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Significado H, J, Z Grado 9 Reaa

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Valle de Puerto Cabello, a los 23 días de Kislev del 5.773 (V.·. L.·.

Muy sabio del Capítulo Rosa Cruz “INDEPENDENCIA Y UNIÓN” Nº 12


Respetables Caballeros 1er y 2do Vigilantes.
Inspectores Generales Gr.·. 33º.
Caballeros Kadosch Gr.·. 30º.
Soberanos Príncipes Rosa Cruz.

SIGNIFICADO DE LAS LETRAS H, Z, J EN LA


CAMARA DEL MAESTRO PERFECTO.

Durante la Ceremonia de Iniciación en la cámara de este Grado en el Cual nos


encontramos trabajando, dado el momento el Muy Respetable Caballero 2do Vig.`.
explica al recipiendario las alegorías que se encuentran en el mausoleo, entre las cuales
se encuentran los tres lados de la pirámide cuyos lados representan la Virtud, la Verdad
y la Inmortalidad, se nos explica que una “H” está en el primero de los lados cuya
representación monográfica es la del Maestro HIRAM el Virtuoso; el Segundo lado
contiene una “Z” que es la inicial de Zerval o Maestro Secreto, la Conciencia que nunca
engaña, y en el Tercero se nos muestra una “J”, representación del Maestro Perfecto,
“JEHOVAH” de tal manera que las tres Reunidas en este mismo lugar conforman una
alianza entre los tres Maestros el Simbólico o Practicante de la Virtudes, el Maestro
Secreto cuya Conciencia no le permite engañar jamás a su propio pensamiento
poniéndose de manifiesto que ha sido hecho a imagen y semejante de su Creador.

La primera de ella la “H”, como ya les he mencionado representa al Maestro


Simbólico HIRAM el Virtuoso, equivale a un doctorado en la escuela del saber
esotérico. En los antiguos símbolos, el Maestro está representado por un anciano,
apoyado en su báculo, con una larga barba blanca sobre el pecho, y los ojos profundos y
penetrantes velados por sus cejas de filósofo. En verdad, él es un anciano, pero no en
edad, sino en sabiduría y comprensión, que son las únicas medidas verdaderas de la
edad. A través de años y vidas de trabajo ha hallado al fin el báculo de la vida y la
verdad sobre el cual se apoya. Ya no depende de las palabras de los demás, sino de la
tranquila voz que brota del fondo de su propio ser. No hay posición más gloriosa para
un hombre que la de Maestro Constructor, que se ha levantado por medio del trabajo, a
través de los diversos grados de la conciencia humana. El tiempo es la diferencia de la

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eternidad, que el hombre ha inventado para medir el acontecimiento de los sucesos
humanos.

En los planos espirituales de la Naturaleza, él es el espacio o distancia entre las


etapas de crecimiento espiritual, y por tanto, no puede ser medido por medios
materiales. A menudo un joven alcanza a penetrar en el alto mundo de Gran Maestro de
una Escuela Masónica, en tanto que, muchas veces, un hermano respetado y honorable
pasa en silencio al eterno descanso sin haber conseguido ser admitido en tal umbral. La
vida del Maestro está saturada, pujante y desbordante de la experiencia obtenida en su
lento peregrinaje hacia los máximos peldaños de la escala del conocimiento. Llevándose
consigo todo un cumulo de conocimientos esotéricos productos de sus análisis
exotéricos, relacionados con la evolución del ser en el transcurrir de los años en la
institución masónica.

De esta forma el Maestro en Representación de HIRAM, se prepara para ir a un


plano aún más superior de lo que hasta este momento ha conseguido. En la ceremonia
del Maestro Perfecto la institución le entrega la llave demarcada con la Letra “Z” de
Zerval y la cual en capaz de abrir el Santo Sanctórum, lugar inviolable por todas
aquellas costumbre que se fueron con la materia durante la muerte del Profano en la
recepción del Nuevo Maestro, ellas deben permanecer en el umbral del templo
encadenadas. Para ello el Maestro Perfecto continua una lucha en el perfeccionamiento
del espíritu, teniendo presente que la continuidad de la vida es una ley universal; capaz
de demostrar que aún falta mucho por recorrer.

La conciencia es una significación del maestro secreto, y a través de esta que el


masón se prepara a continuar su carrera dentro de la institución; sus principales
herramientas son el Silencio y el Secreto, a través de las cuales debemos hacer lo que
nos indica nuestro catecismo, Meditar, Pensar y Observar. El Maestro Secreto
representado en sus alegorías por la “Z”, es un hermano que debe tener presente que
dentro su propio templo santum, hay una arca que entre sus aguardos esta la conciencia,
imagen de nuestras acciones y omisiones; consciente o inconscientes. Y como está
inscrito en el cuarto de reflexiones usado para la iniciación masónica, “Tu Conciencia es
tu Juez Inflexible, por ello el crimen jamás queda impugne”, y lo que nos quiere decir es
que podéis engañar a todo el mundo, pero a tu propia conciencia, jamás; y debemos
tener presente que esta a su vez forma parte de una conciencia universal cósmica.

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La virtud y la Conciencia confluyen en un ser aún más superior que ambas por
separadas; y es que ellas juntas forman parte del Grande Arquitecto del Universo, “J”
de JEHOVAH; es la tercera letra que encontramos en la Pirámide del Mausoleo del
Maestro Perfecto, de tal manera que cuando el pensamiento del hombre agita las alas de
la inspiración, cuando destruye las tinieblas de la ignorancia con la fuerza de la razón y
de la lógica, entonces, ciertamente, todo el ser se ve liberado de su miseria, y se inunda
de luz, bañándose en las aguas del poder y de la vida. Esa luz nos permite investigar con
mayor claridad el misterio de la creación y hallar, con la mayor certidumbre, nuestro
puesto en el Gran Plan, puesto que a medida que el hombre desarrolla sus cuerpos
adquiere mayores talentos con los cuales le es posible explorar los Misterios de la
Naturaleza y ahondar en la búsqueda de las ocultas obras de la Divinidad. El Maestro
es liberado por medio de tales poderes, y su conciencia continúa adelante, de conquista
en conquista. Esos altos ideales, esos espirituales conceptos, esas aplicaciones altruistas,
filantrópicas y educadoras del poder del pensamiento, glorifican al Maestro.

Porque estos tres (la Virtud, La Conciencia y el Superior JEHOVAH)


proporcionan el poder de expresar, sea en pensamiento, sea en palabras, sea en acción, y
todo el que puede expresarse por sí mismo es, desde ese instante, libre. Cuando el
hombre puede moldear sus pensamientos, sus emociones y sus más altos ideales,
entonces él es la libertad, porque la ignorancia representa las tinieblas del Caos,
mientras que el conocimiento es la luz del Cosmos.

Él Maestro Perfecto conoce la razón que rige al Cosmos, no conoce las leyes que
moldean su ser, pero sabe que en alguna parte, tras el velo de la humana ignorancia, hay
una luz eterna hacia la cual debemos acercarnos, paso a paso. Con los ojos fijos en el
infinito universo, allá arriba, vamos subiendo lentamente las gradas como candidatos.
Temerosos, temblando todavía por la divina comprobación de lo bueno, llama a la
puerta y aguarda, en silencio, la respuesta que vendrá desde su propio interior

M.`.P.`. SIGGAR VELIS RODRIGUEZ


SOB.`.CAP.`. R.`. C.`. “INDEPENDENCIA Y UNIÓN” Nº 12
VALLE DE PUERTO CABELLO.

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