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Todo Lo Que Quiso Saber Sobre El Eclecticismo y Nunca Se Atrevió A Pregunta1

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Todo lo que quiso saber sobre el eclecticismo y nunca se atrevi a preguntar (II)

Hasta ahora hemos dado las lneas generales del entorno terico en el que se mueve el arte justamente anterior a la era de los eclecticismos. En esta segunda parte veremos cmo influyen en la arquitectura estos planteamientos y cmo acaban desembocando en los eclecticismos y su crisis hasta la Primera Guerra Mundial. Antes de continuar conviene hacer unas referencias a la situacin cultural de la Europa de finales del siglo XVIII y principios del siglo XIX, la Europa prerromntica. No obstante, este periodo es de muy difcil acotacin, y aunque sus inicios suelen hacerse coincidir con la Revolucin Francesa, no resulta difcil datar el prefacio de este movimiento en la dcada de 1750. Esta dcada supuso decisivos cambios en la cultura europea, el paso decisivo del barroco tardo y rococ al neoclsico. Baste decir que los dos grandes genios del barroco: Johann Sebastian Bach y Georg Friedrich Hndel murieron en 1750 y 1759, respectivamente y que en 1756 nace el genial Wolfgang Amadeus Mozart, que con slo 4 aos ya compona e interpretaba como los ms geniales virtuosos de la poca, y cuyas obras nos muestran a la perfeccin el gigantesco contraste existente entre estas dos pocas separadas por la crucial dcada. En lo que arquitectura respecta tenemos dos claros ejemplos de contrastes entre una y otra poca: Vierzehnheiligen (la iglesia de los Catorce Santos) de Balthasar Neumann, comenzada en 1743, y Sainte-Genevive (el Panten de Pars) de Jacques-Germain Soufflot, en 1757. Tan slo catorce aos separan estas iglesias, pero entre ellas se extiende un inmenso abismo cultural que, al igual que en msica, muestra el profundo cambio experimentado en aquella poca; por un lado, Neumann, que domina a la perfeccin el soberbio repertorio del barroco tardo y nos muestra una sofisticada exhuberancia provinciana; por otro, el pedante y revolucionario Soufflot, representante de una severidad grfica cosmopolitana sumamente inestable. Posteriormente el revolucionario Panten parisino recibira crticas de Jean Nicolas Louis Durand, quien aludiendo a intil derroche de materiales, abogara por un estilo todava ms depurado y econmico, fiel representante de la corriente emprica de la que l es uno de sus mximos exponentes.

Baltasar Neumann, Vierzehnheiligen (Alta Franconia, Alemania), 1743

Jacques-Germain Soufflot, Sainte-Genevive (Panten de Pars), en 1757

Crtica de Jean Nicole Louis Durand a la Iglesia de Soufflot, (Lecciones de Arquitectura, 1804) Todos estos cambios ms bien parecen anunciar el culmen de la ilustracin que el nacimiento del romanticismo. Es en esta poca cuando comienza a desarrollarse la arqueologa como ciencia y no como simple coleccionismo y expolio. La monumental obra de Winckelmann y las exhaustivas mediciones y levantamientos de edificios clsicos que se hicieron en la poca expresan a la perfeccin las intenciones, enciclopedistas por excelencia, del pensamiento ilustrado. Pero mientras se haca esta colosal y exhaustiva compilacin de los restos de la antigedad, tenemos a un Piranesi que realiza sus grabados: lgubres crceles y recargadas imgenes de ruinas clsicas con cierto sabor extico, que anuncia ya la primera pintura romntica. Sin embargo, Piranesi no fue el nico en captar ese exotismo que produca lo desconocido; aquellos que realizaban grandes viajes por Europa y Asia Menor para estudiar los monumentos clsicos se vean abrumados por la cantidad de informacin alternativa que reciban, sobre todo la de influencia islmica. Esto que en un principio fue slo sorpresa e incluso admiracin ante formas diferentes a las convencionalmente clsicas (pero tan influenciadas por ellas), se convertir en el siglo XIX en una cantera de motivos decorativos cada cual ms pomposo con el que satisfacer a la nueva sociedad burguesa vida de los lujos y ostentaciones del Antiguo Rgimen, con el que acabara identificndose. Pero vamos demasiado rpido. Detengmonos ahora en la Inglaterra del siglo XVIII, que ya es casi primera potencia mundial; ser en esta sociedad de mentalidad burguesa, y por tanto comerciante y emprendedora, en la que dar sus primeros pasos el romanticismo.

Estos primeros pasos surgieron como alternativa al palladianismo. Los principios de la arquitectura de Palladio encontraron un excelente mbito de aplicacin en la campia inglesa, dadas las anlogas caractersticas que esta comparta con la situacin del Vneto en el siglo XVI. As, cada latifundista posea, adems de una casa en Londres, una residencia rural en un estilo discreto y moderado, sin por ello dejar de ser noble. La influencia del arquitecto italiano segua en boga a mediados del siglo XVIII, poca en la que empiezan a perfilarse nuevas alternativas, debidas sobre todo a la incesante sed de conocimiento que caracterizaba la ilustracin. As, comenzaron a aparecer publicaciones con planimetras exactas de los edificios clsicos grecorromanos, que acabaron por desbancar las teoras de Palladio (el cual en sus escritos defiende teoras errneas). Esto hizo aparecer a la historia de la arquitectura bajo una luz completamente distinta, hecho que cambi an ms cuando tambin se redescubri la Edad Media. Aunque en Inglaterra nunca haba existido una ruptura total con el repertorio formal gtico (el llamado gothic survival del renacimiento tudor- y barroco secular ingls), es en el siglo XVIII cuando se le da a este la misma categora de importancia que las ruinas clsicas; ahora, adems de los templos y baslicas, se estudiarn y se publicarn planimetras de catedrales y monasterios ingleses. En ambos tipos de publicaciones se apreciaba la misma esttica pintoresquista que en Piranesi, pero que aqu influy de una manera inmediata en la concepcin del edifico y el paisaje: ste ahora deber identificarse con el entorno, luego todo el repertorio clasicista, con su perfecta simetra y elementos repetitivos, es sustituido progresivamente por formas asimtricas y repertorio formal basado en el gtico (pasaremos en breve a tratar su evolucin). Las primeras apariciones de este neogtico tuvieron lugar en villas rurales a las que sus propietarios preferan dar un toque pintoresco en vez del monumental propio del palladianismo. As, se comenzaron a construir villas de planta asimtrica, con un aspecto exterior abigarrada por la presencia de saledizos y entrantes, frontones, torres, pinculos, arcos ojivales, ventanas treboleadas y corona de almenas, que deba imitar la estructura progresiva de una construccin medieval. Sin embargo, el repertorio formal empleado era menos riguroso que el del tambin contemporneo greek revival (versin ms depurada del neoclsico basada en todos los estudios publicados en Inglaterra sobre los templos clsicos). Los criterios seguidos eran puramente decorativos; se tomaban elementos pertenecientes a diferentes obras y periodos del estilo gtico ingls o francs, todo a escala reducida y fabricado con revoque, madera papel mach, pintado en vivos colores y completado con la colocacin de espejos; un mudo artificial y frvolo que an tena mucho que ver con el rococ y poco con la seriedad arqueolgica que iba a caracterizar a este estilo ya en el siglo XIX. Brillantes ejemplos de los inicios de este estilo son las villas de Strawberry Hill y Arbury Hall, inmensos complejos que representaban tambin de proyeccin real de los relatos de las novelas gticas, autnticos best-sellers de la poca. Al igual que la novela de caballera espaola (pero con una proyeccin mucho ms fuerte, por cuanto los lectores podan imitar sin dificultad la vida y costumbres de los personajes), este gnero encontr su auge en una brillante novela que a su vez le sirvi de fin: La abada de Northanger, de Jane Austen, en la que, de un modo muy irnico, narra la peripecias de una joven aficionada a las novelas gticas que pasa una temporada en una pintoresca propiedad con todas las caractersticas de este castle style.

Interior neogtico de Strawberry Hill. John Cute, 1748. Poco despus, en 1820-1830, la concepcin romntica y pintoresca del neogtico ingls empez a retroceder ante la tendencia creciente a imitar con fidelidad las estructuras arquitectnicas medievales. El estudio y la documentacin de los edificios gticos originales fueron dando unos conocimientos ms exactos sobre las diversas formas de diseo y construccin. Adems, restaurando edificios medievales, casa vez ms arquitectos adquiran experiencia, que luego aplicaran en sus propias obras. El gothic revival empez a ser considerado como un estilo serio fuera del mbito de la construccin de casas de campo y comenz a competir con el clasicismo dominante. Naturalmente, uno de los primeros campos que conquist el neogtico fue al construccin de iglesias, ya que se consideraba el estilo cristiano por antonomasia. As, muchas de las iglesias de los nuevos barrios y ciudades industriales se construyeron empleando el lenguaje formal gtico, empleando como modelo formal el gtico tardo ingls, el Perpendicular. Como en las iglesias neoclsicas, el edifico se caracteriza por la presencia de una torre occidental de gran altura, ero aqu se han aadido adems ventanas de tracera, contrafuertes y pinculos. Estas iglesias emulaban el gtico tanto en forma como en construccin, aunque hay varios ejemplos de mezcla de estructuras gticas y tcnicas modernas, como la parroquia de St. George en Liverpool (1812-13), del arquitecto Thomas-Rickman, en colaborador con el fabricante local de hierro John Cragg. El interior est hecho completamente con hierro colado, incluso la tracera de las ventanas. El empleo de nuevos materiales para edificios historicistas ser ya una constante varias dcadas despus; esta combinacin de tcnicas tendr defensores y enemigos (con ms menos matices). Entre estos ltimos se encuentra John Ruskin, quien en sus escritos pone de manifiesto la repugnancia de los victorianos de su poca por la mecanizacin, que les ahoga con sus productos falsos y de baja calidad artstica; y su deseo de volver a los tiempos ms ingenuos de la artesana.

Thomas-Rickman. Iglesia de St. George, Liverpool (1812-13) Por otro lado, sus teoras tienen un marcado carcter moralista, y arremete contra todo aquello que en construccin resulta falso enmascarado: el pintar los materiales para simular algo que no son, el aceptar los ornamentos fabricados por medio de mquinas, lo que supone una suplantacin de la mano del hombre y por tanto un error moral. Aboga entonces por el retorno al uso de los materiales venerables (piedra, arcilla, madera), aunque esto plantea un grave dilema, pues el hierro y el vidrio eran materiales que iban ganando cada vez ms terreno. Ruskin cree resolver sus contradicciones aceptando el hierro como una prudente ortopedia y lanza su axioma de que los metales deben usarse como cemento y no como soporte. Y ante el uso del hierro como soporte (en obras como el Cristal Palace de Londres), se atreve a contradecirse presumiendo, y casi intuyendo, que en un futuro prximo podr desarrollarse un nuevo sistema de leyes arquitectnicas enteramente adaptado a al construccin metlica. En la lnea de los defensores del empleo de materiales modernos y repertorios antiguos tenemos a William Morris y a Eugne-Emmanuel Viollet-le-Duc. El primero sigue una lnea similar a la Ruskin, su maestro, pero con ciertos matices que hacen que su teora pueda adaptarse mejor (aunque no del todo) a la situacin de la poca. Morris se preocupaba ms por la produccin del objeto que por ste en s (como haca Ruskin), por lo que en algunas ocasiones defiende el uso de mquinas siempre bajo una mirada racional y sin convertirse en esclavo de ellas. En sus escritos no exige al destruccin de las mquinas como instrumentos, sino del sistema capitalista, y profetiza el triunfo de una revolucin socialista que acabar con las grandes ciudades industriales y dar lugar a pequeas comunidades artesanales. El marcado carcter utpico de sus propuestas les llevan al mismo fracaso que los dems intentos de la poca. Con todo, el ejemplo que nos ofrece su Casa Roja y los talleres que cre, sirvi de gua y modelo a los movimientos del primer tercio del siglo XX, que suponene la culminacin del arts and Crafts que l inici.

William Morris y Philip Webb. Casa Roja, Londres (1859) Las teoras de Viollet-le-Duc constituyen el opuesto a las de Ruskin. ste ltimo rechazaba toda restauracin de piezas perdidas terminacin de las incompletas, por cuanto era imposible restituir el alma del artista que la realiz. Esto ltimo estaba muy en lnea con la teoras pintoresquistas de las ruinas, que vean al belleza de lo antiguo en el paso del tiempo por las mismas. Hasta los edificios contemporneos eran imaginados en ruinas para darle mayor romanticismo a al obra del arquitecto (como las acuarelas de John Soane con las vistas en ruinas del banco de Inglaterra). Viollet-le-Duc, sin embargo, abogaba por la terminacin y reparacin de estas piezas, pero siguiendo una unidad de estilo. Esta teora hubiera sido revolucionaria un siglo antes, cuando era normal que un edificio comenzado en la edad medias se terminara trescientos aos ms tarde en un estilo completamente distinto que poda atrofiar sin problemas parte de la estructura antigua para colocar la nueva y moderna; pero ahora, una vez mejorado el conocimiento de la Edad Media, se apetece terminar las obras empezadas en este periodo siguiendo una lnea proyectual similar a la de la poca. As, las grandes catedrales de Europa (Colonia, Miln, Sevilla, que durante siglos haban aparecido en los grabados como gigantescos cuerpos inconclusos) se finalizaron en el mismo estilo en el que se iniciaron, eliminando en algunos casos las aadiduras barrocas y renacentistas.

La ciudad medieval de Carcasona fue restaurada por Viollet-Le-Duc en 1849 Pero adems de la teora de la unidad de estilo, Viollet-le-Duc cre la teora del racionalismo estructural, segn la cual la arquitectura moderna deba ser sobre todo utilitaria y buscar al mejor adapatacin a la necesidades de sus destino, manteniendo al decoracin dentro de los ms discretos trminos. Estos principios precursores del funcionalismo le permitieron crear soluciones muy curiosas para el empleo del hierro. Curiosamente, esta teora que supone la culminacin de sus ideas, parte de las mismas premisas de Ruskin, a saber, que ya haba pasado la poca de la gran arquitectura y que ya no poda construirse como antes, slo recapitular y restaurar.

Eugene-Emmanuel Viollet-Le-Duc. Diseo para una sala de conciertos siguiendo los principios gticos aplicados a los nuevos materiales, 1864. (De Entretiens sur larchitecture)

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