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Cuadernillo08B 024

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EL COLEGIO ESMERALDINO

LA VÍA DEL FÉNIX

Cuadernillo VIII-B
La Cardiognosis o Vía Cardíaca

Praxis:
La Oración del Corazón como práctica de la Presencia1.

Secuencia ritual.
En las Vías del Corazón de sesgo angelofánico ( = del descenso a la mina terrestre
según el triple Arcano cardíaco Sangre-Luz-Soplo), la reiteración íntima (mental) del
nombre de potencia asumido + la energía-conciencia descendida al Corazón + la
concentración cardíaca (llamada himma, entre los sufís) + la respiración iluminativa que la
alimenta, todo este conglomerado sutil se revelar más operativo, desde el punto de vista de
las Alquimias internas, que las meras repeticiones a voz en cuello de nombres de potencia
1
La así llamada Diagonal del Corazón es un documento interno de la Orden Martinista coordinada
por Rémi Boyer desde Francia. Esta práctica se incluye en dicho documento, siendo una praxis previa y
externa a este documento, con diversos usos y versiones según los círculos cardiognósticos de asunción de la
misma. Incorporamos aquí una versión anotada y agregada desde nuestra Logia de Esmeralda en Buenos
Aires, según lecturas y experiencias que creemos han enriquecido las versiones de referencia.

1
según las vías ceremoniales. Partiendo de tal preliminar cardíaco en cuanto determinación
primaria, toda la secuencia meditacional que sigue podrá ser captada en su función
purificatoria y teofánica de sesgo dulce y sutil, sin cuyo regusto íntimo difícilmente haya
Estrella en las operaciones del Arte Mágico.

*La meditación ritualizada de la Oración del Corazón se inicia en Luna Nueva o


Luna Llena, con sus características diferenciales, y se continúa hasta la siguiente Nueva o
Llena, practicándola una vez al día, en las inmediaciones del amanecer o bien antes de irse
a dormir (y en ambas ocasiones también, según adaptaciones que la resuman), todos los
días, día por medio o tres veces a la semana, preferentemente en los inicios equinocciales o
solsticiales, a lo largo de años de recurrencias. Luego, se puede repetir durante el año en
fases privilegiadas de la propia revolución solar.

*Preparación: un altar u oratorio sencillos: mantel sobre el suelo, o bien una mesa
con mantel blanco. Sobre el mantel: una copa de agua, incienso, un poco de sal, una
luminaria consagrada. Se puede agregar un ícono del Xristos, Myriai, una Virgen Negra,
Nuestra Señora de Esmeralda, una efigie de Isis, etc.

*Abluciones rituales con Agua Lustral o de Bendición a criterio de quien opera,


según Sacramentario de elección. En su defecto, este protocolo ritual sugiere:
Ablución de la frente (el pensamiento); de los ojos (la visión); de las orejas (la
orientación); de la boca (la palabra); del corazón (la conciencia); del vientre (la fuerza); de
los pies (el camino).

*Investidura sacramental con la túnica blanca.

*Adoptar preferentemente la posición del sabio según la Vía del Fénix. En segunda
instancia puede ser la posición de loto o semiloto sobre el piso, o bien la de cochero
(sentado en un banco o silla sin respaldo, palmas sobre los muslos).

*Ejecutar una oración a la divinidad que en Verdad puja en quien opera.


Para un cristiano gnóstico puede vehicularse a través de la versión aramea del Padre
Nuestro o bien el Oficio del Espíritu Santo (una sección de él), una oración de sesgo
alquímico (como las de Karl von Eckartshausen en el Catecismo de la Química Superior), o
mejor si se trata de una creación personal y breve, una dedicación respecto a la divinidad
que habitamos, o incluso a la mera Presencia no teísta.

*Realizar una breve meditación retrospectiva de las “negatividades” del día,


aspirando a su disolución / absolución a través de la intercesión de la divinidad o de la
Presencia antes invocadas.

*Flechar una orientación contrastante a las negatividades recién absueltas


(=soltadas), resolución ofrecida, en breve orat, a la divinidad, a lxs Maestrxs Pasadxs,
2
apelando a su intercesión. Sentir esta aspiración como una llama íntima que en Verdad
desea.

*Meditar en la propia muerte, disolución o Separatio.


Esto debería realizarse entendiendo que, de una parte, se trata de la muerte iniciática
por Separatio, Arcano XIII, que dista mucho del imaginario médico o de casa de sepelios.
Para esto agenciar experiencias del propio proceso alquímico de Nigredo y Solve, sea que
se hayan tenido dentro del presente entrenamiento o fuera de él. De otra parte, extender este
afecto, sin el emnor dramatismo, hacia la adivinación de lo que pueda implicar nuestra
muerte física. Todo esto al rayo, sin detenciones imaginarias ni novelescas.

*Cerrar los ojos y la boca, colocar la punta de la lengua pegada al paladar, sin
rigidez ni presión alguna, la cabeza ligeramente inclinada, colocar la mano derecha dentro
de la izquierda, en cuenco, y mantenerse en Silencio, instalarse en la calma mental y
corporal, agregando una respiración conciente de elección.

*En esta parte del ritual –sea que sigamos la Vía del Fénix o la Diagonal del
Corazón– se hace uso de una secuencia de la meditación Muraqabah de la cardiognosis
sufí, adaptada a la cardiognosis hermeto-alquímica –¡y viceversa!–. Por lo tanto esta
sección se desarrolla del siguiente modo:

----- Se concentra la atención en el portal del lóbulo frontal / tercer ojo, y se


proyecta, desde esta apertura, durante la exhalación, y en percatación de la A exhalada, un
ovoide mandorlino justo enfrente: la almendra co-respondiente de Genius o Daena [captar
hasta qué punto esto se vincula a la Meditación de la Letra A del Cuadrante del Despertar].
Esta vescica que se abre "enfrente" hay que saber que en realidad se encuentra
siempre fundida a nosotras: es desde siempre parte de nuestro Mundus, sólo que ahora la
espejeamos / desdoblamos, por arte espagírico.

----- Al sentir, a través de la respiración, que esta brisa o vibración es más y más
presencial, bienvenir esta Presencia, en acto reverencial (a través del Noten Kavod, p.ej.)
pudiéndose agregar una palabra o símbolo que revista un carácter sagrado para quien opera.

----- La vesica enfrente va ganando un rigor apariencial que a lo largo de los años
dependerá cada vez menos de quien practica: es el paisaje de aparición del Maggid = del
Mensajero, del Guía de Luz, Espejo de la Naturaleza, Naturaleza Perfecta, que va cobrando
vida desde su centro.
[Dentro del cuadro de una práctica colectiva los participantes pueden en este
momento abrir los ojos y concentrarse en la llama de una vela que se ha fijado de
antemano, al centro del círculo, visualizando el corazón de la vela como el corazón de
Cristo o de la Presencia; luego, percatarse del rayo de luz saliendo del «corazón» hacia el
“corazón” de cada uno de los practicantes –revisar la práctica de la creación de vínculos
mágicos–]

----- Llegado este punto en el que se percibe viviente la vesica de tal Guía, se le
expresa que vamos a conectar nuestro corazón al de ÉlElla:

3
/// ahora sostener la conciencia en el punto del Corazón, a medio camino en la
diagonal que va entre el pezón izquierdo y la punta del esternón [ver ilustración al final del
documento], y si es necesario, presionar con el dedo índice ese punto para que pueda
fijárselo un instante en la autocepción ///
...en la exhalación se emite desde el propio punto del Cor un haz de luz dorada
hacia el Cor de la almendra del Maggid, almendra que es el soma athanaton de nuestro
Paredros Celeste. No visualizar su cabeza, ni rostro ni cuerpo. Sólo importa su aura, su
irradiación auroral percibida en cuanto presión bajo la Gracia.

----- Luego, el cuerpo de energía del Guía de Luz hace lo propio hacia cada cuál,
emitiendo desde su Cor, durante nuestra inhalación, un haz de luz dorada hacia nuestra
área cardíaca (siempre se usa la respiración para generar esta doble acción existenciadora
de uno hacia otro).

----- Se va pecibiendo la íntima contemplación / auscultación a la que se va


entrando, por más que no haya "ojo": se está empezando a utilizar la intuición del Corazón
y el intelecto de la Respiración.
Ese mirarse es en realidad un respirarse, el besarse del primer versículo del Cantar
de los Cantares (“Béseme Él con los besos de su boca”), un percatarse del rigor presencial
de uno en el otro, a través del Soplo que despierta la imaginatio vera tanto como la oración
teofánica. Se sale a conocer la naturaleza de esa mandorla que es una "entidad", pero en
cuanto paisaje abierto a la exploración, a la autocepción.

----- Se inicia así la "conversación" o “sermón" (filológicamente la palabra sermón


lleva a la palabra diálogo, y en especial a la noción y experiencia de diálogo angélico, a
millas de la versión que incluye púlpito y lecciones amparadas en los sermones humanistas
de la exoteria católica o protestante). No hay discurso en esta conversación, y si lo llegara a
haber, se comprobará de qué clase. Básicamente no habría rezo en su sentido convencional.
Para esto es de suma utilidad, a veces, mantenerse simplemente en A.

----- Ahora se agrega el siguiente método de oración con-pasionada:


*primero se respira sincronizadamente con el Guía de Luz: “ambos” inhalamos y
exhalamos a la vez.
*luego de unos minutos se respira de manera alternada con ÉlElla: cuando uno
inhala el otro exhala, y viceversa, a la manera de un diálogo angélico en A.

----- Se permanece allí unos instantes para co-responderse en la pregunta / respuesta


existenciadoras, como en el Cantar de los Cantares.
Se recordará que este cantar, según sus etimologías hebreas, es también cordón,
hilo: todo lo que en este momento se pone técnicamente en práctica. Por otra parte, acaso
en Verdad se llega a oir el así llamado Ángel de la Respuesta, a manera de brisa marina,
marial...

*Ahora se va a agregar una recitación mental del mantra / palabra de potencia


elegida [ver más abajo].
Poco a poco esta recitación se armonizará con la respiración, la conciencia siempre
enfocada en el punto del corazón: en la inhalación por allí se absorbe el nombre elegido,
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mientras que en la exhalación se lo proyecta. Además, tras cada inhalación marcar un
tiempo de retención corto.
Palabras de potencia sugeridas para la vía cardíaca que experimentamos:
..Aumin
..Yeshuah
..Kyrie Eleison – Christe Eleison
..Maran Atha (del arameo: Nuestro Señor/a viene, o también: Mi Señor/a,¡ven!, o
incluso: Nuestro Señor/a está cerca, el conjunto haciendo referencia a la segunda venida,
en Espíritu y en Verdad, del Xristos: la Parusía: “Benedictus qui venit”, se dice del Ángel
de la Presencia en los misales).
..Iesous / Iesous Christe
..IAO
..Shaddai
..Athanatos
..Michael

[Cabe señalar que, tanto en la fase previa de este diálogo por la respiración con-
pasionada, como en esta fase de sesgo mántrico, se trata del Paredros en mí ( = “Santo
Ángel Guardián”), y a la vez de la Inteligencia Activa del Mundo (Espíritu Santo), o Anima
Mundi, rotando y relevándose mutuamente entre sí, de manera aparentemente sucesiva
aunque su realidad imaginal sea siempre simultánea, ya que el Ángel que portamos [Ángel
de la Pregunta] tanto como el Ángel de la Tierra [Ángel de la Respuesta] se transparentan e
interceden entre sí.

*Practicar durante al menos diez minutos.

*Al finalizar se saluda y reverencia al Guía de Luz (a través del Noten Kavod),
utilizando la misma palabra sagrada, o símbolo, que se usó para saludar al inicio, si es que
se usó.

*Se retrae, primero, el cordón de Oro a través del Cor, utilizando la inhalación.
La calidad de realización de este gesto es importante: es el gesto amoroso de la
guarda del Tesoro, del Oro en cada uno, en el relicario del Sacre-Coeur. Es un acto de
incubación dentro de las Alquimias en Espíritu que tarde o temprano nutre al embrión solar
y le da chances de proyección y multiplicación. Recordar el Eis Tus Aionas de El Calyx,
recordar la praxis del despertar de los centros sutiles.

*Finalmente se reabsorbe por el Ajna, o lóbulo frontal, la vesica piscis del Paredros,
es decir su Mundus [Arcano XXI].

*Permanecer unos instantes inmóvil y en silencio en la estesia de la Vía Íntima


lograda, la conciencia descansando en el punto del Corazón, pequeño fanal o Estrella,
particlo eterno, embrión metálico de nuestra mina terrestre.

Notas:

5
..Si uno se dispersa durante la fase de invocación del Guía o Ángel hacer lo
siguiente: abrir los ojos y enunciar tres veces: «Dios con-templa» o “Benedictus Qui
Venit”.
Si la dispersión continúa, realizar una ablución del rostro o una ablución completa
como la sugerida al inicio.

* *
*

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