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Chacona

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La Chacona o Ciaccona, a juzgar por la literatura espa�ola y las canciones de

finales del siglo XVI, est� comprendida en las danzas populares espa�olas, con
metro ternario tempo moderado y variaci�n continua de las voces superiores sobre
bajo ostinato. En el siglo XVII se difundi� por toda Europa a trav�s de Espa�a
(aunque existen defensores de su origen hispanoamericano, teor�a de menor peso
actualmente). Apareci� originalmente en colecciones de guitarra con patrones
comunes de acordes/bajo. Es en su origen una danza festiva, viva y de gran
erotismo.

�ndice

1 Italia
2 Francia
3 Alemania y evoluci�n
4 Espa�a
5 V�ase tambi�n
6 Referencias
7 Enlaces externos

Italia

Una de las primeras series conocidas de variaciones instrumentales sobre este


ostinato fue compuesta para Chitarrone por Alessandro Piccinini, amigo de
Frescobaldi en la corte de los Este en Ferrara. Esta obra es t�pica de las primeras
variaciones de chacona por la persistencia de la melod�a del bajo, el uso de una
progresi�n de acordes que se repite en cada aparici�n del bajo, y el ritmo
unificado dentro de cada variaci�n, que se mueve entre los patrones (blanca-negra y
negra-blanca).

Monteverdi y Frescobaldi utilizaron ritmos m�s lentos del tipo zarabanda, muy del
gusto de Couperin y Lully, que la utilizaban en sus obras esc�nicas.
Francia

Lully emplea la chacona como danza en sus obras esc�nicas en comp�s ternario con
uno de estos bajos ostinatos: 8-7-6-5; 8-5-6-5; 1-5-2-5; 1-2-3-4-5. Siempre en modo
mayor. Tras dos exposiciones del ostinato, hay generalmente un bajo contrastante.
Tempo= 121-159.
Alemania y evoluci�n

En Alemania, Johann Sebastian Bach compondr�a la c�lebre Chacona en re menor para


acabar la partita para viol�n solo n� 2, BWV 1004 Partitura.1? En este ejemplo, la
chacona se basa en la sucesi�n de temas arm�nicos y mel�dicos en el bajo. Esta ha
sido la chacona m�s famosa de la historia, su fecha data de 1720, cuando el maestro
estaba en K�then. Se cree que la compuso tras la muerte de su esposa Mar�a B�rbara
Bach, por lo que muchos la consideran m�s cercana al lamento que a la chacona.
Bach, Chacona.gif

Este lamento mencionado en la obra de Johann Sebastian Bach, como herencia de


Claudio Monteverdi, se basa y evidencia en muchas secciones de la pieza en las que
aparecen movimientos crom�ticos descendentes. Esta composici�n adem�s destac� por
su larga duraci�n (de 15 minutos), su dificultad t�cnica as� como los corales
luteranos que la integran.

Esta pieza ser�a clave en el repertorio para viol�n, siendo considerada una de las
piezas m�s complejas compuestas para este instrumento, debido a que abarca todos
los aspectos de la t�cnica de viol�n barroca.

Encontraremos otro ejemplo italiano en la Chacona en sol menor para viol�n, de


Tomaso Antonio Vitali, hijo de Giovanni Battista Vitali (aunque de dudosa
atribuci�n). En la que con cada variaci�n, aumenta el grado de dificultad,
convirti�ndose en una interesante y compleja pieza de estudio.
Espa�a

Juan Ara��s, compositor espa�ol a caballo entre los siglos XVI y XVII, compuso la
famosa chacona A la vida bona, tambi�n conocida como El sarao de la chacona,en la
que lejos del lamento, canta a la diversi�n sana y a la alegr�a de la gente de su
�poca. Esta est� incluida en su libro Segundo de tonos y villancicos publicado en
1624 en Roma, que contiene numerosas canciones a una, dos y cuatro voces, con
acompa�amiento de guitarra. La letra, que est� en un perfecto castellano popular
del s. XVII, se trata de una burla a la sociedad y a sus arquetipos: negros,
gitanos, prostitutas, m�dicos...
V�ase tambi�n

Resulta muy interesante c�mo una danza que muchas veces fue considerada indecente
por sus letras llegara a la solemnidad de la chacona tratada por Bach, alcanzando
semejante punto en la t�cnica instrumental. Esta evoluci�n hacia la solemnidad se
debe a la asociaci�n de la chacona con el lamento musical que encontraremos en el
estudio de Claudio Monteverdi, reconocible mediante el tetracordo descendente y
cromatismos vinculados al sentimiento que se desea expresar. Su origen alegre y
vivaz evolucionar�a de este modo a una danza m�s cadenciosa de manifestaci�n
semejante al pasacalle. Su l�nea divisoria se ver�a tan difusa que Louis Couperin
llamar�a a una de sus piezas Chacona o Passacaglia. Esta asociaci�n de la chacona
con el pasacalle se dio sobre todo en algunas danzas del XVIII franc�s.
Referencias

Notas

�Violin Partita No.2 in D minor, BWV 1004 (Bach, Johann Sebastian) -


IMSLP/Petrucci Music Library: Free Public Domain Sheet Music�.

Bibliograf�a

Thomas Schmitt: Passacaglio ist eigentlich eine Chaconne. Zur Unterscheidung


zweier musikalischer Kompositionsprinzipien. En: Frankfurter Zeitschrift f�r
Musikwissenschaft, 13 (2010), pp.1�18 (online, PDF, 364 KB)
Historia de la m�sica espa�ola. Tomo 2. Desde el ars nova hasta 1600. Samuel
Rubio. Alianza Editorial. 1983.
Diccionario de la M�sica: Espa�ola e Hispanoamericana. Tomo 3. Dir: Emilio
Casares Rodicio. Sociedad General de Autores y Editores. 1999.
SADIE, Stanley E. The new Grove dictionary of music and musicians. 1980.
WALTER HILL, John. La M�sica Barroca: M�sica en Europa occidental, 1580-1750.
Ediciones Akal. 2008.

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