Razon Filosofia Savater
Razon Filosofia Savater
Razon Filosofia Savater
EDUCACIÓN
Fernando Savater
1. 1. Razón e información
La suposición de que lo racional es estar bien informado es uno de los
problemas de nuestra época, en la que se considera que tener acceso a
mucha información va a desarrollar la razón. La información es útil
precisamente para quien tiene una razón desarrollada. No es lo mismo —y
Giovanni Sartori y otros doctores han insistido en ello—, información que
conocimiento. Yo creo que hay una distinción importante entre ambos
conceptos. El conocimiento es reflexión sobre la información, es capacidad
de discernimiento y de discriminación respecto a la información que se
tiene, es capacidad de jerarquizar, de ordenar, de maximizar, etc., la
información que se recibe. Y esa capacidad no se recibe como información.
Es decir, todo es información menos el conocimiento que nos permite
aprovechar la información.
2. 2. Razón y autonomía
Los que nos dedicamos a la enseñanza, educamos para que las personas a las
que educamos, nuestros alumnos, puedan prescindir de nosotros. El maestro,
o los padres cuando educan a sus hijos, los educan para que se vayan, los
educan para que prescindan de ellos. [Sin embargo,] todos dependemos de
otras razones y eso es lo que nos da a veces la sensación de estar
abrumados, de que todo conocimiento es ínfimo, es ininteresante, porque
hay tanto que saber… Por eso hay que intentar potenciar la capacidad
racional de asumir incluso las limitaciones de nuestro propio conocimiento.
Una de las características de la razón es asumir los límites del conocimiento
y no creer que, por mera acumulación, se puede extender hasta el infinito.
4. 4. Lo racional y lo razonable
La razón no se nota solamente cuando uno argumenta sino también cuando
uno comprende argumentos. Ser racional es poder ser persuadido por
argumentos, no sólo persuadir con argumentos.
Educar para que las personas sean vulnerables a los razonamientos también
forma parte de la educación racional, y esto entra en la distinción
fundamental entre lo racional y lo razonable. La razón cubre un campo que
abarca lo meramente racional, en el que nos las entendamos con las cosas lo
mejor posible, y lo razonable, en el que nos las entendemos con los sujetos.
Es razonable incluir la propia razón de otro sujeto en la mía propia, la
posibilidad de aceptar sus fines, de aceptar sus objetivos, su propia
búsqueda de la experiencia como parte de mi propia razón. El
funcionamiento racional y el funcionamiento razonable están ligados, y hay
que educar en ambos. Lo razonable será ese otro uso que yo consiga dar a
los conocimientos racionales que tengo.
5. 5. Filosofía y subjetividad
No toda la praxis es meramente instrumentalidad. La escuela de Frankfurt
y otros hablaron de la razón instrumental frente a la razón comprensiva de
la subjetividad y no solamente de manera objetiva. Y ahí entra el papel de la
filosofía.
6. 6. Filosofía y mundo
Una persona que se dedique a la filosofía tiene la obligación de poder
discutir inteligentemente un tema filosófico con cualquiera. Naturalmente,
si esa persona quiere profundizar o quiere enterarse, antes o después ha de
leer obras de filósofos, o de grandes pensadores, o quizás de grandes
literatos, que puedan ampliar esa preocupación, ese intento de mantener
abierta la pregunta. Pero no es verdad que un filósofo no pueda hablar de
nada con los demás salvo que los demás posean la misma jerga y conozcan lo
que significa analítica trascendental... Y no es verdad tampoco lo que los
profesores de filosofía en el bachillerato, con la mejor intención del mundo,
te dicen con entusiasmo: "Yo he logrado que los chicos comprendan el
sistema de Aristóteles, o de Hegel". Es verdad que a veces la comprensión
de las respuestas de los filósofos es importante, pero la filosofía no
consiste en comprender los sistemas de los filósofos, sino que los sistemas
de los filósofos sirven para comprender el mundo. Lo interesante es utilizar
los conocimientos, las ideas, los sistemas de los filósofos para comprender
el mundo, no convertir el conocimiento de los filósofos en la finalidad de la
filosofía.