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Compendio Unidad 4. Fundamentos Curriculares.
Compendio Unidad 4. Fundamentos Curriculares.
Compendio Unidad 4. Fundamentos Curriculares.
Fundamentos curriculares
3 créditos
Profesor Autor:
Ing. Silvia Suástegui S.
Titulaciones Semestre
Tabla de contenidos
Resultado de aprendizaje de la asignatura .......................................................................3
Unidad 4. Necesidad de la innovación curricular ..............................................................3
4.1. Dimensiones del currículo ..........................................................................................3
4.1.1. La dimensión diseño curricular. ..............................................................................3
4.1.1.1. Tareas de la dimensión diseño curricular: ...........................................................4
4.1.2. La dimensión práctica curricular .............................................................................7
4.1.2.1. Pasos para llevar a cabo con efectividad el curriculum .....................................9
4.1.2.2. Actividades para la creación de condiciones para la ejecución del curriculum: .9
4.1.2.3. La aplicación, desarrollo o puesta en práctica del curriculum ...................... 10
4.1.3. La dimensión evaluación curricular. ...................................................................... 12
4.1.3.1. Principales elementos a tener en cuenta al diseñar la evaluación curricular: 12
4.2. La innovación educativa curricular ........................................................................... 13
4.2.1. ¿Innovación, cambio o reforma?........................................................................... 13
4.2.1.1. El concepto de innovación educativa ................................................................ 15
4.2.2. Perspectivas vs modelos en innovación educativa .............................................. 15
4.2.3. Las dimensiones de la innovación curricular ........................................................ 17
4.2.3.1. Programas innovadores significativos en el ámbito curricular .......................... 19
4.2.3.2. Concepción de la innovación curricular para la mejora de las prácticas
pedagógicas .................................................................................................................... 20
4.2.3.3. Aspectos que tomar en consideración para que los proyectos de innovación
curricular puedan ser espacios de experimentación....................................................... 23
4.2.3.4. Principios que podrían orientar los proyectos curriculares como estrategia
innovadora ....................................................................................................................... 24
4.2.4. Consideraciones respecto al cambio educativo ................................................... 24
4.2.4.1. Papel del proceso de cambio en los procesos de innovación y reformas
curriculares ...................................................................................................................... 25
Materiales Complementarios Unidad 4 ........................................................................... 26
2
Resultado de aprendizaje de la asignatura
4
indicadores para diagnosticar la práctica. El contenido de esta tarea permite la
realización de la exploración de la realidad para determinar el contexto y
situación existente en las diferentes fuentes curriculares.
Se explora los sujetos del proceso de enseñanza-aprendizaje, sus cualidades,
motivaciones, conocimientos previos, nivel de desarrollo intelectual, preparación
profesional, necesidades, intereses, etc. Se incluye aquí la exploración de los
recursos humanos para enfrentar el proceso curricular. En general se explora la
sociedad en sus condiciones económicas, sociopolíticas, ideológicas, culturales,
tanto en su dimensión social general como comunitaria y en particular las
instituciones donde se debe insertar el egresado, sus requisitos, características,
perspectivas de progreso, etc.
Estos elementos deben ofrecer las bases sobre las cuales se debe diseñar la
concepción curricular. Debe tenerse en cuenta también el nivel desarrollo de la
ciencia y su tendencia, el desarrollo de la información, esclarecimiento de las
metodologías de la enseñanza, posibilidades de actualización, etc. Se
diagnostica además el currículum vigente, su historia, contenidos, contextos,
potencialidades, efectividad en la formación de los alumnos, la estructura
curricular, su vínculo con la vida, etc. Para realizar la exploración se utilizan
fuentes documentales, los expertos, los directivos, el proceso de enseñanza-
aprendizaje, la literatura científica, etc.
Los elementos que se obtienen de la exploración permiten caracterizar y evaluar
la situación real, sobre la cual se debe diseñar y en su integración con el estudio
de los fundamentos teóricos posibilita pasar a un tercer momento dentro de esta
etapa que consiste en la determinación de problemas y necesidades. En este
momento se determinan los conflictos de diversas índoles que se producen en
la realidad, por ejemplo:
- Lo que se aprende y lo que se necesita.
- Lo que se enseña y lo que se aprende.
- Lo que se logra y la realidad, entre otras
Estos conflictos se clasifican, se jerarquizan y se determinan los problemas que
deben ser resueltos en el proyecto curricular. Del estudio anterior también debe
surgir un listado de necesidades e intereses de los sujetos a formar que deben
ser tenidos en cuenta en el currículum a desarrollar. De todo esto se deriva que
en la tarea de diagnóstico de problemas y necesidades se pueden distinguir tres
momentos:
1. Estudio del marco teórico.
2. Exploración de situaciones reales.
3. Determinación de problemas y necesidades.
El resultado de esta tarea debe quedar plasmado en una breve caracterización
de la situación explorada y los problemas y necesidades a resolver.
5
2da. Modelación del currículum.
En esta tarea se precisa la conceptualización del modelo, es decir, se asumen
posiciones en los diferentes referentes teóricos en relación con la realidad
existente. Se explícita cual es el criterio de sociedad, hombre, educación,
maestro, alumno, etc. Se caracteriza el tipo de currículum, el enfoque curricular
que se ha escogido. Un momento importante de la concreción de esta tarea es
la determinación del perfil de salida expresado en objetivos terminales de
cualquiera de los niveles que se diseñe. El perfil de salida se determina a partir
de:
Bases socioeconómicas, políticas, ideológicas, culturales en relación con la
realidad social y comunitaria.
Necesidades sociales.
Políticas de organismos e instituciones.
Identificación del futuro del egresado, campos de actuación, cualidades,
habilidades y conocimientos necesarios para su actuación y desarrollo
perspectivo.
Estos elementos deben quedar expresados de forma integrada en objetivos para
cualquiera de los niveles que se diseña. Por la importancia que tiene la
determinación del perfil del egresado y la concepción de los planes de estudio
para el resto de la modelación se amplía sobre su teoría y metodología al final
de este capítulo.
La modelación del currículum incluye una tarea de mucha importancia para el
proceso curricular y es la determinación de los contenidos necesarios para
alcanzar los objetivos terminales. Se entiende por determinación de contenidos
la selección de los conocimientos, habilidades y cualidades que deben quedar
expresados en programas de módulos, disciplinas, asignaturas, programas
directores, componentes, de acuerdo al criterio de estructuración que se asuma
y el tipo de currículum adoptado, precisados al nivel que se está diseñando.
Además de los contenidos se debe concebir la metodología a utilizar para el
desarrollo curricular. La metodología responderá al nivel de concreción del
diseño que se esté elaborando, de tal forma que si se trata de un plan de estudio
la metodología se refiere a como estructurar y evaluar el mismo, así mismo si se
trata de un módulo, disciplina, asignatura, una unidad didáctica, un componente,
etc., debe quedar revelada la forma de desarrollar y evaluar su aplicación
práctica. En la medida que la concepción es de currículum cerrado o abierto, la
responsabilidad de determinar contenidos y metodologías recaerá en los niveles
macro, meso y micro de concreción de diseño curricular.
En la tarea de modelación se pueden distinguir tres momentos fundamentales.
6
1. Conceptualización del modelo.
2. Identificación del perfil del egresado o los objetivos terminales.
3. Determinación de los contenidos y la metodología.
El resultado de esta tarea debe quedar plasmado en documentos en los que
están definidas las posiciones de partida en el plano de la caracterización del
currículum del nivel que se trate; los objetivos a alcanzar; la relación de los
conocimientos, habilidades, cualidades organizados en programas o planes de
acuerdo con la estructura curricular que se asuma, del nivel de que se trate y de
lo que se esté diseñando; y las orientaciones metodológicas para la puesta en
práctica.
8
esenciales de un proceso superior que en el modo de actuación profesional que
es el autoperfeccionamiento (Reflexiones sobre una Teoría y una práctica.
Propuesta de una pedagoga cubana. V. Páez Suárez. 1977. Editado por el
Instituto Superior Privado. José‚ L. Bustamante y Rivero. Arequipa. Perú.)
Esta posición permite percatarnos de que cuando relacionamos las dimensiones,
el autoperfeccionamiento constituye uno de los núcleos básicos del desempeño
profesional, porque opera sobre la esfera de la regulación, las significaciones,
los motivos, las necesidades de tomas de decisiones y la evolución de los
significados (Labarrere Sarduy Alberto, 1993)
La ejecución dinamiza procesos de autoperfeccionamiento que influyen en las
relaciones de comunicación y los estilos de dirección, sobre la destreza y
suficiencia profesional, es en resumen la implicación reflexiva y autorreflexiva del
docente en su desempeño profesional y educación permanente.
Este modo de actuación es posible potenciarlo desde la participación de todos
los docentes en todas las dimensiones curriculares.
Cuando se piensa en la práctica curricular, el pensamiento se dirige al nivel que
nos es más cercano, el nivel micro, es decir el que se realiza en la institución, en
las disciplinas, en las asignaturas y en las clases, los protagonistas de
esta práctica son los profesores y los alumnos, que por lo general en esta
fase pueden desempeñar un rol más o menos activo en dependencia de las
concepciones de la institución de que se trate. Relacionado con esta
reflexión es que consideramos la necesidad cada vez más creciente de que el
profesor, a partir de su propia práctica y vinculado sistemáticamente al estudio
de los principales presupuestos teóricos, pueda aportar y sugerir
transformaciones al currículum.
Esto se logra cuando el profesor involucra a colegas, estudiantes y otros
miembros de la comunidad educativa al proceso de desarrollo curricular. Por eso
es razonable el criterio de Stenhouse cuando afirma "Lo deseable en innovación
educativa no consiste en que perfeccionemos tácticas para hacer progresar
nuestra causa, sino en que mejoremos nuestra capacidad de someter a crítica
nuestra práctica a la luz de nuestras creencias y a la luz de nuestra práctica".
La labor del profesor en la dimensión del desarrollo curricular se caracteriza por
enfrentar constantemente las tareas de diseño, adecuación y rediseño y esto
último como el resultado de la reelaboración del diseño donde se valora el
modelo inicial en su puesta en práctica a partir de su investigación curricular. El
rediseño tiene una estrecha relación con el diseño por cuanto sería repetir el
programa de diseño curricular de forma total o en algunas de sus partes con la
finalidad de perfeccionarlo.
La adecuación es un proceso que se realiza a nivel meso y se concreta en la
elaboración de diseños curriculares que respondan a las características
9
concretas de la comunidad educativa, no se trata de elaborar un nuevo
currículum, sino de enriquecer el existente con el aporte que ofrece la realidad
inmediata de forma tal que cumpla con las exigencias nacionales en términos de
comprensión e incorporación al currículum de las realidades culturales locales.
En el texto Introducción al Curriculum de Bolaño y Molina los autores realizan
una propuesta metodológica para llevar a cabo con efectividad el curriculum a
nivel meso e institucional.
adecuación.
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5. Reflexión de lo que se espera como resultado de la implementación del plan
de estudio, así como las principales direcciones del plan metodológico.
6. Establecimiento de los colectivos de profesores que atenderán los diferentes
grados, objetivos y tareas principales en colaboración con la comunidad
educativa.
7. Desarrollo de los contenidos curriculares con sus actividades de aprendizaje
tanto los programados como aquellos que surjan por las necesidades
estudiantiles.
8. Vinculación de la actividad investigativa con la actividad de servicio (práctica)
desde el propio desarrollo académico.
Estos elementos están también muy relacionados con la función profesional del
docente, entre las funciones más pertinentes en el desempeño profesional del
docente sobresalen las siguientes:
1- La previsión (diseño)
2- La aplicación (desarrollo del curriculum)
3- La investigación sobre la concepción y práctica curricular.
La previsión. Una previsión fundamentada y bien estructurada en la acción es
esencial para la enseñanza y constituye una tarea de la práctica cotidiana del
maestro. Predecir la acción da posibilidades al desarrollo profesional en la
medida que sea más abierto el proceso de decisión y diseño curricular. En esta
función hay una anticipación a la acción, buscando coherencia entre la teoría y
la práctica, el pensamiento y la acción.
11
Integrar la investigación evaluativa y la crítica sobre el modelo de
evaluación diseñado o aplicado.
Investigación sobre la concepción y la práctica curricular.
La práctica es validación de la teoría y generalización de nuevos conocimientos.
La investigación-acción-indagación-colaboración-aprendizaje colaborativo tiene
en común el compromiso de transformar la realidad e integrar teoría y práctica,
previsión del profesor, colectivo del centro, estudiantes y comunidad en esa
transformación. El diseño y la aplicación se completan y se consolidan mediante
la investigación rigurosa; así estas funciones se complementan entre sí y son la
base de la innovación educativa. La innovación requiere de una actividad de
integración permanente, que es imprescindible para el desarrollo de la
profesionalización.
En estrecha relación con el vínculo que existe entre los elementos valorados
anteriormente está el desarrollo profesional que no es más que un proceso de
formación continua a lo largo de toda la vida profesional, que produce cambios y
transformaciones positivas en las conductas docentes, en las formas de pensar,
valorar y actuar sobre la enseñanza. En este proceso pueden destacarse como
principales aspectos:
Desarrollo pedagógico (aquí se destaca la necesidad de que todo programa
de desarrollo profesoral debe dirigirse a enfrentar al docente a su propia
práctica).
Desarrollo psicológico (madurez personal, dominio de habilidades y
estrategias hacia la solución de problemas y sobre todo crear redes de
comunicación y apoyo para comprender los fenómenos educativos).
Desempeña un papel importante la experiencia previa de aprendizaje, o sea la
experiencia previa sobre otros programas. La retroalimentación es necesaria
para la fijación de todo aprendizaje: todo proceso de aprendizaje exige una
puesta en práctica.
Introducir una novedad en la práctica diaria supone, de una parte, saber trasladar
una teoría o metodología a formas de hacer en la actividad del aula y por otra
parte superar la situación de incertidumbre que se genera al abordar algo
desconocido sin saber si obtendrá éxito.
En Cuba, como una alternativa se implementa el desarrollo profesional
cooperativo, como método y estilo de trabajo para promover la transformación
del sistema educacional, el cual cumple las siguientes funciones:
1. Promueve el trabajo de unos niveles con otros para llevar a cabo la acción
transformadora en las diferentes esferas.
2. Sirve para organizar la capacitación y adiestramiento del personal de los
diferentes niveles, en la búsqueda y valoración de los principales problemas,
las insuficiencias metodológicas y la elaboración e implementación de
12
recomendaciones que den solución a ellas, en correspondencia con las
condiciones concretas locales, para promover el cambio educativo.
3. Actúa como método universal por el grado de generalidad que tiene en su
aplicación a cualquier esfera de la actividad educacional.
Este método se caracteriza por el alto grado de actividad mental y práctica y el
nivel de participación conjunta de entrenados y entrenadores; va encaminado al
desarrollo del estilo reflexivo, por lo que propicia en los docentes el pensamiento
anticipado de las acciones a realizar, las alternativas de que dispone para
seleccionar las mejores y valorar los posibles resultados; tiene un enfoque
preventivo y es flexible en el empleo de procedimientos y alternativas de
organización, así como , en las formas de pensar y actuar. Es sistemático,
motivador, valorativo y tiene efecto multiplicador de las experiencias y los
resultados positivos alcanzados en diferentes lugares. La estructura lógica del
método generalmente es: el diagnóstico, la demostración, la consolidación, el
control y la evaluación.
que se usarán, procurando que sean objetivos, válidos y confiables. Por eso las
instituciones deben desarrollar también una metaevaluación con la participación
de todos los implicados.
4.2. La innovación educativa curricular
(Tomado de MARGALEF GARCÍA, LEONOR, & ARENAS MARTIJA, ANDONI (2006). ¿QUÉ
ENTENDEMOS POR INNOVACIÓN EDUCATIVA? A PRÓPOSITO DEL DESARROLLO
14
CURRICULAR. Perspectiva Educacional, Formación de Profesores, (47),13-31. [fecha de
Consulta 13 de febrero de 2021]. ISSN: 0716-0488. Disponible en:
https://www.redalyc.org/articulo.oa?id=3333/333328828002)
y que esa novedad sea asimilada por ese alguien. Pero ¿qué relación se puede
establecer con el cambio educativo? ¿Qué se entiende por cambio educativo?
El cambio siempre implica una alteración, una transformación de un objeto, de
una realidad, de una práctica o de una situación educativa. Por ello, en el caso
de la innovación educativa se considera que el cambio es la causa y el fin de una
innovación, es decir, se innova para generar cambios. Havelock y Hibernan
(1980) consideran que la innovación educativa es el estudio de las estrategias o
15
procesos de cambio.
Se han realizado diferentes clasificaciones de las innovaciones según el
contenido de estas cuando éstas se han asociado a los cambios educativos.
Siguiendo a Elmore (1990) podemos distinguir entre cambios estructurales:
afectan a todo el sistema educativo o a la configuración de los distintos niveles;
cambios curriculares: relacionados con el diseño y desarrollo del curriculum, con
las estrategias de enseñanza, con los componentes del currículo (cambios en
los materiales curriculares, utilización de nuevos enfoques de enseñanza);
cambios profesionales referidos a la formación, selección y desarrollo profesional
de los docentes: cambios políticos-sociales: afectan a la distribución del poder
en educación y a la relación de los agentes sociales con la enseñanza escolar.
Y ¿cómo se relaciona con el concepto de reforma? Reforma es un cambio
propiciado por la Administración Educativa y que afecta al sistema educativo en
su conjunto, bien a su estructura, a sus fines o a su funcionamiento. Es decir, un
cambio generado -a veces impuesto- de arriba hacia abajo, un cambio político
que pretende dar respuestas a necesidades sociales, por ende, estamos ante un
cambio planificado, las reformas se han asociado y vinculado a objetivos sociales
que los responsables políticos consideran prioritarios, de allí la incesante
proliferación de reformas educativas que en las últimas décadas se han sucedido
en diversos países haciendo hincapié en su carácter político y gubernamental
(Coll. 2003).
Para Ángulo Rasco (1993) reforma es un concepto fuertemente ideológico
porque viene a representar los ideales políticos que simbolizan los intereses
estatales, sociales y económicos de una nación, de parte de ella o de quienes
gobiernan. Las reformas poseen un carácter más amplio y abarcador y se
refieren a todo el sistema educativo, por ello dada la extensión y la intensidad del
cambio que proponen son procesos a más largo plazo, conllevan muchas
dificultades en su puesta en práctica, requieren diferentes tipos de medios y
condiciones para ser efectivas, lo que hace que muchos sostengan que cuando
se llevan a la práctica ya están desactualizadas y habría que comenzar de nuevo
con la reforma de la reforma.
16
De este modo, cuando hablamos de innovación educativa aparecen fuertemente
entremezcladas las nociones de cambio y reforma. En este artículo el concepto
de innovación educativa lo entendemos a partir de diversas características.
4.2.1.1. El concepto de innovación educativa:
Supone una idea percibida como novedosa por alguien, y a su vez incluye
la aceptación de dicha novedad
Implica un cambio que busca la mejora de una práctica educativa.
Es un esfuerzo deliberado y planificado encaminado a la mejora
cualitativa de los procesos educativos.
Conlleva un aprendizaje para quienes se implican activamente en el
proceso de innovación.
Está relacionado con intereses económicos, sociales e ideológicos que
influyen en todo proceso de innovación.
Es difícil separar estos ámbitos, cambio y reforma, tanto en el discurso educativo
como en la práctica pedagógica, ya que en el caso de las innovaciones
educativas suelen estar íntimamente relacionados, es fácil contundirse cuando
se habla de “una reforma para el cambio” o de “los cambios de las reformas”. Lo
cierto es que en el discurso dominante sigue imperando la concepción de
“reforma a gran escala”, como bien indica Fullan (2004) a pesar de décadas de
investigaciones sobre los factores de éxito del cambio y los procesos de mejora
e institucionalización de los cambios educativos.
Por cierto, que plantearnos una innovación, sobre todo con el propósito de
realizar cambios educativos, no supone ni garantiza que estas innovaciones se
realicen y que el cambio se logre (Hargreaves. 2005).
Aquí nos centraremos más en el ámbito de las innovaciones curriculares. En
primer lugar, se hará una breve referencia a los modelos de innovación, ya que
independientemente del contenido de la innovación, para comprender los
procesos de innovación educativa es necesario tener en cuenta las perspectivas
que sustentan los ideales y las teorías que se han ido desarrollando en torno a
la innovación educativa.
4.2.2. Perspectivas vs modelos en innovación educativa
Se han desarrollado diversos modelos de innovación, clásicamente estos
modelos se han conocido como: Investigación. Desarrollo y Difusión; Interacción
Social y Solución de Problemas. No es este el lugar para desarrollarlos, pero lo
importante es destacar que en todos ellos subyace un denominador común: la
sumisión del receptor y el grado de control ejercido por los agentes externos. En
definitiva, el poder sigue estando distribuido desigualmente entre innovadores y
receptores, o por lo menos entre los creadores de las innovaciones y quienes
tienen que llevarlas adelante.
17
Por ello, Olson (1992) tiene en cuenta las críticas realizadas y las limitaciones
que deben superarse, especialmente las relaciones entre los agentes implicados
y la dimensión cultural de todo proceso de innovación y propone un Modelo de
Diálogo que se encuentra dentro de una perspectiva cultural, siendo su
preocupación esencial no el cambio por el cambio sino saber por qué se cambia.
La mejora en el aula y en las escuelas comienza cuando los profesores
confrontan el significado de su práctica a través del diálogo. El cambio supone
un diálogo entre lo viejo y lo nuevo, entre la teoría y la práctica (Kemmis. 1999:
Perrenoud. 2004). Para Olson el cambio implica tanto valores como aspectos
técnicos. Este proceso supone también un diálogo entre los prácticos y los
agentes externos basados en una tarea de colaboración. Si se realiza un
verdadero diálogo que se asiente en una reflexión crítica se crean no solo las
bases para un desarrollo profesional, sino para un cambio sostenible y profundo
(Hargreaves. 2005; Fullan. 2004; Elliot. 1993).
Pareciera que el aporte de House (1988) resulta más clarificador porque propone
hablar de perspectivas a través de las cuales se pueden entender los fenómenos
teóricos y prácticos de la innovación. Considera que lo que realmente ilumina el
campo de la innovación es la construcción y proyección explícita de las diferentes
perspectivas en las que se agrupan y sustentan los hechos, valores y
presupuestos. Cada perspectiva se conviene en un marco de referencia para
entender una línea de acción y trabajo: "Se basan más en el acuerdo profesional
acerca de qué es posible, relevante o valioso, que en la convergencia científica
a propósito de qué es verdad (...). Es un modo de ver un problema, no un
conjunto rígido de reglas y procedimientos" (House, 1988:8).
La perspectiva tecnológica surge en el contexto histórico-político norteamericano
con el auge de la industria, la agricultura, la tecnología espacial y militar y el auge
de las investigaciones tecnológicas que se traducen al campo educativo. La
realidad educativa podía ser mejorada en eficiencia, eficacia y productividad con
un conocimiento altamente tecnológico y a través de procesos de innovación
concebidos desde la tecnología. La enseñanza es una técnica, y por ello el
cambio y solución de sus problemas y necesidades son susceptibles de
tratamiento científico En tal sentido existe una preocupación por encontrar
nuevos métodos de enseñanza y en producir nuevos materiales que mejoren el
aprendizaje de los alumnos.
La perspectiva cultural considera que toda innovación tiene que hacer frente a
una interacción cultural, a un choque entre culturas y subculturas. La innovación
representa un conjunto de significados y valores culturales propios y compartidos
Por ello, es muy difícil prever los efectos de la innovación. Cabe esperar
resultados complejos e incluso contradictorios. Esta perspectiva revaloriza la
divergencia valorativa y el conflicto entre las culturas. Asume una ética relativista.
La perspectiva política asume que las innovaciones conllevan siempre el
18
conflicto y en el mejor de los casos lograr el acuerdo o consenso negociado.
Estos se asientan en intereses dispares y contrapuestos que cada grupo
sustenta y de acuerdo con el poder que cada uno busca para imponer una nueva
situación, para defender su autonomía o bien para resguardar el statu quo
vigente. Desde esta perspectiva se puede comprender las relaciones entre las
administraciones, las escuelas y el contexto sociopolítico.
Hargreaves, Earl y otros (2001), agregan una cuarta perspectiva denominada
postmoderna. Desde la misma se reconoce que si el mundo es incierto, complejo
y diverso es imposible conocer por complemento a los seres humanos que se
encuentran implicados en una dinámica de cambio constante. Por ello, es
importante indagar sobre los riesgos y las oportunidades que cada reforma lleva
aparejada.
23
Randi y Corno (2000) han realizado una completa recopilación de los estudios e
investigaciones sobre la innovación educativa y los profesores como
innovadores. Según estas autoras, durante mucho tiempo las investigaciones
han estado centradas en el cambio de la educación y en cómo cumplimentarlo y
se han olvidado de preguntar a los docentes sobre sus perspectivas perdiendo
la oportunidad de aprender de los profesores. Son ellos los que en búsqueda de
respuestas a las situaciones cambiantes de sus aulas transforman las escuelas
y las prácticas educativas.
En esta misma línea abogan diversos estudios e investigaciones que revelan que
el éxito de muchas innovaciones, además de cumplir con lo que indica Elliott de
aunar el desarrollo curricular con el desarrollo profesional y la mejora de los
procesos curriculares, se encuentra en la implicación y compromiso de los
docentes que trabajan en las escuelas para hacer realidad esas prácticas
innovadoras. Se trata de "una implicación en primera persona, individual, por
tanto, pero que se sostiene en la relación con las compañeras y los compañeros
del centro, y también con los de otras escuelas... de participar en la
transformación de la escuela desde dentro" (Blanco, 2005: 374)
En este sentido, para evitar la confusión de que no importan las condiciones y
las estructuras, los apoyos y el contexto ni se trata de dejar librada las
innovaciones al compromiso del profesorado, es que consideramos que la idea
de proyecto curricular, en su sentido de inacabado, de proyección, y como modo
de traspasar el compromiso individual, sigue siendo una alternativa que permite
partir del saber experiencial de los docentes y del reconocimiento de su
profesionalidad. Por ello, reconocemos el potencial innovador de los proyectos
curriculares como estrategia de renovación y cambio en el desarrollo curricular.
Los proyectos curriculares se plantearon en distintos contextos educativos y
propuestas de reformas, especialmente desde la tradición británica y desde una
concepción de desarrollo curricular como investigación, como un espacio pata la
innovación y la profesionalización de los docentes. ¿Pero en qué sentido pueden
considerarse los proyectos curriculares como una estrategia de innovación? La
respuesta estará íntimamente relacionada con la concepción que subyace a la
forma de entender los proyectos curriculares y a los supuestos desde los que se
plantee su elaboración y desarrollo.
En muchas reformas educativas, los Proyectos Curriculares, más que ser una
estrategia que posibiliten la autonomía y el cambio en las prácticas, se han
concebido como una forma de concretar y desarrollar prescripciones reguladas,
prescripciones que no sólo determinan las finalidades de la educación, la propia
concepción de lo que se debe entender por educación y concretamente por
aprendizaje, sino también los objetivos de cada una de las etapas y áreas de
conocimiento, los bloques de contenido, las orientaciones metodológicas y los
criterios de evaluación. Este fue el caso, de la concreción de los proyectos
curriculares de la Ley Orgánica del Sistema Educativo (1990) en España.
24
En el caso de Chile, las orientaciones curriculares para cada sector de
aprendizaje elaboradas por el Ministerio de Educación han sido tomados, en la
mayoría de los casos como "la" forma de desarrollar el currículo. siendo escasos
los establecimientos educacionales que han desarrollados sus propios planes y
programas educativos (PONTIFICIA UNIVERSIDAD CATÓLICA DE
VALPARAÍSO-INSTITUTO DE HISTORIA. 2005).
Desde esta concepción, no se favorecen muchas posibilidades para un
desarrollo cunicular abierto y flexible, sino más bien se trata de la concreción y
adaptación de lo prescrito conforme a la lógica establecida. Por el contrario, no
pensamos que porque existan prescripciones no pueda haber desarrollo
curricular, sino que éstas deberían establecer un marco general en el qué
moverse, un marco que garantice la igualdad de oportunidades y el derecho a la
educación, pero que no determine la estructura, los componentes y las
relaciones que se establecen entre ellos.
El desarrollo curricular, así entendido, sigue atrapado en una concepción
instrumental y tecnológica. A los centros educativos, a los equipos de profesores
se les pide que tomen decisiones, pero en el marco de la adaptación de unos
parámetros ya definidos, de una concepción de enseñanza y aprendizaje que
impregna iodo el currículo. Los Proyectos Curriculares se perciben sólo como
concreción y adaptación y ese es el margen de autonomía que se le concede a
los profesores y justamente esa es la función que se le asigna a los Proyectos:
"los proyectos curriculares consagran la autonomía que permita adoptar las
decisiones capaces de llevar a cabo una enseñanza adaptativa, esto es, una
enseñanza que constituya una respuesta ajustada a las necesidades de los
diversos alumnos (Solé, 1994:22). ¿Esto estimula la elaboración de Proyectos
Curriculares innovadores o simplemente "adaptadores"? ¿Pueden los profesores
cuestionar el currículo oficial, pueden concebir el sentido de escuela y lo que
debe enseñar, desde otros supuestos? ¿El profesorado puede proponer otros
modos de pensar, reflexionar, o solo modos de hacer, pero dentro de un
pensamiento convergente?
Es decir, seguimos en un modo de concebir al profesorado como fieles
adaptadores de las reformas, como indicaban Randi y Corno (2000) en los
estudios dominantes de la implementación y desarrollo de las innovaciones
curriculares.
Es necesario reflexionar sobre las relaciones entre las estrategias de desarrollo
curricular y la innovación. En la concepción de los proyectos curriculares desde
un punto de vista burocrático e instrumental, la estrategia de desarrollo es de
arriba hacia abajo, los profesores tienen que aplicar lo diseñado, en este caso
con margen de autonomía para la adaptación. Los proyectos curriculares con la
regulación específica para su elaboración y en un plazo determinado son una
imposición que genera poco compromiso porque no se percibe como una
necesidad surgida de los propios docentes, y en el caso que nos ocupa, con
25
pocas posibilidades para la renovación pedagógica. Más bien se resalta el
producto, el documento final, y no el proceso como medio de formación e
innovación. Como decía Stenhouse (1984) las escuelas necesitan desarrollarse
como comunidades en lugar de en manos de reformadores, y la clave de ese
desarrollo es una maduración en el arte de la enseñanza de los miembros del
personal docente.
30