La Importancia de Evaluar en El Desarrollo Artístico de Niños de Preescolar A Través Del Dibujo
La Importancia de Evaluar en El Desarrollo Artístico de Niños de Preescolar A Través Del Dibujo
La Importancia de Evaluar en El Desarrollo Artístico de Niños de Preescolar A Través Del Dibujo
del Dibujo
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Evaluación Educativa
Introducción
La rama del dibujo en el arte infantil emerge como una manifestación única y reveladora del
mundo interior de los niños. Es a través de esta expresión artística que los pequeños exploran,
comunican y dan forma a sus pensamientos y emociones de manera visual. Desde los
primeros trazos hasta las representaciones más complejas, el dibujo en la infancia se erige
como una herramienta esencial para el desarrollo integral de los niños, abriendo ventanas a
su creatividad, psicomotricidad fina, comunicación y comprensión del entorno que les rodea.
En el contexto del arte del dibujo, la evaluación desempeña un papel esencial en el proceso
educativo de los niños, actuando como un medio valioso para comprender y fomentar su
desarrollo artístico. La evaluación en esta disciplina no se limita a la mera calificación de
resultados finales; más bien, se convierte en una herramienta dinámica que permite a los
educadores explorar las distintas dimensiones del aprendizaje artístico de los niños. Al
centrarse en aspectos como la creatividad, la expresión emocional y las habilidades técnicas.
La evaluación en el arte del dibujo busca no solo medir el rendimiento, sino también nutrir y
orientar el crecimiento artístico individual.
Desde la perspectiva de Jean Piaget, la etapa pre operacional (2-7 años) se destaca como el
periodo en el que los niños inician su participación en el juego simbólico, utilizando el dibujo
como una manifestación de su pensamiento y una representación mental de la realidad
circundante. La evaluación en este contexto se convierte en una herramienta esencial para
comprender la evolución del desarrollo cognitivo en esta etapa temprana.
A medida que los niños avanzan en su desarrollo artístico, las teorías de Lowenfeld y
Malchiodi señalan la existencia de diferentes estados, siendo la etapa preescolar (3-5 años)
especialmente reveladora. En esta fase, los niños comienzan a expresar conscientemente
formas que tienen relación con su entorno, organizando así sus percepciones y conexiones
con el mundo. Evaluar ayuda a proporciona una visión detallada de cómo los niños
estructuran su comprensión del entorno a través del dibujo.
El dibujo no solo actúa como una expresión visual, sino también como un lenguaje de
comunicación esencial en el desarrollo infantil, según Chang y Torres. La metodología de
"Aproximación del Mosaico" respalda esta idea al utilizar herramientas visuales para
reflexionar sobre las perspectivas de los niños. La evaluación se vuelve esencial para
comprender cómo los niños utilizan el dibujo como un medio para expresar ideas, emociones
y pensamientos de manera única.
En el plano emocional, Nieto y MacDonald destacan que el dibujo no solo representa formas
y colores, sino que también es una manifestación de emociones y personalidad en diversos
niveles: gesto gráfico, valor expresivo, valor proyectivo y valor narrativo. Al evaluar en estos
planos ofrece una oportunidad única para identificar y comprender el estado afectivo y las
emociones de los niños en situaciones específicas.
La utilidad del dibujo no solo sirve para evaluar en el curso de artística, sino también en la
evaluación psicológica, como se señala desde los años 80, subraya la capacidad de esta
expresión artística para proporcionar información valiosa sobre las dificultades emocionales
de los niños. Evaluar a través del dibujo se convierte en un medio efectivo para analizar el
desarrollo psicológico y el impacto de experiencias particulares, como evidenciar problemas
fuera y dentro del aula o demostrar emociones de lo que presenta en su entorno.
La evaluación en educación artística ofrece una mirada única y valiosa para la mejora
continua del aprendizaje. Según Eisner (1995), la calidad artística se construye mediante
valoraciones cualitativas, desafiando la evaluación objetiva tradicional. Antes, la creatividad
se centraba en la autoexpresión, pero la educación artística cuestionó la evaluación final
frente al proceso creativo. Este enfoque divergente ha llevado a respuestas innovadoras en la
evaluación, destacando la importancia de la estética y juicios artísticos.
Autores como Aspin (1986) desmitifican la distinción entre ciencias objetivas y subjetivas,
cuando habla de la evaluación en las distintas ramas del arte. Por otro lado, Gardner (1995)
enfatiza la evaluación como lo son los exámenes, abogando por métodos naturales y variados
para medir la inteligencia artística y adaptarse a la diversidad. La evaluación formativa, según
Jorba y Sanmartí (1993), debe integrarse en la vida cotidiana del estudiante, proporcionando
retroalimentación útil para guiar el aprendizaje.
En la educación artística, la evaluación no solo juzga el producto final, sino que también
abraza la subjetividad inherente al proceso creativo. Es esencial considerar la calidad estética,
las diferencias individuales y proporcionar herramientas que beneficien al estudiante, según
los principios de Gardner (1995). La evaluación en este contexto se convierte en una
experiencia de aprendizaje interesante y motivadora, permitiendo que los estudiantes
expresen su creatividad y desarrollen habilidades artísticas de manera única y personal. Es
decir, la evaluación en educación artística no solo mide el desempeño, sino que también
impulsa la exploración creativa y el crecimiento personal en un entorno de aprendizaje
estimulante.
Existen varios aspectos a evaluar en la educación artística a través del dibujo en niños de
preescolar como lo son, por ejemplo:
Más adelante en el libro de la profesora Luz Stella García (2012) nos menciona a que: “las
actividades de evaluación deberían tener como finalidad principal favorecer este proceso de
regulación, de manera que los propios estudiantes puedan detectar sus dificultades y
dispongan de estrategias e instrumentos para superarlas” (Sanmarti, 2008, p.10). que busca
como objetivo que los estudiantes sean capaces de identificar y abordar sus dificultades
mediante el desarrollo de estrategias y la aplicación de herramientas aprendidas a lo largo del
proceso educativo.
Conclusión
La evaluación del desarrollo artístico a través del dibujo en niños de preescolar se revela
como un componente esencial para comprender y respaldar su crecimiento integral. Cuando
observamos y analizamos las creaciones artísticas de los niños, estamos abriendo una ventana
única hacia su mundo interior. Estos dibujos no son simplemente trazos en papel; son
manifestaciones de emociones, pensamientos y experiencias que los niños están procesando
a medida que exploran su entorno.
Puleo Rojas, Elda Marisol. (2012). La Evolución del Dibujo Infantil. Una Mirada desde el
Contexto Socio- cultural Merideño. Educere, pág. 157-170.
Luz Stella García Carrillo. (2012). La evaluación escolar: Una práctica cotidiana que va
perdiendo el año. Ibagué: Sello Editorial Universidad del Tolima, 2012.