La Tradición Antropológica y La Diversidad Cultural - Joaquín Beltrán
La Tradición Antropológica y La Diversidad Cultural - Joaquín Beltrán
La Tradición Antropológica y La Diversidad Cultural - Joaquín Beltrán
antropológica
y la diversidad
cultural
Joaquín Beltrán Antolín
PID_00141600
FUOC • PID_00141600 La tradición antropológica y la diversidad cultural
Índice
Introducción .............................................................................................. 5
Objetivos ..................................................................................................... 6
Resumen ...................................................................................................... 36
Actividades ................................................................................................. 37
Solucionario ............................................................................................... 38
Glosario ....................................................................................................... 38
Bibliografía ................................................................................................ 39
Anexo ............................................................................................................ 40
FUOC • PID_00141600 5 La tradición antropológica y la diversidad cultural
Introducción
Los diferentes tipos de interrelaciones que se desarrollan han dado lugar a la for-
mulación de varios paradigmas, aunque ninguno de ellos es capaz de abordar
toda la complejidad de los intercambios, quedándose en meras aproximaciones
a la realidad o en justificaciones de determinados intereses. La interculturalidad
constituye un nuevo paradigma de la pluralidad cultural que trata de superar las
limitaciones de la aproximación previa del multiculturalismo.
FUOC • PID_00141600 6 La tradición antropológica y la diversidad cultural
Objetivos
En este módulo, se analizan las bases antropológicas sobre las cuales se funda-
menta la diversidad cultural. Los objetivos que se pretende que el estudiante
alcance son los siguientes:
El término cultura no se aplica para referirse a una sociedad hasta el siglo XVIII,
momento en el que también empezará a utilizarse como sinónimo de civiliza-
ción. Cultura era una palabra en singular, una característica o atributo común
a toda la humanidad, algo que, al fin y al cabo, diferenciaba y separaba al ser
humano de la naturaleza. Desde este punto de vista, la cultura es todo lo que
una persona comparte con el resto de los seres humanos, privilegiando lo hu-
mano en su totalidad y universalidad. Esto suponía la existencia de una uni-
dad psíquica de la humanidad.
Lectura recomendada
Por otro lado, el concepto alemán de kultur o cultura se utilizó para ha-
Para un análisis del estado de
blar por primera vez de culturas en plural, considerándolas especificida- la cuestión del concepto
de civilización, véase:
des concretas y peculiares de grupos o formaciones sociales determinadas
E.A. Tiryakian (ed.).
geográfica e históricamente. “Rethinking Civilizational
Analysis”. International
Sociology (vol. 16, núm. 3,
septiembre 2001).
“El concepto de civilización atenúa hasta cierto punto las diferencias nacionales entre los
pueblos y acentúa lo que es común a todos los seres humanos o debiera serlo desde el
punto de vista de quienes hacen uso del concepto. En él se expresa la conciencia de sí
mismos que tienen los pueblos cuyas fronteras y peculiaridades nacionales hace siglos
que están fuera de discusión porque están consolidadas, de pueblos que hace mucho
tiempo que han desbordado sus fronteras y que han realizado una labor colonizadora
más allá de ellas. [...] el concepto alemán de cultura pone especialmente de manifiesto
las diferencias nacionales y las peculiaridades de los grupos [...]. Manifiesta la tendencia
a la delimitación, así como a poner de manifiesto y a elaborar las diferencias de grupo.”
Desde un primer momento, la antropología sienta sus bases sobre unos gran-
des temas que no han cesado de debatirse. La diversidad cultural constituye el
objeto fundamental de análisis en torno al cual se articulan los debates, dando
lugar a distintas perspectivas que, una y otra vez, son reformuladas. En defini-
tiva, se trata de conjugar la idea de cultura como algo distintivo de los seres Lecturas recomendadas
humanos con la diversidad de su manifestación encontrada a lo largo del Los debates sobre la
diversidad cultural aparecen
tiempo y del espacio. en todos los manuales de
antropología. Para una visión
general, véase:
A. Barnard (2000). History
1.2.1. Universalismo frente a particularismo and theory in Anthropology.
Cambridge: Cambridge
University Press.
Habitualmente, estos dos conceptos se han considerado irreconciliables, uno T.H. Eriksen; F.S. Nielsen
(2001). A history of
excluía el otro. El problema de fondo era que el universalismo se solía limitar Anthropology. Londres: Pluto
Press.
a la expresión y extensión de unos determinados valores occidentales, represen-
FUOC • PID_00141600 9 La tradición antropológica y la diversidad cultural
tativos de una determinada particularidad cultural, a los que se les otorgaba car-
ta de “naturaleza” universal. Esta perspectiva se olvidaba de que la condición
humana compartida siempre se manifestaba de forma diferente. Ello no signifi-
ca que lo particular excluya lo universal, sino que es precisamente por medio de
las concreciones específicas como se puede alcanzar lo universal.
Lecturas recomendadas
Desde el particularismo, las culturas están constituidas por grupos so-
Para ampliar los términos
ciales discretos y limitados, diferentes y separados unos de otros. La hu- del debate del universalismo
manidad es así una categoría fragmentada más que algo universal. frente al particularismo
y la crítica a la razón
ilustrada, se puede leer:
A. Semprini (1997).
“Le noeud gordien
épistémologique”. En: Le
La otra visión que predomina durante gran parte del siglo XIX se relacionaba con multiculturalisme (págs. 57-69).
las ideas de la racionalidad ilustrada, el positivismo y el determinismo. París: PUF.
J.S. Kahn (1995). “Culture,
difference and the expresivist
La Ilustración pretendía acabar con las costumbres y tradiciones diferentes en critique of Modernism”. En:
Culture, Multiculture,
nombre de la razón y del progreso. Sus defensores eran los portavoces de una Postculture (págs. 18-47).
Londres: Sage.
humanidad universal y común y se consideraban los poseedores de la verdad
con una base científica. Pensaban que el hecho de enfrentarse al mundo ra-
cionalmente liberaba a las personas del dominio irracional de las culturas par-
ticularistas. Eran los propagandistas de la libertad y la igualdad para toda la
humanidad. Su proyecto consistía en el ideal de una humanidad común con
objetivos universales: el reino universal de la razón.
Las perspectivas aparentemente opuestas que enfrentan la cultura con las cul-
Lecturas recomendadas
turas son, en realidad, complementarias. Todos los seres humanos comparten
Un análisis interesante
una serie de características que son universales y les distinguen de las otras es- del concepto jerárquico
frente al diferencialista
pecies animales: la capacidad de comunicación simbólica, de transmisión de de cultura se encuentra en:
conocimientos de una generación a otra, de valorar, juzgar, actuar, adaptarse Z. Bauman (2002). La cultura
como praxis. Barcelona:
al medio que les envuelve y transformarlo. Estas características, junto a mu- Paidós.
chas otras, son comunes a cualquier ser humano y, en este sentido, se puede Asimismo, el universalimo es
objeto de discusión en:
decir que la cultura es un fenómeno universal. T. Eagleton (2001). La idea
de cultura. Barcelona: Paidós.
Lecturas recomendadas
La idea de irreductibilidad o inconmensurabilidad de las culturas surge del En estos capítulos, podéis
encontrar un análisis
hecho de llevar hasta las últimas consecuencias la crítica que cuestiona la in- centrado en los problemas
de la comparación:
vestigación de categorías y leyes universales por medio de la comparación. La T. San Román (1996).
irreductibilidad o supuesta incapacidad de encontrar cosas en común entre “Relativismo relativista:
Inconmensurabilidad versus
personas portadoras de culturas diferentes se puede transformar en un senti- incompatibilidad”. En: Los
muros de la separación (págs.
miento de incompatibilidad que se pone de manifiesto en la imposibilidad 119-133). Madrid: Tecnos.
de la comunicación, la separación total y el conflicto inevitable. U. Hannerz (1998). “Cuando
la cultura está en todas
partes: Reflexiones sobre
un concepto favorito”. En:
El problema de la comparación es que siempre se parte de un punto de vista Conexiones transnacionales
concreto que selecciona y determina una serie de criterios sobre los cuales ha- (págs. 55-75). Madrid:
Cátedra.
cerla. Por tanto, implica juicios de valor que, a veces, van acompañados de la
FUOC • PID_00141600 11 La tradición antropológica y la diversidad cultural
Ulf Hannerz (1998) afirma que tan sólo mediante la comparación cultural sis-
temática es posible discernir el continuum y la interdependencia de las dimen-
siones universales, colectivas y singulares de los seres humanos.
Alan Barnard (2000, págs. 99-100) elabora una clasificación de los distintos ti-
pos de relativismo que se han desarrollado dentro de la antropología:
2) Relativismo normativo. Dado que cada cultura juzga a las demás de acuerdo con sus
propios estándares, no existen estándares universales para juzgar culturas. Hay dos tipos
de relativismo normativo, que son los siguientes.
b) Relativismo moral. Todo juicio ético y estético se hace en términos de valores cultu-
rales específicos y no de valores universales.
Para tratar de ver el mundo desde el punto de vista propio de cada cultura, hay
Lecturas recomendadas
que distanciarse de cualquier juicio moral o cuestionar la existencia de juicios
La mayoría de las etnografías
de valor únicos. El relativismo es necesario para conocer y contextualizar las de antropología constituyen
ejemplos prácticos del
diferentes culturas, aun a pesar del riesgo de caer en un relativismo ético ab- relativismo, dado que tratan
soluto que imposibilite tanto las generalizaciones teóricas como la mera posi- de describir las culturas desde
sus propios presupuestos.
bilidad de comunicación y conocimiento. Para desarrollos teóricos
sobre el relativismo cultural,
se pueden leer estos libros:
Todo relativismo siempre será relativo en sí mismo y su importancia radica en C. Geertz (1996). Los usos
el hecho de que aporta una actitud crítica respecto al etnocentrismo presente de la diversidad. Barcelona:
Paidós.
en cada sociedad. La experiencia de la diversidad es paralela al argumento re- T. Todorov (1991). Nosotros
y los otros. Reflexión sobre la
lativista, puesto que constata la existencia de diferentes maneras de explicar y diversidad humana. México:
entender todo lo que nos rodea y la manera de organizarnos socialmente. Siglo XXI.
T. San Román (1996). Los muros de la separación. Ensayo sobre alterofobia y filantropía
(págs. 109-110). Madrid: Tecnos / UAB.
FUOC • PID_00141600 14 La tradición antropológica y la diversidad cultural
Por tanto, “los otros” siempre han estado presentes en la vida de cada pueblo.
Otro tema es cuándo se convierten en objeto de estudio por sí mismos y el de-
safío que introducen en la autocomplacencia y el sentimiento de superioridad
del mundo del pensamiento ilustrado. Ese momento coincide con la institu-
cionalización de la antropología como la disciplina científica orientada a dar
cuenta de la diversidad cultural observada. Las primeras escuelas antropológi-
cas son el resultado del contexto intelectual europeo de mediados del siglo XIX
y, sin duda, estaban directamente relacionadas con los proyectos imperialis-
tas: el conocimiento del otro era un instrumento clave para el poder.
Durante esta época, los distintos pueblos y culturas eran tratados como un re-
flejo invertido de los europeos, más que como entidades en sí mismas con su
propia historia.
El interés por el otro quedaba limitado a los libros de viaje, por una par-
te, y a la filosofía social, por otra, que comenzaba a especular sobre la
unidad y variabilidad de los seres humanos.
Desde el primer momento, se hace eco del debate entre los principios aporta-
dos por el pensamiento ilustrado con su énfasis en la razón, el universalismo,
el individuo, la igualdad y el progreso, y la reacción del Romanticismo alemán
que sienta las bases para el nacionalismo moderno en tensión con la tradición,
dirigiendo su interés hacia grupos sociales específicos, los sentimientos, el len-
guaje, etc.
2.2.1. Evolucionismo
Para sus fines, era necesario recurrir a una comparación sistemática a partir de
datos empíricos detallados. Se trataba de determinar zonas culturales concre-
tas, y localizar su centro y los movimientos de difusión de sus rasgos hacia la
periferia y hacia otras áreas culturales. De algún modo, la influencia difusio-
nista ha llegado hasta la actualidad en las teorías de la dependencia, del siste-
ma-mundo y en los estudios de la globalización.
2.2.3. Funcionalismo
“Las culturas son psicologías individuales agrandadas al ser proyectadas sobre la pantalla,
hasta adquirir proporciones gigantescas y [existir durante] un largo periodo de tiempo.”
Benedict, R. (1932). Configurations of culture in North America. American Anthropologist, 34, 24.
Esta diversidad significa que es necesario negociar los valores, las normas,
representaciones y prácticas para conseguir un consenso que siempre es-
tará sujeto a cambios en la medida en que el equilibrio de las relaciones
de poder que dieron lugar a ese acuerdo se altere.
Desde esta perspectiva, se puede afirmar, como hacen F.J. García y J.B. Mon-
león (1999), lo siguiente:
“La cultura es, por definición, híbrida, es decir, abierta, cambiante, negociable, sujeta a mo-
dificaciones. Sin embargo, ‘esa gran organización de la diversidad que es una cultura’ no se
materializa fuera de las relaciones de poder (inter e intraculturales), ni de la economía.”
F.J. García Selgas; J.B. Monleón (1999). “Introducción”. En: Retos de la postmodernidad
(pág. 24). Madrid: Trotta.
Después de la Segunda Guerra Mundial, se produjeron dos hechos que han marcado una
nueva sensibilidad hacia la diversidad cultural: uno es el genocidio judío en nombre de
la pureza, irreductibilidad e incompatibilidad de las culturas; el otro, el proceso de des-
colonización y el desarrollo de nuevas identidades culturales anteriormente reprimidas y
silenciadas. Estos dos hechos cuestionan la supuesta universalidad y superioridad de la
cultura occidental. Entre estos dos parámetros, irrumpe la interculturalidad.
“La historia de las relaciones entre Europa y China ha dependido en alto grado de las
ideas europeas acerca del Reino Central y de los cambios experimentados por esas ideas
como consecuencia no sólo de las mudanzas ocurridas en la misma China, sino también
de las peripecias de la historia europea. Pues los cambios en Europa han venido a sumi-
nistrar a los europeos un cambiante punto de comparación desde el cual considerar a los
chinos, y también han determinado la mudanza de deseos y necesidades susceptibles de
ser satisfechos por conceptos acerca de China adecuados al momento. Así resulta que
China ha sido tenida en uno u otro momento por rica y por pobre, por adelantada y por
atrasada, por sabia y por necia, por bella y por fea, por fuerte y por débil, por honrada y
por embaucadora: la lista de las cualidades contradictorias que le han sido atribuidas no
tiene límites.”
Dawson, R. (1970). El camaleón chino. Análisis de los conceptos europeos de la civilización chi-
na (págs. 12-13). Madrid: Alianza.
A veces, se han utilizado otras culturas como una figura retórica para criticar Lectura recomendada
la propia. El contacto con otros, junto con el distanciamiento de lo propio, el Un interesante análisis del
exotismo se puede encontrar
hecho de situarse afuera, puede ayudar a descubrir que los convencionalismos, el siguiente libro:
aquello que se considera natural, las asunciones y presupuestos tácitos de cada T. Todorov (1991). Nosotros
y los otros (parte IV: “Lo
cultura son, en realidad, el resultado de un largo proceso de construcción de exótico”, págs. 303-396).
México: Siglo XXI.
acuerdo con unos determinados intereses y contextos.
FUOC • PID_00141600 23 La tradición antropológica y la diversidad cultural
Uno aprecia lo “alejado por el hecho de estar alejado”, como nos recuerda
Tzvetan Todorov: “los mejores candidatos al papel ideal de exótico son los
pueblos y las culturas más alejados y más desconocidos”.
3.2. Aculturación
El contacto directo y continuado entre grupos sociales que tienen culturas di-
ferentes puede dar lugar al fenómeno de la aculturación, entendiendo como
tal los cambios producidos en la cultura original de un grupo o de ambos.
Si para los difusionistas el contacto entre culturas era el medio para la expan-
sión de atributos culturales de una cultura a otra, para los funcionalistas ese
mismo contacto y la interacción se consideraba el origen de la desintegración
cultural, lo cual, llevado a sus últimas consecuencias, justificaba políticas se-
gregacionistas como el apartheid con el fin de preservar las especificidades cul-
turales del riesgo de la presencia e influencia de extraños.
Por otro lado, la idea esencialista de cultura postula la tolerancia entre cultu-
El apartheid
ras separadas y autónomas que se consideran en peligro de desaparición si se
interrelacionan. La visión estática de cultura como algo dado en el pasado y El apartheid consiste en la legi-
timación institucional de las
que es necesario conservar, característica del Romanticismo alemán, no per- desigualdades sociales y com-
porta la separación física de los
mite la aceptación de la convivencia de la diversidad porque se considera des- grupos que coexisten, con la
integradora y peligrosa. creación de guetos.
3.3. Asimilación
Los contactos entre culturas pueden ser más o menos simétricos, dependiendo
de las posiciones de poder relativas que haya entre ellas. A veces se producen
reacciones de rechazo y conflictos, o se desencadenan movimientos de resis-
tencia y de revitalización de especificidades culturales. En otros casos, puede
dar lugar a la asimilación o pérdida de identidad cultural de un grupo o de
una persona cuando adopta completamente los valores, las creencias y prácti-
cas de otra cultura.
Al mismo tiempo, las culturas, en su interior, no están exentas de conflicto, sino Véase el modulo 3, “La emergencia
de la etnicidad”, para profundizar
que éste forma parte de su desarrollo, pues siempre hay contradicciones entre en el aspecto del conflicto.
las normas y la conducta, o entre varios grupos que tratan de imponer sus cos-
movisiones interesadas para legitimar su poder y autoridad sobre los demás.
A lo largo de la historia, los grupos dominantes de los nuevos estados han uti-
lizado la estrategia de reducir la diversidad interior y promover la homogenei-
dad cultural mediante el control de la escuela y los medios de comunicación
de masas, la imposición de una lengua determinada, unos símbolos y rituales,
la delimitación de unas fronteras y la reconstrucción y la invención de la his-
toria y de las tradiciones. El resultado ha sido la creación de imaginarios de
unidad monolítica y monocultural en contraste con el mundo exterior.
4.1. Homogeneización
Esto afecta tanto a las minorías autóctonas como a las formadas por procesos
migratorios.
4.2. Pluralismo
El término sociedad plural fue utilizado por primera vez por John S. Furnivall
(1944) y, con posterioridad, por M. G. Smith (1965) para describir la situación F. Barth influirá en
dada en los territorios colonizados donde coexistían colonizadores, nativos so- las teorías posteriores…
metidos y otros grupos intermediarios. Según estos autores, la dominación, el … de la división cultural
del trabajo y de las etnoclases.
conflicto y la inestabilidad eran las características de las sociedades plurales. Ambos planteamientos inciden
en la estratificación, especiali-
zación y encapsulamiento de
Otra interpretación diferente la aporta Frederick Barth (1969). Él apunta la po- unos determinados grupos ét-
nicos en nichos económicos
sibilidad de una coexistencia pacífica y armónica, afirmando que, en una so- concretos, dentro de la socie-
dad general de cada país.
ciedad plural, se combinan los contrastes étnicos con la interdependencia
FUOC • PID_00141600 29 La tradición antropológica y la diversidad cultural
Dentro del pluralismo cultural, la teoría del melting pot representa un modelo
de transición entre la inicial sociedad plural propia de un contexto colonial y
los modelos más recientes del multiculturalismo y la interculturalidad.
Melting pot
El resultado final, denominado melting pot, consistía en la pérdida de
la cultura previa de origen y la creación de una nueva que sería homo- La metáfora del melting pot (li-
teralmente, crisol) surge en el
génea. siglo XVIII en la literatura norte-
americana. Sin embargo, será
Israel Zangwill quien, en su
obra de teatro The melting pot
(1909), describa EE.UU. como
Sin negar la realidad del mestizaje, de la mezcla, se puede criticar esta visión un lugar donde todas las cultu-
ras de Europa se mezclen y re-
porque olvida las relaciones de poder entre los diferentes grupos que entran formulen.
en juego. No todos hacen las mismas aportaciones, y los grupos dominantes
tienden a controlar la mezcla y a definir los contenidos de la nueva que pre-
coniza el modelo.
4.3. Multiculturalidad
ligiosos que buscan el reconocimiento y el respeto a sus diferencias. Estos Cada vez hay más literatura
dedicada al análisis
grupos han desarrollado movimientos sociales en torno a un sistema de valo- del multiculturalismo.
res, un estilo de vida, sentimientos de identidad o de pertenencia a colectivos Por ejemplo:
M. Martiniello (1998).
o con experiencias comunes de marginalidad. Habitualmente se les ha some- Salir de los guetos culturales.
Barcelona: Edicions
tido a prácticas de exclusión, por lo que reivindican el derecho a ser reconoci- Bellaterra.
dos y tratados como iguales por el grupo dominante. W. Kymlicka (1999).
Ciudadanía multicultural.
Barcelona: Proa/Ediuoc.
El apogeo del multiculturalismo se asocia a la crisis del estado-nación y de la A. Semprini (1997). Le
multiculturalisme. París: PUF.
hegemonía del racionalismo ilustrado y universalista. Andrea Semprini (1997)
distingue diferentes modelos de cohesión en el espacio multicultural:
1)Modelo político liberal clásico. Existe una clara distinción entre la vida pública y pri-
vada. Se fijan los derechos y deberes cívicos y políticos de los individuos que adquieren
el estatus de ciudadano en igualdad absoluta con los otros. Se supone que el espacio pú-
blico es neutro y homogéneo, y las diferencias quedan confinadas al ámbito privado.
3)Modelo multicultural maximalista. Hay grupos que reclaman la separación y una au-
tonomía política completa. Los factores culturales y étnicos son más valorados que la ciu-
dadanía. Presupone la fragmentación, separación y yuxtaposición de múltiples espacios
monoculturales que reivindican una identidad específica.
Concebir la realidad social de este modo puede ser una nueva justificación del
racismo, en este caso sobre una base cultural, al proporcionar nuevos argu-
mentos a la segregación, separación y exclusión en nombre del respeto y el re-
conocimiento de la diferencia.
4.4. Interculturalidad
La sociedad es plural. Los grupos y las culturas son siempre construcciones so-
Lectura complementaria
ciales, contingentes, flexibles, con movilidad y en cambio constante. Las rela-
Una interesante recopilación
ciones entre los grupos deberían responder a la negociación continua, al de trabajos sobre la relación
consenso siempre elaborado ante unas condiciones y circunstancias cambian- entre antropología y
traducción o mediación se
tes. Hablamos de intercambio, de diversidad, de heterogeneidad, de diálogo, encuentra en este libro:
G. Pálsson (ed.) (1993).
de comunicación y de la posibilidad de traducción. En este sentido, Hannerz Beyond boundaries.
(1993) reafirma la necesidad continua de mediaciones: Understanding, translation and
anthropological discourse.
Londres: Berg.
“El cambio de mosaico global a ecúmene global como metáfora básica de la antropología
depende de poner nuestra atención en el hecho de que las discontinuidades cada vez son
más relativas y, en consecuencia, las mediaciones afectan a prácticamente todos los ám-
bitos. De hecho, siempre están adoptando nuevas formas, conforme nuevas culturas y
nuevas diferencias son continuamente generadas en este mundo tumultuoso. [...] Noso-
tros, antropólogos, tenderemos a mediar las mediaciones. [...] Debemos repensar nuestra
antropología con el fin de mantenernos al tanto de este mundo.”
U. Hannerz (1993) Mediations in the global ecumene, en G. Pálsson (ed.) Beyond Boundaries,
pp. 56-57. Oxford: Berg (traducido y adaptado del original).
Por tanto, es necesario relativizar, admitir que nadie posee definiciones, expe-
riencias y conciencias definitivas y absolutas. Implica superar las dualidades,
y armonizar las diferencias, la reciprocidad y el diálogo. La sociedad debe ser
abierta para ser pluralista.
T. San Román (1996). Los muros de la separación. Ensayo sobre alterofobia y filantropía
(pág. 132). Madrid: Tecnos / UAB.
FUOC • PID_00141600 34 La tradición antropológica y la diversidad cultural
Las diferencias culturales son manipuladas por algunos sectores sociales como
justificación de la marginación, ocultando y enmascarando los factores econó-
micos y políticos que subyacen. En la actualidad, el término cultura se ha trans-
formado en “el territorio semántico clave del discurso político” (Stolcke, 1994).
Lectura complementaria
El reciente desarrollo de lo que podríamos denominar fundamentalismo
El texto donde se desarrolla
cultural consiste en la sustitución de la categoría raza por la de cultura. el concepto de
fundamentalismo cultural
por primera vez lo podéis
encontrar en la siguiente
obra:
La cultura se naturaliza, reifica y esencializa, ejerciendo las mismas funciones V. Stolcke (1994). “Europa:
nuevas fronteras, nuevas
que antes realizaba la biología para fundamentar la jerarquización de superio- retóricas de exclusión”.
ridad-inferioridad y la distribución desigual de riqueza entre los grupos huma- En: VV.AA. Extranjeros en el
paraíso (págs. 235-266).
nos antes identificados por la raza y ahora por la cultura. En la actualidad se Barcelona: Virus.
segrega espacialmente las culturas, se excluye a los otros. Teresa San Román
(1996) afirma:
“[...] biologismo y argumentación cultural del rechazo me parecen dos componentes al-
ternantes o compatibles del discurso de legitimación de la exclusión, de la discrimina-
ción, de la explotación [...].”
T. San Román (1996). Los muros de la separación. Ensayo sobre alterofobia y filantropía
(pág. 234). Madrid: Tecnos / UAB.
Como nos advierte Verena Stolcke (1994), la aportación de esta nueva argumen-
tación culturalista que se superpone al racismo de antes consiste en lo siguiente:
“La asunción de que las relaciones entre las diferentes culturas son por naturaleza hosti-
les y mutuamente destructivas porque el etnocentrismo es consustancial a la naturaleza
FUOC • PID_00141600 35 La tradición antropológica y la diversidad cultural
humana. Por tanto, las diferentes culturas deberían mantenerse separadas por su propio
bien.”
V. Stolcke (1994). “Europa: nuevas fronteras, nuevas retóricas de exclusión”. En: VV.AA.
Extranjeros en el paraíso (pág. 243). Barcelona: Virus.
En este mismo sentido, y para concluir, valgan las palabras de advertencia que
cierran el análisis de la idea de cultura de T. Eagleton (2001):
“Hemos visto cómo la cultura ha asumido una nueva dimensión política, pero, también,
cómo ha adquirido una importancia desproporcionada. Es hora, pues, de reconocer todo
su alcance, pero, también, de volver a ponerla en su sitio.”
T. Eagleton (2001). La idea de cultura. Una mirada política sobre los conflictos culturales
(pág. 193). Barcelona: Paidós.
FUOC • PID_00141600 36 La tradición antropológica y la diversidad cultural
Resumen
Las culturas siempre han estado en contacto y sus relaciones han dado lugar a
diferentes fenómenos de cambio. La convivencia de distintas culturas en un
mismo espacio puede ser más o menos conflictiva y suelen entrar en juego re-
laciones de poder.
Actividades
1. Buscad ejemplos cotidianos de los distintos usos y conceptos de cultura.
2. Trabajad el debate del etnocentrismo y relativismo cultural con algún ejemplo que, habi-
tualmente, esté muy cargado de valor: los derechos humanos, llevar o no velo a la escuela, etc.
3. Descubrid y analizad las marcas del evolucionismo presentes en los discursos cotidianos
(conceptos de desarrollo, tercer mundo, modernidad, etc.).
4. Observad ejemplos de cultura y personalidad como pueden ser los estereotipos naciona-
les/étnicos/culturales: los andaluces son..., los franceses son..., los gitanos son..., etc.
5. Buscad muestras de exotismo en nuestra sociedad. Por ejemplo, las agencias y los libros
de viajes, la búsqueda de nuevas espiritualidades procedentes de lugares lejanos, el consu-
mo de determinadas drogas, la adopción de dietas extrañas (p. ej., la macrobiótica), las mo-
das como los tatuajes, etc.
6. Analizad los discursos políticos sobre la inmigración, tratando de descubrir los paradigmas
donde se encuadran.
Ejercicios de autoevaluación
1. ¿En qué sentido se equipara cultura a civilización?
Solucionario
1. Cuando se habla de cultura en singular, es decir, como un atributo común a toda la hu-
manidad.
4. El análisis de las semejanzas y diferencias entre culturas y el hecho de descubrir leyes a par-
tir de particularidades.
10. En la preferencia sistemática por lo que procede de lugares extraños frente a lo que es
propio.
11. La pérdida de identidad cultural de un grupo y/o persona al adoptar completamente los
valores, creencias y prácticas de otra cultura.
12. En la transformación de culturas diferentes en una única y nueva con una aportación
igual de todas ellas.
14. La comunicación, el diálogo y el intercambio entre personas que son portadoras de dife-
rentes culturas, en condiciones de igualdad.
Glosario
aculturación f Fenómeno producido por el contacto directo y continuo entre grupos que
tienen culturas diferentes con el resultado de cambios de la cultura original de un grupo o de
más de uno.
crisol de culturas m Forma idealizada de integración según la cual diferentes culturas for-
man una cultura nueva y distintiva.
en melting pot
etnocentrismo m Tendencia a interpretar el mundo que nos rodea y otras culturas y socie-
dades desde el punto de vista del observador, que exporta sus ideas y juicios de valor.
evolucionismo unilineal m Teoría que considera las culturas dentro de una única jerar-
quía de grados de desarrollo.
particularismo m Perspectiva que considera las culturas como entidades específicas y ais-
ladas.
relativismo cultural m Doctrina que postula que cada cultura tiene unos criterios propios
e intransferibles de comprender y explicar el mundo. Es decir, posee una moralidad, unos va-
lores y unas creencias acompañados de una lógica y racionalidad que es ajena para quienes
no forman parte de esa cultura.
Bibliografía
Barfield, T. (ed.) (2001). Diccionario de Antropología. Barcelona: Edicions Bellaterra.
Barnard, A. (2000). History and Theory in Anthropology. Cambridge: Cambridge University Press.
Dawson, R. (1970). El camaleón chino. Análisis de los conceptos europeos de la civilización china.
Madrid: Alianza.
Eagleton, T. (2001). La idea de cultura. Una mirada política sobre los conflictos culturales. Bar-
celona: Paidós.
Eriksen, T.H.; Nielsen, F.S. (2001). A History of Anthropology. Londres: Pluto Press.
García Selgas, F.J.; Monleón, J.B. (1999). “Introducción”. En: Retos de la postmodernidad
(págs. 11-29). Madrid: Trotta.
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Anexo