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Sociologia de La Educacion

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La escuela es una organización especializada encargada de transmitir la herencia cultural de

la sociedad. Habilita a las nuevas generaciones para aprovechar las experiencias y los
descubrimientos y los prepara como miembros útiles de la sociedad.

Es la escuela la encargada de transmitir normas, actitudes y valores que forjan al individuo


como una persona social más compleja y lo preparan para la vida social.

Hay dos tipos fundamentales de aprendizajes que transmite la escuela: las nuevas conductas
de rol y el ajuste de las reglas interpersonales y la autoridad formal.

Es en organización escolar donde el individuo adquiere conocimientos, competencias


técnicas y elementos reguladores de su conducta imprescindibles para la vida social.

Otra institución fundamental para el presente análisis son las instituciones religiosas que
apuntan a transformar dogmas y principios morales en un conjunto de prácticas sociales y de
disposiciones subjetivas, de creencias y de fe. El objetivo es crear individuos que, compartiendo
un conjunto de verdades reveladas, ritos, etc.se comportan de determinada manera.

Si bien a lo largo de la historia las instituciones religiosas y de la iglesia católica en particular


ejercieron mucha influencia social en la actualidad se han desdibujado notablemente.

También en la conformación del individuo influyen notablemente los grupos de amigos


entendiéndose como tal a grupos de pares formados por personas de la misma edad, que
comparten actitudes similares.

De niños los grupos se forman por las relaciones de los padres más tarde se forman casi
accidentalmente en torno a interacciones de diferentes contextos. Poco a poco pueden
volverse más selectivos.

Son grupos que carecen de una organización formal, son temporarios y sus intereses
inmediatos. Crean sus propias pautas culturales.

Estas estructuras hacen del grupo de pares un eficaz agente socializador ya que en ellos el
individuo desarrolla una serie de aprendizajes que solamente pueden tener allí se puede
transmitir información en forma simultanea e impersonal a un gran número de individuos. En
los últimos años los avances de la tecnología dieron paso a una gran revolución en las
comunicaciones. Esto hizo que los medios de comunicaciones ocupasen un lugar cada vez más
importante en la vida de los individuos y de la sociedad en sí.

Todo esto otorga a los medios un enorme poder, a punto que su control se ha convertido en
un objeto fundamental de los poderes del estado, los partidos políticos, los grupos
económicos, las organizaciones sociales, etc.

Nunca el mensaje es neutro basta con comparar la información que sobre un mismo tema
dan dos periódicos diferentes orientaciones ideológicas o filiación política, para advertir las
formas en que aquellas pueden ser manipuladas tergiversada o simplemente ignorada.

El medio, por su parte, constituye una influencia más entre otras, dentro de una situación
total, es imposible definir los límites de cada una de las influencias.

Para poder analizar la violencia simbólica citaremos a el sociólogo francés Pierre Bourdieu
que formula que es la violencia no ejercidas directamente mediante la fuerza física, sino a
través de la imposición por parte de los sujetos dominantes a los sujetos dominados de una
visión del mundo, de los roles sociales, de las categorías cognitivas y de las estructuras
mentales.

La forma paradigmática de la violencia simbólica es, para el autor, el fenómeno de la


dominación masculina, que, lejos de ser sólo una violencia ejercida por hombres sobre
mujeres, es un complejo proceso de dominación que afecta a los agentes sin distinción de
géneros. Pero pueden encontrarse formas y fenómenos de violencia y dominación simbólicas
en los más
diversos acontecimientos sociales y culturales: en la esfera del lenguaje, en el ámbito
educativo, en las múltiples clasificaciones sociales, etc.

“La violencia simbólica es esa coerción que se instituye por mediación de una adhesión que
el dominado no puede evitar otorgar a la dominante (y, por lo tanto, a la dominación) cuándo
sólo dispone para pensarlo y pensarse o, mejor aún, para pensar su relación con él, de
instrumentos de conocimiento que comparte con él y que, al no ser más 1 que la forma
incorporada de la estructura de la relación de dominación, hacen que ésta se presente como
natural...”

Este mundo social, cuya experiencia se opera únicamente a través de las prácticas, es
concebido por Bourdieu como un espacio pluridimensional en el que los diversos campos
(económico, político, escolar, cultural, etc.) funcionan como espacios de fuerzas y están
estructurados de acuerdo a diversas variables. En el espacio social, los agentes se ubican de
acuerdo a las posiciones relativas que cada uno ocupa en los distintos campos, estableciéndose
algo así como un sistema de coordenadas guiado por la lógica de la distribución y la
diferenciación.

Vivimos dentro de una sociedad donde la violencia simbólica está interiorizada y


naturalizada, y hasta el punto de que creemos que las cosas “siempre fueron así”,
continuamente vemos en los medios de comunicación como esa violencia pasa de ser
percibida nos dejamos influenciar y dándole credibilidad e importancia, podríamos nombrar
vario medio de comunicación que visibilizan estereotipos de figuras femeninas las cuales
quieren imponer que de esa única manera la mujer se ve bien, llevando a otras que no entran
dentro del mismo a querer cambiarlo para poder “encajar” dentro de la sociedad.

También podríamos hablar de la violencia simbólica que ejerce el estado, la iglesia, y la


escuela donde continuamente se están generando este tipo de violencia, la relación del
individuo con la sociedad muchas veces trae aparejada este tipo de problemáticas.

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