres Bélgica Alemania Estonia Francia Hungría Eslovenia Finlandia Suecia Noruega
Unido
Tiempo Libre 5:22 5:53 5:28 4:46 5:29 5:34 6:08 5:24 5:30 6:03
Comida y
2:40 2:33 2:15 3:01 2:31 2:13 2:01 2:11 2:04 1:47
cuidados personales
199
Atendiendo a las diferencias entre tiempo libre y ocio en España, las
cifras anteriores quedan aun más reforzadas si calculamos el tiempo que
dedican los españoles en promedio a las actividades de ocio, independien-
temente de que impliquen gasto o no. La encuesta de empleo de tiempo
del INE para 2002 (INE, 2004) muestra cómo se dedica alrededor de 5
horas al día a las actividades de esparcimiento, es decir, prácticamente el
40% del tiempo no dedicado a las actividades de descanso.
Medios de comunicación
(2:16) Trayectos y tiempo
Aficiones y juegos
(2:16) no espec.
(1:10)
Deportes y actividades Cuidados personales
al aire libre (11:22)
(0:48)
Vida social
y diversión
(1:29)
Trabajo voluntario
y reuniones
(0:13)
Hogar y familia
(2:59) Estudios
(0:43) Trabajo
(2:39)
Grafico 4
Distribución media del tiempo diario de los españoles
Fuente: EET, INE, 2002-2003
200
201
Tabla 4
Distribución de actividades por grupos de edad
menos de 25 de 45 65 y
de 25 años a 44 años a 64 años más años
tiempo % diario tiempo % diario tiempo % diario tiempo % diario
Cuidados
11:38 47,10 10:48 40,40 11:07 40,62 12:35 47,10
personales
Hogar y
1:06 4,45 3:01 11,28 3:42 13,52 3:41 13,79
familia
Tiempo
5:21 21,66 3:59 14,90 4:36 16,81 6:34 24,58
libre
Trabajo y
4:29 18,15 4:32 16,96 3:09 11,51 0:08 0,50
estudios
Voluntario
1:06 4,45 3:01 11,28 3:42 13,52 3:41 13,79
y reuniones
Trayectos y
tiempo no 1:20 4,18 1:23 5,17 1:06 4,02 0:04 0,25
especificado
Fuente: INE y elaboración propia
202
6,9
6,73
6,29
5,84 5,64
4,96
4,39
Gráfico 5
Estructura del gasto en Ocio, espectáculos y cultura por grupos de edad.
Grupo 9. ocio,
Gasto medio por espectáculos y cultura
hogar
Valor %
Conclusiones
203
204
205
Introducción
209
210
211
212
Existe una nueva corriente sobre la revolución que han supuesto las
nuevas tecnologías en la experiencia turística. Estas corrientes van un
paso más allá, de entender este fenómeno como impacto a llamarlo revo-
lución, basada en el acceso a la información. Estas ideas se basan en que
si hace unos años, las grandes agencias de viajes ponían a disposición de
los internautas (o «turisnautas») una gran fuente de información para ele-
gir su próximo destino, la comercialización de la oferta turística, hoy en
día, en éstas mismas agencias, están iniciando otra revolución: dar mayor
poder a los usuarios a través de una mayor y mejor información.25
Aunque en algunos foros se le ha acusado de utilizar un termino de-
masiado pretencioso, «segunda revolución turística», Hallé, quien lo ha
bautizado como Revolución,26 habla de la revolución turística de manera
intuitiva y documentada. El informe de la Consultora Magma Turismo
(cuyos socios son el propio Hallé y Grau), ha analizado las claves del sec-
tor turístico y afirman que «tras la irrupción de las TIC, que ha permitido
25 http://www.turistec.net/blog/2006/08/turismo_20.html
26 Hallé Bruno. La segunda Revolución Turística. (21/11/06) http://www.cincodias.com/
articulo/opinion/
213
Imab. Nuevas
28 Mario Eduardo Alza [http://www.turistec.net/blog/2006/08/turismo_20.html]
214
Tabla 2
Turismo 0.0 - 1.0 - 2.0
Tipo de Integrada
Red Red
organización verticalmente
Soc. Información y
Tipo de sociedad Soc. Información
Industrial del conocimiento)
Estandarizada Individualizada Individualizada
Tipo de oferta Rígida Flexible Flexible
Masas Segmentada Personalizada
Medianamente Altamente
Conectividad Desconectada
conectada conectada (web)
Media/Alta
Orientación la Alta (bidireccional:
Baja (unidireccional:
cliente usuario activo)
usuario pasivo)
Orientación al
Baja Media/Alta Alta
destino
Fuente: Adaptado de William, 200729
29 http://www.hosteltur.com/blogs/355_turismo-00---10-20-esquema-comparativo.html
215
30 Estos porcentajes son especialmente bajos entre aquellos que realizan los trabajos de
campo con profesionales aunque también existen diferencias como la capacidad de expli-
216
Figura 3
Progreso en el tiempo de la investigación en TAM
Fuente: Lee et al., 2003
car el fenómeno entre cuando de hace en entornos reales frente a «laboratorios» o entre es-
tudiantes o profesionales, ya que algunos incluyen factores complejos contextuales que hay
que tener en cuenta (Sun y Zhang, 2006).
217
Perceived
Usefulness
(PU)
Attitude
Toward Behavioral Actual
External
Using Intention Use
variables
(A) (BI)
Perceived
Ease of Use
(PEOU)
Figura 4
TAM-Technology Acceptance Model
Fuente: Davis, Bagozzi and Warshaw, 1989
218
219
220
221
222
223
224
Implicaciones
225
226
Bibliografía
AGARWAL, R. AND KARAHANNA, E., (2000). Time flies when you’re having fun:
cognitive absorption and beliefs about information technology usage. MIS
Quarterly, 24 (4), 665-694.
AJZEN, I. & FISHBEIN, M., (1980). Understanding attitudes and predicting social
behaviour. Englewood Cliffs (NJ), Prentice-Hall
ATKINSON, M.A. & KIDD, C., (1997). Individual Characteristics Associated with
World Wide Web Use: An Empirical Study of Playfulness and Motivation. The
DATA BASE for Advances in Information Systems, 28 (2), 53-62.
BAKER, D. A. & CROMPTON, J. L., (2000). ‘Quality, Satisfaction and Behavioral
Intentions’, Annals of Tourism Research 27(3): 785-804
227
228
229
Introducción
231
es más conveniente «incluir todas y cada una de las relaciones entre ambas disciplinas, o
crear una especie de marco conceptual identificando un sujeto con parámetros precisos».
En el primer escenario la disciplina se podría diluir, mientras que una definición académica
demasiado estricta provocaría probablemente un sujeto demasiado rígido (Gammon y Ro-
binson, 1997: 21)
232
233
La experiencia en el turismo
234
235
Gráfico 1
Relaciones de la experiencia con las áreas de interacción humana
Fuente: elaboración propia
236
sensaciones fuertes
5
lúdica
4
deportiva
3
festiva
2
creativa
1 ecológica
relación social 0 descubierta solidaria
desarrollo personal
Gráfico 2
Dimensiones del ocio y la experiencia recreativa
Fuente: elaboración propia
237
238
Desarrollo Personal
Nivel emocional
Relación Social
Descubrimiento
Nivel intelectual
Nivel físico
Sensaciones
Fuertes
Nivel motivacional
Gráfico 3
Pirámide de la Experiencia y motivaciones en Turismo Activo
Fuente: elaboración propia a partir de Tarssanen y Kylänen, 2006:139
239
240
Aplicaciones prácticas
241
La oferta turística
242
Aspectos Educativos
243
Aspectos Legales
Investigación
244
4
solidaria deportiva
2
0
sensaciones fuertes
descubierta
ecológica festiva
desarrollo personal
relación social
creativa
Gráfico 4
Importancia de las dimensiones del ocio en las diferentes experiencias.
Fuente: elaboración propia
Conclusión
245
Bibliografía
246
247
248
Resumen
249
equipamientos de este talante, de los cuales, 211, es decir, el 31% del total, están si-
tuados, según sus responsables, en espacios naturales protegidos o en su entorno (CE-
NEAM, 2002).
34 Según la Secretaría General de Turismo (2004:9), en el año 2004 existen 1.389 em-
250
251
áreas protegidas»: los parques son en primer lugar para conservarlos; los parques son en
segundo lugar para la recreación; sólo se debería permitir la recreación de bajo impacto;
los equipamientos de turismo en los parques deberían proveer beneficios para la conserva-
ción del mismo (Buckley, 2002).
252
253
254
Clasificación y tipología de actividades recreativas
con el fin de disfrutar de sus recursos naturales de una manera sostenible causando el menor impacto negativo, involucrando a la población lo-
cal y satisfaciendo las necesidades del visitante.
Para profundizar en este concepto véase Dawson, 2001:41-54; Fernández, 2006; Fernández de Tejada e Iniesta, 1999:59-80; Hernández de
la Obra y Gómez-Limón, 2005:66; Juan, 1999:81-101; Pérez de las Heras, 1999:103-129; UICN, 1994:36-39.
38 Se puede entender por agroturismo la prestación de servicios de alojamiento, con o sin manutención, y otros servicios complementarios
255
López, 1995:473
Volvemos a reiterar el hecho de que no todas las actividades inclui-
das en la tabla 1 son ecológicas y que en consecuencia será cada per-
sona por una parte, y cada país, comunidad autónoma y parque natural
en cuestión, por otra, quiénes deberían establecer, según sus criterios y
legislación vigente, el número y tipo de actividades recreativas y, pos-
teriormente, ecológicas realizables en cada parque natural en el que nos
encontremos.
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Urkiola Gorbeia
Pesca Pesca
Caza Caza
(Senderismo) Senderismo
(Montañismo) Recorridos, circulación o compe-
Circulación con bicicletas tencias deportivas ecuestres y en
(Paseos a caballo) bicicleta
Escalada Escalada
Espeleología Espeleología
Realización de fuego Acampada
Estacionamiento de vehículos en suelo Escucha, observación, fotografía,
no urbanizable filmación, etc. durante el periodo
Corta de leña con fines recreativos de berrea
Parapente, Vuelo con ala delta o simi- Corta de leña con fines recreativos
lares Realización de fuego con fines
Sobrevuelo del parque por aviones y recreativos
helicópteros Estacionamiento de vehículos en
Vuelo de aparatos de aeromodelación suelo no urbanizable
provistos de motor Utilización de vehículos con
Actividad recreativa tip pic-nic escape libre, megáfonos, bocinas,
Utilización de vehículos con escape li- instrumentos musicales, aparatos
bre, megáfonos, bocinas, instrumentos de radio o similares con volumen
musicales, aparatos de radio o similares que resulten molestos
con volumen que resulten molestos Otras actividades deportivas
Fuente: elaboración propia a partir de Decreto 505/1995, de 5 de diciembre, por el que
se aprueba la parte normativa del Plan Rector de Uso y Gestión del Parque Natural de
Urkiola y se ordena la publicación íntegra, Decreto 111/2006, de 30 de mayo, por el que
se aprueba la parte normativa del Plan Rector de Uso y Gestión del Parque Natural de
Urkiola y Decreto 66/1998, de 31 de marzo, por el que se aprueba la parte normativa del
Plan Rector de Uso y Gestión del Parque Natural de Gorbeia y se ordena la publicación
íntegra.
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40 Se trata de un plan regional de acción elaborado por la Comisión sobre Parque Na-
cionales y Espacios Protegidos como resultado del IV Congreso Mundial de Parques cele-
brado en Caracas, Venezuela, en 1992.
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41 Entre otros, destacamos las definiciones dadas por la Comisión para el Análisis de
los Recursos de la Recreación al Aire Libre (Ford & Blanchard, 1993:4), Carlson (Ford
& Blanchard, 1993:5), Ford y Jensen (Iso Ahola, 1980:275; Jensen, 1995:9-10), Leitner
(Leitner, Leitner & Associates, 1989:310), el Consejo de Educación al Aire Libre (COE)
(Ibrahim & Cordes, 1993:288), Ibrahim (Ibrahim & Cordes, 1993:288) y Clawson y Knet-
sch (Ford & Blanchard, 1993:5).
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261
Bibliografía
BANCO MUNDIAL/EUROPEAN INVESTMENT BANK ,(1990). The Environmental Pro-
gramme for the Mediterranean: Preserving a Shared Heritage and Managing
a Common Resource. Washington DC/Luxembourg: World Bank.
BLANCO, F.J., (1999). «El alojamiento turístico rural en la legislación española».
En M.J. Viñals, y A. Bernabé, Turismo en Espacios Naturales y Rurales. Va-
lencia: Universidad Politécnica de Valencia, Servicio de Publicaciones.
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Introducción
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Introducción
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Tabla 1
Elementos claves de la inclusión en ocio
INCLUSIÓN EN OCIO
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En el inicio del siglo XXI, el siglo del ocio por excelencia, nadie pone
en duda la relevancia, el significado e importancia vital que tiene para la
persona y la comunidad dicho fenómeno. Pero, sin duda, al profundizar
en el ocio para todos nos encontramos escollos y dificultades que se ha-
cen más evidentes cuando defendemos el derecho de toda persona a un
ocio de calidad que le permita desarrollar un área vital de su experiencia
como ser humano.
El ocio constituye un fenómeno de gran relevancia en la actualidad;
hoy se asignan tiempos y espacios para su disfrute. A pesar de ser necesa-
rio el tiempo desde un punto de vista cuantitativo, la calidad de la expe-
riencia de ocio emerge como uno de los parámetros fundamentales para
vivir una experiencia de ocio satisfactoria y gratificante. Mientras tanto,
socialmente el ocio se ha convertido en un fenómeno social y personal
que nadie pone en cuestión. En la actualidad, se conoce muy bien el im-
pacto económico que cualquiera de los ámbitos del ocio, cultura, turismo,
deporte y recreación, tienen sobre la economía y el Producto Interior Bru-
to de un país. Además también se sabe el conjunto de beneficios físicos,
psicológicos y sociales que supone para una persona y la comunidad tener
un estilo de vida de ocio satisfactorio.
En este capítulo se adopta una concepción humanista del ocio (Cuen-
ca, 2000). El ocio entendido como derecho, área de la experiencia hu-
mana, elemento generador de desarrollo personal integral y vivencia
intransferible. Esta visión del ocio se desarrolla en diferentes dimensiones
del ocio (festiva, lúdica, ambiental-ecológica, creativa y solidaria) y se
articula en ámbitos del ocio (cultura, turismo, deporte, y recreación). La
concepción del ocio humanista (Cuenca, 1995) se apoya en el derecho
al ocio y en el ocio como experiencia humana (WLRA: 1994). La con-
sideración del ocio como derecho (Cuenca, 2000), ha sido estudiada por
diferentes autores centrándolo en el colectivo de las personas con discapa-
cidad (Lázaro, 2007; y Herran, 2007). También ha habido autores que han
investigado en el ámbito de las políticas de ocio (San Salvador del Valle,
2000; y Velasco, 2007).
El ocio, ha adquirido en los últimos años, un importante significado
en la vida de todas las personas. Se ha convertido en un ámbito de cre-
cimiento, disfrute, placer, descanso y en un indicador de calidad de vida
(WLRA, 1994). Se apuesta por un ocio serio potenciador del desarrollo
humano en su plenitud (Stebbins, 1992). Pero esta realidad ha estado te-
ñida por el hecho de que en muchas ocasiones colectivos excluidos han
permanecido al margen o con serias dificultades a la hora de acceder a la
oferta de servicios y programas de ocio.
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Tabla 2
Condicionantes del acceso al ocio de las personas con discapacidad
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Condiciones de accesibilidad
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Reto 2: Accesibilidad
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los bienes y servicios a disposición del público, en el apartado d sobre Cultura, Deporte y
Ocio dice que las Administraciones competentes promoverán el establecimiento de los me-
dios de apoyo a la comunicación oral para las personas que sean usuarias de los mismos, en
aquellas actividades culturales, deportivas, de recreación y de ocio, tales como cines, tea-
tros y museos nacionales, monumentos histórico-artísticos de Patrimonio Nacional y visi-
tas guiadas en las que participen personas sordas, con discapacidad auditiva y sordociegas.
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Tabla 4
Un ocio inclusivo
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Introducción
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Es evidente que los mayores de hoy, siglo XXI, son diferentes a los de
otras épocas, constituyen un grupo representativo de la sociedad, viven
más tiempo, poseen mayor calidad de vida y, por tanto, manifiestan unas
necesidades acordes a esta realidad.
Los pronósticos apuntan que las personas mayores del futuro, además
de constituir un importante porcentaje de nuestra sociedad, manifestarán
diferentes características a la cohorte generacional actual ya que tendrán
un mayor nivel de vida, poseerán un nivel cultural claramente superior,
serán más participativos y tendrán mayor concienciación sobre la vejez y
preparación para la misma (Muñoz, 2002).
A continuación se presentan unos breves datos con el objetivo prin-
cipal de ofrecer referencias que permitan conocer y valorar la dimensión,
en términos de individuos, de la realidad sobre la que se reflexiona en este
capítulo.
El proceso de envejecimiento entre 2006 y 2026 se producirá con una
disminución progresiva del segmento de 16 y 64 años y un aumento, tam-
bién progresivo, de los mayores de 65 años en el Estado Español.
Tabla 1
Porcentaje de población por grupos de edad en relación al total
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El aprendizaje continuo
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Es aprendizaje
Esto es así puesto que se produce un aprendizaje de manera conti-
nuada para mejorar las capacidades, conocimientos y cualificaciones de
las personas. Las materias impartidas intentan, por una parte, ayudar a la
persona a controlar y manipular su entorno, y resolver los problemas que
se le plantean cotidianamente. Así se cubre, lo que Habermas (1984, en
Mezirow 2000) denomina el campo instrumental del aprendizaje. Pero
también en el programa se trabaja el campo comunicativo del aprendizaje
a través de materias que ayudan a comprender al otro cuando se comuni-
ca. Todo ello teniendo presente que junto con el aprendizaje (resultado) es
esencial el sentimiento, placer y disfrute (proceso).
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Bibliografía
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Susana JUNIU
Directora y Profesora en el Departamento de Ciencias del Ejercicio y
Educación Física de la Universidad de Montclair. Doctora en Educación,
título que obtuvo en la Universidad de Temple, USA, en el campo de la
Dirección y Gerencia de Deportes y Estudios sobre la Recreación. La Dra.
Juniu imparte materias relacionadas con Estadística, Métodos de Inves-
tigación, Métodos de Evaluación y Medición en Educación Física. Entre
sus áreas de especialización, destacan sus trabajos de investigación orien-
tados al análisis psico-social del comportamiento en el ocio, el impacto
de la inmigración y la experiencia recreativa, el impacto de las nuevas
tecnologías en el ocio, y el uso de la computadora como recurso didácti-
co. En esta línea, ha publicado y presentado diversos trabajos sobre ocio,
aspectos socioculturales, y tecnología.
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Aurkene ALZUA-SORZABAL
Doctora en Outdoor Recreation and International Tourism por la
Universidad estadounidense, PURDUE UNIVERSITY (1999). Su tesis
titulada «A Leisure Involvement Model for the Study of Historic Site-
Based Participation» es un estudio centrado en la aplicación de modelos
psicosociales en el campo del patrimonio cultural y el medio ambiente.
En el momento actual, es directora del centro de investigación cooperati-
va en turismo, CICtourGUNE. Así mismo es profesora de la Universidad
de Deusto y su ámbito de investigación se centra en ciencias del turismo,
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Arantza ARRUTI
Licenciada en Pedagogía por la Universidad de Deusto y profesora del
Departamento de Educación de la Facultad de Filosofía y Ciencias de la
Educación de la misma universidad. Ha desarrollado labores de gestión de
programas educativos de carácter nacional e internacional desde su incor-
poración a la Universidad de Deusto, en 1993. En la actualidad, compa-
gina sus labores docentes como profesora de Didáctica General y Progra-
mación educativa con la coordinación de un programa de Emprendizaje e
innovación de la Fundación Deusto, denominado Ingenio. Asimismo, se
encuentra realizando su tesis doctoral en torno a la Educación ambiental
y de ocio en parques naturales protegidos, área de interés en la que lleva
trabajando durante la última década. En este tiempo, ha impartido clases
en la Universidad de Deusto sobre educación ambiental, ha participado en
investigaciones ha publicado artículos relacionados con esta materia.
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Deusto
Publicaciones