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Ciclismo

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Zapatillas para ciclismo

Las zapatillas de ruta están diseñadas para ser ligeras pero rígidas, para transferir la fuerza
de tus pedaleadas sin ser una carga en tus piernas, hasta su ancho y mecanismo de cierre
están pensados con este principio en mente.

En pocas palabras, para encontrar las zapatillas correctas deberás considerar:


 Tallas: Antes de comprar las más ligeras, rápidas o resistentes, las mejores zapatillas son
las que se ajustan correctamente a tus pies. Es de suma importancia que sientas la
comodidad al usarlas. Para asegurarte de esto, las zapatillas de ciclismo se miden en
medias-tallas, y diferentes anchos para ser ideales en cualquier forma y tamaño de pie.
Claro, está muy bien tener una tabla de tallas y conocer la tuya, pero nada se compara con
ir personalmente a una tienda y ponértelas, así puedes saber con certeza que el par que
compres va a tener las medidas correctas de ancho y largo, y el ajuste correcto en tu talón.
 Forma: Cada zapatilla tendrá un ajuste un poco diferente, afectando su ancho y forma;
algunas tendrán un talón más estrecho para evitar deslizamientos, mientras que otras
tendrán espacio extra en el área de los dedos para pies más anchos. Así que si tus pies son
particularmente anchos o estrechos, presta buena atención a esto.
 Calas (o Chocles): Son lo que asegura tu pie al pedal. En concepto, usar pedales con calas
te permite una transferencia de poder y velocidad más eficiente con tu bicicleta. Las calas
de bicicleta de ruta tienen un sistema de tres pernos con un área de contacto mayor, para
que tus pies estén estables y se transfiera la mayor cantidad de energía al pedalear, en
contraste, las de ciclomontañismo tienen un sistema de dos pernos, para facilitar la
limpieza de suciedades y mugre que se acumule en ellas. De hecho, no hay nada de malo
con usar un juego de pedales y zapatillas de MTB en tu bici de ruta. Son menos ajustadas y
precisas que un juego especializado para la ruta, para bien o para mal, pero algo que debes
tener en cuenta es que las zapatillas serán casi por seguro más pesadas.

 Mecanismo de ajuste: Cualquiera podría pensar en mil formas de mantener una zapatilla


atada a tus pies, pero en el mercado moderno, existen apenas unos pocos métodos
comprobados y comunes. Más allá de la opción tradicional de apretarlas con una tira de
velcro, tal vez preferirías una opción con sistema de ratchet o diales, para tener un ajuste
más preciso y refinado; por el otro lado, los cordones están de moda últimamente, si
quieres salir a montar al estilo vintage.
 Ventilación: Al igual que con los cascos, unas zapatillas de gama alta no servirán de nada
si no quieres ponértelas por mala ventilación. Así que mantener tus pies frescos al montar
debería estar en la cima de tu lista de prioridades. Esto es especialmente importante porque
los pies tienden a expandirse con el calor y la sangre se acumularía en ellos si no están
ventilados por periodos extendidos. Encontrar un balance de temperatura no es tan fácil
como suena: mucha ventilación, y tus pies se congelarán; muy poca y tendrás pies
entumecidos por el calor y la hinchazón. Fíjate en la ubicación de las ventanillas en tus
zapatillas, normalmente se encuentran en la base y en el área de los dedos.
 Rigidez de la suela: Las zapatillas básicas de ciclismo normalmente tienen suelas de
nylon, pero si te fijas en las premium, encontrarás materiales más avanzados como placas
de fibra de carbono para reducir el peso e incrementar su rigidez. Entre más dura sea la
placa, mejor será la transferencia de tu energía a los pedales, y tu rendimiento en
general. Aunque para algunos, una suela muy rígida puede ser incomoda, así que asegúrate
de ver reseñas y seguir principalmente lo que se sienta bien en tu caso particular.

Unas Luces para Ver y ser Visto.


Tener luces para ver y ser visto en tu bicicleta es algo que se da por sentado, montes de día
o de noche
Un estudio en Dinamarca concluyó que ocho de cada diez accidentes de ciclismo ocurren
durante el día, y que usar farolas aún bajo el sol es la primera cosa que deberías hacer para
reducir el riesgo de verte en uno.

Esto es lo que debes tener en cuenta cuando elijas las luces de tu bicicleta:

 Ver o ser visto: Si normalmente montas en vías oscuras o pobremente iluminadas,


necesitarás unas buenas farolas para saber hacia dónde vas. Al tener el propósito de
iluminar tu camino, es de entenderse que sean más brillantes que otros tipos de luces,
también necesitan una batería más grande y un haz de luz más angosto para iluminar
mayores trechos de la carretera. Si solo montas durante el día, o en carreteras bien
iluminadas, lo único que necesitas son luces que te hagan más visible, por seguridad. En
este caso, estarían diseñadas con ser visibles desde cualquier ángulo en mente, con un haz
más amplio y reflectores laterales, serán más tenues para no enceguecer al que las vea, y
por esto no necesitan baterías tan grandes, lo cual es bueno para tu billetera.
 Reglas de la Ruta: Tener en cuenta una buena etiqueta al montar, y seguir las
reglamentaciones Colombianas es algo clave que debes considerar con cualquier accesorio
que compres. Entre las reglas más importantes está utilizar una luz blanca (estática o
parpadeante) en la parte frontal de tu bicicleta cuando montes de noche, y una luz trasera
roja (de nuevo, estática o parpadeante) con un reflector que te haga tan visible como los
automóviles que podrían cruzarse por tu camino. Estas luces deben ser visibles a 200
metros, y sus reflectores a 50. La regla de los 200 metros es la parte esencial que debes
considerar al comprar tus luces, sean para ver o ser visto.
 Medida en Lumen: los Lumen son la escala en la que más comúnmente veras
comparadas las luces, indican cuánta luz emiten; entre más lúmenes, más brillo. En el caso
de las luces para bicicleta, normalmente comienzan por los lados de 30 lúmenes, y pueden
llegar hasta más de 2000.

 Montura de las luces: La mayoría de las luces se aseguran a tu bicicleta con Velcro, un
tornillo que se ajuste a tu manubrio o poste del sillín, o incluso existen algunas con una
banda elástica que se amarra firmemente a tu bicicleta. Gracias a esta variedad, es
importante que te asegures del ajuste que tendrá cada una con tu equipo personal, no todos
los accesorios funcionan con cualquier bicicleta.
 Tiempo de uso y Vida de la Batería: El tiempo de uso es cuánto durará la luz encendida
desde el momento en que la enciendas hasta que la batería se agote, depende
principalmente del tamaño de la batería y el poder de esta. Te recomendamos conseguir
una que pueda cargarse por USB y con un tiempo de uso que se acomode a tus
necesidades.
 Presupuesto: El precio de unas luces para tu bicicleta puede ser tan bajo como $30.000
mil pesos, o llegar a costarte hasta 1 millón de pesos, con todo un repertorio en este
espectro.
Elijas lo que elijas, asegúrate de comparar los Lúmens, el ángulo del rayo, la vida y tipo de
batería, y cómo están diseñadas tanto la luz como su montura antes de casarte con una que
bien podría no serte útil.

Un Casco
Los cascos protegen lo más importante que tienes, tu cabeza. Sin ser muy dramáticos,
usar un casco aprobado y ajustado correctamente a tu cabeza puede ser clave para salir
sano y salvo de un accidente.

En Colombia, no es reglamentario el uso de un casco siempre y cuando montes en terreno


seguro y tengas experiencia y precaución con el tráfico, la idea es incentivar al público a
respetar el ciclismo y usarlo como alternativa de transporte. Por nuestra parte, te
recomendamos usar un casco para montar tranquilo y disfrutar tu experiencia al máximo;
eso sí, si planeas montar en terrenos accidentados, o quieres enseñarle a tu hijo/a a montar,
el casco debe ser lo primero que tengas listo antes de siquiera montarte en la bicicleta.
La reglamentación colombiana no es tan estricta con las marcas de cascos como en otros
países, pero estamos dando buenos pasos para asegurarnos de que lo que pongas en tu
cabeza sea sólo lo mejor de lo mejor.

Para esto, hay algunos elementos esenciales que debes revisar a la hora de elegir un
casco
 La Ventilación: Es extremadamente importante que tu casco no se convierta en un horno
sobre tu cabeza, asegúrate de que tenga buena refrigeración y pueda mantenerse cómodo
hasta en los días más calientes, un casco con ventanillas bien puestas canalizará el aire a lo
largo de tu cabeza, manteniéndote ventilado.
 Peso: el beneficio de los cascos diseñados para la ruta es que generalmente son más ligeros
que los de otros tipos, usando correas más angostas y un caparazón delgado pero duradero.
Los cascos más livianos pueden llegar a pesar apenas 200gr, la regla general es que entre
más cueste, más ligero será.
 Aerodinámica: Como con todo lo del ciclismo, la búsqueda por el diseño más
aerodinámico no tiene freno, y los cascos son uno de los accesorios donde esto es más
notorio. Un casco aerodinámico puede tener los mismos beneficios de deslizamiento que
las ruedas de perfil alto, así, que si lo que buscas es ir más rápido sin esfuerzo extra, hacer
la inversión de un casco aerodinámico es empezar con buen pie. La mayoría de estos
cascos tienen diseños avanzados que no requieren tantas ventanillas de ventilación, si
acaso las tienen; y tendrán una "cola" para reducir la resistencia al viento.
 Seguridad: El propósito principal por el cual estás consiguiendo un casco, obviamente no
puedes dejar la seguridad de lado cuando estés eligiendo uno, es absolutamente necesario
que tengas esto como primera prioridad, de nada sirve tener un casco muy vistoso si no va
a protegerte cuando más lo necesites.
La tecnología MIPS (Sistema de protección de impacto multi-direccional), por ejemplo, es
el nuevo estándar en el diseño de un buen casco, desarrollada para tener en cuenta que no
todos los accidentes de ciclismo son un golpe contundente de frente, un buen casco debe
considerar todo tipo de "Violencia Rotacional" que pueda ocurrirte, disipando la fuerza de
torsión y rotación en el caso de un choque. Así que ten muy en cuenta la tecnología MIPS
y otros tipos de extras en la seguridad cuando estés comprando un casco.

 Ajuste: Por bien diseñado que sea un casco en cualquiera de los aspectos anteriores, si no
se ajusta bien a tu cabeza, de nada servirá. Ponle especial atención a la forma del
caparazón, si eso funciona para ti, las correas y demás ajustes pueden modificarse a la
medida.
 Extras: Otros elementos que hacen un buen casco son, por ejemplo, que el acolchado
pueda removerse fácilmente para lavarse o reemplazarse, que el ajuste pueda acomodarse
en lo más mínimo con correas y diales, y que ofrezca mayor visibilidad con colores fuertes
y stickers reflectivos.

 Caramañolas, Bidones y Portacaramañolas

Muy seguramente los portacaramañolas no serán lo primero que pensarías cuando hablas


de accesorios para tu bicicleta, pero, te retamos a montar por más de media hora sin
necesitar uno.
Con una sola botella guardada en tu bicicleta puedes montar con tranquilidad en trechos
medianos de más o menos dos horas, pero si vas a montar más que eso, te aseguramos que
te hará falta un poco de hidratación extra.

Y si mantenerte saludable y bien hidratado no es lo tuyo por alguna razón, un porta-


caramañolas puede serte útil para guardar repuestos. Pipetas de CO2, y utensilios
pequeños, un buen portador para tus botellas podría ayudarte mucho en cuestiones de peso,
evitar que haya cosas rebotando por tu marco.

Generalmente, Los portacaramañolas están hechos de aluminio, plástico o fibra de carbono


(dependiendo de cuanto te dispongas a gastar) y para mayor seguridad, cuentan con
agarres de goma o alguna medida similar, para evitar que lo que guardes en ellos salga
volando.

Cuando elijas una caramañola, asegúrate de que tenga buen litraje según lo que requieras
para montar a tope, también fíjate bien en el mecanismo de cierre, de nada sirve una
botella que se derrame apenas empieces a montar, y ten un buen ojo a que se pueda
desensamblar para fácil limpieza; por último, como siempre, asegúrate de que se ajuste
bien a tu bicicleta, nunca sobra decirlo.

Te lo recordamos porque no es para nada raro comprar un portacaramañolas extra, sólo


para darte cuenta de que el poste de tu sillín (donde normalmente se montan los extras) es
muy grueso o con muy poco espacio, haciendo casi imposible que tengas más de uno, así
que fíjate en esto antes de comprar. 

Gafas de Sol

Las gafas de sol específicas para ciclismo son ligeras, con lentes intercambiables y un
campo de visión amplio para que estés al tanto de todo tu entorno, montes en trechos
arriesgados o escalando laderas; siempre viene bien asegurarte de que se acomoden bien a
tu cabeza, con o sin casco.
También, dependiendo del clima en el que montes, querrás gafas con buena ventilación
para mantenerte fresco, o sin ella para conservar todo el calor posible, teniendo esto en
cuenta, fíjate bien de que no se empañen cuando no estás en movimiento por la
acumulación de calor y de que los lentes tengan protección UV (ultravioleta) del 100%
para reducir tu exposición a la radiación.

Algunas de las gafas de más alta gama vienen con lentes polarizados que te ayudan a no
enceguecerte con la luz solar, y a que tus ojos no se irriten luego de montar por periodos
extendidos. Los lentes foto crómicos (también conocidos como lentes de transición) se
ajustan a los cambios de iluminación mejor que los demás, porque nadie monta bajo luz
constante, se adaptan a las transiciones entre sol y sombra.

Asegúrate de prestarle atención al campo de visión que te brindan las gafas que te
interesan, lo ideal es que no veas el marco de tu bicicleta cuando la estés montando, sin
importar la posición que tomes.

Oakley y 100% fueron dos marcas pioneras en este diseño, con los lentes y marcos que se
expanden en la parte superior para aumentar tu campo de visión cuando estás corriendo, o
en una posición aerodinámica.

Ropa para Ciclismo

La ropa del ciclismo de ruta está hecha para un ajuste apretado con el cuerpo, para mejorar
la aerodinámica y reducir la irritación, hay muchos tipos de tela para elegir, como siempre
la regla de oro aplica: entre más te dispongas a invertir, mejor será el peso, la ventilación y
la comodidad.
Las telas sintéticas como el poliéster y el elastano son comunes por su ligereza, elasticidad,
tejido y durabilidad; y para sumarle a la frescura, a menudo las combinan con telas
naturales, como el algodón.

Identificar una prenda de calidad es su propio asunto de complejo, hay muchos factores
como la medida, el deterioro del color con la transpiración y la luz, impermeabilidad,
propiedades anti-bacteriales, entre muchas otras características.

Si lo que quieres es la velocidad, busca una prenda de una tela bien ventilada y con buen
movimiento, también ayuda que sea lo más ligera posible.
Para entrenar en ambientes fríos, en cambio, necesitarás una tela resistente al viento y el
agua, y si las cosas se ponen heladas, no viene mal tener una capa aislante

Un Ciclocomputador

Para muchos, comprar un ciclocomputador es lo que de verdad hace la diferencia en tanto


rendimiento y desempeño como corredor, te permiten no sólo medir tu ritmo en tiempo
real, además puedes compararlo con tu rendimiento pasado y ver cómo (ojalá) has
mejorado a medida que prácticas.

Un computador para bicicleta te muestra todo lo que debes saber, cómo tu velocidad y la
distancia que has recorrido en determinado tiempo. Algunas alternativas más costosas te
darán información aún más detallada, como tu cadencia (velocidad de pedaleo), gradiente,
ritmo cardíaco, temperatura, cuántas calorías has quemado, mapas, hasta cuánta energía
estás consumiendo, y mucho más.

Tener estos datos frente a tus ojos en todo momento pueden darte ese empujón que se
necesita para mantener velocidades récord y hasta batirlas, ponerte metas de elevación o
recorrer una distancia específica.

La gran mayoría de ciclo-computadores cuentan con integraciones para aplicaciones de


terceros, permitiéndote agregar un aspecto social a tu bicicleta, comparando tu rendimiento
al de tus amigos, retándote a dar cada vez más y llegar a tus objetivos de fitness.

Cuando compres un computador para tu bicicleta, fíjate bien que la pantalla tenga buena
visibilidad, la batería dure lo suficiente, y que pueda fijarse fácilmente a tu bicicleta

Otras versiones más avanzadas te permiten personalizar los datos que te muestran, cómo
interactúan con otros dispositivos (como mostrarte la batería y datos por el estilo), o
agregarle una banda que mida tu ritmo cardíaco; las versiones de punta incluso te permiten
ver mapas y notificaciones de tu celular en su pantalla táctil.

 Ciclo-simuladores

Cuando pensamos en simuladores, pensamos en el invierno, el clima frío, la lluvia y


viento... básicamente, en montar cuando el clima no nos lo permite; pero un ciclosimulador
puede ser mucho más que eso, puede brindarte entrenamientos en habilidades muy
específicas, incluso con amigos en el mundo virtual, gracias a las nuevas tecnologías de
simulación inteligente.
Tener a tu disposición un ambiente óptimo y controlable con un ciclosimulador puede
traerte muchas ganancias más allá de la conveniencia, así que harías bien en tener uno en
tu lista de accesorios a tener en cuenta.

Si te interesa conseguir uno, estos son algunos puntos que debes considerar al comprar un
Ciclosimulador.

 Tipo: Como con todo, los simuladores tienden a variar en su mecanismo y propósito, los

que seguro encontrarás serán de transmisión directa, de tracción en la rueda, o que usen

rodamientos para convertir tu pedaleo en movimiento digital. Un simulador de

transmisión directa se conecta con el cassette de tu bicicleta en la parte posterior,

actuando como un reemplazo de la rueda trasera; con este mecanismo, disfrutarás de

una sensación natural y fluida, podrás realizar cambios como si estuvieras realmente en

la ruta, y no desgastarás tu rueda trasera.


Mencionamos esto último porque eso es lo que más distingue a los simuladores de
transmisión directa de los de tracción en rueda, los cuales se unen de forma similar en el
eje trasero, pero funcionan haciéndole resistencia a tu rueda con un rodillo para aparentar
una carretera real con todas sus variaciones., y por supuesto, esto desgasta un poco la
rueda.

La versión más básica de los simuladores es la de rodamiento, fijas tu bicicleta sobre tres
rodillos, y pedaleas, no hay forma más sencilla de simular un entrenamiento completo de
balance, eficiencia en el pedaleo, y fuerza en tu núcleo.

Todas estas alternativas tienen sus pros y contras, cual sea mejor para ti depende de lo que
se acomode mejor a tus necesidades y presupuesto.

 Tipos de resistencia: Los simuladores varían en el método que usan para crear una
representación del terreno, por supuesto, esto hace que varíen en costo, sensación,
fidelidad de información, y el ruido que producen. La gran mayoría usa fluido (para
aumentar o reducir la presión sobre el eje, para hacerte pedalear más fuerte), magnetismo
(una forma simple y efectiva de variar la resistencia) o viento (para simular la resistencia
del viento a altas velocidades); de nuevo, todas las alternativas tienen sus beneficios y
problemas, por ejemplo, los simuladores de viento pueden sentirse muy naturales y
realistas, pero llegan a ser muy ruidosos, y los simuladores con fluido son silenciosos, pero
cuestan más.
 Simuladores Inteligentes: La nueva tendencia en la simulación es crear ambientes
absolutamente realistas, conectando varios dispositivos y abriendo las puertas a un
entrenamiento personalizable desde la palma de tu mano, y a incluir a tus amigos en la ruta
virtual. Puede que cuesten mucho más que los simuladores básicos, pero para muchos, la
experiencia casi real de un simulador inteligente, y el aspecto social que agregan a la
mezcla, junto con el análisis detallado de rendimiento, lo valen.
Muchos de estos simuladores SMART te muestran tu velocidad, cadencia, el poder que
generas, y la inclinación en la que estás entrenando en tiempo real, las cuales son las
métricas que debes tener en cuenta para un buen rendimiento, tanto del simulador que
elijas, como propias.

También vale la pena revisar qué otros aparatos puedes integrar, y qué aplicaciones de
terceros son compatibles con tu simulador.

 Aspectos prácticos: Recuerda pensar en el ruido, el espacio del que dispones, y el peso

de tu simulador, estos tres aspectos claves pueden ser la diferencia entre algo que uses

frecuentemente, y un mueble más en la casa. Por bueno que sea, si no tienes dónde

ubicarlo para que no estorbe, o si el ruido molestaría a tus vecinos, deberías considerar

otro modelo de simulador.

Campanas y Campanillas

Las campanas, como los cascos, deberían (y en algunos lugares son obligatorias) ser un
accesorio permanente en las bicicletas de ruta, son una manera barata y compacta de
hacerle saber a todo el mundo donde estás, y es mejor un ding que gritarle a la gente en la
carretera.

Cuando compres una campana, cerciórate de que se pueda montar con facilidad a cualquier
diámetro de manubrio, que sea lo suficientemente sonora para escucharse claramente en el
tráfico, y que sea compacta, para no estorbarle a tus luces, computador, y manos.

Una Alforja o Maleta

Sabemos que comprar un porta herramientas de ciclismo no es tan emocionante como un


par de zapatillas nuevas, pero tener unos buenos compartimientos hacen la diferencia, nos
agradecerás cuando notes lo mucho que mejora tu experiencia de ciclismo al no
preocuparte por tu espacio de almacenamiento, especialmente si te ves en algún apuro y
recordaste empacar tus esenciales.
Como la gran mayoría de bicicletas de ruta no se montan en tours o aventuras de mucha
duración, nos saltaremos la mención de los Panniers (las alforjas grandes que se montan en
la parte de atrás de la bicicleta y se usan para andar con cargamentos grandes, de varios
días).

Tener una multi-herramienta a la mano puede serte muy útil si necesitas ajustar una que
otra tuerca, apretar tu manubrio, el tubo del asiento o tus frenos, tener llaves Allen,
destornillador (de pala y Phillips) y quién sabe cuántas otras herramientas a tu disposición
en cualquier momento es algo que nunca debería sobrar en tu equipo diario.

Teniendo en cuenta detalles así, estas son algunas consideraciones que debes tener cuando
elijas un porta herramienta o almacenamiento para ir con tu bicicleta.

 El Espacio: Asegúrate de poder cargar con los esenciales que mencionamos de manera


cómoda y menos estorbosa que sea posible, tu confort y seguridad van ante todo. La
mayoría de los porta herramientas tienen compartimentos para separar lo que empaques, e
incluso hay algunas con bolsillos de fácil acceso para tu multi-herramienta y objetos que
no puedes darte el lujo de buscar en el fondo del equipaje.
 Distribución de peso: Tener todo revuelto en tu alforja puede volverse incómodo
rápidamente, en especial si tu bicicleta es ligera, busca una solución de almacenamiento
que mantenga todo en su lugar y distribuya su peso de manera uniforme para mantener tu
balance. Lo ideal es conseguir porta herramientas que se mantengan alineadas con el
centro de equilibrio de tu bicicleta, así puedes montar con la tranquilidad de que no te
empujará de lado a lado cuando andas.
 Instalación y ajuste: Como todo en el mundo del ciclismo, si tus accesorios se comportan
como uno con tu bicicleta, la experiencia será mucho más satisfactoria, tomate el tiempo
de encontrar almacenamiento que sea de fácil y rápido ajuste, montar y desmontarlo no
debería de tomarte más de unos segundos. Lo más seguro es que encuentres un porta
herramienta que utilice velcro o una montura estándar que debes asegurar al poste del
sillín. Algunos prefieren montar su almacenamiento cerca al tubo superior, para tener
acceso fácil a algún snack, mejor eso que guardarlo en tu bolsillos.
 Otras cosas que tener en cuenta: fíjate bien que todo esté bien asegurado, vale más una
chequeada rápida, a que todo lo que guardaste termine tirado por la carretera. Algunos
porta herramientas usan cierres, pero no es poco común encontrarlas con velcro o broches,
a final de cuentas, tu ley es conocer tus gustos, prefieres uno que sea rígido o flexible? la
decisión es toda tuya.
Por ejemplo, una bolsa flexible puede llegar a guardar más cosas si empacas todo apretado,
pero una alforja rígida te ofrece mayor protección de sus contenidos, especialmente si llega
a caerse, aunque también producen más ruido cuando sus contenidos rebotan al montar.

Por último, siempre es bueno tener la conciencia tranquila con alforjas resistentes a la
humedad y mugre; para resumir, una buena alforja es la que menos dolores de cabeza te
produzca, si puedes montar con tranquilidad y sin preocuparte por lo que le pase a lo que
trajiste, tienes la alforja perfecta para ti.

Infladores de Llantas.

Mantener tus llantas infladas correctamente es fundamental para una buena experiencia al
montar tu bicicleta. Sin la presión correcta, tus ruedas pueden sentirse esponjosas al girar,
afectando tu rendimiento, y peor aún, podrían ocasionar un pinchazo si se doblan sobre sí
mismas.

Y si se te va la mano inflándolas, una presión que excede lo recomendado de fábrica haría


que tus llantas no tengan buena tracción, en el peor de los casos hasta podrían estallar y
salirse de la rueda.

Sabiendo esto, puedes darte cuenta de lo importante que es un inflador apropiado en tu


equipo de ruta. Con su utilidad establecida, también deberías tener en cuenta que para
llegar a las presiones de más de 90 psi que se necesitan para inflar correctamente una
llanta, seguramente debas contar tanto con un inflador de bombeo a mano, como uno de
pie.

La diferencia principal es que los infladores con bomba de pie son maravillosos para inflar
tus llantas desde la comodidad de tu hogar, con mayor facilidad de bombeo y acoples para
válvulas presta y schrader (las cuales explicaremos más abajo).

Mientras que con un inflador de mano, no serás consciente de lo necesario que es hasta que
te encuentres en medio de la carretera con una llanta pinchada, su único inconveniente es
que llegar a presiones altas va a tomarte un buen esfuerzo bombeando.

Es por esto que recomendamos que cargues con un inflador de CO2 con cartuchos extra
para una solución rápida a tu llanta pinchada, pero nunca hace daño tener un confiable
inflador de mano, porque nunca te va a fallar y es tan compacto que puedes guardarlo en tu
alforja o fijarlo en el tubo superior de tu bicicleta sin que ocupe mucho espacio.
Volviendo a los tipos de válvulas, ya te mencionamos que normalmente encontrarás una de
dos tipos, presta o schrader.

Las válvulas presta (también llamadas de alta presión o válvulas francesas) son las más
comunes en bicicletas de ruta, se reconocen fácilmente porque son mucho más angostas
que una válvula schrader y tienen un anillo de seguridad que sella la válvula cuando la
conectas.

Y las válvulas schrader son las mismas que encontrarías en las llantas de un automóvil, no
sería raro que las encuentres en una bicicleta recreacional o de llantas gruesas.

El tipo de llanta que uses seguramente dictará el tipo de válvula que uses, y a su vez cada
válvula necesita un inflador correspondiente.

Mantenimiento

Dejarse llevar con tu equipo de mantenimiento puede ser más fácil de lo que pensarías,
siempre habrá herramientas cada vez más especializadas y llamativas

Si eres de esos que prefiere que los expertos en el taller se encarguen de mantener tu


bicicleta en perfecto estado, entonces solo necesitarás una botella de lubricante para la
cadena y unos cuantos paños; pero si te gusta engrasarte las manos y darle a tu bicicleta el
cariño que merece, estos son los esenciales que necesitarás, sin entrar mucho en
profundidad porque nunca terminaría la lista.
 Lubricante de cadena: Es de suma importancia que la cadena de tu bicicleta esté
correctamente lubricada, para mantener el sistema entero en su tope de rendimiento y para
alargar la vida de sus partes, para esto debes saber qué tipo de lubricante usar: “en seco” o
“Húmedo”. El lubricante húmedo es más viscoso y duradero que su alternativa en seco, es
tu opción perfecta para montar en climas inclementes. En cambio, el lubricante en seco es
menos viscoso, y por tanto necesita aplicarse más frecuentemente, un gran beneficio es que
atrapa menos mugre cuando montas, manteniendo la cadena limpia en comparación con
lubricantes más viscosos. Hay un lubricante para cada situación, elijas el que elijas, es
importante que limpies el exceso luego de aplicarlo, para no crear un imán de suciedad que
terminaría siendo contraproducente.
 Desengrasante: Tu bicicleta de verdad te lo agradecería si mantienes su transmisión
limpia, así puedes montar de manera fluida y sin problemas innecesarios, además te ahorra
dinero a largo plazo al prolongar la vida de la cadena, el cassette y los piñones porque los
mantiene libres de elementos externos que podrían averiar las piezas prematuramente. Un
buen desengrasante es biodegradable, así tienes en cuenta al medio ambiente, y de camino
proteges la pintura y las partes delicadas de tu bicicleta.
 Set de llaves Allen o Hex: Un kit de llaves Allen es probablemente todo lo que necesitarás
para encargarte de cualquier perno en tu bicicleta, tenerlas a la mano te permite cambiar las
pastillas de tus frenos, ajustar el sillín y el manubrio, y prácticamente cualquier pieza que
necesite enroscarse. Casi todas vienen con un brazo alargado para darte mayor torque,
hasta las hay con agarres ergonómicos; un set en el rango de 1.5 a 10mm cubrirá casi
cualquier necesidad que tengas a la hora del mantenimiento.
 Puesto de trabajo: Tener su propio puesto de trabajo es una excelente inversión para
cualquier hobbyista del mantenimiento de bicicletas, te facilita mucho el trabajo en lugares
difíciles de alcanzar y la limpieza.
 Llave de Torque: La mejor forma asegurarte de que todo esté bien asegurado, apretado, y
sin miedo a lastimar el marco y las partes, es de lejos tener una buena llave de torsión (o
Torque), su ventaja está en que te permite especificar exactamente cuánto quieres apretar,
así evitas que se te vaya la mano, lo que podría hacerle daño a tus piezas. Si tienes una
bicicleta con marco y piezas de fibra de carbono, esto es asunto de vida o muerte, pues una
sola fractura en su estructura puede comprometer toda la pieza.

El metabolismo del ejercicio explica las vías y los sistemas de energía


utilizados por los ciclistas para convertir los alimentos que ingerimos en
energía que puedas usar durante el ejercicio.
El conocimiento actual de cómo los alimentos se convierten en energía
nos proporciona una base para comprender los temas de cómo debes
entrenar, comer e incluso crear estrategias para las carreras. Es cierto que
la bioquímica y la biología celular no son cosas que la mayoría de las
personas se sientan muy motivadas a aprender, pero en ciclismo, el
conocimiento del metabolismo del ejercicio es muy relevante.

ATP: La moneda de cambio de tu cuerpo

La molécula más importante en el metabolismo del ejercicio es el


trifosfato de adenosina (ATP). El ATP es la principal unidad de energía de
tus células. Es lo que te permite hacer un trabajo, como pedalear.
La energía del ATP se libera cuando pierde un fosfato y se convierte en
difosfato de adenosina (ADP).
Una vez que el ATP se convierte en ADP, es difícil de aprovechar para el
trabajo en las células (por ejemplo, restablecer las fibras musculares) hasta
que se vuelva a convertir en ATP. Hay dos métodos principales en los que
las células del cuerpo hacen esto. Se puede colocar un fosfato en un ADP
a través de medios anaeróbicos (sin oxígeno), a través de una serie de
procesos conocidos como fosforilación del sustrato, o por medios
aeróbicos (en presencia de oxígeno) mediante un proceso llamado
fosforilación oxidativa.

Metabolismo anaeróbico

Los medios anaeróbicos de la «reposición» de ATP son el sistema ATP-PC,


la glucólisis y la fosforilación de la adenilato quinasa. El sistema ATP-PC es
un proceso bastante simple. Una molécula de creatina retiene una
molécula de fosfato hasta que aparece una molécula de ADP necesitada.
La molécula de fosfato de creatina cede su molécula de fosfato a un ADP
y revierte a la creatina en el proceso. Debido a que este sistema es tan
simple, puede generar ATP muy rápidamente, pero como probablemente
puedas adivinar, los almacenes de fosfato de creatina son finitos y deben
ser recargados por el ATP que se produce a través de otros sistemas
cuando se han agotado.
En un esfuerzo total, el sistema ATP-PC es la forma principal en que se
repone la ATP durante los primeros 10 segundos.
Es importante tener en cuenta en este momento que todos los sistemas
de energía discutidos en este artículo siempre están ocurriendo. Nunca se
apagan completamente o proporcionan el cien por ciento de la ATP.
Simplemente cambian en el porcentaje y la cantidad de energía que
contribuyen.
De todos los sistemas anaeróbicos para la producción de ATP, la glucólisis
(la descomposición de los carbohidratos) es posiblemente la más
importante para los ciclistas de resistencia.
Durante la glucólisis, la glucosa y el glucógeno (carbohidratos) se
descomponen, lo que resulta en una conversión de ADP a ATP. Por cada
molécula de glucosa desglosada a través de este proceso, se obtiene una
ganancia neta de 2 ATP (glucógeno de descomposición y la ganancia neta
es 3). La ventaja de la glucólisis es que puede producir una gran cantidad
de ATP de forma más rápida y, lo que es más importante, más rápida que
el sistema aeróbico. La desventaja es que existe una cantidad finita de
carbohidratos almacenados en el cuerpo y nuestro sistema nervioso
funciona principalmente con esta fuente de combustible.
Cuando las reservas de carbohidratos se agotan y tanto el cerebro como los
músculos quieren lo que queda, probablemente puedas adivinar cuál se
cerrará primero 😉
En un esfuerzo total, la glucólisis proporciona a tus músculos ATP desde
la marca de 10 a 30 segundos. La glucólisis también es el principal medio
suplementario para proporcionar energía cuando ruedas a una intensidad
que requiere más ATP que la que puede proporcionar tu sistema
aeróbico. Curiosamente, la glucólisis comparte una relación íntima con el
sistema aeróbico. El producto final de la glucólisis es una molécula
conocida como piruvato. Cuando hay suficiente oxígeno presente, este
sustrato se alimenta al sistema aeróbico, donde se le quita más energía
para producir más ATP. Cuando las concentraciones de oxígeno son bajas,
el piruvato se convierte en lactato. La mayoría de los ciclistas han oído
hablar del lactato (o de su ácido químico láctico relativo cercano). El
lactato no es un producto de desecho, pero en realidad es una parte
importante del metabolismo aeróbico y anaeróbico. Desafortunadamente,
hay muchos malentendidos en torno a esta molécula. Por un lado, el
lactato no causa dolor muscular. Por otro lado, la fatiga del ejercicio no se
debe simplemente a la acumulación de lactato.
El último medio anaeróbico de convertir un ADP en un ATP se realiza con
la ayuda de una enzima llamada adenilato quinasa. La reacción de la
adenilato quinasa es bastante simple y puede expresarse como tal:
difosfato de adenosina (ADP) + difosfato de adenosina (ADP) ->
monofosfato de adenosina (AMP) + trifosfato de adenosina (ATP).
Básicamente, dos ADP se combinan para obtener un ATP y el subproducto
de un AMP.
La velocidad de este proceso aumenta significativamente cuando estás en
extrema necesidad de ATP y el resto de los sistemas anaeróbico y
aeróbico no lo están administrando. Es una especie de último recurso. La
razón de esto tiene que ver en parte con las condiciones en las que se
activa la adenilato quinasa, y en parte con el subproducto de la reacción,
AMP. El AMP, que tiene un solo fosfato, necesita dos fosfatos para volver
a ser un ATP. Este es un proceso muy “costoso”, por lo que para evitar
tener que pagar esta “deuda” de fosfato, el AMP se convierte en una
molécula conocida como IMP que no se convierte nuevamente en ATP.
Aunque IMP resuelve el problema de la «deuda de fosfato», ahora la
célula se queda con el problema de deshacerse del IMP que ha
acumulado. Entonces, una vez más, mientras que los mecanismos de
producción anaeróbica de ATP son excelentes para proporcionar energía
rápidamente, todos comparten la desventaja común de que sus
capacidades para producir ATP son limitadas.

Metabolismo aeróbico

El metabolismo aeróbico puede proporcionar grandes cantidades de ATP,


solo que a una velocidad mucho menor que los mecanismos anaeróbicos.
En este sistema, el ADP se convierte aeróbicamente en ATP a través de
una máquina enzimática / molecular conocida como ATP sintasa junto
con la cadena de transporte de electrones y el ciclo de Krebs. Este
proceso requiere la presencia de oxígeno para poder trabajar. Toda la
producción de ATP aeróbica de las células del cuerpo se produce en las
mitocondrias. Las mitocondrias son pequeños cuerpos semi autónomos
compartimentados de la célula. El metabolismo aeróbico tiene claras
ventajas sobre la glucólisis. Por un lado, una molécula de glucosa que se
descompone aeróbicamente (cuando 2 subproductos de piruvato de la
glucólisis entran en las mitocondrias) puede producir 30+ ATP. (a
diferencia de 2 por molécula de glucosa con glucólisis). Otra ventaja del
metabolismo aeróbico es que no se limita a un combustible de
carbohidratos (por ejemplo, glucosa y glucógeno), como ocurre con la
glucólisis.
El metabolismo aeróbico puede descomponer los carbohidratos, las grasas y
las proteínas para producir ATP.
Las grasas y las proteínas son fuentes de combustible mucho más
abundantes en el cuerpo que los carbohidratos. El conocimiento de esto
es uno de los hechos fundamentales que influyen en la estrategia de
nutrición durante la competición deportiva de resistencia.
Las desventajas del metabolismo aeróbico ya han sido insinuadas. Esta
gran fuente de ATP solo funciona cuando se puede suministrar suficiente
oxígeno a las células de trabajo (por ejemplo, fibras musculares). Además,
debido a su complejidad, el sistema aeróbico tarda algún tiempo en
“calentarse” antes de que pueda entregar el ATP en todo su potencial
(como se ha observado en la figura de este artículo). Esto causa lo que se
llama un déficit de oxígeno, que debe «devolverse» más adelante cuando
podamos recuperarnos.
Esto es parte de la razón por la que respiras fuerte después de un ejercicio
intenso.

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