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Libro de Calduch

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CURSO DE METODOS Y TECNICAS DE INVESTIGACION EN RELACIONES INTERNACIONALES

Dr. RAFAEL CALDUCH CERVERA


CATEDRTICO DE RELACIONES INTERNACIONALES UNIVERSIDAD COMPLUTENSE DE MADRID

INDICE 1.- Introduccin 2.- El incipiente debate metodolgico 3.- Estructura del proceso de investigacin 3.1.- Determinacin del tema de investigacin: las preguntas bsicas 3.2.- Determinacin del tipo de investigacin 3.3.- La informacin como materia prima de la investigacin 4.- El mtodo de investigacin cientfica 4.1.- Qu es el mtodo de investigacin ? 4.2.- La pluralidad de mtodos cientficos 4.3.- Reglas prcticas para la utilizacin del mtodo cientfico en la investigacin de las Relaciones Internacionales 5.- Las hiptesis, las estructuras de causalidad y los modos de razonamiento en la lgica formal 5.1.- Las hiptesis 5.2.- Las estructuras de causalidad 5.3.- Modos de razonamiento en la lgica formal 6.- Las teoras cientficas y los modelos tericos de las Relaciones Internacionales 6.1.- Las Teoras 6.2.- Los modelos tericos de las Relaciones Internacionales 7.- La observacin, la comparacin y la experimentacin en las Relaciones Internacionales 8.- La indeterminacin de los niveles de anlisis y sus consecuencias en el debate doctrinal de las Relaciones Internacionales 9.- La importancia metodolgica de la periodificacin en las Relaciones Internacionales 10.- Aplicacin de la Estadstica a la investigacin internacional 83 10.1.- Estadstica descriptiva y Estadstica inferencial 10.2.- Estadstica y medicin de variables 10.3.- La Estadstica de una sola variable (univariable) y el mtodo comparativo 10.4.- Estadsticas de dos variables (Bivariable) y de mltiples variables (Multivariable) 10.5.- Aplicacin de la Estadstica a las Relaciones Internacionales: Los indicadores y las series temporales 102 10.6.- El Indice de Desarrollo Humano (IDH) 10.7.- Las Series Temporales 10.8.- El confuso empleo de la cuantificacin como instrumento metodolgico en las Relaciones Internacionales 11.- Diagramas de flechas (Mapas causales) 12.- Mapa de conocimiento: Anlisis de los motivos y las intenciones 13.- Utilizacin de resultados tericos 14.- Evaluacin sistemtica de la literatura cientfica 15.- Juicio sistemtico de expertos 16.- El Anlisis Delphi 17.- La simulacin en las Relaciones Internacionales: posibilidades y limitaciones 3 5 8 10 14 17 23 23 24 30 31 31 33 48 53 53 55 61 66 72 83 85 89 97 108 109 120 124 126 129 132 134 140 144

1.- INTRODUCCION Han transcurrido ochenta aos desde que en 1919 se crearan los primeros estudios universitarios britnicos y norteamericanos dedicados a las Relaciones Internacionales. Desde entonces se ha desarrollado un intenso debate terico en torno al concepto, el objeto material y la perspectiva central desde la que se deba abordar el conocimiento de la realidad internacional por esta nueva disciplina. Un intenso debate, todava inconcluso, que ha concentrado la mayor parte de los trabajos realizados por los mejores especialistas, sin que todava se hayan alcanzado resultados concluyentes para la mayora de las principales interrogantes que impulsaron el nacimiento de esta ciencia. 1 En este apartado abordar cuatro ideas bsicas: 1).- Que el debate sobre los principales paradigmas ha ensombrecido, y en ocasiones ha sustituido, una valoracin profunda y continuada de los aspectos metodolgicos fundamentales que deban presidir el desarrollo de las Relaciones Internacionales. 2).- Como consecuencia de lo anterior, se han cometido serios errores metodolgicos que han impedido la acumulacin de una masa crtica de investigaciones y la verificacin de las diversas propuestas tericas, susceptibles ambas de sustentar el avance cualitativo necesario en los conocimientos y explicaciones cientficas de la realidad internacional. 3).- En los momentos actuales, existen oportunidades para el desarrollo y aplicacin de mtodos y tcnicas de investigacin en las Relaciones Internacionales que, si se aprovechan adecuadamente, nos permitirn realizar investigaciones mucho ms rigurosas y profundas que en el pasado y, de este modo, elaborar conceptos ms precisos, modelos ms operativos y explicaciones tericas ms slidas. 4).- Sin embargo, el aprovechamiento de las posibilidades que ofrecen estos mtodos y tcnicas, slo puede alcanzarse mediante un esfuerzo conjunto y coordinado de numerosos equipos de especialistas que previamente debern abandonar sus querellas doctrinales sobre qu conocimientos deben configurar las Relaciones Internacionales en aras de una mayor concentracin en los aspectos relativos a cmo adquirir los conocimientos cientficos necesarios para esta disciplina.

- En un artculo publicado hace cinco dcadas Harold Guetzkow llamaba ya la atencin de las deficiencias ms notables que aquejaban al esfuerzo terico que se estaba realizando en la naciente disciplina de las Relaciones Internacionales. GUETZKOW, H.- "Investigacin a largo plazo en las relaciones internacionales" - VASQUEZ, J.A. (comp.)- Classics of International Relations.- Edit. Prentice-Hall; 2 ed., 1990. (Traduccin de Isadora Somervile Alzate.- Relaciones Internacionales. El pensamiento de los clsicos.- Edit. Limusa, S.A. Mxico, 1994; pgs. 101-111.)

2.- EL INCIPIENTE DEBATE METODOLGICO Es caracterstico de los comienzos de una ciencia que los debates tericos se concentren en la determinacin de su objeto material, es decir de la parcela de la realidad a la que deben dedicarse las investigaciones, en las cuestiones relativas al objeto formal o perspectiva intelectual desde la que debe abordarse el conocimiento de dicha parcela de la realidad y, finalmente, a la determinacin de los conceptos y postulados bsicos para la formulacin de modelos interpretativos de naturaleza terica. La polarizacin de los debates doctrinales sobre estos tres aspectos resulta lgica pues detrs de cada uno de ellos se oculta un aspecto decisivo para la supervivencia de la nueva ciencia en la competicin que inicia con las ciencias ya establecidas 2 En efecto, tras la determinacin del objeto material se encuentra la cuestin del carcter cientfico de la actividad intelectual realizada por los pioneros de la nueva ciencia y, por tanto, la diferenciacin con otras dimensiones acientficas o metacientficas de la actividad intelectual humana, como son el arte o la religin. En definitiva, se trata del aspecto de la necesidad cientfica. Por su parte, el debate sobre el objeto formal permite encontrar los lmites que le separan de otras ciencias que investigan la misma parcela de la realidad y, de este modo, se alcanza la justificacin social necesaria para que la nueva disciplina se abra paso, por oposicin o diferenciacin con las ciencias ya existentes, logrando insertarse plenamente en las estructuras que la sociedad ha arbitrado para garantizar la evolucin de sus conocimientos y experiencias, es decir en la Universidad y en los Centros Superiores de Investigacin. Se trata, por tanto, de la decisiva cuestin de la singularidad cientfica. Finalmente, el debate doctrinal sobre los conceptos y postulados fundamentales de la disciplina, intenta dirimir dos importantes interrogantes: su capacidad explicativa, de la que depende en buena medida el propio desarrollo cientfico de la disciplina, y la eficacia prctica de sus resultados para resolver demandas esenciales de la sociedad, aspecto ste que tendr un significativa influencia para determinar su importancia social, y por tanto los recursos humanos y materiales que la sociedad estar dispuesta a movilizar en favor de esta ciencia y en detrimento de las disciplinas complementarias y/o competidoras, y su nivel de reconocimiento cientfico. En otras palabras, se trata del tema de la rentabilidad cientfica y social. En trminos generales, si la ciencia emergente logra en el transcurso de unas pocas dcadas resolver satisfactoriamente estas tres dimensiones centrales de su discurso, lograr entronizarse de un modo efectivo en el cerrado universo acadmico y cientfico, incluso aunque haya descuidado aspectos esenciales del mtodo que necesariamente afectarn al rigor y profundidad de sus investigaciones a la par que mermarn la validez de sus resultados y conclusiones. No cabe la menor duda de que esta ha sido la evolucin experimentada por las Relaciones Internacionales desde su aparicin. Desde el punto de vista de la intrahistoria terica, el
- En este sentido, la emergencia de una nueva ciencia supone siempre una revolucin cientfica, en el sentido empleado por Kuhn, y por tanto se encuentra sometida a las reglas generales sealadas por este autor para este tipo de fenmenos. KUHN,Th.- La estructura de las revoluciones cientficas.- Edit. Fondo de Cultura Econmica. Mxico, 1 ed.; 6 reimp.
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principal mrito de la poderosa irrupcin de esta nueva disciplina, pero tambin sus limitaciones ms importantes, le corresponde al realismo poltico clsico. 3 Adems, desde la perspectiva de la historia externa de la disciplina las condiciones polticas internacionales surgidas tras la Segunda Guerra Mundial, con su epicentro en la disuasin nuclear Este-Oeste, constituyeron el contexto idneo para su rpida difusin pues, no en vano, haba surgido una nueva realidad mundial, sin precedentes histricos de referencia, que reclamaba explicaciones tericas no slo sobre su naturaleza sino tambin sobre sus posibilidades de evolucin y, llegado el caso, de superacin. La Humanidad se jugaba su propia existencia en este reto. 4 Desde esta perspectiva se comprende, aunque no pueda disculparse, el tratamiento parcial que han recibido todos los temas referidos al mtodo cientfico aplicable las Relaciones Internacionales durante las pasadas dcadas. Tal vez sea cierto, como seala Vsquez, que nuestra disciplina " ha cobrado cabal conciencia de la falta de progreso en el acmulo de conocimientos. Dicho estado de conciencia ha dado origen a dos tipos de debates en este campo. El primero de ellos es de carcter epistemolgico y metodolgico. El campo ha intentado mejorar, peridicamente, sus conocimientos plantendose la interrogante si los mtodos que emplea para lograr el conocimiento presenta fallas, o si stos seran susceptibles de un cambio positivo mediante la adopcin de mtodos de otras disciplinas que, aparentemente estn realizando mayores progresos en la comprensin de su materia de estudio." 5 Pero esta recurrente tendencia a suscitar las cuestiones metodolgicas podra deberse tambin a la constatacin de que los avances cientficos y tecnolgicos no dejan inalterado el campo metodolgico, antes al contrario, suelen irrumpir en l obligando a una profunda revisin de los mtodos y, sobre todo, de las tcnicas para adaptarlos a las nuevas circunstancias. Sea como fuere, creo llegado el momento de proceder a una profunda consideracin de los logros y limitaciones que caracterizan la metodologa de las Relaciones Internacionales como disciplina para actualizar los primeros, enfrentando las oportunidades que nos brindan los ltimos avances en el terreno de la lgica, de la matemtica y de la informtica, tratando de

- Aunque el realismo poltico clsico tiene su principal desarrollo terico en las universidades norteamericanas, existen destacados autores europeos que se inscriben plenamente dentro de esta corriente, como Schwarzenberger o Aron, y como he tenido ocasin de demostrar, la concepcin realista domin el ncleo central de la obra terica y de la poltica prctica de los dirigentes soviticos desde Lenin hasta Breznev. SCHWARZENBERGER,G.- Power Politics. A Study of International Society.- Edit. Stevens. Londres, 1941; 3 ed. 1964. Traduccin de J. Campos y E. Gonzlez Pedrero.- La poltica del poder. Estudios de la sociedad internacional.- Edit. Fondo de Cultura Econmica. Mxico, 1960. ARON,R.- Paix et guerre entre les nations.- Edit. Calmann-Lvy. Pars, 1962. Traduccin de Luis Cuervo.- Paz y geurra entre las naciones.- Edit. Revista de Occidente. Madrid, 1963. dem..- Les dernires annes du sicle.- Edit. Julliard. Pars, 1984. Traduccin de Mauro Armio.- Los ltimos aos del siglo.- Edit. Espasa-Calpe. Madrid, 1984. CALDUCH,R.- "Las relaciones internacionales en la obra de los dirigentes soviticos: una reflexin terica".-Revista de Estudios Internacionales, vol.2, n.3 (julio-septiembre 1981); pgs. 543-597 4 - Sobre la decisiva influencia de la historia interna y la historia externa en la evolucin de las ciencias, vase: LAKATOS, I.- "La Historia de la ciencia y sus reconstrucciones racionales".- HACKING, I. (comp.).- Scientific Revolutions.- Edit. Oxford University Press. Oxford, 1981. Traduccin de JuanJos Utrilla.- Revoluciones cientficas.- Edit. Fondo de Cultura Econmica. Mxico, 1 ed. Castellana, 1985. Pgs. 235 - 242. 5 - VASQUEZ, J.A. (comp.) - op. cit.; pg.95.

minimizar las segundas y de este modo aliviar las hipotecas de un debate doctrinal que amenaza con esterilizarnos frente al desarrollo de las restantes ciencias sociales. 6 Varios son los errores y omisiones metodolgicas que debemos abordar. Sin embargo, resulta imprescindible sealar previamente que el debate metodolgico que propugno, sin poder abstraerse totalmente del debate doctrinal o entre los distintos paradigmas, s debe y puede diferenciarse claramente de l. No podemos repetir la experiencia suscitada por los conductistas y su empeo en cuantificar o matematizar las relaciones internacionales con la ingenua conviccin de que con ello se lograra trascender el imprescindible recurso a la Historia y el carcter normativo que haban impuesto a la disciplina los principales autores del primer debate doctrinal, 7 para llegar a alcanzar un rango equiparable al que haban logrado la Economa y ciertas parcelas de la Sociologa. Por el contrario, mi propuesta parte del supuesto de que los planteamientos metodolgicos que, implcita o explcitamente, formulan las distintas corrientes tericas de nuestra ciencia son susceptibles de articularse, siempre y cuando se diferencien del sustrato conceptual y de postulados caractersticos de la propuesta doctrinal que las introdujo en nuestra disciplina. Para que esta vertebracin metodolgica sea posible debern corregirse tambin algunas insuficiencias que todava subsisten. Sin embargo, las soluciones de algunos de los profundos problemas que provocaron la diversidad de planteamientos metodolgicos, comienzan actualmente a perfilarse ntidamente y con ellas adquiere mayor vigencia la formulacin de propuestas de cohesin metodolgica. Resulta revelador que hace ya ms de tres dcadas, en 1958, Fernand Braudel vislumbrara ya las oportunidades ofrecidas por los avances matemticos y tecnolgicos en el terreno de la metodologa de las ciencias sociales, propugnando la necesidad de una amplia conjuncin de stas con la Historia en los siguientes trminos: "Desde este momento, el paso de la observacin a la formulacin matemtica no se hace ya obligatoriamente por la intrincada va de las medidas y los largos clculos estadsticos. Se puede pasar directamente del anlisis social a una formulacin matemtica; casi diramos que a la mquina de calcular. (...) Un doble hecho est, sin embargo, establecido: en primer lugar, que semejantes mquinas, que semejantes posibilidades matemticas existen; en segundo lugar, que hay que preparar a lo social para las matemticas de lo social, que han dejado de ser nicamente nuestras viejas matemticas tradicionales. Curvas de precios, de salarios, de nacimientos...
- El reciente debate suscitado por la corriente postmodernista, so pretexto de liberarnos de las rigideces y esquematismos racionalistas impuestos por las principales teoras de las Relaciones Internacionales, amenaza con enterrarnos en la cinaga de la interpretacin arbitraria de los fenmenos internacionales y de la crtica instrascendente, es decir sin el menor rigor metodolgico, de las principales conclusiones cientficas alcanzadas por esta disciplina. TOMASSINI,L.- La poltica internacional en un mundo postmoderno.- Edit. Grupo Editor Latinoamericano. Buenos Aires, 1991. 7 - Sobre los diversos debates doctrinales o paradigmticos vase: ARENAL, C. del.- Introduccin a las Relaciones Internacionales.- Edit. Tecnos. 3 ed. Madrid, 1990. BARBE, E.- Relaciones Internacionales.- Edit. Tecnos. Madrid, 1995. GARCIA, P.- Las relaciones internacionales en el siglo XX: La contienda terica. Hacia una visin reflexiva y crtica.- Edit. Universidad Nacional de Educacin a Distancia, 1998. MEDINA, M.- La teora de las relaciones internacionales.- Edit. Seminarios y Ediciones, S.A. Madrid, 1973. MESA, R.- Teora y prctica de las Relaciones Internacionales.- Edit. Taurus Ediciones. 2 ed. Madrid, 1980.
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(...) En estos campos se abren con toda evidencia miles de posibilidades de investigacin. (...) En la prctica - porque este artculo tiene una finalidad prctica - deseara que las ciencias sociales dejaran, provisionalmente, de discutir tanto sobre sus fronteras recprocas, sobre lo que es o no es ciencia social, sobre lo que es o no es estructura...Que intenten ms bien trazar, a travs de nuestras investigaciones, las lneas - si lneas hubiere - que pudieran orientar una investigacin colectiva y tambin los temas que permitieran alcanzar una primera convergencia. Yo personalmente llamo a estas lneas matematizacin, reduccin al espacio, larga duracin. Pero me interesara conocer cuales propondran otros especialistas." 8 Sin lugar a dudas, Braudel estaba en lo cierto sobre la tendencia que seguiran los avances metodolgicos de las ciencias sociales en las dcadas posteriores. Por ello, conviene seguir la lnea trazada por este autor aplicndola al marco concreto de las Relaciones Internacionales, para ampliar su horizonte cientfico y aproximarlo al de las restantes ciencias sociales incluida, claro est, la propia Historia.

- BRAUDEL, F.- La Historia y las ciencias sociales.- Edit. Alianza. 1 ed.; 7 reimp. Madrid, 1986;

pgs.

3.- ESTRUCTURA DEL PROCESO DE INVESTIGACION El comienzo de toda tarea de investigacin en el mbito de las Relaciones Internacionales, como en el de cualquier otra ciencia, requiere un conocimiento previo del proceso general de la investigacin cientfica para disponer de una gua clara de las etapas que debemos recorrer y los requisitos que debemos cumplir en cada una de ellas antes de pasar a la fase siguiente. Mi experiencia durante veinticinco aos como profesor de la Universidad espaola y director de varias tesis doctorales, me ha demostrado que la mayora de los especialistas y de los jvenes investigadores en nuestra disciplina ignoran esta estructura general del proceso investigador o no son capaces de formularla de manera expresa. Existen numerosas formulaciones generales, ms o menos detalladas, sobre el proceso de la investigacin cientfica, pero casi todas ellas coinciden en las etapas bsicas y en los principales requerimientos de cada una de ellas. 9 Sin nimo de exhaustividad y con carcter orientativo, se puede establecer una estructura general de la investigacin cientfica, desarrollada en cinco etapas o niveles sucesivos: 1.- Determinacin del tema de investigacin 2.- Informacin 3.- Interpretacin de la informacin 4.- Explicacin 5.- Aplicacin El orden de estas fases no es arbitrario. Por el contrario es un orden perfectamente jerarquizado de acuerdo con el criterio de necesidad, es decir que el cumplimiento de todos los requerimientos de cada uno de los niveles previos es condicin necesaria para poder desarrollar la etapa siguiente. Ello impone al desarrollo de las diversas fases de la investigacin cientfica un carcter sucesivo, sin que ello signifique que en todas las diversas categoras o formas de investigacin, deban alcanzarse los cinco niveles sealados. Como veremos, el tipo de investigacin que realicemos, a tenor de las distintas modalidades que existen, nos determinar hasta qu nivel de la estructura general debemos llegar y, por tanto, las fases que deberemos desarrollar en su totalidad necesariamente.

- SIERRA, R.- Tesis doctorales y trabajos de investigacin cientfica.- Madrid,1993. Edit. Paraninfo; pgs. 31-35

ESTRUCTURA DEL PROCESO DE INVESTIGACION (ESQUEMA N 1)


1 FORMULACION DE HIPOTESIS INICIALES

DETERMINACION DEL TEMA

2 OBSERVACION DIRECTA

ACUMULACION

INFORMACION

CLASIFICACION

SELECCION

3 ELECCION DE METODOS

INTERPRETACION DE LA INFORMACION

ELECCION DE TECNICAS

4 FORMULACION DE HIPOTESIS DE DESARROLLO

EXPLICACION

FORMULACION O ELECCION DE TEORIAS

APLICACION

PRONOSTICO

VERIFICACION

3.1.- Determinacin del tema de investigacin: las preguntas bsicas. La determinacin del tema de investigacin constituye, sin duda, la parte ms importante de todo el proceso de investigacin ya que su correcta o errnea resolucin va a condicionar todo el trabajo realizado con posterioridad. Conviene, por tanto, conceder la mxima atencin y tiempo a esta fase del proceso investigador y, a menudo, puede resultar muy provechoso consultar a uno o varios expertos en la materia para conocer la oportunidad y viabilidad del tema elegido, as como la idoneidad del enfoque y/o del planteamiento inicial con el que se aborda la investigacin. Como criterios prcticos para resolver satisfactoriamente esta primera etapa de la investigacin deben formularse y responderse las siguientes cuestiones bsicas: a).- QUE ? se quiere conocer o investigar: Determinacin de la parcela de la realidad que debe ser objeto de la investigacin CRITERIOS PRACTICOS: 1.-INNOVACION: El tema elegido o el enfoque de la investigacin deber recaer sobre un aspecto de la realidad poco estudiado o en el que se hayan producido cambios significativos que permitan nuevas investigaciones. 2.-ACOTACION: El tema de anlisis deber ser perfectamente acotado en su temtica, en su enfoque, y en las dimensiones espacial y/o temporal. b).- POR QU ? se quiere conocer: Determinacin de las motivaciones y condicionamientos personales que nos impulsan a realizar la investigacin. Motivaciones personales que inducen la eleccin del tema: -Atraccin intelectual por el tema -Creatividad intelectual o cientfica -Afn de protagonismo profesional -Animo de lucro, etc. Condicionamientos personales que influyen en la investigacin del tema. -Grado de conocimiento general del tema -Prejuicios ideolgicos sobre el tema -Limitaciones sicolgicas (filias o fobias) CRITERIOS PRACTICOS: 1.-INTROYECCION-DISCUSION: Consiste en reflexionar sobre las motivaciones y condicionamientos personales. Una vez reconocidos debern escribirse en un papel y discutirlos con otras personas conocidas (familiares, amigos, director de la investigacin, etc.) para determinar su realidad y alcance. De este modo podremos detectar ms fcilmente su incidencia en el desarrollo de la tarea investigadora y,

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adems, podremos explicitarlos, si lo deseamos, para precisar al mximo la inevitable influencia de nuestra propia subjetividad sobre el contenido de la investigacin. 10 2.- REDACCION DE UN ESQUEMA DE CONOCIMIENTOS: Constituye una forma de autoevaluacin de los conomientos generales sobre el tema, incluida la bibliografa que ya se haya ledo, para saber si estamos en condiciones de poder investigarlo. Resulta muy til, aunque no necesario, discutir el esquema con un experto en el tema, para poder disponer de una evaluacin ms objetiva. Conviene no avanzar en el desarrollo de la investigacin hasta que esta fase no se ha superado satisfactoriamente. c).- PARA QUE ? se quiere conocer: Determinacin de las finalidades cientficas y prcticas de la investigacin. 1.- Finalidad cientfica: aportar nuevos conocimientos; difundir conocimientos ya existentes; incrementar los conocimientos propios; realizar pronsticos o previsiones de futuro; etc. 2.- Finalidad prctica: elaborar un Tesis; obtener una beca o subvencin; publicar un libro o artculo; asesorar a un cliente; etc. d).- COMO ? se quiere conocer: Determinacin del tipo de conocimiento, la perspectiva y las limitaciones que inciden en la investigacin del tema 1.- Conocimiento exhaustivo (sntesis) o intensivo (anlisis) del tema 2.- Especificacin de la perspectiva desde la que se aborda el tema: poltica; econmica; histrica; interdiciplinar; etc. 3.- Lmites materiales y cientficos del anlisis o investigacin: -Limitaciones materiales: medios humanos; econmicos materiales y temporales necesarios para llevar a cabo la investigacin. -Modelos tericos y tcnicas disponibles para realizar el trabajo de investigacin.

e).- CUANDO ? Delimitacin temporal del tema objeto de la investigacin. 1.- DESDE CUANDO se quiere conocer: determinacin del referente temporal inicial objeto del anlisis o investigacin. 2.- HASTA CUANDO se quiere conocer: determinacin del referente temporal final objeto del anlisis o investigacin.

- Vase un ejemplo en CALDUCH, R.- Relaciones Internacionales.- Madrid,1991. Edit. Ciencias Sociales; pgs. 13-15

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En ambos casos hay que tener presente que cuando los referentes temporales corresponden al pasado o al presente afectan a hechos ciertos, mientras que cuando se trata de referentes temporales de futuro afectan a sucesos inciertos que deben cumplir la condicin de posibilidad y de los que deberemos determinar su probabilidad. Como es evidente, el grado de informacin que podemos disponer y utilizar en los dos supuestos es cualitativamente distinto y, por tanto, el conocimiento y explicacin que podemos lograr es tambin diferente. Tales diferencias, sin embargo, no significan ventajas o inconvenientes insalvables para ninguna de las tcnicas que podemos emplear en funcin del referente temporal que definamos, nicamente supone la necesidad de tener clara esa distincin para poder recurrir a los mtodos o tcnicas ms adecuados en funcin del tipo de hechos o sucesos que debemos investigar. f).- CUANTO ? cuesta conocer: Determinacin del esfuerzo y costes de la investigacin Toda investigacin requiere un esfuerzo intelectual, de tiempo y, con frecuencia, de dinero. Por tanto, resulta imprescindible que antes de iniciarla se realice una evaluacin de los recursos humanos, temporales, materiales y financieros para conocer su viabilidad. Habitualmente, cuando la investigacin es unipersonal y slo nos afecta a nosostros mismos, solemos tener una idea mental aproximada del esfuerzo que nos puede requerir su realizacin y, generalmente, no realizamos el esfuerzo de evaluar los costes materiales, temporales y personales del proyecto que emprendemos aunque, ciertamente, si realizsemos un mnimo clculo sobre el papel, nos sorprenderamos de las diferencias que existen con la idea que tenamos. Dicha sorpresa se acrecentara si adems hiciramos el esfuerzo de calcular los costes alternativos, es decir de lo que podramos lograr si dedicramos ese mismo esfuerzo material, temporal y humano a lograr otros objetivos, por ej. buscar un puesto de trabajo o adquirir cierta prctica en nuestra profesin. Sin embargo la exigencia de una evaluacin estimativa de costes resulta imprescindible si la investigacin debe realizarse en equipo o bien si el proyecto de investigacin debe presentarse a organismos pblicos o empresas privadas para su financiacin. En el primero de ambos supuestos, la estimacin de costes debe realizarse ya que est en juego el esfuerzo y el tiempo, adems de las expectativas profesionales, de personas que generalmente son especialistas ya cualificados cuyas energas no se pueden derrochar por falta de previsin sin que nuestra credibilidad como investigadores se vea mermada. En el segundo de los casos, la evaluacin de costes junto con una adecuada determinacin del tema que se desea investigar, una correcta planificacin temporal y, en su caso, la cualificacin investigadora de los miembros del equipo, suelen ser los elementos fundamentales que utilizarn los evaluadores externos para decidir la viablidad de la investigacin y, por tanto, la oportunidad de su financiacin. Todo ello sin olvidar que la evaluacin de los costes econmicos del proyecto que realicemos, nos condicionar durante su ejecucin caso de que nos concedan la ayuda o la beca que solicitamos. A la hora de especificar los costes de la investigacin deben seguirse algunas reglas prcticas: a).- Debe realizarse una estimacin inicial, lo ms rigurosa posible, de los recursos que ya se poseen. Esto es especialmente importante para los recursos humanos (expertos en el tema conocidos y a los que podemos recurrir para realizar consultas; miembros de

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un equipo de investigacin ya constituido; etc.) y materiales; por ej. bibliografa y documentacin que ya hemos recopilado; hardware y software; instalaciones propias o de fcil acceso (lugar de trabajo; telfono; fax; bibliotecas; etc.). b).- Debe elaborarse una estimacin de recursos humanos, materiales, temporales y econmicos necesarios y suficientes para que el proyecto pueda realizarse sin dificultades. Esta estimacin debe realizarse huyendo de las valoraciones maximalistas, ya que casi nunca se satisfacen y suelen inducir a los evaluadores externos a considerar que el responsable del proyecto no posee un conocimiento suficiente de lo que pretende investigar, en el mejor de los casos, o lo que es peor a considerar que pretende engaarles, pero tambin debemos evitar la subestimacin de recursos porque ello puede hacer fracasar la ejecucin del proyecto de investigacin y con el fracaso vendr inevitablemente la frustracin y el posible cuestionamiento, propio y ajeno, de nuestra autoestima y profesionalidad. c).- La evaluacin de costes debe realizarse distinguiendo claramente, al menos, las siguientes cinco grandes rbricas o apartados: 1.- Recursos humanos (incluidos los becarios o el personal que deba contratarse especficamente para la investigacin) 2.- Material inventariable, en el que debern figurar los libros, suscripcin de revistas especializadas; hardware (ordenador; mdem; impresora; lectoresgrabadores; scnners;etc.); ficheros, estanteras; etc. En otras palabras, todo aquel material cuya vida til excede el perodo de la investigacin y que, por consiguiente, puede utilizarse en proyectos posteriores o distintos. 3.- Material fungible, que generlamente incluye el material de oficina, el software y material informtico utilizado especficamente para la investigacin (disquettes; cintas o cartuchos de impresora; etc.). En otras palabras, el material que se va a consumir en el desarrollo de la investigacin. 4.- Comunicaciones y transportes, que necesariamente deber contemplar los costes de los servicios de comunicacin empleados durante la investigacin (correo; telfono; conexiones a Internet, etc.), as como todos los gastos de los viajes y desplazamientos que se consideren imprescindibles para su adecuada ejecucin. En este ltimo supuesto, debemos valorar los gastos en billetes; alojamientos y manutencin segn el coste de la vida del lugar al que nos desplacemos y nunca segn el nivel de precios del lugar donde residimos. 5.- Otros gastos: que debera incluir aquellos costes difciles de prever o de evaluar de forma pormenorizada en alguno de los apartados anteriores, por ej. gastos de reparacin del material inventariable; prdidas temporales por demora en la recepcin de libros o documentos; enfermedad de alguno de los miembros del equipo de investigacin; etc. Cuando haya que realizar una valoracin econmica de este apartado, un criterio razonable es aplicar un porcentaje entre el 5 y el 10 % del valor econmico total de los cuatro apartados precedentes.

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d).- Por ltimo, si el proyecto debe realizarse durante varias anualidades, resulta imprescindible evaluar los recursos para cada uno de los aos que se contemplan para la ejecucin de la investigacin, adems de la evaluacin total para el conjunto del perodo estimado. De este modo obtendremos dos resultados importantes: podremos realizar un seguimiento anual de la utilizacin de lo recursos, detectando su correcta utilizacin o corrigiendo las desviaciones que se produzcan, y , en segundo trmino, justificaremos fcilmente el empleo anual de los recursos econmicos, caso de recibir financiacin externa, garantizando con ello la concesin de las cantidades correspondientes a la siguiente anualidad. RESULTADO PRACTICO DE ESTA FASE El correcto desarrollo de esta primera fase debe plasmarse en la elaboracin de un PLAN DE TRABAJO, en el que necesariamente debern figurar los siguientes apartados: 1.- Eleccin de un ttulo breve que exprese claramente los aspectos esenciales del tema. 2.- Redaccin de un breve resumen de la investigacin ( no ms de 1000 palabras) 3.- Formulacin, clara y resumida, de los principales objetivos cientficos del trabajo. 4.- Redaccin de un esquema que incluya los principales puntos que debern investigarse. 5.- Redaccin de un listado bibliogrfico y documental que rena todas aquellos libros, artculos y documentos que se hayan ledo o estudiado en su totalidad. 6.- Elaboracin de una planificacin temporal y econmica, con asignacin de funciones en el caso de proyectos en equipo, del desarrollo de la investigacin.

3.2.- Determinacin del tipo de investigacin Existen muchos tipos de investigacin y cada uno de ellos presenta sus ventajas y sus limitaciones, adems de requerir distintos procedimientos para su desarrollo y, naturalmente, un diverso grado de rigor y exigencia metodolgica. En general podemos reducirlos a cuatro categoras: a).- Cientfica b).- Acadmica c).- Divulgativa d).- Periodstica a).- La investigacin cientfica es aquella que se realiza para incorporar nuevos conocimientos ( investigacin bsica ), mtodos o tcnicas de investigacin ( investigacin aplicada ) a una determinada disciplina cientfica o bien para verificar (comprobar empricamente) la validez de los conocimientos, teoras o tcnicas ya existentes. Se trata, por tanto, del tipo de investigacin ms creativo o innovador, pero tambin ms exigente en cuanto a sus mtodos para alcanzar unos resultados que puedan considerarse vlidos, ya que su valoracin se realizar por los expertos en la materia tanto nacionales como extranjeros.

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Es un tipo de investigacin que exige un buen dominio de los principales modelos tericos y tcnicas ms comunes que se emplean en el campo cientfico en el que realizamos nuestra investigacin, as como un conocimiento actualizado de las lneas de investigacin en las que trabajan los investigadores de otros pases. La investigacin cientfica debe centrarse en los aspectos innovadores o empricos, obviando todos aquellos aspectos que, por resultar comunes en el campo especfico en el que se realiza la investigacin, son o deberan ser conocidos por los especialistas en la materia. Ello es especialmente significativo cuando se trata de investigaciones que incluyen referencias a sucesos histricos bien conocidos e investigados. En estos casos una referencia bibliogrfica, generalmente en nota a pie de pgina, de las obras ms destacadas que han tratado los conocimientos generales que debemos dar por supuestos resultar suficiente. Finalmente, conviene sealar que toda investigacin cientfica slo existe en la medida en que sea conocida por la comunidad de especialistas. En otras palabras, la presentacin de los resultados en congresos o seminarios cientficos o su publicacin en revistas especializadas es imprescindible para que la investigacin se pueda dar por concluida. b).- La investigacin acadmica, al igual que la anterior, va dirigida a especialistas de una disciplina y por tanto desde el punto de vista metodolgico y formal debe cumplir con los requisitos establecidos en el mbito acadmico, generalmente Institutos y Universidades, en el que se desarrollar y presentar. En este aspecto, resulta oportuno recordar que aunque existen ciertos stndares internacionalmente aceptados para determinar el rigor en el contenido y la presentacin de las investigaciones cientficas, ello no es as para las investigaciones acadmicas, para las que suelen existir importantes diferencias formales en los criterios de elaboracin y presentacin de sus resultados de unos pases a otros o, incluso, entre organismos acadmicos de un mismo pas. Por ej. las investigaciones de licenciatura o las Tesis Doctorales poseen procedimientos de realizacin y presentacin notablemente distintos en Estados Unidos; Francia o Espaa, pero incluso en Espaa los criterios de composicin de los tribunales, los requisitos administrativos necesarios para proceder a la defensa de la Tesis o las calificaciones concedidas han variado sustancialmente a lo largo de los tres ltimos lustros. La finalidad principal de la investigacin acadmica es la acreditacin de un conocimiento satisfactorio de los principales aspectos cientficos del tema investigado. Desde esta perspectiva, su contenido suele ser mucho ms descriptivo y sinttico que innovador. Ello no le resta mrito ya que, generalmente, este tipo de investigaciones suelen necesarias para lograr que el investigador alcance el grado de especializacin necesaria para abordar la investigacin al ms alto nivel. Se trata, por tanto, de un nivel de investigacin previo, y por tanto menos exigente en su contenido, que el de la investigacin cientfica. En la medida en que este tipo de investigacin suele ir asociado al proceso de formacin superior en un campo cientfico, la difusin de su contenido y de sus resultados suele quedar restringida al reducido mbito acadmico en el que se realiza y, en el mejor de los casos, a su presentacin en Seminarios o conferencias y su publicacin como artculos breves en revistas especializadas. A esta categora corresponden las tesinas de licenciatura, los trabajos de investigacin de Tercer Ciclo, que pueden presentarse bajo la direccin de un profesor para la obtencin de crditos en el Programa de Doctorado, o el trabajo de investigacin que se exige para la obtencin de ciertos ttulos propios, como ocurre en los Magister.

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c).- La investigacin divulgativa, a diferencia de las dos anteriores va orientada a un pblico que sin estar especializado en el campo cientfico concreto en el que se realiza la investigacin, posee un conocimiento bsico del mismo y, generalmente, goza de una formacin media o superior gracias a la cual est familiarizado con los procedimientos de investigacin acadmica. El objetivo prioritario de este tipo de investigacin es dar a conocer a ciertos grupos los principales avances cientficos en un campo concreto, con objeto de orientar las estrategias de decisin y conducta de los grupos sociales directamente vinculados con el desarrollo tecnolgico, econmico, poltico o cultural de dicho campo cientfico. El principal mrito de este tipo de investigacin radica en la adecuada combinacin del rigor en el contenido, que se obtiene recurriendo a las investigaciones cientficas y/o acadmicas, y de la sencillez en la presentacin, que le exime de llevar a cabo el desarrollo y explicacin de todo el proceso metodolgico que imponen dichos modelos. Por ello este tipo de investigacin informativa se limita a incorporar las explicaciones, conclusiones y, en su caso, las posibles consecuencias o aplicaciones prcticas que se derivan de las investigaciones cientficas y acadmicas. Con frecuencia, el empleo de grficos, mapas, estadsticas o esquemas se utiliza para facilitar la comprensin y hacer ms atractivos los contenidos de esta categora de investigaciones informativas. En el mbito de las Relaciones Internacionales podemos encontrar ejemplos de este tipo de investigaciones informativas en los artculos de revistas como Foreign Affairs, Poltica Exterior, Financial Times o Le Monde Diplomatique. d).- Finalmente, la investigacin periodstica est destinada a facilitar una informacin actualizada y fiable de las principales tendencias o resultados que se producen en los diversos campos cientficos. Su destinatario natural es el pblico en general y sus canales son los medios de comunicacin de masas en sus distintas versiones ( prensa diaria; semanarios; radio; televisin; cine ) y, recientemente, Internet. Al igual que en el caso de la investigacin divulgativa, la investigacin periodstica posee un objetivode difusin informativa, sin embargo el carcter heterogneo de sus destinatarios y el desigual grado de formacin que poseen en el terreno cientfico, obliga a extremar la simplificacin en la presentacin del tema. Ello unido a las limitaciones de espacio o tiempo que caracterizan a los medios de comunicacin de masas y, con demasiada frecuencia, a la falta de especializacin del periodista, suele redundar en perjuicio del rigor en el contenido de la investigacin. Todos estos condicionamientos, aunque frecuentes, no son consustanciales a este tipo de investigacin ya que una buena sntesis, como corolario de un largo proceso de estudio de las investigaciones cientficas y acadmicas y de anlisis crtico de sus contenidos, oportunamente contratastado mediante entrevistas con expertos en la materia, puede reflejarse de forma breve y con lenguaje sencillo en un medio de comunicacin, logrndose un efecto social directo que difcilmente podr alcanzarse por las prolijas y exhaustivas investigaciones cientficas o acadmicas. Adems, cuando este tipo de investigaciones periodsticas se realiza correctamente, contribuyen a mejorar el conocimiento de la sociedad sobre muchos de los problemas que le afectan cotidianamente y de este modo desempean una importante funcin socio - cultural. Para concluir esta breves consideraciones sobre los diversos tipos de investigaciones, resulta conveniente recordar que, aunque cada una de ellas posee sus fines y sus propios

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destinatarios, no son incompatibles entre s sino complementarias, de tal manera que es frecuente comprobar que algunos cientficos prestigiosos, adems de sus trabajos acadmicos o especializados, colaboran en la difusin de los conocimientos de sus respectivos campos a travs de las investigaciones informativas o periodsticas, al igual que estas ltimas terminan incidiendo en el desarrollo de la investigacin bsica o aplicada al condicionar las polticas de I+D que articulan los gobiernos, los grandes Institutos y Universidades privadas o las propias empresas multinacionales.

3.3.- La informacin como materia prima de la investigacin. 3.3.1.- La informacin: cunta y para qu? En la medida en que la informacin constituye la materia prima, la base sobre la que debe descansar todo el proceso de investigacin, resulta especialmente importante determinar qu tipo de informacin y de cuanta informacin debemos disponer para realizar correctamente nuestro trabajo, as como para qu nos sirve la informacin disponible. En la actualidad y gracias a los ordenadores y las redes informticas, la obtencin de la informacin necesaria y suficiente, que tradicionalmente ha constituido una de las mayores dificultades en el trabajo de los analistas e investigadores, resulta hoy en da una tarea relativamente sencilla y barata. La informatizacin de las bibliotecas junto con la creacin de bancos de datos y redes informticas internacionales, constituyen unos poderosos instrumentos de trabajo que el analista o investigador debe conocer y saber utilizar. Gracias a ellos, disponemos de una ingente cantidad de informacin y un acceso rpido a la mayor parte de las investigaciones y anlisis que sobre los temas internacionales se desarrollan en todo el mundo.El problema de la informacin se traslada as a otra importante cuestin de cuya adecuada o incorrecta solucin depende, en gran medida, el xito o fracaso final de la investigacin. Se trata de establecer unos criterios claros que nos permitan seleccionar de la abundante informacin disponible, aquella que resulta necesaria para nuestra labor. Entre los que pueden citarse figuran los siguientes:

1.- CRITERIO DE ADECUACION TEMATICA. La seleccin debe realizarse tomando como referencia el tema que debemos analizar o investigar. Toda aquella informacin disponible que se refiera directamente al tema que abordamos, debe ser seleccionada. Cuando se trata de informacin relacionada de modo indirecto o genrico con el tema slo deber seleccionarse una vez hayamos concluido la seleccin anterior y slo en la medida en que nos queden lagunas por conocer o interrogantes por despejar. 2.-CRITERIO DE LA EXIGENCIA METODOLOGICA O TECNICA.

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Cuando se conocen los mtodos y/o tcnicas que deben emplearse en el anlisis o investigacin, la naturaleza de aquellos impondr con frecuencia la necesidad de seleccionar aquel tipo de informacin que resulta ms idneo para su empleo. Por ej. el empleo de tcnicas estadsticas exige la seleccin y disponibilidad de informacin numrica; el anlisis de contenido impondr la seleccin y disponibilidad de informacin documental, escrita o verbal. 3.-CRITERIO DE SUFICIENCIA MINIMA. De acuerdo con este criterio, se realizar la seleccin slo de aquella informacin que resulte imprescindible para un conocimiento suficiente de la realidad objeto del anlisis o investigacin. A su vez esta informacin se recopilar en la cantidad mnima necesaria para que en ella podamos encontrar todos los elementos necesarios para un correcto conocimiento del tema. Ello significa evitar el acopio de informacin redundante o simplemente secundaria. La combinacin de ambos criterios significa que deber prevalecer siempre aquella informacin que resulta ms completa. Por ejemplo, es preferible el texto completo de un documento que su resumen. De este modo se garantiza mejor la disponibilidad de la informacin suficiente. No obstante, suele ser frecuente que al analista le surjan dudas, sobre todo al inicio de su trabajo, sobre la necesidad o utilidad de disponer en las fases posteriores de cierta informacin directamente relacionada con el tema y que, en principio, no le parece muy relevante. En tal caso debe evaluar la facilidad o dificultad de acceso a dicha informacin que tendr cuando avance en el proceso de anlisis o investigacin. Si la informacin resulta de acceso sencillo, deber descartarla hasta el momento en que apreciase su necesidad. En caso contrario, el criterio de suficiencia debe prevalecer siempre sobre el de minimizacin y por tanto deber seleccionarla, an cuando ello pueda aumentar el coste humano, material y temporal. 4.-CRITERIO DE FIABILIDAD DE LA FUENTE. Ante dos o ms informaciones disponibles y directamente relacionadas con el tema se elegir siempre aquella que proceda de la fuente ms fiable. La fiabilidad de la fuente no siempre resulta fcil de determinar a priori, aunque si se trata de una fuente que ya hemos empleado en otras ocasiones y se revel fiable nos facilitar su eleccin frente a otras fuentes cuya fiabilidad nos resulta desconocida. Junto a esta consideracin, se pueden sealar algunas otras normas prcticas: 1.- Generalmente las fuentes directas son ms fiables que las indirectas 2.- La informacin de fuentes de fiabilidad incierta debe contrastarse, como mnimo, con la informacin sobre el mismo fenmeno procedente de otra fuente, aunque sea indirecta. 3.- Cuando no podemos contrastar la informacin de una fuente de fiabilidad incierta deberemos, como mnimo, averiguar si ha sido utilizada por especialistas de reconocida solvencia profesional.

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5.-CRITERIO DE LA FACILIDAD DE ACCESO A LA INFORMACION. De acuerdo con este criterio, cuando dispongamos de la misma informacin con un distinto grado de facilidad en su localizacin y acopio, recurriremos a seleccionar aquella cuya obtencin nos resulta ms sencilla y rpida. Si se trata de dos o ms informaciones que slo parcialmente son distintas, se aplicar este criterio slo en la medida en que las diferencias afecten a aspectos secundarios del tema y no a los contenidos fundamentales del mismo. Este criterio resulta muy prctico ya que nos permite ahorrar costes humanos y materiales, as como reducir la duracin del trabajo requerido para realizar el anlisis o investigacin. Todos los criterios sealados, si se emplean de un modo razonable nos permitirn descartar una masa copiosa de informacin sin afectar sustancialmente al rigor, solidez y profesionalidad de las investigaciones que realicemos, al tiempo que nos facilitar enormemente nuestro trabajo. No obstante, conviene siempre recordar que la finalidad ltima de la informacin que logremos seleccionar y acopiar es alcanzar aquel grado de conocimiento de la realidad necesario y suficiente para llevar a cabo una adecuada explicacin de la misma. En ningn caso, las tareas de acopio, seleccin y clasificacin de la informacin pueden suponer un riesgo para el desarrollo de las fases posteriores del proceso cientfico. Este principio debe considerarse de modo categrico, lo que implica que debe prevalecer sobre cualquiera de los criterios prcticos de seleccin anteriormente enunciados. 3.3.2.- La clasificacin de la informacin. La clasificacin de la informacin tiene como funcin esencial facilitar el acceso a toda la informacin disponible de un modo lgico, rpido, seguro y eficiente, de tal modo que en cualquier fase del proceso de investigacin sea posible disponer de toda la informacin necesaria. Junto a los criterios tcnicos de clasificacin de la informacin que, en algunos casos, han adquirido rango universal (sistema de clasificacin de la UNESCO), como por ej. Ttulo; Autor; Materia; etc. y que son bien conocidos de todos los usuarios de biliotecas y de bases de datos bibliogrficos, en muchos casos puede resultar imprescindible para el investigador realizar una clasificacin ms personalizada de la informacin que ha logrado reunir y que se adapte mucho mejor a los requerimientos de su trabajo. Esta tarea de clasificacin puede realizarse de modo muy simple recurriendo a un programa informtico que disponga de un gestor de base de datos (GBD). Adems, el especialista deber clasificar su informacin con un reducido grupo de criterios que a su simplicidad aadan su eficacia. Para ello proponemos los siguientes:

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1.-CRITERIO DE LA NATURALEZA DE LA INFORMACION. Distinguir la informacin en funcin de su naturaleza, pudiendo sealarse como categoras las siguientes: 1.- ESCRITA: 1.1.- TEXTOS DOCUMENTALES 1.2.- LIBROS 1.2.1.- OBRAS GENERALES 1.2.2.- OBRAS ESPECIFICAS 1.3.- ARTICULOS DE REVISTAS 1.3.1.- GENERALES 1.3.2.- ESPECIFICOS 1.4.- CUESTIONARIOS/ENCUESTAS 1.5.- DOCUMENTACION ESCRITA DE SEMINARIOS O CONGRESOS Y NO PUBLICADA 1.6.- INFORMACION DE PRENSA 1.6.1.- NOTICIAS 1.6.2.- COMUNICADOS 1.6.3.- ARTICULOS. DE OPINION Y EDITORIALES 1.6.4.- ENTREVISTAS 1.7.- OTROS 2.- ORAL 2.1.- DECLARACIONES 2.1.1.- OFICIALES 2.1.2.- PRIVADAS 2.2.- ENTREVISTAS PERSONALES GRABADAS 2.3.- CONFERENCIAS 2.4.- INFORMACIONES DE RADIO 2.5.- OTROS 3.- VISUAL 3.1.- IMGENES 3.1.1.- FOTOGRAFICAS 3.1.2.- VIDEOGRAFICAS 3.1.3.- TELEVISAS 3.1.4.- INFORMATICAS 3.2.- GRAFICOS 3.3.- MAPAS 3.4.- OTROS 4.- DATOS 4.1.- CRONOLOGICOS 4.2.- GEOGRAFICOS 4.3.- ESTADISTICOS 4.4.- INFORMATICOS 4.5.- OTROS

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2.-CRITERIO DE LAS FUENTES Este criterio permite una clasificacin en funcin de las fuentes que generaron la informacin o facilitaron su distribucin. Entre las fuentes cabe realizar una sencilla y til distincin entre FUENTES DIRECTAS y FUENTES INDIRECTAS que a su vez podemos dividir en INTERPRETATIVAS o MEDIATICAS. Las primeras incluiran a las personas o instituciones que originan la informacin, las segundas a las personas o instituciones que se limitan a difundir la informacin o incorporan una interpretacin de la misma. 3.-CRITERIO CRONOLOGICO Este criterio clasificatorio resulta especialmente til por cuanto asocia el contenido de la informacion con la variable temporal que, como tendremos ocasin de exponer ms adelante, es una variable que desempea una funcin esencial en el anlisis internacional.

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4.- EL MTODO DE INVESTIGACION CIENTFICA 4.1.- Qu es el mtodo de investigacin ? Es el conjunto de tareas o procedimientos y de tcnicas que deben emplearse, de una manera coordinada, para poder desarrollar en su totalidad el proceso de investigacin. De esta definicin se desprende claramente que el mtodo de investigacin aunque incluye los mtodos cientficos, no queda reducido a ellos. Por el contrario, el mtodo de investigacin incluye tareas como la seleccin del tema o la difusin de los resultados que, en sentido estricto no constituyen parte de los mtodos cientficos. Adems, el mtodo de investigacin est directamente condicionado por el tipo de investigacin que se realiza, lo que supone que los mtodos cientficos slo resultan relevantes para las investigaciones cientficas y acadmicas, pero no as para las divulgativas y periodsticas. Bunge lo define como "un procedimiento para tratar un conjunto de problemas. Cada clase de problemas requiere un conjunto de mtodos o tcnicas especiales". Como vemos, este autor no diferencia claramente entre mtodos y tcnicas cientficas, ello le obliga a diferenciar entre el mtodo general de la ciencia: "un procedimiento que se aplica al ciclo entero de la investigacin en el marco de cada problema de conocimiento" y los mtodos o tcnicas especiales. 11 Esta confusin entre mtodos y tcnicas de investigacin suele provocar dos tipos de errores muy frecuentes: a).- Condicionar las investigaciones a las tcnicas ms avanzadas o sofisticadas, con independencia de su idoneidad para el modelo terico adoptado para la investigacin que se desea realizar. Ej. utilizar estadsticas econmicas para "medir" el desarrollo de los pases. b).- Dificultar el empleo de las tcnicas ms adecuadas a cada una de las fases del proceso general de la investigacin. Por ej. la utilizacin de las tcnicas de simulacin, con las estadsticas y ambas con la tcnica narrativa histrica. Puesto que el mtodo de investigacin es el que conjuga la totalidad de tareas que se llevan a cabo en el desarrollo de la investigacin, incluido el empleo de uno o varios mtodos cientficos, en las investigaciones cientficas y acadmicas, conviene especificar de forma expresa, aunque sucinta, los sucesivos pasos que se han dado en el proceso de investigacin as como los obstculos o dificultades que se han encontrado y la forma en que se han resuelto. El criterio prctico que debe emplearse en la elaboracin del apartado dedicado al mtodo de investigacin es el siguiente: incluir todas aquellas actividades del proceso investigador que permitan a cualquier otro especialista repetir ntegramente la investigacin realizada. Ello facilita la verificacin de los resultados alcanzados con la investigacin y, adems, impone una disciplina en la tarea del investigador que, al mismo tiempo que aumenta el rigor de su trabajo, reduce los riesgos de cometer errores y garantiza la fiabilidad de las conclusiones alcanzadas con la investigacin.

4.2.- La pluralidad de mtodos cientficos.


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- SIERRA, R.- op. cit. ,pgs. 46-47

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Como veamos, el mtodo de investigacin no debe confundirse con el mtodo cientfico, que consiste en el procedimiento empleado por la ciencia para alcanzar sus conocimientos sobre la realidad. En sentido estricto no existe el mtodo cientfico sino los mtodos cientficos, es decir una pluralidad de procedimientos de obtencin de sus conocimientos por las diversas ciencias. Si hubiese que hablar de un mtodo cientfico por excelencia este sera el de mtodo de prueba - error. Por lo general, aunque todas las ciencias utilizan una pluralidad de mtodos cientficos, el objeto material (parcela de la realidad que se trata de conocer) y el objeto formal (perspectiva desde la que se aborda su conocimiento) de cada disciplina cientfica suelen primar el empleo de alguno de ellos sobre los dems. Los principales mtodos cientficos empleados son los siguientes: A.- EL METODO DESCRIPTIVO. Consiste en realizar una exposicin narrativa, numrica y/o grfica, lo ms detallada y exhaustiva posible de la realidad que se investiga. El objetivo de este mtodo es disponer de un primer conocimiento de la realidad tal y como se desprende de la observacin directa que realiza el analista y/o del conocimiento que ha adquirido a travs de la lectura o estudio de las informaciones aportadas por otros autores. Por tanto se trata de un mtodo cuya finalidad es obtener y presentar, con el mximo rigor o exactitud posible, la informacin sobre una realidad de acuerdo con ciertos criterios previamente establecidos por cada ciencia (tiempo, espacio, caractersticas formales, caractersticas funcionales, efectos producidos, etc.). De acuerdo con esta finalidad, el mtodo descriptivo nos debe aportar informacin rigurosa e interpretada segn los criterios establecidos por cada disciplina cientfica. Ello significa que no basta con la informacin bruta y, ni tan siquiera, con la informacin ordenada. El rigor exigido por este mtodo presupone obtener toda la informacin necesaria sobre el fenmeno que se investiga, pero slo esa informacin. La sobreabundancia de informacin sobre un fenmeno no garantiza un mayor rigor, slo un mayor trabajo. Tampoco cabe interpretar la exigencia de rigor con la utilizacin exclusiva de informacin por observacin directa del fenmeno, pues la informacin indirecta, ya se obtenga de otros observadores o por la aplicacin de otros mtodos cientficos, resulta igualmente rigurosa. Junto al rigor, el mtodo descriptivo exige la interpretacin de la informacin de acuerdo con ciertos requisitos o exigencias propios del objeto material o formal de la disciplina cientfica en cuyo seno realizamos la investigacin. Esta interpretacin, aunque es subjetiva, no es en absoluto arbitraria, pues debe ser coherente con los hechos, tal y como se presentan en la realidad o en la informacin obtenida, y consistente con los requerimientos de la disciplina. Por ejemplo, la descripcin histrica debe ser interpretada tomando como referencia bsica, aunque no exclusiva, la cronologa, es decir la sucesin en el tiempo de los acontecimientos humanos, mientras que la descripcin geogrfica interpretar los fenmenos de la realidad desde la dimensin del espacio fsico y su ubicacin en l. Con respecto a la primera de ambas descripciones, la interpretacin histrica puede valorar de forma distinta dos sucesos relevantes como son la cada de Constantinopla (1453) y el descubrimiento de Amrica (1492)

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pero no puede ignorarlos o alterar su relacin en el tiempo. Otro tanto cabra sealar para la descripcin geogrfica. En ella la relacin en el tiempo de ambos sucesos puede resultar claramente secundaria respecto de su ubicacin, en continentes distintos separados a miles de kilmetros entre s, lo que produce caractersticas territoriales, climticas, etc. muy diferentes en ambos casos, y de su dimensin espacial que obliga a distinguir entre el espacio de una ciudad y el de un continente. B.-EL METODO ANALITICO. Parte del conocimiento general de una realidad para realizar la distincin, conocimiento y clasificacin de los distintos elementos esenciales que forman parte de ella y de las relaciones que mantienen entre s. Se basa en el supuesto de que el todo permite conocer y explicar las caractersticas de cada una de sus partes y de las relaciones que existen entre ellas. Ello presupone que en el proceso de descomposicin del todo en sus partes la prdida de informacin no es esencial, pero esta presuncin no es del todo correcta. Con frecuencia, existe una prdida de informacin esencial con respecto a los elementos dinmicos de la realidad, pues estos no siempre se pueden desagregar sin afectar a la forma en que se producen las variaciones a lo largo del tiempo (dinmica) y en todo caso, el modo en que se lleva a cabo la desagregacin est directamente condicionado por los criterios de periodificacin (medicindel tiempo) que hayamos adoptado.
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El empleo del mtodo analtico resulta imprescindible para poder aplicar, con posterioridad, el mtodo comparativo. Por otra parte, el empleo de este mtodo nos permite descubrir las principales relaciones de causalidad que existen entre los sucesos o variables de la realidad investigada. Se convierte as en un mtodo fundamental para toda investigacin cientfica o acadmica e imprescindible para poder realizar dos de las operaciones tericas ms elementales: la conceptualizacin y la clasificacin. C.-EL METODO COMPARATIVO. Es el mtodo mediante el cual se realiza una contrastacin entre los principales elementos (constantes, variables y relaciones) de la realidad que se investiga con los de otras realidades similares ya conocidas. Este mtodo obliga a descubrir tanto las semejanzas (bsqueda analgica) como las diferencias (bsqueda diferenciadora) y entre estas ltimas adquieren especial relavancia las oposiciones (bsqueda antagnica). El empleo del mtodo comparativo nos permite distinguir entre los sucesos o variables que se repiten en diversas realidades internacionales diferentes y, por tanto, que poseen un carcter de generalidad y aquellos otros que son exclusivos de cada una de ellas y slo podemos considerarlos desde su particularidad.

- En estadstica, este efecto del tiempo sobre una variable se intenta determinar mediante la desestacionalizacin en los anlisis de series temporales. BARBANCHO, A.- Estadstica elemental moderna.- Edit. Escuela Nacional de Administracin Pblica; Madrid, 1967; pgs. 255-312. PULIDO, A.; SANTOS, J.- Estadstica aplicada para ordenadores personales.- Edit. Ediciones Pirmide; Madrid, 1998; pgs. 175-197.

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A travs de la distincin entre los elementos comunes y los particulares podemos inferir aquellos fenmenos que constituyen las causas originarias de los que simplemente son causas intervinientes o simples elementos circunstanciales, caractersticos de una determinada realidad internacional pero irrelevantes para la formulacin de leyes cientficas con carcter de generalidad. En efecto, gracias al empleo de este mtodo podemos descubrir de un modo sencillo qu elementos de la realidad cumplen las condiciones de necesidad y suficiencia, pues deben pertenecer exclusivamente a la categora de los elementos comunes, restringindonos el campo de los fenmenos susceptibles de ser considerados como causas originarias y con ello las hiptesis bsicas que podemos formular como fundamento de la investigacin. Adems, la bsqueda antagnica nos facilita la comprensin de la dimensin antittica que existe en toda realidad social y, de ese modo, la aplicacin del mtodo o razonamiento dialctico. Finalmente, en la medida que el mtodo comparativo lo apliquemos a una misma realidad internacional en momentos temporales diferentes, nos permitir captar la dimensin dinmica en trminos histricos de esa realidad, al poder diferenciar los sucesos o variables estructurales, que tan slo cambian a largo plazo, de los meramente coyunturales.

D.-EL METODO SINTETICO. Es el mtodo opuesto al analtico. Se parte del conocimiento de los diversos elementos de una realidad y de las relaciones que los unen para tratar de alcanzar el conocimiento general y completo de dicha realidad. Descansa en la idea de que el todo puede ser comprendido y explicado mediante la conjuncin del conocimiento de sus partes. Ello nos facilita el conocimiento tanto de la estructura y dinmica internas de la realidad internacional como un todo, a travs de los sucesos o variables esenciales. Sin embargo el empleo de este mtodo resulta mucho ms difcil que el del mtodo analtico, pues exige el recurso previo al mtodo comparativo para poder desentraar las causas originarias y diferenciarlas de las causas intervinientes, de las simples circunstancias y de los propios efectos. Impone tambin el conocimiento y diferenciacin entre los elementos estructurales y los coyunturales, precisamente porque del empleo del mtodo sinttico debe derivarse una reconstruccin simplificada pero suficiente de la realidad que permita una comprensin y explicacin de esa realidad tanto desde una perspectiva esttica como dinmica y tanto a corto, como a medio y largo plazo. Por esta razn, el empleo de este mtodo resulta imprescindible para la formulacin de modelos tericos y su traduccin a programas de simulacin, ya sea real o por ordenador. E.-EL METODO INDUCTIVO O INFERENCIA INDUCTIVA. Consiste en observar, estudiar y conocer las caractersticas generales o regulares que se aprecian en una diversidad de hechos o realidades para formular, a partir de ellas, una

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proposicin o ley cientfica de carcter general. Ej. En las guerras del Peloponeso, en las guerras pnicas, en la Primera Guerra Mundial, en la Segunda Guerra Mundial, ...etc...se producen vctimas entre la poblacin civil luego en todas las guerras se producen vctimas entre la poblacin civil. En la induccin el razonamiento es, lgicamente, ascendente desde lo particular o singular a lo general. Se suele afirmar que la inferencia inductiva es una razonamiento orientado hacia el fin. Como podemos apreciar fcilmente, la induccin no es mas que una consecuencia lgica y metodolgica de la utilizacin del mtodo comparativo. Ms exactamente, es el procedimiento mediante el cual se diferencian las causas originarias de las restantes causas intervinientes, a partir de la comparacin entre una amplia diversidad de realidades, para poder inferir la formulacin de una ley o proposicin cientfica. Se trata de discernir, por comparacin analgica, una regularidad o repeticin en las relaciones de causalidad existentes en numerosos fenmenos similares aunque distintos entre s, estableciendo luego por cualquiera de los procedimientos de inferencia existentes, principalmente la inferencia matemtica de la que forma parte la inferencia estadstica, la formulacin de la proposicin general o ley cientfica. Aunque suele considerarse el mtodo cientfico por excelencia, debido a su indudable naturaleza emprica, no han faltado autores que critiquen su cientifismo como una simple apariencia. As Popper ha escrito lo siguiente: "Es corriente llamar inductiva a una inferencia cuando pasa de enunciados singulares (llamados, a veces, particulares), tales como descripciones de los resultados de observaciones o experimentos, a enunciados universales, tales como hiptesis o teoras. Ahora bien, desde un punto de vista lgico, dista mucho de ser obvio que estemos justificados al inferir enunciados universales partiendo de enunciados singulares, por elevado que sea su nmero; pues cualquier conclusin que saquemos de este modo corre siempre el riesgo de resultar un da falsa: as, cualquiera que sea el nmero de ejemplares de cisnes blancos que hayamos observado, no est justificada la conclusin de que todos los cisnes sean blancos". 13 F.-EL METODO DEDUCTIVO O INFERENCIA DEDUCTIVA. Consiste en la determinacin de las caractersticas o enunciados de la realidad particular que se investiga por derivacion o consecuencia de las caractersticas o enunciados contenidos en proposiciones o leyes cientficas de carcter general formuladas previamente. La deduccin trata de derivar las consecuencias particulares o singulares de las premisas o conclusiones generales establecidas y aceptadas. Ej. Todas las guerras provocan vctimas entre la poblacin civil luego la guerra de Kossovo provocar vctimas entre la poblacin civil. Autores como Hacking, tambin cuestionan el carcter cientfico del mtodo deductivo alegando que, en definitiva, no "descubre" nada de la realidad particular que no estuviese ya contenido en la formulacin general. En realidad el mtodo deductivo slo es aplicable una vez se comprueba que el fenmeno o suceso particular que estamos investigando pertenece a la categora de fenmenos o sucesos contemplados por la la ley cientfica general. Semejante comprobacin exige el empleo previo de los mtodos descriptivo, analtico y comparativo, porque slo gracias a ellos podemos establecer la analoga o correspondencia lgica y fenomenolgica entre ley y suceso, sin que por ello podamos llegar a tener una certeza

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- Citado por ALCINA.- op. cit.; pgs. 66-67

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definitiva a cerca de la validez que la ley cientfica tendr respecto del prximo suceso particular. Ninguno de ambos mtodos (inductivo o deductivo) nos puede dar una certeza absoluta y universal sobre la validez de las formulaciones tericas que alcanzamos mediante su empleo. Como seala Morin: "La mayor aportacin del conocimiento del siglo XX ha sido el conocimiento de los lmites del conocimiento. La mayor certidumbre que nos ha dado es la de la imposibilidad de eliminar ciertas incertidumbres, no slo en la accin sino tambin en el conocimiento". 14 Sin embargo, tampoco las certezas absolutas y/o universales son necesarias para considerar una investigacin verdaderamente cientfica, pues basta con que nos aporten certezas relativas (probabilidades) pero suficientemente generalizadas sobre la validez de las conclusiones o formulaciones tericas que nos permiten alcanzar. No obstante, conviene sealar que la aplicacin del mtodo deductivo sirve tambin para reforzar las formulaciones cientficas alcanzadas mediante el empleo del mtodo inductivo, pues tras cada caso particular que ajusta su estructura de causalidad a lo previsto por la ley cientfica existe una nueva demostracin del carcter de generalidad de la proposicin terica alcanzada por induccin. Ello nos remite al importante tema de la relacin entre ambos mtodos, inductivo y deductivo, en el desarrollo de una investigacin cientfica. En efecto, el empleo del mtodo inductivo nos permite generalizar a partir de casos particulares y de este modo avanzamos en nuestro conocimiento de la realidad ya que futuros fenmenos, similares a los recogidos en la formulacin cientfica general que hemos inducido, podrn ser comprendidos, explicados y pronosticados sin necesidad de esperar a que acaezcan y sean investigados analtica o comparativamente. Al actuar as hacemos posible el desarrollo de modelos tericos cuya validez depender de que el nmero de casos particulares que hayamos empleado para la induccin y la identidad estructural y dinmica que exista entre ellos sea lo suficientemente precisa y completa para que las formulaciones generales establecidas posean un elevado grado de probabilidad. 15 Cuando aparezcan casos que perteneciendo aparentemente a la categora de los considerados por las leyes cientficas inducidas no respondan a lo previsto en ellas, inicialmente sern considerados como excepciones o anomalas cientficas en la terminologa de Kuhn, que slo requieren hiptesis auxiliares para su explicacin. Si el nmero o la importancia de los casos excepcionales cuestiona la validez de la teora se realizar un cambio de teora o de paradigma, sin que por ello se cuestione la validez del mtodo. Para mucho autores la utilizacin conjunta de los mtodos inductivo o deductivo resulta idnea para desarrollar plenamente la tarea investigadora en nuestra disciplina. Como seala Sahagn:

- MORIN, E.- La tte bien faite. Repenser la rforme. Rformer la pense.- Edit. Editions du Seuil. Pars, 1999. (traduccin de M Jos Bux-Dulce Montesinos.- La mente bien ordenada.- Edit. Seix Barral. Barcelona, 2000; pgs. 71-72. 15 - KING,G.; KEOHANE, R.O.; VERBA, S.- Designing Social Inquiry. Scientific Inferencia in Qualitative Research.- Edit. Princenton Unversity Press. Princenton, 1994.(traduccin de Jess Cullar Menezo.- El diseo de la investigacin social. La inferencia cientfica en los estudios cualitativos.- Edit. Alianza. Madrid, 2000; pgs. 55-87.

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"Hay dos formas de investigar: la deductiva, pasando del concepto general a los subconceptos y de estos a los indicadores; y la inductiva, que nos llevara de los indicadores a los conceptos generales. El cruzamiento de ambos mtodos, siempre que haya tiempo, es la opcin ideal." 16 En realidad el mtodo inductivo slo tiene valor en la medida en que las leyes cientficas generales que permite formular puedan ser empleadas deductivamente en todos aquellos casos que no fueron investigados para realizar la induccin. En otras palabras, la induccin nos permite teorizar a partir de casos particulares y la teora nos permite la aplicacin deductiva a nuevos casos particulares, facilitndonos la investigacin y la transmisin de conocimientos. Por esta razn, si es cierto que hablando en abstracto podemos afirmar que una investigacin cientfica o acadmica aislada, puede realizarse slo con el empleo del mtodo inductivo o del mtodo deductivo, lo cierto es que en concreto rara vez, y sobre todo en nuestra disciplina, se emplea uno slo de ambos mtodos. En cualquiera de los casos, es imposible el desarrollo de cualquier ciencia, tanto desde la perspectiva de la investigacin como de la transmisin de sus conocimientos, sin el empleo conjunto y complementario de ambos mtodos. G.-EL METODO DIALECTICO O INFERENCIA CONTRADICTORIO-SINTETIZADORA. El mtodo o razonamiento dialctico no debe confundirse con el materialismo dialctico marxista. Consiste en descubrir las contradicciones o antagonismos que existen entre los diversos elementos que forman parte de la realidad investigada para conocer las proposiciones o leyes que explican la dinmica de esa realidad y poder deducir las posibilidades y formas en que producir el cambio a otra realidad superadora. 17 El mtodo dialctico, al igual que los dos anteriores, presupone que en la realidad existen una serie de condiciones que, cientficamente, nunca se han llegado a demostrar, lo que significa que son metacientficas. Bsicamente podemos reducirlas a las siguientes: 1.-La realidad adems de dinmica es tambin evolutiva. 2.-Las contradicciones son el motor del cambio de la realidad. 3.-La sntesis entre las contradicciones no slo es posible sino inevitable. 4.- La propia relacin entre la realidad y el conocimiento terico de la misma est sometida a dialctica.

- SAHAGUN, F..- op. cit.; pgs.124 - Morin seala como uno de los siete principios-gua del pensamiento el dialgico, al que describe del siguiente modo: "Une dos principios o nociones que deben excluirse mutuamente, pero que son indisociables en una misma realidad. (...) La dialgica permite asumir racionalmente la inseparabilidad de unas nociones contradictorias para concebir un mismo fenmeno complejo." Aunque el mtodo dialctico que sealamos incluye el principio dialgico de Morin, su mbito de aplicacin es ms amplio, pues incluye la propia dialctica imperante entre el pensamiento y la realidad y no slo la que se encuentra inserta en esta ltima. MORIN, E.- La mente... op. cit.; pg. 126.
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En sentido estricto, el mtodo dialctico es ms una forma singular de razonamiento que un mtodo cientfico propiamente dicho. En otras palabras, es mucho ms que un mtodo cientfico, es mas bien una actitud mental del investigador. 4.3.- Reglas prcticas para la utilizacin del mtodo cientfico en la investigacin de las Relaciones Internacionales Habida cuenta de que la ciencia de las RR.II. posee un carcter multidisciplinar muy destacado y que, en consecuencia, el investigador internacionalista debe poseer conocimientos de varias ciencias auxiliares, entre las que destacan: la Historia; el Derecho Internacional Pblico; la Ciencia Poltica; la Sociologa; la Economa, especialmente la Macroeconoma; la Geografa; las ciencias militares o estratgicas y la Geografa, necesariamente tiene que estar dispuesto a utilizar varios mtodos y distintas tcnicas, en funcin del objeto material de su investigacin y las ciencias auxiliares que deba emplear.De todos modos, pueden sealarse varios criterios prcticos generales: 1.-Debern describirse explcitamente los mtodos y tcnicas empleados en la investigacin, as como los pasos concretos que se han seguido en su empleo, de modo que cualquier otro investigador pueda llevar a cabo una repeticin de la investigacin para verificar el rigor y solidez de su desarrollo y de sus conclusiones. 2.-Cuando exista una colisin entre las exigencias de un mtodo y las de una tcnica, deber primar el mtodo empleado y, por tanto, cambiarse la tcnica a utilizar. Nunca un mtodo puede quedar condicionado por una tcnica de investigacin. 3.-Cuando exista un conflicto entre dos mtodos susceptibles de ser empleados en la investigacin deber primar el que mejor se adapte al tema elegido, el que aporte una explicacin mayor o ms rigurosa y si ambos son igualmente explicativos, el que resulte ms adecuado a la informacin o tcnicas disponibles y, en ltimo extremo, nos permita una mayor capacidad predictiva. 4.-Siempre habr de especificarse de modo expreso el criterio de periodificacin elegido, el marco conceptual en el que realizamos nuestra investigacin (macro o microinternacionalidad) y el mbito espacial que tomamos como referencia (estatal; regional; interregional; mundial). 5.-La especificacin de las hiptesis deber realizarse de forma separada de la descripcin del mtodo y tcnicas empleados. 6.-Siempre debern figurar explcitamente las fuentes informativas empleadas para el desarrollo de la investigacin.

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5.- LAS HIPTESIS, LAS ESTRUCTURAS DE CAUSALIDAD Y LOS MODOS DE RAZONAMIENTO EN LA LOGICA FORMAL 5.1.- Las hiptesis Toda investigacin o estudio analtico trata de abordar el conocimiento y solucin de ciertos aspectos de la realidad que se formulan como problemas a resolver o interrogantes a despejar. Desde esta perspectiva, las hiptesis son soluciones o respuestas que se intuyen, presumen o conjeturan como las ms adecuadas para abordar la resolucin de los problemas o interrogantes formuladas. En otras palabras, las hipotesis son suposiciones de respuestas o soluciones a los problemas que suscita la realidad susceptibles de verificarse, confirmndose o refutndose, a travs de la investigacin cientfica. Como lo ha sealado Pardinas: " Hiptesis es una proposicin enunciada para responder tentativamente a un problema." 18 La formulacin de hiptesis resulta imprescindible en toda investigacin cientfica y/o acadmica. En realidad, todo investigador cuando inicia su tarea en un campo especfico posee alguna(s) hiptesis sobre la realidad que intenta conocer y explicar, ya que con frecuencia posee ya alguna(s) idea(s) sobre como se desarrollan los fenmenos en ella y cuales son algunas de sus posibles causas. Estas suposiciones iniciales son, con frecuencia, esbozos de hiptesis que el investigador debe precisar de forma explcita concretando las relaciones de causalidad que, a su juicio, resultan relevantes para comprender la realidad que va a investigar. Duverger subraya esta dimensin intuitiva del investigador, que le permite esbozar las hiptesis iniciales, en los siguientes trminos: " No existen reglas precisas para la elaboracin de una hiptesis de trabajo. De nuevo nos encontramos en el terreno de la creacin, de la invencin, de la intuicin, que se sita ms all de toda metodolga rigurosa." 19 El desarrollo de la investigacin permitir la verificacin de las hiptesis permitiendo extraer unas conclusiones cientficas. Llegados a este punto, resulta imprescindible apuntar algunas reflexiones sobre el significado de la expresin "verificacin de las hiptesis" ya que es muy frecuente comprobar cmo los investigadores, especialmente en el mbito de las ciencias sociales, se empean en destacar las investigaciones que confirman las hiptesis, al tiempo que desprecian u ocultan las investigaciones que refutan las hiptesis. Semejante forma de proceder traduce una gran ignorancia sobre el modo en que opera la ciencia para mejorar el conocimiento humano. En trminos generales, la ciencia descansa en el procedimiento de prueba-error como base del conocimiento racional del hombre. Los diversos mtodos cientficos antes mencionados, no son en realidad mas que diversas formas de aplicacin del procedimiento de prueba-error para optimizar los resultados y minimizar el esfuerzo humano de conocimiento y racionalizacin. Desde esta perspectiva, toda investigacin cientfica o acadmica bien realizada contribuye al avance cientfico ya que confirma o refuta ciertas hiptesis sobre el funcionamiento de la realidad. En el primero de ambos supuestos, el de la confirmacin de las hiptesis, el resultado
- PARDINAS, F.- Metodologa y tcnicas de investigacin en ciencias sociales. Introduccin elemental.- Madrid, 11ed., 1973. Edit. Siglo XXI; pg. 132 19 .- DUVERGER, M.- op. cit., pg. 385
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de la investigacin, sus conclusiones, resulta directamente aplicable al conocimiento de esa realidad aportando explicaciones sobre ella y permitiendo previsiones sobre su comportamiento. Ello abre el camino para nuevas investigaciones posteriores. En el segundo caso, es decir cuando se refutan ciertas hiptesis, el resultado de la investigacin, sus conclusiones, tambin resulta directamente aplicable al conocimiento de la realidad slo que lo hace descartando explicaciones sobre ella y, por tanto, no permite sustentar previsiones sobre su funcionamiento. No obstante, en este caso tambin se abre el camino para investigaciones posteriores obligando a descartar las hiptesis refutadas y, en consecuencia, a formular nuevas hiptesis. En ambos casos se facilita la acumulacin de conocimientos cientficos y con ello el progreso de la Ciencia. En trminos generales podemos clasificar las hiptesis siguiendo dos criterios: por su importancia y por el momento de su formulacin. De acuerdo con su importancia podemos diferenciar entre hiptesis bsicas o fundamentales e hiptesis auxiliares o complementarias. Las primeras son aquellas que se refieren al ncleo central de relaciones causales explicativas del funcionamiento de la realidad que se investiga, en otras palabras, son hiptesis formuladas respecto de las que se consideran causas originarias del fenmeno investigado. Por ejemplo, en una investigacin sobre la poltica exterior de un pas realizada siguiendo el modelo realista, las hiptesis sobre las relaciones de poder polticomilitar seran hiptesis bsicas. Las hiptesis auxiliares son, en realidad, hiptesis parciales o subhiptesis de las anteriores y se refieren a las causas intervinientes o, simplemente, a factores de circunstancialidad que concurren en la realidad investigada. En el ejemplo anterior seran hiptesis auxiliares las referidas al procedimiento de adopcin de las decisiones polticas en el pas investigado. Dada la relacin jerrquica que existe entre estas dos tipos de hiptesis, una investigacin se considera cientfica cuando se pueden verificar al menos sus hiptesis bsicas, aunque no lo sean algunas de sus hiptesis auxiliares. Por el contrario, si slo es posible verificar las hiptesis auxiliares pero no las bsicas, esa investigacin no responde a los criterios del mtodo cientfico. Las hiptesis tambin pueden distinguirse atendiendo al momento de su formulacin dentro del proceso de investigacin. De acuerdo con este criterio, podemos distinguir entre hiptesis iniciales e hiptesis de desarrollo. Las primeras se formulan con anterioridad al inicio de la investigacin o durante las dos primeras fases (determinacin del tema e informacin) y condicionan el resto de la investigacin pues de ella depende, en buena medida, la seleccin de informacin, la eleccin de mtodos, tcnicas o, incluso, modelos tericos. Por ejemplo, si la hiptesis inicial de una investigacin sobre el proceso de integracin poltica entre dos pases supone que "los flujos de comunicacin entre ellos tendern a intensificarse", siguiendo la concepcin de Deutsch, lgicamente centraremos nuestra investigacin en el estudio de las diversas formas de relacin comunicativa antes que en los aspectos jurdicos, econmicos o histricos. Las hiptesis de desarrollo se formulan durante las fases de interpretacin de la informacin o de explicacin y afectan a interrogantes concretas o a fenmenos particulares de la realidad, de los que se tienen conocimiento a medida que se avanza en la investigacin. Sin embargo, el hecho de que estas hiptesis deban formularse durante la investigacin no debe hacernos creer que su importancia es menor que la de las hiptesis iniciales. Por el contrario, es muy frecuente que la verificacin de las hiptesis iniciales dependa de una correcta seleccin y

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formulacin de las hiptesis de desarrollo y que algunas de estas hiptesis obliguen a precisar la formulacin de las hiptesis iniciales. Finalmente, hay que sealar que la formulacin de las hiptesis debe respetar las relaciones de causalidad y las reglas del razonamiento lgico, cualquiera que sea la lgica que adoptemos durante la investigacin. En todo caso, su redaccin nos permitir comprobar el rigor metodolgico y el grado de coherencia de nuestra investigacin durante las distintas fases.

5.2.- Las estructuras de causalidad Pero por importantes que sean los conceptos, los postulados, los axiomas y los teoremas a la hora de formular una teora cientfica, por s solos no bastan para lograr una explicacin satisfactoria de la realidad. Hace falta establecer las relaciones que vinculan entre s, de un modo general y estable, ciertos sucesos (constantes o variables) de la realidad, es decir por encima de las circunstancias particulares de cada caso concreto. A estas relaciones las denominamos relaciones de causalidad que, obviamente, son distintas de las relaciones de casualidad o coincidencia precisamente en virtud del carcter particular y ocasional de stas ltimas. En otras palabras, las relaciones de causalidad slo se producen entre los elementos sistemticos, es decir aquellos que se repiten, de distintos sucesos o fenmenos, mientras que las relaciones casuales se producen entre los elementos no sistemticos de dichos fenmenos. Dinstinguir unas de otras es, en buena medida, la razn del rigor metodolgico que se exige en la ciencia frente a otras formas de conocimiento. 20 Por estructuras de causalidad entendemos las diversas formas en que pueden articularse las relaciones de causalidad. Existen varios modelos para representar las estructuras de causalidad: 21

- KING,G.; KEOHANE, R.O.; VERBA, S.- El diseo de la investigacin... op. cit.; pgs. 88-124 - En la obra de King; Keohane y Verba se habla de mecanismos causales distinguiendo entre la causalidad mltiple, la simtrica y la asimtrica. KING,G.; KEOHANE, R.O.; VERBA, S.- El diseo de la investigacin... op. cit.; pgs. 98-102.
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1.- CAUSALIDAD UNICA Y DIRECTA Un mismo y nico suceso o variable, denominado causa originaria, provoca directamente uno o varios sucesos denominados efectos. (ESQUEMA N 2-1)

CAUSA

EFECTO EFECTO 1

CAUSA EFECTO 2

La causalidad nica y directa constituye la forma ms sencilla de relacin causal y, por tanto, es tambin la que ha logrado un tratamiento ms exhaustivo en el mbito de la lgica formal y matemtica. Como tendremos ocasin de comprobar, las aportaciones de la estadstica descriptiva bivariable resultan esenciales para la descripcin, comparacin y verificacin de todos aquellos sucesos internacionales que podamos cuantificar en su evolucin ya sea mediante la observacin directa o por medio de indicadores. Con frecuencia, la utilizacin del mtodo descriptivo nos permite determinar de una forma precisa este tipo de relaciones causales. Sin embargo, obsrvese que el modelo B al mostrar dos efectos diferentes como resultados de una misma causa puede inducir a explicaciones insuficientes en la medida en que el investigador slo haya demostrado la relacin entre la causa y uno de los efectos pero no con el/los otro(s). Ejemplos de este tipo de causalidad seran los siguientes: - modelo A Las variaciones del comercio de mercancas entre dos pases (causa) origina la variacin de las transacciones financieras entre ellos (efecto). - modelo B El desencadenamiento de un conflicto blico entre dos pases (causa) provoca el desplazamiento de la poblacin civil (efecto 1) y vctimas entre las fuerzas beligerantes (efecto2) y la destruccin de recursos productivos (efecto3).

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2.- MULTICAUSALIDAD DIRECTA Se produce cuando varias causas concurren originariamente en la produccin directa de uno o varios efectos. (ESQUEMA N2-2)

CAUSA 1 CAUSA 2 CAUSA 3

EFECTO 3 EFECTO 1 EFECTO 2

Este tipo de relacin de causalidad resulta ms complejo que el anterior ya que obliga a determinar para cada una de las causas concurrentes en el desencadenamiento de un efecto el cumplimiento de las condiciones de necesidad y suficiencia. La condicin de necesidad significa que si la causa X no se da, tampoco se producir el efecto Y aunque concurran el resto de causas. La condicin de suficiencia significa que si se produce la causa X el efecto Y se producir tambin aunque no concurran otras causas, sin embargo la ocurrencia de la causa X puede producirse o no. A este respecto en la obra de Selltiz; Jahoda; Deutsch y Cook se afirma: "En la ciencia moderna, el nfasis se carga ms bien sobre una multiplicidad de 'condiciones determinantes', las cuales, en conjunto, hacen probable la ocurrencia de un determinado acontecimiento. Tanto el sentido comn como el pensamiento cientfico se ocupan del descubrimiento de las condiciones necesarias y suficientes. (...) Una condicin necesaria, como el trmino implica, es la que debe ocurrir si el fenmeno del que es 'causa', se da en efecto. Si X es una condicin necesaria de Y, entonces Y nunca se dar a menos que ocurra la condicin X. (...) Una condicin suficiente es la que siempre es seguida por el fenmeno del que es 'causa'. Si X es una condicin suficiente de Y, siempre que se d X, ocurrir Y. (...) Una condicin puede ser a la vez necesaria y suficiente para la ocurrencia de un fenmeno. En tal caso, Y nunca se dar a menos que ocurra X y siempre que ocurra X, tambin se dar Y. En otras palabras, no habr ningn caso en que X o Y aparezcan slos." 22

- SELLTIZ,C.; JAHODA, M.; DEUTSCH, M.; COOK, S.W.- Mtodos de investigacin en las relaciones sociales.- Madrid, 5 ed., 1971. Edit. Rialp; pgs. 101-102

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Si en lugar de un solo efecto se derivan varios, la comprobacin de las condiciones sealadas debe realizarse para todos y cada uno de dichos efectos. Este modelo de relacin causal sigue siendo todava relativamente simple pues existe una conexin directa o inmediata entre las causas y el/los efecto(s). Por esta razn, si logramos encontrar una causa que cumpla las dos condiciones sealadas, necesidad y suficiencia, en realidad nos hallamos en el modelo de causalidad nica y directa, siendo las dems causas concurrentes simples fenmenos circunstanciales o, si se prefiere, causas aparentes. La forma ms simple de aplicar este modelo consiste en determinar la necesidad y suficiencia del conjunto de causas concurrentes para la ocurrencia de los efectos. Vemoslo con un ejemplo concreto: El crecimiento econmico (causa 1 -necesaria pero no suficiente - ) y la redistribucin de la riqueza (causa 2 - necesaria pero no suficiente -) generan el desarrollo econmico (efecto 1) y la mejora del nivel cultural de la poblacin (efecto 2).

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3.- CADENA DE CAUSALIDAD SUCESIVA Una serie de sucesos o variables relacionados entre s de forma sucesiva (causas intervinientes), producen ciertos resultados o efectos en la realidad a partir de un suceso o variable inicial considerado como causa originaria. (ESQUEMA N 2-3)

CAUSA ORIGINARIA

CAUSA INTERVINIENTE 1

CAUSA INTERVINIENTE 2

EFECTO(S) FINAL(ES)

En el modelo de cadenas de causalidad sucesiva en la que existe una sola causa originaria y una o varias causas intervinientes, el principal problema que se plantea a la hora de realizar la investigacin consiste en determinar los criterios que nos permitan diferenciar estas ltimas de aquella otra. Semejante tarea no es fcil en el mbito de las ciencias sociales, en general, y de las Relaciones Internacionales, en particular pues todas estas disciplinas estn sometidas a una relacin de causalidad histrica. Dicho de otro modo, los actores internacionales, como cualquier otra colectividad humana, estn sujetos a la relacin de causalidad que impone la sucesin temporal. Siempre hay un suceso histrico anterior necesario para poder explicar algunos de los sucesos posteriores. Llegados a este punto conviene establecer algunos criterios prcticos para diferenciar las causas intervinientes de la causa originaria. Para ello emplearemos, de nuevo, las condiciones de necesidad y suficiencia y agregaremos la condicin de temporalidad. Las causas intervinientes siempre son necesarias, pero nunca son suficientes, para la ocurrencia particular del efecto y adems deben ser sucesivas en el tiempo respecto de la causa originaria (diacrnicas), lo que las diferencia del modelo anterior en el que la mutlicausalidad poda ser simultnea en el tiempo (sincrnica). En cambio la causa originaria debe ser necesaria y suficiente para que exista la posibilidad de ocurrencia de la categora general de sucesos a los que pertenece el efecto particular que se investiga y, adems, debe ser temporalmente anterior a alguna de las causas intervinientes (diacronismo), aunque no necesariamente a todas ellas,. La concurrencia de las condiciones de suficiencia y diacronismo temporal resultan claves para determinar cundo nos encontramos ante la causa originaria que, directa pero no inmediatamente, nos explica el o los efectos finales. Por ejemplo, la causa originaria de la crisis de los misisles de Cuba la encontramos en la proliferacin de los arsenales nucleares, tanto americanos como soviticos o de terceros pases. Naturalmente este fenmeno por s solo no explica el cmo y el cuando de esta crisis particular pero s nos explica la posibilidad de una crisis nuclear. Con anterioridad a la disponibilidad de arsenales nucleares por ambas superpotencias, sencillamente habra sido imposible una crisis de las caractersticas de la de los misisles de Cuba, es decir con amenaza nuclear directa. Pero tambin es cierto que slo si agregamos las causas intervinientes (rgimen castrista, despliegue de misiles soviticos en Cuba, espionaje areo norteamericano, etc.) podemos obtener una explicacin completa de esta crisis, con todas sus

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particularidades histricas, y deiferenciarla de otras crisis nucleares, por ej. entre Pakistn y la India o entre la URSS y la R.P. de China. Podramos haber tomado como causa originaria la rivalidad entre Estados Unidos y la URSS que, histricamente, es anterior tanto a la crisis cubana como a la proliferacin de arsenales nucleares, pero entonces observaramos que dicha causa no poda explicar por s sola la posibilidad general de una crisis nuclear y, por tanto, tampoco esta crisis nuclear, como lo demuestra el hecho de que entre 1947 y 1949-50, es decir con anterioridad a las primeras experiencias nucleares soviticas, la rivalidad entre ambas potencias era ya oficial (doctrina Truman) pero resulta obvio que la URSS nunca habra podido amenazar a los Estados Unidos con el despliegue de unas armas que no posea. En resumen, la rivalidad USA-URSS fue una de las causas intervinientes, histricamente anterior, pero no la causa originaria de esta crisis. Evidentemente, a nadie se le ocurrira buscar como causa originaria de la crisis cubana a la revolucin bolchevique de 1917, aunque sin que se hubiese producido dicho suceso histrico es imposible que la URSS hubiese existido y, por tanto, que hubiese desarrollado los arsenales nucleares que con posterioridad despleg en Cuba. Observemos que en la cadena de causalidad sucesiva, las causas intervinientes pueden desaparecer sin que por ello desaparezca la posibilidad de ocurrencia del efecto mientras subsista la causa originaria. En ese caso simplemente pasaramos a un modelo de causalidad nica y directa. Por el contrario, si suprimimos la causa originaria, las causas intervinientes por s solas nunca producirn el efecto., ello significa que este modelo en realidad es una cadena de modelos de causalidad nica y directa. Ello le confiere una especial idoneidad para ser utilizado en el anlisis histrico de fenmenos de microinternacionalidad, pues en este caso, la sucesin temporal nos determina el encadenamiento causal desde la causa originaria hasta el efecto que deseamos explicar o pronosticar. Desde el punto de vista de la aplicacin del mtodo analtico, el problema queda reducido a encontrar los sucesos o variables histricas que cumplan los requisitos de necesidad y suficiencia respecto del efecto y a estudiar con detenimiento los elementos esenciales que los explican y que, por tanto, tambin nos aclaran las relaciones histricas particulares que se desarrollaron entre ellos. La facilidad de aplicacin del anlisis histrico a travs de la cadena de causalidad sucesiva, explica su amplia difusin entre los historiadores. Sin embargo, debemos prevenir sobre las dificultades que provocan los resultados de este mtodo a la hora de emplearlos como datos o informaciones que debemos utilizar con otros mtodos cinetficos, por ej. en el mtodo comparativo. En efecto, al emplear la causalidad sucesiva para analizar un suceso histricamente singular e irrepetible, la condicin de necesidad de las causas intervinientes que, no lo olvidemos, tambin son sucesos histricos irrepetibles complica la comparacin con aquellos fenmenos que aparentemente podran parecernos similares pero cuyas sucesiones de causas intervinientes nunca podrn ser idnticas. Por esta razn, la bsqueda de analogas histricas a travs del mtodo comparativo, difcilmente puede superar los lmites de la analoga de las causas originarias y/o de las causas intervinientes de carcter estructural, relativizando por tanto el valor de generalizacin que podemos obtener con tales analogas.

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4.- CADENA DE MULTICAUSALIDAD SUCESIVA (ESQUEMA N 2-4)

CAUSA ORIGINARIA 1

CAUSA INTERVINIENTE 1 CAUSA INTERVINIENTE 3

EFECTO FINAL

CAUSA ORIGINARIA 2

CAUSA INTERVINIENTE 2

Este es un modelo de causalidad ms complejo, pero tambin ms comn en la realidad internacional, que exige aplicar los criterios prcticos sealados en el modelo anterior para dirmir las diferencias entre las causas originarias y las causas intervinientes. Sin embargo la multicausalidad en ambas categoras, impone la necesidad de aplicar algunas reglas para ponderar la importancia de cada una de las causas originarias. En primer trmino, las diversas causas originarias deben concurrir simultneamente, pues en caso contrario nos hallaramos en una situacin propia del modelo anterior, es decir en el de la cadena de causalidad sucesiva, ya que la(s) causa(s) originaria(s) no simultnea(s) tendra(n) que ser o causa(s) previa(s), ya fuese(n) originaria(s) o interviniente(s), o por el contrario pasara(n) a formar parte de la(s) causa(s) posterior(es) a las originarias, es decir de la(s) causa(s) interviniente(s) de la realidad particular que estamos investigando. En segundo lugar, la suficiencia respecto de la posibilidad de la categora general de sucesos a los que pertenece el efecto particular que se est investigando, debe predicarse para el conjunto de las causas originarias. En efecto, de no ser as, aquella causa originaria que no cumpliera esta condicin de suficiencia no sera tal y deberamos considerarla simplemente como una causa aparente o mera circunstancia secundaria, sin valor de causalidad alguno. De las dos reglas anteriores se desprende un tercer criterio: desde el punto de vista del conocimiento cientfico basta con abordar las causas originarias en su conjunto para establecer las relaciones con el conjunto de las causas intervinientes y poder explicar as el efecto o efectos resultantes. El estudio de las relaciones entre las diversas causas originarias, de una parte, o entre las diversas causas intervinientes, de otra, que puede fcilmente realizarse mediante la utilizacin del mtodo analtico, no resulta imprescindible para explicar los sucesos particulares de la realidad que se ajustan a este modelo causal, sino slo para ampliar los conocimientos sobre cada uno de los sucesos o variables que estamos considerando en cada una de las dos categoras causales sealadas. Pongamos un ejemplo para ilustrar este modelo de causalidad. Si consideramos el proceso de desintegracin sovitica que se produce durante 1991, observamos claramente que, al menos, pueden mencionarse tres causas originarias: a).- la presin de las fuerzas polticas independentistas en varias repblicas federadas ( repblicas blticas; Moldavia, Azerbaidjan; Armenia); b).- la divisin interna y el progresivo debilitamiento del control del Partido

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Comunista sobre la Administracin del Estado y c).- el fracaso de las reformas econmicas introducidas con la "perestroika". Junto a ellas se podran citar numerosas causas intervinientes: el desprestigio poltico en el interior de la Unin Sovitica de la figura de Gorbachov; el fracasado intento de golpe de Estado; la presin de las fuerzas polticas democratizadoras; etc. Respecto de las tres causas originarias mencionadas se puede demostrar que efectivamente cada una de ellas es causa suficiente para provocar la posibilidad de ocurrencia de la categora general de fenmenos a la que pertenece el suceso que analizamos. Esta categora general es la de la desaparicin de un Estado y no slo la del cambio de rgimen poltico o econmico del mismo. En efecto, que la presin de las fuerzas independentistas puede provocar la desaparicin de un Estado lo ilustran todos aquellos casos de divisin de Estados provocados por este tipo de fenmenos; por ej. la divisin de la India y ms tarde de Pakistn o la propia desintegracin yugoslava, por citar un caso mucho ms reciente y prximo. Anlogamente, el debilitamiento del control del partido comunista sobre el aparato del Estado constituy una de las causas originarias decisivas para lograr la desaparicin de la Repblica Democrtica Alemana y la unificacin en la Repblica Federal de Alemania. Finalmente, la crisis de las reformas econmicas constituy una de las causas originarias del proceso de desintegracin de Checoslovaquia en dos Estados independientes. Si cada una de estas causas originarias, considerada de forma independiente, resulta suficiente para explicar la categora general de fenmenos que designamos como desaparicin de Estados, necesariamente la concurrencia de todas ellas simultneamente deben explicar el origen del proceso de desintegracin sovitica. No obstante, ni en Alemania, ni en la antigua Yugoslavia, ni, por supuesto, en Checoslovaquia, existieron golpes de Estado fracasados, ni apareci la figura de Gorbachov, aunque s se dieron la formacin de fuerzas polticas democratizadoras. En otras palabras, algunas de las causas intervinientes que hemos sealado para el caso sovitico se demostraron necesarias para este fenmeno particular pero no para el resto de sucesos de la misma categora o naturaleza. La consideracin conjunta de las tres causas originarias sealadas nos permite explicar el caso de desaparicin estatal, como fenmeno general, y por tanto tambin el caso sovitico, pero adems nos permite utilizar el mtodo comparativo para contrastarlo con otros casos de la misma categora. En cambio el anlisis de las causas intervinientes, slo nos permite comprender y explicar mejor la singularidad histrica e irrepetible de la desintegracin sovitica.

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ESTRUCTURA DE CAUSALIDAD DIALECTICA. 1.- MODELO DE CAUSALIDAD DIALECTICA ENDOGENA (ESQUEMA N 3-1)

FENOMENO 2

SINTESIS

FENOMENO 1

TESIS

ANTITESIS

2.- MODELO DE CAUSALIDAD DIALECTICA EXOGENA (ESQUEMA N 3-2)

FENOMENO 3

SINTESIS

FENOMENO 2

FENOMENO 2

TESIS

ANTITESIS

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3.- MODELO DE CAUSALIDAD DIALECTICA MIXTA (ESQUEMA N 3-3)

MOMENTO 3

FENOMENO 4

SINTESIS

MOMENTO 2

SINTESIS
FENOMENO 3 FENOMENO 2

ANTITESIS

TESIS

MOMENTO 1

FENOMENO 1

TESIS

ANTITESIS

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Cuando se abordan los modelos de causalidad dialctica, no nos enfrentamos nicamente a modelos ms complejos sino tambin a un cambio cualitativo desde el punto de vista filosfico y de la lgica de razonamiento. En otras palabras, se trata de un cambio de mentalidad desde el punto de vista de la sicologa del investigador y de un cambio de paradigma cientfico, en el sentido originario de este trmino acuado por Kuhn, desde el punto de vista gnoseolgico. En efecto, admitir las estructuras de causalidad dialctica significa aceptar como premisa filosfica, o si se prefiere cosmognica, que la realidad, su estructura y su dinmica, estn gobernadas por la permanente tensin de contrarios y, adems, que esta constante oposicin de contrarios es inevitable y evolutiva. Ello obliga a considerar incompletas, y por tanto, insuficientemente explicativas, las interpretaciones filosficas, o cosmognicas, fundadas en la consideracin de la realidad, su estructura y su dinmica, desde una mentalidad unilateral o unidireccional. Desde el punto de vista de la lgica aplicable al razonamiento y argumentacin de la causalidad dialctica, supone considerar la lgica binaria o bivalente como una parcela de una lgica ms general: la lgica borrosa o multivalente. En la primera las sentencias slo pueden ser verdaderas o falsas; las partes estn incluidas en el todo; lo subjetivo est claramente diferenciado, y por tanto es diferenciable, de lo objetivo; la teora de la praxis; etc. En la lgica borrosa (fuzzy logic), las sentencias son verdaderas y falsas en un cierto grado; el todo no es mas que una de las posibilidades de unin entre las partes; los subjetivo y lo objetivo no pueden comprenderse, ni explicarse, como realidades diferentes;etc. Como lo ha escrito Kosko: "La fe binaria siempre ha tenido que enfrentarse con dudas. Nunca ha dejado de suscitar respuestas crticas, de promover una especie de 'underground' lgico y filosfico. (...) La mayor parte de los enunciados, si no todos, son indeterminados, inciertos, grises; son borrosos. (...) Llamo a este 'el problema de la discordancia': el mundo es gris pero la ciencia es blanca y negra. Hablamos con ceros y unos; la verdad, sin embargo, cae entre ellos. El mundo es borroso, la descripcin no. Todos los enunciados de la lgica formal y de la programacin de ordenadores son o verdaderos del todo o falsos del todo, 1 0. Pero los enunciados del mundo no son as. (...) El lenguaje, en especial el matemtico de la ciencia, crea fronteras arificiales entre el blanco y el negro. La razn o el sentido comn las borran. La razn trabaja con grises." 23 Estas consideraciones estn destinadas a advertir al lector que el empleo de los diversos modelos de causalidad dialctica no resultan de la simple y mecnica aplicacin de un esquema que distingue entre tesis-anttesis y sntesis. Requiere mucho ms, exige cambiar los hbitos de razonamiento lineal, sencillo y directo, que se nos inculcaron y aprendimos con nuestra propia experiencia desde nuestra infancia. Sin este cambio, nunca podremos emplear correctamente estas estructuras de causalidad por la sencilla razn de que nunca lograremos captar la similitudes y las diferencias, siempre sutiles, entre la tesis y la anttesis, para poder comprender cmo y hasta donde pueden compenetrarse entre s para dar origen a una nueva realidad que las trasciende: la sntesis. Las relaciones de causalidad dialctica se generan siempre entre los fenmenos o variables esenciales de la realidad, resultando indiferente o secundario que se produzcan tambin entre
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- KOSKO, B.- El pensamiento borroso.- Barcelona, 1995. Edit. Crtica; pgs. 19-20-21 y 28

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los fenmenos o variables accidentales de la misma. Bsicamente puede adoptar tres formas diferentes y que denominamos: a).- causalidad dialctica endgena; b).- causalidad dialctica exgena y c).- causalidad dialctica combinada. En la primera, la contradiccin se desarrolla entre los sucesos o variables que pertenecen al mismo fnomeno que estamos estudiando, y genera siempre un nuevo fenmeno en el que se manifiesta la sntesis de los contrarios. (autosuficiencia explicativa del fenmeno nico inicial). Esta sntesis, precisamente porque se parte inicialmente de una oposicin entre sucesos o variables de un mismo fenmeno, se realiza mediante la articulacin de nuevas estructuras de relacin entre los sucesos o variables contrarios y/o la formacin de nuevos sucesos o variables que contienen caractersticas que eran especficas de los contrarios. Ejemplos de procesos que pertenecen a esta categora de cambio dialctico podramos citar la reostasis en la teora general de sistemas o los ciclos en la teora econmica. En el segundo modelo, la contradiccin se desarrolla entre sucesos o variables pertenecientes a dos fenmenos de la realidad diferentes pero opuestos entre s. La sntesis se produce provocando la aparicin de un nuevo fenmeno de la realidad que conjuga los sucesos o variables esenciales de los fenmenos contrarios a travs de la articulacin de nuevas relaciones entre ellos, lo que supone una nueva estructura interna del fenmeno sintetizador. La tercera y ltima forma de causalidad dialctica es, sin duda, la ms compleja y, consiguientemente, la ms difcil de comprobar empricamente y de formular tericamente. En realidad es una forma combinada de los dos modelos anteriores que se desarrolla a travs de tres etapas sucesivas. Inicialmente se analizan las contradicciones entre sucesos o variables pertenecientes a un mismo fenmeno (1), o alternativamente entre dos fenmenos opuestos, que generan la sntesis en nuevo fenmeno (2) en un momento posterior Los sucesos o variables de este fenmeno (2) sintetizador de las contradicciones precedentes, a su vez constituyen la tesis que se opone a los sucesos o variables que existen en otro fenmeno (3) perteneciente a la realidad de ese mismo momento (2), es decir sincrnico con el fenmeno (2) sintetizador de la etapa precedente, lo que nuevamente provoca una sntesis en un fenmeno (4) que surge en una fase posterior y as sucesivamente. Gran parte de la dificultad de este modelo causal radica en lograr desentraar qu sucesos o variables resultan esenciales en cada fenmeno para comprender y explicar su estructura y su dinmica y, por tanto, las que necesariamente deberemos considerar para determinar las relaciones de oposicin que lleven al fenmeno de sntesis y las nuevas formas o relaciones que adquirirn en l. Esta dificultad se acenta por cuanto en la realidad internacional los sucesos o variables esenciales suelen estar fuertemente imbricados con otros sucesos o variables propios de la circunstancialidad histrica de cada Sociedad o actor internacional. Existen distintas formas de resolver esta dificultad segn las diversas corrientes tericas. Por ejemplo, las teoras estructuralistas identifican los sucesos o variables esenciales con aquellos que corresponden a la estructura de una determinada sociedad internacional y, por tanto, que permanecen a pesar de los cambios coyunturales o a corto plazo que experimenta esa sociedad. Otra posibilidad es la adoptada por las teoras institucionalistas, como las que sustentan los regmenes internacionales, para quienes los sucesos o variables esenciales son aquellos que definen las principales instituciones que existen en una Sociedad Internacional. En este caso, aunque las instituciones trascienden la coyunturalidad histrica, suelen variar en perodos ms breves que la estructura internacional en la que se insertan, lo que significa que seleccionan sucesos o variables ms cambiantes que las teoras estructuralistas. Finalmente, las teoras sistmicas identifican los sucesos o variables esenciales con aquellos que explican

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la composicin y funcionamiento del sistema y, por tanto, que subsistirn mientras lo haga el sistema. Tampoco es sencillo determinar el modelo de causalidad dialctica que debemos aplicar a una determinada realidad internacional, pues el constante proceso histrico de interpenetracin entre la Sociedad Internacional y las sociedades intraestatales est difuminando la distincin entre el modelo de causalidad dialctica endgeno y el de causalidad dialctica exgeno. Un ejemplo de esta dificultad y los errores que puede inducir lo encontramos en la propia teora marxista. De acuerdo con los postulados del materialismo dialctico de Marx y Engels, el ncleo de causalidad dialctica se encontraba en el seno del sistema capialista y, por tanto, las contradicciones se producan entre variables endgenas: entre la estructura econmica y la superestructura poltico-ideolgica; entre el proletariado y la burguesa; etc. El resultado de esta concepcin dialctica endgena fue la subestimacin del anlisis sobre la causalidad dialctica exgena, es decir, las consecuencias de la oposicin entre las variables esenciales del sistema capitalista y las del sistema socialista o comunista, as como sus posiblidades de sntesis. Desde la adopcin del modelo de causalidad dialctica endgena, lgicamente, la sntesis slo poda producirse en un estadio posterior y como consecuencia de la aparicin de un nuevo fenmeno, es decir un nuevo sistema econmico superior al capitalismo y sucesor de este, tanto a escala nacional como internacional, y, por tanto, imposible de entrar en una contradiccin dialctica con este. Este error fue parcialmente corregido por los tericos del socialismo en un solo pas. 24 El modelo de causalidad dialctica combinada se ajusta mejor a la complejidad de los fenmenos internacionales, sobre todo si se contemplan desde la perspectiva de la macrointernacionalidad, es decir, desde la ptica de una Sociedad Internacional considerada en su conjunto. No obstante, teniendo en cuenta que los fenmenos internacionales, como todos los fenmenos sociales, se desarrollan en el rgido marco de la temporalidad, lo que en principio y en una concepcin abstracta seran sucesos o variables dficiles de adscribir en la causalidad dialctica a la tesis, la anttesis o la sntesis, quedan clarificados en cada realidad internacional concreta por el hecho de que los sucesos o variables de la tesis o anttesis siempre sern temporalmente anteriores a los de la sntesis. Por otra parte, si consideramos la Sociedad Internacional organizada sobre la base de tres estructuras: poltica; econmica y cultural, cada una de ellas con su propios ritmos de evolucin y, por tanto, con una dinmica temporalmente distinta a las de las otras dos estructuras, podremos establecer relaciones de contradiccin tanto endgenas a cada estructura, como exgenas entre las estructuras internacionales. Por ltimo, aunque no menos importante, cada Sociedad Internacional que analicemos debe contar con un marco espacial de refrencia. Ya sea este regional, continental, interncontinental o mundial, lo cierto es que ello nos permite investigar relaciones de causalidad dialctica interespacial. Considerando todos estos factores, resulta evidente que el modelo de causalidad dialctica combinada se puede aplicar incluso para aquellas reas de problemas que afectan y se desarrollan a escala de la Sociedad Internacional de dimensiones mundiales. En efecto, slo desde una concepcin terica unidimensional y homogeneizadora, por ejemplo desde las
- CALDUCH, R.- "Las relaciones internacionales en la obra de los dirigentes soviticos: Una reflexin terica".- Revista de Estudios Internacionales; Vol. 2.n 3 (julio-septiembre 1981); pgs.: 543-597
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modernas mitificaciones globalistas, cabra cuestionar la utilidad de este modelo de causalidad dialctica porque, en caso contrario, la Sociedad Internacional, sea mundial o global, puede estudiarse en la diversidad contradictoria de fenmenos ocasionada a partir de la diferenciacin de estructuras, reas geogrficas y ritmos temporales. En definitiva, como una realidad ajustada al modelo dialctico que estamos considerando. Un ejemplo de lo que acabamos de sealar lo podemos establecer a partir del siguiente modelo:

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EJEMPLO DE APLICACIN INTERNACIONAL DE LA CAUSALIDAD DIALECTICA COMBINADA AL PROCESO DE DESCOLONIZACION ( GRAFICO n 3-4 )

MOMENTO 3

SUBDESARROLLO/DESARROLLO SINTESIS

MOMENTO 2

POBREZA/RIQUEZA TESIS DESCOLONIZACION INDEPENDENCIA SINTESIS


MOMENTO 1

TRANSCULTURACION ANTITESIS

COLONIALISMO EXPLOTACIONE CONOMICA TESIS REBELION POLITICA ANTITESIS

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Como se puede apreciar claramente en el ejemplo que reproducimos, los sucesos o variables que operan como causalidad dialctica en cada fenmeno y/o etapa, no tienen que proceder de la misma estructura, antes por el contrario, la oposicin dialctica se produce entre sucesos o variables de estructuras diferentes. Esto significa que la anttesis de una situacin de crisis econmica, puede proceder de sucesos o variables econmicos de naturaleza poltica o cultural y viceversa. Fue la presin econmica, a travs de los impuestos, que ejerci la metrpoli britnica la que provoc la rebelin poltica de las colonias americanas y su descolonizacin, implantando un nuevo modelo poltico: la Repblica constitucional y democrtica. A partir de ese momento se desarroll un proceso de transculturacin ya que gran parte de la expansin por los territorios del Sur y del Oeste de los Estados Unidos, se realiz a costa de la incorporacion, por compra o por conquista, de zonas pertenecientes a los imperios espaol o francs adems de aquellos otros que pertenecan a las tribus indgenas. Puesto que la colonizacin de esos territorios que se anexion Estados Unidos fue muy anterior al proceso de expansin de este pas, el resultado fue lo que Huntington ha denominado "un choque de civilizaciones" que termin desencadenando varios conflictos armados. Todava en la actualidad se pueden apreciar en algunas de las particularidades culturales y polticas de numerosos Estados del Sur y Oeste de los Estados Unidos, los restos de esos conflictos civilizatorios. 5.3.- Modos de razonamiento en la lgica formal En general, los modos de razonamiento lgico son la formalizacin simblica de las reglas mediante las cuales se establecen los procesos de vinculacin causal gracias a los cuales podemos formular leyes cientficas generales, vincularlas entre s y lograr la construccin de una teora cientfica. Dado que existen distintos tipos de relacin causal y diversas formas de razonamiento, existirn tambin mltiples formalizaciones simblicas que las traduzcan, es decir varias formas de lgica. Entre las ms conocidas podemos mencionar: la lgica formal o binaria; la lgica matemtica; la lgica borrosa y la lgica simblica. Nos vamos a centrar en la lgica formal o binaria no slo por su indiscutible difusin e importancia cientfica, sino porque resulta extraordinariamente a la hora de realizar la modelizacion terica que permita desarrollar programas de simulacin internacional por ordenador. Segn Sierra Bravo 25 existen cuatro tipos bsicos de razonamiento lgico: el categrico; el hipottico o condicional, el alternativo y el disyuntivo. Todos estos razonamientos estn formados por tres enunciados: dos premisas y una conclusin. Es muy importante recordar que los razonamientos lgicos slo son expresiones simblicas de unos sucesos y de sus relaciones de causalidad y que por tanto no aaden ni quitan veracidad o falsedad a dichos sucesos o relaciones de causalidad. En consecuencia, el razonamiento lgico desarrollado a partir de premisas falsas, es decir de sucesos o variables falsos o de relaciones de causalidad inexistentes, no podr alcanzar conclusiones verdaderas a pesar de que seamos muy rigurosos en la aplicacin de las reglas lgicas. Ignorar este aspecto de la lgica, suele conducir a interpretaciones tericas groseramente errneas.

A.-RAZONAMIENTOS CATEGORICOS
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- SIERRA,R.- op. cit.; pgs. 89 y ss.

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En el razonamiento categrico, los enunciados son simples, es decir con un solo sujeto y un predicado, y categricos, es decir, afirmativos o negativos. Poseen slo tres trminos, de los que uno de ellos es el trmino o de enlace entre las premisas y la conclusin. Este tipo de razonamiento es idneo para las relaciones de causalidad nica y directa y para la cadena de causalidad sucesiva. Si M ------implica------ P Si S -----implica-------- M Luego S --implica------ P Ej. Si los Estados poseen un territorio Si Espaa es un Estado Luego: Espaa posee un territorio B.-RAZONAMIENTOS CONDICIONALES Es un razonamiento que consta de dos enunciados y una conclusin. El primer enunciado establece una relacin condicional entre dos sucesos (A y B). El segundo enunciado establece el grado de cumplimiento de la relacin condicional para uno de los dos sucesos. La conclusin confirma el grado de cumplimiento del otro suceso y puede adoptar dos formas, una afirmativa y otra negativa. Admite dos versiones: 1.-Modus ponendo ponens relacin condicional: Si A, entonces B verificacin de la condicin: Se da A conclusin: luego se da B Ej. Las guerras provocan vctimas civiles Se ha desencadenado la guerra Luego: Habr vctimas civiles 2.-Modus Tollendo tollens relacin condicional: Si A entonces B verificacin de la condicin: No se da B conclusin: luego tampoco A Ej. Las guerras provocan vctimas civiles No hay vctimas civiles Luego: no se ha desencadenado la guerra En este modelo de razonamiento conviene llamar la atencin sobre algunas ideas importantes. En primer lugar, el modo ponendo ponens razona desde la comprobacin de la ocurrencia de la causa a la confirmacin del efecto, luego corresponde a un tipo de causalidad suficiente pero no necesaria. En efecto, la ocurrencia de A por s misma garantiza la ocurrencia de B, aunque no tenemos certeza de que se produzca A ni tampoco de que B se produzca aunque no lo haga A.

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El modo tollendo tollens razona desde la comprobacin de la no ocurrencia del efecto a la no ocurrencia de la causa. Ello es lgico precisamente por lo que sealbamos respecto de la condicin de suficiencia pero no de necesidad de la causa. En efecto, si se produce B no podemos deducir exclusivamente que se produjo A puesto que no tenemos certeza de su ocurrencia y B poda ser tambin un efecto de otro tipo de causa C. C.-RAZONAMIENTOS ALTERNATIVOS : Son razonamientos que constan de dos enunciados y una conclusin. El primero de estos enunciados est formado por la negacin de la relacin de asociacin entre sus dos elementos unidos entre s por la conjuncin copulativa (y). El segundo enunciado consiste en la negacin o afirmacin del cumplimiento de uno de los elementos (P) de ambos enunciados se extrae la conclusin sobre el cumplimiento o no del otro elemento (Q). 1.-Modus tollendo ponens No (P y Q) No P Luego Q Ej. Un Estado No puede estar en guerra y paz al mismo tiempo No est en guerra Luego: Est en paz 2.-Modus ponendo tollens No (P y Q) Se da P Luego No Q Ej. Un Estado no puede estar en guerra y paz al mismo tiempo Est en guerra Luego: No est en paz Ambos tipos de razonamiento alternativo descansan sobre el principio de no simultaneidad en la ocurrencia de dos sucesos diferentes, para deducir de la ocurrencia o no de uno de ellos la ocurrencia del otro. No obstante, el modo tollendo ponens es utilizado ms frecuentemente por cuanto es ms fcil y relevante constatar en una investigacin la no ocurrencia de un suceso para deducir la del otro que a la inversa. Ello lo hace adecuado para descartar falsas causalidades mltiples simultneas, ya sea en las estructuras de causalidad directa o sucesiva. D.-RAZONAMIENTOS DISYUNTIVOS: Son razonamientos que constan de dos enunciados y una conclusin. El primero de estos enunciados est formado por la relacin de asociacin entre sus dos elementos unidos entre s por la conjuncin disyuntiva (o). El segundo enunciado consiste en la negacin del cumplimiento de uno de los elementos (P), de ambos enunciados se extrae la conclusin sobre el cumplimiento del otro elemento (Q).

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1.-Modus tollendo ponens PoQ No P Luego Q Ej. Hay guerra o hay paz No hay guerra Luego: Hay paz Este modelo opera sobre la condicin de necesidad para dos sucesos cuya ocurrencia no puede ser simultnea, permitiendo concluir de la ausencia de uno de ellos la certeza en la ocurrencia del otro. Es, por tanto, el complemento del razonamiento alternativo ya que nos permite investigar la ocurrencia necesaria de un suceso una vez hemos descartado la imposibilidad de su ocurrencia simultnea. En ambos casos se apunta hacia relaciones de causalidad sucesiva. Una de las caractersticas de los razonamientos sealados es la de que, hasta ahora, se consideran premisas ciertas que lgicamente permiten deducir conclusiones ciertas. Sin embargo, en la realidad, la mayora de las veces hemos de trabajar con acontecimientos de los que tenemos una cierta probabilidad pero no una certeza. En tal caso estamos en el mbito de los razonamientos probabilsticos que permiten conclusiones slo probables pero no seguras. La falta de seguridad en las conclusiones flexibiliza extraordinariamente las exigencias del razonamiento de la lgica formal aumentando sus posibilidades de utilizacin a cambio de una reduccin en el rigor cientfico de los resultados. Se pone as en evidencia una ley general del conocimiento: cuanto ms riguroso y profundo es el conocimiento ms complejo y menos prctico resulta. El mismo autor, 26 recoge seis formas de razonamiento probabilstico a las que denomina: 1.- Analoga sustantiva 2.- Analoga estructural 3.- Induccin de primer grado 4.- Induccin de segundo grado 5.- Modus ponens dbil 6.- Modus tollens dbil Aunque los razonamientos probabilsticos siguen, bsicamente, las reglas de razonamiento sealadas, sin embargo, requieren complementarlos con el uso de la estadstica inferencial o de probabilidades, ya que el valor de las premisas y las conclusiones depender, en buena medida, del conocimiento exacto de las probabilidades que posean. Por ejemplo, unas premisas con una probabilidad de 0'8 (80 %) sern mucho ms fiables para extraer conclusiones que las premisas que slo gozan de una probabilidad del 0'2 (20 %).

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- SIERRA,R.- op. cit.; pgs. 92-95

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En efecto, el empleo de razonamientos probabilsticos exige respetar los principales axiomas de la teora de probabilidades y que podemos resumir en los siguientes: 27 1.- A todo suceso aleatorio A le podemos asignar un nmero que especifique su probabilidad de ocurrencia P (A) 2.- La probabilidad de un suceso es un nmero comprendido enytre 0 y 1, es decir entre la imposibilidad y la certeza de ocurrencia. 0 <=P(A)<=1 3.- La probabilidad de que ocurra un suceso A o un suceso B es el resultado de sumar las probabilidades de cada uno de dichos sucesos menos la probabilidad de que ocurran simultneamente ambos. P (A o B) = (P(A) + P(B) ) - P (A y B) Si dos sucesos se excluyen mtuamente, la probabilidad de que ocurra un suceso o el otro es igual a la suma de las probabilidades de ambos sucesos. Tales sucesos se denominan complementarios. P(no A) = 1 - P(A) 4.- Dos sucesos se denominan independientes cuando la probabilidad de que ocurra uno de ellos no altera la probabilidad de que ocurra el otro. En tal caso, la probabilidad de que ocurran simultneamente dos sucesos independientes es igual al producto de las probabilidades de cada uno de ellos. P (A y B) = P(A) x P(B)

- ALCAIDE, A.- Estadstica aplicada a las Ciencias Sociales.- Madrid, 1976. Edit. Ediciones Pirmide; pgs.24-26

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6.- LAS TEORIAS CIENTFICAS Y LOS MODELOS TEORICOS DE LAS RELACIONES INTERNACIONALES 6.1.- Las Teoras Como muy certeramente ha sealado Sahagn: "Todos tenemos un modelo mental de la Sociedad Internacional. Por modelo entendemos una abstraccin de la realidad que nos ayuda a comprenderla mejor. Puede ser implcito o explcito, consciente o inconsciente, literario o cientfico, realista o idealista, ms influido por el pasado o ms influido por el futuro o el presente, experimental o racional. Todo modelo es una simplificacin de la realidad en la que resaltan unos elementos y se ignoran o difuminan otros. Simplificar no es necesariamente malo. Al contrario, todo ejercicio intelectual requiere cierto grado de simplificacin y de sntesis para facilitar la comprensin. Es, posiblemente, la nica forma de comprender el mundo que nos rodea." 28 Naturalmente, no todo modelo mental se corresponde con una teora cientfica, es decir con un modelo terico consciente, abstracto y generado a partir de la utilizacin de mtodos cientficos y de la aplicacin de reglas lgicas, con objeto de conocer y explicar la realidad. En definitiva, las teoras cientficas son una categora particular de modelos mentales. Duverger define las teoras como "un balance de los resultados de las investigaciones ya realizadas y un programa de futuras investigaciones" y considera que las teoras constituyen una sntesis de "los resultados de la observacin, de la experimentacin y del mtodo comparativo, expresando de forma coherente todo lo que se sabe y tambin todo lo que se supone acerca de estos fenmenos". A partir de esta definicin de lo que es una teora cientfica distingue entre las teoras generales, referidas al conjunto de las ciencias sociales y a las que considera como autnticas "cosmogonas" ya que "intentan explicar el mecanismo global de la vida social"; las teoras parciales que"sintetizan los resultados relativos a una rama concreta de una disciplina" y a las que denomina modelos cuando tan slo "adoptan la forma de haces de hiptesis coordinadas y, finalmente, las teoras particulares que se corresponderan a la formulacin de "unas hiptesis de trabajo a las que se pretende verificar para transformarlas en leyes sociolgicas". 29 Aunque coincidimos con algunas de las afirmaciones de Duverger en relacin con su conceptualizacin y clasificacin de lo que son las teoras cientficas, sin embargo consideramos su visin demasiado confusa ya que al incluir bajo la denominacin de teoras tanto al proceso de teorizacin o abstraccin, que necesariamente se realiza en toda investigacin cientfica o acadmica, como al proceso de sntesis de los resultados aportados por numerosas investigaciones realizadas sobre un mismo tipo de fenmenos o realidades sociales, termina confundiendo el procedimiento de investigacin, es decir la actividad investigadora, con los resultados abstractos y formalizados de las investigaciones, en otras palabras, con las interpretaciones generales que las investigaciones han verificado. No obstante, esta confusin se disipa a poco que observemos como se desarrolla el conocimiento cientfico, pues para el investigador su actividad cientfica concreta est inducida y, hasta cierto punto orientada, por las teoras existentes, incluso si lo que se propone es modificarlas radicalmente, en el sentido de las revoluciones cientficas de Kuhn, y no slo desarrollarlas y verificar su validez y aplicabilidad a nuevas realidades no consideradas inicialmente por dichas teoras. Cabra decir, por consiguiente, que al no distinguirse
28 29

- SAHAGUN,F.- op. cit.; pg. 56. - DUVERGER, M.- op. cit.; pgs. 374-375.

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claramente por Duverger entre estas dos dimensiones de la ciencia: el proceso de investigacin y el proceso de formalizacin y difusin de sus resultados, elimina automticamente una de las funciones principales de las teoras cientficas, a saber: permitir el aprendizaje y utilizacin de aquellos resultados generales que se consideran verificados a travs de investigaciones cientficas particulares y, de este modo, facilitar el proceso de desarrollo cientfico, ya sea por acumulacin o por revolucin. En trminos generales podemos definirlas como un conjunto lgicamente coherente de conceptos, axiomas y leyes cientficas, gracias al cual podemos dar un significado o interpretacin cognoscible y verosmil de la realidad, o de ciertos aspectos de ella, susceptible de comprobacin y con el que podemos explicarla y predecirla. Los conceptos son la formulacin descriptiva general de los principales fenmenos o variables de la realidad que pretende explicar la teora. Son, por utilizar una metfora, los ladrillos de la construccin terica. Por esta razn, los conceptos de un buen modelo terico debern cumplir dos condiciones: ser precisos y ser los mnimos indispensables. La primera de estas condiciones exige que los conceptos delimiten clara y rigurosamente los fenmenos o variables de la realidad que describen. La imprecisin conceptual impedir la delimitacin de las relaciones entre los diversos fenmenos y/o variables, imposibilitndonos la investigacin y formulacin de leyes cientficas. Adems, la imprecisin conceptual impide la elaboracin de axiomas y con ello complica el proceso de articulacin de la teora. Un ejemplo tpico de imprecisin es la inclusin en la definicin del fenmeno o variable que se define: "La cooperacin internacional: es la cooperacin entre dos o ms actores internacionales". Otro caso frecuente de imprecisin conceptual es la inclusin de trminos no definidos previamente cuando dichos trminos se emplean en un sentido diferente del que les atribuye el lenguaje comn, por ej. el significado del trmino reconocimiento empleado en la definicin del Estado posee un signficado jurdico y poltico que no coincide con el que se atribuye en el lenguaje comn a ese mismo trmino, lo que obliga a definirlo para poder precisar el concepto de Estado con total rigor. Adems, un buen modelo terico debe contener el mnimo indispensable de conceptos. Esta condicin es, probablemente, la ms difcil de satisfacer a la hora de formular una teora cientfica y ha hecho fracasar, tanto por exceso como por defecto, no pocos intentos de teorizacin. El exceso de conceptos, frecuentemente inducido por una imprecisin definitoria, complica la formulacin del modelo terico al incrementar el nmero de fenmenos o variables, y las relaciones entre ellos, ms all de lo que exige una comprensin y explicacin satisfactorias de la realidad. En estos casos, incluso cuando se alcanza a formular la teora, cosa que a menudo no ocurre por los numerosos conceptos que se emplean, esta no resulta ms o mejor explicativa de la realidad que modelos ms simples lo que, en definiiva, terminar provocando el empleo de las teoras ms sencillas. Los postulados son proposiciones evidentes por s mismas, y que por tanto no necesitan demostracin, que "se refieren a definiciones de trminos indispensables para la estructura del sistema terico y que generalmente son aceptados por convencin"30, a partir tir de los cuales se pueden formular otras proposiciones cientficas de carcter general a las que denominamos axiomas. Los axiomas son proposiciones derivadas de los postulados mediante el razonamiento lgico y en los que se formulan principios tericos ms generales. Finalmente, las teoras incluyen teoremas que son proposiciones derivadas de los postulados y de los axiomas pero que requieren una demostracin.
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.- Pardinas op. cit. ; pg. 40

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Un axioma de las Relaciones Internacionales podra ser el siguiente: "todo actor no puede pertenecer simultneamente a dos categoras actoriales distintas para la misma relacin internacional". En efecto, resulta evidente y no requiere demostracin alguna sino tan slo la mera deduccin lgica de los conceptos de actor y relacin internacional que, por ejemplo un Estado no puede ser al mismo tiempo una OIG, una ONG o una Empresa Tranasnacional como participante en una relacin internacional de naturaleza blica, diplomtica, econmica, etc. Este axioma nos permite excluir del estudio sobre la conducta de ese actor estatal todas aquellas conductas que son propias de otras categoras de actores y, de este modo, concentrarnos en el reducido grupo de conductas propiamente estatales que pueden darse en cualquier tipo de relacin. Por ejemplo, como Estado beligerante emplear sus fuerzas armadas o podr concluir un tratado de paz, conductas que no podra realizar en tanto que ONG o Empresa Transnacional. De los axiomas cabe deducir ciertas conclusiones que, a su vez, sustentan razonamientos ms complejos a partir de la aplicacin de las reglas de la lgica formal, matemtica, etc. Tales razonamientos constituyen el ncleo de las leyes o regularidades cientficas. Empleando la metfora inicial, podramos decir que los axiomas son los fundamentos del edificio terico. Sin embargo, debemos sealar que los axiomas slo son deducibles en el marco de una determinada formulacin cognoscitiva y con referencia a una determinada parcela de la realidad, lo que significa que si cambiamos la perspectiva de conocimiento o el contexto cultural, los axiomas dejan de ser proposiciones lgicas. Por ejemplo, el axioma que antes hemos formulado slo es evidente en el marco del razonamiento binario pero no sera igualmente evidente desde los razonamientos de la lgica borrosa o dialctico. Uno de los principales errores que se cometen a la hora de formular los axiomas de una teora cientfica es el de presentar como tales lo que no son mas que simples tautologas. Este error se debe a que en buena medida los axiomas emplean en su formulacin algunos de los conceptos elementales que previamente ya se han definido. En consecuencia, es fcil incurrir en el error de presentar como axioma lo que no es mas que una formulacin diferente de los postulados. En estos casos tautolgicos la aparente evidencia axiomtica no lo es ya que simplemente no hay evidencia sino redundancia. 6.2.- Los modelos tericos de las Relaciones Internacionales Las oportunidades que se abren al desarrollo terico de las Relaciones Internacionales, mediante una mejora sustancial en el empleo de los mtodos y tcnicas que hoy en da resultan accesibles para las ciencias sociales, depende, adems de las cuestiones abordadas, de la elaboracin de modelos tericos que resulten suficientemente descriptivos y operativos. El tema de la modelizacin terica en las ciencias sociales slo ha sido abordado y satisfactoriamente resuelto por la Economa, sin embargo constituye un paso metodolgico crucial en la articulacin de teoras cientficas vlidas. El modelo terico puede definirse como una representacin intelectual simplificada, sistemtica y lgicamente coherente de una realidad, realizada de conformidad con los supuestos de una teora. 31 As considerado, coincidimos con Ramrez, en que el modelo
- Braudel los define como "hiptesis, sistemas de explicacin slidamente vinculados segn la forma de la ecuacin o de la funcin" una concepcin demasiado restrictiva a nuestro juicio. Por su parte, Waltz,
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terico es un "instrumento de la investigacin y no, en sentido estricto, el resultado de la misma. Combina las ideas previas con la experiencia que tenemos del objeto, en este sentido, no es una pura idealizacin sin referente concreto, pero tampoco, una descripcin fidedigna de lo real. Pretender contrastar el modelo con la realidad es terminar la investigacin ah donde apenas empieza. Considerarlo como el punto final del proceso de investigacin es tomar la pregunta como respuesta y evitarse el esfuerzo de pensar cmo contestarla." 32 El modelo terico reproduce algunas de las relaciones causales que la teora establece entre las variables o sucesos de la realidad, mientras que ignora deliberadamente otras. Para que un modelo sea verdaderamente representativo y, por tanto, til a los efectos metodolgicos, debe incluir aquellas variables que cumplen con las condiciones de necesidad y suficiencia para explicar las relaciones de causalidad, de conformidad con los supuestos tericos utilizados. Por ejemplo, en el modelo de equilibrio de poder las dos variables necesarias y suficientes para explicar el funcionamiento del sistema internacional (efecto o variable dependiente) son las grandes potencias y las variaciones en su poder poltico-militar. De la dinmica de estas dos variables se derivan claramente algunas conclusiones: a).- los Estados con un poder menor resultan irrelevantes porque no gozan del poder suficiente para alterar la realidad internacional; b).- debe existir ms de un Estado poderosos (potencia) en la realidad internacional; c).- no existe un inters general diferente del inters particular de los Estados ms poderosos; d).- el mantenimiento de la realidad internacional (estabilidad del sistema) se produce como consecuencia automtica del inters de cada potencia en garantizar su propia existencia como tal. La valoracin del modelo de equilibrio de poder, debe realizarse considerando su grado de representatividad de la realidad internacional de acuerdo con el marco terico que lo sustenta, en este caso el realismo poltico. Naturalmente este modelo carece de significado y utilidad en el contexto de las doctrinas estructuralista o transnacionalista. Llegados a este punto, conviene despejar algunos equvocos sobre los modelos tericos, ya que suelen ser la fuente de no pocas crticas y debates doctrinales, condenados a la ms absoluta estrilidad.

precisa un poco ms el concepto, aunque sigue manteniendo una cierta confusin entre el modelo y la teora: "Modelo es un trmino utilizado de dos maneras principales. En un sentido, un modelo representa una teora. En otro sentido, un modelo describe la realidad simplificndola, digamos, por medio de la omisin o de la reduccin a escala." Por su parte, Merle formula un concepto mucho ms restringido: "El trmino modelo, de uso corriente en el lenguaje cientfico no debe tomarse aqu en un sentido moral (ejemplo a imitar). Designa un esquema sinttico y abstracto que ordena los elementos de la realidad en una construccin rigurosa. La construccin de un modelo parte de una serie de observaciones concretas o experimentales sobre hechos o datos previamente cuantificados." Limitar la construccin del modelo a las realidades que pueden traducirse en "hechos o datos cuantificados" equivale a restringir su aplicacin a los modelos matemticos, ya sean estadsticos o no. BRAUDEL, F.- op. cit.; pg. 85. WALTZ, K.N.- op. cit.; pg. 17. MERLE, M.- op. cit.; pg. 138. 32 - RAMIREZ, - "La utilizacin de modelos en la construccin de conocimiento y la exigencia de apertura".- Suplementos Anthropos, n 45 (septiembre 1994); pg. 69.

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El primero y ms comn de estos errores, es la confusin entre el modelo y la realidad. Semejante confusin suele presentarse bajo la forma de objeciones al modelo por no recoger toda la complejidad de los fenmenos que pretende representar o, dicho de otro modo, por no reunir todas las variables relevantes que pueden observarse en la realidad. Semejantes crticas ignoran el verdadero sentido de la modelizacin como instrumento metodolgico, ya que la finalidad de los modelos tericos no es la reproduccin de la realidad, ya sea con fines de observacin o experimentacin, sino representar su configuracin esencial para facilitar la comprensin y determinar su comportamiento. En efecto, el modelo de oferta y demanda no trata de reproducir las innumerables variables que inciden en la determinacin de la oferta y de la demanda, slo trata de representar aquellas variables necesarias y suficientes para explicar el comportamiento del mercado, por eso las variaciones del modelo dependern de las variaciones que puedan presentar los mercados en la realidad (competencia perfecta; olipolistcos; monopolsticos; etc.), pero no de los cambios que puedan experimentar variables tales como la existencia de bienes complementarios o sustitutorios, etc. Otra crtica frecuente atribuye los defectos de la teora al modelo elaborado a partir de ella. Un modelo slo es comprensible y til en el contexto de una determinada teora cientfica, por consiguiente si sta es incompleta o inadecuada para describir y explicar determinados fenmenos de la realidad, difcilmente podemos esperar que estas deficiencias se subsanen con el modelo, ya que ste es slo una versin simplificada de la misma. En el ejemplo del modelo del equilibrio de poder, no podemos juzgarlo inadecuado porque consideremos que los supuestos del realismo poltico en los que descansa sean excesivamente simplificadores de la realidad poltica internacional. Esa, en todo caso, es una crtica a la teora cientfica no al modelo que la representa. Por ltimo, suele objetrsele a los modelos su incompletitud terica, es decir que no representan el conjunto de leyes o relaciones causales incluidas en una determinada teora cientfica. Semejante crtica posee dos variantes: la de quienes atribuyen el trmino de teora a leyes cientficas o concepciones tericas particulares que forman parte de una teora ms general y la de quienes identifican teora y representacin formal de la misma. A los primeros hay que recordarles que no existe ningn modelo capaz de representar de forma satisfactoria la totalidad de leyes contenidas en una teora general. Por ej. no existe un modelo nico que represente toda la fsica newtoniana. A los segundos resulta imprescindible indicarles que todo modelo terico posee una finalidad distinta de la teora y, desde luego, de la representacin formalizada de la misma, lo que justifica que la necesidad de versiones simplificadas de esta ltima. Parte de la simplificacin se alcanza limitando el modelo a las variables causales necesarias y suficientes, pero la simplificacin tambin se obtiene dejando implcitos en el modelo postulados o principios tericos que en su formalizacin completa debern figurar de modo expreso. Por ejemplo, en el modelo del equilibrio de poder, los supuestos tericos que lo sustentan son: a).- el poder (poltico-militar) entre los Estados est desigualmente distribuido; b).- no existe autoridad capaz de ejercer su poder en el contexto internacional; c).- las relaciones entre los Estados estn determinadas por la lucha por el poder. Para determinar la validez de un modelo terico debemos atender fundamentalmente a tres criterios: su precisin, su sencillez y su utilidad. La precisin del modelo significa su capacidad para reproducir de forma inequvoca las relaciones entre las variables que establece la teora. La sencillez exige la consideracin exclusiva de aquellas variables necesarias y suficientes para el cumplimiento de las relaciones de causalidad que contempla la teora y que se

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pretenden representar en el modelo. La utilidad supone la capacidad del modelo para resolver, o al menos facilitar la resolucin, de problemas, tericos o prcticos, concretos. En el mbito de las Relaciones Internacionales, se han desarrollado algunos modelos tericos de cierta relevancia. 33 Bsicamente los podemos clasificar en tres categoras: estticos, dinmicos y globales. Los modelos estticos se concentran en las variables que explican la continuidad de una determinada realidad internacional a pesar de los cambios que se producen en ella. Adems del modelo del equilibrio o balanza del poder, al que ya nos hemos referido, y que ya fue teorizado por De Vattel y Voltaire en el siglo XVIII, 34 debemos incluir tambin en esta categora algunos modelos basados en la aplicacin de la teora de sistemas a nuestra disciplina, empezando por los modelos sistmicos de Morton Kaplan, que ms all de su valor heurstico, constituyen una verdadera demostracin metodolgica de cmo debe realizarse la modelizacin en nuestra disciplina. 35 Los modelos dinmicos priman la consideracin de las variables que explican los procesos de cambio en una determinada realidad internacional. Conviene sealar que en el contexto de nuestra disciplina, existe un gran vaco de modelos dinmicos que traten de representar los procesos de cambio de una realidad internacional a otra. Ya se trate de procesos de cambio generativos o degenerativos, lo cierto es que la escasa atencin terica prestada a los cambios de sociedad internacional y no a los cambios en la sociedad internacional, lastra necesariamente su modelizacin. La teora marxista, con su modelo de lucha de clases, a escala nacional e internacional, introdujo una poderosa lnea de pensamiento sobre el cambio econmico, social y poltico, cuyos ecos han llegado hasta nuestros das. 36 Descendiendo al terreno especfico de las relaciones internacionales, se han desarrollado modelos dinmicos sobre los conflictos internacionales, como el modelo de Duroselle sobre el conflicto de Trieste, o el modelo de los conflictos interestatales didicos. 37 No menos importantes han sido los trabajos de Deustch sobre los procesos de comunicacin, con su conocido modelo en cascada de los flujos de influencia e informacin, 38 y de su influencia sobre los procesos de integracin internacional. 39

- SEARA, M.- "La crisis mundial y los modelos de la sociedad internacional".- Cursos de Derecho Internacional de Vitoria-Gasteiz. Edit. Universidad del Pas Vasco. Bilbao, 1985;pgs. 15-79. 34 - TRUYOL, A.- op. cit.; pgs. 33-34 35 - KAPLAN, M.A.- Systema and Process in International Politics.- Nueva York, 1957. Una seleccin de esta obra puede encontrarse en: HOFFMANN, S.- Contemporary Theory in International Relations.- Edit. Prentice-Hall Interntaional Inc. Englewood Cliffs, 1960. Traduccin al castellano de M.D. Lpez Martnez.- Teoras contemporneas sobre las relaciones internacionales.- Edit. Tecnos. Madrid, 1960; pgs. 141-162. Una revisisn de algunos de sus modelos tericos, puede consultarse en: AA.VV.- "Sistemas Internacionales".- Enciclopedia Internacional de Ciencias Sociales.- Edit. Aguilar. Madrid, 1977; vol. 9; pgs. 727-729. 36 - - ARENAL, C. del.- op. cit.; pgs.355 y ss. MESA, R.- op. cit.; pgs. 48 y ss. CALDUCH, R.- "Las relaciones internacionales en la obra de los dirigentes soviticos: una reflexin terica".- Revista de Estudios Internacionales; vol. II, n 3 (julio-septiembre 1981); pgs. 543 y ss. 37 - DUROSELLE, J.B.- Le conflict de Trieste.- Bruselas, 1966. LEGAULT, A.; STEIN, J.; STEINBERG, B.- "L'Analyse comparative des conflicts intertatiques dyadiques (CADIC)".- tudes internationales; vol. IV, n 4 (diciembre 1973); pgs. 480-501. 38 - DEUSTCH, K.W.- The Analysis of International Relations.- Edit. Prentice-Hall International. Englewood Cliffs, 1968. Traduccin al castellano de E.J. Prieto.- El anlisis de las relaciones internacionales. Buebos Aires, 2 ed., 1974; pgs. 126 y ss.

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Finalmente se encuentran los modelos globales que intentan reproducir todas las variables y relaciones fundamentales para comprender el funcionamiento dinmico de una parte de la sociedad internacional. Por tanto, se trata de modelos elaborados siguiendo un anlisis macrointernacional. 40 Su desarrollo ha estado presidido por la conjugacin de la dinmica de sistemas y el empleo del ordenador, con todas sus potencialidades de rapidez y fiabilidad en el clculo numrico. El origen de este tipo de modelizacin se encuentra en los modelos elaborados por Forrester, del Instituto Tecnolgico de Masssachussets, denominados World-1 y World-2, 41 antecedentes del modelo empleado por Meadows en el Primer Informe del Club de Roma. 42 Estas primeras iniciativas, muy pronto fueron seguidas por otras modelizaciones. Entre ellas debemos mencionar: el Segundo Informe del Club de Roma, realizado por Mesarovic y Pestel, en el que se realiza una crtica del criterio de proyeccin matemtica empleado por Meadows: el crecimiento exponencial. 43 Estas crticas, junto con la aparicin de otros muchos modelos globales, como el SIMLINK elaborado por el Banco Mundial, el Modelo de Relaciones Internacionales en la Agricultura, desarrollado por tcnicos del Consejo del Medio Ambiente y del Departamento de Estado de los Estados Unidos o el Interfuturos de la OCDE, indujero a Meadows a realizar una nueva revisin de su modelo originario, comparando la evolucin real de los datos de las variables con los que haba considerado e introduciendo algunas correcciones adicionales, para llegar a la conclusin de que las previsiones iniciales se estaban cumpliendo antes, incluso, de lo previsto. 44 Desde luego todos estos esfuerzos de modelizacin terica, no han sido baldos. En primer lugar, han pemritido adquirir un conocimiento prctico sobre algunos de los principales problemas de la realidad internacional y, lo que tal vez resulta ms importante, han generado una conciencia poltica sobre la necesidad de su resolucin. En segundo lugar, la similitud de conclusiones que se alcanzan entre ellos, a pesar de la diversidad de datos y tcnicas empleados en su elaboracin, permiten confirmar la validez general de sus anlisis sobre los problemas internacionales y, por tanto, de las tendencias de su evolucin futura, si no articulan medidas correctoras de las causas que los generan, especialmente difciles de adoptar cuando se trata de problemas globales. Y, sobre todo, gracias a estos esfuerzos de modelizacin terica, las ciencias sociales, en general, y la disciplina de las Relaciones Internacionales, en particular, han visto enriquecerse sus instrumentos metodolgicos de investigacin y anlisis, abriendose de este modo un camino lleno de posibilidades que apenas hemos comenzado a recorrer.
- DEUSTCH, K.W.- Tides among Nations.- Nueva York, 1979. Traduccin al castellano de L. Surez.- Las naciones en crisis.- Edit. Fondo de Cultura Econmica. Mxico, 1981. 40 - POQUET, G.- "Los lmites de la modelizacin global".- Revista Internacional de Ciencias Sociales; vol. XXX, n 2 (1978); pgs. 299 y ss. 41 - TAMAMES, R.- La polmica sobre los lmites del crecimiento. Edit. Alianza. Madrid, 1974. 42 - MEADOWS, D.H.; MEADOWS,D.L.; RANDERS, J.; BEHRENS, W.W.- The Limits Growth..- Nueva York, 1972. Traduccin al castellano de M Soledad Loaeza.- Los lmites del crecimiento. Edit. Fondo de Cultura Econmica. Mxico, 1 ed. 1972; 2 reimp. 1975, pgs 253 y ss. 43 - MESAROVIC, M.; PESTEL, E.- Mankind and The Turning Point. The Second Report to The Club of Rome.- sin lugar de edic.,1974.Traduccin al castellano de Miguel A. Crdenas.- La Humanidad en la encrucijada. Segundo Informe del Club de Roma.- Edit. Fondo de Cultrua Econmica. Mxico, 1975. 44 MEADOWS, H.; MEADOWS, D.- Ms all de los lmites del crecimiento.- Edit. Ediciones El Pas, S.A./ Aguilar S.A. de Ediciones. Madrid, 1992.
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Sin embargo, sera inadecuado concluir este apartado, sin hacer referencia a la principal limitacin que presentan los modelos ms sofisticados hasta ahora desarrollados, es decir los globales. Se trata de la excesiva concentracin en las variables cuantificables en detrimento de aquellas otras que, sin ser cuantificables, resultan decisivas en la interpretacin causal de ciertos fenmenos internacionales.

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7.- LA OBSERVACION, LA COMPARACION Y LA EXPERIMENTACION EN LAS RELACIONES INTERNACIONALES Se suele afirmar que la observacin de la realidad constituye el origen de todo el proceso de investigacin cientfica, ya que es esa "mirada atenta" de los sucesos la que nos permite obtener los datos esenciales y descubrir las "anomalas", es decir aquellas parcelas de la realidad cuya comprensin no resulta evidente de forma inmediata y, por tanto, nos plantea interrogantes para cuyas respuestas, debemos desarrollar todo el proceso investigador siguiendo una determinada metodologa. Este primer significado del trmino, se corresponde con lo que Pardinas ha denominado la "observacin heurstica". 45 Pero la observacin tambin se emplea para llevar a cabo la verificacin de las hiptesis que se formulan en los inicios del proceso investigador. Sin embargo, esta segunda categora presenta una clara diferencia con la anterior, puesto que se trata de una observacin dirigida por las exigencias del mtodo empleado para realizar la investigacin. En el mbito de las Relaciones Internacionales, ambos tipos de observacin presentan algunas particularidades que conviene conocer. En buena medida, estas particularidades se imponen por el propio objeto material de la disciplina, ya que la sociedad internacional posee un alto grado de complejidad originado por sus distintos miembros colectivos, las innumerables relaciones que se establecen entre ellos, as como por las intrincadas y mtuas influencias entre la dimensin interior y externa de los actores internacionales. El resultado de esta complejidad real no puede ser otro que la dificultad en su observacin. 46 Ante todo, la observacin de los fenmenos internacionales rara vez se puede realizar de forma directa por el investigador ya que, por lo general, ste no tiene un acceso directo o una participacin inmediata en los sucesos internacionales. En consecuencia, el internacionalista se convierte en tributario de los datos o la informacin que pueda obtener de aquellas personas o entidades que realizan la observacin directa de los sucesos. Naturalmente, el carcter indirecto de la observacin en las Relaciones Internacionales, constituye una dificultad intrnseca que el investigador debe superar para reducir, en la medida de lo posible, los errores de percepcin que cometen los observadores directos. Ello nos remite al problema de la existencia, del rigor y de la fiabilidad de las fuentes de informacin, que para el internacionalista se convierte en una cuestin metodolgica central. 47 En segundo lugar, la falta de inmediatez en la observacin, introduce un cierto desfase temporal entre la ocurrencia de los sucesos y el conocimiento y observacin de los mismos por
- PARDINAS, F.- Metodologa y tcnicas de investigacin en ciencias sociales. Introduccin elemental.- Edit. Siglo XXI editores. Mxico, 1 ed. 1969; 11 ed., 1973; pgs. 48-49. 46 - Merle ha sealado detalladamente las principales dificultades que se le presentan al internacionalista en el proceso de observacin. No obstante, la distincin que realiza este autor entre observacin directa y observacin estadstica resulta discutible. La primera no es tal, ya que una atenta lectura de su contenida demuestra que se identifica observacin directa con observacin de fenmenos contemporneos, para diferenciarla de la observacin histrica. En cuanto a la segunda, la utilizacin de las tcnicas estadsticas no impide que se apliquen a fenmenos contemporneos, luego sus observaciones deberan ser catalogadas como observaciones directas tal y como las ha considerado este autor. MERLE, M.- Sociologie des relations internationales.- Edit. Jurisprudence Generale Dalloz. Pars, 4 ed. 1988. Traduccin al castellano por Roberto Mesa.- Sociologa de las relaciones internacionales.- Edit. Alianza. Madrid, 2 ed. revisada y ampliada, 1991; pgs. 114-135. 47 - Sobre el tema de las fuentes de informacin, vase: SAHAGUN, F.- op. cit.; pgs. 55-60 y 87-148.
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el internacionalista. Esta brecha temporal entre los acontecimientos internacionales y su consideracin por el investigador, no slo le imprime una cierta dimensin histrica sino que adems amplia el campo de la subjetividad en la propia actividad observadora. El desarrollo tecnolgico experimentado por los medios de comunicacin, ha permitido una constante reduccin de este desfase temporal para los sucesos internacionales del presente. Cada vez ms se acenta la inmediatez entre la observacin directa y el conocimiento de sus resultados por el investigador. Por ltimo, la observacin de la realidad internacional adolece de una elevada fragmentariedad, resultante de dos factores fundamentales: la amplitud del campo de investigacin y la pluralidad de fuentes de observacin directa. En efecto, el campo de observacin de las Relaciones Internacionales incluye una enorme y diversa gama de fenmenos, imposibles de captar a travs de observaciones unitarias o totalizadoras. Se requieren mltiples contemplaciones directas para captar sus caractersticas y particularidades, lo que provoca, necesariamente, un cierto grado de parcelacin en los datos o informaciones que le aportan al internacionalista. Pero la fragmentariedad tambin se produce por la multiplicidad de observadores directos que pueden concurrir en la apreciacin de un mismo fenmeno internacional. Cada observador concentrar su atencin en determinados aspectos del fenmeno y, lo que resulta ms destacable, realizar una particular interpretacin de la realidad observada que incorporar, explcita o implcitamente, en los resultados de su observacin. La fragmentariedad de la observacin impone al internacionalista la necesidad metodolgica de realizar una reconstruccin intelectual de los distintos datos o informaciones obtenidos de los observadores directos para poder alcanzar una idea general o una visin de conjunto del fenmeno internacional que investiga y, de este modo, poder descubrir las interrogantes a las que debe dar respuesta. En todo caso, la observacin nos poroporciona informacin, y por consiguiente cierto nivel de conocimiento, sobre la realidad internacional. De las distintas formas de observacin aplicables a las ciencias sociales que establece Duverger, es decir la que se realiza de un modo directo, ya sea extensiva o intensiva, y la que se lleva a cabo a travs de los documentos, resulta obvio que es sta ltima la que ms ha nutrido las investigaciones internacionales. 48 Gracias a ella podemos emplear el mtodo descriptivo en sus distintas formas ( narrativa; histrica; estadstica; grfica; etc.), dependiendo de la naturaleza de los datos y de la informacin obtenida, y de este modo nos facilita la acumulacin de descripciones. Una de las formas descriptivas especialmente significativas para el internacionalista es la que realiza la Historia, sobre todo la denominada historia episdica (histoire venementielle), ya que gracias a ella se puede tener un primer conocimiento de los datos relevantes que afectaron a las realidades internacionales pretritas.
- Duverger establece una clasificacin de las observaciones tan sencilla como til, distinguiendo entre la observacin documental, la observacin directa extensiva, que est destinada a amplias comunidades sociales y que descansa en la realizacin de encuestas, y la observacin directa intensiva, dirigida a conocer en profundidad la realidad social de pequeas comunidades o individuos y que utiliza las tcnicas de la entrevista, los test o la observacin participativa. DUVERGER, M.- op. cit.; pgs.115-354.
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La acumulacin de descripciones sobre los fenmenos internacionales nos abre el camino para el anlisis y la comparacin. El anlisis nos permite un conocimiento ms profundo de cada fenmeno internacional descrito, al desentraar sus componentes o variables esenciales, diferencindolas y clasificndolas, as como las relaciones de causalidad que se pueden descubrir entre ellas. El mtodo analtico nos permite realizar dos importantes tareas del proceso de teorizacin: la conceptualizacin y la clasificacin. Sin embargo, este mtodo descansa en el supuesto epistemolgico de que la realidad puede ser descompuesta intelectualmente en sus diversos componentes, sin que en dicho proceso se pierdan elementos esenciales para su comprensin. Un supuesto que, ciertamente podemos calificar de problemtico. Cuando se ha realizado el anlisis de un cierto nmero de fenmenos internacionales a partir de sus descripciones, surge la posibilidad de utilizar el mtodo comparativo. Gracias a l podemos realizar una comparacin entre los principales elementos (constantes, variables y relaciones) de la realidad que se investiga con los de otras realidades similares ya conocidas Este mtodo obliga a descubrir tanto las semejanzas (bsqueda analgica) como las diferencias (bsqueda diferenciadora) o incluso las oposiciones (bsqueda antagnica). El empleo del mtodo comparativo nos permite distinguir entre los sucesos o variables que se repiten en diversas realidades internacionales y, por tanto, que poseen un carcter de generalidad y aquellos otros que son exclusivos de cada una de ellas y slo podemos considerarlos desde su singularidad. En la medida que el mtodo comparativo lo apliquemos a una misma realidad internacional en momentos temporales diferentes, nos permitir captar la dimensin dinmica en trminos histricos de esa realidad, al poder diferenciar los sucesos o variables estructurales, que tan slo cambian a largo plazo, de los meramente coyunturales. El mtodo comparativo nos permite la generalizacin de las conclusiones obtenidas de los anlisis internacionales y, por tanto, la posibilidad de formular leyes cientficas, entendidas como "relaciones entre variables, siendo las variables conceptos que pueden adquirir diferentes valores", 49 ya que para que puedan formularse no basta con que exista una relacin entre variables, adems es necesario que dicha relacin se observe repetidamente en otros sucesos internacionales, ya que slo en semejantes condiciones podemos adquirir una slida expectativa, es decir una expectativa avalada por una elevada probabilidad, de que esa relacin se producir en futuros sucesos siempre que se mantengan idnticas las restantes variables fundamentales (condicin caeteris paribus). Este procedimiento de generalizacin que sustenta las leyes cientficas es conocido con el trmino de inferencia. 50

- WALTZ, K.N.- op. cit.; pg. 9. - Aron ha puntualizado muy certeramente la relacin entre evidencia e inferencia, o si se prefiere entre datos y proposiciones cientficas, en los siguientes trminos: "Los conceptos de evidencia e inferencia, aunque tienen un significado posible, no pertenecen a mi vocabulario espontneo. El primero designa, en mi opinin, el conjunto de datos de que dispone el sabio (y en su caso el historiador) antes de arriesgarse a las inferencias, es decir a los diversos actos mediante los cuales alcanzar proposiciones ms o menos generales, que no estaban contenidas en los datos pero que, sin embargo, se pueden obtener de ellos, deducidas o inducidas legtimamente. (...) Ms an: la distinicin que hemos establecido entre los datos y las inferencias es falsamente clara. Madie ignora que, en las ciencias naturales ms avanazadas, la inferencia de ayer es el dato de hoy. Las
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Pero adems, algunos autores consideran que el mtodo comparativo puede ser empleado como una forma particular de experimentacin. 51 En efecto, Bernard en relacin con la medicina estableci la diferencia entre las experiencias provocadas y las experiencias invocadas 52 para diferenciar entre los fenmenos que se producen como resultado de la manipulacin de la realidad por el investigador de aquellos otros que se producen de forma natural y respecto de los cuales el investigador slo los utiliza para la observacin y/o la verificacin. Este planteamiento, aunque resulta intelectualmente muy sugerente, amenaza con inducir a un grave error epistemolgico que conviene despejar. La distinicin realizada por Bernard tiene ms que ver con la doble funcin que atribuamos a la observacin que con la posible similitud entre sucesos experimentales y sucesos naturales. Si consideramos detenidamente el papel que metodolgicamente se la concede a la experimentacin, coincidiremos fcilmente en que desempea una funcin de verificacin de las hiptesis o de las teoras. Por tanto, la experimentacin, entendida como sucesos manipulados por el investigador, faclita la observacin dirigida y a travs de ella la comprobacin o disprobacin de la validez de ciertas relaciones causales o de ciertas leyes cientficas. Rara vez se emplea la experimentacin para permitir la observacin heurstica, aunque suele ocurrir que la experimentacin de ciertos sucesos produzca resultados inesperados que abren nuevos interrogantes cuya resolucin requerir un nuevo proceso de investigacin y verificacin. Si admitimos que la verificacin puede alcanzarse a travs de la observacin dirigida de fenmenos experimentales o naturales, entonces podemos admitir la distinicin de Bernard y con ella la idea de que el mtodo comparativo nos facilita una forma de verificacin alternativa a la que nos proporciona la autntica experimentacin cuando sta no puede realizarse. Sin embargo, no podemos ignorar las diferencias entre ambas formas de verificacin ni tampoco el hecho de que las ciencias experimentales tambin gozan de la verificacin comparativa. De cualquier modo, el internacionalista, al igual que el historiador aunque no del mismo modo, debe admitir imposibilidad de verificar sus hiptesis o sus teoras mediante la experimentacin y, consiguientemente, debe recurrir a la verificacin comparativa, ya sea histrica o del presente, para corroborar su validez. Considerado deste este punto de vista, el debate metodolgico entre los partidarios del empirismo inductivo o del normativismo deductivo, resulta en buena medida ajeno a nuestra disciplina ya que nos alejan de los primeros las dificultades de la observacin directa y de la verificacin experimental, pero tampoco nos aproximan a los segundos las singularidades histricas, consustanciales a los fenmenos internacionales, y las limitaciones intrnsecas de la verificacin comparativa. 53
proposiciones establecidas antes por inferencia se convierten en los datos de que parte el sabio. Teoras y hechos estn integrados de tal manera que sera vano intentar separarlos con algn rigor." ARON, R.- Dimensiones...op. cit.; pgs. 57-58. 51 - Para un amplio estudio de la experimentacin en la investigacin social, vase: CEA, M.A.- op. cit.; pgs. 293-314. 52 - Citado por JANSSENS, P.- op. cit.; pg. 85. 53 - Waltz es especialmente crtico tanto respecto del mtodo deductivo como del inductivo, cuando escribe: Nada puede ser explicado por deduccin, pues los resultados de la deduccin se desprenden

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Es posible que las especificidades que hemos sealado, tanto en la observacin como en la metodologa, confieran a la disciplina de las Relaciones Internacionales ese perfil de conocimiento basado en las "teoras dbiles" que, segn Waltz, caracterizan a las ciencias sociales y que, en opinin de Hoffmann, explican "porqu una teora del comportamiento indeterminado no puede consistir en un conjunto de proposiciones que expliquen leyes generales que hacen posible la prediccin, y que es poco lo que pueden hacer ms all de definir conceptos bsicos, analizar configuraciones bsicas, esbozar los rasgos permanentes de una lgica constante de comportamiento, en otras palabras hacer inteligible el campo." 54 Yo no lo creo, pero de cualquier modo el desarrollo de nuevas formas de razonamiento lgico, el refinamiento de las tecnicas estadsticas y de las teoras matemticas, el espectacular avance en la obtencin, transmisin y utilizacin de los datos y de la informacin, todo ello combinado con los resultados que se estn alcanzando en algunas de las principales ciencias auxiliares, nos permiten legtimamente cuestionar la actualidad de estas visiones que subestiman la capacidad cognoscitiva, explicativa y predictiva de nuestra disciplina y que fueron formuladas hace ya dos dcadas.

lgicamente de las premisas iniciales. La deduccin puede ofrecer ciertas respuestas, pero nada nuevo; lo que se deduce ya est presente, o bien en las premisas mayores tericas o en las premisas menores empricas que se ocupan de las cuestiones observadas previamente. La induccin puede ofrecer nuevas respuestas, pero nada seguro; la multiplicacin de observaciones particulares no puede respaldar nunca una afirmacin universal. La teora es fructfera porque trasciende el enfoque hipottico-deductivo, que es necesariamente estril. Tanto la deduccin como la induccin son indispensables en la construccin de la teora, pero su utilizacin combinada slo da nacimiento a una teora si emerge una idea creativa." WALTZ, K.N.- op. cit.; pgs. 22-23. En nuestra opinin esta crtica nos parece excesiva, pues ignora algunas de las principales ventajas que cada uno de estos mtodos aporta al desarrollo del conocimiento cientfico, para conceder un valor determinante a lo que denomina "idea creativa". Sin negar el decisivo papel desempeado por estas "ideas creativas" en la evolucin de las ciencias, tal y como ya lo demostrara Kuhn, resulta evidente que la deduccin y la induccin desempean importantes funciones metodolgicas al facilitar la acumulacin de conocimientos, la formulacin de leyes y la elaboracin de modelos tericos. En resumen, cabra decir que a pesar de las crticas de Waltz, las ciencias han avanzado gracias a la deducicn y a la induccin. 54 - HOFFMANN, S.- op. cit.; pg. 28.

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8.- LA INDETERMINACION DE LOS NIVELES DE ANALISIS Y SUS CONSECUENCIAS EN EL DEBATE DOCTRINAL DE LAS RELACIONES INTERNACIONALES Suele ser frecuente que los investigadores de las Relaciones Internacionales aborden sus estudios sin diferenciar suficientemente la distinta naturaleza y alcance de los fenmenos internacionales que analizan. Este es un error que atenta directamente contra el ms elemental rigor metodolgico. Por ejemplo, es habitual y muy poco racional equiparar fenmenos como el de la disuasin nuclear, la deuda internacional o el subdesarrollo, que afectan al conjunto de la Sociedad Internacional, con otros como la rivalidad rabe-israel, la intervencin del Fondo Monetario Internacional en la crisis financiera de un pas o el intervencionismo militar de una gran potencia europea en el Africa Subsahariana, fenmenos estos que an admitiendo la importancia de su estudio, slo afectan a un rea regional o a un reducido nmero de pases. Resulta urgente e imprescindible generalizar el empleo de un criterio diferenciador en el anlisis de los diversos fenmenos internacionales porque como afirman Kegley y Wittkopf: "La diferenciacin de niveles de anlisis es importante porque enfatiza que las transformaciones en la poltica mundial no pueden atribuirse a una nica fuente sino que debe considerarse la influencia de muchas causas. El sentido comn sugiere que existen interrelaciones entre todos los niveles y que las tendencias y transformaciones en la poltica mundial estn vibculadas simultneamente a las fuerzas que operan en cada nivel." 55 Algunos autores ya lo han adoptado tales niveles analticos, aunque muy pocos han logrado desarrollar sus formulaciones tericas en consonancia con las distinciones adoptadas. En efecto, segn Singer podemos distinguir dos niveles de anlisis internacional, el nivel del Estado nacional y el nivel del sistema internacional. Aunque esta divisin resultaba demasiado simplificadora al excluir las diversas categoras de actores internacionales no estatales, hay que reconocerle el mrito de ser uno de los primeros intentos serios de introducir una perspectiva analtica diferenciada en los estudios internacionales. 56 Aos ms tarde, en la obra de Reynolds, encontramos ya una clara diferencia entre las microrelaciones internacionales, que incluyen el estudio de los actores y de la poltica exterior, y las macro-relaciones internacionales, a las que pertenecen los diferentes tipos y niveles de estudios sistmicos de la sociedad internacional 57 Ms recientemente, Rosenau planteaba el estudio de la realidad internacional a partir de tres mbitos analticos a los que denomina parmetros y que se corresponden con el nivel individual o micro, el nivel estructural o macro, en el que operan las colectividades, y el nivel que vincula a los dos anteriores o relacional, en el que se describen las formas de articulacin que dan origen

- KEGLEY, Ch. W.; WITTKOPF, E.R.- World Politics. Trend and Transformation.- Edit. St. Martin's Press Inc. New York, 5 ed., 1995; pgs. 40. 56 - SINGER, J.D.- "The Level of Analysis Problem in International Relations".- KNORR, K. Y VERBA, S. (edits.).- The International System.- Edit. Princenton University Press. Princenton, 1961; pgs. 77-92. 57 - REYNOLDS, P.A.- An Introduction to International Relations.- Edit. Longman Group Lted. Londres, 1971. Traduccin de Francisco Condomines.- Introduccin al estudio de las Relaciones Internacionales.- Edit. Tecnos. Madrid, 1977.

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a las diversas colectividadesque operan en el mbito internacional a partir de las relaciones que se establecen entre los individuos. 58 Tambin Hoffmann introdujo una divisin analtica en tres niveles: el de las prcticas e instituciones que garantizan el orden internacional y que para este autor constituye el nivel ms descriptivo; un segundo nivel formado por una teora general de las relaciones interestatales, en el que dominan las teoras del realismo poltico y, por ltimo, un tercer nivel constituido por las teoras de los sistemas interestatales, destinadas a estudiar el conjunto formado por las unidades competidoras. 59 Finalmente, en la obra de Kegley y Wittkopf se sealan tres niveles analticos diferentes: el ms reducido lo constituye el nivel individual, en el que se aborda el estudio de las caractersticas personales de los decisores, tanto de los Estados como de los actores no estatales; un nivel superior o nivel nacional, en el que se investigan las unidades que participan en los procesos de decisin de la poltica exterior de los Estados, as como el resto de variables que inciden en dicha poltica, tales como el tamao, la localizacin, el poder, etc.; finalmente se encuentra el nivel sistmico que incluye aquellas macro-propiedades que influyen en el conjunto del contexto global y entre las que pueden citarse: las normas jurdicas internacionales, la distribucin del poder o el nmero de alianzas contrapuestas. 60 Siguiendo con la orientacin de estos autores y con una distincin que se ha demostrado muy fructfera en la ciencia econmica y la sociologa, proponemos dos niveles analticos para los estudios de las Relaciones Internacionales: la Macrointernacionalidad y la Microinternacionalidad. El primero de estos niveles, aborda el anlisis de los fenmenos relevantes para la Sociedad Internacional considerada en su conjunto. Es por tanto la perspectiva holstica, es decir la que contempla la Sociedad Internacional como un todo, junto con el criterio de relevancia los que determinan la seleccin y estudio de los fenmenos considerados macrointernacionales. 61 Naturalmente, la adopcin de este criterio arroja resultados distintos segn consideremos la sociedad internacional de los siglos XIX y XX que posee un alcance mundial, de las sociedades internacionales que le precedieron histricamente y que nunca rebasaron el marco geopoltico intercontinental. Esta distincin entre lo que Medina 62 ha denominado las sociedades internacionales particulares y la sociedad internacional mundial, cuyo trnsito se produjo con el cierre espacial que segn Merle se alcanz durante el siglo pasado, resulta crucial para
- Aunque Rosenau desarrolla sus niveles de anlisis en su obra: ROSENAU, J. N.- Turbulence in World Politics. A Theory of Change and Continuity.- Edit. Princenton University Press. Princenton, 1990; sin embargo, unos aos antes haba ya desarrollado ampliamente su interpretacin del nivel relacional en un artculo aparecido en 1979: ROSENAU, J. N.- "Le touriste et le terroriste ou les deux extrmes du continuum transnational".- Etudes Internationales, vol. X; n 2 (junio 1979). 59 - HOFFMANN, S.- Janus and Minerva. Essays in the Theory and Practice of International Politics.Edit. Wetsview Press Inc. Boulder, 1987. Traduccin de Patricia Mc Elroy.- Jano y Minerva. Ensayos sobre la guerra y la paz.- Edit. Grupo Editor Latinoamericano. Buenos Aires, 1991; pgs. 98-100. 60 - KEGLEY, Ch. W.; WITTKOPF, E.R.- op. cit.; pgs. 39-40. 61 - Para el criterio de relevancia seguimos la definicin adoptada por Schwarzenberger: SCHWARZENBERGER, G.- op. cit.; pg. 4. Vase tambin: CALDUCH, R.- Relaciones Internacionales.- Edit. Ediciones de Ciencias Sociales. Madrid, 1991. Pgs. 22-24. 62 - MEDINA, M.- Teora y formacin de la sociedad internacional.- Edit. Tecnos. Madrid, 1983; pgs. 29-30.
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entender correctamente qu fenmenos deben considerarse macrointernacionales en cada perodo histrico. Al nivel de anlisis macrointernacional pertenecen, entre otros, los fenmenos relativos a las estructuras e instituciones de la Sociedad Internacional, la naturaleza y caractersticas de sus principales categoras de actores, sus relaciones bsicas, los principales retos o problemas que afectan al conjunto o la mayora de los miembros de la sociedad internacional, as como las formas de enfrentarlos o resolverlos y, finalmente, las tendencias de su evolucin histrica. Las teoras estructuralistas y transnacionalistas se encuentran dominadas por el enfoque macrointernacional. Sin embargo, slo determinado grupo de modelos elaborados con la teora de sistemas han seguido esta perspectiva, pues muchos otros se inscriben plenamente en el terreno de la microinternacionalidad. Existen dos razones para diferenciar este nivel de anlisis macrointernacional. En primer lugar por la importancia intrnseca de los fenmenos que afectan a toda la Sociedad Internacional respecto de aquellos otros que slo afectan a una parte de la misma. En segundo trmino, porque las consecuencias de las conductas y las soluciones a los problemas de alcance general son sustativamente diferentes de aquellas que pueden darse entre un reducido nmero de actores internacionales. Por ej. el agotamiento en la disponibilidad de recursos energticos y materias primas no renovables para un pas se resuelve fcilmente mediante su importacin sin necesidad de que modifique sus pautas de consumo. Desde la perspectiva macrointernacional, este problema slo puede resolverse mediante una reduccin de las pautas de consumo hasta que logren encontrarse productos sustitutivos de aquellos o nuevas fuentes de abastecimiento. El nivel de anlisis microinternacional, aborda aquellos fenmenos que slo resultan destacables desde la ptica de un actor internacional o de un reducido nmero de ellos. El ncleo terico de este nivel analtico lo constituye el estudio de la poltica exterior de los Estados, pero junto a l se consideran tambin los fenmenos relativos a la organizacin interna, el proceso decisorio o las principales relaciones entre actores internacionales no estatales, por ej. las ONG o las Empresas Multinacionales. Junto a las teoras de la Poltica Exterior de los Estados, suelen desarrollar anlisis microinternacionales las teoras de la decisin, las teoras del conflicto, las teoras de la comunicacin, las teoras de la integracin, los trabajos que utilizan la teora y dinmica de sistemas aplicada a las relaciones exteriores de los Estados o de las OIG y los denominados "area studies", es decir los estudios interdisciplinares aplicados a los pases de una misma regin.y a las relaciones entre ellos. 63 Uno de los problemas centrales que suscita el empleo metodolgico de estos niveles de anlisis, consiste en la difcil adscripcin de algunos fenmenos internacionales que por su naturaleza pueden ser reclamados como propios tanto por la macro como por la microinternacionalidad. Entre ellos podemos citar la disuasin nuclear entre Estados Unidos y la URSS; el proceso de integracin europea; la desintegracin del bloque comunista; etc. Esta dificultad es fcilmente superable desde el punto de vista metodolgico ya que la distincin entre ambos niveles de anlisis no se realiza en funcin del alcance internacional intrnseco a los fenmenos sino atendiendo al marco intelectual de referencia adoptado para su estudio. En otras palabras, no estamos afirmando que los fenmenos internacionales deban adscribirse a una u otra de ambas categoras de anlisis porque slo sean relevantes para el conjunto de la sociedad internacional o para alguno de sus actores, sino porque el
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- Para un anlisis detallado de las aportaciones de estas teoras, vase: ARENAL, C. del.- op. cit.; pgs. 243-305.

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centro de atencin terica atribuye relevancia a uno u otro de estos planos que participan de la misma y nica realidad internacional. En consecuencia, si analizamos las interacciones que configuran la disuasin nuclear entre las dos superpotencias desde la perspectiva de las decisiones y conductas adoptadas por cada una de ellas y de sus consecuencias recprocas, nos habremos situado en el nivel microinternacional, por el contrario, si tratamos de conocer los condicionamientos y consecuencias que la disuasin nuclear provoca en el conjunto de la estructura poltica internacional, entonces estaremos situndonos en el marco de la macrointernacionalidad. Precisamente porque es la perspectiva intelectual del investigador la que determina el nivel analtico al que se adscribirn los fenmenos internacionales y, consiguientemente, los mtodos y modelos tericos preferentes para su investigacin, resulta inexcusable realizar una identificacin expresa del nivel de anlisis internacional empleado. Ello no es slo una cuestin de rigor metodolgico sino tambin una importante medida de prevencin frente al empleo confuso de mtodos y tcnicas inadecuados o la errnea identificacin de relaciones de causalidad inexistentes. La falta de una diferenciacin de niveles analticos ha contribuido decisivamente a una generalizada confusin en el debate doctrinal que poda haberse evitado fcilmente. En efecto, las teoras del realismo clsico se demostraron muy slidas para explicar una parcela esencial de la realidad internacional desde el nivel microinternacional. Concretamente aportaron una explicacin vlida a la poltica exterior de los Estados que se desarrolla a travs de las relaciones de conflicto y de asociacin, mediatizadas por el poder. 64 Sin embargo, al partir del supuesto de que la sociedad internacional careca de un verdadero y eficaz orden poltico, abortaron toda posibilidad de investigar los mismos fenmenos que atraan su atencin desde el nivel macrointernacional. Es ms, pretendieron generalizar las conclusiones obtenidas desde sus anlisis microinternacionales al conjunto de la sociedad internacional, ignorando que al realizar esta proyeccin terica estaban, en realidad, abandonando el marco intelectual de referencia en el que haban desarrollado sus estudios. Tomemos por ejemplo a Morgenthau y su formulacin terica sobre los fundamentos del realismo poltico como disciplina cientfica diferenciada de las restantes ciencias sociales y dedicada al estudio de la realidad internacional. Desde las primeras pginas de su obra central Politics among Nations, observamos su constante confusin entre los niveles de anlisis. No slo emplea indistintamente los trminos de poltica exterior y de poltica internacional como si ambos perteneciesen al mismo plano interpretativo sino que las leyes o explicaciones generales observables en la primera son directamente aplicables a la segunda. En definitiva, para este autor la poltica internacional no es mas que la simple agregacin resultante del juego de las polticas exteriores de los Estados, sin que ello suponga ni exija cambio alguno de perspectiva terica. He aqu algunos ejemplos: "Lo que puede afirmarse del carcter general de las relaciones internacionales es vlido tambin para la nacin Estado como ltimo punto de referencia de la poltica exterior en la poca actual. (...)

- Para una tipologa de las diversas relaciones internacionales vase: CALDUCH, R.- op. cit.; pgs. 87 - 103.

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La poltica internacional, como toda poltica, es una lucha por el poder. Cualesquiera que sean los fines ltimos de la poltica internacional el poder es siempre la finalidad inmediata." 65 Aunque podramos agregar muchas otras citas en la misma direccin, stas nos bastan para comprobar que efectivamente para este autor la diferenciacin entre niveles analticos en el estudio de la realidad internacional resulta secundaria pues, al fin y al cabo, los postulados bsicos se pueden predicar tanto de la poltica exterior como de la poltica internacional o, incluso, de la poltica en general. Sin embargo, una cosa es afirmar que ciertos fenmenos internacionales ( por ej. la lucha por el poder) constituyen un elemento constante de la actuacin de los Estados a partir del cual se puede formular una ley cientfica y otra muy distinta es defender el supuesto de que el estudio de este fenmeno internacional arrojar las mismas conclusiones si lo consideramos a la luz de cada Estado o desde la ptica de la realidad que incluye a todos los Estados. Cul sera en este caso el inters nacional definido en trminos de poder del contexto mundial ?. Posee algn sentido terico la lucha por el poder contemplado desde la atalaya de la realidad mundial en su totalidad?. Puede constituir la guerra un instrumento til para acrecentar el poder del conjunto de la sociedad mundial y no slo para la mera redistribucin del poder entre sus miembros estatales?. Evidentemente, este tipo de interrogantes no pueden abordarse satisfactoriamente por el realismo poltico clsico simplemente porque su planteamiento terico, ciertamente exitoso, se ubica en el plano de la microinternacionalidad. Por esta razn, el verdadero envite superador de las limitaciones de esta corriente doctrinal no proceden de las teoras estructuralistas sino de los tericos del conductismo. El estructuralismo, marxista y no marxista, aplicado a las Relaciones Internacionales no puso en evidencia las limitaciones tericas del realismo poltico clsico, es decir no llev a cabo la falsacin popperiana de la teora vigente, por la sencilla razn de que se situ en otro nivel analtico, concretamente en el de la macrointernacionalidad, y porque se centr en otra categora de relaciones internacionales, las relaciones de dominacin econmica y social entre Estados. Ello facilit la articulacin de una nueva corriente doctrinal: el realismo estructuralista o neorrealismo, que trat de sintetizar los postulados microinternacionales del realismo poltico clsico con los fundamentos macrointernacionales del estructuralismo, 66 demostrndose, de paso, la validez del modelo de Imre Lakatos sobre el modo en que se realiza el progreso de la

- MORGENTHAU, H.J.- Politics among Nations. The Struggle for Power and Peace.- Edit. Alfred A. Knopf Inc. Nueva York, 1960. Traduccin de F. Cuevas Cancino.- La lucha por el poder y por la paz.Edit. Sudamericana. Buenos Aires, 1963; pgs. 13 y ss. dem.- Escritos sobre poltica internacional.- Estudio preliminar, traduccin y notas de Esther Barb. Edit. Tecnos. Madrid, 1990. 66 - KNORR, K.E.- The Power of Nations.- Edit. Basic Books Inc. Nueva York, 1975. Traduccin de Antonio Bonanno.- El poder de las naciones.- Edit. Belgrano. Buenos Aires, 1981. WALTZ, K.N.- Theory of International politics.- Edit. Addison-Wesley Publishing Company Inc., 1979. Traduccin de Mirta Rosenberg.- Teora de la poltica internacional.- Edit. Grupo Editor Latinoamericano. Buenos Aires, 1988. GILPIN, R.- The Political Economy of International Relations.- Edit. Princenton University Press. Princenton, 1987. Traduccin de Cristina Pia.- La economa poltica de las relaciones internacionales.- Edit. Grupo Editor Latinoamericano. Buenos Aires, 1990. RIOUX, J.F.; KEENES, E.; LEGAR, G.- "Le no-realisme ou la reformulation du paradigme hgmonique en relations internationales".- tudes Internationales, vol. XIX, n 1 (marzo 1988); pgs 60 y ss.

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ciencia a travs de las sntesis parciales entre teoras contendientes pertenecientes a un mismo programa de investigacin cientfica. 67 Como podemos comprobar, en la evolucin terica concreta de las Relaciones Internacionales como disciplina se han desarrollado dos niveles analticos claramente diferenciados, aunque todava semejante diferenciacin no ha tenido su adecuada traduccin en las reglas metodolgicas que presiden el trabajo de investigacin.

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- LAKATOS, I.- op.cit. pgs. 220-235

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9.- LA IMPORTANCIA METODOLOGICA DE LA PERIODIFICACION EN LAS RELACIONES INTERNACIONALES Un segundo problema metodolgico, todava no resuelto satisfactoriamente en nuestra disciplina, es el relativo a la incidencia de la variable temporal en la elaboracin de los modelos tericos y los trabajos empricos. En efecto, todos los internacionalistas coinciden en admitir el ineluctable carcter histrico de la sociedad internacional y, por consiguiente, la necesidad de considerar la influencia que el devenir temporal imprime en los actores y en la dinmica internacional. Sin embargo, la mayora de ellos han resuelto las interrogantes que semejante postulado abra en el corazn mismo de la disciplina, con el fcil recurso de la remisin a las aportaciones de la Historia, 68 ya fuese general o especfica (Historia de las Relaciones Internacionales), o con ocasionales referencias a sucesos histricos, incorporados al anlisis internacional como pruebas testimoniales de la veracidad de las hiptesis formuladas. 69 En realidad, esta forma de abordar el tratamiento del tiempo en la teora internacional, asocindolo a la historicidad de los sucesos internacionales no enfrenta la decisiva cuestin metodolgica sobre cmo transformar la variable temporal a categoras tiles para la formulacin de teoras de las Relaciones Internacionales. En definitiva, la cuestin que suscitamos consiste en la determinacin de unos criterios de periodificacin que resulten vlidos y fiables a la hora de elaborar los anlisis internacionales. Esta cuestin es comn a todas las ciencias sociales, pues si hay dos variables conocidas que inciden decisivamente en la existencia y conducta de los grupos humanos son: el espacio y el tiempo. Por lo que se refiere al espacio, las doctrinas geopolticas y las aportaciones de la
- No pretendemos introducir en este punto un estudio detallado de las aportaciones de la Historia como ciencia auxiliar de las Relaciones Internacionales, ni de la funcin nuclear que para la teorizacin internacional le atribuyen autores tan destacados como Aron; Carr; Kissinger; Renouvin; Duroselle; Bull; Luard o, entre los autores espaoles, Truyol y Medina. Sin duda el tratamiento de esta cuestin requiere un espacio y una atencin que exceden las posibilidades de este estudio. Bastar con afirmar que de todos los autores mencionados, probablemente Aron es el autor que le atribuye una funcin especfica en el proceso de teorizacin internacional que desarroll en el modelo conocido como sociologa-histrica. Todos los dems autores coinciden en atribuirle a la Historia dos aportaciones esenciales a las Relaciones Internacionales: en primer lugar, constituye la base de sucesos internacionales que permiten emplear la observacin y la comparacin para elaborar y contrastar la validez de los modelos tericos internacionales. En segundo trmino, permite desentraar las relaciones causales que contribuyen a explicar la estructura y dinmica de la realidad internacional presente, tanto desde la perspectiva micro como macrointernacional. ARON, R.- " Qu'est - ce qu'une Thorie des Relations Internationales ?".- Revue Franaise de Science Politique, n 5 (1967). dem.- Dimensions de la conscience historique.- Edit. Librairie Plon. Pars, 1 ed. 1961; 2 ed. 1964. Traduccin de David Huerta y Paloma Villegas.- Dimensiones de la conciencia histrica.- Edit. Fondo de Cultura Econmica. Mxico, 1 ed., 1 reimp. 1984. DUROSELLE, J.-B.- "L' tude des Relations Internationales".- Revue Franaise de Science Politique, n 2 (1952) TRUYOL, A.- La sociedad internacional.- Edit. Alianza. Madrid, 2 ed., 1993. 69 - En cierta medida, este tipo de tratamiento terico del tiempo como variable analtica de las Relaciones Internacionales, incide en el error denunciado en su da por Popper como una de las deficiencias bsicas de las ciencias sociales. POPPER, K.- The Poverty of Historicism.- ! ed., 1957. (Traduccin de Pedro Schwartz.- La miseria del historicismo.- Edit. Alianza. Madrid, 1 ed. 1961; 2 ed. 1973.)
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geografa humana desarrollada por Vidal de la Blache y sus discpulos de la escuela francesa ya se encargaron de demostrar su importancia explicativa para las relaciones interestatales y, de paso, las consecuencias que pueden ocasionar las interpretaciones deterministas de la Geopoltica como la doctrina del espacio vital, la doctrina del espacio de coprosperidad o la doctrina de las fronteras naturales, por citar slo algunos ejemplos significativos. 70 En cuanto al tiempo, Braudel ha demostrado la necesidad de categorizar los distintos ritmos que pueden descubrirse en la sucesin de acontecimientos histricos al diferenciar entre el tiempo breve o corto, propio de la historia tradicional apegada al acontecimiento, el tiempo cclico o de la coyuntura, introducido por la historia econmica y social, y, finalmente, el tiempo de larga o muy larga duracin, anclaje imprescindible para el desarrollo de una historia plurisecular. Pero este mismo autor reconoce que esta necesidad de periodificacin no es exclusiva de las ciencias histricas, sino que es aplicable a todas las dems ciencias sociales. En sus propias palabras: "Tanto si se trata del pasado como si se trata de la actualidad, una consciencia neta de esta pluralidad del tiempo social, resulta indispensable para una metodologa comn de las ciencias del hombre." 71 Si la diferenciacin entre los diversos tiempos sociales resulta, por tanto, indispensable para un desarrollo terico coherente y riguroso de las ciencias sociales, sorprende constatar que en las obras consideradas clsicas en nuestra disciplina no existan referencias inequvocas a la variable temporal y, mucho menos, a la necesidad de establecer divisiones temporales con fines analticos, es decir, de periodificar. Qu sentido tiene comparar un fenmeno internacional como el de la descolonizacin, que se desarrolla durante dos siglos, con otro como el de la rivalidad USA-URSS, que tan slo ha durado cuatro dcadas, o con la desintegracin sovitica que se ha consumado en tres aos?. Cmo podemos estudiar y explicar satisfactoriamente cada uno de estos tres fenmenos internacionales si no los diferenciamos y clasificamos segn un criterio tan elemental como su distinta duracin?, y an ms, cmo vamos a diferenciarlos y clasificarlos si no establecemos unas categoras de periodificacin?. Resulta evidente que esta es una laguna que est lastrando sensiblemente el progreso de nuestra disciplina al menos en dos aspectos concretos. Por una parte al dificultar, si no impedir, cualquier estudio prospectivo, ya que toda aplicacin concreta de los resultados obtenidos por la investigacin internacional requiere, para poder sustentar con rigor un pronstico ( previsor o predictivo), la determinacin del perodo en el que las conclusiones alcanzadas sern vlidas porque lo sean tambin las variables principales empleadas en el modelo terico respecto de la realidad internacional. 72
- KLEIN, J.- "Renaissance de la gopolitique. Espace, frontires et peuples dans l'organisation de la scurit europenne".- tudes Internationales; vol. XXVI, n 2 (junio 1995); pgs. 347-360. 71 .- BRAUDEL, F.- op. cit; pg. 63 72 - Ya se adopte un planteamiento dbil sobre la capacidad de prognosis de las Relaciones Internacionales, como lo hace el modelo aroniano al introducir la praxeologa como la etapa que da sentido ltimo al esfuerzo de teorizacin y verificacin sociolgica e histrica, o, por el contrario, se adopte una posicin fuerte sobre las oportunidades que ofrece nuestra disciplina en la formulacin de predicciones sobre la evolucin futura de la realidad internacional, lo cierto es que en ambos casos la periodificacin se convierte en la piedra de toque para especificar el grado de validez de los modelos tericos empleados y, en consecuencia, de la fiabilidad de los estudios prospectivos. Como lo ha afirmado muy certeramente Braudel:
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Por otra parte, resulta imposible elaborar modelos rigurosos de simulacin de la realidad internacional, sin incorporar la variable temporal diferenciada segn unos criterios que deben ser acordes con los diversos fenmenos de la realidad internacional que pretenden reproducirse en la simulacin. Como sealaremos ms adelante, cerrarse el camino de la simulacin por ordenador por falta de criterios de periodificacin, supone abandonar una, y tal vez la ms importante, lnea de investigacin emprica que se abre actualmente a las Relaciones Internacionales. En consecuencia, resulta urgente abrir un debate cientfico para cubrir esta laguna metodolgica lo ms rpida y rigurosamente posible. 73 Mientras ese debate se produce y respetando la coherencia metodolgica que reclambamos al establecer los niveles de anlisis, proponemos unos criterios de periodificacin especficos para la macrointernacionalidad y otros para la microinternacionalidad, no sin antes subrayar que dichos criterios slo pretenden ser orientativos y de ningn modo rgidos marcos temporales que dificulten, en vez de facilitar, la tarea del investigador. Esta tarea no resulta sencilla por cuanto a la dificultad intrnseca de la realidad internacional como objeto de nuestra disciplina, debemos aadir la relatividad consustancial a la variable temporal. Como apunta Sahagn: "(...) el responsable de planificacin de la defensa normalmente trabaja con plazos medios (unos 5 aos en la OTAN) o largos (10 o ms); el responsable de Exteriores, en cambio, con frecuencia necesita respuestas en doce horas; para una empresa financiera, que se mueve en bolsa, doce horas es el largo plazo, dos o tres horas el plazo medio y segundos o minutos el corto plazo. En radio y televisin, el corto plazo es ya, el medio es el boletn de cada hora y el largo lo que separa un diario hablado o telediario de otro. (...) Es obvio que la periodificacin es fundamental en cualquier actividad humana, pero que vara en cada una de ellas. Lo mismo sucede con las culturas y las sociedades. Cincuenta aos, para un pas como China, puede ser un plazo medio, mientras que para los pases occidentales hablar de cincuenta aos es como hablar de siglos o de ciencia-ficcin. No distinguir estos escalones temporales en el anlisis internacional es fracasar antes de comenzar." 74 En efecto, por lo que se refiere a los fenmenos macrointernacionales, es decir los que toman como referencia la Sociedad Internacional en su conjunto, parece razonable considerar las propias etapas que puedan descubrirse en la existencia y dinmica de sta como el criterio
"De donde se deduce la necesidad de confrontar tambin los modelos con la idea de duracin; porque de la duracin que implican depende bastante ntimamente, a mi modo de ver, tanto su significacin como su valor de explicacin. (...) He dicho que los modelos tenan una duracin variable: son vlidos mientras es vlida la realidad que registran." BRAUDEL, F.- op. cit.; pgs. 86 y 93. CALDUCH, R.- Relaciones...op. cit. pgs. 35 - 38. 73 - Un ejemplo ilustrativo de los errores a donde puede conducir la omisin de cualquier criterio de periodificacin la encontramos en el artculo de SOLDATOS, P.- " Esquisse d'un modle de schmatisation du mcanisme sociologico-politique des conflits internationaux".- Etudes Internationales; vol. III; n 1 (marzo 1972); pgs. 14 - 36, dondese intenta actualizar el modelo terico de conflictos desarrollado por Duroselle para analizar el conflicto de Trieste. De las varias decenas de variables y tipologas recogidas en el modelo, no existe ni una sola referida a la variable temporal. 74 - SAHAGUN, F.- De Gutenberg a Internet. La sociedad internacional de la informacin.- Edit. Estudios Internacionales de la Complutense. Madrid, 1998; pg. 108

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bsico para diferenciar sus principales perodos. Desde esta perspectiva, diversos estudios histricos apuntan claramente a la existencia de, al menos, tres fases o perodos: la gnesis o formacin, el desarrollo o consolidacin, con dos subetapas que se corresponden con el desarrollo creciente y el desarrollo decreciente, y la crisis o decadencia de dicha sociedad, con un punto de ruptura que marcara el final, en trminos del carcter dominante o de referencia, de dicha sociedad internacional. 75 Cada uno de los fenmenos internacionales que analicemos desde esta perspectiva, adquirirn pleno significado en la medida en que influyan en la dinmica propia de cada una de estas fases acelerndola o retardndola, pero a su vez ellos mismos se encontrarn condicionados por la tendencia general que domina la configuracin y el cambio de las estructuras de la Sociedad Internacional en consonancia con la fase en la que se encuentre. Es el cambio estructural, por tanto, el que impone los ritmos y tendencias en la vida histrica de las sociedades internacionales. Sin duda, es este un cambio con ritmos lentos y diferentes para cada una de las tres estructuras (poltica, econmica y cultural) sobre las que descansa el conjunto de la sociedad internacional. Tal vez por ello, los internacionalistas hemos tendido con excesiva facilidad a considerar ciertos sucesos relevantes para la vida internacional como indicadores inequvocos de un cambio de sociedad internacional sin interrogarnos sobre la posibilidad de que tales sucesos slo indicasen un cambio de tendencia en la misma sociedad internacional. Fue la Gran Guerra Europea de 1914 a 1918 el final del Concierto Europeo de Grandes Potencias o slo el punto de inflexin entre la fase decreciente de la fase de desarrollo y la etapa de crisis de esa sociedad internacional ?. Este tipo de interrogantes no son simples aspectos tericos secundarios, ya que de su solucin, en uno u otro sentido, depende en buena medida el alcance y significado que atribuyamos a cuantos fenmenos internacionales se generan en el seno de una misma sociedad internacional. En otras palabras, de la interpretacin que realicemos de los sucesos que jalonan los cambios en las etapas de la sociedad internacional, depende el significado e importancia que atribuyamos a los fenmenos que configuran la microinternacionalidad. Esta es una tarea en la que el cientfico internacionalista es tributario de las aportaciones que realizan los historiadores de ese tiempo de larga duracin del que nos habla Braudel. 76

- La concepcin de las fases de gnesis, desarrollo y decadencia de las civilizaciones se encuentra claramente recogida en la obra de TOYNBEE, A.J.- A Study of History Abridgement.- Edit. Oxford University Press. Londres, 1946. Traduccin al castellano de Luis Grasset.- Estudio de la historia. Compendio I/IV.- Edit. Alianza. Madrid, 2 ed., 1970. Por su parte, Paul Kennedy, con una referencia mucho ms prxima a nuestra disciplina, ha demostrado tambin la existencia de procesos de ascenso y decadencia de las grandes potencias que han dominado la vida internacional durante los ltimos cinco siglos. KENNEDY, P.- Rise and fall of the Great Powers.- Edit. Unwin Hyman. Londres, 1988. (Traduccin al castellano de J. Ferrer Aleu.- Auge y caida de las grandes potencias.- Edit. Plaza y Jans Editores. Esplugues de Llobregat, 1989.) 76 - "Si la historia est abocada por naturaleza, a prestar una atencin privilegiada a la duracin, a todos los movimientos en los que sta puede descomponerse, la larga duracin nos parece, en este abanico, la lnea ms til para una observacin y una reflexin comunes a las ciencias sociales. Es exigir demasiado el pderiles a nuestros vecinos que en un momento de sus razonamientos refieran a este eje sus constataciones o sus investigaciones ?." BRAUDEL, F.- op. cit.; pg. 102.

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Retornando a la macrointernacionalidad, el lector atento habr observado la connotacin cclica que subyace en la periodificacin propuesta y tendr razn en esa apreciacin porque, efectivamente, es as. La divisin temporal apuntada para la macrointernacionalidad presupone una concepcin cclica y no una concepcin lineal de la historia de las sociedades internacionales. Esta es, desde luego, una hiptesis de trabajo ms que un criterio metodolgico firme, puesto que no existen investigaciones que avalen resultados concluyentes en este tema. Sin embargo, resulta mas que razonable pensar que si en la estructura econmica y en algunos sectores de las estructuras poltica y cultural es posible determinar ciclos seculares, tales tendencias cclicas tengan su reflejo en la evolucin de la sociedad internacional de la que participan y a la que condicionan decisivamente. 77 Naturalmente se pueden aducir diversos argumentos para justificar su utilidad cientfica. Desde la contingencia histrica de los actores y las estructuras que sustentan la existencia las sociedades internacionales hasta el efecto degenerativo que provoca en la Sociedad Internacional, como en toda sociedad, la acumulacin de problemas y disfunciones, pasando por el impacto poltico, econmico y cultural que poseen los cambios generacionales en el seno de las sociedades y en las relaciones entre ellas, todos apuntan a la misma conclusin: la utilidad de un modelo cclico en lugar de un modelo lineal. Su representacin grfica sera la siguiente:

- Existen diversos trabajos que apuntan a la validez de la teora de ciclos aplicada al anlisis de las Relaciones Internacionales, aunque todava resultan insuficientes para sustentar de forma indiscutible, como ocurre en Economa, un modelo terico. DORAN, Ch. F.- " Quo Vadis?. The United States' Cycle of Power and its Role in a Transformating World ".- DEWITT, D.; HAGLUND, D.; KIRTON, J. (edits.) - Building a New Global Order. Emerging Trends in International Security.- Edit. Osford University Press. New York, 1993; pgs. 12-39. GILPIN, R.- War and Change in Wolrd Politics.- Edit. Cambridge University Press. New York, 1981. GOLDSTEIN, J.S.- Long Cycles: Prosperity and War in the Modern Age.- Edit. Yale University Press. New Haven, 1988. dem.- "The Possibility of Cycles in International Relations".- International Studies Quarterly, n 35 (diciembre 1991); pgs. 477-480. MODELSKI, G. ; THOMPSON, W.R.- "Long Cycles and Global War".- MIDLARSKY, M.I. (edit.).- Handbook of War Studies.- Edit. Unwin Hyman. Boston, 1989); pgs. 23-54. VYRYNEN, R.- " Fluctuaciones econmicas, innovaciones tecnolgicas y carrera de armamentos. Una perspectiva histrica.".- MOSCOSO, L.; BABIANO, J. (comps.).- Ciclos en poltica y economa.Edit. Pablo Iglesias. Madrid, 1992; pgs. 77-120.

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REPRESENTACION GRAFICA DE LAS ETAPAS DE EVOLUCION HISTORICA DE LAS SOCIEDADES INTERNACIONALES ( GRAFICO n 4 ) EVOLUCION DE LA SOC.INT.

DESARROLLO
DESARROLLO DECRECIENTE

DESARROLLO CRECIENTE

CRISIS

GENESIS

PUNTO DE RUPTURA

TIEMPO

Naturalmente se pueden aducir diversos argumentos para justificar su utilidad cientfica. Desde la contingencia histrica de los actores y las estructuras que sustentan la existencia las sociedades internacionales hasta el efecto degenerativo que provoca en la Sociedad Internacional, como en toda sociedad, la acumulacin de problemas y disfunciones, pasando por el impacto poltico, econmico y cultural que poseen los cambios generacionales en el seno de las sociedades y en las relaciones entre ellas, todos apuntan a la misma conclusin: la utilidad de un modelo cclico en lugar de un modelo lineal. Cada una de estas fases se singulariza por las particularidades que presentan cuatro grupos de elementos esenciales: los actores internacionales; las relaciones; las estructuras y los valores. Las etapas de gnesis o formacin, presentan el siguiente perfil para cada uno de tos elementos esenciales: a).- La aparicin de nuevas categoras de actores internacionales y una fuerte movilidad entre los actores dominantes de cada estructura internacional. b).- La emergencia de nuevas formas de relacin internacional o su expansin a nuevas reas geogrficas y/o funcionales.

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c).- Importantes cambios en las estructuras internacionales que, adems, se producen con ritmos diferentes para cada una de ellas. d).- Potenciacin de los valores de creatividad y novedad (innovacin) como valores-gua de las relaciones internacionales y que impulsan concepciones idealistas de la Sociedad Internacional. Las fases de desarrollo o consolidacin, se caracterizan por: a).- La multiplicacin del nmero de actores pertenecientes a las nuevas categoras surgidas en la etapa anterior acompaadas por una consolidacin en la hegemona de los actores dominantes de cada estructura internacional. b).- Institucionalizacin de las nuevas formas de relacin internacional aparecidas en la fase anterior. c).- Desarrollo de una fuerte interdependencia orgnica y funcional entre las diversas estructuras de la Sociedad Internacional. d).- Hegemona de los valores de estabilidad y orden como valores de referencia que se difunden a travs de concepciones pragmticas de la Sociedad Internacional. Esta etapa, a su vez, podemos diferenciarla en dos perodos. En el primero de ellos, denominado de desarrollo creciente, las caractersticas sealadas para esta etapa operan de forma acumulativa para consolidar el orden internacional, el protagonismo de sus actores hegemnicos y la funcionalidad de sus instituciones y estructuras. En cambio, durante el siguiente perodo, de desarrollo decreciente, podemos observar claramente cmo las caractersticas de la etapa general operando de forma acumulativa no producen ya un mayor orden y estabilidad, ni facilitan la hegemona de los actores dominantes, ni permiten una mayor o mejor funcionalidad institucional. En resumen, durante el primer perodo de esta etapa, la dinmica de la Sociedad Internacional experimenta resultados acumulativamente favorables para su mantenimiento, en cambio durante el segundo perodo, los resultados de la dinmica internacional operan acumulativamente perjudicando su perpetuacin. Finalmente, las etapas de crisis o decadencia, presentan los siguientes rasgos: a).- La desaparicin de los actores dominantes o la creciente prdida de su hegemona internacional, frecuentemente acompaada de intensas convulsiones o conflictos en el seno de tales actores. b).- La progresiva ineficacia de las instituciones internacionales para mantener el orden en las relaciones internacionales, lo que provoca una creciente conflictividad, no siempre blica, en la Sociedad Internacional. c).- La aparicin de fuertes disfunciones en las estructuras internacionales, agudizadas por su incapacidad para abordar nuevos retos o problemas que surgen en la realidad internacional. d).- La ausencia de unos valores dominantes o de aceptacin general, lo que estimula los conflictos valorativos y la aparicin de concepciones crticas del orden internacional imperante. Aunque la duracin de cada una de estas etapas vara de una Sociedad Internacional a otra, se puede constatar que comprenden varias dcadas, como mnimo alrededor de 25 30 aos, que es el perodo medio durante el cual cada generacin ejerce el liderazgo y el control institucional en las sociedades estatales, antes de ser relevada por la generacin siguiente. La etapa de desarrollo suele poseer una duracin mayor que cada una de las otras dos. Resulta importante comprobar hasta qu punto se ha ignorado por los internacionalistas el decisivo papel desempeado por cada generacin en los asuntos internacionales. Una admirable excepcin la constituye Jervis, para quien la influencia de las caractersticas

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generacionales resulta decisiva para comprender el papel de los dirigentes en la toma de decisiones. "...Tomando en cuenta que los intereses y los acontecimientos que adquirieron relevancia especial en una poca penetran indefectiblemente en la sociedad, todos aquelllos que llegan a la mayora de edad en dicha poca se ven afectados de manera semejante. Dado que, como analizamos previamente, no es nada sencillo substituir la orientacin que se establece en primera instancia, sino que por el contrario, sta tiende a estructurar la interpretacin de los acontecimientos posteriores, el resultado se refleja en un efecto generacional o de cohorte." 78 La etapa de gnesis de una sociedad internacional emergente suele solaparse parcialmente con la etapa de crisis de la sociedad internacional decadente. Durante estos perodos de transicin, la realidad internacional presenta una configuracin simbitica entre los elementos de ambas etapas que pugnan entre s, para confirmarse unos y no desaparecer definitivamente los otros. Ello les confiere una dificultad aadida para poder adscribir los sucesos internacionales, y las causalidades que surjen entre ellos, a una u otra de las sociedades internacionales. Esta dificultad se puede reducir metodolgicamente si tenemos en cuenta que durante estas fases de transicin se desarrollan acontecimientos internacionales cuya trascendencia y singularidad se debe, precisamente, a que resumen y simbolizan las contradicciones entre la vieja y la nueva sociedad internacional. Ello les convierte, desde una perspectiva investigadora, en los sucesos de referencia para sealizar tericamente el momento histrico de la defintiva aparicin de una sociedad internacional y de la desaparicin de la sociedad precedente. A estos fenmenos los denominamos puntos de ruptura. Si nos adentramos ahora en el mbito de la microinternacionalidad, es decir la que adopta la perspectiva de losactores internacionales, podemos introducir una periodificacin atendiendo a dos criterios bsicos: la configuracin estructural interna de los actores y los cambios que pueden producirse en ella, de una parte, y la unidad de accin internacional desarrollada por ellos, de otra. Combinando ambos aspectos podemos establecer la siguiente divisin temporal: corto plazo, medio plazo y largo plazo. El corto plazo comprende una fase temporal generalmente breve, pero duarnte la cual los actores internacionales son capaces de formular y ejecutar una determinada accin o grupo de acciones internacionales. Sepuede estimar razonable un perodo que comprenda entre 1 y 5 aos, ya que es un plazo de tiempo durante el cual puede realizarse una planificacin de las decisiones a tomar y de las acciones a ejecutar, con una garanta suficiente de cumplimiento de la planificacin o, si se prefiere, con una probabilidad razonablemente alta de que las desviaciones de la realidad internacional sobre las previsiones realizadas podrn ser corregidas. 79 Esto es as porque durante este perodo de tiempo, los principales factores y las estructuras internas de los actores internacionales slo sufrirn variaciones secundarias previsibles,
- JERVIS, R.- "Cmo aprenden de la historia quienes toman las decisiones".- V'ASQUEZ, J.A.Relaciones Internacionales. El pensamiento de los clsicos.- Mxico, 1994. Edit. Limusa; pg. 193. MANHEIM,K.- " El problema de las generaciones".- Revista Espaola de Investigaciones Sociolgicas; n 62 (Abril-Junio 1993); pgs. 193-241. 79 - SNCHEZ VALDS, N.- "La coyuntura, el campo de objetos y los parmetros de tiempo. Una aproximacin metodolgica.".- Suplementos Anthropos; n 45 (Septiembre 1994); pgs. 45-53
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mientras que el orden internacional imperante permanecer sustancialmente inalterado. En otras palabras, la mayor parte de las variables que inciden en la organizacin y dinmica de los actores internacionales, junto con aquellas otras que afectan al contexto internacional pueden considerarse como si fueran constantes en condiciones de estabilidad de la Sociedad Internacional. Este supuestos terico es muy parecido, aunque no coincide exactamente con la condicin caeteris paribus que se emplea en la ciencia econmica y que tambin puede emplearse en nuestra disciplina. Sin embargo, conviene realizar una advertencia importante sobre la consideracin de las variables como constantes a corto plazo. En efecto, dicho supuesto no resulta adecuado en los perodos histricos prximos a un punto de ruptura. Como se ha demostrado por las teoras del caos y la teora de catstrofes para las ciencias fsico-naturales, cualquier pequea modificacin cuantitativa que se produzca en la proximidad de los lmites de un sistema dinmico puede provocar alteraciones del sistema irreversibles, es decir un cambio de sistema, y no previsibles con los modelos tericos basados en el principio de estabilidad del sistema. 80 Naturalmente la aplicacin de esta restriccin nos remite al problema de determinacin de los criterios para conocer cuando nos encontramos en una fase de crisis de la Sociedad Internacional y dentro de ella en momentos histricos prximos al punto de ruptura. Respecto del primer aspecto del problema, ya hemos avanzado algunos criterios que caracterizan la etapa de decadencia de una Sociedad Internacional. La respuesta al segundo aspecto de la cuestin resulta mucho ms complicada, ya que los acontecimientos histricos que hemos definido bajo el trmino de puntos de ruptura, por definicin, son difcilmente pronosticables. No obstante, un buen criterio metodolgico es no trabajar slo con la hiptesis de la estabilidad del orden internacional cuando tenemos claras evidencias de hallarnos en una fase de crisis de la Sociedad Internacional. Cuanto ms tiempo haya transcurrido desde los primeros sucesos internacionales que responden a las caractersticas de este proceso, tanto ms slida se vuelve la aplicacin restrictiva del supuesto de estabilidad, y por tanto del carcter constante de las variables, y mayor la necesidad de comparar las previsiones deducidas con la aplicacin del criterio general de los perodos de corto plazo, con las que podemos obtener simulando cambios en algunas variables bsicas, de acuerdo con los modelos matemticos elaborados para situaciones caticas o catastrficas. Un ejemplo de aplicabilidad de las teoras del caos a la Economa lo encontramos en la obra de Fernndez Daz. 81 El medio plazo comprende una etapa un poco ms amplia, entre 5 y 10 aos, durante la cual algunos de los factores endgenos y de las estructuras propias de cada actor internacional experimentarn cambios significativos que, necesariamente, condicionarn su capacidad de intervencin en los asuntos internacionales. En efecto, durante el perodo temporal comprendido entre el lustro y la dcada, apreciaremos cambios importantes en las capacidades econmicas o demogrficas de un pas. La rapidez con la que se realizan los cambios cientficos y tecnolgicos o enlos medios de comunicacin, interpersonal y de masas, al menos durante los dos ltimos siglos, constituyen otros tantos argumentos que avalan la evidencia de que los cambios que se producen en el seno de los actores internacionales a plazo medio son
- ARNOLD, V.I.- Teora de catstrofes.- Madrid,1989. Edit. Alianza; GLEICK, J.- Caos. La creacin de una ciencia.- Barcelona, 2 ed., 1994. Edit. Seix Barral; WOODCOCK, A.; DAVIS, M.- Teora de las catstrofes.-Madrid, 1989. Edit. Ediciones Ctedra. 81 - FERNNDEZ DAZ,A.- La Economa de la complejidad. Economa dinmica catica.- Madrid, 1994. Edit. Mc Graw Hill
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cambios verdaderamente significativos y no slo simples cambios circunstanciales. Finalmente, este es el perodo de tiempo requerido para que los cambios de regmenes polticos y/o la formacin de nuevos actores internacionales, se hagan irreversibles. Naturalmente el simple transcurso del tiempo no impone esos cambios de regmenes polticos, pero en caso de producirse es muy improbable que los nuevos regmenes o actores puedan consolidarse en un perodo inferior. Si consideramos el medio plazo desde la perspectiva de la Sociedad Internacional, observamos que los cambios en los actores internacionales producirn, necesariamente, algunos cambios en la dinmica y en la configuracin institucional de la realidad internacional. No obstante, estos cambios, an siendo necesarios, no sern suficientes para provocar alteraciones sustanciales y mucho menos irreversibles en las estructuras de la Sociedad Internacional. Todas estas razones convierten el medio plazo en el perodo idneo para planificar y ejecutar las estrategias de conducta internacional de los diversos actores, especialmente las directrices de las polticas exteriores de los Estados. Esta planificacin resulta tanto ms necesaria cuanto que la ampliacin del marco temporal de referencia permite la irrupcin de sucesos o variables que a corto plazo podamos considerar como constantes. Por otro lado, este plazo medio es tambin el perodo requerido para que se produzca un relevo generacional en las elites dirigentes sin provocar rupturas y conflictos violentos. Finalmente, entendemos como largo plazo un perodo que comprende entre dos y tres dcadas, es decir el tiempo requerido para que una generacin sea sustituida por otra en el liderazgo de los actores internacionales. Desde la perspectiva interna de estos ltimos, el largo plazo permite cambios sustanciales en el seno de las percepciones, los valores e ideologas que guan la vida de sus miembros. A diferencia de los dos perodos anteriores durante los cuales pueden producirse cambios en la opinin pblica o en la opinin de sus lderes, a largo plazo los cambios se producen en el sustrato cultural de los actores internacionales. Ello termina afectando al proceso decisional y, lgicamente, tambin a las relaciones entre los actores internacionales. Evidentemente, esto supone un lmite objetivo a la fiabilidad de la planificacin y la prognosis a largo plazo. Los estudios e investigaciones que trabajan con la proyeccin de tendencias en perodos superiores a una dacada se convierten en trabajos cuyo sustrato especulativo, y por tanto sin rigor cientfico, es directamente proporcional a la amplitud del perodo temporal adoptado como referente de la investigacin. Adems la complejidad del modelo terico empleado para investigar el largo plazo, lo hace difcilmente operativo, incluso con el empleo de las potencialidades de clculo y operatividad de los modernos ordenadores. Parte de esta complejidad procede de los cambios que experimenta el entorno internacional en el que existen y actan sus actores. En efecto, al cabo de varias dcadas, las estructuras de la Sociedad Internacional experimentan cambios irreversibles que modifican el marco de oportunidades y limitaciones en el que deben operar los actores internacionales. Dichos cambios, observados retroactiva o proyectivamente nos muestran los procesos generales de transformacin evolutiva o degenrativa de la Sociedad Internacional en su conjunto. En otras palabras, los cambios experimentados a largo plazo por la Sociedad Internacional, constituyen el nexo de vinculacin entre las etapas de periodificacin de la microinternacionalidad y las fases de evolucin propias de la macrointernacionalidad. La conclusin que podemos extraer de los criterios de periodificacin aplicables a la microinternacionalidad, es evidente: cuanto ms corto sea el perodo temporal adoptado en

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la investigacin, mucho ms precisos, concretos y fiables sern los resultados y por tanto las previsiones, pero menores sern tambin las posibilidades de formulacin de leyes tericas generales a partir de dichos resultados. A la inversa, las investigaciones, sobre todo con carcter histrico, basadas en largos perodos temporales nos facilitan el conocimiento de las tendencias generales de cambio en la Sociedad Internacional, a costa de perder una parte importante de la precisin, fiabilidad y concrecin sobre la realidad internacional que nos aportan los estudios de corto plazo.

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10.- APLICACION DE LA ESTADISTICA A LA INVESTIGACION INTERNACIONAL 10.1.- Estadstica descriptiva y Estadstica inferencial Segn Kruskal, los mtodos estadsticos cumplen las siguientes funciones generales: a).-Resumen de los datos y extraccin de informacin relevante de los mismos, esto es, de las mediciones observadas, sean stas numricas, clasificatorias, ordinales o de otro tipo; b).-Bsqueda y evaluacin de los modelos y pautas que ofrecen los datos, pero que se encuentran ocultos por la inherente variabilidad aleatoria de los mismos; c).-Contribuir al diseo de experimentos y encuestas; d).-Facilitar la comunicacin entre los cientficos, ya que siempre ser ms fcil comprender la referencia a un procedimiento estndar, sin necesidad de mayor detalle; A partir de estas funciones se puede comprender la divisin de la Estadstica en dos grandes reas o campos: la Estadstica descriptiva y la Estadstica inferencial. La Estadstica descriptiva, est constituida por el conjunto de instrumentos y temas relacionados con la descripcin de colecciones de observaciones estadsticas, ya se refieran al total de la poblacin o a una muestra de la misma. La Estadstica inferencial o inductiva, se ocupa de la lgica y procedimientos para la inferencia o induccin de propiedades de una poblacin en base a los resultados obtenidos de una muestra conocida. Esta parte de la Estadstica descansa en la teora de probabilidades. La Estadstica suministra, de este modo, los instrumentos que permiten el salto desde las observaciones a la inferencia, siendo la descripcin y resumen de las observaciones un paso previo para la operacin fundamental de la estadstica: la inferencia. GRAFICO N 4

HECHOS

ESTADISTICA DESCRIPTIVA

ESTADISTICA INFERENCIAL

UNIVARIABLE BIVARIABLE MULTIVARIABLE

La Estadstica se utiliza para operar con determinados nmeros, que reflejan valores de mediciones que se supone satisfacen determinados supuestos. Esto es, las consideraciones estadsticas se introducen en la fase analtica del proceso.

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La Estadstica hay que considerarla como un auxiliar en el proceso de investigacin, un auxiliar ciertamente imprescindible y que cuando es utilizado correctamente, conduce a la utilizacin ms detallada de la teora y a la colaboracin ms precisa del modelo que se va a seguir en la investigacin. Las caractersticas de los elementos que integran la realidad objeto del anlisis u observacin (denominado en Estadstica bajo el trmino poblacin o universo) podemos dividirlos en dos categoras: 1.-Aquellas que pueden ser expresadas o descritas mediante nmeros y que son denominadas cuantitativas o variables. A los diversos nmeros que las representan los denominaremos valores. 2.-Las que slo puede pueden ser descritas o expresadas de forma literal y que llamaremos cualitativas o atributos.Las diversas formas de presentacin de los atributos se denominan modalidades. Las puntuaciones o valores que adoptan las variables se denominan observaciones estadsticas. Siempre que sea posible, se expresarn en nmeros. El objeto al que hace referencia la variable que se mide se denomina unidad de anlisis, stas pueden ser los propios individuos o diferentes categoras de agrupacin social (familias, ciudades, regiones Estados,etc. La poblacin estadstica o universo la constituyen todos los valores de las variables que dese medir el investigador en todas las unidades de anlisis. Cuando las observaciones estadsticas de una poblacin estadstica se pueden contar a dicha poblacin o universo se le denomina finita, por ej. la edad de los espaoles, por el contrario, cuando las observaciones no pueden limitarse en el tiempo o en el espacio se le denomina universo infinito, por ej. el poder de los Estados. Rara vez se recopilan los datos de todos los valores de una poblacin. Lo ms frecuente es que se realice una seleccin de un subconjunto de tales valores al que se denominar una muestra estadstica.

GRAFICO n 5

FINITO UNIDAD DE ANALISIS UNIVERSO O POBLACION

VARIABLES caracteres cuantitativos

VALORES

INFINITO

ATRIBUTOS caracteres cualitativos

MODALIDADES

10.2.- Estadstica y medicin de variables

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Una de las principales dificultades que debe enfrentarse por los tericos a la hora de poder aplicar las tcnicas estadsticas, consiste en operar con los conceptos abstractos de modo que puedan ser medidos y cuantificados por la Estadstica. La medicin puede definirse como el procedimiento de asignacin de nmeros a los objetos o acontecimientos investigados siguiendo ciertas reglas. Cuando se estudia una variable es posible ordenar los elementos del universo o poblacin de modo jerrquico (mayor a menor o a la inversa), de acuerdo con los valores de dicha variable. En cambio cuando se analiza un atributo, slo puede establecerse una ordenacin convencional pero no una ordenacin jerrquica. Una variable puede estudiarse en forma de atributo, recurriendo a la agrupacin de sus valores mediante criterios convencionales en distintas modalidades. En cambio un atributo no puede estudiarse como variable aunque sus modalidades se expresen numericamente. Las variables pueden clasificarse atendiendo a distintos criterios: 1.-Segn el tipo de medicin realizada para conocerlas, pueden ser variables nominales, ordinales, de intervalo y de cociente o proporcin. 2.-Segn el uso que se hace de ellas en la investigacin, pueden ser: variables independientes, variables dependientes y variables intervinientes. 3.-Segn el tipo de escala empleado en la medicin de las variables, lo que permite distinguir entre: variables continuas y variables discretas. Las variables continuas son aquellas que reflejan caractersticas cuyos valores pueden comprender de modo contnuo todos los nmeros, enteros y fraccionados de una determinada escala. Las variables discretas son las que se refieren a caractersticas cuyos valores slo pueden comprender un determinado conjunto de nmeros, generalmente los enteros.

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GRAFICO n 6 INDEPENDIENTES USO EN INVESTIG. INTERVINIENTES DEPENDIENTES TIPOS DE ESCALA CONTINUAS DISCRETAS VALORES COCIENTE O PROPORCION MODALIDADES ATRIBUTOS TIPO DE MEDICION INTERVALO ORDINALES

VARIABLES

NOMINALES

La caractersticas de los objetos de anlisis u observacin, admiten cuatro formas de medidas: 1.-Medidas nominales: Se realiza una medida nominal cuando las propiedades de los objetos estudiados slo pueden agruparse en categoras lgicamente exhaustivas y mtuamente exclusivas, de tal modo que pueden establecerse claramente equivalencias o diferencias. Este sistema se aplica especialmente para medir los atributos y consiste en asignar ciertos nmeros a sus modalidades. No obstante, la asignacin de esos nmeros slo debe interpretarse en el sentido de que cada nmero, y la variable cualitativa o atributo que le corresponde, es distinto de otro sin que ello quiera decir que es mayor o menor.

Ej.-Medicin nominal de preferencias polticas de los espaoles:

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1.- Extrema derecha 2.- Derecha democrtica 3.- Centro derecha 4.- Centro izquierda 5.- Izquierda 6.- Extrema izquierda 7.- Nacionalista moderado 8.- Independentista Gracias a las medidas nominales se realiza una de las operaciones ms simples e importantes de toda ciencia: la clasificacin. El objetivo es siempre obtener categoras que permitan una clasificacin clara de los elementos y que sea homognea en relacin a otras variables. Las medidas nominales poseen la caracterstica de la relacin de equivalencia, que engloba a las propiedades reflexiva ( A=A para cualquier valor de A); simtrica ( si A=B tambin B=A para cualquier valor de A y B) y transitiva ( si A=B y B=C entonces A=C para cualquier valor de A;B;C) Con las escalas nominales no pueden realizarse operaciones matemticas, por ej. suma; resta; multiplicacin o divisin. 2.-Medidas ordinales: Se tiene una medida ordinal a aquella escala que adems de las propiedades de las escalas nominales, podemos establecer una ordenacin de sus categoras siguiendo los criterios de mayor que (>) o menor que (<). Este tipo de relaciones poseen tres propiedades: la irreflexiva ( no es cierto que para todo valor de A se cumpla que A>A); la asimtrica ( si A>B entonces B<A) y la transitiva (si A>B y B>C entonces A>C). Se aplican a las variables mediante la asignacin de un nmero que denote un orden jerrquico. Para la obtencin de este orden se pueden emplear los sistemas de puntuacin o los sistemas de rango. Este tipo de medidas resulta especialmente til cuando se carece de escalas o unidades de medida de las variables estudiadas. Ej. de una escala ordinal de preferencias polticas de los espaoles: Grado de conformidad con la democracia 1.-Muy conforme (5) (4-5) 2.-Bastante conforme (4) (3-4) 3.-Conforme (3) (2-3) 4.-Algo disconforme (2) (1-2) 5.-Muy disconforme (1) (0-1) Obsrvese que las medidas ordinales no aportan ninguna infirmacin sobre la magnitud de las diferencias entre las categoras. Por esta razn, rara vez se pueden realizar operaciones matemticas con los valores de las variables medidas ordinalmente.

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3.-Medidas de intervalo: Las medidas de intervalo incluyen no slo las propiedades lgicas de las escalas ordinales y nominales, sino, adems, sus categoras se definen en trminos de una unidad de medicin estndar. Ej. dlares; km2; Tonelaje de los buques; etc. Ello permite interpretar la diferencia entre dos medidas, es decir, permite asignar unos nmeros a las distintas categoras de los objetos de forma suficientemente precisa para que podamos saber la distancia o diferencia (intervalos) entre todos los objetos de la escala por referencia a la distancia o diferencia entre los nmeros que le han sido asignados. En una escala de intervalo, el punto cero y la unidad de medicin son arbitrarios y el cociente de cualquiera de los intervalos es independiente de los mismos. Con una escala de intervalo se pueden realizar las operaciones matemticas, como las sumas, restas, mutiplicaciones y divisiones, y adems de las relaciones de equivalencia (escalas nominales ) y de mayor/menor que (escalas ordinales) se puede establecer un cociente entre cualquier par de intervalos. 4.-Medidas de cociente o proporcin: Cuando una medicin tiene todas las caractersticas de una medida de intervalo y adems se puede determinar un punto de origen verdadero de valor 0 entonces estamos ante una medida de cociente o proporcin y su escala, con 0 absoluto en su origen se llama escala de cociente o proporcin. Todas las operaciones matemticas pueden realizarse con una escala de proporcin y, adems, las medidas de cociente no quedan afectadas por elk hecho de multiplicarlas por una constante K. En estas escalas, slo es arbitraria la unidad de medida, no as el punto de origen que es absoluto o verdadero. Por ej. la medida del nmero de buques de guerra de los pases. Cualquiera que sea el tipo de medidas que utilicemos, deben cumplir dos requisitos esenciales: 1.-Deben ser vlidas. 2.-Deben ser fiables. La validez hace referencia a que el procedimiento utilizado mida lo que realmente se pretende medir; mientras que la fiabilidad se refiere a la propiedad del instrumento empleado para obtener las medidas que nos debe permitir obtener siempre las mismas medidas cuantas veces se repita la medicin en idnticas condiciones. Se suele tambin distinguir entre validez interna y validez externa. La primera se refiere a la siguiente cuestin: se obtendran resultados diferentes si se hubiesen utilizado procedimientos diferentes?, en cambio la segunda, trata de dar respuesta a la pregunta: hasta qu punto es generalizable el procedimiento de medicin utilizado?. 10.3.- La Estadstica de una sola variable (univariable) y el mtodo comparativo

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Ya hemos sealado que una de las principales funciones de la estadstica descriptiva es obtener un conocimiento cuantitativo de los fenmenos de la realidad y poder extraer conclusiones de su comparacin. Desde esta perspectiva, el supuesto ms sencillo que se puede plantear es el de considerar una sola variable de la realidad para poder medir sus valores y compararlos con los de la misma variable en otra realidad distinta. Para debemos considerar los cuatro aspectos fundamentales de este proceso: 1.-Organizacin de los datos 2.-Establecimiento de datos representativos del conjunto de los valores de la variable. 3.-Determinacin de las principales caractersticas que definen el conjunto de valores de la variable. 4.-Representacin comparativa numrica y grfica. a).- Organizacin de los datos Un conjunto de datos que no se encuentren suficientemente organizados resulta muy poco til en la investigacin. En consecuencia, la primera tarea que debemos realizar es la de establecer una organizacin de los datos siguiendo criterios de mayor a menor o de cualquier otro tipo que nos permita ordenarlos de forma significativa. En estadstica, las organizaciones ms resumidas y representativas de los datos son las distribuciones, que pueden ser de tres tipos: distribucin de frecuencias; distribucin procentual y distribucin acumulada. 1.-Distribucin de frecuencias Cuando se maneja un nmero muy elevado de datos, puede resultar muy til agruparlos convenientemente en distintas clases o categoras, precisando el nmero de casos que pertenecen a cada clase. Este nmero se denomina frecuencia de clase y se simboliza por la letra f o fi, donde i se refiere a la clase i de la variable. El nmero total de casos es igual a la suma de la columna de las frecuencias y se simboliza por la letra N o por el smbolo fi (sumatorio de fi) EJEMPLO Supongamos que tenemos un grupo de personas con edades comprendidas entre 18 y 75 aos y que pretendemos ordenar la informacin que disponemos sobre sus edades para poder comparar este grupo de poblacin con otro, comprendido entre las mismas edades, para averiguar cual de los dos grupos est ms envejecido. Contabilizamos el nmero de personas que poseen la misma edad y anotamos ese dato. En principio realizaramos una medida de intervalo tomando como unidad el ao natural, que nos dara como resultado una tabla de datos parecida a la que figura a continuacin. TABLA ESTADISTICA n 1

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EDAD/n PERS. 18/2 19/5 20/3 21/5 22/2 23/4 24/2 25/1 26/4 27/5 28/1 29/3

EDAD/n PERS. 30/0 31/6 32/0 33/1 34/2 35/1 36/0 37/5 38/1 39/1 40/3 41/2

EDAD/n PERS. 42/2 43/4 44/1 45/1 46/3 47/0 48/0 49/1 50/5 51/2 52/1 53/0

EDAD/n PERS. 54/0 55/0 56/1 57/3 58/4 59/6 60/3 61/3 62/3 63/3 64/0 65/1

EDAD/nPERS 66/0 67/0 68/0 69/3 70/1 71/2 72/2 73/1 74/1 75/4 N = 120

El elevado nmero de datos sobre las edades y las personas que hay en cada edad, nos hace poco til la informacin que hemos acumulado. Ello nos aconsejara realizar una organizacin distinta de ese cmulo de datos, agrupndolos de un modo ms simple pero, al mismo tiempo, igualmente completo, es decir, sin excluir ninguna edad ni a ninguna persona. Una forma de realizar esta organizavcin de los datos sera mediante la agrupacin en clases o categora de edades.Con ello obtendramos una nueva tabla de datos, similar a la que figura a continuacin y que, en sentido estricto, sera una distribucin de frecuencias. TABLA ESTADISTICA n 2 EDAD (aos) De 18 a 20 aos De 21 a 25 aos De 26 a 35 aos De 36 a 45 aos De 45 a 60 aos De 61 a 75 aos fi 10 14 23 20 29 24 fi = N = 120

Como podemos observar en esta distribicun de frecuencias, hemos agrupado los datos en 6 clases o categoras de edades, aunque no poseen el mismo tamao o amplitud (18-20 2635), y hemos contado el nmero de casos para conocer la frecuencia de cada clase. De este modo hemos realizado una organizacin agrupada de los datos que resulta til para poder compararla con otra distribucin de frecuencias, correspondiente a las edades de otro grupo de poblacin. Hay que destacar que en este proceso de agrupacin de los datos, hemos adoptado la edad como criterio de agrupacin del n de personas y que igualmente podramos haber adoptado el criterio del nmero de personas para agrupar las edades, aunque en ese caso, la distribucin de frecuencias que nos hubiese salido no nos habra aportado una informacin tan clara.

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En el proceso de organizacin agrupada de los datos, hemos perdido una pequea informacin respecto de la tabla inicial, ya que ahora no sabemos cuantas personas corresponden a cada uno de los aos que integran una clase o categora. A cambio hemos logrado una simplificacin ordenada, completa y representativa de toda la informacin que disponamos. Los nmero extremos de cada clase o categora se denominan lmites de clase (18; 20; 21; 25.....etc.), siendo el menor el lmite inferior y el mayor el lmite superior. Cuando una clase o categora no tiene, al menos tericamente, un lmite inferior o superior la denominamos como una clase o categora abierta. Este sera el caso de la primera de las clases de la distribucin de frecuencias si su intervalo lo hubisemos establecido del modo siguiente: Menos de 21. Al hacerlo as estaramos creando una categora abierta de la que, en sentido estricto, no tenemos datos suficientes pues no conocemos el nmero de personas con edades de 1; 2; 3...etc. aos.Lo mismo podramos hacer con la ltima de las categoras, cuyo intervalo se podra expresar del modo siguiente: Ms de 60 aos. 2.-Distribucin porcentual Para calcular un porcentaje,es necesario primero calcular una proporcin. Esta es igual al nmero de casos que existe en cada categora dividido por el nmero total de casos en la distribucin (N). En el ejemplo de la distribucin de frecuencias por edades, la proporcin de cada una de las categoras sera la siguiente: 10 14 23 20 29 24 120 ---- + ----- + ----- + ----- + ----- + ----- = --------- = 1 120 120 120 120 120 120 120 Como se puede apreciar, la suma de las porporciones de todas las categoras es igual a 1. Se trata de una de las propiedades fundamentales de las proporciones. Los porcentajes se obtienen multiplicando cada una de las proporciones por 100. Al utilizar los porcentajes en realidad lo que se hace es estandarizar el tamao de las categoras averiguando el nmero de casos que habra en cada categora si el nmero total de casos fuera 100 y si la proporcin en cada categora se mantuviese. Esta estandarizacin facilita enormemente la comparacin entre las categoras de dos grupos notablemente dispares respecto del nmero total de casos que contienen. Imaginemos un colectivo de 600 personas, agrupados por categoras de edades idnticas a las del ejemplo anterior. Supongamos que la categora 18-20 aos tuviese una frecuencia 10. En principio, comparando ambas categoras por su frecuencia, no advertiramos diferencias entre ellas. Sin embargo, al calcular su proporcin inmediatamente observaramos una diferencia entre ellas pues en el primer ejemplo sera: 10 --------- = 0'0833 que porcentualmente sera 8'33 % 120 mientras que en el segundo colectivo la misma frecuencia supondra la siguiente proporcin: 10

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--------- = 0'0166 que porcentualmente sera 1'66 % 600 Es decir, la misma frecuencia tiene mucho menor peso en el segundo colectivo que en el primero o, en otras palabras, hay menos gente joven en el segundo grupo que en el primero. Si establecemos en el primer ejemplo la distribucin de los porcentajes resultara una distribucin porcentual del siguiente tipo: 3.-Distribucin acumulada La distribucin acumulada se realiza indicando para cada categora el nmero total de casos o porcentaje que quedan por debajo del lmite real superior de dicha categora. Las distribuciones acumuladas se establecen comenzando la acumulacin por las categoras de orden inferior. La principal utilidad de las distribuciones acumuladas, sean de frecuencias o de porcentajes, es que nos permiten conocer de forma directa el nmero de casos que quedan incluidos en todas las categoras inferiores a la que estamos considerando, permitiendo comparar ms fcilmente entre distintos colectivos. Un uso muy frecuente de las distribuciones acumuladas se da con las distribuciones de la renta entre los diversos grupos sociales. TABLA ESTADISTICA n 3 EDADES 18-20 21-25 26-35 36-45 46-60 61-75 TOTALES fi 10 14 23 20 29 24 120 % 83 117 192 167 241 200 1000 Frecuencia acumulada 10 24 47 67 96 120 Porcentaje acumulado 83 200 392 559 800 1000

b).-Establecimiento de datos representativos del conjunto de los valores de la variable. Una vez se han organizado adecuadamente los datos mediante las distribuciones de frecuencias, porcentuales o acumuladas, la segunda tarea que debemos abrodar es la de buscar aquellos datos o valores que puedan ser suficientemente representativos del conjunto. Estos valores se pueden determinar atendiendo a los criterios de su posicin en la distribucin o a su representatividad de la totalidad de los valores. En trminos estadsticos a estos valores se les denomina como las medidas de tendencia central y se concretan en tres: la mediana; la moda y la media. 1.-La Moda La moda es el valor ms sencillo de obtener ya que es el valor o valores que se presenta con una mayor frecuencia. En otras palabras, la moda es el valor o valores ms comn(es) de la distribucin. En los casos de datos agrupados, la moda constituye el punto medio de

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la categora que posee la mayor frecuencia. Cuando la medida es nominal, la moda ser la categora a la que corresponde la frecuencia mxima y en los casos de medidas ordinales, la moda es el valor ordinal al que corresponde la frecuencia mxima. Una distribucin puede no tener moda o poseer varias, en cuyo caso las distribuciones se denominan unimodales, bimodales o multimodales. En el caso de la distribucin agrupada por edades, la moda sera el punto medio de la categora 46-60, ya que es sta la que posee una mayor frecuencia, y su clculo sera: 46+60/2=53. En cambio, en el ejemplo de la distribucin de nmeros del 1 al 9 del ejemplo posterior, dado que todos los nmeros poseen la misma frecuencia, nos hallaramos ante un supuesto de distribucin carente de moda.

2.-La Mediana La mediana se define como el punto o valor numrico que deja por debajo y por encima la mitad de las puntuaciones de una distribucin, es decir que divide las puntuaciones de una distribucin en dos partes iguales. Por ejemplo, si tenemos la serie de nmeros: 1,2,3,4,5,6,7,8,9 la mediana sera el nmero 5 ya que este nmero deja 4 nmeros por debajo y otros 4 por encima (1,2,3,4) y (6.7.8.9). Observemos que en esta distribucin ha sido sencillo encontrar la mediana, ya que hemos tomado un nmero relativamente pequeo de casos y adems como cada nmero tiene una frecuencia de 1 y son un nmero impar, el resultado se alcanza con un simple recuento. Cuando no se cumplen estas condiciones, la mediana se puede calcular aplicando la siguiente frmula: a).- Para una distribucin impar N+1 9+1 Me= -------------- en el ejemplo Me= ----------- = 5 2 2

b).- Para una distribucin par Nc-1 + Nc+1 Me=---------------------2 Es decir la suma de los dos valores centrales de la distribucin divida por dos. En el ejemplo anterior, si la distribucin slo llegase hasta el nmero 8 la Mediana sera 4+5/2= 4'5.

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c).-La frmula de clculo de la mediana con los valores agrupados ser la siguiente: 1 ---- N - acum fmd 2 Me= Lmd + ( ----------------------------------) X W fmd En la que Lmd es el lmite inferior del intervalo o categora que contiene la mediana; N es el nmero total de casos; acum fmd es la frecuencia acumulada por debajo de la frecuencia del intervalo que contiene la mediana y W es la amplitud o distancia de la categora que contiene la mediana. Para poder determinar la mediana es necesario que los valores de una distribucin posean, como mnimo, una medicin ordinal, ya que la mediana exige una ordenacin de mayor a menor o viceversa. No obstante, como la mediana es un valor indicativo de posicin en una distribucin, slo requiere el conocimiento de la amplitud del intervalo en el que se encuentra. Ello permite utilizarla en aquellas distribuciones cuyas categoras extremas no posean lmites superiores y de que la mediana no corresponda a esas categoras, lo que resulta muy raro. 3.- La Media El concepto de la media consiste en hallar un valor, real o terico, que sintetice el conjunto de los valores de una distribucin. Existen varias clases de medias, aunque la media ms comn es la media aritmtica. Esta se calcula sumando los datos de todas las observaciones y dividndola por el nmero de observaciones realizadas. Su frmula general es la siguiente: _ X1 + X2 +....Xn X = ------------------------n En la que X1...son los valores de cada caso o categora y n es el nmero de casos o categoras. En el ejemplo de la distribucin por edades, para poder calcular la media aritmtica debemos, previamente calcular las denominadas marcas de clase, es decir los puntos medios de la amplitud, que no olvidemos es variable, de cada categora. Ello nos obligara a elaborar la siguiente tabla: TABLA ESTADISTICA n 4 EDADES 18-20 21-25 26-35 36-45 46-60 61-75 fi 10 14 23 20 29 24 120 Mc Marca de clase 19 23 305 405 53 68
x Mc 190 322 7015 810 1537 1632 51925

fi

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La media aritmtica sera entonces: _ X = 5192'5/120 = 43'27 Este nmero significa que si cada una de las 120 consultadas tuviese 43'27 aos, habramos obtenido una distribucin homognea cuyo resultado permitira una fcil comparacin con otras distribuciones de edades, con independencia del nmero de personas que las compusiesen, para saber si el conjunto de su poblacin era ms joven o ms vieja. La media aritmtica constituye una especie de centro de gravedad estadstico de la distribucin considerada. Cuando las distintas frecuencias de cada caso o categora poseen una importancia distinta para el colectivo que se est considerando, puede resultar muy til asociar a cada frecuencia un cierto factor o peso que pondere dicha importancia. En este caso se puede obtener una media aritmtica ponderada, cuya frmula es: _ X1 W1 +...+Xn Wn X = ------------------------------W1+.........+Wn Dos son las principales propiedades estadsticas de la media aritmtica, sea simple o ponderada: a).-La suma de las desviaciones (diferencias) de cada valor de la variable a la media aritmtica es igual a cero. b).-La media aritmtica de los valores de una variable no vara si todas las frecuencias de su distribucin se multiplican o dividen por un mismo nmero. En trminos generales se puede sealar como la principal ventaja de la media respecto de la mediana que vara menos de una muestra a otra, lo cual la hace especialmente idnea cuando el conocimiento de una realidad se intenta obtener no a partir de la totalidad de los datos, sino de una muestra o varias de las unidades que forman parte de esa realidad. El sistema de informacin por muestreo hace especialmente til el empleo de la media aritmtica en lugar de la mediana, como medida de tendencia central. El principal inconveniente radica en que la media aritmtica, a diferencia de la mediana, utiliza la informacin de toda la distribucin lo que la hace especialmente sensible a las alteraciones que se pueden producir en los valores extremos. c).-Determinacin de las principales caractersticas que definen el conjunto de valores de la variable: variacin o dispersin de una distribucin. El tercer aspecto significativo que debemos considerar en un conjunto ordenado de los valores de una variable (distribucin), se refiere al grado de agrupamiento o dispersin que presentan dichos valores en la distribucin. Bsicamente, el perfil del agrupamiento o dispersin de los datos puede considerarse:

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1.- atendiendo al recorrido o amplitud de la escala en la que se distribuyen las puntuaciones; 2.- considerando la variacin de las puntuaciones respecto de las medidas de tendencia central. a).-Recorrido o rango El recorrido o rango de un conjunto de nmeros o una distribucin es la diferencia entre el mayor y el menor de todos ellos. El problema de este criterio para conocer el perfil egenral de la distribucin radica en que en la medida en que el recorrido depende de los valores extremos, si estos son atpicos o excepcionales respecto de los valores intermedios, el resultado se ver afectado por esta atipicidad. En el ejemplo de la distribucin por edades, si hubiese una sola persona con 80 aos, el recorrido de toda la distribucin se vera afectada por esa sola persona a pesar de que la mayora de las personas consideradas posean una edad entre 18 y 75 aos. b).-Desviacin media La desviacin media o promedio de desviacin es una medida de dispersin que toma como referencia un determinado valor medio, como suele ser la media aritmtica. Esta desviacin media se calcula como la media aritmtica de los valores absolutos (es decir sin considerar su signo + o -) de las desviaciones observadas respecto de la media aritmtica de la distribucin. _ Xi - X Dm = ---------------N _ _ donde X es la media aritmtica de los nmeros dados o de la distribucin y Xi - X es el valor absoluto de las desviaciones de los diferentes valores de X respecto del valor de la media aritmtica. EJEMPLO Hallar la desviacin media de los nmeros 2,4,6,8,10. Primero se calcula su media aritmtica: 2 + 4 +6 +8 + 10 30 ------------------------= -------- = 6 5 5 Luego se calcula la desviacin media de esos nmeros respecto de esa media aritmtica: (6-2) + (6-4) + (6-6) + (8-6) + (10-6) 4+2+0+2+4 12 -------------------------------------------------- = -------------------------= ------ = 24 5 5 5

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Como criterio general se puede afirmar que cuanto mayor sea la desviacin media, mayor ser tambin la variacin respecto de la puntuacin media y por consiguiente ms dispersa ser la distribucin. c).-Desviacin tpica y varianza. La varianza es el valor medio del cuadrado de las desviaciones de las puntuaciones a la media aritmtica. La desviacin tpica es la raz cuadrada de la varianza. 10.4.- Estadsticas de dos variables (Bivariable) y de mltiples variables (Multivariable) Hasta ahora hemos estado analizando los supuestos en los que existe una sola variable relevante. Sin embargo, en la realiad internacional, puede ser mucho ms til considerar realidades un poco ms complejas en las que intervengan dos variables. En tal caso, debemos abordar tres tipos de cuestiones bsicas: 1.-La organizacin de los datos de ambas variables. 2.-Las formas de relacin estadstica entre ellas. 3.- La interpretacin de las distintas relaciones estadsticas.

1.-Organizacin de los datos de las variables: Al igual que indicbamos para los valores de una sola variable, en los casos de dos o ms variables, el primer paso que debemos realizar es una organizacin de los valores que presentan las observaciones realizadas. La forma ms habitual de organizacin y presentacin de los datos se realiza mediante una tabla de doble entrada , en la que estableceremos las categoras de las variables dependientes en las columnas de la tabla y las categoras de la otra variable en las filas de la tabla. Los valores que figuren en cada una de las casillas de las distintas columnas correspondern a las frecuencias de las observaciones de cada variable dependiente para cada una de las categoras de la variable independiente. 2.-Formas de relacin estadstica entre las variables: El profesor Garca Barbancho introduce el trmino de covariacin estadstica para referirse a la existencia de una variacin conjunta de los valores de dos variables X e Y obtenidos a partir de las observaciones. Esta covariacin estadstica presenta, segn el tipo de relacin que exista entre ambas variables, cinco supuestos diferentes: a).-Dependencia causal unilateral: Se produce cuando los cambios en los valores de la variable independiente o causal (X) influye en la variacin de los valores de la variable dependiente o efecto (Y).

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b).-Interdependencia: Se produce cuando existe una incidencia recproca en los cambios de los valores de dos variables (X) e (Y).

c).-Dependencia indirecta: Esta situacin se corresponde con la existencia de una covariacin estadstica entre dos variables (X) e (Y) como resultado de su relacin con una tercera variable (Z) que incide en ambas. En este caso la relacin de dependencia causal no se produce entre las dos variables dependientes o efectos (X) e (Y) sino de stas con la tercera variable (Z) que es la autnticamente independiente. Con frecuencia, la interdependencia encubre realmente una dependencia indirecta, slo que el modelo considerado ha excluido a la tercera variable. (Vanse las referencias en el apartado dedicado a los modelos de causalidad) d).-Concordancia: Este tipo de covariacin se produce cuando los valores de dos variables independientes (X) e (Y) coinciden en el sentido de las variaciones de sus respectivos valores. e).-Covariacin casual: Es la situacin en la que dos variables (X) e (Y) independientes entre s, es decir sin ningn tipo de relacin de causalidad, muestran una fuerte covariacin o dependencia estadstica entre sus respectivos valores. Por ej. la evolucin de las temperaturas climticas de un pas y el nmero de conflictos armados con terceros pases. Como se puede apreciar, la relacin estadstica entre los valores de las variables, constituye el centro de atencin de esta parte de la Estadstica Descriptiva y adems de su representacin numrica admite tambin una representacin grfica en un eje de coordenadas en cuyo eje de abcisas se indicarn las categoras o valores de la variable independiente X y en su eje de ordenadas figurarn las categoras o valores de la variable depndiente Y. Los valores de las observaciones se indicarn con los puntos en donde interseccionan los correspondientes valores o categoras de X e Y. Con ello se obtiene una nube de puntos o diagrama de dispersin, que reflejar las distintas observaciones realizadas y que puede presentar cuatro posibles modelos: Los principales instrumentos estadsticos para evidenciar la covariacin entre dos variables son la regresin y la correlacin. a).- Regresin: Mediante la regresin, en sentido amplio, se busca una lnea o funcin matemtica que exprese, sin irregularidades una dependencia causal entre una variable independiente (X) y otra dependiente (Y). Esta dependencia causal presenta dos modalidades: puede ser una dependencia estadstica, consistente en que ambas variables estn fuertemente relacionadas pero las observaciones poseen un componente aleatorio que impiden que la nube

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de puntos aparezca exactamente distribuida a lo largo de una lnea (recta o curva). La dependencia funcional o exacta posee una lnea o funcin matemtica que nos indica exactamente cmo estn relacionadas ambas variables. El anlisis de regresin consiste en obtener la lnea terica hacia la que tienden los puntos de un diagrama de dispersin. Se trata, por tanto, de avriguar la dependencia estadstica mediante la eliminacin de los factores aleatorios. La lnea de regresin puede obtenerse mediante tres mtodos: a).-Mtodo elemental: Consiste en trazar una lnea (recta o curva) que ajuste lo ms posible la nube de puntos resptano su tendencia. Es un mtodo rpido y fcil de representar grficamente la lnea, aunque posee el inconveniente de ser subjetivo y, por tanto, menos riguroso.

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b).-Mtodo de las medias: Consiste en calcular las medias de todos los valores de Y para cada valor de X , obteniendo as la lnea mediante la unin de los puntos que representan tales medias. c).-Mtodo analtico: Resulta de aplicar una funcin matemtica para explicar la dependencia causal exacta que subyace entre las dos variables. La ecuacin de la lnea de regresin se expresa de forma genrica mediante una funcin matemtica del tipo: Y = f (X) (Y es funcin de X cuando no existen errores aleatorios) Esta relacin matemtica no slo permite explicar la dependencia causal exacta entre ambas variables sino tambin predecir o estimar los valores de Y para cada valor e X. Las funciones matemticas que describen las formas ms comunes de dependencia entre ambas variables son las siguientes: 1.-Recta o funcin lineal: Y = a X + b El parmetro a constituye, precisamente, el coeficiente de regresin

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2.-Parbola o funcin de segundo grado: Y = a X + b X + c


b

3.-Funcin potencial: Y = a X X 4.-Funcion exponencial: Y = a . b El valor del coeficiente de regresin Su valor expresa el incremento de Y cuando X aumenta en una unidad. En la funcin lineal si a toma un valor positivo, la variable Y crece al aumentar los valores de la variable X y, por tanto, la recta es creciente y la dependencia entre ambas variables es positiva o directa. Cuando a es igual a 0 la recta es horizontal y no hay dependencia entre ambas variables. Por ltimo, cuando a es negativa ello significa que cuando aumenta X disminuye Y, lo que supone una recta decreciente y una dependencia negativa o inversa entre ambas variables. El parmetro a en la funcin exponencial representa la progresin geomtrica de los valores de Y correspondientes a los aumentos de 0, 1, 2,.... en los valores de X. Finalmente, este mismo parmtero en los funcin potencial mide constituye la variacin porcentual de los valores de Y cuando los valores de X aumentan en un 1 %. b).- Correlacin: La correlacin permite determinar un nmero, llamado coeficiente de correlacin (r), que indica objetivamente el grado de variacin conjunta o covariacin de los valores de ambas variables. Para el caso de dos ariables X e Y y de una covariacin lineal o simple, el coeficiente de correlacin se formula como: Sxy r = -------------------Sx Sy en cuya formulacin Sxy es la covariancia entre X e Y, Sx y Sy son las respectivas desviaciones estndar de las variables X e Y. La covariancia se determina segn la siguiente frmula: _ _ (X - X ) ( Y - Y) XY X Y Sxy = ----------------------------------- = ----------------------- - ------------- X -------------N N N N Si el coeficiente de correlacin ( r )es igual a 1 la correlacin es perfecta y directa, es decir la nube de puntos se encuentra sobre la recta creciente. Si, por el contrario ( r ) es igual a -1 la correlacin lineal es perfecta pero inversa y la nube de puntos se encontrar sobre una recta decreciente. Si ( r ) es igual a 0 no existe ninguna correlacin lineal y, en este supuesto, o bien la correlacin no es lineal o bien no hay covariacin entre las dos variables. En los casos

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intermedios se habla de una correlacin dbil. Conviene recordar que mientras el coeficiente de regresin seala claramente una relacin de causalidad entre las variables, ello no resulta cierto para el coeficiente de correlacin. Ello permite aplicarlo a aquellos supuestos en los que se aprecia una cierta covariacin pero se desconoce la existencia de relaciones causales entre las variables.

10.5.- Aplicacin de la Estadstica a las Relaciones Internacionales: Los indicadores y las series temporales. Uno de los problemas clsicos que se suscitan cuando tratamos de utilizar la Estadstica como un instrumento de investigacin en el campo de las ciencias sociales, consiste en establecer una relacin entre las diversas variables, que figuran formuladas en trminos abstractos en los conceptos, y las realidades internacionales concretas, en definitiva entre el mundo abstracto y general de la teora y el mundo concreto y particular de los fenmenos internacionales. Esta vinculacin se realiza a travs de la definicin operativa y, sobre todo, de la construccin de los indicadores. La definicin operativa tiene como finalidad determinar "cmo se medir la ocurrencia de un concepto determinado en una situacin concreta. En dicha definicin se detallar el contenido del concepto que va a medirse, vinculado con constructos definidos tericamente con los procedimientos operativos." 82 Los indicadores pueden derivarse de las definiciones operativas ya que son la versin numrica de aquellos elementos de la realidad recogidos en la definicin operativa. En otras palabras, los indicadores traducen a datos cuantitativos alguna de las propiedades o caractersticas de la realidad contenidas en la definicin operativa que se ha formulado a partir del concepto terico previo. Por ejemplo el concepto de Estado incluye tres elementos sociolgicos: territorio, poblacin y sistema poltico (gobierno), junto con otros dos elementos jurdicos: el reconocimiento y la soberana. Cada uno de estos cinco elementos o propiedades definitorias del Estado puede, a su vez, definirse operativamente. As, el territorio puede definirse como: la superficie terrestre, martima y area dentro de los lmites fronterizos. De esta definicin podemos extraer varios indicadores: por ej. la superficie en Kilmetros cuadrados; los kilmetros de fronteras; los kilmetros de costa; la superficie cultivada; etc. Todos ellos son indicadores que se refieren a distintos elementos cuantificables de una misma propiedad definitoria del Estado, el territorio. Como lo ha puesto de relieve Alcaide, se han realizado muchas definiciones del trmino indicador, pero todas ellas coinciden en las tres caractersticas que deben cumplirse por cualquier indicador social: a).- el indicador debe tomar alores numricos dentro de un cierto dominio social; b).- deben medir tanto la situacin de la realidad social en un momento determinado como su evolucin en el tiempo y, por ltimo, c).- deben servir para la construccin de un modelo terico representativo de la configuracin y el funcionamiento de la realidad social que se investiga. 83
82

- CEA, M A.- Metodologa cuantitativa.Estrategias y tcnicas de investigacin social.- Madrid,1996. Edit. Sntesis; pg.136 83 - ALCAIDE, A.- op. cit.; pg. 376

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Existen varios mtodos estadsticos para la obtencin de indicadores sociales, entre los que podemos destacar los siguientes: 1.- Los nmeros ndices 2.- El anlisis factorial 3.- Las encuestas de opinin de expertos (Anlisis Delphi) o del pblico.

10.5.1.- Nmeros ndices simples y compuestos Los nmeros ndices, son elementos cuantitativos que nos permiten medir las fluctuaciones de una cierta magnitud variable en funcin de uno de sus valores que se toma como trmino de referencia. Es norma convenida que el trmino que se toma como referencia (ao; rea geogrfica; sector econmico; etc.) se haga igual a 100 y, en consecuencia, los nmeros ndices se convierten en los porcentajes de cada valor de la variable respecto del valor que se toma como referencia y al que se denomina como base. El valor de los nmeros ndices reside, segn Barbancho, en que "resumen en una sola serie las fluctuaciones no de una sola variable sino de un conjunto de variables relacionadas entre s desde cierto punto de vista." 84 Las observaciones de la variable pueden ser temporales o atemporales. En las observaciones temporales, los valores de la variable fluctan al pasar de una unidad temporal a otra. En las observaciones atemporales, las fluctuaciones en los valores de la variable son el resultado de pasar de un elemento ( mbito geogrfico, sociolgico, econmico, etc.) a otro. Cuando se trate de observaciones temporales, debe tomarse como base el dato correspondiente a un intervalo de tiempo normal (ao; mes; etc.). No podemos olvidar que los nmeros ndices nos dan series relativas que dependen del tiempo base que se toma como trmino de comparacin. Por tanto, debe evitarse tomar como base el dato referido a un perodo de tiempo anormal.Si las observaciones son atemporales, los ndices suelen calcularse o bien tomando como base de referencia el dato de un elemento ( km; pas; etc.) o bien la media de todos los valores de la variable. Su expresin estadstica es la siguiente:

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- BARBANCHO, A.- op. cit.; pg. 145

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VALOR DE LA VARIABLE EN EL PERIODO t

Is = x 100
VALOR DE LA VARIABLE EN EL PERIODO BASE

DISTRIBUCION REGIONAL DE LOS CONFLICTOS DE ALTA INTENSIDAD EN 1989-19921996 REGIONES/ AOS AFRICA ASIA AMERICA C. y S. EUROPA ORIENTE MEDIO TOTAL 1989 = 100 9 11 5 2 5 32 1992 7 11 3 4 4 29 1996 5 10 3 2 4 24

Fuente: Anuario CIP 1998.- Barcelona, 1998. Edit. Icaria; pg. 262

De la tabla estadstica que recogemos y tomando como ao base = 1989, podramos obtener la siguiente tabla de nmeros ndices simples: REGIONES/ AOS AFRICA ASIA AMERICA C. y S EUROPA ORIENTE MEDIO TOTAL 1989 = 100 100 100 100 100 100 100 1992 (%) 77 100 60 200 80 90 1996 (%) 55 90 60 100 80 75

Naturalmente si en lugar de tomar como ao base 1989 hubisemos tomado el ao 1996 los resultados numricos seran diferentes (comprebelo el lector), sin embargo nos seguiran arrojando la misma informacin sobre la realidad internacional de los conflictos. En el caso de las observaciones temporales, resulta muy importante seleccionar adecuadamente el perodo temporal que tomaremos como base para equiparar los datos de las variables a 100. Cuando los datos de las observaciones varan notablemente en breves perodos de tiempo (das o semanas, por ej.) convendr tomar como base el promedio de los datos que corresponden a un perodo temporal suficientemente amplio para que las fluctuaciones queden suavizadas. De la combinacin o agregacin de varios nmeros indices simples podemos obtener los nmeros indices compuestos o conjuntos. Para calcularlos podemos recurrir a distintos promedios de los nmeros ndices simples. Entre los mtodos estadsticos ms frecuentes para lograr la combinacin de diversos ndices simples podemos citar:

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A).- EL INDICE AGREGATIVO SIMPLE Consiste en sumar los valores de las diversas variables de un mismo perodo de tiempo, si se trata de ndices temporales, o de un mismo elemento si se trata de ndices atemporales y divirdirlo por el resultado de sumar los valores de la variable del perodo o elemento tomado como base, multiplicndolo todo por 100. Su expresin estadstica es la siguiente:
SUMA DE TODOS LOS VALORES DE LA VARIABLE EN EL PERIODOCONSIDERADO

Ic = X 100
SUMA DE TODOS LOS VALORES DE LA VARIABLE EN EL PERIODO DE BASE

De los datos de la tabla estadstica anterior podramos deducir los siguientes nmero ndices agregativos simples: REGIONES/ AOS AFRICA ASIA AMERICA C. Y S. EUROPA ORIENTE MEDIO TOTAL Indice Agregativo por Regiones 1989 = 100 9 11 5 2 5 32 100 % 1992 7 11 3 4 4 29 91 % 1996 5 10 3 2 4 24 75 % Indice Agreg por Aos 66 % 97 % 34 % 25 % 41 %

B.- LA MEDIA ARITMETICA Se obtiene calculando la media aritmtica de los ndices simples. En el ejemplo que venimos empleando dara la siguiente tabla: REGIONES/ AOS AFRICA ASIA AMERICA C. Y S. EUROPA ORIENTE MEDIO TOTAL Indice Compuesto por Regiones 1989 = 100 100 100 100 100 100 100 100 1992 77 100 60 200 80 90 103'40 1996 55 90 60 100 80 75 77 Indice compuesto por Aos 77'33 96'67 73'33 133'33 86'67

Tambin se pueden utilizar la media geomtrica y la media armnica de los nmeros ndices simples para obtener nmeros ndices compuestos o conjuntos. Sin embargo, resulta ms interesante sealar que la mayora de los nmeros ndices cuando se emplean

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como indicadores sociales, suelen ponderarse, lo que significa que a cada uno de las categoras de la variable se le atribuye un nmero que representa el peso o importancia que le atribuimos en relacin con las dems categoras de esa variable y al que denominamos coeficiente de ponderacin. El proceso de ponderacin debe realizarse a partir de aquella informacin de la realidad que nos demuestra la distinta importancia que poseen los valores de la variable de cada una de las categoras, temporales o atemporales, que empleamos para determinar la variacin de esos valores. Si aplicamos la ponderacin al indice agregativo simple podemos obtener un ndice agregativo ponderado, cuya formulacin estadstica ser la siguiente: X1 . W1 + X2 . W2 + X3 . W3 Icp = x 100 X10 . W1 + X20 . W2 + X30 . W3 En donde Icp es el ndice agregativo ponderado X1; X2; X3 .......... son los valores que toma la variable para un perodo o caracterstica atemporal determinados. W1; W2; W3....... coeficiente de ponderacin, son las cantidades que hemos adoptado para ponderar las caractersticas de la variable, por ej. en la distribucin regional de los conflictos de alta intensidad podramos haber adoptado unos valores de ponderacin en funcin de cualquiera de los siguientes criterios: nmero de vctimas producidas en dichos conflictos; poblacin total de los pases o grupos beligerantes; tamao de los ejrcitos; etc. X10; X20; X30 ............ son los valores que toma la variable en el perodo o caracterstica tomados como base. Obviamente, la eleccin de los valores de ponderacin posee un cierto grado de arbitrariedad pues como hemos visto, para una misma realidad podemos emplear diversos criterios y asignar distintos valores de ponderacin en cada criterio. Aunque desde un punto de vista metodolgico, los nicos requisitos mnimos que debemos cumplir son: explicar el criterio y los valores de ponderacin asignados y argumentar las razones que justifican la eleccin del criterio y valores de ponderacin, ello no significa que no puedan segurirse ciertas recomendaciones metodolgicas con el fin de lograr una mayor fiabilidad y seguridad en las ponderaciones. Entre ellas y siguiendo lo indicado en el Informe FOESSA 1970, podemos sealar: 1.- Reflejar los ms rigurosamente posible la variable que se pondera y las diferencias entre sus indicadores. 2.- El coeficiente de ponderacin debe ser lo ms sencillo posible y, por tanto, debemos emplear nmeros enteros y pequeos. 3.- Cuando la variable puede poseer significados opuestos en funcin de sus diversos valores, conviene atribuir signos positivos (+) o negativos (-) a los coeficientes de ponderacin. Por ejemplo en una escala de medicin de la percepcin de amenaza o confianza entre dos pases, podemos ponderar los diversos valores de la confianza con signos positivos y los de la amenaza con signos negativos. 4.- Todas las frecuencias o atributos iguales deben ponderarse del mismo modo con objeto de facilitar la comparacin entre sus respectivos ndices ponderados.

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El sistrema de nmeros ndices, simples y compuestos, constituye una de las principales formas de elaboracin de indicadores internacionales, ya que resulta muy sencilla su elaboracin a partir de las estadsticas aportadas por los pases o las Organizaciones Intergubenamentales. A este respecto, conviene destacar algunas de las principales fuentes donde el investigador internacionalista encontrar los datos estadsticos, elaborados o semielaborados, a partir de los cuales pueda desarrollar sus propios indicadores internacionales o, lo que resulta ms frecuente cuando no se tienen conocimientos vanazados de estadstica, emplear los indicadores ya existentes y que reflejan ms rigurosamente las caractersticas del concepto terico que se utiliza. En particular podemos citar el World Development Indicators (1998), elaborado por el Banco Mundial; el Informe sobre desarrollo humano (1998) elaborado por el PNUD desde 1990 y el World Handbook of Political and Social Indicators, elaborado por Taylor, Ch.Lewis. y Jodice, David A. Como regla prctica que debe seguir el investigador, conviene formular la siguiente: Nunca debe emplearse un indicador del que se ignore el procedimiento estadstico empleado para su obtencin o no comprendamos el concepto operativo empleado para su formulacin estadstica. La frecuencia con la que muchos investigadores de las Relaciones Internacionales emplean indicadores polticos, sociales, econmicos o militares de los que ignoran lo ms elemental de las medidas estadstica utilizadas para su elaboracin o, lo que resulta todava ms grave, el concepto operativo empleado para la medicin, suele conducir a realizar comparaciones entre indicadores estadsticamente diferentes o conceptualmente incompatibles. Por ej. se comparan indicadores de los efectivos militares, humanos y materiales, entre los diferentes pases sin ponderar, cuando resulta evidente que el grado de profesionalizacin y experiencia de la tropa profesional (casos de EE.UU. y Reino Unido) es manifiestamente mayor que el de la tropa de conscripcin, y tratndose de material militar, resulta elemental que los pases con tecnologa y capacidad productiva propia se encuentran estratgicamente en condiciones ms ventajosas, en caso de conflicto armado, que aquellos pases que simplemente importan su material militar. Precisamente la necesidad de evitar errores en la elaboracin de ndices compuestos, partiendo de aquellos ndices simples ya elaborados y que tiene disponibles el investigador, le obliga con frecuencia a realizar dos operaciones previas: la normalizacin y la estandarizacin de los datos de los indicadores que tratamos de agrupar. Si es posible, todos los indicadores que se incorporen al ndice debern tener la misma escala (rango de los posibles valores del indicador). Esto es necesario con el fin de prevenir posibles distorsiones cuando los valores de cada indicador singular se agregen o sumen. Tales distorsiones pueden deberse simplemente al hecho de que uno de los indicadores comprenda valores de 0'0 a 10'0, mientras que otro indicador puede comprender valores entre 0'0 y 100'0. Cuando se agregasen o sumasen los valores de ambos indicadores, tenderamos convertir el segundo indicador en 10 veces mayor que el primero. Si queremos normalizar o limitar todos los indicadores a un rango de valores entre 0'0 y 1'0, podramos corregirlos utilizando la siguiente frmula:

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Valor Original del Indicador - Valor ms bajo posible del Indicador Valor normalizado = del Indicador Valor ms alto posible del Indicador - Valor ms bajo posible del Indicador Si el valor ms bajo posible del Indicador es 0'0 entonces la frmula se convierte en: Valor Original del Indicador Valor Normalizado del Indicador = Valor ms alto posible del Indicador Una vez normalizados, los valores del indicador estarn situados en el rango entre 0'0 y 1'0 y por tanto sern comparables.Cuando sea difcil determinar los valores ms alto y ms bajo posible del indicador, tales indicadores debern ser estandarizados. Este procedimiento transforma las series de datos en series estandarizadas de indicadores (llamadas Zescala). Las series estandarizadas de datos se caracterizan por poseer una media de 0'0 y una desviacin stndard de 1'0 y se obtienen sustrayendo para todos los casos de valores del indicador original la media de las series y dividindola por la desviacin estndard. Obviamente, los indicadores normalizados y estandarizados no deben mezclarse en la construccin de un ndice. 10.6.- El Indice de Desarrollo Humano (IDH) Ya hemos sealado que uno de los indicadores internacionales ms importantes que han aparecido en los ltimos aos, es fruto del esfuerzo que vienen realizando los expertos del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) y aborda uno de los fenmenos centrales de nuestra ciencia: el desarrollo humano. Se trata del Indice de Desarrollo Humano, habitualmente conocido en castellano con las siglas IDH, un ndice compuesto de otros ndices que, a su vez, tratan de reflejar las principales caractersticas del fenmeno del desarrollo. 85 El propio Informe aporta la definicin operativa del desarrollo que se emplea para la elaboracin del IDH en los siguientes trminos: " El IDH se basa en tres indicadores: longevidad, medida en funcin de la esperanza de vida al nacer, nivel educacional, medido en funcin de una combinacin de alfabetizacin de adultos (ponderacin, dos tercios) y tasas de matriculacin combinada primaria, secundaria y terciaria (ponderacin, un tercio), y nivel de vida, medido por el PIB per cpital real (PPA en dlares). (...) El IDH es un promedio simple del ndice de esperanza de vida, el ndice de nivel de educacin y el ndice del PIB real per cpita ajustado (PPA en dlares). Se calcula dividiendo por tres la suma de los tres ndices.". 86 Se trata por tanto de un ndice compuesto obtenido por agregacin mediante la media aritmtica de otros tres indices que reflejan aspectos sociales, educativos y econmicos de la realidad de cada pas. Su valor oscila entre 0, desarrollo nulo, y 1, desarrollo perfecto.
- "Medir y evaluar el desarrollo".- Revista Internacional de Ciencias Sociales; n 143 (Marzo 1995); pgs. 3-159 86 - PNUD.- Informe sobre desarrollo humano 1998.- Madrid, 1998. Edit. Mundi Prensa,S.A.; pg. 107
85

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Aunque ambos valores extremos son tericos ya que nunca se puede dar en la realidad que un pas tuviese valores 0 en los tres indicadores parciales que se agregan, as como que su valor fuese 1 en los tres, nos sirven de referencia ya que cuanto ms prximo est el IDH de un pas al valor 1 ms desarrollado estar y, por el contrario, cuanto ms se aproxime al 0 ms subdesarrollado se encontrar. Adems del IDH como un indicador general del desarrollo, los sucesivos informes anuales del PNUD han tratado de ampliar y profundizar en los mltiples aspectos que presenta el fenmeno del desarrollo en la realidad mediante la elaboracin de indicadores parciales del desarrollo, entre los que podemos citar los siguientes: Indice de Libertad Humana -ILH- 87 ; el Indice de Pobreza Humana de los pases en desarrollo -IPH 1- completado ms tarde con el Indice de Pobreza Humana de los pases industrializados -IPH 2- 88 ; el Indice de Desarrollo relacionado con la Mujer IDM- y el Indice de Potenciacin de la Mujer- IPM- 89 , convertidos ms tarde en el Indice de Desarrollo relativo al Gnero -IDG- y el Indice de Potenciacin del Gnero - IPG-. Aunque la introduccin de estos indicadores parciales, junto con el perfeccionamiento del clculo del IDH, precisamente introduciendo factores de ponderacin, ha hecho que las fluctuaciones de algunos pases en los IDH de los primeros aos no se correspondiese exactamente con los cambios experimentados en sus realidades y, por tanto, que los primeros Informes deban tomarse con cierta cautela, lo cierto es que el IDH constituye hoy en da uno, por no decir el nico,de los indicadores sobre el desarrollo humano suficientemente preciso y fiable para su empleo en las investigaciones internacionales. La claridad y profundidad de los anlisis interpretativos de los datos que cada ao arroja el IDH y que figuran en el Informe, acompaando a las correspondientes tablas y grficos, unido al detalle y rigor de las notas tcnicas, en las que se explican los procedimientos de clculo estadstico empleados, constituyen una fuente primaria de informacin para el internacionalista de nuestros das.

10.7.- Las Series Temporales Ya hemos sealado la importancia que adquiere la variable temporal en la investigacin de los fenmenos internacionales que, como el resto de los fenmenos sociales, estn directa e inevitablemente condicionados por el constante fluir del tiempo. Por esta razn, una de las psobilidades ms importantes que aporta la Estadstica a los investigadores en las Relaciones Internacionales es la de elaborar series temporales o cronolgicas. Se denominan as las series de datos estadsticos de dos o ms variables relacionadas entre s y de las que una de ellas es el tiempo. En otras palabras, son series bi o multivariables en las que una de ellas es el tiempo. Cuando abordamos el estudio de los datos u observaciones de una variable Y en el marco temporal, debemos distinguir claramente entre los datos de la variable referidos a un momento determinado, considerados stocks o variables fondo, de aquellos otros datos que se refieren a todo un perodo temporal tomado como unidad, en cuyo caso estamos ante corrientes o variables flujo. Las primeros nos permiten aplicar el mtodo comparativo a sucesos o
87 88

- PNUD.- Informe 1991; pgs. 51-57 - PNUD.- Informe 1998; pgs. 110 89 - PNUD.- Informe 1995; pgs. 80-96

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fenmenos internacionales considerados desde una perspectiva esttica. En cambio, las variables flujo nos permiten estudiar los sucesos o fenmenos internacionales contemplndolos de un modo dinmico. Ambos resultan igualmente tiles para el investigador y el empleo de uno u otro tipo de variables depender del fenmeno y la finalidad de la investigacin que deseamos realizar. Las series temporales resultan un instrumento estadstico muy til para conocer la evolucin de una variable Y cuyos valores cambian con el transcurso del tiempo. Ello convierte al tiempo en la variable independiente, mientras que la variable Y ser la variable dependiente. Con las series temporales no slo logramos un conocimiento preciso de la evolucin de los valores de la variable dependiente Y durante los perodos del pasado o del presente, ino que tambin adquirimos informacin sobre la evolucin futura de los valores de dicha variable, lo que facilita el anlisis predictivo. Cuando consideramos los tipos de series temporales, fcilmente podremos observar dos categoras fundamentales: a).- Aquellas en las que las variaciones son evolutivas y, por tanto, el valor medio de la variable experimenta cambios o alteraciones a lo largo del tiempo; b).- Aquellas en las que las variaciones son estacionarias, lo que significa que el valor medio de la variable permanece constante o cuasiconstante a lo largo del tiempo.

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VARIACION EVOLUTIVA

T
VARIACION ESTACIONARIA

En ambos casos, los valores de la variable experimentan fluctuaciones a lo largo del tiempo, pero mientras en las series evolutivas las fluctuaciones provocan cambios en la tendencia de la variable dependiente, en las series estacionarias, las fluctuaciones no producen cambios de tendencia en la variable dependiente. En el planteamiento clsico de las series temporales, se parte del supuesto de que la variable dependiente Y es una funcin de la variable independiente T, es decir Y = f (T), y que las variaciones temporales de la variable Y son la resultante de cuatro componentes o factores: una tendencia principal o secular (T); un componente cclico (C), un componente estacional (E) y un componente accidental o aleatorio (A). La tendencia principal o secular muestra las fluctuaciones de los valores de la variable a largo plazo. Para poder apreciarla es necesario que la serie temporal abarque un nmero elevado de plazos temporales, por ej. si se trata de aos debe comprender como mnimo una dcada. Con ella podemos determinar si la variable presenta un movimiento persistente, ya sea de crecimiento, decrecimiento, cclico o estacionario. Por lo que se refiere a las fluctuaciones cclicas de los valores de la variable, se trata de movimientos que se repiten a medio plazo, es decir en perodos superiores al quinquenio. Las variaciones estacionales reflejan los movimientos que experimentan los valores de la variable a corto plazo y que se repiten de forma peridica. Aunque el perodo de repeticin suele ser el ao, para determinados sucesos pueden producirse variaciones estacionales en perodos menores ( semanas, meses, trimestres, cuatrimestres, semestres, etc.) o mayores (bienios, trienios, lustros, etc.). En general puede afirmarse que cuanto mayor sea el perodo de repeticin de las fluctuaciones de la variable ms nos aproximaremos a las tendencias seculares o cclicas. Finalmente, las variaciones aleatorias o accidentales, son provocadas por factores ocasionales o sucesos espordicos que, sin embargo, por su envergadura afectan a los valores de la variable. Estas variaciones tienden a diluirse o ser irrelevantes en el anlisis de la

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tendencia principal, pero, en cambio, afectan de forma significativa a los valores de la variable en series temporales muy cortas. En estos casos , lo ms aconsejable es simplemente prescindir de los datos que arrojan aquellos perodos anormales directamente influidos por factores espordicos u ocasionales. Para estudiar el comportamiento de una serie temporal pueden emplearse distintos modelos estadsticos. Entre los ms frecuentes figuran: a).- MODELO ADITIVO: De acuerdo con este modelo, la evolucin general de la serie temporal es el resultado de sumar los cuatro componentes que la influyen. Yt = Tt + Ct + Et + At b).- MODELO MULTIPLICATIVO Este modelo se fundamenta en el principio de que la evolucin general de la serie temporal es la resultante de la multiplicacin de sus cuatro componentes. Este modelo es el que se emplea ms frecuentemente en la elaboracin de las series temporales de carcter social y econmico. Yt = Tt x Ct x Et x At

c).- MODELOS MIXTOS Resultan de una combinacin de los dos modelos anteriores y preentan dos formulaciones diferentes segn que las variaciones de carcter cclico no se produzcan, por ej. en muchos fenmenos fsicos o qumicos, o simplemente no se puedan delindar de las variaciones estacionales. 1.- Modelo mixto sin existencia de componente cclico: Yt = Tt x Et + At 2.- Modelo mixto sin diferenciacin entre el componente cclico y el estacional Yt = Tt x ( Ct + Et ) x At ESTUDIO DE LA TENDENCIA PRINCIPAL El estudio de la serie temporal que refleja la tendencia principal, nos permite conocer la evolucin experimentada por los valores de la variable durante un largo perodo de tiempo, lo que nos manifiesta claramente el comportamiento estructural de dicha variable. Para su construccin, consideramos que la serie temporal que la representa, est compuesta por dos tipos de componentes: los valores de la tendencia propiamente dicha ( Tt ) y unos valores aleatorios que resultan de la existencia de circunstancias o sucesos ocasionales ( At ). Su expresin estadstica segn utilicemos el modelo multiplicativo o aditivo sera:

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Yt = Tt x At

Yt = Tt + At

Existen tres procedimientos para la elaboracin de la serie temporal que refleja la tendencia principal: el mtodo grfico; el mtodo de las medias mviles y el mtodo analtico. El mtodo grfico es el ms sencillo de elaborar, pero es menos exacto que los otros dos. Consiste en unir con una lnea todos los picos superiores de la representacin grfica de la serie temporal. Luego se traza otra lnea que una los picos inferiores del mismo grfico de la serie emporal. Por ltimo, se traza una lnea por el espacio medio de las dos anteriores. Esta lnea intermedia representa grficamente a la tendencia principal. Vase el ejemplo grfico:

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Y TENDENCIA PRINCIPAL

El mtodo de las medias mviles suaviza la serie temporal eliminando las fluctuaciones aleatorias mediante el clculo de la media de varios valores sucesivos de la misma, para ello se elige un perodo temporal (k) que debe corrresponder con un nmero de observaciones siempre igual y que debemos hacer coincidir con el nmero de estaciones de la serie, por ejemplo 12, para los meses del ao, 4 para los trimestres, 5 para los lustros, 10 para las dcadas, etc. El perodo de referencia (k) se va desplazando por los perodos temporales de la serie y se calcula la media aritmtica correspondiente a cada uno de los perodos agrupados de tamao k. El valor de esta media se hace coincidir con el tiempo central del perodo agrupado correspondiente, de ah su denominacin de medias mviles centradas, cuando incluye un nmero de observaciones impar. Si se trata de grupos con un nmero par de observaciones, la media aritmtica se sustituye por el valor central del perodo resultante de convertir K en 2k + 1, de modo que quedarn dos observaciones k por encima y otras dos por debajo de la media calculada de este modo. Finalmente, el mtodo analtico consiste en aplicar una funcin matemtica que se ajuste lo ms rigurosamente posible a la tendencia previsible de los datos de la serie original. Para ello utilizaremos el mtodo grfico y una vez conocidas las carctersticas generales de la lnea que refleja la tendencia principal, aplicaremos la correspondiente funcin mtemtica de las diversas existentes:

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FUNCION LINEAL: Tt = a + b t
2

FUNCION PARABOLICA DE SEGUNDO GRADO: Tt = a + bt + ct


t

FUNCION EXPONENCIAL: Tt = A x B Una vez que hayamos seleccionado la funcin matemtica, procederemos a determinar los parmteros a; b; cetc. por el sistema de los mnimos cuadrados y procedremos a realizar su representacin grfica. ESTUDIO DE LAS VARIACIONES ESTACIONALES Son las oscilaciones a corto plazo que presenta la serie temporal como consecuencia del cambio de un perodo a otro. Para calcular las variaciones estacionales se emplea el mtodo de las razones a la media mvil. En el modelo multiplicativo, se calculan primero las medias mviles, siguiendo el procedimiento explicado anteriormente. Luego dividimos cada uno de los valores de la variable Y por la media mvil correspondiente al perodo de observaciones al que pertenece el valor de la variable. Con ello obtenemos un valor de la variable Y* corregido respecto de la tendencia central y la cclica. Llegados a este punto, debemos observar si las oscilaciones provocadas por el componente aleatorio son insignificantes, en cuyo caso podemos emplear los valores de Y* como los de la serie estacional. N caso contrario debemos corregir las desviaciones provocadas por el componente aleatorio At mediante la divisin de los valores Y* por los valores de At. Y* Et = At Si la estacionalidad de la serie se repite de forma regular, se pueden comparar las variaciones de un perodo estacional a otro mediante la simple elaboracin de los correspondientes nmeros ndices de los valores de Y*. Cuando la serie es evolutiva, la estacionalidad queda desvirtuada por la tendencia principal. ESTUDIO DE LAS VARIACIONES CICLICAS Las variaciones cclicas son las oscilaciones que presenta a medio plazo la serie temporal alrededor de la tendencia principal. El mtodo ms frecuente de clculo de la componente cclica es el los resduos. Se basa en el aislamiento de la componente cclica (Ct) del resto de componentes de la serie (tendencia principal; variaciones estacionales y componente aleatorio). En el caso del modelo multiplicativo, se calculan las componentes cclica y estacional por los mtodos indicados con anterioridad. Luego se desestacionaliza dividiendo los valores de Yt por los valores estacionales. Una vez obtenida la serie desestacionalizada, se dividen los nuevos valores de la variable por los valores de la tendencia principal y con ello eliminamos la influencia de la tendencia central. Finalmente se eliminan las irregularidades provocadas por el componente aleatorio y obtenemos as la tendencia cclica. Todos estos procedimientos estadsticos se simplifican enormemente empleando cualquiera de los programas estadsticos para ordenadores que existen en el mercado; por ej. el IPD recogido

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en la obra de PULIDO SAN ROMN; A. y SANTOS PEA,J.- Estadstica aplicada para ordenadores personales.- Madrid, 1998; Edit. Ediciones Pirmide. El empleo de las series temporales, especialmente de las que reflejan las tendencias principales y las tendencias cclicas, resulta esencial en las Relaciones Internacionales. Gracias a ellas, podemos conocer con exactitud la evolucin de ciertas variables de la realidad internacional y podemos extrapolar su incidencia en las posibles evoluciones futuras de dicha realidad. En efecto, con las series temporales podemos conocer y determinar la evolucin de variables estructurales a largo plazo y, a travs de ellas, podemos establecer posibles relaciones de causalidad cuya investigacin requerir, sin embargo, el empleo de otros mtodos o tcnicas complementarios de la Estadstica. En definitiva, el anlisis de las tendencias en diversas series temporales debe emplearse para obtener informacin sobre la dinmica que se produce en los perodos de largo plazo de la microinternacionalidad y en las fases de evolucin propias de la macrointernacionalidad. Tomemos como ejemplo de serie temporal la evolucin internacional de los actos terroristas ocurridos entre 1968 y 1986, es decir un perodo de 28 aos, y representemos grficamente los datos de la variable dependiente n de actos terroristas por ao, fcilmente podemos comprobar la existencia de una tendencia secular muy clara que adquiere la forma de parbola. Algo que podemos corroborar, si utilizamos el mtodo grfico para determinar la lnea de tendencia principal. Tambin se puede observar que existen unas variaciones cclicas a corto plazo, ya que el n de actos terroristas oscila de unos aos a otros. De la observacin de ambas tendencias, a corto y largo plazo, podramos formular dos hiptesis que, sin embargo, requeriran el empleo de otros mtodos y tcnicas de investigacin para corroborarlos, a saber: 1.- El fenmeno del terrorismo internacional corresponde, al menos para el perodo estudiado, a la categora de fenmenos persistentes y evolutivos a largo plazo que requieren, en consecuencia, explicaciones causales de carcter estructural y no simplemente coyuntural. 2.- Adems, el terrorismo internacional experimenta variaciones a corto plazo que deben explicarse por causas coyunturales, que sirven para completar las explicaciones aportadas por los factores estructurales.

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NUMERO DE ACTOS TERRORISTAS INTERNACIONALES (1968-1996)

700 600 500 N ACTOS 400 300 200 100 1968 0

1970

1972

1974

1976

1978

1980

1982

1984

1986

1988

1990

1992

N ACTOS 1994 1996

AOS

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Cuando no se dispone de todos los datos necesarios para construir una serie temporal, podemos sustituir esta tcnica por una comparacin de los valores de variables fondo o stocks correspondientes a dos perodos suficientemente distanciados en el tiempo, por ej. dos o tres dcadas. En este caso no podemos extrapolar con rigor hacia el futuro una tendencia que ignoramos, pero s podemos determinar si se han producido cambios estructurales y el sentido evolutivo, estacionario o involutivo de dichos cambios. Tabla Estadstica TENDENCIAS SOCIOECONOMICAS DE LOS PAISES MEDITERRANEOS
PAISES/AREAS Poblac.1960 Poblac. 1992 Pob.Urb. 1960 Pob. Urb. Esp.Vida Esp.Vida 1992 1960 1992 PIB real per capita 1960 2.701 $ 5.344 $ 4.375 $ 1.618 $ 1.889 $ PIB real per capita 1992 13.400 $ 19.510 $ 18.090 $ 9.850 $ 8.310 $

UNION EUROPEA ESPAA FRANCIA ITALIA PORTUGAL GRECIA BALCANES ALBANIA ESLOVENIA CROACIA SERBIAMONTENEGRO BOSNIA-HERZ. MACEDONIA BULGARIA RUMANIA TURQUIA MAGREB MARRUECOS ARGELIA TUNEZ LIBIA MACHREK EGIPTO ISRAEL SIRIA JORDANIA LIBANO OTROS PAISES CHIPRE MALTA

30,5 Mill. 45,7 Mill. 50,2 Mill. 8,8 Mill. 8,3 Mill. 1,6 Mill. No consta No consta No consta No consta No consta 7,9 Mill. 18,4 Mill. 27,5 Mill. 11,6 Mill. 10,8 Mill. 4,2 Mill. 1,3 Mill. 27,8 Mill. 2,1 Mill. 4,6 Mill. 1,7 Mill. 1,9 Mill. 0,6 Mill. 0,3 Mill.

39,5 Mill. 57,3 Mill. 57,1 Mill. 9,8 Mill. 10,3 Mill. 3,4 Mill. 2,0 Mill. 4,7 Mill.* 10,5 Mill. ** 4,5 Mill.** 2,1 Mill.** 8,9 Mill. 23,1 Mill. 58,4 Mill. 25,4 Mill. 26,1 Mill. 8,4 Mill. 4,9 Mill. 59 Mill. 5 Mill. 13,2 Mill. 4,7 Mill. 2,7 Mill. 0,7Mill. 0,4 Mill.

57% 62% 59% 22% 43% 31% No consta No consta No consta No consta No consta 39% 34% 30% 29% 30% 36% 23% 38% 77% 37% 43% 40% 36% 70%

76% 73% 67% 34% 64% 36% 50% 51% 51%*** 36% 53% 69% 54% 64% 47% 53% 56% 84% 44% 91% 51% 70% 86% 53% 88%

69 70,3 69,2 63,3 68,7

77,6 76,9 77,5 74,6 77,6

62,1 72 No consta 3.500 $ No consta No consta No consta No consta No consta No consta No consta No consta No consta No consta No consta No consta No consta No consta No consta No consta No consta No consta No consta No consta 68,4 71,2 No consta 4.250 $ 65,5 69,9 No consta 2.840 $ 50,1 66,5 1.669 $ 5.230 $ 46,7 47 48,4 46,7 46,2 68,6 49,8 47 59,6 68,7 68,5 63,3 67,1 67,8 63,1 63,6 76,5 67,1 67,9 68,5 77 76,1 854 $ 1.676 $ 1.394 $ No consta 3.370 $ 4.870 $ 5.160 $ 9.782 $

557 $ 3.540 $ 3.958 $ 14.700 $ 1.787 $ 4.960 $ 1.328 $ 4.270 $ No consta 2.500 $ 2.039 $ 1.516 $ 15050 $ 8.281 $

Fuentes: PNUD.-Informe sobre el desarrollo humano 1993.-Madrid,1993.Edit. CIDEAL PNUD.-Informe sobre el desarrollo humano 1995.-Mexico,1995 Edit. Harla,S.A.

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En la tabla estadstica que se adjunta sobre las tendencias econmicas de los pases nediterrneos, se realiza una comparacin entre los datos de variables fondo demogrficas y econmicas de dos aos (1960 y 1992) separados temporalmente por ms de tres dcadas. En este caso no podemos determinar rigurosamente la tendencia secular a largo plazo, ni la evolucin cclica a corto plazo, sin arriesgarnos a cometer graves errores estadsticos, pues carecemos de los datos de la variable durante los aos intermedios. Sin embargo, podemos fcilmente deducir dos hiptesis que deberemos investigar con mayor profundidad por otras tcnicas: 1.- Los cambios demogrficos y econmicos demuestran una clara tendencia a incrementarse a largo plazo, lo que sin duda afectar a la estructura social y econmica de los pases mediterrneos y, naturalmente, tambin a las relaciones que se desarrollan en esta sistema regional. 2.- Puesto que tanto los indicadores socio-demogrficos como los econmicos se han incrementado a largo plazo, resulta evidente, al menos para estos pases y durante el perodo considerado, que el incremento demogrfico y de la poblacin urbana, son compatibles con un incremento de la riqueza de los pases y de la propia regin. Sin duda se podran formular muchas ms hiptesis parciales, a partir de la comparacin entre los mismos indicadores para los distintos pases de esta zona, por tanto, las hiptesis formuladas slo sirven de ejemplo sobre la forma en que deben utilizarse los datos estadsticos reflejados en las series temporales. Cuando se realiza el anlisis de las variaciones cclicas o a corto plazo, las hiptesis que podemos formular quedan restringidas a las posibles causas coyunturales, es decir a sucesos o factores que pueden cambiar a corto plazo. Ello nos permite excluir todos aquellos fenmenos de la realidad internacional que sabemos, a priori, que permanecen constantes o con muy escasas variaciones en tan corto perodo de tiempo. Por ej. respecto de las variaciones cclicas del n de actos terroristas, deberemos considerar como posibles causas, algunas de las siguientes: los cambios en las polticas antiterroristas nacionales e internacionales; las variaciones regionales de la actividad terrorista; la aparicin o disolucin de grupos terroristas; etc. No tendra sentido, en cambio, que considersemos como posibles causas de estas oscilaciones cclicas: la disuasin Este-Oeste; el desarrollo o subdesarrollo de los pases; los procesos internacionales de cambio ideolgico o religioso; etc. En resumen, la elaboracin de series temporales y la delimitacin de las variaciones que presentan como resultado de la influencia de los cuatro componentes que inciden en ellas, especialmente la tendencia secular y las oscilaciones cclicas, constituyen una importante herramienta estadstica para el investigador de las Relaciones Internacionales. Su correcto empleo, nos permite formular hiptesis slidas sobre las relaciones de causalidad entre los sucesos internacionales, as como avalar con datos rigurosos los argumentos o razonamientos desarrollados gracias al empleo de otros mtodos y tcnicas. Sin embargo, conviene no perder en ningn momento de vista que las series temporales, al igual que los restantes datos estadsticos, slo son descripciones cuantitativas de la realidad internacional y, por tanto, nunca bastan por s mismas para dar una explicacin suficiente de ella y, mucho menos, para constituir su argumento definitivo. Esta advertencia ya la seal Waltz hace ya dos dcadas, en los siguientes trminos: "Las estadsticas no demuestran cmo funciona algo ni cmo las cosas encajan. Las estadsticas son simples decripciones con forma numrica. La forma es econmica porque las estadsticas describen un universo por medio de manipulaciones de las muestras extradas de l. Las estadsticas son tiles a causa de la variedad de operaciones ingeniosas que autorizan,

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algunas de las cuales pueden utilizarse para comprobar la significacin de las otras. El resultado, no obstante, sigue siendo una descripcin de alguna parte del mundo y no una explicacin de ella. Las operaciones estadsticas no pueden franquear el abismo que se abre entre la descripcin y la explicacin." 90 10.8.- El confuso empleo de la cuantificacin como instrumento metodolgico en las Relaciones Internacionales Otra de las lneas de trabajo epistemolgico que se ha demostrado insuficiente, es la de la cuantificacin. El desarrollo en Estados Unidos de la sociologa conductista provoc un influjo irresistible en las restantes ciencias sociales y, naturalemente, tambin en los tericos de las Relaciones Internacionales. En trminos generales, las denominadas teoras cuantitativistas no cuestionan los postulados que haba sentado el realismo poltico, antes al contrario, intentan consolidarlos mediante el recurso a la cuantificacin estadstica de las principales variables, como por ej. el poder de los Estados, y la formulacin de aquellas funciones matemticas que traduzcan las relaciones interestatales, especialmente las relaciones de conflicto. El sustrato que subyace en los primeros trabajos de esta naturaleza, identifica el grado de madurez cientfica con la capacidad de prediccin de los fenmenos internacionales y sta ltima con la posibilidad de elaborar modelos matemticos que interpreten en trminos numricos las formulaciones tericas nominales, permitiendo as su reproduccin simulada matemticamente. Es la voluntad de imponer en las Relaciones Internacionales el rigor metodolgico que exige el empleo de las matemticas, 91 gracias al cual las ciencias de la naturaleza pudieron salir de su etapa pre-cientfica, y la expectativa de alcanzar un grado razonable de prediccin, lo que impuls a los defensores de la cuantificacin en nuestra disciplina a elaborar numerosos estudios, la mayora de los cuales se concentraron en "la lucha por el poder entre los Estados" y de modo especial en la disuasin nuclear. 92 El desarrollo de la teora de juegos, formulada ien 1944 por von Neumann y Morgenstern 93 para modelizar matemticamente la conducta de los agentes econmicos, muy pronto encontr seguidores entre los internacionalistas 94 pues sus posibilidades de aplicacin a los fenmenos microinternacionales, especialmente a la poltica exterior de los Estados, hacan de esta teora
- WALTZ, K.N.- Theory of International politics.- Edit. Addison-Wesley Publishing Company Inc., 1979. Traduccin de Mirta Rosenberg.- Teora de la poltica internacional.- Edit. Grupo Editor Latinoamericano. Buenos Aires, 1988, pg. 12 91 - Sobre las limitaciones metodolgicas de las teoras cuantificadoras, vase: MERLE, M.- op. cit.; pgs. 120-134 y 139-143. MALITZA, M.- "L'application des mathmatiques l'tude des relations internationales".- Revue Internationale des Sciences Sociales; vol. XXVII, n 3 (1975); pgs. 485-494. 92 - RICHARDSON, L.F.- "Could an Arms Race End Without Fighting?".- Nature, 29 Septiembre 1951. 93 -DAVIS, M.D.- Game Theory. A Nontechnical Introduction.- Edit. Basic Books Inc. New York, sin fecha de edicin. Traduccin al castellano de Francisco Elas Castillo.- Teora del juego.- Edit. Alianza. Madrid, 1971. 94 - Entre las primeras obras merecen citarse: KAPLAN, M.A.- "The Calculus of Nuclear Deterrence".- World Politics, vol. XI (1958-1959); pgs. 20-43. SCHELLING, T.S.- The Strategy of Conflict.- Cambridge, 1960. Traduccin al castellano de Adolfo Martn.- La estrategia del conflicto.- Edit. Tecnos. Madrid,1964.
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un campo singularmente prometedor para demostrar las potencialidades de los modelos matemticos. Los trabajos desarrollados durante varias dcadas han demostrado su vala en algunas parcelas muy concretas de las relaciones interestatales, especialmente en el mbito poltico-estratgico, 95 y han contribuido a potenciar las teoras de la decisin y las teoras de la negociacin, ntimamente vinculadas con las formulaciones matemticas de la teora de juegos, pero tambin han supuesto un serio revs para las esperanzas incialmente depositadas en ella.
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Otra vertiente significativa de las tendencias cuantificadoras, se ha concentrado en la elaboracin de indicadores estadsticos de los principales conceptos tericos. Esta orientacin trata de desarrollar bases de datos cuantificados que permitan aplicar todas las posibilidades que ofrecen las modernas tcnicas estadsticas y cuyos resultados ha permitido saltos significativos en otras ciencias sociales como la Economa y la Sociologa. En buena medida, los seguidores de esta corriente se han nutrido de los datos estadsticos aportados por estas ciencias, para intentar demostrar su validez y avanzar en su aplicacin a las teoras internacionales. Los estudios realizados para determinar indicadores del poder estatal, en sus vertientes militar y econmica, 97 del nmero y alcance de los conflictos blicos, 98 de los flujos de comunicacin, 99 del grado de integracin 100 , del nivel de desarrollo 101 o de

- BRAMS, S.J.; KILGOUR, D.M.- Teora de juegos y seguridad nacional.- Edit. Ministerio de Defensa.,1989. 96 - Las limitaciones de la teora de juegos en su aplicacin a las Relaciones Internacionales, ha sido descrita por Keohane en relacin a su propia trayectoria personal, en los siguientes trminos: Como resultado de mi compromiso con un intento colectivo por entender 'la cooperacin en anarqua' a travs del uso de simples preceptos derviados de la teora de los juegos, llegu a la conclusin de que era poco probable que una mayor formalizacin de la teora de los uuegos pudiera dar una estructura clara para una investigacin precisa y reflexiva sobre la poltica mundial y, en cualquier caso, que no estaba equipado intelectualmente y por temperamento era poco adecuado para hacer una contribucin a esa empresa. El empleo de la teora de los juegos slo destacaba la importancia del contexto dentro del cual los juegos tienen lugar y las percepciones que afectan la toma de decisiones en situaciones ambiguas." KEOHANE, R:O.- op. cit.; pgs. 51-52 Para un anlisis crtico de estas teoras, apoyado en una amplia base bibliogrfica, vase: ARENAL, C. del.- op. cit.; pgs. 295-300. 97 - HART, J.- "Three approaches to the measurement of power in international relations".International Organization, vol. 30 (1976); pgs. 289-305. 98 - BOUTHOUL, G.; CARRRE, R.- Le dfi de la guerre, 1740-1974: duex sicles de guerres et rvolutions.- Edit. Presses Universitaires de France. Pars, 1976. JAMES, P.- " Structure et conflit en politique internationale: Une analyse squentielle des crises internationales 1929-1973.".- tudes Internationales, vol. XX, n 4 (diciembre 1989); pgs. 791-815. 99 - DEUTSCH, K.W.- Political Communication at the International Level. Problems of Definition and Measurement.- Edit. Handem, Co. New York, 1 ed., 1954; 2 ed. 1970. dem.- "Shifts in the Balance of International Communications Flows".- Public Opinion Quarterly; vol. 20 (1956); pgs. 143-160. dem.- "Towards an Inventory of Basic Trens and Patterns in Comparative and International Politics".American Political Science Review; vol. 54 (1960); pgs. 34-37. dem.- The Nerves of Government. Models of political Communication and Control.- Glencoe, 1ed. 1963. Traduccin al castellano de A Ciria.- Los nervios del Gobierno. Modelos de comunicacin y control polticos..- Buenos Aires, 1960. dem.- Tides among Nations.- Nueva York, 1979. Traduccin al castellano de E.L Surez.- Las naciones en crisis.- Edit. Fondo de Cultura Econmica. Mxico, 1981. 100 - HANSEN, R.D.- "Regional Integration. Reflections on a Decade of Theoretical Efforts".- Wolrd Politics, vol. 21 (1969); pgs. 242-271.

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la estabilidad del sistema internacional 102 , son algunos de los ejemplos ms significativos de las reas en donde ha penetrado la cuantificacin estadstica. A diferencia de la teora de juegos, la senda abierta por estos trabajos se ha demostrado mucho ms enriquecedora, no slo por la cantidad y calidad de los datos reunidos de forma sistemtica, sino porque ha permitido centrar el significado de algunos conceptos bsicos de la teora internacional, ha reforzado el empleo de los mtodos comparativo y analtico y, de paso, ha facilitado la verificacin de algunos modelos y teoras considerados, hasta ese momento, verdades categricas. Por tanto, la elaboracin e investigacin de nuevos indicadores y series estadsticas, constituye uno de los mbitos terico-metodolgicos que deberan proseguirse en nuestra disciplina, mxime si pensamos que con las disponibilidades informticas actuales, el rutinario y costoso proceso de tabulacin y clculo estadstico ha quedado extraordinariamente simplificado. 103 La tarea debe concentrarse en la deduccin de indicadores, suficientemente significativos para que traduzcan de forma operativa toda la complejidad de las relaciones entre las principales variables de los modelos tericos, y la recopilacin de los datos que exigen dichos indicadores. Esta no es una tarea sencilla, como se ha podido apreciar en los trabajos de elaboracin del Indice de Desarrollo Humano, que precisamente ha encontrado sus mayores obstculos en la determinacin de indicadores socio-polticos, demostrando que la verdadera barrera metodolgica, hasta ahora no superada satisfactoriamente, surge entre los conceptos tericos y las definiciones operativas 104 que exige la implantacin de todo indicador estadstico. 105 En resumen, las denominadas teoras cuantitativas de las Relaciones Internacionales eran, ms que formulaciones tericas en sentido estricto, esfuerzos metodolgicos destinados a elaborar modelos estadstico-matemticos que permitiesen evaluar y predecir el desarrollo de los principales fenmenos internacionales. No resulta extrao, por tanto, que sus aportaciones al anlisis y explicacin de la realidad internacional hayan sido considerada muy escasas en comparacin con las realizadas por otras corrientes doctrinales. Sin embargo, su limitado alcance explicativo no merma su inestimable valor metodolgico y nada despreciable contribucin emprica al desarrollo de las Relaciones Internacionales como ciencia. En otras palabras, las insuficiencias cuantificadoras no residen slo, y anadira que ni tan siquiera prioritariamente, en los modelos matemticos o los datos estadsticos, sino en la deficiente utilizacin que de ellos se ha hecho a la luz de unas falsas expectativas de quienes

LINDBERG, L.N.- "Political Integration as a Multidimensional Phenomenon Requiring Multivariate Measurement".- International Organization, vol. 24 (1970). 101 - AA.VV.- "Medir y evaluar el desarrollo".- Revista Internacional de Ciencias Sociales, n 143 (marzo 1995); pgs. 3-90. 102 - HAAS, M.- "International Subsystems: Stability and Polarity".- American Political Science Review; n 64 (1970); pgs. 98-123. BUENO DE MESQUITA, B.- "Measuring Systemic Polarity".- Journal of Conflict Resolution; n 19 (1975); pgs. 187-216. 103 - PULIDO, A.; SANTOS, J.- Estadstica aplicada para ordenadores personales.- Edit. Ediciones Pirmide. Madrid,1998. 104 - CEA, M. A.- Metodologa cuantitativa: estrategias y tcnicas de investigacin social.- Edit. Sntesis. Madrid, 1996; pgs. 123-158. 105 - PNUD.- Desarrollo Humano: Informe 1991.- Edit. Tercer Mundo Editores. Bogot, 1991; pgs. 3758 y 203-232.

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esperaban encontrar en los nmeros las leyes y regularidades que no eran capaces de descubrir en la realidad.

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11.- DIAGRAMAS DE FLECHAS (MAPAS CAUSALES) La tarea es analizar de modo breve un problema complejo mediante una "ilustracin" que haga visibles dos aspectos: primero, las fuerzas efectivas simultneas en un problema; y segundo, las relaciones entre ellas. Por lo general, nada es fcilmente visible por una mera ojeada, la evidencia, el sentido "comn" o la intuicin, especialmente cuando muchas fuerzas operan simultneamente y las relaciones entre ellas son verdaderamente intrincadas. Es extraordinariamente importante, en toda situacin de anlisis, estar al corriente de todas las fuerzas que determinan (y cambian) la situacin. 11.1.- Idea bsica La solucin es determinar y hacer visibles las causas y efectos en los procesos polticos, econmicos y sociales mediante una presentacin en forma simplificada, un tipo de mapa causal. Todos los tipos de fuerzas que tienen un efecto sobre otras o son dependientes de otras- tambin llamados conceptos o variables- son primero escritas. Las conexiones entre ellas son indicadas mediante flechas representando las relaciones de causa-efecto. Los diagramas de flechas sirven tan slo como una ayuda de pensamiento (ayuda mental) para una mejor comprensin de una situacin. Formulan supuestos que, en la medida en que las circunstancias lo permitan, deben ser necesariamente comprobados, pero que para la mayor parte ya permiten conclusiones a cerca de las relaciones causales y las posibles consecuencias. 11.2.- Procedimiento Paso 1.Establecer los conceptos o las variables que son del mximo inters. Esto se puede conseguir formulndose interrogantes sobre la situacin del tipo Qu ocurre? Cules son los principales acontecimientos o los fenmenos ms destacados que tengo que analizar? Qu puede suceder tras la situacin X ? Cules son las alternativas o soluciones a la situacin que estoy analizando? etc. (SE ESCRIBEN EN UNA RELACION O LISTADO A LA DERECHA DEL PAPEL) Paso 2.Interrogar o averiguar a cerca de las fuerzas ( o conceptos o variables) que poseen un impacto en los fenmenos sealados en la fase anterior. (SE ESCRIBEN EN UN LISTADO A LA IZQUIERDA DEL PAPEL) Paso 3.Destacar las supuestas relaciones de causa-efecto que existan ( o que seamos capaces de descubrir) entre los diversos conceptos. Estas relaciones son indicadas mediante flechas que signifiquen "influencias" o relaciones del tipo " X lleva a...Y" "X remite a...Y". Debemos aadir a

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las flechas signos + o - para indicar relaciones positivas ( "si ms X...luego ms Y" ) o negativas ( "si ms X...luego menos Y"). El resultado es un diagrama de flechas o mapa causal. Paso 4 (Opcional).- Posteriores anlisis pueden averiguarse mediante el sistema de "la causa de las causas", por ej. interrogando sobre las influencias que determinan las causas recogidas en el diagrama de flechas. Este recorrido analtico puede ampliarse hasta cubrir tantos niveles o fases del proceso causal cuantos sean necesarios. 11.3.- Posibles ayudas y aplicaciones Todos los procedimientos estadsticos para la comprobacin individual o colectiva de las relaciones de causa-efecto en un diagrama de flechas. Este mtodo aporta una fcil entendimiento de la representacin de todos los tipos de problemas, tal vez contribuyendo tambin a la clarificacin de las relaciones entre los conceptos individuales. El contenido y resultado de las discusiones colectivas sobre las relaciones de causa y efecto y las oportunidades para una accin puede resultar mucho ms comprensibles con un diagrama de flechas. De forma limitada, pueden lograrse pronsticos con la ayuda de los diagramas de flechas: por medio de un "experimento" mental respecto de cmo ciertos cambios en las variables causales -cambios que deben ser estimados como parte del futuro- se reflejarn en las variables efecto. Tales consideraciones son especialmente tiles en la preparacin de decisiones. EJEMPLOS 1).-De qu depende la estabilidad interna de un pas? 2).-Cules son los factores determinantes para una solucin pacfica del conflicto en la regin X? 3).-Qu determinar la victoria o el fracaso del partido gubernamental en las prximas elecciones?

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12.- MAPA DE CONOCIMIENTO: ANALISIS DE LOS MOTIVOS Y LAS INTENCIONES. Se trata de pronosticar la conducta de los actores polticos ( Jefes de Gobiernos; Ministros; Lderes polticos o de todo tipo, como adversarios o partidarios ) en una situacin determinada. 12.1.- Idea Bsica La idea bsica de un mapa de conocimiento consiste en la aplicacin del procedimiento del anlisis de situacin por medio del diagrama de flechas al pensamiento de terceros. Toda figura poltica acta sobre la base de ciertas - con frecuencia muy simples - suposiciones y expectativas respecto de las relaciones causa-efecto: "Si yo hago A, resultar B - por tanto, si quiero B, debo hacer A ". Tales suposiciones o "modelos mentales" son investigados con ayuda de los diagramas de flechas. Estos representan un tipo de "mapas de conocimiento o mapas congnitivos" del correspondiente actor. Ya sean estas suposiciones correctas o equivocadas ( y con mucha frecuencia son obviamente equivocadas ) ello no es un problema; los actores se comportan, ciertamente, de acuerdo con su interpretacin del mundo. El teorema de Thomas sugiere que "cuando la gente define las situaciones como reales, en consecuencia, son reales". Ello hace de los mapas de conocimiento un mtodo til. 12.2.- Procedimiento Nivel 1 Determinar los actores relevantes o los representantes de tales actores. El mtodo del mapa de conocimiento se dirige a las figuras con liderazgo y elites polticas, cuyas acciones, tomando en consideracin sus objetivos y suposiciones, deseamos comprender y, si es posible, predecir.Es por tanto muy importante seleccionar cuidadosamente aquellos que actan o representan al pas o grupo poltico en cuestin. Nivel 2 Proveerse de textos representativos: Con el fin de establecer un mapa de conocimiento debemos disponer de un texto que pueda ser analizado. Este texto debe ser idealmente representativo, oficial y, si es posible, escrito con un carcter programtico o de justificacin. Naturalmente surge la cuestin de la honestidad del texto. Esta cuestin debe ser enjuiciada con las fuentes clsicas y las consideraciones crticas, idealmente consideradando a quin fue dirigido el texto y la situacin en la que se origin. No obstante, en general, las figuras polticas dicen la verdad ms frecuentemente de lo que se suele creer, y sus declaraciones, con frecuencia e injustamente, no son tomadas con seriedad - con fatales consecuencias en el caso del Mein Kampf (Mi Lucha) de Hitler. Cuando sea posible, deben realizarse entrevistas con las personalidades en cuestin o con sus consejeros. Ello nos permite revisar con el propsito de precisar y dirigir la conversacin a los temas que de otro modo pueden quedar marginados.

Nivel 3

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Analizar el texto con nfasis en las suposiciones a cerca de las causas-efectos contenidas en l, de acuerdo con los principios de desarrollo de un diagrama de flechas. Nivel 4 (Opcional) Anlisis adicional: Aunque en el ejemplo anterior slo se ha examinado un texto, a veces debemos considerar muchos textos simultneamente ( por ej. los discursos de los parlamentarios de un pas sobre un determinado tema). En este caso, se requieren mtodos especiales ( por ej. un anlisis cuantitativo de los contenidos ) que exceden de esta exposicin. 12.3.- Posibles ayudas y aplicaciones Para la adecuada interpretacin de un mapa de conocimiento, desarrollado sobre la base de las fuentes documentales de cualquier clase, la revisin de la biografa de la persona en cuestin y/o la evaluacin de la evidencia psico-biogrfica puede revelarse muy til. Los elementos biogrficos pueden ayudar a clarificar ciertos detalles del pensamiento de una persona; pero es difcil deducir unas ideas de la persona de una sola biografa, e imposible predecir sus acciones. La sico-biografa emplea conceptos, principios y teoras sicolgicas con vistas a explicar las acciones e ideas de todos los tipos de personas. Los anlisis han sido emprendidos para la totalidad del espectro de personalidades, desde los reformistas de la Edad Moderna (Lutero, etc.) hasta los polticos actuales (Nixon). La aproximacin habitual consiste en deducir de las tempranas experiencias de la niez (la mayora malas), las subsiguientes caractersticas de la conducta de la persona en cuestin., especialmente una actitud inconsciente adversa hacia su padre (que la utiliz para reprenderle desde nio), algunas facetas de su cinducta adulta. Lo que puede resultar interesante de esta lnea de investigacin, es que se han realizado pequeos ensayos disponibles para practicar en la forma simple de reglas if ....the (si...entonces). Hay que advertir claramente que no sepueden extraer conclusiones del tipo si alguien ha tenido dificultades con su padre, le causar problemas con sus superiores en la vida posterior. Es incluso ms peligroso analizar sicolgicamente a partir de la experiencia de s mismo. Si la literatura biogrfica, posiblemente incluso los trabajos sico-biogrficos, estan disponibles para que pueda elaborarse el mapa cognitivo de una persona, ello slo debera ser considerado como materiales adicionales para la investigacin. Entre sus aplicaciones encontramos el anlisis de la visin mundial de importantes personalidades ( polticos; hombres de negocios; asesores; expertos; etc.) Tambin pronsticos (prognosis) a corto plazo de las actuaciones de lderes polticos en los pases con liderazgos claramente identificables. El mapa de conocimiento es utilizado tambin para advertir con anticipacin los cambios fundamentales en las suposiciones y actitudes que determinaan la evolucin de las conductas presentes y futuras de importantes personalidades.

Ejemplos de interrogantes: 1.-Cmo el estadista X divide el mundo: en bloques, grupos, quin con quin, quin contra quin?

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2.-Qu fuerzas determinan la dinmica de la poltica mundial desde la perspectiva del estadista X? 3.-Hasta dnde alcanzan las creencias capaces de influir en la evolucin de los acontecimientos? 4.- Hasta dnde llega la visin de s mismo y de su pas como objeto pasivo de la accin de otras fuerzas ? 5.- Por qu o cmo se siente el mismo amenazado ?. 6.- Puede detectarse algn cambio en estas observaciones ?. 7.- Hasta dnde alcanzan estas observaciones revelan unidad en el liderazgo del grupo y hasta dnde alcanza la disensin ?. 8.- En qu sentido la percepcin del mundo en el Jefe de Gobierno difiere de la que posee el lder de la oposicin?.

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13.- UTILIZACION DE RESULTADOS TEORICOS Muchas de las cuestiones importantes para una evaluacin de los problemas internacionales (por ej. la estabilidad/inestabilidad de los regmenes; la probabilidad de las guerras; etc.) han sido investigadas y en parte clarificadas por las ciencias sociales. En muchas reas xiste un cuerpo de conocimientos verdaderamente considerable sobre el porqu y bajo qu condiciones acaecern ciertos fenmenos. Ello nos remite al problema de lograr estos conocimientos alcanzados en diferentes contextos y frecuentemente adquiridos por xito de la investigacin bsica aplicada con fines prcticos. 13.1.- Idea Bsica Al igual que otras ciencias, las ciencias sociales alcanzan resultados tericos.Estos son, en su mayora, observaciones generales del tipo en todos los casos, si A, luego B o cuanto ms A, ms (o menos) B . De este modo, las causas generales se relacionan con las consecuencias generales. Al mismo tiempo, la ciencia no slo ofrece sentencias tericas, sino que intenta averiguar si ( y con qu alcance) se aplican, generalmente a travs de anlisis empricos de todos los casos pertinentes o por un muestreo de ellos. De este modo, permite disponer del conocimiento en forma de experiencias sistemticas adquiridas bajo condiciones controladas. La teora cientfica es, por decirlo as experiencia prctica en una forma concentrada ( Hrlimann 1981; p.30). Para la mayora de los casos, tales relaciones, en el rea de la poltica internacional, son relaciones de probabilidad. El conocimiento terico puede impulsarse en la prctica para dos propsitos diferentes: primero, para la explicacin y segundo para la prognosis. Utilizando los resultados tericos, el proceso cientfico dedicado a lograr ensayos tericos es, por as decir, invertido. La ciencia que emana de la experiencia con una multitud de casos concretos, saca conclusiones a cerca del caso general. El pragmtico, por el contrario, saca conclusiones del caso general, que la ciencia ha aclarado, y lo aplica al los casos de inters particular, con vistas a alcanzar explicaciones o pronsticos. 13.2.- Procedimiento Nivel 1 Formulacin de la cuestin que debe inverstigarse. Ejemplos: a) Para obtener explicaciones: - Porqu se disolvi la Unin Sovitica?. - Porqu se disolvi la Repblica Federal de Yugoslavia?. - Qu tipo de fenmenos y factores coincidentes se dieron en los casos sovitico y yugoslavo?. - Qu provoc la transicin a la democracia de las dictaduras argentina y chilena?. - Qu provoca la tendencia a la constante ampliacin de la Unin Europea?.

b) Para obtener pronsticos:

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- Lograr consolidarse el proceso de paz en Oriente Medio? - Puede provocarse un golpe de Estado en Irak? - Se consolidar el proceso de unificacin entre Rusia y Bielorrusia? Nivel 2 Obtener la literartura cientfica y la documentacin necesaria sobre el tipo de fenmenos que deseamos investigar. Nivel 3 Seleccionar entre las distintas teoras que ofrece la literatura cientfica. Conviene sealar que en las Relaciones Internacionales, en particular, y en las ciencias sociales, en general, la cantidad y el grado de inconsistencias que ofrecen las teoras es asombroso. Los criterios para la seleccin entre las diversas teoras son: a) su nivel de verificacin emprica y b) su plausibilidad desde el punto de vista del investigador. Aquellas teoras que han soportado casos empricos se consideran verificadas. Si en la literatura cientfica hay referencias al xito en las pruebas empricas de las conclusiones de una teora, el investigador puede considerarlas como una medida de su calidad terica. Nivel 4 Las teoras consisten, por regla general, en un grupo de sentencias del tipo "si............luego......" o bien del tipo " a ms de X.......le corresponde mas/menos de Y". Estas son las denominadas hiptesis. Es necesario formular aquellas hiptesis que son interesantes para la aplicacin concreta que se investiga. No se necesita formular una sola hiptesis, es posible crear una lista de hiptesis sealadas por diversas teoras. Ejemplo: Modelo (econmico, sociolgicos, poltolgico, etc.) general: En todos los casos si X...........................................................................luego Y Crecimiento econmico, industrializacin y redistribucin de rentas.......desarrollo econmico Urbanizacin demogrfica y crecimiento de clases medias.....................modernizacin social Separacin de poderes, Estado de derecho y elecciones libres..............democracia poltica Alfabetizacin general, libertad de expresin y crecimiento cientfico......progreso cultural Conjuncin de todos estos fenmenos....................................................Pas desarrollado Nivel 5 Los resultados tericos anteriores permiten realizar inferencias desde el caso general al caso particular que investigamos mediante la formulacin de hiptesis, de acuerdo con los siguientes esquemas: a) Esquema de explicacin

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Caso General: En todos los casos ( o con probabilidad ...) si X luego Y Caso Particular: Se da Y luego la(s) causa(s) es ( o con probabilidad...es) X b) Esquema de prognosis Caso General: En todos los casos ( o con probabilidad...) si X luego Y Caso Particular: Se da X luego se producir (o con probabilidad...se producir) Y Ejemplo prctico: Aplicar los sucesos referidos a los casos de Rusia; Argentina; Argelia y Corea del Sur, tanto en su forma explicativa como de pronstico. La inferencia desde los efectos aparentes a las causas supuestas, que destaca la explicacin se denomina "reduccin" mientras que la inferencia desde el pasado a los sucesos futuros es conocida como "deduccin". Adems, ambos tipos de conclusiones pueden llevar la investigacin al error. En el caso de las conclusiones reductivas (desde el efecto a la causa), es frecuente que hallamos inferido las propias causas desde los efectos aparentes, ya que podra ser una relacin del tipo: "En todos los casos si Z (en lugar de X) luego Y". La explicacin cientfica en las ciencias sociales se refiere habitualmente a campos complejos de posibles causas. Por otra parte, al concluir desde las causas a los efectos en el caso particular (deduccin) podemos pensar que la parte general del esquema se aplica slo con una cierta probabilidad, por lo que sta tendr que aplicarse a todas sus consecuencias prcticas. Ello aconseja el empleo de varias hiptesis lo que permite investigar en un marco de varias causas y cuando se emplea con propsitos de prognosis poder considerar las diversas consecuencias futuras. 13.3.- Posibles ayudas y aplicaciones El mtodo de evaluacin sistemtica de la literatura cientfica resulta muy til para la formulacin de las hiptesis. Pueden realizarse explicaciones o pronsticos de muy diverso tipo siguiendo el procedimiento indicado. Lo que el asesor poltico o el comentarista, en la formulacin de su opinin, asume como conocimiento general se explicita con este procedimiento y se compara con el resultado de la investigacin. Debe formularse una restriccin: las hiptesis generales slo pueden ser aplicadas a los fines de la prognosis cuando las respectivas relaciones causales incluyen un desfase temporal, o cuando podemos anticipar que ciertas causas es probable que se produzcan; cuando se aprecian tendencias; cuando los decisores anuncian planes; etc. El mbito de aplicacin queda necesariamente restringido a las limitaciones de las investigaciones ya disponibles. Slo donde unos suficientes resultados de investigaciones empricas estn disponibles es posible emplearlos en la forma descrita aqu.

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14.- EVALUACION SISTEMATICA DE LA LITERATURA CIENTIFICA La tarea es hacer aplicable el conocimiento terico contenido en la literatura cientfica para propsitos prcticos. Frecuentemente se seala que ciertos conocimientos poseen contradicciones; a veces se realizan explicaciones mtuamente irreconciliables de un mismo fenmeno. Si a pesar de todo debemos realizar una sntesis, existen mtodos para transformarlos en una evaluacin final. 14.1.- Idea Bsica La idea bsica consiste en encontrar y comparar sistemticamente - o al menos cuanto sea posible - los estudios destacados sobre un determinado problema. La comparacin presupone, naturalmente, que los estudios son comparables o que pueden llegar a serlo. Slo despues de esto ser posible determinar qu resultados deberan considerarse por encima de la controversia y qu extremos son extremadamente conrovertidos y deberan no obstante utilizarse slo para algunas de las conclusiones. 14.2.- Procedimiento REQUISITOS PREVIOS El acceso a las bibliografas especializadas y a una buena biblioteca de investigacin, resultan necesarias. NIVEL 1 Recopilar los estudios ms destacados sobre el tema. Este nivel implica la formulacin de palabras-clave para describir brevemente el problema. Semejantes palabras clave se utilizarn para encontrar referencias en las correspondientes relaciones bibliogrficas de libros y artculos de acuerdo con el Indice de Citas de Ciencias Sociales. NIVEL 2 Una sistemtica comparacin de los estudios disponibles. Ello resulta, adems, necesario para comprender las caractersticas importantes para comprender la comparacin y resumir los resultados de un modo breve. Las siguientes caractersticas resultan importantes para realizar una comparacin: a) variables independientes y dependientes (variables-causa y variables-efecto), perodo temporal ( Qu perodo se va a investigar? ), mbito geogrfico ( Qu pases o regiones van a investigarse?), tipos de datos empleados en la investigacin, calidad de estos datos ( especialmente su validez e ideoneidad al caso estudiado ); tipos de anlisis; relevancia estadstica de los resultados. La informacin resultante de diversos estudios a partir de estos criterios se coleccionan en una tabla (tabulacin). NIVEL 3 Ponderacin de los estudios: El propsito de la comparacin es ponderar los diversos resultados con otros y, en el caso de contradicciones, clarificarse. Al mismo tiempo, los criterios

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mencionados con antelacin pueden emplearse como criterios objetivos de ponderacin: Uno puede preferir, por ejemplo, priorizar la bsqueda de resultados que muestren un alto y significativo grado de correlacin y ello a costa de unos buenos datos. Criterios adicionales se derivan de la naturaleza de los problemas abordados. Los resultados de investigaciones que coinciden en los mbitos temporal y espacial con los problemas propios se preferirn a aquellos otros que slo poseen variables similares pero que difieren en el horizonte temporal y en el marco espacial. NIVELES 4 y 5 Aplicar los niveles 3 y 4 del apartado de utilizacin de los resultados tericos. 14.3.- Posibles ayudas y aplicaciones No existe una ayuda especfica. Si el resultado no resulta satisfactorio, no hay otro camino que la propia investigacin emprica. Otra opcin es el empleo de teoras con propsitos heursticos. Ignorando por el momento dicho propsito, designado para ofrecer explicaciones, las teoras son ante todo y nada ms que aplicaciones sistemticas de marcos de trabajo para guiar la percepcin. Entre otras cosas, las teoras estructuran la percepcin y aportan la formulacin de interrogantes. Una aplicacin con fines prcticos sera la siguiente: Determinar todos los elementos en los que un problema concreto se puede dividir desde la perspectiva de una teora especfica. Ello permite una "lista de control" (checklist) que puede utilizarse como un hilo conductor para una visin "instruida" de un problema que permita un mejor, comprehensivo y completo anlisis de un problema especfico. Las aplicaciones son las mismas que las del apartado de utilizacin de los resultados tericos. 14.4.- Costes y requisitos El trabajo requerido depende del mbito de los problemas en cuestin, as como del volumen de los materiales disponibles. Si estos se reducen a una docena de estudios, su evaluacin requerir slo unos pocos das. Por otro lado, hay reas de problemas en los que existen centenares de estudios. El trabajo se reduce significativamente si se aborda por un especialista a quien le resulta familiar el campo y el lenguaje tcnico. Con frecuencia este lenguaje es casi incomprensible para el lector general. No obstante, se aconseja, donde sea posible, consultar al especialista recabando un informe detallado sobre el estado de la investigacin en el campo especfico de que se trate. Debe concederse especial atencin a la delimitacin clara de los objetivos de este tipo de investigacin, de lo contrario los informes podran alcanzar un nmero muy elevado incrementando excesivamente los costes y el tempo requerido.

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15.- JUICIO SISTEMATICO DE EXPERTOS Si la adopcin de decisiones es habitualmente definida como una eleccin entre ciertas opciones bajo incertidumbre, por consiguiente esta eleccin est determinada esencialmente por dos cosas: primero por el objetivo deseado, y segundo por los supuestos a cerca del futuro, tanto ms cuanto ms relevante sean para determinadas opciones. Ello debera ser retenido mentalmente, no obstante, la eleccin de una opcin particular estar influida a veces por el curso de acontecimientos y sucesos, considerados independientes, que se tomarn en cuenta en la adopcin de decisiones, a pesar de que harn ms dificil la propia eleccin. El ncleo de toda decisin es una respuesta a la pregunta Qu suceder?. La adopcin de decisiones actualmente es idntica a la prediccin ( "gouverner c'est prvoir"). Donde no disponemos de un conocimiento a cerca del futuro, tienen que bastar las suposiciones. Pero estas suposiciones pueden ser a veces invocadas rutinariamente, a modo de instruidas (pero en ocasiones poco instruidas) conjeturas personales, o pueden ser realizadas de forma consciente y de modo tan sistemtico como sea posible. Esto ltimo es lo que aporta el juicio sistemtico de expertos. Si es posible, deberamos realizar el intento de fundamentar las suposiciones en las opiniones de personas tan competentes como sea posible, bajo la premisa de que la diversas opiniones combinadas entre s prometen mejores resultados que una sola opinin. 15.1.- Idea Bsica El juicio sistemtico de expertos es, en esencia, un sondeo de opinin entre expertos. Esto permite dos cosas: primero, que pueda recurrirse a las tcnicas de entrevista y evaluacin de cuestionarios desarrollada y verificada en el campo de la investigacin de la opinin; y, segundo, que el asesoramiento individual pueda ser juzgado de acuerdo a la competencia de los expertos consultados. "Expertos" deben ser considerados entre otros los especialistas independientes o las personas entre el crculo de conocidos o los directos colaboradores del propio responsable de las decisiones. El paso inicial consiste en definir y dividir el problema en problemas parciales que puedan ser desarrollados con la ayuda de los expertos. El conocimiento de los expertos se emplear para determinar aquellas influencias (variables) de las que dependa el desarrollo futuro del problema. Pueden emplearse tanto cuestionarios cerrados como abiertos ( o semiabiertos): Ejemplo de cuestionario cerrado: Seale el grado de importancia que concede a las siguientes variables a la hora de invertir en un pas extranjero Muy importante Importante Poco Importante Irrelevante Inversin extranjera Presin Fiscal Infraestructuras Nivel de comercio ext. Etc......

Ejemplo de cuestionario abierto:

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Seale y ordene las variables que considera ms relevantes para decidir la inversin en un pas extranjero: 1.- ..................................................... 2.- ..................................................... 3.- ..................................................... etc. Ejemplo de cuestionario semiabierto Indique las principales variables que influyen a la hora de decidir la inversin en un pas extranjero en orden a su importancia, de acuerdo con las siguientes categoras: Variables de carcter poltico ................................................................. ................................................................. .................................................................

Variables de carcter econmico .................................................................. .................................................................. .................................................................. Otras variables ................................................................... ................................................................... ................................................................... Siguiendo un proceso riguroso, en una primera etapa se emplearn cuestionarios abiertos para obtener un listado de variables que podrn ser ponderadas por los expertos en una segunda fase empleando un cuestionario cerrado en el que se incluyan determinadas categoras del tipo (muy importante, importante, etc.) o bien rangos nmericos (0 a 5; 5 a 10; etc.). Se recomienda eliminar todos aquellos conceptos o variables que resulten irrelevantes para la inmensa mayora o la totalidad de los expertos. Si observamos que el grupo de expertos se polariza en dos o ms grupos a la hora de seleccionar y ponderar las variables, deberemos trabajar con los planteamientos de cada grupo de expertos y desarrollar as diversos escenarios o posibilidades de interpretacin y evolucin de la realidad que estamos investigando.

15.2.- Procedimiento Prerrequisitos

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Debemos tener acceso a un grupo de expertos, preferiblemente 3 ms, as como disponer de algn especialista en la materia de que se trate en el equipo de investigacin, en el caso de que el propio investigador no sea especialista en la materia. Nivel 1 Asesoramiento sobre el problema. Generalmente se puede obtener a partir de una primera reunin o entrevista en la que se formulen interrogantes del tipo " qu sucedera en el futuro si....?" y se discuta sobre ellas. Con objeto de clarificar el alcance del problema mediante el juicio de expertos, debemos dvidir el tema en problemas o interrogantes parciales que nos permitan considerarlo en detalle. Una simple cuestin puede generar una cadena completa de preguntas parciales. Estas preguntas parciales nos remiten a factores, variables o conceptos particulares de los que dependen el futuro de las soluciones y eventualmente el centro de atencin. Esencialmente, este nivel se corresponde con la primera fase del anlisis de problemas mediante el diagrama de flechas. Por ejemplo, podemos interrogarnos sobre cmo afectar la crisis de Kossovo a la estabilidad poltica deSerbia? Esta cuestin se divide en varias cuestiones parciales de acuerdo con los siguientes factores: 1.- Posibilidad de lograr un acuerdo efectivo entre los representantes de los albaneses kosovares y el Gobierno de Belgrado. 2.- Influencia de la comunidad internacional para lograr el cumplimiento del acuerdo 3.- Distribucin de fuerzas polticas serbias y posicin ante un posible acuerdo 4.- Posicin del gobierno de Montenegro ante un posible acuerdo. 5.- Medidas mnimas necesarias para garantizar la aplicacin duradera del acuerdo. Etc..... Nivel 2 Trasladar el problema a un cuestionario. La calidad de las respuestas es casi siempre inducida por el tipo de pregunta. Resulta necesario expresar el problema y sus aspectos parciales con la mayor claridad posible, ya que cuanto ms inequvocas sean las preguntas tambin lo sern las respuestas. De acuerdo a la naturaleza del problema, pueden emplearse los siguientes tipo de preguntas: a).- Preguntas con eleccin entre mltiples respuestas La tensin en la crisis entre Cuba y Estados Unidos .............. est aumentando ( ) .............. permanece estable ( ) .............. est reducindose ( ) b).- Preguntas con una escala de evaluacin de probabilidades Determine la probabilidad de que se resuelav la crisis entre Cuba y Estados Unidos durante el prximo ao Imposible.............................................................................Seguro 0-------1-------2-------3-------4-------5-------6-------7-------8-------9-------10

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tambin puede establecerse una escala de probabilidad de forma simplificada Imposible ......................... 0-2 o bien -1Poco probable ................. 2-4 o bien -3Probable .......................... 4-6 o bien -5Muy probable ................... 6-8 o bien -7Seguro ............................ 8-10 o bien -9c).- Preguntas con adhesin a respuestas predeterminadas Indique la validez de las siguientes sentencias en relacin con la posible evolucin de las relaciones entre Estados Unidos y Cuba durante el prximo ao Muy de acuerdo .............. de acuerdo ............total desacuerdo Se mantendr la actual situacin sin cambios Se aliviar el bloqueo de EE.UU. Se intensificar el bloqueo de EE.UU. Nivel 3 Para la seleccin de las personas encuestadas y atendiendo a los objetivos de la investigacin, debemos adoptar una decisin fundamental, a saber: debemos seleccionar a personas que forman parte del crculo de los que adoptan las decisiones, o al menos prximo a ellas, o por el contrario debemos interrogar a expertos independientes o ajenos al proceso de toma de decisiones?. En el primero de ambos supuestos las personas que debemos interrogar se determinan en funcin de los rganos o instituciones que participan en el proceso de toma de decisiones y simplemente debemos decidir si se realiza la encuesta a todas las personas o seleccionamos slo una muestra representativa, por ej. los portavoces de los grupos parlamentarios; los altos funcionarios; etc. En el segundo caso, adems de deccidir si realizamos una encuesta exhaustiva o por muestreo, debemos decidir si consideramos slo a los especialistas en el tema o incluimos tambin a todos aquellos que por razn de su cargo, aunque no participan en el proceso decisional, gozan de la capacidad de manifestarse sobre las diversas opciones; por ej. los lderes de opinin; los responsables de medios de comunicacin; los funcionarios encargados de la ejecucin de las decisiones; los observadores internacionales; etc. Nivel 4 Ponderar el valor de las opiniones individuales. Esta ponderacin puede realizarse en funcin de distintos criterios segn los requerimientos de la investigacin. Cuando se trata de personas que participan en el proceso de toma de decisiones, el distinto grado de importancia o de competencias de los rganos de decisin nos facilitar la determinacin del valor que debemos atribuir a la opinin de sus representantes. As, por ej. la opinin del Presidente del Gobierno o Primer Ministro tendr mayor importancia que la de sus Ministros; la opinin de los asesores ser inferior a la de los decisores; etc.

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En cambio, si consideramos las opiniones de expertos independientes o ajenos al proceso decisional, deberemos decidir si valoramos ms la opinin en funcin del grado de conocimiento del problema, de la idnependencia de criterio o de la capacidad para influir en la opinin de terceros (opinin pblica; accionistas; inversores; diplomticos de otros pases; etc.). La ponderacin del valor atribuido a cada una de las categoras de expertos interrogados se incluir en una tabla elaborada especficamente. Presidentes de Gobierno ....................... 3 Ministros ................................................ 2'5 Asesores ............................................... 2 Parlamentarios ...................................... 1'5 Periodistas ............................................. 1'25 Cientficos y acadmicos ....................... 1 Para la elaboracin de la tabla de ponderacin del valor de las opiniones de los expertos cuando se trata de especialistas ajenos a la toma de decisiones y que pertenecen a una misma categora, puede resultar til emplear diversos criterios objetivos, como por ej. la experiencia directa en la zona; la experiencia anterior en la toma de decisiones sobre el mismo tema; el grado de reconocimiento en la comunidad cientfica internacional de la autoridad del experto; etc. Alternativamente, se pueden incluir preguntas en el cuestionario que nos permitan establecer lso criterios de ponderacin a partir de una autoevaluacin realizada por los propios expertos interrogados. Por ej. podemos incluir preguntas similares a las siguientes: 1).- Cul es el nivel de atencin que concede en su actividad profesional al tema o de la regin investigada ? a).- Exclusivo ................... ( ) b).- Prioritario ................... ( ) c).- Marginal ..................... ( ) Nivel 5 Coleccin de las respuestas. La mejor forma de recabar las respuestas de los expertos es a travs de un cuestionario escrito o de entrevistas personales grabadas. En ambos casos se descarta el anonimato, ya que la identidad del experto resulta imprescindible para ponderar correctamente el valor de sus respuestas, as como para poder ampliarlas o completarlas con cuestionarios o entrevistas posteriores. Slo cuando la exigencia del anonimato se plantea como condicin previa para responder al cuestinario y la excepcionalidad del experto interrogado impide su sustitucin por otro de su misma categora En cuanto al cuestionario debera elaborarse de tal forma que resulte sencilla su conversin a una o varias bases de datos informatizadas, con el fin de poder utilizar todas las posibilidades de clculo y grficas que ofrecen los modernos programas de ordenador. Desde esta perspectiva, si hemos de operar con un elevado nmero de expertos y/o cuestionarios, resulta imprescindible recurrir al empleo de modelos que sean susceptibles de informatizacin mediante scanners o lectores pticos de cdigos de barras.

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Nivel 6 Evaluacin presentacin de resultados. Una primaria evaluacin implica el clculo de promedios o de medias ponderadas para las diversas categoras de respuestas. Estos resultados se incorporarn al modelo de cuestionario y se acompaarn de un breve comentario general del significado de los diversos datos obtenidos. Tambin se puede aadir una referencia expresa al grado de coincidencia o discrepancia en las respuestas de los expertos. Para ello resulta adecuado recurrir a las medidas de dispersin (vase apartado estadstico) y a su representacin grfica de modo que se haga visible el perfil de respuestas de los diversos expertos interrogados. Naturalmente, si hemos empleado diversos factores de ponderacin para las distintas categoras de expertos, deberemos reflejarlo a la hora de presentar los resultados mediante la desagregacin de los resultados generales en diversos subgrupos coincidentes con las categoras establecidas. Con ello, adems de las conclusiones generales podremos obtener tambin diversas conclusiones parciales en funcin de las categoras de expertos consultados y de este modo podremos realizar posteriores comprobaciones para determinar qu subgrupo de expertos resulta ms fiable en sus anlisis y pronsticos del tema que nos ocupa. Ello, adems de facilitar posteriores investigaciones sobre este mismo tema y con esta tcnica, nos permitir desarrollar de modo ms sencillo, breve y econmico, el empleo de tcnicas ms avanzadas como el anlisis delphi. 15.3.- Aplicaciones El anlisis sistemtico de expertos resulta muy til para el diagnstico y prognosis de situaciones internacionales de las que carecemos de indicadores satisfactorios o de datos estadsticos fiables. Adems constituye una tcnica imprescindible para la elaboracin, verificacin y ajuste de programas de simulacin por ordenador basados en la generacin de sistemas expertos. En estos casos, la obtencin del conocimiento necesario para la formulacin de las reglas que nutren el motor de inferencia, como para la determinacin de las probabilidades aplicables a las distintas reglas de inferencia, as como para la evaluacin de los resultados obtenidos de la simulacin y la correccin, en su caso, de los posibles errores detectados en el proceso de inferencia, resulta imprescindible la aportacin de los expertos humanos y, por tanto, de esta tcnica diseada especficamente para obtener sus conocimientos y conclusiones.

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16.- EL ANALISIS DELPHI El anlisis delphi, al igual que el juicio sistemtico de expertos, est destinado a obtener de una forma rigurosa el conocimiento, conclusiones y pronsticos de los expertos sobre un tema internacional. 16.1.- Idea Bsica Esta tcnica es ms compleja y sofisticada que la anterior ya que no slo aspira a conocer las opiniones de los expertos, sino tambin a determinar los cambios o confirmaciones que se pueden producir en ellas a partir de un proceso de realimentacin en las opiniones de los expertos generado por las sucesivas entrevistas o cuestionarios realizados y el conocimiento de los resultados generales alcanzados en cada ocasin. De este modo se obtienen varias ventajas respecto de la tcnica del juicio sistemtico de expertos. En primer lugar, podremos determinar, con mayor exactitud qu variables o fenmenos resultan ms fiables, cuales haban sido ignorados o subestimados por algunos expertos y aquellos otros que simplemente presentan un alto grado de incertidumbre para todos o la mayora de los expertos. Ello nos permitir obtener unas explicaciones y/o pronsticos ms precisos y elaborar un modelo terico ms completo. En segundo trmino, esta tcnica podemos utilizarla para determinar el grado de discrepancias y/o errores consolidados que existen en las opiniones de los expertos, obviando, de este modo las discrepancias y/o errores superficiales, como los derivados de las diferencias de edad, experiencia, etc. La determinacin del valor de las discrepancias y/o errores consolidados entre los expertos constituye un elemento esencial a la hora de elaborar los modelos de simulacin por ordenador mnimamente tiles. Por tlimo, el empleo de esta tcnica nos permitir obtener mayores y mejores argumentos a las explicaciones y pronsticos realizados por los expertos, ya que estos se ven inducidos a reflexionar sobre ellos y sobre el grado de coherencia en sus razonamientos. En este sentido, el anlisis delphi nos permite contrastar los criterios y argumentos que se emplean por los expertos pertenecientes a distintas categoras, por ej. los que participan en la toma de decisiones y los que permanecen ajenos a ellas. 16.2.- Procedimiento Niveles 1 a 3 Idnticos a la tcnica del juicio sistemtico de expertos. Nivel 4 Llevar a cabo una segunda ronda de entrevistas o presentar por segunda vez un cuestionario. Para ello, la forma ms simple de proceder es presentar el formulario de la primera entrevista o el texto del primer cuestionario junto con los valores medios obtenidos de las respuestas de los expertos para cada pregunta y el valor obtenido de la respuesta de cada experto individual.

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En caso de que exista una desviacin significativa entre el valor de la respuesta del experto y el valor medio para el conjunto de ellos, se formulan preguntas adicionales para que aclare las razones o argumentos de su respuesta. Existen diversos mtodos para determinar el grado de desviacin que resulta aceptable, es decir el que no obligara a formular alcaraciones, y aquel otro que exige dar respuesta a las preguntas aclaratorias. Por ej. una desviacin superior a un 20 % por encima y por debajo del valor medio de las repuestas exigira contestar a las nuevas preguntas aclaratorias. Nivel 5 Evaluacin de los resultados de la segunda ronda de entrevistas o del segundo cuestionario. Los comentarios o respuestas aclaratorias incluidos se emplearn para la formulacin de nuevas preguntas. Nivel 6 Realizacin de una tercera ronda de entrevistas o la presentacin de un tercer cuestionario que incluir nuevas preguntas, siguiendo el procedimiento anteriormente sealado para la segunda ronda. Nivel 7 Evaluacin de los resultados de la tercera ronda y recopilacin de los comentarios o respuestas aclaratorias para establecer nuevas cuestiones. Nivel 8 Realizacin de una cuarta y tima ronda de entrevistas o presentacin de un cuarto cuestionario, que incorporen las nuevas preguntas formuladas a partir de los comentarios realizados en la tercera ronda. Nivel 9 Resumen y presentacin final de los datos sobre las respuestas realizadas por los expertos, incluyendo un anlisis general de sus principales explicaciones y argumentos, as como de la evolucin experimentada en los datos de cada respuesta. 16.3.- Aplicaciones La realizacin del procedimiento de consulta requerido tanto por el juicio sistemtico de expertos como por el anlisis delphi, se facilita extraordinariamente con la utilizacin de la red de Internet. En efecto, podemos emplear el correo electrnico para remitir los cuestionarios a los diversos expertos y recabar sus respuestas de un modo rpido, sencillo y con costes muy reducidos.

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Tambin podemos elaborar el cuestionario como una pgina web, incorporndole un contador de visitas, y agregar la direccin de la pgina (URL) en aquellas redes (network) que vinculan a diversos centros y especialistas de todo el mundo en el tema que deseamos consultar. De este modo el alcance del cuestionario supera ampliamente el reducido mbito de especialistas en el tema de un solo pas. En ambos casos, una correcta elaboracin del cuestionario contar con la ventaja adicional de que las respuestas de cada experto estarn ya informatizadas y ser muy sencilla su tabulacin en una hoja de clculo. Finalmente, si se trata de encuestas, podemos emplear el sistema de videoconferencias para llevarlas a cabo sin desplazarnos de nuestro centro de trabajo, Este ltimo sistema resulta ms caro y menos asequible que los dos anteriores pues son todava muy pocas las personas que acceden a Internet que dispongan del hardware y del software necesario para participar en videoconferencias. En todo caso, este sistema no permite la informatizacin de las respuestas de un modo tan sencillo como en los casos precedentes. Realizadas estas observaciones sobre el procedimiento para emplear estas tcnicas aprovechando las oportunidades que ofrece Internet, debemos advertir que el anlisis delphi presenta algunos problemas que el usuario de esta tcnica debe conocer y prevenir, ya que en caso contrario, el efecto acumulativo de ciertos defectos a travs de las sucesivas entrevistas o cuestionarios puede llevar a explicaciones o pronsticos absolutamente errneos. Segn Frei y Ruloff, los principales problemas que se suscitan en el empleo de esta tcnica son los siguientes: 1.- Incertidumbres a cerca del horizonte temporal de referencia. El pronstico pierde valor cuanto ms distante temporalmente sea el futuro considerado. Los expertos suelen preferir los pronsticos a corto o, como mucho, medio plazo ya que a largo plazo el nmero de variables a considerar son numerosas y por tanto requieren conocimientos del tema mucho ms profundos del que habitualmente carecen las personas que adoptan las decisiones e, incluso, sus asesores y los especialistas independientes. 2.- La imposicin de predicciones a cualquier precio. Los expertos deben ser libres para no realizar pronsticos cuando realmente consideran que las incertidumbres sobre algunas variables bsicas generan escenarios futuros muy improbables o muy imprecisos. Como sealan ambos autores "El conocimiento de que ciertas cosas son inciertas es mejor que las falsas seguridades." 3.- Las simplificaciones abusivas de temas complejos. La presin sobre los expertos puede adquirir, a veces, niveles intolerables que les induzcan a dar respuestas precipitadas y demasiado simples a temas complejos. En ocasiones la excesiva simplicidad de las respuestas es la consecuencia directa de preguntas demasiado simples o deficientemente formuladas. 4.- La existencia de expertos falsos o ilusorios. 5.- Las deficiencias en la realizacin del procedimiento derivadas de costes humanos, materiales o financieros demasiado reducidos.

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6.- Las oscilaciones radicales entre las posiciones pesimistas y optimistas de los expertos. 7.- La sobreestimacin de las posibilidades ofecidas por el anlisis delphi. 8.- La manipulacin consciente o inconsciente de los resultados. 106

- FREI, D.; RULOFF, D.- Handbook of Foreign Policy Analysis.- Dordrecht, 1989. Edit. Martinus Nijhoff Publishers; pgs. 146-148

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17.- LA SIMULACION EN LAS RELACIONES INTERNACIONALES: POSIBILIDADES Y LIMITACIONES Hasta ahora nos hemos referido a algunas deficiencias esenciales que justifican la necesidad de una revisin metodolgica de nuestra disciplina. Resulta oportuno dedicar algunas consideraciones a las posibilidades que ofrecen los avances tericos ms recientes en otros mbitos cientficos, as como las extraordinarias oportunidades que existen en la obtencin, almacenamiento, gestin y transmisin de la informacin, tras el espectacular desarrollo tecnolgico de la informtica y las telecomunicaciones, as como la implantacin a escala universal de Internet. 107 a).- Es posible la simulacin internacional? Como hemos sealado con anterioridad, una de las dificultades metodolgicas que se consideraba caracterstica de las Relaciones Internacionales respecto de otras ciencias sociales, y que serva de pretexto para justificar su desfase en el empleo de ciertos mtodos y tcnicas eminentemente empricos, era su incapacidad para emplear la experimentacin como instrumento de adquisicin de conocimiento y de verificacin de hiptesis. El empleo del mtodo comparativo, ya fuese de forma sincrnica o diacrnica, era la alternativa que se nos ofreca a los internacionalistas, aunque ello suscitaba otra serie de dificultades metodolgicas. No obstante, la idea de incorporar la simulacin como tcnica cuasi-experimental, aparece ya en los aos sesenta vinculada a la irrupcin de la corriente funcionalista en el estudio de los asuntos internacionales. Como es bien sabido, en el mbito de la sociologa o la sicologa se desarrollaron ciertas tcnicas de experimentacin en laboratorio como los grupos artificiales, los sociodramas y los sicodramas. 108 Anlogamente, el desarrollo de la teora de juegos permiti la observacin y experimentacin en laboratorio de las conductas de los jugadores, enfrentados a distintas situaciones, tales como juegos repetitivos con o sin comunicacin. 109 Todas estas lneas de trabajo, arrojaron importantes conocimientos prcticos en el terreno del anlisis microinternacional, gracias a los cuales se puedieron introducir significativos refinamientos en las teoras dominantes e, incluso, permiti la formulacin de nuevas teoras y modelos. Sin embargo, todo ello no permiti superar el principal escollo a la aplicacin de la experimentacin en la disciplina pues, al fin y al cabo, los internacionalistas seguan sin poder manipular a los actores o las sociedades internacionales existentes para observar sus resultados y verificar sus hiptesis y mucho menos podan crear artificalmente semejantes realidades en el laboratorio. El desarrollo de la modelizacin terica introdujo la posibilidad de utilizar una frmula de carcter cuasi-experimental: la simulacin por ordenador. En principio la simulacin consiste en la manipulacin o alteracin controlada de las variables de un modelo terico o de las condiciones en las que este opera. 110 Se trata, por tanto, de un tipo de tcnica operativa de
- Sobre este ltimo aspecto, puede consultarse el anlisis realizado por el reciente informe del Banco Mundial. BANCO MUNDIAL.- Informe sobre el desarrollo mundial. El conocimiento al servicio del desarrollo 1998/99.- Edit. Ediciones Mundi-Prensa. Madrid, 1998. 108 - DUVERGER, M.- op.cit.; pgs. 392-400. 109 - DAVIS, M.D.- op. cit.; pgs. 122-144. 110 - Guetzkow defini, en 1959, la simulacin como "una representacin operativa de las caractersticas centrales de la realidad".
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naturaleza terica y, en este sentido, corresponderan a esta categora lo que Aron ha denominado el experimento mental aplicado a la historia y las aportaciones de la corriente doctrinal conocida como la historia contrafctica. 111 Naturalmente toda simulacin terica est precondicionada por el modelo empleado, como ste lo est por la teora empleada en su elaboracin. Pero la finalidad bsica de la simulacin es obtener toda la informacin posible del modelo para alcanzar su mximo grado de utilidad, tanto torica como prctica. Desde este punto de vista, la simulacin puede desempear tres funciones bsicas: a) determinar las posibilidades de variacin interna que permite el modelo; b) especificar su capacidad explicativa del comportamiento de los fenmenos reales y c) permitir su aplicacin prctica a la realidad. Desde luego, no todas las simulaciones concretas se realizan con la intencin de satisfacer estas tres funciones, pero la tcnica de simulacin las satisface plenamente. Ello nos permite comprender porqu la simulacin, que desde luego dista mucho de poder equipararse con la experimentacin, ya sea en la naturaleza o en el laboratorio, est cada vez ms emplendose all donde la experimentacin resulta imposible de realizar. Este es, sin lugar a dudas, el caso de nuestra disciplina. 112 Por esta razn, no debemos sorprendernos de que las primeras experiencias de simulacin internacional se produjeran hace ya cuatro dcadas en el terreno de las relaciones polticomilitares pues, no en vano, nos hallbamos en plena etapa de la sisuasin nuclear. En efecto, en 1959 se iniciaba por Guetzkow el Inter-Nation Simulation (ISN), cuyo desarrollo llegara hasta 1965, mientras Bloomfield y Padelford, realizaban el Ejercicio poltico-militar de Lincoln Bloomfield (PME). 113 Aunque ambos casos realizan la simulacin de los procesos de decisin poltica en los Estados, cada uno de ellos responda a una filosofa y una estructura muy distintas. 114 El ISN
Aos ms tarde, y tras la experiencia de su modelo de simulacin Inter-Nation Simulation realiz una definicin mucho ms completa y precisa en los siguientes trminos: "...una construccin terica consistente no slo de palabras, no slo de palabras y smbolos matemticos, sino de palabras, smbolos matemticos y componentes sustitutorios o repetidos de cualquier tipo operando en el tiempo para representar los fenmenos que son estudiados." GUETZKOW, H.- "A Use of Simulation in the Study of International Relations".- Behavioral Science; vol. 4, n 3 (Julio 1959); pg. 183. dem.- "Some Correspondence Between Simulations and 'Realities' in International Relations".KAPLAN,M.A.- New Approaches to International Relations. Edit. St. Martin's Press. New York, 1968; pg. 203. 111 - ARON, R.- Dimensiones...op. cit.; pg. 77. JANSSENS, P.- op. cit.; pgs. 95-98. 112 - SMOKER, P.- "International Relations Simulations".- Peace Research Reviews; vol. 3, n 6 (1970); pg. 1-84. 113 - GUETZKOW, H.; CHERRYHOLMES, C.- Inter-Nation Simulation Kit: Instructors Manual.Edit. Science Research Associates Inc. Chicago, 1966. GUETZKOW, H.- Inter-Nation Simulation Kit: Participant's Manual.- Edit. Science Research Associates Inc. Chicago, 1966. BLOOMFIELD, L.P.; `PADELFORD, N.J.- "Three Experiments in Political Gaming".- The American Political Science Review; vol. LIII, n 4 (diciembre 1959); pgs. 1105-1115. 114 - Para un estudio detallado de cada uno de estos casos de simulacin, vase: SMOKER,P.- op. cit.; pgs. 26-34. ALKER Jr., H.R.; BRUNNER, R.D.- "Simulating International Conflict: A Comparison of Three Approaches".- International Studies Quarterly; vol. 13, n 1; pgs. 70-110.

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de Guetzkow era una simulacin basada en la relacin hombre-mquina (ordenador), mientras que el PME de Bloomfield era una simulacin exclusivamente humana, lo que la asemejaba al tipo de experimentacin en laboratorio de los grupos artificiales o de los sociodramas, utilizados en la investigacin sociolgica. Por tanto, desde los comienzos de la simulacin en Relaciones Internacionales, surgi un interesante debate sobre el papel que le corresponda desempear al ser humano como participante en ella. De una parte estaban lo que distinguan los juegos de las simulaciones, segn que intervieniesen o no los seres humanos como decisores en el proceso de simulacin, y quienes, como Guetzkow, consideraban que el recurso a los decisores humanos constitua un recurso legtimo en la simulacin cuando las deficiencias tericas impedan la modelizacin de las variables explicativas de su comportamiento, siempre que se cumpliese la condicin de la correspondencia entre la intervencin humana en la simulacin y la realidad internacional objeto de estudio. 115 Adems, la utilidad de ambos tipos de simulacin era claramente distinta y desigual. Mientras la simulacin exclusivamente humana se empleaba, y se emplea todava, 116 como una importante tcnica de investigacin sobre la conducta humana en el proceso de adopcin de decisiones en temas de poltica internacional y cuestiones estratgicas (war games), as como para la formacin y el entrenamiento de personal especializado ( profesores, diplomticos, militares, etc.). Su principal limitacin radica en que este tipo de simulacin no es aplicable a todoas aquellas reas de fenmenos internacionales que no implican directamente la adopcin de decisiones; por ej. el anlisis macrointernacional; el estudio y pronstico de la evolucin en reas regionales o temticas, etc. La simulacin mixta, es decir la basada en la interaccin hombre-ordenador, adems de poder aplicarse con fines pedaggicos en el mbito de la adopcin de decisiones, admite tambin su aplicacin al anlisis y prognosis, dentro de ciertos lmites, de cuestiones muy diversas pertenecientes al mbito micro y macrointernacional. Es, por consiguiente, un tipo de tcnica mucho ms poderosa tericamente y con mayores aplicaciones prcticas. Tal vez por ello, y en la medida en que el desarrollo de la informtica ha potenciado sus capacidades, ha constituido el principal instrumento de simulacin internacional en las ltimas dcadas. En efecto, en la segunda generacin de modelos de simulacin mixta, desarrollada tomando como referencia el INS de Guetzkow, aparecen el World Politics Simulation (WPS 1969-) elaborado por William Coplin y el International Processes Simulation (IPS -1968-) de
- Esta distincin entre juegos y simulaciones trataba de enfatizar la idea de que era posible el desarrollo de simulaciones diferentes a las que se elaboraban a partir de la teora de juegos, en la que el nmero de jugadores y el grado de comunicacin entre ellos constituyen variables decisivas en la formulacin de sus distintos modelos (dos jugadores, n-jugadores, suma nula, suma no nula, etc.). Desde este punto de vista, nuestra posicin se aproxima ms a la de Guetzkow ya que consideramos que el concepto de simulacin terica incluye las simulaciones desarrolladas a partir de la teora de juegos aunque, desde luego, no se agota en ellas ni mucho menos. BENNETT, P.G.- "Hypergames: developing a Model of Conflict".- Futures, vol. 12, n 6 (diciembre 1980); pgs. 116 - En Marzo de 1995.se realiz una simulacin humana entre alumnos de la Escuela Diplomtica y del Magister de Relaciones Internacionales y Comunicacin de la Facultad de Ciencias de la Informacin de la Universidad Complutense de Madrid, sobre el funcionamiento del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas. Dicha simulacin se realiz bajo la direccin de Rafael Moreno Izquierdo y de James P. Muldoon y tom comoreferencia el conflicto fronterizo entre Ecuador y Per durante ese mismo ao. El desarrollo de la simulacinse tuvo una duracin de da y medio y se bas en el manual de procedimiento y la documentacin aportadas por los directores de la misma.
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Paul Smoker y, mucho ms tarde, el Simulated International Processer (SIPER -1977-) creado por Stuart A. Bremer. 117 Estos y muchos otros modelos de simulacin demostraron, a pesar de sus limitaciones conceptuales, de formalizacin y operativas, las decisivas contribuciones que la simulacin mixta poda realizar al desarrollo y verificacin de las distintas teoras, as como a la aplicacin prctica que de las Relaciones Internacionales poda realizarse, incluso en el terreno del anlisis macrointernacional. 118 Un reciente programa de simulacin por ordenador, aplicado al estudio de los diversos escenarios de evolucin del sistema mundial y de sus principales reas tras la desaparicin de la bipolaridad, ha sido el International Futures (IFs) realizado por Barry Hughes. 119 Sin embargo, todos estos tipos de simulacin basada en programas de ordenador y en la interaccin hombre-mquina, presentan una caracterstica comn que resulta decisiva para conocer sus posibilidades: se desarrollan de acuerdo con una programacin algortimica. 120 La cuestin que debemos formularnos es si sta es la nica forma de simulacin mixta que podemos desarrollar en nuestra disciplina o si, por el contrario, han surgido nuevas tcnicas de programacin capaces de superar algunas limitaciones de la programacin algortmica y, en consecuencia, ms adecuadas a la ciencia de las Relaciones Internacionales. b).- La simulacin internacional a travs de sistemas expertos La respuesta a la cuestin suscitada en el apartado anterior radica en la consideracin de los sistemas expertos o sistemas basados en el conocimiento ( experts systems o knowledgebased systems). El origen de esta rama de la programacin informtica se encuentra en las races mismas del desarrollo de la Inteligencia Artificial a partir de finales de los aos cincuenta.
- COPLIN, W. (ed.).- Simulation in the Study of Politics.- Edit. Markham Publishing Comp. Chicago, 1968. dem.- "Man-Computer Simulation as an Approach to the Study of Politics: Implications from a Comparison of State Department and High School Runs of the World Politics Simulation".- Proceedings, National Gaming Council, Eighth Symposium. 1969. dem.- "Approaches to the Social Sciences trough Man-Computer Simulations".- Simulation and Games; vol. I (1970). SMOKER, P.- International Processes Simulation: A Man-Computer Model.- Edit. Northwestern University. Evanston, 1968. dem.- Analyses of Conflict Behaviours in an International Processes Simulation and an International System 1955-60.- Edit. Northwestern University. Evanston, 1968. dem.- IPS Program Pack.- Edit. Northwestern University. Evanston, 1968. BREMER, S.A.- Simulated Worlds. A Computer Model of National Decision-Making.- Edit. Princenton University Press. Princenton, 1977. 118 - Diversos estudios empricos realizados para determinar la validez del modelo INS a partir de la correspondencia de las diversas variables empleadas o los resultados obtenidos con su empleo y las situaciones de la realidad internacional demostraron su elevado nivel de validez. SMOKER, P.- op. cit; pgs. 30-34. 119 - HUGHES, B.B.- International Futures. Choices in the Creation of a New World Order.- Edit. Westview Press. Boulder, 1993. 120 - Un algoritmo, siguiendo a Gear puede ser definido como "un mtodo para resolver un problema usando operaciones a partir de un grupo determinado de operaciones bsicas, que produce la solucin en un nmero finito de tales operaciones." Citado por IGNIZIO, J.P.- Introduction to Expert Systems. The Development and Implementation of Rule-Based Expert Systems..- Edit. McGraw-Hill. New York, 1991, pg. 27.
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En efecto, una de las lneas bsicas de la investigacin en el sector de la programacin por ordenador, se concentraba en la reproduccin de los procedimientos del conocimiento humano en los ordenadores. 122 Un sistema experto fue definido por Feigenbaum como: "un programa inteligente para ordenador que utiliza conocimiento y procedimientos inferenciales en la resolucin de problemas, problemas que son lo suficientemente difciles para que su resolucin requiera una experiencia humana importante. El conocimiento necesario para actuar as, junto con los procedimientos inferenciales utilizados, puede considerarse como un modelo dela experiencia de los mejores expertos del campo." 123 En la actualidad, como muy certeramente han destacado Castillo y Alvarez, el sistema experto desarrolla muchas ms funciones que la resolucin de problemas y, por consiguiente, sera ms correcto definirlo como: "un sistema informtico que simula el proceso de aprendizaje, de memorizacin, de razonamiento, de comunicacin y de accin de un experto humano en una determinada rama de la ciencia, suministrando, de esta forma, un consultor que puede sustituirle con unas ciertas garantas de xito." 124 A partir de esta definicin, podemos deducir que los sistemas basados en el conocimiento tratan de resolver problemas complejos pero bien definidos, utilizando las posibilidades ofrecidas por los ordenadores, y a partir del conocimiento aportado por expertos humanos especializados en la resolucin de tales problemas. Como seala Dincbas, un sistema experto tiene como finalidad "la modelizacin del comportamiento de un experto humano, que cumple una tarea de resolucin de problemas para los que no dispone de ningn algoritmo, centrndose en un dominio muy preciso." 125 Entre las principales utilidades prcticas que aportan los sistemas expertos, podemos destacar dos: incrementan sustancialmente la capacidad, rapidez y fiabilidad del proceso de conocimiento y aprendizaje especializados de los seres humanos y reducen extraordinariamente los costes del desarrollo y adquisicin del conocimiento. Conviene destacar que en cuanto a las soluciones aportadas por la programacin algortimica o convencional y la del sistema experto existe una diferencia esencial. La primera converge hacia la solucin ptima mientras que la segunda slo alcanza una solucin satisfactoria o suficiente del problema. Esta diferencia en cuanto al tipo de soluciones aportadas a los
- En 1962 se celebr una conferencia sobre informtica terica, organizada por John McCarthy, y en la que intervinieron algunos de los creadores de la Inteligencia Artificial, como Allen Newell; Herbert Simon; J.C. Show; Marivin Minsky y el propio organizador. En esta conferencia se presentaron algunos de los primeros resultados significativos, entre los que cabe destacar el Information Processing Language (IPL) desarrollado por Show y el lenguaje de procesamiento de listas (LISP) elaborado por Minsky y McCarthy. Citado por CASTILLO, E.; ALVAREZ, E.- Sistemas expertos. Aprendizaje e incertidumbre.- Edit. Paraninfo. Madrid, 1989; pgs. 23-24. 122 - Las seis reas principales de la Inteligencia Artificial, segn Castillo y Alvarez son: la demostracin de teoremas; los juegos inteligentes; el procesamiento del lenguaje natural, la robtica, la visin artificial y los sistemas expertos. CASTILLO, E., ALVAREZ, E.- op. cit.; pg. 24. 123 - HARMON, P.; KING, D.- Expert Systems. Artificial Intelligence in Bussiness.- Edit. John Wiley and Sons Inc., 1985. Traduccin de Gregorio F. Fernndez.- Sistemas Expertos. Aplicaciones de la inteligencia artificial en la actividad empresarial.- Edit. Ediciones Daz Santos S.A.. Madrid, 1988; pg. 5. 124 - CASTILLO, E., ALVAREZ, E.- op. cit.; pg. 14. 125 - Citado por DUSSAUCHOY, A. ; CHATAIN, J.N.- Systmes Experts. Mthodes et outils.- Edit. Eyrolles. Pars, sin fecha de edic. Traduccin al castellano de Toms Hurtado Merelo.- Sistemas Expertos. Mtodos y herramientas.- Edit. Paraninfo. Madrid, 1988; pg. 31.
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problemas hace que no siempre se disponga del conocimiento terico suficiente para desarrollar el algoritmo. En semejantes condiciones, el sistema basado en el conocimiento se convierta no slo en la nica forma de programacin disponible sino tambin en la mejor forma de programacin. Adems, desde el punto de vista de su estructura y funcionamiento internos, los sistemas basados en el conocimiento, presentan importantes ventajas respecto de los programas informticos convencionales, que los hacen especialmente idneos para ser empleados en nuestra disciplina. Estas ventajas las resume Ignizio 126 en la siguiente tabla:

TABLA COMPARATIVA ENTRE LOS PROGRAMAS CONVENCIONALES Y LOS SISTEMAS EXPERTOS Caractersticas Modelo Procedimiento Algortmico Cuantitativo Relaciones precisas Opaco Proceso de desarrollo estructurado Revisin relativamente difcil Numricos Todos los valores deben ser conocidos para resolver Convergente Dependiente del orden Sistema Experto Cuantitativo y cualitativo Relaciones imprecisas Transparente Proceso de desarrollo relativamente estructurado Revisin relativamente fcil Numricos o simblicos

Variables/atributos (valores)

Resuelve con valores conocidos o desconocidos Satisfactorio Proceso de solucin Relativamente independiente del orden Conjuga el qu conocemos con el Separa el qu conocemos del cmo lo cmo lo hacemos hacemos Por lo general una sola sin Con frecuencia mltiples con Conclusiones explicacin explicacin

En efecto, el estudio emprico de las realidades sociales, incluidos los fenmenos internacionales, revela claramente que no siempre la conducta humana se orienta a la mejor solucin de un problema sin que se limita a alcanzar una solucin satisfactoriadel problema siempre y cuando sea ms sencilla de alcanzar. En este sentido, las soluciones alcanzadas por los sistemas expertos se revelan como mejores en la prctica aunque sean peores tericamente. En cuanto a su arquitectura interna, todos los autores coinciden, aunque no siempre empleen los mismos trminos, en que un sistema experto contiene los siguientes elementos esenciales: 1.- Base de conocimiento

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- IGNIZIO, J.P.- op. cit.; pg. 44

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Es una estructura de datos que rene todo el conocimiento especializado que aporta el experto humano sobre un problema determinado. Fundamentalmente incluye los objetos o sucesos relevantes para la solucin del problema, as como las relaciones que se desarrollan entre ellos. Adems incorpora los casos particulares o excepciones que deben tomarse en consideracin y las estrategias de resolucin del problema as como la forma de aplicarse. Estos elementos ltimos constituyen el meta-conocimiento o reglas de conocimiento sobre la forma de adquirir o utilizar el propio conocimiento. La base de conocimiento constituye el fundamento de todo el sistema experto, pues de su contenido depende, en buena medida, la mayor o menor potencialidad y eficacia del sistema. 2.- Motor de inferencia Es la parte ms operativa del sistema experto ya que activa los datos o sucesos de la base de conocimiento para desarrollar procesos de razonamiento que permitan extraer las soluciones a los problemas planteados. Los procesos de inferencia que puede emplear esta parte del sistema experto se basan en las reglas de razonamiento existentes en los diversos tipos de lgica (numrica; booleana; simblica; etc.) 3.- Base de hechos o memoria de trabajo Es el empleo temporal de una parte de la memoria del ordenador con objeto de almacenar los datos obtenidos del caso particular que est considerando el usuario, as como las conclusiones intermedias que obtiene el ordenador aplicando el procedimiento inferencial establecido y cuyo encadenamiento le permiten alcanzar una solucin para el caso planteado. 4.- Interfase con el ususario Es la parte del programa que permite la interaccin hombre-mquina, traduciendo el lenguaje del usuario al lenguaje de programacin y viceversa. Gracias a este mdulo, el usuario puede incorporar nuevos datos o conocimientos al sistema o, alternativamente, tener conocimiento de los resultados alcanzados por ste. 5.- Mdulo de explicaciones Ya veamos que una de las ventajas de los sistemas expertos respecto de los sistemas algortmicos, radica en que los primeros pueden aportar explicaciones sobre el modo de adquirir y utilizar el conocimiento del experto humano para alcanzar la solucin en cada caso concreto. Este mdulo presenta el conjunto de inferencias realizadas, as como las reglas aplicadas para alcanzarlas. De este modo, permite que el sistema experto no slo aporte soluciones a los problemas, sino tambin el conocimiento sobre cmo y porqu se alcanzan tales soluciones. 6.- Mdulo de adquisicin del conocimiento Es la parte del sistema experto que gestiona la obtencin del conocimiento aportado por el experto humano y/o de los datos suministrados por el usuario o alcanzados mecnica o informticamente de la realidad ( instrumentos de medicin; bases de datos de otros ordenadores; etc.).

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Adems se encarga de comprobar la verosimilitud de tales informaciones y de realizar el procedimiento para su incoporacin al sistema. Constituye, por tanto, el principal instrumento de alimentacin de la base de conocimiento. La articulacin relacional entre los diversos componentes del sistema experto, se corresponde con el siguiente esquema (n 4) elaborado por Dussauchoy y Chatain 127 :

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- DUSSAUCHOY, A.; CHATAIN, J.N.- op. cit.; pg. 34

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PRINCIPALES ELEMENTOS DEL SISTEMA EXPERTO ESQUEMA n 4

ADQUISICION DE CONOCIMIENTO

EXPERTO

INGENIERO DEL CONOCIMIENTO

MODULO DE ADQUISICION DE CONOCIMIENTO

REPRESENTACION DEL CONOCIMIENTO

BASE DE HECHOS

BASE DE CONOCIMIENTO

TRATAMIENTO DEL CONOCIMIENTO

MOTOR DE INFERENCIA

MODULO DE EXPLICACIONES

INTERFASE DE USUARIO
UTILIZACION DEL CONOCIMIENTO

USUARIO

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Aunque existen mltiples clasificaciones de los sistemas expertos en funcin de los criterios aplicados a los diversos elementos que los componen, en trminos generalesse pueden clasificar en sistemas expertos basados en reglas y sistemas expertos basados en probabilidades. Existen sustanciales diferencias entre ellos. En efecto, siguiendo a Castillo y Alvarez podemos elaborar la siguiente tabla comparativa: DIFERENCIAS ENTRE TIPOS DE SISTEMAS EXPERTOS ELEMENTOS BASE DE CONOCIMIENTO MOTOR DE INFERENCIA SUBSISTEMA DE EXPLICACION ADQUISICION DE CONOCIMIENTO SUBSISTEMA DE APRENDIZAJE MODELO PROBABILISTICO
Abstracto: Estructura probabilstica Concreto: Hechos Aplicacin del teorema de Bayes (evaluacin de probabilidades condicionales) Basado en probabilidades condicionales Espacio probabilstico Parmetros Cambio en la estructura del espacio probabilstico Cambio en los parmetros
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MODELO DE REGLAS
Abstracto: Reglas Concreto: Hechos Encadenamientos hacia atrs y/o hacia adelante Basado en reglas activas Reglas Factores de certeza Nuevas reglas Cambio en los factores de certeza

Como ya sealbamos, uno de los principales obstculos metodolgicos en nuestra disciplina, radica en la dificultad de cuantificar con precisin algunos sucesos o variables esenciales. Semejante dificultad resulta insalvable cuando a la ocurrencia de dichos sucesos o variables, debemos asociar una determinada probabilidad. Por esta razn, los sistemas expertos basados en reglas con asignacin de factores de certeza a las mismas, constituye, a nuestro juicio, el instrumento idneo de programacin para realizar simulaciones de fenmenos internacionales. Resulta imprescindible destacar que existe una importante diferencia metodolgica entre asignar una determinada probabilidad condicional de ocurrencia a cada uno de los sucesos o variables de un fenmeno internacional y la atribucin de factores de certeza al cumplimiento de todas o de las principales reglas del sistema experto. 129

- CASTILLO, E.; ALVAREZ, E.- op. cit.; pg. 35 - La atribucin de probabilidades condicionales serealiza aplicando el teorema de Bayes o de inferencia Bayesiana, segn el cual:
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P (Aj / Ej ) x P (Ej) P ( Ej / Aj ) = ---------------------------------------------------- [ P ( Aj / Ej ) x P (Ej ) ] En donde P (Ej) es la probabilidad "a priori" de un suceso Ej; P ( Ej / Aj ) es la probabilidad "a posteriori" de un suceso Ej tras conocer cierto dato o hecho Aj sobre el mismo; P ( Aj / Ej ) es la "verosimilitud", es decir la probabilidad de que un suceso Ej elegido al azar posea el hecho o dato Aj; [ P ( Aj / Ej ) x P (Ej ) ] es la suma de las probabilidades de todos los sucesos Ej multiplicada por las probbailidades de todos los sucesos Ej que contienen el hecho o dato Aj.

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En efecto, puede resultar muy difcil alcanzar un mnimo grado de aproximacin en la asignacin de probabilidades por parte de los expertos a cada una de las variables o sucesos bsicos que configuran el siguiente principio: Si las relaciones de disuasin entre dos pases son eficaces se evitar la guerra, ya que la disuasin depende, al menos, de tres variables bsicas de acuerdo con la siguiente ecuacin: Efecto Disuasor = Capacidad destructiva estimada de los medios militares x Intencin estimada de emplearlos x Dao estimado en el caso de su empleo 130 Resulta innecesario insistir sobre la dificultad de establecer con rigor las probabilidades para cada una de estas variables y para cada uno de los Estados afectados. Sin embargo, resulta relativamente sencillo determinar un factor de certeza respecto del cumplimiento o veracidad del citado principio en la realidad internacional. Para ello podemos recurrir a dos tcnicas bien conocidas en nuestro campo: el juicio sistemtico de expertos y el anlisis delphi. 131 La elaboracin de un sistema experto, requiere el siguiente procedimiento: 1. 2. 3. 4. 5. 6. 7. 8. 9. Definicin, lo ms precisa posible, del problema a resolver Bsqueda de un experto humano o de los datos o experiencia acumulada sobre ese problema Diseo del sistema experto Determinacin del grado de intervencin del usuario en el funcionamiento del sistema Seleccin de la herramienta o lenguaje de programacin que debe emplearse Realizacin de un prototipo o demo Comprobacin del funcionamiento del prototipo Ajuste del sistema a partir de ciertos casos y posterior generalizacin a todos los casos que presentan el mismo tipo de problema Mantenimiento y actualizacin posterior

Los sistemas expertos basados en reglas emplean reglas de inferencia del tipo SI............LUEGO.......... En el ejemplo que considerbamos anteriormente, la regla de inferencia sera la siguiente: Regla 1 SI la disuasin del Estado A respecto del Estado B es eficaz Y la disuasin del Estado B respecto del Estado A es eficaz LUEGO se evitar la guerra
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- Una versin simplificada de esta ecuacin, aplicada a la disuasin nuclear la he formulado en: CALDUCH, R.- Relaciones...op. cit.; pg. 383. 131 - El juicio sistemtico de expertos consiste en la realizacin de encuestas a un grupo de expertos en el tema concreto de que se trate, aplicando las tcnicas de elaboracin de encuestas y de evaluacin del cuestionario bien conocidas en las ciencias sociales. Por su parte el anlisis delphi constituye una tcnica ms compleja ya que implica la formulacin de las opiniones de los expertos a travs de sucesivas rondas de entrevistas, cuyos resultados se utilizan para realimentar las opiniones y argumentos emitidos en las rondas precedentes de entrevistas y, en su caso, modificarlas. Con esta tcnica se obtiene un grado de profundidad en los conocimientos de los expertos que no se alcanza con la simple encuesta o entrevista. FREI, D.; RULOFF, D.- Handbook of Foreign Policy Analysis. Methods for Practical Application in Foreign Policy Planning, Strategic planning and Business Risk Assessment.- Edit. Martinus Nijhoff Publishers. Dordrecht, 1989; pgs. 138-148. JENSEN, Ll.- "Predicting International Events".- Peace Research Reviews; vol. 4, n 6 (Agosto 1972); pgs. 13-15.

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A travs de estas reglas de inferencia los sucesos o datos conocidos se articulan con razonamientos lgicos para alcanzar como conclusiones nuevos sucesos o datos. Las conclusiones alcanzadas mediante la aplicacin de una sola regla, como el ejemplo utilizado, se denominan simples, mientras que el encadenamiento de varias reglas da lugar a conclusiones compuestas. Fundamentalmente se pueden emplear dos tipos de encadenamiento de reglas: el encadenamiento hacia adelante ( forward chaining ) o el encadenamiento hacia atrs ( backward chaining ). El encadenamiento de reglas hacia adelante, parte de un grupo de hechos o datos conocidos a travs de la observacin y opera considerando cada regla para comprobar si los datos o sucesos satisfacen las premisas, lo que supone que la aplicacinn de los datos o sucesos a las premisas tiene que hacerlas verdaderas. Cuando ello ocurre la regla es ejecutada ( activacin o disparo de la regla ), obtienindose nuevas conclusiones que se emplean para activar otras reglas y as sucesivamente hasta alcanzar unas conclusiones finales, es decir hechos o sucesos que ya no activan las reglas del sistema y que pasan a incorporarse a la base de hechos o datos del sistema. Como ya indicbamos, la base de conocimiento debe contener adems de las reglas de conocimiento emprico y de los casos excepcionales, las denominadas meta-reglas o reglas del meta-conocimiento, es decir las reglas que determinan la estrategia de utilizacin del motor de inferencia. En esta categora deben formularse al menos tres tipos de reglas: a).- las reglas de activacin; b).- las reglas de resolucin de conflictos y c).- las reglas de ejecucin. Las primeras establecen los criterios que deben emplearse para comparar los datos con las premisas de las reglas de conocimiento emprico. Las segundas, incluyen los criterios que deben seguirse cuando las conclusiones obtenidas de la aplicacin de una regla de conocimiento emprico activa dos o ms reglas, con objeto de determinar cual de ellas deber ejecutarse. Finalmente la tercera categora incluye los criterios de ejecucin de las conclusiones alcanzadas con la activacin de la regla de conocimiento emprico. En este caso cabe dos posibles soluciones: los sucesos o datos concluidos se derivan a la base de hechos o bien se convierten en nuevas reglas de conocimiento emprico que se incorporan a la base de conocimiento. El modelo de representacin del encadenamiento de reglas hacia delante se corresponde con el de la fig. n 5.

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MODELO DE ENCADENAMIENTO DE REGLAS HACIA ADELANTE FIGURA n 5

Regla 4

A Regla 1 B H D Regla 2 E G C

Regla 6

F I K Regla 3 L M

Regla 5

El proceso de encadenamiento de reglas hacia atrs es totalmente diferente del anterior, ya que se inicia con la determinacin de los objetivos o conclusiones deseadas y determina si

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existen hechos que permitan deducir un valor para cada una de estas conclusiones u objetivos. Lgicamente, el programa se inicia con una base de hechos conocidos vaca y utiliza el listado de conclusiones u objetivos para comprobar su coincidencia con los valores de veracidad o falsedad contenidos en las reglas y poder determinar de este modo si la regla se activar o no. En el caso de que se active podr especificar los datos o sucesos contenidos en sus premisas y los incorporar a la base de hechos, en caso contrario buscar en la siguiente regla y as sucesivamente. Segn Gonzlez y Dankel, 132 el procedimiento es el siguiente: 1. Se define en el sistema experto un grupo ordenado de objetivos o conclusiones deseables; 2. Se considera el primero de estos objetivos o conclusiones y se recopilan todas las reglas capaces de satisfacerlo; 3. Para cada una de estas reglas se examinan sus premisas, pudiendo darse tres opciones: a).- Si se cumplen todas las premisas de la regla se ejecuta para obtener su conclusin y el objetivo se excluye del grupo de objetivos establecido inicialmente, pasndose a considerar el siguiente; b).- Si el valor de una de las premisas de la regla no se satisface, se buscan aquellas reglas que permitan deducir el valor de dicha premisa. En caso de no hallarse ninguna, este valor se considera una subconclusin o un subobjetivo y se sita al frente del grupo de conclusiones, volvindose al paso 2; c).- Si en el caso anterior sigue sin encontrarse ninguna regla cuyos valores de las premisas satisfagan los rquerimientos de la subconclusin o subobjetivo, se le pregunta al usuario para que introduzca un valor para el mismo y se vuelve a revisar el cumplimiento de los valores de las premisas de cada una de las reglas, hasta encontrar aquella que los satisfaga. 4. Si todas las reglas que pueden satisfacer el objetivo o conclusin considerada fallan, esta conclusin u objetivo se considerada indeterminado y se extrae del grupo de objetivos o conclusiones, procedindose a considerar el siguiente. En caso de que la base de conclusiones u objetivos se encuentre vaca, se da por concluido el proceso. Consideremos el ejemplo del principio de la disuasin al que nos hemos referido anteriormente. De acuerdo con el encadenamiento de reglas hacia atrs, seprocedera de la forma siguiente: Objetivo: Evitar la guerra Valor = verdadero Regla 1 SI la disuasin del Estado A respecto del Estado B es eficaz Valor = verdadero Y la disuasin del Estado B respecto del Estado A es eficaz Valor = verdadero LUEGO se evitar la guerra Valor = verdadero Se comprobara si el valor del objetivo se satisface por la regla y se revisara el cumplimiento del valor de la primera premisa de la regla, en caso de satisfacerse se comprobara el de la segunda premisa y en caso afirmativo se deducira el cumplimiento del objetivo o conclusin, dado que no hay ms reglas. Si el cumplimiento de los valores de la primera o segunda premisa no se satisficiesen, entonces se incluira una nueva subconclusin o subobjetivo que podra ser:
- GONZALEZ, A.; DANKEL, D.D.- The Engineering of Knowledge-based Systems. Theory and Practice.- Edit. Prentice Hall. Englewood Cliffs, 1993; pgs. 96-97.
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Subobjetivo: Desencadenar la guerra Valor = verdadero Y se revisaran de nuevo los valores de las premisas de la regla para comprobar en este caso que tampoco satisfacen esta subconclusin concluyendo que es indeterminado y, puesto que no hay ms reglas, solicitando nuevos valores al usuario o determinando que el proceso ha concluido. En efecto, cualquier internacionalista afirmara que de la falta de eficacia de la disuasin de un Estado respecto de otro no puede deducirse necesariamente la inevitabilidad de la guerra, ya que sta puede evitarse adems de por las medidas disuasorias, por medidas de negociacin diplomtica o de confianza. Lgicamente este especialista recabara ms informacin y caso de no obtenerla, concluira que la falta de una eficaz poltica disuasora puede facilitar el desencadenamiento de una guerra o puede faciltar otras muchas formas de relacin cooperativa. El encadenamiento de reglas hacia atrs sigue el esquema del grfico n 6:

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MODELO DE ENCADENAMIENTO DE REGLAS HACIA ATRAS FIGURA n 6

OBJETIVO-A-

REGLA 3 REGLA 1 REGLA 2

PREMISA 1 PREMISA 1 PREMISA 2 PREMISA 1

PREMISA 2

PREMISA 2

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Evidentemente, excede de las posibilidades de esta breve exposicin, estudiar todas las variantes de sistemas expertos que se han desarrollado, atendiendo a los tipos de lgica utilizada, a las formas de tratamiento del conocimiento, a los mbitos cientficos en los que se est aplicando o las utilidades prcticas a las que podemos dedicarlos. 133 Sin embargo y a pesar de su ya demostrada eficacia en otras ciencias sociales, incluida la Economa y el Derecho, lo cierto es que en el mbito de las Relaciones Internacionales sigue existiendo una amplia laguna en el desarrollo y aplicacin de los sistemas expertos. Fundamentalmente hay tres reas donde su utilizacin resultara extraordinariamente fecunda: a) en la modelizacin de teoras con la finalidad de facilitar su aprendizaje y utilizacin por los alumnos; b) en el desarrollo de programas informticos de diagnstico de situaciones internacionales a corto y medio plazo, as como de la simulacin de los procesos decisionales en el terreno de la poltica exterior de los Estados y c) en la verificacin de teoras a travs de la simulacin de escenarios internacionales. Sin duda, la explotacin de este vasto campo que ofrecen las nuevas tcnicas de investigacin no puede ser la obra del investigador individual y ni tan siquiera de equipos aislados. Se requiere la creacin de redes de equipos de investigacin que faciliten su coordinacin y el mximo rendimiento de los recursos humanos y materiales, dedicados al desarrollo y aplicacin prctica de estas tcnicas, mediante la complementariedad de las lneas de trabajo que eviten, en la medida de lo posible, la redundancia de las investigaciones y el trabajo disperso. Ese es el reto que actualmente se le plantea a nuestra disciplina. Si somos capaces de enfrentarlo podremos sacarla del marasmo de charlatanera que la aqueja en este momento y situarla a la par de las ciencias sociales ms avanzadas. En caso contrario habremos frcasado en nuestra principal obligacin como hombres de ciencia: aplicar nuestros conocimientos a la resolucin de los principales problemas que aquejan a la Sociedad Internacional y, por tanto, a la propia Humanidad.

- Un amplio tratamiento de los diversos tipos de sistemas expertos que existen, atendiendo a todas estas caractersticas puede encontrarse en: HARMON, P.; KING, D.- op. cit.; pgs. 123 y ss. DURKIN, J.- Expert Systems. Design and Development.- Edit. Prentice Hall. Englewood Cliff, 1994; pgs. 701 y ss. BENFER, R.A.; BRENT Jr., E.E.; FURBEE, L.- "Expert Systems".- Sage University Papers, n 77 (1991); pgs. 79-85.

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