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Profetas y Culto

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EL CULTO Y LOS PROFETAS.

En muchas ocasiones los profetas denuncian las prácticas cultuales en sus


diversas formas: fiestas peregrinaciones, ofrendas, sacrificios, rezos,etc;
porque se han convertido en un tranquilizante de las conciencias y porque
introducen una falsa idea de Dios. Las personas que oprimen a los pobres o
contempla con indiferencia los sufrimientos del pueblo son las primeras en
acudir a los templos y santuarios pensando que el Señor se complace más en
los actos del culto que en la práctica de la justicia y de la misericordia

Definición de culto:

El Culto es el conjunto de actos sensibles que la comunidad o individuo


realizan para exteriorizar su vida religiosa y entrar en relación con Dios. Es en
el culto sin duda que establece esta relación. Pero, siendo Dios
necesariamente el primero obviamente la acción del hombre es segunda,
entonces el Culto es la respuesta de la criatura a su Creador.

El culto es esencialmente un fenómeno social: aunque practicado por el


individuo, él se realiza segundo reglas determinadas, o más posible en lugares
determinados y generalmente en tiempos determinados.

Nos hemos occidentalizado mucho en nuestro concepto de culto. Por ello, y


para poder entender cual fue la raíz y la base del culto a Dios en el principio, es
importante estudiar los matices y lo que se entendía en Oriente, concretamente
en Israel del concepto de culto.

Lo que destaca y caracteriza el culto israelita, y lo que se opone frente a los


cultos orientales, aún cuando los rito son parecidos, son tres elementos de la
adoración judía:

1. Este es el culto de un Dios único. 2. Este es el culto de un Dios personal que


actúa en la historia 3. Este es un culto sin imagen.

Los términos hebraicos que significan adoración describen una acción o


respuesta al Santo. El A. T. Llama a Dios de “el Santo de Israel” y afirma que él
está “con” o “en medio de” su pueblo.

“SANTO” (Kadosh) Destaca que Dios es otro, trascendente, inaccesible,


misterioso intangible. Pero es llamado “El Santo de Israel en medio (quereb) de
ti.. Is.12:6, Os. 11:9.

Este factor de la santidad de Dios “determina la naturaleza y la dirección del


culto en Israel hasta donde podemos verlos en la historia.
“Regocíjate y canta, moradora de Sión; porque grande es en medio de ti el
Santo de Israel” Isaías 12:6

“No ejecutaré el ardor de mi ira ni volveré a destruir a Efraín, porque Dios soy,
no hombre; soy el Santo en medio de ti, y no entraré en la ciudad.” Oseas 11:9

Estar en la presencia de Dios era algo grandioso, incluso a veces terrible. En el


encuentro de Isaías con Dios dice “muerto soy”. La manifestación de Dios era
para dar bendición y perdón.

HISTORIA DEL CULTO:

Epóca promonárquica:

Remitiendono a los orígenes y siguiendo en esta caminar a Rainer; resulta muy


difícil establecer los orígenes del culto en Israel, debido a la misma dificultad
que implica los problemas acerca de la formación del Pentateuco. En la época
premonárquica, sabemos que la relación con YHWH era importante para la
misma cohesión política de la mancomunidad tribal y en ella no se veía
reflejada ninguna institución cúltuca oficialmente reconocida. Al parecer existían
una serie de santuarios que estaban limitados al territorio de una tribu o para
algunas tribus vecinas. La independencia política implicaba también una
autonomía cúltica; el mismo culto a YHWH practicado por una tribu aseguraba
que esta conservara su independencia; la descentralización política tenía
también como consecuencia una descentralización cúltica. Esto genero ya de
entrada un poli.yahvismo; una diferenciación local como ocurría también con
los dioses El y con el mismo Baal; YHWH adquiría diversas configuraciones
según los respectivos sitios: En Silo (templo que al final de laépoca
promonárquica habría tenido cierta relevancia) YHWH Zebaot (Señor de los
ejércitos), YHWH en Hebrón; YHWH de Sanmaría, etc.
El grupo de pastores y campesinos de Palestina no consideró la tradición de
santuarios cultuales; propios de la cultura cananea; como la expresión más
adecuada del culto yahvista. El tipo de santuario que recobra cierta relevancia
son los altozanos; que estaba al aire libre; fuera de la ciudad o de la aldea,
sobre una altura; su simplicidad era más acorde con el carácter popular y
descentralizado de la religión yahvista. Unas veces presidía la ceremonia un
eventual hombre de Dios; en otras ocasiones un sacerdote contratado. Pero lo
importante es que el culto se celebraba con cierta independencia y con la
participación de todos; el carácter democrático de la sociedad israelita y
el sentido antijerárquico de su relación con YHWH tenían su más perfecto
reflejo en la dimensión eminentemente popular del culto. Los elementos
constituyentes del altozano eras: un altar, una estela y en árbol; estos dos
últimos eran signo de la presencia divina; eran originariamente símbolos de la
fertilidad y representaban lo divino en dualidad masculino-femenino; que rea
típico en las religiones de Medio Oriente. Aparece entonces la aṧerá que hace
referencia a la diosa Astarté quien era la esposa del dios El. YHWH al ocupar el
lugar del dios El en la mancomunidadde las tribus heredó la divina compañera
del dios.. Los cultos trataban de asegurar la fertilidad de la tierra, del ganado y
del vientre de la mujer. Aparecen unas pinturas de mujeres desnudas que
podrían representar a la divinidad femenina; el culto a Aṧerá alcanzó en la
época monárquica la misma familia real y llegó a instalarse en el mismo Templo
de Jerusalén. En relación con el culto de la diosa aparecen mujeres en el
Templo para buscar dineros para el Templo y para el culto a la diosa. Es lógico
que en unos santuarios rurales descentralizados se filtraran espontáneamente
y sin ningún control unas costumbres que en una época posterior iban a
resultar intolerables. Esas formas de culto quedaron excluidas de la religión
oficiala raíz de la polémica iniciada por Oseas.
El desarrollo ulterior del culto continuó también en Israel con la construcción de
verdaeeros templos en las respectivas colonias. Los más celebres pertenecían
a lo sque se denominaba casa de YHWH: el principal será el de Jerusalén,
pero también el de Betel, Samaría, Silo. Al santísimo solo podían acceder los
sacerdotes; poseía su propia dinastía de sacerdotes (Elí y sus hijos),
oficialmente establecidos que vivían de las ofrendas de la población. Pero este
proceso se debe también a la consolidación política de Israel; a medida que se
consolidaba la política, se consolidaba también el culto; el santuario era el
centro de la actividad política y jurídica. El culto comunitario consistía en las
tres grandes fiestas que reflejaban el ciclo de la producción agrícola. La fiesta
de los ázimos, (Massot) que se celebraba en el mes de Abib (marzo-abril); al
principio de la siega de la cebada; la fiesta de las semanas (ṧabu´ot) o fiesta de
las cosechas, siete semanas después de la fiesta de los ázimos, al final de la
cosecha del trigo. La fiesta de las tiendas (sukkot) o fiesta de la vendimia en
septiembre/octubre, después de la cosecha del vino y de otras frutas. En sus
orígenes las fiestas eran de carácter puramente agrícola; eran celebraciones
rituales de la cosecha en su diversas fases. Su finalidad era asegurar la
fertilidad, el buen tiempo y expresar la alegría y el reconocimiento por la
recolección y maduración de los frutos; solo posteriormente se relacionan con
la experiencia histórico política de liberación. En Israel el culto comunitario era
de carácter agrícola. Pero es importante resaltar el aspecto histórico de
liberación que marca la identidad del pueblo y el carácter de una relación de
tipo personal con Dios. Es por ello que las fietan van a tomar un sentido
histórico y religioso; recordaban y hacían presente los hechos fundacionales de
Israel y esto marcaba consigo una serie de elemento importantes; pues el
pueblo recordaba que había sido elegido y eso debía tener una serie de
connotaciones, pues la respuesta a YHWH no era solo el culto; sino de una
manera principal la obediencia a su voluntas, esto es; el ser una sociedad
contraste con una estructura de hermandad y fraternidad; una sociedad
igualitaria. De las fiestas sabemos que la de los ázimos era muy antigua. La
fiesta de la Pascua y su relación con el éxodo es probablemente
deuteronómica y se convi9rtío en fiesta de peregrinación. La celebración
comunitaria de las fietas anuales contribuyó a fomentar el clima de solidaridad
local y regional en el conjunto de tribus. La actitud solidaria estaba
fuertemente marcada desde los comienzos y era una dimensión que no
podía separarse del culto.
LA IMPORTANCIA DEL DERECHO:
Junto a la experiencia de liberación político-religiosa y la celebración
comunitaria del culto, el derecho constituía la base común del Israel de las
tribus; el sentimiento de pertenencia a la comunidad sea alimentaba una
concepción común de moralidad y de derecho.

CULTO EN EL REINO DEL SUR:


La instauración de la monarquía influyó en el desarrollo histórico del culto.
Surgen los grandes Templos construidos por el rey; los templos eran propiedad
del rey; pretendían ser el santuario central del reino, donde los súbditos podían
ir a dar culto a Dios. El culto se centraliza, y va a concluir con las exigencias
deuteronómicas de abolición de los cultos locales, a excepción de Jerusalén.
La prosperidad económica que trajo la monarquía, también transformó la
celebración del culto en lo referente a utensilios cúlticos y en el personal
asignado al servicio del Templo.

Atraidos por la grandiosidad de las instalaciones, los fieles acudían desde los
más apartados rincones para la celebración de las fiestas anuales. los
sacrificios adquieren una dimensión importante. Pero para poder sostener el
majestuoso templo y todo lo que llevaba consigo; se crea un sistema de
rigurosos impuestos y una explotación a gran escala de la cria de ganado en
las tierras pertenecientes al rey.
En Jerusalén, es sin duda con la monarquía que aparece el Templo y se une
allí la vinculación altar y trono. David es el que lleva allí el Arca a su capital,
para convertirla en centro cúltico del reino; pero es con Salomón que se
construye el templo. Las instalaciones eran propiedad del rey y el conjunto
constituía un conjunto arquitectónico impresionante. Los sacerdotes eran
funcionarios del rey y algunos eran miembros de la familia real. Se incluyen
oraciones por el rey, de manera que el culto paso a ser una legitimación y a
brindar una estabilidad al poder del rey y garantizaba la unidad y seguridad del
reino. Con el culto, David pretende establecer un vínculo entra las tradiciones
de las tribus y la antigua religión Yahvista. Pero la política religiosa de
conciliación llavada a cabo por David, cambio con Salomón. De todos modos
es provable por algunos textos que en en la ciudad pre-davídica de Jerusalén,
ya existiera un santuario donde es muy procable que haya llevado el arca, por
ello no había necesidad de contruir un nuevo Templo. El mismo texto de la
construcción del Templo deja ver que se trato de viejas estructuras; es decir,
que lo que hizo Salomón fue reformar un antiguo santuario, convirtiéndolo en
un suntuoso Templo. Si no copntamos el lugar del Santo de los Santos, que es
en realidad el más importante del Templo, tendríamos un santuario de estilo
siro-palestinense. El Templo todo con el santo de los Santos, quería simbolizar
la vinculación de YHWH con ese lugar concreto. En el Templo de Jerusalén,
YHWH estaba entronizado y tenía su morada en Sión. El Trono formado por los
querubines representaba la presencia cuasi-material de YHWH en el Templo
(1Re 8,12). La altura colosal de los querubines significa la grandeza de YHWH,
que excede toda capacidad, incluso la del mismo Santísimo. De allí que la
teología del templo expresaba de manera insistente la presencia de YHWH en
Sión. La concepción teológica que se desarrolló en torno al Templo central de
Jerusalén, se caracterizó por un marcado sincretismo oficial. Los sacerdotes y
teólogos de corte, procedían de ambiente jebuseo, vinculados a las tradiciones
cúlticas pre-israelitas; pretendía lograr una síntesis de concepciones israelitas y
cananeas que pudiera funcionar como religión yahvista oficialmente aceptada;
esta teología giraba en torno a dos núcleos: la realeza de YHWH, y la
presentación de la ciudad de Jerusalén como ciudad de Dios. La teología del
Templo influirá muchísimo en Isaías (6,5). Por otro lado es innegable la
coexistencia con otros cultos o almenos con otras influencias cúlticas
semejantyes. El dios El de los cacaneos, era el dios supremo del panteón y
tenía el título de rey eterno, señor de los excelsos dioses, es el principal en la
asamblea divina. YHWH, se sienta en medio de su corte celestial, y ante él se
postran en señal de reverencia los demás dioses, es el soberano de todos los
dioses; en el salmo 29 se le da el título de Rey Eterno y en el salmo 93 se le
canta como Rey. Del Baalismo, se dice que Baal venció al caos y de allí el
origen de todas las cosas, matando a Yam; así, YHWH domina el caos
primigenio (que no es entendido de la misma manera) Pero el reinado de Dios
se extiende en la teología del Templo: YHWH es el Rey de las naciones.. La
lucha con el caos pasa de ser mitológico a ser histórico. De este sincretismo
también saldría hacia el siglo VIII la idea de Dios creador, que era título del dios
El. Si para la primitiva religión yahvista la característica de YHWH era su
vinculación con un grupo humano, ahora los teólogos habían sustituído esa
idea por una vinculación íntima de YHWH con un detreminado lugar. La acción
salvífica de Dios, que constituía el fundamento y la razón esencial de la
pervivencia del estado Israelita, no era ya la liberación de Israel, sino el hecho
de que YHWH había fijado su morada en Sión. De esta manera el culto oficial
de Jerusalén, había elaborado por su cuenta una tradición salvífica totalmente
independiente de las viejas creencias del primitivo yahvismo pre-monárquico.
Según esta concepción Jerusalén es el centro del mundo, había sido instituída
para siempre por el mismo YHWH. Su presencia en la celebración cúltica
constituye una garantía incondicional e inquebrantable de protección y
salvación para la ciudad; pues es YHWH quien la defiende de toda amenaza y
así quedo YHWH reducido a lo cúltico y a lo político. YHWH que era garante de
un sistema anti-jerárquico, de la libertad, ahora es garante de la monarquía, del
culto, de la corte.

CULTO OFICIAL EN EL REINO DEL NORTE:

Por su parte ya el culto del norte es mal visto por ser cismático y por que su
promoción por Jreroboán era totalmente político, pues quería evitar el peligro
de que sus súbditos siguieran viajando a Jerusalén en peregrinación para las
fiestas e incluso en otros momentos Los santuarios del norte encierran una
perversidad que corrompe los actos que allí se realizan, pues su origen es
culpable por ser cismático y por depender plenamente del poder político. Lo
interesante del tema es que lo mismo ocurría en el sur, en el Templo de
Jerusalén, como ya lo vimos. Ahora bien, en el texto de Rainer se deja ver un
paralelismo entre Moisés y Jeroboán bastante sobresaliente y dice que lo que
se narra de experiencias de esclavitud en Egipto en realidad corresponden a
aquellas a las que están sometidos bajo Salomón y su hijo.
Los teólogos deuteronomísticos culpan a Jeroboán de haber introducido en el
culto del reino una serie de innovaciones arbitrarias, que habrían inducido a
todo el país a cometer grave pecado; refiriéndose a los becerros de oro
colocados en Betel y Dan; diciéndoles: estos son tus dioses Israel, que te
sacaron de la tierra de Egipto. Había puesto como sacerdotes a personas que
no pertenecían a la tribu de Leví y había trnasladado la fiesta del otoño. Erigio
santuarios en Dan Siquén, Penuel y esto hacía que el culto no fuera
centralizado.
En Betel se daba culto a El Betel y es probable que se haya presentado un
sincretismo

EL CULTO EN EL ANTIGUO ISRAEL:

I. Espacios Sagrados
II.
En todo culto hay tres elementos básicos: espacio sagrado, tiempo sagrado y
acciones concretas. Cuando el culto se realiza a nivel comunitario, entran en el
escenario los ministros o funcionarios del culto.
En el mundo Bíblico, el espacio sagrado fue evolucionando. A través de las
distintas tradiciones se advierte que:

 Ciertos lugares adquieren carácter sagrado porque la divinidad se manifiesta


en ellos. Desde los tiempos lejanísimos de los patriarcas, hubo hechos (que
dieron lugar a recuerdos y tradiciones) vinculando la presencia o
manifestación (actividad) de Dios con ciertos lugares. Luego se ofrecía
culto a Dios preferentemente en aquellos lugares "sagrados". Claro está
que el ser humano no puede obligar a Dios a revelarse; por eso el hombre
siempre ha querido buscarle donde él se ha dado a conocer, en los lugares
que él ha escogido:
1. Betel: es probable que se tratara de un santuario canane
uqe fue aeceptado posteriormente y llego a ser muy visitado por los
israelitas. El hecho de haber sido de origen cananeo genera dificultades por
lo cual lo vincula a una revelación de Dios a Jacob. Este es un Templo que
tiene mucha importancia en el reino del Norte y es donde Jeroboan I coloca
uno de los becerros de oro.
2. sinaí: también denominado Orbe; No pensemos que todas
las manifstaciones divinas condujeron automáticamente a la construcción
de un santuario. En el Sinaí, Dios se revela de ferma decisiva y relevante;
Moisés debe quitarse las sandalias pues el lugar que pisa es Santo, es
terreno sagrado; allí se constituye el pueblo, la alianza y es allí donde se
entregan las leyes; pero no existe allí un Templo ni nada por el estilo.
3. Jerusalén: Dios no interviene directamente sino a través
del profeta Gad quien pide en nombre de Dios a David, la edificación de un
altar al Señor. Este sería el sitio en el que si hijo Salomón construye el
Templo

 Otros lugares adquieren la connotación de Sagrados y fueron elegidos por el


hombre:
1. Guilgal: en este sitio junto al Jordan, existió un famoso
santuario vinculado a las tradiciones del paso del río cuando el grupo de
Moisés venía desde Egipto; es posible que se tratase de un antiguo santuario
cananeo.
2. Dan: también surge por elección humana en el límite del norte
de Israel. Se encuentra en el libro de los jueces que esa tribu emigro al norte
buscando un mejor lugar para asentarse. En el camino entro en la casa de un
tal Milcá una imagen la cual roban y la entronizan en el nuevo lugar. Jeroboán
I le dio también gran importancia y coloca allí a otro de los becerros de oro.
3. los altozanos: son lugares sacralizados por decisión del
hombre y los podemos relacionar con la s ermitas; al margen de la religión
oficial, representan el espacio religioso popular.

Pero no faltaban peligros en esta práctica:

- se podría creer que Dios se limitaba a estos lugares, a estilo de los dioses
paganos, quienes ejercían su acción sobre un territorio determinado; esto
resultaría en un particularismo religioso difícil de superar...
- en caso de varios lugares de culto (como de hecho se dieron en el judaismo
premonárquica y monárquica), dicha situación se podría degenerar en varias
invocaciones distintas que se competirían entre sí, como si se tratara de varios
dioses distintos. Así se perdería la unidad de culto, y subsiguientemente, la
unidad de fe (monoteísmo).
- habría también un peligro del "orgullo institucional" en los santuarios, es
decir, atribuir todo a la eficacia del culto, a la perfección o amplitud de los ritos
humanos y lo esplendoroso de los edificios y liturgias.

¿Cómo evitaban el culto judío estos peligros que representaban los "lugares
sagrados", que tanto abundaban en Canaán?

- los santuarios judíos fueron interpretados no como morada de Yavé, sino


como lugares de su manifestación vgr. Betel, Peniel (cf. Gén 28; 32)
- o bien, al adoptar el lenguaje de "morada" se evitaba hablar de la morada de
Yavé mismo, y se utilizaba rodeo verbales como "morada de su nombre" o de
su gloria para recordar que el trono de Dios estaba en el cielo, no en la tierra
- la posterior centralización del culto en Jerusalén parece responder a
preocupaciones por la pureza y unidad del culto yavista en tiempos del rey
Josías.
II Objetos sagrados

Son varios los objetos relacionados con la presencia misma de Yavé, pero
entre ellos dos se destacan por su importancia y antigüedad: el Arca de la
Alianza, y la Tienda de Reunión. Luego veremos en breve otros objetos
asociados con el culto que podrían ser considerados "sagrados".

El "Arca de la Alianza" (Ex 25,10-21; Núm 10,33ss; 1 Sam 3-4) era una especie
de "trono desocupado" (fenómeno conocido en otras religiones también), ya
que fue considerada como "estrado de sus pies". Posiblemente remonta hasta
el período del desierto, cuando, según Ex 25, fue iniciado por orden de Yavé.
El Arca enfatiza la cercanía de Dios (del Dios santo) y su permanencia en el
pueblo.
La "Tienda de Reuniones" o "de las Citas" (Ex 33,7-11 E) no era solamente un
ambiente donde guardar el arca de la alianza, sino un santuario en sí....Es el
lugar de la manifestación ocasional de Dios. En la tradición sacerdotal, es el
lugar de manifestación de la gloria o el nombre de Yavé.

En un segundo plano tenemos:

- la "vara de Dios", relacionado con milagros de serpientes (Ex 4; 7; Núm 21),


siendo a la vez un regalo de Dios y algo ofrecido a Dios (guardado en el Arca).
Se sabe de varas ceremoniales o cúlticas en otras religiones antiguas: Egipto,
Asiria...
- el "Urim y Thummim", que parecen haber sido una especie de dados
sagrados, utilizados dar "respuestas" de Yavé, en un tipo de adivinación
legítima (cf. 1 Sam 14,41ss). Hay discrepancias acerca de quiénes estaban
permitidos o autorizados para su uso: sólo Moisés, sólo Leví (Dt 33,8), o por el
sumo sacerdote (Ex 28,15ss)
III. Tiempos sagrados

El hombre en su experiencia general, valora de forma distinta no sólo los


distintos momentos de la vida; sino también las diversas épocas del año. Es
una necesidad psicológica que pide marcar tiempos distintos que se presentat
también en el campo de lo religioso y tiene sus repercusiones en el culto.
En Israel, si bien todo momento era considerado bueno para encontrar a Dios,
existían momentos específicos, consagrados a él: el sábado, el novilunio y las
grandes fiestas anuales. Estas se fueron desarrollando a lo lardo del tiempo ,
respondiendo a las circunstancias y vicisitudes que atravesó el pueblo a lo
largo de su historia.

TEOLOGÍA DEL TIEMPO:

La vida judía podría definirse como la santificación del tiempo y de la historia


que es el lugar teológico por excelencia, es en y durante el tiempo donde el
hombre se encuentra con su Dios; la experiencia de la creación está
enmarcada en la sucesión cronológica. la liturgia judía apunta a comprender el
significado del tiempo (como experiencia del creador del orden y de todo
cuanto existe, del único DIOS VERDADERO que interviene a favor de su
pueblo en un tiempo y espacio determinado). La fuente del tiempo es la
eternidad. Es aquí donde aparece el sentido de fiesta: Dios convoca a su
pueblo (lo cita), y el pueblo responde en un ambiente de gozo y alabanza, pues
el Dios de la historia le convoca para hacerle participe de su presencia
(shekina) y de su poder.

La semana judía sigue el ritmo del shabbat: primera fiesta que anticipa el
mundo venidero.

El año judío sigue el ritmo de las solemnidades <<como memorial de la historia


judía>> las intervenciones de Dios en la historia del pueblo, las visitas del
DIOS VIVO Y ÚNICO a su pueblo. Dios es fiel a sus promesas e Israel es por
siempre su elegido; los acontecimientos fundantes de la historia de Israel se
actualizan durante las celebraciones jubilosas.

Las fiestas de Israel tienen su origen en cuatro ritmos distintos: el ritmo de los
pastores, el de los campesinos, el del tiempo y el de la historia:

1. El ritmo de los pastores: La Pascua.


En los comienzos remotos de Israel, el pueblo estuvo marcado por una
profunda experiencia como pastores. El origen y los ritos de esta fiesta
son complejos. Llama la atención que nunca aparece mencionada en los
textos proféticos. Parece ser qie la Pascua había quedado en desuso y
solo es restituída con la reforma de Josías a finales del S VII.
2. El ritmo del campesino:
La agricultura terminó por convertirse en la actividad principal de Israel.
La siembra, la ciega del trigo, la cosecha de los frutos; señalan tres
momentos capitales del año.
 Los ázimos:
Primera fiesta agrícola del año, que señala el tiempo de la siega
de la cebada, en primavera. Lo esencial es comer pan con granos
nuevos y sin levadura, esto es sin nada que provenga de la
cosecha anterior, para indicar que se comenzaba de cero; y se
realizaba durante siete días. Se iba en peregrinación a ofrecer a
Dios las primicias de la cosecha.
 Pentecostés: la fiesta de las semanas, de la siega o de las
primicias; es la segunda gran fiesta anual. En el Éxodo solo se
dice que hay que presentarse al Señor por la fiesta de la siega, de
las primicias o de todo lo que hayas sembrado en tus tierras. Se
celebra la fiesta de las semanas al comenzar la siega del trigo. Ha
terminado la siega y el hombre debe dar gracias a Dios,
ofreciéndole algo en proporción a los bienes recibidos. El
Deuteronomio da un matiz social; no se trata solo de agradecer a
Dios; sino también de compartir con los más debiles,
recordando las penalidades sufridas en Egipto.
 Tabernáculos: la fiesta de los tabernáculos, tiendas, cabañas,
chozas; es la de la recolección. Era la más importante y
frecuentada, por lo cual es llamada la fiesta de YHWH, o
simplemente la fiesta. El nombre de sukkot le viene de las chozas
que se construían en el campo durante la recolección; más tarde,
se la relacionó con el periodo del desierto, pensando que los
israelitas vivieron entonces en cabañas o en chozas.

3. el ritmo del tiempo:


las celebraciones religiosas de Israel no se etienen solamente a la vida
pastoril o campesina. Están marcadas también por un ritmo fijo de
semanas, meses y años
 El Sabado: es una institución típica de Israel; es provable que
inicialmente no fuera una fiesta religiosa, sino un día de
descanso. Pero, este descanso se halla relacionado con la
voluntad divina; no es meramente profano; su observancia
demuestra la fidelidad a Dios. Se presenta una gran afluencia de
los fieles al Templo en ese día
 El Novilunio: marca el comienzo del nuevo mes lunar; se trata de
una celebración muy antigua. La encontramos atestiguada en la
época de Saúl y de David, aunque no se dice cómo se celebraba.
En Amós se deja ver cómo uno de los elementos importantes era
el descanso por lo cual los comerciantes se quejan de ello. En
Oseas se deja ver un contexto de fiesta y de alegría. La historia
de Eliseo deja ver algo particular: los sábados y los novilunios
eran días típicos para ir a consultar un profeta.
RELACIÓN DE LAS FIESTAS DE LA NATURALEZA CON DIOS.
En un segundo estadio casi todas las fiestas llegan a tener referencias
históricas, principalmente en conexión con el acontecimiento del Éxodo-Sinaí y
la travesía del desierto. La Pascua, fiesta de la liberación de Egipto por Yavé,
comprende la fiesta ganadera de los primogénitos (cordero pascual) y la fiestas
agrícola de los panes ázimos (massot). Pentecostés se asocia con la
revelación de la ley en Sinaí, y la fiesta de las Chozas ("tabernáculos")
recordará la estancia de sus antepasados en el desierto. El sábado también,
por lo menos en su versión en el libro de Deuteronomio (5,12-15), está
relacionado con el Éxodo.
Desde esta vinculación de las fiestas con la historia de salvación del pueblo
judío, la memoria (en hebreo zikkaron, en griego anámnesis ) será un aspecto
esencial de las fiestas litúrgicas en la tradición judeo-cristiana.

c) Tablas de fiestas litúrgicas. En el Pentatéuco tal como llegó hasta nosotros


tenemos no uno sino nada menos que cuatro listas de la fiestas que había que
celebrar. Sin embargo, todas concuerdan en la designación de tres fiestas de
peregrinación ("presentarse ante Yavé"): Pascua, Fiesta de las Semanas
(=Pentecostés) y DE los Tabernáculos
OTRO MODO DE COMPRENDER LAS FIESTAS:

I. FIESTAS DE INSTITUCIÓN MOSÁICA: Están inventariadas por la torá,


Son Preceptos Divinos.
Nombres de las fiestas: Según la Torá se asignan tres nombres a las
fiestas de acuerdo a su naturaleza.
1. Mo´ed: encuentro. Así: la fiesta es una cita fijada por Dios. Nm 9,3-3;
el marco de la cita es fijado por Dios pero corresponde al hombre fijar el
punto exacto. Lv 23,2: “Vosotros”; dos elementos son fundamentales
para la cita: tiempo y lugar “tienda de encuentro” Nm 1,1; Templo Ex
25,22. Pero hay que comprender que todo tiempo y lugar es
siempre abarcado por la trascendencia de Dios. Pero las “citas”
momentos indicadas son importantes.
2. Miqra qodés: Santo; asamblea santa. En oposición al hol: profano.
Tiempo especial de santidad por que Dios ha convocado.
3. Hag: idea de ciclo: fiestas de peregrinación en relación al ciclo de la
naturaleza en clave de las estaciones y el ciclo agrario o de las
cosechas. En su sentido total evoca la idea del aporte de la naturaleza
como orden.
Características: Días no laborables: (todo pertenece a Dios) el trabajo deja de
ser propiedad del hombre y es absorto en la trascendencia de Dios; como la
fiesta es un encuentro con Dios es un ambiente de gozo: halell; allelu.

 NEOMENIA, NOVILUNIO, O
COMIENZO DEL MES: Ros (cabeza) Hodés
(mes).
Ciclo
Ordinari
o  SHABBAT. Memoria del doble
descanso de Dios Gen 2,2; Ex 20,11
(después de la creación); Dt 5,12-15 (salida
de Egipto). Abstención del trabajo.

Fiestas  PASCUA (Pesá)


de  PENTECOSTÉS (Savuot)
peregri  TIENDAS (Sukkot)
nación

Fiestas
Austera  PRIMER DÍA DEL AÑO (Ros ha saná)
s  GRAN DÍA DEL PERDÓN(Yom
Kippur)

2. FIESTAS DE INSTITUCIÓN RABINICA: También son llamadas


fiestas menores. Surgen a partir de costumbres populares testificadas por
sabios. Tienen por objetivo ser acciones de gracias a Dios por su
providencia. Tienen como características : son días laborables; son
manifestaciones populares y familiares; se viven en un ambiente de gozo y
alabanza

Fiestas  Fiesta de la dedicación (hanukká)


Menore  Nuevo año de los árboles(tu bi-
s sevat)
 Conmemoración de la destrucción
del templo (9av)
LOS ACTOS DEL CULTO:

ACTOS PRIMARIOS:
Sacrificio: es toda ofrenda animal o vegetal, que se destruye en todo o en parte
sobre el altar, como obsequio a la divinidad; existen diversas clases:
 Holocaustos: se quema toda la víctima, que debe ser un animal macho,
sin defecto. El oferente pone la mano sobre ella,para indicar que es
suya, él mismota degûella fuera del altar; luego la pasa al sacerdote, que
derrama la sangre y quema al resto.
 Sacrificio de comunión: la víctima se reparte entre Dios, el sacerdote y el
oferente; quien la come como cosa santa. Las partes de YHWh se
queman sobre el altar. Pretende fomentar la unión con la divinidad.
Existian tres subclases: el sacrificio de alabanza, el sacrificio
espontáneo, el sacrificio votivo.
 Sacrificios expiatorios: tienen por objeto restablecer la Alianza con Dios,
rota por las faltas del hombre. Son el sacrificio por el pecado y
reparación. En ellos la sangre tiene un papel importante; el oferente no
come nada, solo los sacerdotes.
 Ofrendas vegetales: solo se ofrecían en casos especiales y eran
complemento de sacrificio sangriento
 Panes presentados: eran doce tortas de flor de harina, dispuestas en
dos hileras; se renovaban cada sábado.
 Ofrendas de incienso: debía hacerse todos los días por la mañana y por
la tarde y era función sacerdotal; era muy costosa.

ACTOS SECUNDARIOS:
 La oración litúrgica: las acciones cultuales iban acompañadas de
palabras: fórmulas de bendición, maldición, confesiones de fe, plegarias,
etc. Es muy probable que para esta oración se emplearan los salmos; la
palabra fue adquiriendo relieve, especialmente en la sinagoga.
 Ritos de purificación y de desecración: existía la convicción de que
determinados actos o sustituciones dejaban impuro: tocar un cadáver,
haber tenido una enfermedad como la lepra, haber dado a luz; esto
exigía una purificación para poder acercarse a Dios.
 Ritos de consagración: Buscan favorecer el acceso a Dios; entre ellos
estaban los votos.

Ritos sagrados

a) Ritos de consagración y purificación

circuncisión (signo de la Alianza)


nazireo (consagración por voto)
numerosos ritos de purificación
(cf. concepción "concéntrica" de diferentes grados de pureza, llegando hasta la
máxima inaccesibilidad en el "Santísimo" al interior del templo)
el anatema (orden de aniquilamiento en la Guerra Santa), considerado como
"consagración" de los paganos y "sacrificio" de ellos a Dios
b) Sacrificios:

de alimentos (pero nunca con el sentido de alimentar a Yavé: cf. Sal 50)
ofrenda de dones: obligatorias (promesas) o voluntarias;
rechazo tajante de prostitución 'sagrada'
matanza de seres vivientes: sacrificios luego comidos, o bien totalmente
entregados a las llamas -es decir, a Dios (holocaustos) - pero en Israel
siempre un tajante rechazo del sacrificio humano
comunión sagrada: banquete (presencia de Yavé; unión personal con él)
expiación (en Israel, de carácter personal: pasar de la impureza a estar puro)

c) oración

diversos motivos: lamento, súplica, acción de gracias


bendición / maldición en nombre de Yavé

V. Instituciones sagradas

a) El Templo de Jerusalén

b) Las sinagogas

MINISTROS DEL TEMPLO:

En tiempos antiguos en Israel no existían sacerdotes; los actos del culto eran
realizados por el cabeza de familia, incluso en ocaciones nisiquiera el cabeza
de familia (jue6,26-25).
Los funcionarios del culto empezaron a imponer su autoridad hasta hacerce
imprescindibles. Sus funciones eras:
 Transmitir el oráculo divino mediante el uso del efod: el turim y el urim
 La enseñanza; originalmente la Torá era una instrucción breve,
principalmente en relación con el culto para distinguir entre lo santo y lo
profano, lo puro de lo impuro. El sacerdote enseña todas las
prescripciones que rigen la relación entre Dios y el hombre y delos
hombres entre sí. Así, eran maestros de moral y religión.
 El sacrificio: comenzaba con la manipulación de la sangre, la parte más
santa de la víctima.
 Mediación: el sacerdote es en todo mediador entre dios y los hombres.

CRÍTICA PROFÉTICA AL CULTO:

Para poder realizar un análisis honesto y adecuado al respecto, dice Sucre; es


necesario tener presente la totalidad de los textos; de lo contrario se pueden
presentar lecturas que resultan ser parciales o reduccionistas. Una de estas,
afirma que los profetas rechazan el culto por principio; como algo
esencialmente malo. Podemos admitir que algunos profetas como Amós; se
opusieron radicalmente al culto; pero esto no puede extenderse sin mas a
todos los profetas.
Otro reduccionismo es el de la línea diametralmente contraria y afirma que
todos los profetas estaban vinculados al culto.
A veces se piensa que la diversidad en la opinión acerca del culto en los
profetas se reduce a un problema cronológico; antes del exilio lo habrían
rechazado, y después del exilio lo habrían defendido debido al influjo de
Ezequiel. Esta idea tiene aspectos verdaderos, pero no puede generalizarse
Dentro del periodo preexílico, vemos que Amós acusa a los comerciantes de
aceptar a regañadientes la observancia del Sábado y el novilunio(Am8,5) y en
Nah 2,1; encontramos una exhortación a celebrar la fiesta. En el periodos
postexílico, encontramos algunos textos que suponen una dura crítica a la
reconstrucción del Templo Is66,1-4) o a las liturgias penitenciales (Is58,1-12).

Nos ubicamnos en el S XI aC; un episodio va a enfrentar a los personajes


claves del momento. El primer rey, Saúl, después de campaña contra los
amalecitas, decide reservar las mejores ovejas y vaca, el ganado bien cebado,
los corderos para ofrecerlos como sacrificio al Señor; pero al actuar de esta
manera el rey estaba faltando a uno de los principios fundamentales de la
guerra santa que obliga a exterminar todo lo conseguido en la campaña. No es
mala la voluntad que guía a Saúl; se trata de una estima del culto exagerada
que le hace situarlo por encima de la voluntad de Dios, manifestada en las
normas de la guerra. Por ello el profeta Samuel le dice:

¿quiere el señor sacrificios y holocaustos,


O quiere que obedezcan al señor?
Obedecer vale más que un sacrificio,
Ser dócil más que grasas de carneros. (1Sam15,22)

Este texto nos señala dos aspectos importantes: que el hombre tiene la
tentación de buscar su propio camino para contentar a Dios y generalmente
piensa que ese camino pasa necesariamente por el culto; el segundo, que el
profeta no considera al culto como un valor absoluto; hay cosas que pueden
estar muy por encima de él y ante ellas las practicas cultuales casi carecen de
valor.

Amós encuentra en el S VIII una situación en la que el culto es más floreciente.


Las peregrinaciones a los grandes santuarios de Betel, Guilgal y Berseba
ejercen gran atención sobre el pueblo. No se escatiman los diezmos, abundan
los sacrificios de animales y las ofrendas voluntarias; pero este va acompañado
de grandes injusticias, de engaños en el comercio, compraventa de esclavos,
opresión de los débiles. Entonces, el culto se había convertido realmente en un
opio, tranquilizaba conciencias, fomentaba la idea de ser pueblo elegido,
superior a los demás, con una garantía absoluta de protección y bendición
divinas. Amós reclama contra este culto que lo único que hace es responder al
deseo humano, y que no constituye una invitación real a vivir la voluntad de
Dios y es por ello que Dios no encuentra en dicho culto ningún placer; incluso
Amós hace también referencia a las peregrinaciones (4,1-5; 5,4-6). Demuestran
estos versos la equivocación del hombre de buscar a Dios en los santuarios;
Amós recuerda claramente que no es allí. Dios actúa en la historia y por la
historia, actúa salvando y salvando se revela, esa es la peculiaridad de YHWH.
Entonces no es en el Templo sino en la vida misma, en el prójimo. La única
forma de encontrarlo es amando el bien e instaurando la justicia en los
tribunales. Existe una intervención de Amós aún más radical (5, 21-24); en el
texto quedan nuevamente contrapuestos el camino del hombre que pasa por el
culto y el de Dios que pasa por la justicia y el derecho, a través de las
relaciones interhumanas. Amós señala que no es buena la disposición de los
fieles que practican el culto (3,13-14;4,4-5;8,4-8). Amós señala también que los
santuarios son lugares de practicas perversas; de idolatria, de prostitución
sagrada. Amós es radical, el culto no sirve para nada, no conduce a Dios, sino
que conduce a un ídolo, no entran por el a un contacto con Dios, sino con una
falsa imagen de Él; al contrario, lo alejan y lo irritan. Oseas, detecta el mismo
problema y lo enfoca del mismo modo (8,aa-13ª). Allí se contraponen de nuevo
el camino de Dio y el del hombre; pero el texto refleja de modo más claro la
tragedia del culto: el pueblo desea expiar su pecado, agradar a Dios, pero
piensa que sólo puede conseguirlo a través de la construcción de altares y la
inmolación de víctimas; miestras al mismo timpo, se niega a cumplir la Voluntad
de Dios, el camino que Dios le indica a través de sus leyes; ya que esta es la
unica manera de evitar el pecado y expiarlo. Después de describir los deseos
del pueblo de convertirse al señor, de volver a él y conocerlo, el profeta avisa:

Quiero lealtad no sacrificios,


Conocimiento de Dios, no holocaustos (Os6,6).

Sale al paso al equívoco que ye hemos mencionado: pensar que el modo de


relacionarse con dios es el culto; cuando lo importante es la lealtad, la fidelidad
y el conocimiento de Dios; con lo cual se refiere es a la vivencia de la alianza y
de las rectas relaciones interhumanas. Solo quien practica la justicia y se
interés por el prójimo es leal con Dios y loo conoce. Así es como ser
comprende la importancia de esta frase en el contexto de la guerra siro
efraimita; cuando las relaciones entre los pueblos hermanos se han deteriorado
de forma injusta y cruel, resulta absurdo resolver el problema con una
búsqueda formal de Dios. En este contexto se comprende la mayor acusación
que hace Oseada los sacerdotes de su tiempo: roban al pueblo el conocimiento
de Dios, transmitiéndole una idea falsa de él y de sus exigencias. Para los
sacerdotes el culto se ha convertido en un negocio,; animan a la gente a
ofrecer sacrificios y dones, aparentemente para aplacar a Dios por sus pecados
y culpas; mientras ellos se benefician. Oseas dice por ello que los sacerdotes
se alimentan del pecado del pueblo y con sus culpas matan el hambre; pues es
rentable engañar al pueblo. El profeta es libre y no pretende ganarse la vida
con sus palabras, no esta sujeto al rey ni a la corte por lo cual habla libremente
y transmite así la Voluntad de Dios.
Miqueas, que es posterior a Amós y Oseas pero del mismo S VIII, en 6,1-8
empieza enumerando los antiguos beneficios de Dios, que menciona para
suscitar el agradecimiento del pueblo; se trata de responder con generosidad a
la generosidad divina; pero después de ello se dirige a la línea del culto en los
cuales realiza una exageración nunca antes vista; si se diera sería el mejor
negocio en años para los sacerdotes del templo; pero habla también de ofrecer
el primogénito en reparación por los pecados, con lo cual señala que no
quedaría nada mas por ofrecer. Pero el profeta señala que lo que quiere dios
es ofrecer algo distinto; lo que Dios quiere no es que las personas o el pueblo
ofrezcan cosas, animales o seres queridos; sino que se entreguen así mismos
poniendo en práctica el derecho y la bondad como meta de las relaciones con
el prójimo. En esto coincide con Amós y Oseas, pero Miqueas añade otra cosa:
mostrase atento con Dios, caminar humildemente con tu Dios; se trata de una
actitud, de un comportamiento y esta es la actitud que tiene el hombre cuando
practica el derecho y la justicia, cuando ama la bondad. El SVIII nos pone en
contacto con Isaías; cuyas afirmaciones parecen muy inspiradas en Amós.
Isaías hace una enumeración exhaustiva de todas las prácticas cultuales con
las que el hombre busca inútilmente llegar a Dios. (1,10-17) Menciona a
Sodoma y a Gomorra pare señalar el pecado de Jerusalén, y deja también así,
clara la posibilidad de castigo divino. Jerusalén esta pervertida no por las
desviaciones sexuales; sino por las desviaciones cultuales. Los versos 11-15
contienen una crítica de los sacrificios de comunión, que intentan fomentar la
unión con la divinidad al repartir la víctima entre Dios, el sacerdote y el
oferente, del holocausto que exigía mayor desprendimiento, de las ofrendas
vegetales, del incienso, de las grandes fiestas anuales e incluso de las
oraciones. Dios no puede reprochar el desinterés por el culto como sucederá
en tiempo de Malaquías en que se reprocha el ofrecer víctimas robadas o
defectuosas; acá por el contrario impresionan la cantidad y calidad de
animales; pero ante tantas ofrendas crece el rechazo de Dios: ¿Qué me
importan?, estoy harto, no me agradan. Tras esta enumeración detallada, todo
el sistema cultual queda en entredicho; estos versost terminan conla acusación
de “vuestran amnos estanmanchadas de sangre”; después de lo cual es de
esperar una condena a muerte de los culpables; pero curiosamente lo que
sigue es una exhortación, con nueve imperativos: hay que cambiar radcalmente
la actitud ante la vida; se manifiesta en binas el paser de lo negativo (apartad
de mi vista vuestras malas acciones, cesad de obrar el mal); a lo positivo
(aprended a obrar el bien, preocupaos por el dercho) y los tres últimos
imperativos, concretan las exigencias: el bien y el derecho. Aparecen dos
clases de èrsonas que preocupan a Isaías: el huérfano y la viuda. El profeta no
se limita a señalar lo que esta mal, lo que no se debe hacer; el va más
adelantese trata de imitar la conducta de Dios que hace justicia al huérfano y a
la viuda. El hombre a través del culto intenta agradar a Dios y reconoce el
puesto capital de Dios enla vida del hombre; pero Isaías recuerda que la mejor
manera de agradar a Dios es interesarse por las personas que él más ama.
Isaías señala que es en los santuarios en donde la fe Yahvista se contaminó al
contacto con la religión Cananea; pero no parece condenar elk culto en cuanto
tal; sino el culto practicado por unas personas que tienen las manos
manchadas de sangre, gente que quiere unir festividad e iniquidad; lo que irrita
a Dios no es el culto en cuanto tal, sino las personas que lo llevan a cabo.
Por su parte Jeremías va en la misma línea de Oseas; contrapone el camino
que el hombre elige y el que Dios le indica. Leer Jr 7,21-28

“añadid vuestros holocaustos a vuetros sacrificios y comed la carne;


Pues cuando saque a vuestros padres de Egipto
nos les ordené mi hable de holocaustos y sacrificios;
esta fue la orden que les di:
obedecedme, caminad por el camino que os señalo y os irá bien.
Pero no escucharon ni prestaron oído,
Seguían sus planes, la maldad de su corazón obstinado,
Dándome la espalda y no la cara.

Jeremías señala la raíz de todo este conflicto: el hombre sigue sus planes, la
maldad de su corazón. El camino que Dios le indica, el de la obediencia a su
voluntad, le resulta poco atractivo porque exige dar un rodeo y pasar por el
prójimo: la justicia, el derecho y la misericordia por los oprimidos, los huérfanos,
viudas, inmigrantes.

CRITICA DE LOS ELEMENTOS DEL CULTO:

Con respeto al espacio sagrado, tenemos que hacer en el análisis la


diferenciación entre el Reino del norte y el de Judá. En este último tenía en
Jerusalén un lugar de culto indiscutible que restaba importancia a los otros
santuarios; el culto se centralizo.. Israel por su parte, tuvo en su historia
diversos santuarios que eran promovidos por los reyes. Los profetas que
actuaron en el norte mencionan a Betel, Guilgal, Berseba, Dan; y todos son
despreciados y condenados. Amós afirma que las peregrinaciones a estos
lugares solo satisface el placer de los Israelitas y no agradan a Dios.
De alguna manera es la misma postura adoptada por algunos profetas del sur,
respecto al Templo de Jerusalén. Miqueas anuncia que el monte del templo
será reducido a ruinas; Jeremías se exprese de la misma manera, denunciando
cómo la casa de Dios se ha transformado en cueva de bandidos, donde
ladrones, adúlteros, idólatras y asesinos se refugian para ponerse a salvo.
Jeremías está convencido que Dios no habita incondicionalmente en ningún
lugar.
Se levantaron voces a favor del espacio Sagrado. La actitud de sospecha se
hace presente en el profeta Isaías (66,1-2). La mayoría de los textos proféticos
se muestra crítica frente al espacio sagrado que fomenta una falsa religiosidad
y una falsa idea de Dios.
El tiempo sagrado tampoco sale bien librado. Los profetas no hablan a menudo
de las grandes fiestas anuales; nunca mencionan los ázimos ni Pentecostés; la
Pascua aparece solo en Ezequiel y la de las chozas en Ezequiel y Zacarías.
Estos textos son exílico o postexílico.
Dentro de los actos del culto merecen una atención especial los sacrificios en
sus diversas modalidades; para el antiguo Israelita un culto sin sacrificio es
inconcebible. Los argumentos que se presentan contra los sacrificios son los
siguientes:
 Crean una falsa idea de Dios, como si él tuviese necesidad de alimento,
como si tuviera hambre.
 No corresponde a la experiencia originaria del desierto como lo afirman
Amós (5,15) y Jeremías (7,21-28) y presentan los sacrificios como una
mera invensión humana. Pero en el desierto se ofrecieron sacrificios; al
menos la Pascua.
 A Dios no le agradan, no los quire. Misericordia quiero y no sacrificios,
conocimiento de Dios, no holocaustos y Miqueas es aún más fuerte al
respecto (6,6-8) que refiere que son malos en sí mismos.
Respecto a los ministros del culto, son objeto de fuertes críticas por parte de
los profetas. Se conoce el conflicto de Amós con Amasías, de Isaías con sus
contemporáneos y de Jeremías con Pasjur. El catalogo de las acusaciones es
amplio: borrachera, ambición, profanación de lo sagrado y violación de la Ley,
extraviar al pueblo, rechazar el conocimiento de Dios, asesinatos, desinterés
por dios, abuso de poder, fraude, impiedad.

LA OTRA CARA:

Si nos quedamos solo con los textos anteriores, llaegaríamos a la conclusión


de que los profetas atacaron al culto de forma sistemática. La línea descrita
anteriormente es la predominante, pero no es la única. Profetas importantes
como Ezequiel conceden al culto un puesto fundamental en su visión del futuro
para este profeta, sacerdote; los sacrificios y las fiestas juegan un papel
importante y capital en la nueva Jerusalén. Otros profetas postexílicos, no
esperan la aparición de un nuevo mundo para exhortar a sus contemporáneos
a la recta práctica cultual. Ageo anima el pueblo a reconstruir el templo
incendiado por los Babilonios en el 586; pues, dejarlo en ruinas es una muestra
de ingratitud para con Dios (1,9) y no tolera la falta de interés de os
contemporáneos al respecto.; los israelitas no pueden desinteresarse del culto
como si fuera algo inútil o superfluo. Zacarías asegura que la reconstrucción
del Templo será llevada a cabo por Zorobabel y lo presenta como uno de los
mayores dones de Dios a la comunidad.
En lo referente al tiempo sagrado, adquiere gran valor el sábado, del que
encontramos una defensa apasionada en Jeremías (17,21-22) y de no
cumplirse acarreará la destrucción de Jerusalén. Malaquías se presenta a
favor de los sacrificios; los sacrificios que se ofrecían eran los peores, cojos
enfermos, robados y decía “ofrecédselos al gobernador a ver si le agradan”
(1,8).

Con lo anterior podríamos concluir que cuando el culto se convierte en una


pasión que hace olvidar otras realidades mucho más importantes, el profeta lo
denuncia y ataca con virulencia inimaginable. Cuando el culto desaparece de la
perspectiva del pueblo y del individuo, el profeta subraya su importancia.

EL MENSAJE PROFÉTICO Y EL DEL NUEVO TESTAMENTO:

Los Escritos neotestamentarios admiten que hay algo mucho más importante
que el culto sacrificial de los antiguos Israelitas: la voluntad de Dios.

Mateo lo afirma claramente: misericordia quiero y no sacrificios. El escritor de la


carta a los hebreos, comentando el salmo 40,7-9, escribe: Sacrificios y
ofrendas, holocaustos y víctimas expiatorias no los quieres ni te agradan…. Y
añade: Aquí estoy para cumplir tu voluntad. Deroga lo primero para establecer
lo segundo.

Jesús captó el problema de la misma manera que los profetas críticos. Lo que
a Dios le agrada no son los sacrificios, sino el cumplimiento de su voluntad.

Hay cosas más importantes que el espacio sagrado, como lo es la forma de


adoración que se tributa a Dios, (en espíritu y en verdad). El nuevo Testamento
elimina muchas cosas del culto antiguo, introduce o mantiene elementos que
se insertan en la misma perspectiva.

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