Lucas 13.6-9 Completo Revisado
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Cédula: 2.803.526
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2. La ocasión de la parábola
Los destinatarios de la parábola estaban juzgando los pecados de los hombres en base a los sufrimientos en esta
vida. Sin embargo, este punto de vista no es correcto puesto que no se puede juzgar de los pecados de los hombres
a base de lo que puedan sufrir en esta vida, porque muchos son arrojados al horno, no como desecho que debe ser
consumido, sino como oro que tiene que ser refinado, por consiguiente, no hemos de apresurarnos a censurar a
quienes sufren más que sus semejantes, no sea que añadamos aflicción al afligido. Recordemos siempre el
precepto de Jesús: «No juzguéis, para que No seáis juzgados» (Mt. 7:1).
Los judíos pensaban que solo por ser descendientes físicos de Abraham no tendrían necesidad de
arrepentimiento para perdón de pecados, ellos debían reconocer a Jesucristo como el cordero de Dios que quita el
pecado del mundo; pensaban que aquellos que recibieron la muerte por causa de Pilatos le sucedió por su maldad,
ya que ellos no necesitan arrepentirse. Jesús aprovecha estos trágicos sucesos para hacer un llamamiento al
arrepentimiento, y advierte sobre las graves consecuencias que trae consigo la impenitencia: «Si no os arrepentís,
todos pereceréis igualmente» (vv. 3, 5).
3. LA INTERPRETACIÓN DE LA PARÁBOLA.
3.1. TIPO DE LITERATURA.
Evidentemente es una parábola, lo cual, implica la idea de poner una cosa al lado de otra con el propósito de
compararlas, en este caso, la higuera representando al pueblo de Israel (y hoy día a la Iglesia) tanto colectiva como
individualmente y lo que Dios espera de su pueblo.
Vamos a analizar esta parábola siguiendo los lineamientos de Matthew Henry quien trata a esta parábola bajo
tres encabezados: (1) Ventajas que tenía la higuera: plantada en su viña (el mejor terreno)
(2) Lo que su dueño esperaba de ella: vino a buscar fruto.
(3) El desengaño de su expectativa: no lo halló.
(1) Ventajas que tenía la higuera: estaba plantada en la viña (el mejor terreno)
Usando una figura del mundo agrario, muy conocida por todos: la viña que era un lugar elegido por su fertilidad,
separado de los campos circundantes, y cultivado con especial cuidado, con miras sólo a la obtención de frutos, se
plantea un problema central: la relación del hombre con Dios. La higuera representa tanto a Israel como a la
Iglesia y la viña representa el Reino de Dios. A aquel se le ha hecho la propuesta del reino de Dios, ha sido
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constituido por acción divina pueblo del Señor. Dios en persona ha intervenido, ha trabajado como un “propietario
labrador” para brindar los cuidados a su viña, no ha escatimado fatiga, no ha ahorrado empeño.
La viña del Dios Todopoderoso es el pueblo de Israel; los hombres de Judá son su huerto preferido. Él esperaba
justicia, pero encontró ríos de sangre; esperaba rectitud, pero encontró gritos de angustia. La nación judía era
como la higuera sin fruto: tenía la apariencia externa de vida, pero no daba fruto. Juan el Bautista colocó su hacha
a la raíz del árbol (3:9) y Jesús ministró a la nación por tres años, pero todavía no había fruto.
8 Él entonces, respondiendo, le dijo: "Señor, déjala todavía este año, hasta que yo cave alrededor de ella y la
abone. 9 Si da fruto, bien; y si no, la cortarás después".
Dios escogió a la nación judía como pueblo suyo, cercano a Él, y esperaba de este pueblo fruto de obediencia;
pero ellos no correspondieron a la confianza que Dios les había mostrado, sino que, en lugar de acreditar la
profesión que habían hecho (v. Éx. 19:8), la desacreditaron. A consecuencia de ello, Dios determinó justamente
abandonarlos; pero, por intercesión de Cristo, como antes por la de Moisés, les concedió una tregua con
prolongación de misericordia.
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. La sentencia que contra la higuera pronuncia el dueño: «Córtala». ¿Qué otra cosa puede esperarse de un árbol
que no da fruto año tras año? ¿Por qué motivo ha de continuar inutilizando la tierra? ¿Qué razón hay para que
ocupe en la viña un lugar sin provecho?
La intercesión del Viñador a favor de la higuera. Cristo es el Gran Intercesor
Ro 8:34 ¿Quién es el que condenará? Cristo es el que murió; más aún, el que también resucitó, el que además
está a la diestra de Dios,[37] el que también intercede por nosotros.
He 7:25 Por eso puede también salvar perpetuamente a los que por él se acercan a Dios, viviendo siempre para
interceder por ellos.
1 Jn 2:1 Hijitos míos, estas cosas os escribo para que no pequéis. Pero si alguno ha pecado, abogado tenemos
para con el Padre, a Jesucristo, el justo.
Pero también los creyentes han de interceder unos por otros, especialmente, los ministros de Dios, que tienen el
deber de orar por aquellos a quienes van a predicar.
3.2. COMPARACIÓN DE TRADUCCIONES
3.2.1. En el versículo 13:6 las versiones RV95, LBLA y NVI usan la palabra parábola en tanto que TLA habla
de ejemplo como si fuese una ilustración. Además RV95 y LBLA usan la palabra viña mientras que TLA y NVI
hablan del viñedo que es el lugar donde se encuentra la viña.
3.2.2. En el versículo 13:7 las variaciones semánticas son las siguientes:
RV95 LBLA NVI TLA
¡Córtala! ¿Para qué Córtala. ¿Por qué ha de ¡Córtala! ¿Para qué ha de Córtala, pues sólo está
inutilizar también la cansar la tierra?”. ocupar terreno?” ocupando terreno.
tierra?"
En todo caso la idea es la misma: si la higuera es estéril porque no da fruto y además ocupa un terreno fértil
para su propio provecho, es preferible cortarla y sembrar otra que dé fruto. Contextualizando, a día de hoy, evoca
el “creyente” que lo que hace es calentar banco sin preocuparse por su conocimiento de Dios ni su crecimiento
espiritual ni de la convivencia con sus hermanos.
3.2.3. En el versículo 13:8 los matices son:
RV95 LBLA NVI TLA
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Él entonces, El viñador le respondió: “Señor —le contestó el “Señor —le contestó el
respondiendo, le dijo: “Señor, déjala por este año viñador—, déjela todavía viñador—, déjela todavía
"Señor, déjala todavía todavía, hasta que yo cave por un año más, para que por un año más, para que
este año, hasta que yo alrededor de ella, y le eche yo pueda cavar a su yo pueda cavar a su
cave alrededor de ella y la abono, alrededor y echarle abono alrededor y echarle abono.
abone.
Una vez más, pese a los matices de las distintas versiones, el punto es que reflejan la misericordia del viñador
(Cristo) y la disposición de sanarla. Esto se pone de manifiesto en 2 P 3:9
2 P 3:9 El Señor no retarda su promesa, según algunos la tienen por tardanza, sino que es paciente para con
nosotros, no queriendo que ninguno perezca, sino que todos procedan al arrepentimiento
3.2.4. En el versículo 13:9 tenemos:
RV95 LBLA NVI TLA
Si da fruto, bien; y si Si da fruto, bien; y si Así tal vez en adelante dé Si el próximo año da higos,
no, la cortarás después" no, la cortarás después" fruto; si no, córtela la dejará vivir; si no, puede
ordenar que la corten.”»
Aquí se pone de manifiesto que la misericordia y la paciencia de Dios no son infinitas, que el ser humano debe
arrepentirse y dar fruto obedeciendo la palabra de Dios pues de lo contrario la ira de Dios caerá sobre él.
Jn 3:17-18 17 Dios no envió a su Hijo al mundo para condenar al mundo, sino para que el mundo sea salvo por
él. 18 El que en él cree no es condenado; pero el que no cree ya ha sido condenado, porque no ha creído en el
nombre del unigénito Hijo de Dios.
Jn 5:24 "De cierto, de cierto os digo: El que oye mi palabra y cree al que me envió tiene vida eterna, y no vendrá
a condenación, sino que ha pasado de muerte a vida.
Jn 15:5-6 5 "Yo soy la vid, vosotros los pámpanos; el que permanece en mí y yo en él, este lleva mucho fruto,
porque separados de mí nada podéis hacer. 6 El que en mí no permanece, será echado fuera como pámpano, y se
secará; y los recogen, los echan en el fuego y arden.
3.3. ANÁLISIS CONTEXTUAL
3.3.1. Contexto Anterior: (Lucas 13:1-5)
Le cuentan a Cristo la muerte de unos galileos. Al responder, Cristo habla de otro hecho que era como este,
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otro caso de gente afectada por una muerte repentina. Poncio Pilato, el gobernador romano, no fue conocido por
su amabilidad. No se llevaba bien con los judíos y no vacilaba en matar a la gente que se interponía en su
camino. Este incidente quizás ocurrió cuando los judíos protestaron que Pilato tomara dinero del templo. El
gobernador tenía en la multitud que se hallaba en el templo soldados en ropas de civiles y mataron a algunos
judíos desarmados. ¿Dónde estaba Dios cuando sucedió esto? ¿Por qué permitió Dios que mataran a sus fieles
sin advertencia?
Jesús destacó que estas muertes en el templo no eran sino una de las muchas tragedias que ocurren en
nuestro mundo. El mismo Jesús que nos pide arrepentimiento, porque el reino del cielo está a la puerta, nos
pide que nos arrepintamos, porque de lo contrario, pereceremos.
Jn 1:12-13 12 Mas a todos los que lo recibieron, a quienes creen en su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos
de Dios. 13 Estos no nacieron de sangre, ni por voluntad de carne, ni por voluntad de varón, sino de Dios.
Ef 2:10 pues somos hechura suya, creados en Cristo Jesús para buenas obras, las cuales Dios preparó de
antemano para que anduviéramos en ellas.
3.4.3. Escena 3: (El desenlace) La misericordia o compasión del Viñador: Jesucristo (13:8-9)
De acuerdo al Pacto de Redención establecido por el Dios Trino desde antes de la fundación del mundo,
Jesucristo vino a salvar a los perdidos y a dar su vida en rescate por muchos: Por tanto, Dios en su gracia y
misericordia nos da un sinnúmero de oportunidades para que lo busquemos y obtengamos la salvación.
2 P 3:9 El Señor no retarda su promesa, según algunos la tienen por tardanza, sino que es paciente para con
nosotros, no queriendo que ninguno perezca, sino que todos procedan al arrepentimiento
La parábola usa la imagen de la higuera para anunciar la necesidad del Padre de ver en los hombres buenos
frutos y la misericordia que el Padre quiere usar para la humanidad a través de Cristo, y al mismo tiempo revela
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que Dios espera con paciencia la conversión de los malvados, pero cuando llega la hora del castigo, se muestra
inexorable, si no se aplaca con arrepentimiento y conversión.
3.8. APLICACIÓN.
La parábola de la higuera estéril tiene el propósito de reforzar la advertencia que hemos señalado antes: la
higuera estéril, a menos que dé fruto, será cortada. Esta parábola se refiere, en primer lugar, a la nación y al
pueblo judío. Pero, sin duda, también atañe a todos los que disfrutamos de los medios de gracia, y los privilegios
de la iglesia visible. Aunque Dios haya soportado por mucho tiempo nuestra rebeldía y fracasos, podemos esperar
que nos tolere un poco más, pero no podemos tener la esperanza de que siempre soporte nuestras iniquidades si
no nacemos verdaderamente de nuevo.
Miq 7:1 "¡Ay de mí! porque estoy
como cuando han recogido los frutos del verano,
como cuando han rebuscado después de la vendimia
y no queda racimo para comer,
ni uno de esos frutos que tanto desea mi alma.
Jn 15:1-6 1 "Yo soy la vid verdadera y mi Padre es el labrador. 2 Todo pámpano que en mí no lleva fruto, lo
quitará; y todo aquel que lleva fruto, lo limpiará, para que lleve más fruto. 3 Ya vosotros estáis limpios por la
palabra que os he hablado. 4 Permaneced en mí, y yo en vosotros. Como el pámpano no puede llevar fruto por sí
mismo, si no permanece en la vid, así tampoco vosotros, si no permanecéis en mí. 5 "Yo soy la vid, vosotros los
pámpanos; el que permanece en mí y yo en él, este lleva mucho fruto, porque separados de mí nada podéis hacer. 6
El que en mí no permanece, será echado fuera como pámpano, y se secará; y los recogen, los echan en el fuego y
arden.
. Es una gran misericordia de parte de Dios conceder tiempo para arrepentirse a quienes rechazan Su gracia.
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Sólo a la intercesión de Cristo se debe el que muchos árboles infructuosos no sean cortados inmediatamente. Esto
nos invita a preguntarnos: ¿Soy yo como este árbol sin fruto para el Señor? También nos invita a interceder
ante el Señor a favor de otros: «Señor, déjalos todavía este año».
De modo que debemos permanecer en la brecha, para impedir que Dios descargue su ira sobre los árboles de su
viña. Tengamos en cuenta que las oraciones de otros hermanos a favor de nosotros, aun cuando sirvan para
demorar el castigo que merecemos, no han de conseguirnos el perdón de nuestros pecados, a menos que nosotros
mismos reaccionemos con fe, arrepentimiento y oración.
Dicho lo cual, debemos preguntarnos: ¿Qué espera el Señor de nosotros? Que perseveremos en nuestro caminar
con Él.
He 10:39 Pero nosotros no somos de los que retroceden para perdición, sino de los que tienen fe para
preservación del alma.
¿De qué manera debo aplicarla a mi vida? Reconociendo que soy débil, pecador e incapaz de mantenerme
glorificando a Dios sin la ayuda del Espíritu Santo y practicando las disciplinas espirituales para madurez y
crecimiento espiritual.
Jn 15:5 5 "Yo soy la vid, vosotros los pámpanos; el que permanece en mí y yo en él, este lleva mucho fruto,
porque separados de mí nada podéis hacer.
Bibliografía:
1, Análisis de Parábolas - I.B.L.D. Caripe, 2014.
2. Lucas 11-24 - J.C. Ryle, Editorial Peregrino, 2004.
3. Enseñaba por Parábolas – Edesio Sánchez, Sociedades Bíblicas Unidas, 2000.
4. Santa Biblia Reina Valera 95.
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