Tema 1 Concepto de La Ética
Tema 1 Concepto de La Ética
Tema 1 Concepto de La Ética
PRIMERA CLASE
EXAMEN DE DIAGNOSTICO
ÉTICA – AXIOLOGÍA – TEOLOGÍA-DEONTOLOGÍA
¿Con qué otra disciplina filosófica la ética se relaciona?
Axiología
2. Definición etimológica de axiología.
La palabra axiología viene de las palabras griegas axios: digno y valioso, logos: tratado, más el sufijo
-ia que indica cualidad. En su origen significa "estudio de aquello que es digno" o "tratado de lo digno
o valioso".
3. Definición real de axiología.
Ciencia filosófica de los valores
4. ¿En qué se relaciona la ética con la axiología?
La ética encuentra sustento teórico en la axiología sobre los valores, tratando de llegar a su sentido o
esencia.
5. ¿Por qué la ética no puede prescindir de la noción de valor?
Las normas morales implican valoraciones o apreciaciones que nos permiten formular lo que es
bueno o malo
6. ¿Por qué el hombre es un ser axiológico?
Porque su mundo o su realidad la hace objeto de su valoración, agradable o desagradable, etc.
7. ¿Por qué son importantes los valores para el hombre?
Son las directrices de la conducta, dan sentido y finalidad a su vida individual y social
8. ¿Qué son los juicios de valor?
Se vive haciendo valoraciones, conforme a las normas que regulan la vida social
9. ¿Qué son los valores?
No son cosas, no pertenecen a la realidad
10. ¿Cuáles son las corrientes sobre los valores?
Subjetivista y Objetivista
11. ¿En qué consisten los valores subjetivistas?
Los valores son el resultado de las reacciones, individuales y colectivas, dependen del sujeto, son
meras creaciones de su mente, deseos e intereses.
12. ¿Cuáles son las posiciones de los subjetivistas ante la valoración?
Discrepancia, constitución biológica, interés
13. ¿En qué consiste la relatividad de los valores?
En su carácter concreto e histórico, no hay valores universales
14. ¿En qué consiste la corriente objetivista sobre los valores?
Separación radical entre el valor y la realidad
15. ¿Qué dicen los objetivistas sobre el valor?
Los valores son independientes respecto a los bienes
16. ¿Qué características tiene el valor, según los objetivistas?
Los valores son absolutos, existen en sí, independientes del sujeto, se pueden ordenar o jerarquizar
17. ¿En qué consiste la jerarquización de los valores?
Los valores suponen un orden jerárquico, superior e inferior
18. ¿Qué son los bienes?
Los valores necesitan plasmarse en realidades concretas llamadas bienes; los bienes sob objetos en
los que se depositan cualidades valiosas.
19. ¿Existen valores universales?
Pese a los cambios históricos que sufre la moral, se perciben valores que podemos concebir como
universales: justicia, paz, tolerancia y libertad
20. ¿En qué consiste la valoración moral?
El hecho de atribuir un valor a una acción humana determinada, tienen un carácter histórico
21. ¿Cuáles son las teorías sobre lo bueno o criterios estimativos?
Formalismo kantiano, vitalismo de Nietzsche, eudemonista y utilitarista
22. ¿Qué son las virtudes morales?
Actitudes que implican o encarnan lo valioso, lo bueno por excelencia
23. ¿Cuáles son las dimensiones axiológicas?
Veracidad, valentía, autodominio, justicia
24. ¿Cuándo las virtudes morales cobran expresión?
Ejercicio de la profesión
25. ¿En qué consiste la deontología?
Estudio de los deberes de los profesionistas
La ética puede ser observada en nuestra vida cotidiana en todos los actos, decisiones y
comportamientos con los que nos conducimos, bien sea en el trabajo o la escuela, en la forma
en que nos relacionamos con nuestros seres queridos o con las demás personas, así como con el
medio ambiente.
Es gracias al respeto de todos estos principios y reglas que creamos las condiciones adecuadas para
convivir en sociedad. Por eso, a continuación, te comentamos siete ejemplos de ética en distintos
ámbitos de nuestra vida cotidiana.
1. Ética personal
La ética puede aplicarse a la vida personal de alguien, que contempla no solo sus relaciones con la
familia, los amigos y la pareja, sino también su relación consigo mismo y la forma en que actúa y
toma decisiones en función de sus valores morales fundamentales.
Así, la ética en la vida personal está también atravesada por los sentimientos, las emociones, las
sensaciones, los sueños, las ideas y las opiniones de una persona, que son, en definitiva, los que
determinan su forma de ser y comportarse en la vida íntima.
3. Ética en la escuela
Cuando asistimos a una institución educativa, vamos para formarnos como ciudadanos, en los valores
sociales y con los conocimientos de nuestro tiempo.
Por eso, la escuela o la universidad son lugares donde, al relacionarnos con los demás, también
aprendemos a comportarnos de manera ética: siendo honestos, respetuosos y leales con nuestros
compañeros, reconociendo la autoridad del profesor, y cumpliendo con nuestros deberes escolares.
4. Ética social
La ética aplicada a la vida social en general se demuestra en valores como el respeto, la tolerancia, la
honestidad, la inclusión y la igualdad. Así, la ética social aparece en todas las relaciones que
mantenemos con los otros por distintas razones, que pueden ser económicas, políticas, laborales,
ciudadanas o, incluso, circunstanciales.
5. Ética ciudadana
Practicamos ética ciudadana al relacionarnos con respeto y responsabilidad con el otro y con el
espacio en que vivimos y que compartimos con otras personas, como la ciudad, el barrio, la calle,
incluso nuestra residencia o nuestro piso.
La ética ciudadana observa un conjunto de reglas relacionadas con la forma adecuada de
comportarnos en los espacios públicos, no solo respetando los derechos del otro, sino siendo amables
y bondadosos con quien los demás.
6. Ética medioambiental
La manera en que nos relacionamos con el medio ambiente implica ciertas normas éticas, que se
basan en el respeto y cuidado de la naturaleza, los animales, los recursos y el equilibrio ecológico de
un lugar.
La ética medioambiental está también en la forma en que tratamos los desperdicios que producimos
y en la utilización consciente y responsable de los recursos que pone la naturaleza a nuestra
disposición.
7. Ética económica
Competencia profesional
Éticamente, es fundamental en una persona que hace ejercicio de su profesión tener las
competencias necesarias para el cargo o función que desempeña. Un profesional no debe postularse
ni asumir encargos o tareas para las cuales no tenga ni el conocimiento, la experiencia o la debida
preparación. Un psicólogo, por ejemplo, no puede ejercer de abogado.
Secreto profesional
La información que llega a manejar una persona por razones del ejercicio de su profesión debe ser
guardada con celo y cautela, pues está amparada y protegida por la ley dentro de lo que se conoce
como secreto profesional. Ejemplo de ello lo constituyen los médicos, psicólogos o abogados.
En el ejercicio de nuestra profesión debemos tratar con todo tipo de personas (empleados, jefes,
colegas, inversores, clientes, etc.), de diferente origen étnico o social, de distintas edades y grados
de formación, con variadas creencias religiosas u opciones personales. Debemos asegurarnos, por lo
tanto, de que nuestras acciones y decisiones de índole profesional no estén sujetas a ningún tipo de
prejuicio de este tipo (discriminación, segregación, exclusión, etc.) que pueda menoscabar la
dignidad humana de una persona.
Ética financiera
Comportamiento honesto
Responsabilidad social
Un profesional debe rechazar cualquier tarea o prestación de servicios cuando tenga conocimiento de
que estos puedan ser empleados de manera perjudicial a los intereses de otras personas, grupos,
instituciones o comunidades. Es más, las operaciones de una empresa pueden afectar negativamente
la vida de una comunidad. En estos casos, lo más conveniente es rechazar y, de ser posible,
denunciar este tipo de actividades.
Toda actividad económica, ya sea industrial o empresarial, tiene impacto en el medio ambiente y en
las comunidades: ruidos, emisiones de gases, consumo energético, contaminación del agua,
producción de desechos. Evitar a toda costa causar daños medioambientales debe ser la única opción
ética en toda actividad profesional.
https://www.significados.com/9-ejemplos-practicos-de-etica-profesional/
TEMA 1 CONCEPTO DE LA ÉTICA
HISTORIA DE LA ÉTICA
La historia de la Ética es tan antigua como la historia del hombre; el más primitivo de los Homos
tenía idea de lo bueno, lo justo, el deber y la virtud, buscando la manera de determinar y justificar
sus acciones.
En el mundo antiguo 4.500 años a.C. los primitivos tenían la preocupación por determinar lo que está
bien o está mal, aplicando un conjunto de valores, principios y normas concretas que en caso de
infringirlos suponía un castigo.
La explicación de lo que está bien o mal basadas en las leyes inmutables de la naturaleza creando
normas o códigos morales marcadas por la tradición.
Desde el antiguo Egipto casi cuatro mil años antes de Cristo, la sabiduría de Amenope y las normas
morales son recogidas en los papiros, como en. El Libro de los Muertos.
En la Grecia arcaica desde el siglo VII al II a.C. Homero escribe en la Ilíada y la Odisea sobre la ética
del mundo antiguo, se describen los héroes mitológicos y sus valores desde la fuerza física, la
valentía, belleza, habilidad y linaje, héroes QUE AUN HOY DEBERÍAMOS IMITAR SOBRE TODO EN
LOS VALORES.
Los filósofos griegos que comienzan a especular sobre la verdadera virtud, lo verdadero de lo bueno
y concluyen que lo bueno es toda acción que beneficia a la comunidad y que la virtud, arte
y capacidad de “excelencia” que permite destacar en algo sobre los demás, ser el mejor y prestar los
mejores beneficios a la comunidad.
Los pensadores de la Grecia clásica comenzaron a agruparse de acuerdo a sus filosofías y propuestas
tales como los ESCOLÁSTICOS que distinguían la “razón especulativa” es decir comprender el ser y la
“razón práctica” o sea conocer el deber del ser.
Los Sofistas presocráticos estos filósofos dudaban de los códigos morales del mundo antiguo, se
consideraban a sí mismo como maestros de la virtud y afirmaban que frente a la imposición surge la
CONVENCIONALIDAD y EL RELATIVISMO MORAL, más claramente estar de acuerdo más o menos
con unos valores, que si no convienen podemos cambiarlos; todo esto dentro del marco histórico
donde surgen las polis o ciudades estados que se gobiernan a sí mismo, también surge el concepto
“ciudadanos” que se agrupan de acuerdo a sus propios intereses, a muchos intereses de clases,
como la nobleza, la burguesía ( baja nobleza y filósofos),los agricultores y comerciantes y finalmente
los extranjeros y esclavos, estas últimas van desapareciendo, pero al parecer en algunos grupos de
la sociedad actual habría aceptado y practicado esta posición que va en contra de la misma sociedad.
Otro grupo liderado por Zenón de Citio (siglo III a.C.) en Atenas, crea Los Estoicos, defiende el
“Orden Cósmico” organizado por leyes naturales inmutables y un hombre virtuoso es aquel que
respeta las leyes y se muestra imperturbable ante los acontecimientos. A diferencias de
los Epicúreos, los Estoicos participan en política, pero permanecen indiferentes ante el éxito o el
fracaso. Los Estoicos promueven y plantean que el hombre debe esforzarse por ser virtuoso, pues la
virtud es actuar conforme el orden cósmico sin temer la muerte. Dicen que los hombres deben tener
una fría racionalidad capaz de eliminar emociones y sentimientos y aceptar estoicamente lo que les
venga encima. En la actualidad estas propuestas han perdido validez.
“CONÓCETE A TI MISMO”
Sócrates implanta la Mayéutica: el arte de ayudar y la asimilación de conocimientos y definiciones,
refiere que la virtud es única, definiendo las virtudes de la ciencia ética que demuestran la existencia
de valores absolutos como el BIEN, la JUSTICIA y FELICIDAD, inmutables para establecer Leyes que
son valores que el hombre puede alcanzar mediante el uso de la inteligencia y la razón. Si se
alcanzan, el hombre es sabio y virtuoso, la sabiduría suprema distingue los bienes de los males, la
intelectualidad moral identifica el saber con virtud y vicio con ignorancia desde estos tiempos de la
Grecia antigua ya se pensaba que para conseguir una sociedad buena, justa y virtuosa es necesaria
la educación.
Las virtudes se adquieren mediante el hábito, tanto las intelectuales como las éticas ya que el
hombre es un ser social “animal político” capaz de vivir y organizar una sociedad.
Para Aristóteles el bien último del hombre es la Felicidad, el dinero, la fama, y los honores, es decir el
Bien perfecto, buscando siempre la autosuficiencia, adquirir virtudes propias, cumplir y desarrollar las
funciones propias del ser humano hasta la excelencia ya que la felicidad es el ejercicio de la
inteligencia.
Algunos siglos después aparecen las llamadas ESCUELAS HELENISTAS (siglo IV-II a.C.) en donde en
Filosofía y Ética se abandona la política y se vuelve al individualismo.
Para los Epicúreos con su escuela “El Jardín”; la finalidad de la vida es el placer racional, limitando
los deseos, superando el dolor y evitando las preocupaciones, para conseguirlo es necesario una vida
sobria, sin crearse necesidades.
Pregonan no tener miedo a la muerte porque mientras estamos vivos, la muerte no nos afecta y
cuando estamos muertos tampoco. Van más halla al decir que no hay que tener miedo a los dioses,
porque ellos no se preocupan por nosotros. Ya que el bien es fácil de alcanzar y el mal fácil de evitar,
solo hay que conformarnos con nuestra suerte.
Daremos un largo salto hasta el Mundo Medieval desde el Siglo IV al XV después de Cristo, tiempo
en el cual la influencia del cristianismo que culmina con la presencia de Santo Tomas de Aquino con
sus principios básicos:
El hombre es creado por Dios a su imagen y semejanza y depende de él. La felicidad consiste en la
unión con Dios.
Existe una vida futura y eterna después de la terrenal
para vivir en amor y su Ética es practicar las virtudes
cristianas:
FE
-ESPERANZA y
CARIDAD.
Santo Tomas de Aquino (1225-1274) seguidor de Aristóteles, une el
intelectualismo griego y la doctrina cristiana y dice que todo ser obra por un
fin, los seres sin razón no son libres y tienden a su fin movidos por su instinto,
las personas son seres con corazón y voluntad libre, son dueños de sus actos
por lo tanto para alcanzar la felicidad eterna es necesario cumplir nuestros
deberes, cumpliendo las leyes naturales que nos indican lo bueno y lo malo
que la razón nos hace diferenciar hasta llegar a la finalidad suprema: la unión
con Dios, proclamando que la ética adquiere su sentido ultimo y profundo a
través de la religión.
Ya en la Edad Moderna siglos XV a XVIII
Descartes, separa la razón de la fe y la ética
deja de estar influida por la religión; en la
Ilustración la razón como única fuente de
conocimiento que apoya el individualismo; un
poco mas adelante Kant (1724-1804) revela que
el centro de la reflexión es el sujeto pensante
merced a las condiciones de su conciencia se da
a sí mismo su propia ley moral, ya que el ser
humano debe ser responsable de sus actos y
tiene conciencia de su deber que genera
conocimiento,
Karl Marx (1818-1883) afirma que la Moral cumple una función social, que tiene un carácter de clase
por lo tanto a cada clase social corresponde una moral peculiar que es relativa mientras se busca una
sociedad justa e igualitaria que surgirá de los cambios de una nueva moral para transformar las
relaciones sociales que mantienen a la mayoría de los hombres humillados, explorados y
abandonados.
Es posible que nos falte mencionar y o analizar otras fuentes actuales, el arte de la Ética será
siempre el mismo desde la Filosofía, Psicología, Sociología, Antropología, Derecho, Historia, Teología
o Medicina el estudio de la conducta humana en relación con los principios universales sobre los
valores morales, el deber, la dignidad, la justicia y benevolencia del Médico frente a sus pacientes y
la sociedad.
La ética es una rama de la filosofía que se encarga de estudiar la moral, es decir, lo que es
considerado como parte de las buenas costumbres y del buen vivir en la sociedad a fin de generar
una convivencia amable y equilibrada entre las personas.
La ética se inculca desde temprana edad a través de ejemplos que expliquen y ejemplifiquen la
importancia de nuestros actos y sus consecuencias. La ética debe tener como meta alcanzar la
felicidad individual y de la sociedad en general, de allí que su objeto de estudio se la moral, su
importancia y aplicación.
Objeto de la ética
La ética determina aquellos principios que se consideran correctos en la sociedad.
La ética se ha desarrollado desde la Antigua Grecia con el objeto de estudiar, desde una perspectiva
filosófica, la conducta humana, de la cual se determinan qué acciones son consideradas como
correctas o incorrectas según la sociedad.
La palabra ética deriva del griego êthos, traducida como ‘modo de ser’ o ‘carácter’, que a su vez
deviene de ethos, traducida como ‘costumbre’ y ‘hábito’. De hecho, la traducción latina
de ethos es mos, que en español significa ‘moral’, de allí que la ética tenga como objeto de estudio la
moral.
Esta aclaración etimológica es importante para entender que la ética no hace referencia al carácter
como naturaleza de un individuo, sino a las costumbres y posturas que se adquieren a lo largo de la
vida y que conforman una serie de hábitos, entre los que se diferencian las virtudes o los vicios.
Filósofos como Platón y Aristóteles expusieron que la ética se encarga de estudiar las conductas
humanas, las cuales son llevadas a cabo desde la libertad y la conciencia que cada individuo posee
para diferenciar lo bueno de lo malo. En este sentido la ética conjuga los términos conducta, libertad
y bien.
Es decir, las personas actuamos de manera libre, pero consciente de que nuestros actos generan una
serie de consecuencias, buenas o malas, según los juicios de valor que le otorgue la moral.
Nuestras conductas morales dependen de la enseñanza de las costumbres y hábitos que, según lo
establecido por la sociedad, son consideradas como éticamente correctas y parte de las buenas
costumbres. No obstante, estas normas pueden cambiar a través del tiempo según las mudanzas que
presente la sociedad.
En este sentido, la ética es una reflexión acerca de las conductas morales del ser humano y sus
efectos en la sociedad. Por ejemplo, quienes llevan una vida basada en los valores familiares, sociales
y profesionales serán reconocidos por su ética y moral, es decir, por sus buenas conductas,
responsabilidad y compromiso.
Quien es éticamente correcto buscará siempre la mejor solución ante cualquier dificultad y estará a
favor de la convivencia sana más allá de las diferencias, inevitables, además, que puedan existir con
las demás personas bien sea por la tendencia política, la cultura, la religión, entre otros.
LA HISTORIA DE LA ÉTICA
La ética ha sido una reflexión de la filosofía estudiada desde la Antigua Grecia. De allí que Platón
dedicara un espacio en sus obras para tratar este tema, por ejemplo, en textos
como Fedón, Gorgias, República y Fedro. Platón trató sobre la ética en diferentes contextos, incluso,
diferenció la ética individual y la ética pública.
Por su parte, Aristóteles también realizó importantes aportes sobre la ética. Su obra Ética
nicomáquea, escrita en el siglo IV a.C., es considerada uno de los primeros tratados sobre ética, en el
que se destaca la importancia de la felicidad como una de las finalidades más importantes del ser
humano.
Luego, en la Edad Media la ética es unida a la doctrina cristiana y es considerada el fin último del ser
humano para alcanzar la felicidad y plenitud. De esta época se destacan los textos teológicos escritos
por san Agustín de Hipona y santo Tomás de Aquino.
Más tarde, surgieron nuevos filósofos y pensadores que se dedicaron a estudiar la ética desde las
perspectivas expuestas por Platón y Aristóteles.
Por ejemplo, los racionalistas René Descartes y Baruch Spinoza. Posteriormente, el filósofo Immanuel
Kant reflexionó acerca de la importancia de los límites de la moral, así como otros autores, entre
ellos, Michel Foucault o Friedrich Nietzsche.
Entre los términos ética y moral existe una delgada brecha que los diferencia y que es importante
determinar para evitar hacer un uso erróneo de estas palabras.
Ética es el estudio de la moral, que parte desde una perspectiva filosófica, científica y teórica
para establecer y fundamentar su significado.
La ética también toma en cuenta que las personas parten de la razón y del conocimiento de las
consecuencias que acarrean nuestras acciones hacía nosotros mismos y a la sociedad.
En consecuencia, la ética establece los principios de nuestra vida e implica la distinción entre lo
bueno y malo, a partir de un análisis previo.
Ética profesional
Entre los términos ética y moral existe una delgada brecha que los diferencia y que es importante
determinar para evitar hacer un uso erróneo de estas palabras.
Ética es el estudio de la moral, que parte desde una perspectiva filosófica, científica y teórica
para establecer y fundamentar su significado.
La ética también toma en cuenta que las personas parten de la razón y del conocimiento de las
consecuencias que acarrean nuestras acciones hacía nosotros mismos y a la sociedad.
En consecuencia, la ética establece los principios de nuestra vida e implica la distinción entre lo
bueno y malo, a partir de un análisis previo.
Por su parte, la moral es un conjunto de valores, normativas y creencias que se cumplen y
determinan las buenas costumbres y las conductas sociales.
En este sentido, la moral hace una valoración de las conductas de las personas, de las cuales se
pueden clasificar aquellas que se consideren buenas o malas tanto para el individuo como para la
sociedad en general. De allí que la moral sea el objeto de estudio de la ética.
a ética está presente en las diferentes facetas en las que nos desenvolvemos. De allí que podamos
hablar de ética personal, ética profesional, ética académica, ética política, ética médica, entre otras.
Esto se debe a que las conductas humanas buscan tanto el bien personal como social a través de una
serie de reglas moralmente correctas.
En el entorno profesional es importante que las personas actúen de manera responsable y con
criterio al momento de desenvolverse como especialistas o conocedores de un área de trabajo. Por
ello, los profesionales deben ajustarse a las normas morales preestablecidas.
La ética profesional está compuesta por valores humanos que propician el respeto, la
responsabilidad, el compromiso, la inclusión, la honestidad, la puntualidad, la discreción, la
competitividad, incluso, la amistad.
Asimismo, existe una serie de normas deontológicas que fundamentan los principios y deberes que se
deben cumplir a fin de conseguir un óptimo resultado laboral, en especial, si se presenta una
situación difícil en la cual se debe tener cuidado al momento de tomar una decisión para alcanzar el
bienestar común.
La ética profesional nos representa como personas responsables de nuestras acciones, por tanto, la
labor de un profesional en cualquier área, es dar lo mejor de sí en función de ofrecer un buen
servicio o producto. De esta manera se están aportando soluciones, ayudas, respuestas y
oportunidades para otras personas.
A menudo, los términos “ética” y “moral” son confundidos y empleados como sinónimos; sin
embargo, existen ciertas diferencias entre estos. La palabra “ética” proviene del griego ethikos, que
significa carácter; mientras que la palabra “moral” proviene del vocablo griego mos, que significa
costumbre.
En otras palabras, el comportamiento moral responde a una serie de costumbres establecidas por un
grupo de individuos, mientras que el comportamiento ético es definido por el carácter de un
individuo.
En la siguiente
tabla, se
especifican las
diferencias
entre la ética y
la moral:
Ejemplos de moral
La moral se refiere a las creencias culturales y religiosas de un grupo, las cuales determinan qué es
correcto y qué es incorrecto.
La moral ofrece una serie de reglas en cuanto a lo que es correcto o adecuado para cualquier
situación. En este sentido, se puede decir que lo que se considera moralmente correcto no siempre
es objetivamente correcto.
Ejemplos de ética
La ética es una rama de la filosofía que se encarga de estudiar los principios que rigen la conducta de
un individuo. Los principios éticos dependen de la situación en la que una persona se encuentre y
varían de un individuo a otro.
1 – Aceptación
Uno de los principios éticos es la aceptación hacia todo aquello que sea diferente. En este sentido, el
racismo, la homofobia y la xenofobia son comportamientos no éticos.
2 – Caridad
La caridad es una virtud que involucra la benevolencia hacia otros individuos.
3 – Respeto
El respeto es la relación de cortesía que se tiene hacia otras personas.
4 – Compasión
La compasión es el sentimiento de conmiseración hacia los sufrimientos de otra persona. Por
ejemplo, una persona con cáncer terminal puede pedir que le sea aplicada la eutanasia.
La moral nos dice que no debemos atentar contra la vida de otra persona. Sin embargo, en algunos
casos, la ética profesional permite que el suicidio asistido sea aplicado.
5 – Responsabilidad
La responsabilidad es un principio ético de cada individuo que se refiere al cumplimiento de un
compromiso adquirido y al hecho de responder por nuestras acciones.
6 – Empatía
La empatía es la capacidad que tenemos los seres humanos de “conectarnos” afectivamente con otro
individuo, de compartir y comprender sus emociones y sentimientos. Ser empáticos nos permite
entender el proceder de otras personas.
7 – Igualdad
La igualdad significa que las personas sean tratadas de modo que todas puedan obtener los mismos
resultados sin importar los factores particulares que condicionen a cada individuo.
8 – Integridad
Una persona íntegra es aquella honrada, cuyo proceder es tanto ético como moral, que hace lo que
dice y que no intenta aprovecharse de los demás.
9 – Justicia
La justicia es una virtud que señala que cada persona debe recibir lo que se merece.
10 – Transparencia
La transparencia es un principio ético que se relaciona con la honestidad. Por ejemplo, si te toca
entrevistar a un amigo para ofrecerle un trabajo y le das el puesto a pesar de que este no cumple
con los requisitos, tu proceder no será transparente sino parcializado.
El primero en hablar del concepto de ética que hoy conocemos fue Aristóteles, pero ¿cómo se
originó?
Es muy común que algunas personas (y filósofos) confundan ética con moral.
El origen de la necesidad de hablar de ética se dio cuando el hombre empezó a descubrir el efecto de
sus acciones. Es decir, cuando comenzó a razonar acerca de los resultados de cada cometido. Luego
sintió la necesidad de establecer qué acciones son bondadosas y dan resultados nobles, frente a las
otras acciones que son dañinas o dan resultados malos. Desde ese momento nació la ética como el
estudio de la moral aplicada.
¿Qué quiero decir con moral aplicada? Es necesario distinguir lo ético de lo moral:
La moral (como la palabra lo indica), "mora" o se encuentra, dentro del hombre; en su interioridad.
Hace al hombre bueno para sí mismo, lo perfecciona en su interioridad.
La ética en cambio es la moral aplicada exteriormente, en otras palabras, son las acciones
moralmente correctas. Un hombre no puede realizar un acto ético si no lo ha pensado (aquí entra lo
moral).
Se habla de cuatro virtudes que regulan la moral... la templanza, la prudencia, la fortaleza y la
justicia. Las primeras tres (templanza, prudencia y justicia) no necesitan de otro sujeto para
perfeccionarse. Un hombre para ser prudente solamente necesita querer ser prudente y en base a
ello actuar sin necesidad de que sea con otro, lo mismo con la fortaleza y la templanza (ej, tengo el
deseo enorme de comer una torta de chocolate entera pero como soy un hombre que tiene
templanza dejo de lado la tentación y me como solamente una porción) pero.... para ser justo no
basta que el hombre tenga el deseo de ser justo, sino que el hombre necesita serlo con otro. Lo justo
es aquello que se le debe "a otro" bajo un cierto grado de igualdad, en resumidas cuentas, la justicia
necesita de otro para perfeccionarse, mientras que las demás virtudes cardinales sólo necesitan la
voluntad del hombre que las piensa.
Con lo antedicho podemos resumir que para que un hombre tenga un comportamiento ético debe ser
considerado justo. De ahí que la ética actúe siempre en la exterioridad del hombre puesto que es
imposible ser justo solamente en nuestra interioridad, basado netamente en lo moral.
Por favor no olvides nunca que moral y ética actúan en dos campos diferentes, pero, la ética se
encuentra inmersa dentro del campo de lo moral (lo interno) lo que sucede es que la ética se basa en
la aplicación de esa moralidad. Un juez no puede juzgar la moral de una persona, pero sí su ética.
Fíjate que los médicos tienen un código de ética que deben cumplir, no un código de moral.
Tarea 1 ver video y copiar las frases de cada teoría, cada corriente y de cada filosofo
https://pt.slideshare.net/profedefilosofia/pensamiento-y-vida-tica/7
Etimológicamente, Ética deriva de la palabra griega ETHOS que significa ‘morada’, cimentada en la
estructura de la persona. Por lo tanto, es la ciencia de los actos humanos encaminados hacia el bien.
La Ética es un conocimiento de la conducta propia dirigida a orientar nuestra actividad hacia el bien,
evitando destruirnos. Parte de la persona humana se vale del conocimiento de sus actos y termina
por elevarla. La Ética es la ciencia de las acciones humanas.
+La Ética se capta con la razón; tiene como órgano básico a la razón. Esto significa que la Ética no es
un producto de la emoción o del instinto, tampoco es el resultado de instrucción del corazón, ni
mucho menos de la intención.
+La Ética es una ciencia práctica porque está hecha justamente para realizarse en la vida diaria.
+La Ética es una ciencia normativa porque establece leyes, normas para que el hombre sepa elegir
entre el “bien y el mal”.
De la revisión realizada respecto a la clasificación de las ciencias por diversos autores, entre ellos
Aristóteles, Schopenhauer, Bain, Locke, Thompson y otros, podemos ubicar a la Ética dentro de las
ciencias prácticas, ciencias empíricas, ciencias concretas, ciencias normativas y ciencias filosóficas y
que lo presentamos en el siguiente cuadro:
Forman parte de las ciencias filosóficas: Antropología filosófica, Axiología, Deontología, Dialéctica,
Ética, Estética, Filosofía, Filosofía de la cultura, Filosofía de la educción, Filosofía de la historia,
Filosofía de la ciencia, Gnoseología, Lógica y Ontología.
Ciencias formales:
Conjunto de ciencias que estudian los procesos lógicos y matemáticos (cuyo objeto de estudio no es
el mundo, la realidad físico-natural, sino formas vacías de contenido), pero cuyos conocimientos
pueden ser aplicados a dicha realidad físico-natural. Las ciencias formales trabajan con formas, es
decir, con objetos ideales, que son creados por el hombre, que existen en su mente y son obtenidos
por abstracción.
Forman parte de las ciencias formales: Filosofía, Lógica, Matemática, Cálculo, Ética, Computación.
Ciencias prácticas:
Conjunto de ciencias que tienen por finalidad estudiar y dirigir las acciones del hombre durante su
existencia, sea en su vida personal o colectiva.
Forman parte de las ciencias prácticas: Arquitectura, Economía, Estética, Ética, Historia, Política,
entre otras.
Ciencias empíricas:
Las ciencias empíricas son conjuntos sistemáticos de conocimientos, coherentes y racionales, con los
que se ofrece una explicación de las causas de los fenómenos y de las leyes por las que se regulan,
explicación que es contrastable con la experiencia. El método por excelencia de las ciencias empíricas
es el método hipotético-deductivo.[5] Son conjunto de ciencias respaldadas por la investigación
experimental y que muestran datos concretos, y dan valor a la observación como método de
conocimiento con el fin de encontrar las causas de los hechos o fenómenos físicos y psíquicos y de
los efectos o consecuencias que producen y de establecer leyes universales.
Forman parte de las ciencias empíricas o ciencias a posteriori: Anatomía, Botánica, Derecho, Ética,
Física, Fisiología, Geología, Historia, Mineralogía, Psicología, Química, Zoología y Zootomía.
El carácter no restrictivo de la ética como ciencia de la conducta le viene dado por ocuparse de la
libertad. Ligada a ella, la responsabilidad sobre mis actos y la plena congruencia entre mis ideas y
mis hábitos. Finalmente, toda especulación ética lleva inherente la instauración de una nueva práctica
posible, o ése debería ser el compromiso que dicha teorización se pusiera como meta. Al menos para
mí así lo es.
La ética se erige, entonces, como la posibilidad de “ser” a partir de una deliberación responsable
tanto de mis actos como de las consecuencias de los mismos. La moral, en cambio, se entiende como
el canon de reglas que asumimos como buenas y que nos permiten integrarnos como personas
respetables en un determinado grupo social. La ética se inclina más al ámbito de la búsqueda
filosófica por la buena vida, la moral juzga la vida buena. La ética es autónoma, la moral
heterónoma. La ética se constituye de hábitos, la moral de costumbres.
La ética también nos remite a los principios fundamentales de la práctica cívica, político-social e
incluso profesional, frente a lo cual, la moral hace eco en el mundo de lo privado y en cuán valiosos
son mis actos en mis asuntos personales; ya que al parecer lo bueno se restringe cada vez más a la
vida privada y la responsabilidad a la vida pública. En lo privado queremos consagrarnos como
“buenos” seres humanos, en lo público como personas “responsables”. Y en este último sentido, se
invierten los términos, pues la moral, cuya función es básicamente social, se entiende como
individual y la ética, que parte de la toma de conciencia del individuo, se asume como el apego a los
intereses comunes antes que a los de la propia persona. Tal derivación en los discursos colectivos
hace aún más difícil establecer una clara distinción entre ambas.
De manera antitética, ambas se instauran en la posibilidad de hacernos cada día, en virtud de una
práctica que pretende ser congruente con aquellos principios que anhelamos perpetuar. En este
territorio, el de la cotidianidad, ambos conceptos se entrelazan confundiéndose hasta el punto en
que, hoy por hoy, nos ofrece muchas dificultades tratar de expresar el significado de cada uno y
determinar sus diferencias fundamentales.
¿Recuerdas lo que decíamos acerca de los usos de la razón cuando hablamos a principio de curso de
"El saber filosófico"? Repasa tu glosario, debes tener definidos los conceptos de Razón teórica y
práctica y también los de Filosofía teórica y práctica. Recordarás que dos son los ámbitos de la razón:
uno, el de la razón teórica, inclinado hacia el conocimiento entendido como búsqueda de la verdad en
la realidad. Otro, el de la razón práctica, inclinado hacia la búsqueda de la acción correcta en el
ámbito de las relaciones interpersonales y sociales. ¿Recuerdas?
Pues ahora nos vamos a adentrar en el uso práctico de la razón, en el sentido antes apuntado. En
esta secuencia didáctica que estamos iniciando hablaremos de la "acción correcta", es decir, de cómo
debe ser la conducta, pero a nivel individual; de ello se encarga la Ética y la Moral. Más adelante
tendremos ocasión de hablar de las "relaciones interpersonales", es decir, de cómo debemos
organizarnos socialmente para posibilitar la convivencia; de ello se encarga la filosofía política, que
veremos en otra secuencia didáctica.
¿Qué vamos a aprender?
Los seres humanos, a diferencia de los animales que están dominados por sus instintos,
continuamente tenemos en nuestra vida la posibilidad de elegir entre diferentes posibilidades. Es
decir, somos libres para determinar nuestra conducta. Por ello necesitamos criterios para elegir
sabiamente lo que más nos conviene: ¿cuál debo elegir? ¿qué debo hacer? pues unas posibilidades
son convenientes, o "buenas", mientras que otras son "malas"... y soy responsable de las elecciones
que haga
¿Qué es la libertad?
¿Qué es la responsabilidad?
¿Qué es la ética?
¿Qué es la moral?
Tomamos decisiones en nuestra vida aplicando criterios, ahora bien ¿quién establece esos criterios?
¿Qué es la autonomía moral? y ¿qué es la heteronomía moral?
Recibimos o aprendemos del ámbito cultural en el que vivimos una buena parte de esos criterios,
ideas, costumbres... pero nuestra cultura no es la única ¿cuál de ellas es la mejor? las diferentes
culturas ¿comparten cosas?
¿Qué es el etnocentrismo?
¿Qué es el relativismo cultural?
¿Qué es una ética de máximos? y una ¿ética de mínimos?
Es en las situaciones límite donde se pone a prueba la catadura, la solidez moral de las personas, la
profundidad y firmeza de sus convicciones. La ética, como conjunto de principios y fundamentos de
nuestras normas morales, no es solamente una bonita teoría. Se pone a juego en la vida, en las
situaciones reales de la vida: perder un trabajo, vivir una situación límite, de guerra, de conflicto, de
grave peligro... es ahí donde se vive de verdad la ética. Por eso, vamos ahora hablar de la ética y
también de la moral, y de cómo afectan e influyen en nosotros, en nuestra existencia cotidiana. A
partir de casos concretos, de situaciones reales.
Se relata la historia de un empresario de origen checo, Oskar Schindler (interpretado por Liam
Neeson), miembro del Partido Nazi quien acababa de llegar a Cracovia. Inicialmente se aprovecha de
la situación en Polonia (recientemente invadida por el ejército nazi) para crear una fábrica de
artículos de cocina, y para ello llega a un acuerdo con el director de un campo de trabajos forzados
para usar mano de obra judía proveniente del ghetto de Cracovia, la opción de trabajo más
económica disponible. Schindler depende de su contador judío, Itzhak Stern.
Pero pronto, Oskar intenta ayudar a sus trabajadores con todo lo que puede, impidiendo que vayan
al ghetto, o a campos de concentración o de exterminio, aunque, para ello, tiene, en muchas
ocasiones, que comprar a los judíos para salvarlos de su cruel destino en aquella época.
Oskar Schindler es un recién llegado a Cracovia, quien es mujeriego y disfruta mucho del dinero.
En la época de Hitler, un hombre, el empresario Oskar Schindler, se opone al régimen que gobierna
en su país y lucha a su manera contra el holocausto que está viviendo.
Utiliza su fortuna para contratar a judíos que están en campos de concentración con el fin de que
trabajen para él y así salvarle la vida.
Poco después hará una lista con los nombres de los agraciados que vivirán a salvo hasta el fin de la
guerra.
Una mañana desde lo alto de una colina, a donde lo había llevado un paseo a caballo), su mirada
recae en una niña judía de abrigo rojo que logra escapar de la vigilancia de los alemanes y
esconderse en su casa.
Poco después Schindler presencia el crematorio de los cuerpos en los barracones, que reconoce el
cadáver de la niña del abrigo rojo, transportado en una carretilla.
Este es el inicio de la reflexión de Oskar Schindler que empieza a ver el mundo judío más de cerca.
Sin embargo lo más impactante es cuando Schindler reflexiona y lamenta de no poder haber
conseguido contratar a más judíos para salvarles la vida.
Es una película que muestra lo peor y lo mejor que un ser humano puede dar de sí mismo... Dicen
que el dinero no puede comprar la felicidad, pero en este caso, no solo compra la felicidad sino
también la libertad y la vida.
En esta película, que está basada en hechos reales, que nos transporta a la Segunda guerra mundial,
nos muestra desde el corazón de los que más sufrieron: los judíos.
Oskar Schindler nunca pretendió ser un héroe, pero si fue capaz de resolver a su manera la cuestión
judía construyendo en Cracovia un campo de concentración que a la vez era una fábrica, que tras los
muros de estos se albergaron miles de judíos.
En fin, una película realmente cruda por su realismo y en definitiva una película excepcional.
En Jerusalén, en la avenida de los Hombres Justos, hay un árbol que recuerda la emoción histórica y
la maestría de una gran persona: OSKAR SCHINDLER
Ética y Moral
Libertad y responsabilidad son el fundamento mismo de la dimensión ética y moral del ser humano,
ahora bien, ¿qué diferencia hay entre ética y moral?
Supongamos que yo tengo una norma: decir siempre la verdad. Esa es una norma "moral", es decir,
una norma que guía mis acciones desde el punto de vista de lo que está bien y lo que está mal.
Pero supongamos que nos enteramos de que alguien, con muy malas intenciones, está buscando a
otra persona para asesinarla, y que nos pregunta a nosotros sí sabemos dónde se encuentra esa
persona. Nosotros lo sabemos. Y nuestra norma moral nos dice que siempre debemos decir la
verdad. ¿Deberemos, en consecuencia, decir la verdad y ayudar así al asesino a encontrar a su
víctima?
Lo más probable es que reflexionemos acerca de esa norma, y que establezcamos que debe tener
algunos límites y excepciones, ¿no es así? Pues bien, esa reflexión que hacemos es lo que
comúnmente llamaríamos "ética".
Ya hemos visto de donde brota el árbol de la ética: de la libertad y su acompañante inseparable, la
responsabilidad. Pero vayamos un poco más lejos. Cada vez que decido decir la verdad en lugar de
mentir, estoy construyendo mi vida de una manera. Cada vez que decido dialogar en lugar de usar la
violencia, estoy dándole a mi vida una orientación en determinada dirección, en lugar de otra.
Piénsalo. Cada vez que decides, das un paso en determinada dirección, y así, poco a poco, te forjas
un carácter moral, vas adquiriendo un perfil ético. Tu vida adquiere determinadas connotaciones. Y
las consecuencias te van a acompañar. Si decidiste ayudar, ser solidaria con alguien que lo
necesitaba, diste a tu vida un sabor, un tono, un perfil. Y poco a poco, a base de esas minúsculas
decisiones, te hiciste y te sigues haciendo como persona.
Por eso, la ética no es sólo una teoría. Es muchísimo más que eso. Y por eso merece la pena que
reflexiones sobre ello. Si eres libre, según ya dijimos, eres responsable de las consecuencias de tus
acciones. Esto significa que la dimensión ética está entrelazada con nuestras vidas. Y no solo eso. De
las diferentes opciones que la realidad te ofrece, has de tomar unas y dejar otras. Has de elegir. Y
esta elección has de hacerla desde la más absoluta indeterminación, o sea, sin saber si tu elección es
correcta o no. Eso quiere decir que has de hacer tu vida, porque la vida no te es impuesta, como
ocurre, por ejemplo, con los animales.
Quizás te parezca que esta cuestión no es importante, y que lo importante es que se respeten las
normas para garantizar así el orden social y la buena convivencia. Sin embargo, te aseguro que no es
así, y que esta cuestión es mucho más importante de lo que parece. ¡Puede llegar a resultar
dramáticamente decisiva!
Para que puedas ilustrar este punto, y reflexionar acerca de las consecuencias de la autonomía y la
heteronomía moral, voy a proponerte el siguiente vídeo y caso de estudio. Observa el siguiente
vídeo, donde se cuenta el famoso experimento Milgran sobre la obediencia. Se trata de un clásico
experimento de la psicología social que nos muestra de qué manera eludimos nuestras
responsabilidades éticas escudándonos en las "órdenes recibidas":
En todas partes, personas consideradas honrados padres de familia y probos funcionarios, se
ven involucrados en feos asuntos de tortura y crímenes llevadas a cabo por obediencia a las órdenes
de un superior, a veces incluso extralimitándose en el cumplimiento del deber.
En 1960 fue condenado y ejecutado en Israel Adolf Eichmann acusado de crímenes contra la
humanidad realizados en la Alemania nazi contra los judíos. El psicólogo Stanley Milgram de
la Universidad de Yale, se sintió intrigado sobre el motivo que llevaba a una persona normal, que
no tenía nada en contra de los judíos, a ser partícipe activo de un exterminio de personas inocentes.
Para ello realizó un experimento que se conoce como el Experimento de Milgram consistente en
medir cuanto es capaz de seguir cumpliendo un voluntario las órdenes de infringir fuertes daño a otro
voluntario. Escenificó una prueba en el que los participantes creían estar probando el efecto del
castigo en el aprendizaje.
Un actor se situaba en una cabina acristalada visible para el auténtico voluntario, y se le colocaban
electrodos a través de los cuales, solo recibia descargas inocuas de aviso de 45 voltios, escenificando
ellos muestras de dolor cada vez más intensas. El auténtico voluntario debía enviar corrientes
eléctricas, que supuestamente eran extremadamente dolorosas, que iban aumentando de intensidad
a medida que transcurría el experimento, mientras el actor simulaba cada vez más dolor.
El resultado de las pruebas fue que la mayoría de personas, que creían estar aplicando corrientes
eléctricas a otras personas, siguieron haciendo voluntariamente daño al obedecer órdenes recibidas.
Llegando las descargas, a lo que ellos creían ser, de 150 voltios, los actores daban los primeros gritos
de dolor, pero pese a ello el 82,5% de los participantes siguió administrando descargas tal como se
les ordenaba, y de ellos, el 79% continuó hasta aplicar 450 voltios.
La mayoría de los participantes obedecían las órdenes de una autoridad, aunque entrasen en
conflicto con su conciencia personal. Los voluntarios se iban poniendo nerviosos al ver sufrir al otro,
pero seguían obedeciendo al investigador, se demostró que la obediencia a las órdenes está por
encima de la moral de casi cualquier individuo
Recientemente Jerry M. Burger psicólogo de la Santa Clara University repitió el experimento casi
medio siglo después confirmando que nada ha cambiado en cincuenta años, la gente sigue dispuesta
a hacer daño a otros, si se lo ordena una autoridad.
La técnica experimental aplicada por Milgran fue muy controvertida, por lo que desde entonces se
modificó el código ético para la experimentación psicológica, y hoy un un estudio psicológico no
puede utilizar el mismo procedimiento utilizado por Milgram, por ello Burger ha modificado la
prueba para lograr la aprobación institucional para su trabajo, limita las descargas ficticias a 150
voltios y se les suministró una descarga de 15 voltios a los actores. A pesar de los cambios, las
pruebas demostraron que la bondad no gana aún a la obediencia.
Además, en el estudio de Burger, se informó a los participantes que podían abandonar el
experimento en cualquier momento, y que en cualquier caso percibirían su dinero. Pese a ello los
resultados obtenidos coinciden en gran medida con los alcanzados por Miligran.
Resultados similares se obtuvieron en experimentos virtuales realizados para probar la utilidad de la
realidad virtual en la investigación psicológica. La University College de Londres. realizó un
experimento similar al de Milgram, salvo que en este caso los voluntarios sabían que quienes sufrían
las descargas eran personas ficticias. Una parte se comunicaba con los personajes virtuales a través
de un interfaz textual, y otro grupo lo hizo en un entorno gráfico,
Los resultados fueron, en el primer grupo, todos los participantes administraron las 20 descargas
eléctricas que se les pidió, en el segundo, tres personas aplicaron 19 descargas, y otras tres dieron
respectivamente 9, 16 y 18, la mitad del segundo grupo admitió que había deseado detenerse, pero
la autoridad venció a sus propios impulsos Los resultados tiene mucha coincidencia con los resultados
obtenidos por Milgram y Burger.
Según Milgram, la férrea autoridad se impone a los imperativos morales y, con los gritos de las
víctimas sonando en los oídos, la autoridad subyuga al voluntario. La extrema aceptación de casi
cualquier requerimiento ordenado por la autoridad es el principal descubrimiento de estos
experimentos.
¿Qué opinión te merece el experimento del vídeo? ¿Cómo crees que actuarías tú en un caso
semejante? Aunque una cosa es una situación ficticia y otra muy diferente una situación real, una
situación en la que se juegue la vida de muchas personas, incluida la tuya. En ese caso, quizás no te
sea tan fácil dar una respuesta.
El relativismo niega la existencia de verdades absolutas en torno a la existencia del bien y del mal,
pues piensa que estas limitan la libertad. Por lo tanto, lo que está bien y lo que está mal, lo que es
correcto e incorrecto, depende de cada raza, ideología, cultura, época, clase o situación particular. No
niega que pueda haber valores comunes para varias culturas, pero sí que exista un código ético de
carácter absoluto, válido para todas las épocas, situaciones y culturas.
Por su parte, el universalismo ético postula que debe haber una ética universal y válida para todos,
justificada y verdadera, con principios y normas morales que puedan ser reconocidos por todos los
miembros de la especie humana, en cualquier situación, época y cultura. Por lo tanto, debe haber
una naturaleza humana común, y dentro de esa naturaleza humana debe haber una "tendencia
natural" a la ética.
Y, en nuestro país, en el nombre de "la tradición" se permite la tortura y el maltrato a los animales
como forma de diversión y entretenimiento.
¿Y ahora, qué piensas? ¿Debería haber una ética universal o no? Quizás una respuesta a este tema
debería ser un planteamiento de mínimos. Es decir: debería haber un diálogo entre culturas en el que
se impusieran unas normas universales mínimas de obligado cumplimiento para todas las culturas, y
entre las cuales se prohibieran la pena de muerte, la discriminación de género, inclinación sexual o
raza, la tortura a humanos o animales, las mutilaciones, etcétera.
Son los actos humanos formalmente considerados los que constituyen el objeto
material de la ética; es decir, aquellos actos de los que el hombre es dueño y responsable y por
tanto, pueden ser ordenados por el propio hombre a su debido fin; es este aspecto lo que constituye
el objeto formal de la ética. Por ello la ética ha sido calificada como una ciencia teórico-práctica,
ciencia que estudia los actos humanos en tanto que sean de libre albedrío.
Los griegos del siglo V antes de nuestra era fueron los primeros en filosofar sobre cómo debemos
comportarnos e iniciaron así la ética, íntimamente unida a la política.
Puedes estudiar el siguiente cuadro, en el que encontrarás muy resumidas las principales escuelas y
autores de teorías éticas materiales:
Éticas materiales
Escuela Autor/es Cómo define el bien Cómo prescribe alcanzar el bien
Intelectualismo El bien supremo es la Suprimiendo la ignorancia. Somos malos
Sócrates
moral sabiduría. porque somos ignorantes.
Desarrollando la actividad propia del
El bien supremo es la
Eudemonismo Aristóteles hombre, el conocimiento, y mediante la
felicidad.
virtud, entendida como término medio.
Cultivando los placeres moderados y un
El bien supremo es el
Hedonismo Epicuro estado de "ataraxia" o ausencia de
placer.
pasiones.
Zenón, El bien supremo es la A través de la indiferencia y la aceptación
Estoicismo
Séneca rectitud moral. del destino.
El bien supremo consiste
Iusnaturalismo Sto. Tomás en el acercamiento a Siguiendo la Ley moral de origen divino.
Dios.
El bien es el placer o Mediante acciones que promueven el
Utilitarismo J.S. Mill
ausencia de dolor. placer para el mayor número de personas.
Ahora, imaginemos que tenemos el raro privilegio de poder charlar con uno de los más importantes
filósofos de la historia. ¿Qué nos diría el propio Aristóteles si le preguntásemos acerca de su
pensamiento?
Sofistas y Sócrates
La filosofía aparecida en torno al siglo VI antes de nuestra era en Grecia sufre un giro antropológico
en la Atenas del siglo V. Las investigaciones anteriores a Sócrates tenían como objetivo eminente la
investigación de la Physis, ahora, con los sofistas y Sócrates la filosofía dirige su atención a temas
más típicamente humanos: la reflexión ética, la búsqueda de una fundamentación de la práctica
moral y política, la indagación sobre las posibilidades del conocimiento humano. Tanto Sócrates como
sus contemporáneos los sofistas se centran en asuntos relacionados con la ética y la política.
Eudemonismo Aristóteles
Se entiende por "eudemonismo" toda teoría ética que identifica la felicidad con el Sumo
Bien. La primera teoría eudemonista importante es la de Aristóteles, quien hará consistir la felicidad
humana en el desarrollo de las facultades intelectuales y la vida virtuosa.
Hedonismo Epicuro
Teoría ética que considera al placer como la finalidad o el objetivo de la vida. Los
hedonistas, por lo tanto, viven para disfrutar de los placeres, intentando evitar el dolor. Se trata de
un conjunto de teorías morales que destacan que, por lo general, todo lo que el ser humano hace es
un medio para conseguir otra cosa. El placer, en cambio, es lo único que se busca por sí mismo. Fue
impulsada por el filósofo griego Epicuro de Samos, que vivió en el periodo comprendido entre los
siglos IV y III a.C y que estableció que la meta máxima de cualquier ser humano debe ser el
conseguir la felicidad.
La Ilustración del siglo XVIII introdujo como valores la libertad y la autonomía. Cualquier ética que
señale unos preceptos o normas que deben ser cumplidos coarta la libertad y autonomía de las
personas, pero facilita la convivencia. Afrontó el reto de pensar una ética que permita la convivencia
al mismo tiempo que las personas conservan su libertad y autonomía... ummm ¿cómo es eso posible?
Pues sí, ¡es posible! Saca pecho y atrévete a practicar una ética que respete tu libertad y autonomía.
Lee con atención el siguiente cuadro/resumen:
Éticas formales
Escuela Autor Cómo define el bien Cómo prescribe alcanzar el bien
Lo único moralmente bueno es Imperativo categórico: actúa de tal forma
Ética formal
Kant una buena intención, o actuar que puedas desear sin contradicción que
kantiana
conforme al sentido del deber. tu máxima se torne ley universal.
Las normas morales deben ser
Una norma es moral si es
Ética consensuadas entre todos los miembros
Habermas aceptable para toda la
discursiva de la comunidad a través de un diálogo
comunidad de diálogo.
libre entre iguales.
Ahora, imaginemos un diálogo con Kant, el autor de la teoría ética formal más conocida y estudiada.
Emotivismo Hume
¿Cuál sería tu reacción si presenciaras el maltrato a un animal? ¿O a una persona? ¿Cómo
reaccionarías ante la violencia, el engaño o la manipulación? Sin duda, ante determinados hechos, los
seres humanos solemos experimentar una reacción emocional de aversión o rechazo.
A esta teoría que vincula y explica la ética y las normas morales con sentimientos y reacciones de
carácter emocional, se la ha llamado "emotivismo", defendida sobre todo por David Hume.
El objeto material es la cosa que se estudia, que en el caso de la Ética serán los actos humanos;
mientras que el objeto formal es el aspecto de la cosa que se estudia, siendo su aspecto que se
estudia, la bondad o la maldad de dichos actos.
Por lo que, en concreto el OBJETO DE ESTUDIO DE LA ÉTICA, sería “La bondad o maldad de los
actos humanos”
Esto es, la ética no se ocupa de los actos del hombre, sino únicamente de aquellos actos que son
ejecutados consciente y libremente con miras a un fin, es decir, los actos humanos. Por ello, la ética
está en el ámbito de lo esencialmente humano.
Se llama objeto formal al aspecto determinado del objeto material que estudia una ciencia.
Varias ciencias pueden tener el mismo objeto material, y sin embargo, distinguirse por su objeto
formal.
Muchas son las ciencias que se ocupan de los actos humanos, es decir, que tienen como objeto
material, los actos humanos: la psicología, la sociología, la historia o la ética.
Estas disciplinas coinciden en su objeto material pero cada una de ellas estudia los actos humanos
desde distintos puntos de vista, o dicho de otro modo, tienen diferente objeto formal.
Por ejemplo, a la historia le interesa la actividad humana a través del tiempo y a la sociología, las
repercusiones de la actividad humana en la sociedad.
ÉTICA
Objeto formal y el Objeto material
Bondad o maldad Actos humanos (conformidad o disconformidad con la norma de moralidad).
El objeto formal de la ética, es entonces, la bondad o maldad de los actos humanos. Su rectitud, su
valor moral y su adecuación con la norma de moralidad.
Es normativa. La ética establece lar normas para guiar y regir nuestras acciones. Por ende, se ocupa
de lo que debe ser.
NORMAS RELIGIOSAS. -
Indican el reconocimiento de un ser absoluto y trascendente. Son preceptos que contribuyen a
mantener la relación con ese ser. Por ejemplo: el Decálogo.
NORMAS SOCIALES. -
Regulan nuestra forma de comportarnos ante los demás. Cambian con las costumbres y la época. No
hay más sanción externa que la burla o el repudio de los demás. Son accidentales. No atañen a lo
más esencial del hombre. Por ejemplo: vestirse de negro para ir a un velorio o cederle el asiento a
los demás.
NORMAS ÉTICAS. -
Dirigen la actividad humana en orden al bien.
Atañen al núcleo esencial del hombre en un orden natural.
Son obligatorias porque se fundan en el valor, pero no tienen sanción externa.
En muchas ocasiones las normas éticas se revisten con la forma de otra norma. Por ejemplo:
Respetar los bienes de otros. (Norma ética)
Se traduce en:
No robar. (Norma jurídica)
Así tenemos que no todas las normas son normas éticas, pero de hecho, muchas de las normas
jurídicas, sociales y religiosas son en el fondo expresiones de las normas éticas.
La vida del hombre está regulada internamente por las normas éticas, y es su cumplimiento el que lo
perfecciona como ser humano.
Finalmente, y tomando en consideración todas las características aquí mencionadas, podemos decir
que la ética es:
Puesto que ya hemos visto cada una de las partes de esta definición, estamos preparados para
comprenderla y reflexionar acerca de la importancia de la ética en la formación del hombre.
EL ACTO MORAL
EL ACTO HUMANO
Un chico de 9 años se acerca a la cuna en donde su hermanito, un precioso bebé, juega encantado
con el biberón, después de haber derramado la leche en las sábanas y en la ropa.
Niño: ¡Mamá! Ven a ver lo que hizo el bebé.
Mamá: ¿Qué pasa? ¡Ay diablillo! Te has tirado encima la leche. Pero con esa sonrisa ¿quién te puede
reclamar?
Niño: ¿Por qué no lo regañas como a mí cuando derramé el refresco en el mantel?
Mamá: Porque él no se da cuenta de que hace mal.
Niño: ¿Y cuándo papá tiró el pegamento en el tapete? Él sí sabía que lo echaba a perder y sin
embargo no te enojaste con él.
Mamá: Porque lo hizo sin querer. En cambio, tú tiraste a propósito el refresco para hacerme rabiar
porque no te di permiso de salir con tus amiguitos ¿Te acuerdas?
Niño: Es cierto, pero la verdad es que me sentí muy mal después, porque te quiero mucho.
Mamá: En cambio cuando haces tú tarea con esmero, actúas bien. Creo que ya estás en edad de
darte cuenta de que algunas acciones son buenas y otras malas, y debes ser tú el que elija el camino
que vas a seguir.
Y así:
Actos meramente naturales son los que proceden de las potencias vegetativas y sensitivas, sobre las
que el hombre no tiene control voluntario alguno y son enteramente comunes con los animales; por
ejemplo: la nutrición, digestión, circulación de la sangre, sentir dolor o placer, etc.
Actos del hombre son los que proceden del hombre sin ninguna deliberación o voluntariedad, ya sea
porque está habitualmente destituido de razón (locos, idiotas, niños pequeños), o en el momento de
realizar el acto (dormidos, hipnotizados, embriagados, delirantes o plenamente distraídos). Todos
estos actos no afectan a la moralidad ni son de suyo imputables al agente; pero pueden serlo en su
causa, como veremos más adelante.
Actos violentos son los que el hombre realiza por la coacción exterior de un agente que le obliga a
ejecutarlos contra su voluntad interna.
Actos humanos son aquellos que el hombre realiza con plena advertencia y deliberación, o sea
usando de sus facultades específicamente racionales. Solamente entonces obra el hombre en cuanto
tal, es dueño de sus actos y plenamente responsable de ellos.
Y así se llaman:
ACTOS HUMANOS, en cuanto producidos por el hombre con pleno dominio y deliberación, o sea
racionalmente.
ACTOS IMPUTABLES, en cuanto producidos libre y voluntariamente por el hombre, que adquiere por
lo mismo la responsabilidad de los mismos en orden al premio o al castigo.
DIVISIÓN.-
Es múltiple también la división de los actos humanos según el punto de vista en que nos coloquemos.
Las que afectan más de cerca el orden moral son las siguientes:
ACTO IMPERADO es el realizado por una facultad interna o externa a impulsos de la voluntad, que se
lo ordena, ya sea despóticamente y sin que lo pueda resistir (como abrir o cerrar los ojos), ya
políticamente y con potestad de desobedecer (como permanecer atento, no distraerse, etc.)
Solamente los sentidos externos y la facultad locomotiva admiten imperio despótico; no los sentidos
internos ni el entendimiento, que muchas veces se niegan a obedecer a la voluntad.
ACTO NATURAL es el que procede y se realiza con las solas fuerzas de la naturaleza sin auxilio de la
gracia (ejemplo: pensar, hablar...)
ACTO SOBRENATURAL es el que requiere la gracia (al menos actual) y dice orden a la vida eterna
(ejemplo: un acto de verdadero amor a Dios).
ACTO VÁLIDO es el que reúne todas las condiciones establecidas por la ley para producir ciertos
efectos (ejemplo: para la fuerza obligatoria de un contrato).
ACTO INVÁLIDO es el que no reúne dichas condiciones y no tiene fuerza para producir el efecto
intentado (ejemplo: bautizar a un niño con un líquido distinto del agua natural o sin emplear la
fórmula debida).
ACTO BUENO (o virtuoso) es el que se ajusta a la recta razón y normas de la moralidad. Puede ser
natural o sobrenaturalmente bueno (ejemplo: dar una limosna a un pobre por simple compasión
natural o por amor a Dios).
ACTO MALO (o vicioso) es el que se aparta del recto orden moral. No se da ningún acto naturalmente
malo que no lo sea también en el orden sobrenatural. El llamado “pecado filosófico” no existe, como
veremos en su lugar correspondiente.
ACTO INDIFERENTE es el que no se relaciona de suyo con la moralidad (ejemplo: pasear). Sólo se
dan en abstracto, no en concreto; pues las circunstancias concretas que le rodean le hacen bueno o
malo, como veremos.
ACTO LÍCITO es el que está autorizado por la ley natural o positiva legítima.
ACTO ILÍCITO es el que es malo en sí mismo (ejemplo: blasfemar, mentir) o está prohibido por una
ley legítima (ejemplo: trabajar los domingos).
ACTO PERMITIDO es el que no está prohibido por ninguna ley natural ni positiva.
ACTO HUMANO PERFECTO es el realizado con pleno conocimiento y deliberación, siendo el hombre
dueño por completo de sí mismo.
Un mismo acto puede ser acto humano en unas circunstancias y acto del hombre, en otras.
Por ejemplo:
La relación sexual es un acto del hombre, pero adquiere categoría de acto humano cuando se realiza
con plena conciencia y libertad.
Manejar es un acto que debiera ser siempre humano. Sin embargo, un hombre en estado de
ebriedad que maneja no es totalmente consciente de lo que hace, por lo que su acto de manejar se
convierte en acto del hombre.
Una persona mientras más ejercita las facultades propias del ser humano, inteligencia y voluntad,
ejecuta más actos humanos.
Este nivel de actuación es el de la moralidad, es decir, los actos humanos son los únicos que pueden
ser calificados como buenos o malos moralmente.
La moralidad es la cualidad en los actos humanos, por la cual, les llamamos buenos o malos (y es
justamente la moralidad de los actos humanos, el campo de estudio de la ética).
Sin embargo, para precisar un concepto adecuado de la ética es necesario entender antes los
principios en que se fundamenta.
El principal elemento cognoscitivo que requiere el acto humano es la advertencia, de la que vamos a
hablar enseguida. A continuación diremos dos palabras sobre los restantes elementos cognoscitivos.
La advertencia.
La advertencia es el acto por el cual el entendimiento percibe la obra que se va a realizar o se está ya
realizando.
Coincide casi enteramente con la atención, que fue definida por Balmes como: la aplicación de la
mente en un objeto: La atención, sin embargo, es una advertencia más perfecta y profunda, que
supone cierta concentración del espíritu a lo que se va a realizar o se está realizando, mientras que la
advertencia se refiere a la simple percepción consciente, aunque sea semidistraída. Atender es más
que simplemente advertir.
PERFECTA O IMPERFECTA, según perciba en todas sus notas la especie moral del acto (ejemplo:
sabiendo que el adulterio envuelve dos malicias: contra la castidad y la justicia), o se dé cuenta tan
sólo de que aquella acción es buena o mala, pero sin saber exactamente por qué y en qué grado y
medida.
DISTINTA O CONFUSA, según advierta con toda claridad la bondad o maldad de la acción que va a
ejecutar o no esté del todo segura de ello.
1ª. LA SIMPLE APREHENSIÓN del acto cuya posible realización se presenta ante el entendimiento. Se
trata de algo meramente psicológico todavía.
3ª. DELIBERACIÓN O CONSEJO sobre los medios que se podrían emplear para realizar el acto.
4ª. ÚLTIMO JUICIO PRÁCTICO por el que el entendimiento indica a la voluntad cuál es el medio
mejor y más oportuno para realizarlo.
5ª. IMPERIO DE LA RAZÓN PRÁCTICA, que intima la realización.
6ª. USO PASIVO, o sea, ejecución del acto por el mismo entendimiento (si se trata de un acto
intelectual, ejemplo: estudiar) o por las potencias ejecutivas correspondientes (si se trata de un acto
no intelectual, ejemplo: andar, comer, etc.).
Como se ve, los cuatro primeros momentos pueden reducirse fácilmente a la advertencia (psicológica
y moral) del acto que se va a realizar y de los medios para realizarlo. El imperio es un acto de la
razón práctica que tiene gran interés en el tratado de la ley. En cuanto al uso pasivo, no siempre
pertenece al entendimiento, ya que con frecuencia afecta a las potencias ejecutivas del acto humano
en cuestión.
El acto voluntario. - es el que procede de un principio intrínseco con conocimiento del fin.
Por la noción que acabamos de dar, aparece claro que el voluntario se distingue perfectamente de
algunos otros afines o dispares. He aquí los principales:
Lo natural, que procede de un principio intrínseco, pero no de la voluntad (ejemplo: los actos de las
potencias vegetativas, la digestión de los alimentos, etc.).
Lo espontáneo, que procede del instinto natural con conocimiento puramente material del fin (actos
instintivos del hombre y de los animales).
Lo violento, que procede de una coacción extrínseca contra la voluntad del agente.
Lo simplemente querido, sin que dependa de la propia voluntad (ejemplo: el labrador quiere y se
alegra de la lluvia, pero sin que pueda producirla por él mismo).
Lo permitido, aunque no querido (ejemplo: la autoridad permite, para evitar mayores males, ciertos
desmanes que preferiría que no se cometiesen). Otra cosa sería si hubiera obligación de impedir
incluso aquellos males menores.
Lo involuntario, o sea, lo realizado por ignorancia, de tal suerte que no se hubiese realizado si se
hubiera conocido la verdad.
Lo no-voluntario, o sea, lo que se hace con ignorancia, pero de tal suerte que igual se realizaría si se
conociera la verdad.
Quise iniciar el presente trabajo de investigación con la frase anterior, porque plasma
verdaderamente situaciones a las que nos podemos encontrar en el sendero de nuestra profesión, y
es ahí donde debemos atender al llamado de nuestros valores, de la responsabilidad moral y ética y
en ningún momento dejarnos titubear por intereses mezquinos que nos hagan perder el rumbo de la
rectitud, de la dignidad profesional, tal como lo menciona Platón: “subir con trabajo al palacio que
habita la justicia”.
El tema de la ética del abogado, es de suma importancia y necesidad, ya que es, precisamente, el
profesional del derecho en quien la sociedad busca una actuación recta, indisoluble, de atender al
llamado de su conciencia que le dicte e induzca a una realidad equitativa.
Con esta recopilación nos darnos cuenta que hablar de ética en nuestro tiempo equivale a hablar de
justicia, bien común, seguridad y fines del derecho, que desde antaño se han buscado, trayéndonos
esos principios inherentes a la actividad del abogado, a la reflexión, a la práctica y a la conciencia,
Conceptualización de abogado
Podemos decir que el abogado es un profesional que brinda asesoría y representación a sus clientes
en cuestiones jurídicas, más, existe varias conceptualizaciones que nos dan diversos autores, y serán
algunas las que mencionaremos.
El abogado es “un profesional del derecho que ejerce la abogacía. Para el ejercicio de esta profesión
es requisito sine qua non, tener e título de la licenciatura en derecho y obtener la cédula
correspondiente de la Dirección General de Profesiones. Del abogado se ha dicho –encareciendo la
importancia de su misión- que es ‘el primer juez de todas las causas’. Según Couture (Vocabulario
jurídico): profesional universitario, con título hábil, a quien compete el consejo o asesoramiento en
materia jurídica, la conciliación de las partes interesadas opuestas y el patrocinio de las causas que
considere justas.[14]
En el libro “El jurista y el simulador del derecho”, su autor, alude que: “el abogado debe ser un
jurisprudente, esto es, un sapiente del Derecho. Sería absurdo que no lo fuese, es decir, que
padeciese “ignorantia juris”. Sin los conocimientos jurídicos no podría ejercer digna y acertadamente
su profesión. Ahora bien, el abogado es una especie de jurisprudente que se vale de su sabiduría
para patrocinar, dirigir o asesorar a las partes contendientes en un litigio, ante un órgano
jurisdiccional del Estado que desea resolverlo.[15]
Con los conceptos anteriores, podemos afinar que para ejercer la abogacía en México, es necesario
realizar estudios durante varios años, en una universidad o escuela de derecho, legalmente
reconocida y obtener y el título y cédula correspondiente, en licenciado en Derecho, previamente
registrado en la Secretaría de Educación Pública.
Valores de la abogacía
El abogado no es, por lo tanto, una pieza aislada e independiente del aparato institucional de la
aplicación del Derecho por el Estado, sino que se integra en él. Pero esto no quiere decir que el
abogado sea un mero servidor del Estado. Más bien, Estado (o más exactamente, los funcionarios del
Estado y todavía más concretamente los jueces y abogados son servidores del Derecho. Por eso, el
artículo primero del Código de Ética Profesional de la Barra Mexicana –Código de Abogados-
comienza: “El abogado ha de tener presente que es un servidor del Derecho y un coadyuvante de la
justicia...” [18]
Así los valores que siempre deben perseguir el pretendiente a ejercer la ciencia del derecho son la
justicia, la seguridad jurídica y el bien común.
Justicia. Disposición de la voluntad del hombre dirigida al reconocimiento de lo que a cada cual es
debido o le corresponde según el criterio inspirador del sistema de normas establecido para asegurar
la pacífica convivencia dentro de un grupo social más o menos amplio. Aristóteles nos habla de una
justicia distributiva, que exige que en el reparto de los bienes y honores públicos cada cual sea
tratado según sus merecimientos, y de una justicia correctiva, que puede ser conmutativa (referida a
las relaciones contractuales) o judicial (referida a la aplicación judicial del derecho). El sentimiento de
justicia es común a todos los hombres. Tradicionalmente, la justicia ha sido considerada como el
valor jurídico por excelencia.[19]
Seguridad jurídica. Una de las finalidades del Estado es proporcionar seguridad jurídica a los
ciudadanos, esto es, la certeza y convicción de que sus derechos no serán violados ni física ni
jurídicamente, la cual otorga por medio de la fe pública que confiere al Registro Civil, al Registro
Público de la Propiedad, al Ministerio Público, al Secretario Judicial y, fundamentalmente a los
notarios, instituciones todas ellas que se encuentran a cargo de los abogados. [20]
La seguridad jurídica, por tanto, es uno de los valores más preciados que el Estado debe de
garantizar, mediante la actividad jurisdiccional, con la cual busca facilitar a la sociedad, unos medios
eficaces para conseguirla. Además, esta seguridad jurídica, se refiere a que toda persona debe contar
con la seguridad de que en todo momento sus derechos y posesiones serán respetados en todo
momento.
Así dice la Suprema Corte de Justicia de la Nación, acerca de la seguridad jurídica: “es la certeza que
debe tener el gobernado de que su persona, sus posesiones o sus derechos serán respetados por la
autoridad, pero si ésta debe producir una afectación en ellos, deberá ajustarse a los procedimientos
previamente establecidos en la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos y las leyes
secundarias.
Bien común. Se relaciona con las personas por la ley de la superación y por la ley de la distribución.
De ahí resulta, evidentemente, una ordenación de las personas entre sí y con todo, que hace posible
la comunidad. Por constituirse en función de él la unidad de orden, el bien común resulta ser un
principio de organización social, que no puede establecerse sin la determinación de lo que cada uno
corresponde dar y recibir, y en este sentido el bien común es un principio jurídico.
Honorarios adecuados
Cuando nos referimos a los honorarios adecuados, estamos señalando que éstos pueden cobrarse
conforme a varios aspectos, los cuales podrían ser: el trabajo efectivamente desarrollado por el
abogado, el prestigio del abogado, la complejidad del asunto, el monto o la cuantía de la pretensión,
la capacidad económica del cliente, y la voluntad contractual de las partes.
El Código de Ética profesional, cita algunos factores, como la cuantía e importancia del asunto; la
novedad o dificultad del contenido jurídico que se ha debatido; la capacidad económica de cliente, la
experiencia, reptación y especialidad del abogado; la costumbre del lugar; si los servicios que presta
dicho profesional son aislados o constantes; el tiempo empleado en el patrocinio; el grado de
participación en el estudio, planteamiento y desarrollo del asunto, así como el éxito alcanzado y su
trascendencia; si únicamente patrocinó al cliente o si también lo sirvió como mandatario; y la
posibilidad de intervenir en otros casos o de desavenirse con otros cliente o con terceros.
En todo caso, en México, existen leyes arancelarias en diferentes Entidades federales, con el objeto
de regular el pago de los honorarios de los licenciados en derecho, que cuenten con una cédula
profesional para ejercer dicha profesión, en aquellos casos en que no se haya pactado el monto que
corresponda en el contrato de prestaciones de servicios profesionales.
Quien contrata a un abogado, está en el entendido que lo representará desde el principio y que no
abandonará o lo traicionará; la lealtad está basada en los valores de justicia, verdad y honradez, y en
caso de que este tipo de conductas impropias del abogado se den, las sanciones se especifican en:
El artículo 229, del Código Penal del Estado de Nayarit, expresa: “se impondrá prisión de seis meses
a tres años y multa de diez a treinta días de salario y suspensión en el ejercicio profesional de un
mes a dos años, a los abogados, patronos o litigantes, cuando éstos últimos no sean ostensiblemente
patrocinados por abogados, si cometen algunos de los delitos siguientes:
I. Alegar, a sabiendas, hechos falsos o leyes inexistentes o derogadas;
II. Pedir términos para probar lo que notoriamente no puede probarse o no ha de aprovechar a su
parte; o promover artículos o incidentes con el fin de crear dilaciones o trámites innecesarios para el
normal desarrollo del juicio, o recursos claramente improcedentes, o de cualquier otra manera,
procurar dilaciones notoriamente indebidas.
Para proceder a la iniciación de la averiguación penal será necesaria la previa calificación de los
hechos a que se refiere esta fracción, realizada por el Juez o Tribunal que conozca del negocio; y
III. Presentar por sí mismo o aconsejar a su patrocinado, a que presente testigos o documentos
falsos.
En el caso de esta fracción, las sanciones expresadas se impondrán sin perjuicio de las que
correspondan por la participación del infractor en la comisión del delito de falsedad en declaraciones
ante la Autoridad; falsificación de documentos o uso de los mismos.
Aparte de que “la ley reglamentaria del artículo 5º constitucional no ve a las asociaciones como un
órgano de control y vigilancia, ya que prevalece la libertad de profesión. La ley en comento le delega
a las entidades federativas la regulación de las asociaciones profesionales; siendo pocas entidades las
que lo ha hecho. [29]
Nayarit es una de las entidades que tiene una ley que regula las asociaciones profesionales: “Ley
para el ejercicio de las profesiones y actividades técnicas en el Estado de Nayarit”, en donde su
capítulo VII, art. 33 reseña: “Todos los profesionales y Técnicos de una misma rama podrán construir
en el Estado, una o varias asociaciones…”
CONCLUSIONES
Hemos terminado un interesante e importante tema como lo es la Ética del Abogado, sobre
todo en esta época en que el panorama para la abogacía es sombrío, donde se olvidan en muchas
ocasiones, las normas de ética profesional.
Haber comentado los principios de los postulados de algunos juristas como Ángel Ossorio,
Eduardo j. Couture y Arellano García, así como y el Código de Ética de la Barra Mexicana de
Abogados, nos dejó conocer los principios rectores de la función del abogado y reconocer la
importancia de la ética en el desempeño profesional.
Se han tratado los conceptos teóricos que forman la base en que se construye la ética del
abogado y reconocemos con estos que la ética es un aspecto trascendental en la legitimización de la
labor de la abogacía ante la sociedad.
Analizamos la colegiación en México y su importancia de esta para la abogacía, terminando con
esto con aquellos malos abogados que mucho daño ha hecho al gremio, ya que, en ocasiones, por
unos cuantos perdemos todos.
Los datos sobre la colegiación de otros países permiten ver la enorme distancia que nos falta
por recorrer para mantener un verdadero control sobre el ejercicio de la profesión, evitando las malas
prácticas y promover el estudio de la cultura jurídica.