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Neurociencia Cognitiva y Educacion

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Neurociencia Cognitiva y Educacin

Jos Gmez Cumpa UNPRG

Serie: Materiales del Postgrado Jos Gmez Cumpa neurocienciacognitiva@gmail.com josewgomez@gmail.com

Universidad Nacional Pedro Ruiz Gallo Rector : Jorge Cumpa Reyes Vicerrector Acadmico : Jos Ponce Ayala Escuela de Postgrado Director : Francis Villena Rodrguez Facultad de Ciencias Histrico Sociales y Educacin Decano : Mauel Tafur Morn Programa de Maestras Coordinador : Manuel Oyague Vargas Coordinador Acadmico : Jos W. Gmez Cumpa Coordinador de Investigacin : Julio C. Sevilla Exebio Mencin en Psicopedagoga Cognitiva Coordinador : Jos Gmez Cumpa Comit Asesor Internacional : Mara Teresa Esquivias Serrano (UNAM, Mxico), Francisco Herrera Clavero y M Inmaculada Ramrez Salguero, M Inmaculada Herrera Ramrez (Universidad de Granada, Espaa) Neurociencia cognitiva y educacin Equipo de trabajo Coordinacin y edicin : Jos Gmez Cumpa Colaboradores : M Inmaculada Herrera Ramrez Miguel ngel de la Cruz Vives Jess Martnez Velasco Fredy E. Gonzlez Lisette Poggioli Francisco Herrera Clavero M Inmaculada Ramrez Salguero Carlos Ruiz Bolvar Pablo Cazau Miguel Martnez Migulez

51-74-97-9775975 Fondo Editorial FACHSE, Ciudad Universitaria de Lambayeque, Per Compilacin y edicin: Jos Gmez Cumpa Impresin: Tiraje: 1000 ejemplares Primera edicin: septiembre 2004 Impresin: Imprenta Peruana SAC, Chiclayo, Per

Maestra en Ciencias de la Educacin Mencin en Psicopedagoga Cognitiva

NEUROCIENCIA COGNITIVA Y EDUCACIN


Jos Gmez Cumpa, editor

Lambayeque, 2004

Contenido Prlogo Presentacin Parte I Captulo 1 Captulo 2 Parte II Captulo 3 Captulo 4 Captulo 5 Parte III Captulo 6 Captulo 7 Captulo 8 Neurociencia: procesos neusofisiolgicos y pensamiento Distintos planteamientos sobre el problema cuerpo-mente El cerebro: Introduccin a la Neurociencia Cognitiva La ciencia cognitiva: enfoques y aplicaciones La ciencia cognitiva, una investigacin interdisciplinar. Etapas de su construccin Las ciencias cognitivas como contexto para interpretar las nuevas concepciones acerca del aprendizaje Perspectivas actuales de la investigacin en el rea cognoscitiva Neurociencia cognitiva y educacin Neurociencia y Educacin Estilos de aprendizaje: el modelo de los cuadrantes cerebrales El proceso creador a la luz de la Neurociencia

Parte IV Desarrollo del pensamiento Captulo 9 Teoras, programas y estrategias de desarrollo del pensamiento Captulo 10 Cognicin-Metacognicin Captulo 11 Habilidades cognitivas Captulo 12 Estrategias cognoscitivas: una perspectiva terica

Autores

Captulo 1: Distintos planteamientos sobre el problema cuerpo-mente 2: El cerebro: Introduccin a la Neurociencia Cognitiva 9: Teoras, programas y estrategias de desarrollo del pensamiento 3: La ciencia cognitiva, una investigacin interdisciplinar. Etapas de su construccin 4: Las ciencias cognitivas como contexto para interpretar las nuevas concepciones acerca del aprendizaje 5: Perspectivas actuales de la investigacin en el rea cognoscitiva 12. Estrategias cognoscitivas: una perspectiva terica 6: Neurociencia y educacin

Miguel ngel de la Cruz Vives

Doctor en Filosofa, I.E.S, Madrid e-Mail: macruz@platea.pntic.mec.es

M Inmaculada Herrera Ramrez, Licenciada en Psicopedagoga, Doctora en Psicopedagoga, Facultad de Educacin y Humanidades de Ceuta, Universidad de Granada. e-Mail: inmaculadah@hotmail.com Jess Martnez Velasco Fredy E. Gonzlez
Doctor en Filosofa, , Departamento de Filosofa, Universidad de Valladolid Universidad Pedaggica Experimental Libertador, Ncleo Maracay fgonzalez@ipmar.upel.edu.ve Lisette Poggioli, profesora del Instituto Pedaggico de Caracas lpoggiol@ucab.edu.ve.

Carlos Ruiz Bolvar, Ph. D., Coordinador General


de Investigacin Universidad Pedaggica Experimental Libertador Instituto Pedaggico de Barquisimeto. e-mail: cruizbol@cantv.net Pablo Cazau, Licenciado en Psicologa y Profesor de Enseanza Media y Superior en Psicologa, Buenos Aires e-mail: pcazau@hotmail.com Miguel Martnez Migulez, Doctor en Pedagoga por la Universidad Pontificia Salesiana de Roma. Profesor-Investigador Titular (Jubilado) en la Universidad Simn Bolvar de Caracas, Maestra de Psicologa y en el Doctorado de Ciencia Poltica (Universidad Simn Bolvar), y en el Doctorado de Estudios del Desarrollo del CENDES (Universidad Central de Venezuela e-Mail: miguelm@usb.ve

7: Estilos de aprendizaje: el modelo de los cuadrantes cerebrales 8: El proceso creador a la luz de la Neurociencia

Francisco Herrera Clavero

Doctor en Psicologa por la Universidad de Granada y Doctor en Filosofa y Ciencias de la Educacin por la U.N.E.D, profesor de la Universidad de Granada, Ceuta e-mail: fherrera@ugr.es

10: Cognicin-Metacognicin 11: Habilidades cognitivas

M Inmaculada Ramrez Salguero

Doctora en Filosofa y Ciencias de la Educacin por la Universidad Nacional de Educacin a Distancia, Catedrtica de la Universidad de Granada, Ceuta e-mail: iramirez@ugr.es

Prlogo
En las ltimas dcadas se ha progresado considerablemente en el conocimiento del cerebro y la inteligencia. Sabemos mucho ms no slo sobre la organizacin anatmica del cerebro y cmo circula en l la informacin, sino tambin sobre la interaccin con el mundo exterior, ya sea fsico, social o cultural. Estamos en el inicio de una revolucin en la formacin de una base cientfica de los procesos psicolgicos. Hemos avanzado mucho, por ejemplo, en la comprensin de los mecanismos moleculares muy ntimos que se producen en la comunicacin entre neuronas. El influjo nervioso se transmite de una neurona a otra a travs de una sustancia qumica (un neurotransmisor), liberada por la primera y reconocida por la segunda, gracias a unos receptores especficos. Conocemos ahora unos cuarenta neurotransmisores y ms de mil receptores, si incluimos los receptores del olfato. Sobre todo, cada da comprendemos mejor la naturaleza qumica y el funcionamiento del pensamiento y la inteligencia. La Neurociencia Cognitiva, ha asumido y asume la tarea de penetrar en la estructura y funcionalidad del cerebro humano. Esta disciplina, en construccin, es alimentada con un conocimiento interdisciplinario. Hoy (2004) podramos hacer la misma afirmacin de Tony Buzan, quien deca en 1992 que la mayora de nuestros conocimientos proviene de los ltimos diez aos. En efecto, hay un incremento exponencial de los estudios sobre el cerebro y las inteligencias, facilitados por las nuevas tecnologas, y el inters creciente en estos temas. Habiendo surgido hace algo ms de 20 aos, la Neurociencia Cognitiva es reciente: ha acumulado en los ltimos diez aos, el 95% de su saber. La dcada del cerebro, como se ha denominado a los noventas, ha dado sus productos y distintas reas pueden usufructuarlos, entre ellas la educacin. Los modelos educativos de nuestro milenio deben ser el resultado de estos nuevos descubrimientos. El conocimiento y el proceso de enseanza-aprendizaje, son su transmisor y difusor. La Neurociencia Cognitiva es el conocimiento que estudia las relaciones mente-cerebro, los procesos mentales desde un abordaje interdisciplinario. Las disciplinas que determinan el nacimiento de la Neurociencia

Cognitiva en los ltimos diez aos, son la Neuroanatoma (Estructura cerebral macro y micro), la Neurofisiologa (Funcionamiento cerebral), las Tecnologas de Neuroimgenes, las Ciencias Cognitivas (Psicologa Cognitiva, Teora de la Informacin, Teora de Sistemas), la Etologa. La Neurociencia Cognitiva se aplica en toda rea en que una persona, interactuando con su ecosistema, necesite optimizar sus funciones, entre ellas el rea educativa y su proceso de enseanza-aprendizaje. Resultado de esa aplicacin ser la posibilidad de optimizar las capacidades potenciales neurocognitivos de las personas, mejorando el aprendizaje significativo, el pensamiento superior, el pensamiento crtico, la autoestima y la construccin de valores. La Neurociencia Cognitiva permite en las personas optimizar el procesamiento de la informacin, desarrollar las inteligencias mltiples, el conocimiento y desarrollo de los sistemas representacionales, el desarrollo de los sistemas de memoria, la generacin de significados funcionales, y el desarrollo de inteligencia emocional. Todo ello se expresa en la emergencia de un modelo cognoscitivo de enseanza, caracterizado porque el profesor construye la informacin activamente con los alumnos (constructivismo); el profesor acta como coordinador-mediador; comunicacin pluridireccional (profesoralumno/alumno-alumno); el profesor explora la individualidad de los alumnos (estilos de aprendizaje); existen mltiples inteligencias en los alumnos y, acorde a ellas, se ensea y aprende; se privilegia la memoria comprensiva para ensear y evaluar; la realidad es el lugar principal de aprendizaje; cultiva la inteligencia analtica, prctica y creativa; el proceso de enseanza-aprendizaje se implementa en contextos reales o smiles a la realidad; el aprender a aprender en cualquier tema es el objetivo del aprendizaje; se induce la autonoma del alumno; se trata de reproducir la forma natural como aprende el cerebro; se induce el aprendizaje multisensorial; promueve el desarrollo intelectivo y afectivo; la enseanza del nivel de pensamiento superior es prioritario; es indispensable la articulacin del conocimiento previo con el nuevo (aprendizaje significativo); se aprende para resolver problemas; el aprendizaje es una tarea placentera, la motivacin es objetivo prioritario. Como vemos, hay fundamentos slidos para recusar los modelos clsicos de enseanza. Es decir, los nuevos modelos educativos del tercer milenio estn directamente relacionados con la Neurociencia Cognitiva, encuadrada dentro del paradigma de la Ciencia Cognitiva, brindando nuevas teoras, mode-

los y estrategias operativas para la educacin , tanto presencial como a distancia. La Neurociencia Cognitiva tiene su potencial aplicacin en diversas reas en las que se necesite optimizar funciones, entre ellas el rea educativa y su proceso de enseanza-aprendizaje. Los resultados que se obtienen evidencian una optimizacin del procesamiento de la informacin, el desarrollo de las inteligencias mltiples en cada alumno, la generacin de significados funcionales, el desarrollo de los diversos sistemas de memoria, y nos permite conocer y desarrollar los sistemas representacionales propios de cada alumno. Por ltimo, las diferencias entre el clsico y el nuevo modelo de enseanza - aprendizaje son centrales para comprender como debemos desarrollar las nuevas tecnologas aplicadas a la educacin. Desde el rol del profesor, pasando por la motivacin del alumno y el aprendizaje multisensorial hasta la resolucin de problemas, son elementos fundamentales de los desafos que nos presenta la educacin del nuevo milenio.

Jos Gmez Cumpa


Universidad Nacional Pedro Ruiz Gallo

Presentacin
En este libro el propsito es de presentar los hallazgos ms importantes sobre la Neurociencia, y sus implicaciones en el surgimiento e impacto en la Ciencia Cognitiva, en relacin con los procesos de la inteligencia y de la educacin. En la primera parte, Neurociencia: procesos neusofisiolgicos y pensamiento, incluimos tres captulos. El primero presenta los antecedentes sobre la relacin cuerpo-mente, estableciendo las bases sobre las cuales a fines del siglo XX surgir la Neurociencia y la Ciencia cognitiva. El segundo captulo hace una presentacin general y detallada, sobre el cerebro, enfatizando las funciones cognitivas y emocionales, a partir de los ms recientes avances de la Neurociencia Cognitiva. En la segunda parte del libro, La ciencia cognitiva: enfoques y aplicaciones, incluimos tres captulos: el tercero, sobre las etapas de la construccin de las ciencias cognitivas, destacando su naturaleza mul.tidisciplinaria, compleja e inacabada. En el cuarto captulo nos plantea el enfoque de las ciencias cognitivas como contexto para interpretar las nuevas concepciones acerca del aprendizaje; y en el quinto se establecen las perspectivas y tendencias de la investigacin en el rea cognoscitiva, de un modo introductorio, ya que esta perspectiva ser desarrollada ms concretamente en la cuarta parte del libro. La tercera parte del libro trata de la Neurociencia cognitiva y educacin, con tres captulos, en el sexto se plantea una sistematizacin de los enfoques ms importantes sobre el cerebro y la inteligencia, remarcando algunas sugerencias aplicativas; el stimo captulo presenta uno de los modelos ms importantes sobre la concepcin y modificaicn de los estilos de aprendizaje; y el octavo analiza y hace propuestas sobre el proceso creador desde la perspectiva y los aportes de la Neurociencia. En la cuarta parte, titulada Desarrollo del pensamiento, con tres captulos, se trata del anlisis de las aplicaciones concretas de los descubrimientos en el desarrollo del pensamiento; as, el captulo nueve trata de las teoras, programas y estrategias de desarrollo del pensamiento; el decimo trata de la cognicin y la metacognicin y su aprovechamiento desde el punto de vista pedaggico, lo mismo que el onceavo captulo

que trata especficamente del desarrollo de las habilidades cognitivas. El doceavo captulo trata de sistematizar las estrategias cognoscitivas, desde el punto de vista de la teora del procesamiento d ela informacin. Esperamos que los materiales incluidos sean de utilidad para todos los maestros interesados en aportar a la mejora de la calidad educativa desde la Psicopedagoga. Agradecemos la generosidad de los autores que nos han autorizado a incluir sus trabajos en este volumen. Especialmente a los miembros de nuestro comit cientfico asesor, Mara Teresa Esquivias Serrano (UNAM, Mxico), y M Inmaculada Ramrez Salguero, Francisco Herrera Clavero y M Inmaculada Herrera Ramrez (U de Granada, Espaa). Ellos han aportado valiosas sugerencias, desde la concepcin misma de nuestra mencin de Psicopedagoga Cognitiva.

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Parte I
Neurociencia: Procesos neusofisiolgicos y pensamiento

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CAPTULO 1
Distintos planteamientos sobre el problema cuerpo-mente Miguel Angel de la Cruz Vives
La nocin de alma aparece ya en estadios muy antiguos del pensamiento humano y puede encontrarse de un modo u otro en todas las culturas. El enterramiento del cadver acompaado de alguno de sus objetos y los ritos funerarios, que aparece ya en el Hombre de Neandertal muestran los primeros signos de algn tipo de creencias relacionadas con la muerte y algn tipo de inmortalidad1. En trminos muy generales el alma o espritu es considerada como un principio de vida interno que reside en todos los organismos vivos y que posibilita y regula tanto sus funciones fisiolgicas como mentales. 1. Pueblos primitivos La concepcin que tienen del alma los pueblos primitivos y que podemos encontrar todava en algunas sociedades primitivas contemporneas como los aborgenes de Australia, las tribus del Amazonas o los esquimales, forma parte de su nocin precientfica del universo, segn la cual todos los fenmenos naturales (el curso del da y de las estaciones, las tormentas, los terremotos, etc.) estn producidos tambin por la accin de espritus. Se conoce con el nombre de animismo a aquellas creencias religiosas que consideran a todos los fenmenos de la naturaleza como dotados de un alma y, por tanto, con un comportamiento semejante al humano, es decir, dotados de vida, sentimiento y voluntad propias. Las almas actan sobre los cuerpos y existen independientemente por lo que pueden separarse de ellos. Esta separacin puede ser temporal, como ocurrira
1 Sobre las ideas religiosas de los Neandertales puede consultarse: Neandertales: una Ciberperspectiva, en http://platea.pntic.mec.es/~macruz/neander/ritual.html
I. PLANTEAMIENTO ANTIGUO: ALMA Y CUERPO

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en los sueos, la enfermedad o en estados de trance ritual y posesin, o ser definitiva, produciendo la muerte. El alma es concebida en la mayora de los casos como el soplo o aliento que posibilita la respiracin y tambin como una especie de fuego o calor vital que se extingue en el momento de la muerte. En otras culturas el alma es considerada como la sombra o doble del cuerpo. Segn las distintas culturas y religiones, el alma separada puede trasladarse a otro mundo, encarnarse en otro cuerpo, fundirse en el seno de un Alma csmica superior e incluso extinguirse y desaparecer. Tambin se suele considerar una pluralidad de almas con distintas funciones (conocimiento, emociones, etc.) coexistiendo en el mismo cuerpo. 2. Religiones orientales La idea de alma ocupa un lugar central en las religiones orientales. El hinduismo consideraba el alma individual (atmn) como el principio que controla todas las actividades y que forma parte de un alma universal (Brahma) a la que aspira volver a integrarse al cabo de un ciclo de reencarnaciones en distintos seres, tratando de alcanzar la purificacin y el conocimiento necesarios para ello. El budismo, en cambio, niega la existencia de un alma individual permanente o atmn. La persona no es sino la combinacin temporal de cinco realidades distintas que estn en cambio permanente: el cuerpo, los sentimientos, las percepciones, la predisposicin ante las cosas y la conciencia. No puede hablarse de la persona como de una unidad permanente ya que sus elementos constitutivos estn en continuo cambio; tampoco hay ningn alma personal que sobreviva a la muerte aunque el modo de vida y el conocimiento alcanzado durante una encarnacin determina el carcter de la reencarnacin siguiente en una nueva vida. El deseo de placer, poder y riquezas, de bienes individuales, en suma, genera una energa o karma que mantiene al individuo atado a la Rueda de la Vida (el ciclo de reencarnaciones), pues se ve contaminado por toda clase de impurezas (la codicia, el odio, la ignorancia) que son el origen de su infelicidad. El budista aspira alcanzar, mediante la supresin del deseo, un estado de conciencia o iluminacin (nirvana), que le libere de todas las impurezas que conlleva la existencia, para poder salir de la Rueda de la Vida, anonadndose en el Todo. De este modo, las dos filosofas orientales ms importantes defienden concepciones contrapuestas acerca del alma. Mientras el hinduismo afirma la existen-

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cia de un alma sustancial (atmn), para el budismo no hay ningn alma sustancial permanente sino un flujo continuo de estados de conciencia. 3. Pensamiento griego Podemos encontrar en las obras de Homero y Hesodo las ms antiguas creencias de los griegos sobre el alma humana. El alma (psique) aparece como un aliento que mantiene la vida del cuerpo inanimado (soma) y que le abandona cuando el ser humano muere o est moribundo o desmayado. Pero aparte de esta funcin puramente vital no parece tener ninguna otra. Tambin en los sueos se desprende temporalmente del cuerpo y realiza efectivamente las acciones que en l aparecen, puesto que para los griegos el contenido de los sueos se corresponde a algo real y no imaginario. Cuando sucede la muerte del ser humano, el alma escapa por la boca o las heridas y va al Hades como una sombra o imagen reconocible, ya que mantiene las caractersticas fsicas y morales que se construyen durante la vida. Sin embargo no alcanza propiamente una vida inmortal porque separada del cuerpo carece del vigor necesario y lleva una existencia lnguida y tenue. Por su falta de corporeidad tampoco puede actuar sobre el mundo fsico. La verdadera vida solo es posible cuando alma y cuerpo estn unidos y el alma en el Hades es algo as como el recuerdo inmaterial del individuo que existi. En el siglo VI a.C. aparecen los primeros planteamientos filosficos sobre el alma, que son ms bien una racionalizacin de las ideas religiosas y mitolgicas que hemos descrito. Los primeros filsofos griegos conceban que todo aquello que est dotado de vida est regido por un alma en la que reside el principio que las lleva a nacer, desarrollarse y morir. Este alma es concebida como de naturaleza material, si bien de una materia distinta y ms sutil que la que constituye los cuerpos. El planteamiento de estos primeros filsofos es monista: alma y cuerpo no son de naturaleza radicalmente diferente sino manifestaciones distintas de la sustancia nica que constituye la totalidad de las cosas (arqu). El alma sigue siendo principio vital pero tambin la causa de todos los movimientos y cambios que se producen en el ser vivo (nacimiento, crecimiento, etc.). Sin embargo, al mismo tiempo se introducen en Grecia las ideas religiosas del orfismo, que plantean una concepcin dualista del ser humano: el alma que anima el cuerpo es de origen divino y eterna: preexiste al cuerpo, entra dentro de l y lo vivifica y sigue existiendo despus de la muerte y la corrupcin del cuerpo. El cuerpo es concebido, as, como una suerte de crcel del alma, y es tarea del ser humano liberar su alma por medio de ritos de purificacin. Mientras no alcanza esta purificacin, el alma se ve obligada a transmigrar de unos cuerpos a otros.

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Estas ideas fueron acogidas por los filsofos pitagricos, quienes vieron en el alma la causa de la armona de los constitutivos materiales de las cosas. Si el Cosmos est ordenado es en virtud de un Alma del Mundo que produce la estructura y la proporcin entre sus partes. Tambin en el ser humano el alma es lo que produce la armona del cuerpo (salud, vigor, etc.). Consideraron que toda armona es de naturaleza matemtica ya que pueden expresarse por medio de relaciones numricas cualquier tipo de realidad como el movimiento de los planetas, las figuras geomtricas, las melodas musicales, etc. Los pitagricos, a su vez, ejercieron una importante influencia sobre la concepcin filosfica del alma de Platn, para quien alma y cuerpo son de naturaleza totalmente distinta. De hecho, pertenecen a dos mundos distintos y separados: el cuerpo pertenece al Mundo sensible sujeto a cambio y corrupcin, mientras el alma pertenece al Mundo divino de las ideas siempre idntico a s mismo. Tambin Platn considera al alma como de naturaleza material, si bien de una materia distinta y ms pura que la que constituye los cuerpos del mundo sensible: su materia es la misma que la de las ideas. Los griegos no podan considerar algo como realmente existente si no est compuesto de algn tipo de materia. El alma es principio de vida y movimiento del cuerpo, pero totalmente independiente de l; aspira a liberarse del cuerpo para regresar a su origen divino, para lo cual debe purificarse de su contacto con el Mundo sensible. Esta liberacin no se realiza mediante ritos de purificacin como en el orfismo y el pitagorismo, sino alcanzando la sabidura. Aparece as una nueva dimensin del alma como principio de conocimiento. En el Mundo de las Ideas, de donde el alma proviene, se contienen los objetos propios del conocimiento racional (ideas) de los que las cosas del Mundo sensible no son sino sombras, reflejos o imgenes. A travs del cuerpo el ser humano conoce la multiplicidad cambiante de las cosas particulares por lo que el conocimiento sensible es siempre un conocimiento de rango inferior (opinin). El verdadero conocimiento (ciencia) consiste en la contemplacin de las ideas; esto es, los modelos a partir de los cuales han surgido todas las cosas del mundo sensible. Pero este conocimiento no se efecta con los ojos del cuerpo sino con los ojos del alma. El alma conoci estos modelos ideales cuando estaba separada y contiene dentro de s este conocimiento, pero al unirse al cuerpo se produce el olvido y es necesaria la aparicin sensible de las cosas para que el alma recuerde las ideas. Platn distingue tres partes del alma con funciones distintas: la parte concupiscible es la sede de los apetitos y deseos, la parte irascible es la sede de las pasiones nobles como el valor y la parte inteligible es la sede de la razn. Las dos prime-

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ras partes estn ligadas al cuerpo, rigen sus funciones y perecen con l, siendo la parte inteligible la nica separable del cuerpo y la que debe guiar y dominar sobre las otras dos, evitando sus excesos, y la que conduce al hombre a alcanzar la sabidura, en la que radica la verdadera felicidad. Aristteles, discpulo de Platn, enmarca el estudio del alma dentro del estudio general de los seres vivos. Por primera vez, la psicologa aparece como parte de la fisiologa. Todos los seres vivos tienen en s un principio vital o alma que regula todas sus funciones vitales. Aristteles elimina el dualismo entre Mundo sensible y Mundo inteligible de Platn, sustituyndolo por un dualismo entre materia y forma. La materia es pura indeterminacin (potencia: puede ser esto o aquello) que necesita ser determinada por una forma (acto: determina a esto como esto). Todo lo que existe esta compuesto necesariamente de una materia que adopta una determinada forma. En los seres vivos, el cuerpo es materia y el alma es la forma del cuerpo. No pueden darse el uno sin la otra, pero es en el alma donde residen las funciones vitales y es la causa y el principio de las actividades del cuerpo. El alma no es eterna ya que, estando ligada necesariamente al cuerpo, perece con l. Aristteles considera que hay tres tipos distintos de alma, cada uno de los cuales corresponde a una clase de seres vivos: as, las plantas tienen un alma vegetativa, que rige la nutricin, la generacin y el crecimiento; los animales tienen un alma sensitiva, que aade a las funciones del alma vegetativa la sensibilidad y el movimiento; por ltimo, el ser humano dispone de alma racional que aade a las anteriores el pensamiento y el razonamiento. Como en Platn, el alma es principio de vida y movimiento y principio de conocimiento. La nocin griega del alma est relacionada con su concepcin teleolgica del Cosmos, segn la cual la materia es eterna e indestructible y todos los cambios que se producen estn regidos por una fuerza interior (physis) que hace surgir las cosas, crecer, desarrollarse y reproducirse hacia un fin determinado que es, a su vez, el origen de todas las cosas y de todo movimiento. En Platn este fin ltimo es la Idea de Bien, de la cual han surgido el resto de las ideas, del que las cosas no son sino copias o imgenes y que es la fuente de la que procede la armona del cosmos. En Aristteles, el fin ltimo es el Primer Motor, origen de todo movimiento, incluido el que produce la mezcla de los elementos (tierra, aire, agua y fuego) que forman todas las cosas; este Primer Motor es inmvil y mueve todo lo dems hacia s mismo a travs del deseo sin ejercer ninguna accin, como el objeto de su amor mueve al enamorado.

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Mientras en Platn es afirmada expresamente la inmortalidad del alma, en Aristteles hay slo una oscura mencin a la posible eternidad de una Inteligencia Csmica, que sera nica para todos los seres humanos. Pero no encontramos ni siquiera en Platn la idea de inmortalidad personal. El alma se individualiza al encarnarse en un cuerpo pero no tiene carcter personal. Separadas de los cuerpos todas las almas son iguales (aunque ms o menos puras). Al encarnarse en un nuevo cuerpo adquieren una nueva individualidad. Aunque el alma sea inmortal el individuo no lo es, porque el alma est en el individuo pero no le pertenece sino que es algo ajeno 4. Pensamiento medieval Los planteamientos platnicos y aristotlicos llegaron hasta la filosofa medieval cuyos autores trataron de hacerlos compatibles con los dogmas de la religin cristiana y, fundamentalmente, con el dogma de la creacin. Frente a la idea griega de la eternidad del Cosmos, el cristianismo afirma la existencia de un Dios creador de todas las cosas. El alma humana ha sido creada de la nada por Dios y constituye un puente de unin entre lo material y lo divino. En algn momento entre la fecundacin y el nacimiento crea Dios el alma individual de cada ser humano. La unin entre el alma y el cuerpo no es as accidental como en Platn sino que adquiere un carcter personal: cada ser humano posee su propia alma que es puramente espiritual, sin nada de materia, y constituye la intimidad misma de la persona. La nocin de persona distingue al individuo propiamente humano del resto de los seres individuales. Cada ser humano no es slo un individuo sino tambin una persona porque est dotado de racionalidad y voluntad libre y autnoma por lo que pueden establecer entre s una comunicacin personal y ser responsables de sus actos. Desde esta perspectiva, el alma humana sigue siendo vida, pero una vida superior a la meramente biolgica. Es un conjunto de experiencias que engloba la subjetividad, la personalidad, la conciencia de s y la trascendencia. Es la persona entera, el compuesto de alma y cuerpo, no slo el alma, la que alcanza la inmortalidad, ya que mediante la contemplacin de Dios, el cuerpo material puede transformarse en "cuerpo glorioso". Los filsofos medievales distinguen tres funciones del alma: memoria, entendimiento y voluntad: cada persona tiene sus propias experiencias, sus propios pensamientos y razonamientos y toma libremente sus propias decisiones.

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II. PLANTEAMIENTO MODERNO: MENTE Y CUERPO2 1. El dualismo sustancial de Descartes A comienzos del siglo XVII, la obra de Galileo y Descartes ponen los cimientos de la ciencia y la filosofa modernas. Por un lado, la nueva ciencia de Galileo exiga la utilizacin de un mtodo de investigacin experimental para la explicacin de los fenmenos fsicos; por otro, la nueva filosofa de Descartes quiere sentar las bases de un pensamiento racional autnomo de las ideas religiosas, capaz por s solo de descubrir certezas. Se produce a partir de entonces en todas las esferas del conocimiento un cambio radical de perspectiva respecto a las cuestiones que se haban planteado desde Platn y Aristteles. En lo que respecta al problema que estamos examinando, la filosofa de Descartes supone la disolucin del planteamiento antiguo del problema como problema de la relacin entre el alma y el cuerpo en un Cosmos teleolgico, y la emergencia de un nuevo planteamiento del problema como problema de la relacin entre la mente y el cuerpo en un Cosmos mecanicista. La nueva ciencia de Galileo tiene como consecuencia una nueva concepcin de la Naturaleza que desplaza la antigua concepcin teleolgica del Cosmos, sustituyndola por una concepcin mecanicista, en la que la cuestin de los fines queda totalmente relegada. El Cosmos es concebido como un mecanismo de fuerzas en el que los cuerpos se influyen recprocamente segn leyes puramente mecnicas. Es posible conocer matemticamente las leyes que producen los fenmenos naturales, sin necesidad de plantearse la cuestin de la finalidad ltima de tales fenmenos. La concepcin teleolgica exiga elaborar teoras generales que explicaran la totalidad del universo. La concepcin mecanicista se limita a elaborar teoras particulares de un conjunto limitado de fenmenos. En el marco de esta concepcin mecanicista del Cosmos, Descartes elimina la nocin clsica del alma como principio de vida y movimiento, estableciendo una distincin radical entre el alma y el cuerpo. El alma es puro pensamiento pero carece de extensin. Los cuerpos son extensos y se rigen por causas puramente mecnicas pero son incapaces por completo de pensar. Alma y cuerpo son dos sustancias de naturaleza totalmente distinta y se encuentran separados. No hay ya un alma vegetativa o sensitiva que posi2 Para una ampliacin de los contenidos de este captulo puede consultarse: El problema mente-cuerpo: de Descartes aWilliam James, en: http://platea.pntic.mec.es/~macruz/mente/descartes/indice.html

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bilite y regule las funciones de los seres vivos y los dirija hacia un determinado fin, sino que son puros mecanismos cuyo funcionamiento es posible explicar mediante leyes mecnicas. El alma es algo totalmente diverso: una mente pensante que no se rige por leyes mecnicas sino por leyes lgicas que estn impresas en la mente en el momento del nacimiento. El dualismo sustancial de Descartes tiene importantes consecuencias: 1) Hace posible una explicacin mecanicista del Cosmos, independiente por completo de la religin. La regularidad mecnica de los fenmenos naturales hace posible su conocimiento cientfico. 2) Afirma la total libertad del pensamiento humano, ya que al ser la mente una sustancia totalmente distinta del cuerpo, no est sometida a las leyes mecnicas. 3) Se haca posible el estudio autnomo de la mente humana, ya que los fenmenos mentales no podan ser explicados como los fenmenos fsicos y la introspeccin es el nico acceso posible a los contenidos de la conciencia. Pero la separacin radical entre mente y cuerpo que haca posible la nueva ciencia introduca un problema de difcil solucin: Si alma y cuerpo son dos sustancias enteramente distintas, cmo las afecciones del cuerpo pueden producir las ideas de la mente y cmo las ideas de la mente pueden producir acciones del cuerpo? El problema de la relacin entre la mente y el cuerpo slo surge en los seres humanos, ya que, segn Descartes, la nica evidencia de que algo tiene mente es la posesin de lenguaje, por lo que ni los animales ni las mquinas tienen mente. 2. Intentos de solucin al problema de la relacin mente-cuerpo El problema de las relacin entre la mente y el cuerpo que surge del planteamiento cartesiano fue objeto de discusin durante los siglos siguientes y dista an hoy de estar resuelto. Para resolver este problema, Descartes propuso la existencia de un punto en el cerebro humano (la glndula pineal, que Descartes consideraba errneamente que slo se encontraba en los seres humanos) donde se establecera esta comunicacin. Pero esta solucin era totalmente inaceptable ya que supona la afirmacin de una sustancia que sera pensante y extensa a la vez lo que era contradictorio con la propia definicin cartesiana de la sustancia. Los filsofos racionalistas trataron de resolver el problema que presentaba el dualismo mentecuerpo, manteniendo la nocin de sustancia de Descartes: los fenmenos fsicos y los fenmenos mentales son totalmente diferentes, pero ni los procesos psquicos causan los fsicos ni viceversa, aun-

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que hay una correspondencia estricta entre unos y otros. Los principales intentos de solucin a este problema fueron los siguientes: 1) El ocasionalismo de Malebranche: Cada vez que se produce un movimiento en el alma, Dios interviene para producir el correspondiente movimiento en el cuerpo, y viceversa. 2) El monismo de Spinoza: Extensin y pensamiento no son propiamente sustancias sino dos de los atributos de una nica sustancia infinita: Dios o Naturaleza. Las ideas y las cosas seran modos de esa sustancia y se corresponderan estrictamente como las dos caras de una misma realidad. 3) La armona preestablecida de Leibniz: En el momento de la creacin, Dios ha establecido una perfecta armona entre las dos sustancias, como si se tratara de dos relojes perfectamente sincronizados que dan la misma hora. 3. La disolucin del sujeto cartesiano El dualismo sustancial de Descartes fue puesto en cuestin por una serie de desarrollos filosficos y cientficos posteriores: -El empirismo y el positivismo eliminaron el problema de la relacin entre la mente y el cuerpo del nico modo que era posible: eliminando la nocin cartesiana de sustancia. Abrieron con ello el camino al estudio de los fenmenos mentales utilizando la metodologa aplicada a los fenmenos fsicos. -El evolucionismo de Darwin puso en cuestin la radical separacin entre el hombre y el animal y abri la posibilidad de que no solo los seres humanos sino tambin los animales tuvieran mente. -El psicoanlisis de Freud puso en cuestin la identidad de la mente con la conciencia al afirmar la existencia de pensamientos y sentimientos inconscientes que actan sobre la conducta. a) El empirismo y el positivismo: constitucin de la Psicologa como ciencia Los filsofos empiristas ingleses de los siglos XVII y XVIII rechazaron la afirmacin cartesiana de que las leyes lgicas del pensamiento estn ya impresas en la mente en el momento del nacimiento, retomando la nocin aristotlica de que la mente no tiene ningn contenido en el momento del nacimiento y que todas las ideas, incluso las leyes lgicas del pensar, se adquieren a travs de la experiencia. Por consiguiente, todas las

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ideas de la mente tienen su origen en la experiencia sea esta experiencia del mundo exterior o experiencia de los propios estados internos. Pero no podemos tener experiencia de sustancia alguna: 1) Lo que nos ofrece la experiencia externa son las cualidades de las cosas (olores, colores, sabores, figuras, magnitudes, etc.) pero no de la pretendida sustancia a la que estn adheridas tales cualidades. 2) Lo que nos ofrece la experiencia interna es tan solo un flujo permanente de estados mentales, pero no es posible percibir ningn yo sustancial. Las ideas simples (un determinado matiz de un color, de un olor, etc.) son combinadas por la mente para formar ideas complejas (las ideas de las cosas) por medio de determinadas leyes de asociacin (por semejanza, por contigidad en el espacio y el tiempo y por relacin de causa-efecto ), que pueden descubrirse mediante la observacin y la experimentacin como las leyes fsicas. De este modo, frente a la introspeccin, proponen el asociacionismo, como mtodo psicolgico y abren el camino a una investigacin de los fenmenos mentales semejante al estudio cientfico de los fenmenos fsicos. El empirismo ingls constituy uno de los pilares fundamentales de la filosofa positivista que lleg a dominar el pensamiento europeo durante el siglo XIX. Para el positivismo, el nico conocimiento admisible es el que procede de los hechos y las relaciones entre los hechos, en el mbito de la experiencia sensible. El movimiento positivista trata de extender el mtodo de investigacin de las ciencias naturales al estudio de la mente humana y la sociedad, partiendo de los hechos comprobables por la experiencia para formular las leyes que los rigen. Por otro lado, durante el siglo XIX una serie de investigaciones y descubrimientos contribuyeron a allanar el camino para la aparicin de una psicologa cientfica: a) La frenologa: Franz Joseph Gall (1758-188) relacion las facultades psquicas con determinadas zonas del cerebro de modo que la forma y las dimensiones de las distintas zonas implicaran un mayor o menor desarrollo de las funciones psquicas relacionadas con ellas. Se crearon diversas tcnicas de medicin y examen del crneo y se cre una tipologa segn la cual la forma y estructura del crneo determinaba el desarrollo de una personalidad normal o patolgica, deficiente o genial, social o antisocial. b) La psicofsica: Tambin avanz mucho el estudio de la fisiologa del sistema nervioso y de la sensacin. Charles Bell describi las funciones de los nervios motores y sensitivos y mostr la relacin de los mismos con las diferentes partes del cerebro segn sus funciones. Pierre Flourens investig las funciones del cerebelo. Ernst Heinrich Weber estableci su ley de la sensacin (o Ley de Weber) en la que formulaba la relacin matemtica que exista entre la intensidad de un estmulo y la sensacin producida por ste. Estos y otros descubri-

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mientos llevaron a la conviccin de que era posible explicar mediante principios fsico-qumicos todos los actos humanos. Es en este marco que, en el ltimo tercio del siglo XIX, Wilhem Wundt (18321920) funda la Psicologa como ciencia de la mente y sus contenidos, en base a mtodos rigurosos de observacin y experimentacin. b) La teora de la evolucin En 1859, Charles Darwin (1809-1882) public su obra "El origen de las especies por medio de la seleccin natural" donde explicaba su teora de que dentro de una misma especie surgen de forma natural variaciones que pueden ser para el individuo que las posee beneficiosas o perjudiciales para la adaptacin a su ambiente especfico. Cuando una variacin da una ventaja adaptativa el individuo mejora sus posibilidades de supervivencia y reproduccin, transmitiendo a sus descendientes sus rasgos, incluida la variacin. A travs de las sucesivas generaciones la variacin original se ir haciendo cada vez ms adaptativa al medio llegando de este modo a aparecer una especie nueva que se diferencia significativamente de la que le dio origen. En 1871, Darwin public su obra "El origen del hombre" donde afirmaba la continuidad evolutiva entre algunas especies de primates y el hombre, continuidad presente tambin en el psiquismo. De este modo, el hombre y el animal tendran bsicamente las mismas capacidades psquicas, si bien en grado muy diferente. Posteriormente, Herbert Spencer (1820-1903) fundament la psicologa en la biologa evolucionista afirmando que lo psquico surge en el curso de la evolucin fisiolgica del sistema nervioso y el cerebro. c) El psicoanlisis freudiano La teora psicoanaltica fue creada por Sigmund Freud (1856-1939) para explicar y tratar el comportamiento mental patolgico, pero explicaba tambin los mecanismos que determinan el comportamiento de los individuos considerados normales. Segn Freud, en la mente humana existen procesos que inciden en la conducta sin estar controlados por la conciencia. Estos procesos psquicos inconscientes, que estn regulados por leyes propias distintas de las que gobiernan la conciencia, determinan buena parte de la vida psquica. El inconsciente puede ser conocido a travs de sus manifestaciones en los actos fallidos, sue-

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os y sntomas neurticos, cuyo significado debe ser desentraado por medio del anlisis. Para Freud, la conducta del hombre est regida por dos tipos de instintos: los instintos de conservacin del yo (hambre, sed) y los instintos sexuales. Mientras la primera clase de instintos no pueden ser reprimidos sin poner en peligro la vida del individuo, los instintos sexuales pueden ser reprimidos. Ms tarde, Freud aadira el instinto de muerte, en el que se fundamentara la conducta agresiva. En el curso del desarrollo infantil, el nio pasa de ser una masa de instintos desorganizados, regidos por el principio de placer, que exige una satisfaccin inmediata de las necesidades, a un individuo socializado en el seno de una determinada sociedad, ajustando la satisfaccin de sus necesidades a las normas morales, costumbre y leyes de la sociedad. En el curso del proceso de socializacin, el principio de placer es sustituido por el principio de realidad : el individuo pospone el placer inmediato por miedo a ser castigado si contraviene las normas sociales. Los impulsos reprimidos por el individuo no desaparecen simplemente sino que siguen presentes en el seno del inconsciente y se manifiestan de forma simblica en los actos fallidos, los sueos y los sntomas neurticos. Los deseos y pensamientos moralmente inaceptables, (que constituyen el contenido latente), se transforman en una experiencia consciente, aunque no inmediatamente comprensible, a veces absurda, denominada contenido manifiesto. La sexualidad adulta es el resultado de un complejo proceso de desarrollo que comienza en la infancia, pasa por una serie de etapas ligadas a diferentes funciones y reas corporales (oral, anal y genital), y se corresponde con distintas fases en la relacin del nio con los adultos, especialmente con sus padres. En este desarrollo es esencial el periodo edpico, que transcurre, aproximadamente, entre los 4 y 6 aos de edad, momento en el que el nio por primera vez es capaz de establecer un vnculo afectivo con su progenitor del sexo opuesto, con lo que el progenitor del mismo sexo es considerado un rival. La inmadurez psquica del nio condena al fracaso los deseos infantiles y malogra su primer paso hacia lo adulto. Adems, la inmadurez intelectual del nio complica an ms la situacin porque le hace temer sus propias fantasas. El grado en el que el nio supere este trauma y en el que estos vnculos, miedos y fantasas pervivan de modo inconsciente, ser decisivo en su vida posterior, especialmente en sus relaciones afectivas. Segn el psicoanlisis, la vida psquica del individuo est dominada por tres instancias distintas: a) el Ello: masa de impulsos sexuales y agresivos, dominadas por el principio de placer (egosta, acrtico e irracional), al margen de las normas sociales y totalmente inconsciente.

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b) el Yo: Trata de satisfacer las necesidades instintivas pero adaptndose a las normas sociales, por lo que reprime los impulsos del Ello y los canaliza de modo socialmente aceptable. Slo una pequea parte del Yo es consciente, siendo en su mayor parte inconsciente. c) el Super-Yo: Se forma en el proceso de socializacin a travs del cual el individuo interioriza una serie de prohibiciones para la satisfaccin de las tendencias instintivas y una imagen ideal a la que debe ajustarse su comportamiento. Constituye, pues, la conciencia moral, que controla las actividades del yo y crea un sentimiento de culpabilidad cuando sus exigencias no son atendidas. Es parcialmente inconsciente. El Yo se encuentra, pues como instancia mediadora entre el Ello, el Super-Yo y el mundo exterior tratando de conciliar las exigencias de todos ellos. De este modo, la nocin de inconsciente del psicoanlisis niega la identidad entre la mente y la conciencia que constitua uno de los pilares fundamentales del sujeto pensante cartesiano. III. PLANTEAMIENTO ACTUAL: MENTE Y CEREBRO Los avances cientficos que se han producido durante los ltimos ciento cincuenta aos sobre la estructura y el funcionamiento del sistema nervioso han puesto de manifiesto el papel rector que el cerebro ejerce respecto del resto del organismo. Todas las funciones orgnicas estn reguladas por el cerebro y hay un permanente flujo de informacin entre los rganos y el cerebro. En los ltimos aos se han desarrollado una serie de tcnicas que han permitido un avance espectacular del estudio del cerebro: 1) Se han delimitado distintas reas de la corteza cerebral especializadas en recibir y procesar las informaciones sensoriales y controlar las reacciones musculares: reas auditivas, visuales, motoras, etc. 2) Sin embargo, estas reas especializadas no representan apenas una cuarta parte de la corteza cerebral; el resto, las denominadas reas de asociacin, no cumplen ninguna funcin especfica y parecen estar encargadas de interpretar, integrar y coordinar las informaciones procesadas por las reas sensoriales y motoras. Las reas de asociacin seran responsables as de nuestras funciones mentales superiores: lenguaje, pensamiento, razonamiento, memoria, planificacin de la accin, creatividad, etc. 3) Cada uno de los hemisferios controla y ejecuta funciones diferentes o aspectos diferentes de una misma funcin. En trminos generales, parece que en la mayor parte de las personas el hemisferio izquierdo controla la habilidad lingstica, numrica y de pensamiento analtico, mientras que el hemisferio derecho controla las habilidades espaciales complejas, como la percepcin de patrones y aspectos de ejecucin artstica y musical. 4) Sin embargo, las actividades complejas requieren de la interrelacin de los dos hemisferios. As, por ejemplo, cuando leemos un relato, el hemisferio

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izquierdo entiende el significado de las palabras, pero es el hemisferio derecho el que capta el contenido emotivo y las imgenes utilizadas. 5) Por otra parte, hay muchas funciones, principalmente de las reas primarias sensoriales y motoras que parecen idnticas en ambos hemisferios. En definitiva, hay una especializacin funcional pero la actividad conjunta de ambos hemisferios es necesaria para el funcionamiento integral del cerebro. La participacin de los dos hemisferios en las actividades psicoorgnicas es variable segn los individuos: las reglas a que esto obedece y las razones que la determinan (genticas, sociales) son todava poco conocidas. 6) Por consiguiente, aunque ciertas funciones de la mente estn localizadas en determinadas regiones cerebrales, el cerebro se comporta como un todo unificado. Estos descubrimientos ponen de manifiesto ante todo lo mucho que queda por conocer en torno al cerebro humano, pero han sido suficientes para replantear el problema clsico de la relacin entre el cuerpo y la mente o alma en trminos de la relacin entre el cerebro, en cuanto centro que recibe los estmulos del medio, los integra con la experiencia acumulada y diversas estructuras, produciendo las respuestas correspondientes, y la mente, como conjunto de los procesos de recepcin y procesamiento de informacin y de la ejecucin o inhibicin de las respuestas. La estructura del problema, sin embargo, sigue siendo bsicamente la misma: Son los procesos mentales distintos o idnticos a los procesos cerebrales? Si son idnticos, cmo los procesos cerebrales producen los procesos mentales? Si mente y cerebro son realidades distintas, cmo interactuan entre s? 1. El reduccionismo monista Los partidarios de un planteamiento monista de la cuestin niegan la existencia de la mente como una realidad distinta del cerebro y adoptan alguna forma de reduccionismo, tratando de explicar los fenmenos mentales en trminos fsicos o biolgicos. Las posturas reduccionistas consideran, en general, que la distincin entre la mente y el cerebro es debida a la insuficiencia actual de nuestros conocimientos acerca de los procesos cerebrales, pero que el desarrollo cientfico futuro permitir reducir los fenmenos mentales a fenmenos puramente fsicos o biolgicos que tienen lugar en el cerebro. a) Conductismo: no existen los estados mentales Desde sus inicios a fines del siglo XIX, con la obra de Wilhem Wundt, la psicologa tena como objeto la mente y sus contenidos (sensaciones, sentimientos e imgenes). Pero, a comienzos del siglo XX, John B. Watson

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(1878-1958) fund una nueva escuela que consideraba la conducta como el tema de estudio de la psicologa. En los aos 50, Skinner continu y ampli el conductismo de Watson, radicalizando sus presupuestos. Difera de Watson en que los fenmenos internos, como las emociones o los sentimientos, deban ser totalmente excluidos. La psicologa deba quedar restringida al estudio de la conducta observable, quedando excluida la mente, que en modo alguno se puede observar o medir. Los conductistas entendan la conducta como el conjunto de respuestas dadas por un organismo frente a determinados estmulos del medio. La psicologa deba ser una ciencia natural que tuviera por objeto describir, predecir y controlar la conducta, no teniendo en cuenta los estados mentales ni siquiera como causa de la conciencia. El conductismo trata de reducir todos los fenmenos psicolgicos en trminos de estmulo-respuesta.. Cualquier forma de comportamiento es analizada como una cadena de respuestas fisiolgicas simples que pueden ser observadas y medidas. Los procesos que ocurren en la "caja negra" de la mente entre el estmulo y la respuesta no tienen ningn inters para la investigacin psicolgica, ya que es posible explicar la totalidad de la conducta sin referirse para nada a supuestos estados mentales. El conductismo de Watson y Skinner era un conductismo metodolgico que trataba de trasladar a la psicologa el mtodo general de las ciencias naturales puramente empricas. Pero ciertos filsofos de la mente, como Gilbert Ryle y Carl G. Hempel, lo convirtieron en un conductismo ontolgico al negar positivamente la existencia de la mente. Para el conductismo lgico la mente no existe propiamente y el cerebro es irrelevante para el estudio de los fenmenos psicolgicos. Todo lo mental se reduce a la conducta y a disposiciones para la conducta. La mente es slo la aptitud y disposicin a hacer un determinado tipo de cosas. Propugnan, en consecuencia, abandonar el lenguaje mentalista (es decir, trminos como deseo, creencia, sentimiento o propsito) de las explicaciones psicolgicas, siendo sustituido por un lenguaje descriptivo de los estmulos y respuestas, as como de las leyes que gobiernan la conducta. As, por ejemplo, mi creencia de que va a llover consiste en hechos tales como que lleve puesto un impermeable y coja un paraguas cuando salgo a la calle. b) Teora de la identidad mente-cerebro

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El conductismo llevaba a un callejn sin salida ya que era imposible no diferenciar los estados mentales de sus manifestaciones conductuales; por ejemplo, entre el estado subjetivo de dolor y la conducta asociada a ese dolor. Adems, hay procesos mentales a los que no acompaa conducta alguna y estados mentales que parecen implicar otros estados mentales: si cojo el paraguas es no slo por mi creencia en que va a llover sino tambin por mi deseo de no mojarme, lo cual supone a su vez la creencia de que el paraguas me mantendr seco. Los estados mentales parecen resistirse a ser pura y simplemente eliminados. Para resolver estas dificultades J.J.C. Smart y David Armstrong propusieron la teora de que los procesos mentales son idnticos a los procesos cerebrales. Admiten la existencia de los procesos mentales como causa interna de la conducta. Ahora bien, la nica explicacin de la conducta humana y animal que es posible establecer en trminos cientficos es la que se realiza en trminos del funcionamiento fsico-qumico del sistema nervioso central. Por consiguiente, los estados mentales son idnticos a los estados puramente fsicos del sistema nervioso central y la psicologa debe reducirse a la neurofisiologa. La teora de la identidad mente-cerebro se enfrenta tambin a dificultades insuperables: por un lado, no todos los estados cerebrales producen estados mentales; por otro lado, cabe suponer la existencia de organismos en otros planetas que tambin tuvieran estados mentales a pesar de tener una qumica diferente a la nuestra. Por ltimo, los computadores no tienen procesos neurolgicos pero son capaces de ejecutar determinados procesos que en los seres humanos calificamos de mentales: clculos aritmticos complicados, demostracin de teoremas lgicos y matemticos, jugar a las damas y al ajedrez, etc. c) Materialismo eliminativo Paul Churchland vuelve a eliminar los estados mentales. Considera que la creencia popular en la existencia de la mente es una teora primitiva precientfica y que los estados mentales de los que hablamos en el lenguaje ordinario (creencias, deseos, sentimientos, intenciones) no existen realmente. Tal psicologa del sentido comn o "psicologa popular" debe ser sustituida por una neurociencia estricta, que parta de la idea de que las actividades cognitivas son en ltima instancia actividades del sistema nervioso.

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Propone una inversin del procedimiento habitual de la investigacin de los procesos cognitivos (aproximacin de arriba abajo) que parte de las actividades cognitivas de los seres humanos (pensar, hablar, recordar, aprender, etc.) y luego indagan las operaciones cerebrales que pueden producirlas, por una aproximacin de abajo arriba: empezar por comprender el comportamiento fsico, qumico, elctrico y de desarrollo de las neuronas y slo despus tratar de comprender lo que sabemos intuitivamente sobre nuestras actividades cognitivas. 2. Dualismo neurofisiolgico Pese a que el monismo materialista es la corriente predominante entre los cientficos que estudian el cerebro humano, hay tambin posturas dualistas como la que mantiene el neurlogo John Eccles. Segn Eccles, el cerebro no es una estructura lo suficientemente compleja para dar cuenta de los fenmenos relacionados con la conciencia, por lo que hay que admitir la existencia autnoma de una mente autoconsciente distinta del cerebro, como una realidad no material ni orgnica que ejerce una funcin superior de interpretacin y control de los procesos neuronales. Eccles encuentra el fundamento de su hiptesis dualista en la teora de los tres mundos del filsofo Karl Popper, segn la cual todo lo que existe y nuestra experiencia est contenida en uno de estos mundos: Mundo 1 Realidad objetos naturales tanto inanimados como biofsica lgicos y objetos artificiales Mundo 2 Fenmenos percepciones, sentimientos, intenciones, rementales cuerdos, estados de conciencia, etc. Mundo 3 Productos mitos, herramientas, teoras y problemas cientculturales ficos, instituciones sociales, obras de arte, etc. Segn Eccles, mientras el cerebro est contenido en el Mundo 1, al Mundo 2 pertenecen todos los elementos de lo mental: a) el sentido externo: percepciones producidas por los datos de los rganos sensoriales; b) el sentido interno: pensamientos, recuerdos, intenciones, representaciones, emociones o sentimientos; c) el yo: ncleo del Mundo 2, base de la identidad y continuidad personal que experimentamos. Por consiguiente, mente y cerebro son dos entidades distintas (la una perteneciente al Mundo 2 y la otra al Mundo 1) pero entre ambas existen interacciones: 1) Las experiencias de la mente autoconsciente estn en relacin con los procesos neuronales que tienen lugar en las reas asociativas del crtex cerebral pero no son idnticas a ellos como afirma la teora de la identidad mente-cerebro.

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2) Las informaciones procedentes de los rganos sensoriales son transmitidas al cerebro, pero slo en la mente se transforman en las experiencias perceptivas, que son distintas a los procesos cerebrales. 3) La mente autoconsciente es capaz de actuar sobre los procesos cerebrales desencadenando procesos neuronales: recordar algo, hacer un clculo mental, buscar la frase apropiada para expresar una idea, etc. En definitiva, la mente autoconsciente selecciona las informaciones procedentes de multitud de centros cerebrales y los integra en un todo unitario, ejerciendo una funcin superior de interpretacin y control de los procesos neuronales. La unidad de la experiencia consciente es producto de la mente y no de los procesos cerebrales. El dualismo neurofisiolgico de Eccles deriva finalmente a un planteamiento religioso puesto que identifica la mente con el alma, objeto de la creacin divina. 3. Funcionalismo Para tratar de superar las dificultades del monismo, Hillary Putnam y Jerry Fodor propusieron el funcionalismo segn el cual los procesos mentales internos son estados funcionales del organismo cuyo rgano no es necesariamente el cerebro. As, por ejemplo, el dolor no es un estado fsico-qumico del cerebro o del sistema nervioso, sino un estado funcional del organismo tomado en su totalidad. De este modo, los fenmenos mentales son estados funcionales del organismo y no es posible conocerlos estudiando procesos parciales en los que estn implicados, como los procesos cerebrales. El funcionalismo presupone que una misma funcin puede ser desempeada por sistemas muy distintos, ya que la naturaleza de sus componentes no es esencial para el correcto desempeo de su funcin. Una cosa es un reloj o un termostato por la funcin que realiza (dar la hora, desconectar la corriente cuando se alcanza una determinada temperatura) y tanto da el material del que est hecho. Del mismo modo, las creencias y deseos son estados fsicos de sistemas fsicos que pueden estar hechos de diferentes tipos de materiales. Algo es una creencia o un deseo en virtud de lo que hace y no en virtud de los materiales de los que su sistema est compuesto. No es analizando el sistema sino su funcin como comprenderemos el proceso. De este modo, podemos atribuir estados mentales a seres extraterrestres con una estructura fisicoqumica muy diferente a la nuestra y las funciones mentales podran muy bien ser desempeadas por un soporte no orgnico, como un ordenador digital. Cualquier sistema puede tener mente a condicin de que sea capaz de realizar la funcin adecuada. La objecin ms importante a la que se enfrenta el funcionalismo es el denominado problema de los qualia (caracteres cualitativos de las sensaciones). Para la teora funcionalista un estado psicolgico es idntico a un estado funcional; en consecuencia, el estado psicolgico de experimentar una determinada cualidad

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(un matiz de azul, por ejemplo) deber ser idntico a cierto estado funcional. Pero puede ocurrir que un mismo estado funcional pueda producir la experiencia de cualidades distintas (de azul, pero tambin de rojo o verde); en ese caso no habra una correspondencia estricta entre estados mentales y estados funcionales. 4. Emergentismo Cmo solucin a las dificultades tanto del monismo como del dualismo, algunos autores han propuesto algn tipo de teora emergentista, segn la cual los estados mentales no son idnticos a estados fsicos del cerebro ni pueden reducirse a ellos, pero no son tampoco independientes de los mismos. La ms importante de estas teoras es el naturalismo biolgico de John Searle. Los procesos mentales, ya sean conscientes o inconscientes, estn causados por procesos cerebrales, pero no se reducen a estos sino que son fenmenos o propiedades autnomos que emergen de los sistemas neurofisiolgicos en el curso del largo proceso evolutivo de la especie. Los procesos mentales de percibir, sentir, recordar, imaginar, desear, pensar, etc. son propiedades emergentes de sistemas neurolgicos pero no pueden explicarse simplemente analizando los componentes de estos sistemas porque son distintos a ellos, como la digestin es algo distinto al sistema digestivo o la liquidez es algo distinto de la estructura de las molculas. Hay, pues, dos niveles de descripcin del cerebro que no deben ser confundidos: a) las micropropiedades: estructura y funcionamiento de las neuronas; b) las macropropiedades: estructura y funcionamiento de los procesos mentales. Es posible, pues, distinguir entre procesos mentales, tal como los estudia la psicologa, y procesos cerebrales, tal como los estudia la neurociencia, sin necesidad de reducir los primeros a los segundos.

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CAPTULO 2
El cerebro: Introduccin a la Neurociencia Cognitiva M Inmaculada Herrera Ramrez
1. Introduccin El cerebro forma parte del sistema nervioso central de los vertebrados encontrndose ubicado en el interior del crneo. Es una masa de tejido gris-rosceo que, en la especie humana, pesa un promedio de 1,3 kg y est compuesto por, aproximadamente, unos 100.000 millones (en un cerebro adulto) de clulas nerviosas neuronas interconectadas, que son las responsables del control de, prcticamente, todas las funciones vitales de supervivencia (movimiento, sueo, hambre, sed, etc.) y, en especial, de la mente (pensamiento-lenguaje, inteligencia, memoria, etc.) y de las emociones y sentimientos (amor, odio, miedo, ira, alegra, tristeza, etc.), a travs de la recepcin e interpretacin de innumerables seales sensaciones percibidas por los sentidos, al aplicar atencin sobre estmulos del propio organismo y tambin del exterior. La gran superficie que posee el cerebro y su complejo desarrollo justifican el nivel superior de inteligencia del hombre, si se compara con el de otros animales. La corteza cerebral est dividida por una fisura longitudinal en dos partes: derecha e izquierda, denominadas hemisferios cerebrales, que son simtricos, como una imagen vista en un espejo. Ambos hemisferios, se encuentran interconectados a travs del cuerpo calloso, que es un conglomerado de fibras nerviosas blancas por la que transfieren informacin de uno a otro. El hemisferio izquierdo tiene un comportamiento racional, automtico, lgico, analtico, de rpida capacidad de respuesta y repetitivo; por el contrario, el hemisferio derecho es imaginativo, algico, intuitivo, innovador y creativo. El hombre, desde su nacimiento, tiene casi totalmente desarrollado el hemisferio derecho y, el izquierdo, lo va desarrollando paulatinamente con la acumulacin de informacin que va registrando en su memoria. Cada hemisferio cerebral se divide en cinco lbulos: frontal, parietal, temporal, occipital y la nsula de Reil. En general, los cuatro primeros lbulos se sitan debajo de los huesos que llevan el mismo nombre. As, el lbulo frontal descansa en las profundidades del hueso frontal, el lbulo parietal bajo el hueso parietal, el lbulo temporal bajo el hueso temporal y el lbulo occipital debajo de la regin correspondiente a la protuberancia del occipital. La nsula de Reil

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no puede verse en la superficie del encfalo, ya que se sita en el fondo de otra cisura llamada cisura de Silvio. El cerebro es el rgano del cuerpo que ms trabaja, ya que todo lo que hacemos, sentimos o pensamos se debe a l y si se le compara con un ordenador, su diferencia es patente, ya que ste hace sus operaciones por medio de procesos secuenciales y lgicos, mientras que el cerebro es multidireccional y sus funciones son mucho ms complejas, ya que procesa la informacin analizndola, sintetizndola e integrndola a travs de procesos paralelos simultneos. Toda la informacin que recibe el cerebro la obtiene captando estmulos mediante los sentidos externos e internos, recibiendo y enviando constantemente mensajes que nos informan de todo lo que sucede a nuestro alrededor; no obstante, a pesar de toda esa informacin, los especialistas afirman que el ser humano utiliza solamente un diez por ciento de su capacidad aproximadamente. De igual forma, se ha podido determinar, en lneas generales, que cada hemisferio est interrelacionado ntimamente con su homlogo, aunque ejercen funciones diferentes y cada uno es responsable de un lado del cuerpo en forma especular; es decir, que las funciones realizadas por el lado izquierdo del cuerpo son dirigidas y controladas por el hemisferio derecho, sucediendo de forma semejante con el hemisferio izquierdo, permitiendo de esta manera complementar cada uno de los mensajes recibidos y ejecutar totalmente las funciones corporales competentes a este rgano. El funcionamiento del cerebro se basa en el concepto de que la neurona es una unidad anatmica y funcional independiente, integrada por un cuerpo celular del que salen numerosas ramificaciones llamadas dendritas, capaces de recibir informacin procedente de otras clulas nerviosas, y de una prolongacin principal, el axn, que conduce la informacin hacia las otras neuronas en forma de corriente elctrica. Pero las neuronas no se conectan entre s por una red continua formada por sus prolongaciones, sino que lo hacen por contactos separados por unos estrechos espacios denominados sinapsis. La transmisin de las seales a travs de las sinapsis se realiza mediante unas sustancias qumicas conocidas como neurotransmisores, de los cuales hoy se conocen ms de veinte clases diferentes.

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El cerebro tiene a su cargo las funciones motoras, sensitivas y de integracin. El hemisferio cerebral izquierdo est especializado en producir y comprender los sonidos del lenguaje, el control de los movimientos hbiles y los gestos con la mano derecha. El hemisferio derecho est especializado en la percepcin de los sonidos no relacionados con el lenguaje (msica, llanto, etc.), en la percepcin tctil y en la localizacin espacial de los objetos. Hoy en da se sabe que en el lbulo occipital se reciben y analizan las informaciones visuales. En los lbulos temporales se gobiernan ciertas sensaciones visuales y auditivas. Los movimientos voluntarios de los msculos estn regidos por las neuronas localizadas en la parte ms posterior de los lbulos frontales, en la llamada corteza motora. Los lbulos frontales estn relacionados tambin con el lenguaje, la inteligencia y la personalidad, si bien, se desconocen funciones especficas en esta rea. Los lbulos parietales se asocian con los sentidos del tacto y el equilibrio. En la base del encfalo se sita el tronco cerebral, que gobierna la respiracin, la tos y el latido cardaco. Detrs del tronco se localiza el cerebelo, que coordina el movimiento corporal manteniendo la postura y el equilibrio. Las reas cerebrales que gobiernan las funciones como la memoria, el pensamiento, las emociones, la conciencia y la personalidad, resultan bastante ms difciles de localizar. La memoria est vinculada al sistema lmbico, situado en el centro del encfalo. Por lo que respecta a las emociones, se sabe que el hipocampo controla la sed, el hambre, la agresin y las emociones en general. Se postula que los impulsos procedentes de los lbulos frontales se integran en el sistema lmbico, llegando al hipotlamo, estructura que, a su vez, regula el funcionamiento de la glndula hipofisaria, productora de varias hormonas. Es en el crtex donde se integran las capacidades cognitivas, donde se encuentra nuestra capacidad de ser conscientes, de establecer relaciones y de hacer razonamientos complejos. Lo que llamamos sustancia gris es una pequea capa que recubre el resto del cerebro. Pero el crtex cerebral humano tiene una caracterstica que la distingue de todas las dems, tiene numerosos pliegues. Esto aumenta notablemente su superficie. Si la extendiramos, ocupara el rea equivalente a cuatro folios. En comparacin, la de un chimpanc slo sera de un folio, la de la mona ocupara como una tarjeta postal y la de la rata la de un sello de correos. El procesamiento de la informacin sensorial recogida del mundo que nos rodea y de nuestro propio cuerpo, las respuestas motrices y emocionales, el aprendizaje, la conciencia, la imaginacin y la memoria son funciones que se realizan por circuitos formados por neuronas interrelacionadas a travs de los contactos sinpticos. Es por este motivo que el funcionamiento cerebral se asemeja, en parte, a una computadora, pero el cerebro es muchsimo ms complejo que un ordenador, ya que est dotado de propiedades que solo proporciona su naturaleza biolgica.

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Paul MacLean (1997), Director del Laboratorio de Evolucin Cerebral y Conducta del Instituto Nacional de Salud Pblica de California, desarroll un modelo sobre la estructura cerebral del ser humano conocido como cerebro triuno, trada cerebral o tres en uno. Para poder comprender la estructura de este rgano plante que el cerebro humano est formado por tres sistemas neurales interconectados, teniendo cada uno su especfica y particular inteligencia, as como sus funciones propias y definidas, que estn relacionadas en funcin del proceso de evolucin y, por consiguiente, del desarrollo de cada uno de los sistemas neurales: a) Sistema-R, sistema reptlico o cerebro reptil; b) Sistema-L o sistema-cerebro lmbico; y c) Neocorteza. a) Sistema-R o Reptlico: Este sistema cerebral, segn MacLean, es el ms antiguo; es decir, corresponde al cerebro de nuestros ancestros y sigue realizando sus antiguas funciones, es el cerebro primitivo. Est ubicado en la parte superior de la mdula espinal, en la base del cuello, y se dedica a recoger informacin en forma de energa a travs de la columna vertebral hasta los poros de la piel. Su denominacin proviene de que el referido cientfico encontr gran afinidad con los cerebros de los reptiles, siendo el cerebro que nos hace hacer las cosas instintivamente (seguridad, territorialidad, rutinas, hbitos, patrones, valores, condicionamiento, etc.). b) Sistema-cerebro lmbico: Es el sistema cerebral que sigue en antigedad, tambin denominado Paleomamfero o cerebro mamfero, localizado detrs de la cara, envolviendo al cerebro Reptil y est conectado a la Neocorteza, dedicado a las experiencias y expresiones emocionales (amor, alegra, miedo, depresin, sentirse o no afectado, etc.) y que, a su vez, controla el sistema autnomo del organismo. En suma, es la conexin entre el cerebro reptil y la neocorteza. c) Neocorteza: Es el ltimo sistema cerebral, su nombre indica corteza nueva, siendo el ms joven y de mayor evolucin, y que permiti el desarrollo del Homo Sapiens. Est dividido en dos hemisferios (izquierdo y derecho) y es el encargado de las funciones superiores (pensar, hablar, percibir, imaginar, analizar..., y comportarnos como seres civilizados). Se encuentra ubicado sobre el sistema lmbico y, segn MacLean, en l se desarrollan una serie de clulas nerviosas dedicadas

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a la produccin del lenguaje simblico, a la funcin asociada a la lectura, escritura y aritmtica, etc. De igual manera, proporciona la procreacin y preservacin de las ideas que all surgen, recibiendo las seales de los sentidos que provienen del sistema lmbico.

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Visin global del cerebro

Para estudiar el cerebro es imprescindible hacerlo teniendo en cuenta donde se inserta: sistema nervioso. ste est constituido por el tejido nervioso del organismo y los elementos de soporte asociados. Desde un punto de vista estructural o anatmico, el sistema nervioso se divide en dos; el Sistema Nervioso Central (SNC) y el Sistema Nervioso Perifrico (SNP). El SNC est formado por el cerebro y la mdula espinal, y el SNP comprende los nervios, ganglios y receptores especializados. Por otro lado, desde el punto de vista funcional el sistema nervioso se divide, en Sistema Nervioso Somtico y Sistema Nervioso Autnomo. El sistema somtico es la parte del sistema nervioso que responde o relaciona el organismo con el medio ambiente externo, en cambio el sistema autnomo est en relacin con el medio interno orgnico, realizando funciones propias de regulacin y adaptacin internas. Ambos sistemas no actan independientemente, sino que se hallan interrelacionados y cooperan entre s.

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La funcin del sistema nervioso consiste en recibir los estmulos que le llegan tanto del medio externo como interno del organismo, organizar esta informacin y hacer que se produzca la respuesta adecuada. Los estmulos procedentes del medio externo son recibidos por los receptores situados en la piel, destinados a captar sensaciones generales como el dolor, tacto, presin y temperatura, y por los receptores que captan sensaciones especiales como el gusto, la vista, el olfato, el odo, la posicin y el movimiento. Las seales (o impulsos) que llegan al sistema nervioso perifrico, se transmiten a partir de estos receptores al sistema nervioso central, donde la informacin es registrada y procesada convenientemente. Una vez registradas y procesadas, las seales son enviadas desde el sistema nervioso central a los distintos rganos a fin de proporcionar las respuestas adecuadas. 2. Anatoma del cerebro Para su mejor estudio, a continuacin se van a analizar sus principales componentes. Tales son los siguientes: amgdalas, cerebelo, corteza cerebral, diencfalo, hipocampo, hipfisis, mdula, ncleo estriado, sistema lmbico, tronco enceflico, ventrculos, corteza somatosensorial, cortes transversales y cortes frontales.

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EL CEREBRO HUMANO

Amgdalas Las amgdalas forman parte del sistema endocrino, el cual est formado por un conjunto de glndulas (tiroides, paratiroides, amgdalas, hipfisis, epfisis y glndula suprarenal) que sintetizan hormonas y las liberan al torrente sanguneo. Hoy en da se sabe que el hipotlamo es el responsable del control de la secrecin hormonal, y a su vez las hormonas afectan el funcionamiento del sistema nervioso, por este motivo al conjunto de los dos sistemas se les denomina sistema neuroendocrino. Las glndulas endocrinas controlan una gran cantidad de funciones fisiolgicas del organismo como el metabolismo, la homeostasis, el crecimiento, la reproduccin, el dolor, etc., pero tambin estn involucradas en la conducta huma-

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na, concretamente en las emociones, la memoria, el aprendizaje o incluso en las patologas como la depresin, la ansiedad o la anorexia nerviosa. Cerebelo El cerebelo es, despus del cerebro, la porcin ms grande del encfalo. Ocupa la fosa craneal posterior y se localiza debajo de los lbulos occipitales del cerebro, del que est separado por una estructura denominada tienda del cerebelo. Consta de dos hemisferios cerebelosos y una parte intermedia denominada vermis. Se une al tallo cerebral mediante tres pares de pednculos cerebelosos; estos pednculos son haces de fibras que entran y salen del cerebelo, en cuya superficie aparecen numerosos surcos superficiales prximos unos a otros.

Un corte sagital del cerebelo muestra que en el exterior del cerebelo (en la corteza cerebelosa) se encuentra la sustancia gris, y en el interior la sustancia blanca. En la parte ms profunda del cerebelo se encuentran los ncleos dentados. El cuarto ventrculo ocupa una localizacin inmediatamente anterior al cerebelo. La corteza cerebelosa se divide en una capa externa, o molecular, y una capa interna, o granulosa. Entre ambas capas aparecen unas clulas denominadas clulas de Purkinje. Aunque las clulas de las dos capas cerebelosas corticales son de pequeo tamao, no por ello dejan de ser neuronas. Tambin se halla presente la neuroglia.

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El cerebelo desempea un papel regulador en la coordinacin de la actividad muscular, el mantenimiento del tono muscular y la conservacin del equilibrio. El cerebelo precisa estar informado constantemente de lo que se debe hacer para coordinar la actividad muscular de manera satisfactoria. A tal fin recibe informacin procedente de las diferentes partes del organismo. Por un lado, la corteza cerebral le enva una serie de fibras que posibilitan la cooperacin entre ambas estructuras. Por otro lado, recibe informacin procedente de los msculos y articulaciones, que le sealan de modo continuo su posicin. Finalmente, recibe impulsos procedentes del odo interno que le mantienen informado acerca de la posicin y movimientos de la cabeza. El cerebelo precisa, pues, toda esta informacin para poder llevar a cabo las funciones que le son propias. Corteza cerebral La corteza cerebral es la parte ms voluminosa del encfalo. Una hendidura profunda, denominada cisura longitudinal, lo divide en dos hemisferios, derecho e izquierdo.

La corteza es una fina lmina de neuronas interconectadas que forman una capa de unos milmetros de grosor y que recubre la superficie irregular de los hemisferios cerebrales. La superficie de cada hemisferio presenta un conjunto de prominencias y surcos (o cisuras) que proporcionan a la corteza una apariencia plegada, de tal forma que slo un tercio de esta queda expuesta a la superficie.

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Tres de estas cisuras sirven para delimitar ciertas reas del cerebro. Son: 1) surco central o cisura de Rolando, 2) surco lateral o cisura de Silvio, y 3) surco parietooccipital. Las eminencias situadas entre los surcos reciben el nombre de circunvoluciones o pliegues. La circunvolucin central anterior se sita por delante del surco central, y la circunvolucin central posterior se coloca inmediatamente detrs del surco central. Cada hemisferio se divide en cuatro grandes lbulos: frontal, parietal, temporal y occipital. En general, los lbulos se sitan debajo de los huesos que llevan el mismo nombre. As, el lbulo frontal descansa en las profundidades del hueso frontal, el lbulo parietal debajo del hueso parietal, el lbulo temporal debajo del hueso temporal y el lbulo occipital debajo de la regin correspondiente a la protuberancia del occipital. Los surcos o cisuras mencionadas anteriormente actan como estructuras limtrofes entre algunos de los lbulos cerebrales. El surco central se localiza entre los lbulos frontal y parietal. El surco lateral separa el lbulo temporal situado debajo de los lbulos frontal y parietal situados encima. El surco parietooccipital puede visualizarse en la superficie central del cerebro. Diencfalo

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El diencfalo es una estructura situada en la parte interna central de los hemisferios cerebrales. Se encuentra entre los hemisferios y el tronco del encfalo, y a travs de l pasan la mayora de fibras que se dirigen hacia la corteza cerebral. El diencfalo se compone de varias partes: tlamo, hipotlamo, subtlamo y epitlamo. El tlamo est formado por dos cuerpos ovoides de 3 cm de largo y aproximadamente 1,5 cm de espesor, que se asienta en la profundidad de cada hemisferio cerebral. El tercer ventrculo separa entre s ambos tlamos, aunque stos permanecen unidos gracias a un puente de tejido talmico denominado masa intermedia, que se extiende entre ambos. Los tlamos son masas de sustancia gris, por lo que contienen cuerpos neuronales y numerosas conexiones sinpticas. Desde un punto de vista funcional, el tlamo es una estacin de relevo sensitivo. Los impulsos nerviosos hacen una escala a nivel talmico, estableciendo sinapsis antes de proseguir su recorrido hacia el crtex cerebral. El tlamo constituye tambin un centro sensitivo primitivo que sirve para registrar un tipo de sensacin generalizada e imprecisa. El hipotlamo se localiza, como su nombre indica, debajo del tlamo. Presenta una gran variedad de funciones, algunas de ellas bastante inslitas. Por ejemplo, produce dos hormonas (oxitocina y vasopresina) y contiene centros que regulan la actividad de la hipfisis anterior, el sistema nervioso autnomo, la temperatura corporal y la ingesta de agua y alimentos. Adems, el hipotlamo se relaciona con el estado de vigilia y la sensibilidad emocional. En animales de laboratorio, como el gato, la liberacin de la influencia inhibidora que ejerce sobre el hipotlamo la corteza cerebral origina la aparicin de estallidos de violencia ante la ms pequea provocacin. El subtlamo est delante del tlamo y al lado del hipotlamo, su funcin principal se relaciona con el movimiento corporal. Las vas neuronales que lo atraviesan van hacia el tlamo, el cerebelo y los ganglios basales. El epitlamo se sita en la parte posterior del diencfalo, al lado del mesencfalo. Est formado por la glndula pineal o epfisi y los ncleos de la habnula. La epfisi es una glndula endocrina que segrega la hormona de la melatonina, esta secrecin est relacionada con la cantidad de luz solar existente, a ms luz ms se segregar. la habnula tiene la funcin de favorecer la comunicacin entre el sistema lmbico y la formacin reticular. Hipocampo

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La formacin hipocampal est situada en la superficie media de del lbulo temporal. Le llega informacin del crtex y, a su vez, enva seales neuronales al hipotlamo y el rea septal a travs del frnix. La principal funcin del hipocampo es la de la consolidacin de la memoria y el aprendizaje. Una lesin en esta zona produce amnesia antergrada; es decir, de los acontecimientos ocurridos despus de la lesin, afectando as a los recuerdos de hechos especficos, pero curiosamente no afecta al aprendizaje de nuevas capacidades o habilidades

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Por ejemplo, una persona podra aprender a montar en bicicleta despus de la lesin, pero no recordara haber visto nunca una bicicleta.

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Hipfisis

La hipfisis est situada en la base del encfalo, unida al hipotlamo y forma parte del sistema neuroendocrino el cual est formado por un conjunto de glndulas (tiroides, paratiroides, amgdalas, hipfisis, epfisis y glndula suprarenal) que sintetizan hormonas y las liberan al torrente sanguneo. La hipfisis consta de dos partes que funcionan de manera distinta: la hipfisis posterior o neurohipfisis, que se encarga de almacenar y liberar las hormonas sintetizadas por el hipotlamo (oxitocina y vasopresina). Y la hipfisis anterior o adenohipfisis, que acta como una glndula secretora por s misma. Mdula espinal La mdula espinal es una masa cilndrica de tejido nervioso que se extiende en direccin caudal a partir del bulbo raqudeo. La mdula de un adulto mide aproximadamente 45 cm de longitud y ocupa los dos tercios superiores del

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conducto raqudeo. Durante las primeras etapas del desarrollo la medula espinal ocupa la casi totalidad del conducto raqudeo, pero el crecimiento rpido que experimenta en seguida la columna vertebral da lugar a la disposicin que presenta el adulto. La terminacin inferior de la medula recibe el nombre de cono terminal. La medula espinal se divide en 31 segmentos: 8 cervicales, 12 torcicos o dorsales, 5 lumbares, 5 sacros y uno coccgeo. Los nervios salen de la medula espinal a lo largo de toda su longitud, en nmero de un par por cada segmento medular. La medula presenta dos engrosamientos, el cervical y el lumbar. El engrosamiento cervical corresponde al origen de los nervios que se dirigen al miembro superior, el engrasamiento lumbar al de tos nervios que se dirigen al miembro inferior.

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La medula espinal est constituida por sustancia gris y sustancia blanca que adoptan una distribucin bastante regular. La sustancia blanca ocupa la parte externa que rodea la sustancia gris, y se compone de fibras ascendentes y descendentes sostenidas por la neuroglia. Al examinar un corte transversal de la medula puede observarse que la sustancia gris presenta una disposicin en forma de H. La parte horizontal de esta H se denomina comisura gris, y cada una de las puntas recibe el nombre de asta. En consecuencia, existen dos astas ventrales o anteriores y dos astas dorsales o posteriores. La sustancia blanca se dispone en tres columnas o cordones de fibras, anterior o ventral, lateral y posterior o dorsal, que discurren de un nivel del sistema nervioso a otro. Las fibras que se extienden desde un lugar determinado a otro se agrupan en haces denominados fascculos o tractos. Varias fisuras discurren a lo largo de la medula espinal. En la figura aparecen dos de estas fisuras, la anterior o ventral y la posterior o dorsal. La fisura anterior es ms profunda y sirve para identificar la parte frontal de la medula espinal. La sustancia gris de la medula espinal sirve de centro reflejo y forma parte de un centro de distribucin para las vas sensitivas y motoras. La sustancia blanca acta as de gran va conductora de impulsos hacia el encfalo y a partir de ste. Ncleo estriado El ncleo estriado est formado por: caudado, putamen y globo plido. El ncleo estriado est en el interior de los hemisferios cerebrales, en la base de cada hemisferio y su funcin est relacionada con el movimiento corporal.

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Este ncleo forma parte de un sistema funcional mayor llamado sistema de ganglios basales, formado por el cuerpo estriado, el subtlamo y la negra. La lesin de cualquiera de estas estructuras puede provocar alteraciones en el control de los movimientos (temblor, tics, etc.). El caudado tiene forma de C visto lateralmente, sigue el curso del ventrculo lateral. Al conjunto del caudado y el putamen tambin se le denomina neoestriado, y al globo plido paleoestriado. Sistema lmbico El sistema lmbico est compuesto por un conjunto de estructuras cuya funcin est relacionada con las respuestas emocionales, el aprendizaje y la memoria. Nuestra personalidad, nuestros recuerdos y en definitiva el hecho de ser como somos, depende en gran medida del sistema lmbico. Los componentes de este sistema son: amgdala, tlamo, hipotlamo, hipfisis, hipocampo, el rea septal (compuesta por el frnix, cuerpo calloso y fibras de asociacin), la corteza orbitofrontal y la circumbolucin del cngulo. Tronco enceflico

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El tronco enceflico est constituido por el mesencfalo, la protuberancia y el bulbo raqudeo. Todos estos centros nerviosos poseen una estructura similar: sustancia blanca en la parte externa con islotes de sustancia gris esparcidos por toda su superficie. La sustancia blanca est compuesta por fibras nerviosas que van y vienen del cerebro. El ncleo rojo del mesencfalo es una de las masas de sustancia gris ms prominentes. Adems de estas zonas ms bien discretas de sustancia gris y blanca, el tallo cerebral contiene una mezcla de ambas que recibe el nombre de formacin reticular. El tronco enceflico contiene numerosos centros reflejos, los ms importantes de los cuales son los centros vitales. Estos centros son esenciales para la vida, ya que controlan la actividad respiratoria, cardiaca y vasomotora. Adems de estos centros vitales, el tallo cerebral contiene otros centros que controlan la tos, el estornudo, el hipo, el vmito, la succin y la deglucin. La formacin reticular ejerce dos efectos contrarios sobre la actividad motora. Por un lado facilita o estimula tal actividad, y por el otro la deprime. Estudios llevados a cabo en el laboratorio muestran que la formacin reticular del tallo cerebral y estructuras adyacentes cerebrales (hipotlamo) son necesarias para el inicio y mantenimiento del estado de vigilia y conciencia. El tronco enceflico contiene ncleos correspondientes a nervios craneales, y al considerar la funcin del tallo no debe olvidarse la funcin de estos nervios.

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Finalmente, esta es una estructura por la que pasan las fibras ascendentes procedentes de la medula espinal y las descendentes que se dirigen a sta. Muchas de estas fibras establecen conexiones a diferentes niveles con las neuronas de la formacin reticular y, en algunos casos, con las neuronas de otros ncleos del tallo facilitando el funcionamiento de los reflejos. Ventrculos Los ventrculos cerebrales estn compuestos por varias partes: los ventrculos laterales, el tercer ventrculo y el cuarto ventrculo. El lquido cefalorraqudeo se encuentra en el interior de este sistema ventricular. El lquido cefalorraqudeo es un lquido acuoso que se localiza en los ventrculos y en los espacios subaracnoideos. Est producido por los plexos coroideos de los ventrculos, que son como ovillos capilares cubiertos por clulas epiteliales.

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Estas clulas absorben el lquido acuoso de la corriente sangunea y lo segregan al interior de los ventrculos. El lquido cefalorraqudeo pasa a continuacin desde los ventrculos al interior del espacio subaracnoideo a travs de las tres aberturas u orificios situados en el cuarto ventrculo. Una vez en el espacio subaracnoideo, se absorbe y vuelve a la corriente sangunea a travs de la membrana aracnoidea, concretamente a travs de las vellosidades aracnoideas. Cualquier obstruccin en la circulacin del lquido cefalorraqudeo da como resultado la aparicin de un crecimiento ventricular conocido con el nombre de hidrocefalia.Esta afeccin puede originar un crecimiento global de la cabeza si ocurre a una edad temprana, cuando los huesos de la cavidad craneal no se han unido de manera definitiva. El lquido cefalorraqudeo, producido de manera continua a partir de la sangre por los plexos coroideos, no puede ser adecuadamente reabsorbido en

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caso de hidrocefalia. El ser humano posee por trmino medio un volumen de lquido cefalorraqudeo que oscila alrededor de 135 ml. Este lquido forma una especie de manto protector contra eventuales contusiones o movimientos bruscos de la cabeza, que de lo contrario repercutiran gravemente en la integridad enceflica. Por otra parte, sirve tambin como medio de derivacin hacia la cavidad raqudea del volumen lquido contenido en la cavidad craneal. Por ejemplo, si en la cavidad craneal penetran cantidades excesivas de sangre, la derivacin de lquido al interior de la cavidad espinal sirve para acomodar las cantidades adicionales de sangre en el compartimiento craneal. El lquido cerebroespinal tambin puede servir para el transporte de sustancias nutritivas. Esta figura muestra las reas somatosensoriales primarias de la corteza cerebral, es un grfico donde se representan las zonas del crtex humano donde se reconocen, organizan e integran las sensaciones provenientes de las distintas partes del cuerpo. Como puede observarse, no todas las partes el cuerpo requieren de la misma "cantidad" de corteza especializada.Las reas somestsicas o reas de la sensibilidad general, se localizan en la circunvolucin central posterior. En esta zona se registran las sensaciones de calor, fro, tacto, presin, dolor y la sensibilidad propioceptiva (sentido de la posicin y equilibrio muscular). Cada circunvolucin recibe las sensaciones procedentes del lado opuesto del organismo. La disposicin de las partes del cuerpo representadas en la circunvolucin sigue tambin un orden inverso, de manera que las reas sensitivas de los pies se localizan en el extremo superior del crtex, mientras que las reas para la cabeza ocupan el extremo inferior. Las reas motoras se localizan en las circunvoluciones centrales superiores. Cada circunvolucin controla la actividad del msculo esqueltico que ocupa el Corteza somatosensorial

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lado opuesto del organismo. Las diversas partes del organismo representadas en la circunvolucin se disponen escalonadamente, de arriba abajo, de modo que la porcin superior de la circunvolucin controla los movimientos de la extremidad inferior opuesta, mientras que la zona inferior de la circunvolucin controla la cabeza y el cuello. Algunas partes del organismo, como la mano y la cara, estn ms representadas que otras. Ello se debe a la capacidad de tales partes para efectuar movimientos ms delicados. El rea promotora, relacionada tambin con la actividad motora, ocupa una posicin inmediatamente anterior a la circunvolucin precentral. La estimulacin de esta rea se traduce en la aparicin de una serie de movimientos de naturaleza generalizada, como la rotacin de la cabeza, giros del tronco y movimientos generales de las extremidades. Las reas del lenguaje, o reas de Broca, se localizan en el lbulo frontal. En una persona diestra las reas del lenguaje estn mejor desarrolladas en la corteza cerebral izquierda. En un zurdo estn ms desarrolladas las reas del lenguaje derechas. Las reas visuales se localizan en el lbulo occipital. En el lbulo occipital izquierdo se registran los impulsos que se originan en la parte izquierda de cada globo ocular, mientras que en el lbulo occipital derecho se registran los impulsos que se originan en la parte derecha. Las reas auditivas se localizan en la circunvolucin temporal superior. Cada lbulo temporal recibe impulsos auditivos procedentes tanto del odo derecho como del izquierdo. Ello se debe a que un nmero considerable de neuronas encargadas de transmitir los impulsos auditivos no siguen la va contralateral, sino que se dirigen al lbulo temporal del mismo lado. El rea primaria olfativa se localiza en la superficie medial del lbulo temporal, y el rea primaria gustativa en la cara anterior de la circunvolucin central posterior del lbulo parietal. Existen otras reas llamadas reas de asociacin. Las situadas en el lbulo parietal participan en la integracin de la informacin sensitiva procedente de las reas somestsica, auditiva, visual y gustativa. Las reas de asociacin parietales correlacionan informacin acerca de las diversas partes del organismo. Las reas asociativas situadas en la regin posterior del lbulo temporal se relacionan con la integracin de datos sensitivos. La afasia visual y auditiva (incapacidad para comprender la palabra oral y escrita) puede asociarse a lesiones de estas reas asociativas. Las reas de asociacin localizadas en la porcin anterior del lbulo temporal se relacionan con gran variedad de experiencias, aparte de las audiovisuales. Esta porcin anterior del lbulo temporal se ha denominado corteza psquica a causa de su relacin con experiencias pasadas. Las actividades superiores tales como el discernimiento, razonamiento y abstraccin dependen tambin de la corteza cerebral. La parte anterior del lbulo frontal, denominada rea prefrontal, se halla en relacin con estos procesos

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mentales caractersticos del ser humano. La corteza cerebral ejerce tambin una influencia de carcter inhibitorio sobre las partes inferiores del sistema nervioso central. Cortes transversales

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Cortes frontales

3. La neurona. A finales del siglo XIX se logr una mayor claridad sobre el trabajo del cerebro debido a los trabajos de Ramn y Cajal, en Espaa, y Sherrington, en Inglaterra. El primero trabaj en la anatoma de las neuronas y el segundo en los puntos de conexin de las mismas o sinapsis. El tejido nervioso es el ms diferenciado del organismo y est constituido por clulas nerviosas, fibras nerviosas y neuroglas, que est formada por varias clases de clulas. La clula nerviosa se denomina neurona y es la unidad funcional del sistema nervioso. Hay neuronas bipolares, con dos prolongaciones de fibras, y multipolares, con numerosas prolongaciones. Las neuronas pueden ser sensoriales, motoras y de asociacin.

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Se estima que en cada milmetro del cerebro hay alrededor de unas 50.000 neuronas. La estructura de una neurona es como se puede ver en la figura adjunta. El tamao y forma de las neuronas es variable, pero con las mismas subivisiones que muestra la figura. El cuerpo de la neurona o soma contiene el ncleo que se encarga de todas sus actividades metablicas y recibe la informacin de otras neuronas vecinas a travs de las conexiones sinpticas. Las dendritas son las conexiones de entrada de la neurona y el axn es la salida de la neurona y se utiliza para enviar impulsos o seales a otras clulas nerviosas. Cuando el axn esta cerca de sus clulas destino se divide en muchas ramificaciones que forman sinapsis con el soma o axones de otras clulas. Esta unin puede ser inhibidora o excitadora segn el transmisor que las libere. Cada neurona recibe de 10.000 a 100.000 sinapsis y el axn realiza una cantidad de conexiones similar. La transmisin de una seal de una clula a otra por medio de la sinapsis es un proceso qumico en el que se liberan sustancias transmisoras en el lado del emisor de la unin y su efecto es elevar o disminuir el potencial elctrico dentro del cuerpo de la clula receptora. Si su potencial alcanza el umbral, se enva un pulso o potencial de accin por el axn. Se dice, entonces, que la clula se dispar, alcanzando este impulso otras neuronas a travs de la distribuciones de los axones. Haciendo una comparacin entre el funcionamiento del cerebro neuronas y de un ordenador interruptores del chip, podemos observar las siguientes diferencias: Cerebro Sistema de datos de mltiple propsito capaz de tratar gran cantidad de informacin en poco tiempo, pero no necesariamente con exactitud. La frecuencia de los impulsos nerviosos puede variar. Ordenador Sistemas altamente especializados con capacidad para procesar informacin muy concreta, siguiendo unas instrucciones dadas.

La frecuencia de transmisin es inalterable y esta dada por el reloj interno de la mquina. Las llamadas sinapsis cumplen Las compuertas lgicas tienen una en el cerebro la funcin simultnea funcin perfectamente determinada e de varias compuertas (and, or, not, inalterable. etc.) La memoria es del tipo asociati- La informacin se guarda en posi-

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vo y no se sabe dnde quedar almacenada. Los impulsos fluyen a 30 metros por segundo.

ciones de memoria de acceso directo por su direccin. En el interior de una computadora los impulsos fluyen a la velocidad de la luz. En cuanto a sus similitudes, podemos observar las siguientes: - Ambos codifican la informacin en impulsos digitales. - Tanto el cerebro como la computadora tienen compuertas lgicas. - Existen distintos tipos de memoria. - Los dos tienen aproximadamente el mismo consumo de energa. Cuando los impulsos llegan al cerebro, cada rea cortical los analiza y los enva a diferentes lugares donde sern almacenados. En esta funcin los neurotransmisores tienen una funcin muy importante, ya que son los encargados de controlar el almacenaje de la memoria. Las neuronas se comunican mediante espasmos que abren las vesculas sinpticas dejando salir los neurotransmisores, hacindolos llegar a los receptores. stos se encargan de dejar pasar iones que pueden activar algunas enzimas y pueden formar, junto con otras, una reaccin en cadena, reforzando las conexiones. Algo fundamental para que la sinapsis se pueda realizar es el potasio (k). A partir de ah, en el hipocampo, que contiene alrededor de unos 40 millones de neuronas, se produce una gran actividad para guardar en memoria (a corto y largo plazo, si procede) todo aquello que proviene de los sentidos; pero, esta informacin no puede ser procesada en bruto por lo que debe ser simplificada antes, para poder ser procesada correctamente. Si tomamos como ejemplo una cara humana, no podramos almacenar todos los datos de golpe: ojos, boca, nariz, etc.; si no que la simplificamos en formas geomtricas

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ms sencillas, como crculo, tringulo, etc. Una vez que el hipocampo ha recibido esta informacin, la adjunta a otra informacin que recibe de los sentidos para saber si debe archivar o no. En el hipocampo es donde almacenamos la memoria reciente (Memoria a Corto Plazo MCP), guardando recuerdos de horas, das o aos, dependiendo del tipo de informacin que sea (ms compleja y significativa o no). Una vez que la memoria reciente esta preparada, la informacin pasa al crtex para ser almacenada mediante seales elctricas y, es all, donde se guardarn nuestros recuerdos permanentes (Memoria a Largo Plazo MLP). Una vez que esta informacin ha llegado al crtex, se vuelve a fragmentar en diferentes ramificaciones de neuronas del crtex, de esta forma si encontramos un fragmento, podramos extraer el resto de los fragmentos para poder encontrar todo el recuerdo completo. No obstante, existen ciertas actividades, a las que pudiramos llamar mecnicas (montar en bicicleta, conducir o tocar el piano, por ejemplo), que se guardan en el cerebelo. Aunque pudiera parecer lo contrario, segn vamos creciendo vamos perdiendo memoria, ya que las neuronas van muriendo por s solas de muerte natural, incluso los vasos sanguneos se van estrechando con el tiempo. Las zonas cercanas al hipocampo pierden gran numero de clulas, de manera que, en la mayora de los casos, llegamos a perder un 20 % de nuestras neuronas. Lo que ocurre es que, a medida que crecemos, nuestro caudal de recogida de informacin y nuestra capacidad para procesarla aumentan considerablemente, lo que compensa sobremanera la prdida que se produce. Hasta llegar a la vejez, ya que al disminuir las capacidades y aumentar las prdidas, los problemas de memoria se agudizan, especialmente en la reciente, debido a la incapacidad de establecer conexiones neuronales. En este sentido, una de las enfermedades que ms nos afectan es el Alzheimer, que se encarga de extender neuronas enfermas por el crtex y una sustancia llamada Betaaminoide. Sus sntomas se llegan a dar a partir de los 35 aos, pero lo normal viene a ser despus de los 65 aos. Una forma de mejorar nuestra calidad de vida y retrasar el Alzheimer sera estimular nuestro cerebro, mediante ejercicios mentales por ejemplo. Esto producira acetilcolina (ACH) que es fundamental para la memoria y el aprendizaje, y cuando hay bajas y no existe la suficiente ACH el Sistema Inmunolgico llega a atacarse a s mismo. Se piensa que los estrgenos pueden contribuir a la produccin de ACH, esto se ha llegado a pensar porque cuando los niveles de ACH bajan, tambin lo hacen los de los estrgenos, lo que se puede observar en mujeres postmenopusicas. Por ello, las mujeres postmenopusicas presentan mayor aquejamiento de Alzheimer. En estos casos se utiliza THA para la inhibicin de la desaparicin de ACH.

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4. El cerebro y la cognicin El Dr. Tony Buzan (1984), creador de la teora de los mapas mentales como herramienta de aprendizaje, en la dcada de los sesenta, empez a advertir que, cuando dictaba sus conferencias sobre psicologa del aprendizaje y de la memoria, l mismo tena discrepancias entre la teora que enseaba y lo que haca en realidad, debido a que sus notas de clase eran las tradicionales notas lineales, que aseguran la cantidad tradicional de olvido y de comunicacin frustrada. En este caso, en sus clases y conferencias, el Dr. Buzan le indicaba a sus alumnos que los dos principales factores en la evocacin eran la asociacin y el nfasis. En tal sentido, se plante la cuestin de que sus notas pudieran ayudarlo a destacar y asociar temas, permitindole formular un concepto embrionario de cartografa mental. Sus estudios posteriores sobre la naturaleza en el procesamiento de la informacin y sobre la estructura y funcionamiento de la neurona y el cerebro, entre otros estudios relacionados al tema, confirmaron su teora original, suponiendo el nacimiento de los mapas mentales. 4.1. El pensamiento irradiante. Para hacer ms fcil la interpretacin de lo que se denomina mapas mentales es importante considerar el trmino de pensamiento irradiante, al que se puede resumir con un simple ejemplo: Si a una persona se le pregunta qu sucede en su cerebro cuando en ese momento est escuchando una msica agradable, saboreando una dulce fruta, acariciando a un gato, dentro de una habitacin sumamente iluminada a la cual le entra el olor de pinos silvestres a travs de la ventana, se podra obtener que la respuesta es simple y a su vez asombrosamente compleja, debido a la capacidad de percepcin multidireccional que tiene el cerebro humano para procesar diversas informaciones en forma simultnea. El Dr. Buzan expresa que cada bit de informacin que accede al cerebro (sensacin, recuerdo o pensamiento, la cual abarca cada palabra, nmero, cdigo, alimento, fragancia, lnea, color, imagen, escrito, etc.) se puede representar como una esfera central de donde irradian innumerables enlaces de informacin, por medio de eslabones que representan una asociacin determinada, donde cada una de ellas posee su propia e infinita red de vnculos y conexiones. En este sentido, se considera que la pauta de pensamiento del cerebro humano como una gigantesca mquina de asociaciones ramificadas, un super biordenador con lneas de pensamiento que irradian a partir de un nmero virtualmente infinito de nodos de datos, las cuales reflejan estructuras de redes neuronales que constituyen la arquitectura fsica del cerebro humano y, en este sentido, cuanto ms se asocien nuevos datos de una manera integrada, irradiante y organizada, ms fcil se har el seguir aprendiendo. Lo anteriormente descrito, permite concluir que el pensamiento irradiante es la forma natural y virtualmente automtica en que ha funcionado siempre el cerebro humano.

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4.2. El mtodo de los mapas mentales. El mapa mental es una tcnica que permite la organizacin y la manera de representar la informacin de forma fcil, espontnea y creativa, en el sentido que la misma sea asimilada y recordada por el cerebro. Asimismo, este mtodo permite que las ideas generen otras ideas y se puedan ver cmo se conectan, se relacionan y se expanden, libres de exigencias de cualquier forma de organizacin lineal. Es una expresin del pensamiento irradiante y una funcin natural de la mente humana. Es una poderosa tcnica grfica que ofrece los medios para acceder al potencial del cerebro, permitiendo su aplicacin a todos los aspectos de la vida, ya que una mejora en el aprendizaje y una mayor claridad de pensamientos refuerzan el trabajo y la produccin del hombre. El mapa mental tiene cuatro caractersticas esenciales, a saber: 1. El asunto o motivo de atencin, se cristaliza en una imagen central. 2. Los principales temas de asunto irradian de la imagen central en forma ramificada. 3. Las ramas comprenden una imagen o una palabra clave impresa sobre una lnea asociada. Los puntos de menor importancia tambin estn representados como ramas adheridas a las ramas de nivel superior. 4. Las ramas forman una estructura nodal conectada. Junto a estas caractersticas, los mapas mentales se pueden mejorar y enriquecer con colores, imgenes, cdigos y dimensiones que les aadan inters, belleza e individualidad, fomentndose la creatividad, la memoria y la evocacin de la informacin. Cuando una persona trabaja con mapas mentales, puede relajarse y dejar que sus pensamientos surjan espontneamente, utilizando cualquier herramienta que le permita recordar sin tener que limitarlos a las tcnicas de estructuras lineales, montonas y aburridas. Para la elaboracin de un mapa mental y tomando en consideracin las caractersticas esenciales el asunto o motivo de atencin, se debe definir identificando una o varias Ideas Ordenadoras Bsicas (IOB), que son conceptos claves (palabras, imgenes o ambas) de donde es posible partir para organizar otros conceptos, en este sentido, un mapa mental tendr tantas IOB como requiera el cartgrafo mental. Son los conceptos claves, los que congregan a su alrededor la mayor cantidad de asociaciones, siendo una manera fcil de descubrir las principales IOB en una situacin determinada, hacindose las siguientes preguntas, de acuerdo con el Dr. Buzan: - Qu conocimiento se requiere?. Si esto fuera un libro, cules seran los encabezamientos de los captulos?. - Cules son mis objetivos especficos?.

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Cules son mis interrogantes bsicos?. Con frecuencia: qu?, quin?, cul?, cmo?, dnde?, cundo?, por qu? y para qu?, sirven bastante bien como ramas principales de un mapa mental. Cul sera la categora ms amplia que las abarca a todas?

Una vez que se han determinado las ideas ordenadoras bsicas se requiere considerar otros aspectos: 1. Organizacin: El material debe estar organizado en forma deliberada y la informacin relacionada con su tpico de origen (partiendo de la idea principal, se conectan nuevas ideas hasta completar la informacin). 2. Agrupamiento: Despus de tener un centro definido, un mapa mental se debe agrupar y expandir a travs de la formacin de subcentros que partan de l y as sucesivamente. 3. Imaginacin: Las imgenes visuales son ms recordadas que las palabras, por este motivo el centro debe ser una imagen visual fuerte para que todo lo que est en el mapa mental se pueda asociar con l. 4. Uso de palabras claves: Las notas con palabras claves son ms efectivas que las oraciones o frases, siendo ms fcil recordar para el cerebro stas que un grupo de palabras, frases u oraciones. 5. Uso de colores: Se recomienda colorear las lneas, smbolos e imgenes, debido a que es ms fcil recordarlas que si se hacen en blanco y negro. Mientras ms color se use, ms se estimular la memoria, la creatividad, la motivacin y el entendimiento, e, inclusive, se le puede dar un efecto de profundidad al mapa mental. 6. Smbolos (herramientas de apoyo): Cualquier clase de smbolo que se utilice es vlido y pueden ser usados para relacionar y conectar conceptos que aparecen en las diferentes partes del mapa, de igual manera sirven para indicar el orden de importancia adems de estimular la creatividad. 7. Involucrar la conciencia: La participacin debe ser activa y consciente. Si los mapas mentales se convierten en divertidos y espontneos, permiten llamar la atencin, motivando el inters, la creatividad, la originalidad y ayudan a la memoria. 8. Asociacin: Todos los aspectos que se trabajan en el mapa deben ir asociados entre s, partiendo desde el centro del mismo, permitiendo que las ideas sean recordadas simultneamente. 9. Resaltar: Cada centro debe ser nico, mientras ms se destaque o resalte la informacin, sta se recordar ms fcilmente y con mayor rapidez. 4.3. Leyes y recomendaciones de la cartografa mental. De acuerdo con el creador de esta tcnica, Dr. Buzan, existen unas leyes cuya intencin consiste en incrementar ms que restringir, la libertad mental. En este contexto, es importante que no se confundan los trminos orden con

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rigidez, ni libertad con caos. Dichas leyes se dividen en dos grupos: Las leyes de la tcnica y las leyes de la diagramacin: Leyes de la Tcnica Leyes de la Diagramacin Utilizar el nfasis Utilizar la jerarqua Utilizar la asociacin Utilizar el orden numrico Expresarse con claridad Desarrollar un estilo personal De igual forma, el Dr. Buzan, aade algunas recomendaciones a las leyes anteriores: - Romper los bloqueos mentales. - Reforzar (revisar y verificar el mapa mental). - Preparar (crear un contexto o marco ideal para la elaboracin del mapa mental). Las ventajas de la Cartografa Mental sobre el Sistema Lineal de preparartomar notas son las siguientes: Se ahorra tiempo al anotar solamente las palabras que interesan, al no leer ms que palabras que vienen al caso, al revisar las notas del mapa mental y al no tener que buscar las palabras claves entre una serie innecesaria. - Aumenta la concentracin en los problemas reales. - Las palabras claves se yuxtaponen en el tiempo y en el espacio, con lo que mejoran la creatividad y el recuerdo. - Se establecen asociaciones claras y apropiadas entre las palabras claves. - Al cerebro se le hace ms fcil aceptar y recordar los mapas mentales. - Al utilizar constantemente todas las habilidades corticales, el cerebro est cada vez ms alertado y receptivo. Mapa mental -

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4.4. Aprendizaje y memoria. El aprendizaje cambio relativamente estable de la conducta es, en realidad, un proceso de almacenamiento en el cerebro y la memoria es la recuperacin de los contenidos almacenados en los bancos de datos del cerebro. En general, existen dos tipos de aprendizaje y memoria diferentes. En primer lugar, hay aprendizaje y memoria motores, que es el aprendizaje de todas las habilidades motoras, incluida la postura erecta y la marcha. Y, en segundo lugar, existe el aprendizaje y memoria cognitivos, que incluye las percepciones, ideas, expresiones lingsticas y el conjunto de la cultura con todas sus manifestaciones. Uno de los aspectos en que el chimpanc se parece al hombre es en la estructura de su cerebro, mostrando una capacidad de razonamiento primitivo, con un cerebro similar al que tendra los homnidos primitivos. Como en el Homo, la cra de chimpanc est muy indefensa tras el nacimiento, pero su cerebro es aproximadamente un 60% del tamao adulto, comparando con el 26% de la cra humana. A los tres meses, presenta algunas coordinaciones motoras y a los cinco comienza a dar sus primeros pasos y a trepar. Los jvenes se mantienen bajo el cuidado maternal durante uno a dos aos despus del destete, que sucede a los cinco aos aproximadamente. A los siete u ocho aos de edad, el macho joven deja a su madre para unirse a la sociedad masculina. A los quince aos alcanza la madurez, en cambio en las hembras es anterior, presentando una vida sexual activa a los once aos. En experimentos se ha demostrado que los chimpancs pueden construir mapa de reas, por ejemplo, con localizaciones de alimentos ocultos; es decir, disponen de memoria espacial. El aprendizaje motor se realiza en forma correcta en el simio y es posible alguna comunicacin verbal en lenguaje con signos o smbolos. Muestran un reconocimiento de objetos. En la evolucin de los homnidos, estaba dispuesto el mecanismo de un desarrollo cerebral evolucionado para el aprendizaje y la memoria. Pero el rendimiento humano es de una magnitud diferente. El rendimiento de un adulto humano es incomparablemente superior y se desarrolla a lo largo de la vida, aprovechando todos los cdigos aprendidos de forma ms o menos permanente, tal como la escritural. El hipocampo del Homo tiene un ndice mayor. En la evolucin los hemisferios cerebelosos se desarrollan en paralelo con los hemisferios cerebelares, aunque en menor grado. El rea VPO (puente ventral) est implicada en la va cerebrocerebelosa, lo que explicara su gran ndice de tamao. Las eferencias de los hemisferios cerebelosos se producen a travs del ncleo cerebeloso lateral, de ah el alto ndice de tamao para Homo. Por el contrario, los ncleos cerebelosos MNC (ncleo cerebeloso medial) e ICN (ncleo cerebeloso intermedio) tienden a ser agresivos.

Como sabemos, las fibras de las neuronas terminan en botones sinpticos que estn llenos de vesculas sinpticas con la sustancia qumica que va a ser transmitida a travs de la hendidura sinptica. Se cree que el aprendizaje poda acompaarse de un reforzamiento de las sinapsis tras una intensa actividad. El hipocampo presenta un papel importante en la memoria cognitiva. En casos de su extirpacin por alguna dolencia, el paciente presenta una incapacidad total para almacenar recuerdos cognitivos (amnesia retrgrada). Tambin juegan un papel clave las reas asociativas sensoriales de los lbulos parietal y temporal con sus aferencias tctiles, auditivas y visuales. Existe una relacin bidireccional ntima con la corteza frontal denominada memoria a largo plazo, a travs de una importante va al hipocampo y estructuras relacionadas al sistema lmbico. De ah, la va se dirige al tlamo mediodorsal de la corteza frontal, producindose una convergencia en la corteza frontal de dos aferencias desde las reas asociativas sensoriales, con la consiguiente oportunidad de conjuncin, siendo un factor clave para la memoria congnitiva. Aunque, se ha producido un aumento en los ndices de tamao del hipocampo y estructuras relacionadas de la esquizocorteza y el diencfalo en los primates y tambin un gran aumento en la corteza asociativa, particularmente del lbulo prefrontal. No obstante, la corteza prefrontal humana ocupa un rea cinco veces mayor que la del simio. En este proceso el lenguaje juega un papel fundamental. Posiblemente, ya el Homo habilis realiz un mayor avance con su cerebro ms grande y con el desarrollo de las reas del lenguaje, adems de una cultura basada en utensilios de piedra duraderos. Podemos presumir que su cultura dependi de una mejora de la memoria cognitiva. Los primeros aos de vida del hombre y los primates se centran en el aprendizaje motor. La cra del chimpanc aprende casi el doble de rpido que el beb humano, posiblemente por el hecho de que las cras humanas nacen prematuramente. El cerebelo est involucrado en el control del movimiento. En su evolucin, los hemisferios cerebelosos han crecido ms que el vermis, situado ms medialmente, y que la regin intermedia, producindose los siguientes hechos: 1. Disminucin del ncleo cerebeloso medial (MCN), que se corresponde con la disminucin del vermis, de los movimientos automticos del cuerpo y de las extremidades controlados por el tronco del encfalo y la mdula espinal. 2. El ncleo cerebeloso intermedio (ICN) muestra un rendimiento evolutivo mixto, que corresponde al doble papel del lbulo intermedio del cerebelo y el ICN. Relacionados con el control del movimiento del tronco del encfalo y de la mdula espinal, por un lado, y, por otro, con la corteza cerebral contralateral. 3. El ncleo cerebeloso lateral (LCN) muestra un considerable avance en el Homo. Estara involucrado en los niveles superiores del control del movimien-

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to. Este control cerebeloso del movimiento puede estar sujeto a un proceso de aprendizaje. Si bien los monos y los simios tienen un buen desarrollo de la maquinaria para los aprendizajes cognitivo y motor, encuentran obstculos en una situacin nueva porque aquellos son incapaces de pensar los problemas lingsticamente. Por lo tanto, en la evolucin de los homnidos se presenta nuevamente el papel clave del lenguaje en el xito evolutivo. Para que tenga lugar una consolidacin de un recuerdo, las aferencias del hipocampo a la neocorteza han de repetirse tanto como en la experiencia inicial, en lo que podramos denominar recuerdos episdicos de uno a tres aos. Un fallo en esta repeticin origina el proceso ordinario del olvido. La memoria cognitiva se mantiene en bancos de datos de la corteza cerebral. Por experimentos con la tcnica para medir el flujo sanguneo cerebral (rCBF) por inyeccin de xenn radioactivo, se pudo notar que se produjo un aumento notable de rCBF a ambos lados del lbulo prefrontal, por lo que se puede concluir, que en la recuperacin de memorias cognitivas almacenadas, se produce una actividad cerebral bastante considerable en muchas reas; pero, sobre todo, en la corteza prefrontal. El rea del lenguaje, especialmente las reas 39 y 40 de Brodmann, est muy aumentada. Este origen evolutivo tardo puede deberse a su tarda mielinizacin. Siendo por lo que se propone que esta enorme expansin evolutiva de la corteza prefrontal desde los hominoides no experiment un crecimiento uniforme. Como en las reas 39 y 40, se pudieron desarrollar reas nuevas con propiedades especiales que confirieron al lbulo prefrontal su preeminencia en el pensamiento y memoria humanos. La creencia filosfica griega se movi entre el dualismo y el interaccionismo. Descartes, influido por ella, propuso una mente no material interaccionando con un cerebro material. Un animal es consciente cuando se gua por sentimientos y estados de nimo, y cuando es capaz de valorar su situacin presente a la luz de la experiencia pasada, as puede desarrollar una accin apropiada que es ms que una respuestas instintiva estereotipada. De esta forma, es capaz de mostrar un patrn original de comportamiento que puede ser aprendido y que, adems, incluye una serie de reacciones emocionales. El rendimiento instintivo de un animal se basa en la construccin ontogentica de su sistema nervioso y estructuras relacionadas por medio de instrucciones genticas; por ello, el aprendizaje puede ser el aumento de la efectividad sinptica tras el uso. Se podra plantear la hiptesis de que en la evolucin, la aparicin de las experiencias mentales conscientes acompaaba la evolucin del mecanismo de procesamiento visual, esencial en la gua de conducta animal.

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Una de las caractersticas ms significativas del cerebro humano es su asimetra, las asimetras se muestran en los lbulos ntimamente relacionados con el yo consciente. No se han observado asimetras en los cerebros de monos y mandriles. Probablemente, exista asimetra en la fisura de Silvio del cerebro del simio, la cual tiende a ser mayor en el hemisferio derecho. En el cerebro humano la fisura de Silvio en el lado derecho se angula hacia arriba antes que en el lado izquierdo. Esta asimetra se relaciona con la asimetra del plano temporal, que es ms amplia en el lado izquierdo, siendo el rea para el procesamiento de la informacin musical. No obstante, no se ha demostrado asimetra para las reas corticales del lenguaje. Para los monos la asimetra de este tipo est dada por la preferencia manual. La especializacin hemisfrica no est presente y son ambidiestros. En la evolucin de los homnidos ha habido un enorme desarrollo de las asimetras en las funciones de zonas anatmicamente simtricas de los hemisferios derecho e izquierdo. La simetra sobresaliente se encuentra en las reas del lenguaje. Las partes ms amplias de los lbulos parietal y temporal izquierdo se especializan en la semntica del reconocimiento y produccin del lenguaje (rea de Wernicke). No obstante, las reas que representan la imagen especular en el hemisferio derecho tienen muy poca relacin funcional con le lenguaje. De forma similar, la imagen especular del rea de Broca en el lbulo frontal inferior derecho parece que no se utiliza en la produccin del lenguaje. Aunque, las reas 39 y 40 de Brodmann que, en el lado izquierdo se relacionan con funciones especficas del lenguaje, en el rea 39 est implicada en la conversin de las aferencias visuales (escritas e impresas) en un significado, mientras que el rea 40 se implica en las aferencias auditivas. El lbulo parietal derecho est especialmente relacionado con la manipulacin de datos espaciales y con una forma no verbalizada de relacin entre el cuerpo y el espacio. Implica las habilidades espaciales y su lesin origina la prdida de las habilidades basadas en movimientos finamente organizados (apraxia), y, adems, trastornos sutiles como deterioro de la fluidez verbal, reduccin en la capacidad de concentracin, etc. Una amplia variedad de trastornos resultan tambin de lesiones extensas del lbulo parietal izquierdo. Los trastornos principales se relacionan con el lenguaje. En le lbulo parietal izquierdo existe una integracin de los datos sensoriales con el lenguaje y, como consecuencia, existen incapacidades para la accin motora, la capacidad constructiva y el clculo. El lbulo temporal derecho ha mostrado especial implicacin en la apreciacin musical y en el reconocimiento de patrones espaciales. En cambio, el izquierdo, se relaciona con un estadio del procesamiento de la informacin acstica que es anterior a su reconocimiento semntico. En resumen, existe una dominancia del hemisferio izquierdo para el lenguaje y el procesamiento analtico, y del derecho para la meloda y el procesamiento

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holstico. Esta asimetra es nica en los homnidos y su mente parece ser holstica y no divisible en partes. Tras una operacin llamada comisurotoma, en la que se realiz una seccin del cuerpo calloso el gran tracto de fibras nerviosas (200 millones) que une los dos hemisferios cerebrales, se lleg a la conclusin de que cada hemisferio utiliza sus propios preceptos, imgenes mentales, asociaciones e ideas. El derecho es un cerebro muy desarrollado, pero no puede expresarse por medio del lenguaje, de forma que no es capaz de revelar ninguna experiencia de consciencia. En general el hemisferio dominante se especializa en relacin con los detalles imaginativos, precisos en todas las descripciones y respuestas; es decir, es analtico y secuencial (puede sumar, sustraer, multiplicar, etc.). Su dominancia se deriva de sus habilidades verbales e ideacionales y de su enlace con la autoconciencia (concimiento de s mismo). Hemisferio dominante Relacin con la autoconciencia. Verbal. Musical. Sentido pictrico y de formas. Anlisis en el tiempo. Holstico. Imgenes. Hemisferio menor Relacin con la conciencia. Casi no verbal. Descripcin lingstica. Ideacional. Similitudes conceptuales. Sntesis en el tiempo. Anlisis del detalle.

Geomtrico y espacial. Sintetiza el es- Aritmtico y parecido a un ordenapacio. dor. Los hemisferios cerebrales humanos existen en una relacin simbitica en la que tanto las capacidades como las motivaciones actan de forma complementaria. Hasta hace poco se crea que el rendimiento cognitivo superior del cerebro humano se deba a su magnitud y esta es una burda creencia sin ninguna idea creativa. Por el contrario, ahora se propone que las funciones extraordinarias del cerebro humano se derivan de la neoneocorteza, que probablemente sera insignificante en los hominoides ms avanzados, en analoga con el modelo del simio. Las reas 39 y 40 son las ms claramente definidas de la neocorteza, pero los lbulos prefrontal medio y temporal inferior tambin lo estn. Las reas neoneocorticales son la base estructural para muchas de las asimetras. En la evolucin de los homnidos podemos suponer que existi una imperiosa necesidad de ms circuitos neuronales con un exquisito diseo para poder satisfacer la amplia demanda del nuevo desarrollo evolutivo, especialmente para los niveles ms altos del lenguaje. Por consiguiente, se gener una estrategia evolutiva consistente en no formar ms neocorteza con una representacin

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dual y, en su lugar, se producira, al nacer, una tendencia hacia la derecha o hacia la izquierda para una u otra funcin nstica durante la maduracin retardada. El gran xito en la evolucin de los homnidos se asegur por la economa asimtrica, que dobla potencialmente la capacidad cortical. La asimetra cortical es el punto crucial de este xito. La neocorteza vieja con sus funciones sensoriales y motoras, permaneci inalterada con sus funciones simtricas. Las caractersticas de la neoneocorteza son: - Filogenticamente, es la ltima en evolucionar y un desarrollo especial de los homnidos. - Ontogenticamente, es la ltima en madurar, como lo muestra la mielinizacin retardada y el desarrollo retardado de dendritas y sinapsis. Existe una asimetra funcional. En los nios existe una plasticidad en la maduracin; es decir si sufre un hemisferio una lesin, el otro puede coordinar las funciones principales que cumplira el otro. La activacin de la neoneocorteza va asociada a una amplia variedad de funciones gnsticas: conciencia y autoconciencia, pensamiento, memoria, sentimientos, imaginacin y creatividad. Las siguientes imgenes son tomografas tomadas a individuos mientras realizaban una accin. Las reas de mayor actividad son las rojas, pudindose observar ante una accin determinada que zona de los hemisferios se presenta una mayor concentracin de movimiento.

Algo se ha movido y co- Llegan nuevas impresiones Proceso de pensamiento mienza a observarse. El pticas y se visualiza con con una mayor actividad en el lbulo frontal. centro de la visin comienza mayor detalle la escena. a moverse.

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Los odos perciben la msiLa persona recuerda activi- Realizacin de un deporte. ca y el lenguaje en una candades y momentos del pa- Se observa la activacin de cin. sado. Varias zonas colabo- las zonas motoras. Participan ambos hemisferan en esta tarea. rios

Se analizan las variedades de los tonos musicales.

Se escucha msica.

Tenemos una memoria del futuro, es decir, un tipo de memoria no de lo que ha sucedido, sino de un conjunto de anticipaciones que experimentamos cuando estamos pensando en acciones planificadas para el futuro. Las lesiones bilaterales de la corteza prefrontal producen un sndrome de prdida del futuro, caracterizado por la indiferencia y por la prdida de la ambicin y de la capacidad de previsin. En cuanto a la localizacin de la imaginacin en el cerebro, se ha podido estudiar por medio de las tcnicas de radiotrazadores. Las regiones de la corteza cerebral implicadas en distintos tipos de imaginacin se pueden localizar en grandes reas de los lbulos prefrontales. Otras reas de la corteza cerebral

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estn especficamente relacionadas con las tareas imaginarias, como las reas del lenguaje y las reas visuales. Para la imaginacin abstracta no se han hecho estudios, pero se puede suponer que la corteza prefrontal podra ser dominante. 5. El cerebro y las emociones Las emociones son funciones biolgicas del sistema nervioso que mantienen activa la vida mental. En estudios realizados por Gazzaniga (1975), sobre ciruga de escisin cerebral, se mostraba que al dividir el cerebro, la comunicacin entre los hemisferios desaparece. La informacin que est en un hemisferio queda encerrada y no puede ser utilizada por el otro. El autor lleg a las siguientes conclusiones sobre los mecanismos cerebrales de las emociones: 1. El enfoque adecuado de anlisis de una funcin psicolgica es el que la estudia en relacin con su localizacin en el cerebro. 2. Los mecanismos cerebrales que generan conductas emocionales se conservan a lo largo de la evolucin. 3. Las emociones conscientes mediante las cuales conocemos y apreciamos u odiamos nuestras propias emociones son desvos en el estudio cientfico de las emociones. 4. Lo importante es procurar los mecanismos que detectan una situacin que pueda provocar una emocin. 5. Utilizando las respuestas emocionales podemos investigar el mecanismo subyacente y conocer mejor el mecanismo que genera nuestros sentimientos conscientes. 6. Los sentimientos conscientes no son diferentes de otros estados de consciencia, como la percepcin. 7. Las emociones tienen lugar sin que las hayamos planeado, teniendo la mente poco control sobre ellas emociones. 8. Las conexiones que comunican los mecanismos emocionales con los cognitivos son ms fuertes que las que comunican los cognitivos con los emocionales. 9. Las emociones motivan conductas futuras e influyen tanto en las reacciones inmediatas como en las futuras, pudiendo ocasionar problemas como trastornos mentales, pero tambin pueden ser tiles. 10. Las experiencias emocionales conscientes son slo una parte de los mecanismos que las generan. 11. La creacin de las emociones es una de las funciones ms complicadas del cerebro. 12. A pesar de ser el estado del cerebro que mejor se conoce, no se sabe muy bien de dnde proceden las emociones.

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13. Los cientficos presentan diversas teoras sobre la naturaleza de las emociones: para algunos, son reacciones fsicas evolucionadas por el efecto de la lucha por la supervivencia. Para otros, son estados de la mente que surgen cuando se detectan reacciones fsicas. Otros, opinan que lo importante solamente ocurre en el interior del cerebro. 14. Los avances en el estudio de la cognicin aportan un marco conceptual y una metodologa til como planteamiento para todos los aspectos de la mente, incluyendo las emociones. Desde la antigua Grecia se ha tendido a separar la cognicin de las emociones y ha considerarlas aspectos opuestos de la mente. No obstante, hoy da, de la mano del Cognitivismo, aunque en sus orgenes estudiaba la cognicin sin tener en cuenta las emociones, a la hora de intentar comprender cmo conocemos el mundo en que vivimos y cmo hacemos uso de esos conocimientos, opina que es imprescindible tener en cuenta las emociones y, dentro de ellas, particularmente, el estudio de la motivacin. Esto ha dado lugar al constructo del Aprendizaje Autorregulado SRL, que centra su atencin en la conjuncin de la cognicin-metacognicin, la motivacin y la conducta del aprendiz, con el afn por conseguir que los alumnos aprendan a aprender. Los alumnos sern autorreguladores en la medida que sean, cognitiva-metacognitiva, motivacional y conductualmente, promotores activos de sus propios procesos de aprendizaje (Zimmerman, 1990; McCombs y Marzano, 1990). 1. Cognitiva-metacognitivamente, cuando sean capaces de tomar decisiones que regulen la seleccin y uso de las diferentes formas de conocimiento: planificando, organizando, instruyendo, controlando y evaluando (Corno, 1989). 2. Motivacionalmente, cuando sean capaces de tener gran autoeficacia, autoatribuciones e inters intrnseco en la tarea, destacando un extraordinario esfuerzo y persistencia durante el aprendizaje (Schunk, 1986; Borkowski et al., 1990). 3. Conductualmente, cuando sean capaces de seleccionar, estructurar y crear entornos para optimizar el aprendizaje, buscando consejos, informacin y lugares donde vean favorecido su aprendizaje (Wang y Peverly, 1986; Zimmerman y Martnez-Pons, 1986), autoinstruyndose y autorreforzndose (Rohrkemper, 1989). En suma, un aprendiz efectivo ser aquel que llegue a ser consciente de las relaciones funcionales entre sus patrones de pensamiento y de accin (estrategias) y los resultados socioambientales (Corno y Mandinach, 1983; Corno y Rohrkemper, 1985); es decir, cuando se sienta agente de su comportamiento, estando automotivado, usando estrategias de aprendizaje para lograr los resultados acadmicos deseados, autodirigiendo la efectividad de su aprendizaje, evalundolo y retroalimentndolo.

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En general, podemos sealar que los modelos de aprendizaje autorregulado estn integrados por tres elementos bsicos: el uso de estrategias de aprendizaje autorregulado, el compromiso hacia las metas acadmicas y las percepciones de autoeficacia sobre la accin de las destrezas por parte del alumno. No obstante, en la primera mitad del siglo XX el conductismo fue la corriente dominante en Psicologa que defenda que los estados interiores y subjetivos de la mente, como las emociones, no eran temas apropiados para la psicologa, que deba estudiar hechos observables y no de la consciencia. Hacia la mitad del siglo XX el conductismo perdi fuerza a costa del nacimiento del cognitivismo, se crearon los ordenadores, surgi la inteligencia artificial y se consider la mente como una herramienta de procesamiento de informacin. La mente volva a estar en primer plano. El funcionalismo contribuy al afianzamiento del cognitivismo al sostener que la mente es al cerebro lo que un programa informtico es a un soporte fsico, considerando la mente como procesador de informacin, olvidando la conciencia y el subjetivismo, centrndose ms en la comprensin de la organizacin funcional y de los procesos que subyacen a los procesos mentales y los originan. El contenido consciente procede del procesamiento y no somos conscientes de l, sino slo de su resultado. El psiclogo Kihlstrom (1973) us el trmino inconsciente cognitivo para referirse a los procesos ocultos, principal inters del cognitivismo, y que abarcan muchos niveles de complejidad de la mente. Este inconsciente implica que mucho de lo que realiza la mente sigue existiendo fuera de la consciencia. Lo primero que analiza el sistema nervioso en un estmulo son sus propiedades fsicas y dichos procesos ocurren sin que nos demos cuenta. Somos conscientes del resultado del procesamiento, pero no del proceso en s. El cerebro atribuye significado a los estmulos a partir del anlisis de sus caractersticas fsicas, las cuales llegan hasta los recuerdos almacenados a largo plazo. Entonces, se compara la informacin del estmulo con la informacin almacenada sobre objetos similares, obteniendo finalmente los recuerdos conscientes. De esta manera, la mayora de los cientficos cognitivistas afirmaban que las emociones juegan un papel importante en la mente; pero, a la vez, sealan que no forman parte de su planteamiento. A pesar de ello, otros autores han llegado a conclusiones que muestran que la cognicin no es estrictamente lgica; sino que, incluso, es ilgica en ocasiones, por lo que pudiera ser que las emociones no estuvieran tan separadas de la cognicin como se afirmaba. Tradicionalmente, se ha considerado que las emociones eran estados subjetivos de la consciencia. Esta subjetividad hizo que fueran despreciadas, en principio, por el cognitivismo. Pero, otras funciones cerebrales que tienen correlaciones subjetivas siguen adelante y, por tanto, el estudio de las emociones tambin debera continuar.

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As pues, los psiclogos interesados en las emociones, han intentado explicarlas como procesos cognitivos. Las emociones seran pensamientos sobre situaciones en las que nos encontramos y no se diferenciaran de los actos de cognicin. En suma, los sentimientos y emociones son las explicaciones que damos acerca de los estados fsicos emocionalmente ambiguos, utilizando el pensamiento y las atribuciones sobre causas externas e internas de ese estado. Las emociones seran el resultado de la interpretacin cognitiva de las situaciones. En nuestros das, se han realizado muchas simulaciones informatizadas sobre la evaluacin y otros procesos mentales. Algunos investigadores creen que las emociones pueden programarse por ordenador, pero an no ha sido creado ningn programa que pueda procesar emociones. Gran parte de los estudios sobre el procesamiento inconsciente se han basado en informes y procesos verbales, introspeccionistas, por lo que, probablemente, nuestra nocin de la complejidad de los procesos inconscientes del hombre es inexacta. Mediante estudios con animales se han llegado a comprender mecanismos emocionales compartidos con el hombre. Esto hace que conozcamos mejor cmo actan el lenguaje y la consciencia, funciones recin evolucionadas, y cmo interactan con los sistemas subyacentes no verbales e inconscientes, en las emociones. La ciencia moderna tiene como uno de sus objetivos primordiales hallar la localizacin de estas funciones en el cerebro, ya que para saber como funciona una funcin lo primero es localizarla.

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Parte II
La Ciencia Cognitiva: Enfoques y Aplicaciones

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CAPTULO 3
La ciencia cognitiva, una investigacin interdisciplinar Etapas de su construccin Jess Martnez Velasco
Tratar los problemas de la mente y de la cognicin exige hoy hacerlo concurrentemente con ciertos programas cientficos. Los avances que se han producido en la investigacin de los fenmenos cerebrales y cognitivos obliga a un cambio revolucionario en la forma de conceptualizar esos problemas. La ciencia cognitiva ms que una ciencia constituida, es todava una organizacin de disciplinas, cada una de las cuales contribuye a una mejor comprensin de lo mental, y todas juntas parten de la base terica que afirma que los seres humanos y aquellos ingenios a los que se atribuyen estados y procesos cognitivos son sistemas procesadores de informacin. Situamos los orgenes de la ciencia cognitiva en los antecedentes griegos y modernos, y su desarrollo y expansin en el giro cognitivo que ha dado la filosofa de la mente en las ltimas dcadas, principalmente con el desarrollo de la inteligencia artificial y la teora del ensamblaje de las neuronas y su relacin con los patrones de comportamiento. No olvidamos la alternativa de la enaccin, que intenta conciliar el mundo como realidad objetiva y el mundo experienciado. 1. Estudio cientfico de la Cognicin Una ciencia, cuando se constituye como tal, busca articular, sistematizar e institucionalizar un conjunto de ideas y de prcticas, al tiempo que procura distinguirse de otras disciplinas, incluso de aquellas con las que guarda algn tipo de relacin. El objetivo es el reconocimiento, como tal disciplina, por parte de la comunidad cientfica y, en consecuencia, su aceptacin y apoyo por la sociedad en general y por los grupos acadmicos en particular. La presencia o aparicin y el posterior desarrollo de una ciencia nueva es fruto, por tanto, de una historia interna y de una historia externa, sin entrar ahora a precisar cul de los dos tipos de historia cumple un papel genticamente principal en su constitucin. Es muy probable que si en la constitucin de una ciencia, la historia interna ha sido decisiva, en su aparicin y presencia y, sobre

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todo, en su aceptacin por la comunidad cientfica, la historia externa, social e institucional, ha debido ser determinante. Pretender atribuir a una ciencia identidad disciplinaria de una vez y para siempre no responde a la verdad. Las diversas disciplinas cientficas han sufrido, en el transcurso de su desarrollo constitutivo, un largo proceso de transformacin, de cambios y de modificaciones, en funcin de las circunstancias histricas y culturales especficas. Toda disciplina aspira, como es lgico, a definir su marco epistmico, constituido por el paradigma epistmico y por el paradigma social, pero, hasta que una ciencia logra definir ese marco, se necesita tiempo. En suma, toda ciencia necesita hallar su identidad cognitiva (paradigma epistmico: esquemas conceptuales, coherencia en sus orientaciones intelectuales, problemas y herramientas de investigacin, etc), y su identidad social (paradigma social), dentro de una ordenacin institucional superior. Una ciencia no paradigmtica, en el sentido kuhniano, que no posee un cuerpo definido de creencias y concepciones propias de un grupo cientfico (matriz disciplinar), al tiempo que soluciones tpicas de problemas concretos que el grupo cientfico acepta como caractersticas de la teora (ejemplares), se halla todava en el estado precientfico. Pero, una vez definido su marco epistmico, la ciencia en cuestin est sometida a cambios, algunos de los cuales llegan a ser tan profundos que afectan al propio marco epistmico. Es entonces cuando, en trminos kuhnianos, se producir una revolucin cientfica que dara lugar a otro largo perodo de ciencia normal, constituido por el dominio de otro paradigma epistmico y social. Pero tambin pueden coexistir paradigmas rivales y programas de investigacin en competencia, cada uno de los cuales orienta la investigacin en una direccin determinada. No vamos a entrar en la polmica de si la ciencia est en estado de revolucin permanente (Popper) o si lo dominante son largos perodos de ciencia normal (como quiere Kuhn). Lo que s importa subrayar en este momento es que la introduccin de la historia en la filosofa de la ciencia, ha supuesto ver la historia de la ciencia, tanto cognitiva como no cognitiva (siempre que no se la considere un depsito de ancdotas o como una crnica), como la que puede producir una transformacin decisiva de la imagen que tenemos actualmente de la ciencia3. De ah que, junto a la identidad cognitiva y a la identidad social, sea necesario encontrar la identidad histrica de cada disciplina, reconstituyendo su pasado disciplinario, al cual todos los miembros de una comunidad cientfica estn de acuerdo en pertenecer.

3 KUHN, Th. La Estructura de las Revoluciones cientficas. Mxico, FCE, 1979. p. 20.

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Cuando una nueva disciplina emerge en el intento de resolver un conjunto de problemas, existe la necesidad de buscarle sus fundamentos histricos en los que apoyar sus investigaciones. Por dos razones: por el respeto intelectual que la propia disciplina pueda ganar y, sobre todo, como una proteccin contra la repeticin de errores y contra la prdida de penetracin o perspicacia tericas. Esta identidad tridica debe ser el fundamento sobre el que se levante el edificio de cualquier ciencia nueva, cuya definicin solo podr lograrse en el curso de su propio desarrollo histrico. Definir una ciencia tarda tiempo, porque la triple identidad de la que estamos hablando solo se logra al final de un largo trayecto, en cuyo curso se han ido estableciendo diferencias con otras disciplinas, integrando puntos de vista de disciplinas diferentes, se han producido reconocimientos institucionales, etc. En los tres niveles de formacin de la identidad se pueden observar procesos de seleccin, de rechazo, de almacenamiento y de recuperacin de orientaciones alternativas. Pues bien, la ciencia cognitiva no es ajena a este triple propsito y, a pesar de que el objeto del que se ocupa (la cognicin) ha sido tema de estudio desde los orgenes mismos del pensamiento occidental, no ha logrado, hasta tiempos recientes, si es que realmente lo ha logrado, encontrar, como deca Kant de la metafsica, el camino seguro de la ciencia. No se puede afirmar, en efecto, que la ciencia cognitiva haya logrado ya su identidad cognoscitiva, tampoco su identidad social, y tal vez algo ms su identidad histrica. En este caso, la dificultad aadida de lograr este triple objetivo est en su carcter interdisciplinar e integrador de disciplinas que, como la psicologa, la lingstica, la ciencia computacional, la filosofa, la epistemologa, la antropologa y la neurociencia, se han formulado preguntas semejantes sobre la naturaleza de la mente humana y han desarrollado mtodos complementarios de investigacin. No obstante, a pesar de este carcter interdisciplinar e integrador, aspira a tener entidad propia y separada como ciencia. La pregunta es si un campo interdisciplinar puede confundirse con una ciencia. Al parecer, la historia demuestra que las ciencias han tendido ms a diferenciarse que a agruparse y, tal vez por eso, algunos prefieren hablar de investigaciones cognitivas en lugar de ciencia cognitiva4. No estaramos entonces ante una disciplina, sino ante un canal que nos permitira reconocer y manejar intereses comunes a psiclogos cognitivos, a investigadores en I.A., a lingistas, a filsofos y a otros estudiosos que tratan de comprender la mente humana, y cuyos antecedentes nos permiten remontarnos al propio Scrates.
4 RASTIER, F. Smantique et recherches cognitives. Paris, PUF, 1991. p. 20

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La identidad disciplinar no implica necesariamente simplicidad. El objeto de la ciencia cognitiva, que globalmente podramos definir como el estudio de los sistemas cognitivos (naturales o artificiales, humanos o no humanos), es lo suficientemente complejo y amplio como para que pueda ser estudiado de forma aislada por disciplinas particulares. Nos encontramos, como dice Norman5, ante una disciplina que ha nacido de la convergencia de intereses entre todos aquellos que se plantean el estudio de la cognicin desde puntos de vista diferentes. Es cierto que no ha existido una ciencia cognitiva que haya tenido por objeto especfico la cognicin humana, pero es de justicia reconocer que la filosofa, desde el origen, ha hecho de la cognicin su objeto preferente de investigacin. Sin embargo, hoy da se requiere algo ms que un tratamiento meramente terico acerca de lo que es y cmo funciona la mente humana. Se hace necesaria una ciencia cognitiva, cuya meta sea la comprensin de todos los mecanismos que intervienen en la cognicin, porque estamos ante un complejo sistema (la mente humana), que recibe, almacena, recupera, transforma y transmite informacin. La nueva ciencia precisar ms herramientas de las que puedan exigir cada una de las disciplinas, para las que la cognicin constituye solo un captulo, por importante que ste sea. A este respecto, la ciencia cognitiva no es todava una ciencia constituida, no posee an un marco epistmico definido, puesto que ello exigira una estructura terica general junto con el desarrollo de nuevos procedimientos, de nuevos mtodos y de nuevas tcnicas experimentales. Lo que sucede es que, al pretender ser la nueva ciencia de la cognicin en general, y dada la complejidad de la tarea, la ciencia cognitiva podr tener a su disposicin una variedad de mtodos que van desde la simulacin por computador a la observacin natural, desde el registro de impulsos elctricos del cerebro a la ejecucin de anlisis lingsticos, y desde usar lgicas no monotnicas a los tiempos de reaccin y protocolos verbales. Disponer de un buen mtodo se ha considerado siempre esencial a la hora de dar carcter de naturaleza a una ciencia, porque ello determina no solo el tipo de preguntas que nos podemos formular, sino tambin a qu tipo de cuestiones podemos aspirar a responder. Pues bien, se ha producido de un tiempo ac un desarrollo en la metodologa computacional dominante, en las teoras y tcnicas de procesamiento de la informacin y en la investigacin de la estructura y funcionamiento neuronal, que est conduciendo a lo que estamos llamando ciencia cognitiva, porque nos aproximamos a problemas, tradicionalmente intratables desde una perspectiva cientfica. Un dilogo fuerte entre cientficos que trabajan en tradiciones diferentes, que utilizan diferentes metodologas y que parten de supuestos diferentes, es el que
5 NORMAN, D.A. Perspectivas de la ciencia cognitiva. Barcelona, Paidos, 1987. p. 13

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permitir demarcar los problemas de esta disciplina y ofrecer las soluciones ms adecuadas. Nos hallamos ante un campo (la cognicin) en el que los reduccionismos, aunque deseables, tal vez no sean los que, por ahora, nos proporcionen la explicacin mejor fundada. Si los mecanismos o reglas mediante los cuales funcionan los sistemas cognitivos son muy variados, habr que estudiar aquellos que son especficos del funcionamiento cognitivo: los que actan, por ejemplo, en las reglas del lenguaje, los que intervienen en los principios biolgicos relevantes para la cognicin, los de los sistemas de procesamiento de smbolos fsicos, etc., como algo vital para la ciencia cognitiva. El reciente y rpido desarrollo de la teora de la informacin y de la ciencia del ordenador ha situado el ncleo de la ciencia cognitiva en torno al modo como los estados mentales procesan la informacin. La mente se convierte en un sistema de procesamiento de la informacin, con independencia del sustrato fsico de la misma (materia orgnica o silicio), aunque no parece que se puedan ignorar las bases biolgicas de la cognicin. No queremos prejuzgar si un artefacto mecnico o un cerebro es una mente. Este problema constituye, por s solo, un programa amplio de investigacin y nos llevara nada menos que a la ontologa misma del pensamiento, es decir, al estudio de la naturaleza de los estados y procesos psicolgicos y su relacin con los estados y procesos fsicos. No vamos a desarrollar todava la tesis del cognitivismo, cuyo principal modelo es la teora computacional de la mente, porque constituye una de las etapas ms importantes del desarrollo de la ciencia cognitiva moderna, y nos referiremos a ella un poco ms adelante. Pero en el intento de aproximarmos a una delimitacin y definicin de la ciencia cognitiva, s debemos dejar constancia de que uno de sus temas centrales parece ser el papel que la computacin y la manipulacin de smbolos desempean en la cognicin. Se parte, en efecto, del hecho de que la esencia misma de un sistema cognitivo es ser un sistema procesador de smbolos, y en esto coincidiran hombres, animales y mquinas. Por tanto, representacin y computacin parecen constituir, segn Newell, la base de la ciencia cognitiva. A este respecto, una definicin de ciencia cognitiva sera el estudio de la inteligencia y sus procesos computacionales en los humanos (y animales), en los computadores y en abstracto6. O, de un modo ms amplio, como el dominio de investigacin que intenta estudiar los sistemas inteligentes y la naturaleza de la inteligencia. Hemos aprendido que la inteligencia no es cuestin de sustancia, sea protoplasma o cristal o alambre, sino de formas que la substancia toma y de procesos por los que pasa. En la raz de la inteligencia hay smbolos, con capacidad denotativa y susceptibles de
6 SIMON, H.A. and KAPLAN, C. A. Foundations of cognitive science. (En POSNER, M.I. (Ed). Foundations of cognitive science. Cambridge, The MIT Press, 1989. p. 2).

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manipulacin. Y los smbolos pueden fabricarse con casi todo lo que se puede disponer, disear y combinar. La inteligencia es mente implementada con cualquier tipo de materia diseable7 No se trata, por tanto, de una manipulacin simblica puramente formal, porque, tal vez entonces, quedaran disociados los smbolos de sus significados, riesgo que se presta a correr la ciencia del computador o una teora computacional de la mente, al caer, en ltimo extremo, en un solipsismo metodolgico. La ciencia cognitiva debe aproximar el significado simblico a travs de la nocin de representacin, por medio de la cual mantenemos una relacin con el mundo, caracterstica sta propia de los sistemas cognitivos biolgicos, especialmente los humanos, cuyos sistemas de procesamiento de la informacin y cuyas relaciones representacionales solo pueden ser descubiertas por una investigacin cuidadosa y creativa. En resumidas cuentas, el objetivo ltimo de la ciencia cognitiva ser comprender tanto los procesos de informacin formal, con su capacidad para producir conductas significativas, a travs de los procesos representacionales, como las posibilidades para su implementacin fsica en cerebros o mquinas. El interrogante es si las propiedades fsicas de una mquina o de un organismo imponen algn tipo de restriccin a las informaciones que pueden realizarse y su rapidez. Los defensores de la mente computacional y del programa fuerte de I.A., como Fodor, Dennett, Pylyshyn, etc, no observan dificultades especiales a la hora de explicar los procesos cognitivos desde los procesos de simulacin por ordenador; en cambio Searle (neurocientfico mentalista), y otros, como P.M.Churchland y el propio Rorty, nada sospechosos de defender posturas mentalistas, y situados, por el contrario, en la posicin del materialismo eliminativo, consideran que hay algo (se refieren a la conciencia), que es difcilmente traducible a un programa de ordenador. Su materialismo neurocientfico no les lleva a identificarse con un naturalismo funcional, a pesar de que en un ordenador potente se puedan simular procesos y estados funcionalmente equivalentes a los que realiza un cerebro humano. Pero equivalencia no es lo mismo que identidad. P.M.Churchland va a defender, en ltima instancia, una teora neurocomputacional de la mente que, a travs del modelo conexionista, integre y asimile la actividad cerebral y la actividad de un ordenador. La ciencia cognitiva tiene una relacin simblica con la neurociencia y con la ingeniera electrnica. Como ciencia bsica del procesamiento de la informacin pretende descubrir los principios generales y fundamentales de ese procesamiento. Junto con el estudio del procesamiento de la informacin, y en consonancia con l, la inteligencia, el pensamiento y la cognicin son temas actuales para la ciencia cognitiva, cuyo objetivo sera, a juicio de Simon y Kaplan, el
7 o.c. p. 26

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estudio de la inteligencia y de los sistemas inteligentes, con una referencia particular a la conducta inteligente como computacin, sin olvidar que, adems, la cognicin humana se produce dentro de un sujeto personal que vive en una cultura y sociedad. Tanto las estructuras cerebrales como los factores culturales y sociales determinan nuestras acciones y, por consiguiente, comprender los procesos cognitivos es comprender esos aspectos y la forma como interactan. Si la I.A. puede ayudar y ayuda, de hecho, a la comprensin de la cognicin humana, debemos seguir cuestionndonos hasta qu punto la I.A. es capaz de compartir el mismo conocimiento cultural y social o crear su propia base cultural para ser verdaderamente creativos y comunicativos8. La conciencia, los qualia, la semntica de nuestros sistemas de comunicacin y de representacin, la creacin de cultura, la organizacin social, la memoria, la percepcin y el aprendizaje, son retos a cuya explicacin debe enfrentarse hoy la ciencia cognitiva desde la pluridimensionalidad de perspepctivas que la configuran y que, lejos de ser un obstculo para su definicin, constituyen una de sus virtudes. La cognicin en general y la cognicin humana en particular, por ser un fenmeno complejo, su investigacin exige aproximaciones especiales, diferentes y complementarias. Una visin completa de la cognicin debe tener representados todos los niveles. Conocer qu es la ciencia cognitiva implica conocer qu disciplinas han colaborado a su formacin, porque saber qu es la cognicin supone conocer las bases biolgicas y neurolgicas (neurociencia), matemticas y cibernticas, filosficas (lgicas y epistemolgicas), psicolgicas (psicologa cognitiva y experimental), antropolgicas, lingsticas y socioeconmicos de los sistemas cognitivos. La Fundacin Sloan represent en 1978 esta contribucin pluridimensional en el llamado hexgono cognitivo9:

8 NORMAN, D.A. o.c. pp. 13-14. 9 Las lneas continuas indican vnculos interdisciplinares fuertes; las discontinuas, vnculos interdisciplinares dbiles

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Filosofa Psicologa Inteligencia artificial Neurociencia Lingstica Antropologa

El diagrama delimitaba el campo dentro del cual debera actuar la investigacin cognitiva. Los que se vieron dentro de ese campo, ocupando una posicin nuclear o perifrica, se sintieron muy halagados y les supuso un impulso vigorizante para seguir investigando en sus respectivas reas. No se lleg a un consenso y a una coincidencia respecto al conjunto de premisas y de mtodos comunes a todos ellos. Por eso, la comunidad de cientficos ofreci resistencia a aceptar dentro de s una nueva disciplina que tuviera la categora de ciencia constituida, ya que cada rea intentaba imponer su paradigma predilecto al campo total. Ningn agente externo, aunque sea tan poderoso como la Fundacin Sloan, es capaz, por s solo, de fundar una ciencia. Es necesario el acuerdo acerca de la direccin de la investigacin que facilite la constitucin de una comunidad de cientficos, tal como ocurre, por ejemplo, con la fsica atmica o la biologa molecular. Nos encontramos, ms bien, ante un proyecto de investigacin y ante una filiacin de disciplinas que ante una disciplina propiamente tal. El proceso de constitucin contina todava y no por ello es menos apasionante. Sucede que cada una de esas disciplinas responde a la pregunta de qu es la mente y la cognicin desde su propio inters especfico ms que desde el campo total, a falta de haber consensuado una formulacin comunitaria. Sin embargo, la propia denominacin, ciencia cognitiva, indica que el estudio de la mente es en s mismo un proyecto cientfico10, en el que predomina todava hoy la diversidad ms que el acuerdo, a pesar de que ciertas voces participantes en el mismo adquieren ms fuerza que otras en diferentes perodos de tiempo. Resulta difcil prever cul ser su desarrollo futuro, ya que los historiadores modernos de la ciencia (Koyr, Kuhn) creen que la imaginacin cientfica cambia radicalmente con el tiempo.

10 VARELA, F.J. y otros. The embodied mind. Cognitive Science and human experience. Cambridge, The MIT Press, 1991. p. 4

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Para los representantes de la Fundacin Sloan, sin embargo, lo que justificaba la existencia de este campo total (la ciencia cognitiva) era un proyecto de investigacin comn a todas las disciplinas cognitivas: descubrir las capacidades representacionales y computacionales de la mente y su representacin estructural y funcional en el cerebro11. La pregunta que queda en el aire es si una relacin interdisciplinar puede constituir una disciplina nueva, provista de un objeto nuevo. La paradoja y a la vez el desafo de la ciencia cognitiva es cmo conciliar reas tan dispares como la antropologa respecto a la I.A., o la I.A. con la neurociencia, sta con la filosofa, etc. Si el objeto de la ciencia cognitiva, tal como lo plante la Fundacin Sloan, sigue siendo el estudio de la representacin y de la computacin y su posible representacin estructural y funcional en el cerebro, la tarea de los cientficos cognitivos y de otros cientficos tendr que ser construir o descubrir puentes que conecten a su disciplina con las vecinas, principalmente con la neurociencia, por abajo, y con las ciencias culturales (antropologa), por arriba. Mientras no sea posible, si es que es posible, nos hallaremos ante una ciencia incompleta y dispersa. La ciencia cognitiva parece sentirse segura en el mbito de la I.A., de la psicologa cognitiva, de la lingstica y de la filosofa, pero cuando el problema de la cognicin lo abordamos desde la neurociencia y desde su dimensin cultural y social, por poner los dos extremos, las dificultades crecen, a pesar de intentos recientes por conciliar los aspectos neurales con los computacionales y los filosficos, tal como se pone de manifiesto en la obra de los Churchland12. Antes de entrar a describir los antecedentes histricos remotos de la ciencia cognitiva y de detenernos en las etapas ms recientes de su constitucin, me gustara sealar que nos encontramos ante un campo, cuyo programa fundamental de investigacin se lo ha proporcionado la filosofa clsica a raz de su preocupacin por los problemas epistemolgicos. El conocimiento, su naturaleza, su gnesis, su desarrollo, los factores psicolgicos, biolgicos y sociales que lo determinan, la relacin del conocimiento con los diferentes niveles de representacin: imgenes, pensamiento, palabras, etc. Todo este vasto campo ha sido recogido por la ciencia cognitiva y lo ha convertido en objeto de un proyecto cientfico, cuyo tratamiento pretende ajustarse a los cnones normativos impuestos por el mtodo cientfico, con las tcnicas ad hoc de cada nivel o dominio de la ciencia cognitiva.
11 Sloan Foundation. Cognitive Science, 1978. Informe del State of Art Committee, New York, p. 6. 12 CHURCHLAND, P.S. Neurophilosophy: toward a unified understanding of the mind/brain. Cambridge, The MIT Press, 1986. CHURCHLAND, P.M. Neurocomputational Perspective. The Nature of Mind and the Structure of Science. Cambridge, The MIT Press, 1989.

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Es distinto el nivel de tratamiento antropolgico de un problema, como el lenguaje y su capacidad representacional, que el nivel neural, o computacional, o psicolgico, o filosfico, pero nicamente en la interconexin de tales niveles podremos hallar una descripcin adecuada del problema que nos ocupa. Las fronteras que limitan cada una de las disciplinas cognitivas deben hacerse ms permeables, sin miedo a su desaparicin o a su absorcin por la ciencia cognitiva. De la misma manera que la bioqumica, o la fsicoqumica no ha hecho desaparecer ni a la biologa, ni a la qumica, ni a la fsica. Nadie pone en duda hoy da los progresos que se han llevado a cabo en la explicacin de aquellos temas que preocuparon a Platn, a Aristteles, a Descartes, a Kant, a los fenomenlogos, y ello se ha debido principalmente a los procedimientos cientficos utilizados por las diversas disciplinas cognitivas a la hora de estudiar alguno de aquellos problemas. El conocimiento de la mente sigue teniendo todava reas sombreadas y estamos lejos, por tanto, de acabar con todos los problemas cientficos que plantea el conocimiento de la mente. Pero la historia de la ciencia nos permite ser optimistas respecto al futuro del desafo cognitivo, aunque solo en la medida en que se superen los escepticismos necesarios y las limitaciones que el propio proceso de investigacin plantee, y comience a verse claro que las diferentes aproximaciones tienen un carcter complementario, que obliga a las prximas generaciones de cientficos a tener una preparacin distinta, basada en el conocimiento de algunas disciplinas mejor establecidas. 2. Antecedentes histricos Nihil novum sub sole. Este aforismo es aplicable de pleno a la ciencia cognitiva. Lo hemos indicado anteriormente. Los temas que estudia han tenido su raz y su fundamento terico en los tratamientos histricos particulares de la filosofa de la mente y de la psicologa filosfica. La historia del pensamiento contiene, desde el origen, las primeras aproximaciones hacia una explicacin completa de la mente y proporcionan paralelismos con gran parte del trabajo que se realiza en la moderna ciencia cognitiva. Ha habido incluso momentos en los que los temas de la mente se han convertido en el ncleo fundamental en torno al cual se ha hecho girar la reflexin filosfica (Ockham, Descartes, Leibniz, Hobbes, Locke, Hume, Kant, los fenomenlogos, principalmente Husserl y Merleau-Ponty, la psicologa, la filosofa analtica). El viraje hacia el sujeto de conocimiento que se produjo en la filosofa moderna hizo que los temas de investigacin y de reflexin se centraran en el conocimiento de la naturaleza humana, con especial dedicacin al anlisis de la estructura, del funcionamiento y de los contenidos de las facultades de conocimiento humano. Se aspiraba a construir una ciencia del hombre que fuera,

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como dice Hume13, la nica fundamentacin slida de todas las dems. Hume pretenda que esa ciencia, a la que quera convertir en un sistema completo de las ciencias, se edificara sobre un fundamento casi enteramente nuevo, basado en la experiencia y en la observacin. El propsito de realizar un estudio cientfico del hombre, y en concreto de la mente humana, no es, pues, patrimonio exclusivo de la ciencia cognitiva actual. Ya en la antigedad, pero sobre todo en la poca moderna, nos encontramos con tratados que se dedican a estudiar, de modo expreso, algunos de los temas centrales de la ciencia cognitiva. Sirvan como ejemplos, el Fedn y el Menn de Platn, el De Anima y el De Interpretatione de Aristteles, Las Regulae...., el Tratato del hombre, el Tratado de las pasiones, y las Meditaciones Metafsicas de Descartes, El Ensayo sobre el Entendimiento humano de Locke, Los Nuevos Ensayos sobre el Entendimiento humano de Leibniz, el Tratado de la Naturaleza humana de Hume, La CRP de Kant, Las Investigaciones Lgicas y las Meditaciones Cartesianas de Husserl, La Fenomenologa de la Percepcin y la Estructura del Comportamiento de Merleau-Ponty, La Filosofa de la Psicologa de Wittgenstein, etc, el estudio del lenguaje en la Filosofa Analtica, el Positivismo Lgico y la psicologa conductista, la revolucin cognitiva en psicologa y la vuelta hacia el paradigma mentalista de origen racionalista. Son ejemplos que han desembocado en la configuracin del programa de trabajo, de temas y cuestiones que estn ocupando a los cientficos cognitivos de orientacin emprica. En el transcurso de esta ya larga historia de la ciencia cognitiva se han ido encontrando nuevos caminos de aproximacin a los problemas acerca de la naturaleza del pensamiento y de la mente. No vamos a entrar en los detalles de estos antecedentes ms remotos, pero s creemos oportuno hacer una descripcin de lo que consideramos histricamente ms relevante de los mismos para, posteriormente, centrarnos en las etapas ms recientes de su construccin. 2.1 Filosofa griega En la cultura y filosofa griegas el hombre era definido como un ser racional. El ser racional y el actuar racionalmente eran signos inequvocos del hombre. La racionalidad era el ideal ms sublime al que poda y deba aspirar todo hombre. Toda accin deba estar supeditada al control y al imperativo de la razn. Por otro lado, la racionalidad del hombre perteneca a una dimensin suprafsica o metafsica de lo humano, de un valor incalculablemente superior a la realidad material. Constitua la naturaleza esencial especfica del hombre o lo que Aristteles llama la forma substancial o entelequia. A pesar de que los
13 HUME, D. Tratado de la Naturaleza Humana. Tomo I. Madrid, Ed. Nacional, 1977. p. 81.

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griegos tenan pruebas sobradas de la irracionalidad del comportamiento humano seguan aferrados a la idea de que el hombre era lgico y racional. Aristteles lleg a construir, en su Organon, una ciencia (la lgica), en la que se definan las leyes del pensar. La lgica no era una parte de la filosofa, sino el prtico para cualquier forma de saber. Era necesario conocer la manera como formamos los conceptos, cmo y que tipos de juicios o enunciados proposicionales formulamos, los tipos de razonamiento vlidos y la relacin de esas diferentes formas de representacin con los contenidos. A esas leyes se las consideraba universales y comunes a todos los hombres que piensan. Eran reglas del pensar que tenan un carcter puramente formal. Leibniz dir tambin, ms tarde, que el pensamiento es una forma de razonamiento formal, y Hobbes, que el pensamiento es un tipo de clculo con smbolos no numricos. Muchos cientficos cognitivos adoptaron al comienzo (J. Bruner, H. Simon y A. Newell, Piaget, etc) este modelo lgico, hasta el punto que Piaget sostendr que el nio desarrollado razona siguiendo principios lgicos y las diferentes etapas por las que transcurre el desarrollo intelectual son estadios caracterizados por el funcionamiento de una lgica de complejidad creciente. Y, sin embargo, estudios empricos recientes, principalmente los llevados acabo por Johnson-Laird, han demostrado que no siempre el hombre, cuando se encuentra frente a un problema, razona siguiendo las leyes de la lgica, lo cual no significa que acte de modo irracional. Simplemente que la lgica que estudian y definen los lgicos tiene una aplicacin muy limitada en el modo de razonar en el mundo real. El modelo lgico-racional, la fe en la razn y el ideal de racionalidad no terminaron con sus protagonistas griegos, sino que se continuaron y, en algunos casos, se acrecentaron a lo largo de la historia. 2.2 Pensamiento moderno y contemporneo Centrndonos en la poca moderna, resulta inevitable referirse a la figura con la que no solo se inaugura el pensamiento moderno (Descartes), sino tambin con el que se inician, en profundidad, los debates acerca de las relaciones mente/cuerpo, espiritualismo/mecanicismo, lenguaje/pensamiento, representacin mental/contenido extramental, el origen innato de las ideas, el funcionamiento de los procesos cerebrales, la imposibilidad de simular la mente en un artefacto, sea orgnico o inorgnico, temas todos ellos de plena actualidad en la ciencia cognitiva. El pensar, para Descartes, sigue constituyendo la esencia del hombre. Proclama el poder de la subjetividad: un yo que piensa, cuya existencia es independiente de cualquier cosa material (dualismo) y que puede ser estudiado con independencia de la realidad. La mente, el pensamiento, la conciencia es el rgano de las ideas, que son innatas, de las representaciones, cuya conexin

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con las cosas representadas no es necesaria. Podemos estudiar la mente con independencia de la realidad (solipsismo metodolgico) a travs de un proceso introspectivo. Su teora representacional de la mente le lleva a separar dos mbitos de realidad claramente incompatibles: uno tratable matemticamente (el mbito de la materia, en el caso del hombre, el cuerpo=mecanicismo), y el otro (el pensamiento) no susceptible de ser tratado ni experimental ni matemticamente, pero, por contra, es el mbito que define al hombre substancialmente. La filosofa cartesiana se presenta, pues, como una filosofa de compromiso, que oscila entre las exigencias de la explicacin cientfica, que nos lleva al reino de la materia, y las exigencias de la moral y de las creencias, que le llevan a definir el pensamiento como un tipo de realidad radicalmente opuesto a la materia14. As pues, el escepticismo representacional, el solipsismo metodolgico y el dualismo cartesiano, han tenido una enorme influencia en la historia del pensamiento sobre la mente. Y, desde luego, estos tres aspectos estn perfectamente representados en la ciencia cognitiva. Son legados de Descartes. Paradgicamente, las tesis empiristas van a continuar, de alguna manera, el paradigma mentalista propuesto por Descartes, aunque, desde otro punto de vista, van a dar lugar a la justificacin del movimiento psicolgico opuesto: el conductismo. El primero, cuando Locke reafirma en el Ensayo sobre el entendimiento humano la tesis mentalista de las representaciones mentales y el carcter privado y personal de las mismas, inaccesibles a la observacin directa de una tercera persona. En el Ensayo, L. III, cap. II, 1, dice que los pensamientos no pueden manifestarse por s solos, permanecen escondidos a las miradas de los dems. De ah surgi la necesidad de crear unos signos sensibles (las palabras) para comunicar nuestros pensamientos a los dems y darlos a conocer. Con las palabras, pues, nos referimos a las cosas a travs de los procesos de representacin (las ideas), que constituyen la significacin de las palabras. No obstante, Locke niega el carcter innato de las ideas y hace esfuerzos por establecer vnculos entre los contenidos de la mente y el mundo de las cosas. Hume, como Descartes, participa del escepticismo representacional y defiende un fenomenismo psicolgico tal como se pone de manifiesto en un clebre pasaje del Tratado, Parte I, Secc. II, 7, donde dice que las impresiones de la sensacin surgen originariamente en el alma de causas desconocidas, y en la
14 ... mientras que si sabemos cunto difieren (el alma de los hombres y de los animales), se comprenden mucho mejor las razones que prueban que la nuestra es de una naturaleza enteramente independiente del cuerpo y, por tanto, no est sujeta en modo alguno a morir con l; adems, como en modo alguno se ven otras causas que la destruyen, uno se siente inclinado a juzgar, naturalmente, que es inmortal. DESCARTES, R. El Discurso del mtodo. Madrid, Alhambra, 1986, 5 parte, prrs. 462-468.

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Parte III, Secc.V, 84, dir que la causa ltima de las impresiones procedentes de los sentidos es, en su opinin, perfectamente inexplicable por la razn humana. Adems, a Hume no le interesa saber la explicacin causal de los fenmenos de conciencia, lo que le interesa es la experiencia personal de su impresin o de su correspondiente idea, con lo cual reafirma tambin, como Descartes, el solipsismo metodolgico, segn el cual podemos estudiar los estados mentales sin prestar ninguna atencin al mundo externo que representan y sin asumir que existe. No se niega su existencia, simplemente se la ignora. El nico acceso posible ser a travs de la creencia, del hbito y del sentimiento, carentes de toda justificacin demostrativa. Finalmente decir que el conductismo tuvo tambin sus antecedentes en el empirismo a partir del concepto de asociacin, que es un proceso puramente psicolgico, que se inaugura con Locke y adquiere su mxima expresin en Hume. Frente al optimismo mentalista cartesiano, de tipo dogmtico, y al probabilismo cuasiescptico de Hume, Kant, interesado y obsesionado por ofrecer un fundamento epistemolgico slido al conocimiento, inicia la explicacin del modelo de conocimiento desde un supuesto previo: someter a juicio la propia facultad de conocimiento, hacer de la CRP un canon de la facultad de conocer, como condicin para saber cul es su alcance y cuales sus limitaciones. Quiere determinar lo que podemos y lo no podemos conocer y cmo y por qu. Su objetivo es nicamente ste: cules son nuestros poderes cognitivos, si los tenemos, para ser capaces de producir conocimiento. Trat de demostrar que poseemos la materia prima necesaria para la adquisicin del conocimiento, pero el yo tiene que poner en marcha una actividad capaz, no de crear, pero s de construir el objeto de conocimiento. La revolucin copernicana de Kant ha consistido en cambiar la cuestin fundamental de la epistemologa, cmo nuestras ideas se conforman a los objetos, por cmo los objetos se rigen por nuestro conocimiento. El pensamiento depende de la mente, no de los objetos. El yo pienso, como unidad trascendental de la conciencia, es la condicin de todo conocimiento, pues debe ser capaz de acompaar a todas mis representaciones y, sin embargo, no puede ser objeto de experiencia, a pesar de que la psicologa racional se empea en aplicarle la categora de substancia a travs de un silogismo falaz, que utiliza los trminos de sujeto y substancia en dos sentidos diferentes15 El idealismo trascendental kantiano es, no obstante, un idealismo atenuado, compatible con un realismo emprico que lo limita, claramente diferenciado de aquel otro idealismo, cuyo objetivo es la reduccin, por elevacin, de todo a lo

15 KANT, I. Crtica de la Razn Pura. Madrid, Alfaguara, 1978. B406-407, y B410-411.

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mental, tal como ocurre, aunque por razones distintas, en el caso del idealismo subjetivo de Berkeley, y del idealismo objetivo de Hegel. No quiero terminar este repaso de los antecedentes histricos sin referirme, aunque sea tambin de manera breve, a dos pensadores que, a mi juicio, han contribuido notablemente a la orientacin y reformulacin de los problemas de la ciencia cognitiva moderna. Me estoy refiriendo, por un lado, a Husserl y, por otro, a Wittgenstein. A juicio de H.C.Dreyfus16, Husserl pasa por ser reconocido por el primero que ha plantado una teora general del papel de la representacin mental en la filosofa del lenguaje y de la mente, y el padre espiritual de la investigacin actual en psicologa cognitiva y en I.A. En efecto, con los principales representantes de la Teora Representacional de la Mente (TRM), como por ejemplo Fodor, est de acuerdo en oponerse a una psicologa naturalista. Husserl, con su teora fenomenolgica trascendental y a partir del concepto de epoj fenomenolgica, proclama la independencia de la mente respecto a la realidad natural. Segn Husserl, cada uno de nosotros tenemos un tipo de conocimiento de primera persona, a partir de rasgos intrnsecos esenciales de la mente o conciencia, que es independiente de la verdad o falsedad de nuestras creencias sobre el mundo. En Husserl, el conocimiento de nuestra representacin de la realidad es anterior al conocimiento de la naturaleza de la realidad, ya que nuestro acceso a la realidad es solo a travs de nuestras representaciones. Tanto Husserl como Fodor, no creen necesario ofrecer una teora naturalista sobre cmo tienen lugar actualmente los procesos mentales en las mentes humanas o cerebros. Su propsito es hacer un anlisis general abstracto de lo que se halla implicado en los diferentes tipos de actividades mentales, anlisis que se aplicar con igual validez a cualquier entidad capaz de este tipo de actividad mental. A la teora fenomenolgica de la mente y a la teora representacional de la mente les interesan casi exclusivamente los contenidos internos de las representaciones mentales, que pueden explicarse sin referencia a cosas extramentales, simplemente como relaciones entre esas representaciones mentales (o noemas). Ignoran, de hecho, las relaciones de la mente con el mundo y se focalizan sobre los noemas o representaciones y las relaciones entre ellos. A este sistema de representaciones mentales es a lo que llamar Fodor lenguaje del pensamiento y coincide con la descripcin de Husserl acerca de los noemas, cuyas relaciones son de la misma naturaleza (sintctica y semntica) que las que caracterizan a un lenguaje natural.

16 DREYFUS, H.C. Husserl, Intentionality and cognitive Science. Cambridge, The MIT Press, 1983. p. 2.

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El pensamiento humano no es puramente formal y computacional. Las propiedades semnticas inherentes a nuestras representaciones mentales es lo que hara, segn Husserl, que la I.A. fuera artificial, al ser solo formal y carente, por tanto, de lo que es verdaderamente mental. Si esto fuera as, cosa que es discutible, el computacionalismo sera falso como teora de la mente. Husserl quiere dejar muy claro que su inters y familiaridad por la lgica y la matemtica no le constrie a una descripcin fenomenolgica que sea puramente sintctica. Husserl, en ltima instancia, pretende rescatar la dignidad de un sujeto que, en un recortado naturalismo y objetivismo, se olvida del sentido total del mundo de la vida. Por eso, propone como tarea de la fenomenologa intencional estudiar el espritu en cuanto espritu desde una experiencia sistemtica y desde la ciencia. De Wittgenstein interesara subrayar dos aspectos: su concepcin del lenguaje y la defensa de la autonoma de lo psicolgico. El Wittgenstein del Tractatus todava aspiraba a crear un lenguaje universal bajo una forma lgica. El lenguaje era como un a priori desde el que se podan establecer las condiciones de posibilidad de todo enunciado dotado de sentido sobre estados de cosas, de modo que los lmites del lenguaje son los lmites del mundo17. El Wittgenstein de las Investigaciones Filosficas, en cambio, inicia un anlisis sociolgico del lenguaje ordinario a fin de describir las reglas conforme a las cuales se constituyen los juegos del lenguaje como formas concretas de vida. Ahora, la distincin entre semntica y pragmtica es algo abstracto. La comprensin del lenguaje implica un sentido prctico, no consiste en la aprehensin pura de smbolos, sino en la capacidad de seguir una comunicacin. Wittgenstein renuncia finalmente a una visin naturalista, cuya exigencia era la de construir un lenguaje universal, y el abandono de este monopolio lingstico deja espacio libre al pluralismo de los lenguajes naturales, que permiten situar la realidad en diversos mundos de vida. De una concepcin sintctico-formal del lenguaje pasa a una concepcin en la que la experiencia sociolgica y cultural de prctica y de uso adquiere ahora la condicin de posibilidad del lenguaje mismo. La esencia del lenguaje se encuentra, pues, en la forma viva de hablar y es estudiado como habla humana, sometido, por tanto, a un proceso de aprendizaje, en el que el significado se refiere a actos de uso concreto, a situaciones y a personas. En segundo lugar, tal vez nadie haya ido tan lejos como Wittgenstein en afirmar la autonoma e independencia de lo psicolgico y lo fisiolgico. No existe una relacin causal entre lo cerebral y lo mental. El origen neurofisiolgico de nuestros estados mentales no es razn suficiente para hacerlos casualmente dependientes ni para pensar en un paralelismo psicofsico. Se pueden dar pro17 WITTGENSTEIN, L. Tractatus Logico-Philosophicus. Madrid, Alianza, 1973. 5.6.

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cesos causales entre fenmenos psicolgicos, sin que se interponga nada fisiolgico. El funcionamiento de la mente humana no est determinado unvocamente por la estructura fsica del cerebro. Sorprende, sin embargo, en Wittgenstein esta separacin epistemolgica psicofisiolgica cuando, en realidad, se opone al valor de los mecanismos explicativos que utilizan los psiclogos. Su antifisicalismo se desdobla en un antimentalismo radical, porque su anticausalismo le lleva a rechazar toda hiptesis referente a los estados y procesos internos, ya sean fsicos o mentales. A partir de este repaso histrico, tal vez deberamos convenir con Fodor en llamar a la ciencia cognitiva una empresa reincidente, porque se trata de un redescubrimiento de doctrinas familiares de la tradicin epistemolgica clsica, que va desde Descartes a Kant, pasando por Locke, Berkeley y Hume18. Al ser uno de sus temas ms importantes el de la representacin mental y el de la computacin, se la puede considerar como el punto culminante de una teora de la mente, cuyos orgenes estn en la epistemologa clsica. A estos antecedentes remotos les suceden otros ms prximos, que constituyen la historia ms inmediata de esta ciencia, que, a su vez, va a dar lugar a las etapas ms recientes de su construccin. No es fcil hacer la historia de un acontecimiento que vive ms el presente y el futuro que el pasado, por ser tan inmediato. En realidad, ms que de etapas, hay que hablar de paradigmas que coexisten y rivalizan entre s en el intento de explicar cientficamente el problema de la cognicin. Estos tres paradigmas son el Cognitivismo, el Conexionismo y la Enaccin. 3. El Cognitivismo En 1948 se celebr en el Instituto de Tecnologa de California una reunin en la que un grupo de investigadores se propuso estudiar el influjo de los mecanismos cerebrales en la conducta. Pero, en seguida, el mismo planteamiento de los problemas le sugiri otros temas adyacentes, como la analoga entre el ordenador y el cerebro (el matemtico J. Von Newmann), la manera como el cerebro procesa la informacin (W.McCulloch), pretendiendo establecer paralelismos entre el sistema nervioso y los procedimientos lgicos. En la misma reunin, Lashley critic a quienes hasta entonces haban impedido el surgimiento de la ciencia cognitiva. A comienzos de siglo se iniciaron estudios acerca de aspectos importantes de la cognicin, tales como el pensar, la solucin de problemas, la naturaleza de la conciencia, el lenguaje, etc., pero se hicieron echando mano del mtodo introspectivo, con poco o nulo fundamento cientfico.

18 FODOR, J.A. Introduction au problme de la rpresentation mentale. En Les Etudes Philosophiques, juillet-septembre, 1992, pp. 301-302. (orig. 1987).

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Este modelo fue muy pronto desechado por una escuela de psicologa, que ha estado dominando los primeros cincuenta aos de nuestro siglo, el conductismo, que surgi como una reaccin contra el introspeccionismo y para el que nicamente la utilizacin de los mtodos propios de las ciencias naturales podan dar a la psicologa un estatuto verdaderamente cientfico. Eso exiga centrarse en el estudio de las aspectos pblicos de la conducta como los nicos capaces de ser sometidos a ese proceso de control cientfico. Se tuvo que prescindir de temas tan importantes como la mente, el pensar, la imaginacin, el lenguaje en su aspecto semntico y sintctico, la memoria, etc, y de conceptos como deseo, plan, propsito, que escapaban a un control pblico. El conductismo no slo afect a la psicologa. Los filsofos pertenecientes al positivismo lgico (Ryle, Wittgenstein, Carnap, Neuraht, Schlick) pensaron que si se tenan que seguir utilizando conceptos mentalistas como conciencia, pensamiento, creencia, mente, etc, se tenan que redefinir en trminos ms objetivos, relativos a los movimientos observables pblicamente del organismo o a los eventos en el entorno. La adhesin al paradigma conductista se sald, sin duda, con un precio excesivamente caro. Tanto que, como dice Gardner19, estaba haciendo imposible el estudio cientfico de la mente. Se parta de un supuesto equivocado como era que toda actividad estaba determinada por las condiciones ambientales, que ejercan un poder causal determinante sobre la conducta, sin que los procesos internos de organizacin desempearan ningn papel relevante. El ideal era descubrir aquellas leyes universales que descubren, predicen y explican las relaciones entre estmulos y respuestas. Pero nos hallamos, como dice Bunge, ante una psicologa sin cerebro, en la que todo ocurre por medio de procesos mecnicos que tienen lugar entre las condiciones del medio y las reaccciones del organismo, utilizando como modelo el arco reflejo. Exista verdadero inters en desvelar el misterio de la mente, en consonancia con el conocimiento que ya se comenzaba a tener de la materia fsica y de la materia viva. Pero, se poda llegar a ofrecer una teora de la mente, cientficamente vlida, prescindiendo de la actividad cerebral y de los procesos internos de organizacin? Los asistentes a la reunin del Instituto de Tecnologa de California respondieron negativamente. Adems, cuando se queran explicar conductas complejas se comenz a observar que el modelo conductista no era vlido. Y no lo era porque, para explicar las capacidades cognitivas complejas, no bastaba con prestar atencin a los estmulos procedentes de fuera y a los movimientos o respuestas, sino que era necesario mirar al interior del organismo, a los procesos internos que median entre la percepcin y la accin. Pero
19 GARDNER, H. La nueva ciencia de la mente. Historia de la revolucion cognitiva. Buenos Aires, Paidos, 1987. p. 29

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nadie se arriesgaba a lanzar una ciencia sobre la cognicin, porque no se dispona de un modelo capaz de explicar los procesos internos que intervenan en la conducta. Pues bien, a proponer tal modelo vino a contribuir la ciencia computacional. El software de un ordenador es un buen ejemplo de procesador de la informacin, aunque, tal vez, no resulte un modelo adecuado de la cognicin humana, ya que, a su vez, la I.A. se nutre y se realiza desde el conocimiento de la inteligencia humana proporcionado por otras disciplinas, como la psicologa, la lingstica, etc. Pero es cierto que la I.A. contribuye tambin a explicar y probar las teoras sobre la cognicin humana. De este modo, el cognitivista, como dice Fodor20, insiste con mucha frecuencia en la analoga entre las mentes y los ordenadores. La problemtica referente a los temas del ordenador se ha mostrado, a su juicio, relevante para el estudio de la mente humana. El cognitivismo ortodoxo (de Fodor y de Pylyshyn) tiene su origen en el auge de la lgica y de la matemtica a finales del s. XIX y comienzos del XX, que contribuyeron, sin duda, a fundamentar la ciencia cognitiva. El positivismo lgico del primer Wittgenstein, Russell, Carnap, Frege, etc. contribuy de dos maneras con el cognitivismo: - creando las condiciones histricas para la concepcin de los ordenadores, y - proponiendo como ideal simblico los lenguajes formales. Pero los trabajos en lgica-matemtica de los aos 30, en especial los de A. Turing, fueron los que, de manera significativa, contribuyeron al nacimiento y desarrollo del cognitivismo. La conocida mquina de Turing se ha convertido en el marco a partir del cual se ha seguido investigando en todo lo referente a los problemas de la computacin. Adems, constituye el centro de discusin en todo lo referente a las relaciones entre lo psicolgico y lo computacional. A pesar de ser un modelo abstracto y caracterizado por su simplicidad, Stillings dir que es el artefacto computacional ms poderoso pensable21. El entusiasmo de Turing le llev a pensar que se podra construir una mquina capaz de simular cualquier respuesta que pudiera dar un ser humano. Como todos sabemos, una mquina programada pasa la prueba de la mquina de Turing si cualquier observador es incapaz de distinguir sus respuestas de las de un ser humano. A partir de aqu, se pens que cuanto mejor se conociera el funcionamiento de la mente humana mejor se podra disear una mquina computadora que operara de forma idntica. En 1943, W. McCulloch (neurofisilogo y neuropsiquiatra) y W. Pitts (matemtico) publican un artculo, A logical Calculus of the Ideas Inmanent in Nervous Activity (Bulletin of Mathematical Biophysics, 5, pp.115-133), en el que
20 FODOR, J.A. o.c. p. 320 21 STILLINGS, N.A. y otros. Cognitive Science. An Introduction. Cambridge, The MIT Press, 1987. p. 323.

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conciben el cerebro humano como una mquina computadora cuyas operaciones podan concebirse por semejanza con las operaciones de la lgica. Al igual que ellos, A. Wiener, en su obra Cybernetics (1948), afirm que existan paralelismos decisivos entre el organismo vivo y las nuevas mquinas de la comunicacin. Al funcionalismo de la mquina se le consideraba el modelo ms simple para dar cuenta de las relaciones entre estados psicolgicos y biolgicos. Un tercer momento decisivo lo constituye C. Shannon, a quien se le atribuye la creacin de la teora de la informacin. Se propuso representar en circuitos electrnicos las principales operaciones del pensamiento. La informacin es independiente de la materia y, adems, es simplemente informacin, ni materia ni energa, con lo cual se pudo concebir a los procesos cognitivos con independencia de toda materializacin concreta de los mismos. Las bases de la ciencia cognitiva estaban echadas y las ideas de estos autores eran objeto de permanente discusin en reuniones e instituciones generalmente al margen del ambiente curricular, en el que se vea con extraeza el auge que estaba tomando el nuevo campo, porque contravena los modelos en los que se estaba trabajando: la psicologa conductista, la lingstica estructural y la neurofisiologa del aprendizaje animal. Estos tres momentos definen una problemtica que todava hoy tiene plena vigencia y cuyos polos seran, como dice Rastier22, los siguientes: - Estructura - Mente - Mquina de Turing - Arquitectura - Cerebro - Circuito Electrnico La nueva perspectiva sobre la cognicin es, como puede observarse, materialista (McCulloch se preguntaba en el Symposium de Hixon, por qu la mente est en la cabeza?) y mecanicista, porque se piensa en reproducir el funcionamiento de la mente y el cerebro en una mquina. Se est en la conviccin de que nada fundamental separa lo biolgico de lo artificial. Mente, cerebro y ordenador son los tres polos en torno a los cuales gira toda la problemtica de la ciencia cognitiva. El ordenador digital es el representante metafrico del cognitivismo. Con l se abandona la vieja metodologa especulativa en el estudio de la mente y se la dota de una base experimental con la pretensin de simular informticamente los procesos mentales y cerebrales en la medida que se los conoce. Ahora bien, simular la conducta no es lo mismo que explicarla. Como dice Fodor23, un fongrafo puede simular perfectamente el habla humana, pero eso no significa que explique la produccin del habla ni que el fongrafo pueda
22 RASTIER, F. o.c. p. 27 23 FODOR, J.A. La explicacin psicolgica. Madrid, Ctedra, p. 167

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hablar. Y no entramos en otros aspectos del habla que son mucho ms exigentes (como la intencionalidad, la semntica y la sintaxis). El problema de la simulacin plantea cuestiones metatericas acerca de lo que entendemos por equivalencia funcional entre los estados y procesos de una mquina con respecto a los de un organismo. No es el momento de entrar en esta discusin. Digamos sencillamente que para que la simulacin se produzca, tanto las respuestas de una mquina como los procesos de datos presentes en la conducta de la mquina se correspondan con los presentes en el organismo y que sean funcionalmente equivalentes. No basta, pues, con la equivalencia de la conducta, sino que lo ms definitivo es la equivalencia funcional de los procesos implicados en la produccin de la conducta, con independencia de la materia de la que est hecha la mquina. Pero, como dice Dennett, si yo viera a un ser callejeando por el mundo con una inteligencia (en la guerra de las galaxias, por e.) pensara que estar local o remotamente controlado por un cerebro humano. En el paradigma cognitivista, las investigaciones cognitivas tienen como tema recurrente el conocimiento, concebido como un proceso de representacin a modo de una traduccin simblica. La ciencia del ordenador mostr a los cientficos que era posible explicar la conducta inteligente de un sistema complejo sin presuponer la inteligencia de sus componentes, empleando la idea de un sistema de procesamiento de la informacin y el modelo computacional de explicacin24. Este modelo tambin demostr la posibilidad de analizar el significado en trminos de estados funcionalmente interpretados de sistemas fsicos. La mente es concebida, pues, como un sistema de procesamiento formal y de manipulacin de smbolos de acuerdo con unas reglas, de las que depende su significado. La esencia del procesamiento de la informacin es codificar la informacin sobre el mundo, operar sobre esa informacin en alguna direccin que pueda ser caracterizada como significativa y estructurada como un conjunto de partes en interaccin, funcionalmente organizada. El ordenador digital es un ejemplo perfecto de estas ideas y ha proporcionado la evidencia de que la ejecucin inteligente puede ser el producto de un sistema fsico de procesamiento de la informacin. Para el cognitivismo, la cognicin, incluida la cognicin humana, es la manipulacin de smbolos a la manera de los computadores digitales. Dicho de otro modo, la cognicin es una representacin mental y la mente manipula smbolos que representan rasgos del mundo o el mundo como siendo de alguna manera. La palabra clave es la de representacin y la concomitante de intencionalidad. Es un hecho incontrovertible para el cognitivista que la conducta inteligente
24 STILLINGS, N.A. y otros. o.c. p. 312

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presupone algn tipo de habilidad para representar el mundo. Lo que resulta ms difcil es cmo esas representaciones son fsicamente realizadas en forma de un cdigo simblico en el cerebro o en una mquina. Para algunos25, el atractivo del cognitivismo o computacionalismo consiste en liberar el estudio cientfico y filosfico de la cognicin de una dependencia completa de la ciencia neurofisiolgica, porque al cognitivista le resulta irrelevante saber si esos procesos son realizados en una substancia inmaterial, en un tejido humano o en un circuito de ordenador. El modelo cognitivista hace, por tanto, abstraccin de las realizaciones biolgicas de las estructuras cognitivas. A veces se han aportado incluso razones acerca de la irrelevancia sustancial de la neurociencia en orden a una teora general de la cognicin26. Como si del anlisis de la microestructura y de la microactividad del cerebro no se pudiera extraer una teora acerca de la cognicin. De hecho, a este nivel, todos los neurocientficos reconocen que la existencia de un sistema capaz de realizar transformaciones de la informacin de un nivel de gran profundidad, por medio de una arquitectura masivamente paralela, hace que sus operaciones de procesamiento y almacenamiento de la informacin sean muy diferentes de las de los sistemas artificiales inspirados en la manipulacin simblica gobernada por reglas. Como dice Block27, el modelo computacional tiene un profundo prejuicio antibiolgico, pero es considerado por Pylyshyn28 como el nico mecanismo conocido, lo suficientemente plstico, para poderse comparar con la plasticidad de la cognicin. Su funcionamiento formal le otorga, a su juicio, un carcter de universalidad que permite a esa mquina el que pueda ser programada para realizar cualquier funcin formalmente especificada, al expresarse mediante sistemas simblicos. Podemos, pues, sacar la conclusin de que la computacin es representacional y, por consiguiente, tiene un valor semntico. No parecera tener mucho sentido hablar de computacin sin considerar las relaciones semnticas existentes entre las expresiones simblicas. No hay computacin sin representacin. Ahora bien el nivel semntico de las expresiones simblicas est determinado en un ordenador por la sintaxis; sta es la que refleja la proyeccin semntica y
25 HALL, H. Naturalism, Schemas, and the Real philosophical Issues in Contemporary Cognitive Science. (En OTTO, H.R. and TUEDIO, J.A. Perspectives on Mind. Dordrecht, Reidel, 1988, pp. 239-240. 26 CHURCHLAND, P.M. Cognitive activity in artificial neural net-works. (En OSHERON, D.N. and SMITH, E.E. (Eds). An invitation to the cognitive science, v. 3: Thinking, Cambridge, The MIT Press, 1990. pp. 199-200. 27 BL0CK, N. The computer model of mind. (En OSHERON, D.N. and SMITH, E.E. (Eds). o.c. p. 261). 28 PYLYSHYN, Z.W. Computing in cognitive science. (En POSNER, M.I. (Ed). o.c. p. 52)

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lo que nos tendramos que preguntar es si esto es realmente as en el lenguaje humano, ya que no est claro que todas las diferencias semnticas relevantes para una explicacin de la conducta estn reflejadas sintcticamente. No obstante, la teora computacional de la mente sigue viendo en el paralelismo entre sintaxis y semntica la posibilidad de que tanto la inteligencia como la intencionalidad sean traducibles mecnicamente, pudindose construir un modelo mecnico del pensamiento. Incluso ms, al distinguir, como hace Pylyshyn, en los ordenadores distintos niveles de organizacin, tal como sucede en la mente humana, el nivel de conocimiento, el nivel simblico y el nivel fsico o biolgico, se estn dando los mecanismos y creando las condiciones necesarias para que se d una conducta inteligente e integrada. Para Newell, Rosembloon y Laird, ese sistema arquitectnico est realizado en una tecnologa neuronal y se puede simular en una tecnologa mecnica, cuya funcin central es la de apoyar un sistema de smbolos capaz de computacin universal, aunque ni en una ni en otra conozcamos todas las funciones que estn siendo ejecutadas. Para terminar este apartado, me gustara sealar dos cosas a modo de reflexin. Primera, el reducir la semntica a la sintaxis hace que un ordenador manipule smbolos sin considerar lo que se representa en esos smbolos, es decir, construye un lenguaje en trminos de smbolos no interpretados y no puede dar cuenta del carcter contextual del significado, lo cual le hace caer en lo que ya hemos llamado solipsismo metodolgico. Ahora se pueden estudiar los estados mentales sin prestar atencin al mundo externo que representan y sin asumir que existe. No parece muy probable explicar la cognicin humana, sobre todo cuando nos situamos en el campo de las actitudes proposicionales (creencias, deseos, sensaciones, etc.), sin una referencia a los objetos intencionales que ellas representan, aunque la idea de arquitectura cognitiva y de sistema multinivel, que Pylyshyn atribuye a los ordenadores, quiere paliar esta dificultad. Segunda, el argumento de la realizacin mltiple de la cognicin no puede, a mi juicio, utilizarse como justificacin de que sta pueda realizarse de forma idntica en cualquier sistema fsico. Aun limitndonos al mbito del reino animal, se observan grandes diferencias en sus manifestaciones inteligentes, que revelan, a su vez, diferentes arquitecturas fisiolgicas y una historia evolutiva distinta. Como dice metafricamente P.M. Churchland29, la inteligencia es una cuerda de muchos hilos y, por eso, a veces solo se la puede simular en parte. Desde un punto de vista funcionalista estricto, es cierto que todos los componentes de un sistema funcional se podran realizar de muchas maneras, tanto biolgica como no biolgicamente y, as, los seres humanos seran ordenado29 CHURCHLAND, P.M. Matter and Consciousness. Cambridge, The MIT Press, 1984, p. 106.

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res, cuya nica diferencia sera la de estar hechos de materia orgnica. Se podra construir, por tanto, un autmata finito, hecho de componentes electrnicos, capaz de tener vida mental completa. Pero, en el transfondo del problema surge un cierto escepticismo acerca de un hecho capital que queremos expresar de forma interrogativa. la mquina as construida tiene vida propia que le permita realizar experiencias cualitativas conscientes? Si no es as, no parece que una teora funcional sea una teora adecuada de la mente. Recordemos que el ser algo funcionalmente equivalente no significa que sea idntico. Podemos y debemos hablar de una relatividad en la equivalencia, lo cual no permite exigir que la organizacin de un robot sea causalmente relevante en todos sus aspectos. Los interrogantes que de manera insidiosa aparecen, constituyendo el ncleo central del problema que nos ocupa, son los siguientes: es el cerebro un ordenador digital?, pueden las mquinas exhibir, no solo emular, inteligencia? Como puede observarse, aqu no se debate un compromiso o no con el fisicalismo o mecanicismo, porque tanto el reduccionismo computacional como neurocientfico parten del principio meterialista de que producir qualia exige un sistema con una organizacin fsica necesaria, cuyos rasgos ms relevantes, solo para los defensores de la I.A. deben ser computacionales. No todos los defensores del naturalismo neurocientfico (Searle, Bunge, y ms moderadamente Churchland) estn dispuestos a aceptar el programa fuerte de I.A., es decir, el hecho de que tener una mente sea tener una programa. La plasticidad de la naturaleza humana, junto con su pertenencia a culturas variadas y cambiantes, hacen que la mente humana sea enriquecida constantemente por multitud de experiencias vitales, como conciencia individual y como miembro de una sociedad humana. Este sera el gran obstculo, en principio, a una explicacin reductiva y naturalista, que se podra, segn Churchland, salvar con el modelo conexionista. 4. El paradigma conexionista Tener en cuenta la dimensin sociocultural mutante del hombre e integrarla en el carcter no menos plstico de la actividad neuronal, es el reto que se propone el modelo conexionista de la actividad mental, sin apartarse para nada de la perspectiva naturalista e incluso reduccionista. Lo que un reduccionista tiene que intentar explicar es cmo un sistema fsico puede acercarse y manipular, como dice Churchland30 , rasgos tan sutiles y culturalmente configurados. En el paradigma conexionista, la nocin de conocimiento va ms all de ser una representacin concebida como una traduccin simblica, como ocurra
30 CHURCHLAND, P.M. A neurocomputational perspective. The nature onf mind and the structure of science. Cambridge, The MIT Press, 1989. p. 133

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en el modelo cognitivista. Los conocimientos ni son definidos ahora como representaciones, ni son necesariamente conscientes y accesibles, (el cerebro no se reduce al cortex, ni el sistema nervioso al cerebro), ni son necesariamente conceptuales ni de naturaleza simblica. El conocimiento cubre un campo ms amplio y se construye en ntima relacin con el contexto. Se da menos importancia al razonamiento y a la operacin con smbolos que a la percepcin, tanto si es biolgica como artificial. El aplastante dominio de la lgica como enfoque predominante en la ciencia cognitiva comenz a dejar paso a la teora de la emergencia o teora conexionista, precisamente porque se inici una crtica del concepto mismo de representacin y, en todo caso, del procesamiento de smbolos como vehculo apropiado para las representaciones. A pesar del reconocimiento que Rumelhart hace de la metfora del ordenador como herramienta til para comprender y apreciar cmo las actividades mentales pueden surgir ms all de las operaciones elementales que tienen lugar en el procesamiento de la informacin, considera necesario utilizar otro tipo de metforas y nuevas intuiciones acerca de cmo se producen las operaciones mentales31. Ahora la metfora es la metfora neuronal. La nueva arquitectura cognitiva debe construirse en base a nuestro conocimiento acerca de cmo los cerebros humanos pueden funcionar. Ya no se trata de pensar el cerebro a imagen del ordenador, sino ste a imagen de aqul, porque se piensa que los modelos computacionales estn inspirados neuralmente. El modelo est, pues, inspirado en la comprensin del cerebro, aunque sin anticipar una explicacin detallada de los procesos neurales. Pero s se comenz a pensar que el cerebro no estaba regido por reglas, no dispona de un procesador central ni existan en l lugares precisos para almacenar la informacin. Su forma de operar era a base de interconexiones masivas entre las unidades bsicas de procesamiento (las neuronas), interconexiones que cambian como consecuencia de la experiencia. Nos hallamos ante un modelo dinmico complejo no lineal de procesamiento de la informacin, caracterizado, como dicen P.S. Churchland y O. Sejnowski32, por conexiones y fuerzas diferenciales entre las unidades de procesamiento (el equivalente a las neuronas), cuya arquitectura combinatoria explicara la ejecucin de una tarea. El modelo supone concebir la arquitectura cognitiva como una estructura sistmica de un espacio altamente dimensional, dentro del
31 RUMELHART, D.E. The Architeture of mind: a connectionist approach. (En POSNER, M.I. o.c.) 32 CHURCHLAND, P.S. and SEJNOWSKI, T.J. Neural representation and neural computation. (En LYCAN, W.G. Mind and Cognition. Cambridge, Basil Blackwell, 1990, p. 234).

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cual ninguna conducta encuentra su explicacin a partir de un componente singular y separado del sistema, sino como el producto de un conjunto amplio de componentes interactuantes, cuya cooperacin contribuye, como dice Rumelhart33, a explicar la conducta globalmente observable del sistema. As pues, el modelo conexionista consiste en construir un sistema cognitivo no a partir de smbolos y reglas, sino de componentes simples que se conectaran dinmicamente entre s ms all de su actividad local. Ahora se habla de propiedades emergentes o globales, de dinmica de redes, de redes de unidades interconectadas, de sistemas complejos y hasta de sinergia. Es posible que las unidades de un sistema computacional operen a un nivel mucho ms rpido que las neuronas. De hecho lo hacen. Pero el cerebro humano dispone de 100 billones de neuronas, la posiblidad de 1010 conexiones sinpticas y las 1014 posibles configuraciones cognitivas que puede asumir. Es decir, el cerebro despliega muchos elementos de procesamiento cooperativamente y en paralelo para llevar a cabo sus actividades. A partir del concepto de red de unidades interconectadas y de la gran cantidad de conexiones posibles, se puede ofrecer, sin salirse del marco cientfico naturalista, una explicacin de la plasticidad y flexibiliad con que se manifiesta toda actividad humana, en especial la actividad cognitiva, principalmente cuando sta se encuentra afectada, como sucede la mayora de las veces, por factores del entorno lingstico, conceptual, cultural y social, que introducen amplios mrgenes de impredecibilidad en la conducta que pblicamente se expresa. Al ser nuestro cerebro un sistema de procesamiento de la informacin altamente complejo, es posible explicar desde l conductas tambin altamente complejas, sobre todo aquellas que pertenecen a los aspectos cualitativos y conscientes del sujeto humano, sin necesidad de salirse de la perspectiva cientfica. Los datos neurobiolgicos proporcionan nuevas exigencias esenciales a las teoras computacionales. Son indispensables para el descubrimiento de teoras que expliquen cmo ejecutamos tareas como ver, pensar y conocer. Si furamos capaces de explicar cada vez con ms precisin cmo operan los sistemas neurales, se paliara la distincin entre teoras conexionistas y neurales. Crearamos un modelo, en el que la actividad cognitiva y, en general, cualquier conducta, quedara enmarcada en la configuracin de esas redes o fuerzas que determinan qu actividad vamos a hacer, a qu vamos a atender, etc. La ventaja, quiz, del modelo conexionista est en ser capaz de liberarnos, como dicen Churchland y Sejnowski34, del sueo boeleano, para el que toda
33 RUMELHART, D.E. The Architecture of mind: a connectionist approach. (En POSNER, M.I. o.c. p. 136). 34 CHURCHLAND, P.S. and SEJNOWSKI, T.J. o.c. p. 248

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cognicin es una manipulacin de smbolos de acuerdo con las reglas de la lgica, y del sueo de los neurobilogos (el sueo de Cajal), que exigira, para dar razn de cualquier conducta, conocer los detalles de la neurofisiologa y de las conexiones de cada neurona. Tal vez por esta complejidad, el objetivo es la integracin de los modelos neurobiolgicos, computacionales y psicolgicos, de modo que las actividades cognitivas de alto nivel, dada su complejidad, puedan encontrar una mejor explicacin desde la I.A. de tipo conexionista y desde la neurobiologa computacional35 como nuevas fuentes de inspiracin. Ante la metfora cognitivista, mente ------ ordenador, y la metfora conexionista, ordenador ------ cerebro, queda la comparacin recproca cerebro -----ordenador, mbito en el que se puede dar, como dice Rastier36, la connivencia secreta entre los dos paradigmas, con la diferencia de que el cognitivismo quiere pensar el cerebro a imagen del ordenador, y el conexionismo, el ordenador a imagen del cerebro. Hay quien, sin embargo, considera, como Maturana y Varela37, que la metfora del cerebro como ordenador no solo es ambigua, sino equivocada. De ah que inicien y propongan una tercera alternativa que, a su juicio, representara y explicara mejor la cognicin. Se trata del paradigma de la Enaccin. 5. El paradigma de la ENACCIN Es una alternativa, tericamente sugerente, porque trata de integrar y conciliar dos puntos de vista aparentemente opuestos, pero que resultan imprescindibles para dar cuenta de la cognicin humana: el mundo como realidad objetiva, anterior a cualquier experiencia vivida, y el mundo experienciado, inseparable de nosotros; el mundo que se proyecta sobre nosotros y nosotros que proyectamos el mundo, no siendo ste sino el sujeto mismo proyectado. Este crculo nos abre a un espacio entre el yo y el mundo, entre lo interno y lo externo. La alternativa enactiva concibe el sistema nervioso operando ms all del nivel representacional y solipsista. El sistema cognitivo no es un mero espejo de la naturaleza, ni sta se limita a ser el reflejo de las leyes internas del sistema. Realismo e idealismo cognitivos giran ambos en torno al concepto de representacin. En el realismo representamos lo que est fuera y en el idealismo utilizamos la representacin para proyectar lo que est dentro. Pues bien, el modelo enactivo cuestiona la centralidad de la idea de representacin para dar cuenta de la cognicin. En su sustitucin se propone la idea de la cognicin como accin encarnada, que tiene su origen filosfico ms inmediato en la hermenutica
35 CHURCHLAND, P.M. A Neurocomputational Perspective. p. 235. 36 RASTIER, F. o.c. p. 43. 37 MATURANA, H. y VARELA, F. El rbol del conocimiento. Las bases biolgicas del conocimiento humano. Madrid, Ed. Debate, 1990. p. 145

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heideggeriana y de su discpulo H.G.Gadamer, y que est perfectamente representada en la obra de M.Merleau-Ponty. La hermenutica se refiere al fenmeno entero de la interpretacin comprendido como la enactuacin, el hacer emerger o el dar a luz, el significado de algo desde el fundamento de la comprensin. El conocimiento es inseparable ahora de nuestra pertenencia al mundo, al que estamos vinculados con nuestro cuerpo, nuestro lenguaje y nuestra historia social, es decir con nuestra encarnacin. Se introduce la nocin de folk psychology como parte integrante de la explicacin de los procesos cognitivos en clara oposicin a la filosofa analtica, que se resiste a esta nocin de cognicin como comprensin encarnada, y a la que P.M.Churchland calificaba de falsa. El propsito de la alternativa enactiva es, pues, poner nfasis en el hecho de que la cognicin no consiste en la representacin de un mundo predado por una mente predada, sino, ms bien, la promulgacin de un mundo y una mente sobre la base de una historia de la diversidad de acciones que un ser ejecuta en el mundo. El concepto de representacin solo tiene sentido desde la afirmacin previa de un mundo preexistente a nuestra presencia cognoscitiva en l. Por el contrario, si el mundo en que vivimos emerge y es modelado en lugar de ser predefinido, la nocin de representacin ya no puede jugar un papel protagonista. La cognicin como accin encarnada, tal como la entiende la perspectiva enactiva, da el protagonismo a las capacidades sensoriomotoras del cuerpo que se expresan y realizan en un contexto amplio, biolgico, psicolgico y cultural, y a partir de las cuales emerge (se enacta) un mundo. La percepcin y la accin resultan ahora inseparables en la cognicin. Lo importante es ver cmo el perceptor gua sus acciones en un contexto determinado, que cambia, al mismo tiempo, como resultado de la actividad del perceptor. El papel rector lo desempea la estructura sensoriomotora del percipiente, es decir, la manera como el perceptor est encarnado, que condiciona la manera de actuar del perceptor y la forma como el propio agente perceptor es modelado por los acontecimientos del entorno. Hay una permanente comunicacin entre el sujeto de la percepcin y el contexto en el que se realiza; ambos se van definiendo y construyendo en el propio proceso de comunicacin. Organismo y medio, conocedor y conocido, mente y mundo, mantienen una relacin a travs de la mutua y recproca especificacin. El reto que lanza a la ciencia cognitiva es poner en tela de juicio uno de los supuestos bsicos de nuestra herencia cientfica: que el mundo es independiente del que lo conoce. Ahora, en cambio, el mundo resulta inseparable de la estructura de estos procesos de autodefinicin. Los sistemas cognitivos ya no pueden entenderse sobre la base de las relaciones entre entradas y salidas,

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porque se pone en duda que la informacin exista en el mundo y que sea extraida por un perceptor a travs de procesos de representacin. La cognicin no se reduce a un simple procesamiento, traduccin y almacenaje de la informacin. Los sistemas cognitivos no operan por representacin, sino que actan en un contexto haciendo emerger un mundo. Son los sistemas cognitivos los que constituyen la informacin desde sus propias estructuras operatorias siempre activas, estructuras que se van modificando y construyendo, a su vez, en el transcurso de la evolucin personal en contacto con un mundo fenomenal, cuyo edificio va construyendo el nio con sus propias leyes y con su propia lgica. Como dice Varela, la doctrina de la Enaccin implica que las aptitudes cognitivas estn inevitablemente enlazadas con una historia vivida, tal como una senda que no existe, pero se hace al andar38 Mente y mundo se cooriginan mutuamente. La orientacin enactiva introduce en la cognicin la nocin de temporalidad del vivir, tanto si se trata de una especie (evolucin), de un individuo (ontogenia), o de la estructura social (cultura). La cognicin ya no se puede estudiar de un modo esttico, tal como los modelos cognitivista y conexionista indican, sino que es inexplicable al margen de su propio quehacer, puesto que la inteligencia ya no se concibe como la capacidad para resolver un problema, sino como la capacidad de ingresar en un mundo compartido de significado. El interrogante con que queremos terminar el trabajo es, hasta qu punto si no se tienen en cuenta las exigencias de esta aproximacin enactiva no se puede entender la cognicin ni se pueden formar artefactos cognitivos verdaderamente inteligentes? La comunicacin ya no consiste en transferir informacin de un emisor a un receptor, sino en la modelacin mutua de un mundo comn a travs de una accin conjunta. Quiz como en ningn otro campo de investigacin, en la ciencia cognitiva, fronteriza de las ciencias naturales y humanas, se hace imprescindible, epistemolgicamente, conciliar experiencia cientfica y experiencia vivida. Ciencia y experiencia deben compatibilizarse en un estudio cientfico del hombre y de sus procesos cognitivos. Tal vez lo deseable sera alargar el horizonte de la ciencia cognitiva hasta incluir en l el aspecto ms profundo de lo humano (la experiencia vivida), as como su pertenencia a un ambiente sociocultural, de modo que comprender los procesos cognitivos es comprender la intervencin de todos esos factores personales, culturales, sociales, biolgicos, computacionales, etc., en cuyo marco pueden tener lugar. Un concepto restrictivo de ciencia hace inviable el estudio cientfico de la experiencia vivida y se dejara fuera algo que es consustancial a nuestra realidad humana: el mundo de nuestras experiencias. Lo exgeno y lo endgeno, la
38 VARELA, F.J. Conocer. Las ciencias cognitivas: tendencias y perspectivas. Barcelona, Gedisa, 1990. p. 108

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conducta y la experiencia conforman un crculo que si se abandona se puede dar lugar a posiciones extremas, tales como afirmar que la psicologa del sentido comn es falsa o negar la posibilidad de una ciencia cognitiva.

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Captulo 4
Las ciencias cognitivas como contexto para interpretar las nuevas concepciones acerca del aprendizaje

Fredy E. Gonzlez
En este artculo se hace un breve recorrido por los diferentes perodos histricos que caracterizan el desarrollo de las Ciencias Cognitivas con la finalidad de proponer a stas como un contexto vlido para interpretar nuevas concepciones acerca del aprendizaje que polemizan con las interpretaciones conductistas. Se comienza planteando las limitaciones del Paradigma Conductista para estudiar el aprendizaje. Luego, se presentan los rasgos principales de la denominada Revolucin Cognitiva; en este sentido, sin dejar de reconocer la importancia que, en la conformacin del campo de la Ciencia Cognitiva, han tenido los numerosos aportes que se han derivado del debate entre racionalismo y empirismo, slo se consideran los hitos ms importantes en el advenimiento de la Revolucin Cognitiva; seguidamente, se dilucida la ubicacin de la Psicologa Cognitiva en el marco referencial constituido por las Ciencias Cognitivas, haciendo nfasis en los problemas de investigacin que resultan interesantes cuando se considera el Enfoque de Procesamiento de Informacin: (a) los aspectos arquitecturales del sistema cognitivo humano; (b) Los procesos cognitivos que las personas activan cuando operan con la informacin; (c) las relaciones entre los contenidos de la estructura cognitiva y los procesos activados para operar con ellos. Luego de esto se plantean las limitaciones de la visin psicomtrica de la inteligencia. El trabajo culmina con un breve esbozo de la Teora Trirquica de la Inteligencia propuesta por Robert Sternberg. Introduccin En cuanto al aprendizaje, han sido varias las concepciones que, a lo largo de la historia de la Psicologa, han predominado. Antes del advenimiento de las concepciones cognoscitivistas, el paradigma ms poderoso lo constituy el conductismo skinneriano, el cual fue el reflejo en el mbito de los psiclogos, de la visin positivista de la ciencia; con el desarrollo de las Ciencias Cognitivas, este paradigma se ha debilitado y ha dado lugar a otro que, hasta ahora, luce como ms potente para explicar lo que acontece en el ser humano cuando

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se haya abocado a procesos propios de la adquisicin y generacin de conocimientos. Este artculo comienza planteando las limitaciones del Paradigma Conductista para estudiar el aprendizaje. Seguidamente, se presentan los rasgos principales de la denominada Revolucin Cognitiva; en este sentido, slo se consideran los hitos ms importantes en el advenimiento de la Revolucin Cognitiva; a continuacin, se dilucida la ubicacin de la Psicologa Cognitiva en el marco referencial constituido por las Ciencias Cognitivas, haciendo nfasis en los problemas de investigacin que resultan interesantes cuando se considera el Enfoque de Procesamiento de Informacin; finalmente, se hace un breve esbozo de la Teora Trirquica de la Inteligencia propuesta por Robert Stenberg. Limitaciones del Paradigma Conductista para estudiar el Aprendizaje La irrupcin de un nuevo enfoque en el terreno de la Psicologa que superara los abordajes conductistas, fue posible gracias a dos condiciones contextuales sumamente importantes. Por una parte estuvo la propia debilidad interna del enfoque conductista para llevar a cabo con xito su propio programa de investigacin y para responder satisfactoriamente a las interrogantes que, cada vez con ms frecuencia y agresividad, se le formulaban al asociacionismo y al condicionamiento. La otra condicin coadyuvante a la emergencia de enfoques alternos al conductismo fue la Revolucin Tecnolgica, promovida a partir de la Segunda Guerra Mundial, la cual favoreci la recuperacin para la Psicologa de los Procesos Mentales que haban sido execrados del campo de la Psicologa por los conductistas. Sierra y Carretero (1990) sealan que las insuficiencias del conductismo se han relacionado con su posicin excesivamente reduccionista y asociacionista del comportamiento humano. Es decir, su concepcin de que el estudio de dicho comportamiento deba reducirse al anlisis de las asociaciones entre estmulos y respuestas producidas por procesos de reforzamiento (lo que se denomina condicionamiento operante) o por asociaciones entre estmulos neutrales e incondicionales (condicionamiento clsico). A esto sola ir unido no slo que toda conducta deba ser observable y medible, sino que todo constructo terico deba tener tambin un correlato directamente observable. Esto haca muy difcil, cuando no imposible, el estudio de los procesos mentales humanos y, por ende, la aparicin de una concepcin ms amplia del aprendizaje. Por su parte, Fernndez-Valmayor, Fernndez y Vaquero (1991) sostienen que la principal limitacin del paradigma conductista es que slo proporciona una descripcin cuantitativa de la conducta. En ningn momento se pretende generar una descripcin del estado interno en que se encuentra el individuo, ni descubrir los procesos internos responsables del aprendizaje, ms bien intenta predecir y controlar.

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Como se ve, las crticas al conductismo apuntaban en dos direcciones; por un lado se le cuestionaba la visin restrictiva de su mbito de acuerdo con la cual la mente no debera ser objeto de estudio de la Psicologa (Lohman, 1989) y, por otro lado, se evidenciaban las limitaciones del mtodo adoptado (el asociacionismo, el condicionamiento, y la experimentacin con animales en el mbito de la investigacin bsica), el cual, en lugar de contribuir a la bsqueda de explicaciones para fenmenos complejos como el pensamiento y el razonamiento, se orientaba hacia una visin cada vez ms reduccionista del funcionamiento intelectual humano; segn esto, el conductismo resultaba un enfoque cada vez ms insuficiente para dar cuenta del aprendizaje humano, situacin sta que se puso de manifiesto mediante el sealamiento de un conjunto de anomalas inexplicadas desde la perspectiva conductista (Pozo, 1989). De modo que los aos finales de la dcada de 1950 y los aos 60's fueron testigos de una avalancha de crticas al conductismo, las cuales se vieron favorecidas, principalmente, por factores externos a la Psicologa, entre los que cabe destacar el impacto de las nuevas tecnologas generadas a partir de las investiguaciones que tuvieron lugar en la Teora de la Comunicacin, la Lingstica y la Ciberntica (Pozo, 1989). En efecto, desde principios de la Revolucin Industrial, haba existido preocupacin por disear dispositivos, cada vez ms complicados, que sustituyesen al hombre, o al menos le ayudasen, en la realizacin de un conjunto de tareas de rutina; y, ya desde la poca de Descartes, se hacan planteamientos que apuntaban hacia la explicacin del comportamiento animal y humano en trminos mecnicos (Moore, 1968). Pero, como dijeron alguna vez Shannon y McCarthy, "cuando los hombres buscan mquinas anlogas al cuerpo humano, las mquinas que escogen reflejan necesariamente sus propios tiempos" (citados por Moore, 1968; p. 305). Y es esto precisamente lo que ha venido ocurriendo desde finales de los aos 40's cuando, desde diversos campos cientficos se ha conformado todo un campo terico, conceptual y prctico que tiene como uno de sus principales logros la concepcin, construccin y desarrollo de las computadoras electrnicas, que ahora son utilizadas para explorar las relaciones entre hombre y mquina, pero con una sustancial diferencia con respecto a la primera fase de la Revolucin Industrial, durante la cual la relacin hombremquina apuntaba hacia la mecanizacin, y despus electrificacin, de la fuerza muscular, mientras que ahora se apunta hacia la mecanizacin y electrificacin de la fuerza cerebral (Davis, 1968). Y es precisamente el advenimiento de estas "mquinas de nuestro tiempo" el que ha hecho posible el estudio de los procesos mentales que el conductismo haba marginado (Pozo, 1989) y crearon las condiciones favorables para el desarrollo de la Revolucin Cognitiva en el campo de la Psicologa. En efecto, seala Lohman (1989), la emergencia de la Metfora del Computador como una metfora de la mente y como un vehculo para probar teoras

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acerca del pensamiento fue lo que finalmente destron al conductismo haciendo que la corriente principal de la psicologa se moviera del condicionamiento hacia la percepcin y luego al pensamiento y la solucin de problemas. La Revolucin Cognitiva Aunque muchos estudiosos ubican hacia mediados de los aos 50's el perodo de eclosin de la Revolucin Cognitiva, sta vena incubndose desde haca mucho tiempo y hay quienes consideran que es necesario ver en la preocupacin por la gnesis, desarrollo y transmisin del conocimiento, caracterstica de los filsofos clsicos, las fuentes nutricias del desarrollo de la Ciencia Cognitiva (Lohman, 1989; Gmez, 1991). Sin dejar de reconocer la importancia que, en la conformacin del campo de la Ciencia Cognitiva, han tenido los numerosos aportes que se han derivado del debate entre racionalismo y empirismo, se ubican hacia mediados del presente siglo los hitos ms importantes en el advenimiento de la Revolucin Cognitiva, los cuales, segn Gmez (1991) son: 1. 1936: Los aportes de Turing 2. 1948: 2.1 El desarrollo de la Ciberntica (Wiener) 2.2 El Simposio de Hyxon, celebrado en el Instituto de Tecnologa de California 3. 1956: 3.1 Simposio sobre Teora de la Informacin, celebrado en el Instituto de Tecnologa de Massachussets (MIT) 3.2 Publicacin de A Study of Thinking por Bruner, Goodnow y Austin. 3.3 Publicacin, por parte de Miller, del artculo El mgico nmero siete ms o menos dos: algunos lmites de nuestra capacidad para procesar informacin. 3.4 Publicacin de los trabajos de Chomsky sobre Lingstica. 4. 1960 Creacin del Centro de Estudios Cognitivos de la Universidad de Harvard. 5. 1977 Nacimiento de la revista Cognitive Science 6. 1979 Fundacin de la Cognitive Science Society 7. 1984 Nacimiento de la revista Cognitive and Instruction A continuacin se har un breve esbozo de cada uno de los hitos mencionados anteriormente. 1. A. M. Turing fue un notable matemtico y lgico britnico que abord el problema de crear una "mquina pensante", diseando un autmata que, en principio, pudiera realizar cualquier clculo definible con precisin. Segn Kemeny (1968), Turing consider que "mediante la combinacin de un pequeo nmero de operaciones sencillas, en cantidad suficiente, una mquina puede llevar a cabo tareas de complejidad asombrosa" (p. 257); basndose en este principio fue que Turing ide sus famosas "Mquinas de Turing", las cuales son "mquinas simples programadas para operar, a base de cdigos binarios, y

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con una gran capacidad de clculo y de operaciones lgicas" (Gmez, 1991). En el principio sobre el cual Turing bas el diseo de sus clebres mquinas podra vislumbrarse una reminiscencia de lo que ms tarde llegara a constituir una Teora Componencial del intelecto humano. Pero, a pesar de lo notable de este principio, hay otro aporte con el cual Turing contribuy a sentar los fundamentos de la Ciencia Cognitiva, y que pudiera considerarse una de las bases de sustentacin de la Metfora del Computador. En efecto, a comienzos de los aos 50's, Turing ide un experimento en el cual el experimentador, mediante un dispositivo especial, se comunicaba con cada una de dos habitaciones (o cajas negras), en una de las cuales se hallaba un hombre y en la otra una mquina. Si, despus de haber intercambiado una serie apropiada de mensajes con cada habitacin, el experimentador es incapaz de decir en cul de ellas est el hombre y en cual la mquina, entonces podra decirse que la mquina "piensa" (Oettinger, 1968). Con esto, Turing estaba sentando las bases de la Inteligencia Artificial y de sus relaciones recprocas con la Inteligencia Humana (Vsquez, 1991). 2. Hacia fines de los aos 40's tuvieron lugar dos acontecimientos importantes para el desarrollo de la Ciencia Cognitiva. El primero de ellos lo constituy la publicacin, por parte de N. Wiener, de su artculo Cybernetics con el cual inauguraba una nueva rama de la ciencia, que se ocupa de los problemas de la Comunicacin y del Control; los primeros hacen referencia a la emisin, transmisin, recepcin y almacenamiento de la informacin, en tanto que los segundos tienen que ver con la bsqueda, consecusin y mantenimiento de la estabilidad en el comportamiento de uno o de varios sistemas que actan interdependientemente. En los planteamientos iniciales de Wiener puede vislumbrarse parte de la gnesis del Enfoque del Procesamiento de Informacin que, con posterioridad, pasar a constituir el Paradigma Dominante en el campo de la Psicologa Cognitiva; adems, en su Teora del Control, se anuncia ya una de las funciones que se le atribuir a los procesos metacognoscitivos. De acuerdo con Wiener (1968, versin original de 1948) la Ciberntica: es una palabra inventada para designar un nuevo campo cientfico, en el cual convergen bajo una misma rbrica el estudio de lo que dentro de un contexto humano se denomina con cierta imprecisin pensamiento y de lo que en ingeniera se denomina control y comunicacin. Dicho en otras palabras, la ciberntica pretende encontrar los elementos comunes al funcionamiento de las mquinas automticas y al sistema nervioso de los seres humanos y desarrollar una teora que sea capaz de abarcar todo el campo del control y la comunicacin en las mquinas y los organismos vivientes (p. 92) El mismo ao que Wiener public su, ahora clebre, artculo Cybernetics, tuvo lugar el Simposio de Hyxon, en el Instituto de Tecnologa de California, el cual convoc a matemticos, neurofisilogos, psiclogos y otros especialistas que,

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durante este histrico cnclave, hicieron aportes que hoy se consideran fundamentales en el contexto de la Ciencia Cognitiva, se produjo aqu un significativo encuentro de perspectivas interdisciplinarias sobre el control, la informacin y la comunicacin, cuya convergencia contribuy a delinear el mbito de lo que hoy constituyen las Ciencias Cognitivas. 3. Aunque Lohman (1989) reconoce que las races de la Revolucin Cognitiva pueden encontrarse en muchas fuentes anteriores, considera que 1956 constituye un ao clave de la misma, como resultado del conjunto de acontecimientos que ocurrieron durante dicho ao y que forman parte de los hitos importantes en el desarrollo de la Ciencia Cognitiva, la cual cogi impulso en los aos 60's y alcanz inusitada fuerza durante los 70's. Los sucesos acaecidos durante 1956 verdaderamente hacen mrito para que ese ao sea considerado como crucial en el desarrollo de la Ciencia Cognitiva. En efecto, fue en 1956 cuando se celebr, en el Instituto de Tecnologa de Massachusetts, el II Simposico sobre Teora de la Informacin al cual asistieron, entre otros, Newell, Simon, Chomsky y Miller. Coincidencialmente, durante 1956, surgieron algunos de los trabajos sobre cuyo contenido se fundamenta el movimiento cognitivo en el campo de la Psicologa y de las Ciencias Cognitivas. En efecto, en aquel ao vi luz un artculo de G. A. Miller que ocupa un lugar propio en la historia de la psicologa. El artculo se titulaba "El mgico nmero siete ms o menos dos: algunos lmites de nuestra capacidad para procesar informacin" y en l Miller, basndose en las ideas de la Teora de la Comunicacin de Shannon y otros autores, sostena que los seres humanos tenemos una capacidad como canal de informacin limitada a siete (ms o menos dos) temes simultneos. Tambin aquel ao Chomsky daba a conocer sus ideas sobre la nueva lingstica, basada en reglas formales y sintcticas, tan prximas a las formalizaciones matemticas, que desembocara al ao siguiente en la publicacin de Estructuras Sintcticas. Igualmente Newell y Simon daban a conocer en el Simposio celebrado en el M.I.T. uno de sus primeros trabajos (The Logic Theory Machine) en el que presentaban por primera vez un programa de computador capaz de hacer la demostracin de un teorema. Finalmente, por aquel mismo ao, fue publicado A Study of Thinking, monumental obra colectiva de Bruner, Goodnow y Austin, la cual est considerada como una obra capital en la psicologa del pensamiento y la solucin de problemas y posiblemente el trabajo ms influyente en la investigacin sobre la adquisicin de conceptos artificiales. En efecto, A Study of Thinking registra los resultados de un programa de investigacin quinquenal (1951-1956) que form parte de un Proyecto sobre el Conocimiento realizado en el Laboratorio de Relaciones Sociales de la Universidad de Harvard, que abord uno de los fenmenos del conocimiento ms simples y omnipresentes: la categorizacin o conceptualizacin; el propsito

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fue "describir y, en menor medida, explicar, lo que ocurre cuando un ser humano inteligente intenta agrupar el entorno en clases significativas de acontecimientos a fin de poder tratar de modo juicioso cosas diferentes como si fueran equivalentes" (Bruner, Goodnow y Austin, 1978). La concepcin, desarrollo y posterior publicacin tuvo como privilegiado contexto el creciente inters que, ya para la poca, generaba la investigacin de los procesos cognitivos, como producto de: el reconocimiento de los complejos procesos que median entre los clsicos "estmulos" y "respuestas", los avances ocurridos en la Teora de la Informacin, y los cambios profundos y duraderos producidos en la Teora de la Personalidad. 4. Otro acontecimiento relevante en la Historia de la Ciencia Cognitiva y, por ende, en la de la Psicologa de este mismo signo, lo constituye la creacin, en 1960, del Centro de Estudios Cognitivos de la Universidad de Harvard, institucin que a partir de entonces ha actuado como punto de convergencia y encuentro de especialistas que investigan el conocimiento desde distintas perspectivas (lingstica, matemtica, biolgica, psicolgica). Bruner, junto con Miller, fund este Centro con el fin de fomentar estudios interdisciplinarios sobre procesos mentales superiores. Cada ao, Miller y Bruner actuaban como anfitriones de un distinguido grupo de visitantes y estudiantes de diferentes pases y de distintas disciplinas que compartan el inters por averiguar la naturaleza de la cognicin humana. Guiado por el inters de Bruner en el desarrollo intelectual y la educacin y la preocupacin de Miller por la psicolingstica y la memoria humana, el Centro pronto se convirti en un activo foro para crear, compartir y probar ideas. Como testimonio de las investigaciones conducidas en este Centro qued la obra Studies in Cognitive Growth, publicada en 1966. 5. El esfuerzo acumulado durante las casi tres dcadas anteriores, vertido en obras de carcter monogrfico y en artculos, se ve coronado a finales de los aos 70's con el nacimiento de la revista Cognitive Science, la cual constituy un signo de la madurez alcanzada por los investigadores en el rea y un medio a travs del cual se potencializaba la posibilidad de lograr una convergencia e integracin interdisciplinaria que contribuyera a delimitar un campo de estudio con caractersticas definitorias propias. 6. A dos aos del lanzamiento de la Revista Cognitive Science, en 1979, nace la asociacin cientfica que lleva el mismo nombre (Cognitive Science Society) interesada por estudiar los procesos cognoscitivos desde una variedad de puntos de vista (la Segunda Conferencia Anual, en 1980, cita explcitamente los campos de la Antropologa, Inteligencia Artificial, Lingstica, Neurofisiologa, Filosofa, Psicologa y Sociologa). 7. Otro acontecimiento editorial de sin igual relevancia lo constituye la aparicin, en 1984, de la Revista Cognition and Instruction, publicacin interdisciplinaria dedicada a las investigaciones cognitivas de la instruccin y el aprendi-

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zaje que intenta servir como vehculo de comunicacin entre las personas de varios campos implicados en la investigacin cognitivo-instruccional. El prototipo de artculo de esta revista atiende a uno de estos tres aspectos (paradigmticamente, a la interseccin de ellos): anlisis cognitivo de tareas instructivas relevantes, teoras generales de adquisicin de conocimiento y destrezas relacionadas con el aprendizaje de materias escolares y anlisis cognitivos tericos de intervenciones instructivas. La dcada de los aos 80's y lo que va de la actual, ha visto incrementar inusitadamente el trabajo de un innumerable grupo de notables investigadores, entre los que destacan nombres como los de Sternberg, Feuerstein, Greeno, Brandsfor, Meyer, Brown, y muchos otros, quienes han llevado a cabo trabajos de investigacin, publicado incontables artculos y monografas y construido interesantes teoras relacionadas con el funcionamiento intelectual, todo lo cual configura un campo de indagacin cientfica en pleno auge: las Ciencias Cognitivas y, entre stas, la Psicologa Cognitiva. La Ciencia Cognitiva y la Psicologa Cognitiva A partir de lo que se lleva dicho hasta ahora, se puede entender que la etiqueta Ciencia Cognitiva no alude a una ciencia unitaria sino, ms bien, a la actividad terica, conceptual y prctica llevada a cabo por un amplio espectro de investigadores y tericos quienes usan una variedad de mtodos para estudiar un conjunto, igualmente diverso, de problemas; por ello, el trmino Ciencia Cognitiva se usa para designar una mezcla de ciencias que incluye la computacin, la psicologa, la lingstica, la neuropsicologa, la filosofa, y algunas otras. Con relacin a las disciplinas que conforman el mbito de la Ciencia Cognitiva, Vsquez (1991) afirma que "no existe un acuerdo de pleno consenso acerca de cules son las disciplinas cognitivas. Podra decirse que las disciplinas matrices de la ciencia cognitiva son la filosofa (principalmente la lgica y la teora del conocimiento), la psicologa, la lingstica y la IA, a las que posteriormente se han sumado la antropologa, y la neurociencia (como interdisciplina de ciencias tales como la neuroanatoma, la neurofisiologa y neuropsicologa). Estas seis disciplinas configuran una red hexagonal, con relaciones internas ms o menos prximas, generalmente admitida para representar el conjunto de ciencias cognitivas. Prximas a ellas se encuentran ciertas disciplinas limtrofes como la Sociologa, la Economa y la Psicologa Social. Por su parte, Garca-Mila y Martnez (1991) afirman que la Ciencia Cognitiva est formada por la convergencia de la IA, Psicologa, Lingstica, Antropologa, Filosofa y expertos en el rea objeto de estudio. Dentro de este vasto campo, la Psicologa Cognitiva se ha reservado para si el problema de comprender la inteligencia humana y cmo ella funciona, de aqu que su foco est constituido por la comprensin, evaluacin y mejoramiento de la inteligencia humana; este programa de investigacin formulado por la

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Psicologa Cognitiva se desarroll, segn Lohman (1989), en tres vertientes: (a) aportar nuevas evidencias acerca de la validez de constructo de los tests que se aplicaban para "medir" la inteligencia y otras habilidades de los sujetos humanos; (b) desarrollar nuevos mtodos, procedimientos e instrumentos para medir la inteligencia; y, (c) desarrollar nuevas teoras acerca de la inteligencia humana. Los investigadores ubicados en la primera vertiente vean que los mtodos y teoras de la Psicologa Cognitiva les proporcionaban una nueva manera de comprender lo que los tests de inteligencia y de otras habilidades realmente medan; para ello procedan a realizar un anlisis experimental de las tareas tomadas en los tests de inteligencia y de otras habilidades, o un cuidadoso estudio de la solucin de problemas u otras caractersticas de procesamiento de informacin de los individuos identificados como ms o menos capaces por los tests existentes. En esta forma, la psicologa cognitiva ofrece una nueva fuente de evidencia sobre la validez de constructo de los tests y de los factores de habilidad que ellos definen. La segunda vertiente en el desarrollo del programa de investigacin de la Psicologa Cognitiva parte de una revisin del propsito para el cual se aplican los tests de inteligencia y de otras habilidades relacionadas, que consiste en predecir la ejecucin que tendr el individuo en una situacin de "no-test", por ejemplo la enseanza convencional. Pues bien, los psiclogos cognitivos procedieron a realizar un cuidadoso estudio de las exigencias de conocimiento y procesamiento de estas ejecuciones criterio para luego desarrollar nuevas estrategias de medicin y sugerir cambios y refinamientos en los instrumentos de medida existentes. Finalmente, hubo investigadores, ubicados en el mbito de la Psicologa Cognitiva, que se propusieron desarrollar nuevas teoras acerca de la cognicin humana, yendo ms all de las definiciones de inteligencia existentes y desarrollando teoras generales sobre el pensamiento y el aprendizaje. Entre la Psicologa Cognitiva y la Ciencia Cognitiva se da una relacin de contenido a continente y, al respecto, Garca-Mila y Martnez (191), sealan que "la investigacin en la Ciencia Cognitiva difiere de la Psicologa Cognitiva en que la primera se preocupa por el contenido de la informacin con la que se pretende razonar, entender, conocer y aprender, poniendo el nfasis en las representaciones mentales de conocimientos especficos y los procesos cognitivos que operan sobre tales representaciones mentales. Los tericos del aprendizaje de la Psicologa Cognitiva, por el contrario, realizan un tipo de investigacin abstracta y libre de contenido que, segn Pozo (1989), refiere la explicacin de la conducta a entidades mentales, a estados, procesos y disposiciones de naturaleza mental, para los que reclama un nivel de discurso propio. Como es esperable en un campo surgido de la convergencia de vertientes tan diversas, en el terreno de la Psicologa Cognitiva son identificables varios en-

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foques los cuales, a pesar de sus diferencias, comparten un fundamento comn cual es la visin de que los procesos y contenidos involucrados en la atencin, la percepcin y la memoria, el pensamiento, el razonamiento y la solucin de problemas, y la adquisicin, organizacin y uso del conocimiento, son los temas centrales de indagacin para la ciencia psicolgica. Las tareas cognitivas incluyendo las tareas de aprendizaje escolar y de los tests educacionales y psicolgicos, que parecen reflejar estos fenmenos pueden ser analizados para alcanzar una comprensin ms profunda de los procesos mentales y contenido de conocimientos que comprenden el desempeo complejo. Efectivamente, las tareas de aprendizaje escolar son de creciente inters para los psiclogos cognitivos precisamente porque ellas repesentan una clase de tareas seleccionadas y conformadas durante aos para exigir y promover las funciones cognitivas de ms importancia para la sociedad. De acuerdo con Pozo (1989), en la Psicologa Cognitiva se pueden identificar, al menos, dos enfoques principales: la posicin racionalista y constructivista, y la posicin de procesamiento de informacin, las cuales, segn este mismo autor, constituyen dos maneras muy diferentes de entender la Psicologa Cognitiva. Desde la posicin constructivista, el aprendizaje es entendido como un proceso de reestructuracin del conocimiento previo; esta perspectiva es englobada bajo la denominacin de Teora del Cambio Conceptual, la cual, segn GarcaMila y Martnez (1991), "se fundamenta en crear un paralelismo entre la evolucin de las teoras de los estudiantes y la evolucin del Conocimiento Cientfico en la Historia de la Ciencia. La Teora del Cambio Conceptual se basa en las Teoras Epistemolgicas de T. S Kuhn y Lakatos sobre la evolucin histrica del conocimiento cientfico. Segn esto, la dificultad de los estudiantes para entender Ciencia est en la falta de esquemas mentales apropiados con los cuales integrar informacin cientfica conceptual. Estos esquemas mentales, son iguales a los esquemas mentales correspondientes al estado del conocimiento cientfico aristotlico y medieval y evolucionan de igual forma que la ciencia, a travs de cambios radicales de paradigmas resultando en teoras inconmensurables. Los estudiantes llegan a clase con unos esquemas mentales desarrollados espontneamente a travs del contacto con los fenmenos de la vida diaria. Estos esquemas mentales son cualitativamente muy distintos de los que poseen los expertos, contienen concepciones naive; son intuitivos, ingenuos, errneos, universales entre sujetos y resistentes a la instruccin. El nombre adoptado para estas concepciones es el de misconceptions [se utiliza indistintamente con el de preconcepciones, concepciones naive, concepciones espontneas, concepciones intuitivas o concepciones errneas]. Varios estudios han demostrado que estos conceptos previos con los que los alumnos vienen a clase interfieren

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con el aprendizaje de conceptos cientficos, debido especialmente a su resistencia a la instruccin. Sin embargo, afirman Snow y Lohman (1989), en su mayora, los diversos abordajes de la Psicologa Cognitiva adoptan el enfoque del Procesamiento de la Informacin, el cual es visto como ms productivo para teorizar acerca de los aspectos arquitecturales del sistema cognitivo humano que, se supone, dan cuenta de las conexiones entre estmulos y respuesta, tanto como para experimentar sobre tales conexiones. Los enfoques de la Psicologa Cognitiva que adoptan la perspectiva del Procesamiento de Informacin, de acuerdo con lo dicho por Snow y Lohman (1989), tienen como propsito penetrar en la "caja negra" del Conductismo; es decir, explicar el funcionamiento interno del sistema cognitivo humano, los eventos y procesos mentales que conectan el estmulo con la respuesta en un tem, una prueba, o la ejecucin de una tarea; todos estos modelos plantean una o mas secuencias de pasos o etapas de procesamiento en las cuales las operaciones cognitivas son ejecutadas sobre la informacin de entrada o almacenada; de acuerdo con esto, sostiene Pozo (1989) unas pocas operaciones simblicas relativamente bsicas, tales como codificar, comparar, localizar, almacenar, etc, pueden en ltimo extremo, dar cuenta de la inteligencia humana y la capacidad para crear conocimientos, innovaciones y tal vez expectativas con respecto al futuro. Pero, este es slo uno de los problemas de los que se ocupa la Psicologa Cognitiva basada en el modelo de Procesamiento de Informacin; efectivamente, de acuerdo con Prez Gmez (1985), adems de interesarse por los procesos con los que el individuo opera sobre los datos, existen otros dos tipos de problemas que atraen la atencin de los psiclogos cognitivos que asumen la perspectiva del procesamiento de informacin: (a) la estructura de la informacin almacenada en la memoria, y (b) las relaciones entre estructura y procesos. Se completa as, afirma Prez Gmez (1985), una triloga de problemas de investigacin: 1. Los aspectos arquitecturales del sistema cognitivo humano que tienen que ver con la forma como las personas organizan la informacin en su estructura cognitiva. Los datos e informaciones no se encuentran aislados y arbitrariamente relacionados en la memoria sino que, de forma isomrfica a la estructura de relaciones lgicas que componen las teoras cientficas, tambin en el individuo la mayor parte de los datos se agrupan en nudos de relaciones, en esquemas o redes que permiten una comprensin significativa de la realidad que representan (red cognitiva, red semntica, esquemas). 2. Los procesos cognitivos que las personas activan cuando operan con la informacin. La informacin en la memoria manifiesta unas caractersticas estructurales, pero cuando tales datos se ponen en funcionamiento para interpretar una situacin o para resolver un problema son objeto de elaboraciones y

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reelaboraciones conforme a unos procedimientos y operaciones peculiares. Para explicar tales procedimientos cognitivos se han desarrollado diferentes modelos (teora del juego, solucin de problemas) relacionados de alguna manera con los modos de procesar la informacin de los computadores, es decir, con los programas de instrucciones. De esta manera, se llega a identificar determinadas actividades bsicas que todo individuo debe realizar para adquirir, organizar y utilizar la informacin de la memoria. 3. Las relaciones entre los contenidos de la estructura cognitiva y los procesos activados para operar con ellos. En relacin con este aspecto, seala Prez Gmez (1985), cuando un individuo se pone en contacto con datos y conceptos organizados en teoras y asimila el significado de esos cuerpos de conocimiento se pone tambin en contacto con la lgica que une y organiza los datos en estructuras tericas, y esta lgica induce la activacin preferente de unas determinadas operaciones mentales. A continuacin se detallar cada una de las reas problemticas sealadas anteriormente. 1. La Psicologa Cognitiva que adopta el enfoque segn el cual el ser humano es concebido como un procesador activo de informacin se basa, segn Pozo (1989), en la aceptacin de la analoga entre la mente humana y el funcionamiento de un computador. Para ser exactos, se adoptan los programas de computadora como metfora del funcionamiento cognitivo humano. Esta analoga est en cierto modo basada en el Test de Turing, segn el cual si la ejecucin de dos sistemas de procesamiento en una determinada tarea alcanza tal semejanza que no pueden distinguirse el uno del otro, ambos sistemas deben considerarse idnticos (Oettinger, 1968; pp 410-411). El computador, como "mquina de nuestro tiempo" (Moore, 1968), ha servido de base para la construccin de una explicacin de la cognicin humana, sustentada en la denominada Metfora del Computador. De modo que, afirman Sierra y Carretero (1990), el estudio del aprendizaje desde la perspectiva de la Psicologa Cognitiva que asume el enfoque de procesamiento de informacin se sustenta sobre la base de la comparacin de la mente humana con la estructura bsica de un computador; de acuerdo con esto, el ser humano tendra la capacidad para recoger informacin del medio, procesarla y tomar decisiones en funcin de algn tipo de criterio. De la Metfora del Computador, segn Pozo (1989), se tiene dos versiones: (a) la versin fuerte; y (b) la versin dbil. La versin fuerte admite una equivalencia funcional entre ambos sistemas, la versin dbil se limita a aceptar parte del vocabulario y de los conceptos de la informtica, sin llegar a afirmar esta equivalencia. En cuanto a la variedad de formas que ha adoptado la Metfora del Computador, se ha expresado ms explcitamente Lohman (1989) quien afirma que "esta metfora ha tomado varias formas. En el nivel ms simple, se han hecho

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analogas entre el hardware del computador y el sistema cognitivo humano. Los computadores tiene dispositivos (devices) para encodificar informacin proveniente de fuentes externas (lectoras de tarjetas, teclados), almacenndola temporalmente (buffers de memoria), transformndola (unidad central de proceso - CPU), conservndola en dispositivos (devices) de almacenamiento a largo plazo (cintas, discos) y produciendo salidas (outputs, impresoras, pantallas de video). Los modelos del procesamiento humano de informacin se apoyaron fuertemente sobre esta analoga y proponen estructuras similares para el sistema cognitivo humano. Como consecuencia de los estudios acerca del sistema de procesamiento humano de informacin, se ha llegado a hipotetizar un conjunto de aspectos arquitecturales que configuran un Modelo de Procesamiento de la Informacin en el Hombre y que, segn Posner (1979), presentara los siguientes elementos: 1. La Concepcin Multialmacn de la memoria humana (Sierra y Carretero, 1990). La idea central de la concepcin multialmacn es que existe una serie de fases en la adquisicin de la informacin, la cual permanecera, por tanto, durante un tiempo en un determinado almacn correspondiente a cada fase. As se ha venido distinguiendo entre memoria sensorial, memoria a corto plazo y memoria a largo plazo. La primera tiene una duracin de medio segundo aproximadamente. Por tanto, es responsable de una primera impresin de la informacin. Por memoria sensorial icnica se entiende la relacionada con la informacin visual y por memoria sensorial ecoica la que tiene que ver con la informacin auditiva. La memoria a corto plazo tiene capacidad limitada. Concretamente de siete elementos (ms o menos dos, segn las ocasiones) y una duracin que oscila entre veinte y treinta segundos. Esto quiere decir que podemos atender simultneamente a siete elementos totalmente nuevos y que podemos retenerlos durante el tiempo citado. Si no utilizamos ninguna estrategia de recuerdo, no nos acordaremos de nada al cabo del intervalo citado. Ahora bien, cmo conseguir que la informacin que se almacena durante medio minuto en la memoria a corto plazo pase a la memoria a largo plazo?. Es decir, a nuestro bajage de conocimientos, puesto que este ltimo almacn se caracteriza por no poseer lmites ni en su duracin ni en su capacidad. De hecho, se supone que contiene toda la informacin que hemos ido almacenando a lo largo de nuestra vida. En este sentido conviene distinguir entre la informacin de la que disponemos casi inmediatamente y la que requiere algn proceso de bsqueda o recuperacin. En resumen, 1.1 Hay una entrada (input) de informacin que llega al sistema a travs de los rganos de la sensibilidad y una salida (output), por la cual el individuo cambia su ambiente original.

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1.2 Hay una clase de memoria llamada memoria a corto plazo (MCP) con capacidad limitada a 6 7 fragmentos de informacin (el "nmero mgico 7 2" de Miller), la cual requiere constante ejercicio para preservar la informacin del desvanecimiento (por ejemplo, olvidar). La solucin de problemas y las operaciones de clculo generalmente se ejecutan a nivel de esta limitada capacidad de MCP. Esta funcin a la que se denomina "memoria operatoria", procesa la informacin en serie (o sea, una operacin al mismo tiempo) y no de modo simultneo (o sea, varias operaciones al mismo tiempo). 1.3 Uno de los aspectos ms significativos del sistema es la memoria a largo plazo (MLP) (llamada base de datos), en la cual la gente almacena todo lo que sabe acerca del mundo. Uno de los rasgos ms interesantes de esta "base de datos" estriba en dos hechos: su capacidad aparentemente ilimitada y la dificultad encontrada hasta ahora para recuparar la informcin almacenada. Otro aspecto muy significativo de la MLP es su alto grado de organizacin. Casi todo lo que se sabe acerca de algo est relacionado de algn modo con cada una de las cosas que se conocen. 2. Los Procesos de Control. Hay dos conjuntos de procesos de control. Uno de ellos dirige las bsquedas en la base de datos, opera con ella y difunde la informacin entre los almacenes de informacin. Este conjunto de procesos de control recibe el nombre comn de procesos interpretativos. Estos desempean un papel significativo en la solucin de problemas, en el recuerdo y en el reconocimiento, as como en la comprensin del lenguaje y en las operaciones de clculo. Estos procesos capacitan a los seres humanos para pensar de un modo deductivo, inductivo, analgico y algortmico. Sin ellos, la mayor parte de lo que conocemos sera informacin intil, no importa cun bien ni cmo haya sido aprendida. El otro conjunto de procesos de control opera como un supervisor del sistema, que toma decisiones ejecutivas orientadas a que la bsqueda rinda buenos resultados; supervisa tambin la localizacin en la MLP de partculas especficas de informacin as como la cantidad de esfuerzo requerida para la bsqueda y otras operaciones. Este conjunto de procesos de control es conocido como sistema monitor; este sistema es el que tiene la capacidad de metamemoria (la de conocer lo que sabe). 2. La Psicologa Cognitiva tambin se ha ocupado de estudiar los procesos con los que el individuo opera sobre los datos. Para Garca-Mila y Martnez (1991), una de las lneas de investigacin ms fructferas en esta rea se ha orientado hacia la determinacin de las diferencias entre expertos y novatos en la solucin de problemas de texto y la ejecucin de tareas especficas, con el fin de desarrollar modelos explcitos de procesamiento y representacin de la informacin. Estos modelos son de dos tipos: 1) los modelos psicolgicos, los cuales pretenden simular la forma del pensar humano y, por tanto, entender

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mejor los procesos de aprendizaje, y 2) los modelos de Inteligencia Artificial, los cuales apuntan a resolver los problemas o tareas con xito, independientemente del proceso seguido para conseguirlo. El fin de esto ltimos es disear sistemas expertos para facilitar el aprendizaje de los seres humanos o bien, automatizar su razonamiento [la metodologa ms usada es el anlisis de protocolos obtenidos al pensar en voz alta]. Los trabajos pioneros en esta rea consisten en determinar las diferencias cuantitativas en los procesos de solucin de problemas entre los expertos y los novatos; estas diferencias cuantitativas permiten inferir las distintas estrategias utilizadas en las solucin de problemas tales como: 1) el tiempo empleado por expertos en hacer un anlisis cualitativo previo a las operaciones algebraicas; 2) la forma de trabajar de los novatos y la de los expertos; sin embargo, para determinar las distintas representaciones mentales de conocimiento elaboradas por novatos y expertos es necesario estudiar sus diferencias cualitativas cuando solucionan problemas. Estas diferencias cualitativas se han determinado mediante el mtodo de categorizacin de problemas. La transformacin de novato a experto se da, no por medio de la acumulacin de conocimientos, sino a travs de una mejor estructuracin cualitativa de este conocimiento. 3. En cuanto a las relaciones entre estructura y procesos, se ha encontrado que, afirma Prez Gmez (1985), en el conocimiento cientfico cabe distinguir entre la estructura semntica de una disciplina (el conjunto de contenidos conceptuales relacionados entre s de una manera determinada) y la estructura sintctica (el conjunto de mtodos y procedimientos que definen la lgica de la investigacin especfica en tal rea del conocimiento). Del mismo modo, en la estructura de la memoria humana cabe diferenciar los cuerpos organizados de conocimiento y los procesos metodolgicos que utiliza el individuo para adquirir, incrementar y aplicar dicha informacin. As, se tienen dos tipos de conocimiento; (a) Conocimiento proposicional (figurativo) la estructura organizada de cuerpos de conocimiento, los datos almacenados de la memoria; se refiere a informacin relacional sobre los conceptos; (b) Conocimiento operativo, algortmico, capacidades de actuacin mental, mtodos y estrategias de procesamiento; se refiere a procedimientos en el sentido de configurar operaciones. De modo que, en cuanto a la vinculacin entre estructura y procesos, la Psicologa Cognitiva basada en el Modelo de Procesamiento de Informacin, ha desarrollado dos vertientes; por una parte, est la dada "conocimiento declarativo-conocimiento procedimental", que alude al contenido de la estructura cognitiva; y, por la otra, est la controversia entre "procesamiento controlado y procesamiento automatizado", la cual tiene que ver con el modo como el individuo opera con los datos que estn contenidos en aquella estructura.

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El conocimiento declarativo es conocimiento factual acerca del significado o las caractersticas perceptuales de las cosas; mientras que el conocimiento procedimental es conocimiento de cmo hacer algo, desde pronunciar una palabra, manejar un carro, transformar y recitar (rehearsing) informacin en la memoria de trabajo, ensamblar nuevos mtodos de solucin de problemas y monitorear la efectividad con la cual dichos mtodos son implementados. Organizar teoremas geomtricos en una secuencia para lograr una cierta demostracin, por ejemplo, requiere conocimiento procedimental. As que la Psicologa Cognitiva ha definido dos tipos de conocimientos: el conocimiento declarativo [el saber qu], el cual corresponde a conocimientos sobre hechos y cosas, y el conocimiento procedimental [el saber cmo], el cual se refiere a cmo llevar a cabo ciertas actividades cognitivas La Visin Psicomtrica de la Inteligencia y sus Limitaciones Desde un punto de vista psicomtrico, se considera que la inteligencia comprende una o ms entidades estables, fijas, llamadas factores, las cuales son las que explican las diferencias individuales que se observan, tanto en la ejecucin de los tests para medir Coeficiente Intelectual como en la ejecucin de los estudiantes en las pruebas y dems tareas escolares. Sternberg (1984, Septiembre) cuestiona el inmovilismo de esta visin por cuanto que la misma sugiere muy poco acerca de la modificabilidad de la inteligencia; por ello, plantea un enfoque alternativo el cual concibe a la inteligencia como constituida por un conjunto de procesos y de estrategias subyacentes para combinar esos procesos; de esta manera Sternberg arriba a una visin no esttica sino dinmica de la inteligencia concibindola como mejorable por la va de la intervencin a nivel de esos procesos mentales y ensendole a los individuos qu procesos usar, cundo y cmo usarlos, y cmo combinarlos en estrategias que puedan aplicarse y funcionar en la ejecucin de tareas intelectualmente exigentes. Inicialmente, Sternberg (1980, Septiembre; 1984, Septiembre) planteaba una teora que buscaba "comprender la inteligencia en trminos de los procesos componentes que constituyen la ejecucin intelectual" (1984, Septiembre; p. 38). Sus estudios e investigaciones posteriores lo llevaron a formular una concepcin ms global, holstica, de la inteligencia a la cual denomin Teora Trirquica de la Inteligencia (Sternberg, 1985). Plantea Sternberg (1988) que el modelo trirquico de la inteligencia lo integran tres partes bsicas. La primera parte de la teora, una subteora contextual, trata de las relaciones de la inteligencia con el mundo externo del individuo; la segunda parte de la teora, una subteora experiencial, trata de las relaciones de la inteligencia con la experiencia; y, la tercera parte, una subteora componencial, la cual trata de las relaciones entre la inteligencia y el mundo interno del individuo.

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La subteora contextual especifica que la conducta inteligente es definida, en gran parte, por el contexto sociocultural en donde tiene lugar dicha conducta, as que las conductas son consideradas inteligentes en funcin de la cultura particular que les sirve de contexto; desde este punto de vista, la inteligencia se relaciona con el mundo externo del individuo plantendose la interrogante de qu conductas son inteligentes, para quin y dnde estas conductas son inteligentes. Esta subteora especifica el conjunto potencial de contenidos de conductas que pueden ser caracterizadas como inteligentes. Por ello, dice Sternberg (1985), "la subteora contextual es relativstica con respecto tanto al individuo como al ambiente y escenarios socioculturales donde l vive. Lo que constituye un acto inteligente puede diferir de una persona a otra. La subteora experiencial, por su parte, vincula la inteligencia para llevar a cabo una determinada tarea o enfrentar una situacin dada, con el monto de experiencia que tenga el individuo con respecto a dicha tarea o situacin. El propio Sternberg (1988) seala que la inteligencia de una persona con las tareas o situaciones que demandan o exigen una conducta contextualmente inteligente por parte de un sujeto, se evidencia en: (a) su habilidad para tratar con tareas o situaciones relativa (pero no totalmente) nuevas; y, (b) el grado de automatizacin con el cual ejecute las respuestas que la tarea o situacin exige. As, Sternberg (1985) relaciona la conducta inteligente con la experiencia que el sujeto tenga con la situacin o tarea que demanda dicha conducta; y en este continuo identifica una zona dentro de la cual la situacin o tarea no es enteramente nueva y, tampoco, tan conocida por el sujeto como para automatizadamente afrontarla de modo exitoso; es en este espacio entre la relativa novedad y la preautomatizacin donde ms se evidencia la inteligencia, experiencialmente considerada. Se tiene entonces que, seala Lohman (1989), la inteligencia est relacionada con la experiencia que cada individuo tiene con respecto a una tarea o situacin; de aqu que la subteora experiencial sea relativstica con respecto a los puntos del continuo de experiencias del sujeto en los cuales la novedad y la automatizacin sean relevantes para ste. En resumen, como lo plantea Sternberg (1985) la subteora experiencial relaciona la inteligencia tanto con el mundo interno como con el mundo externo del individuo; responde la interrogante de cundo la conducta es inteligente. Esta subteora especifica la relacin entre inteligencia (tal como es exhibida en una tarea o en una situacin), por un lado, y el monto de experiencia que el sujeto tenga con respecto a la tarea o situacin, por el otro. Para completar la "triarqua" de especificaciones que definen la medida en la cual una conducta dada es inteligente, Sternberg postula una subteora componencial con la cual se plantea "describir los mecanismos de pensamiento que podran ser usados en cualquier acto inteligente" (Lohman, 1989; p. 355); en efecto con la subteora componencial, Sternberg (1984, 1985, 1988) se propone

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especificar los mecanismos mentales (estructuras y procesos cognoscitivos) que son responsables de la conducta inteligente. A diferencia de las subteoras contextual y experiencial, que son relativsticas, Sternberg (1985) considera que la subteora componencial es universal porque, segn l aunque los individuos pueden diferir en cuanto a los mecanismos mentales que ellos aplican a una tarea o situacin dada, el conjunto potencial de mecanismos mentales que subyacen a la inteligencia es el mismo a travs de todos los individuos y escenarios socioculturales. El carcter trirquico de la inteligencia humana queda de manifiesto cuando las tres subteoras (contextual, experiencial y componencial) se utilizan conjuntamente en la explicacin de los actos inteligentes de los seres humanos; de este modo, seala Sternberg (1985) una conducta contextualemtne apropiada, emitida en los puntos relevantes del continuo experiencial del sujeto, es inteligente en funcin de la medida en la cual dicha conducta involucra cierta clase de procesos mentales: los componentes. As que la subteora componencial relaciona la inteligencia con el mundo interno del individuo y responde la interrogante de cmo es generada la conducta inteligente. En particular, la subteora especifica el potencial conjunto de mecanismos mentales que subyacen a la conducta inteligente, independientemente del contenido conductual particular. Pero, qu son los componentes?. Estos constituyen la unidad bsica de anlisis para explicar las fuentes de diferencias individuales en la conducta inteligente; as que los componentes son mecanismos mentales de procesamiento de informacin que operan sobre representaciones internas de objetos o smbolos, llevando a cabo alguna de las siguientes acciones: traducir un input sensorial en una representacin mental, transformar una representacion conceptual en otra, o traducir (translate) una representacin mental en un output motor. Los componentes pueden ser clasificados segn la funcin que cumplen: (a) planificar, supervisar, evaluar y tomar decisiones con respecto a la ejecucin de una tarea; (b) ejecutar efectivamente alguna tarea; y, (c) aprender cosas nuevas. Estas funciones cumplidas por los componentes dan lugar a sendas clases: (a) metacomponentes; (b) componentes de ejecucin; y, (c) componentes de adquisicin de conocimientos. A continuacin se describir cada una de estas clases de componentes. 1. Metacomponentes: son procesos de orden superior o ejecutivos que usamos para planear lo que vamos a hacer, supervisar lo que estamos haciendo y evaluar lo que hemos hecho. Luego, los metacompontes controlan el procesamiento de informacin de uno y lo capacitan para monitorearlo y, ms tarde, evaluarlo 2. Componentes de Ejecucin: mientras que los metacomponentes deciden qu hacer, los componentes de ejecucin efectivamente lo hacen. Esto quiere decir que los componentes de ejecucin son los que efectivamente ejecutan los planes construidos por los metacomponentes.

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3. Componentes de adquisicin de conocimientos: son los procesos usados para aprender nuevo material. Estos son los componentes que codifican y combinan selectivamente nueva informacin y comparan selectivamente la nueva informacin con la vieja informacin, a fin de permitir que el aprendizaje de la nueva informacin tenga lugar. En resumen, la subteora componencial hipotetiza la existencia de tres tipos de procesos que, por sus funciones, se clasifican en: metacomponentes: los cuales controlan el procesamiento y lo capacitan a uno para monitorearlo y evaluarlo; componentes de ejecucin, los cuales ejecutan planes ensamblados por los metacomponetes; componentes de adquisicin de conocimientos, los cuales codifican y combinan selectivamente la nueva informacin y selectivamente comparan la nueva informacin con la vieja informacin. A continuacin se muestra una breve caracterizacin de los diferentes componentes que conforman la subteora componencial, tal como Sternberg (1985) lo hace en la obra donde este autor presenta su teora de la inteligencia humana (Sternberg, 1985). Metacomponentes. 1. Decisiones en cuanto, justamente, a lo que hay en el problema que necesita ser resuelto. Esto tiene que ver con el reconocimiento y la definicin de la naturaleza del problema. 2. Seleccin de los componentes de orden inferior. Seleccionar los procesos necesarios para resolver el problema. Un individuo debe seleccionar un conjunto de componentes de orden inferior para usarlos en la solucin de una tarea dada. Seleccionar un conjunto de componentes no ptimos puede conducir a una ejecucin incorrecta o ineficiente de la tarea. En algunos casos, la eleccin de componentes puede ser atribuible parcialmente a la disponibilidad o accesibilidad diferencial de varios componentes. Por ejemplo, los jvenes pueden carecer de ciertos componentes que son necesarios o deseables para llevar a cabo tareas particulares, o ellos an no pueden ejecutar estos componentes en la forma que sea suficientemente eficiente para facilitar la solucin de la tarea. Otras veces la falla para ejecutar los componentes necesarios para resolver una tarea puede deberse a una deficiencia en el conocimiento necesario para la ejecucin de esos componentes. 3. Seleccin de una o ms representaciones u organizaciones de la informacin. Un componente dado frecuentemente puede operar sobre una cualquiera de varias representaciones u organizaciones posibles diferentes de la informacin. La elecin de la representacin u organizacin (lingstica, visual, espacial) puede facilitar o impedir la eficacia con la cual los componentes operan. 4. Seleccin de una estrategia para combinar los componentes de orden inferior (secuenciar los procesos en una estrategia ptima). En s misma, una lista

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de componentes es insuficiente para ejecutar una tarea. Uno debe tambin secuenciar estos componentes en una forma que facilite la ejecucin de la tarea, decidir cmo cada componente ser usado, y decidir cules componentes ejecutar en serie (uno a continuacin de otro) y cules ejecutar en paralelo (simultneamente). 5. Decisiones respecto a la distribucin (allocation) de los recursos atencionales. Cada una de las tareas y componentes usados en la ejecucin de tareas recibe slo una limitada proporcin de los recursos de atencin totales del individuo. Mayores limitaciones pueden dar lugar a una calidad reducida en la ejecucin. En particular uno debe decidir cunto tiempo invertir (asignar) a cada tarea componente y cunto la restriccin de tiempo afectar la calidad de la ejecucin del componente particular. Uno trata de distribuir el tiempo a travs de varios componentes de ejecucin de tareas de manera que maximice la calidad del producto total. 6. Monitoreo de la solucin (monitorear y evaluar el proceso de solucin de uno). A medida que un individuo procede a la solucin de un problema, debe conservar la pista de lo que ya ha hecho, lo que est actualmente haciendo, y lo que an necesita hacer. Si las cosas no estn progresando como uno espera, es necesario un enjuiciamiento del progreso de uno, y uno puede aun tener que considerar la posibilidad de cambiar de metas. Frecuentemente la persona necesita formularse metas ms realistas a medida que comprende que las viejas metas no pueden ser alcanzadas. En la solucin de problemas, los individuos algunas veces encuentran que ninguna de las opciones de respuestas disponibles proporciona la respuesta correcta. El individuo debe entonces decidir si reejecuta ciertos procesos que puedieron haber sido ejecutados errneamente o elegir la mejor de las opciones disponibles. 7. Sensibilidad ante el feedback externo (responder adecuandamente al feedback externo). Este tipo de feedback proporciona un valioso medio para mejorar la ejecucin de la tarea. La habilidad para comprender el feedback, para reconocer sus implicaciones, y luego actuar en funcin de ello es una habilidad clave en la ejecucin de tareas. Componentes de ejecucin Son usados en la ejecucin de varias estrategias para llevar a cabo la tarea. Tienden a organizarse a si mismos en etapas de solucin de tareas que parecen ser bastante generales a travs de las tareas: codificacin de estmulos, comparacin de o combinacin entre estimulos, y respuesta. Componentes de codificacin: son aquellos que tienen que ver con la percepcin inicial y el almacenamiento de la nueva informacin. Cambios cualitativos y cuantitativos en la codificacin parecen constituir una fuente principal de desarrollo intelectual.

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Componentes de comparacin y combinacin. Estos componentes estn involucrados en la conjuncin (putting together) o comparacin de informacin. Componentes de respuesta. (responder efectivamente a nuevas clases de tareas y situaciones, aplicar viejas relaciones a nuevas situaciones). Componentes de adquisicin de conocimientos Son procesos usados para ganar nueva informacin. Codificacin selectiva. implica la separacin de la informacin relevante de aquella que es irrelevante. Cuando la nueva informacin es presentada en un contexto natural, la informacin relevante para un propsito dado de uno, est inmersa en medio de una gran cantidad de informacin irrelevante para nuestro propsito. Una tarea clave para el aprendiz es la de separar "el trigo de la paja": reconocer justamente aquella informacin entre todas las piezas de informacin presentadas que es relevante para los propsitos de uno. Combinacin selectiva. Implica la combinacin de informacin selectivamente codificada de manera tal que forme una totalidad integrada, plausible. Simplemente separar la informacin relevante de la irrelevante no es suficiente para generar una nueva estructura de conocimiento. Uno debe conocer cmo combinar las piezas de informacin en una totalidad internamente conectada. Comparacin selectiva. Implica relacionar la informacin recientemente adquirida o recuperada con la informacin adquirida en el pasado. En el caso de la informacin recientemente adquirida, se ve una relacin entre algo que acaba de ser codificado y algo que fue codificado en el pasado. En el caso de la informacin recientemente recuperada, un item ya almacenado en la memoria es relacionado con algn otro item y de ese modo llega a ser comprendido de una nueva manera. Decidir cul informacin codificar y cmo combinarla no ocurre en el vaco. Por el contrario, la codificacin y combinacin de nuevo conocimiento son guiados por la recuperacin de la vieja informacin. La nueva informacin ser totalmente intil si no puede ser relacionada de algn modo con el viejo conocimiento con el fin de formar una totalidad externamente conectada. Sntesis En este trabajo se ha brindado una panormica del surgimiento, desarrollo y estado actual de las Ciencias Cognitivas, con el fin de ofrecerlas como un contexto en cuyo marco pueda ser interpretada una visin del aprendizaje que abre la caja negra skinneriana, y considera los procesos de pensamiento que el aprendiz activa cuando lleva a cabo Tareas Intelectualmente Exigentes (Gonzlez, 1998). Se entatiza la Teora Trirquica de la Inteligencia propuesta por Robert Sternberg por su potencia para abordar los procesos de monitoreo, supervisin y control de la actividad cognitiva propia, correspondientes al mbito de la Metacognicin (Gonzlez, 1996).

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Captulo 5
Perspectivas actuales de la investigacin en el rea cognoscitiva

Lisette Pogglioli
En este trabajo se presenta una breve perspectiva terica de las habilidades cognitivas para posteriormente hacer referencia a la investigacin desarrollada en este campo, especficamente en reas tales como la adquisicin del conocimiento, la solucin de problemas y la metacognicin. Introduccin Hallazgos recientes reportados en la literatura por psiclogos cognitivos e instruccionales sealan que las habilidades de los individuos para procesar informacin constituyen un factor fundamental para el desarrollo de destrezas de comprensin, aprendizaje y retencin. Este cambio en la conceptualizacin de tales procesos enfatiza las habilidades de procesamiento que los individuos traen consigo a la situacin de aprendizaje y se aleja cada vez ms de la posicin que concibe al aprendiz como un receptor pasivo de informacin. La influencia de la "revolucin cognitiva" ha caracterizado a la investigacin psicolgica y educativa de las ltimas dcadas. La mente humana ha sido redescubierta, o dicho de otra manera, redimensionada. El aprendizaje, la memoria, el razonamiento, el pensamiento, entre otros constructos, se han constituido en objetos fundamentales de estudio cientfico. Igualmente, la naturaleza y el desarrollo de las habilidades cognitivas humanas estn siendo examinadas desde diferentes perspectivas (Poggioli, 1989). El impacto del enfoque cognitivo ha generado un inters especial por el papel del aprendiz como participante activo en el proceso de enseanza-aprendizaje, atribuyndosele gran relevancia al anlisis de todas aquellas actividades en las cuales se involucra con el fin de seleccionar, adquirir, organizar, recordar e integrar conocimiento. Se parte del supuesto que los aprendices cuando reciben informacin novedosa, la procesan, la almacenan y posteriormente la recuperan para aplicarla a nuevas situaciones de aprendizaje. En este sentido, su papel es el de un organismo que procesa, interpreta y sintetiza de manera activa la informacin que recibe utilizando para ello una amplia variedad de estrategias de procesamiento, almacenamiento y recuperacin. Habilidades Cognitivas: una Perspectiva Terica

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Antecedentes Durante muchos aos, el estudio del aprendizaje humano estuvo dominado por el enfoque asociacionista. Esta perspectiva concibi el aprendizaje como el resultado de asociaciones entre estmulos o entre estmulos y respuestas tal y como lo propuso Thorndike (1913, 1931) o como el resultado del establecimiento de patrones de reforzamiento tal y como lo concibi Skinner (1957) con su teora sobre el condicionamiento operante. Thorndike seal que los individuos adquieren nuevas asociaciones a travs de un proceso de ensayo y error en el cual las asociaciones que son recompensadas se fortalecen, mientras que aqullas que son ignoradas o no reforzadas, se debilitan y desaparecen gradualmente. En tal sentido, los investigadores trataron de determinar empricamente cules asociaciones eran ms fciles de formar y cules las ms difciles lo cual gener, en consecuencia, implicaciones para el aprendizaje y la enseanza. Skinner y sus seguidores sealaron, por una parte, que una ciencia de la mente no era posible ya que los eventos mentales no pueden observarse y por otra, que es el ambiente y no el aprendiz quien determina el aprendizaje, hecho que gener una dependencia total en los efectos de los eventos externos como determinantes de lo que se aprende. Estas proposiciones hicieron que el nfasis del proceso enseanza-aprendizaje se centrara en el docente y en los objetivos de aprendizaje como componentes del ambiente en el cual se desenvuelven los aprendices. Los supuestos de la teora de Skinner llevaron a desarrollar una tecnologa del proceso enseanza-aprendizaje en la cual se organiza la prctica en secuencias cuidadosamente ordenadas con el fin de que los individuos adquieran gradualmente los elementos de una conducta nueva y compleja sin cometer errores en el transcurso de su adquisicin. Como ya se ha sealado, durante un largo perodo de tiempo, casi toda la investigacin sobre el aprendizaje se ha realizado dentro del marco asociacionista. La investigacin tradicional en esta corriente se centr principalmente en el aprendizaje animal originando que los estudios se refirieran en esencia al anlisis de formas de aprendizaje relativamente simples. Incluso en la investigacin acerca del aprendizaje humano, los estudios utilizaron tareas simples que involucraban memorizacin ms que comprensin (Shuell, 1986). El enfoque cognitivo, por su parte, intenta analizar y comprender cmo la informacin que se recibe, se procesa y se estructura en la memoria. Con el inters desarrollado por el papel que tienen los procesos de transformacin y organizacin de la informacin que ocurren en el aprendiz, la atencin de los investigadores ha sido reorientada hacia el anlisis de las actividades que ste realiza cuando aprende. La gran mayora de los estudios iniciales constituyeron esfuerzos por examinar el rol que tiene el aprendiz en la facilitacin de su aprendizaje y el nfasis se centr en el examen de las estrategias mnemotcnicas. Basados en el xito de estas investigaciones pioneras en el rea, algunos

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investigadores se dedicaron a analizar los procesos subyacentes a este tipo de estrategia y a determinar su efectividad (Bower, 1970; Paivio, 1971). Las tareas utilizadas en estos estudios incluyeron el aprendizaje de listas de pares asociados de palabras, listas de temes aislados y tareas de recuerdo libre y estaban referidas a tareas de laboratorio ms que al tipo de situacin que confrontan los aprendices en la vida diaria (Glaser, 1982). En la actualidad, el nfasis de las investigaciones se ha reorientado hacia el anlisis de tareas ecolgicamente vlidas, especialmente de aqullas relacionadas con contextos acadmicos (Dansereau, 1988; DiVesta, 1989). El Aprendizaje como Cognicin Las concepciones tericas contemporneas conciben al aprendizaje como un conjunto de procesos que tienen por objeto el procesamiento de informacin. Una vez que el estmulo proveniente de fuentes externas llega a los registros sensoriales (RS) del individuo, es transformado en patrones que contienen informacin. Esta se transmite a travs de canales y est limitada por la capacidad de los mismos. La codificacin de la informacin se puede utilizar como un medio para superar las limitaciones de la capacidad de los canales. El procesamiento de la informacin con frecuencia se realiza en forma serial, pero tambin se puede llevar a cabo en paralelo (Lachman y Butterfield, 1979). Estas y otras ideas se han aplicado con xito a la investigacin sobre el funcionamiento del intelecto humano. Pero quizs el aporte ms significativo ha sido el brindado por los cientficos del rea de la Inteligencia Artificial que conciben al computador como un sistema de manejo de smbolos y quienes han construido una analoga con las operaciones de la cognicin humana. Para los tericos cognitivistas, el aprendizaje es un proceso activo, constructivo y orientado hacia metas que depende de las actividades mentales del aprendiz. En este sentido, los trabajos de investigacin se han orientado hacia el examen del papel de procesos metacognitivos tales como la planificacin y el establecimiento de metas y submetas en la ejecucin de una determinada tarea (Flavell, 1981), la seleccin activa de estmulos, el papel del aprendiz en la organizacin de la informacin que recibe an cuando no estn presentes de manera explcita en la informacin presentada las bases para su organizacin (Bjorklund, Ornstein y Haig, 1977), la generacin o construccin de respuestas apropiadas (Wittrock, 1974) y el uso de diferentes estrategias de aprendizaje (Weinstein y Mayer, 1985). Las nuevas teoras sobre la adquisicin del conocimiento han tratado de explicar el papel fundamental de las construcciones mentales y las interpretaciones de los individuos durante los eventos de aprendizaje. El papel de las inferencias en la comprensin de textos, la evidencia de que los sujetos inventan procedimientos o algoritmos para ejecutar determinadas tareas y la caracterizacin de los sujetos expertos en la solucin de problemas como individuos que re-

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formulan los mismos antes de comenzar a trabajar en ellos, son hechos que apuntan hacia el papel activo del aprendiz cuando adquiere nuevo conocimiento. Los individuos parecen trabajar en funcin de la informacin que poseen y tratan de alcanzar soluciones factibles y explicaciones posibles dentro de los lmites de su conocimiento (Resnick, 1981). De esta manera, los aprendices, al tratar de comprender textos o resolver problemas, organizan y estructuran la informacin que reciben aunque sta sea incompleta o imprecisa. La Estructura de la Memoria Aunque ha habido mucho discusin entre los tericos cognitivistas acerca de la naturaleza exacta de la estructura de la memoria, existen muchos modelos basados en la estructura bsica propuesta por Atkinson y Shiffrin (1968). Los Registros Sensoriales (RS) Los registros sensoriales o filtros de entrada representan un componente del sistema de memoria que se asocia con los sentidos. Son almacenes de memoria de muy poca duracin que funcionan para mantener la informacin, que llega a travs de los sentidos, por perodos muy cortos de tiempo. La Memoria a Corto Plazo (MCP) Este tipo de memoria almacena cantidades limitadas de informacin por un perodo breve de tiempo. Si los temes aislados almacenados en la MCP no reciben un procesamiento posterior, desaparecen en aproximadamente veinte segundos (Peterson y Peterson, 1959). Cuando la MCP recibe la informacin que le llega al aprendiz a travs de los sentidos, este tipo de memoria se denomina memoria primaria que almacena la informacin de manera transitoria. Sin embargo, otros procesos que tienen lugar en la MCP hacen pensar que sta opera como una memoria de trabajo que cumple varias funciones. Una de ellas es la comparacin de la informacin que se recibe con la que est almacenada en la memoria a largo plazo (MLP), la cual es recuperada y llevada a la MCP de manera que la unidad de informacin se aparee con la otra y pueda ser as reconocida. Otra funcin es la combinacin o integracin del material a ser aprendido con un cuerpo organizado de conocimiento almacenado en la MLP. Una tercera funcin y la ms conocida es la funcin de ensayo. Este proceso interno de repetir o practicar el material recibido en la MCP permite que los temes recin codificados se mantengan por perodos ms largos de veinte segundos, de lo contrario, la informacin se perder (Gagn y Glaser, 1987). La Memoria a Largo Plazo Algunos tericos consideran que la MLP est conformada por dos componentes: la memoria episdica y la memoria semntica. Bower (1975) seala que en la MLP se encuentran estructuras tales como (1) modelos espaciales del mundo que nos rodea, incluyendo representaciones correspondientes a imgenes de objetos y lugares, (2) conceptos de objetos y sus propiedades y las reglas que

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los relacionan, (3) creencias acerca de la gente, de nosotros mismos y destrezas de interaccin social, (4) actitudes y valores hacia eventos y objetivos sociales, (5) destrezas motoras, (6) destrezas de solucin de problemas y (7) destrezas para comprender el lenguaje, la msica y la pintura. Por su parte, Gagn y Glaser (1987) consideran que aunque el listado de Bower es lo suficientemente comprehensivo, sugieren que hay otros tipos de conceptualizacin acerca del contenido de la MLP que merecen especial atencin. Estos son las imgenes, el conocimiento declarativo, el conocimiento procedimental, los esquemas y las habilidades cognitivas. Gagn (1984) seala que las habilidades humanas constituyen los resultados del aprendizaje y plantea que adems del conocimiento declarativo (informacin verbal) y el conocimiento procedimental (destrezas intelectuales), existen otras habilidades como las estrategias cognitivas, las destrezas motoras y las actitudes. Las dos ltimas han sido consideradas como productos del aprendizaje por mucho tiempo; sin embargo, las estrategias cognitivas han comenzado a examinarse ms recientemente considerndose que constituyen habilidades que permiten el control interno de otros procesos involucrados en el aprendizaje, el recuerdo y el pensamiento. Hasta ahora se ha hecho referencia al aprendizaje y a procesos de aprendizaje referidos a la adquisicin de informacin que permite a los individuos funcionar en su vida cotidiana. A continuacin se har referencia al aprendizaje que facilita y subyace a la ejecucin de los seres humanos en actividades mentales ms complejas como las involucradas en el uso de estrategias cognitivas en la adquisicin del conocimiento, la solucin de problemas y en los procesos de autorregulacin. Adquisicin del Conocimiento Algunos autores han sealado que los cambios en los resultados del aprendizaje se rigen por la interaccin entre cuatro grupos de variables: (1) las actividades o estrategias del aprendiz que ste utiliza para codificar, almacenar y evocar informacin, (2) las caractersticas del aprendiz, atributos individuales que posee y que influyen los procesos de codificacin, almacenamiento y recuperacin de la informacin, (3) los materiales de aprendizaje, el tipo de material, su naturaleza, estructura, longitud, nivel de dificultad, etc., y (4) la tarea criterio, tipo de prueba - cuantitativa o cualitativa - que se utiliza para evaluar el aprendizaje (Bransford, 1979; Jenkins, 1979). Estas clases de variables conforman lo que se ha denominado el modelo tetrahedral del aprendizaje y su rasgo ms importante lo constituye la naturaleza interactiva de las variables que lo conforman. En tal sentido, una estrategia especfica utilizada por un aprendiz con baja habilidad verbal puede promover un tipo de ejecucin mientras que la misma estrategia utilizada por un sujeto con alta habilidad verbal puede generar una ejecucin muy diferente.

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En el rea de las estrategias de adquisicin del conocimiento se encuentran todas aquellas actividades mentales que puede desplegar un aprendiz con el fin de codificar, almacenar y evocar informacin. En tal sentido, se puede incluir en esta categora a las estrategias de ensayo, elaboracin y organizacin. Estrategias de Ensayo En los estudios realizados sobre el desarrollo de la memoria existen dos tendencias claramente diferenciadas. La primera se refiere a las estrategias que utilizan los individuos para ensayar o practicar la informacin que reciben y que estn directamente relacionadas con su habilidad para transferir la informacin a su sistema de memoria. La segunda enfatiza el papel de los contenidos del sistema de memoria permanente o conocimiento base y su influencia en la adquisicin y retencin de informacin (Chi, 1978). La investigacin en el rea de la memoria se ha centrado fundamentalmente en el procesamiento de informacin tanto en su comprensin inicial y almacenamiento como en su posterior recuperacin de acuerdo con las demandas de la tarea criterio. Dentro de este marco, los esfuerzos se han dirigido al examen del desarrollo y utilizacin de estrategias de retencin (Kail y Hagen, 1977; Ornstein, 1978). Las estrategias de ensayo se pueden agrupar en (1) estrategias que promueven la atencin hacia aspectos relevantes del material y la tarea y que conducen a representaciones ms elaboradas y significativas y (2) estrategias que enfatizan la organizacin del material durante el aprendizaje y el recuerdo. Mientras que las estrategias de codificacin facilitan la adquisicin de las caractersticas estructurales del material en el momento de su presentacin, las estrategias de organizacin son ms tiles durante el proceso de evocacin ya que le permiten al aprendiz tener acceso a la informacin almacenada en la memoria (Waters y Andreassen, 1983). Los estudios reportados en la literatura sobre el uso de estrategias de memoria se han centrado en los siguientes aspectos: 1. La utilizacin espontnea de estrategias de ensayo por parte de nios pequeos, 2. El entrenamiento en estrategias de ensayo y el mantenimiento de las estrategias entrenadas en el tiempo, 3. El comportamiento de los nios de diferentes edades cuando deben ensayar o practicar una lista de temes, 4. El efecto del entrenamiento en estrategias de ensayo en las pruebas de recuerdo, 5. El tipo de ensayo que realizan los sujetos cuando deben memorizar una lista de temes.

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Chi (1985) propone que el uso de las estrategias de memoria no es slo una cuestin de si el individuo posee o no la estrategia o de si la puede utilizar o no segn su edad y su nivel de maduracin. Ms bien, el uso de las estrategias de memoria interacta de manera compleja con el conocimiento del individuo de forma tal que es este conocimiento lo que facilita la adquisicin y el uso de estrategias de memoria apropiadas. En las pruebas de recuerdo libre se presenta una lista de temes y se pide a los sujetos que las evoquen en el orden en que ellos prefieran. La secuencia del recuerdo puede revelar la organizacin que los sujetos imponen a los temes estmulo. Debido a que el orden de la secuencia de los temes evocados no es el mismo que el de la secuencia presentada, se supone que los sujetos realizan algn tipo de organizacin o de reordenamiento que es compatible con su organizacin mental interna. Los estudios de Chi (1977, 1978, 1985) evidencian el papel del conocimiento base en la ejecucin de los sujetos en pruebas de recuerdo. Esta autora encontr que tanto las diferencias en el uso de las estrategias como las diferencias en el conocimiento base contribuyen al desarrollo de cambios en la amplitud de la memoria de los sujetos. Al utilizar estmulos que eran igualmente familiares tanto para los nios como para los adultos encontr que las diferencias de edad, en relacin con la amplitud de la memoria, prcticamente se eliminaban. Chi concluy que la ejecucin superior de los adultos en tareas tpicas para medir la amplitud de la memoria se debe a que stos poseen mayores grados de familiaridad con los estmulos presentados y no a diferencias en la capacidad de la memoria de trabajo. Estrategias de Elaboracin Esta categora de estrategias incluye todas aquellas actividades mentales que permiten realizar alguna construccin simblica sobre la informacin que se est tratando de aprender con el fin de hacerla significativa (Weinstein, 1988). Las estrategias de elaboracin se utilizan, generalmente, cuando los materiales estmulo carecen de significado para el aprendiz. La elaboracin puede ser de dos tipos: imaginal y verbal. El uso de imgenes mentales es una de las estrategias ms examinadas, particularmente, en el aprendizaje de pares de palabras, de vocabulario de lenguas extranjeras, de vocabulario y sus definiciones, estados y sus capitales, presidentes y el orden en el que gobernaron, ocupaciones, ciudades y sus productos, funciones de varias sustancias qumicas, personas famosas y sus logros (Levin, 1981). Entre los resultados de las investigaciones en las que se entrevist a los sujetos con el fin de indagar acerca del uso de estrategias de elaboracin imaginal se pueden sealar los siguientes: (1) existen diferencias individuales en el uso de las estrategias de elaboracin imaginal, con algunos sujetos que reportan una actividad elaborativa y otros no, (2) la proporcin de sujetos que reportan

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haber elaborado sobre el material incrementa a medida que los sujetos se hacen mayores, y (3) el uso de estrategias de elaboracin est consistentemente asociado con la ejecucin en tareas de aprendizaje de alto nivel. Las estrategias de elaboracin verbal se refieren bsicamente a aquellas actividades que se desarrollan para aprender informacin contenida en textos. Tienen como objetivo la formacin de un vnculo entre informacin ya aprendida (conocimiento previo) y la contenida en un texto (conocimiento nuevo) con el fin de incrementar su procesamiento y por ende, su comprensin y aprendizaje. Esta categora de estrategias incluye actividades tales como parafrasear, hacer inferencias, extraer conclusiones, utilizar mtodos de comparacin y contraste, hacer predicciones y verificarlas, relacionar el contenido con el conocimiento previo, pensar en analogas, generar notas, hacer y responder preguntas, utilizar la estructura del texto y resumir (Weinstein, Ridley, Dahl y Weber, 1988-1989). En un estudio realizado por Dicillo y Poggioli (1992) se compararon estrategias de elaboracin verbal e imaginal en el aprendizaje individual y de grupos cooperativos en nios de la segunda etapa de la Educacin Bsica. No se encontraron diferencias significativas entre los grupos (imaginal y verbal) que elaboraron sobre el material ledo ya que ambos grupos obtuvieron medias similares en la prueba de comprensin de lectura. Tales resultados llevan a concluir que lo importante es la elaboracin que se haga sobre el material independientemente de si sta es de naturaleza imaginal o verbal. En lneas generales se puede afirmar que la investigacin en el rea de las estrategias de elaboracin se ha diseado para explorar cmo los sujetos aprenden nueva informacin, pudindose sealar, a manera de conclusin, que cuando los aprendices se involucran en actividades de elaboracin - imaginal o verbal su comprensin y aprendizaje de la informacin recibida incrementa significativamente. Estrategias de Organizacin Las estrategias de organizacin se refieren a aquellos procedimientos utilizados por el aprendiz para transformar la informacin a otra forma que sea ms fcil de comprender. El efecto facilitador se le atribuye al procesamiento involucrado en lograr dicha transformacin as como tambin a la estructura impuesta a la informacin. Esta categora de estrategia, al igual que la de elaboracin, exige del aprendiz un papel ms activo que el requerido por las estrategias de ensayo (Weinstein, 1988). Varios estudios han evidenciado la importancia de la organizacin en el aprendizaje y la memoria (Ver Tulving y Donaldson, 1972, para una revisin). La organizacin es particularmente efectiva cuando se agrupa el material que se debe aprender (Cofer, Bruce y Reicher, 1966). Los resultados de la investiga-

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cin en estrategias de organizacin son similares a los hallazgos reportados sobre las estrategias de ensayo (Moely, 1979a). Los resultados de los estudios realizados sugieren que las estrategias de organizacin (1) se desarrollan durante los aos de escolaridad, (2) aparecen bajo condiciones limitadas y referidas a ciertos contextos para posteriormente generalizarse con el desarrollo a un cierto rango de condiciones de procesamiento y de materiales. De igual manera, los hallazgos ponen de relieve dos caractersticas relacionadas con el sistema de memoria de los nios. Primero, los nios pequeos poseen informacin disponible en su memoria que podra ser utilizada en la formacin de estrategias apropiadas. Aunque est claro que el conocimiento de estos nios es incompleto en relacin con el de los nios mayores y los adultos, su ejecucin en pruebas de memoria se caracteriza por la discrepancia entre el conocimiento disponible y el uso estratgico de ese conocimiento. Estas deficiencias de produccin (Flavell, 1970; Ornstein y Corsale, 1979b; Paris, 1978a) se relacionan con la segunda caracterstica de la memoria de los nios que es la distincin entre aspectos deliberados y automticos de la ejecucin. Aunque parece que los nios ms pequeos parecen requerir varios aos para utilizar estrategias de memoria deliberadamente, la informacin disponible en su memoria a largo plazo puede promover el recuerdo si se proveen tareas orientadoras (Brown, 1979). Cuando las estrategias de organizacin se aplican a tareas de aprendizaje ms complejas como por ejemplo la comprensin y el aprendizaje de textos, se utiliza otro tipo de estrategia con el fin de facilitar la codificacin y el recuerdo de la informacin, tales como identificar las ideas principales y secundarias de un texto o construir representaciones grficas como por ejemplo, elaborar esquemas, redes semnticas o mapas de conceptos (Jones, Pierce y Hunter, 1988-1989). Las representaciones grficas son ilustraciones visuales de materiales en prosa. Muchas representaciones de este tipo son: diagramas de flujo, esquemas, mapas, rboles semnticos, matrices de comparacin y contraste, entre otras. Por lo general, constituyen el esquema organizacional subyacente al texto y son importantes porque ayudan al aprendiz a comprender, resumir, organizar y sintetizar ideas complejas de manera que, en muchos casos, sobrepasan la informacin contenida en enunciados de tipo verbal ya que incluyen conceptos claves y sus relaciones ofreciendo una visin holstica de la informacin que las palabras por s solas no logran (Van Patten, Chao y Reigeluth, 1986). Los estudios que han examinado la utilidad de las estrategias de organizacin han evidenciado que los estudiantes que las usan en tareas de comprensin y aprendizaje de textos, rinden significativamente mejor que los estudiantes que utilizan sus propios mtodos. A partir de los hallazgos reportados en la literatura, se puede afirmar que las estrategias de organizacin son fundamentales para el logro de un aprendizaje

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efectivo ya que el uso de estas estrategias permite (1) la organizacin de la informacin mediante la imposicin de una estructura por parte del aprendiz, (2) la abstraccin de la macroestructura del texto, (3) la construccin de una representacin grfica alternativa del material a aprender, (4) la visualizacin de la organizacin general de la informacin y (5) la reconstruccin de la informacin. Solucin de Problemas Entre los objetivos fundamentales de las instituciones educativas, desde el nivel de preescolar hasta el universitario, est el impartir conocimiento y desarrollar habilidades cognitivas, siendo una de las ms importantes, la habilidad para resolver problemas. Las actividades que realizan los individuos cuando resuelven problemas pueden ser analizadas en funcin de las estrategias cognitivas involucradas. El estudio de la solucin de problemas, histricamente, ha recibido una atencin espordica por parte de los psiclogos educativos y de los educadores; sin embargo, a partir de la dcada de los sesenta, el estudio sobre los procesos del pensamiento y de la solucin de problemas se ha convertido en un rea de gran relevancia, principalmente, a partir del surgimiento del enfoque de Procesamiento de Informacin. Greeno (1980) considera que el principal aporte de la investigacin reciente en el rea de la solucin de problemas involucra dos aspectos importantes: (1) un progreso en la formulacin de una nueva conceptualizacin de las relaciones entre la solucin de problemas y el conocimiento y (2) el desarrollo de una comprensin diferenciada de los procesos cognitivos involucrados en la solucin de problemas. Naturaleza de la Solucin de Problemas Un problema ha sido definido como una situacin en la cual un individuo desea hacer algo pero desconoce el curso de la accin necesaria para lograr lo que quiere (Newell y Simon, 1972) o como una situacin en la cual el individuo acta con el fin de lograr una meta utilizando para ello alguna estrategia en particular (Chi y Glaser, 1983). El hacer referencia a "la meta" o a "lograr lo que se quiere" significa lo que se desea alcanzar: la solucin. La meta o solucin est asociada con un estado inicial y la diferencia que existe entre ambos estados es lo que se denomina "problema". Las actividades que llevan a cabo los sujetos tienen por objeto operar sobre el estado inicial para transformarlo en meta. As, se podra decir que los problemas tienen cuatro componentes: las metas, los datos, las restricciones y los mtodos. Las metas constituyen lo que se desea lograr en una situacin determinada y pueden estar bien o mal definidas. Los datos constituyen los elementos de los cuales dispone el aprendiz para comenzar a analizar la situacin problema. Las restricciones son los factores que limitan la va para llegar a la solucin. Los

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mtodos u operaciones se refieren a los procedimientos que pueden utilizarse para resolver el problema. La solucin de problemas involucra actividades fsicas y mentales as como tambin factores de tipo cognitivo, emocional y conductual; sin embargo, la investigacin psicolgica referida al rea ha centrado su atencin principalmente en los factores cognitivos involucrados en la solucin de problemas no existiendo an un enfoque que abarque los aspectos emocionales y conductuales (Andre, 1986). En el marco de la psicologa cognitiva, la solucin de problemas es considerada como el procesamiento de informacin que realiza un sistema (cerebro o computador) de manera tal que dicha informacin, que se encuentra en un estado inicial, se transforme en un estado final deseado. El nfasis principal de este enfoque reside en los procesos y conocimientos internos del estudiante e interpreta los problemas de distinta naturaleza en funcin de: (1) la descripcin del contexto en el cual se encuentra la tarea, (2) el anlisis de todas las conductas asociadas con las respuestas del sujeto para ejecutar la tarea, (3) las mediciones repetidas de las ejecuciones, (4) las inferencias sobre las operaciones cognitivas que relacionan tanto la informacin acerca de la tarea y la ejecucin como acerca de los cambios en esa ejecucin, (5) la representacin del problema y (6) las estrategias y planes de solucin de un problema. La Investigacin en Solucin de Problemas En las investigaciones realizadas en el rea de la solucin de problemas existen dos tendencias: una que enfatiza el proceso de solucin y otra que hace nfasis en el conocimiento del solucionador del problema, particularmente, en la organizacin de ese conocimiento (Chi, Feltovich y Glaser, 1981; Chi, Glaser y Rees, 1982). En este sentido, se ha observado un cambio de inters de las estrategias generales ms o menos independientes de un dominio en particular, al conocimiento base relacionado con el rea en el cual el individuo resuelve un problema. Son muchos los aspectos que se estn investigando actualmente. Podran mencionarse aspectos fundamentales como la representacin y las estrategias as como tambin los factores que afectan la solucin de problemas. La representacin consiste en la transformacin de la informacin presentada que es almacenada en el sistema de memoria y que incluye la identificacin de la(s) meta(s) y los datos. Este aspecto es de suma importancia ya que las representaciones mentales, adecuadas o inadecuadas, que los individuos utilizan para resolver problemas pueden facilitar o inhibir la solucin (Puente, 1989). Durante las ltimas dcadas, los investigadores han examinado la ejecucin de sujetos en tareas que requieren muchas horas de aprendizaje y experiencia. Estos estudios sobre la experticia han centrado su inters en el examen de las diferencias experto-novato en diferentes reas del conocimiento (Chase y

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Simon, 1973a; Egan y Schwartz, 1979; Larkin, McDermott, Simon y Simon, 1980). Los resultados de los estudios realizados en el rea de las diferencias expertonovato conducen a pensar que existen altos niveles de competencia en trminos de la interaccin entre la estructura de conocimiento del sujeto y sus habilidades de procesamiento y sealan que las relaciones entre la estructura del conocimiento base y los procesos en la solucin de problemas estn mediadas por la calidad de la representacin del problema (Gagn y Glaser, 1987). Las estrategias en la solucin de problemas se refieren a las operaciones mentales que los solucionadores utilizan para pensar sobre la representacin de las metas y los datos con el fin de transformar stos en metas y alcanzar una solucin. Las estrategias incluyen los mtodos heursticos, los algoritmos y los procesos de pensamiento divergente. En lo que respecta a los mtodos heursticos, los investigadores han examinado diferentes vas o enfoques posibles a seguir para alcanzar una solucin: (1) buscar representaciones alternativas (Goldstein, 1980), (2) trabajar en sentido inverso, de la meta a los datos (Hayes, 1981), (3) trabajar por pasos (Mayer, 1983), (4) el anlisis medios-fin, que implica dividir el problema en submetas e ir eliminando obstculos con el fin de acercarse ms a ellas (Mayer, 1983), (5) el razonamiento hipottico (Hayes, 1981), (6) resolver partes de un problema (Polya, 1945), y (7) buscar problemas anlogos (Gick y Holyoak, 1985). Algunos investigadores apoyan la nocin de que la eficiencia en la solucin de problemas est relacionada con el conocimiento especfico del rea en cuestin (Lenat, 1983; Mayer, 1983; Simon, 1980a). En este sentido, Mayer (1983) seala que los tipos de conocimiento necesarios para resolver problemas incluyen: (1) conocimiento lingstico, reconocimiento de palabras, oraciones, etc., (2) conocimiento semntico, conocimiento del rea relevante al problema, (3) conocimiento esquemtico, conocimiento de los tipos de problemas, (4) conocimiento procedimental, conocimiento de los algoritmos necesario para resolver el problema y (5) conocimiento estratgico, tcnicas para utilizar tipos de conocimiento y procesos heursticos. La adquisicin de habilidades para resolver problemas ha sido considerada como el aprendizaje de sistemas de produccin que involucran tanto al conocimiento declarativo como el procedimental. Los resultados de los estudios realizados sealan que existen diversos procedimientos que facilitan o inhiben la adquisicin de habilidades para resolver problemas, entre ellos se pueden mencionar: (1) ofrecer a los estudiantes representaciones metafricas (Mayer, 1975, 1976, 1980), (2) permitir la verbalizacin durante la solucin del problema (Webb, 1983), (3) hacer preguntas (McKenzie y Herrington, 1981), (4) ofrecer ejemplos (Simon, 1984), (5) utilizar el aprendizaje por descubrimiento vs el aprendizaje expositivo (Puente, 1985), (6) ofrecer descripciones verbales (Kersch, 1962), (7) trabajar en grupos (Webb, 1983).

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Desde la perspectiva del enfoque cognitivo se han revisado los factores que afectan la solucin de problemas. Lester (1983) identific una serie de categoras que permiten agrupar estos factores en factores vinculados a la tarea, relacionados con los procesos y dependientes del sujeto. Los factores vinculados a la tarea son aqullos asociados con la naturaleza del problema, por ejemplo, su contenido, su estructura, el contexto y la sintaxis. Los procesos mentales desarrollados por los individuos mientras resuelven un problema estn siendo objeto de estudio por parte de los investigadores del paradigma cognitivo. En este sentido, la mayor parte de las investigaciones en el rea de la matemtica, por ejemplo, directa o indirectamente, tienen por objeto analizar y generar modelos que reflejen los procesos subyacentes a la ejecucin de los sujetos. Clsicamente se ha considerado que las caractersticas de los individuos tienen un papel importante en el xito o fracaso en la solucin de problemas. Algunos factores son el conocimiento, la experiencia previa, la habilidad en la lectura, la perseverancia, las habilidades de tipo espacial, la edad y el sexo. En la actualidad existe una tendencia que se orienta hacia la construccin de modelos que representan las diferencias entre solucionadores eficientes e ineficientes o las diferencias entre expertos y novatos en la ejecucin de una tarea. Los trabajos realizados han sealado diferencias considerables en aspectos vinculados con la percepcin de la estructura del problema, la organizacin de los elementos dados y supuestos, el nivel lingstico, el reconocimiento de patrones en la memoria y la capacidad de transferencia a situaciones nuevas (Puente, 1989). Otro de los aspectos que se ha estudiado durante la ltima dcada es el papel que tienen las estructuras lgicas y los sistemas simblicos en la solucin de problemas (Rimoldi, 1984). Sin embargo, este aspecto no ha sido considerado en toda su dimensin e importancia por los tericos clsicos del rea de solucin de problemas. En efecto, han sido los investigadores de la comprensin del discurso los que han argumentado y estudiado con ms nfasis la relacin entre el lenguaje, el sistema simblico y las estructuras de pensamiento. El lenguaje y el sistema de smbolos constituyen el formato bsico de informacin almacenada en la memoria y ste es un conocimiento que permite comprender y representar el problema (Kintsch, 1986). En los estudios realizados se ha encontrado que la mayor parte de los estudiantes, independientemente del nivel de escolaridad, resuelven menos problemas cuando stos se presentan en forma verbal que cuando se presentan en forma matemtica. Kintsch (1987) descubri tres posibles fuentes de error al resolver problemas aritmticos sencillos presentados en forma verbal: (1) mal uso o desconocimiento de estrategias aritmticas, falsas concepciones y fracaso en el procedimiento de conteo, (2) comprensin equivocada del problema, princi-

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palmente por factores lingsticos y (3) sobrecarga de elementos en la memoria a corto plazo. Se ha encontrado que nios en edad preescolar y bsica son capaces de resolver problemas construidos alrededor de estructuras lgico-matemticas si los problemas se presentan en un lenguaje que pueda ser comprendido. Por lo tanto, es necesario investigar en cada caso cul es el lenguaje mejor controlado por el sujeto y utilizarlo para resolver situaciones progresivamente ms complejas. Metacognicin La metacognicin puede definirse como el grado de conciencia o conocimiento que los individuos poseen sobre sus formas de pensar (procesos y eventos cognitivos), los contenidos (estructuras) y la habilidad para controlar esos procesos con el fin de organizarlos, revisarlos y modificarlos en funcin de los resultados del aprendizaje (Brown, 1975; Chadwick, 1988; Flavell, 1981). Baker y Brown (1984) distinguen dos tipos de metacognicin: El conocimiento acerca de la cognicin y la regulacin de la cognicin. El primero abarca el conocimiento sobre las fuentes cognitivas y la compatibilidad que hay entre las demandas de la situacin de aprendizaje y los recursos de los individuos para aprender mientras que el segundo componente - la regulacin de la cognicin est conformado por mecanismos autorreguladores que utiliza el aprendiz durante el proceso de aprendizaje. La metacognicin incluye el conocimiento y la regulacin de varios procesos cognitivos. Por ejemplo, la meta-atencin es la conciencia y la regulacin de los procesos que se utilizan en la captacin de los estmulos. El conocimiento sobre los procesos de comprensin y la regulacin de los mismos, se denomina metacomprensin. El conocimiento sobre los procesos de la memoria y sus mecanismos autoreguladores se denomina metamemoria. Investigacin en el rea de la Metacognicin La investigacin sobre la metamemoria es una de las ms desarrolladas dentro del rea de la metacognicin. Los estudios realizados se han referido principalmente a los aspectos ejecutivos de tareas tales como la estimacin de la amplitud de la memoria, la prediccin del individuo acerca de si est listo para recordar algo, el tiempo dedicado al estudio de ciertos tipos de informacin y la conciencia de los sujetos acerca de las estrategias y de las demandas de la tarea. Las poblaciones examinadas han estado conformadas por sujetos desde el nivel de preescolar hasta adultos y muy recientemente, se ha comenzado a explorar las operaciones metacognitivas en sujetos con necesidades especiales. Otras reas tales como la comunicacin, la comprensin de la lectura y la solucin de problemas tambin han sido objeto de investigacin en el marco de la metacognicin.

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En el rea de la comunicacin, por ejemplo, se ha examinado el desarrollo de estrategias metacognitivas que implican que los individuos estn en capacidad de apreciar que los mensajes que reciben son incompletos, vagos o imprecisos o que pueden interpretarse de diversas maneras. La investigacin realizada en el rea de la lectura indica que lo metacognitivo tiene un papel fundamental en la comprensin de la lectura. La metacognicin en la lectura involucra el conocimiento de cuatro variables y la manera cmo stas interactan para facilitar el aprendizaje. Estas variables son: el texto, la tarea, las estrategias y las caractersticas del aprendiz. Baker y Brown (1984) han distinguido entre dos tipos de lectura: leer para comprender y leer para aprender. Leer para comprender involucra la actividad metacognitiva de supervisin o monitoreo progresivo de la comprensin la cual permite al individuo apreciar si est comprendiendo, asegurarse que el proceso transcurre sin obstculos y tomar acciones correctivas de ser necesario. Los aspectos metacognitivos de leer para aprender incluyen la identificacin de las ideas importantes, el anlisis de las demandas impuestas por los materiales y la tarea de aprendizaje, el desarrollo y el mantenimiento de estrategias apropiadas as como tambin el establecimiento de un horario y de un ambiente de estudio adecuados. Los estudios realizados en el rea de leer para comprender han examinado la ejecucin en sujetos nios y adultos. En los nios se ha explorado su conocimiento sobre las estrategias utilizadas, el efecto de las tareas en su rendimiento y los propsitos de la lectura; es decir, su conocimiento metacognitivo acerca de los procesos involucrados en la comprensin de textos escritos. Tales estudios se han llevado a cabo principalmente mediante el uso de tcnicas tales como reportes verbales (Anderson, 1979; Baker, 1979; Collins, Brown y Larkin, 1980; Myers y Paris, 1978), preguntas de comprensin (Kavale y Schreiner, 1979), obtencin de puntajes que pretenden medir la confianza de sujeto en sus respuestas a preguntas de comprensin (Hanley y Collins, 1989), pruebas cloze (Di Vesta, Hayward y Orlando, 1979), medidas del procesamiento (Patterson, Cosgrove y O'Brien, 1980) y autocorrecciones realizadas durante la lectura (Beebe, 1980). Otros estudios han incorporado el anlisis de componentes conductuales detectndose una falta de correspondencia entre lo que los nios dicen que haran al leer y lo que realmente hacen cuando leen (Baker y Brown, 1984b). Leer para aprender implica la actividad de leer para comprender y algo ms, ya que el estudiante debe concentrarse en la seleccin de informacin relevante en el texto, utilizar estrategias de aprendizaje y evaluar la efectividad de la estrategia utilizada. Los estudios en el rea de leer para aprender se han dirigido al examen de las variables involucradas en el proceso de comprensin de la lectura: los textos, la

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tarea criterio, las estrategias y las caractersticas del aprendiz. Se considera que una forma fundamental de la metacognicin es la habilidad para monitorear en forma progresiva, la comprensin y el aprendizaje. Esta habilidad depende del conocimiento del individuo acerca de los cuatro factores antes mencionados. Todos ellos interactan y tienen influencia en la manera cmo los individuos pueden coordinar sus planes de comprensin y aprendizaje e involucrarse en actividades de monitoreo, supervisin y evaluacin de dichos procesos. La investigacin en el rea de la lectura revela directa o indirectamente la existencia o no de actividades de monitoreo durante la lectura. Los estudios se han agrupado bajo algunas actividades que se consideran cruciales para la comprensin: (1) el establecimiento de propsitos en la lectura, (2) la modificacin de la tasa de lectura y de estrategias de comprensin en relacin con los propsitos, (3) la identificacin de los elementos importantes del texto, (4) la identificacin de la estructura lgica del material, (5) el uso del conocimiento previo en la interpretacin de nueva informacin, (6) la evaluacin del texto en relacin con elementos tales como la claridad, la consistencia y la coherencia, (7) la deteccin de fallas de comprensin y (8) el establecimiento y seleccin de estndares apropiados para determinar el nivel de comprensin (Baker y Brown, 1984b). Establecimiento de los Propsitos de la Lectura Algunos investigadores han explorado las concepciones que tienen los nios sobre la lectura antes de haber recibido un entrenamiento formal y en las etapas iniciales de la instruccin. Se ha comparado tambin las concepciones que tienen los lectores de alto y de bajo rendimiento. Uno de los hallazgos ms comn es que los nios pequeos y los lectores de bajo rendimiento tienen poca conciencia sobre el hecho de que el tratar de comprender un texto implica cierto esfuerzo cognitivo; de igual manera, consideran a la lectura como un proceso de decodificacin de palabras y no como una actividad cuyo objetivo fundamental es la de extraer significado (Canney y Winograd, 1979; Garner y Kraus, 1980; Myers y Paris, 1978). Modificacin de la Tasa de la Lectura en Funcin de los Propsitos Algunos estudios han examinado la habilidad de los lectores para modificar sus conductas de lectura en respuesta a las instrucciones que reciben. Aunque los nios suelen indicar en las entrevistas que pueden adaptar sus actividades de lectura en funcin de los propsitos, lo que realmente hacen cuando leen no se corresponde con lo que dicen que haran (Myers y Paris, 1978). Slo cuando los sujetos alcanzan el nivel adulto es cuando exhiben cierta flexibilidad en el ajuste de su tasa de lectura: modifican el movimiento de los ojos cuando se encuentran con textos difciles y se adaptan a las instrucciones que reciben. Sin embargo, tambin se ha encontrado que algunos individuos, a

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nivel de educacin superior, tienen fallas para establecer los propsitos de la lectura independientemente de la dificultad del texto y de los propsitos para leer (Bond y Tinker, 1973). Identificacin de los Elementos Importantes del Texto La investigacin sobre los juicios acerca de la importancia de la informacin en un texto refleja el vnculo que existe entre conocimiento metacognitivo y procesamiento cognitivo. Aunque los nios tienen dificultad para identificar los aspectos principales en un texto, estn en capacidad para recordar la informacin ms importante y sus patrones de recuerdo son muy similares a los de los adultos (Flavell y Wellman, 1977). La Estructura Lgica del Texto Un elemento fundamental de la comprensin es poder determinar cmo se relacionan las ideas contenidas en un texto. Los lectores de alto y de bajo rendimiento poseen diferencias considerables en su conocimiento acerca de las relaciones lgicas. Los resultados de los estudios indican que los sujetos recuerdan mejor los textos que poseen una estructura lgica y slo los lectores de alto rendimiento reconocen que los textos menos lgicos son los ms difciles de aprender. Activacin del Conocimiento Previo La habilidad para detectar la organizacin lgica de un texto tiene su base en el conocimiento previo que posee el sujeto. Algunos estudios han examinado la tendencia que tienen los sujetos para evaluar textos en trminos de su conocimiento acerca del mundo. Saber que se debe activar el conocimiento previo durante la lectura y la habilidad para hacerlo constituyen componentes metacognitivos importantes en los procesos de comprensin y aprendizaje. Cuando no se posee conocimiento previo, es importante darse cuenta de que no se est comprendiendo, que hay una ruptura en el proceso de comprensin y que es necesario tomar acciones de tipo remedial. Evaluacin del Texto Algunos estudios han examinado la habilidad de los sujetos para evaluar las inconsistencias presentes en los textos, como por ejemplo, saber cundo un texto es ambiguo, cundo la informacin que presenta est incompleta o cundo algunas ideas contenidas en l entran en conflicto con otras. Deteccin de Fallas de Comprensin Darse cuenta que se ha fallado en la comprensin de un texto es un componente importante del monitoreo de la comprensin, tambin se debe saber qu hacer cuando sto ocurre.

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Determinacin del Nivel de Comprensin Los lectores deben estar en capacidad de seleccionar diferentes criterios para decidir si han comprendido una informacin. Existen varias estrategias para la evaluacin de la comprensin tales como la autogeneracin de preguntas, la elaboracin de resmenes y esquemas. En sntesis, se puede sealar que los hallazgos reportados en la literatura revelan un patrn consistente en relacin con el desarrollo metacognitivo en la lectura y que este desarrollo est vinculado al nivel de proficiencia de los individuos en los procesos de comprensin y aprendizaje. Se podra concluir que los lectores muy jvenes o de bajo rendimiento poseen un conocimiento inadecuado sobre cmo los factores involucrados en una situacin de aprendizaje (texto, tarea, estrategias y caractersticas del aprendiz) pueden afectar su habilidad para comprender y aprender. De igual manera, se ha encontrado que este tipo de lector tiene dificultad para ejercer control sobre sus procesos cognitivos cuando leen, no son tan flexibles como los lectores expertos o de alto rendimiento, les es difcil identificar los aspectos principales de un texto, tienen dificultad para detectar sus fallas de comprensin y no estn en capacidad de ajustar las actividades de la lectura a los propsitos de la misma ni de establecer criterios que les permitan determinar su nivel de comprensin. Es decir, que los individuos con estas limitaciones poseen deficiencias en los dos componentes de la metacognicin: el conocimiento y los mecanismos de autorregulacin. Los resultados de los estudios realizados en el rea de las estrategias cognitivas y metacognitivas han contribuido al desarrollo de aplicaciones especficas a contextos acadmicos. Dichas aplicaciones se basan en supuestos tales como (1) las actividades cognitivas en las que los estudiantes se involucran cuando enfrentan tareas de aprendizaje acadmico son fundamentales para el logro del aprendizaje y (2) estas actividades pueden modificarse mediante la instruccin y el entrenamiento a objeto de hacerlas ms efectivas y eficientes. En este trabajo se present una revisin sobre el estado del arte del rea de las habilidades cognitivas y metacognitivas desde una perspectiva terica y emprica basndonos en el enfoque de Procesamiento de Informacin. La informacin considerada se refiri bsicamente a la investigacin realizada en reas tales como la adquisicin del conocimiento, la solucin de problemas y la metacognicin. De igual manera, se present un conjunto de orientaciones de naturaleza emprica cuyo propsito fundamental es orientar a los participantes en estas Jornadas de Investigacin Educativa en el desarrollo de estudios que permitan de alguna manera enriquecer esta incipiente rea de investigacin.

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Parte III
Neurociencia Cognitiva y Educacin

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CAPTULO 6
Neurociencia y Educacin

Carlos Ruiz Bolvar


En este trabajo se discuten los enfoques de la Neurociencia representada por Sperry (1973), MacLean (1978) y Herrmann (1989. Sperry y colaboradores confirmaron la especializacin de los hemisferios cerebrales. Sus investigaciones permitieron establecer que la capacidad de hablar, escribir, leer y razonar con nmeros, es fundamentalmente una responsabilidad del hemisferio izquierdo; mientras que la habilidad para percibir y orientarse en el espacio, trabajar con tareas geomtricas, elaborar mapas conceptuales y rotar mentalmente formas o figuras, son ejecutadas predominantemente por el hemisferio derecho. MacLean presenta un modelo del cerebro formado por tres elementos interrelacionados, estos son: el cerebros reptiliano, el sistema lmbico y la neocorteza; ellos controlan la vida instintiva, emocional e intelectual, respectivamente. Herrmann, por su parte, ha propuesto el modelo del cerebro total, formado por cuatro cuadrantes, que determinan estilos diferentes de procesamiento de informacin en los individuos, aun cuando se admite que el cerebro funciona como una totalidad integrada. Estos hallazgos tienen implicaciones para el rediseo del currculo de la carrera de formacin docente, para la planificacin de programas de entrenamiento para docentes en servicio, al mismo tiempo que permiten fundamentar el diseo de estrategias instruccionales, atendiendo a distintos estilos de aprendizaje y al desarrollo de la creatividad. Introduccin Una de las explicaciones ms recientes que se ha intentado sobre el comportamiento inteligente ha sido formulada desde la perspectiva de la neurociencia (Beauport y Daz, 1994); es decir, la disciplina que se encarga del estudio interdisciplinario del cerebro humano, lo que ha derivado en una mayor comprensin acerca de la relacin entre el funcionamiento del cerebro y la conducta. Tal vez, uno de los resultados ms relevantes de los trabajos de investigacin que se han realizado sobre este rganos consiste en haber descubierto que sus dos hemisferios difieren significativamente en su funcionamiento. La naturaleza de esta diferencia ha sido intensivamente estudiada desde la dcada de los ao 50, particularmente por bilogos, psiclogos, neurlogos y cirujanos.

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Uno de los trabajos pioneros en est rea ha sido realizado por Gazzaniga y colaboradores (Gazzaniga, Bogen y Sperry, 1965; Gazzaniga y Sperry, 1967). De igual forma, ha sido importante la contribucin de autores tales como MacLean (1978) y Herrmann (1989) entre otros. Tales investigaciones han dado origen a diferentes interpretaciones acerca del funcionamiento del cerebro. A continuacin se presenta una sntesis de los hallazgos ms relevantes que al respecto reporta la literatura y se analizan sus implicaciones para la educacin. La Investigacin sobre los Hemisferios Cerebrales Hasta mediado del Siglo XIX los investigadores todava no haban advertido la especializacin de los hemisferios cerebrales. Los primeros hallazgos, en este sentido, se deben al mdico francs Paul Broca y al neurofisilogo alemn Carl Wernicke (citado por Herrmann, 1989; Wittrock, 1977; VerLee, 1986), quienes a partir de sus observaciones clnicas en pacientes con daos cerebrales llegaron a la conclusin de que haba una relacin directa entre el dao de ciertas zonas del cerebro y la prdida de la capacidad de hablar. Especficamente, Broca observ, en 1985, que las lesiones en cierta zona de la parte izquierda del cerebro producan, casi invariablemente, trastornos en el habla, en tanto que ello no corra con las lesiones en la misma zona del hemisferio derecho. Posteriormente, en 1874, Wernicke identific otra regin, diferente a la ya descubierta por Broca, relacionada con otro tipo de dificultad en el habla. De nuevo, constat que el lenguaje slo era afectado por una lesin en el hemisferio izquierdo. En ambos casos, los investigadores determinaron que la incapacidad no estaba relacionada con los msculos productores del habla, sino que cada zona intervena en su proceso mental bsico necesario para la produccin de un lenguaje articulado y con significado. Los hallazgos anteriores no slo permitieron confirmar la diferenciacin funcional de los dos hemisferios cerebrales, sino que hicieron pensar en el cerebro izquierdo adems, de ser diferente, era tambin superior al derecho, por el hecho mismo de estar asociado con la capacidad de hablar. As surgi la teora de la dominancia cerebral. Esta teora pareca estar respaldada por el hecho de que en la mayora de las personas la mano derecha (controlada por el hemisferio izquierdo) es la dominante, lo cual llev a pensar que el hemisferio derecho no jugaba ningn papel importante en el pensamiento. Fue despus de la Segunda Guerra Mundial que se lleg a determinar, en soldados con lesiones cerebrales, que el dao de ciertas zonas del hemisferio derecho produca dificultades en ciertas funciones del organismo. VerLee (1986) ha resumido tales hallazgos en los trminos siguientes: Si bien los pacientes con lesiones en el hemisferio derecho conservan su capacidad verbal, a menudo experimentaban una extrema distorcin espacial; muchos tenan gran dificultad en encontrar los lavados (cuarto de bao) o bien

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eran incapaces de hallar la sala de estar. Les costaba vestirse solos y era frecuente que se pusieran prendas al revs o que metieran una extremidad en la manga o pierna que no le corresponda. Los dibujos tambin denotaban serios problemas con las relaciones espaciales, demostrando una gran desorganizacin y distorcin de relaciones entre diversos elementos (p. 26). Los estudios revelaron, adems, que el hemisferio derecho era superior al izquierdo en la discriminacin entre colores y formas, lo cual ocurra no slo con el campo visual sino tambin con los dems sentidos; por ejemplo, los pacientes con lesiones en el hemisferio derecho tenan dificultad para discriminar cul de dos presiones en el cuerpo era ms intensa o para saber con exactitud donde haba sido pinchados con un alfiler (discriminacin tctil). Tambin tenan problemas para familiarizarse con laberintos cuando se les vendaban los ojos (VerLee, 1986). Los hallazgos antes reportados sobre la especializacin de los hemisferios cerebrales quedaron confirmados con los resultados de las investigaciones de Roger Sperry y colaboradores (Sperry, Gazzaniga y Bogen, 1969; Sperry, Bogen y Vogel, 1970; Sperry, 1973; Gazzaniga, Bogen y Sperry, 1962, 1963, 1965, citados por Wittrock, 1977) del Instituto Tecnolgico de California, quienes en la dcada de los ao 60 disearon la tcnica de la comisuroctoma (corte del cuello calloso) y la aplicaron, por primera vez, con gatos para estudiar el funcionamiento de los dos hemisferios por separado. Los resultados de tales investigaciones le permitieron a Sperry ganar un premio Nobel de Medicina en 1981. Al aplicar la tcnica anterior con sujetos epilpticos crnicos encontraron que la comisuroctoma no alteraba la conducta de los pacientes; es decir, los sujetos mantenan su comportamiento habitual o normal. Esto se explica porque en la mayor parte de sus experiencias cotidianas, los dos hemisferios reciben el mismo tipo de informacin. Sin embargo, cuando los investigadores manipularon la presentacin de informacin de modo que esta llegase slo a un hemisferio, fue cuando se pudo explorar la diferencia en el funcionamiento de los dos lados del cerebro. Los resultados de estas investigaciones permitieron conocer muchos aspectos relacionados con el control de la conducta, por ejemplo, que el lado izquierdo del cuerpo est controlado principalmente por el hemisferio derecho, y que el lado derecho est controlado, sobre todo, por el izquierdo. Por consiguiente, los estmulos a partir de la mano, la pierna y el odo derecho son procesados primordialmente por el hemisferio izquierdo y viceversa. No obstante, los estmulos visuales son procesados simultneamente por los dos hemisferios, ya que cada ojo enva informacin a ambos lados del cerebro. Otras investigaciones (Ver Gazzaniga, Bogen y Sperry, 1962, citado por Wittrock, 1977) estuvieron orientadas a determinar el intercambio de informacin entre los dos hemisferios. El primer resultado importante fue que tal intercambio quedaba completamente interrumpido una vez efectuada la comisurocto-

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ma. Sin embargo, se encontr que la informacin sensorial (visual, tctil, auditiva, olfativa) presentada a un hemisferio poda ser procesada en esa mitad del cerebro, aun cuando cada uno de tales procesos fueron realizados fuera del campo consciente del otro lado del cerebro. Esta observacin confirm los resultados preliminares obtenidos con sujetos animales por Sperry y Col (1962, citado por Wittrock, 1977), pero estos resultados fueron ms dramticos, puesto que es en el hemisferio izquierdo donde normalmente se procesa el lenguaje natural y los mecanismos del discurso. Todos los procesos que se llevan a cabo en este hemisferio pueden ser en forma verbal fcilmente descritos por los pacientes; mientras que la informacin presentada al hemisferio derecho es indescriptible. En consecuencia, fue slo a travs del uso de tcnicas especiales de evaluacin desarrollados por estos investigadores con tal propsito, que se pudo describir que el hemisferio derecho tiene una rica e independiente vida mental y que es capaz de experienciar la mayora de las actividades mentales que desarrolla el lado izquierdo del cerebro (Gazzaniga, 1977). En uno de los experimentos realizados con personas sanas se proyect la palabra "Spoon" (cuchara) en el campo visual izquierdo (hemisferio derecho); y cuando se le pregunt al sujeto qu estaba viendo, no pudo responder. Sin embargo, usando la mano izquierda, l fue capaz de identificar el objeto con referencia ("Spoon") dentro de un grupo constituido por diferentes elementos, sin necesidad de ver dichos elementos, simplemente fue capaz de reconocer la forma del objeto a travs de la sensacin tctil. No obstante, cuando se le pregunt qu objeto tena en la mano, su respuesta fue: "no lo s", lo cual llevo a la conclusin de que el hemisferio derecho si bien es capaz de reconocer una palabra, en este caso el trmino "cuchara" y de encontrar una cuchara real, pero no es capaz de describir su funcionamiento con palabras. Los resultados del experimento anterior apoyan el modelo de funcionamiento hemisfrico sugerido por los estudios de pacientes con lesiones cerebrales. La mano derecha comunica con el hemisferio izquierdo verbal, y as el sujeto puede describir verbalmente su contenido. La mano izquierda comunica con el hemisferio derecho, pero puesto que la capacidad verbal de ste es limitada, el sujeto no puede dar una respuesta verbal. Ello pone en evidencia que la falta de una respuesta verbal no indica una carencia de conocimientos sino tan slo una dificultad para expresar dicho conocimiento verbalmente. Estos resultados sugieren que mientras el hemisferio izquierdo presenta una mayor capacidad para procesar informar verbal que el hemisferio derecho, ste es superior al primero en el manejo de las relaciones espaciales. En resumen, se podra decir que a travs de las investigaciones en el rea de la neurociencia se ha podido establecer que muchas de las habilidades mentales especficas son lateralizadas; es decir, son llevadas a cabo, son apoyadas y coordinadas en uno u otro de los dos hemisferios cerebrales. As tenemos que

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la capacidad de hablar, escribir, leer y de razonar con nmeros es fundamentalmente una responsabilidad del hemisferio izquierdo en muchas personas. Mientras que la capacidad para percibir y orientarse en el espacio, trabajar con tareas de geometra, elaboracin de mapas mentales y la habilidad para rotar mentalmente formas o figuras son ejecutadas predominantemente por el hemisferio derecho. La diferencia de procesamiento de los dos hemisferios puede ser establecida de la manera siguiente: por una parte, el hemisferio izquierdo procesa secuencialmente, paso a paso. Este proceso lineal es temporal, en el sentido de reconocer que un estmulo viene antes que otro. La percepcin y la generacin verbales dependen del conocimiento del orden o secuencia en el que se producen los sonidos. Este tipo de proceso se basa en la operacin de anlisis. Es decir, en la capacidad para discriminar las caractersticas relevantes, para reducir un todo a sus partes significativas. El hemisferio derecho, por otra parte, parece especializado en el proceso simultneo o de proceso en paralelo; es decir, no pasa de una caracterstica a otra, sino que busca pautas y gestalts. Integra partes componentes y las organiza en un todo. Se interesa por las relaciones. Este mtodo de procesar tiene plena eficiencia para la mayora de las tareas visuales y espaciales y para reconocer melodas musicales, puesto que estas tareas requieren que la mente construya una sensacin del todo al percibir una pauta en estmulos visuales y auditivos. De acuerdo con VerLee (1986), lo que fundamentalmente diferencia a los dos hemisferios cerebrales, en cuanto a las funciones que realizan, es su estilo de procesamiento de informacin. En este sentido, ella aclara que el hecho de que el estilo de procesamiento del hemisferio izquierdo sea ms eficiente cuando trata de un tipo de informacin temporalmente organizada, como el lenguaje, no significa que el lenguaje este situado en el lado izquierdo del cerebro. De la misma manera seala que el pensamiento visoespacial no radica en el hemisferio derecho, sino que ste se especializa en una modalidad de proceso que percibe y construye pautas; en consecuencia, es ms eficiente en las tareas visoespaciales. La Teora del Cerebro Triuno La teora del cerebro triuno propuesta por MacLean (1978, 1990) presenta otra visin del funcionamiento del cerebro humano y sus implicaciones para la educacin. Sin embargo, esta conceptualizacin no es opuesta a la de la dominacin cerebral; por el contrario, la complementa y ampla. Esta teora ha sido desarrollada a partir de estudios fisiolgicos realizados con animales. MacLean considera que el cerebro humano est formado por tres cerebros integrados en uno. Estos cerebros son: (a) el reptiliano; (b) el sistema lmbico; y (c) la neocor-

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teza. Cada una de estas reas del cerebro ejerce diferentes funciones que, en ltima instancia, son responsables por la conducta humana. El Cerebro Reptiliano Esta parte del cerebro est formada por los ganglios basales, el tallo cerebral y el sistema reticular. Es el responsable de la conducta automtica o programada, tales como las que se refieren a la preservacin de la especie y a los cambios fisiolgicos necesarios para la sobrevivencia. Algunas veces, es denominado complejo reptiliano porque es tpico de los reptiles y tiene un papel muy importante en el control de la vida instintiva. En consecuencia, este cerebro no est en capacidad de pensar, ni de sentir; su funcin es la de actuar, cuando el estado del organismo as lo demanda. Desde un punto de vista evolutivo, el cerebro reptiliano es el ms primario y est muy relacionado con la piel y con los poros. Esta rea del cerebro controla las necesidades bsicas y la reaccin de "luchar o volar", la cual se refiere a los cambios en el funcionamiento fisiolgico que acompaan al estrs o a la amenaza. El complejo reptiliano, en lo seres humanos, incluye conductas que se asemejan a los rituales animales como el anidarse o aparearse. La conducta animal est en gran medida controlada por esta rea del cerebro. Se trata de un tipo de conducta instintiva programada y poderosa y, por lo tanto, es muy resistente al cambio. En el cerebro reptiliano se procesan las experiencias primarias, noverbales, de aceptacin o rechazo. Aqu se organizan y procesan las funciones que tienen que ver con el hacer y el actuar, lo cual incluye: las rutinas, los valores, los hbitos, la territorialidad, el espacio vital, condicionamiento, adicciones, rituales, ritmos, imitaciones, inhibiciones y seguridad. En sntesis, este cerebro se caracteriza por la accin. El Sistema Lmbico De acuerdo con Maclean, el segundo cerebro est representado por el sistema lmbico, cuya funcin principal es la de controlar la vida emotiva, lo cual incluye los sentimientos, el sexo, la regulacin endocrina, el dolor y el placer. Anatmicamente est formado pro los bulbos olfatorios, el tlamo (placerdolor), las amgdalas (nutricin, oralidad, proteccin, hostilidad), el ncleo hipotalmico (cuidado de los otros, caractersticas de los mamferos), el hipocampo (memoria de largo plazoz), el rea septal (sexualidad) y la pituitaria (directora del sistema bioqumico del organismo). Puede ser considerado como el cerebro afectivo, el que energiza la conducta para el logro de las metas. El desbalance de dicho sistema conduce a estados agresivos, depresiones severas y prdida de la memoria, entre otras enfermedades. La investigacin en esta rea parece apoyar la nocin de que toda la informacin que penetra al organismo es supervisada y controlada por el sistema lm-

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bico, lo cual constituye una funcin vital para la sobrevivencia (Ver Restqak, 1984). La Neocorteza El tercer cerebro est constitutivo por la neocorteza, la cual est conformada por los dos hemisferios en donde se llevan a efecto los procesos intelectuales superiores. De all que la neocorteza se la identifique, tambin, como el cerebro que rige la vida intelectual. La neocorteza se convierte en el foco principal de atencin en las lecciones que requieren generacin o resolucin de problemas, anlisis y sntesis de informacin, del uso del razonamiento analgico y del pensamiento crtico y creativo. Las dos caractersticas bsicas de la neocorteza son: (a) la "visin", la cual se refiere al sentido de globalidad, sntesis e integracin con que acta el hemisferio derecho; y (b) el anlisis, que se refiere al estilo de procesamiento del hemisferio izquierdo, el cual hace nfasis en la relacin parte-todo, la lgica, la relacin causa-efecto, el razonamiento hipottico y en la precisin y exactitud. La Teora del Cerebro Total Herrmann (1989), basado en los estudios previos sobre la dominancia cerebral (Sperry, 1973) y en la teora del cerebro triuno (MacLean, 1978); as como en los resultados de sus propias investigaciones, utilizando equipos de retroalimentacin biolgica (bio-feedback) y de electroencelografa, ha replanteado el problema de la dominancia cerebral (RuizBolvar y Cols., 1994). l ha propuesto la teora del cerebro total que se expresa en un modelo que integra la neocorteza (hemisferios derecho e izquierdo) con el sistema lmbico. Concibe esta integracin como una totalidad orgnica dividida en cuatro reas o cuadrantes, a partir de cuyas interacciones se puede lograr un estudio ms amplio y completo de la operatividad del cerebro y sus implicaciones para la creatividad y el aprendizaje. Cada una de las reas cerebrales o cuadrantes realiza funciones diferenciadas. As, el lbulo superior izquierdo (Cuadrante A) se especializa en el pensamiento lgico, cualitativo, analtico, crtico, matemtico y basado en hechos concretos. Por su parte, el lbulo inferior izquierdo (Cuadrante B), se caracteriza por un estilo de pensamiento secuencial, organizado, planificado, detallado y controlado; el lbulo inferior derecho (Cuadrante C) se caracteriza por un estilo de pensamiento emocional, sensorial, humanstico, interpersonal, musical, simblico y espiritual. Finalmente, el lbulo superior derecho (Cuadrante D), se destaca por su estilo de pensamiento conceptual, holstico, integrador, global, sinttico, creativo, artstico, espacial, visual y metafrico. Las cuatro reas antes sealadas se recombinan y forman, a su vez, cuatro nuevas modalidades de pensamiento, estas son: (a) realista y del sentido comn formado por las reas A y B (hemisferio izquierdo); (b) idealista y kinestsico,

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constituido por las reas C y D (hemisferio derecho); (c) pragmtico o cerebral, conformado por los cuadrantes o reas A y D; y (d) instintivo y visceral formado por las reas B y C (sistema lmbico). Herrmann llega a la validacin de su modelo a partir del anlisis factorial de las respuestas de un cuestionario aplicado a una muestra de ms de 100. 000 ciudadanos norteamericanos. Dicho cuestionario estaba formado por temes que representaban las diferentes funciones cerebrales que tpicamente utilizan los individuos en situaciones acadmicas, laborales, de recreacin y de la vida diaria. En cada caso, se le pide al sujeto indicar su preferencia por tal o cual funcin, a objeto de identificar cul es la tendencia de su dominancia con respecto a cada cuadrante. La muestra estudiada por Herrmann indica que el 6% de los sujetos tenan una dominancia simple, es decir, su estilo de pensamiento estaba claramente enmarcado en uno de los cuatro cuadrantes; el 60% tena una dominancia doble; o sea que su estilo de pensamiento se ubica por igual en algunas de las siguientes posibles combinaciones: AB; CD; AD; AC y BC. El 30% tena dominancia triple; es decir, su estilo de pensamiento era mltiple y caa en algunas de las siguientes posibilidades: ABC; BCD; CDA y DAB; mientras que slo el 3% tena cuadruple dominancia. De acuerdo con esta estadstica, el 94% de los sujetos tena dominancia en ms de un rea de pensamiento. En una de las aplicaciones del modelo del cerebro total se ha encontrado que existe una relacin claramente definida entre el tipo de dominancia y la preferencia ocupacional. Al respecto, Herrmann ha reportado que las personas que tienen dominancia primaria en el cuadrante A, tienden a seleccionar ocupaciones tales como: ingeniero, mdico, abogado, banquero, fsico, qumico, bilogo y matemtico, entre otras. Las personas que tienen dominancia en el cuadrante B, prefieren ocupaciones tales como las de: planificador, administrador, gerente y contador. Los del cuadrante C, se ubican en ocupaciones como: maestro, comunicador social, enfermero y trabajador social; mientras que quienes tienen dominancia en el cuadrante D, se deciden ms por las siguientes ocupaciones: arquitecto, pintor, literato, compositor, diseador grfico, escultor y msico. Hasta aqu se ha presentado una descripcin breve de las caractersticas ms resaltantes de los tres modelos de funcionamiento cerebral reportados en la literatura (biohemisfrico, cerebro triuno y cerebro total). A continuacin se discutir la importancia que los hallazgos reportados en la literatura de la neurociencia tienen para la educacin. Implicaciones Educativas Lateralidad y Aprendizaje

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Uno de los aprendizajes que emergen de la presentacin anterior es que existen dos modalidades de pensamiento: una verbal y otra noverbal, representadas por los hemisferios cerebrales izquierdo y derecho respectivamente. No obstante, los sistemas educativos de la mayora de las sociedades occidentales tienden a privilegiar el desarrollo del hemisferio izquierdo. Esta tendencia puede ser claramente observada cuando se constata que las reas curriculares que tienen mayor nfasis en la escuela elemental son las de: lectura, escritura y aritmtica; dejando de esta manera la otra mitad de la potencialidad del individuo con una posibilidad de desarrollo bastante limitada, por decir lo menos. En general, la nocin de que existen dos modalidades laterizadas de pensamiento sugiere que la enseanza, ya sea a travs de conferencia o de la imitacin, afecta primariamente a uno de los dos hemisferios. Por lo tanto, el aprendizaje de cualquier rea de contenido ser ms afectivo en la medida en que se activen ambas modalidades, mediante la presentacin diversificada de dicho contenido y a travs de la utilizacin de un currculo que estimule el desarrollo de ambos hemisferios de manera balanceada. El sobrenfasis del sistema educativo en el desarrollo del rea lgicoverbal ha hecho aparecer, errneamente, a dicha rea como la determinante en el aprendizaje escolar; sin embargo, esta aparente superioridad del hemisferio izquierdo en el rea lgicoverbal, no implica necesariamente superioridad en otras reas, como la visoespacial, por ejemplo. De hecho existen individuos que, por diferentes razones, estn ms orientadas hacia un tipo de procesamiento de informacin verbal; mientras que otros son ms eficientes cuando trabajan con informacin noverbal. Estimulacin del Hemisferio Derecho Una de las enseanzas que los educadores deben aprender, de los hallazgos reportados sobre la investigacin en el rea de la neurociencia, es que la efectividad de la instruccin aumenta en la medida en que el contenido se presenta no slo en la modalidad verbal tradicional (estmulo al hemisferio izquierdo) sino tambin en la modalidad no verbal o figural (grfica, imaginal, pictrica u otra), lo cual contribuir a estimular el hemisferio derecho. Lo anterior lleva a plantear la necesidad de utilizar en el aula de clase una estrategia instruccional mixta que combine las tcnicas secuenciales, lineales, con otros enfoques que permitan a los alumnos ver pautas, hacer uso del pensamiento visual y espacial, y tratar con el todo, adems de las partes. Al respecto, se podra utilizar las siguientes estrategias de enseanza: el pensamiento visual, la fantasa, el lenguaje evocador, metfora, la experiencia directa, el aprendizaje multisensorial y la msica (ver VerLee, 1986) Cerebro Triuno y Educacin Como ya se ha sealado, MacLean (1978, 1990) en su teora del cerebro triuno interpreta el cerebro como un sistema formado por tres subsistemas: el repti-

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liano, el lmbico y la neocorteza, los cuales interaccionan permanentemente para la produccin de la conducta. Esta conceptualizacin enfatiza una visin holsticas del comportamiento en trminos de sus procesos determinantes; de all que considere que no es apropiado un estudio de dicho comportamiento a partir de los procesos parciales cognitivos o motivacionales que lo producen, sino como una totalidad. En consecuencia, comprender esta conceptualizacin del funcionamiento del cerebro tiene importantes implicaciones para la educacin, por cuanto le puede servir al docente como base terica para una interpretacin ms adecuada del proceso interactivo que ocurre en el aula de clase y para desarrollar un sistema de instruccin integrado que tome en cuenta las diferentes reas del cerebro. Para ilustrar el planteamiento anterior, Nummela y Rosengren (1986) plantean que se puede dar el caso de que un nio pudiera estar vivenciando un sentimiento de ira debido a una pelea con uno de sus compaeros, al mismo tiempo que podra estar tratando de comprender una instruccin compleja para la realizacin de una tarea. Este tipo de situacin no es nueva; sin embargo, en el pasado su tratamiento era generalmente por separado; por ejemplo, el rea afectiva era tratada independientemente de la dimensin cognitiva y viceversa. Numera y Rosengren consideran que toda nueva informacin, o aprendizaje en general, envuelve un contenido emocional o est asociado con algn contexto emocional. De all que cuando un docente quiere que un alumno aprenda algo, el sentimiento del estudiante hacia el educador, la escuela y la materia, interaccionan con su habilidad para procesar la nueva informacin. Por ejemplo, un estudiante que perciba el ambiente o clima de la clase como inseguro, hostil o amenazante, en lugar de estimulante, exitante o retador, experimentar una interferencia emocional en su intento por aprender. Por su parte, Lozanov (1978) ha sealado que existen barreras para aprender, las cuales actan como filtros emocionales que determinan la aceptacin o rechazo de la nueva informacin por parte del estudiante. Estas barreras actan como alarmas que se activan automticamente, con un propsito de autoproteccin y estn relacionadas con fuentes externas de estmulos o con los estmulos propiamente dichos. Lozanov piensa que la barrera surge cuando el estudiante percibe una falta de confianza en el docente: (a) como persona o como autoridad; (b) en cuanto a la habilidad intelectual y dominio del contenido de la leccin; o (c) en relacin con cualquiera pregunta que pueda estar reida con cuestiones religiosas o morales o con sistemas de creencias. El considera que estas barreras existen en forma permanente, tanto a nivel consciente como inconsciente, y cuando un estudiante las vivencia el foco de la atencin se desplaza desde la leccin y el profesor, hacia los sentimientos y fantasas internas. La investigacin en esta rea parece apoyar la nocin de que los sentimientos y el aprendizaje son inseparables, lo cual plantea la necesidad de que los docen-

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tes sean ms sensibles a las barreras emocionales del aula de clase que potencialmente amenaza la calidad de la instruccin. En consecuencia, los docentes deben propiciar un clima psicoafectivo agradable, armnico y emocionalmente clido que haga propicia una efectiva interaccin docente-alumnos, y alumnoalumnos. La enseanza principal que los educadores deben derivar de esta teora del cerebro triuno es la conveniencia de desarrollar estrategias instruccionales integradas, basadas en una nueva conceptualizacin del proceso de enseanzaaprendizaje, que tome en cuenta que el alumno puede vivenciar el aprendizaje a diferentes niveles al mismo tiempo, incluyendo el nivel inconsciente, y que estos procesos estn en permanente actividad; es decir, los tres cerebros (reptiliano, lmbico y neocorteza) influyen complementariamente en la efectividad del aprendizaje. Cerebro Total y Educacin Del modelo de Herrmann se pueden deducir tres implicaciones principales para la educacin. En primer lugar, el mismo podra ser utilizado como criterio para disear e instrumentar polticas de seleccin de estudiantes para la carrera de formacin docente. Ello permitira admitir alumnos mejores dotados para el estudio y desarrollo de la profesin de educador. En segundo lugar, como criterio para la administracin del currculo en la carrera de formacin docente. Esto permitira formar terica y metodolgicamente en este campo, a los estudiantes de formacin docente. En tercer lugar, como criterio para fundamentar programas de entrenamiento de docentes en servicio; de esta manera los educadores se capacitaran para orientar el diseo y la prctica instruccional, de acuerdo con los postulados de este modelo, lo cual contribuira a mejorar la calidad de la enseanza y del aprendizaje. Conclusin De la exposicin anterior se derivan dos conclusiones bsicas, ellas son: 1. La neurociencia constituye un nuevo paradigma que permite analizar y explicar el comportamiento humano inteligente, desde tres perspectivas tericas diferentes, pero que, al mismo tiempo, son complementarias. La caracterstica ms destacada en cada uno de los modelos presentados es la holonoma. Esta condicin se expresa en el mecanismo de funcionamiento del cerebro en el cual relaciona las partes con el todo; es decir, existen hemisferios, reas o cuadrantes que cumplen funciones especficas, que caracterizan el comportamiento humano, pero ste, a su vez, requiere de todo el cerebro, para operar de manera ptima. 2. Los hallazgos de la neurociencia tienen implicaciones para la teora y la prctica educativa. En el rimer caso, al ofrecer explicaciones novedosas que permi-

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ten profundizar en el conocimiento acerca de las condiciones bajo las cuales el aprendizaje puede ser ms efectivo. Desde el punto de vista de la prctica educativa, porque permitira fundamentar el diseo de estrategias instruccionales no convencionales dirigidas a atender las diferentes dimensiones y el desarrollo de la creatividad.

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CAPTULO 7
Estilos de Aprendizaje: El Modelo de los Hemisferios Cerebrales

Pablo Cazau
Aprender no consiste en almacenar datos aislados. El cerebro humano se caracteriza por su capacidad de relacionar y asociar la gran cantidad de informacin que recibe continuamente y buscar pautas y crear esquemas que nos permitan entender el mundo que nos rodea. Pero no todos seguimos el mismo procedimiento, y la manera en que organicemos esa informacin afectar a nuestro estilo de aprendizaje. Cada hemisferio procesa la informacin que recibe de distinta manera, es decir, hay distintas formas de pensamiento asociadas con cada hemisferio. Segn como organicemos la informacin recibida, podemos distinguir entre alumnos hemisferio derecho y alumnos hemisferio izquierdo. El hemisferio lgico, normalmente el izquierdo, procesa la informacin de manera secuencial y lineal. El hemisferio lgico forma la imagen del todo a partir de las partes y es el que se ocupa de analizar los detalles. El hemisferio lgico piensa en palabras y en nmeros, es decir contiene la capacidad para la matemtica y para leer y escribir. Este hemisferio emplea un estilo de pensamiento convergente obteniendo nueva informacin al usar datos ya disponibles, formando nuevas ideas o datos convencionalmente aceptables. El hemisferio holstico, normalmente el derecho, procesa la informacin de manera global, partiendo del todo para entender las distintas partes que componen ese todo. El hemisferio holstico es intuitivo en vez de lgico, piensa en imgenes y sentimientos. Este hemisferio emplea un estilo de pensamiento divergente, creando una variedad y cantidad de ideas nuevas, ms all de los patrones convencionales. El currculum escolar toma en cuenta las habilidades de este hemisferio para los cursos de arte, msica y educacin fsica. Aunque no siempre el hemisferio lgico se corresponde con el hemisferio izquierdo ni el holstico con el derecho en un principio se pens que as era, por lo que con frecuencia se habla de alumnos hemisferio izquierdo (o alumnos analticos) y alumnos hemisferio derecho (o alumnos relajados o globales).

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Un hemisferio no es ms importante que el otro: para poder realizar cualquier tarea necesitamos usar los dos hemisferios, especialmente si es una tarea complicada. Para poder aprender bien necesitamos usar los dos hemisferios, pero la mayora de nosotros tendemos a usar uno ms que el otro, o preferimos pensar de una manera o de otra. Cada manera de pensar est asociada con distintas habilidades. El comportamiento en el aula de los alumnos variar en funcin del modo de pensamiento que prefieran. Nuestro sistema escolar tiende a privilegiar el hemisferio lgico sobre el hemisferio holstico (los currculum dan mucha importancia materias como matemtica y lengua, se privilegia la rapidez para contestar, los manuales contienen ejercicios aptos para el hemisferio lgico, etc.). Adems, muchos profesores tuvieron xito personal con un estilo verbal, secuencial y lgico, y asumen que esto funciona para todos los estudiantes. Lo que nos interesa es organizar el trabajo en el aula de tal forma que las actividades potencien la utilizacin de ambos modos de pensamiento.
Hemiferio lgico (Normalmente el izquierdo) Lgico y analtico Abstracto Secuencial (de la parte al todo) Lineal Realista Verbal Temporal Simblico Cuantitativo Lgico Escritura Smbolos Lenguaje Lectura Ortografa Oratoria Escucha Localizacin de hechos y detalles Asociaciones auditivas Procesa una cosa por vez Sabe como hacer algo Visualiza smbolos abstractos (letras, nmeros) y no tiene problemas para comprender conceptos abstractos. Hemisferio holstico (Normalmente el derecho) Holstico e intuitivo Concreto Global (del todo a la parte) Aleatorio Fantstico No verbal Atemporal Literal Cualitativo Analgico Relaciones espaciales Formas y pautas Clculos matemticos Canto y msica Sensibilidad al color Expresin artstica Creatividad Visualizacin, mira la totalidad Emociones y sentimientos Procesa todo al mismo tiempo Descubre qu puede hacerse Visualiza imgenes de objetos concretos pero no smbolos abstractos como letras o nmeros.

Modos de pensamiento

Habilidades asociadas

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Comportamiento en el aula

Verbaliza sus ideas. Aprende de la parte al todo y absorbe rpidamente los detalles, hechos y reglas. Analiza la informacin paso a paso. Quiere entender los componentes uno por uno. Les gustan las cosas bien organizadas y no se van por las ramas. Necesita orientacin clara, por escrito y especfica. Se siente incmodo con las actividades abiertas y poco estructuradas. Le preocupa el resultado final. Le gusta comprobar los ejercicios y le parece importante no equivocarse. Quiere verificar su trabajo. Lee el libro antes de ir a ver la pelcula. Su tiempo de reaccin promedio es 2 sg.

Piensa en imgenes, sonidos, sensaciones, pero no verbaliza esos pensamientos. Aprende del todo a la parte. Para entender las partes necesita partir de la imagen global. No analiza la informacin, la sintetiza. Es relacional, no le preocupan las partes en s, sino saber como encajan y se relacionan unas partes con otras. Aprende mejor con actividades abiertas, creativas y poco estructuradas. Les preocupa ms el proceso que el resultado final. No le gusta comprobar los ejercicios, alcanzan el resultado final por intuicin. Necesita imgenes, ve la pelcula antes de leer el libro. Su tiempo de reaccin promedio es 3 sg.

Material preparado por Pablo Cazau, a partir de la informacin obtenida en: Robles Ana, http://www.galeon.com/aprenderaaprender/general/indice.html Metts Ralph (1999) Teoras y ejercicios, Santiago de Chile. 1. Generalidades Basndose en los modelos de Sperry y de McLean, Ned Herrmann elabor un modelo de cerebro compuesto por cuatro cuadrantes, que resultan del entrecruzamiento de los hemisferio izquierdo y derecho del modelo Sperry, y de los cerebros lmbico y cortical del modelo McLean. Los cuatro cuadrantes representan cuatro formas distintas de operar, de pensar, de crear, de aprender y, en suma, de convivir con el mundo. Las caractersticas de estos cuatro cuadrantes son: Los cuatro cuadrantes del modelo Herrmann
Cognitivo 1 CORTICAL IZQUIERDO (CI) EL EXPERTO 4 CORTICAL DERECHO (CD) EL ESTRATEGA

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LOGICO - ANALITICO BASADO EN HECHOS CUANTITATIVO Comportamientos: Fro, distante; pocos gestos; voz elaborada; intelectualmente brillante; evala, critica; irnico; le gustan las citas; competitivo; individualista. Procesos: Anlisis; razonamiento; lgica; rigor, claridad; le gustan los modelos y las teoras; colecciona hechos; procede por hiptesis; le gusta la palabra precisa. Competencias: Abstraccin; matemtico; cuantitativo; finanzas; tcnico; resolucin de problemas. Realista 2 LIMBICO - IZQUIERDO (LI) EL ORGANIZADOR ORGANIZADO SECUENCIAL PLANEADOR DETALLADO Comportamientos: Introvertido; emotivo, controlado; minucioso, manitico; monologa; le gustan las frmulas; conservador, fiel; defiende su territorio; ligado a la experiencia, ama el poder. Procesos: Planifica; formaliza; estructura; define los procedimientos; secuencial; verificador; ritualista; metdico. Competencias: Administracin; organizacin; realizacin, puesta en marcha; conductor de hombres; orador; trabajador consagrado. Visceral

HOLISTICO - INTUITIVO INTEGRADOR SINTETIZADOR Comportamientos: Original; humor; gusto por el riesgo; espacial; simultneo; le gustan las discusiones; futurista; salta de un tema a otro; discurso brillante; independiente. Procesos: Conceptualizacin; sntesis; globalizacin; imaginacin; intuicin; visualizacin; acta por asociaciones; integra por medio de imgenes y metforas. Competencias: Creacin; innovacin; espritu de empresa; artista; investigacin; visin de futuro. Idealista 3 LIMBICO - DERECHO (LD) EL COMUNICADOR INTERPERSONAL SENTIMIENTOS ESTETICO EMOCIONAL Comportamientos: Extravertido; emotivo; espontneo; gesticulador; ldico; hablador; idealista, espiritual; busca aquiescencia; reacciona mal a las crticas. Procesos: Integra por la experiencia; se mueve por el principio del placer; fuerte implicacin afectiva; trabaja con sentimientos; escucha, pregunta; necesidad de compartir; necesidad de armona; evala los comportamientos. Competencias: Relacional; contactos humanos; dilogo; enseanza; trabajo en equipo; expresin oral y escrita.

Cuadro preparado en base a:

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Folino Juan Carlos, El modelo Ned Herrmann, Revista Prensa Psicolgica, Buenos Aires Setiembre 1994, pgs. 27-28. Chalvin Marie Joseph, Los dos cerebros en el aula, TEA Ediciones, Madrid, 1995, pg. 78. 2. El modelo Herrmann en el aula Los siguientes esquemas sintetizan algunos aspectos del modelo Herrmann tiles para considerar en la actividad docente. Fueron resumidos y reorganizados a partir de la informacin obtenida en el texto de Chalvin. CARACTERISTICAS DE DOCENTES Y ALUMNOS SEGUN CADA CUADRANTE
DOCENTE Estilo Profundiza en su asignatura, acumula el saber necesario, demuestra las hiptesis e insiste en la prueba. Le molesta la imprecisin, y da gran importancia a la palabra correcta. ALUMNO Estilo Le gustan las clases slidas, argumentadas, apoyadas en los hechos y las pruebas. Va a clase a aprender, tomar apuntes, avanzar en el programa para conocerlo bien al final del curso. Es buen alumno a condicin de que se le de 'materia'. Metdico, organizado, y frecuentemente meticuloso; lo desborda la toma de apuntes porque intenta ser claro y limpio. Llega a copiar de nuevo un cuaderno o una leccin por encontrarlo confuso o sucio. Le gusta que la clase se desarrolle segn una liturgia conocida y rutinaria.

Cortical Izquierdo Tienen necesidad de hechos. Dan prioridad al contenido.

Lmbico Izquierdo Se atienen a la forma y a la organizacin

Prepara una clase muy estructurada, un plan sin fisuras donde el punto II va detrs del I. Presenta el programa previsto sin disgresiones y lo termina en el tiempo previsto. Sabe acelerar en un punto preciso para evitar ser tomado por sorpresa y no terminar el programa. Da ms importancia a la forma que al fondo.

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Lmbico Derecho Se atienen a la comunicacin y a la relacin. Funcionan por sentimiento e instinto. Aprecian las pequeas astucias de la pedagoga.

Cortical Derecho Necesitan apertura y visin de futuro a largo plazo.

Se inquieta por los conocimientos que debe impartir y por la forma en que sern recibidos. Cuando piensa que la clase no est preparada para asimilar una leccin dura, pone en marcha un juego, debate o trabajo en equipo que permitirn aprender con buen humor. Pregunta de vez en cuando si las cosas van o no van. Se ingenia para establecer un buen ambiente en la clase. Presenta su clase avanzando globalmente; se sale a menudo del mbito de sta para avanzar en alguna nocin. Tiene inspiracin, le gusta filosofar y a veces levanta vuela lejos de la escuela. Con l parece que las paredes de la clase se derrumban. Se siente con frecuencia oprimido y encerrado si tiene que repetir la misma leccin. Modos de evaluacin Una nota global en cifras.- Da una evaluacin cuantificada, una nota media precisa que destaca ante todo las capacidades del alumno. Insiste en el saber, la potencia del razonamiento y el espritu crtico.

Trabaja si el profesor es de su gusto; se bloquea y despista fcilmente si no se consideran sus progresos o dificultades. No soporta crticas severas. Le gustan algunas materias, detesta otras y lo demuestra. Aprecia las salidas, videos, juegos y todo aquello que no se parezca a una clase. Es intuitivo y animoso. Toma pocas notas porque sabe seleccionar lo esencial. A veces impresiona como un soador, o de estar desconectado, pero otras sorprende con observaciones inesperadas y proyectos originales.

Cortical quierdo

Iz-

Lmbico quierdo

Iz-

Notas para cada criterio.- Da ms importancia al saber hacer que al contenido; las capacidades de realizacin y de iniciar la accin tienen mucha importancia. Insiste en la presentacin y la limpieza. Pone notas precisas y no duda en calificar con cero los ejercicios

Tipos de aprendizaje La teora.- Tiene dificultades para integrar conocimientos a partir de experiencias informales. Prefiere conocer la teora, comprender la ley, el funcionamiento de las cosas antes de pasar a la experimentacin. Una buena explicacin terica, abstracta, acompaada por un esquema tcnico, son para l previos a cualquier adquisicin slida. La estructura.- Le gustan los avances planificados. No soporta la mala organizacin ni los errores del profesor. No es capaz de reflexionar y tomar impulso para escuchar cuando la fotocopia es de mala calidad o la escritura difcil de descifrar.

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originales o fantsticos. Valora el trabajo y la disciplina. Pone con frecuencia malas notas a los alumnos relajados y despreocupados. La apreciacin ante todo.- Pone notas de manera aproximativa. Se adapta a la costumbre de evaluar con nmeros, pero esas notas tienen menos importancia que la evaluacin escrita en su boletn (frecuentemente circunstancial). Insiste mucho en el saber estar, la integracin del alumno en el grupo y sus intervenciones orales. Anota los progresos, incluso los nfimos, y para sealarlos puede subir algo la nota.

Lmbico Derecho

Cortical Derecho

Ms importancia a la imaginacin.- Es aproximativo. Se siente atado por la evaluacin escrita, que congela al alumno en un momento dado en un ejercicio preciso e impide que se le aprecie en su globalidad con todo el potencial que se puede adivinar. Es posible que sobrevalore los trabajos que demuestren originalidad e imaginacin. Por el contrario, es duro con las lecciones carentes de ingenio.

Es incapaz de tomar apuntes sino hay un plan estructurado y se siente inseguro si una b) va detrs de un 1). Necesita una clase estructurada para integrar conocimientos y tener el nimo disponible para ello. Compartir.- Necesita compartir lo que oye para verificar que ha comprendido la leccin. Dialoga con su entorno. En el mejor de los casos, levanta el dedo y pregunta al profesor volviendo a formular las preguntas (o haciendo que el propio profesor las formule). Suele pedir informacin a su compaero para asegurarse que l tambin comprendi lo mismo. Si se le llama al orden se excusa, y balbucea: Estaba hablando de la leccin, lo cual es cierto pero, aunque a l le permite aprender, perturba la clase. Las ideas.- Se moviliza y adquiere conocimientos seleccionando las ideas que emergen del ritmo montono de la clase. Aprecia ante todo la originalidad, la novedad y los conceptos que hacen pensar. Le gustan en particular los plnateamientos experimentales que dan prioridad a la intuicin y que implican la bsqueda de ideas para llegar a un resultado.

VENTAJAS Y DESVENTAJAS DE LOS TIPOS DE PEDAGOGIA


VENTAJAS CORTICAL IZQUIERDO Riguroso. Fiable. Preciso. Claro. Estable. Pertinente. Competente. Profesional. Creble. Se apoya en los hechos (rechaza lo arbitrario). Da pruebas. Analiza los proceDESVENTAJAS Seco. Falto de contacto y de fantasa. Despreciativo. Suficiente. Intolerante con las preguntas 'estpidas' (y tambin cuando no comprende cmo funcionan

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sos utilizados. Avanza de forma lineal. Se expresa por escrito concisamente. Permite reproducir fcilmente los ejercicios. Directivo. Objetivo: se basa en hechos. Espritu crtico. Exigente. Encuentra el placer intelectual y lo comunica. Utiliza bien el material. Conoce las referencias, las experiencias, los resultados: los dems se dirigen a l cuando no saben algo. Saben guardar distancia frente a las manifestaciones afectivas. Estimula a los alumnos mediante una sana competencia. Gana con el trato.

los otros). Muy exigente. Lenguaje hermtico. Abstracto. Muy directivo. Ironiza, critica, lanza indirectas. Se molesta por las intervenciones de tipo 'parsito' y por las disgresiones. Se desestabiliza por las preguntas que no conoce. Bloquea la expresin espontnea. Destroza lo imaginario y la creatividad. Se interesa por los primeros de la clase. Provoca la pasividad en los otros. Selectivo, no saca a la pizarra a los flojos. Le cuesta trabajo entender que alguien no comprenda. No repite: cree que es evidente. No encuentra palabras para explicar algo de otra forma. No tiene en cuenta las exigencias de trabajo de otras disciplinas. Insiste en aprobar un alumno porque es bueno, a pesar de las protestas de sus colegas. Gasta siempre las mismas bromas. No cambia casi nada. Escolar. Da mucha importancia al horario. Rutinario (propone siempre las mismas elecciones). Quisquilloso en la presentacin de trabajos y carpetas. Manitico. Montono, pesado. Regulador (le gustan las frmulas). Autoritario. Impone su forma de pensar: 'o se dobla o se rompe'. Falta de apertura. Violento, reconcentrado, aterroriza a algunos alumnos. Dirigente, desptico, Le gusta el poder y puede abusar de l. Conservador. No se entrega. No le gusta el cambio, la innovacin ni la sorpresa. Se desconcierta con la originalidad. Corta la inspiracin. Bloquea la curiosidad de los alumnos. Provoca pasividad. Coloca etiquetas a los alumnos. Le gusta el papeleo. Defiende su territorio su clase, su armario, su aula. Toma ideas de los otros y las aplica. Le atraen poco las nuevas pedagogas. Trabaja en equipo si est de acuerdo con los mtodos y si se es eficaz y puntual. Carece fundamentalmente de seguridad. Demasiado paternalista. Establece una

LIMBICO IZQUIERDO Concienzudo (minucioso). Puntual. Prudente (con los proyectos aventurados). Metdico. Cumplidor. Objetivo (no tiene preferidos). Eficaz. Seguro (con l se sabe a dnde se va). Tiene sangre fra. Sabe dominarse. Capaz de controlarse. Crea ambientes tranquilizadores. Da seguridad. Pone 'parapetos' para evitar las cadas. Dirige su clase. Tiene pocos problemas de disciplina. Da normas para la vida. Termina su programa. Planifica su ao escolar. Gestiona bien su tiempo. Da instrucciones claras. Presenta documentos bonitos. Comprueba los cuadernos o las agendas. poniendo de manifiesto las omisiones. Realiza evaluaciones con regularidad. Organiza viajes y visitas, se encarga de la administracin. Metido en su molde. Bien considerado por su eficacia, puntualidad y asiduidad. Toma posesin del territorio: personaliza y decora su clase.

LIMBICO DERECHO Clido. Humano. Vivo. Ldico. Entusiasta.

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Establece buenos contactos. Mediador. Negociador. Disponible. Escucha a los otros. Comprensivo. Generoso. Gratificante. Sabe apoyarse en las cualidades de los otros. Tiene sentido del dilogo. Hace que los alumnos se atrevan a hablar. Establece un clima de confianza. Favorece el entendimiento y la armona en clase. Le gusta trabajar en equipo. Favorece la interdisciplinariedad. Sabe adaptarse al grupo-clase. Sabe presentar un trabajo difcil. Establece una pedagoga del estmulo. Recupera al 'calamidad'. Suscita vocaciones. Hace una evaluacin ms formativa que sumativa. Acepta ser desmitificado. Hace saber su estado de nimo. Tiene estallidos saludables. Desdramatiza las situaciones.

dependencia afectiva. Tiene preferidos y cabezas de turco. Susceptible. Verstil, inconstante, luntico. Se deja 'invadir' por los alumnos. Subjetivo, parcial. Pesado, invasor. Gesticula mucho, cansa. Inquisidor (quiere conocer la vida privada). Moralizador. Charlatn, redundante. Farsante (comediante). Demagogo. Incapaz de expresar un rechazo. No se atreve a criticar. Seleccionado para el puesto de otros. No hace ms que lo que le gusta. No termina sus clases (desbordado). Pierde el tiempo. Arrastra su programa. No soporta las clases silenciosas. Cuenta su vida. Demasiado camarada. Tiene berrinches. Provoca psicodramas. Interviene durante los exmenes (desconcentra a los alumnos). No puede reproducir la misma leccin dos veces. Tiene demasiada preferencia por la evaluacin oral. Hace ms observaciones sobre el comportamiento que sobre los conocimientos. Perturbador. Desconcertante. Desorienta. Falta de rigor y anlisis. Falta de plan y estructura. Se dispersa. Embarullado y desordenado. Falta de precisin. Falta de indicaciones para facilitar la comprensin. Salta de un tema a otro. Procede por asociacin (no por sucesin de ideas). Se sale del tema. Hace disgresiones. Da informaciones vagas e insuficientes. Demasiado general. Se aleja, se distrae. Pierde el sentido de lo concreto. Impone sus imgenes sin ligarlas con la nocin que se quiere ilustrar. Ambiguo: expone una cosa y lo contrario de esta sin dar una eleccin final. Produce inseguridad. No cuantifica la evaluacin. Deja a los alumnos la responsabilidad de s msmos. Deja que los alumnos estructuren el curso, se dirige a los ms favorecidos (los que tienen ya una buena estructuracin). Se le quiere o se le rechaza. Se le adora o se le detesta. Tiene proyectos muy ambiciosos. Corta la palabra a

CORTICAL DERECHO Imaginativo. Creativo. Innovador. Lleno de ideas y proyectos. Propone novedades pedaggicas. Original. Caprichoso (poco realista). Humor cido. Estimulante. Con sentido artstico y esttico, organiza sesiones de diapositivas y talleres. Globaliza y sintetiza. Va directo a lo esencial. Se fija objetivos a largo plazo. Abierto al mundo, favorece la apertura. Sobrepasa los lmites de la clase. Trabaja sobre un tema en conexin con los profesores de disciplinas diferentes. Tiene chispa (pensamientos rpidos). Trabaja deprisa. Visionario: hace pronsticos buenos sobre el porvenir de un alumno. Renueva sus clases. Transmite las cosas con imgenes. Propone ejemplos concretos que se recuerdan. Posee el arte de dar rodeos. Favorece la experimentacin en detrimento de la teora. Crea una estructura flexible, un espacio de tolerancia. Puede cautivar a los alumnos. Impulsa las motivaciones para realizar investigaciones y abrirse al mundo: lecturas, excursio-

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nes, visitas. Termina su programa.

los alumnos en cuanto sabe qu preguntarn. Comprueba poco lo que han aprendido.

CURSOS DE ACCION SEGUN CADA TIPO DE PEDAGOGIA


TIPO DE PEDAGOGIA CORTICAL IZQUIERDO Una pedagoga basada en los hechos, la teora y la lgica. El CI es considerado es ms profesional y el ms competente, el que posee el saber y la tcnica. Puede, no obstante, resultar difcil de comprender porque usa la jerga sin aclaraciones, pone el listn muy alto y trabaja sobre todo para los que estn a la cabeza de la clase. QUE HACER EN CLASE? TRABAJAR EN EL COMPORTAMIENTO Establecer un clima ms clido en la convivencia. Sonrer a los alumnos en clase. Valorar a los alumnos. Tener en cuenta la afectividad. Hacer ms gestos. Ser ms tolerante frente a las diferencias: hacer autocrtica. Aceptar el trabajo en equipo: escuchar, tener en cuenta la opinin de los otros. MEJORAR LA PEDAGOGIA No ser polismico. Definir y precisar las palabras y su sentido. Escribir la programacin en la pizarra. Recordar, de vez en cuando, la situacin de la asignatura en el conjunto del curso. Presentar esquemas y cuadros no demasiado abstractos, pensar en una representacin grfica clara. Proponer ejemplos concretos. Comprender que los otros no entiendan algo, hacer que lo formule un alumno distinto. Interesarse por todos los alumnos. alir de su 'coraza de sabidura'. Tener en cuenta la originalidad y la intuicin de los alumnos en los criterios de evaluacin. PENSAR EN EL DESARROLLO PERSONAL Practicar actividades artsticas para desarrollar su imaginacin y mejorar su distensin. Leer libros humorsticos. Hacer un cursillo sobre la risa. Practicar deportes colectivos para ser menos individualista. TRABAJAR EN EL COMPORTAMIENTO Ser menos autoritario, menos directivo, ms flexible. Adquirir un poco de tranquilidad y frescura. Abrirse al dilogo con los alumnos. Favorecer la participacin. No monopolizar la palabra. Dar instrucciones menos estereotipadas. Ser ms abierto. Dar confianza: ser menos desafiante, ms optimista. Desarrollar la fantasa, el humor, el empleo de metforas. Desarrollar su espritu crtico. Tener una visin ms global. Sonrer con ms frecuencia. MEJORAR LA PEDAGOGIA Atenerse al fondo ms que a la forma. Distinguir el objetivo final y recodrselo a los alumnos. Diversificar su pedagoga y sus ejercicios. Hacer sntesis. Renovar las lecciones, innovar, crear y favorecer la creacin.

LIMBICO IZQUIERDO Una pedagoga basada en la estructura, el mtodo, la seguridad. El LI es el educador ms apreciado por sus superiores. Puntual, apegado a las formas, termina su programa; su aspecto metdico y estructurado responde perfectamente a los requerimientos de los supervisores. Sin embargo, es rutinario y poco innovador, y

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eliminar cualquier veleidad de autonoma en los alumnos. Se percata de que estos quieren seguridad, gua y encuadre para sentirse tranquilos.

LIMBICO DERECHO Una pedagoga basada en el dilogo, la participacin, la escucha. El LD es con frecuencia percibido como charlatn, afectivo, desorganizado y demasiado espontneo. No obstante es el que se implica ms profundamente en su trabajo. Se emplea a fondo personalmente, estimula a sus alumnos y al equipo de educadores, practica la escucha y el dilogo, teniendo en cuenta las dificultades de cada uno. Suele sentirse decepcionado con los resultados, pues recibe pocas gratificaciones y cree que no se le reconocen sus cualidades. En algn caso, crea una atmsfera agobiante y se ve menospreciado por los que le rodean, que abusan de su cortesa.

CORTICAL DERECHO Una pedagoga basada en la imaginacin, la apertura, la innovacin. El CD pone en marcha una pedagoga innovadora e imaginativa, original y abier-

Fromular preguntas abiertas, ejercicios con varias soluciones. Trabajar ms en equipo sobre temas concretos. Dejar iniciativas a los alumnos. Practicar una pedagoga de convenio. Desarrollar las cuestiones que favorecen la invencin y la globalizacin. Observar cmo trabajan los dems colegas. PENSAR EN EL DESARROLLO PERSONAL Hacer yoga o teatro. Trabajar su voz para dominar su miedo a los alumnos. TRABAJAR EN EL COMPORTAMIENTO Controlar su verborrea: hacer pausas, aprender a estar en silencio. Obligarse a dejar de decir algo que tiene ganas. Reflexionar antes de hablar. Hablar ms despacio. Culpabilizar menos, si algo no marcha bien. Ser menos perfeccionista. Ser ms independiente de sus alumnos. Evitar que sus afinalidades sean evidentes para los alumnos. No dejarse 'fagocitar'. Aceptar verse en video o dar clase ante un colega. Evitar las frases que comiencen con yo... . MEJORAR LA PEDAGOGIA Estructurar el curso. Ser ms pragmtico y organizado. Preparar las clases minuciosamente, sobre todo los soportes (material). Organizar su tiempo para tratar todo lo previsto. Estructurar su pizarra. Establecer una forma de avanzar anual con calendario. No elaborar con demasiada frecuencia clases 'por gusto'. Trabajar menos con los sentimientos. Esperar menos la aprobacin de los alumnos. No perder la estabilidad ante una pregunta. No perder la motivacin ante una clase con la que no se entiende. Obligarse a seguir un modelo. Utilizar parrillas de evaluacin, inventarlas. Ser objetivo para evitar sobrevalorar los progresos nfimos. Preparar las parrillas con notas codificadas. Adoptar un mtodo para triunfar en el trabajo en equipo (slo para reflexionar). PENSAR EN EL DESARROLLO PERSONAL Hacer yoga para dominar su sensibilidad. Mejorar la concentracin. Practicar artes marciales, teatro de improvisacin. Pensar en s msmo (Montaigne). TRABAJAR EN EL COMPORTAMIENTO Trabajar con un reloj. Aceptar las limitaciones horarias. Llevar una agenda anotando las fechas de reunin. Tener redactadas las lecciones, libros como soporte de trabajo para los alumnos. Hacerse instalar un armario en la clase. Luchar contra las distracciones: tener sus llaves, nmero de aula, etc. Escuchar a los alumnos. Ejercitarse para responder puntualmente a las pregun-

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ta al mundo y al porvenir. Estimula a sus alumnos porque se sale de la rutina, su lenguaje grfico ayuda a transmitir nociones abstractas, por las mismas razones que su sentido de lo concreto. Sin embargo, a causa de su vivacidad, es desestabilizador para aquellos a quienes les gusta la rutina y las clases estructuradas; su costumbre de globalizar con exceso perturba a los alumnos ms lentos. Su preferencia por la independencia de espritu y movimiento hace de l un colega sorprendente, a veces en el mal sentido de la palabra.

tas. Adaptarse a una cierta disciplina en el trabajo en equipo. MEJORAR LA PEDAGOGIA Ser ms lento en la exposicin. Ser menos concreto y globalizador. Analizar las etapas y los procesos. Ser ms riguroso. Evitar saltar de un tema a otro: restitur el eslabn que falta. Obligarse a justificar. Proporcionar pistas escritas: dictar un resumen. Escribir un programa en la pizarra (aunque no se lo pueda seguir). Realizar ms representaciones simblicas o grficas. Multiplicar las prcticas de ejercitacin. Evaluar regularmente con exmenes escritos. Corregir los trabajos sin olvidarlos ni perderlos. Dominar la tcnica. PENSAR EN EL DESARROLLO PERSONAL Hacer juegos de lgica. Hacer maquetas siguiendo las instrucciones. Hacer programaciones informticas. Hacer su presupuesto de vez en cuando.

COMUNICARSE A PESAR DE LAS DIFERENCIAS


COSTUMBRES DE CADA CUADRANTE CORTICAL IZQUIERDO Gracias a su capacidad de juicio, razonamiento y anlisis, son una ayuda preciosa para encontrar soluciones racionales a un problema difcil. Son inigualables para ordenar, reunir los hechos, discutirlos racionalmente valorar las contradicciones y medir su importancia con precisin. Son consejeros fiables, resulta agradable conseguir su ayuda y opinin. No se comunican fcilmente con los dems y son difciles de abordar porque son distrados, seguros de s msmos e intimidantes. Se querra que fuesen ms expresivos, menos sistemticos y ms atentos con los dems. Su lenguaje, frecuentemente salpicado de trminos tcnicos o complicados, y sus referencias a COMO ABORDAR CADA CUADRANTE LO QUE SE DEBE ACEPTAR A PRIORI CON UN CI No ser demasiado exigente respecto a los cambios y al contacto humano. Aceptar su intransigencia, su aire perentorio. Estar preparado para recibir crticas sobre los puntos de la propia intervencin que parezcan ligeramente imprecisos. Esperan preguntas concretas, preparar las respuestas detalladas. No improvisar con l. No dejarse devaluar, pero pedirle ayuda para perfeccionar el propio proyecto. Le gusta que se le pida consejo. COMO ABORDAR A UN CI Expresarse sin excesos. Exponer las cosas de forma breve, precisa y clara, dando cifras y apoyndose en hechos. Aportar pruebas. Preguntar, consultar. Darle ocasin de brillar preguntndole sobre algo relacionado con su especialidad. Interrumpirle, con educacin pero con firmeza, para pedir que precise algo cuando no se comprende lo que ha dicho. Comprobar

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modelos que son autoridad (americanos, japoneses, alemanes) ponen a los dems nerviosos e inquietos. LIMBICO IZQUIERDO No tienen la facilidad de los CI en su relacin con los dems. Su emotividad controlada les da en ocasiones un aspecto un poco rgido o torpe. Esta falta de soltura provoca, a su alrededor, una inquietud en los interlocutores que se sienten incmodos e intimidados. Son reservados y pdicos y no les gustan los que tratan de inmiscurirse en su vida privada. Prudentes, se ocultan detrs de una coraza protectora, pero ganan cuando se les conoce. Si se guardan las formas, se revelan con todas sus cualidades. Los LI son resistentes, trabajadores, dotados de una capacidad de actuacin superior a la media. Son realistas, minuciosos, metdicos y organizados; evitan las situaciones arriesgadas, se toman su tiempo y tienen una notable eficacia cuando estn situados en una estructura que transmite seguridad.

LIMBICO DERECHO Son con frecuencia extravertidos. La mayor parte de ellos tienen el don del contacto y se muestran sonrientes y abiertos. Tienen una conversacin fcil y procuran establecer relaciones sencillas e ntimas, incluso en el ambiente profesional. Tienen un sentido natural para la conciliacin, por temor al conflicto. Generosos, disponibles y humanos, dan muestras de cualidades excepcionales para la comunicacin.

algunas de sus afirmaciones, despus de haberse entrevistado con l, porque a veces puede mostrar una seguridad excesiva. LO QUE SE DEBE ACEPTAR A PRIORI CON UN LI Un LI no har nada para que el otro se sienta cmodo, no hay que dudar en seguir adelante con prudencia. No se debe divagar, no aprecia ni las conversaciones de saln, ni los discursos que saltan de un tema a otro sin orden lgico ni objetivo. Hay que contar con que plantear problemas de detalle exasperantes, es verificador y quisquilloso y con frecuencia pretende buscar tres pies al gato. No transgredir el reglamento establecido, se corre el riesgo de ser llamado al orden. No tener prisa, no le gusta ser presionado y necesita tiempo de reflexin antes de decidir. COMO ABORDAR A UN LI Respetar las reglas, la jerarqua, la cortesa. Respetar sus rutinas y rituales. No ser personal: nada de cuestiones directas o indiscretas. Evitar disgustarle, es un emotivo controlado (atencin a los bloqueos y explosiones sbitas). Entregarle los escritos limpios, sin faltas ni tachones. Pedirle que critique con detalle lo que no est bien. Darle tiempo para reflexionar y pedirle otra entrevista. Pedirle consejos para la puesta en marcha y posterior ejecucin de un informe. Hacerle precisar cualquier cosa que no haya tenido en cuenta. Valorar su sentido de la organizacin y su talento como organizador. Valorar sus capacidades para seguir los asuntos en detalle hasta su puesta en marcha. LO QUE SE DEBE ACEPTAR A PRIORI CON UN LD Habr que soportar una serie de preguntas sobre la propia vida y el trabajo. Llegan a resultar indiscretos. Quien trata a un LD tiene derecho a una larga descripcin de todo lo que hace por el bien de todos, pues siempre busca la aprobacin y gratitud de los dems. Con l se tiene la impresin de perder el tiempo. Los asuntos se podran solucionar rpidamente si se abordasen sin rodeos. Quien le trata se asombrar al comprobar que no aborda realmente el fondo del problema. Con l se corre el riesgo de

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Saben escuchar y tener en cuenta los deseos personales. Estos amables personajes, sin embargo, se dejan dominar por su afectividad, es su taln de Aquiles. Se inflaman y se apasionan para defender sus valores o ideologa, carecen de calma y paciencia. Se acomplejan y retraen ante el lenguaje tcnico, parecen asustados y no osan decir que no comprenden nada. Es decir, reaccionan mal ante los reproches, porque se sitan ante todo en el plano personal. CORTICAL DERECHO Son originales e independientes y no pasan desapercibidos en su grupo. Innovadores y creativos, les gusta lo inesperado y estn siempre dispuestos a nuevas experiencias. Ante un problema, asombran por su capacidad para retener lo esencial y proponer mltiples soluciones. Algunos son extravagantes y poco realistas, pues hacen con frecuencia propuestas interesantes e innovadoras. Dotados de un humor ligero o custico, de un sentido de la paradoja y de la metfora, hacen que el ambiente en torno a ellos sea distendido y saben 'poner el dedo' en las incoherencias. Sin embargo, son desestabilizadores e insoportables, olvidan sus asuntos y citas. Llegan tarde, se muestran desenvueltos y desatentos cuando el asunto les parece demasiado prosaico. A veces son imprecisos, desordenados, sus exposiciones carecen de rigor y prefieren hacer planes fantsticos a solucionar problemas cotidianos. Los CD son los que ms sufren si tienen que estar encerrados en sus lmites, o estn obligadas a seguir instrucciones o reflexionar pausa-

verse implicado en una relacin demasiado afectiva y personalizada ( esto lo hago porque es usted... ). COMO ABORDAR A UN LD Aceptando perder el tiempo para poder ganarlo. Abordndole con una sonrisa y expresin franca. Hablndole de su vida personal y sus problemas. Dejndole expresarse. Aceptando escucharle. Teniendo con l pequeas atenciones. Siendo muy concreto. Valorando su preocupacin por los otros, su disponibilidad. Hacindole sentir que gusta, que resulta simptico. Mostrando agradecimiento por todo lo que hace, por su capacidad para dinamizar a la gente, por la capacidad para escuchar que demuestra. LO QUE SE DEBE ACEPTAR A PRIORI CON UN CD Hay que escucharle una serie de sueos referidos a las mltiples posibilidades que se vislumbran para realizar lo que se desea. A veces cuesta trabajo seguirle y se corre el riesgo de verse arrastrado a hablar de otra cosa. Su capacidad para hacer varias cosas al mismo tiempo puede desestabilizar y perturbar a los dems. El CD puede anotar ideas, contestar al telfono e informarse sobre lo que pretende una persona que entreabre la puerta, mientras dice: Dgame, lo escucho . Al tratar con l se corre el riesgo de quedarse atnito o perder la estabilidad por culpa del humor, las paradojas o las metforas que utiliza. Quien le trata, se siente impresionado por la riqueza de ideas que muestra, pero perplejo respecto a las posibilidades de ponerlas en prctica. COMO ABORDAR A UN CD Mostrndose jovial. Diciendo bobadas con humor. Abordarle preguntando: qu hay de nuevo? . No siendo estricto con los horarios. Dejndole hablar. Pidindole ideas para solucionar un problema, mejorar un proyecto o salirse de la rutina. Preguntndole cmo ve el porvenir respecto a un problema preocupante. Dejando vagar su pensamiento por asociaciones. Pidindole que se explique cuando salta de un tema a otro y haga perder el hilo de lo que est diciendo. Proponindoleque presente una

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damente, sin dar rienda suelta a su imaginacin y humor.

cosa y su contraria y no pedirle que se decida, se siente cmodo con las contradicciones.

QUE PEDAGOGIA USAR CON LOS ALUMNOS DE CADA CUADRANTE


QUE LE FALTA AL ALUMNO CORTICAL IZQUIERDO Es poco creativo. Le falta imaginacin. Desarrolla mal sus ideas. Tiene pocas ideas personales y no expresa su sensibilidad. Tiene pocas aptitudes para el arte. Tiene problemas con las materias literarias: expresin seca, sin emociones. Es demasiado individualista. QUE HACER CON ESTE ALUMNO Utilizar con l una pedagoga racional que de prioridad al contenido: Utilizar el libro o el manual. Terminar el programa. Proporcionar hechos. Insistir en la teora. Dar definiciones precisas. Dar referencias. Mostrar esquemas abstractos: diagramas, curvas. Dar cifras y estadsticas. Trabajar en informtica. Partir de la hiptesis, de la ley, para llegar a la experimentacin (deduccin). Procurar que haga ejercicios en progresin, yendo de lo ms sencillo a lo ms difcil, para estimular su espritu de competicin. PROCURAR QUE SE ABRA A OTROS CUADRANTES Utilizar su gusto por la competicin: cualquier idea nueva ser tomada en cuenta y aumentar su nota. Hacer que prepare trabajos orales. Hacerle intervenir ante toda la clase. Transformar los smbolos en imgenes y metforas. Ensearle a ver las cosas en su globalidad. Practicar juegos que le ayuden a desarrollar su sentido espacial. Hacer que prponga sus ideas desorganizadamente antes de organizarlas. Organizar actividades de reflexiones dirigidas, asociando en ellas ideas con imgenes. Hacer que describa una situacin con los cinco sentidos. Hacer poesas. Imaginar y crear mediante la mmica y el dibujo. Hacer que conozca el mundo por medio de visitas escolares, para desarrollar su sensibilidad artstica. QUE LE FALTA AL ALUMNO LIMBICO IZQUIERDO Le falta apertura, fantasa y visin global. No sabe qu hacer frente a un imprevisto. Le resulta difcil trabajar con medios audiovisuales. No sabe resumir un texto o una situacin. QUE HACER CON ESTE ALUMNO Uitilizar con l una pedagoga organizada, estructurada en un clima de seguridad: Escribir la programacin en la pizarra en forma clara y legible. Darle instrucciones estrictas. Proporcionarle documentos escritos impecables. Dividir la hora de clase en secuencias, indicndolo previamente. Proponerle objetivos a corto plazo bien definidos. Permitirle salirse de las normas para pasar a la experimentacin (le gustan los trabajos manuales y tiene xito en ello). Es preciso que conozca las relaciones con lo que conoce. Es necesario respetar su territorio: no excitarle pidindole algo bruscamente. PROCURAR QUE SE ABRA A OTROS CUADRANTES Elogiarle cuando tiene xito en algo. Darle confianza en s msmo. Utilizar su faceta de lder y dirigente para una buena causa. Hacer fichas de evaluacin donde perciba lo que sabe hacer y sus progresos. Desarrollar su memoria dndole reglas mnemotcnicas. Ensearle a exteriorizar y a comunicar haciendo exposiciones en tiempos delimitados y

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breves. Proporcionarle modelos para que se lance a ejercicios nuevos. Ensearle a resumir las clases: tres palabras clave y basta dos o tres puntos concretos. Ensearle a globalizar: leer un texto, dividirlo en varias partes y darles ttulos; inventar un ttulo global a partir de esos ttulos secundarios. Utilizar su sentido de la organizacin. QUE LE FALTA AL ALUMNO LIMBICO DERECHO Le falta orden, rigor, conocimientos precisos. Le falta saber escuchar (aunque sabe hacerlo si consigue dominarse). Le falta control y dominio de s msmo, organizacin, y tiene poca autonoma y perspectiva frente a la opinin de otros. QUE HACER CON ESTE ALUMNO Proporcionarle una pedagoga emotiva y concreta: Crear un ambiente clido y acogedor. Establecer un dilogo eficaz (no constante). Elogiar sus progresos, sus actitudes positivas. Partir de sus vivencias (su experiencia): lo que es, lo que hace, lo que sabe, lo que le gusta. Realizar gesto eficaces: con frecuencia el LD es un kinestsico. Dejar que decore su cuaderno, sus deberes, que personalice sus trabajos. Favorecer los trabajos en grupo canalizando las charlas sobre problemas personales. Variar los ejercicios. Jugar, moverse, aprender divirtindose: juegos, visitas, teatros, msica. Partir de imgenes y representaciones personales hasta llegar a la abstraccin. Darle responsabilidades y confiarle funciones de comunicacin y negociacin. PROCURAR QUE SE ABRA A OTROS CUADRANTES Ayudarle a organizarse, comenzar por el mantenimiento del cuaderno de programacin. Ayudarle a buscar el sentido preciso de las palabras, tener un diccionario en la clase. Leer los textos en voz alta aceptando preguntas para asegurar la comprensin. Sustitur los 'me gusta, no me gusta' por los 's, no s'. Proporcionar mtodos y comenzar por lo que sabe, para darle confianza y ponerle en condiciones de tener xito. Canalizar su espontaneidad y su impulsividad dicindole que, antes de intervenir, 'hable para sus adentros' para clasificar, escoger y organizar sus ideas. Ensearle a dominar sus emociones y a hablar de ellas. Ensearle a suprimir el 'yo' y a utilizar el 'l', es decir a tomar perspectiva respecto a sus afectos (establecer diferencia entre autor y narrador). Actuar como abogado del diablo para crear la distancia entre el yo y el otro: pros y contras. Procurar que se haga teatro de improvisacin (atenindose a unas reglas rigurosas que se imponen) para obligarle a ceirse a una ley impuesta. Utilizar sus habilidades de negociador y sus dotes para el contacto humano para convertirle en delegado de la clase. QUE LE FALTA AL ALUMNO CORTICAL DERECHO Le falta organizacin, estructura, espritu de grupo, claridad (pasa de una idea a otra), rigor, lgica y mtodo. QUE HACER CON ESTE ALUMNO Proporcionarle una pedagoga imprevisible, original, imaginativa y concreta: Proponer ejemplos concretos y visibles. Utilizar soportes visuales. Tener humor. Utilizar el mtodo experimental y emprico. Proponer clases variadas, ricas, con interrupciones grficas concretas. Permitirle ensayar con riesgo de equivocarse. Proponer juegos, obras imaginativas, teatro. Darle la posibilidad de hablar, decir aberraciones, tener ideas incongruentes al margen de las lecciones. Darle ocasin de inventar, crear, innovar sin presin. PROCURAR QUE SE ABRA A OTROS CUADRANTES Ayudarle a clasificar sus ideas, a ir ms all de sus adquisiciones. Ensearle rigor y

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mtodo a partir de diagramas que favorezcan la organizacin planificada de elementos o ideas lanzados en desorden. Cuando tenga que reflexionar sobre el contenido de una tarea, se le aconsejar que escriba todas sus ideas tal como se le ocurran en un papel y que despus las estructure, jerarquizando las respuestas y los argumentos. Pedirle que justifique sus respuestas. Desarrollar una idea justificando las etapas mencionadas. Reconstrur el camino del pensamiento que ha llevado a una respuesta espontnea. Ponerle trampas para que perciba los riesgos de la intuicin pura, sin comprobacin. Hacerle encontrar un enunciado a partir de un resultado. Pedirle que reconstruya el principio de un texto a partir de una conclusin. Hacer que complete un puzzle en tiempo limitado. Hacerle que responda a una norma dada.

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CAPTULO 8
El Proceso Creador a la Luz de la Neurociencia

Miguel Martnez Migulez


l. Orientacin Introductoria Hace unos aos, el Congreso Norteamericano emiti una Resolucin por medio de la cual design la dcada del 90 como "dcada del cerebro", y destin ms de 500 millones de dlares para el estudio de la Neurociencia durante ese ao. Las expectativas que se han formado sobre los estudios de la maquinaria neuronal son ilimitadas. Como en otro tiempo se estudiaron las aves para fabricar mquinas volantes y los peces para hacer submarinos, ahora se trata de arrancarle los secretos a la dinmica cerebral para sustituir al hombre por mquinas pensantes que lo imiten y, si es posible, lo superen en el nivel de eficacia de las decisiones a tomar. No podemos formarnos una idea exacta del futuro promisor que pueden tener los estudios de la Neurociencia. Quiz, no mucho ms precisa de la que se podran haber formado los caverncolas sobre nuestra civilizacin actual. En esta conferencia, nos preguntamos hasta qu punto los estudios actuales sobre Neurociencia iluminan el proceso creador. Es decir, qu aportes nos ofrecen la neurofisiologa, la neuroqumica, la neurociruga, la neurofarmacologa y la neuropsicologa en la comprensin del origen, dinmica y xito del pensamiento divergente, innovador y enriquecedor. En una palabra, nos preguntamos qu relacin directa existe entre la experiencia interna subjetiva, que es nuestra realidad primaria, y el cerebro como sede de la misma. Las neurociencias sealadas abundan en datos semi-empricos que corren el riesgo de ser poco explotados si no son ubicados en sus contextos especficos, si no se relaciona y armoniza la estructura de estos hallazgos con la estructura y funcionamiento del cerebro y si no se le hace avanzar de su estado actual de datos primarios con una organizacin estructural y sistmica, es decir, a travs de un proceso de teorizacin que los integre y le d pleno sentido. En fin de cuentas, como sola decir Einstein, la ciencia consiste en crear teoras. Por otra parte, el principo rector que nos guiar en el ordenamiento y en la expresin de estas ideas ser el principio de economa de estructuras, principio de una

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validez incuestionable en la naturaleza humana, y que pudiramos concretar ms precisamente de la manera siguiente: a cada estructura especfica del cerebro corresponde una funcin, y esta funcin ser tanto ms acabada y perfecta cuanto ms siga y respete la estructura en que se apoya. 2. Complejidad estructural y funcional. Los datos que especifican la naturaleza constitutiva del cerebro humano son todos muy sorprendentes, aparentemente increbles y casi imposibles de imaginar. Veamos slo algunos de ellos: - El cerebro tiene slo el 2% del peso del cuerpo, pero consume el 20% de su energa. - Est compuesto por unos 10 a 15 mil millones de neuronas, cada una de las cuales se interconecta con otras por un nmero de sinapsis que va de varios centenares a ms de 20.000, formando una red estructural que es unas 100 veces ms compleja que la red telefnica mundial. - Sin embargo, el tiempo de activacin entre dos sinapsis es inferior a un milisegundo (Eccles, 1973). - Una estimacin modesta de la frecuencia de impulsos entre los dos hemisferios supera los 4000 millones por segundo, 4000 Megahertz (MHz), (Eccles,1980, p. 366), cuando las computadoras ms sofisticadas se acercan ahora a los 80 100 MHz. - De esta manera, la velocidad de procesamiento de informacin del sistema nervioso no consciente supera toda posible imaginacin humana, siendo de uno a diez millones de bits (unidades de informacin) por segundo (Hainer, 1968), lo cual equivale a unas 300 pginas de lenguaje de un libro normal. - Toda experiencia sensorial, consciente o inconsciente, queda registrada en el aparato neuronal y podr ser evocada posteriormente, si se dan ciertas condiciones propicias; y algo parecido sucede con nuestro conocimiento hereditario inconsciente que constituye una base de potencialidad aun mucho mayor (Popper, 1980, p.136-7). - Parece ser que el cerebro, al igual que algunos sentidos como la vista y el odo, utilizan los principios hologrficos para almacenamiento de informacin, de modo que, registrando nicamente la pauta de difraccin de un evento, conserva la informacin de la totalidad y el aprendizaje se reduce a la organizacin jerrquica de estructuras de estructuras. Esto indicara que el cerebro sigue el sabio concepto de no poner en la cabeza nada que pueda ubicarse en una estantera. - Igualmente, la vastedad y los recursos de la mente son tan grandes que el hombre puede elegir, en un instante dado, cada una de las 1040 sentencias diferentes de que dispone una lengua culta (Polanyi, 1969, p. 151). Estos y otros datos similares nos llevan a concluir que el cerebro humano es la realidad ms compleja del universo que habitamos.

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Siguiendo el principio de economa antes citado, nos podemos preguntar qu sentido o significado tiene, o qu funcin desempea, esta asombrosa capacidad del cerebro humano que reside en su ilimitada posibilidad de memoria y en su inimaginable velocidad de procesar informacin. Nuestra respuesta es que esa dotacin gigantesca est ah, esperando que se den las condiciones apropiadas para entrar en accin. 3. reas comprometidas y reas disponibles Szentgothai (1975), basndose en extensos estudios microestructurales, ha desarrolado la idea segn la cual, tanto en la estructura como en la funcin de todas las reas de la corteza cerebral, la columna, mdulo o engrama, constituye la unidad bsica, est dispuesta verticalmente respecto a la superficie, se compone de unas 10.000 neuronas de diferentes tipos, especialmente excitadoras e inhibidoras, y toda la maquinaria neuronal de la corteza cerebral humana posee de uno a dos millones de mdulos o engramas. Se prodran comparar los mdulos a los microcircuitos integrados de la electrnica actual, aunque, siendo mucho ms complejos, tienen un sistema propio de generar energa interna, asegurando la delimitacin del entorno mediante su accin inhibidora sobre los mdulos adyacentes, de modo que cada mdulo puede actuar sobre cientos de otros, recibiendo a su vez la accin de ellos. Cada mdulo se puede tambin comparar a una estacin de radio transmisora hacia la mente y receptora de ella (Eccles, 1980, p. 538), con una disposicin funcional de excitacin e inhibicin en retroalimentacin y proalimentacin. El cerebro es un sistema abierto de sistemas abiertos cuya operacin en conjunto es inmensamente compleja y est ms all de todo lo imaginable. Penfield (1966) llama reas comprometidas a aquellas reas del crtex que desempean funciones especficas; as, las reas sensoriales y motoras estn comprometidas desde el nacimiento con esas funciones, mientras que las reas dedicadas a los procesos mentales superiores son reas no comprometidas, en el sentido de que no tienen localizacin espacial concreta, y su funcin no est determinada genticamente. Penfield hace ver que mientras la mayor parte de la corteza cerebral de los animales est comprometida con las funciones sensoriales y motoras, en el hombre sucede lo contrario: la mayor parte de su cerebro no est comprometida, sino que est disponible para la realizacin de un futuro no programado. Entre las muchas realidades importantes en el funcionamiento del cerebro, hay un hecho sumamente relevante que conviene subrayar: las vas de los rganos receptores que van al cerebro nunca son directas, sino que siempre hay conexiones sinpticas de una neurona a otra en las estaciones de rel. Una neurona slo lleva el "mensaje" de un extremo al otro de su axn. Por lo tanto, cada uno de estos estadios da cierta oportunidad de modificar la codificacin

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del "mensaje" procedente de los receptores sensoriales. Esta situacin llev a Mountcastle (1975) a afirmar: "Todos creemos vivir directamente inmersos en el mundo que nos rodea, sentir sus objetos y acontecimientos con precision y vivir en el mundo real y ordinario. Afirmo que todo eso no es ms que una ilusin perceptiva, dado que todos nosotros nos enfrentamos al mundo desde un cerebro que se halla conectado con lo que est 'ah fuera' a travs de unos cuantos millones de frgiles fibras nerviosas sensoriales. Esos son nuestros nicos canales de informacin, nuestras lneas vitales con la realidad. Estas fibras nerviosas sensoriales no son registradores de alta fidelidad, dado que acentan ciertas caractersticas del estmulo, mientras que desprecian otras. La neurona central es un contador de historias, por lo que respecta a las fibras nerviosas aferentes, y nunca resulta completamente fiable, permitiendo distorsiones de cualidad y de medida en una relacin espacial forzada aunque isomrfica entre 'fuera' y 'dentro'. La sensacin es una abstraccin, no una rplica, del mundo real". 4. Complementariedad de las estructuras cerebrales. En 1981 le fue otorgado a Roger Sperry, del Instituto Tecnolgico de California, el Premio Nbel por sus investigaciones y hallazgos en el campo de la neurociencia. Sperry, entre otras cosas, ha dicho: "Cada uno de los dos hemisferios cerebrales parece tener sus propias sensaciones, percepciones, pensamientos, sensibilidad y memoria". Y, al especificar las funciones propias de cada uno, viene a precisar, integrar y, en ciertos aspectos, a completar hallazgos de muchos otros investigadores, de extraordinarias implicaciones para la comprensin del proceso creador. El hemisferio izquierdo, que es consciente, realiza todas las funciones que requieren un pensamiento analtico, elementalista y atomista; su modo de operar es lineal, sucesivo y secuencial en el tiempo, en el sentido de que va paso a paso; recibe la informacin dato a dato, la procesa en forma lgica, discursiva, causal y sistemtica y razona verbal y matemticamente, al estilo de una computadora donde toda "decisin" depende de la anterior; su modo de pensar le permite conocer una parte a la vez, no todas ni el todo; es predominantemente simblico, abstracto y proposicional en su funcin, poseyendo una especializacin y control casi completo de la expresin del habla, la escritura, la aritmtica y el clculo, con las capacidades verbales e ideativas, semnticas, sintcticas, lgicas y numricas (Martnez, 1987). El hemisferio derecho, en cambio, que es siempre inconsciente, desarrolla todas las funciones que requieren un pensamiento o una visin intelectual sinttica y simultnea de muchas cosas a la vez. Por ello, este hemisferio est dotado de un pensamiento intuitivo que es capaz de percepciones estructurales, sincrticas, geomtricas, configuracionales o gestlticas, y puede comparar esquemas en forma no verbal, analgica, metafrica, alegrica e integral. Su manera de

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operar se debe, por consiguiente, a su capacidad de aprenhensin estereognsica del todo, a su estilo de proceder en forma holista, compleja, no lineal, tcita, simultnea y acausal. Esto le permite orientarse en el espacio y lo habilita para el pensamiento y apreciacin de formas espaciales, el reconocimiento de rostros, formas visuales e imgenes tctiles, la comprensin pictrica, la de estructuras musicales y, en general, de todo lo que requiere un pensamiento visual, imaginacin o est ligado a la apreciacin artstica (ibdem). La velocidad de trabajo y procesamiento de informacin de ambos hemisferios es totalmente diferente: mientras el sistema nervioso racional consciente (hemisferio izquierdo) procesa apenas unos 40 bits (unidades de informacin) por segundo, la plena capacidad de todo el sistema nervisoso inconsciente (asentado, en su mayor parte, en el hemisferio derecho, el cerebelo y el sistema lmbico) alcanza -como ya sealamos- de uno a diez millones de bits por segundo (Hainer, 1968). Es conveniente advertir que, de acuerdo a algunos investigadores, el 44% de las personas zurdas lateralizan algunas de estas funciones en sentido contrario al usual (Restak, 1979, p. 193), y que igualmente haran los japoneses debido a la estructura de su lengua, en que dominan las vocales, sin embargo, al ser educados en Occidente siguiran la pauta occidental (Tsunoda, 1985). John Eccles (1980), Premio Nbel por sus descubrimientos sobre transmisin neurolgica, estima que el cuerpo calloso est compuesto por unos 200 millones de fibras nerviosas que cruzan por l de un hemisferio a otro, conectando casi todas las reas corticales de un hemisferio con las reas simtricas del otro, y que, teniendo una frecuencia de unos 20 ciclos cada una, transportan una cantidad tan fantstica de trfico de impulsos en ambas direcciones que supera los 4000 millones por segundo, 4000 Megahertz. Este trfico inmenso, que conserva los dos hemisferios trabajando juntos, sugiere por s mismo que su integracin es una funcin compleja y de gran trascendencia en el desempeo del cerebro. La sutileza y la inmensa complejidad de los engramas espaciotemporales que as se forman, constituyen lo que Sherrington llamaba "la trama encantada" y -segn Eccles (1975)- se hallan muy por encima de los niveles de investigacin logrados por la fsica y la fisiologa de nuestros das. Aunque la actividad del hemisferio derecho es totalmente inconsciente debido a su alta velocidad, tiene, no obstante, una especie de reverberacin en el izquierdo. De este modo, la mente consciente, que acta slo sobre este hemisferio, puede, sin embargo, tener un acceso indirecto prcticamente a toda la informacin que le interesa, en un momento dado, del hemisferio derecho. Por esta razn, ambos hemisferios tienen una estructura y desarrollan actividades especializadas, pero que se complementan; en efecto, muchas funciones de codificacin, almacenamiento y recuperacin de informacin dependen de la integracin de estas funciones en ambos hemisferios. An ms, la complementariedad se encuentra tan radicada en su naturaleza que en los casos de atrofia congnita

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de un hemisferio, el otro trata de realizar el trabajo de los dos, y -segn Sperryal cortar el cuerpo calloso (impidiendo, con ello, el paso de informacin de uno a otro), cada hemisferio opera de manera independiente como si fuera un cerebro completo, pero, evidentemente, en forma menos eficiente aun en la realizacin de sus propias funciones especficas. Como seala el eminente neurlogo y Premio Nbel Ramn y Cajal, "es imposible entender el plan arquitectnico del cerebro si uno no admite, como principio gua de este plan, la unidad de percepcin" (Ornstein, 1973, p. 117-8). Este hecho tiene, como veremos ms adelante, incalculables implicaciones para el fomento y programacin de actividades creadoras y para la promocin del autoaprendizaje. Ya los psiclogos de la escuela de Wrzburg descubrieron asombrados, desde principios de siglo, que en el estudio de un problema el proceso determinante de la solucin se desarrollaba al margen de la conciencia. Las personas sometidas a los experimentos nunca podan indicar cmo obtenan la solucin. En efecto, nadie tiene conciencia clara de cmo escoge, a partir de millones de posibilidades, y de cmo termina adivinando. En cierta ocasin, Einstein afirm que los cientficos son como los detectives que se afanan por seguir la pista de un misterio, pero que los cientficos creativos deben cometer su propio "delito" y tambin llevar a cabo la investigacin. Einstein, como otros cientficos eminentes, saba esto por experiencia propia. Ellos, ante todo, haban cometido el "delito" de pensar y creer en algo que iba en contra del pensamiento "normal" y corriente de los intelectuales y de lo aceptado por la comunidad cientfica; algo que desafiaba las normas de un proceder "racional" e, incluso, de la misma lgica consagrada por el uso de siglos; algo que solamente se apoyaba en su intuicin. La osada intelectual siempre ha sido un rasgo distintivo de las personas creadoras; incluso ms que el mismo C.I. Es perfectamente posible -seala Popper- que un gigante intelectual como Einstein, posea un C.I. comparativamente bajo, y que, entre las personas con un C.I. excepcionalmente alto, sean raros los talentos creativos (1980, p. 139). 5. Dinmica del Proceso Creador Al entrar en la dinmica del proceso creador, aspecto central de nuestro tema, conviene sealar, en honor a la clarificacin y precisin de conceptos, tres hechos que, sin temor a exagerar, pudiramos concretar en las siguientes expresiones: 1) la formacin del pensamiento crtico y el desarrollo de la creatividad son los objetivos ms frecuentes en los planes de estudio a todo nivel; 2) estos objetivos son, paradjicamente, los menos cultivados en forma expresa y, cuando emergen espontneamente, los ms perseguidos, y, 3) esta falta de cultivo y esta persecucin se interpretan ordinariamente como un inters en neutralizar individuos revolucionarios, anrquicos o desestabilizadores del

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sistema y nunca como lo que realmente son, una afirmacin de la personalidad inmadura o incapaz del docente, o de los intereses de los directivos. El proceso creador, en accin, sigue una dinmica constituida por varias etapas o pasos, cuya naturaleza y secuencia podemos ordenar integrando una gran variedad de aportes de las diferentes neurociencias. 5.1 Motivacin inicial En primer lugar, debe existir una motivacin o inters especfico centrado en un rea determinada, que tiene un gran significado intelectual o emocional para nosotros. Solamente as, la mente inicia la tarea de buscar y recuperar recuerdos, palabras, expresiones, ideas, sucesos, imgenes, melodas, etc., sondeando y escudriando activamente los dispositivos modulares abiertos o semiabiertos para integrar su contenido en un recuerdo reconocible, rico en significacin personal. 5.2 Exploracin del contenido de los mdulos abiertos En esta actividad, la mente acta remota y lentamente, sin potencia coercitiva, sobre una amplia extensin de mdulos de la corteza cerebral, en los cuales est codificada la informacin: aunque necesita aproximadamente slo un milisegundo la transmisin de una neurona a otra, la mente autoconsciente emplea, sin embargo, unos 800 milisegundos para ejecutar una orden. Este tiempo, relativamente largo, de incubacin lo emplea en sondear la disposicin y contenido de los mdulos abiertos o que tengan cierto grado de apertura, es decir, que sintonizan con sus intereses actuales; pero, a travs de su accin sobre los mdulos abiertos, puede influir sobre los cerrados que tengan cierta semejanza de contenido, y al actuar sobre todos estos mdulos del hemisferio izquierdo, consciente, puede sondear tambin el contenido de los mdulos del derecho, inconsciente, e incorporar e integrar su riqueza y significacin propia. Le es posible realizar esta accin a travs de las fibras del cuerpo calloso que conectan las reas simtricas de ambos hemisferios, y por el efecto de reverberacin que existe entre los mdulos de ambos hemisferios que tienen cntenidos relacionados. As, la mente autoconsciente, en fracciones de segundo, puede sondear cientos de miles de unidades independientes y sintetizar su gran diversidad haciendo de ella una unidad de experiencia consciente. 5.3 Papel activo de la mente autoconsciente En nuestro cerebro existe una especie de divisin en jerarquas de controles: los resultados de primer orden o nivel son revisados crticamente por la mente autoconsciente, es decir, la mente consciente de s, autorreflexiva, y, as, se forma un segundo orden, como sucede cuando el yo observa las ilusiones pticas y se hace crticamente consciente de que "tiene" una ilusin y de que debe superarla, o cuando reconoce que un nombre o un nmero no es correcto y ordena un nuevo proceso de recuerdo, etc. De esta manera, en un sistema abierto de sistemas abiertos, como es el cerebro humano, el yo se va ubicando y conserva siempre la mayor altura en esta jerarqua de control, es decir, la mente auto-

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consciente tiene una funcin maestra, superior, interpretativa y controladora, en su relacin con el cerebro, ya que acepta o rechaza, usa o modifica, valora y evala los contenidos que le ofrece el cerebro de relacin. Popper dice que "el yo, en cierto sentido, toca el cerebro del mismo modo que un pianista toca el piano o que un conductor acciona los mandos de su coche" (1980, p. 557). Al tratar de recuperar el recuerdo o la informacin que nos interesa en un momento determinado, la mente autoconsciente sondea ensayando todo tipo de estrategias. Es un proceso activo y extremadamente complejo. Para que la mente trabaje eficientemente con el cerebro e interacte con l, precisa una buena dosis de aprendizaje intenso, que se concreta en el uso eficaz del lenguaje, expresando las ideas con palabras y oraciones adecuadas, comprobando hacia atrs y hacia adelante, avanzando y retrocediendo, evaluando y juzgando. Teniendo presente cul es nuestra atencin, eleccin e inters, y usando estos tpicos como claves en su operacin, la mente puede hacer una seleccin de lo que le ofrece el cerebro de relacin (mdulos explorados) y mezclar los resultados de muchas reas diferentes formando una unidad integrada de experiencia consciente; es decir, la mente autoconsciente desempea el papel principal de accin en la bsqueda, seleccin, descubrimiento, organizacin e integracin de contenidos. No hay un proceso mecnico simple de la mente autoconsciente; no se accionan sencillamente algunas claves y se obtiene un mensaje, se oprime una tecla y se obtiene una respuesta inmediata y ltima, tal como ocurrira con la memoria o casillero de una computadora; "las cosas son infinitamente ms complicadas" -dice Eccles. En la generacin de oraciones, por ejemplo, se produce un continuo modelado y modificacin oscilando hacia adelante y hacia atrs y aproximndose, en un juego continuo de interaccin, desarrollado entre la mente autoconsciente, por un lado, y los centros cerebrales superiores, por el otro. El trabajo, por ejemplo, de una neurona inhibitoria, en este contexto, es similar al de un escultor que corta y descarta partes de la piedra a fin de formar una estatua. Esta dinmica y actividad de la mente autoconsciente supera ampliamente las explicaciones y teoras que asignan a la mente un carcter de "espectador pasivo" ante las reacciones del cerebro. El nivel de complejidad que se da en la interaccin entre la parte consciente y la inconsciente es muy alto. Cuando nuestra mente est libre de mecanismos defensivos, cuando acta espontneamente, cuando observa y ausculta todas las reacciones de su propio cerebro, dispone de un cmulo intenso de datos que procesa, a veces inconscientemente, y genera conclusiones que se le presentan como intuiciones. Esta "sabidura del organismo" nos proporciona juicios que pueden ser ms sabios que el pensamiento consciente, tomado en s mismo, ya que el carcter racional del hombre le lleva, quiz, a negarse a s mismo y a desconocer aquella parte que se le presenta con una aparente incoherencia o como amenazadora. A veces, hay un autntico antagonismo entre las tendencias excesivamente racionalistas y la intuicin; pareciera como si la dialcti-

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ca, o el dilogo, entre los dos hemisferios cerebrales, derecho e izquierdo, todava no hubiera terminado. 5.4 Interaccin en el sistema cognitivo-afectivo De una importancia capital es la relacin entre el sistema lmbico o lbulo lmbico y el neocrtex prefrontal, es decir, entre el sistema emotivo y el cognitivo, unidos a travs de una gran red de canales de circulacin en ambas direcciones. El sistema lmbico abarca un ensamblaje extremadamente complejo de estructuras, cuya plena comprensin, tanto estructural como funcional, no ha sido an alcanzada. Sabemos, sin embargo, muy bien que el sistema lmbico da un colorido emocional cambiando en gran medida las percepciones conscientes y, viceversa, que, mediante la corteza prefrontal (sistema consciente), el sujeto ejerce una influencia de control sobre las emociones generadas por el sistema lmbico. Es ms, hoy da se avanzan teoras que los consideran como un solo sistema, la estructura emocional-cognitiva, ya que hay vas de complicada circulacin que van desde las entradas sensoriales al sistema lmbico y luego, de ah, al lbulo prefrontal, regresando de nuevo al sistema lmbico y, posteriormente, una vez ms, al lbulo prefrontal. Nauta (1971), un gran estudioso de la relacin entre los sistemas prefrontal y lmbico, seala que el estado interno del organismo (hambre, sed, miedo, rabia, placer, sexo, etc.) se indica a los lbulos prefrontales desde el hipotlamo, los ncleos septales, el hipocampo, la amgdala y dems componentes del sistema lmbico, a travs de una gran red de vas y circuitos que llevan intenso trfico de informacin; el crtex prefrontal sintetiza toda esta informacin emotiva, sentimental y apetitiva y traza, luego, una gua adecuada de conducta. De esta manera, los estados afectivos adquieren una importancia extraordinaria, ya que pueden inhibir, distorsionar, excitar o regular los procesos cognoscitivos, conclusin sta que deber cambiar muchas prcticas antieducativas, que no se preocupan de crear el clima o atmsfera afectivos necesarios para facilitar los procesos de aprendizaje y el fomento y desarrollo de la creatividad. 5.5 Influencia del pasado y vivencia del eureka Nuestra mente autoconsciente puede buscar en la memoria los datos e ideas apropiados para la solucin de un problema y luego relacionarlos, pero esto casi siempre lo hace comparando el planteamiento del problema con nuestra estructura cognoscitiva previa, la cual activa las ideas antecedentes pertinentes y las soluciones dadas a problemas anteriores parecidos que, a su vez, son reorganizadas y transformadas en forma de proposiciones de solucin al nuevo problema que se plantea. Ahora bien, cuando la solucin del problema exige relaciones o estructuras novedosas u originales, la mente consciente fcilmente fuerza las cosas en la direccin errnea, en la direccin de lo conocido, de lo viejo, de lo ya sabido, es decir, nos lleva por un camino estril. Sin embargo, este esfuerzo no es intil, al revs, puede ser muy provechoso, pues selecciona muchas ideas pertinentes que, de alguna manera, pueden tener conexin con el

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problema. Estas ideas, cuando la mente consciente deja de forzarlas en una determinada direccin, se unen entre s y con otras pertinentes y adecuadas que ellas movilizan por un proceso inconsciente y de acuerdo a su propia naturaleza; no es que se enlacen al azar, pues el azar no es creativo. La unin de estas ideas por sus caractersticas y naturaleza y a un nivel preconsciente o subliminal, da como resultado el hallazgo, la invencin o el descubrimiento creativos. Pudiramos decir que un conocimiento que ya existe, pero en forma inconsciente, se hace consciente a travs de la "intuicin". No de otra manera se podran explicar los hechos que hacen ver que esos resultados aparecen durante momentos de reposo, pero, ordinariamente, despus de un trabajo mental duro y laborioso sobre los mismos y tras repetidos rechazos insatisfactorios. Ya Helmholtz, a fines del siglo pasado, identific tres etapas en su trabajo creativo: 1) una investigacin inicial llevada adelante hasta que le era imposible seguir; 2) un perodo de reposo y recuperacin, y, 3) la ocurrencia de una solucin repentina e inesperada (Arieti, 1976, p. 268). Tambin Poincar, tratando de explicar el proceso que le llev a sus mltiples descubrimientos, avanza dos hiptesis. En la primera enfatiza la cualidad esttica de la combinacin: la mente, como un siervo educado, dejara pasar por la entrada de la conciencia slo aquellas combinaciones que llaman la atencin por su belleza y elegancia. La segunda asume que durante el trabajo preparatorio la mente no pone en accin todas las ideas posibles, sino solamente aquellas que tienen algo que ver con el objeto de estudio (ibdem, p. 269). El campo de la electroencefalografa ha venido a demostrar, con sus muchas investigaciones al respecto, que cuando se realiza una baja en la frecuencia de las ondas del cerebro (ondas o ritmo alfa y theta: de 10 5 ciclos por segundo, respectivamente, y unos 50 microvoltios en promedio) a travs de la relajacin, se da una mayor sincrona entre las diversas partes del cerebro y aumenta considerablemente la actividad de los procesos preconscientes. Los grandes descubrimientos y creaciones cientficas se efectuaron precisamente en estas condiciones, es decir, cuando sus autores se encontraban relajados fsicamente, con los ojos cerrados, tranquilos y en actitud de ensueo (Arqumedes, Newton, Darwin, Poincar, etc.). Toda la historia de los descubrimientos cientficos, como la de las creaciones artsticas, est llena de ancdotas que hacen ver que el proceso creativo se da como "entre bastidores", pero siempre despus que la mente consciente ha luchado con el problema, lo ha intentado todo y lo deja, alejndose del mismo. Cuando analizamos el contexto en que se da la verdadera intuicin, constatamos que no es una simple conjetura y, menos an, el resultado de un acertijo o de intentos por ensayo y error. La verdadera intuicin es una visin intelectual de una relacin, que puede ser el significado, alcance o estructura de un problema o situacin; es espontnea, ntima, inesperada, instantnea, intensamente clara (tal como si esta idea o verdad se tuviera a la vista) y no ocurre por va de

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razonamiento; simplemante, uno es "arrastrado" hacia la nueva verdad. Y estos fuertes sentimientos de conviccin, de la vivencia del eureka, son -segn MacLean (1978)- , en gran parte, generados por una tormenta que desencadena el sistema lmbico, es decir, que tienen una gran componente emotiva. 5.6 Lgica implcita de la intuicin Una pregunta muy pertinente a este respecto es la siguiente: existe lgica en el proceso preconsciente que culmina con la intuicin novedosa? Frecuentemente se identifica una intuicin -especialmente cuando la verdad de su contenido no puede demostrarse de inmediato- como algo irracional, y a quien cree en ella se le considera falto de lgica, de razn y, tambin, anticientfico. Los mayores genios de la historia tuvieron que soportar esto, a veces, durante toda su vida. Hace mucho tiempo Pascal dijo una frase que se ha hecho famosa: "el corazn tiene razones que la razn no conoce". No es al corazn fsico a lo que se refiere Pascal, y ni siquiera a los sentimientos, sino a la funcin cognoscitiva de la intuicin, que es capaz de sintetizar y aprehender la totalidad de una realidad o situacin dada. Desde luego, la intuicin no es infalible. Ningn conocimiento humano lo es. Pero el proceso intuitivo, que se desarrolla ms all del umbral de la conciencia, puede seguir una lgica implcita, imposible de captar a nivel consciente, debido a la complejidad y rapidez de las relaciones que estn en juego. Esta posicin sobre la lgica implcita es sotenida por autores como Polanyi (1969), Kuhn (1978), Weimer (1979) y, sobre todo, por Henri Poincar quien, despus de sus descubrimientos matemticos y astronmicos, refirindose al proceso inconsciente de las intuiciones que le llevaron a esos hallazgos, afirma: "el yo subliminal no es en forma alguna inferior al yo consciente; no es meramente automtico, es capaz de discernimiento; tiene tacto y delicadeza; sabe cmo elegir y adivinar... Conoce cmo adivinar mejor que el yo consciente, ya que tiene xito donde ste ha fracasado. En una palabra, no es el yo subliminal superior al yo consciente?" (1978, pg. 84). 5.7 Armona entre las diferentes partes del cerebro Quiz, la falla mayor de nuestra educacin haya consistido en cultivar, bsicamente, un solo hemisferio, el izquierdo, y sus funciones racionales conscientes, descuidando la intuicin y las funciones holistas y gestlticas del derecho, e, igualmente, marginando la componente emotiva y afectiva y su importancia en el contexto general. As, mientras en un nivel llevamos una existencia que parece racional y cuerda, en otro nivel estamos viviendo una existencia rabiosa, competitiva, miedosa y destructiva. La armona entre las tres partes del cerebro, entre las tres estructuras fundamentales -hemisferio izquierdo, derecho y sistema lmbico- , su equilibrio y sabia orquestacin deber ser un objetivo fundamental de nuestra educacin moderna. La serenidad y paz emocional es indispensable para que los engramas y mdulos se abran a la bsqueda inquisitiva de la mente autoconsciente, incluso para

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que puedan enfrentar el riesgo y el temor al fracaso. En condiciones normales, el porcentaje de eficiencia del cerebro corriente de muchos adultos no supera el 5% de sus posibilidades, cuando en condiciones ptimas, como las que popician algunos mtodos de orquestacin ideal, pueden aumentar hasta 5 veces el rendimiento normal. 5.8 El yo crea su cerebro Hay, adems, otro aspecto de extremada significacin y trascendencia, y es el que se deriva de la funcin activa de la mente autoconsciente, la cual es capaz de provocar cambios en los acontecimientos neuronales, formando y creando, as, su propio cerebro. "Cuando el pensamiento -dice Eccles- lleva a la accin, como neurlogo, me veo obligado a conjeturar que, de algn modo, mi pensamiento cambia los patrones operativos de las actividades neuronales de mi cerebro. As, pues, el pensamiento acaba por controlar las descargas de impulsos de las clulas piramidales de mi corteza cerebral, y finalmente las contracciones de mis msculos y los patrones de conducta que se derivan de ah" (1980, pg. 318). La conclusin a que llegan tanto Popper como Eccles es que la actuacin de la personalidad y del yo van formando y estructurando el cerebro y que, por ello, "est muy claro que nuestro cerebro es, al menos en parte, el producto de nuestra mente" (pg. 534). Esta razn es la que los llev a cambiar el ttulo de su obra "El Yo y el Cerebro", por el de "El Yo y su Cerebro". Y hacen ver que aunque el yo y la mente consciente tienen una base fsica que parece centrarse en el cerebro, son algo muy distinto de cualquier otra realidad existente o del mismo cerebro, lo cual se demuestra por el hecho de que "podemos perder partes considerables del cerebro sin que ello interfiera con nuestra personalidad" (1980, p. 130). Una posicin, ms o menos similar, haba sostenido tambin Sperry (1969b): "En este esquema -dice l- se considera que los fenmenos conscientes interactan con los aspectos fisicoqumicos y fisiolgicos del cerebro, gobernndolos en gran medida. Obviamente, tambin se produce la relacin inversa, por lo que se concibe una interaccin mutua entre las propiedades fisiolgicas y mentales. Aun as, la interpretacin presente tendera a restaurar a la mente en su vieja posicin prestigiosa sobre la materia, en el sentido de que los fenmenos mentales trascienden claramente los fenmenos de la fisiologa y de la bioqumica". 6. Conclusiones y Aplicaciones La comprensin y el esclarecimiento de un rea determinada del saber siempre repercute benficamente en muchas otras. Podemos preguntarnos qu implicaciones trae lo expuesto hasta aqu para la promocin y cultivo del talento creador. 6.1. Los sabios de la antigedad solan dar a sus consultantes una respuesta o profeca ambigua, que produca el efecto de obligarle a mirar hacia sus adentros, a consultar sus propias intuiciones y sabidura, a replantearse la situacin,

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a volver a considerar sus planes y a pensar nuevas posibilidades. En todo esto haba una creencia: que la informacin para la respuesta y solucin adecuada de nuestros problemas est, por lo menos en gran parte, dentro de nosotros mismos y que all hay que buscarla. 6.2. Se ha demostrado en forma cada vez ms clara que cuanto ms creemos en las habilidades de nuestra mente, cuanto ms la utilizamos y tenemos fe en ella, mejor trabaja. En efecto, parece que el mayor obstculo que se opone a la expansin y uso de la mente intuitivo-creativa, lo que ms inhibe su capacidad y dinamismo, es la falta de fe en nosotros mismos, ya que una gran confianza en uno mismo y en la propia capacidad elimina ciertos constreimientos mentales que imposibilitan, a nivel neurofisilgico cerebral de los engramas, el flujo de ideas y sus relaciones. 6.3. Son muchos los autores e investigadores que han demostrado que la falta de desarrollo estructural lleva luego a una incapacidad funcional. Sperry lo especifica en los siguientes trminos: "muchos elementos internos de nuestro cerebro se activan solamente con operaciones muy especficas y, si estas actividades no se realizan -de una manera particular durante las etapas del desarrollo cuando las neuronas y sus sinapsis dependen mucho del uso- las neuronas involucradas pueden sufrir un proceso regresivo, dejando profundas deficiencias funcionales en su maquinaria integradora" (Bogen, 1976). Esto explicara tantos hechos y constataciones de "desventajas culturales", es decir, de personas cuyas potencialidades han quedado sin desarrollar por falta de una "escolaridad apropiada". 6.4. Una actividad bsicamente inhibidora es la evaluacin escolar, de acuerdo a como se practica en la gran mayora de nuestros centros educacionales. Es antihumano el forzar hacia un conformismo, el mutilar el pensamiento divergente, el sancionar la discrepancia aunque sea razonada, el no aceptar la oposicin aunque sea lgica, el no tolerar la crtica aunque sea fundada. Todo esto se lleva a cabo, de hecho, y en la forma ms natural e impune, en todos nuestros sistemas "educativos", y lo peor es que se realiza inhibiendo o coartando potencialidades, iniciativas e impulsos del ser humano que lo proyectan mucho ms all de los cauces y metas que se le han preprogramado desde afuera. 6.5. En los ltimos tiempos se ha denunciado frecuentemente (Kuhn, 1978; Polanyi, 1969; Feyerabend, 1975, 1978; Weimer, 1979; Maslow, 1982) el nivel de asfixia y sofocacin de la creatividad y la esterilidad intelectual que produce en los medios acadmicos la imposicin de una normativa metodolgica que todo lo reduce a caminar por donde ya se camin, a explorar como antes se explor, a pensar como antes de pens y, en resumidas cuentas, a no hacer nada que antes no se haya hecho, cortndole, de esta manera, las alas y el vuelo a la mejor imaginacin creadora y al pensamiento ms original y productivo. 6.6. La naturaleza de los procesos preconscientes que hemos analizado requiere, como condicin indispensable, que se renuncie -por lo menos temporal-

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mente- al nico orden aparente, a la nica lgica siempre usada, a la nica racionalidad siempre aceptada, y que se d cierta entrada a lo que inicialmente puede presentarse como aparente desorden, caos y sinsentido, porque muy bien puede haber, en ese campo desconocido que se investiga, otro tipo de orden, otra clase de lgica y otra forma de racionalidad que no pueden entrar totalmente en los esquemas anteriores. En fin de cuentas, lo nuevo y original puede serlo en muchos aspectos, en muchas formas y a muchos niveles. 6.7. Finalmente, conviene enfatizar que los procesos creativos, como el pensamiento original y productivo, no son acciones aisladas en las personas, sino que impregnan toda la personalidad; es decir, que no son algo que se toma o se deja, que se entrega o se adquiere en un momento, como en un "taller de creatividad", en una "semana de la creatividad" y cosas por el estilo. La verdadera creatvidad la favorece y la propicia un clima permanente de libertad mental, una atmsfera general, integral y global que propicia, estimula, promueve y valora el pensamiento divergente y autnomo, la discrepancia razonada, la oposicin lgica, la crtica fundada. Como podremos constatar, todo esto es algo que se proclama mucho de palabra, pero que se sanciona, de hecho, en todos los niveles de nuestras instituciones "educativas". Siempre es peligroso defender una opinin diverge. Los representantes del status toman sus precauciones contra esos "fastidiosos perturbadores del orden", contra esos "desestabilizadores del sistema". Por esto, no resulta nada fcil forjarse una opinin propia. Ello exige osada intelectual, esfuerzo y valenta, y una personalidad muy segura, independiente y autnticamente madura. Todos los innovadores, por muy benemritos que los consideren despus las generaciones posteriores, han tenido que pargar por ello. As le ocurri a Coprnico, a Galileo, a Newton, a Darwin, a Freud, a Einstein, a Max Planck y a muchos otros, tanto en el campo de las ciencias como en el de las Humanidades y las Artes.

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Parte IV
Desarrollo del pensamiento

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CAPTULO 9
Teora, programas y estrategias de desarrollo del pensamiento

M Inmaculada Herrera Ramrez


1. Introduccin Responder a la pregunta qu es el pensamiento?, no es una tarea fcil, ya que no es algo fsico, palpable; aunque, realmente, tenga un soporte fsico, las neuronas cerebrales. Por tanto, hablar de pensamiento es aventurarnos en proposiciones o modelos tericos constructos acerca de lo que se cree que es, en funcin de sus manifestaciones, ms que de forma directa. En cualquier caso, parece ser que el pensamiento constituye un proceso o sistemas de procesos complejos que abarcan desde la captacin de estmulos, hasta su almacenaje en memoria y su posterior utilizacin, lo que requiere el anlisis detallado que se ofrece a continuacin. 2. El proceso de pensamiento Desde una perspectiva simplista, podemos entender por pensamiento el proceso o sistema de procesos que establecen, justifican y/o determinan las relaciones funcionales entre estmulos y respuestas. Pylyshyn y Eysenck (1984) lo consideran, desde otro punto de vista tambin sencillo, pero ms claro, como sistema de procesos que operan sobre representaciones; es decir, el trabajo que nuestra mente realiza con las creaciones representativas (simblicas) que elabora del mundo de lo real. No obstante, como lo que aqu se pretende es tener una idea lo ms clara posible, nos introduciremos de forma sencilla en los trminos, intentando que quede patente la estructura dinmica del pensamiento, sus componentes y funcionamiento. Podemos decir que el proceso de pensamiento comienza por una estimulacin (foco estimular) a la que dirigimos nuestra atencin. En ese momento, nuestra mente est dispuesta de forma selectiva a recibir cualquier informacin. Una vez focalizada la atencin; es decir, una vez centrada en los estmulos que le interesan despreciando el resto, por medio de los sentidos, obtenemos sensaciones que no son ms que los datos del mundo exterior.

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Esas sensaciones fsicas (fotones luminosos, ondas sonoras, etc.) son traducidas por los rganos correspondientes (quiasma ptico, rgano de Corti, etc.) a impulsos nerviosos corriente bioelctrica que se transmiten por el sistema nervioso dirigindose al cerebro y, all, se codifica en un tipo de lenguaje especial con el que trabaja, crendose as lo que pudiramos llamar una imagen mental, representacin o percepcin de la realidad. Una vez obtenida la representacin interior de la realidad, se deposita de forma transitoria en la memoria a corto plazo (MCP), que supone una especie de mesa de trabajo o, en trminos informticos la memoria RAM, para as poder seguir trabajando con esos datos. All, entonces, se realiza otra operacin que consiste en realizar un breve anlisis diagnstico o identificativo que recibe el nombre de apercepcin; es decir, darse cuenta. La diferencia entre percibir y apercibirse viene a ser la misma que existe entre mirar y ver, o entre escuchar y or. Cuando nos hemos apercibido, los datos de que disponemos esa representacin mental depurada y consciente, si se trata de la primera vez que tomamos contacto con ellos, forman lo que recibe el nombre de concepto natural, a travs de dos operaciones bsicas: generalizacin y discriminacin. La generalizacin consiste en determinar a qu familia pertenecen los datos disponibles y la discriminacin consiste en detectar cules son sus elementos diferenciales respecto a su familia. Quizs con un ejemplo esto se pueda comprender mejor: Supongamos que por primera vez se le muestra a un nio una tiza. Para que ste pueda formarse su primer concepto concepto natural sobre esa cosa que desconoce, primero, debe conocer a qu familia pertenece familia de las cosas que sirven para escribir, dibujar, etc., con ello estara generalizando; segundo, si, pero, aunque pinta, no lo hace como un lpiz, ni un bolgrafo, etc., sino que, en vez de tinta, etc., deja un polvillo blanco, o de color, que se puede quitar con la mano, etc., y, adems del color, tiene otras constantes perceptivas: forma, textura, tamao, peso, dureza, brillo, sabor, etc. Estas operaciones que la mente del nio est realiza lo que consiguen es categorizar el concepto; es decir, ver sus cualidades o categoras, que, en principio sern pocas y que variarn segn la capacidad y el desarrollo mental de cada cual. En realidad lo que ocurre es que, de alguna manera, se responde a tres preguntas bsicas: qu?, por qu? y para qu?, cuestiones que dan una aproximacin racional a la realidad. Pero esto, en cuanto que se trata del primer concepto concepto natural, de manera que cuantas veces evoque en el futuro ese mismo concepto y vaya descubriendo ms cualidades (ms constantes perceptivas, ms utilidades, etc.), ir puliendo y depurando progresivamente el mismo aadindole ms cualidades o categoras. Pensemos por un momento la evolucin que ha sufrido en nuestra mente el concepto amor, desde que formamos su concepto natural. Mientras tanto, estos datos pueden pasar de la memoria de corto plazo o de trabajo, a la de largo plazo, en funcin de nuestro inters.

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Como es obvio pensar tambin, el hombre desde su niez va aprendiendo gran cantidad de conceptos, pero, en realidad, qu hace con ellos?. Veamos... Supongamos el caso de una mente vaca (cosa que jams ocurre porque incluso dentro del seno materno el hombre tiene algn conocimiento, bien sea de tipo sensitivo, afectivo, motor, etc.), que recibe su primer concepto natural, con uno slo poca cosa puede hacer; pero, si introduce otro, ya puede jugar con los dos de una forma particular, situndolos en el espacio y el tiempo, comparndolos, diferencindolos, etc., y, lo que es ms importante, unindolos incluso para forma otro nuevo concepto fruto de esa unin, tal vez hasta una frase u oracin. Pues bien, si esto se puede hacer con dos conceptos, a medida que los vayamos organizando y engrosando en nuestra memoria cada vez con ms conceptos, le iremos dando ms posibilidades de juego a la mente. Llegado este momento, es conveniente hablar aqu de un tipo de conceptos muy especiales que le va a conferir una gran potencialidad a la mente humana que maneja primeros conceptos, la mente infantil, puesto que se van a convertir en los primeros operadores funcionales (inteligencia preoperacional) de los dems conceptos mentales; me refiero a los conceptos bsicos (arriba-abajo, delante-detrs, etc.; Bohem, 1968). Suponiendo que el primer concepto natural fuese "mam" y el segundo "pap", con los conceptos bsicos se podran construir diferentes conceptos o frases nuevas, tales como: mam delante de pap, etc., y todas las combinaciones posibles. O, con el ejemplo anterior de tiza y otro de nuevo, como, mesa, podra argumentar: tiza arriba o encima de la mesa, o, debajo, delante, detrs, etc. A partir de la utilizacin primaria de estos conceptos, se podrn ir elaborando frases cada vez ms ricas y mejor construidas (inteligencia operacional concreta y formal abstracta). Las frases facilitarn la creacin de premisas, con lo que se podrn plantear y resolver silogismos, y, a partir de ah, se podr razonar, resolver problemas e, incluso, llegar a la puesta en marcha del pensamiento divergente y creador.

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Como se puede apreciar, el manejo/juego de/con los conceptos no es otra cosa que la aplicacin de la inteligencia; es decir, Estmulos la inteligencia, en realidad, es una especie de operadora o calculadora que utiliza los Atencin conceptos para mejor adaptarnos al medio, o, lo que es lo mismo, Sensacin para resolver las situaciones problemticas que nos encontramos en el camino de nuestras vidas. Percepcin Esta superherramienta tan eficaz para el hombre, la inteligencia, Memoria a Corto Plazo para su mejor organizacin y funcionamiento utiliza dos tipos Apercepcin de estrategias bsicas: cognitivas y metacognitivas. Las primeras, encargadas de recoger, procesar Concepto Natural anlisis y sntesis, y guardar en la memoria a largo plazo todos los Generalizacin Discriminacin conceptos (informacin) necesarios; y, las segundas, Inteligencia dedicadas a su aplicacin en cada caso como mejor convenga. Congnicin Metacognicin No obstante, todo el proceso descrito, desde la estimulacin a la Memoria a Largo Plazo aplicacin intelectiva, de alguna manera est mediatizado por los componentes afectivos de nuestra personalidad, tales como nuestra motivacin, autoconcepto, autoestima, autoeficacia, etc. Pero todo esto no se da de golpe, sino secuencial, paulatina y progresivamente a lo largo del desarrollo humano, sobre todo durante los primeros veinte aos de vida, comenzando por la puesta en marcha de procesos conductuales afectivos, posteriormente, psicomotores, cognitivos y socio-relacionales; si bien hay que manifestar que todos tambin producen cognicin, aunque no tan especfica. Recordemos que la afectividad impregna los primeros momentos de la vida del hombre y evolutivamente le siguen la motricidad/psicomotricidad, el conocimiento y las relaciones sociales.

EL PENSAMIENTO

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Una ilustracin grfica secuencial de todo lo expuesto, para una mayor claridad, es la que se ofrece en el esquema siguiente. 3. Pensamiento y lenguaje 3.1. El origen del lenguaje. A pesar de las innumerables investigaciones realizadas, no se sabe con certeza cundo y cmo naci el lenguaje, esa facultad que el hombre tiene para comunicarse con sus semejantes, valindose de un sistema formado por el conjunto de signos lingsticos y sus relaciones, y, aunque muchos investigadores tratan de encontrar luz sobre este misterio, sus resultados no pasan de ser ms que meras especulaciones. No obstante, por la observacin de los gritos de ciertos animales superiores, algunos creen que tales sonidos fueron los cimientos del lenguaje hablado. Desde el punto de vista antropolgico y etnolgico, es indudable que el lenguaje articulado constituye una de las manifestaciones caractersticas que separan al hombre de los seres irracionales. stos ltimos expresan y comunican sus sensaciones por medios instintivos, pero no hablan, a diferencia de los seres dotados de conciencia. Por lo tanto, si tuvisemos que aadir un sexto sentido a los cinco tradicionales, sin duda alguna, sera el habla; ya que la lengua, adems de servir para el sentido del gusto y otras funciones cotidianas, tiene tambin la aplicacin de facilitar la emisin de sonidos articulados, particularidad que nos diferencia de los animales. Por otra parte, el animal no es capaz de planificar sus acciones, puesto que toda su conducta instintiva est determinada por su sistema de reflejos condicionados e incondicionados. La conducta humana, en cambio, se define de forma absolutamente diferente. La situacin tpica del individuo es el proceso de planteamiento y solucin de una tarea mediante la actividad intelectual, para lo que se vale, no slo de la experiencia individual, sino tambin de la colectiva. Consiguientemente, el hombre, a diferencia del resto de los animales, sabe planificar sus acciones, y el instrumento fundamental para tal planificacin y solucin de sus tareas mentales es el lenguaje. Aqu nos encontramos con una de sus funciones ms elementales: la de servir de instrumento del acto intelectual, que se expresa en la percepcin, memoria, conceptualizacin, razonamiento, etc. Los primeros signos articulados por los pitecntropos que habitaron en Asia y frica, data de hace unos 600.000 a. de J.C. Despus vinieron otros homnidos cuya capacidad craneal, superior al Homo Erectus, les permiti fabricar utensilios rudimentarios y descubrir el fuego, pero tambin idearon un cdigo de signos lingsticos que les permitiera comunicar sus pensamientos y sentimientos. Durante el paleoltico (aproximadamente 35.000 a. de J.C.), tanto el Hombre de Neandertal como el Hombre de Cro-Magnon dieron seales de que posean un idioma comunicativo y una anatoma equiparable a la del

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hombre moderno. Quizs stos sean algunos posibles momentos en la evolucin del lenguaje humano, desde la remota poca en que el Homo Sapiens haca simples gestos acompaados de gritos o interjecciones a la manera de ciertos animales, hasta la descripcin oral de los objetos que le rodeaban y la designacin de ideas mediante sonidos que suponan el aumento de la capacidad de abstraccin. ste es el perodo en el que nacen las primeras lenguas, coincidiendo con el desplazamiento de los hombres primitivos. Con el transcurso del tiempo, los hombres primitivos empezaron a vivir en pequeos grupos familiares, usando un lenguaje que era de uso exclusivo del grupo, con palabras que expresaban una idea comn para todos. Poco a poco, se fueron reuniendo en comunidades ms grandes, formando tribus y poblados. Algunos grupos se desplazaron a lugares ms o menos lejanos buscando nuevos territorios donde se poda encontrar caza y pesca, mientras otros se trasladaron en busca de regiones ms clidas, generalmente junto a los ros, donde construyeron sus chozas y consolidaron su lengua materna. Valga aclarar que si los habitantes de un lugar carecan de relaciones con los de otros, no es nada probable que usaran el mismo lenguaje para comunicarse entre s, lo que hace suponer que desde el principio hubo varias lenguas y no una sola lengua madre, como generalmente creen los defensores del mito bblico sobre La Torre de Babel. La filologa comparada, en su estudio sobre las relaciones entre las diversas lenguas, no ha logrado encontrar ninguna esencialmente primitiva de la cual provengan todas las dems, ninguna lengua madre universal, y nicamente le asigna la denominacin de lenguas madres a aquellas de las cuales se han derivado algunos idiomas, como el latn, que es la lengua madre del francs, espaol, portugus, italiano y otras lenguas neolatinas. Los antroplogos, etnlogos y lingistas, desde Luis Heyre (1797-1855) hasta la fecha, han realizado numerosas y profundas investigaciones para averiguar la posible existencia de un primitivo origen del lenguaje, establecindose diferentes hiptesis encaminadas unas a las relaciones psicofsicas entre las sensaciones de la visualidad y las auditivas; otras, tomando como fundamento de la formacin natural del lenguaje, la evolucin progresiva impuesta por el entorno social, y motivado por las necesidades del ser humano. Tambin, se ha pensado en la onomatopeya, en la observacin del lenguaje infantil, en la expresin de sentimientos, en las interjecciones, etc. Pero, los ms destacados psiclogos y lingistas encabezados por Antonio Meillet (1866-1936), han llegado al reconocimiento de que hallar un lenguaje primitivo nico es un problema insoluble, por lo que se limitan a clasificar las lenguas y sealar las races de las que consideran ms primitivas. En cualquier caso, se debe aadir que la evolucin del lenguaje ha sido paralela a la evolucin del hombre desde la ms remota antigedad. Los idiomas que abundan en la actualidad, agrupados en ramas de un mismo tronco lingstico,

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siguen causando controversias entre los investigadores, puesto que el estudio del origen del lenguaje es tan complejo como querer encontrar el eslabn perdido en el proceso de humanizacin de nuestros antepasados. Una sociedad, por muy organizada que est, es incapaz de fijar definitivamente el lenguaje, porque ste se forma progresiva y gradualmente, por lo que no existe ninguna lengua que pueda llamarse completa, por no existir ninguna que exprese todas nuestras sensaciones y todas nuestras ideas. No obstante, el humano, como cualquier ser social por naturaleza, necesita relacionarse con sus semejantes, hablando y escuchando, y el principal instrumento de comunicacin que utiliza es el lenguaje, cuyo sistema, constituido por signos verbales o palabras, hace que los individuos se entiendan entre s. De no existir el lenguaje, tanto en su forma oral como escrita, sera ms difcil la convivencia social y ms primitiva nuestra forma de vida. Adems, gracias al lenguaje ha sido posible lograr grandes xitos en el conocimiento y dominio de las fuerzas de la naturaleza. 3.2. El lenguaje es innato o adquirido?. En la lingstica, como en otras ramas del conocimiento humano, existe una disputa entre el empirismo y el nativismo. El nativismo sostiene que la capacidad de ver, or, pensar y hablar son actos innatos o genticos. En cambio los empiristas, a la cabeza de los behavioristas o conductistas, estn convencidos de que el nio aprende a hablar porque imita a los adultos sobre todo a la madre y porque tiene necesidad de manifestar sus necesidades y deseos. Segn los empiristas, el nio aprende el idioma de la misma manera que otras destrezas fsicas y mentales. Es decir, mediante la llamada conducta operante, que est determinada por la influencia de factores externos o adquiridos y, no as, por medio de factores innatos o genticos. Del mismo modo que los empiristas estn convencidos de que el nio aprende a articular y combinar sonidos, los nativistas y los psiclogos del Gestalt, que rechazan categricamente la teora de que el entorno social sea el nico factor determinante en el desarrollo idiomtico, estn convencidos de que el habla es un don biolgico con el que nacen los humanos, y que la experiencia cognitiva es apenas un estmulo para su desarrollo posterior. De ah, que el psiclogo Arnold Gesell, a diferencia de John B. Watson y Brurrhus Skinner, sostiene la concepcin de que gran parte del desarrollo lingstico del individuo est determinado por factores de maduracin interna, y no por las simples influencias del entorno social. El desarrollo idiomtico del individuo, en consecuencia, no se puede explicar desde el conductismo, sino desde la perspectiva biolgica; ms an, si se considera el complicado proceso lingstico que se genera en el cerebro humano. Segn J. Jackson (1835-1911), cada funcin realizada por el sistema nervioso es garantizada no por un grupo reducido de clulas, sino por una complicada jerarqua de niveles de la organizacin fisiolgica del sistema nervioso... Dicho de otra forma, para que la persona

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pronuncie una palabra, no es suficiente con que se activen el grupo de clulas de la corteza de los hemisferios del cerebro responsable de ello. En la gestacin de la palabra participan, segn su naturaleza, una estructura profundidad de yacimiento, diversos mecanismos cerebrales En el mantenimiento de los procesos lingsticos toman parte tanto los ms elementales mecanismos fisiolgicos del tipo estmulo respuesta (E-R) como mecanismos especficos que poseen estructura jerrquica y exclusivamente caractersticas para las formas superiores de actividad lingstica (Petrovski, 1980:193-94). Para el pensador y lingista norteamericano Noam Chomsky padre de la gramtica generativa, el idioma es parecido a una computadora que funciona de manera automtica, como los procesos de asociacin antes de pensar. Chomsky plantea la teora de que el nio tiene una programacin gentica para el aprendizaje de su lengua materna desde el instante en que las normas para las declinaciones de las palabras y la construccin sintctica de las mismas estn ya programadas genticamente en el cerebro. Lo nico que hace falta es aprender a adaptar esos mecanismos gramaticales al lxico y la sintaxis del idioma materno, que, en el fondo, es una variante de una gramtica que es comn para todas las lenguas, sin que esto quiera decir que exista o existiera una lengua madre universal de la cual derivan todos los idiomas hasta hoy conocidos (Jeffmar 1983:66). El segundo anlisis crtico lo dirige Chomsky contra el behaviorismo o conductismo, que contempla el comportamiento lingstico como un conjunto de estmulos y respuestas (E-R) o, lo que es lo mismo, contra una concepcin externa de la lengua. Si el dualismo fue catalogado de error, el conductismo fue considerado irracional, adems de igualmente errneo. El concepto de que el lenguaje sea algo adquirido del entorno social contrasta con la teora defendida por los nativistas, segn la cual el lenguaje es un producto interior de la mente/cerebro del hablante, independiente de las experiencias y los conocimientos adquiridos del entorno social por medio del proceso de aprendizaje. A pesar de ello, tanto las teoras chomskianas y nativistas han sido motivos de controversias, sobre todo, cuando los empiristas y behavioristas, que no aceptan la existencia de una gramtica innata y programada en el cerebro humano, sealan que las diferencias gramaticales existentes entre los idiomas son pruebas de que el lenguaje es un fenmeno adquirido por medio del proceso de aprendizaje. Noam Chomsky, por su parte, responde que estas diferencias se presentan slo en la estructura superficial de los idiomas, pero no en la estructura profunda. Es decir, si en la estructura superficial se advierte las diferencias gramaticales de los distintos idiomas, en la estructura profunda se advierte una gramtica vlida para todos los idiomas, pues cada individuo, al nacer, posee una gramtica universal que, con el tiempo y gracias a un contexto social concreto, se convierte en una gramtica particular. Asimismo, aparte de las dos teoras mencionadas, se debe aadir la concepcin de los interaccionistas, quienes consideran que el lenguaje es un producto tanto de factores innatos como adquiridos, ya que el lenguaje depende de impulsos internos y externos, que estn determinados de antemano, lo que pre-

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supone la preexistencia de sentimientos y pensamientos. Al faltar los conceptos internos por diversos motivos falta tambin la facultad del habla, como en los recin nacidos o en los deficientes mentales. Pero, para hablar, adems de un contenido psquico mnimo, hace falta el estmulo externo, el impulso de expresarse y hacer partcipes a los dems de nuestros estados de nimo. De ah, que el estudio del desarrollo idiomtico del individuo es tratado no slo por la psicolingstica, sino tambin por la sociolingstica, que estudia cmo el idioma influye y es influido en la interaccin/interrelacin existente entre el individuo y su contexto social, habida cuenta que el lenguaje, adems de ser un cdigo de signos lingsticos, es el acto de expresar ideas y sentimientos mediante la palabra; ms todava, cuando el lenguaje es el primer patrimonio familiar que recibe el recin nacido, a quien le acompaa desde la cuna hasta la tumba, y es la herencia, a veces la nica, que transmite a sus descendientes. 3.3. Qu se da primero, el lenguaje o el pensamiento?. Si para el polmico Noam Chomsky, el idioma es una especie de computadora que funciona de manera automtica, como los procesos de asociacin antes de pensar, entonces habra que suponer que el lenguaje est primero. La teora reguladora explica que la accin y el pensamiento dependen de la capacidad lingstica de la persona, en tanto el psiclogo suizo Jean Piaget, cuya teoras cognitivas son ampliamente conocidas, sostiene que el lenguaje es, en gran medida, el producto del desarrollo de la accin y el pensamiento, ya que tanto la palabra como la idea son imgenes observadas y no a la inversa; pero, no faltan quienes aseveran que durante el desarrollo intelectual del individuo hay una interrelacin dialctica entre el lenguaje y el pensamiento. De modo que responder a la pregunta si primero est el lenguaje o el pensamiento, es lo mismo que responder a la pregunta sobre qu fue primero, si el huevo o la gallina. De cualquier modo, las tres teoras fundamentales que responden a la pregunta de si primero se produce el lenguaje o el pensamiento se pueden sintetizar de la siguiente manera: *La teora que asegura que el lenguaje se produjo/produce antes que el pensamiento plantea que el idioma influye o determina la capacidad mental (pensamiento). En esta corriente lingstica incide la gramtica generativa de Chomsky, para quien existe un mecanismo idiomtico innato, que hace suponer que el pensamiento se desarrolla como consecuencia del desarrollo idiomtico. Por lo tanto, si se considera que el lenguaje es un estado interior del cerebro del hablante, independiente de otros elementos adquiridos del entorno social, entonces es fcil suponer que primero est el lenguaje y despus el pensamiento; ms an, si se parte del criterio de que el lenguaje acelera nuestra actividad terica, intelectual y nuestras funciones psquicas superiores (percepcin, memoria, pensamiento, etc).

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* La teora que opina que el pensamiento se produce antes que el lenguaje sostiene que la capacidad de pensar influye en el idioma. No en vano Ren Descartes acu la frase: pienso, luego existo. Asimismo, muchas actitudes cotidianas se expresan con la frase: tengo dificultad de decir lo que pienso. Algunos psicolingistas sostienen que el lenguaje se desarrolla a partir del pensamiento, por cuanto no es casual que se diga: Una psique debidamente desarrollada da un idioma efectivo. Dentro de esta corriente lingstica se encuentra la llamada The cognition hipotesis (La hiptesis cognitiva), cuya teora se resume en el concepto de que el pensamiento se produce antes que el lenguaje. Aunque, quizs, uno de sus mayores representantes sea Jean Piaget, para quien el pensamiento se produce de la accin, y que el lenguaje es una ms de las formas de liberar el pensamiento de la accin. Piaget indica que el grado de asimilacin del lenguaje por parte del nio, y tambin el grado de significacin y utilidad que reporte el lenguaje a su actividad mental depende hasta cierto punto de las acciones mentales que desempee; es decir, que depende de que el nio piense con preconceptos, operaciones concretas u operaciones formales (Richmond, 1981:139). * La teora simultnea define que tanto el lenguaje como el pensamiento estn ligados entre s. Esta teora fue dada a conocer ampliamente por el psiclogo ruso L.S. Vigotsky, quien explicaba que el pensamiento y el lenguaje se desarrollaban en una interrelacin dialctica, aunque considera que las estructuras del habla se convierten en estructuras bsicas del pensamiento, as como la conciencia del individuo es primordialmente lingstica, debido al significado que tiene el lenguaje o la actividad lingstica en la realizacin de las funciones psquicas superiores del hombre. Asimismo, El lenguaje est particularmente ligado al pensamiento. Sin embargo, entre ellos no hay una relacin de paralelismo, como frecuentemente consideran los lgicos y lingistas tratando de encontrar en el pensamiento equivalentes exactos a las unidades lingsticas y viceversa; al contrario, el pensamiento es lingstico por su naturaleza, el lenguaje es el instrumento del pensamiento. Lazos no menos fuertes ligan al lenguaje con la memoria. La verdadera memoria humana (intermediadora) ms frecuentemente se apoya en el lenguaje que en otras formas de intermediacin. En igual medida se realiza la percepcin con la ayuda de la actividad lingstica (Petrovski, 1980:205). As pues, las diversas teoras que pretenden explicar el origen del lenguaje, las funciones del pensamiento y sus operaciones concretas, son motivos de controversias entre los estudiosos de estas ramas del conocimiento humano; pero, cualquier esfuerzo por arrojar nuevas luces sobre este tema, tan fascinante como explicarse los misterios del universo, es siempre un buen pretexto para volver a estudiar las ciencias que conciernen al lenguaje y el pensamiento de todo ser dotado de capacidad racional y sentido lgico. 4. Evolucin del pensamiento

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4.1. En el nio. 4.1.1. El pensamiento simblico y las funciones de representacin. Las manifestaciones mas importantes de la funcin semitica son: 1. Imitacin. Se hace especficamente representacin al ser imitacin diferida, es decir, en ausencia del modelo. Constituir un elemento importantsimo de avance cognitivo, ya que permite poner en marcha respuestas inicialmente poco personales pero que se perfeccionan con el uso y se interiorizan pasando a aumentar el bagaje adaptativo propio. 2. Juego simblico. Instrumento de desarrollo cognitivo y de equilibrio personal, puesto que proporciona la posibilidad de expresin propia. Con el juego no se persigue una adaptacin a lo real, sino una manifestacin del yo sin coacciones, mediante significantes de creacin individual (smbolos), que pueden llegar a ser colectivos (signos) en funcin de acuerdos de grupo. 3. Dibujo. Funcin de representacin que tiene conjuntamente un intento de imitacin de la realidad y un deseo expresivo de creacin personal. Su evolucin esta relacionada con la estructuracin de la representacin mental del espacio. 4. Imagen mental. Permite representar mentalmente cosas, personas, situaciones mediante significantes ligados a los objetos (entendido el trmino en su sentido ms amplio de opuesto a sujeto) y apoyados en la experiencia perceptiva del sujeto. Esta representacin puede llevarse a cabo, ya sea en un intento de aproximacin a la realidad como tal, ya sea con un deseo de organizacin y combinacin nueva de los elementos perceptivos reales. La primera manifestacin de la imagen mental, que se denomina imaginacin reproductora, aparece en primer lugar en el proceso de evolucin cronolgica, la imaginacin creadora o anticipadora surge algo ms tarde en este proceso evolutivo y relacionada con la estructuracin lgica del pensamiento. 5. Memoria. Capacidad psquica ligada a la funcin semitica que permite al nio desligarse del aqu y el ahora, pudiendo conservar la informacin captada en un determinado momento y utilizarla en situaciones posteriores. 6. Lenguaje. Manifestacin ms especficamente humana de la funcin semitica, que ampla las posibilidades adaptativas a niveles de complejidad considerables dada la amplitud y flexibilidad de sus posibilidades de comunicacin. Es necesario subrayar que es la nica manifestacin de la funcin semitica que est ya elaborada socialmente. En las dems, el nio construye sus propios significantes, aunque con influencia de la circunstancia ambiental. En el lenguaje el nio se encuentra inmerso en un sistema de signos colectivos, que l ir adquiriendo por aprendizaje. Este sistema de signos colectivo contiene una serie de instrumentos cognitivos que estn al servicio del pensamiento y que responden a una estructura lgica, relaciones, clasificaciones y categoras. La utilizacin del vocabulario lingstico por parte del nio, no implica que nece-

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sariamente comprenda todo el contenido de estructuracin lgica que est detrs de dicho vocabulario, ni que lo utilice con el significado preciso que tiene en el mundo adulto. Son estas cuestiones muy importantes a tener en cuenta en el proceso educativo, ya que en funcin de las mismas el lenguaje puede ser un medio que facilite la comprensin y el aprendizaje, o por el contrario una fuente de imprecisiones e inseguridades. 4.1.2. El pensamiento intuitivo. El pensamiento que aparece como resultado del dominio de la funcin semitica no tiene todava una estructura lgica. Esto se debe a que su funcin mental es todava una accin interiorizada y, por ello, ligada a la informacin perceptiva. El nio de esta etapa se somete a la evidencia de lo que percibe, sin tratar de establecer relaciones globales ni interpretaciones generales. Las caractersticas intuitivas de los objetos que manipule o las vivencias afectivas que experimente condicionarn la interpretacin de la realidad llevndole, a veces, a interpretaciones distorsionadas de la misma. La forma intuitiva de presentar la informacin que se desea transmitir al nio marcar de manera muy poderosa sus posibilidades de comprensin, esto es algo muy importante en repercusiones educativas. Por ejemplo, en el proceso de aprendizaje de las diferencias entre sujeto y predicado en una clase de lengua, si los ejemplos que utiliza el educador presentan siempre al sujeto como la primera palabra de la oracin lo que ocurre frecuentemente en los libros de texto de los primeros niveles los nios interpretaran, aunque no se les diga explcitamente que el sujeto es la primera palabra de la oracin. Algo parecido ocurre en geometra, los tringulos rectngulos se representan siempre con el cateto menor como base y esto lleva a que los nios sean incapaces de reconocerlo en otra posicin. El dominio del dato perceptivo les lleva a codificar como relevantes datos de informacin que son secundarios. 4.1.3. El pensamiento lgico concreto. Con la aparicin de la estructura lgica en el pensamiento el nio se libera del impacto de la percepcin. El ejemplo clsico de la teora de Piaget sobre la conservacin de la cantidad, nos puede ayudar para comprender la diferencia. El nio cuyo pensamiento no posee todava estructura lgica cuando modifica la apariencia de dos bolas de plastilina, inicialmente iguales y en las que ha admitido que hay la misma cantidad, piensa si las percibo distintas es que son distintas, por tanto, no hay ya la misma cantidad. Por el contrario, el nio cuyo pensamiento tiene estructura lgica, no esta preso del dato perceptivo y puede, por consiguiente, pensar eran iguales al principio, nicamente las he cambiado de forma, no he aadido ni quitado nada, por lo tanto, tiene que haber la misma cantidad.

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Esta estructuracin lgica le permite organizar y relacionar las secuencias espacio-temporales y alcanzar el equilibrio mvil entre la acomodacin y la asimilacin. Lo propio del esquema sensoriomotor y de la representacin prelgica es que se quedan centrados en un caso particular del objeto o en un punto de vista particular del sujeto. Es decir, simultnea e indistintamente acomodacin fenomnica (cuando se fija en una situacin particular del objeto, el sol calienta porque es amarillo) o asimilacin egocntrica (cuando se distorsiona la realidad en funcin de las propias apetencias la luna me sigue). Lo propio del pensamiento lgico es que ste no se apega ya a los estados particulares de los objetos, sino que es capaz de seguir mentalmente todas las transformaciones sucesivas, segn todos los rodeos y puntos de vista posibles, ni tampoco se apega al punto de vista particular del sujeto. Pero esta capacidad lgica sigue ligada a la realidad concreta. Es decir, el nio puede establecer relaciones lgicas en sus contenidos mentales, pero dependiendo de la lectura de los hechos. Esta limitado a la realidad fsica, a los pensamientos sobre cosas reales que pueden ser representadas, interiorizadas y relacionadas mentalmente. Lo posible se reduce a una prolongacin virtual de las acciones u operaciones ligadas a un contenido dado. Por ejemplo, cuando despus de seriar algunos objetos o algunas representaciones simblicas, el sujeto sabe que podra continuar la seriacin, manteniendo el mismo esquema anticipatorio. Este estar ligado a lo real origina que las posibilidades que ofrece la estructuracin lgica dependan en su actualizacin del contexto en que se deban utilizar, del tipo de tareas a las que se deba hacer frente, de la presentacin intuitiva de dichas tareas, de los procesos de codificacin que utilice el nio para captar la informacin, de la amplitud de demanda de memoria a corto plazo que requiera la tarea, etc. Una cuestin importante ligada a la operacin lgica y con gran incidencia en las estrategias educativas, es el hecho de que la misma va acompaada de la toma de consciencia, de la reflexin sobre los propios procesos mentales (metacognicin). La posibilidad de actualizacin plena de las posibilidades que ofrece esta nueva etapa del pensamiento depender tambin del tipo de interacciones sociales que el nio pueda establecer, de las oportunidades de expresin de sus propias interpretaciones de la realidad que el medio le permita y de las oportunidades de contrastar sus propias interpretaciones con las de los dems. La dinmica educativa juega, por tanto, un papel bsico en el desarrollo cognitivo, ya que puede impulsarlo o favorecerlo al mximo o, por el contrario, frenarlo y limitarlo. Por ello las caractersticas generales del desarrollo cognitivo descritas tendrn manifestaciones diferenciales importantes, en funcin del contexto sociocultu-

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ral en el que la persona viva y en funcin de la realidad individual de cada sujeto y de las oportunidades educativas que haya tenido. 4.2. El adolescente: El pensamiento lgico formal. La aparicin del pensamiento lgico formal opera un cambio importante en el desarrollo cognitivo al producirse una inversin de sentido entre lo real y lo posible. Lo posible en lugar de manifestarse como una prolongacin de lo real o de las acciones ejecutadas sobre la realidad, subordina a lo real. Los hechos reales se conciben como un sector de realizaciones efectivas en el interior de un universo de transformaciones posibles. El pensamiento formal es hipotticodeductivo, la deduccin ya no se refiere, de modo directo, a las realidades percibidas, sino a enunciados hipotticos; es decir, a proposiciones que formulan las hiptesis o plantean los datos independientemente de su carcter actual. La deduccin consiste entonces en vincular entre si esas presuposiciones extrayendo sus consecuencias necesarias incluso cuando su verdad experimental no vaya ms all de lo posible. Ahora bien, este dominio de lo posible que alcanza el pensamiento formal no es en absoluto el dominio de lo arbitrario o la imaginacin libre de toda regla y objetividad, sino la condicin indispensable de una forma ms general de equilibrio. En efecto, ante una situacin determinada el sujeto no se limita a tener en cuenta slo aquellas relaciones entre los elementos dados que aparentemente se le imponen sino que, para evitar que poco despus nuevos hechos lo contradigan, busca desde el comienzo englobar esas relaciones en apariencia reales dentro del conjunto de las relaciones concebidas como posibles. Es decir, el sujeto tiende a insertar los vnculos supuestos en primer lugar como reales, los que toma de la observacin de la realidad concreta, dentro del conjunto de los que reconoce como posibles, de manera que luego pueda elegir los verdaderos mediante el examen de ciertas transformaciones efectuadas en el interior de las relaciones posibles. Se trata, en ltima instancia, de la posibilidad de pensar utilizando un procedimiento riguroso y sistemtico semejante al utilizado en el mtodo cientfico: observacin de la realidad, formulacin de hiptesis interpretativas y comprobacin. La aparicin de la lgica formal viene condicionada por muchos factores y su utilizacin funcional tambin. La lgica formal caracteriza el equilibrio final del desarrollo del pensamiento, pero no todas las personas la alcanzan ni todas las personas la utilizan plenamente en todas las situaciones vitales. En funcin de la experiencia vital, de las oportunidades educativas, de las demandas de la situacin, de la preparacin previa con respecto a los temas, hay

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mayores o menores posibilidades de que los sujetos sean capaces de procesos de pensamiento abstracto. Tambin en este caso inciden positiva o negativamente en su actualizacin todos los aspectos relacionados con las caractersticas de la tarea y las capacidades de codificacin. El sistema educativo, las condiciones de aprendizaje, las oportunidades de intercambio personal enriquecedor son factores condicionantes de la actualizacin de este nivel evolutivo. 4.3. El adulto. Culminado el proceso evolutivo de establecimiento de estructuras bsicas, los procesos de modificacin y cambio no se cierran. La actividad profesional del adulto marcara diferencialmente las caractersticas de esta evolucin, pero lo que han demostrado las investigaciones ms recientes es que no hay una prdida de eficacia ni de potencial intelectual general. En relacin con el desarrollo cognitivo, interesa diferenciar los conceptos de: * Inteligencia fluida, que hace referencia a los procesos cognitivos que implican novedad y rapidez de respuesta. Este tipo de actividad intelectual parece verse ms afectada con el paso de los aos, aunque se manifiestan muy claras diferencias individuales en funcin de la prctica y la experiencia. * Inteligencia cristalizada, relacionada con los aspectos de organizacin y estructuracin de contenidos especficos. Con la orientacin especializada hacia tareas concretas en procesos de profundizacin. Al respecto, la edad adulta marca un momento de mxima eficacia, en funcin de un mayor equilibrio, de una mayor posibilidad de integracin de contenidos experienciales y de puntos de vista diversos. Los aspectos relacionados con la valoracin social, las oportunidades de actividad interesante y las relaciones interpersonales incidirn marcando diferencias significativas entre las personas. 4.4. La persona de edad avanzada. Entre los procesos cognoscitivos la memoria es la que parece mas afectada en funcin de los procesos involutivos que aparecen con la edad. El olvido de acontecimientos recientes, o de realizaciones importantes para la adaptacin vital (apagar el gas, cerrar la puerta, etc.), aparecen creando situaciones de angustia y preocupacin. Los investigadores han estudiado que existen diferencias entre la memoria a corto y a largo plazo en estas situaciones involutivas. En la memoria a corto plazo, los estudios realizados al respecto muestran que existen diferencias significativas en cuanto a la eficacia de la memoria a corto plazo entre los grupos jvenes y las personas adultas y ancianas, cuando se trata de retencin de listas de nmeros o palabras; pero, cuando interviene el contenido significativo en el material a recordar, las diferencias son menos acusadas.

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La memoria a largo plazo, sin embargo, se ve menos afectada que la memoria a corto plazo por los procesos involutivos y aparecen claras diferencias entre los sujetos sometidos a estudios experimentales en torno al tema, en funcin de sus niveles formativos previos, de sus intereses, de la motivacin especfica con que asumen la tarea y de la planificacin previa para recordar. Algunas hiptesis, entre ellas los estudios de Pascual Leone, relacionan las dificultades de memorizacin de las personas de edad avanzada con los niveles de atencin y vigilancia. Los operadores responsables del esfuerzo mental seran, segn ellos, responsables, tambin, del deterioro de la capacidades mnmicas; pero, en todos los casos, lo que importa subrayar es que cada vez ms estudiosos coinciden en destacar las granes diferencias individuales que se producen en los procesos de desarrollo y cmo estas diferencias se acentan con el paso del tiempo en funcin de la experiencia vital del sujeto. 5. Aprender a pensar, pensar para aprender 5.1. Conceptos y teoras. Desde la dcada de los sesenta, han sido numerosas e intensas las propuestas de teoras, investigaciones y programas de intervencin, con el objetivo de mejorar la capacidad cognitiva. Es un hecho que la capacidad para adquirir y utilizar la informacin se puede mejorar entrenando las estrategias de procesamiento que se precisan. La psicologa cognitiva ha puesto de manifiesto, sin negar por ello la existencia de un componente bsico de carcter individual, que la inteligencia es una capacidad fundamentalmente dinmica y flexible, siendo sobre todo una capacidad para pensar y aprender. Esta capacidad opera a travs de una serie de habilidades, estrategias, tcticas y tcnicas cuya adquisicin se puede manipular y mejorar. Sin embargo, frente al notable inters que la investigacin y la prctica educativa ha dispensado al entrenamiento de las habilidades intelectuales, tambin es notable la decepcin generada por los programas en relacin con el impacto real que ejercen sobre el rendimiento de los estudiantes (Derry y Muphy, 1986). Como ya sugiriera Sternberg (1983) hace unos aos, una parte de la pobreza de los resultados observados se debe a la falta de una teora coherente y comprensiva sobre el desarrollo de las habilidades que caracterizan el comportamiento inteligente de los estudiantes. Por otra parte, los programas de intervencin, deberan orientarse tanto al desarrollo intelectual como al desarrollo de la motivacin de los estudiantes y, adems, deberan relacionar la enseanza que se imparte en la escuela con los comportamientos de los individuos en la vida real. La preparacin de los estudiantes como aprendices autnomos, creativos y con capacidad para resolver problemas requiere un nmero considerable de estrategias cuyo entrenamiento puede ayudar de manera notoria a atenuar las difi-

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cultades para aprender, particularmente, en el caso de los estudiantes menos dotados y con peor rendimiento. Como apuntaba Maclure (1998), el homo sapiens puede pensar sin que se le haya enseado formalmente a hacerlo. Pensar es como respirar para l, es una actividad normal de todo ser humano normal y la vida cotidiana depende de la capacidad de pensar. Depurar y agudizar las facultades del pensamiento ha sido siempre uno de los mayores objetivos de la educacin formal, una meta bsica de la enseanza y del aprendizaje en todas sus disciplinas. El objeto de la educacin no es otro que adquirir la capacidad para agrupar, manipular y aplicar la informacin, con el fin de comprender; y, por lo tanto, dominar una disciplina dada. En consecuencia, debe poder ayudar a pensar y hacerlo con un fin determinado. Asimismo, se supone que al aprender a usar eficazmente el poder del pensamiento a travs de las disciplinas de estudio del programa acadmico y prctico, se benefician otros aspectos de la existencia humana, otras formas de resolver problemas en contextos diferentes. Pues bien, a continuacin se analizarn las teoras ms relevantes al respecto, destacando particularmente los trabajos de De Bono (1973), Feuerstein (19541991), Gardner (1983-1999) y Sternberg (1985-2000), quienes se apoyan, por una parte, en la visin cognitiva de la inteligencia, cuyo punto central es su modificabilidad, dando especial relieve a la instruccin, como vehculo ms importante para provocar el cambio en la capacidad intelectual; por otra parte, en la aproximacin constructivista del aprendizaje de base piagetiana y vygotskyana; por otra parte, en la visin psicosociolgica de la experiencia en el aula, del entorno de aprendizaje, y, finalmente, en el procesamiento adecuado de la informacin. No obstante, entre las aportaciones sobre la enseanza del pensamiento habra que distinguir aquellas que se llevan a cabo como materia independiente (una asignatura ms), de las que lo hacen dentro del programa educativo (dentro de cada una de las asignaturas de currculo). Entre las primeras estaran las propuestas de De Bono y Feuerstein y entre las segundas las de Gardner y Sternberg. I. De Bono (1973) parte de la idea de que se han aceptado incondicionalmente determinadas teoras cuando verdaderamente son muy cuestionables, ya que: 1. El pensamiento crtico slo sirve cuando queremos discutir con alguien, pero tiene un valor limitado cuando pretendemos desarrollar un pensamiento original y eficaz, despilfarrando la mayor parte de la energa del pensador en defender una posicin y no en explorar positivamente sus posibilidades; por tanto, no es constructivo ni creativo. 2. El pensamiento analtico no debe conformarse con descubrir las causas de los problemas y enumerarlas; sino, adems, recorrer otros caminos, todos los que sean posibles.

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3. El pensamiento creativo tiene que generar nuevos proyectos con nuevas hiptesis, no limitndose a aplicar las viejas. De Bono es consciente de que dentro de cada asignatura se ensean implcitamente tcnicas de pensamiento, pero son muy limitadas, reducidas exclusivamente a la clasificacin de informacin y a su anlisis, as como algunas destrezas para el debate; lo que demuestra que estn muy lejos de cubrir la gama de tcnicas necesarias tanto para la vida como para su desarrollo (decisiones, prioridades, alternativas, otros puntos de vista, etc.). En suma, lo que propone en su mtodo CoRT es aplicar el pensamiento crtico, analtico y creativo, junto con el conocimiento, a la solucin de problemas; a lo que llama operatividad: capacidad de hacer. II. Feuerstein (1979) destaca como idea principal la posibilidad de que casi todos los jvenes puedan mejorar su inteligencia e incluso llegar a una reestructurain general de sus procesos cognitivos y mejorar su potencial de aprendizaje a travs de un correcto aprendizaje mediado (Teora de la Modificabilidad Estructural Cognitiva TMEC). En palabras de Vygotsky (1978:27), la trasmisin racional e intencional de la experiencia y el pensamiento a los dems, requiere un sistema mediatizador y el prototipo de ste es el lenguaje humano nacido de la necesidad de intercomunicacin durante el trabajo... La verdadera comunicacin requiere significados... La experiencia individual reside nicamente en su propia conciencia... Feuerstein piensa que los sujetos se desarrollan en contacto con dos tipos de experiencias: la directa y la mediada. 1. La directa, en la que el sujeto es modelado por sta; pero que, al no disponer de pautas culturales de la que extraer elementos formativos fruto del contacto directo, slo le sirven para subsistir y satisfacer sus necesidades bsicas. 2. La mediada, en la que alguien gua las experiencias del sujeto, dndoles sentido, finalidad, organizacin e interpretacin; lo que le confiere una visin ms enriquecedora y estructurada. Esta experiencia mediada, para ser enriquecedora, debe tener las siguientes caractersticas: * Intencionalidad y reciprocidad. El mediador debe querer transmitir algo que, a su vez, a l le transmitieron. Debiendo tener un significado bien determinado las experiencias, sin dejarlas al azar. * Trascendencia. El mediador debe transformar las necesidades inmediatas en otras ms permanentes, a mayor largo plazo, lo que permitir al alumno regular su conducta, no slo en el momento actual, sino adems en el futuro. * Competencia. El mediador debe organizar la clase de forma que todos los alumnos puedan obtener xito en la tarea emprendida, deben sentirse capaces de culminar con xito el reto que se planteen. * Significado. El mediador debe procurar que las situaciones de aprendizaje se presenten de forma interesante enlazando con las propias vivencias de los alumnos, de manera que los implique activa y emocionalmente.

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* Regulacin y control del comportamiento. El mediador debe transmitir al alumno conocimientos de qu est haciendo, porqu y para qu lo hace, y cmo lo ha hecho. De manera que sirva de pauta a imitar y mejorar en el futuro. * Participacin activa y conducta compartida. El mediador debe compartir las experiencias de aprendizaje, entablando dilogos y discusiones con los alumnos. * Mediacin de la bsqueda, planificacin y logro de los objetivos. El mediador debe consensuar la recogida de informacin y la planificacin de las tareas y estrategias, para el logro de los objetivos propuestos. * Individualizacin y diferenciacin psicolgica. El mediador debe ser un buen conocedor de las caractersticas individuales y diferenciales de los alumnos, para adaptar el proceso de enseanza-aprendizaje a esas condiciones especiales. * Mediacin del cambio. El mediador debe motivar y desarrollar en los alumnos el inters progresivo por la bsqueda de la novedad y la complejidad de sus intervenciones, afrontando los cambios. * Mediacin de la modificabilidad. El mediador debe transmitir progresivamente al alumno un sentimiento claro de que puede actuar autnomamente y modificar su forma de ser, obrar y pensar. * Mediacin del optimismo. El mediador debe transmitir y provocar optimismo. La modificabilidad de la que habla Feuerstein no se refiere exclusivamente a la adquisicin de algunas habilidades cognitivas bsicas, sino especialmente a la estructura del intelecto, lo que dar mayores garantas de estabilidad con el paso del tiempo. Modificacin que entiende como nueva forma de tratar la informacin (Feuerstein, Rand, Hoffman y Miller, 1980). De ello se desprende que el principal objetivo sea cambiar la estructura cognitiva del alumno para que se convierta en un pensador autnomo capaz de elaborar, llevar a cabo y comunicar sus propias ideas, a travs de un mediador. La carencia de aprendizaje mediado es la causa ms comn de un desarrollo cognitivo deficiente y de la escasa modificabilidad de la inteligencia y, por extensin, del comportamiento. El modelo de Feuerstein queda expresado mediante la frmula S - H - O - H R, donde S es el estmulo de la experiencia directa, H es la funcin mediadora humana que da significado al estmulo, O es el organismo donde se dan los procesos mentales, y R es la repuesta del sujeto despus de elaborarla. Por tanto, es un modelo comportamental en el que el condicionador del aprendizaje es la mediacin humana. La diferencia fundamental entre la propuesta de De Bono y la de Feuerstein radica en que mientras que el primero tiene como objetivo darle al alumno un conjunto de herramientas con las cuales aplicar su inteligencia natural de una manera ms eficaz, el segundo trata de desarrollar la inteligencia del alumno, por lo que este ltimo resulta ms ambicioso. III. Gardner (1983), insatisfecho por las investigaciones sobre la inteligencia basadas exclusivamente en las puntaciones de los tests y sus correlaciones,

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decidi estudiar la informacin emprica relativa a la cognicin humana incluyendo datos biolgicos, psicolgicos y transculturales. En especial, observ lo que se sabe sobre el desarrollo de la capacidad para utilizar smbolos en nios dotados, normales y poco dotados. De esta manera, pudo formular su teora de las inteligencias mltiples, proponiendo siete reas, en principio, y ahora ocho, relativamente autnomas de cognicin humana o inteligencias: lingstica, lgicomatemtica, musical, espacial, corporal-cinestsica, interpersonal e intrapersonal; separando ltimamente de la unidad lgico-matemtica la inteligencia naturalista (199). Solamente a travs de la combinacin de estas inteligencias, podremos explicar una serie relativamente completa de capacidades y estados extremos que figuran en todas las culturas humanas. Ms an, aunque se sealen siete inteligencias, podra ocurrir que se presentara un caso convincente en favor de otras. Esta propuesta no quiere ser exclusiva ni exhaustiva. Ms bien, simplemente muestra la evidencia y los argumentos de que disponemos hasta el momento (Kornhaber y Gardner, 1998). Gardner define la inteligencia como capacidad o conjunto de capacidades que permite al individuo solucionar problemas y elaborar productos que son importantes en uno o ms contextos culturales, entendindola como potencial, cuya presencia permite el acceso individual a formas de pensamiento adecuadas a tipos de contenido especfico. Recientes aportaciones sobre el desarrollo infantil demuestran que, aunque las personas avanzan a travs de etapas en la comprensin y la capacidad de emplear sus aptitudes cognitivas, este progreso no es tan sincrnico como crea Piaget; por el contrario, vara en funcin de las inteligencias (Damon, 1989; Gardner y Wolf, 1983). Ms an, la existencia de una fuerza particular en una inteligencia no predice una fuerza comparable en otros dominios (Gardner, 1983; Feldman, 1986). Las diferentes culturas ponen el acento en diferentes inteligencias y combinaciones de inteligencias, destacando comnmente entre ellas el lenguaje y la relacin interpersonal. As pues, deberamos tratar ya de superar la hegemona exclusivamente lingstica y lgico-matemtica tpica de la educacin tradicional, utilizando como palanca de pensamiento y aprendizaje en cada estudiante su/s inteligencia/s ms sobresaliente/s; para que, apoyados en ella/s, podamos ir organizando y desarrollando las dems. Por otra parte, habr que superar los planteamientos academicistas tradicionales contextualizando el pensamiento y los aprendizajes en su propio ambiente, en la vida real. Una escuela descontextualizada hace que sus materias sean poco interesantes o no tengan valor para la mayora de sus alumnos y los mtodos con que se ensean esas materias tambin lo son. En este sentido, resultan esclarecedoras las palabras de Gardner (1998:207), cuando dice: Si pensamos que los estudiantes son recipientes vacos (o, como a menudo se considera en Estados Unidos, productos) es posible defender la posicin de mantener un

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enfoque tradicional, o uniforme, de lnea de produccin. En las escuelas que utilizan un enfoque uniforme, se ensea a cada nio lo mismo, de la misma forma, al mismo tiempo, se le evala con los mismos mtodos de aplanadora. Por el contrario, la escuelas que siguen una filosofa ms progresista estn haciendo esfuerzos para dar un contexto a los aprendizajes, haciendo que los estudiantes trabajen resolviendo problemas que les intrigan, determinando tcticas mediante las cuales responder a sus dudas y expectativas, as como presentar los resultados de diferentes formas. Se trabajan tambin las artes y otras manifestaciones del pensamiento humano, utilizando las formas de inteligencia relacionadas con ellas, potenciando los encuentros con los adultos para aprender y modelar sus experiencias con otras tcnicas y disciplinas ms reales. La lnea maestra a llevar a cabo sera de la siguiente forma: Introducir al alumno mostrndole las diferentes reas, identificar sus puntos fuertes (en qu inteligencia/s destaca), favorecer desde los puntos fuertes los ms dbiles, y transferir a la vida real. Para ello, se podra tomar el siguiente camino: 1 Partir de centros de inters desde el rea naturalista, asegurando el enlace de los nuevos conocimientos con los previos (prerrequisitos). 2 Disear los centros o estilos de trabajo, partiendo de los puntos fuertes, organizando progresivamente la tarea desde ellos hacia los dems, y utilizando los materiales adecuados. 3 Disear y desarrollar los centros de aprendizaje. 4 Disear y desarrollar actividades en las diferentes inteligencias, partiendo siempre de la ms fuerte. En cuanto a la estructura general del curriculum cognitivo se puede secuenciar en cuatro fases: 1 Introducir a los alumnos en las distintas reas de aprendizaje. 2 Identificar los puntos fuertes de los alumnos en las diferentes reas. 3 Fomentar las reas fuertes de los alumnos y respetar su diversidad. 4 Construir y transferir los puntos fuertes de los alumnos en otras reas. Todo ello favorecer la transferencia partiendo desde el propio conocimiento de cules son los puntos fuertes, buscando su explicacin, mediante los estilos propios de aprendizaje y a travs del conocimiento de los contenidos. IV. Sternberg (1985) entiende la inteligencia como capacidad de autogobierno cognitivo que procura la adaptacin al medio, inhibiendo la primera respuesta instintiva, redefinindola y eligiendo la mejor respuesta. Destacando en ella tres aspectos esenciales: analtico, sinttico o creativo y prctico, que estn representados en los tres subsistemas que integran su teora trirquica: componencial, experiencial y contextual. El primer subsistema, componencial (aspecto analtico), especifica los tres procesos bsicos de la inteligencia: metacomponentes, que planifican y evalan las estrategias de solucin de problemas; componentes de ejecucin, que ejecutan las solucio-

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nes a los problemas; y, componentes de adquisicin de conocimiento, que aprenden la informacin que constituye la experiencia previa. De forma que los metacomponentes controlan y activan los otros tipos de componentes, quienes, a su vez, proporcionan retroalimentacin a los metacomponentes. En general, los buenos pensadores analticos emplean bastante bien estos componentes en la solucin de problemas. El segundo subsistema, experiencial (aspecto sinttico o creativo), resulta de aplicar a la experiencia los componentes anteriores, siendo al principio novedoso y, poco a poco, cada vez ms familiar. Los niveles experienciales ms relevantes para la inteligencia son el nivel de novedad relativa y el de automatizacin. El autntico pensador sinttico es aquel que aplica especialmente los componentes a tareas y situaciones relativamente novedosas, por lo que no son buenas las situaciones extremadamente novedosas. El tercer subsistema, contextual (aspecto prctico), resulta cuando se aplican los componentes a situaciones o metas de adaptacin al ambiente, a la vida real, seleccionando nuevos ambientes o modificando el actual, mejorndolo y compatibilizndolo con sus necesidades, deseos y oportunidades. Esta teora trirquica, como sugiere el mismo Sternberg (1993:435), es factible integrarla con la propuesta de las inteligencias mltiples de Gardner (1983), aplicndola a todas sus reas dentro del currculo escolar. A este respecto, nuestra colaboracin es como la de cualquier matrimonio -el xito depende, en gran parte, de la habilidad para resolver conflictos, o, por lo menos, pasarlos por alto suficientemente para funcionar en conjunto-. De ah, su propuesta conjunta del Programa de Inteligencia Prctica para las Escuelas (Yale-Harvard). En cuanto a la localizacin de la inteligencia, Sternberg y Detterman (1992:2021) hacen la siguiente propuesta: I. En el individuo. A) Nivel biolgico. 1. Interorganismos. a) Interespecies (evolucin). b) Intraespecies (gentica). c) Interaccin inter-intra. 2. Intraorganismos. a) Estructura. b) Proceso. c) Interaccin estructura-proceso. 3. Interaccin inter-intraorganismos. B) Nivel molar. 1. Cognitivo. a) Metacognicin. i. Procesos. ii. Conocimiento.

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iii. Interaccin procesos-conocimiento. b) Cognicin. i. Procesos. ( a ) Atencin selectiva. ( b ) Aprendizaje. ( c ) Razonamiento. ( d ) Solucin de problemas. ( e ) Toma de decisiones. ii. Conocimiento. iii. Interaccin procesos-conocimiento. c) Interaccin metacognicin-cognicin. 2. Motivacional. a) Nivel (magnitud) de la energa. b) Direccin (disposicin) de la energa. c) Interaccin nivel-direccin. C) Nivel conductual. 1. Acadmico. a) Dominio general. b) Dominio especfico. c) Interaccin general-especfico. 2. Social. a) Intrapersonal. b) Interpersonal. c) Interaccin intra-interpersonal. 3. Prctico. a) Ocupacional. b) Cotidiano. c) Interaccin ocupacional-cotidiano. D) Interaccin biolgico-molar-conductual. II. En el medio ambiente. A) Nivel de cultura/sociedad. 1. Demandas. 2. Valores. 3. Interaccin demandas-valores. B) Nivel de posicin intra cultura/sociedad. 1. Demandas. 2. Valores. 3. Interaccin demandas-valores. C) Interaccin nivel x subnivel. III. Interaccin individuo-medio ambiente. En suma, Sternberg (2000a) afirma que las claves para una inteligencia exitosa (successful intelligence) son las siguientes:

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1 No es posible pensar en una sola inteligencia, sino en la multiplicidad dentro de un mismo sistema coherente, con lo que se muestra de acuerdo con Gardner, desde su propuesta trirquica: analtica, sinttica o creativa y prctica. 2 La inteligencia se manifiesta a travs de las habilidades para aprender e intervenir. 3 La inteligencia es modificable. 4 Es preciso unificar la inteligencia en el aula con la inteligencia en la calle, favoreciendo la creatividad. 5 Es imprescindible culminar las intervenciones con xito dentro de su contexto. Beltrn (2000b), en esa lnea, propone un modelo de inteligencia basado en los siguientes aspectos o dimensiones: 1 Disposicional: Motivacin y disposicin o disponibilidad de las habilidades para enfrentarse al desafo. 2 Directiva: Procesos ejecutivos de planificacin, regulacin, evaluacin y reorganizacin (feedback). 3 Estratgica: Seleccin, elaboracin y organizacin. Seran algo as como las herramientas, la tecnologa mental. 4 Analtica: Sobre lo adquirido en la fase anterior. 5 Experiencial: Con significado adquirido a travs de la propia experiencia. 6 Contextual: Adaptado al ambiente o contexto real donde se desarrolla. 7 Emocional: Habilidades relacionadas que se pueden implicar y desarrollar. 8 Sabidura: Dando paso a niveles superiores de pensamiento: pragmtico, dialctico y conciliado. 5.2. Evaluacin. La evaluacin del aprender a pensar y pensar para aprender, en general, es entendida como una evaluacin de la inteligencia, segn las interpretaciones que de ella tienen los diferentes investigadores actuales, aunque cada vez ms alejadas de las lneas psicomtricas clsicas. Lgicamente, cada propuesta terica, en funcin de su modelo explicativo, utiliza una forma particular de evaluacin y de intervencin. De manera que, tan slo como referencia, ya que directamente no es el objetivo de esta investigacin, merece la pena destacar dos lneas principalmente, por una parte, la evaluacin del potencial de aprendizaje (Feuerstein, 1987) y, por otra, la evaluacin de la inteligencia (Gardner, 1989; Sternberg, 1991). I. Feuerstein (1987) propuso el Learning Potential Assessment Device LPAD (Evaluacin Dinmica del Potencial de Aprendizaje), conjunto de estrategias de anlisis de la inteligencia, cuya finalidad consiste en provocar una serie de interacciones entre examinador y examinado para valorar su potencial oculto o su capacidad para beneficiarse del aprendizaje, orientado al anlisis de los procesos mediante los cuales los alumnos van razonando sus respuestas. En la interpretacin de los resultados se ha de valorar la cualidad de los cam-

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bios y la rapidez o destreza de los sujetos para procesar, analizar y generalizar la informacin. Este tipo de evaluacin, provocando cambios cognitivos durante el proceso de la prueba, tiene como objetivo medir, no el CI o la capacidad actual del sujeto, sino su posibilidad de cambiarlos, destacando el valor de la mediacin cultural, entre otros factores del aprendizaje. II. Gardner, cuya propuesta va unida al del Proyecto Cero de Harvard (1988), comenz con la puesta en marcha de un programa y tcnicas de evaluacin de la inteligencia, utilizando contextos ms prximos a la vida real, tanto en educacin preescolar como en primaria y secundaria. Kornhaber y Gardner (1998:209) critican los tests normalizados de inteligencia, desde la lnea que defienden, basndose en criterios tales como: 1 Frecuentemente preguntan sobre cosas que nada tienen que ver con lo que los alumnos piensan normalmente. 2 Aunque pueden detectar ciertos aspectos de la inteligencia lgico-matemtica y lingstica, tienen poco que decir respecto a las tcnicas del pensamiento en otras esferas. 3 Presentan una falta generalizada de validez ecolgica. 4 No revelan el estilo cognitivo de las personas: grado de persistencia, diversin o aburrimiento que pueden tener al realizar una tarea 5 No ofrecen datos sobre la forma en que la gente maneja problemas con los que estn familiarizados e interesados. Esta visin llev a los investigadores del Proyecto Cero a desarrollar evaluaciones ecolgicamente vlidas en los niveles educativos no universitarios, de manera que, por ejemplo, en preescolar crearon el Proyecto Spectrum, diseando actividades y materiales atractivos que permitiesen desarrollar las diversas inteligencias de los alumnos, mientras que los docentes podran descubrir, de manera no instructiva, la gama de potencialidades, intereses y estilos de trabajo que emplean individualmente. Esta iniciativa contribuy a demostrar que, desde edades muy tempranas, hay variaciones en las formas y tcnicas de pensamiento. En educacin primaria y secundaria, el Proyecto Cero est trabajando el PROPEL, que es un mtodo combinado de programa y evaluacin que alienta la produccin, la percepcin y la reflexin en las reas de msica, artes visuales y escritura imaginativa, a travs de un conjunto de actividades motivadoras, como por ejemplo el dilogo. III. Sternberg (1993) ha propuesto el Sternberg Triarchic Abilities Test STAT, cuyo objetivo es medir de cuatro formas (a travs de material verbal, cuantitativo, figurativo y de ensayos) los tres tipos de habilidades intelectuales (analtica, creativa y prctica), segn su teora. 1. El tipo de habilidad intelectual analtica se enfoca de las siguientes formas:

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a) En el apartado analtico verbal se requiere deducir el significado de palabras dentro de un contexto, que es como lo aprendemos las personas; porque, de esta forma, se evita el problema del tests que se supone que mide razonamiento verbal y acaba midiendo conocimiento verbal. b) En el apartado analtico cuantitativo hay que hallar cul es el siguiente nmero de una serie, centrndose en el anlisis de patrones y no en el clculo operacional, y tampoco requiere apenas conocimientos matemticos sofisticados, poniendo el nfasis en el razonamiento. c) En el apartado analtico de figuras se tratan problemas abstractos de matrices, de manera que la persona que hace el test puede ver que a una matriz le falta un elemento y debe encontrarlo. d) En el apartado analtico de ensayos se proporciona la oportunidad de llegar ms all de las opciones mltiples que ofrecen otras pruebas, dando la oportunidad de expresarse libremente y mostrar los procesos de pensamiento de cada uno de forma ms activa y elaborada. 2. El tipo de habilidad intelectual creativa se enfoca de las siguientes formas: a) En el apartado creativo verbal se solicita resolver analogas verbales, pero como si un presupuesto verbal fuera verdadero. La idea es que se realice la tarea a travs de un razonamiento novedoso e hipottico, pensando de una manera que, probablemente, antes no se haba hecho. b) En el apartado creativo cuantitativo se requiere solucionar problemas de operaciones numricas. c) En el apartado creativo de figuras se pide solucionar problemas completando una serie que es diferente a la que se aprendi en la regla, transfirindolas a un nuevo dominio. d) En el apartado creativo de ensayo se solicita que se invente algo, sin interesar la redaccin, la organizacin ni lo prctica que pueda ser la propuesta, tan slo se mide la creatividad. 3. El tipo de habilidad intelectual prctica se enfoca de las siguientes formas: a) En el apartado prctico verbal se presentan situaciones cotidianas de personas con la edad de aquellas a las que se le aplica el test, como por ejemplo: cmo conseguir dinero para sobrevivir?. b) En el apartado prctico cuantitativo se proponen problemas matemticos de la vida cotidiana. c) En el apartado prctico de figuras se utilizan mapas para hacer rutas de viajes. d) En el apartado prctico de ensayo se pide solucionar problemas prcticos de sus propias vidas. Por otra parte, Sternberg y Wagner (1991) disearon el MSG Thinking Styles Inventory, para evaluar los estilos intelectuales o tipos de autogobierno mental, distinguiendo entre funciones (legislativa, ejecutiva y judicial), formas (monrquica, jerrquica, oligrquica y anrquica), niveles (global y local), orientaciones (progresista y conservador) y mbitos (introvertido y extrovertido).

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IV. Gardner y Sternberg (1993) han diseado en comn el Practical Intelligence for Schools PIFS, programa para el desarrollo de la inteligencia prctica en las escuelas, que a la vez sirve de evaluacin, cuya intencin es utilizar el contenido de las materias escolares como trampoln para adquirir habilidades de aprendizaje, a travs de la reflexin y el control de las propias tcnicas de pensamiento, fruto de sus teoras sobre la inteligencia: Teora de las Inteligencia Mltiples y Teora Trirquica de la Inteligencia. 5.3. Programas de intervencin. La apreciacin gradual de que la inteligencia es modificable y transaccional, de que la conciencia y la cultura son factores importantes en el desarrollo y el entendimiento humano, de que tanto los ambientes formales como los informales pueden ser instructivos y formativos, y de que la motivacin humana y el empeo personal mantienen una poderosa influencia sobre cualquier actividad del hombre, ha generado la inquietud de ofrecer programas de intervencin con la intencin de ensear a los estudiantes a aprender a pensar y pensar para aprender. Siguiendo a De Bono (1998:40), para seleccionar un mtodo para ensear a pensar habra que tener en cuenta los siguientes aspectos: 1. Debe ser simple, prctico y deben poder utilizarlo gran cantidad de docentes. 2. Debe ser lo suficientemente slido como para que pase de instructor a instructor y de docente a alumno y siga intacto. 3. Debe utilizar un diseo en el que cualquier parte sea utilizable y til en s misma, an cuando se olviden o no se atiendan las dems. 4. Debe estar especficamente referido a situaciones de la vida real. 5. Debe ir ms all del pensamiento reactivo y la seleccin de la informacin para llegar a las tcnicas operativas necesarias en la vida real, lo que incluye el nfasis en el pensamiento perceptivo (cmo vemos el mundo que nos rodea). 6. Debe poder ser utilizado con alumnos de diferentes edades y capacidades, por docentes con distintas aptitudes y diferentes culturas, religiones y experiencias. 7. Deben hacer disfrutar a los alumnos con la enseanza del pensamiento. En general, estas ideas han servido para disear y llevar a la prctica diversos programas de intervencin, tales como: Cooperative Learning de Slavin (1980), Philoshophy for Children de Lipman (1985), CoRT Thinking Material de De Bono (1985), Instrumental Enrichment Program de Feuerstein (1985), Estrategias de Pensamiento de Orden Superior HOTS de Pogrow (1985), Cognitive Curriculum for Young Children Brigth Start de Haywood, Brooks y Burns (198), Productive Thinking Program de Covington (1987), Programa de Intervencin Cognitiva PAR de Dez y Romn (1988), Intelligence Proyect de la Universidad de Harvard de Hernstein et Al., (1989), Intelligence Training Program de Stenberg (1990), Practical Intelligence for

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Schools PIFS de Sternberg y Gardner (1993), Proyecto de Activacin de la Inteligencia de Baqus (1995). De entre todos estos programas de intervencin, siendo congruentes con la lnea apuntada en el anterior apartado, aqu analizaremos las propuestas de Feuerstein (1987) y la conjunta de Gardner y Sternberg (1993). I. Feuerstein (1985), con su Instrumental Enrichment Program PEI, pretende desarrollar la capacidad humana modificndola a travs de la exposicin directa a los estmulos y a la experiencia proporcionada por el contacto directo con la vida, a travs del aprendizaje formal e informal. Este programa est especialmente indicado para aquellas personas cuyo rendimiento intelectual es bajo o sufren deprivacin cultural, siendo sus principales objetivos los siguientes: 1. Adquirir conceptos bsicos, vocabulario y operaciones a travs de la experiencia, restituyendo y enriqueciendo las funciones y componentes deficitarios de la inteligencia. 2. Trabajar y desarrollar los componentes y funciones intelectuales que no forman parte del repertorio cognitivo del sujeto. 3. Potenciar la motivacin intrnseca, creando la necesidad de usar estos componentes o funciones de la inteligencia adecuadamente en todas las manifestaciones de la vida. 4. Propiciar y facilitar el pensamiento reflexivo. 5. Favorecer la autopercepcin. El programa se presenta en unidades estructurales adaptadas a cada funcin cognitiva particular, a sus necesidades y deficiencias. Tales son: 1. Organizacin de puntos. 2. Orientacin espacial I. 3. Comparaciones. 4. Clasificaciones. 5. Percepcin analtica. 6. Orientacin espacial II. 7. Ilustraciones. 8. Progresiones numricas. 9. Relaciones familiares. 10. Instrucciones. 11. Relaciones temporales. 12. Relaciones transitivas. 13. Silogismos. 14. Diseo de patrones. 15. Orientacin espacial III. En cuanto a la metodologa del programa, decir que para la aplicacin correcta de cada una de las unidades es preciso llevar a cabo los pasos siguientes:

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1. Preparacin de la unidad, reflexionando sobre los objetivos, estrategias, naturaleza del trabajo que se va a realizar, etc.; siguiendo un modelo totalmente presentado. 2. Introduccin, situando a los nios en la tarea: normas a seguir, implicaciones, etc. (alrededor de diez minutos). 3. Realizacin de la tarea, valorando el ejercicio como un reto personal. El aplicador debe hacer de mediador, facilitador y animador; interactuando con todos, observando las realizaciones de cada uno, etc. (sobre veinte minutos). 4. Discusin en grupo, revisando los procesos, las dudas, los errores, comentando las soluciones, etc. (sobre veinte minutos). 5. Resumen, informando el mediador acerca de lo que se ha conseguido respecto de los objetivos propuestos, las estrategias que se van usado, transferencia hacia otras situaciones, etc. En el mbito escolar, el papel del maestro como mediador debe guiar la actividad de los alumnos atendiendo especficamente los procesos mentales irreversibles ms que los productos, impulsando la curiosidad mental y el deseo de eficacia, guiando con preguntas inteligentes la introspeccin sobre la tarea a realizar, creando un clima de confianza y de bsqueda de soluciones, fomentando el deseo de precisin y el dominio de la impulsividad, orientando la aplicacin de las estrategias empleadas a otras de la vida real, etc. En suma, este programa resulta un mtodo de trabajo eficaz, sistemtico y til para modificar comportamientos no deseables, especialmente en grupos marginales, para el diagnstico de dficits y para su modificacin; aunque, existen algunas dificultades para su aplicacin, tales como: la alta capacitacin que exige al mediador, el tiempo que se necesita, la formacin de grupos pequeos heterogneos, etc. II. Gardner y Sternberg (1993) han diseado en comn el Practical Intelligence for Schools PIFS, programa para el desarrollo de la inteligencia prctica en las escuelas, cuya intencin es utilizar el contenido de las materias escolares como trampoln para adquirir habilidades de aprendizaje, a travs de la reflexin y el control de las propias tcnicas de pensamiento, mientras trabajan en una materia curricular especfica, armonizando y conjugando as sus respectivas posturas Teora de las Inteligencias Mltiples y Teora Trirquica de la Inteligencia. La idea de ambos autores es que la inteligencia es un conjunto de habilidades (ms que capacidades) relacionadas entre s, que cambian o evolucionan con la edad; de manera que, la inteligencia exitosa o la frmula para el xito en la vida consta de cuatro elementos: 1) Conocer las propias fuerzas o habilidades. 2) Capitalizar las propias fuerzas. 3) Conocer las debilidades propias. 4) Compensar fuerzas y debilidades.

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El patrn instruccional de este programa va en la lnea de ensear no slo contenido prctico, sino cmo pensar en ese contenido, equilibrando as contenido con procesos de pensamiento. Su base se puede localizar en la teora instruccional de Sternberg y Davidson (1989), sintetizada de la siguiente forma (Sternberg, 1993:43) (Cuadro 9.1.): Cuadro 9.1. 1. Orientacin. 1.1. Ejemplo/s concreto/s para discusin. 1.2. Identificacin de procesos y contenidos. 1.3. Nombramiento de procesos y contenidos. 1.4. Ejemplos generados por los alumnos. 2. Solucin de problemas en grupo. 3. Solucin de problemas entre grupos. 4. Solucin de problemas por individuos. Teora de la instruccin por cuatro facetas de Sternberg y Davidson (1989) El programa utiliza cuatro mecanismos para fomentar la transferencia del contenido y de los procesos del programa, tales son (Cuadro 9.2.): Cuadro 9.2. 1. Especificidad de codificacin. 2. Compatibilidad de organizacin de la materia con el uso. 3. Discriminacin entre contenidos y procesos similares segn su uso. 4. Disposicin para usar los conceptos del curso en su vida cotidiana. Mecanismos de transferencia (Sternberg, 1993) El programa ha pasado por dos etapas, la primera, en la que haba dos subprogramas, el de Yale (Sternberg), sin integracin en el currculo escolar, y el de Harvard (Gardner), integrado en el curriculum, aunque ambos involucraban las asignaturas de lengua y literatura, matemticas, ciencias de la naturaleza y ciencias sociales. En la segunda etapa, tan slo existe un programa, quedando ambos perfectamente integrados. El programa, est organizado en trminos del manejo de tres elementos: s mismo (conocernos), las tareas (conocer y organizar nuestras tareas) y los otros (conocer y relacionarnos con los dems); considerando cada una de las inteligencias mltiples (Gardner) en cada una de las formas de manejo. El programa se inicia con la unidad relativa al gobierno de s mismo, tratando como primer tema los tipos de inteligencia trirquica y mltiples integrados, seguida de los temas de la comprensin de las calificaciones de las pruebas, los tipos de estilos de pensamiento, el aprendizaje de la nueva informacin, la demostracin de lo que se ha aprendido, el conocimiento del propio estilo de aprendizaje, el reconocimiento de todos y partes, la memoria, el uso de la informacin ya aprendi-

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da, la creacin de imgenes en la mente, el uso de la vista, la traduccin de los pensamientos a la accin, la aceptacin de responsabilidades y la coleccin de pensamientos. En suma, lo que pretende esta unidad es: tomar conciencia de las capacidades de que se dispone y de lo que las motiva, en qu contextos, qu nos ayuda a aprender, estrategias de memorizacin y otras que van a facilitar el proceso, y responsabilidad (Cuadro 9.3.). Cuadro 9.3. 1. Estilos de inteligencia. 2. Comprensin de las calificaciones de la prueba. 3. Estilos de pensamiento. 4. La absorcin de la nueva informacin. 5. La demostracin de lo que se ha aprendido. 6. El conocimiento del propio estilo de aprendizaje. 7. El reconocimiento de todos y partes. 8. La memoria. 9. El uso de la informacin ya aprendida. 10. La creacin de imgenes en la mente. 11. El uso de la vista. 12. La traduccin de los pensamientos a la accin. 13. La aceptacin de responsabilidades. 14. La coleccin de pensamientos. Contenidos del gobierno de s mismo (Sternberg, 1993) En la unidad relativa al gobierno de las tareas, los temas tratados son: la organizacin, el reconocimiento de problemas, las estrategias para la solucin de problemas, la planificacin para evitar problemas, la ruptura de malos hbitos, la bsqueda de ayuda para la solucin de problemas, el manejo del tiempo, la comprensin de preguntas, el seguimiento de directrices y la realizacin de las pruebas. En suma, lo que pretende esta unidad es: saber qu pide el profesor, cul es la informacin ms relevante, qu se debe hacer, cmo se debe planificar la intervencin, qu estrategias poner en juego, distribucin del tiempo, cundo se fracasa y cmo superarlo (Cuadro 9.4.). Cuadro 9.4.

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1. La organizacin. 2. El reconocimiento de problemas. 3. Las estrategias para la solucin de problemas. 4. La planificacin para evitar problemas. 5. La ruptura de malos hbitos. 6. La bsqueda de ayuda para la solucin de problemas. 7. El manejo del tiempo. 8. La comprensin de preguntas. 9. El seguimiento de directrices. 10. La realizacin de las pruebas. Contenidos para el gobierno de las tareas (Sternberg, 1993) En la unidad relativa al gobierno de la cooperacin con los otros, los temas tratados son los siguientes: discusiones en clase, saber qu decir, el ajuste de la conversacin a la audiencia, el entendimiento de otros puntos de vista, la solucin de problemas de comunicacin, la seleccin entre alternativas y la percepcin de relaciones entre la actualidad y el futuro. En suma, lo que pretende esta unidad es: la relacin con los dems como apoyo al trabajo individual, utilizar al profesor como fuente de recursos, utilizar las reglas explcitas e implcitas de relacin con los dems y desarrollar las habilidades sociales de relacin y comunicacin (Cuadro 9.5.). Cuadro 9.5. 1. Discusiones en clase. 2. Saber qu decir. 3. El ajuste de la conversacin a la audiencia. 4. El entendimiento de otros puntos de vista. 5. La solucin de problemas de comunicacin 6. La seleccin entre alternativas 7. La percepcin de relaciones entre la actualidad y el futuro. Contenidos para el gobierno de la cooperacin con los otros (Sternberg, 1993) La instruccin del programa debe impartirse durante un ao, aunque tambin puede hacerse en un semestre, aplicndose tres veces por semana, con una duracin de cuarenta y cinco minutos por sesin, aproximadamente, siendo especialmente apropiado para nios de once a catorce aos. El programa cuenta con dos guas, una para maestros y otra para alumnos. Para cada tema o ncleo de intervencin, el profesor debe asegurarse de que se especifique con claridad los siguientes elementos: ttulo, sesiones, objetivos, contenido y aptitudes previas (prerrequisitos). Cada sesin se debe llevar a cabo de la siguiente forma: enlazando con la sesin anterior, realizando actividades y analizando respuestas. Por ejemplo, sobre el tema a tratar (ej.: la responsabilidad): leer un texto (sobre la responsabi-

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lidad de una serie de personas), describir y comentar en una situacin dada (la responsabilidad de todos los que toman parte en un partido de ftbol, en un barco, etc.), evaluacin y orientacin para el desarrollo (sugerencias). 6. Estrategias de pensamiento En la investigacin especializada en estrategias pueden recogerse multitud de definiciones al respecto; no obstante, el nivel de generalizacin concedido al concepto de estrategia vara segn el tipo de definicin formulada. Por ello, se recogen aqu dos grupos claramente diferenciados y delimitados de definiciones: cognitivas y metacognitivas. a) Cognitivas Las estrategias cognitivas son entendidas como operaciones y procedimientos para adquirir, retener y recuperar diferentes tipos de conocimientos y ejecucin..., suponen del estudiante capacidades de representacin (lectura, imgenes, habla, escritura y dibujo), capacidades de seleccin (atencin e intencin) y capacidades de autodireccin (autoprogramacin y autocontrol) (Rigney, 1978:165). O'Neil y Spielberger (1979), a diferencia de Rigney, prefieren utilizar el trmino estrategias de aprendizaje, pues en l incluyen las estrategias de tipo afectivo y motor, as como las estrategias propiamente cognitivas. Sin embargo, ello no impide que puedan establecerse algunas distinciones; por ejemplo, respecto a un tema muy prximo conceptualmente, tal como el de los estilos cognitivos. Perkins (1985), comentando el problema de la generalidad o especificidad de las habilidades cognitivas, seala una posible distincin entre estilos cognitivos y estrategias; los primeros estn ms ntimamente unidos a la conducta general de la persona, a su modo de pensar, de percibir, etc. (dependencia/independencia de campo; reflexividad/impulsividad, etc.), mientras las segundas son conductas ms especficas aplicadas en un momento determinado de un proceso (como, repasar un texto que se acaba de leer). Considerando el aprendizaje como un proceso de comunicacin, las estrategias de aprendizaje son un protocolo fundamental o marco organizativo de las comunicaciones, utilizado por los estudiantes para mejorar la recepcin y facilitar el procesamiento de la informacin que sobre el tema les va llegando (Gulick, 1979:249). Otros autores no slo conectan el concepto de estrategia con el de aprendizaje, sino tambin con el de inteligencia; as, Baron (1986) comenta la idea de que las estrategias pueden ser un componente crucial de la conducta inteligente, pues sta consiste, en gran parte, en una tendencia a utilizar determinadas estrategias de aprendizaje, comprensin o solucin de problemas. Sin embargo, tal como hemos podido observar en las definiciones recogidas, el substrato bsico radica en el aprendizaje y en el procesamiento de la informacin. En este sentido Dansereau (1985:120) afirma que una estrategia efectiva de aprendizaje puede ser definida como un conjunto de procesos o pasos que pueden facilitar la adquisicin, almacenamiento y/o utilizacin de la informacin. Las estrategias pueden operar

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directamente sobre la informacin (primarias) o indirectamente (secundarias o de apoyo), mejorando el propio clima cognitivo-afectivo del sujeto. Asimismo, Weinstein y Mayer (1986) o Weinstein (1988) definen las estrategias como conductas o pensamientos activados por el alumno para facilitar el proceso de codificacin de la informacin, de modo que se pueda mejorar la integracin y recuperacin del conocimiento. Derry y Murphy (1986) entienden por estrategia el modo de abordar una determinada tarea de aprendizaje, desde la determinacin del plan de actuacin para resolver con xito la tarea, hasta la aplicacin de procedimientos especficos para adquirir el conocimiento o superar cada una de las fases o etapas de la tarea, incluyendo la propia conciencia del que aprende acerca de lo que hace y el control que de ello se deriva sobre la actividad del aprendizaje. En otro trminos, las estrategias de aprendizaje son los procedimientos o procesos de pensamiento que utilizamos las personas en situacin de aprendizaje con objeto de adquirir nuevos conocimientos. Derry y Murphy formularon en 1986 un planteamiento de diseo de sistemas de instruccin para mejorar la habilidad de aprender, utilizando como gua la teora de Gagn, la de Sternberg y la teora metacognitiva. El anlisis de estas teoras les llev a la conclusin de que la mejora de la habilidad para aprender necesita el desarrollo no slo de habilidades de aprendizaje especficas, sino tambin de un mecanismo de control ejecutivo que acceda a las habilidades de aprendizaje y las combine cuando sean necesarias; planteando diversas posibilidades en cuanto al diseo curricular para estas estrategias: independiente (detached) (Weinstein, McCombs, Dansereau), incluido en el curriculum normal (embedded) (Jones), o una solucin de compromiso entre ambas (incidental learning model) (Derry). Aunque, advierten que cualesquiera de las posibilidades debe considerar que esas habilidades, sobre todo las de control ejecutivo, son difciles de entrenar, desarrollndose y automatizndose lentamente. Por ello, sus investigaciones representan una integracin de las diversas taxonomas existentes, incorporando estrategias de: memoria, lectura y estudio, solucin de problemas y afectivas. McCormick et al. (1989) abordan la cuestin de las estrategias cognitivas en el marco del aprendizaje en una lnea actual de transicin de los contextos de laboratorio a las situaciones acadmicas de la vida real. En este mbito han tenido lugar dos avances importantes: 1. El desarrollo de modelos complejos de pensamiento calificable como competente; lo cual ha permitido identificar con mayor precisin las estrategias ms importantes. 2. La elaboracin de diseos de instruccin que promueven una actuacin competente, evaluando el valor y efectividad de la instruccin en contextos naturales.

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En relacin al primer apartado los autores sealan tres modelos representativos del enfoque de procesamiento de la informacin: el modelo de resolucin de problemas de Baron, el modelo de componentes de Sternberg y el del buen utilizador de estrategias de Pressley et al. Y, en relacin al segundo apartado, destacan: el modelo de Pressley, que manifiesta la necesidad de ensear todos los componentes del uso correcto de estrategias (estrategias, metacognicin, motivacin y conocimiento), el modelo de la universidad de Kansas, focalizado en la educacin especial, pero con aplicaciones ms generales (estrategias de memoria y comprensin, incluyendo el parafrasear, formularse preguntas, mnemotcnicos, imaginacin visual, control de errores, etc.), y el modelo de entrenamiento en habilidades de solucin de problemas aritmticos de Derry et al., que incluye una enseanza de la planificacin en la resolucin de problemas, de la autocomprobacin y del autocontrol. En opinin de los autores, la instruccin en estrategias se est convirtiendo en un aspecto central de la educacin y de la enseanza profesional. En base a lo expuesto, se puede afirmar que las definiciones recogidas subrayan el papel de las estrategias como factores facilitadores, tanto del procesamiento profundo de la informacin como del aprendizaje consecuente. Del anlisis del concepto estrategia se desprende la idea de que todas esas actividades o procesos no actan al mismo nivel cognitivo y que el grado de generalidad tampoco es el mismo en todas y cada una de ellas. Es decir, que implcitamente estamos admitiendo una cierta jerarqua de tales estrategias y la posibilidad de clasificarlas. b) Metacognitivas En este caso, las estrategias no son simples conglomerados de habilidades, reglas o hbitos, sino que se trata de habilidades de alto orden que controlan y regulan las habilidades ms especficamente referidas a las tareas o ms prcticas (Nisbet y Shucksmith, 1987:21). Resnick y Beck (1976) distinguen entre actividades de tipo amplio, utilizadas para razonar y pensar (estrategias generales), y habilidades especficas, dedicadas a realizar una tarea (estrategias mediacionales). En un sentido ms preciso, Sternberg (1983) diferencia entre habilidades ejecutivas (tiles para planificar, controlar y revisar las estrategias empleadas en la ejecucin de una tarea, como identificar un problema) y habilidades no ejecutivas (utilizadas en la realizacin concreta de una tarea, como comparar). Kirby (1984) distingue tambin entre microestrategias, ms especficas de cada tarea, que pueden ser enseadas con relativa facilidad, y macroestrategias, ms relacionadas con diferencias estilsticas, influenciadas por factores emocionales y motivacionales y difcilmente modificables mediante la enseanza. Por otra parte, Snowman (1986), recogiendo los trminos militares de estrategia y tctica, seala que una estrategia de aprendizaje es un plan general formulado para abordar con xito los objetivos de una tarea y una tctica de

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aprendizaje es una tcnica especfica al servicio de la estrategia para afrontar la tarea de modo fctico. Ciertamente, las dicotomas pueden formularse, pero operan ms en el nivel terico que en el prctico, de hecho gran parte de las investigaciones se centran en estrategias puntuales y existe un importante grupo de autores que, implcita o explcitamente, integra ambos polos del continuum en una nica definicin de estrategias (Weinstein y Mayer, 1986; Weinstein, 1988; Dansereau, 1978; Rigney, Munro y Crook, 1979, etc.). Para Gonzlez y Turn (1992:388), las estrategias de aprendizaje son procesos, planes de accin, generales o especficos, que sirven de base para facilitar el aprendizaje y conocimiento cuando realizamos distintas tareas intelectuales. Denominadas por Paris et al. (1990) habilidades bajo consideracin (skills); es decir, capacidades, destrezas o acciones que el sujeto, como un estratega, selecciona y utiliza consciente y deliberadamente para alcanzar unas metas particulares. En suma, las estrategias de pensamiento son aquellas que operan directamente sobre la informacin: recogiendo, analizando, comprendiendo, procesando y guardando informacin en la memoria, para, posteriormente, poder recuperarla y utilizarla dnde, cundo y cmo convenga. En general, stas son las siguientes: 1. Cognitivas (microestrategias): Facilitadoras del conocimiento. 1.1. Atencin: Exploracin, fragmentacin, seleccin y contradistractoras. 1.2. Comprensin (tcnicas o habilidades de trabajo intelectual): Captacin de ideas, subrayado, traduccin a lenguaje propio y resumen, grficos, redes, esquemas y mapas conceptuales. A travs del manejo del lenguaje oral y escrito (velocidad, exactitud, comprensin). 1.3. Elaboracin: Preguntas, metforas, analogas, organizadores, apuntes y mnemotecnias. 1.4. Memorizacin/Recuperacin (tcnicas o habilidades de estudio): Codificacin y generacin de respuestas. Como ejemplo clsico y bsico, el mtodo 3R: Leer, recitar y revisar (read, recite, review). U otros tantos, como el de Herrera y Ramrez (1991), L-L/S-T/R-R-R : Tras haber entendido los enunciados o ttulos de cada bloque de contenido o ncleo conceptual de informacin, centrarse exclusivamente en el primer apartado leyndolo comprensivamente, volver a leer subrayando, traducir a palabras propias resumiendo, recitar y repasar/revisar; y, as, sucesivamente con cada bloque de contenidos. 2. Metacognitivas (macroestrategias): Facilitadoras del conocimiento, de la cantidad y calidad de conocimiento que se tiene (productos), su control, su direccin y su aplicacin a la resolucin de problemas, tareas, etc. (procesos). 2.1. Conocimiento del conocimiento: de la persona, de la tarea y de la estrategia. 2.2. Control de los procesos cognitivos: 2.2.1. Planificacin: Diseo de los pasos a dar. 2.2.2. Autorregulacin: Seguir cada paso planificado.

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2.2.3. Evaluacin: Valorar cada paso individualmente y en conjunto. 2.2.4. Reorganizacin (feedback): Modificar pasos errneos hasta lograr los objetivos. 2.2.5. Anticipacin (forward): Avanzar o adelantarse a nuevos aprendizajes. Como se ha podido observar, las estrategias cognitivas tienen por finalidad el desarrollo de las habilidades cognitivas, representan lo que Monereo (1991) denomina microestrategias. En palabras de Beltrn (1995), stas son una especie de reglas o procedimientos intencionales que permiten al sujeto la toma de decisiones oportunas de cara a conformar las acciones que caracterizan el sistema cognitivo. Las tareas cognitivas ms elementales suponen la adquisicin, procesamiento, comprensin, estructuracin y grabado en memoria de la informacin, para su utilizacin posterior. Las habilidades aluden directamente a las distintas capacidades intelectuales que resultan de la disposicin o capacidad que demuestran los individuos de hacer algo. Las habilidades son, como indican Hartman y Sternberg (1993), los obreros (workers) del conocimiento. Pueden ser numerosas, variadas y de gran utilidad a la hora de trabajar en las distintas reas de contenidos y cuya actividad especfica se ve afectada por multitud de factores que dependen de la materia, de la tarea, de las actitudes y de las variables del contexto donde tienen lugar. Precisamente, la actuacin estratgica se refiere a la seleccin, organizacin y disposicin de las habilidades que caracterizan el sistema cognitivo del individuo. Por ejemplo, Weinstein y Mayer (1986) las estructuran en tres apartados: 1) Estrategias de repeticin, ensayo o recitacin, cuyo objetivo es influir en la atencin y en el proceso de codificacin en la memoria de trabajo (a corto plazo), facilitando un nivel de comprensin superficial. 2) Estrategias de elaboracin, que pretenden una comprensin ms profunda de los contenidos de los aprendizajes, posibilitando la conexin entre la nueva informacin y la previa, ayudando a su almacenamiento en la memoria a largo plazo, para conseguir aprendizajes significativos. 3) Estrategias de organizacin, que permiten seleccionar la informacin adecuada y la construccin de conexiones entre los elementos de la informacin que va a ser aprendida, lo que fomenta el anlisis, la sntesis, la inferencia y la anticipacin ante las nuevas informaciones por adquirir. Las estrategias metacognitivas hacen referencia, por una parte, a la consciencia y conocimiento del estudiante de sus propios procesos cognitivos, conocimiento del conocimiento, y, por otra, a la capacidad de control de estos procesos, organizndolos, dirigindolos y modificndolos, para lograr las metas del aprendizaje (Flavell, 1976, 1977; Flavell y Wellman, 1977). Son, para Monereo (1991), macroestrategias, ya que no son estrategias especficas, sino generales, de direccin mental, por lo que su grado de transferencia es mayor; de ah su dificultad de aprendizaje y enseanza. Lo que Flavell, Leonard y Kreutzer (1975) denominan metamemoria.

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En general, supondran aprender a reflexionar, estando integradas por variables de la persona, la tarea y las estrategias. Las variables de la persona estaran formadas por nuestros conocimientos y creencias acerca de cmo somos y cmo son los dems, como procesadores cognitivos, estando directamente relacionadas con los componentes cognitivos de la motivacin (percepcin de autoeficacia, creencias de control, expectativas de rendimiento, etc.). Markman (1973, 1975), por ejemplo, observ que los nios pequeos no son capaces de predecir su comportamiento en la mayora de las tareas cognitivas y que tienen dificultades para identificar contradicciones e incoherencias presentes en una historia. Asimismo, Pramling (1983) confirm que los nios del segundo ciclo de Educacin Infantil relacionaban el aprendizaje con hacer cosas o crecer, pero nunca con algo que tuviera relacin con el conocimiento o que el aprendizaje proviniera de la experiencia. Las variables de la tarea incluyen la consciencia acerca de sus demandas: magnitud, grado de dificultad, estructura, si es conocida o no, esfuerzo que requiere, etc.; adquirindose tambin de forma progresiva la comprensin de su influencia. Hay estudios experimentales que confirman el grado de dificultad que entraa reconocer ciertos aspectos asociados a las demandas de las tareas, de manera que los aspectos que implican mayor dificultad o complejidad se aprenden despus que los ms fciles o simples (Moynahan, 1973; Kreutzer, 1975). En este mismo sentido, Miller (1985) analiz los factores que, segn los nios, influyen en la atencin que prestan a las tareas escolares cuando las hacen en casa y en la escuela, llegando a la conclusin de que, para los de 5 a 8 aos, los factores ms importantes eran estar callados (no hacer ruido) y centrados en lo que explica el maestro (inters por la tarea), no moverse de su sitio y observar lo que hace el profesor (aspectos extrnsecos a la tarea de aprender). Sin embargo, los nios mayores, atribuyen la falta de atencin a factores que suelen tener un carcter ms psicolgico, como la falta de motivacin, la dificultad de la tarea o el hecho de desviar el inters hacia otras cosas ajenas a la escuela (aspectos intrnsecos de la tarea de aprender). Mazzoni y Cornoldi (1993) demostraron que el conocimiento previo sobre la facilidad o dificultad percibida o estimada de una tarea, afecta a la distribucin del tiempo de estudio, de manera que a las tareas fciles se les dedica menos tiempo que a las tareas difciles. De igual forma, Dufresne y Kobassigawa (1989), en otro estudio experimental, manipularon el grado de relacin entre los componentes de una lista de pares asociados, observando que el tiempo de recuerdo de los temes menos relacionados entre s, los ms difciles, superaba el tiempo dedicado al recuerdo de los pares ms relacionados. Todas estas apreciaciones ponen de manifiesto que el grado de percepcin de las variables concernientes a las tareas afectan al modo de realizacin de las

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mismas, de forma que, a medida que el sujeto va teniendo una mayor conciencia de las variables de la tarea, se incrementa su eficacia de realizacin. Las variables de las estrategias van referidas al conocimiento estratgico cognitivo, metacognitivo y de los medios que pueden propiciar y facilitar el xito, tales como: repetir elementos de una lista, ordenarlos por categoras, comprender un determinado contenido, relacionarlos son otros, recordar una determinada cuestin, resolver tal o cual problema, etc. Estas estrategias se adquieren con el dominio de las habilidades especficas implicadas en los distintos campos del conocimiento, colaborando a la mejor organizacin del aprendizaje y a la obtencin de resultados eficaces. El conocimiento de las variables de estrategia se refiere al conocimiento procedimental, extrado de la experiencia, resultante de la ejecucin de tareas anteriores. A partir del conocimiento de las caractersticas y requisitos de las tareas, las caractersticas personales y las estrategias que hay que emplear, es cuando se puede empezar a planificar, regular, evaluar y reorganizar el proceso cognitivo coherentemente. As, pues, la metacognicin supone el conocimiento y control de los propios estados y procesos cognitivos (Brown, Bransford, Ferrara, Capione, 1983). Las actividades de planificacin estn integradas por el establecimiento de metas de aprendizaje, subdivisin de la tarea en pasos, generacin de interrogantes ante el nuevo material, identificacin y anlisis del problema, planteamiento de hiptesis de trabajo, determinacin de la dosificacin del tiempo y el esfuerzo necesarios, etc. Las actividades de direccin (monitoring) y autorregulacin incluyen la autodireccin y autocontrol cognitivo durante todo el proceso de realizacin de una actividad cognitiva, siendo capaz de seguir el plan trazado. Y, las estrategias de evaluacin permiten comprobar la eficacia del proceso cognitivo, mientras que las de reorganizacin facilitan su modificacin en su defecto. El desarrollo de las actividades de control cognitivo, de autoconciencia acerca de cmo se conoce y de automanejo de la propia actividad cognitiva, permite a los alumnos asumir la responsabilidad de su propio aprendizaje, que, para Nisbet y Shuckmith (1986), es la clase del aprender a aprender. Precisamente, estos autores, describen la metacognicin como el sptimo sentido que lleva a aprender a aprender; es decir, la capacidad de reconocer y controlar la situacin de aprendizaje. Lo que no debe confundirse con el aprendizaje de habilidades especficas para el estudio es ser capaz de organizar, dirigir y controlar los procesos mentales y ajustarlos a las exigencias o contexto de la tarea. En este sentido, Nickerson et al. (1987) indican que la actuacin de los expertos, respecto a los novatos, es de mayor nfasis en la planificacin y la aplicacin de estrategias, una mejor distribucin del tiempo y los recursos, y un control y una evaluacin cuidadosa del progreso.

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Los hallazgos de diferentes investigaciones confirman que los nios muy pequeos poseen un grado considerable de conocimiento metacognitivo que se va desarrollando gradualmente durante su proceso de maduracin, de ah la conveniencia de que los estudiantes, desde muy corta edad, dentro del currculo y no como apndice del mismo, se inicien en la prctica del autoexamen y el control de su autoeficacia, distribuyendo cuidadosamente el tiempo y los recursos de que disponen. Numerosos trabajos han demostrado el efecto favorable del entrenamiento en estrategias metacognitivas en diferentes reas del currculo: en lectura (Brown, Armbruster y Baker, 1985; Brown y Palincsar, 1987; Campione y Brown, 1990; Chipman, Segal y Glaser, 1985; Jacob y Paris, 1987; Snchez, 1993); en escritura (Bereiter y Scardamalia, 1987; Castell, 1995; Hayes y Flower, 1980; Higgins, Flower y Petraglia, 1992; Saunders, 1989); en el uso de grficos y mapas (Moore, 1993; Schofield y Kirby, 1994); en fsica (Pirolli y Bielaczyc, 1989; Pirolli y Recker, 1994); en la solucin de problemas (Borkowski, 1992; Chi et al., 1989; Bielaczyc, Pirolli y Brown, 1995; Klahr, 1985; Swanson, 1990). Estos trabajos, al mismo tiempo, han desarrollado diversos mtodos de enseanza para llevar a cabo el entrenamiento en metacognicin. Los mtodos tienen distinta fundamentacin terica y se basan en la observacin, la comparacin y la reflexin sobre el modo de ejecutar tareas, hechas por otros (los profesores o el grupo de iguales), o sobre la propia ejecucin de los estudiantes concerniente a tareas relacionadas con el aprendizaje escolar. Entre los mtodos, podemos citar: el role-playing, la discusin, el debate, el mtodo de explicacin o enseanza directa (Duffy et al., 1986); el modelado y el mtodo de andamiaje, derivado de los supuestos que inspiran el trabajo de Vygotsky (1978) (Collins, Brown y Newman, 1989); el mtodo de entrenamiento cognitivo, basado en el dilogo, la explicacin directa, el modelado (un ejemplo de este mtodo lo tenemos en el programa ILS -Informed Strategies for Learning- propuesto por Paris y colaboradores, 1984); el mtodo de aprendizaje cooperativo, entendido como una ayuda al aprendizaje cuando los alumnos realizan tareas en comn (Slavin, 1991); o el mtodo de enseanza recproca, basado en la interaccin del trabajo en situacin de pareja (dada), en la que uno de los integrantes del par adopta el rol de lder (Palincsar y Brown, 1984). Las estrategias metacognitivas deben ensearse simultneamente a la enseanza de los contenidos de las diferentes materias escolares (Hartman y Sternberg, 1993), integradas en alguno de los mtodos de interaccin didctica. Una parte de ellas se centran en el maestro y otras les corresponde desarrollarlas a los propios estudiantes, dependiendo de quin tenga la responsabilidad y el control de la actividad de aprender en cada momento de la situacin de aprendizaje-enseanza. Las tcnicas centradas en el maestro incluyen: preguntar, decir en voz alta lo que se hace al tiempo que se realiza, anticipar los pasos que se van a seguir, preguntarse por el valor y el inters de cada uno de ellos, justificar las

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decisiones que se toman, proporcionar diferentes ejemplos, analogas, grficos, esquemas y justificar su valor procedimental para adquirir el conocimiento. En suma, modelar y justificar previamente el aprendizaje que queremos que realice el alumno despus de forma individual. Las estrategias centradas en el alumno incluyen marcarse objetivos y planificar las tareas, hablarse a s mismo a lo largo del aprendizaje para autopreguntarse y cuestionarse cada paso de la actividad de aprender, pensar en voz alta, detenerse a reflexionar y revisar lo realizado previamente, anticipar y prever etapas y resultados, evaluar resultados parciales y finales, preguntarse por qu las tareas se hacen bien o mal, a qu se puede deber, si est en manos del alumno proponer soluciones y cules. Finalmente, decir que la metacognicin juega un papel muy importante en el aprendizaje escolar contribuyendo a incrementar la eficacia en el rendimiento acadmico de los estudiantes, por lo que la enseanza de la metacognicin debe constituir un elemento ms del currculo escolar, junto a la enseanza de las diferentes materias escolares; aunque, la metacognicin no es la panacea para solucionar todos los problemas del aprendizaje escolar. Sin embargo, la comprensin de los procesos de pensamiento implicados en el aprendizaje de las diversas materias y la estimulacin de la actividad reflexiva de los estudiantes sobre el propio proceso de aprendizaje, son instrumentos eficaces de enseanza en manos de los profesores. La enseanza de la metacognicin es un instrumento ms, un medio de indudable valor e inters al servicio de la enseanza, que, en cualquier caso, no debe constituirse en objetivo de instruccin por s misma.

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CAPTULO 10
Cognicin-Metacognicin

Francisco Herrera Clavero y M Inmaculada Ramrez Salguero


1. Conceptos y teoras Sobre los trminos cognicin-metacognicin, al igual que sobre otros del mbito de la psicologa, es muy difcil encontrar una definicin nica que sea comnmente aceptada por todos los investigadores en este campo del conocimiento, lo que determina obligatoriamente el anlisis de sus componentes para poder ofrecer una aproximacin adecuada. El tema de la metacognicin comenz a interesar plenamente a partir de la dcada de los sesenta, destacando los trabajos de Flavell (Flavell, 1976, 1977; Flavell y Wellman, 1977), de quien podemos apreciar una primera definicin del trmino: Metacognicin se refiere al conocimiento de uno mismo respecto de los propios procesos cognitivos y sus productos o a cualquier cosa relacionada con ellos, por ejemplo, las propiedades de la informacin o los datos relevantes para el aprendizaje... Metacognicin se refiere, entre otras cosas, al control activo y a la consecuente regulacin y orquestacin de estos procesos en relacin con los objetos de conocimiento a los que se refieren, normalmente al servicio de alguna meta concreta u objetivo (Flavell, 1976:232). De esta definicin pueden destacarse dos notas distintivas de la metacognicin, una, su contenido y, otra, su funcin. En cuanto al contenido, decir que la metacognicin es un proceso relacionado con el conocimiento que puede alcanzar el sujeto de sus propios procesos mentales o de la informacin sobre la que stos se ejercen. En cuanto a la funcin, decir que el hecho de poder acceder a los propios procesos cognitivos permite a quien conoce un mejor control de su actividad. En ese sentido, se puede aceptar que sus dos principales elementos integrantes son: la conciencia del propio conocimiento y sus procesos, y el control o regulacin que sobre stos se ejerce, ya que existe una referencia explcita al conocimiento que los sujetos tienen de la cantidad y calidad de sus conocimientos y sus procesos cognitivos, y, adems, del control que ejercen sobre los mismos. As pues, en general, podemos encontrar investigaciones que enfatizan uno u otro aspecto, aquellos que destacan la importancia del conocimiento que los

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sujetos tienen de su propio funcionamiento cognitivo y aquellos que se centran en el papel regulador del conocimiento, analizando sus efectos sobre la conducta cognitiva. Ambas, representan lneas de investigacin que responden histricamente a planteamientos tericos y metodolgicos distintos (Yussen, 1985; Moreno, 1986), tanto en relacin a las tareas especficas que seleccionan para verificar sus hiptesis, como en la medicin y obtencin de datos. De manera que, por ejemplo, los datos sobre los estudios de la conciencia se obtienen a partir de informes verbales; mientras que, sobre los estudios de regulacin de los procesos cognitivos, se obtienen mediante la ejecucin de distintas tareas. Como muestra de la primera lnea podemos destacar el modelo Flavell (1979, 1987), representando a la segunda sobresale el modelo Brown (1978, 1987) y, como postura eclctica, el modelo de Paris (1984). I. Flavell (1987) supone un conocimiento de tipo factual y declarativo, proponiendo una taxonoma para la comprensin de su dominio. Las diversas fuentes de este conocimiento se encuentran en la variabilidad y diversidad de los datos que proporcionan los comportamientos inteligentes inter e intraindividuales, en las actividades que ejecutamos y en las estrategias con que abordamos dichas actividades. Segn Brown (1987), este tipo de conocimiento tendra las siguientes caractersticas: 1. Es estable, permanece con el paso del tiempo. 2. Es reflexionable, puede comunicarse a otros. 3. Es falible, puede creerse como cierto sin serlo objetivamente. 4. Es tardo, se manifiesta en las ltimas etapas del desarrollo evolutivo. Entre las tres fuentes de conocimiento mencionadas se establecen conexiones o relaciones que constituyen la esencia de la actividad metacognitiva, entendida como capacidad de combinar y equilibrar interactivamente las siguientes variables: de la persona, de la tarea y de la estrategia. Las variables de la persona permiten diferenciar los propios procesos mentales de los ajenos, pero teniendo en cuenta que existen elementos comunes para ambos. Se construyen a lo largo del desarrollo y nos permiten valorar en cada momento lo que conocemos o no, el grado de certeza o las limitaciones del conocimiento que poseemos sobre algo o sobre nosotros mismos, pudindose distinguir tres apartados: a) Variables personales interindividuales, conocimientos o creencias que nos formamos de nosotros mismos en comparacin con las que llevan a cabo otras personas. b) Variables personales intraindividuales, conocimientos o creencias que tenemos sobre la diferenciacin interior en comparacin con los dems: conocimiento de los intereses, aptitudes, tendencias y gustos propios y ajenos.

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c) Variables universales, conocimiento sobre aspectos generales de la cognicin humana (teoras), proporcionados por el conocimiento popular, la ciencia, la tcnica, la tecnologa o el arte. Las variables de la tarea aluden a la naturaleza de la informacin que maneja el sujeto cuando reconoce que dicha informacin puede afectar a su proceso de conocimiento. El conocimiento de las variables que definen la tarea (amplitud, grado de dificultad, etc.), ayuda a determinar o seleccionar los procedimientos para su resolucin. Y, de igual forma que en las variables de la persona, la comprensin de la influencia de estas variables tambin se adquiere de modo progresivo con el desarrollo evolutivo de los sujetos. Las variables de la estrategia suponen una reflexin sobre las estrategias cognitivas y metacognitivas empleadas por el sujeto. Son procedimientos que permiten ir de una situacin a otra, relacionar unas tareas con otras y conseguir as objetivos y metas; son, en suma, procedimientos de resolucin. Entre ellas, a grandes rasgos, podemos distinguir dos grupos: cognitivas y metacognitivas. Las primeras, seran aquellas que se requieren para que el individuo progrese o ample su conocimiento y, las segundas, para controlar ese progreso o ampliacin, asegurndole que el aprendizaje que est realizando va en la direccin correcta, suponiendo el aspecto procedimental del control del conocimiento. II. Brown (1987) ofrece la siguiente definicin: La metacognicin se refiere al conocimiento de uno mismo y al control del dominio cognitivo... Aunque el conocimiento y la regulacin del conocimiento estn incestuosamente relacionados, esas dos formas de actividad tienen races bastante diferentes y los problemas que los acompaan son distintos. La tensin generada por el uso del mismo trmino, metacognicin, para los dos tipos de conducta est bien ilustrada por el hecho de que incluso los ms destacados ponentes en este campo tienden a responder a las cuestiones sobre la naturaleza de la metacognicin con un depende. Se desarrolla tardamente la metacognicin?, depende del tipo de conocimiento o proceso al que uno se refiera. Es consciente la metacognicin?, depende... (Brown, Bransford, Ferrara y Campione, 1983: 106-107). De tal forma que distingue dos posibles reas de investigacin: saber sobre el conocimiento y regulacin del conocimiento, estableciendo diferencias entre un conocimiento factual y declarativo, y un conocimiento procedimental. Brown y sus colaboradores (1987) consideran la existencia de un conocimiento procedimental que se reflejara en las actividades utilizadas para regular y revisar el conocimiento. Se trata de actividades de planificacin que se realizan antes de comprender y solucionar un problema (prediccin de los resultados, programacin del tiempo, determinacin de los procedimientos y recursos a utilizar en la realizacin de una tarea, etc.), actividades de supervisin (monitoring) durante el aprendizaje (verificacin, revisin, etc.) y actividades de control sobre los resultados (evaluacin de resultados y retroalimentacin). Estas actividades se caracterizan por ser:

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1. Relativamente estables. 2. No necesariamente comunicables. 3. Ms dependientes de la tarea y la situacin que de la edad (madurez y desarrollo evolutivo) de los sujetos. El conocimiento procedimental ejerce funciones parecidas a las de un procesador central, tales como: a) Predecir las limitaciones de capacidad del sistema. b) Identificar y caracterizar el problema a solucionar. c) Determinar el repertorio de rutinas heursticas apropiadas al problema. d) Planificar y programar las estrategias adecuadas de solucin. e) Controlar y supervisar la eficacia de las rutinas que se han utilizado. f) Evaluar dinmicamente esas operaciones en relacin con el xito o fracaso en la tarea, de manera que las actividades puedan ser medidas estratgicamente (Brown, 1978). La regulacin y control del conocimiento va referida a la participacin activa de quien aprende en tres momentos: antes de iniciar la actividad de aprendizaje (predecir, organizar, etc.), durante el proceso de aprendizaje (ajustar, revisar, etc.) y despus del aprendizaje (evaluar, retroalimentar, etc.). III. Paris (1984) opina que la metacognicin representa el conocimiento sobre los estados o procesos cognitivos a que pueden acceder los individuos, restringiendo la definicin al considerar exclusivamente metacognitivos aquellos procesos de los cuales la persona es consciente. De forma que la metacognicin slo ser conceptualizada como tal si puede ser observada y medida, si la conciencia sobre los aspectos cognitivos puede ser pblica. Quiere decir que, aquellos aspectos que inicialmente actuaron bajo control consciente pero que posteriormente se automatizaron, no seran considerados como metacognitivos. La categorizacin que Paris et al. (Paris & Jacobs, 1984; Jacobs & Paris, 1987; Cross & Paris, 1988) hacen de la metacognicin incluye, por una parte, las autovaloraciones de la cognicin y, por otra, la autodireccin del pensamiento, recogiendo las dos orientaciones tradicionales en el estudio de la metacognicin: 1. Las autovaloraciones de la cognicin representan el aspecto esttico resultante de lo que un sujeto sabe acerca de un dominio o tarea, pudiendo ser de tres tipos: 1) Conocimiento declarativo (como: releer un texto facilita su memorizacin, etc., 2) Conocimiento procedimental (como: resumir, subrayar, etc.) y 3) Conocimiento condicional (como: por qu una estrategia es efectiva, etc.). 2. La autodireccin del pensamiento representa el aspecto dinmico resultante de la traslacin del conocimiento a la accin, pudiendo ser de tres tipos: 1) Planificacin o coordinacin selectiva de los medios para alcanzar una meta cognitiva (como: ajustar el ritmo de lectura a la dificultad del texto, etc.), 2) Regulacin o modificacin de planes y estrategias despus del control del propio rendimiento (como: lectura y relectura del primer prrafo antes de pasar al siguiente, etc.)

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y 3) Evaluacin o anlisis cuantitativo y cualitativo de los logros conseguidos (como: evaluar la propia comprensin de un texto, etc.). 2. Evaluacin Sin duda alguna, la metacognicin es uno de los constructos ms investigados en la psicologa de la instruccin contempornea; no obstante, tanto su delimitacin conceptual como su evaluacin y entrenamiento requieren un tratamiento metodolgico emprico vlido y fiable, que d solidez a sus planteamientos. Hay autores que restringen la metacognicin a los procesos metacognitivos de los que las personas son o pueden ser conscientes y que se manifiestan a travs de indicadores internos, introspectivos (Flavell, 1976, 1977; Flavell y Wellman, 1977); otros, sin embargo, lo hacen a travs de indicadores externos, indirectos, susceptibles de medida y cuantificacin (Paris y Jacobs, 1984; Jacobs y Paris, 1987; Cross y Paris, 1988). En este sentido, unos u otros, intentan analizar la metacognicin mediante la observacin y la medida de los dos grandes aspectos que la definen: autoconocimiento y proceso de control. As pues, en general, el procedimiento metodolgico ms utilizado en la evaluacin de la metacognicin es el informe verbal, como forma de inferir los estados de conciencia de los individuos; aunque, es una herramienta que cuenta con numerossimas crticas (Nisbet y Wilson, 1977) y que supone costosos esfuerzos para mejorar los procedimientos que permitan validar y fiabilizar los hallazgos obtenidos (Ericsson y Simon, 1980). No obstante, podramos distinguir dos grupos de tcnicas diferenciadas al respecto: las primeras, seran aquellas donde los sujetos abordan de forma consciente sus propios estados mentales haciendo alusin a la descripcin de los procesos que verbalizan -think aluod (Cavanaugh y Permlmutter, 1982), entrevistas (Brown, 1987) y cuestionarios (Pintrich y De Groot, 1990, Cuestionario de Estrategias Motivadas -MSLQ-)-, y, las segundas, considerando las respuestas verbales como resultado o producto de un proceso mental dado, actuando como indicadores de que determinados procesos se activan por parte del sujeto -peer tutoring (Garner, 1987), pictorial techniques (Daz y Rodrigo, 1989), graphing subjective (Hall, Dansereau, ODonnell, 1990), cuestionario metacognitivo MQ (Swanson, 1990), judgments of knowing y feeling of knowing (Nelson y Leonesio, 1990), etc.-. Queda claro, pues, que la mayor parte de las tcnicas, salvo las que utilizan dibujos o grficos, se fundamentan en el informe verbal, como procedimiento para acceder a los estados y los procesos de control del conocimiento de los que los individuos son conscientes y que podemos inferir a partir de autovaloraciones personales (Pelegrina, Justicia y Cano, 1991). No obstante, las verbalizaciones, como herramienta metodolgica, han sido objeto de numerosos anlisis (fiabilidad, influencia del experimentador, relaciones entre lo que el sujeto sabe y lo que en realidad hace, consideraciones

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sobre el estado evolutivo de los sujetos, etc.), poniendo de manifiesto algunas precauciones, como recomienda Garner (1987): 1. Evitar preguntar sobre procesos automticos, inaccesibles a la reflexin. 2. Reducir el intervalo entre procesamiento e informe. 3. Evitar el efecto de sesgo del experimentador utilizando preguntas indirectas. 4. Utilizar diferentes mtodos que no compartan las mismas fuentes de error para valorar el conocimiento y la utilizacin de las estrategias. 5. Utilizar tcnicas que reduzcan las demandas de verbalizacin, especialmente en los sujetos ms jvenes. 6. Evitar escenarios hipotticos y cuestiones muy generales. 7. Valorar la consistencia de las respuestas de la entrevista a lo largo del tiempo para un grupo de sujetos. 8. Valorar la validez de las preguntas para reducir las respuestas verbales a temas de inters. As, pues, la tcnica del cuestionario, junto con la entrevista, tal vez sean, entre los procedimientos analizados, los ms utilizados para medir la metacognicin (Belmont y Borkoswski, 1988; Clements y Natassi, 1990; Meichenbaum, Burland, Gruson y Cameron, 1985; Pintrich y De Groot, 1990; Tobias, Hartman, Everson y Gourgey, 1991; Swanson, 1990). De ellos, aqu nos interesan particularmente el Metacognitive Questionnaire, MQ, de Swanson y el Motivated Strategies for Learning Questionnaire, MSLQ, de Pintrich y De Groot. El MQ de Swanson (1990) es un cuestionario para valorar la metacognicin y la aptitud general de los individuos en el mbito de la resolucin de problemas. Es una prueba de carcter individual que se pasa en forma de entrevista, grabando las respuestas de los sujetos. Consta de 17 preguntas que se puntan de acuerdo con cinco categoras de respuesta (sealadas por Kreutzer et al., 1975). Las preguntas se agrupan en tres bloques que corresponden a los siguientes aspectos: a) variables de persona (preguntas:1, 2, 5, 15, 16 y 17); b) variables de tarea (3, 4, 6, 8, 10 y 12); y c) variables de estrategia (7, 13 y 14). Las preguntas 9 y 11 se relacionan con soluciones de problemas planteados en la preguntas 8 y 10, respectivamente, y no tienen que ver en la metacognicin. El cuestionario de Pintrich y De Groot (1990) es algo ms complejo; aunque, por tratarse de una prueba de papel y lpiz, el tiempo que requiere para ser cumplimentado por los estudiantes es bastante breve. Consta de 5 escalas que representan distintas dimensiones del aprendizaje autorregulado. Tres de ellas estn relacionadas con la motivacin y las otras dos son de carcter cognitivo. En realidad, se trata de un instrumento con 56 preguntas en las que se mide la motivacin de los estudiantes, el uso de estrategias cognitivas, el uso de estrategias metacognitivas, y el control y manejo del esfuerzo para aprender. Los estudiantes deben responder a las preguntas seleccionando en una escala tipo Likert con 7 alternativas, la alternativa que demuestre mayor acuerdo entre

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el contenido del enunciado de la pregunta y lo que le ocurre al sujeto (desde 1 = no es cierto; no estoy de acuerdo con el contenido que se enuncia; hasta 7 = es verdaderamente cierto para m, estoy plenamente de acuerdo). Las preguntas las toman y adaptan los autores de diferentes instrumentos previos, utilizados para evaluar estrategias de aprendizaje (Eccles, 1983; Weinstein, Schulte y Palmer, 1987). A travs del anlisis factorial determinaron las dimensiones o factores y se construy el cuestionario final, desechando parte de las preguntas por falta de correlacin o de estabilidad con la estructura factorial obtenida. En el anlisis de la motivacin aparecieron tres factores o dimensiones: la autoeficacia, la motivacin intrnseca y la ansiedad. Los otros dos factores se relacionan con el uso de estrategias cognitivas y con la autorregulacin (estrategias metacognitivas). Las escalas que miden los cinco factores mostraron coeficientes de fiabilidad que oscilaron entre .74 y .89. Respecto a otras opciones, tan slo citar algunos ejemplos, tales como: la tcnica think aloud, que es un informe verbal en el que el sujeto debe expresar en voz alta lo que est pensando mientras resuelve una tarea. La enseanza entre iguales (peer tutoring), consistente en ensear una estrategia nueva a un sujeto, para que despus ste se la ensee a otro. La eleccin con lminas (pictorial techniques), que estriba en mostrar a los sujetos lminas en las que los personajes se enfrentan a una determinada situacin. Y, el paradigma de las dos tareas, que gira en torno a la exposicin a los sujetos de dos estrategias de realizacin de una tarea para que elijan la mejor, sin conocerlas previamente. Por ltimo, referirnos a otros importantes instrumentos, tales como: El elaborado por Weinstein et al.(1987), Learning and Studies Skills Inventory -LASSI-escala que, aunque fue diseada para la medicin de estrategias y habilidades de aprendizaje, resulta un instrumento que puede facilitar informacin adecuada acerca de los procesos cognitivos-metacognitivos e, incluso, motivacionales. El inventario se compone de un conjunto de tcticas implcitas en el rendimiento acadmico que facilita el procesamiento de informacin, tales como: actitud, motivacin, administracin del tiempo, concentracin, procesamiento de la informacin, ayudas para el estudio, autovaloracin, seleccin de ideas principales y estrategias de comprobacin; con unos ndices de fiabilidad muy aceptables (entre 0,68 y 0,86). 3. Programas de intervencin En general, podramos distinguir dos lneas de intervencin: 1) La que alude exclusivamente al trmino metacognicin, y 2) La referida a la conjuncin metacognicin y motivacin. Respecto a la primera orientacin, programas de intervencin exclusivos en metacognicin, decir que son numerosos los trabajos que han demostrado el efecto favorable del entrenamiento en estrategias metacognitivas en diferentes reas del currculo: en lectura (Brown, Armbruster y Baker, 1985; Brown y

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Palincsar, 1987; Campione y Brown, 1990; Chipman, Segal y Glaser, 1985; Jacob y Paris, 1987; Snchez, 1993); en escritura (Bereiter y Scardamalia, 1987; Castell, 1995; Hayes y Flower, 1980; Higgins, Flower y Petraglia, 1992; Saunders, 1989); en el uso de grficos y mapas (Moore, 1993; Schofield y Kirby, 1994); en fsica (Pirolli y Bielaczyc, 1989; Pirolli y Recker, 1994); en la solucin de problemas (Borkowski, 1992; Chi et al., 1989; Bielaczyc, Pirolli y Brown, 1995; Klahr, 1985; Swanson, 1990), etc. Estos trabajos, al mismo tiempo, han desarrollado diversos mtodos de enseanza para llevar a cabo el entrenamiento en metacognicin. Dichos mtodos tienen distinta fundamentacin terica y se basan en la observacin, la comparacin y la reflexin sobre el modo de ejecutar tareas hechas por otros (profesores o grupo de iguales) o sobre la propia ejecucin de los estudiantes, concerniente a tareas relacionadas con el aprendizaje escolar. Entre estos mtodos, podemos citar: el role-playing; la discusin; el debate; el mtodo de explicacin o enseanza directa (Duffy et al., 1986); el modelado y el mtodo de andamiaje, derivado de los supuestos que inspiran el trabajo de Vygotsky (1978) (Collins, Brown y Newman, 1989); el mtodo de entrenamiento cognitivo, basado en el dilogo, la explicacin directa, el modelado (un ejemplo de este mtodo lo tenemos en el programa ISL -Informed Strategies for,Learning- propuesto por Paris y colaboradores, 1984); el mtodo de aprendizaje cooperativo, entendido como una ayuda al aprendizaje cuando los alumnos realizan tareas en comn (Slavin, 1991); o, el mtodo de enseanza recproca, basado en la interaccin del trabajo en situacin de pareja (dada), en la que uno de los integrantes del par adopta el rol de lder (Palincsar y Brown, 1984). Las propuestas, en general, se han dirigido al aumento de las estrategias de memoria, incidiendo en el problema de la generalizacin y mantenimiento de estrategias previamente entrenadas, o a fomentar la lectura comprensiva, utilizando tcnicas de enseanza informativa, metforas, grupos de dilogo, prcticas dirigidas y aplicaciones, como el ISL de Paris et Al (1984). No obstante, puede resultar esclarecedora como muestra, por su sencillez, claridad y profundidad, la pauta de intervencin de Lloyds y Loper (1989), dirigida a desarrollar conductas metacognitivas, siendo sus principales fases las siguientes: 1. Valoracin inicial, para conocer cules son los problemas a tratar, con la ejecucin de las siguientes tareas: planificacin, aplicacin de estrategias, control de la tarea, correccin de errores y evaluacin. 2. Valoracin y tratamiento del desarrollo del plan establecido, con la ejecucin de tareas tales como: autopreguntas, respuestas en voz alta y en silencio, etc. 3. Deteccin de problemas, para el ajuste continuo del programa, con la ejecucin de las siguientes tareas: observacin de la claridad y suficiencia de las instruc-

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ciones, valoracin del ajuste de la intervencin a la habilidad del sujeto, anlisis de interferencias, valoracin de la suficiencia de la informacin, etc. De una forma muy sinttica, podramos resumirlas como a continuacin aparece expuesto: 1. Valoracin inicial: a) Planificacin: Tiene el estudiante las ideas apropiadas para realizar la tarea?. b) Aplicacin de la estrategia: Ejecuta un plan y aplica las tcnicas apropiadas?. c) Control de la tarea: Controla el estudiante su trabajo?. d) Correccin de errores: Corrige el estudiante su trabajo?. e) Evaluacin: Evala el estudiante lo que ha realizado cuando acaba la tarea?. 2. Valoracin y tratamiento (Cuadro 10.1.): Cuadro 10.1. Componentes del Tratamiento Tiempo
Lnea Base Intervencin 1: Se le ensea al nio a autopreguntarse: Plantearse preguntas en voz alta, controlar las respuestas en un formulario y realizar una grfica de las respuestas correctas. Intervencin 2: El nio debe responder a sus propias preguntas en voz baja, controlar las respuestas en un formulario y realizar una grfica con sus respuestas correctas. Intervencin 3: El nio debe responder a sus propias preguntas en silencio y controlar las respuestas. Intervencin 4: El nio debe responder a sus propias preguntas en silencio. Control del mantenimiento: No se le dan al nio instrucciones especficas. Seguimiento. 2 semanas 3 semanas

Expectativas para el progreso diario


Sin cambio Mejora

semanas

Inicialmente puede haber algn decremento, pero posteriormente se producir un mantenimiento gradual o mejora. dem.

2 semanas

2 semanas 4 semanas 1 mes despus

dem. dem. Puede haber un leve descenso, pero bastante por encima del nivel de lnea base.

Pauta de intervencin para el desarrollo de conductas metacognitivas de Lloyds y Loper (1989)

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3. Deteccin de problemas: a) Son las instrucciones suficientemente explcitas?. b) Se ajusta la intervencin al nivel de habilidad del estudiante?. c) Interfiere el procedimiento con otros procedimientos importantes?. d) Est el estudiante suficientemente informado de su progreso?. Respecto a la segunda orientacin, programas de intervencin en metacognicin y motivacin conjuntamente (SRL), decir que tambin son numerosos los trabajos que han demostrado el efecto ms favorable del entrenamiento en estrategias metacognitivas cuando se llevan a cabo conjuntamente con programas de desarrollo motivacional (Paris, Olson y Stevenson, 1983; Corno y Mandinach, 1983; Corno y Rohrkemper, 1985; Zimmerman y Martnez Pons, 1986; Dweck, 1986; Alonso, Garca y Montero, 1986; Castro, 1986; Pintrich y De Groot, 1990; Pokay y Blumenfeld, 1990; Wellman, 1990, 1995; Zimmerman, 1989, l 990; Valle y Nez, 1989; McCombs y Marzano, 1990; Weiner (1990); Gonzlez-Pienda, Nez y Valle, 1991; Borkowski y Muthukrishna, 1992; Jussim y Eccles, 1992; Nez, 1992; Navas et al., 1991, 1992; McCombs, 1993; Castejn, Navas y Sampascual, 1993; Pardo y Alonso, 1993; Cabanach, Nez y Garca-Fuentes, 1994; Nez y Gonzlez-Pienda, 1994; Sampascual, Navas y Castejn, 1994; Rivire, Sarri, Nez y Rodrigo, 1994; Butler y Winne, 1995; Alonso, 1995, etc.). De ellos es preciso destacar que, en general, han sido diseados basndose en la modificabilidad de las atribuciones causales y de la metacognicin, siendo sus mximos exponentes Schunk et al.(1992), recomendando dirigir la atribucin del sujeto, en caso de fracaso, no a la falta de esfuerzo; sino al uso inadecuado de las estrategias de resolucin o al planteamiento incorrecto del problema, por las siguientes razones: 1. Si el sujeto se esfuerza constantemente para obtener un resultado positivo y nunca lo consigue, no slo acabar cansndose de intentarlo, sino que reducir su autoconfianza, creyndose incapaz de alcanzar el xito, por ms que lo intente. 2. De persistir en la atribucin del xito al esfuerzo, el sujeto antes que esforzarse y darse cuenta de que no es capaz, preferir disimular, mostrar un falso inters o esforzarse poco (confirmado por Covington, 1992). 3. Por mucho que le digamos que no se esfuerza, si no se le muestra dnde ha fallado y cmo resolver el problema, nunca lo har correctamente.

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En caso de xito, la atribucin tampoco sera debida al esfuerzo, sino a la habilidad; dado que, segn el grado de comprensin que tiene el nio de los conceptos esfuerzo y habilidad, indicarle que ha aprobado porque se ha esforzado, es como sugerirle que tiene poca capacidad, ya que ha tenido que esforzarse para conseguirlo y, adems, porque conduce a un crecimiento menor de sus expectativas futuras. En este sentido, segn Pardo y Alonso (1993:338), los criterios rectores de intervencin deben ser los siguientes: 1. Antes de la Tarea. 1.1. Orientar hacia una concepcin de la inteligencia como un conjunto de destrezas susceptibles de ser modificadas a travs del propio esfuerzo. 1.2. Presentar las situaciones de logro lo ms desprovistas posible de componentes evaluativos. 1.3. Fortalecer el sentimiento de autonoma personal, a travs de la percepcin de que se posee el control. 2. Durante la tarea. 2.1. Ensear a los sujetos a autodirigirse durante la realizacin de la tarea de logro, facilitndole instrucciones o mensajes de tipo instrumental. 2.2. Adiestrarles en el establecimiento de metas intermedias, que garanticen cierta experiencia de xito y un avance progresivo hacia el resultado final. 3. Despus de la tarea. 3.1. Centrar la evaluacin sobre el proceso de ejecucin seguido durante la realizacin de la tarea y sobre el grado de aprendizaje obtenido en ella. Alonso (1993) propone los siguientes principios para el desarrollo motivacional de la instruccin: I. En relacin con la forma de presentar y organizar la tarea. 1. Activar la curiosidad y el inters del alumno por el contenido del tema o la tarea a realizar. Las estrategias para conseguirlo seran las siguientes: 1.1. Presentar informacin nueva, incierta, sorprendente o incongruente con los conocimientos previos del alumno. 1.2. Plantear o suscitar en el alumno problemas que haya de resolver. 1.3. Variar los elementos de la tarea para mantener la atencin. 2. Mostrar la relevancia del contenido o la tarea para el alumno. Las estrategias para conseguirlo seran las siguientes: 2.1. Relacionar el contenido de la instruccin con las experiencias, conocimientos previos y valores de los alumnos.

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2.2. Mostrar, a ser posible mediante ejemplos, la meta para la que puede ser relevante aprender lo que se presenta como contenido de la instruccin. II. En relacin con la forma de organizar la actividad en el contexto de la clase. 3. Organizar la actividad en grupos cooperativos, en la medida en que lo permita la naturaleza de la tarea. 4. Dar el mximo posible de opciones de realizacin para facilitar la percepcin de autonoma. III. En relacin con los mensajes que el profesor transmite a sus alumnos. 5. Orientar la atencin de los sujetos: 5.1. Antes de la tarea: 5.1.1. Hacia el proceso de solucin, ms que hacia el resultado. 5.2. Durante la tarea: 5.2.1. Hacia la planificacin y el establecimiento de metas realistas, dividiendo la tarea en pasos. 5.2.2. Hacia la bsqueda y comprobacin de posibles medios de superar las dificultades. 5.3. Despus de la tarea, al informar al sujeto sobre lo correcto o no del resultado: 5.3.1. Hacia el proceso seguido. 5.3.2. Hacia la toma de conciencia de lo que se ha aprendido y de las razones que han posibilitado el aprendizaje. 5.3.3. Hacia la toma de conciencia de que, aunque se haya equivocado, sigue mereciendo confianza. 6. Promover explcitamente la adquisicin de los siguientes aprendizajes: 6.1. La concepcin de la inteligencia como algo modificable. 6.2. La tendencia a atribuir los resultados a causas percibidas como internas, modificables y controlables. 6.3. La toma de conciencia de los factores que les hacen estar ms o menos motivados. IV. En relacin con el modelado que el profesor puede hacer de la forma de afrontar la tarea y valorar los resultados. 7. Ejemplificar los mismos comportamientos y valores que se tratan de transmitir con los mensajes que se dan en clase.

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V. En relacin con la evaluacin. 8. Organizar las evaluaciones a lo largo del curso de forma que: 8.1. Los alumnos las consideren como ocasiones para aprender. 8.2. Se evite, en la medida de lo posible, la comparacin de unos con otros. Las estrategias para conseguirlo seran las siguientes: 8.2.1. Disear las evaluaciones de forma que permitan saber no slo si sabe algo o no; sino, en caso negativo, dnde est el problema. 8.2.2. Proporcionar informacin cualitativa relativa a lo que el alumno debe corregir o aprender. 8.2.3. Acompaar la comunicacin de resultados con mensajes para optimizar la confianza del alumno en sus posibilidades. 8.2.4. No dar pblicamente la informacin sobre los resultados de la evaluacin. Por ltimo, nos interesa destacar el Programa Instruccional para la Educacin y Liberacin Emotiva Aprendiendo a Vivir -PIELE- de Hernndez y Garca Hernndez (1992), que ofrece pautas concretas de intervencin cognitivametacognitiva, afectiva y conativa. Su fundamentacin se basa en criterios explicativos de la inadaptacin humana, fundamentalmente en los referidos a los modos inadecuados de la mente de interpretar y valorar la realidad -dimensin cognitiva-metacognitiva-, en los modos de canalizar inadecuadamente las emociones, creando desajustes afectivos -dimensin afectiva-, y en los modos de creacin de hbitos inadecuados, como producto de los antecedentes y consecuentes que forma la conducta dimensin conativa-. En lneas generales, segn sus propios autores, los resultados muestran cmo los alumnos que ms se benefician de este programa tienen unas caractersticas que parecen ser ms coherentes con un alto grado de influenciabilidad, por estar ms afectados por el sufrimiento, por ser ms intrapunitivos, por tener una mayor capacidad intelectual para entender el programa y reconducir su comportamiento, y por tener una educacin y ambiente familiar no restrictivo, que facilita su apertura a los agentes de influencia. Por otra parte, los alumnos que emporan tienden a compartir las caractersticas opuestas, mientras los alumnos que se mantienen, que suele ser el grupo peor definido, ocupan una posicin intermedia (de normalidad). 4. RESUMEN

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Este tema se centra especficamente en la revisin de las definiciones conceptuales, teoras, sistemas de evaluacin y programas de intervencin ms relevantes sobre metacognicin, destacando las siguientes ideas: 1. Respecto a la definicin de metacognicin, tras recoger las opiniones de Flavell (1976), Brown (1983) y Paris (1984), estando ms de acuerdo con la postura eclctica de este ltimo, cabra entenderla como procesos exclusivamente conscientes de autovaloracin de la propia cognicin y autodireccin del pensamiento. 2. En cuanto a las teoras sobre la metacognicin, entre otras, mencionar especialmente la aportacin de Paris (1984), que, respecto a la autovaloracin de la propia cognicin, distingue tres tipos: 1) Conocimiento declarativo, 2) Conocimiento procedimental, y 3) Conocimiento condicional; y, referente a la autodireccin del pensamiento, seala otros tres tipos: 1) Planificacin o coordinacin selectiva de los medios para alcanzar una meta cognitiva, 2) Regulacin o modificacin de planes y estrategias despus del control del propio rendimiento, y 3) Evaluacin o anlisis cuantitativo y cualitativo de los logros conseguidos. 3. Sobre los instrumentos de evaluacin de la metacognicin ms utilizados, distinguir dos grupos de tcnicas diferenciadas al respecto: 1) Aquellas en las que los sujetos abordan de forma consciente sus propios estados mentales haciendo alusin a la descripcin de los procesos que verbalizan -think aluod (Cavanaugh y Permlmutter, 1982), entrevistas (Brown, 1987) y cuestionarios (Pintrich y De Groot, 1990)-, y, 2) Aquellas en las que los sujetos consideran las respuestas verbales como resultado o producto de un proceso mental dado, actuando como indicadores de determinados procesos que se activan por parte del sujeto -peer tutoring (Garner, 1987), pictorial techniques (Daz y Rodrigo, 1989), graphing subjective (Hall, Dansereau, ODonnell, 1990) y MQ (Swanson, 1990)-. 4. Referente a los programas de intervencin en metacognicin, tener en cuenta aportaciones tales como las del role-playing, la discusin, el debate, el mtodo de explicacin o enseanza directa (Duffy et al., 1986), el modelado, el mtodo de andamiaje (Collins, Brown y Newman, 1989), el mtodo de entrenamiento cognitivo ISL -Informed Strategies for Learning- (Paris et al., 1984), el mtodo de enseanza recproca (Palincsar y Brown, 1984), adems de las Lloyds y Loper (1986), Covington (1987), Dez y Romn (1988), Hernndez y Garca Hernndez (1992), y Pardo y Alonso (1993). Todo lo cual nos lleva a decantarnos, por una parte, a la hora de evaluar la metacognicin, de forma complementaria, a travs de los cuestionarios de Pintrich y De Groot (1990), sobre los procesos que verbalizan los sujetos, y el de Swanson (1990), sobre respuestas verbales como resultado o producto de un proceso mental dado; y, por otra parte, respecto a la intervencin con un programa propio de mejora, teniendo en cuenta las ideas aportadas principalmente por Lloyds y Loper (1986), Hernndez y Garca Hernndez (1992), y Pardo y Alonso (1993).

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CAPTULO 11
Habilidades cognitivas Francisco Herrera Clavero
1. Introduccin. Hablar de habilidades cognitivas, aunque sea brevemente, nos remite al mbito de las aptitudes e implica, en primer lugar, introducirnos en el estudio del pensamiento, como proceso o sistemas de procesos complejos que abarcan desde la captacin de estmulos, hasta su almacenaje en memoria y su posterior utilizacin, en su evolucin y su relacin con el lenguaje; abordar el estudio de la inteligencia y su evolucin, como herramienta bsica del pensamiento; y profundizar en el estudio del aprendizaje, como cambio relativamente estable del comportamiento producido por la experiencia. Para, en segundo lugar, con mayor profusin y especificidad, pasar al estudio del binomio cognicinmetacognicin y su relacin con aquellas variables que ms le afectan, como es el caso de las afectivas, tales como: la motivacin, el autoconcepto, la autoestima, la autoeficacia, la ansiedad, etc. De manera que los trminos aprender a pensar, aprender a aprender y pensar para aprender, cada vez nos sean menos ajenos. As pues, aqu nos proponemos hacer una revisin de los principales conceptos y teoras, formas de evaluacin e intervencin ofrecidos en este mbito; aunque, como es obvio, de forma sucinta. 2. Conceptos y teoras. Actualmente estamos sumergidos en la era de la revolucin tecnolgica y, por ello, el nmero de conocimientos culturales y tcnicos, de teoras y habilidades, de modelos y estrategias, etc., aumentan de modo exponencial; siendo por lo que la educacin se enfrenta al gran reto de transmitirlos relacionando a la vez lo terico con la vida real, problema cada vez ms difcil de solucionar. Adems, curiosa y paradjicamente, hallndonos de pleno en la era de la comunicacin social, nos encontramos con los niveles ms altos, histricamente hablando, de incomunicacin personal; lo que agrava sobremanera esta problemtica. La verdad es que, en general, nuestros alumnos dedican muy poco tiempo al trabajo autnomo, especialmente a las consultas, y su actividad se reduce casi exclusivamente, en la mayor parte de los casos, a escuchar (no or siquiera) al profesor, empleando como nica habilidad cognitiva, tomar notas y memorizar

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los apuntes para los exmenes; lo cual denota inters por las clases de tipo expositivo, una alta orientacin en sus actividades de trabajo y un procesamiento pasivo de la informacin. Por otra parte, no slo se trata de una cuestin de ndole prctica, sino que es una imposicin de la perspectiva cognitiva frente a la conductista, interesada por el procesamiento de la informacin y su almacenamiento en memoria, destacando cmo los resultados del aprendizaje no dependen exclusivamente del modo en que el profesor presenta la informacin; sino, adems, del modo en que el alumno la procesa, la interioriza y la guarda (Weinstein y Mayer, 1986). En la investigacin especializada sobre habilidades y estrategias pueden recogerse multitud de definiciones al respecto; no obstante, es factible detectar un nico ncleo de significado, aunque con algunas diferencias en los niveles denotativos de los trminos empleados; en otras palabras, el nivel de generalidad concedido al concepto de habilidad o estrategia vara segn el tipo de definicin formulada. Por ello, se recogen aqu dos grupos claramente diferenciados y delimitados de definiciones: sintticas y analticas. a) Sintticas. En este caso, las habilidades o estrategias se presentan en un sentido general, aunque asignndoles un papel concreto, siendo fcil detectar tanto macrohabilidades o macroestrategias, habilidades ejecutivas, etc., como microhabilidades o microestrategias, habilidades no ejecutivas, etc. Las habilidades cognitivas son entendidas como operaciones y procedimientos que puede usar el estudiante para adquirir, retener y recuperar diferentes tipos de conocimientos y ejecucin ... suponen del estudiante capacidades de representacin (lectura, imgenes, habla, escritura y dibujo), capacidades de seleccin (atencin e intencin) y capacidades de autodireccin (autoprogramacin y autocontrol) (Rigney, 1978:165). O'Neil y Spielberger (1979), a diferencia de Rigney, prefieren utilizar el trmino estrategias de aprendizaje, pues en l incluyen las estrategias de tipo afectivo y motor, as como las estrategias propiamente cognitivas; aunque de hecho reconocen tres caractersticas bsicas de este dominio: la gran diversidad terminolgica, el limitado acuerdo existente respecto a sus conceptos fundamentales y el estado de arte en que se encuentra. Sin embargo, ello no impide que puedan establecerse algunas distinciones; por ejemplo, respecto a un tema muy prximo conceptualmente, tal como el de los estilos cognitivos. Perkins (1985), comentando el problema de la generalidad o especificidad de las habilidades cognitivas, seala una posible distincin entre estilos cognitivos y estrategias; los primeros estn ms ntimamente ligados a la conducta general de la persona, a su modo de pensar, de percibir, etc. (dependencia/independencia de campo; reflexividad/impulsividad, etc.), mientras las

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segundas son conductas ms especficas aplicadas en un momento determinado de un proceso (como, repasar un texto que se acaba de leer). Derry y Murphy formularon en 1986 un planteamiento de diseo de sistemas de instruccin para mejorar la habilidad de aprender, utilizando como gua la teora de Gagn, la de Sternberg y la teora metacognitiva. El anlisis de estas teoras les llev a la conclusin de que la mejora de la habilidad para aprender necesita el desarrollo no slo de habilidades de aprendizaje especficas, sino tambin de un mecanismo de control ejecutivo que acceda a las habilidades de aprendizaje y las combine cuando sean necesarias; planteando diversas posibilidades en cuanto al diseo curricular para estas estrategias: independiente (detached) (Weinstein, McCombs, Dansereau), incluido en el curriculum normal (embedded) (Jones), o una solucin de compromiso entre ambas (incidental learning model) (Derry). Aunque, advierten que cualesquiera de las posibilidades debe considerar que esas habilidades, sobre todo las de control ejecutivo, son difciles de entrenar, desarrollndose y automatizndose lentamente. Por ello, sus investigaciones representan una integracin de las diversas taxonomas existentes, incorporando estrategias de: memoria, lectura y estudio, solucin de problemas y afectivas. McCormick et al. (1989) abordan la cuestin de las habilidades cognitivas en el marco del aprendizaje en una lnea actual de transicin de los contextos de laboratorio a las situaciones acadmicas de la vida real. En este mbito han tenido lugar dos avances importantes: 1. El desarrollo de modelos complejos de pensamiento calificable como competente; lo cual ha permitido identificar con mayor precisin las habilidades y estrategias ms importantes. 2. La elaboracin de diseos de instruccin que promueven una actuacin competente, evaluando el valor y efectividad de la instruccin en contextos naturales. En relacin al primer apartado los autores sealan tres modelos representativos del enfoque de procesamiento de la informacin: el modelo de resolucin de problemas de Baron, el modelo de componentes de Sternberg y el del buen utilizador de estrategias de Pressley et al. Y, en relacin al segundo apartado, destacan: el modelo de Pressley, que manifiesta la necesidad de ensear todos los componentes del uso correcto de estrategias (estrategias, metacognicin, motivacin y conocimiento), el modelo de la universidad de Kansas, focalizado en la educacin especial, pero con aplicaciones ms generales (estrategias de memoria y comprensin, incluyendo el parafrasear, formularse preguntas, mnemotcnicos, imaginacin visual, control de errores, etc.), y el modelo de entrenamiento en habilidades de solucin de problemas aritmticos de Derry et al., que incluye una enseanza de la planificacin en la resolucin de problemas, de la autocomprobacin y del autocontrol. b) Analticas.

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En este caso, las habilidades no son simples conglomerados de reglas o hbitos, sino que se trata de habilidades de alto orden que controlan y regulan las habilidades ms especficamente referidas a las tareas o ms prcticas (Nisbet y Shucksmith, 1987:21). Resnick y Beck (1976) distinguen entre actividades de tipo amplio, utilizadas para razonar y pensar (habilidades generales), y habilidades especficas, dedicadas a realizar una tarea concreta (habilidades mediacionales). En un sentido ms preciso, Sternberg (1983) diferencia entre habilidades ejecutivas (tiles para planificar, controlar y revisar las estrategias empleadas en la ejecucin de una tarea, como identificar un problema) y habilidades no ejecutivas (utilizadas en la realizacin concreta de una tarea, como comparar). En nuestro caso, preferimos hablar de estrategias cognitivas y metacognitivas, que podramos resumir de la siguiente forma: I. Habilidades cognitivas Son las facilitadoras del conocimiento, aquellas que operan directamente sobre la informacin: recogiendo, analizando, comprendiendo, procesando y guardando informacin en la memoria, para, posteriormente, poder recuperarla y utilizarla dnde, cundo y cmo convenga. En general, son las siguientes: 1. Atencin: Exploracin, fragmentacin, seleccin y contradistractoras. 2. Comprensin (tcnicas o habilidades de trabajo intelectual): Captacin de ideas, subrayado, traduccin a lenguaje propio y resumen, grficos, redes, esquemas y mapas conceptuales. A travs del manejo del lenguaje oral y escrito (velocidad, exactitud, comprensin). 3. Elaboracin: Preguntas, metforas, analogas, organizadores, apuntes y mnemotecnias. 4. Memorizacin/Recuperacin (tcnicas o habilidades de estudio): Codificacin y generacin de respuestas. Como ejemplo clsico y bsico, el mtodo 3R: Leer, recitar y revisar (read, recite, review). II. Habilidades metacognitivas Son las facilitadoras de la cantidad y calidad de conocimiento que se tiene (productos), su control, su direccin y su aplicacin a la resolucin de problemas, tareas, etc. (procesos). 1. Conocimiento del conocimiento: de la persona, de la tarea y de la estrategia. 2. Control de los procesos cognitivos: 2.1. Planificacin: Diseo de los pasos a dar. 2.2. Autorregulacin: Seguir cada paso planificado. 2.3. Evaluacin: Valorar cada paso individualmente y en conjunto. 2.4. Reorganizacin (feedback): Modificar pasos errneos hasta lograr los objetivos. 2.5. Anticipacin (forward): Avanzar o adelantarse a nuevos aprendizajes.

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Las habilidades cognitivas aluden directamente a las distintas capacidades intelectuales que resultan de la disposicin o capacidad que demuestran los individuos al hacer algo. Estas habilidades son, como indican Hartman y Sternberg (1993), los obreros (workers) del conocimiento. Pueden ser numerosas, variadas y de gran utilidad, a la hora de trabajar en las distintas reas de conocimientos y cuya actividad especfica se ve afectada por multitud de factores que dependen de la materia, de la tarea, de las actitudes y de las variables del contexto donde tienen lugar. Precisamente, la actuacin estratgica se refiere a la seleccin, organizacin y disposicin de las habilidades que caracterizan el sistema cognitivo del individuo. Por ejemplo, Weinstein y Mayer (1986) las estructuran en tres apartados: 1) Estrategias de repeticin, ensayo o recitacin, cuyo objetivo es influir en la atencin y en el proceso de codificacin en la memoria de trabajo (a corto plazo), facilitando un nivel de comprensin superficial. 2) Estrategias de elaboracin, que pretenden una comprensin ms profunda de los contenidos de los aprendizajes, posibilitando la conexin entre la nueva informacin y la previa, ayudando a su almacenamiento en la memoria a largo plazo, para conseguir aprendizajes significativos. 3) Estrategias de organizacin, que permiten seleccionar la informacin adecuada y la construccin de conexiones entre los elementos de la informacin que va a ser aprendida, lo que fomenta el anlisis, la sntesis, la inferencia y la anticipacin ante las nuevas informaciones por adquirir. Las estrategias metacognitivas hacen referencia, por una parte, a la consciencia y conocimiento del estudiante de sus propios procesos cognitivos, conocimiento del conocimiento, y, por otra, a la capacidad de control de estos procesos, organizndolos, dirigindolos y modificndolos, para lograr las metas del aprendizaje (Flavell, 1976, 1977; Flavell y Wellman, 1977). En general, supondran aprender a reflexionar, estando integradas por variables de la persona, la tarea y las estrategias. Las variables de la persona estaran formadas por nuestros conocimientos y creencias acerca de cmo somos y cmo son los dems, como procesadores cognitivos, estando directamente relacionadas con los componentes cognitivos de la motivacin (percepcin de autoeficacia, creencias de control, expectativas de rendimiento, etc.). Markman (1973, 1975), por ejemplo, observ que los nios pequeos no son capaces de predecir su comportamiento en la mayora de las tareas cognitivas y que tienen dificultades para identificar contradicciones e incoherencias presentes en una historia. Asimismo, Pramling (1983) confirm que los nios del segundo ciclo de Educacin Infantil relacionaban el aprendizaje con hacer cosas o crecer, pero nunca con algo que tuviera relacin con el conocimiento o que el aprendizaje proviniera de la experiencia. Las variables de la tarea incluyen la consciencia acerca de sus demandas: magnitud, grado de dificultad, estructura, si es conocida o no, esfuerzo que requiere, etc.; adquirindose tambin de forma progresiva la comprensin de su influencia. Hay estudios experimentales que confirman el grado de dificultad que

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entraa reconocer ciertos aspectos asociados a las demandas de las tareas, de manera que los aspectos que implican mayor dificultad o complejidad se aprenden despus que los ms fciles o simples (Moynahan, 1973; Kreutzer, 1975). En este mismo sentido, Miller (1985) analiz los factores que, segn los nios, influyen en la atencin que prestan a las tareas escolares cuando las hacen en casa y en la escuela, llegando a la conclusin de que, para los de 5 a 8 aos, los factores ms importantes eran estar callados (no hacer ruido) y centrados en lo que explica el maestro (inters por la tarea), no moverse de su sitio y observar lo que hace el profesor (aspectos extrnsecos a la tarea de aprender). Sin embargo, los nios mayores, atribuyen la falta de atencin a factores que suelen tener un carcter ms psicolgico, como la falta de motivacin, la dificultad de la tarea o el hecho de desviar el inters hacia otras cosas ajenas a la escuela (aspectos intrnsecos de la tarea de aprender). Mazzoni y Cornoldi (1993) demostraron que el conocimiento previo sobre la facilidad o dificultad percibida o estimada de una tarea, afecta a la distribucin del tiempo de estudio, de manera que a las tareas fciles se les dedica menos tiempo que a las tareas difciles. De igual forma, Dufresne y Kobassigawa (1989), en otro estudio experimental, manipularon el grado de relacin entre los componentes de una lista de pares asociados, observando que el tiempo de recuerdo de los temes menos relacionados entre s, los ms difciles, superaba el tiempo dedicado al recuerdo de los pares ms relacionados. Todas estas apreciaciones ponen de manifiesto que el grado de percepcin de las variables concernientes a las tareas afectan al modo de realizacin de las mismas, de forma que, a medida que el sujeto va teniendo una mayor conciencia de las variables de la tarea, se incrementa su eficacia de realizacin. Las variables de las estrategias van referidas al conocimiento estratgico cognitivo, metacognitivo y de los medios que pueden propiciar y facilitar el xito, tales como: repetir elementos de una lista, ordenarlos por categoras, comprender un determinado contenido, relacionarlos son otros, recordar una determinada cuestin, resolver tal o cual problema, etc. El conocimiento de las variables de estrategia se refiere al conocimiento procedimental, extrado de la experiencia, resultante de la ejecucin de tareas anteriores. A partir del conocimiento de las caractersticas y requisitos de las tareas, las caractersticas personales y las estrategias que hay que emplear, es cuando se puede empezar a planificar, regular, evaluar y reorganizar el proceso cognitivo coherentemente. As, pues, la metacognicin supone el conocimiento y control de los propios estados y procesos cognitivos (Brown, Bransford, Ferrara, Capione, 1983). Las actividades de planificacin estn integradas por el establecimiento de metas de aprendizaje, subdivisin de la tarea en pasos, generacin de interrogantes ante el nuevo material, identificacin y anlisis del problema, plantea-

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miento de hiptesis de trabajo, determinacin de la dosificacin del tiempo y el esfuerzo necesarios, etc. Las actividades de direccin (monitoring) y autorregulacin incluyen la autodireccin y autocontrol cognitivo durante todo el proceso de realizacin de una actividad cognitiva, siendo capaz de seguir el plan trazado. Y, las estrategias de evaluacin permiten comprobar la eficacia del proceso cognitivo, mientras que las de reorganizacin facilitan su modificacin en su defecto. El desarrollo de las actividades de control cognitivo, de autoconciencia acerca de cmo se conoce y de automanejo de la propia actividad cognitiva, permite a los alumnos asumir la responsabilidad de su propio aprendizaje, que, para Nisbet y Shuckmith (1986), es la clase del aprender a aprender. Precisamente, estos autores, describen la metacognicin como el sptimo sentido que lleva a aprender a aprender; es decir, la capacidad de reconocer y controlar la situacin de aprendizaje. Lo que no debe confundirse con el aprendizaje de habilidades especficas para el estudio es ser capaz de organizar, dirigir y controlar los procesos mentales y ajustarlos a las exigencias o contexto de la tarea. En este sentido, Nickerson et al. (1987) indican que la actuacin de los expertos, respecto a los novatos, es de mayor nfasis en la planificacin y la aplicacin de estrategias, una mejor distribucin del tiempo y los recursos, y un control y una evaluacin cuidadosa del progreso. Los hallazgos de diferentes investigaciones confirman que los nios muy pequeos poseen un grado considerable de conocimiento metacognitivo que se va desarrollando gradualmente durante su proceso de maduracin, de ah la conveniencia de que los estudiantes, desde muy corta edad, dentro del currculo y no como apndice del mismo, se inicien en la prctica del autoexamen y el control de su autoeficacia, distribuyendo cuidadosamente el tiempo y los recursos de que disponen. Las habilidades y estrategias metacognitivas deben ensearse simultneamente a la enseanza de los contenidos de las diferentes materias escolares (Hartman y Sternberg, 1993), integradas en alguno de los mtodos de interaccin didctica. Una parte de ellas se centran en el maestro y otras les corresponde desarrollarlas a los propios estudiantes, dependiendo de quin tenga la responsabilidad y el control de la actividad de aprender en cada momento de la situacin de aprendizaje-enseanza. Las tcnicas centradas en el maestro incluyen: preguntar, decir en voz alta lo que se hace al tiempo que se realiza, anticipar los pasos que se van a seguir, preguntarse por el valor y el inters de cada uno de ellos, justificar las decisiones que se toman, proporcionar diferentes ejemplos, analogas, grficos, esquemas y justificar su valor procedimental para adquirir el conocimiento. En suma, modelar y justificar previamente el aprendizaje que queremos que realice el alumno despus de forma individual.

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Las habilidades y estrategias centradas en el alumno incluyen marcarse objetivos y planificar las tareas, hablarse a s mismo a lo largo del aprendizaje para autopreguntarse y cuestionarse cada paso de la actividad de aprender, pensar en voz alta, detenerse a reflexionar y revisar lo realizado previamente, anticipar y prever etapas y resultados, evaluar resultados parciales y finales, preguntarse por qu las tareas se hacen bien o mal, a qu se puede deber, si est en manos del alumno proponer soluciones y cules. Por ltimo, destacar la importancia del estudio conjunto de los factores cognitivos-metacognitivos y motivacionales, que, como consecuencia, ha dado como resultado la aparicin del nuevo constructo conocido como aprendizaje autorregulado (SRL: Self-Regulated Learning). Puede considerarse autorreguladores a los alumnos en la medida en que son, cognitiva-metacognitiva, motivacional y conductualmente, promotores activos de sus propios procesos de aprendizaje (Zimmerman, 1990b; McCombs y Marzano, 1990). Cognitiva-metacognitivamente, cuando son capaces de tomar decisiones que regulan la seleccin y uso de las diferentes formas de conocimiento: planificando, organizando, instruyendo, controlando y evaluando (Corno, 1986, 1989). Motivacionalmente, cuando son capaces de tener gran autoeficacia, autoatribuciones y gran inters intrnseco en la tarea, destacando un extraordinario esfuerzo y persistencia durante el aprendizaje (Borkowski et al., 1990; Schunk, 1986). Conductualmente, cuando son capaces de seleccionar, estructurar y crear entornos para optimizar el aprendizaje, buscando consejos, informacin y lugares donde puedan ver favorecido su aprendizaje (Wang y Peverly, 1986; Zimmerman y Martnez-Pons, 1986), autoinstruyndose y autorreforzndose (Rohrkemper, 1989). En suma, un aprendiz efectivo es aquel que llega a ser consciente de las relaciones funcionales entre sus patrones de pensamiento y de accin (estrategias) y los resultados socio-ambientales (Corno y Mandinach, 1983; Corno y Rohrkemper, 1985); es decir, cuando se siente agente de su comportamiento, estando automotivado, usando estrategias de aprendizaje para lograr resultados acadmicos deseados, autodirigiendo la efectividad de su aprendizaje, evalundolo y retroalimentndolo. 3. Evaluacin Sin duda alguna, las habilidades cognitivas y metacognitivas suponen, quizs, los constructos ms investigados en la psicologa de la instruccin contempornea; no obstante, tanto su delimitacin conceptual como su evaluacin y entrenamiento requieren un tratamiento metodolgico emprico vlido y fiable, que d solidez a sus planteamientos. Hay autores que restringen la cognicin-metacognicin a los procesos de los que las personas son o pueden ser conscientes y que se manifiestan a travs de indicadores internos, introspectivos (Flavell, 1976, 1977; Flavell y Wellman,

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1977); y otros, sin embargo, lo hacen a travs de indicadores externos, indirectos, susceptibles de medida y cuantificacin (Paris y Jacobs, 1984; Jacobs y Paris, 1987; Cross y Paris, 1988). En este sentido, unos u otros, intentan analizar la cognicin-metacognicin mediante la observacin y la medida de los dos grandes aspectos que la definen: autoconocimiento y proceso de control. As pues, en general, el procedimiento metodolgico ms utilizado en la evaluacin de la cognicin-metacognicin es el informe verbal, como forma de inferir los estados de conciencia de los individuos; aunque, es una herramienta que cuenta con numerossimas crticas (Nisbet y Wilson, 1977) y que supone costosos esfuerzos para mejorar los procedimientos que permitan validar y fiabilizar los hallazgos obtenidos (Ericsson y Simon, 1980). No obstante, podramos distinguir dos grupos de tcnicas diferenciadas al respecto: las primeras, seran aquellas donde los sujetos abordan de forma consciente sus propios estados mentales haciendo alusin a la descripcin de los procesos que verbalizan -think aluod (Cavanaugh y Permlmutter, 1982), entrevistas (Brown, 1987) y cuestionarios (Pintrich y De Groot, 1990, Cuestionario de Estrategias Motivadas -MSLQ-)-, y, las segundas, considerando las respuestas verbales como resultado o producto de un proceso mental dado, actuando como indicadores de que determinados procesos se activan por parte del sujeto -peer tutoring (Garner, 1987), pictorial techniques (Daz y Rodrigo, 1989), graphing subjective (Hall, Dansereau, ODonnell, 1990), cuestionario metacognitivo MQ (Swanson, 1990), judgments of knowing y feeling of knowing (Nelson y Leonesio, 1990), etc.-. Queda claro, pues, que la mayor parte de las tcnicas, salvo las que utilizan dibujos o grficos, se fundamentan en el informe verbal, como procedimiento para acceder a los estados y los procesos de control del conocimiento de los que los individuos son conscientes y que podemos inferir a partir de autovaloraciones personales (Pelegrina, Justicia y Cano, 1991). No obstante, las verbalizaciones, como herramienta metodolgica, han sido objeto de numerosos anlisis (fiabilidad, influencia del experimentador, relaciones entre lo que el sujeto sabe y lo que en realidad hace, consideraciones sobre el estado evolutivo de los sujetos, etc.), poniendo de manifiesto algunas precauciones, como recomienda Garner (1987): 1. Evitar preguntar sobre procesos automticos, inaccesibles a la reflexin. 2. Reducir el intervalo entre procesamiento e informe. 3. Evitar el efecto de sesgo del experimentador utilizando preguntas indirectas. 4. Utilizar diferentes mtodos que no compartan las mismas fuentes de error para valorar el conocimiento y la utilizacin de las estrategias. 5. Utilizar tcnicas que reduzcan las demandas de verbalizacin, especialmente en los sujetos ms jvenes. 6. Evitar escenarios hipotticos y cuestiones muy generales.

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7. Valorar la consistencia de las respuestas de la entrevista a lo largo del tiempo para un grupo de sujetos. 8. Valorar la validez de las preguntas para reducir las respuestas verbales a temas de inters. As, pues, la tcnica del cuestionario, junto con la entrevista, tal vez sean, entre los procedimientos analizados, los ms utilizados para medir la cognicinmetacognicin (Belmont y Borkoswski, 1988; Clements y Natassi, 1990; Meichenbaum, Burland, Gruson y Cameron, 1985; Pintrich y De Groot, 1990; Tobias, Hartman, Everson y Gourgey, 1991; Swanson, 1990). De ellos, aqu nos interesan particularmente el Metacognitive Questionnaire, MQ, de Swanson y el Motivated Strategies for Learning Questionnaire, MSLQ, de Pintrich y De Groot. 4. Programas de intervencin En general, podramos distinguir dos lneas de intervencin: 1) La que alude exclusivamente al trmino cognicin-metacognicin, y 2) La referida a la conjuncin cognicin-metacognicin y motivacin. Respecto a la primera orientacin, programas de intervencin exclusivos en cognicin-metacognicin, decir que son numerosos los trabajos que han demostrado el efecto favorable del entrenamiento en habilidades y estrategias cognitivas y metacognitivas en diferentes reas del currculo: en lectura (Brown, Armbruster y Baker, 1985; Brown y Palincsar, 1987; Campione y Brown, 1990; Chipman, Segal y Glaser, 1985; Jacob y Paris, 1987; Snchez, 1993); en escritura (Bereiter y Scardamalia, 1987; Castell, 1995; Hayes y Flower, 1980; Higgins, Flower y Petraglia, 1992; Saunders, 1989); en el uso de grficos y mapas (Moore, 1993; Schofield y Kirby, 1994); en fsica (Pirolli y Bielaczyc, 1989; Pirolli y Recker, 1994); en la solucin de problemas (Borkowski, 1992; Chi et al., 1989; Bielaczyc, Pirolli y Brown, 1995; Klahr, 1985; Swanson, 1990), y, recientemente, la de Herrera y Ramrez Salguero (2001) sobre cognicin-metacognicin en contextos pluriculturales. Estos trabajos, al mismo tiempo, han desarrollado diversos mtodos de enseanza para llevar a cabo el entrenamiento en cognicin-metacognicin. Dichos mtodos tienen distinta fundamentacin terica y se basan en la observacin, la comparacin y la reflexin sobre el modo de ejecutar tareas hechas por otros (profesores o grupo de iguales) o sobre la propia ejecucin de los estudiantes, concerniente a tareas relacionadas con el aprendizaje escolar. Entre estos mtodos, podemos citar: el role-playing; la discusin; el debate; el mtodo de explicacin o enseanza directa (Duffy et al., 1986); el modelado y el mtodo de andamia-je, derivado de los supuestos que inspiran el trabajo de Vygotsky (1978) (Collins, Brown y Newman, 1989); el mtodo de entrenamiento cognitivo, basado en el dilogo, la explicacin directa, el modelado (un ejemplo de este mtodo lo tenemos en el programa ISL -Informed Strategies for,Learning- propuesto por Paris y colaboradores, 1984); el mtodo de aprendi-

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zaje cooperativo, entendido como una ayuda al aprendizaje cuando los alumnos realizan tareas en comn (Slavin, 1991); o, el mtodo de enseanza recproca, basado en la interaccin del trabajo en situacin de pareja (dada), en la que uno de los integrantes del par adopta el rol de lder (Palincsar y Brown, 1984). Las propuestas, en general, se han dirigido al aumento de las estrategias de memoria, incidiendo en el problema de la generalizacin y mantenimiento de estrategias previamente entrenadas, o a fomentar la lectura comprensiva, utilizando tcnicas de enseanza informativa, metforas, grupos de dilogo, prcticas dirigidas y aplicaciones, como el ISL de Paris et al. (1984). Respecto a la segunda orientacin, programas de intervencin en metacognicin y motivacin conjuntamente (SRL), decir que tambin son numerosos los trabajos que han demostrado el efecto ms favorable del entrenamiento en estrategias cognitivas y metacognitivas cuando se llevan a cabo conjuntamente con programas de desarrollo motivacional (Paris, Olson y Stevenson, 1983; Corno y Mandinach, 1983; Corno y Rohrkemper, 1985; Zimmerman y Martnez Pons, 1986; Dweck, 1986; Alonso, Garca y Montero, 1986; Castro, 1986; Pintrich y De Groot, 1990; Pokay y Blumenfeld, 1990; Wellman, 1990, 1995; Zimmerman, 1989, l 990; Valle y Nez, 1989; McCombs y Marzano, 1990; Weiner (1990); Gonzlez-Pienda, Nez y Valle, 1991; Borkowski y Muthukrishna, 1992; Jussim y Eccles, 1992; Nez, 1992; Navas et al., 1991, 1992; McCombs, 1993; Castejn, Navas y Sampascual, 1993; Pardo y Alonso, 1993; Cabanach, Nez y Garca-Fuentes, 1994; Nez y Gonzlez-Pienda, 1994; Sampascual, Navas y Castejn, 1994; Rivire, Sarri, Nez y Rodrigo, 1994; Butler y Winne, 1995; Alonso, 1995, etc.). De ellos es preciso destacar que, en general, han sido diseados basndose en la modificabilidad de las atribuciones causales y de la cognicin-metacognicin, siendo sus mximos exponentes Schunk et al.(1992), recomendando dirigir la atribucin del sujeto, en caso de fracaso, no a la falta de esfuerzo; sino, al uso inadecuado de las estrategias de resolucin o al planteamiento incorrecto del problema, por las siguientes razones: 1. Si el sujeto se esfuerza constantemente para obtener un resultado positivo y nunca lo consigue, no slo acabar cansndose de intentarlo, sino que reducir su autoconfianza, creyndose incapaz de alcanzar el xito, por ms que lo intente. 2. De persistir en la atribucin del xito al esfuerzo, el sujeto antes que esforzarse y darse cuenta de que no es capaz, preferir disimular, mostrar un falso inters o esforzarse poco (confirmado por Covington, 1992). 3. Por mucho que le digamos que no se esfuerza, si no se le muestra dnde ha fallado y cmo resolver el problema, nunca lo har correctamente. En caso de xito, la atribucin tampoco sera debida al esfuerzo, sino a la habilidad; dado que, segn el grado de comprensin que tiene el nio de los con-

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ceptos esfuerzo y habilidad, indicarle que ha aprobado porque se ha esforzado, es como sugerirle que tiene poca capacidad, ya que ha tenido que esforzarse para conseguirlo y, adems, porque conduce a un crecimiento menor de sus expectativas futuras. En este sentido, sera conveniente seguir lo que Pardo y Alonso (1993:338) denominan los criterios rectores de intervencin: Antes de la tarea, durante la tarea y despus de la tarea. Finalmente, es conveniente tener en cuenta tambin los conceptos y teoras, los sistemas de evaluacin y programas de intervencin ms relevantes sobre aprender a pensar y pensar para aprender, destacando las siguientes ideas: 1. Respecto al concepto, recogiendo las opiniones de De Bono (1973), Feuerstein (1979), Gardner (1983) y Sternberg (1985), podramos entenderlo como conjunto de habilidades intelectuales relacionadas entre s, que cambian o evolucionan con la edad, cuya operatividad debe partir del conocimiento de su potencialidad y capitalizacin, y de las propias debilidades, para compensar habilidades y debilidades. 2. En cuanto a las teoras, entre otras, destacar especialmente las aportaciones de De Bono (1973), sobre la aplicacin del pensamiento crtico, analtico y creativo, junto con el conocimiento, a la solucin de problemas (operatividad: capacidad de hacer CoRT); de Feuerstein (1979), sobre la mejora de la inteligencia, la reestructuracin general de los procesos cognitivos y la mejora del potencial de aprendizaje a travs de un correcto aprendizaje mediado (Teora de la Modificabilidad Estructural Cognitiva TMEC); de Gardner (1983), sobre las inteligencias mltiples, proponiendo siete reas, en principio, y despus una ms, relativamente autnomas de cognicin humana o inteligencias: lingstica, lgicomatemtica, musical, espacial, corporal-cinestsica, interpersonal, intrapersonal y naturalista. De manera que, solamente a travs de la combinacin de estas inteligencias, podremos explicar una serie relativamente completa de capacidades y estados extremos que figuran en todas las culturas humanas (Teora de las Inteligencias Mltiples); y de Sternberg (1985), sobre la inteligencia como capacidad de autogobierno cognitivo que procura la adaptacin al medio, inhibiendo la primera respuesta instintiva, redefinindola y eligiendo la mejor respuesta. Destacando en ella tres aspectos esenciales: analtico, sinttico o creativo y prctico, que estn representados en tres subsistemas: componencial, experiencial y contextual (Teora Trirquica de la Inteligencia). 3. Sobre los instrumentos de evaluacin, decir que prcticamente todos van asociados a sus correspondientes teoras y programas de intervencin. De entre ellos, destacar los propuestos por Feuerstein (1983), el Learning Potential Assessment Device LPAD (Evaluacin Dinmica del Potencial de Aprendizaje), conjunto de estrategias de anlisis de la inteligencia, cuya finalidad consiste en provocar una serie de interacciones entre examinador y examinado para valorar su potencial oculto o su capacidad para beneficiarse del aprendizaje, orientado al anlisis de los procesos mediante los cuales los alumnos van razonando sus respuestas; por Gardner, cuya propuesta va unida al del Proyecto

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Cero de Harvard (1988), que comenz con la puesta en marcha de un programa y tcnicas de valuacin de la inteligencia, utilizando contextos ms prximos a la vida real, tanto en educacin preescolar como en primaria y secundaria SPECTRUM y PROPEL; por Sternberg (1993) con su Sternberg Triarchic Abilities Test STAT, cuyo objetivo es medir de cuatro formas (a travs de material verbal, cuantitativo, figurativo y de ensayos) los tres tipos de habilidades intelectuales (analtica, creativa y prctica); y la propuesta comn de Sternberg y Gardner (1993), el Practical Intelligence for Schools PIFS, programa para la evaluacin y el desarrollo de la inteligencia prctica en las escuelas, cuya intencin es utilizar el contenido de las materias escolares como trampoln para adquirir habilidades de aprendizaje, a travs de la reflexin y el control de las propias tcnicas de pensamiento, mientras trabajan en una materia curricular especfica, armonizando y conjugando as sus respectivas posturas Teora de las Inteligencia Mltiples y Teora Trirquica de la Inteligencia. 4. Referente a los programas de intervencin, destacar dos tipos de programas: los que se llevan a cabo a parte de currculo escolar, como una asignatura ms, este es el caso de la propuesta de Feuerstein; y, los que se insertan en el curriculum, como los de Sternberg y Gardner. La aportacin de Feuerstein (1985), el Instrumental Enrichment Program PEI, pretende desarrollar la capacidad humana modificndola a travs de la exposicin directa a los estmulos y a la experiencia proporcionada por el contacto directo con la vida, a travs del aprendizaje formal e informal, destacando el papel especial del mediador. La aportacin de Gardner y Sternberg (1993),el Practical Intelligence for Schools PIFS, organizado en trminos del manejo intelectual de tres elementos: s mismo (conocernos), las tareas (conocer y organizar nuestras tareas) y los otros (conocer y relacionarnos con los dems), supone una magnfica contribucin para el autogobierno eficaz de las habilidades intelectuales. Todo lo cual, a la hora de evaluar e intervenir en el aprender a pensar y pensar para aprender, nos lleva a decantarnos por las aportaciones de Feuerstein (1985) y de Gardner y Sternberg (1993).

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CAPTULO 12
Estrategias cognoscitivas: una perspectiva terica

Lissete Pogglioli

Introduccin En este captulo tenemos como propsito ofrecer informacin relacionada con algunos fundamentos tericos indispensables para la comprensin de otros tantos conceptos referidos a cmo aprendemos, es decir, cules procesos realizamos y cules actividades llevamos a cabo cuando queremos procesar informacin para aprenderla y almacenarla en nuestra memoria. Si nosotros, como docentes, tenemos informacin clara y precisa acerca de los procesos involucrados en el aprendizaje humano, entonces tendremos herramientas que nos ayudarn a facilitar el proceso de enseanza-aprendizaje y nuestra prctica educativa ser ms eficaz. Es por estas razones que vamos a brindar al lector la oportunidad de familiarizarse con algunos conceptos como aprendiz, aprendizaje, sistema de memoria, memoria sensorial, memoria a corto plazo, memoria a largo plazo, estrategias cognoscitivas, componentes del proceso de aprendizaje, entre otros, los cuales vamos a definir bajo el enfoque de procesamiento de informacin, al cual nos referiremos ms adelante. Tambin sealaremos los enfoques que han predominado en el estudio sobre el aprendizaje humano en los ltimos aos para que, al analizar las diferentes perspectivas, puedas darte cuenta de las diferencias que hay entre ellas y las razones por las cuales nos acogemos al enfoque cognoscitivo. Antecedentes Durante muchos aos, el estudio del aprendizaje humano estuvo dominado por el enfoque asociacionista. Este enfoque propone que el aprendizaje es el resultado de asociaciones entre estmulos o entre estmulos y respuestas, como lo concibi Thorndike (1931) con su teora de las asociaciones, o del establecimiento de patrones de

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reforzamiento propuesto por Skinner (1957) en su teora sobre el condicionamiento operante, Los planteamientos de Thorndike sealan que los seres humanos aprendemos o adquirimos nuevas asociaciones mediante un proceso denominado de ensayo y error, en el cual las asociaciones que son recompensadas se fortalecen ; mientras que aqullas que son ignoradas o no reforzadas se debilitan y desaparecen gradualmente. Esta proposicin, denominada ley del efecto, orient durante varias dcadas los estudios sobre el aprendizaje, los que tuvieron como propsito tratar de determinar cules asociaciones eran ms fciles de formar y cules ms difciles. Dicha propuesta tuvo implicaciones para el proceso de enseanza-aprendizaje ya que, partiendo de tales supuestos, los docentes podamos organizar la prctica educativa en el aula, de manera tal que slo se fortalecieran las asociaciones correctas y se debilitaran las incorrectas. El enfoque asociacionista del aprendizaje y la enseanza no ha desaparecido totalmente de algunas prcticas educativas ya que, por ejemplo, la instruccin asistida por computadora, en la cual se ejercitan algunas operaciones bajo esta modalidad de presentacin y reforzamiento, particularmente en el rea de la matemtica, puede verse como una versin sofisticada de la teora propuesta por Thorndike. Skinner y otros psiclogos conductistas sealaron que una ciencia de la mente no era posible ya que los eventos y actividades mentales no pueden observarse. Este enfoque se basa en los siguientes supuestos: 1. Los aprendizajes slo son posibles en trminos de conductas observables. Slo aquellos comportamientos y ejecuciones que se pueden observar han sido aprendidos. Lo que no se puede observar, no ha sido aprendido. 2. Los resultados del aprendizaje son el producto del establecimiento de patrones de refuerzo. Si una respuesta es reforzada, se fortalece; si por el contrario, no es reforzada, tiende a desaparecer gradualmente. 3. Es el ambiente y no el aprendiz lo que determina el aprendizaje. Lo que aprendemos no est determinado por nosotros sino por los estmulos que nos llegan del ambiente. 4. Las respuestas incorrectas producen efectos negativos en el aprendizaje; por lo tanto, se deben evitar.

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5. El aprendizaje sin error es posible a travs del moldeamiento de la conducta deseada a travs de la exhibicin de la conducta correcta la cual se puede lograr mediante pequeos pasos o aproximaciones sucesivas a dicha conducta. Tales proposiciones hicieron que el nfasis del proceso enseanzaaprendizaje se centrara en el docente y en los objetivos de aprendizaje como componentes del ambiente en el cual se desenvuelven los aprendices. En el docente, porque es quien presenta los contenidos a aprender y en los objetivos, porque son los elementos del proceso de enseanza-aprendizaje los que establecen las conductas que se aspiran lograr, mediante un proceso de establecimiento de reforzamientos inmediatos, frecuentes y repetidos. Estos supuestos llevaron a desarrollar una tecnologa del proceso enseanza-aprendizaje, en la cual se organiza la prctica educativa en secuencias cuidadosamente arregladas para que los individuos adquieran gradualmente conductas nuevas y complejas sin cometer errores en el transcurso de su adquisicin. Tales principios fueron trasladados al aula de clase en la forma de la instruccin programada. Esta enseanza se caracteriza por presentar una secuencia organizada de pequeos pasos y ofrecer una correccin inmediata para guiar a los aprendices, paso por paso, hasta lograr la habilidad para ejecutar una determinada tarea. De la misma manera, estos principios se aplicaron con el fin de desarrollar y mantener la conducta social deseada en el aula, aplicacin conocida como modificacin de conducta. Como ya hemos sealado, durante un largo perodo, casi toda la investigacin sobre el aprendizaje se realiz bajo el enfoque asociacionista. La investigacin tradicional realizada bajo esta corriente se centr principalmente en el aprendizaje animal por lo que los estudios se abocaron al anlisis de formas de aprendizaje relativamente simples. En lo que se refiere a la investigacin acerca del aprendizaje humano, los estudios utilizaban tareas que involucraban ms memorizacin que comprensin. Aunque los psiclogos de la Gestalt, entre los aos 1910 y 1930, debatieron ocasionalmente acerca del aprendizaje, su inters principal fue el estudio de la percepcin y as, interpretaron el aprendizaje en funcin de principios perceptuales. A partir de la dcada de los setenta, comenz a desarrollarse un movimiento en psicologa y educacin, denominado enfoque cognoscitivo.

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En el marco de este enfoque se han llevado a cabo numerosas investigaciones dirigidas a analizar y comprender cmo la informacin que recibimos, la procesamos y la estructuramos en nuestro sistema de memoria. En otras palabras, cmo aprendemos. Este enfoque ha modificado la concepcin del aprendizaje ya que, en vez de concebirlo como un proceso pasivo y externo a nosotros, lo concibe como un proceso activo, que se da en nosotros y en el cual podemos influir. A diferencia de las propuestas de los enfoques asociacionistas, los resultados del aprendizaje no dependen de elementos externos presentes en el ambiente (docente, objetivos, contenidos) sino del tipo de informacin que recibimos o que se nos presenta y las actividades que realizamos para lograr que esa informacin sea almacenada en nuestra memoria. Los supuestos que sustentan el enfoque cognoscitivo en relacin con el aprendizaje son los siguientes: 1. El aprendizaje es un proceso activo, que ocurre en nuestras mentes, que est determinado por nosotros, y que consiste en construir estructuras mentales o modificar o transformar las ya existentes a partir de las actividades mentales que realizamos, basadas en la activacin y el uso de nuestro conocimiento previo. 2. Los resultados del aprendizaje dependen del tipo de informacin recibida y de cmo la procesamos y la organizamos en nuestro sistema de memoria, no de elementos externos presentes en el ambiente (docente, objetivos, contenidos). 3. El conocimiento est organizado en bloques de estructuras mentales y procedimientos. 4. El aprendiz es concebido como un organismo activo que realiza un conjunto de operaciones mentales con el propsito de codificar la informacin que recibe y almacenarla en la memoria para luego recuperarla o evocarla cuando la necesita. Desde este punto de vista, el papel que tienen los procesos de transformacin y organizacin de la informacin, que ocurren en nuestras mentes, ha cobrado mucha importancia y, en consecuencia, la atencin de los investigadores se ha dirigido a analizar las actividades que realizamos para aprender, retener y evocar. La mayora de los estudios iniciales constituyeron esfuerzos por examinar el papel de los aprendices en la facilitacin de su aprendizaje y el

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nfasis se centr en el estudio de aquellas estrategias que sirven para recordar informacin (estrategias mnemotcnicas). Basados en el xito de estas investigaciones iniciales, los estudios posteriores se dedicaron a analizar los procesos involucrados en este tipo de estrategia y a determinar su efectividad. Los tipos de ejecucin utilizados en estos estudios incluyeron el aprendizaje de listas de pares asociados de palabras (perro-gato), listas de palabras aisladas y tareas de recuerdo libre; sin embargo, estas ejecuciones eran ms tpicas de situaciones de laboratorio que del aprendizaje que confrontamos los individuos en la vida diaria. Aunque el inters del enfoque cognoscitivo por el aprendizaje se ha centrado, bsicamente, en la manera cmo las personas adquirimos nuevos conocimientos y nuevas destrezas y en la forma cmo este conocimiento y estas habilidades se pueden modificar, casi todas las concepciones del aprendizaje han incluido - explcita o implcitamente algunos criterios para su definicin. Estos criterios resaltan 1) que hay un cambio en nuestra conducta o en nuestra habilidad para hacer algo, 2) que este cambio resulta de la prctica o de la experiencia y 3) que este cambio es perdurable (Shuell, 1986). Estas caractersticas son comunes tanto a las concepciones asociacionistas como a las cognoscitivas; sin embargo, existen diferencias entre ellas que vale la pena destacar y que se presentan en el cuadoro 12.1. En sntesis, se puede sealar que el enfoque cognoscitivo concibe el aprendizaje como el proceso que modifica el sistema cognoscitivo humano con el fin de incrementar, de manera ms o menos irreversible, su ejecucin posterior en una o varias tareas. Tal concepcin del aprendizaje enfatiza la adquisicin de conocimiento y la formacin de estructuras cognoscitivas denominadas esquemas (Greeno, 1980). Tanto la concepcin asociacionista como la cognoscitiva consideran que los factores ambientales, as como tambin otros factores intrnsecos al individuo, interactan influyendo en el aprendizaje. Sin embargo, ambas perspectivas no estn de acuerdo en cul de los dos elementos de la relacin aprendiz-ambiente es el ms importante. El enfoque asociacionista seala que se debe modificar el ambiente para influir sobre el aprendizaje como, por ejemplo, brindar refuerzo cuando se obtiene una respuesta correcta; mientras que el enfoque cognoscitivo seala que es necesario modificar el aprendiz, como por ejemplo, promover en el individuo el uso de estrategias de aprendizaje. Tambin existen diferencias entre ambas posiciones en relacin con qu se

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aprende (conducta vs conocimiento estructurado) y cules son los factores que influyen en el proceso de aprendizaje (refuerzo vs habilidades) (Shuell, 1986). Cuadro 12.1. Comparacin entre la teora asociacionista y la teora cognoscitiva del aprendizaje Teora asociacionista Teora cognoscitiva El aprendiz es un ente pasivo y dependiente del ambiente. El aprendizaje ocurre debido a las asociaciones entre estmulos o entre estmulos y respuestas. El conocimiento consiste en patrones de asociaciones que se han aprendido. El aprendizaje consiste en la adquisicin de nuevas asociaciones. El conocimiento previo influye en el nuevo aprendizaje bsicamente mediante procesos como: la transferencia positiva y negativa, debido a la semejanza de estmulos entre asociaciones. La educacin consiste en el arreglo de estmulos de manera que ocurran las asociaciones deseadas. (Adaptada de Andre y Phye, 1986) El aprendiz es un ente activo y con dominio del ambiente. El aprendizaje ocurre porque el aprendiz trata activamente de comprender el ambiente. El conocimiento consiste en un cuerpo organizado de estructuras mentales y procedimientos. El aprendizaje consiste en cambios en las estructuras mentales del aprendiz originados por las operaciones mentales que realiza. El aprendizaje se basa en la activacin y el uso del conoci miento previo con el fin de comprender nuevas situaciones y modificar las estructuras de este conocimiento previo para interpretar nuevas situaciones. La educacin consiste en permitir y promover la exploracin mental activa de los ambientes complejos.

Del enfoque cognoscitivo El inters principal del enfoque cognoscitivo se ha centrado en describir y analizar varios procesos, tales como la percepcin, la atencin, la comprensin, el pensamiento, la representacin del conocimiento, la memoria, la resolucin de problemas, entre otros, sustentados en el enfoque de procesamiento humano de la informacin el cual, en la actualidad, constituye la corriente central del pensamiento tanto en

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psicologa como en educacin. El nfasis est localizado en el estudio de los procesos mentales y en el examen de las estructuras de conocimiento que se pueden deducir a partir de las diferentes y variadas formas del comportamiento humano. Esta corriente del pensamiento ha tratado de explicar algunos aspectos que no fueron estudiados por los enfoques asociacionistas, como los efectos de las caractersticas del aprendiz en el aprendizaje, su papel como un organismo procesador, las formas de pensamiento de alto nivel, lo que procesa durante una situacin de aprendizaje, las consecuencias que tienen ciertas formas de procesamiento y la manera cmo se miden los resultados del aprendizaje (DiVesta, 1989). En consecuencia, se puede afirmar que el enfoque cognoscitivo ha influenciado la teora y la investigacin sobre el aprendizaje humano de manera significativa ya que dicho enfoque: 1. Concibe el aprendizaje como un proceso activo y constructivo. Es activo porque cuando aprendemos, realizamos un conjunto de operaciones y de procedimientos mentales que nos permiten procesar la informacin que estamos recibiendo, y es constructivo, porque estos procesos, que llevamos a cabo, nos permiten construir significado que va a depender de la interaccin entre la informacin que tenemos almacenada en nuestra memoria y la nueva que recibimos. 2. Enfatiza la presencia de procesos de alto nivel en el aprendizaje. Esto quiere decir que cuando queremos aprender una informacin, es necesario que llevemos a cabo procesos de alto nivel como, por ejemplo, la elaboracin de inferencias o el establecimiento de relaciones entre la informacin que tenemos almacenada y la que recibimos ya que, de lo contrario, no habr un aprendizaje significativo. Es posible que se de un aprendizaje basado en la memoria solamente, pero esta informacin se pierde gradualmente porque no pasa a formar parte de nuestras estructuras de conocimiento. 3. Seala que el aprendizaje es un proceso acumulativo en el cual el conocimiento previo tiene un papel fundamental. En otras palabras, el aprendizaje es un proceso que consiste en la acumulacin de informacin la cual se va organizando en nuestras estructuras cognoscitivas o esquemas, de manera tal, que stas se van enriqueciendo y estructurando hasta llegar a unos nive-

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les de afinamiento que son caractersticos de los sujetos expertos. 4. Intenta determinar la forma o formas cmo el conocimiento se representa y se organiza en la memoria. Esto significa que, a partir de estudios realizados, se ha podido determinar que el conocimiento que adquirimos lo tenemos representado y organizado en nuestro sistema de memoria. Algunos dicen que la representacin es en forma de imgenes, pero otros dicen que es en forma de proposiciones verbales o enunciados como, por ejemplo: Caracas es la capital de Venezuela. Algunos tericos sealan que la organizacin es jerrquica, otros que es en forma de redes. 5. Analiza las tareas de aprendizaje y la ejecucin de los individuos en trminos de los procesos cognoscitivos involucrados. Es decir, que nuestro comportamiento y nuestra ejecucin en tareas de aprendizaje han sido examinadas con el fin de poder describir cules son los procesos cognoscitivos que llevamos a cabo en diferentes tareas como, por ejemplo, en la resolucin de un problema, en la comprensin de un material escrito, o en la evocacin de una informacin, entre otras (Shuell, 1986). El sistema de la memoria Para comprender cmo aprendemos, es necesario saber cmo funciona nuestro sistema de memoria. En relacin con la memoria, su naturaleza, su estructura, los procesos que involucra, etc., ha habido mucha discusin entre los tericos cognoscitivos. A pesar de los numerosos estudios realizados, an no se sabe cul es la naturaleza exacta de la memoria; sin embargo, existen varios modelos basados en la estructura bsica inicialmente propuesta por Atkinson y Shiffrin (1968) segn los cuales la memoria es la capacidad que tenemos los seres humanos para registrar, retener y recuperar informacin. Es decir, la informacin que recibimos, tenemos que guardarla en alguna parte ya que si no la almacenamos adecuadamente, no nos ser posible recordarla posteriormente cuando la necesitemos. Por ejemplo, cuando estamos haciendo un trabajo en la computadora, es necesario que lo guardemos, ya sea en un disquette o en el disco duro, ya que si no lo guardamos, no lo podremos recuperar cuando queramos trabajar nuevamente con l o cuando queramos imprimirlo. As como funciona

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la computadora en relacin con la informacin que procesa, de manera parecida funciona nuestro sistema cognoscitivo.

La memoria involucra algunos procesos que nos permiten registrar (codificacin), retener (almacenamiento) y evocar (recuperacin) la informacin. Cada uno de estos procesos es diferente y tiene tambin funciones diferentes. La codificacin es el proceso mediante el cual registramos inicialmente la informacin, de manera tal que nuestro sistema de memoria la pueda utilizar. El hecho de que exista cierta in-

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formacin que no podamos evocar en un momento determinado puede deberse a dos razones: que nunca hayamos sido expuestos a esa informacin y, en consecuencia, es imposible que la hayamos podido registrar; o que dicha informacin no haya sido codificada inicialmente; es decir, no haya sido registrada de manera significativa y, por lo tanto, tampoco la podemos evocar. Otro de los procesos del sistema de memoria es el almacenamiento. Este proceso consiste en guardar la informacin en la memoria y conservarla hasta que la necesitemos. Si la informacin no es almacenada, es obvio que no podr ser evocada. El ltimo proceso es la recuperacin. Este proceso nos permite localizar la informacin que tenemos almacenada en la memoria cuando queremos utilizarla. Slo podremos evocar aquella informacin que ha sido codificada y almacenada. Por lo tanto, slo si se dan los tres procesos, seremos capaces de recordar. La figura 1 representa los procesos bsicos de la memoria. Estructuras de la memoria Aunque los procesos de codificacin, almacenamiento y recuperacin son necesarios para que la memoria funcione, no describen qu es lo que pasa con la informacin desde que llega a nuestros sentidos hasta que la guardamos en nuestro almacn. Algunos investigadores, que se han dedicado a estudiar el sistema de la memoria, sugieren que esta informacin pasa por diferentes niveles de procesamiento (Craik y Lockhart, 1972), mientras que otros sealan que existen tres tipos de almacenamiento en la memoria y que stos varan en cuanto a sus funciones y al tiempo que retienen la informacin (Atkinson y Shiffrin, 1968). A continuacin, vamos a revisar la proposicin que seala que existen tres tipos de almacenamiento de la informacin para posteriormente hacer referencia a los niveles de procesamiento. El modelo de Atkinson y Shiffrin Este modelo sugiere que la memoria est conformada por varios tipos de memoria o, ms precisamente, por varios tipos de almacn. Estos son: la memoria sensorial (MS), la memoria a corto plazo (MCP) y la memoria a largo plazo (MLP). Memoria sensorial (MS) La memoria sensorial (MS) es el almacenamiento inicial y momentneo de la informacin que nos llega a travs de los sentidos (vista, odo, tacto, gusto, olfato), denominados registros sensoriales (RS).

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Por ejemplo, el sonido de un trueno, la visin de un relmpago o el pinchazo de un dedo con un alfiler constituyen estmulos de muy breve duracin, pero que son capaces de proporcionarnos informacin que nos haga producir una respuesta como taparnos los odos, cerrar los ojos o retirar el dedo rpidamente. Esta informacin se almacena inicialmente por un perodo muy breve en la memoria sensorial, se podra decir que por instantes. Debido a que este tipo de memoria o de almacenamiento depende de los sentidos, involucra varios tipos de recuerdos sensoriales que se relacionan con una fuente diferente de informacin sensorial. En este sentido, existe la memoria icnica, que almacena la informacin que recibimos visualmente; la memoria ecoica, o almacenamiento de la informacin que recibimos a travs del sentido del odo, as como tambin, memorias correspondientes a cada uno de los otros sentidos. Como ya hemos dicho anteriormente, el tiempo de duracin de la informacin almacenada en la memoria sensorial es muy breve -entre 1 y 4 segundos-, en consecuencia, si no procesamos esa informacin para pasarla a otro tipo de almacenamiento, se perder para siempre. Los planteamientos antes expresados tienen implicaciones obvias para el aprendizaje. Ya sabemos que la informacin que recibimos a travs de los sentidos, pero fundamentalmente la vista y el odo, permanece por muy poco tiempo en nuestra memoria sensorial, por lo que es conveniente y necesario que tal informacin sea procesada de manera diferente para que pase al otro tipo de almacenamiento denominado memoria a corto plazo (MCP), donde tambin debe ser elaborada para que sea transferida al ltimo almacn que es la memoria a largo plazo (MLP).

Memoria a corto plazo (MCP)

La memoria a corto plazo (MCP) es un tipo de memoria que almacena cantidades limitadas de informacin tambin por perodos breves. Si las unidades de informacin que se almacenan en este tipo de memoria no reciben un procesamiento cuando llegan a l, desaparecern, aproximadamente, entre quince y veinticinco segundos. Un ejemplo simple puede ser un nmero de telfono que buscamos en nuestra libreta y que mantenemos en la memoria para utilizarlo por tan slo unos pocos segundos mientras hacemos la llamada y luego desaparece. La memoria a corto plazo no slo tiene limitaciones en cuanto al tiempo de duracin del almacenamiento de la informacin (entre 15 y 25

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segundos) sino que, adems, tiene limitaciones en su capacidad. Es decir, slo podemos almacenar en ella cierta cantidad de informacin y no ms; es como si fuera una caja en la cual queremos guardar un objeto que no cabe porque el objeto es ms grande que el espacio de la caja. Sin embargo, estudios realizados (Miller, 1956) han encontrado que la capacidad de almacenamiento de este tipo de memoria es, bsicamente, de siete unidades de informacin, pero que puede variar entre cinco y nueve unidades. Inicialmente, se pens que una unidad de informacin en la MCP era una sola letra o un solo dgito, pero se ha encontrado que existe un proceso de agrupacin, el cual hace posible el almacenamiento de palabras o combinaciones de palabras que son familiares, como por ejemplo, OEA, ONU, ABC, TWA. Cuando la MCP recibe la informacin proveniente de la memoria sensorial, este tipo de memoria se denomina memoria primaria, la cual almacena la informacin de manera transitoria. Sin embargo, existen otros procesos que tienen lugar en la MCP los cuales hacen pensar que sta opera como una memoria de trabajo con varias funciones. Funciones de la memoria a corto plazo Una de las funciones de la MCP consiste en comparar la informacin que recibimos con la que tenemos almacenada en la memoria a largo plazo (MLP). En este caso, la informacin nueva la mantenemos en la MCP y, la que tenemos en la MLP, la recuperamos y la transferimos a la MCP, de manera tal, que podamos compararlas. Por ejemplo, vamos a suponer que tenemos almacenada informacin sobre las rocas referida solamente a su composicin; es decir, a la combinacin de materiales que las conforman; posteriormente, en un libro leemos otra informacin que se refiere a los procesos que ocurren en la Tierra y que originan diferentes tipos de rocas: gneas, sedimentarias o metamrficas. Cuando esto sucede, la informacin recibida la mantenemos en la MCP, recuperamos de nuestra MLP la informacin sobre las rocas, las comparamos, y as nos damos cuenta de que la informacin nueva es otra, complementaria de la almacenada. Esto sucede en tan poco tiempo que no nos damos cuenta de todos los procesos que estamos realizando. Otra funcin que este tipo de memoria realiza es combinar o integrar el material a ser aprendido con un cuerpo organi-

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zado de conocimiento que tenemos almacenado en la MLP. Siguiendo con el ejemplo anterior, podemos decir que, de esta manera, la informacin recibida sobre los procesos formadores de rocas pasa a enriquecer nuestras estructuras de conocimiento. Ahora tenemos almacenado un bloque de conocimiento referido a las rocas, su naturaleza y los procesos que las originan. Una tercera funcin, la ms conocida, es la funcin de ensayo o de prctica. Este proceso interno de repetir o practicar el material recibido en la MCP permite que las unidades de informacin recin codificadas sean mantenidas por perodos ms largos de veinte segundos, de no ser as, tales unidades de informacin se olvidarn. Continuando con el ejemplo sobre las rocas, podemos decir que si nosotros no practicamos la informacin recibida sobre los procesos formadores de las rocas, tal informacin desaparecer en un tiempo muy breve y, por lo tanto, dicha informacin no pasar a formar parte de nuestras estructuras de conocimiento. Para poder almacenar la informacin en la MLP es necesario practicar. La prctica es el proceso que permite la transferencia de la informacin de la MCP a la MLP mediante la repeticin u otro tipo de estrategia ms compleja. La prctica tiene dos objetivos: mantener viva la informacin en la MCP y transferir la informacin al ltimo almacn de la memoria que es la MLP. La transferencia de informacin que se realiza entre ambos tipos de almacn - MCP y MLP - parece que depende, en gran parte, del tipo de prctica que se lleve a cabo. Si solamente repetimos la informacin, una y otra vez, mantendremos la informacin en la MCP, pero no necesariamente sta pasar a la MLP. La repeticin, en este caso, es considerada como el proceso mediante el cual se renueva la informacin recibida de manera que la podamos codificar para su posterior almacenamiento en la MLP. Por otra parte, si practicamos la informacin mediante un proceso denominado ensayo elaborativo o prctica elaborativa, es ms probable que la informacin sea transferida a la MLP para su almacenamiento. Este tipo de prctica, ms que un

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proceso de mantenimiento de la informacin en la MCP, es un proceso que favorece la elaboracin del material. La prctica elaborativa ocurre cuando la informacin es organizada de alguna manera con el fin de hacerla significativa, ya sea relacionndola con otra informacin u organizndola de forma tal que sea ms fcil almacenarla y, en consecuencia, recuperarla. Por ejemplo, vamos a suponer que deseamos que nuestros estudiantes se aprendan las 23 entidades federales de Venezuela y sus ciudades capitales. En este caso, la prctica elaborativa puede ser que ellos repitan o ensayen los nombres de las entidades federales y sus capitales pero organizndolos de diversas maneras : 1) por puntos cardinales; es decir, agrupando las entidades federales que se encuentran al norte del pas, al sur, al este y al oeste; 2) por entidades cuyas ciudades capitales tienen nombre de santo: San Cristbal, San Carlos, San Fernando, 3) por entidades cuyas denominaciones y capitales tienen el mismo nombre: Mrida, Trujillo, etc., 4) o simplemente darles libertad para que le impongan la organizacin que prefieran. Lo importante es saber que este tipo de prctica favorece el almacenamiento de la informacin en nuestra memoria, y , por lo tanto, debemos ensear a nuestros estudiantes a practicar de esta manera para que su aprendizaje sea ms eficiente. Los materiales transferidos a la memoria de trabajo para ser elaborados pueden ser: 1) eventos, episodios circunscritos a dimensiones temporales y espaciales, 2) unidades de informacin nueva que podemos comparar con el material almacenado en la MLP y 3) materiales previamente almacenados en la MLP que podemos integrar o combinar con los materiales nuevos que llegan a la MCP. Importancia de la memoria a corto plazo La memoria a corto plazo se puede concebir como una de las etapas en la secuencia de procesamiento de informacin, en la cual el material recibido debe ser atendido por nosotros con el fin de trabajarlo mediante procesos de agrupamiento, ensayo o elaboracin, para poderlo almacenar posteriormente en la MLP. La MCP, en su papel de memoria de trabajo, recibe material evocado de la MLP, lo compara con las nuevas unidades

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de informacin, lo reconoce y lo combina o lo integra con el material recibido para poder as formar nuevas entidades de aprendizaje, las cuales pueden ser diferentes organizaciones del conocimiento, procedimientos, estrategias para resolver problemas, etc. El hecho de que nuestra MCP tenga limitaciones, en cuanto al tiempo de almacenamiento de las unidades de informacin y al nmero de unidades que podemos almacenar, tiene implicaciones definitivas para el aprendizaje. Ya sabemos que no es posible modificar la duracin del tiempo de almacenamiento de nuestra MCP (15-25 segundos) mediante una intervencin de aprendizaje; sin embargo, tambin sabemos que esta limitacin puede ser superada si ensayamos o practicamos la informacin de manera significativa ya sea relacionndola con otra informacin u organizndola. Con respecto a la limitacin del nmero de unidades de informacin, se ha encontrado que podemos incrementar la amplitud de nuestra memoria a travs de la prctica. Los estudios realizados en esta rea han encontrado que es posible incrementar la amplitud de la memoria de siete a doce unidades de informacin (Ericcson y Chase, 1982). La limitacin de la capacidad de la MCP es de particular importancia para el diseo de tareas de aprendizaje. Las instrucciones que damos a nuestros estudiantes para realizar alguna tarea como por ejemplo: primero, observe el mapa en la parte superior de la pgina, coloree en azul los ros y los lagos, en verde las reas de sabana y llano y, finalmente, en marrn las montaas, deben evitar incluir tres o cuatro pasos simultneos o indicar ms de tres o cuatro estmulos a los cuales atender al mismo tiempo; de lo contrario, la capacidad de la MCP se desbordar. Si esto llega a suceder, es probable que los estudiantes: 1) tengan que escuchar o leer las instrucciones nuevamente o, 2) ejecuten las acciones en forma inadecuada porque le dedican demasiada atencin al ensayo de las instrucciones. Cuando tratamos de resolver un problema de cualquier tipo, la capacidad limitada de nuestra MCP para trabajar con varias tareas al mismo tiempo, restringe nuestra ejecucin en la tarea. Estas limitaciones parecen ser obvias en la solucin de pro-

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Memoria a largo plazo (MLP)

blemas matemticos, por lo que estrategias tales como el establecimiento de metas y submetas, hasta encontrar la solucin, pueden contribuir a reducir las demandas del almacenamiento de la MCP. En tareas de lectura, por ejemplo, las limitaciones de la MCP parecen estar involucradas en la decodificacin de las palabras, as como tambin en la comprensin de oraciones gramaticalmente complejas. En consecuencia, al comunicar a nuestros estudiantes lo que queremos que realicen en funcin del seguimiento de instrucciones, el establecimiento de reglas o la comprensin de segmentos de textos, el diseo para una instruccin efectiva, debe tomar en cuenta las limitaciones de la capacidad de la MCP. De igual manera, este requerimiento debe extenderse a los materiales que utilizan la presentacin de problemas como un instrumento de aprendizaje ya que, como sabemos, no podemos trabajar con ms de cuatro unidades de informacin, pasos u operaciones al mismo tiempo. Si deseamos incrementar el nmero de las unidades de informacin a procesar, entonces, debemos ayudar a nuestros estudiantes a ensayarlas, elaborarlas o agruparlas, con el fin de evitar demandas excesivas en su memoria de trabajo.

La memoria a largo plazo (MLP) es el ltimo almacn de nuestro sistema de memoria. En l guardamos la informacin recibida a travs de los sentidos la cual, al ser elaborada en nuestra memoria a corto plazo, puede ser transferida a este tipo de memoria. La MLP es ilimitada, no slo en cuanto al perodo de duracin de la informacin en l, sino tambin en cuanto a su capacidad, es decir, la cantidad de unidades o grupos de informacin que podemos almacenar. En la MLP tenemos almacenados los conceptos y las asociaciones o relaciones que existen entre ellos. Los conceptos pueden ser objetos percibidos (por ejemplo, canario), rasgos de conceptos (por ejemplo, amarillo, rojo, cuadrado, redondo), relaciones entre conceptos (por ejemplo, arriba, debajo, delante) o conceptos de alto nivel (por ejemplo, familia, sabidura, paz) (Poggioli, 1989). Algunos tericos del enfoque cognoscitivo sealan que los conceptos en la MLP parecen estar organizados en la forma de proposiciones (Anderson, 1980), las cuales son enunciados que poseen un sujeto y un

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predicado (por ejemplo, el canario es un ave). De igual manera, sealan que los contenidos de la MLP son redes de proposiciones a las que continuamente les estamos aadiendo otras proposiciones nuevas conformando, de esta manera, configuraciones conceptuales a medida que adquirimos nuevos conceptos o grupos de conceptos. Entre estos tericos se encuentran Collins y Quillian (1969) quienes han propuesto que las redes de conceptos que tenemos almacenadas en la MLP estn organizadas, jerrquicamente, en categoras. Por ejemplo: un concepto como canario est relacionado con la categora ave, la cual, a su vez, se relaciona con la categora animal y con la categora ser viviente . Otra forma de organizacin para las redes de conceptos es la sugerida por Rips, Shoben y Smith (1973), la cual supone que los conceptos se definen y se diferencian de otros por un conjunto de rasgos caractersticos y definitorios; as, el concepto canario presenta los siguientes rasgos: tiene plumas, tiene pico, tiene alas, puede volar, etc., que lo hacen ser un miembro caracterstico de la categora aves. Independientemente de la forma cmo las redes conceptuales estn organizadas en la MLP, parece ser que entre ellas existen relaciones (Anderson, 1980). Cuando se nos presenta un concepto, este genera una activacin que se expande o propaga a otros conceptos en la red con los cuales est asociado. Por ejemplo, si recibimos el concepto canario, l activar otros que tenemos almacenados en nuestra MLP, como ave, animal, ser viviente. Si por el contrario, recibimos otro concepto como animal, es posible que los conceptos que se activen sean otros tales como mamferos, aves, reptiles, peces, anfibios. Lo que queremos que comprendas es que los conceptos almacenados en nuestra MLP estn organizados de tal manera, que los que se asemejan se encuentran ms cerca unos de otros y que cuando uno de ellos se activa, los otros conceptos que estn asociados a l tambin se activan. Por lo tanto, es importante que ayudemos a nuestros estudiantes a activar esos conceptos que tienen almacenados, para que de esta manera las relaciones que queremos que establezcan, sean ms fciles de formar. Estas relaciones pueden ser internas, es decir, entre los conceptos activados y otro tipo de informacin que poseen en sus estructuras de conocimiento o relaciones externas o vinculaciones que pueden establecer entre la informacin almacenada en su MLP y la que estn recibiendo.

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Algunos tericos cognoscitivos consideran que la MLP tiene dos componentes: la memoria episdica y la memoria semntica (Tulving, 1983). La memoria episdica se utiliza para almacenar los eventos de nuestra vida como personas, lo que hemos hecho y las experiencias que hemos tenido, relacionndolas con lugares y tiempos determinados. La memoria semntica, por su parte, almacena los conocimientos generales que tenemos acerca del mundo, como por ejemplo: Caracas es la capital de Venezuela, 2 + 2 = 4, o la Tierra es redonda. Los contenidos de estos dos sistemas pueden explicar la gran variedad de clases de cosas que conforman la MLP. Bower (1975) seala que en la MLP tenemos estructuras tales como: 1) modelos del mundo que nos rodea incluyendo representaciones correspondientes a imgenes de objetos y lugares, 2) conceptos de objetos, sus propiedades y las reglas que los relacionan, 3) creencias acerca de la gente, de nosotros mismos y destrezas de interaccin social, 4) actitudes, valores y objetivos sociales, 5) destrezas motoras tales como nadar, manejar automviles, patinar, etc., 6) destrezas de solucin de problemas y 7) destrezas para comprender el lenguaje, la msica y la pintura. La figura 2 ilustra el flujo de informacin desde los registros sensoriales a la memoria a corto plazo y entre sta y la memoria a largo plazo.

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Algunas distinciones entre las estructuras de la memoria a largo plazo Gagn y Glaser (1987) sealan que los conceptos y sus relaciones estn organizados en la MLP a manera de redes semnticas, pero que es necesario clasificarlas en varias formas de conocimiento si deseamos analizarlas en funcin del aprendizaje y la ejecucin humana. Estos autores consideran que el listado de Bower, antes mencionado, es bastante comprehensivo, sin embargo, sugieren que hay otros tipos de conceptualizacin acerca del contenido de la MLP. Estas son las imgenes, la distincin entre conocimiento declarativo (saber qu) y conocimiento procedimental (saber cmo), los esquemas y las habilidades cognitivas. Las imgenes Una variedad importante del contenido de la MLP lo constituye la imagen. Diversos estudios sealan que los seres humanos poseemos imgenes internas de objetos y eventos percibidos, aunque sus tipos e intensidades difieren ampliamente entre ellos. Es como si tuvisemos almacenados en nuestra MLP dibujos de objetos y eventos. Aunque la imagen visual es quizs la ms comn en la mayora de las personas, tambin existen imgenes auditivas, tctiles y de otros tipos. La investigacin en esta rea se ha centrado bsicamente en dos cuestiones: 1) examinar si el almacenamiento del material aprendido en forma de imgenes promueve la retencin del material almacenado en forma de proposiciones verbales y 2) cul es la naturaleza de la representacin de una imagen. Hallazgos reportados en la literatura indican que el aadir imgenes a las proposiciones verbales almacenadas en la MLP, algunas veces, ayuda a la evocacin de este material. Tal evidencia se ha encontrado, por ejemplo, en estudios realizados referidos al recuerdo de cuentos o historietas por parte de nios, de listas de palabras en lengua extranjera y al aprendizaje de textos (Tierney y Cunningham, 1984). Otros resultados sugieren que las imgenes pueden ser de gran utilidad para ayudar a mejorar la retencin de individuos que tienen baja habilidad

verbal (Salomon, 1979). A pesar de que los resultados de las investigaciones son contradictorios, es evidente que el aadir imgenes a un material ayuda a procesarlo mejor. En consecuencia, es conveniente tomar en consideracin estos planteamientos al momento de disear situaciones de aprendizaje y tratar de ilustrar con imgenes la informacin que queremos transmitir. El conocimiento declarativo (conceptos, hechos y principios) y el conocimiento procedimental (procedimientos) La distincin entre conocimiento declarativo (conocimiento verbal) y conocimiento procedimental (habilidad intelectual) ha tenido una influencia definitiva en la psicologa cognoscitiva y en la investigacin realizada bajo este marco terico de referencia. El conocimiento declarativo se refiere al conocimiento que tenemos acerca de las cosas del mundo que nos rodea y se cree que est representado en la memoria como una red interrelacionada de hechos en forma de proposiciones, como por ejemplo: 4 x 2 = 8 , Pars es la capital de Francia. El conocimiento procedimental es el conocimiento acerca de cmo ejecutar acciones, como por ejemplo: resolver una operacin de suma o de resta, nadar, montar bicicleta, etc. El conocimiento declarativo est representado como una red de proposiciones o enunciados de las relaciones entre hechos, conceptos y eventos, mientras que el conocimiento procedimental est representado como un sistema de produccin; es decir, enunciados de las circunstancias bajo las cuales realizamos una accin o varias acciones, as como tambin, los detalles de lo que debemos hacer cuando esa accin es apropiada. Cada produccin contiene una condicin y una accin; en otras palabras, una produccin es una regla, una unidad de conocimiento procedimental. Vamos a ilustrar con un ejemplo cmo aprendemos a resolver operaciones de suma de ms de dos columnas. El docente o el texto comienza con enunciados que establecen hechos como: En las operaciones de suma, primero se suman los nmeros de la columna de la derecha, luego se suman los nmeros de la columna siguiente, y as sucesivamente.

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Con la prctica y con ejemplos que provee ya sea el docente o el texto, estos enunciados se transforman en la habilidad para ejecutar la tarea. Segn el modelo de Anderson (1980), la habilidad para llevar a cabo las acciones especificadas se puede representar bajo la forma de producciones (P), como se especifica a continuacin: P1. Si el objetivo es resolver una operacin de suma, entonces, sume los nmeros de la columna de la derecha. P2. Si el objetivo es resolver una suma y la columna de la derecha ya ha sido sumada, entonces, sume los nmeros de la siguiente columna. Estas y otras producciones las recopilamos con la prctica y la experiencia en otras ms generales que nos permiten resolver operaciones de suma de manera eficiente. A medida que encontramos operaciones de este tipo y nos familiarizamos con ellas, ocurre un proceso de generalizacin y as, desarrollamos reglas de produccin que se hacen ms amplias en su rango de aplicacin. Gagn (1985) ha planteado que los seres humanos adquirimos muchas reglas que conforman habilidades las cuales facilitan llevar a cabo operaciones simblicas de diversos tipos: utilizar el lenguaje, resolver problemas matemticos, componer y ejecutar msica, interactuar con otras personas, etc. El conocimiento de estas reglas (conocimiento procedimental) implica una ejecucin que es altamente precisa y predecible, mientras que el poseer conocimiento declarativo implica poder enunciar el significado de un conjunto de ideas y construir conocimiento en funcin de l. Estos dos tipos de conocimiento, el declarativo y el procedimental, tienen implicaciones para la instruccin y el aprendizaje. Por ejemplo, el conocimiento previo, relevante al aprendizaje de una nueva regla, conforma un conjunto especfico de conceptos y reglas prerrequisitos. Por ejemplo, el aprendizaje de las reglas para dividir implica el conocimiento previo de reglas prerrequisito relacionadas con las operaciones de suma, resta y multiplicacin. Por su parte, el conocimiento previo (declarativo) para el aprendizaje de un nuevo conjunto de hechos es ms abstracto y no necesariamente constituye un

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prerrequisito del mismo. Los dos tipos de conocimiento, independientemente de la forma como estn representados, poseen diferentes caractersticas relativas a su aprendizaje, almacenamiento, recuerdo y transferencia (Gagn y Glaser, 1987). Los esquemas A comienzos de los aos setenta, se realizaron varios estudios cuyos resultados indican que nuestro conocimiento previo y su activacin durante los eventos de aprendizaje, tienen un papel fundamental en la adquisicin de nuevo conocimiento. El conocimiento almacenado en nuestra MLP ha sido concebido como una estructura denominada esquema. El esquema ha sido definido como un cuerpo abstracto de informacin organizada que representa lo que uno piensa acerca del mundo (Schallert, 1982) y se refiere al formato de organizacin de una estructura de informacin que es modificable y que representa los conceptos genricos que tenemos almacenados en la MLP. Los esquemas representan la informacin disponible acerca de las experiencias, las interrelaciones entre conceptos, objetos, situaciones, eventos y secuencias de eventos que normalmente ocurren en el mundo a nuestro alrededor. En tal sentido, los esquemas contienen informacin acerca de situaciones experimentadas con cierta frecuencia que utilizamos para interpretar nuevas situaciones (Rumelhart, 1981). Los esquemas los vamos formando o desarrollando a partir de nuestras experiencias y por acumulacin de informacin. Los esquemas contienen espacios en los cuales podemos encajar la informacin recibida. Cuando llenamos estos espacios, podemos decir que el esquema se activa. Un esquema activado puede, entonces, guiarnos a buscar informacin para llenar los vacos y construir una interpretacin coherente y completa. Si no disponemos de informacin adicional, entonces podremos construir el esquema con las inferencias elaboradas a partir de la informacin que tengamos sobre la situacin en particular (Glaser, 1987). Consideremos el siguiente ejemplo. En general, todos nosotros hemos ido alguna vez en nuestra vida a un restaurante; en tal sentido, podramos decir que disponemos de un esquema de restaurante en nuestra MLP.

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Cuando vamos a un restaurante, sabemos qu hacer y qu esperar, es decir, podemos predecir lo que va a ocurrir: esperamos que nos conduzcan a la mesa, nos pregunten si deseamos tomar algo, luego nos traen el men, haremos el pedido, nos traen los platos que pedimos, comemos, nos traen la carta para pedir los postres, nos preguntan si deseamos tomar caf, finalmente, pedimos la cuenta, pagamos y nos vamos del restaurante. Sin embargo, si nosotros visitamos un restaurante de comida rpida, del tipo autoservicio, nos damos cuenta de que ese esquema tradicional que tenemos de restaurante no encaja en esta nueva situacin, como tampoco encajara una visita a un McDonalds o a un Burger King, ya que esta es una situacin completamente diferente a las dos anteriores. Qu sucede entonces y qu es lo que nos permite comportarnos de manera diferente en estos tres tipos de situaciones? La respuesta es el esquema. Poseemos un esquema genrico de restaurante y a medida que tenemos diferentes tipos de experiencias con diversos tipos de restaurantes, encajamos esa informacin en el esquema genrico y construimos sub-esquemas que nos permiten actuar diferencialmente en cada situacin en particular. Para nosotros sera sumamente confuso ir a un McDonalds, por ejemplo, y encontrar en la puerta un mesonero que nos conduzca a una mesa y que nos traiga un men para que hagamos el pedido ya que tal situacin no encaja en el esquema que tenemos del restaurante del tipo McDonalds. As como los esquemas son fundamentales para la comprensin de hechos y de situaciones, tambin son muy importantes para la adquisicin de nuevo conocimiento. Los esquemas relevantes nos ayudan a comprender y a recordar textos, proveen las bases y las estructuras para la comprensin y permiten predecir y clasificar nuevas experiencias, en sntesis, son fundamentales para la comprensin y el aprendizaje. Si nosotros no hemos tenido experiencia alguna o si hemos tenido experiencias limitadas con relacin a un tema o tpico en particular, no dispondremos de esquemas o los que tenemos sern insuficientes para poder evocar un contenido determinado, por lo que nuestra comprensin ser muy difcil por no decir imposible. Tal situacin puede ser ilustrada con el siguiente

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ejemplo. Lea el siguiente texto: Si tuviramos la oportunidad de observar un volcn en erupcin, obtendramos evidencia directa de la existencia de un material rocoso fundido que surge del interior de la Tierra. Este material fundido se denomina magma y cuando se solidifica, al entrar en contacto con el aire de la atmsfera, el producto resultante es una roca gnea. Por lo tanto, las rocas gneas son aquellas rocas que se forman a partir de la consolidacin del magma por lo que tambin reciben el nombre de rocas eruptivas o rocas magmticas. Si poseemos informacin relativa a las rocas y a sus procesos de formacin, o hemos visto alguna pelcula en la cual hayamos tenido la experiencia de observar un volcn en erupcin o ledo en algn libro informacin relacionada con este tpico en particular, tendremos esquemas que nos van a permitir comprender la informacin contenida en el texto anterior. Si por el contrario, nunca hemos tenido la experiencia de observar un volcn en erupcin, as sea en pelculas o en fotos, o no hemos ledo o escuchado informacin sobre las rocas y sus procesos de formacin, ser muy difcil que entendamos la informacin presentada en el texto anterior, porque no tendremos esquemas que nos permitan comprenderla. La nocin de esquema, como un formato de organizacin de la informacin en la MLP, constituye parte del marco de referencia conceptual bajo el cual se estn desarrollando en la actualidad innumerables estudios, tanto en psicologa como en educacin. En este sentido, se han realizado investigaciones para examinar los efectos de los esquemas en la comprensin de la lectura, en el almacenamiento y el recuerdo del contenido de un texto cuando se le comunica al lector la perspectiva que debe asumir en relacin con la informacin que va a leer, las diferencias individuales y su relacin con contextos implcitos que afectan diferencialmente la reconstruccin de representaciones de eventos, las expectativas del aprendiz acerca de eventos y su recuerdo, la organizacin general de los cuentos o historietas y su efecto sobre la comprensin y el papel de los esquemas en la solucin de problemas (Gagn y Glaser, 1987). Las habilidades cognoscitivas

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Las concepciones actuales sobre la memoria y el aprendizaje suponen que las personas aprenden habilidades. Gagn y Glaser (1987) han planteado que los seres humanos no aprendemos respuestas sino la habilidad para producirlas y, en particular, clases de respuestas; no adquirimos ejecuciones sino la habilidad para demostrar ciertas clases de ejecuciones, tampoco aprendemos hbitos bsicos simples, ya que ello supone una concepcin muy limitada del rango y de la capacidad de generalizacin de las ejecuciones humanas. Lo que las personas almacenamos y evocamos en nuestra MLP son habilidades. Podra decirse que las habilidades humanas constituyen los resultados del aprendizaje y, adems, del conocimiento declarativo (informacin verbal) y el conocimiento procedimental (destrezas intelectuales) como contenidos de nuestra MLP, existen tambin otros contenidos como son las habilidades, las estrategias cognoscitivas, las destrezas motoras y las actitudes. Las dos ltimas han sido consideradas, por mucho tiempo, productos del aprendizaje, sin embargo, las estrategias cognoscitivas han comenzado a examinarse ms recientemente, considerndose que constituyen habilidades que permiten el control interno de otros procesos involucrados en el aprendizaje, el recuerdo y el pensamiento incluyendo los procesos de control sugeridos por Atkinson y Shiffrin (1968) en su modelo sobre la memoria. En sntesis, podra sealarse que los contenidos de la MLP son variados y diferentes y entre ellos podemos mencionar las imgenes, el conocimiento declarativo y el procedimental, los esquemas y las habilidades cognoscitivas. Como ya se ha sealado a lo largo de este trabajo, todos estos contenidos de la MLP tienen implicaciones para la enseanza y el aprendizaje, en consecuencia, es conveniente tomarlos en consideracin en el momento de planificar el desarrollo de la actividad pedaggica en las aulas de clase. Implicaciones de la memoria a largo plazo para el aprendizaje Cuando una unidad de informacin llega a la MLP para su almacenamiento, podemos decir que esa informacin ha sido aprendida. Esto significa que los procesos de registro y almacenamiento sensorial, de almacenamiento en la MCP y de codificacin semntica han operado

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sobre el material que est siendo almacenado en la MLP ya sea en forma de proposiciones o en forma de imgenes. Cualquiera que sea la forma que el material aprendido adquiera en la MLP, ste se traduce en cinco categoras de habilidades: 1) conocimiento declarativo, 2) conocimiento procedimental, 3) estrategias cognoscitivas, 4) destrezas motoras y 5) actitudes (Gagn, 1984). Aunque el almacenamiento en la MLP pudiramos constituirlo en una definicin de aprendizaje, existen otros cambios que pueden ocurrir con un procesamiento posterior, los cuales pueden concebirse como etapas avanzadas del aprendizaje. Por ejemplo, la fase de compilacin del conocimiento ha sido considerada como una fase profunda y compleja en la cual se almacena un procedimiento. La prctica de estas reglas nos conducen a la adquisicin de cierta velocidad en el uso de las reglas, lo que luego nos permite alcanzar un cierto nivel de automatizacin. Si recordamos el ejemplo sobre cmo realizamos las operaciones de suma con dos columnas, observaremos que, una vez adquirido el procedimiento, este tipo de operacin se hace automtica y la podemos realizar con cierta velocidad. En relacin con el conocimiento declarativo, tambin se han descrito otros cambios que reflejan etapas ms avanzadas del aprendizaje. Supuestamente, despus que codificamos unidades de conocimiento declarativo, la prctica contribuye a que fortalezcamos no slo las unidades de informacin, sino las relaciones entre ellos, incrementando, de esta manera, el tamao de la amplitud de las proposiciones relacionadas (Anderson, 1980). Otros tipos de cambios avanzados en el material inicialmente adquirido, se refieren a la organizacin del conocimiento almacenado. Rumelhart y Norman (1978) sealan que esta organizacin la llevamos a cabo mediante tres procesos: 1) acumulacin, mediante el cual adquirimos nueva informacin 2) reestructuracin, nos permite la creacin de nuevos esquemas y 3) ajuste o afinamiento, nos permite la modificacin gradual y el refinamiento de un esquema como resultado de su utilizacin en diferentes situaciones. Todas estas ideas y planteamientos acerca del aprendizaje implican que la instruccin debe disearse de tal manera que permita la codificacin inicial del material a ser aprendido para su posterior almacenamiento en la MLP. Igualmente, debe facilitar otros tipos de cambios que superen esos estados iniciales. La instruccin debe ofrecer oportunidades para

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que el conocimiento procedimental sea practicado, de manera que las reglas se combinen, adquieran velocidad y se hagan automticas, ya que cuando se logra su automatizacin, al aprendiz le queda ms capacidad en su MCP para atender a otras actividades. Tambin la instruccin debe facilitar el logro de cambios en el conocimiento organizado incluyendo el afinamiento de los esquemas previos y la formacin de nuevos esquemas (Gagn y Glaser, 1987). Niveles de procesamiento : una concepcion alternativa al sistema de memoria En 1972, Craik y Lockhart propusieron una alternativa al modelo multialmacn de Atkinson y Shiffrin (1968) ya que consideraron que si bien tal modelo se haba preocupado por estudiar la capacidad de la memoria y los formatos de codificacin de la informacin, no haba prestado suficiente atencin a cmo se procesa tal informacin y cules pudieran ser las posibles etapas del procesamiento. En su modelo alternativo, estos autores enfatizan las operaciones de codificacin (registro) como determinantes de la permanencia relativa de lo almacenado, partiendo del supuesto que la memoria es un sistema unitario con diversos niveles de procesamiento: estructural, fonolgico y semntico que ocurren de manera continua desde los niveles de senso-percepcin y reconocimiento de patrones hasta los niveles de atribucin de significado. En este modelo se concibe la memoria ms como un proceso activo y menos como un almacn de informacin. Esta propuesta, denominada teora de los niveles de procesamiento, enfatiza el grado en el cual analizamos la informacin nueva y seala que la cantidad de procesamiento de la informacin que se produce cuando nos encontramos con ese material, es de vital importancia para determinar qu cantidad de informacin vamos a recordar. El nivel superficial de procesamiento se orienta hacia el procesamiento de las caractersticas sensoriales y fsicas de la informacin: qu aspecto tiene una letra, o un nmero o una palabra? Es decir, este tipo de procesamiento se refiere, bsicamente, a caractersticas relacionadas con la estructura de la informacin. Por ejemplo, si leemos la palabra flor, slo vamos a prestar atencin a las formas de las letras. En el nivel intermedio de procesamiento, atendemos principalmente a los rasgos de carcter fonolgico; aadindole sonido a las letras,

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traducimos las letras en unidades significativas y las consideramos en el contexto de las palabras. En el nivel de procesamiento profundo, denominado tambin procesamiento de rasgos semnticos, analizamos la palabra en funcin de su significado ubicndola en un contexto ms amplio, pudiendo derivar asociaciones entre su significado y otros que tengamos almacenados. Por ejemplo, podemos pensar en distintos tipos de flor, podemos imaginarlas o relacionarlas con eventos en los cuales es usual recibir o enviar flores, etc. La teora de los niveles de procesamiento o de profundidad de procesamiento, como tambin se le ha denominado, parte de un conjunto de supuestos los cuales se resumen a continuacin: Lo importante no es dnde procesamos la informacin (MCP, MLP) sino la cantidad de procesamiento que esta informacin recibe. El procesamiento de la informacin es un continuo que va desde un procesamiento superficial, pasando por uno intermedio hasta llegar al ms profundo, de carcter semntico, de construccin de significado. La persistencia de la informacin que almacenamos en nuestra memoria est en funcin de la profundidad del anlisis. En consecuencia, los niveles de anlisis ms profundos permiten que dicha informacin sea ms elaborada, ms fuerte y ms perdurable. A mayor grado de anlisis semntico, mayor profundidad de procesamiento. La sola repeticin o prctica de la informacin no garantiza que sta sea transferida a la MLP.Craik y Lockhart distinguen dos tipos de prctica: de mantenimiento y elaborativa. La primera es superficial y nos permite mantener la informacin en la MCP. La segunda nos permite establecer vinculaciones entre la informacin que recibimos con la que ya tenemos en nuestra MLP. Aunque la distincin entre ambos modelos es importante desde una perspectiva terica-psicolgica, desde el punto de vista educacional, los dos generan predicciones similares en relacin con las actividades que podemos realizar cuando queremos adquirir, recuperar y recordar informacin de manera efectiva. Ambos modelos sealan que las activi-

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dades realizadas para codificar y elaborar la informacin presentada influyen sobre el recuerdo. De igual manera, ambos modelos argumentan que el incremento en el grado hasta el cual procesamos una informacin, la relacionamos con la ya almacenada y la elaboramos, conduce a un incremento en el aprendizaje y la retencin. Las actividades educativas que promueven el procesamiento elaborativo y semntico de la informacin facilitan el aprendizaje y la retencin. Como se puede observar, ambas propuestas tienen implicaciones claras para el aprendizaje. El modelo de Atkinson y Shiffrin seala que el sistema de la memoria es un multialmacn conformado por tres tipos diferentes de almacenamiento: memoria sensorial, memoria a corto plazo y memoria a largo plazo. Por su parte, el modelo de los niveles de procesamiento de Craik y Lockhart, se refiere ms al tipo de procesamiento que ocurre desde que recibimos informacin de los estmulos (internos o externos) hasta que se almacena en la memoria a largo plazo (MLP). El aprendizaje de ejecuciones complejas Hasta ahora, nos hemos referido al aprendizaje y a los procesos de aprendizaje relativos a la adquisicin de informacin relativamente simple que nos permite funcionar en nuestra vida cotidiana. A continuacin, vamos a hacer referencia al aprendizaje que facilita nuestra ejecucin en actividades mentales ms complejas como las involucradas en el uso de estrategias cognoscitivas para la adquisicin de conocimiento, el recuerdo de informacin, la solucin de problemas y los procesos de autorregulacin. ESTRATEGIAS COGNOSCITIVAS Una caracterstica fundamental de la corriente del pensamiento tanto a nivel terico como de investigacin sobre el aprendizaje es la nocin de que entre los recursos de los que disponemos los seres humanos existen procesos que influyen en otros, tales como: atender, comprender, aprender, recordar y pensar. Estas actividades constituyen las denominadas estrategias cognoscitivas, las cuales han sido definidas de diferentes formas, algunas de las cuales presentamos a continuacin. Las estrategias cognoscitivas son un conjunto de operaciones y procedimientos que el estudiante puede utilizar para adquirir, retener y evocar diferentes tipos de conocimiento y de ejecucin (Rigney, 1978, p.165).

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Las estrategias cognoscitivas constituyen un plan general que se formula para determinar cmo se puede lograr un conjunto de objetivos instruccionales antes de enfrentarse a la tarea de aprendizaje (Snowman, 1986, p.244). Las estrategias cognoscitivas son los procesos de dominio general para el control del funcionamiento de las actividades mentales . . . crticos en la adquisicin y utilizacin de informacin especfica . . . y que interactan estrechamente con el contenido del aprendizaje (Chadwick, 1988, p.3). Las estrategias cognoscitivas son actividades que un aprendiz utiliza con el fin de influir la manera cmo procesa la informacin que recibe (Mayer, 1988, p.11). Las estrategias cognoscitivas son todas las actividades y operaciones mentales en las cuales se involucra el aprendiz durante el proceso de aprendizaje y que tienen por objeto influir el proceso de codificacin de la informacin (Weinstein y Mayer, 1985, p.315). Las estrategias cognoscitivas son actividades mentales, no siempre conscientes, que realiza el lector para manipular y transformar la manera cmo est presentada la informacin en el texto escrito, con el propsito de hacerla ms significativa ... permiten procesar la informacin, resolver problemas de procesamiento y autorregular el procesamiento (Morles, 1991, p.261-262). Las estrategias cognoscitivas son el conjunto de procedimientos que se instrumentan y se llevan a cabo para lograr algn objetivo. Aplicado al aprendizaje es la secuencia de procedimientos que se aplican para lograr aprender (Mayor, Suengas y Gonzlez, 1993, p.29). Las estrategias hacen referencia a operaciones o actividades mentales que facilitan y desarrollan diversos procesos de aprendizaje escolar. A travs de las estrategias podemos procesar, organizar, retener y recuperar el material informativo que tenemos que aprender, a la vez que planificamos, regulamos y evaluamos esos mismos procesos en funcin del objetivo previamente trazado o exigido por las demandas de la tarea

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(Beltrn, 1993, p. 50). En estudios realizados en aos recientes, se ha encontrado que las estrategias cognoscitivas influyen en las actividades de procesamiento de informacin. Cuando adquirimos estrategias cognoscitivas, se puede decir que hemos adquirido procedimientos que nos permiten aprender a aprender. En la medida que adquiramos tales estrategias y las almacenemos en nuestro sistema de memoria como habilidades cognoscitivas, podremos decir que tenemos herramientas que pueden contribuir en forma determinante a que exhibamos ejecuciones inteligentes. Existen diferentes tipos de estrategias cognoscitivas, sin embargo, a continuacin nos referiremos a las estrategias relacionadas con actividades como aprender, recordar, resolver problemas y auto-regularse. Posteriormente, incluiremos una clasificacin de las estrategias cognoscitivas. Estrategias para aprender Las estrategias cognoscitivas las podemos utilizar con xito para controlar y modificar la informacin que recibimos. Por ejemplo, las estrategias que desarrollamos para atender a segmentos de informacin incluidos en textos pueden ser sugeridas por medio de preguntas anexas (preguntas relacionadas con unidades de informacin que encontramos en un texto a medida que leemos y que debemos responder) o por medio de enunciados en forma de objetivos. Tambin podemos aprender a resumir, a evaluar nuestra comprensin o a elaborar hiptesis con el propsito de guiar nuestra comprensin. Cuando las caractersticas del material a ser aprendido se enfatizan o se resaltan por medio del subrayado o de cualquier otra ayuda tipogrfica, stas nos pueden sugerir estrategias para reconocer la organizacin subyacente al mismo o para que atendamos a informacin relevante contenida en l. Tambin nos pueden sugerir estrategias para codificar informacin a ser aprendida, ya sea mediante instrucciones verbales, por ejemplo, haga un diagrama, o por algn otro tipo de organizacin que se le imponga al material, como puede ser un esquema o un mapa de conceptos. Igualmente, podemos utilizar alguna variacin en la tipografa de un texto para organizar el material de aprendizaje, como crear una estructura organizada de manera semntica para facilitar su comprensin y retencin, o incluir un resumen del texto para incrementar la retencin de la informacin presentada. Otra forma de influir en la codificacin

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de la informacin es a travs del uso de estrategias de elaboracin ya sea verbal o imaginaria. Estrategias para recordar Los procesos de adquisicin, de retencin y de evocacin no son procesos separados y sucesivos, sino ms bien, ocurren en forma paralela y simultnea. Mientras adquirimos un conocimiento, podemos retener otro o evocar otro. Para cada uno de estos procesos existen estrategias cognoscitivas que nos permiten llevarlos a cabo.

Estrategias de adquisicin

Estrategias de retencin

Las estrategias de adquisicin son aquellas que nos permiten construir estructuras de conocimiento o esquemas referidos a un dominio, a un tema o a un tpico en particular. Estas estrategias nos ayudan a :1) atender la informacin, 2) seleccionar y organizar la informacin que consideremos relevante y que est contenida en el material que estamos recibiendo y 3) codificar la informacin mediante operaciones que la transformen para que podamos almacenarla en nuestro sistema de memoria.

Estrategias de evocacin

Las estrategias de retencin son aquellas que mejoran o incrementan la retencin de la informacin almacenada en nuestra memoria a largo plazo (MLP). Su objetivo es evitar la interferencia y las condiciones disruptivas y refrescar lo almacenado mediante actividades de repaso o de re-aprendizaje.

Las estrategias de evocacin son aqullas que nos permiten recuperar el material que tenemos almacenado en nuestra memoria a largo plazo (MLP), con el fin de traerlo nuevamente a la memoria a corto plazo (MCP) para aparearlo, combinarlo o integrarlo con la informacin nueva. Con frecuencia la evocacin se requiere durante la fase de adquisicin. Durante esta fase, la evocacin exige menos procesamiento porque como la informacin ha sido almacenada recientemente est disponible. Esto no ocurre cuando los intervalos de tiempo entre la adquisicin y la evocacin son ms largos y, en consecuencia, necesitamos mayor capacidad de procesamiento porque como la informacin no est disponible, debemos reconstruir el conocimiento o reestructurar su organizacin. La evocacin du-

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rante la fase de adquisicin se utiliza para obtener informacin almacenada en la memoria a largo plazo (MLP). Una estrategia bsica de evocacin durante la adquisicin puede ser el recuerdo dirigido, mientras que reaprender puede ser la estrategia ms til cuando se quiere evocar informacin una vez que ha habido un olvido sustantivo. Estrategias para la solucion de problemas Al analizar las actividades que llevamos a cabo cuando queremos resolver problemas, surge la presencia del uso de estrategias cognoscitivas. Ya sea en problemas de ciencia, de matemtica o de naturaleza social, los seres humanos utilizamos estrategias en las cuales el contenido est, en cierta forma, relacionado con la naturaleza del problema. Podemos utilizar diferentes estrategias para realizar operaciones matemticas, probar teoremas en geometra, resolver problemas de fsica o qumica o simplemente resolver problemas de otra ndole. En la publicacin Estrategias para la resolucin de problemas nos referiremos a este tpico con mayor profundidad. Estrategias para la autorregulacion Los procesos de auto-regulacin constituyen actividades mentales que realizamos para la planificacin y el establecimiento de metas y submetas con el fin de guiar y comprobar nuestros procesos, ya sean stos de memoria, de comprensin, de aprendizaje, de resolucin de problemas, de comunicacin, etc. Estos procesos se incluyen bajo la denominacin genrica de metacognicin (Flavell, 1981). Son procesos de alto nivel, denominados tambin procesos ejecutivos, e involucran dos tipos de actividades: 1) el estar consciente de lo que sabemos o no acerca del material que debemos aprender y de los procesos involucrados en su adquisicin y 2) la regulacin de las actividades que debemos realizar para que el aprendizaje sea exitoso (planificar, establecer las demandas de la tarea de aprendizaje, atender a la naturaleza de los materiales, monitorear o revisar constantemente el proceso de aprendizaje, evaluar la comprensin, etc. Los componentes del proceso de aprendizaje Mayer (1988) en su modelo de aprendizaje seala que las estrategias cognoscitivas estn relacionadas con los componentes del aprendizaje los cuales son: 1) la instruccin, 2) los procesos del aprendizaje, 3) los resultados del aprendizaje y 4) la ejecucin.

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La instruccin La instruccin constituye el primer componente de este modelo y se refiere a cualquier evento o secuencia de eventos que podemos disear para facilitar el aprendizaje de nuestros estudiantes. Weinstein y Mayer (1985) propusieron distinciones entre la instruccin de estrategias cognoscitivas para tareas bsicas o simples y para tareas complejas. El aprendizaje simple se refiere a la adquisicin de hechos aislados, como: 3 x 2 = 6 o Caracas es la capital de Venezuela, es decir, al aprendizaje de unidades de informacin declarativa. El aprendizaje complejo, por su parte, se refiere al aprendizaje de cuerpos integrados de conocimiento como por ejemplo: el ciclo del agua, la fotosntesis, el ciclo de las rocas, o cmo funciona un radar? Las estrategias cognoscitivas apropiadas para un aprendizaje de esta naturaleza pueden no serlo para otro, de manera tal, que las situaciones de enseanza-aprendizaje a disear deben tomar en cuenta tales consideraciones. Los procesos del aprendizaje El aprendizaje consiste en el resultado del funcionamiento de nuestro sistema de procesamiento de informacin que posee tres tipos de almacn: los registros sensoriales que funcionan como una memoria sensorial (MS), la memoria a corto plazo (MCP) y la memoria a largo plazo (MLP), los cuales ya fueron descritos con suficiente nivel de detalle en la seccin sobre estructuras de la memoria. De igual manera, el sistema posee cuatro procesos de control: atencin, ensayo, codificacin y recuperacin.

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La atencin es el proceso mediante el cual centramos y sostenemos nuestro inters en algunos de los muchos estmulos informativos que recibimos del ambiente. Es un proceso determinante para el aprendizaje ya que de l depende no slo cunta informacin va a llegar a nuestro sistema de memoria sino tambin, qu clase de informacin va a llegar, es decir, la atencin opera como un filtro de la informacin permitindonos separar lo relevante de lo irrelevante. La informacin sobre el mundo exterior, -la cual puede ser presentada por nosotros los docentes o estar contenida en materiales instruccionales (libros de texto, guas, manuales, ilustraciones, mapas, etc.)- llega a nuestro sistema cognoscitivo a travs de los registros sensoriales, los cuales mantienen la informacin por un perodo muy breve. Por ejemplo, cuando leemos un texto, representamos las palabras impresas en la memoria sensorial visual o memoria icnica a la que nos hemos referido anteriormente. Como ya sabemos, debido a que la informacin en este tipo de almacn desaparece muy rpidamente, es necesario que le prestemos atencin para retenerla. Si atendemos a un grupo de unidades de informacin en la memoria sensorial, podremos transferirla a la MCP. Las estrategias cognoscitivas utilizadas en los procesos de atencin pueden influir no solamente sobre la cantidad de atencin que prestamos, sino tambin, en la cantidad de informacin que transferimos a la MCP. Por ejemplo, cuando estamos motivados por lo que estamos leyendo, le prestamos ms atencin a la informacin en un texto que otra persona que no posee el mismo nivel de motivacin que nosotros. De igual manera, las estrategias relacionadas con los procesos de atencin pueden influir sobre ella, hacindola ms selectiva y, de esta manera, repercutir en el tipo de informacin que recibe la MCP. Por ejemplo, podemos focalizar nuestra atencin en las ideas principales de los prrafos de un texto o prestarle atencin slo a las definiciones de conceptos claves. El ensayo es el proceso que nos permite practicar el material que recibimos del ambiente que nos rodea con el fin de transferirlo a la memoria de trabajo. Cuando la informacin llega a la MCP, debemos repasar activamente el material. Debido a que la informacin en este

La atencin

El ensayo

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tipo de almacn tambin desaparece en poco tiempo, es necesario que practiquemos el material en forma activa. Las estrategias cognoscitivas relacionadas con el proceso de ensayo pueden influir en: 1) la cantidad de prctica que se realiza y, por ende, sobre el perodo que la informacin puede ser mantenida en la MCP; en consecuencia, mientras ms prctica, ms informacin se podr almacenar en la MCP y ms tiempo se mantendr en este almacn y 2) el tipo de ensayo que se realiza y, en consecuencia, en el tipo de informacin presente en la MCP. Por ejemplo, podemos ensayar una informacin tratando de encontrar las relaciones que conectan las ideas presentadas en un texto, o tratando de aprendernos una definicin mediante la elaboracin de la informacin con el fin de hacerla significativa. La codificacin es el proceso que nos permite transferir la informacin de la MCP a la MLP. La informacin que tenemos almacenada en la MLP es permanente, pero su evocacin se puede dificultar debido a la interferencia. Las estrategias que influyen sobre los procesos de codificacin pueden afectar tanto la velocidad de la codificacin del material como la cantidad y la calidad de la informacin codificada. Por ejemplo, en el aprendizaje de una ecuacin matemtica, la informacin la podemos codificar tal y como es presentada o podemos integrarla al conocimiento existente relativo a las variables de la ecuacin. La evocacin es el proceso que nos permite traer el conocimiento almacenado de nuestra MLP a nuestra MCP. La evocacin del conocimiento previo durante el aprendizaje puede afectar la cantidad de informacin aprendida, pero no la que est almacenada en la MLP. En este sentido, el resultado del aprendizaje va a depender tanto de la informacin que se nos presenta, como de nuestro conocimiento previo. Los resultados del aprendizaje Los resultados del aprendizaje conforman el tercer componente y se refieren al conocimiento que adquirimos como resultado del procesamiento cognoscitivo que realizamos durante la situacin de aprendizaje. Los resultados del aprendizaje se pueden representar como una red de nodos y de relaciones entre ellos y analizar en funcin de tres dimensiones bsicas: 1) el nmero y el tipo de nodos (cuntos nodos y qu tipos de nodos se adquieren), 2) las conexiones internas (cmo hemos reorganizado la informacin) y 3) las conexiones exter-

La codificacin

La evocacin

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nas (cmo hemos relacionado la informacin presentada con nuestro conocimiento previo). La ejecucin La ejecucin se refiere a las conductas que exhibimos en pruebas de recuerdo, de reconocimiento, de comprensin o de otro tipo. Estos tipos de pruebas constituyen la nica forma de medir los resultados del aprendizaje en funcin de los procesos cognoscitivos involucrados ya que stos, como eventos internos, no pueden examinarse de manera directa, pero s pueden inferirse. Las pruebas de naturaleza cuantitativa evalan los resultados del aprendizaje en funcin de la cantidad de informacin aprendida, recordada o reconocida. Las pruebas de recuerdo, de reconocimiento y de preguntas y respuestas constituyen ejemplos de medidas cuantitativas. Las pruebas de naturaleza cualitativa intentan evaluar la calidad de los resultados del aprendizaje. En tal sentido, se pueden utilizar pruebas que midan las diferencias en la atencin selectiva (pruebas de recuerdo o de reconocimiento con especial nfasis en los tipos de informacin adquirida), diferencias en las conexiones internas (pruebas de recuerdo o de reconocimiento que midan inferencias) y diferencias en las conexiones externas (pruebas de transferencia) (Mayer, 1987). Estrategias cognoscitivas: una taxonoma Se podra sealar que el estudio sobre las estrategias cognoscitivas comenz con una investigacin realizada por Weinstein y colaboradores (1979), cuyo propsito fue examinar cules son las estrategias cognoscitivas que utilizan los aprendices eficientes. Luego de realizar entrevistas semi-estructuradas a los estudiantes seleccionados para participar en el estudio, disearon un conjunto de quince tareas de aprendizaje. Los sujetos fueron asignados aleatoriamente a uno de tres grupos y cada uno recibi cinco tareas de aprendizaje: dos listas de pares asociados de palabras (perro-gato), dos listas de palabras para recuerdo libre y una lectura. Se pidi a los sujetos que, a medida que leyeran el material, escribieran los mtodos, procedimientos o actividades que utilizaban para aprender la informacin; de igual manera, se les pidi que describieran cualquier otra tcnica que consideraran til aunque no fuera utilizada por ellos. Posteriormente, el entrevistador discuti, detalladamente con cada uno de los sujetos, los mtodos especficos descritos por ellos, lo cual permiti identificar ocho mtodos de aprendizaje diferentes:

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1. Utilizar tcnicas de estudio. Por ejemplo, releer, reescribir, tomar notas, subrayar y repasar. 2. Utilizar las semejanzas y las diferencias fsicas de las palabras. Por ejemplo, darse cuenta de la ortografa de las palabras o contar sus slabas. 3. Seleccionar una parte de las palabras o de la lectura. 4. Formar imgenes mentales. 5. Elaborar la informacin de manera significativa. Por ejemplo, relacionar el material con el conocimiento o con experiencias previas o analizar las relaciones entre la informacin. 6. Encontrar semejanzas y diferencias. 7. Construir frases u oraciones. 8. Categorizar. Este estudio fue realizado nuevamente con otros estudiantes y los resultados fueron muy similares. Utilizando la clasificacin que hicieron los sujetos de las estrategias, stas se agruparon en cinco categoras: 1. Estrategias de memoria: estrategias que enfatizan la repeticin y la prctica de la informacin. 2. Estrategias fsicas: estrategias que involucran las caractersticas fsicas del material a ser aprendido. 3. Estrategias de elaboracin imaginaria: estrategias que implican la formacin de imgenes mentales con el fin de aprender el material. 4. Estrategias de elaboracin verbal: estrategias que permiten : 1) elaborar sobre el material haciendo o respondiendo preguntas, 2) determinar las implicaciones de su contenido, 3) relacionar el contenido con el conocimiento previo. 5. Estrategias de agrupamiento: estrategias que permiten reordenar el material en pequeas partes, de acuerdo con una caracterstica comn a todas las partes. El cuadro 12.2 presenta diversas clasificaciones de las estrategias cognoscitivas segn diferentes autores en orden cronolgico.

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Cuadro 12.2 Clasificaciones de las estrategias cognoscitivas

Weinstein y Mayer (1985) Estrategias bsicas de ensayo

Weinstein y MacDonald (1986) Estrategias de adquisicin de conocimiento y estrategias activas de estudio

Snowman (1986) Estrategias de memoria

Chadwick (1988) Estrategias de atencin

Mayer (1988) Estrategias para la seleccin de informacin

Derry (198889)

Hernndez y Ga (1991) Estrategias de memorizacin: mnemotcnicas

Estrategias complejas de ensayo

Estrategias fsicas

Estrategias bsicas de elaboracin

Estrategias de comprensin

Estrategias complejas de elaboracin

Estrategias de elaboracin verbal: repeticin, parafraseo, uso de preguntas, agrupacin, combinacin selectiva, estructura y redes. Elaboracin por va de imgenes: imgenes mnemotcnicas, episodios.

Estrategias para la adquisicin de conocimiento verbal

Estrategias de esencializacin: vistazo inicial, subrayado, extra cin de ideas principales

Estrategias para la construccin de conexiones internas

Estrategias para la adquisicin de destrezas procedimen-tales

Estrategias de elaboracin: tom de notas, estrate de visin previa comprensin y consolidacin, valoracin, amp cin

Comparacin Estrategias bsicas de organizacin Inferencia

Estrategias complejas de organizacin

Aplicacin

Estrategias para la construccin de conexiones externas

Estrategias de estructuracin: resumen, postorg nizadores grfic

Estrategias de revisin y de evaluacin de la comprensin

Estrategias metacognoscitivas

Estrategias afectivas y motivacionales

Estrategias para la automotivacin

Estrategias moti cionales

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Si analizamos las clasificaciones presentadas, podremos observar que algunos autores agrupan las estrategias en funcin de los procesos cognoscitivos involucrados en su utilizacin, mientras que otros las agrupan en funcin de los resultados del aprendizaje. De igual manera, algunos autores las restringen a la adquisicin de conocimiento, mientras que otros amplan su rango de uso e incluyen los procesos de autorregulacin y de motivacin. Igualmente, podemos notar lo siguiente: a) algunas estrategias que en una clasificacin estn contenidas en una categora, en otra se encuentran ubicadas bajo otra categora; b) hay estrategias referidas al mismo tipo de proceso, actividad o procedimiento, pero reciben denominaciones diferentes y c) algunas categoras de estrategias se incluyen solamente en una clasificacin. Una taxonoma de estrategias cognoscitivas puede conformarse tomando en consideracin el objetivo de las mismas, como por ejemplo: adquirir conocimiento, resolver problemas, regular nuestros propios procesos de memoria, de comprensin o de aprendizaje, estudiar, etc. Tambin, tomando en cuenta los procesos con los cuales se relacionan: atender, seleccionar informacin, elaborar esa informacin, organizarla, integrarla, almacenarla, evocarla, etc. Mencin especial merecen los procesadores de informacin o ayudas anexas (Orantes, 1993) que consisten en modificaciones o manipulaciones que podemos realizar los docentes en el contenido o en la estructura del material de aprendizaje con el fin de mejorar el proceso instruccional y facilitar as el aprendizaje de nuestros estudiantes. Entre estos procesadores se encuentran: las preguntas anexas, los objetivos, las ilustraciones, el subrayado, los ttulos y subttulos, los organizadores previos, etc. En el ttulo Estrategias de estudio y ayudas anexas nos referiremos a este tpico con mayor detalle. Cada una de las estrategias cognoscitivas referidas en la clasificacin presentada en la cuadro 12.3 3 pueden utilizarse con el propsito de influir en los procesos cognoscitivos involucrados en la codificacin, almacenamiento y recuperacin de la informacin recibida. Las estrategias de adquisicin de conocimiento, de estudio y de resolucin de problemas estn dirigidas principalmente a la seleccin, adquisicin, elaboracin, organizacin, construccin e integracin de la informacin. Las estrategias metacognoscitivas estn relacionadas con todos estos procesos, dependiendo de las caractersticas de la tarea de apren-

dizaje. Las estrategias afectivas y motivacionales pueden tambin influir en todos los procesos, pero parecen ser ms efectivas para la seleccin y adquisicin de informacin. Cuadro 12.3. Una taxonoma de las estrategias cognoscitivas Estrategias de ad- Estrategias de Estrategias de codificacin: requisicin del cono- ensayo petir, ensayar, practicar, enumecimiento rar. Mnemotcnicas. Estrategias de organizacin: agrupacin, clasificacin, categorizacin. Estrategias de Estrategias de elaboracin verelaboracin: bal: parafrasear, identificar ideas verbal principales, anticipar o predecir, elaborar hiptesis, hacer inferencias, activar conocimiento previo, pensar en analogas, extraer conclusiones, generar notas, hacer y responder preguntas, utilizar la estructura del texto, resumir. Estrategias de Formarse imgenes mentales. elabo racin: imaginaria Estrategias de Elaborar esquemas, elaborar organizacin mapas de conceptos, mapas araa, rbol organizado, brainmapping. Estrategias de es- . Tomar notas, subrayar, repasar, tudio y ayudas responder preguntas anexas, anexas preguntas generadas, establecer objetivos instruccionales, presentar organizadores previos, usar ayudas tipogrficas (negrillas, cursivas), ilustraciones, usar ttulos y subttulos, generar encabezamientos. Estrategias para la . Mtodos heursticos.

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solucin de problemas Estrategias meta- . cognoscitivas Estrategias de apo- . yo y motivaciones

Algoritmos. Procesos de pensamiento divergente. Estrategias cognoscitivas para aprender, retener y evocar, autorreguladas y utilizadas de manera consciente. Facilitar condiciones externas: ambiente, tiempo y materiales. Identificar obstculos internos: actitudes e interferencias. Identificar aspectos positivos.

Conclusin En este trabajo se trata de abordar algunos de los fundamentos tericos involucrados en el aprendizaje humano enfocados bajo una perspectiva cognoscitiva. Se hace referencia a las distinciones entre los enfoques asociacionistas y los cognoscitivos y a algunos de los supuestos bsicos que los sustentan. Se describen dos de las proposiciones sobre la estructura del sistema de la memoria humana que tratan de explicar cmo procesamos, almacenamos y evocamos la informacin que recibimos del ambiente que nos rodea. Seguidamente, se presentan varias definiciones de estrategias cognoscitivas y se analizan con el propsito de identificar sus elementos comunes y diversas clasificaciones de estrategias cognoscitivas referidas a los procesos con los cuales se relacionan, ordenadas por autor y por orden cronolgico. Finalmente, se propone una clasificacin que trata de abordar diferentes reas, no slo las referidas a la adquisicin de conocimiento, sino tambin, otras como las que podemos utilizar para resolver problemas, para autorregularnos como las metacognitivas y las que sirven de apoyo a todo el proceso de aprendizaje o estrategias motivacionales.

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