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Comunicación Social y Derechos Humanos

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COMUNICACIÓN SOCIAL Y DERECHOS HUMANOS

La comunicación social y los derechos humanos son dos áreas interrelacionadas que tienen un

impacto significativo en la sociedad. La comunicación social se refiere al intercambio de

información y mensajes a través de diversos medios, como los medios de comunicación, las redes

sociales y las campañas publicitarias. Por otro lado, los derechos humanos son los derechos

inherentes a todas las personas, sin importar su raza, género, religión u orientación sexual.

La comunicación social puede desempeñar un papel importante en la promoción y protección de

los derechos humanos. A través de la difusión de información precisa y objetiva, se puede crear

conciencia sobre los derechos humanos y fomentar un cambio positivo en la sociedad. Además,

la comunicación social puede ser utilizada como una herramienta para denunciar violaciones de

derechos humanos y promover la rendición de cuentas.

En el contexto de los derechos humanos, la comunicación social puede abordar temas como la

libertad de expresión, el acceso a la información, la inclusión y la igualdad de género. Al

garantizar que todas las voces sean escuchadas y representadas, la comunicación social puede

contribuir a la construcción de sociedades más justas y equitativas.

Es importante destacar que la comunicación social y los derechos humanos están estrechamente

vinculados. La comunicación efectiva y el acceso a la información son fundamentales para el

ejercicio de los derechos humanos. Además, los medios de comunicación y otros actores en el

campo de la comunicación social tienen la responsabilidad de respetar y promover los derechos

humanos en su trabajo.

La adopción de los estatutos de las Naciones Unidas en 1945 y de la Declaración Universal de

Derechos Humanos en 1948 obligó a los Estados miembros a reconocer, establecer, proteger y

fortalecer los derechos humanos en los ámbitos global, regional, nacional y local. Ahí se

consagró un conjunto de derechos individuales y libertades fundamentales que debían ser

implementadas para “todos, en todas partes y siempre”, como dijo el señor Koïchiro Matsuura,

director general de la Unesco [1999-2009].


Tal vez sea un signo de su universalidad el hecho de que, desde su adopción hace 61 años, la

Declaración ha sido traducida a más de 330 lenguas. Permítanme hacer notar que cuatro de los

derechos consagrados en la Declaración Universal de Derechos Humanos son competencia

directa de la Unesco. Éstos son:

• Derecho a la libertad de opinión y expresión, incluyendo el derecho a buscar,

recibir e impartir información (artículo 19).

• Derecho a la educación (artículo 26).

• Derecho a tomar parte en la vida cultural (artículo 27).

• Derecho a gozar de los beneficios del progreso científico y sus aplicaciones

(artículo 27).

Desde entonces, el respeto a la dignidad de las personas y su derecho a la igualdad ha impulsado

a la comunidad internacional a reconocer y asumir su responsabilidad en la promoción, respeto y

protección universal de los derechos humanos. Asimismo, a garantizar la indivisibilidad de los

derechos humanos y su interdependencia con la paz y el desarrollo. Como lo señala Cees J.

Hamelink (1994), los derechos humanos proveen un marco universal de estándares para la

integridad y la dignidad de todos los seres humanos. Este marco está basado en los principios de

libertad, igualdad, equidad, solidaridad, inviolabilidad, inclusión, diversidad, participación y

comunicación.

En particular, debemos reconocer la relación que existe entre el derecho a comunicar y aquellos

que garantizan la participación pública. Así, el derecho a comunicar va de la mano de la libertad

de expresión, del derecho a la información y del acceso universal a las nuevas tecnologías y al

conocimiento, pero, también, de la participación de los ciudadanos en los procesos de toma de

decisión relacionados con las políticas de comunicación e información, de la promoción de la

diversidad cultural por parte de los medios y las nuevas tecnologías, del acceso de los grupos

sociales que históricamente han sido excluidos de la esfera pública a las herramientas de la

comunicación, así como de la protección y confidencialidad de la comunicación.


La importancia de la comunicación como derecho humano ha quedado establecida en el artículo

19 de la Declaración Universal de Derechos Humanos, que expresa: “Todo individuo tiene el

derecho a la libertad de opinión y de expresión; este derecho incluye el no ser molestado a causa

de sus opiniones, el de investigar y recibir informaciones y opiniones y el de difundirlas, sin

limitación de fronteras, por cualquier medio de expresión”. Sin embargo, al mismo tiempo que

reconocemos la importancia de la comunicación en las sociedades contemporáneas y su impacto

positivo, no debemos ignorar los aspectos negativos que resultan de la falta de acceso de muchos

grupos sociales al ejercicio de sus derechos comunicativos. Por todo ello, consideramos que la

paz, la democracia y el desarrollo sólo se alcanzarán si garantizamos los principios de la

comunicación como un derecho humano, esto es, el derecho a la comunicación de todas las

personas.

ACCIONES NORMATIVAS DE COMUNICACIÓN Y DERECHOS HUMANOS

En cuanto al lado normativo en comunicación e información, la Unesco tiene un mandato

específico, consagrado en su Constitución, y que es fomentar “el libre intercambio de ideas y

conocimientos” y “el libre flujo de ideas mediante la palabra y la imagen”. Está mandatada a

fomentar “el conocimiento y la comprensión mutuos de las naciones prestando su concurso a los

órganos de información para las masas; a este fin, recomendará los acuerdos internacionales que

estime convenientes para facilitar la libre circulación de ideas por medio de la palabra y la

imagen…”.

Así, la Unesco es la única agencia de la ONU con un mandato especial para la defensa de la

libertad de prensa y su organización; reconoce que la libertad de prensa es central para la

construcción de democracias sólidas, la promoción de la participación cívica y el imperio de la

ley, así como el fomento del desarrollo humano y la seguridad.

Se puede argumentar que la libertad de opinión y de expresión constituye la piedra angular de

cualquier sociedad democrática, y que es una base sólida e indispensable para el desarrollo. En

efecto, el derecho que garantiza la libertad de expresión es ampliamente visto como el entramado

de todos los demás derechos humanos y las libertades democráticas. Si los individuos no tienen el
derecho de buscar, recibir y difundir sus ideas y opiniones libremente, pudieran no beneficiarse

tampoco de otros derechos humanos. El derecho a la libertad de expresión y opinión tiene

también un corolario, la libertad de prensa, que normalmente se percibe como el derecho del

individuo a la libertad de expresión extendido a los medios.

a cambiante situación mundial está produciendo profundos cambios en la comunicación humana.

Estos cambios están abriendo a su vez nuevas y más amplias perspectivas. Es evidente que hay

una estrecha relación entre las necesidades humanas de la comunicación, el desarrollo de los

recursos de comunicación y los derechos humanos. Esta relación puede enunciarse como sigue: la

humanidad tiene derecho a los recursos de comunicación requeridos para satisfacer las

necesidades de la comunicación humana. El derecho a la comunicación se basa en la necesidad

de comunicación de todo ser humano (Unesco, 1976: 8).

La Unesco, a lo largo de los años, se ha involucrado, dado apoyo y promovido estos debates

políticos, investigaciones académicas y publicaciones, incluida la multicitada Comisión

MacBride, cuyo informe señaló: Todos tienen derecho a comunicarse: los componentes de este

derecho humano integral incluyen los siguientes derechos de comunicación específicos: (a) el

derecho de reunión, de discusión, de participación y los derechos de asociación relacionados; (b)

el derecho de inquirir, de estar informado, de informar, y los derechos de información

relacionados; (c) el derecho a la cultura, a la elección, a la intimidad y los derechos de desarrollo

humano relacionados… La adquisición de un derecho a comunicarse requeriría que los recursos

de la comunicación estén disponibles para la satisfacción de las necesidades de comunicación

humana (MacBride, 1993: 146).

El compromiso de Unesco con los principios fundamentales de la libertad de expresión, su

accesibilidad y el libre flujo de información va más allá del aspecto normativo, más allá de la

promoción y el fortalecimiento de la cooperación internacional. Se debería destacar el otro lado

del derecho a la libertad de expresión; es decir, la habilidad para usarlo. De esta forma, el

desarrollo de las capacidades de los profesionales de los medios, así como la garantía de que cada
ciudadano cuente con las habilidades de alfabetización informacional permean el programa de

comunicación e información de la Unesco.


CONCLUSIÓN

Los derechos humanos ahora en día, son un tema de gran importancia, pues vemos como en estos

tiempos a las personas se les ha olvidado que todos valemos lo mismo, la dignificación personal

se ha perdido, por eso se ha incurrido en tocar este tema y volver a sembrar en cada ser humano

el que debe respetar y que hay que cuidar de que este tema no se pierda.

Entre estos derechos vemos como se ha ido perdiendo el respeto por la diversidad de culturas en

Guatemala, con el afán de resguardar los derechos de los pueblos indígenas, la ONU, creo la

declaración de los derechos para los pueblos indígenas en 2007; corresponde a las naciones

unidas velar porque se cumplan los derechos a estos pueblos.

En américa latina, se creó el puesto de Procurador de los Derechos humanos, el cual consiste en

que el que ejerza este puesto, vele por el cumplimiento de los derechos que a cada ciudadano le

corresponde porque estos no sean violentados. Para esto, todo debe ir de la mano, evitar el

amarillismo en los medios de comunicación, que el pueblo este enterado sobre todo a lo que al

Estado le concierne y de esta manera siempre haya democracia, la comunicación social juega un

papel muy importante en la declaración de los Derechos Humanos, pues el conversar e informar

lo que cada ser humano necesita es indispensable, para que un gobierno sea de éxito.

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