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Apunte Sobre La Poesía Hebrea

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336 REVISTA DEL COLEGIO DEL ROSARIO APUNTES SOBRE LA POESIA HEBREA 337

supo qué contestar. Y entrando en conversación, se APUNTES SOBRE LA POESIA HEBREA


atrevió a decir:
-lUsted conoció a don Anselmo. Echevarría? (Estudio para el doctorado en filosofía y letras en el Colegio
del Rosario)
-lQuién no conoce en Méjico al const�nte _pre-
.tendiente a la presidencia de la república, al padre
putativo de la marquesa viuda de Vicencio?-dijo el Se atribuye a Grecia el honor de haber implantado
•.conhuésped sonriendo siempre. en el mundo el imperio de la belleza, de haberle erigido
-Y esa mujer, lpor qué no quería a su padre? el primer altar, de haberla vestido con la soberana pompa
-preguntó Damián. de su idioma y de sus artes, de haber legado a Roma,
-lA Echevarría? Y por ella al mundo, las leyes fundamentales de todas
-Sí. las producciones artísticas; se la llama madre de la be­
_¿ Pero usted conoce a Echevarría? lleza, su primera cuna y su primera nodriza. Y es verdad
-Le he conocido en Madrid. que Grecia enseñó al mundo las artes, que ella expresó
-lY no sabe usted quién es? la belleza con la impecable corrección de sus liras y sus
-_:_Sólo sé que era u� distinguido hombre político cinceles; pero no están en Grecia los mejores modelos;
y el P,.tdre de la marquesa ... Y joyas litera�ias más preciosas que las páginas de los·
-1 Pero usted le ha tratado y no ha conocido que .clásicos se encuentran en otro libro, de remotísima an­
era un pobre loco! tigüedad, escrito en un idioma exótico para la Grecia
-iLoco!-dijo Damián sintiendo que le faltaban Y para nosotros, pero en cuyas páginas está la belleza
de nuevo las fuerzas. retratada con menos artificio y en conceptos más subli­
· -Loco rematado. Era un pobre maestro de escue- mes; en él están sus más puras fuentes, es su ,ñejor
1a que se creía inmens�mente rico, hombre público muy ,cofre, sus fulgores eclipsan las glorias de Grecia y Roma.
importante, con derecho a la presidencia de la república Y cómo no había de ser, siendo su autor causa de
·y siempre perseguido por sus contrarios. Creía

además toda belleza y belleza suma? Las artes han nacido de
1
,que la marquesa de Vicencio era una hija que se le la religión, y en la religión alcanzan su más alto es­
·murió hace muchos años, y con esta manía ha dado plendor; los primeros edificios artísticos fueron templos,
· -serios disgustos a esa señora. 1as notas primeras de las liras fueron himnos de ado­
Al oír esto, el pobre soñador cayó sobre el diván ración y súplica porque, Musa dedil fidibus divos pue­
presa de un síncope. rosque deorum re/erre (t), y el Artista supremo que dio
Al despertar a la mañana siguiente se halló acos­ a los hombres el instinto del arte como brote natural
tado en su cama, y vio sobre la mesita de noche el <le espiritualidad y emblema de lo inmortal, que le en­
• cofrecillo que debía encerrar su tesoro. Lo descerrajó seña la estética en la armonía del desarrollo de la na­
,.con un resto de esperanza y lo encontr6 lleno de pe­ turaleia, ¿qué no daría en su palabra directa, en su
dazos de ,vidrio.
(1) Horacio,
JOSE ESTREMERA
2
338 REVISTA DEL COLEGIO DEL ROSARIO !.PUNTES SOBRE LA POESIA HEBREA 339

testamento sagrado, p_Ieno de amor, cuando se propone No se trata sino de cumplir el precepto de Jesucristo:
dar a conocer la extensión de sus atributos? Por eso « Estudiad las escrituras porque en e!ras está la vida -

dice Salomón que la Biblia «sale de la boca del Altí­ eterna» (J. V-36). Y lo haremos con el respeto que me- -
simo como un v�por, como una emanación sincera de rece « la carta de Dios omnipotente a su criatura, » como
la claridad de Dios omnipotente» (1); por eso no puede la llamó san Gregorio Magno, porque « de aquella ciudad•
compararse su inspiración a la de las musas del Par­ hacia donde vamos peregrinando nos han llegado cartas»
naso: no es sólo joya literaria de los hebreos sino guía (san Agustín); respeto que la Iglesia católica ha maní··
religiosa del mundo y el mayor monumento literario que· testado siempre desde sus comienzos: los primeros cris­
posee la humanidad. tianos en las catatumbas, sobre el altar tenían dos ni­
En su meditación se han formado las almas nobles,. chos iguales: el uno guardaba al Verbo de Dios hecho
su estudio ha hecho de los santos Padres prodigios de carne en la Eucaristía, para el Verbo de Óios escrito
ciencia que no hicieron sino mostrar al mundo la luz en el volumen sagrado era el otro.
divina de este libro; en él los mártires templaron sus
almas para el sacrificio; por él se levantaron los santos
CAPITULO PRIMERO
hasta Dios; sus sentencias iluminan el entendimiento PARTICULARIDADES DE LA POESIA HEBREA
con fulgores divinos y llenan los corazones de paz y de
amor; con ellas los apóstoles convirtieron al mundo· l. Idioma-Es el idioma hebreo el primer manto
en ellas está el fallo último de toda cuestión; allí se de púrpura que usó el pensamiento divino al presen­
escuchan en la tierra los acentos del cielo. tarse entre los hombres; más sencillo que el peplo con
Pero aquí no vamos a entrar en las clar,�s regiones que Grecia adornó a sus diosas, pero no menos rico,
de su luz indeficiente, sino procuraremos admirar sus deja ver toda la sublimidad de la belleza, no impide el
bellezas literarias puramente humanas: no entraremos al atrevido vuelo de la poesía y el derroche abrumador de
palacio sino observaremos los primores de sus adornos sus riquezas de que tan pródiga es la Escritura. Carece
exteriores; porque en las divinas letras el vestido con el hebreo del artificio de las lenguas modernas, pero su
que se presenta la verdad eterna a los mortales, aunque gramática es más lógica y natural, tiene menor número .
deja ver la gracia y brillo de las ideas divinas, es de raíces, pero de cada una saca todo género de pala­
sinembargo de brocado recargado de pedrería. bras y tiene modos maravillosos de grad�ar la intensi­
Nada nuevo queremos decir de la Sagrada Escritura dad del sentido en sustantivos y verbos. El carácter de
porque es presunción agregar una sílaba a lo que los su gramática la hace la lengua más propia para ser
santos padres han dicho, y la fe intangible de la Iglesia el idioma de Dios; pues así como los profetas su�len
no permite la innovación ni de una tilde; y el juramento confundir la historia con la profecía y agregar la una
que dimos en nuestra ordenación sacerdotal no nos a la otra sin distinción, y contar lo' futuro como suce­
permite sino recibir el legado santo de la tradición. dido, así también encontramos que en la conjugación
hebrea no hay más que dos tiempos que son el preté­
(1) Sabiduría, VJl-25. rito y el futuro, que en muchísimas ocasiones se usan-
..340 REVISTA DEL COLEGIO DEL ROSARIO 34f
APUNTES SOBRE LA POESIA HEBREA

uno por otro y se confunden (1), lo que hace a esta de incisos cortos separados completamente, propios para
lengua propia para ser el lenguaje de Dios que habla las máximas breves y concisas de Salomón y para la
desde la eternidad; para expresar las leyes del Señor legislación de Moisés; pero lo emplean también para
que n'o se limitan con el tiempo; para ser la lengua de historia, para la lírica y se usa er1 todo género de es­
los profetas que todo lo ven desde la eternidad, lo mismo critos hasta la decadencia literaria, en que la influencia
lo presente o pasado que lo futuro: es la lengua propia griega hizo variar el carácter peculiar de la edad de oro
para la promulgación de la ley eterna. de las letras hebreas, como se nota en los libros de
Al considerar los originales de la Escritura resulta los Macabeos, en que el autor confiesa haber empleado·
una coincidencia curiosa: en sus originales está el An­ mayor estudio literario.
iiguo Testamento en· hebreo, que se escribe de derecha Otro carácter propio de esta literatura, que es común_
a izquierda y cuyas hojas se pasan de izquierda a de­ a todas las orientales, es la exuberancia y riqueza de
recha; y el Nuevo está en griego que_ se escribe en el imaginación, de donde resultan las figuras exageradas�
orden en que nosotros esc_ribimos. Colocados los dos el desorden de la lírica, las hipérboles y- las compara­
libros, el uno junto del otro, comienzan por fuera para ciones arriesgadas y el resentirse toda la literatura, Y
terminar en el centro; ambos miran a Jesucristo uno por 'sobre todo la poesía, del lujo y opulencia que usaron
un lado y otro por el otro cronológicamente, pues uno en palacios y templos. Si se habla de Dios se dice que
lo ve en el futuro y el otro cuenta su historia; son pues usa la luz como su vestido propio, extiende los cielos
los dos testamentos como los ángeles del arca de la como una tienda portátil, hace subir al sol del tálamo
alianza que estaban uno frente de otro mirando al pro­ de la aurora como un gigant� que se apronta a realizar
piciatorio, que según san Juan «es Jesucristo.» El An­ sus· hazañas, ordena el ejército de las estrellas Y manda
tiguo comienza: • En el principio» y el Nuevo ordenado a la luna que. señale los tiempos. Coloca al mundo en­
cronológicamente empieza por san Juan: « En el princi­ sus cimientos y apenas creado hace con él como las
pio,. y Jesucristo dijo: «Yo soy el principio.» madres con sus hijitos, que los envuelven en pañales:­
II. Estilo 7 Es muy particular el estilo de los libros Dios lo envuelve en nubes. Enfurece al mar y se burla
sagrados y tiene caracteres que son generales a todos de él y lo aprisiona entre arenas y le pone diques Y
los escritores hebreos, lo que contribuye grandemente puertas. Cuando quiere trastorna los el�mentos y cabalga
a la unidad d; la Biblia. En primer lugar su estilo es sobre las plumas de los vientos, pone su tienda sobre
la oscuridad de los cielos, encima de la·s nubes tem­
(1) El pretérito indica un suceso pasadp o que con seguridad pestuosas, y son los rayos las chispas de su carro Y ef
- se realizará y expresa el condicional y subjuntivo; el futuro tiene
fulgor de su mirada; a su paso se inclinan los collados,
el sentido del nuéstro, pero sirve también para expresar la repe­
tición de un acto en cualquier tiempo y suple lo mismo que el tiembla la tierra y humean los montes_ ... Si David
pasado el modo subjuntivo. Además la conjuncion cop,ulativa con­ habla de sus enemigos quiere que desaparezcan como
vierte el pretérito en futuro y viceversa. El presente se expresa el polvo de las plazas que arrebata el viento, que como
por el participio, que sirve también para el pasado y el futuro inmundo lodo sean hollados, que como se derrite la cera
_perfectamente. puesta al fuego, así desaparezcan ante la presencia del
34?. REVISTA DEL COLEGIO DEL ROSARIO . APUNTES SOBRE LA POESIA HEBREA 343

.Señor; pide a Dios que ponga al demonio sobre ellos Algunos como Josefo y San Jerónimo (1) pretendie-
Y sus obras, que sus hijos mendiguen y sean arrojados ron encontrar en et verso hebreo rastros de la medida
de todas partes, que sus trabajos los aprovechen otros, clásica como si' no fuese posible otra manera de versos,
que nadie se compadezca de ellos, que la maldición los y aunque en grandes trozos encontraron otra clase de
cubra como un vestido que nunca se puedan quitar y metro, medían por cuantidades, para sacar alguna regla
que penetre sus huesos, que nunca se borre la infamia que hoy parece imposible aplicar, salvó raras excepcio-
de su madre y la vergüenza sea su vestid@ y la humi- nes. Otra opinión considera el verso hebreo de la es-
llación su capa, que su oración se CQnvierta en pecado, tructura del nuéstro, constituido por el número de síla-
Y llega a desear en su indignación lavar sus manos en bas; en prueba de esto muchos de los salmos, varios
la sangre del pecador. Cuando habla de la misericordia capítulos de Job y todo el libro de los Proverbios están
compara a Dios con un padre que se compadece de sus en heptasílabos, que a veces se combinan con otros
hijos, ªsí el Señor de los que le temen, porque él co- números. En el Pentateuco, también se encuentra alguna
noce c,Smo estamos formados y se acuerda de que somos vez, pero ésta tampo,co es la regla general; puede de-
polvo; por eso perdona nuestras maldades y sana nues- cirse que en el verso buscabar1 alguna medida, a vec s
tras debilidades, nos redime de la muerte y nos corona la de las sílabas, a veces la armonía de los períodos y
de misericordia y de piedades, compasivo .Y misericor- versículos de una manera parecida al modo como Cice-
dioso, magnánimo y de mucha bondad. Su misericordia rón medía su prosa y le daba esa armonía que le es
está de una a otra eternidad, y es más grande y por- tan peculiar, o más bien como los versos saturninos an.:.
tentosa que todas sus obras. teriores a Livio Andrónico.
En los remotísimos tiempos en que se1 escribió este Sinembargo es evidente, que existe el verso en
libro, la poesía no tenía al vers por carro de fiesta, hebreo, sea cual fuere su m e d i d a ; ' esto lo prueban el
por vestidura ordinaria, y brillaba sola sin necesitar ese paralelismo, los acrósticos, etc.
aderezo de p drería. En la forma exterior no se distin- Acostumbraron los poetas hebreos dividir sus can-
guió al principio de la prosa, después algo se diferenció tos en es_trofas, cada una de las cuales .era la paráfra-
pero nunca conoció el hebreo la distinción entre la prosa sis de un verso o el desarrollo de una sola idea; se-
y el verso, que introdujeron los clásicos. N o es la poética paradas por la diferencia de pensamiento o por el
de Aristóteles la única norma de toda poesía y no pier- estribillo, o por algunas señales 1;10 bien conocidas.
den nada de su magnificencia los poemas bíblicos por no Usan a veces la r_ima, más por capricho que por
estar sujetos a estas normas que sólo el uso hizo in- regla general; se encuentra a veces la repetición arbi-
dispensables. Además la imaginación orienial los hacía traria de un sonido, como la sílaba nu en las lamen-
pasar de la historia al himno, del precepto descarnado
a la súplica, de la imprecación dirigida al pueblo a la (1) En el prefacio al libro de Job, dice: • Hexametri versus
' ' sunt, dactilo espondaeoque currentes, et propter linguae idioma,
profecía más elevada y misteriosa, de la descripción de crebro recipientes et alios pedes, non earumdem 11yllabarum sed
la naturaleza o de la ley al más sentido lirismo. eorumdem temporum. lnterdum _quoque rhythmus ipse dulcis et
:tinnulus fertur numeris lege metri solutis. •
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taciones de Jeremías, que simula una especie de aso- Mejor es el pobre que anda en su sencillez,
nancia. Los poemas acrósticos con el alefato eran una que el rico en caminos perversos.
forma solemne de la lírica. (Proverbios xxvm-4)
Como la Escritura no es patrimonio de un pueblo
Otras veces el paralelismo consiste en una sínte-
ni joya de un idioma, sino mensaje de Dios a todos
sis que se ·hace al fin de cada estrofa de lo que en
los hombres de todas las razas y tiempos, la poesía ella se dijo. El salmo 105 tiene paralelismo Sintético Y
hebrea no tiene una rima y métrica· tan exclusivista-
antitético a la vez porque va haciendo un parangón
como las otras literaturas; allí se riman las ideas, para
entre los beneficios de Dios y los crímenes del pueblo.
que la traducción no mengüe su belleza, ni ésta se-
Con el paralel ismo se hacen combinaciones inge- ·
halle incluida en la forma métrica. Es el paralelismo-
niosísimas en que se imitan los cuartetos y tercetos, .etc.
como un balanceo de la idea en que cada pensamiento-
vuelve sobre sí ·mismo, es un flujo y reflujo en que las Mejor es la corrección manifiesta,
misma s olas repiten la embestida, es un . eco de las- que el amor escondido.
ideas propicio a la meditación, insinuante y persuasivo, Mejores son las heridas del que ama,
qúe se hace a veces po la repetición de la idea en el que los ósculos fraudulentos del que aborrece.
mismo sentido como vemos en el almo II: (Prov, XXVII 5-6). -
Por qué bramaron las gentes CAPITULO II
y los pueblos meditaron cosas vanas?
SÁLTERIO
Se pusieron en pie los reyes de la tierra
y se mancomunaron los príncipes El rey Saúl sufría una horrible melancolía, lo do-
contra el Señ6r minaba una tristeza desesperada, y el abatimiento de
y contra su Cristo. su alma llegaba hasta el frenesí, « le atormentaba un
Rompamos sus ataduras. espíritu malo por permisión del Señor, » a causa de
y sacudamos de nosotros su yugo. haberle intimad o Samuel en nombre de Dios que sería .
El que habita· en los cielos se burlará de ellos despojado de su reino por haberse ensoberbecido de-
y el Señor los escarnecerá. masiado con sus victorias sobre Naas, rey amonita Y
Entonces les hablará El en su ira sus triunfos sobre filisteos y amalecitas. Sus cortesa-
y los conturbará en su furor. nos y servido res se alarman, no encuentran remedio,
nadie hay capaz de mitigar los excesos de la melan-
Otras veces el paralelismo se hace por medio de colía y furor del rey; se consterna el palacio y no se
antítesis.
ve esperan za de calmarJo. Recuerda entonces alguno el
Los que abandonan la ley, alaban al impío, poder de la música, resuelven bu_scar a alguno que-
los que la guardan, se enardecen contra él. sepa de tal modo tocar el arpa, que su melodía domi- ·
Los hombres malos no piensan en el juicio ne al rey en su extrema turbación. Es ya conocido un
mas los que buscan al Señor, lo advierten todo joven de próxim a región y se espera· que su música
REVISTA DEL COLEGIO DEL ROSARIO APUNTES SOBRE LA POESIA HEBREA 347

distraiga y tal vez calme al rey. Van los comisionados su arpa y de generación én generación se oyen sus
reales hasta Belén a buscar a la familia de Isai tras notas en todos las pueblos, en todos los idiomas y en
el pastorcito de quien se dice que tiene una destreza todos los tiempos.
en tañer el arpa como no hay semejante en Israel, pru­ Más de treinta siglos há que este libro hace es­
dente en sus palabras, gallardo en su aspecto, bello en tremecer al mundo, porque están en il todos los senti­
s_u porte, con quien está el Señor. « Cuando los exce- mientos humanos: allí se sienten mejbr que en cual­
�sos de furor quitaban la razón a Saúl, tomaba David quier otra parte las ternuras del amor, los excesos de
el arpa y tañía con su mano, y Saúl recobraba la cal­ la ira, la amargura del arrepentimiento; allí está la
ma y quedaba bien» y las delicias de aquella música única alabanza digna de Dios, allí la oración rendida
al embargar su alma disipaban las sombras de la me­ y humilde, allí el vituperio y las más terribles execra­
lancolía. Ese canto embriagó después a Israel desde el ciones; allí el patriotismo más puro, la amenaza, el la­
trono real y hasta hoy llena de armonías al mundo. mento del arrepentido, las más estupendas profecías;
No haremos aquí sino rendir nuestro tributo de es el más divino de los poetas, el más humano de los
admiración al excelso vate de Sión, rey de Jerusalén y· 'libros divinos.
de la lírica. Si todas las edades han admirado las ga-
Los salmos de David son como el viento
·-las soberanas del profeta rey, por qué no hemos de Que apacible y sutil el campo orea,
tomar nosotros también el libro sagrado no sólo para Grana la mies y en melodiosas arpas
alabar a Dios, sino también para sentir la emoción de Los corpulentos árboles convierte,
sus poesías! Mas luégo fiero y desatado troncha
Ya Josefa con los comentadores hebreos, San Jeró­ Los más robustos troncos, las campiñas
�imo con los Santos Padres, Belarmino y mil otros Y los poblados tala, hincha los mares
explicaron su sentido litéral, sus alegorías, interpreta­ Revolviendo \as olas y el espacio
ron sus profecías y quitaron toda esperanza de agre­ Con sus bramidos espantosos llena.
También el canto del salterio enjuga
'
gar una palabra en su explicación o alabanza.
«David, dice San Jerónimo, es nuestro Simónides, El lloro acerbo, vierte en las heridas
Consoladores bálsar¡10s, conforta
nuestro Píndaro y Alceo y es Horacio • y Catulo y
Al débil, da vigor al oprimido
· Sereno.»
Y al enfermo salud. Mas ay, si estalla
Es David el más grande de los poetas líricos. En sus tremendas notas el enojo 1
Porque si los más bellos ingenios han logrado arran­ Ay, si el céfiro blando se trasforma
car a sus liras ecos de su corazón y han alegrado a En huracán desenfrenado! Entonces
otros con sus propias alegrías y han arrancado suspi­ Abate a los soberbios, aniquila
ros por su propio dolor y los han escuchado los aman­ La maldad orgullosa y hasta avienta
tes de la poesía, a veces una ciudad, una nación ;..Da­ El olvidado polvo de las tumbas 1
vid conmovió_ a su pueblo, encontró eco en todos los Oh canto de piedad y de castigo!
oyentes, hizo vibrar todos los corazones al unísono de Por tus sacros versículos parece
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Como que escuch,a el ánimo suspenso fecía, y 'refiere a su propia persona ya las ignominias
Rodar todo el estrépito del mundo:
.de la pasión, ya las glorias -de la resurrección.
Tronos que se desploman, muchedumbres
Por su forma son los salmos odas perfectas, himnos
Que arrastra la pasión, sordos rugidos
De la plebe sin Dios, desesperadas -d e co�te muy semejant.e al clásico. Con frecuencia se
Blasfemias, estertores de la muerte. ven en él los desórdenes líricos de Horacio y Píndaro,
Todo en el arpa del profeta vibra! pero en general en cada salmo desarrolla una idea o un
grupo de ideas que le dan perfecta unidad a pesar de
(Núñez de Arce). la locura de la imaginación oriental.
Es David el más perfecto lírico, porque vivió en Los ternas generales de la poesía son el hombre,
todas las condiciones humanas: fue pastor, palaciego y la naturaleza 'y Dios. David en estos tres campos se
rey; vivió en el campo, en la ciudad, en el templo, en muestra insuperable soberano de la armonía, incompa­
el ejército; saboreó las delicias de la tranquilidad y de rable derrochador de galas poéticas.
la gloria y las amarguras del temor y la d·eshonra • El corazón humano con sus grandezas y debilidá­
triunfó y fue derrotado; tuvo aduladores y servidore; -des .está tan abierto en los poemas del profeta que no
Y sufrió persecución de amigos y parientes. Por eso · ocultó secreto ni supo callar nada de cuanto se esconde
encontró en su salterio todas las cuerdas de todos los -en el fondo de nuestra conciencia, porque quien se lo
sentimientos. Es el poeta que usa mayor variedad de inspiraba no era otro que el autor de ese corazón tan
tonos: unas veces es su canto lúgu_bre y sombrío, como ·complicado y misterioso. Por eso nos oímos todos en
cuando describe la pasión, cuando se oyen los ayes ·los salmos, vemos en ellos nuestras almas. Allí están
lastimeros con que implora indulgencia por sus pro­ los ecos de nuestros sollozos, las expansiones de nues­
pias caídas; otras se viste de gloria como cuando can­ tra a1egria, el reproche de nuestras bajezas, la alabanza

• ta la epopeya de su pueblo o los triunfos del Salva­


dor; es solemne cuando alaba al justo, terrible cuando
de nuestras buenas obras. Para ver qué tan humano era
David basta recordar su amistad con Jonatás. « Acaeció
increpa al pueblo, cruel cuando maldice, tierno cuando que el alma de Jonatás se ligó estrechamente con el
consuela, grande y sublime. siempre. alma de David e hicieron alianza, porque -se amaban
. No es poeta personal como los demás líricos, es como a su propia: alma. » Esta amistad obligó a Jonatás
el cc:irazón de la humanidad el que vibra en su instru­ a darle sus ,vestidos y armas, a salvarle la vida de las
mento, cada hombre encuentra allí toda su alma, todos cóleras de su padre, e hizo que a la muerte de Jonatás
los sentimientos están retratados. prorrumpiera David en aquel himno fúnebre en que
Además, a la inspiración humana que lo hizo poeta muestra su corazón destrozado y su. alma lastimada, y
se unió la divina que lo hizo profeta, y hasta tánto Jleg¿ mezcla sus sentimientos personales con los pat-rióticos
que parece. que él mismo no acertara a distinguir cuándo y la virtud lo eleva al heroísmo de confundir en un
cantaba como hombre y cuándo estaba revelando los­ mismo lamento a su amigo con su perseguidor, al que
arcanos de la divinidad, y mezcla la. oración con la pro-- lo buscó para matarlo con el que siempre · lo salvó:
«Considera, Israel, que tus ínclitos murieron sobre los
350 REVISTA DEL COLEGIO DÜ ROSARIO APUNTES SOBRE LA POESIA HEBREA 35L

montes, no déis la nueva en Geth, ni lo publiquéis en El sentimiento religioso impregnaba su admiración


las plazas de Ascalón, · porque no se alegren las hijas a la naturaleza y en todas las cosas veía la �aria de
de los filisteos, ni hagan fiestas las hijas de los incir­ Dios, por eso exclama con frecuencia: « Alabad al Señor
cuncisos. Montes de Gelboé, ni rocío, ni lluvia vengan, moradores del cielo; alabad al Sefior creaturas de la
sobre vosotros; porque allí fue abatido el escudo de los tierra. »
valientes; Saúl y Jonatás amables y de buen parecer en Dios en David no es uri sér ficticio como los mi­
su vida, en la muerte tampoco se separaron: más ligeros. tológicos, ni el terrible Creador que en su felicidad no
que las águilas, más fuertes que leones. Duélome por tí, alcanza a ver a los mortales, ni piensa como aquellos
oh hermano mío Jonatás, hermoso sobremanera, y ama­ de sus padres que decían a Moisé.s al pie del Sinaí:
ble sobre el amor de las muje_res, como una madre ama « háblanos tú no nos hable el Señor no sea que mura­
a su hijo único, así te amaba yo. 1 Cómo cayeron los mos.» Dios para David es su ámparo, su padre, su
fuertes y. perecieron las armas guerreras!» consuelo, su confidente, aun de sus· debilidades y caídas,
Desde la terraza de su palacio contemplaba el rey su defensor, su apoyo.
poeta el espectáculo de un hermoso panorama: la ciudad Al Mesías lo vio con toda claridad, por eso cuenta
sagrada al pie de la ciudadela de Sión, con los comien­ su pasión paso a paso, pregona su di_vinid.ad, su regia,
zos Y preparativos para la construcción del único templo potestad, sus conquistas ....
que en la tierra se levantaría al Dios Verdadero; a lo Alcanza también a divisar los fulgores de la Iglesia,..
lejos las montafias que rodeaban la ciudad y le servían ve que:
de muro, y el cielo limpio con toda la magnificencia de·
Florecerá en su tiempo el poderío
su doiel azul y por la noche: Del bien, y una pujanza
Los cielos dan pregones de tu gloria, De paz, que durará no un siglo sólo,
Anuncia el estrellado tus proezas, Su reino rico alcanza
Los días te componen larga historia, De mar a mar, y de uno a otro polo.
Las noches manifiestan tus grandezas. Y puesto ante él postrado
No hay habla, ni lenguaje tan diverso, El negro montesino, el enemigo,
Que a aquesta voz del cielo no dé oído, El polvo besa hollado,
Vuela esta voz por todo el universo Los reyes de la Ínar con pecho amigo,
Su són de polo a polo ha discurrido. Y Grecia y los romanos
Allí hiciste al sol rica morada, Con los isleños todos, los sabeos,
Allí el garrido esposo y bello mora, Los árabes cercanos
Lozano y valeroso su jornada Tributo le darán, y los deseos
Comienza y corre y pasa en breve hora. De todos los vivientes
Traspasa de una a la otra parte A sf convertirá, las más lucidas
El cielo, y con su rayo.a todos mira. Coronas de las gentes
Todas adorarán ante El caídas.
(Trad. de Fray L. de L.) (Trad. de F. l. de L.)
.. 352 REVISTA DEL COLEGIO DEL ROSARIO APUNTES SOBRE LA POESIA HEBREA 353

Uno de los rasgos más sublimes de la poesía uni­ Dios, el depositario de la ley, llenó el universo con el
versal es el himno que cantó al Señor, cuando le em-. eco de sus maldades; desde el punto de vista político,
bargó la alegría de ver las muchas ofrendas que el jamás llorarán lo suficiente sus ojos la total desaparición
pueblo traía para la construcción del templo: de una patria; y desde el puramente humano, lcómo··
«Bendito eres Señor Dios de Israel nuestro padre comparar con nada las alternativas de gloria e infortu­
de la una a la otra eternidad. Tuya es Señor la gran­ .nio, de piedad y apostaiía, de bendiciones y castigos
deza, y el poder, y la gloria y la victoria: Y a Ti la divinos?
alabanza: porque todas las cosas que hay en el cielo y Y así pocas literaturas que hayan resuelto tan bien
en la tierra, tuyas son. Tuyo Señor, el reino, y Tú eres -el problema de las relaciones entre lo bello y lo triste,
sobre todos los príncipes. Tuyas las riquezas y tuya e� ninguna que tenga representantes tan excelsos de la
la gloria: Tú lo dominas todo, en tus manos está la elegía, ninguna· que haya sabido acordar más la des­
virtud y el poder: en tu mano la grandeza y el imperio armonía del sufrimiento con la armonía exigida por el
· de todas las cosas. Por esto pues, Señor Dios nuéstro, .arte; ninguna que se haya servido como ella de las im­
.te confesamos a Tí y alabamos tu nombre ínclito. » precaciones violentas de la desesperación para manifes­
.tar la belleza. Y eso porque en lo antiguo ningún pue­
CAPITULO III
blo como ése comprendió el sentido prnfundo del dolor;
ELEGÍA SAGRADA ninguno como él vio la esperanza al través dtl castigo;
ninguno como él sintió la grandeza del hombre en pre­
La Biblia que guarda la colección íntegra de la li­
sencia de los sufrimientos; ninguno vio la vanidad del
teratura hebrea, si en todos los géneros sobresale, en
tiempo enfrente de la eternidad. Por eso nadie podrá
ninguno como en la oda sagrada y en la elegía_. por
·superar el sentimiento y profundidad de esos llantos
razones clarísimas: el pueblo escogido, intermediario
hebreos, comparables tan sólo con la magnitud de sus
entré Dios y la hum<;1nidad, objeto como ninguno de las
.catástrofes.
justicias y misericordias del Señor, en amistad íntima
No entraremos a hacer un análisis del género ele�
con él, lcó:no no aprendería a cantar el agradecimiento
_gíaco de la Biblia, pues basta hójear esos poemas para
a su benefactor, qué cuerdas no tendría para implorar
comprender la grandeza de sus artistas, y se siente uno
sus favores y cómo habría de llorar los pecados con que
incapaz 'de criticar esa poesía del dolor en un pueblo
lo ofendiera?
de caracteres tan excepcionales, que cuenta en su his­
Y en cuanto a la elegía, ninguna que cante más
toria la historia de Dios y cuyas tragedias tienen ecos
· dolorosamente, si su desgracia es la más grande de las
como los truenos del Sinaí y la rotura del velo del
desgracias y ante su tragedia son nada las tragedias
todas ·de los hombres. Desde cualquier punto de vista santuario.
Plagada está ta Escritura de llantos y de quejas.
que se contemple su situación sólo se verá la serie de
No mencionaremos a Job, el gentil, el que conoció
inmensos cataclismos. Desde el punto de vista religioso,
iodos los dolores, el que más sabe de soledad, aquel
·.como pueblo teocrático, el amigo de Dios crucificó a su
3
354 REVISTA DEL COLEGIO DEL ROSARIO APUNTES SOBRE LA POESIA HEBREA 355

-de cuyas maldiciones puede · decirse verdaderamente; Y pasemos al triste por excelencia, Jeremías. En sus
por aquí ha pasado el dedo de Dios. cuerdas se oye el quejido de los niños de Jerusalén y
1
Callemos el nombre del rey sabio el que saboreó /, el derrumbamiento de sus murallas, y su templo; la voz
· todos los placeres y encontró sólo vanidad de vanida­ del poeta que lamenta sus desgracias personales, ahogada
des; el que amontonó riquezas y las halló vanidad de­ por la voz del patriota que ruge ante las de su nación
vanidades; el que coleccionó glorias y las llamó vani-­ y de su pueblo; esos acordes dan la impresión de la
dad de vanidades; el que alcanzó sabiduría y le dio et absoluta soledad, del absoluto abandono, al través de·
· nombre de vanidad de vanidades; el que coleccionó."' ellas alcanzan a oírse lds carcajadas irónicas de los
amores y los catalogó como vanidad de vanidades; él - enemigos; _allí asistimos a las luchas de un alma que­
c- aracterizó la desoladora monotonía de los tiempos y· Hora los pecados de su patria, sonríe a la esperanza
el horrible balanceo de los siglos con Ta atrevida frase-· en medio de la desesperación; invoca la misericordia de
de: «Qué es lo que fue? Lo mism.9 que será. » su padre· y maldice también en nombre de la justicia
Dejemos a David cuyos ecos resuenan todavía de su Dios y Señor.
cuando llora la desgracia de su pueblo, la· traición de En los dos primeros capítulos abarca el desastre
sus amigos o la ruina de su propia alma en los sal­ completo de Jerusalén; .redúcese en el tercero a cantar
mos penitenciales (1). su propio corazón; como temeroso de no haber comple­
tado el 'cuadro de horrores que se propuso, vuelve en el
(1) Transcribimos un ensayo de traducción del hebreo a ver­
so hexá.metro latino de una de las elegías del salterio (salmo 136). cuarto a prodigar las notas sombrías, para concluir en el
quintq con una plegaria de suprema humildad y de su­
Hebraei-Dum �omibus extorres, languemus peregrini
prema confianza, que suaviza el amargor de las quejas,
Et fracti bello, fessique via, patria aegre
Depulsi; adest miseranda Sionis imago porque al través de las lágrimas vislumbra la posibilidad
Mentibus, tecta jacentia, disjectae rriisere arces, del rem�dio, y que es como el coro que en la tragedia
Jnque tuis, Solyme, ipsius tumufata ruinis! griega cantaba después_ de la catástrofe alguna frase de.
Nam fle11do turbavimus extera flumina moesti consuelo.
Quibus vix licet infandum lugere dolorem,
Aflicti vitam in tenebris luctuque trahendam Quam laudem, et vestros umquam obliviscar honores,
Urbis excitium sacrae, magnosque labores. , Laetitiae prima nobis esto jugis origo.
. Plectra silent, ramis salicum pendetia. Fides,. At tu, Omnipotens, qui numine régibus mutas,
Tinnula vox litui, nabliique, silentia cistra Sorte� ac gentibus, hoc facinus punire memento,
Organaque, exulibus, muta esto: Barbarus adest Ora retunde exosa,
Víctor incusans captae suspiria turbae, Chaldaei Citi ! Evertite muros
Jubens de modulis sacris ipsis promere carmen:­ Jam portas excindite: vos occumbite leto!
Chaldaei-lnstaurate melas, quo laetabamini templo. Ílebraei-Infelix, Bab-ylon vastatrix, crimina salves,
Htraei-Ergone divinum terra audiet impia carmem? Quae mala tu nobis egisti repetet Ultor.
Me prius arguta desuetum psallere dextra, llle beatus, qui puerorum capita trudat
Dulcis amor citharae et festivi gloria cantus Saxis :" has aequa clades mercede rependens.
Deficiet, gelidoque haerebit lingua palato,
356 REVISTA DEL COLEGIO DEL ROSARIO APUNTES SOBRE LA POESIA HEBREA 357
I
CAPITULO IV Musa, mihi causas memora. David rn cambio decía:
« Cantadle al Señor un canto nuevo» o « Alabad todos
COMPARACIÓN CON LA LITERATURA CLÁSICA
al Seflor.» «Abrid, Seflor, mis labios, y cantará mi boca
. No tratamos de armonizar ni amalgamar cosas que tus alabanzas.»
no tienen contacto, que no se someten una a otra. La li- Echemos una ojeada sobre los diversos géneros;
1eratura clásica y la bíblica son dos reinas independientes, Las epopeyas clásicas primitivas son el exponente
de los idea les de un pueblo niño; las literarias son
..ambas soberanas, vestidas de gloria, tienen su imperio
esfuerzos· de artificio; en ambas se encuentra el mérito
en las letras y por servidora a la belleza, pero la una
de acomodarse a· los sentimientos del pueblo y expre­
viene del cielo, la otra nace de la razón, la una habla
sar sus ideas. Moisés en cambio cuenta, no lo.que in­
·un lenguaje primitivo, otra el culto idioma ático. Pero teresa a una nación sino la historia del mundo, su
·es bueno al estudiar las letras divinas volver- los ojos protagonista no es un héroe fabuloso, sino Dios, no se
.a las humanas y ver en qué se separan y cómo se acomoda a ninguna clase de ideas sino legisla y man­
.diferencian. da, y su ley- es la natural y divina.
La literatura clásica nace de la razón que idealiza El mayor sabio de Israel, y el supremo exponente­
'la naturaleza, sin dejar que la imaginación o el senti­ de la sabiduría gentílica, alabaron la virtud en térmi­
nos tan parecidos que parece que Aristóteles en su
·miento pasen por encima de la verdad, «el arte embe­
"Jleció la verdad, y la verdad seflaló la meta al arte. ,. himno a Hermías no hiciera sino un resumen de lo qu-<!
La literatura que estudiamos es como un brote Salomón enseña:
�spontáneo de la naturaleza, que · no conoce el conven­ 'AQEtá, Jtolúµox{}i, yÉveL Boord<p, ·
cionalismo de las reglas ni la moderación que los grie­ {}waµa MALITTOV �(<¡?,
gos tuvieron hasta en sus entusiasmos líricos. No acierta o<ii; :n:ÉQL, JtaQ{}evE, µoQ<pai;.
<1 disHnguir los géneros: no se sabe si Moisés escribió xal {}avei:v �at.wi:o,; ilv 'EAAá�L JtÓt;µoi;
'historia o epopeya, si Ester o Judith son monografías, xm :ri:ovovi; tAijvm µett.EQovi; axu�tavtui;·
.cuadros dramáticos o poemas patrióticos. tofov ilm · <pQEVa BetAAEL<;
El clasicismo es fruto de la sumisión a las leyes :rtUQ:rtÓv ili; <Wavatov xovao'Ü te XQEUJOW
retóricas; la literatura de Israel no se acomoda a nin­
.guna clase de reglas sino las funda, es un brote natu­
----
(1)
xm yovi,wv µa1.axavy1ít0Lo -O' Y:ri:vov (1).
Oh virtud I tan preciada y tan costosa
ral, una fusión de la poesía humana c_on la inspiración Al linage de •míseros mortales,
-divina, que forman un confuso torrente. Atracción del vivir la más hermosa,
Por ti, oh Virgen de formas divinales,
Los móviles y los fines de ambas son opuestos.
Mil penas arrastrar, hasta la muerte,
Ambas nacen de la religión, pero una de la mitología Es en la Grecia codiciable suerte.
;cteacta por los griegos, la otra de la primitiva religión
· Cómo siembras en lo íntimo del pecho
-patriarcal, la una pretende enseñar al pueblo a cumplir Rico fruto inmortal, mejor que el oro
Ja ley, la otra sólo busca las expansiones líricas o el Y el sueño blando y el paterno techo .
.aplauso popular. Por eso los .paganos comenzaban: (Trad. del Dr. Renjifo),.

358 REVISTA DEL COLEGIO DEL ROSARIO APUNTES SOBRE LA POESIA HEBREA 359
\

Que no es i¡ino lo que hab_ían dicho los libros -done, porque a donde quiera que fueres iré, y donde
sapienciales: es infinito el número de los necios. Ante­ morares, yo también moraré. Tu pueblo será mi pueblo;
puse la sabiduría (que es lo que Aristóteles llama vir­ iu Dios será mi Dios. En la tierra que te recibiere en
tud) a los reinos y tronos y juzgué que las riquezas tu muer"te en esa moriré y allí tendré el lugar :de mi
nada son en comparación de ella; ni comparé con ella sepulcro. »
las piedras preciosas: porque todo el oro en su com­ Catulo y después Ovidio lograron cristalizar su�
paración es un poco de arena y la plata es como el <iolores en las joyas de sus elegías, de modo que al
lodo. La amé más que la salud y la hermosura, y pro­ través de los tiempos y a pesar de no participar de las


/
puse tenerla por luz: porque es inextinguible su res­ desgracias del poeta, conmueven nuestra alma y nos
plandor .... es la raíz y fuente de inmortalidad. sentimos agobiados por la amargura de que impregna­
El interés dramático de Sófocles, Plauto o Virgilio ron sus escritos para eternizar sus lamentos. Es verda­
no admite comparación con las sencillas narra€iones de deramente sublime la poesía puesta al servicio de una
la historia de José, de Judith o de Ester: uno de los pena. Pero más lúgubres todavía resuenan los lamentos
rasgos más patéticos de la literatura clásica es la des­ de Jeremías sobre las ruinas de la ciudad sagrada, son
_pedida de Hector y Andrómaca: más enérgicas sus frases, es su dolor más sublime.
Ezequiel se levanta como una figura fatídica, que increpa
"iimµov(r¡ , µ1í µo( -n' A(r¡ v a:n:ax.t�Eo -&uµip· y amenaza y Iuégo canta las elegías de· las desgracias
ov yáQ r� µ'{ntÉQ afoav &vr¡Q "Atlh :n:QO°La'lj!EL' que anuncia; e� �us terríficas visi-ones reprende y llora,
'AAA', Et� otxov 'toiícra, rá o' &úrfí� EQYª xóµt�E, amenaza y se duele', pues unas veces habla en nombre
í.crróv r'�Aaxárr¡v rE, xm &µqn:n:oAOL<JL xÉAEVE de Dios y otras en nombre· de su pueblo.
EQYOV E:71:0t.X,€<Jl'tar :n:ÓAEµo� 6'av6Q€<J<JL µEA�<J€L Job no se limita a lo que· pudieramos llamar simpl�
mfow, eµot 61, µáAtora, rot 'IA(cp Eyy1,yáacnv" (1) elegía; llega a decir:
Comparémosla con el siguiente eP.isodio del libro Este morir viviendo noche y día,
de Ruth: «Vuélvete, hija mía, dice Noemí a Ruth- al Ansf me enfada ya, que sin respeto
querer despedirse de ella, vuélve a tu casa y a tu pue­ Las riendas soltaré a la lengua mía.
blo: :porque yo estoy ya acabada por la vejez. No te Diré mis amarguras en secreto;
vengas conmigo porque tu angustia aumenta la mía y Señor ¿ condenarás a un atrevido,
la mano del Señor está levantada contra mí. Y Ruth Ni me dirás razón de aqueste aprieto?
respondió: No te me opongas más para que te aban- ¿ Es bueno ante tus ojos oprimido
- Tener con violencia al -que es tu hechura
(1) Desgraciada, no se entristezca demasiado tu corazón
por mí; nadie puede precipitarme en la muerte antes de la hora Y dar calor al malo a su partido?
señalada por el destino. Vuélve a tu casa, oc_úpate ·en tus quehace­ ¿ Tus ojos son de carne por ventura.
res, tóma el tejido y la rueca y vigila a tus sirvientas, que la Tu vista cual la humana? tu partido
guerra es el oficio de los varones que hemos nacido en llión, y Tu sér es como el sér de la criatura?
p rincipalrnente el mio .

360 REVISTA DEL COLEGIO DEL ROSARIO DOS SONETOS 36f;

Y Dios le dijo que no había pecado: era tan gran­ DOS SONETOS
de su dolor 1
En la po esía bucólica la difer encia es mayor, la·
comparación no se puede hacer sino por antagonismo; LA FLOR DE MAYO
la clásica es pura ficción, la bíblica és la misma espon­ i Santa María I tu primer momento,
taneidad; la una es inverosímil porque unos pastores no Momento fue d e santidad: ninguna
saben decir lo que Virgilio pone en sus églogas, la otra Mancha hay en tí: con victorioso acento
Reina ya el cielo te arrulló en la cuna.
embarga el alma con las d elicias d el aroma de los cam­ ...
pos sazonado con los idilios más suaves que los de Cuanto hay excelso, cuanto amable, aúna.
Teócrito y más sencillos que los de Catulo o Tibulo .. Tu sér; tu imagen al humano intento
Vence; y reinas por palio el firmamento,
Por veste el sol, bajo los pies la luna.
A la d erecha del trono de J esucristo vio Salom·ón Capullo abierto en la mejor mañana-;
a una reina vestida de oro y variedad, rodeada de her­ Pompa y fragancia del eterno día;
mosura y belle za y adornada de riqueza y p edrería; Salud y gloria de la estirpe humana:
cuya belleza enamoró al R ey de la gloria. Esta Reina · i Cuán bien entre el incienso y la ar:nonia ·
esposa del Eterno, según los santos Padres es la Igle­ Floreces, d e las florfS soberana
sia, pero está todavía p eregrinando. Jesucristo la dejó Y flor de la creación, santa María!:
porque se fue a recibir su r eino. Y la Esposa le ma;­
II
da una . em bajada al R ey de los cielos y para esto co­
misiona a sus representantes oficiales que son los sa­ AMOR Y GLORIA (l)
cerdotes y pone en su boca las palabras d e la poe­ (De fohn Keats) . ..
sía hebrea.
Cuando imagino, a veces, ver trunca mi- existencia
JOSE EUSEBIO RICAURTE; Pbro. Sin que m is pensamientos recoja fiel mi pluma;
Doctor en filosofía y letras del Colegio. Antes· que la mies rica de acumulada ciencia
Cosechen cien volúmenes en rebosante sum a;

Cuando ante la leyenda, de luz y sombra arcano,


Que la alta noche escribe con símbolos de estrellas,

K.
Pienso que morir puedo sin que f eliz mi. mano

-•:,:•·
D escifre el gran secre to con que P,alpitan ellas;

(1) Trapucción libérrima hecha sobre el• texto de la colec-­


ción Pocket anthologies N.º 1.-1he hundred ·best poems (lyrica/)..'
in the Ef1fliSh Language. 0/asgoiv, London, 1.904,-p. 59, ·45.-La .
poesía inglesa lleva sólo el titulo genérico sonnet; el que aquí ,
I .se pone es del traductor. -N. del T:.

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