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El Cambio Climático
El Cambio Climático
El Cambio Climático
RESUMEN
El Cambio Climático es uno de los problemas ambientales que en nuestros días
pone en peligro la vida en la Tierra, este fenómeno ha provocado consecuencias
negativas en el planeta que afectan el bienestar y la seguridad de los seres vivos
lo que constituye una gran preocupación para la humanidad.
INTRODUCCIÓN
Los problemas ambientales constituyen una gran problemática en la sociedad, los
mismos están motivados por el actuar del hombre, quienes realizan acciones
tendentes a vulnerar el medio ambiente. En la actualidad son muchos los que nos
afectan; enfatizando nuestra investigación en el cambio climático por ser en
nuestros días un tema recurrente y de gran preocupación, que está directamente
vinculado a la actividad humana.
Esta temática ha sido tratada en literaturas foráneas por autores como Anna
Martínez Guallar en su trabajo “Derecho Ambiental. El Cambio Climático en Reino
Unido” y Gustavo Alanis-Ortega en “El Primer Paso de una Política Climática
Integral en México” los que han sustentado su investigación en el estudio de
aportes legislativos en materia de cambio climático, en países como México y
Reino Unido. Se ha abordado dicha temática desde diferentes perspectivas
regulatorias y programáticas, con la finalidad de crear sus propios marcos
regulatorios para afrontar este problema ambiental. En el escenario nacional
debemos resaltar a autores tales como, Eduardo Orlando Planos Gutiérrez, Roger
Rivero Vegas, Vladimir Guevara Velazco y Aida Hernández Zanuy, los que
desarrollaron el trabajo “Impacto del Cambio Climático y Medidas de Adaptación
en Cuba”, donde realizan un análisis científico-estadístico del impacto del cambio
climático en Cuba; pero no proponen presupuestos normativos para la mitigación
de los mismos[5], además se encuentra el trabajo de Judith Cid Soto y la MsC.
Leisy Pérez López las que trataron el tema “Mecanismos jurídicos para afrontar el
cambio climático. Consideraciones acerca de su regulación”, el mismo estudia
diferentes mecanismos jurídicos para minimizar el cambio climático en el plano
nacional e internacional; debido a la importancia que reviste la protección al medio
ambiente y el tratamiento del cambio climático, esta investigación además va
dirigida hacia el análisis de las normas jurídicas que regulan estas cuestiones.
La palabra clima viene del griego klima, que hace referencia a la inclinación del
Sol. Es el conjunto de condiciones ambientales de un lugar determinado, y se
caracteriza por ser el promedio de los estados del tiempo, calculado mediante
observaciones realizadas durante un largo período (entre 10 y 30 años). El clima
describe la sucesión periódica de los distintos tipos de tiempo que se repiten en
una región de forma característica durante un transcurso amplio de tiempo.
Este ejerce una gran influencia sobre nuestras vidas y la naturaleza, la fauna y la
flora de cada lugar, el agua, los cultivos, la manera de ser y la cultura de cada
rincón del mundo, dependen, entre otros factores, del clima local. Su influencia es
fácilmente perceptible en las actividades humanas basadas directamente en los
ecosistemas, sobre las que descansa la existencia de la humanidad y la economía
de cada nación[6] . Por tanto es comprensible que el cambio climático afecte
todas las áreas de la naturaleza, incluyendo la vida de los seres humanos.
Podemos decir que las principales diferencias entre calentamiento global y cambio
climático son:
Pero el que más influencia tiene hoy en día, de acuerdo con la Convención Marco
de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático del 9 de mayo de 1992, es el
que tiene origen en causas antropogénicas, siendo este último, objeto de nuestra
investigación.
Esta corriente basa sus fundamentos en que aún no existen pruebas concluyentes
sobre la incidencia humana en el calentamiento global, y que en consecuencia, es
altamente probable que el fenómeno actual correspondiera al ciclo regular de
enfriamiento-calentamiento que sufre la tierra periódicamente. Sin embargo, este
punto de vista se encuentra extremadamente reducido en la actualidad, hasta el
punto en que algunos científicos lo consideran pseudociencia. [12]
Los científicos han estimado casi sin margen de error que la aceleración en el
calentamiento global se debe entre otras causas a los gases de efecto invernadero
de origen antropogénico. Cuando las consecuencias del cambio en el clima son
producidas por procesos propios de la naturaleza, esta tiende a establecer un
equilibrio en el medio ambiente por sí misma. Sin embargo, los efectos adversos
sobre el clima que se producen como resultado de la acción humana son
irreversibles, lo que constituye un estigma con el que deben cargar las próximas
generaciones.
Además es válido señalar que se han vuelto cada vez más comunes las olas de
calor severas, y esto se debe a que los gases de efecto invernadero están
atrapados dentro en la atmósfera. Los estudios indican que las mismas seguirán
creciendo en los próximos años y en el futuro. Esto dará lugar a un aumento de
enfermedades relacionadas con el calor y por consiguiente desencadenaría
innumerables incendios.
Cuando la temperatura de los océanos se vuelve más cálida, las tormentas son
más intensas. El calentamiento global propiciará que las tormentas puedan llegar
a ser extremadamente graves. El agua caliente del océano alimentará la fuerza de
las tormentas y esto tendrá como consecuencia un mayor número de huracanes
extremadamente devastadores. Efectos como estos se están sintiendo hoy pues
en los últimos 30 años, la gravedad y número de ciclones, huracanes y tormentas
han aumentado y se han casi duplicado. Esto conduce a inundaciones, pérdida de
vidas, así como daños a la propiedad. Debido al cambio climático ha aumentado la
frecuencia de los huracanes más fuertes en una relación de 13 a 17, lo que viene
a ser un aumento del 31%[16] .
Las sequías, es otro efecto devastador del cambio climático, el cual ya está
causando estragos en varias partes de nuestro planeta. Este se está calentando y,
a su vez disminuye el agua dulce, lo que lleva a malas condiciones en la
agricultura. Hay una gran escasez de agua que está causando dificultades en la
producción mundial de alimentos y el hambre se está haciendo cada vez más
generalizada. Hay lagos históricos que están desapareciendo por todo el mundo,
como el caso del Poyang (el mayor de China), el Poopó (Bolivia) o el Mar de
Aral[17] .
Las plantas y los animales mueren o se trasladan a otros hábitats “no nativos”,
cuando los ecosistemas de los que dependen para sobrevivir; como los arrecifes
de coral, se ven amenazados por la influencia del calentamiento de la temperatura
del mar y el agua ácida. Debido a los cambios que se producen en el clima, la
forma de vida de todos los seres vivos se afecta considerablemente de manera en
que en algunos de los casos los seres humanos deberán migrar, resultando en
una mayor competencia y la guerra por la escasa cantidad de recursos naturales
para la satisfacción de sus necesidades socioeconómicas y culturales.
Las barreras de coral están siendo una de las grandes perjudicadas, el aumento
de temperatura del agua está provocando que se vaya destruyendo su
ecosistema. Si no se pone remedio podrían desaparecer para 2050, aunque hoy
día ya se han perdido muchas zonas que se consideran irrecuperables.
Podemos agregar además que el cambio climático es un hecho social, puesto que
sus causas están dadas en gran medida a las actividades humanas; igualmente
son las sociedades globales y específicas, así como las personas que componen
esas sociedades, quienes finalmente van a sufrir sus consecuencias ya sea
directa o indirectamente a través del cambio del medio biogeofísico. Es un hecho
social también por razón de que su solución o resolución, no puede hacerse por la
naturaleza, sino por la sociedad.
Por esta razón, es preciso abordar el análisis del impacto social del cambio
climático de manera amplia, incluyendo las diversas esferas que componen las
sociedades.
Existen zonas en las que son altamente vulnerables los asentamientos urbanos
oficiosos con elevada densidad de población, sin poder contar con refugios para la
evacuación, con un escaso acceso a recursos tales como agua potable y servicios
sanitarios públicos, así como poca capacidad de adaptación. Ejemplo de ello: en
Europa, las inundaciones constituyen el 43% de todas las catástrofes acontecidas
en el período 1998-2002[22].
La ruta del dinero ha impedido alcanzar los acuerdos que requiere la gravedad del
cambio climático, tampoco disponen del financiamiento que necesitan los países
más pobres para adaptarse a sus efectos actuales y futuros.
Como expresara Fidel: “Son los países desarrollados los que han contaminado la
atmósfera, los que han saturado la atmósfera de dióxido de carbono y las
consecuencias la están pagando los pobres”. (…) “La solución no puede ser
impedir el desarrollo a los que más lo necesitan, lo real es que todo lo que
contribuya hoy al subdesarrollo y la pobreza constituya una violación flagrante de
la ecología”[23].
El cambio climático posee innumerables impactos a nivel mundial los que pueden
observarse en cuanto a su repercusión en el aumento del nivel del mar, las olas de
calor, las tormentas, la sequía, las especies en peligro de extinción, las
enfermedades, la desaparición de glaciares, las guerras, la inestabilidad
económica y la destrucción de los ecosistemas, además de poseer un impacto en
la estructura social y política, conflictos, normas y valores sociales. Aunque es
necesario aclarar que muchas de estas problemáticas son causa-efecto, es decir
en ocasiones la deforestación, la sequía son causas provocadas por la actividad
humana y en otras ocasiones efectos del cambio climático natural o
antropocéntrico, denotando el carácter dialéctico de esa relación causa-efecto. Por
tales razones es preciso estudiar su regulación jurídica internacional.
2. Todos los seres humanos deben tener el mismo acceso a una cantidad total de
emisiones de gases de invernadero que puede soportar la atmósfera de manera
sustentable.
Con sólo el 20 por ciento de la población mundial, ellas consumen las dos terceras
partes de la energía que se produce en el mundo. Han envenenado el aire, han
debilitado y perforado la capa de ozono, han saturado la atmósfera de gases que
alteran las condiciones climáticas con efectos catastróficos que ya empezamos a
padecer.
Si se quiere salvar a la humanidad de esa autodestrucción, hay que distribuir
mejor las riquezas y las tecnologías disponibles en el planeta. Menos lujo y menos
despilfarro en unos pocos países para que haya menos pobreza y menos hambre
en gran parte de la Tierra. No más transferencias al Tercer Mundo de estilos de
vida y hábitos de consumo que arruinan el Medio Ambiente.
Sin duda alguna nuestro Comandante avizoró desde fecha temprana como el
cambio climático se convertiría en uno de los problemas que afectaría la
humanidad en el siglo XXI.
Han transcurrido más de 20 años desde que fue celebrada esta Cumbre y se
aprecia que no ha habido cambios significativos en el actuar de la mayoría de los
países industrializados. La globalización neoliberal unido a la apertura comercial y
a la desregulación financiera ha traído como consecuencia un gran aumento en el
deterioro ambiental, la elevación de los niveles de desigualdad entre las naciones
del primer mundo y las del Tercer Mundo, lo que ha llevado consigo la viabilidad
de alcanzar un desarrollo sustentable. Esta situación resulta enormemente
contradictoria a los principios y acuerdos tomados en Río 1992.