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Jeremías 48
Jeremías 48
Jeremías 48
1) Historia: los moabitas se volvieron contra el pueblo de Dios desde que éste último llegó a
Canaán, a pesar de que eran descendientes de Lot, sobrino de Abraham. Sucedió que Sehón, rey
de Basán había conquistado parte del territorio de Moab antes de salir a desafiar a los
escuadrones de Israel, cuando apenas venían asomándose a Canaán. Gracias a la intervención
divina, bajo el liderazgo de Moisés este rey fue derrotado y todo el territorio que dominaba pasó
a ser la heredad de la tribu de Rubén. Los moabitas procuraron destruir al pueblo de Dios y
siempre pelearon aquellas tierras, las cuales lograron reconquistar tras la caída de Acab, cuando
Israel ya estaba dividido. Habían pasado muchos años, pero Dios no olvidó aquellas injusticias y
ahora por medio de su profeta anuncia la caída de 25 ciudades que constituían el territorio en
litigio. Es muy triste que perdamos la vida peleando por la tierra que nunca nos ha pertenecido,
es más creíble que nosotros pertenezcamos a ella.
2) Una guerra espiritual: lo más impresionante de la Biblia es que nos presenta la dimensión
espiritual de la historia. Además de darnos a conocer que detrás de la devastación babilónica,
Jehová el Dios de Israel permanecía al control. El verso 13 nos revela una guerra entre el Dios
verdadero y los falsos dioses que solo existían en la imaginación de los pueblos: “Los moabitas se
avergonzarán de su dios Quemós, como antes los israelitas se avergonzaron del dios Baal, en
quien pusieron toda su confianza” (v. 13 TLA). Tanto Israel, como Moab y el remanente de Judá
fracasaron por haberle dado la espalda al Creador para adorar las creaciones humanas. ¿Dónde
estará la causa de nuestros fracasos?
3) Hay esperanza para Moab: los pecados de Moab contra Dios y su pueblo eran tan graves que
merecieron una maldición hasta la décima generación, según Deuteronomio 23:3. Sin embargo,
la bondad y misericordia del Señor supera toda maldición alcanza a mil generaciones, como
podemos ver en el último versículo de esta profecía: “Pero haré volver a los cautivos de Moab al
final de los tiempos, dice Jehová. Hasta aquí es el juicio de Moab” (v. 47 RV95). ¡Formidable!
Dios tenía la intención de seguir amando a quienes se opusieron abiertamente contra Su
voluntad…
Interesantes reflexiones… los moabitas se volvieron contra Dios, Jehová permitiría que cosecharan
una justa retribución, pero los haría volver a su tierra, como quien dice incluyéndolos en el Nuevo
Pacto que haría con Su pueblo. Eso quiere decir que lo más importante es que Dios anhelaba que se
volvieran a Él. Y eso sigue siendo lo más importante en tu caso y en el mío. ¿Quieres volverte a Jesús
este día?
#RPSP
Jeremías 48
Pr. Selvin Sosa
fb.com/selvinsosa77