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Contenido y Selección de La Fórmula

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Contenido y selección de la fórmula

La variedad de los productos de alimentación enteral que se comercializa es notable. Para las
preparaciones más estériles es preferible utilizar productos comerciales y evitar la incorporación
de aditivos o fármacos. Cuanto menos se manipulen los productos, más seguros resultarán para
el paciente.

Composición de las fórmulas enterales:

 Proteínas.
La cantidad de proteínas en las fórmulas enterales varía entre un 6 y un 25% de las
kilocalorías totales. Es característico que las proteínas procedan de caseína, suero de
leche o aislado de proteína de soja. En ocasiones se les añaden aminoácidos específicos.

 Hidratos de carbono.
El porcentaje de calorías totales varía entre el 30 y el 85% de las kilocalorías. Suelen
usarse jarabe de maíz, derivados del almidón y la maltodextrina. A las fórmulas que van
a ser consumidas por vía oral se les añade sacarosa.

 Lípidos.
Constituyen entre el 1,5 y el 55% de las kilocalorías totales, generalmente derivados de
los aceites de maíz, soja, girasol, cártamo o colza.

 Vitaminas, minerales y electrólitos.


Las vitaminas y minerales que se encuentran en una fórmula trata de cubrir las
necesidades nutricionales básicas, sin embargo también suelen administrarse de
acuerdo con los requerimientos nutricionales en determinadas patologías. Los
electrólitos se aportan en cantidades relativamente escasas en comparación con los de
la dieta oral, y a veces necesitan aporte suplementario en caso de pérdidas por diarrea
o drenaje.

 Líquidos.
Las necesidades de líquidos en adultos se estiman en 1 ml de agua por kilocaloría
consumida o en 30-35 ml/kg de peso corporal habitual. Pero se puede aportar o reducir
líquidos en función de las necesidades.

Clasificación:

1) Fórmula polimérica estándar: se caracterizan por estar constituidas por una mezcla
definida de macro y micronutrientes, en cantidad y distribución adecuadas para
utilizarse como única fuente nutricional. Se requiere un estado óptimo de la digestión y
absorción gastrointestinal.

2) Fórmula elemental: son nutricionalmente completas (macro y micronutrientes), no


requieren una capacidad digestiva intacta y se usan en alteraciones severas del tracto
gastrointestinal.

3) Fórmula modular: contienen un solo nutriente para ser usado como complemento de
otra fórmula o en pacientes con necesidades nutricionales que no se ajustan a las
fórmulas antes mencionadas.

4) Fórmula artesanal: Son mezclas de alimentos debidamente licuados y homogeneizados


para que tengan una consistencia adecuada para ser administrados a través de una
sonda.

5) Fórmulas específicas:

a. Fórmulas para insuficiencia renal: Menor volumen de líquidos y


concentraciones de potasio, fósforo y magnesio. Contiene aminoácidos
esenciales pero no tiene oligoelementos ni vitaminas.

b. Fórmulas para insuficiencia pulmonar: Suele incrementarse 50% el contenido


de grasas de las calorías totales, con una reducción del contenido de
carbohidratos. El objetivo es reducir la producción de CO2 y aliviar la carga
ventilatoria en pulmones con insuficiencia.

c. Fórmulas para insuficiencia hepática: El objetivo de esta fórmula es reducir las


concentraciones de aminoácidos aromáticos e incrementar las de aminoácidos
de cadena ramificada.

Factores que deben tenerse en cuenta en la elección de una fórmula enteral:

 Capacidad de la fórmula para satisfacer las necesidades nutricionales del paciente.


 Densidad calórica y proteica de la fórmula.
 Función digestiva del paciente.
 Presencia de lactosa, que puede no tolerarse.
 Contenido de la fórmula en sodio, potasio, magnesio y fósforo.
 Tipo de proteínas, grasas, hidratos de carbono y fibra de la fórmula tolerables por la
capacidad digestiva y de absorción del paciente.
 Viscosidad de la fórmula en relación con el tamaño del tubo y el método de
alimentación.

Administración
La elección del método depende del estado clínico del paciente, su situación vital y las
consideraciones sobre calidad de vida. A medida que el estado del paciente cambia, puede
pasarse de un método a otro.

 Bolo
Es de elección para los pacientes que se mantienen
clínicamente estables y con estómago funcional.
Puede administrarse mediante jeringa en un
intervalo de entre 5 y 20 min, o con bomba o por
gravedad. Tres o cuatro alimentaciones en bolo
diarias pueden satisfacer las necesidades
nutricionales en la mayoría de los casos.

 Goteo intermitente
Se administra mediante goteo por bomba o por
gravedad. Se suele establecer una pauta de cuatro a
seis alimentaciones diarias, de entre 20 y 60 min. La
administración de la fórmula se inicia con 100-150 ml
por alimentación, aumentando gradualmente la
dosis en función de la tolerancia.

 Goteo continuo
La infusión por goteo continuo de la fórmula
requiere una bomba. Este método es adecuado
para pacientes que no toleran la infusión de grandes
volúmenes, como los que se administran por bolo o
por goteo intermitente. Los pacientes con
alteración de la función gastrointestinal son
candidatos a este método.

Complicaciones de la nutrición enteral

 Problemas de acceso.
o Fuga en el sitio de ostomía/estoma.
o Necrosis/úlcera/estenosis por presión.
o Desplazamiento/migración del tubo.
o Obstrucción del tubo.

 Problemas de administración.
o Contaminación microbiana.
o Mala colocación del tubo.
o Regurgitación.

 Complicaciones gastrointestinales.
o Estreñimiento.
o Vaciado gástrico retardado.
o Diarrea.
o Distensión/plenitud/espasmos abdominales.
o Intolerancia a los componentes de los nutrientes.
o Mala digestión/hipoabsorción.

 Complicaciones metabólicas.
o Intolerancia a la glucosa/hiperglucemia.
o Estado de hidratación: deshidratación/sobrehidratación.
o Hipoglucemia.
o Hiperpotasemia/hipopotasemia.
o Hiperfosfatemia/hipofosfatemia.
o Carencias de micronutrientes.

Control del paciente que recibe nutrición enteral

 Distensión y molestias abdominales.


 Ingesta y eliminación de líquidos.
 Residuos gástricos.
 Signos y síntomas de edema o deshidratación.
 Volumen y consistencia de heces.
 Peso.
 Idoneidad de la ingesta nutricional.
 Electrólitos séricos, nitrógeno ureico en sangre, creatinina sérica.
 Glucosa, calcio, magnesio, fósforo séricos.

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