Este documento describe la experiencia de un estudiante en su primer semestre de la universidad. El estudiante habla de varios maestros que tuvo una buena impresión, pero se enfoca en un maestro ciego llamado Gregorio Ríos. El estudiante admiró cómo Gregorio Ríos puede enseñar de manera efectiva a pesar de su ceguera y cómo ha superado los obstáculos en su vida para seguir sus sueños. El estudiante aprendió a no darse por vencido y a luchar por sus propios sueños de la dedicación
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Este documento describe la experiencia de un estudiante en su primer semestre de la universidad. El estudiante habla de varios maestros que tuvo una buena impresión, pero se enfoca en un maestro ciego llamado Gregorio Ríos. El estudiante admiró cómo Gregorio Ríos puede enseñar de manera efectiva a pesar de su ceguera y cómo ha superado los obstáculos en su vida para seguir sus sueños. El estudiante aprendió a no darse por vencido y a luchar por sus propios sueños de la dedicación
Este documento describe la experiencia de un estudiante en su primer semestre de la universidad. El estudiante habla de varios maestros que tuvo una buena impresión, pero se enfoca en un maestro ciego llamado Gregorio Ríos. El estudiante admiró cómo Gregorio Ríos puede enseñar de manera efectiva a pesar de su ceguera y cómo ha superado los obstáculos en su vida para seguir sus sueños. El estudiante aprendió a no darse por vencido y a luchar por sus propios sueños de la dedicación
Este documento describe la experiencia de un estudiante en su primer semestre de la universidad. El estudiante habla de varios maestros que tuvo una buena impresión, pero se enfoca en un maestro ciego llamado Gregorio Ríos. El estudiante admiró cómo Gregorio Ríos puede enseñar de manera efectiva a pesar de su ceguera y cómo ha superado los obstáculos en su vida para seguir sus sueños. El estudiante aprendió a no darse por vencido y a luchar por sus propios sueños de la dedicación
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TRABAJO FINAL
PRESENTADO POR: LAURA MILEN BARRERA SIERRA
MATERIA: COMPRENCION Y PRODUCCION DE TEXTOS
SE ENTREGA A: GREGORIO RIOS
UNIVERSIDAD PEDAGOGICA NACIONAL
FACULTAD DE EDUCACION LICENCIATURA EN EDUCACION INFANTIL BOGOTÁ 2015 MI MAESTRO COMO EJEMPLO Tras el estrés del último año de bachillerato, los nervios de la selectividad y el relax que provoca conocer que he aprobado el año escolar, llega uno de los momentos que marcarán mi vida: el primer semestre en la Universidad. El inicio de una etapa que recordare para siempre, porque ser universitario implica muchos cambios y sobre todo uno que afecta de manera muy personal: comenzar a adquirir poco a poco más responsabilidades y madurar. El mundo tiende a unificar conceptos para optimizar los recursos que día a día son más escasos; En este corto tiempo que ha pasado en mi carrera como estudiante de Licenciatura en educación infantil, ha despertado en mí la capacidad de aplicar y socializar ideas. No hay caminos cerrados, solo puertas que abrir, y en estos momentos he abierto una muy grande que me brinda la posibilidad de abrir miles. Sin duda ésta es una de las experiencias más enriquecedoras en la vida como estudiante, ya que el crecimiento que se da a través de las diferentes clases es un desarrollo y crecimiento no solo intelectual, sino también personal y emocional, puesto que la visión del mundo y las percepciones mentales cambian al tener contacto con nuevas personas y sin duda los ideales maduran y son ahora mucho mayores. En esta crónica hablare de mi experiencia en este primer semestre universitario y mi punto de enfoque serán los maestros pero hay uno en particular por el que en verdad siento admiración y mucho respeto, estas palabras no las digo para que él me ayude con la nota de la materia las digo porque en verdad son palabras que él se merece como cualquier otra persona que quiera salir adelante como él. Empezare contando como lo conocí. Llego el mes de septiembre, no recuerdo que fecha era, pero sí que fue un martes, ya que tengo clase con él todos los martes. Mi primer día de clase con el profesor de textos al entrar a el salón me tropecé con él, yo no sabía que mi maestro era ciego, al tropezarme con él me dio mucha pena pero lo único que pude hacer al instante fue pedir disculpas, tome un puesto y me senté. Al finalizar la clase, no tenía más tema del que hablar con mi compañera sino de la vergüenza que me dio al tropezarme con mi maestro de textos, pero a la vez le repetía a ella, que ese maestro era ciego que debía a ver tenido más cuidado a la hora de haber entrado al salón . Fueron pasando las clases y empecé a sentir más admiración por esa persona y mucho respeto. En mi casa le contaba a mi mamá como una persona ciega como él es capaz de salir adelante y que no se ha dejado caer por más obstáculos que le pongan en su camino, Quisiera encontrarme con más personas como él y seguir aprendiendo de como ellos ven el mundo. A medida que me familiarizaba más con la universidad veía muchas más personas ciegas donde mi admiración y respeto hacia ellos crecía, mi emoción por llegar a cada clase era evidente, yo sabía que no participaría en clase, pero ver como este maestro contaba o realizaba su clase era lo mejor, las clase con el son excelentes hay muchas risas donde también hay mucho regaños por no esforzamos en clase. Él es una persona que a simple vista se ve malgeniado o de un carácter agresivo, o esa fue mi primera impresión del el, pero juzgar por las apariencias es malo, siempre nos engañamos; Él es lo contrario a una persona malgeniada es una persona alegre que contagia fácilmente su alegría. Recuerdo no hace mucho que nos dejó una tarea, era llevar preguntas para él, donde por mi parte me goce mucho esa clase ya que sentí como él nos contaba un poco más de su experiencia como persona ciega. Hubo preguntas buenas, otras chistosas, y otras donde el de pronto no sabía cómo responder. Admiro mucho a este profesor ya que habemos personas, me incluyo, que nos quejamos por que alguna parte de nuestro cuerpo está mal o simplemente nos sentimos inseguros de nosotros mismos. Conocer a este maestro me hizo abrir los ojos y quererme a mí misma, me di cuenta que si él vive feliz sin poder ver la luz yo tengo que aprender a vivir tal y como soy. Para mi esta es una experiencia única ya que nunca en mi vida había compartido o trabajado con una persona ciega, esta es una experiencia enriquecedora gracias a él y a otras personas ciegas que he visto en la universidad. Aprendí a luchar por mis sueños, si ellos pudieron muchos de nosotros también. En la universidad surgieron mas experiencias con otros maestros, maestros en los cuales me han hecho abrir los ojos de una manera impresiónate. Conocí maestros con los cuales tuve unas buenas clases, personas que hicieron de este semestre algo agradable y admirable. Vale la pena decir que este semestre fue algo extraordinario. En tan solo este primer semestre me lleve cosas muy agradables y muchos aprendizajes. Quisiera dejar como reflexión, que hay que luchar por las cosas que queremos, simplemente no nos demos por vencidos, que hay personas que les falta alguna parte de su cuerpo o alguno de sus cinco sentidos y que esas personas nos dan día a día una muestra de que hay que luchar por cada sueño. Esta fue la mejor experiencia que pude vivir este semestre aunque nunca puede hablar mucho con este maestro, gracias a él y a que nunca se derrumbó por seguir sus sueños, pude entender que esforzándose al máximo podemos llegar muy lejos. Y que no hay ningún impedimento para poder salir adelante, así nos falte un pie, un brazo, o simplemente no podamos ver la luz el mundo nos tiene grandes cosas, así como este maestro pudo hacer grande cosas sin poderlas ver, nosotros podremos hacer muchas más cosas. Ya para concluir mi historia, quiero decir que este maestro al cual todos llamamos Gregorio Ríos ha sido mi ejemplo, por el cual debo seguir continuando para cumplir mis metas programadas, EL ES UN EJEMPLO PARA MUCHOS, NO SOLO PARA MI.