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Trabajo

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MECANOGRAFÍA

La mecanografía es una habilidad de escritura que implica la utilización de una


máquina de escribir o un teclado de computadora para producir texto escrito de
manera rápida y precisa. Aunque la mecanografía es a menudo asociada con la
escritura en una máquina de escribir, hoy en día, se utiliza principalmente en la
escritura en computadoras y otros dispositivos electrónicos.

La mecanografía es una habilidad muy valiosa en la actualidad, especialmente en


el mundo de los negocios, la administración, la educación y la tecnología. Las
personas que pueden escribir rápidamente y con precisión en un teclado tienen
una ventaja significativa en el mundo laboral, ya que pueden completar tareas de
manera más eficiente y efectiva.

El objetivo principal de la mecanografía es aumentar la velocidad y la precisión de


la escritura en un teclado. La mayoría de los programas de mecanografía
comienzan con la enseñanza de la posición de los dedos en el teclado y la técnica
de escritura adecuada. Los programas luego avanzan a través de diferentes
niveles de dificultad, introduciendo nuevos patrones de teclado y ejercicios de
escritura.

Además de aumentar la velocidad de escritura, la mecanografía también puede


mejorar la precisión de la escritura y reducir la fatiga del usuario. Las personas
que escriben con precisión y rapidez pueden trabajar durante más tiempo sin
experimentar dolor o cansancio en los dedos, las muñecas o los brazos.

La mecanografía también puede ser útil para personas con discapacidades físicas
o cognitivas. Algunos programas de mecanografía están diseñados
específicamente para personas con discapacidades, como la dislexia o la
discapacidad visual, para que puedan escribir con mayor facilidad y precisión.

La mecanografía también puede ser beneficioso para estudiantes y educadores.


Con el aumento del aprendizaje en línea y la necesidad de tomar notas
rápidamente durante las clases, la habilidad de escribir rápidamente en un teclado
se ha vuelto aún más importante. Los estudiantes que tienen habilidades de
mecanografía desarrolladas pueden tomar notas más rápidamente y con mayor
precisión, lo que les ayuda a retener información y a aprender de manera más
efectiva.

Además, la mecanografía también puede ser beneficioso para las personas que
quieren mejorar su productividad personal. Al escribir más rápidamente, se puede
completar más trabajo en menos tiempo, lo que permite más tiempo para otras
actividades y hobbies. Algunos estudios han demostrado que la mecanografía
puede mejorar la productividad en un 25% o más.
ETIMOLOGÍA DE LA PALABRA “MECANOGRAFÍA”

La palabra "mecanografía" se origina en la unión de dos términos griegos:


"mēkhanē", que significa "máquina" y "graphē", que significa "escritura". Así, la
palabra "mecanografía" se refiere a la escritura realizada con una máquina, en
contraposición a la escritura manual.

El término "mecanografía" se utilizó por primera vez en francés en la década de


1880, y se extendió rápidamente a otros idiomas, incluido el español.

HISTORIA DE LA MECANOGRAFÍA

La mecanografía es el proceso de introducir texto en un dispositivo por medio de


un teclado como los que poseen las maquinas de escribir, los computadores o las
calculadoras. El termino se dio cuando empezaron a utilizar las primeras máquinas
de escribir mecánicas. Con la evolución se han logrado otros métodos para
realizar esta tarea al mismo tiempo que se facilita su trabajo. Ej. Punteros,
teclados, reconocimiento de voz, entre otros.

La primera patente por un aparato que escribía caracteres automáticamente fue


otorgada en el año 1714 por la reina Ana de Gran Bretaña al inventor Henry Mill.
Posteriormente, en 1855 el italiano Giuseppe Ravizza invento un aparato que se
puede considerar el verdadero precursor de la máquina de escribir. Sin embargo,
su construcción era artesanal por lo que casi no tuvo repercusión en su época.

Las primeras maquinas de escribir fabricadas en serie fueron inventadas por el


norteamericano Cristopher Lathan Sholes y comercializadas por la compañía
Remington en 1873. Estos rudimentarios aparatos se montaban sobre una
máquina de coser.

Accionada a pedal. A pesar de su enorme tamaño y de la incomodidad que


representaba su manejo, las maquinas de la Remington tuvieron una aceptable
difusión entre la población. Debido a la lentitud de su mecánica, no era infrecuente
que las teclas se atascaran, por lo que para desincentivar la velocidad en el tecleo
se colocaron las teclas mas habituales en los lugares mas incomodos. Así en el
teclado, que ha perdurado hasta hoy en día, encontramos que letras tan comunes
como la “a” o la “p” hay que pulsarlas con el meñique.
En 1833 le fue concedida una patente francesa al inventor Xavier Progin por una
maquina que incorporaba por primera vez uno de los principios utilizados en las
maquinas de escribir modernas: el uso, para cada letra o símbolo, de líneas de
linotipia separadas y accionadas por palancas separadas.

El mecanismo utilizado para para mover el papel entre caracteres y entre líneas es
en casi todas las maquinas de escribir modernas un rodillo cilíndrico, contra el que
se sujeta el papel con firmeza. El rodillo se mueve horizontalmente para producir
el espaciado entre las líneas.

La primera maquina que utilizo este método de espaciado construida en 1843 por
el inventor estadounidense Charles Grover Thurber. La parte impresora de esta
maquina de escribir era un anillo de metal que giraba en sentido horizontal sobre
el rodillo y que estaba provisto de una serie de teclas o pistones con piezas de
caracteres en su parte inferior. La maquina funcionaba girando la rueda hasta que
la letra adecuada se centraba sobre la posición de impresión en el rodillo y luego
se oprimia la tecla.

Varios inventores intentaron crear maquinas diseñadas para hacer impresiones


grabadas en relieve que pudieran ser leidas por personas ciegas, una de esas
maquinas, desarrollada en 1856, era semejante a la maquina de escribir moderna
en cuanto a la disposición de las teclas y líneas de linotipia, pero grababa las
teclas en relieve en una tira de papel estrecha en lugar de una hoja. Una maquina
similar, creada y pantentada en 1856, tenia las líneas linotipia dispuestas en
sentido circular, un soporte de papel móvil, un timbre que sonaba para indicar el
final de una línea y una cinta con tinta. La disposición del teclado de esta maquina
era semejante a las teclas blancas y negras de un piano.
TIPOS DE MÁQUINA DE ESCRIBIR

Máquina De Escribir
DICCIONARIO TECNOLÓGICO
La máquina de escribir es un
dispositivo mecánico, electromecánico o electrónico, con un conjunto de teclas
(llamadas tipos) que, al ser presionadas, imprimen caracteres en un documento,
normalmente papel. La persona que opera una máquina de escribir recibe el
nombre de mecanógrafo.
Las máquinas de escribir fueron herramientas indispensables en las oficinas de
todo el mundo, así como para la literatura, el cine, el periodismo, el teatro y
cualquier actividad que requiriera escribir desde finales del siglo XIX y durante casi
todo el XX. En la década de 1980 los procesadores de texto para computadoras u
ordenadores personales reemplazaron casi totalmente a las máquinas de escribir
en los países desarrollados, aunque en otras regiones su uso no se vio afectado
por el poco avance de las nuevas tecnologías hasta entrado el siglo XXI.
Entre las compañías que manufacturaban máquinas de escribir y sus accesorios
se encontraban Adler-Royal, Canon, Brother, Nakajima, Olivetti, Olympia y Smith-
Corona. Olivetti y Olympia fueron las últimas compañías occidentales que
fabricaron máquinas de escribir mecánicas, pues Olivetti ha dejado de producir
máquinas de escribir y Olympia solo produce dos modelos electrónicos, siendo
todos los modelos actuales electrónicos.
La última empresa dedicada a la fabricación de máquinas de escribir, la india
Godrej and Boyce, establecida en la década de 1950, cerró su última fábrica
en Mumbai en abril de 2011.1 El 20 de noviembre de 2012 se fabricó la última
máquina de escribir manufacturada en Europa, concretamente en la factoría de
Brother en Wrexhamc (Gales, Reino Unido).

La Máquina de escribir eléctrica

Este tipo de máquina de escribir fue inventada por Thomas Alva Edison en
1870. Sin embargo, no fue sino hasta después de un siglo que salió al mercado.
Las primeras máquinas de escribir eléctricas fueron vistas a partir del año 1925 y
fueron toda una novedad para la época, pues las teclas se movían gracias a un
motor que se encargaba de mover el carro y el rodillo al terminar de escribir una
línea.
Las personas que utilizan este tipo de máquinas deben emplear una menor
presión al momento de oprimir las teclas que aquellos que utilizan las máquinas de
escribir convencionales, por eso pueden escribir más rápidamente y agotarse
menos.
Algunas máquinas de escribir eléctricas permiten corregir errores y alinear
uniformemente el margen derecho. Además, suministran caracteres de idiomas
extranjeros y permiten escribir con diferentes tipos de letras.

Las mejores máquinas de escribir eléctricas fueron las desarrolladas por IBM y
Remington Rand. Sin embargo, la IBM Selectric es tal vez la mejor, pues
reemplazó las barras de tipos por una esfera de tipos, la cual tenía las letras
moldeadas en la superficie.

 Esta importante máquina utilizaba un sistema compuesto por cinta metálicas,


palancas y pestillos, el cual funcionaba gracias a un motor eléctrico que hacía girar
la esfera hasta la posición necesaria y golpearla contra el rodillo y la cinta.
La máquina de escribir electrónica.
Es la última evolución importante de este tipo de máquinas, reemplazó el
mecanismo de la bola de tipos por unos discos con letras moldeadas conocidos
como “margaritas”, los cuales eran mucho más sencillos de utilizar y más
baratos; la diferencia principal entre las máquinas de escribir eléctricas y las
electrónicas es que estas últimas se basan en sistemas de circuitos y en una gran
cantidad de complementos.
Estas máquinas cuentan con un panel visor que los usuarios pueden utilizar para
revisar que el trabajo quede bien hecho antes de imprimir el texto; hoy en día,
estos artefactos se siguen utilizando para hacer borradores de diversos

La máquina de escribir mecánica.


Hacia 1920, la máquina de escribir
«manual» o «mecánica» había
alcanzado un diseño más o menos
estándar. Había pequeñas variaciones de un fabricante a otro, pero la mayoría de
las máquinas seguía el siguiente diseño:
Cada tecla estaba unida a un tipo que tenía el correspondiente carácter en relieve
en su otro extremo. Cuando se presionaba una tecla con la suficiente fuerza y
firmeza, el tipo golpeaba una cinta (normalmente de tela entintada) extendida
frente a un cilindro que sujetaba el papel y se movía adelante y atrás. El papel se
enrollaba en este cilindro, que rotaba al accionar una palanca (la del «retorno de
carro», en su extremo izquierdo) cuando se alcanzaba el final de la línea. Algunas
cintas estaban divididas en dos mitades, una roja y otra negra, a todo lo largo,
contando la mayoría de las máquinas con una palanca que permitía cambiar entre
los colores al escribir, lo que estaba especialmente ideado para los libros de
contabilidad, donde las cantidades negativas tenían que figurar en rojo como
número negativo.
En los años 1940 se comercializó una máquina de escribir silenciosa que resultó
ser un fracaso, lo que llevó a algunos observadores a la conclusión de que el
cliqueteo de las máquinas de escribir convencionales era del gusto de los
consumidores.

MARCAS DE LA MÁQUINA DE
ESCRIBIR.

Adler-Royal

Adler fue una empresa de


fabricación de máquinas de escribir alemana, tuvieron un importante protagonismo
en la evolución de la escritura con la creación de máquinas de escribir Adler con
un acabado de calidad y funcionamiento avanzado para la época.
Merece la pena redactar un texto desde una máquina de escribir Adler, estas
cuentan con un teclado diseñado para facilitarle al mecanógrafo la labor
de escribir en máquina, aunque resulte complejo el poder corregir los errores
cuando se tipea en una máquina para escribir aún hay quienes prefieren usarlas.
Para los mejores escritores de todos los tiempos mecanografiar sus obras
literarias se ha convertido en un factor indispensable de inspiración, y es que, para
muchos escritores el redactar sus escritos en un ordenador le quita su esencia a la
obra de arte que están creando.
Las maquinas Adler fueron diseñadas para ser resistentes y brindarle al usuario un
artilugio de calidad y facilidad de uso, son tan resistentes y funcionales que a la
fecha puedes encontrar en el mercado una máquina de la marca Adler en buenas
condiciones.

Smith corona

Las máquinas de escribir Smith Corona por décadas le han


ofrecido a los usuarios productos de calidad a un precio sorprendente, en la
actualidad a pesar que la mayoría de máquinas de escribir se han convertido
en una pieza de museo de la historia de la evolución de la escritura, aún hay
quienes buscan la inspiración de una redacción a través de este aparato antiguo
que continua en el mercado.

Una máquina de escribir se ha convertido en un artefacto de colección, sin


embargo, es relevante acotar que se ha dado paso a un nuevo uso de
las maquinas corona, gracias al emprendimiento de expertos mecanógrafos
quienes ofrecen sus servicios en los juzgados, como un nuevo concepto para
redactar documentos de emergencia cuando no se tiene acceso a un ordenador.
Puedes adquirir una máquina de escribir corona manual, para inspirarte en las
redacciones retro o comprar una máquina de escribir corona electrónica, cuyos
elementos para redactar son más sofisticados, mejorando considerablemente el
ritmo de trabajo al momento de mecanografiar un documento.
Decidirte por una máquina de escribir Smith corona, es determinante si quieres
tener en tus manos un poderoso artefacto que te permite resaltar tus redacciones
dándole un toque vintage y personal, la era de lo retro vuelve a la palestra
trayendo consigo la reutilización de las máquinas para escribir desde la invención
de la máquina de escribir el mundo de la escritura dio un giro de 360°.

Underwwod

Merece la pena conocer cuál es el papel protagonista que tuvieron las máquinas
de escribir Underwood en la historia. Tal cual las conocemos hoy en día, las
máquinas de escribir  de esta marca durante años han sido testigos de los hechos
y acontecimientos de la historia mundial.

Y la máquina Underwood, por ser una de las primeras máquinas de escribir


fabricadas en el mundo fue un elemento icónico en la historia, las primeras
máquinas de escribir creadas fueron manuales, sin embargo, con el paso de
tiempo y de los años fueron evolucionando hasta fabricar máquinas eléctricas y
portátiles.

Por su practicidad las máquinas de escribir se convirtieron en el principal elemento


de redacción para periodistas y escritores desde el siglo XIX hasta el siglo XX,
cuando fueron suplantadas por los ordenadores al cabo de los años, por lo cual
fueron testigo de la evolución y transformación histórica del mundo.

La fábrica Underwood, fundada en el año 1874, fue una de las pioneras en la


fabricación de estos sorprendentes aparatos que facilitaban el trabajo de oficina,
ya que los mecanógrafos redactaban los documentos en tiempo record, sin duda
alguna desde su creación la máquina de escribir revolucionó la historia.

Hermes

Al sentarse frente a una Hermes 3000 por primera vez, te vas a sentir atraído por
la máquina y tus dedos querrán escribir lo antes posible.

El diseñador del Hermes fue Paillard, una empresa que comenzó dedicándose a la
relojería y mecanismos de cajas de música.

Son conocidos hasta el día de hoy como uno de los mejores fabricantes de cajas
de música.

La compañía pasó años investigando cómo podían mejorar el diseño actual de las
máquinas de escribir.

Hermes comenzó con el modelo 2000, que era más bien una máquina de escribir
convencional, aunque muy sólida y fiable. Después de diseccionar muchos de los
modelos actuales, debutaron con el Hermes 3000. El Hermes 3000 tiene un
diseño compacto, perfil ultra bajo y un estuche de transporte incorporado.

Las principales innovaciones incluyeron los primeros márgenes de relámpago del


mundo (visibles delante de la hoja de papel), tabulador automático, regulador
táctil, agrupación de todas las llaves de servicio y placa base y cubierta integradas
para facilitar la manipulación y el transporte.

Remington

La empresa E. Remington & Sons fue fundada en 1816 por Eliphalet Remington
en Ilion, Nueva York. En principio la firma se dedicaba a fabricar armas de fuego,
pero a partir de la Guerra Civil americana el hijo del fundador decidió diversificar la
producción.

Desde 1870 a 1894 fabricaron máquinas de coser; fue a partir de 1876 cuando
comenzaron a manufacturar máquinas de escribir. La idea surgió tras la concesión
de una patente en 1868 a Christopher Sholes, Carlos Glidden y Samuel W. Soule
para construir la primera máquina de escribir conocida: la máquina Sholes &
Glidden.
Fue la primera máquina que permitía escribir más rápidamente que a mano. La
patente fue vendida a Densmore & Yost, que acordaron su comercialización con
Remington bajo el nombre de la empresa. Su primera máquina de escribir
apareció en el mercado el 1 de marzo 1873, con el teclado QWERTY diseñado por
Sholes.

La Remington Nº 2 fue la primera máquina que permitía cambiar las mayúsculas


por minúsculas presionando una tecla, lo que la convirtió en todo un éxito de
ventas.

En 1886, E. Remington & Sons vendieron la máquina a la Standard Typewriter


Manufacturing Co., incluyendo los derechos del nombre. La empresa cambió su
propio nombre por el de Remington Typewriter Company en 1902, y en 1927 se
fusionaron con Rand Kardex Bureau dando lugar a la Remington Rand.

Olivetti

Si hay una marca de máquinas de escribir histórica y de referencia es Olivetti, sólo


hacer referencia a esta marca ya sabemos que forma parte de la historia.
Tanto las más antiguas como las nuevas son una referencia en el mercado y te
vamos a mostrar las mejores y a los mejores precios.

Olivetti fue una fábrica italiana especialista en la elaboración de máquinas de


escribir, abriendo sus puertas desde el año 1908 diseñó diversos modelos con
características y funciones diversas para que el usuario pudiese rendir en su
trabajo de mecanografiado.

Hoy en día una máquina de escribir Olivetti, es un producto de segunda mano que
puede encontrarse en el mercado actual bien cuidadas, gracias a la calidad del
material usado para la fabricación de las máquinas de escribir de esta firma
italiana.

No solo se especializaron en la fabricación de máquinas de escribir, también sus


repuestos y consumibles, así como también la fabricación de calculadoras
eléctricas, hoy en día las máquinas de escribir Olivetti son codiciadas por los
coleccionistas especialmente los modelos de la línea lettera, unas obras de arte y
verdaderas antigüedades de mucho valor.
Olympia

Actualmente, a pesar de los nuevos avances que se obtienen día a día, se ha


marcado una nueva tendencia y se ha vuelto a poner de moda el uso de una
máquina de escribir Olympia como alternativa de redacción de documentos
cuando no se dispone de un ordenador.
Esta tendencia está creciendo últimamente en las calles de ciudades importantes
como Madrid, donde se pueden ver cubículos con un mecanógrafo y su máquina
de escribir manual, si eres un amante de lo retro y te gusta tener en tu decoración
un documento o un poema escrito a máquina el Street Write es para ti.

Desde la concepción de la máquina de escribir, una de las empresas estandarte


en la fabricación de estos aparatos fue la fábrica Olympia, de origen alemán quien
se enfocó en la utilización de materiales de fabricación duraderos y de avanzada
tecnología.

La fábrica de máquinas de escribir Olympia se destacó por fabricar máquinas


llamativas elaboradas en cromo y acero, con acabados únicos, lo cual las hacia
las favoritas de muchos escritores, Olympia se ha definido por ser una empresa
especializada en la fabricación de dispositivos de oficina.

Ofreciéndole a sus clientes innovaciones tecnológicas para facilitarle sus laborales


cotidianas, desde la fabricación de la primera máquina de escribir por la firma,
Olympia ha ido evolucionando los conceptos de fabricación en lo referente a
equipos de oficina.

EVOLUCIÓN DE LA MÁQUINA DE ESCRIBIR.

La máquina de escribir fue una herramienta indispensable en las oficinas de todo


el mundo, así como para la literatura, el cine, el teatro, y cualquier actividad que
requiriera escribir, desde finales del siglo XIX y casi todo el siglo XX.

Pero en la década de los ochenta los procesadores de texto para computadoras


personales reemplazaron casi totalmente a las máquinas de escribir en los países
desarrollados.

El primer intento registrado de producir una máquina de escribir fue realizado por
el inventor Henry Mill, que obtuvo una patente de la reina Ana de Gran Bretaña
en 1714.

1. En 1833 le fue concedida una patente francesa al inventor Xavier


Progin por una máquina que incorporaba por primera vez uno de los
principios utilizados en las máquinas de escribir modernas: el uso, para
cada letra o símbolo, de líneas de linotipia separadas y accionadas por
palancas separadas.
2. En 1855 el italiano Giuseppe Ravizza creó un prototipo de máquina de
escribir, llamado Cembalo scrivano o Macchina da scrivere a tasti. Era una
máquina avanzada que permitía al usuario ver lo que escribía a medida que
tecleaba.

3. En 1865 el reverendo danés Rasmus Malling-Hansen inventó la Bola de


escribir (The Writing Ball), que se comercializó en 1870, siendo la primera
máquina de escribir puesta a la venta. Fue un éxito en Europa, y se sabe
que estuvo en uso en oficinas de Londres hasta 1909.
Adicionalmente, Malling-Hansen usó un escape solenoidal para el retorno
del carro de algunos de sus modelos, constituyendo un serio candidato para
la primera máquina de escribir “eléctrica”.

4. La primera máquina de escribir con éxito comercial real fue inventada


en 1872 por Christopher Sholes, Carlos Glidden y Samuel W. Soulé. La
patente fue vendida por $12.000 a Densmore and Yost, que llegó a
un acuerdo con E. Remington and Sons (entonces famosos como
fabricantes de máquinas de coser) para comercializar la que fue conocida
como Máquina de escribir Sholes and Glidden.

5. La mayoría de las primeras máquinas de escribir, los tipos golpeaban


subiendo contra el fondo del rodillo. Por ello, lo que se escribía no era
visible hasta que las siguientes líneas escritas hacían que el papel se
deslizarse, dejándolo a la vista. Esto fue finalmente logrado con diversos
diseños mecánicos ingeniosos, y las llamadas Máquinas de escribir
visibles fueron comercializadas hacia 1895. Sorprendentemente, los
modelos antiguos siguieron fabricándose hasta 1915.

6. Hacia 1920, la máquina de escribir «manual» o «mecánica» había


alcanzado un diseño más o menos estándar.
Cada tecla estaba unida a un tipo que tenía el correspondiente carácter en
relieve en su otro extremo. Cuando se presionaba una tecla, el tipo golpeaba una
cinta (tela entintada) extendida frente a un cilindro que sujetaba el papel y se
movía adelante y atrás. El papel se enrollaba en este cilindro, que rotaba al
accionar una palanca (la del «retorno de carro», en su extremo izquierdo) cuando
se alcanzaba el final de la línea.

7. Algunas cintas estaban divididas en dos mitades a todo lo largo, una roja y


otra negra, con una palanca que permitía cambiar entre los colores, lo que
estaba especialmente ideado para los libros de contabilidad, donde las
cantidades negativas tenían que figurar en rojo.

Un dato curioso: en los años 1940 se comercializó una máquina de escribir


silenciosa que resultó ser un fracaso, lo que llevó a algunos observadores a la
conclusión de que el cliqueteo de las máquinas de escribir convencionales era del
gusto de los consumidores.
https://muytecnologicos.com/diccionario-tecnologico/maquina-de-escribir

https://www.maquinasdeescribir.net/electronicas/

http://bengar.com/blog/la-maquina-de-escribir/#:~:text=En%201865%20el%20reverendo%20dan
%C3%A9s,oficinas%20de%20Londres%20hasta%201909.

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