La Maldicion Del Mohan
La Maldicion Del Mohan
La Maldicion Del Mohan
Pocos son los que escuchan al viento, pues su lengua está casi olvidada.
Apenas sienten la caricia de la brisa o el golpe de la ráfaga.
Pero yo lo escucho y cuando me cuenta esa historia, brama de rabia.
Porque es la historia de la arrogancia y la traición a todo cuanto se ama.
El cielo, el rio en armonía danzaban, otorgando a sus hijos los dones que solo un padre da.
Anduvieron por la tierra, cazando y danzando, pero también guerreando.
La sangre se volvió ofrenda y los guerreros se inmortalizaron en cantos.
Entre ellos el más fiero fue mahun, de todos el mas amado por su pueblo.
Mahun hijo del rio le llamaban, pues fue bendecido para que sus aguas no lo ahogaran.
Mahun hijo del cielo, pues los días y las noches no hacían mella en su cuerpo.
Mahun hijo de la tierra, pues hacia la guerra y traía dicha a su pueblo.
Mahun azote de los guerreros, pues por montones los envió con sus ancestros.
Como fue de ilhen mitad caimán por la pasión es, a ti mahun la pasión te enloqueció.
Cien vírgenes no fueron suficientes, pues quería que tu semilla fuera lo único que
germinara.
De nada valió el amor de tu pueblo, ni la bendición del cielo y el rio.
Enloquecido de pasión tomaste todas las mujeres que tu hambre quería.
Miles las lágrimas tu locura provocaron, que la tierra misma se sintió violada.
Busco consuelo en el rio y en el cielo, pero nada pudo consolarla.
Mas lagrimas hiciste que cayeran sobre ella y el amor de los mahues se tornó en rabia.
Pues los llevaste a la grandeza y después los arrastraste a la vergüenza.