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Anestesia en Proctologia
Anestesia en Proctologia
Anestesia en Proctologia
Parasimpático pélvico
La inervación parasimpática del periné está formada
por tres plexos: sacro, pudendo y sacrococcígeo.
Plexo sacro
Está compuesto por el tronco lumbosacro, la rama
anterior de la raíz L5 y presenta anastomosis con la raíz
L4. El tronco lumbosacro a su vez está formado por las
ramas anteriores de las tres primeras raíces sacras.
Desciende por delante del ala del sacro y establece
anastomosis con la primera raíz sacra por delante del
borde superior de la escotadura ciática. La reunión de
estos nervios forma un triángulo cuya base corresponde
a los agujeros anteriores del sacro, con su vértice en el
Figura 2. Sistematización del simpático pélvico (según Ka- borde inferior de la escotadura ciática mayor. El plexo
mina). En rojo, parasimpático; en negro, simpático. a. Plexo sacro descansa sobre la cara anterior del músculo
cardíaco; b. plexo mesentérico; c. plexo ovárico; d. plexo mesen- piramidal, donde está cubierto por una vaina aponeuró-
térico inferior; e. plexo hipogástrico superior y nervio hipogás- tica fibrosa dependiente de la aponeurosis pélvica que lo
trico; f. hacia el aparato genital; g. hacia la vejiga y la uretra; h. separa de los vasos hipogástricos. Conviene insistir en la
hacia el recto; 1. plexo hipogástrico; 2. nervio pudendo. existencia de numerosas anastomosis con el plexo
lumbar pudendo y el simpático pélvico. A excepción del
aórtico, que se unen para dar lugar a los tres nervios nervio obturador interno, todas estas ramas van desti-
esplácnicos pélvicos (2 laterales y uno medio). A la nadas al miembro inferior a través del nervio ciático
altura de L5, en la cara anterior del recto y dentro de los mayor. Sale de la cavidad pélvica por la parte inferior de
agujeros sacros anteriores, se diferencian para formar el la escotadura ciática mayor, por fuera del pedículo
cordón plexiforme de Cruveilhier y el nervio hipogás- pudendo interno.
trico de Latarjet.
El plexo hipogástrico inerva la vejiga, el recto y los Plexo pudendo
órganos genitales. Adopta la forma de una lámina El plexo pudendo (antes llamado pudendo interno) se
neurovascular cuadrada y multiperforada. Se encuentra compone de las ramas anteriores de S2, S3 y, sobre todo,
momento el reflujo vascular con intentos de aspiración existen tres posibilidades: una infiltración pudenda
reiterados. En caso de agitación, logorrea, gusto metálico aislada, un bloqueo pudendo por neuroestimulación o
en la boca, parestesias inesperadas o signos generales de una infiltración perineal profunda, múltiple, de tipo
síncope, taquicardia o, si se utilizan soluciones con bloqueo perineal posterior.
adrenalina, hipertensión arterial, se interrumpirá la
administración. Por último, deberán respetarse los Anestesia local
retrasos de instauración de la acción característicos de
los productos empleados, variables según los casos, Pueden emplearse todos los procedimientos de anes-
antes de iniciar la intervención quirúrgica [7]. tesia local con inyecciones subcutáneas, intradérmicas y
submucosas de pequeños volúmenes de AL. Este tipo de
anestesia puede recomendarse para las extirpaciones de
■ Características del dolor fisuras anales, ablaciones de papilomas, tratamiento de
fístulas no complicadas y algunas esfinterotomías
perineal laterales [15]. Sin embargo, la inyección de AL en la zona
Al igual que cualquier otro dolor, los dolores perinea- anorrectal de un paciente despierto es dolorosa, no
les se asocian a cierto grado de ansiedad que conviene tanto por la punción propiamente dicha sino más bien
tener en cuenta para una preparación psicológica por la distensión producida por el volumen del AL,
adecuada [11, 12]. sobre todo cuando se realiza en un lugar situado bajo de
Hay que distinguir: la línea pectínea. Nivatvongs [16] propone hacer una
• intervenciones quirúrgicas cutáneas y parietales (condilo- inyección submucosa previa de 3 ml en cada uno de los
mas acuminados, pedículos varicosos aislados): a cuatro cuadrantes por encima de esta línea, utilizando el
menudo se trata de una cirugía distal de carácter no anoscopio, y efectuar la infiltración por debajo de
grave, pero cuya localización condiciona un matiz aquélla de manera secundaria, hasta llegar a la zona
ansiógeno que puede necesitar, según sea o no ambu- cutánea del ano. Sobrado et al [17] describieron con el
latoria, una medicación ansiolítica. En este tipo de mismo fin una técnica de anestesia que utiliza una
cirugía, puede bastar una analgesia de tipo multimo- aguja curva en forma de anzuelo, manejada también a
dal (AINE, analgésicos de clase 2) durante las primeras través del anoscopio, que permite infiltrar la mucosa a
24 horas. Dependiendo de las circunstancias y de la partir de una zona situada por encima de la línea
incidencia previsible de efectos secundarios, podrán pectínea y hasta la región anal. A menudo es necesario
utilizarse otras moléculas, como la benzofenazoxina y combinar estas técnicas con infiltraciones más profun-
la ketamina, o un opioide por vía oral; das en abanico (en cuadrantes) paralelas al borde
• cirugía visceral: el ejemplo típico es la hemorroidecto- externo del esfínter externo, con objeto de inundar las
mía a cielo abierto, que, sea cual sea la técnica ramas rectales inferiores del nervio pudendo [18] . El
quirúrgica utilizada, puede comprender un compo- método más clásico es el de una única inyección aso-
nente parietal y otro visceral. Este último, aunque ciada a bolos a demanda. También se ha descrito una
reducido por la elección de una técnica interna administración continua de AL por vía subcutánea,
(anopexia según la técnica de Longo), existe a causa utilizando como vector una solución Ringer lactato [19].
de la inflamación local provocada por el acto quirúr- Por último, Argov [6] propuso una doble infiltración
gico. En estas situaciones, es típico que la infiltración simultánea de los esfínteres interno y externo, que
de anestésicos locales permita reducir la cantidad de puede realizarse con el paciente en posición genupecto-
medicamentos anestésicos generales administrados, y ral. Este tipo de anestesia, asociada a una sedación
acelera la recuperación postoperatoria gracias a su ligera, puede utilizarse perfectamente en intervenciones
acción local sobre los mediadores de la inflamación geriátricas ambulatorias en los casos de anopexia de
liberados en toda agresión quirúrgica, por poco Longo.
invasora que sea; Estas infiltraciones locales, aunque sencillas, siempre
• tratamiento del «levantamiento del bloqueo». Se entiende deben practicarse siguiendo las reglas de buena práctica.
por «levantamiento del bloqueo» el momento en el Como en toda anestesia local, la cantidad total utili-
que dejan de actuar los anestésicos locales. Se impone zada, sobre todo cuando se administran cantidades
entonces un relevo analgésico, sobre todo en los casos suplementarias de AL a demanda, no debe sobrepasar
de intervenciones ambulatorias, cuando el paciente se las dosis máximas recomendadas. Por último, hay que
encuentra ya en su domicilio, lejos de la estructura recordar que las inyecciones efectuadas en zonas recién
asistencial [13, 14]. El relevo depende, de forma precoz intervenidas tienen mayores probabilidades de reabsor-
o incluso anticipada, de la prescripción de opioides ción sistémica y, por tanto, mayores riesgos de toxicidad
orales como refuerzo y de una valoración rigurosa del y de sobredosis.
dolor, para optimizar la comodidad postoperatoria y
evitar la posible cronificación del dolor. Anestesia locorregional
Bloqueo pudendo aislado
■ Técnicas Su primera descripción, realizada por Mueller, data de
La cirugía proctológica, en concreto la hemorroidal 1908 [20]. Este bloqueo se utilizaba en analgesia obsté-
(de tipo Milligan-Morgan), es muy dolorosa en el trica durante la segunda parte de la dilatación. Se basa
postoperatorio. La relación beneficio-riesgo de las en el bloqueo del nervio a la salida del conducto de
anestesias locorregionales se revela muy favorable, Alcock, antes de su bifurcación. En cirugía proctológica
incluso aunque la anopexia según el método de Longo o del pene, su eficacia analgésica puede mejorarse
haya reducido mucho los dolores postoperatorios (DPO). mediante infiltraciones más distales que permiten actuar
Sólo las intervenciones poco invasoras, muy superficia- sobre las ramas rectales y perineales y sobre el simpático
les y que interesan a la vertiente externa del conducto pélvico. Existen dos posibles vías de acceso: la transva-
anal, son subsidiarias de una anestesia local pura. Puede ginal, reservada a los obstetras y que no se tratará aquí,
tratarse de la simple exéresis de pequeñas zonas de y la transperineal, utilizada en las demás indicaciones.
trombosis antiguas o de condilomas. En estos casos, la
técnica utilizada será una infiltración local simple Infiltración transperineal simple
asociada a una aplicación preventiva de crema a base de Si el paciente se encuentra despierto, esta infiltración
lidocaína y prilocaína, siempre que se respete la integri- precisará una anestesia local previa de la piel (o una
dad de la piel. Para las intervenciones más agresivas aplicación de crema a base de lidocaína y prilocaína) y
“ Puntos importantes
• La relación beneficio-riesgo de las técnicas de
anestesia local y locorregional del periné es muy
Figura 7. Infiltración presacra. favorable.
• La seguridad en materia de administración de
los anestésicos locales pasa por el conocimiento
la punción de los cuadrantes y para la infiltración de sus efectos secundarios y tóxicos y por un gran
presacra, con el fin de separar la ampolla rectal en rigor en la realización del procedimiento, tanto si
sentido opuesto a la punción. En cuanto a la infiltración se trata de una técnica de infiltración o de un
rectal posterior, el volumen inyectado debe ser de bloqueo troncular.
40 ml. La concentración del anestésico local utilizado
• Para la realización del bloqueo se recomienda el
dependerá del peso y del estado del paciente. No obs-
tante, parece posible utilizar ropivacaína al 0,75% sin
uso de agujas de bisel corto.
sobrepasar una dosis total de 300 mg para un adulto de • Las dosis de anestésicos locales (AL) deben
70 kg. La asociación de adyuvantes como la clonidina adaptarse con cuidado al peso del paciente. Se
(0,5 μg/kg-1) permite prolongar la duración de la acción evitarán dosis acumuladas demasiado grandes y
de bloqueo de 12 a 16 horas. Es imprescindible prever próximas a las dosis tóxicas en casos de
la aparición de dolor cuando el bloqueo desaparezca y reinyección o de procedimientos anestésicos con
administrar un tratamiento analgésico sustitutivo. inyección en varias localizaciones.
• En cirugía proctológica, sólo las intervenciones
poco invasoras, muy superficiales y que interesan
■ Límites y contraindicaciones a la vertiente externa del conducto anal pueden
beneficiarse de una anestesia local o locorregional
de estas técnicas pura. En las intervenciones más cruentas, será
Las contraindicaciones de estas técnicas son las de necesario proceder a una infiltración pudenda
toda anestesia locorregional (rechazo del paciente, aislada o a un bloqueo pudendo por
trastornos de la coagulación, infección, en especial del neuroestimulación.
lugar de la punción, etc.). Como en toda ALR, el • El bloqueo pudendo se realiza en la salida del
paciente debe recibir una información lo más completa nervio del conducto de Alcock, antes de que se
posible. La obesidad puede dificultar la realización de bifurque. Debido a las variaciones anatómicas, su
estas técnicas, tanto en lo que se refiere a la identifica-
eficacia analgésica puede mejorarse utilizando
ción de las marcas anatómicas de las zonas que se van
una infiltración profunda y en varios puntos,
a infiltrar como por la limitación de tamaño de los
materiales disponibles. En estos casos (neuroestimula- como sucede en el caso del bloqueo perineal
ción) es fundamental la experiencia del profesional. posterior.
■ Posibles complicaciones
Todas las complicaciones derivan de las limitaciones
y contraindicaciones de la técnica, por lo que son fáciles
de evitar siguiendo una técnica rigurosa. Así pues, ■ Bibliografìa
resultan indispensables una asepsia perfecta y una [1] Rouvière H, Delmas A. Traité d’anatomie humaine. Paris:
antibioticoterapia adaptada a la cirugía anorrectal. Las Masson; 1984.
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inyecciones se hagan respectando las buenas prácticas Anatomie clinique de l’appareil génital feminine. Encycl Méd
clínicas y no se superen las dosis máximas recomenda- Chir (Elsevier SAS, Paris), Gynécologie, 10-A-10. 2003: 28p.
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■ Conclusión [5] Hutschala D, Mascher H, Schmetterer L, Klimscha W,
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cuentes cuando se utiliza un material idóneo, se [6] Argov S, Levandovsky O. Radical ambulatory
respetan las buenas prácticas y se utilizan las dosis de hemorrhoidectomy under local anesthesia. Am J Surg 2001;
AL recomendadas. Estas técnicas se emplean por sí 182:69-72.
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P. Niccolai (patricknic@wanadoo.fr).
Service d’Anesthésie-Réanimation, CH Princesse Grâce, Avenue Pasteur, 98012 Monaco cedex, Principauté de Monaco.
M. Raucoules-Aimé.
Département d’Anesthésie-Réanimation, CHU de Nice,30, Voie Romaine, 06002 Nice cedex 1, France.
Cualquier referencia a este artículo debe incluir la mención del artículo original: Niccolai P., Raucoules-Aimé M. Anesthésie locale et
locorégionale pour la chirurgie proctologique. EMC (Elsevier SAS, Paris), Techniques chirurgicales - Appareil digestif, 40-683, 2006.