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La Injusticia Social en La Obra El Señor Presidente
La Injusticia Social en La Obra El Señor Presidente
La Injusticia Social en La Obra El Señor Presidente
Presentado por:
Profesor:
AYACUCHO – PERÚ
2022
PLANIFICACIÓN
La injusticia social en la obra “El señor presidente”
INTRODUCCIÓN:
CUERPO:
1. ¿Qué es la injusticia social?
Quienes la ejercen
2. Régimen dictatorial que se presenta en la obra
3. Casos de injusticia social: Daño a los derechos humanos
3.1. Corrupción
3.2. Persecución
3.3. Tortura
3.4. Discriminación
4. Consecuencias que trajo la dictadura
Revolución
Migración
CONCLUSIÓN:
REDACCIÓN
Tortura
En la obra existen demasiados casos de tortura, primeramente, el auditor
busca a un grupo de mendigos que vieron el asesinato del coronel Parrales, el
cual murió a manos del Pelele, quien a su vez fue asesinado para que no hablara
en contra del ejército, Al primer disparo el Pelele se desplomó por la gradería de
piedra. Otro disparo puso fin a la obra. (VII, 48); estos mendigos, a base de tortura,
inculparon al general Canales y el licenciado Carvajal por su muerte:
− ¡Mentira…! −afirmó el Auditor y, pausa de por medio−, ¡mentira, embustero!...
Yo le voy a decir, a ver si se atreve a negarlo, quiénes asesinaron al coronel
José Parrales Sonriente; yo se lo voy a decir… ¡El general Eusebio Canales y el
licenciado Abel Carvajal!... (II, 22)
El ejército busca, de formas atroces, hacer que los capturados digan lo que
ellos quieren escuchar. En otro caso de tortura está el interrogatorio de la
Chabelona, “¡Perra!... −le dijo y, sin dejar de mirarla añadió−: ¡Haremos cantar a ésta!”
(XIII, 80), a la cual mataron porque no sabía el paradero del general Canales (XIII,
81).
Discriminación
En la obra principalmente se ve discriminación contra los indios, en un
primer caso vemos como a una anciana se le niega la oportunidad de ver a su
hijo, sin embargo, siguió insistiendo:
La anciana se retiró sin bajarse el rebozo, poco a poco, contando los pasos
como si midiera su infortunio; se detuvo un momentito en la orilla del andén y
luego acercóse otra vez al oficial, que seguía sentado.
− Perdone, señor, es que yo no estoy aquí nomás; vengo de bien lejos, de más
de veinte leguas, y ansina es que si no le veyo hoy a saber hasta cuándo voy a
poder volver. Hágame la gracia de llamarlo…
Tortura
En la obra existen demasiados casos de tortura, primeramente, el auditor
busca a un grupo de mendigos que vieron el asesinato del coronel Parrales, el
cual murió a manos del Pelele, quien a su vez fue asesinado para que no hablara
en contra del ejército, Al primer disparo el Pelele se desplomó por la gradería de
piedra. Otro disparo puso fin a la obra. (VII, 48); estos mendigos, a base de tortura,
inculparon al general Canales y el licenciado Carvajal por su muerte (muerte del
coronel Parrales):
− ¡Mentira…! −afirmó el Auditor y, pausa de por medio−, ¡mentira, embustero!...
Yo le voy a decir, a ver si se atreve a negarlo, quiénes asesinaron al coronel
José Parrales Sonriente; yo se lo voy a decir… ¡El general Eusebio Canales y el
licenciado Abel Carvajal!... (II, 22)
− Perdone, señor, es que yo no estoy aquí nomás; vengo de bien lejos, de más
de veinte leguas, y ansina es que si no le veyo hoy a saber hasta cuándo voy a
poder volver. Hágame la gracia de llamarlo…
Tortura
En la obra existen demasiados casos de tortura, primeramente, el auditor
busca a un grupo de mendigos que vieron el asesinato del coronel Parrales, el
cual murió a manos del Pelele,quien a su vez fue asesinado para que no hablara
en contra del ejército, Al primer disparo el Pelele se desplomó por la gradería de
piedra. Otro disparo puso fin a la obra. (VII, 48); estos mendigos, a base de tortura,
inculparon al general Canales y el licenciado Carvajal por la muerte del coronel
Parrales:
− ¡Mentira…! −afirmó el Auditor y, pausa de por medio−, ¡mentira, embustero!...
Yo le voy a decir, a ver si se atreve a negarlo, quiénes asesinaron al coronel
José Parrales Sonriente; yo se lo voy a decir… ¡El general Eusebio Canales y el
licenciado Abel Carvajal!... (II, 22)
El ejército busca, de formas atroces, hacer que los presos digan lo que ellos
quieren escuchar. En otro caso de tortura está el interrogatorio de la Chabelona,
“¡Perra!... −le dijo y, sin dejar de mirarla añadió−: ¡Haremos cantar a ésta!” (XIII, 80), a
la cual mataron porque no sabía el paradero del general Canales (XIII, 81).
Discriminación
En la obra principalmente se ve discriminación contra los indios. En un
primer caso vemos como a una anciana se le niega el derecho de ver a su hijo,
sin embargo, siguió insistiendo:
La anciana se retiró sin bajarse el rebozo, poco a poco, contando los pasos
como si midiera su infortunio; se detuvo un momentito en la orilla del andén y
luego acercóse otra vez al oficial, que seguía sentado.
− Perdone, señor, es que yo no estoy aquí nomás; vengo de bien lejos, de más
de veinte leguas, y ansina es que si no le veyo hoy a saber hasta cuándo voy a
poder volver. Hágame la gracia de llamarlo…
Burgos, C. H. (2014). Más allá del consenso y la oposición: las actitudes de la “gente corriente”
en regímenes dictatoriales. Una propuesta de análisis desde el régimen franquista.
Revista de estudios sociales, 87-100.
Rouquié, A. (1981). Dictadores, militares y legitimidad en América Latina . Crítica & Utopía
Latinoamericana de Ciencias Sociales, 161- 193.