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Tipos de Conocimientos

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“Los cuatro tipos

de
conocimiento”

La verdadera ignorancia no es la ausencia de conocimientos,


sino el hecho de negarse a adquirirlos.
----- Karl Popper -----

Alumno: Flores Morales Paulina


Profesor: José Antonio Molina
Ramírez
Materia: Teoría del conocimiento
científico
Escuela: Universidad Popular
Autónoma de Veracruz
¿Qué es el conocimiento?
La palabra conocimiento proviene del latín cognoscere, formada por el
prefijo con, que significa 'todo' o 'junto', y la palabra gnoscere.
El conocimiento es la acción y efecto de conocer, es decir, de adquirir
información valiosa para comprender la realidad por medio de la razón,
el entendimiento y la inteligencia. Se refiere, pues, a lo que resulta de
un proceso de aprendizaje.

¿Cómo se adquiere el conocimiento?


El conocimiento se construye desde la primera infancia y acompaña el
proceso de desarrollo de la persona, influyendo en su comportamiento
y capacidad para resolver problemas. El conocimiento se origina a
través de la percepción sensorial, de donde llega al entendimiento, y de
allí pasa al proceso racional de análisis y codificación de la información.
Sin embargo, que el proceso de construcción del conocimiento es
sumamente complejo y atiende a muchas variables, razón por la cual
existen diversas escuelas dedicadas a la formulación de una teoría del
conocimiento.

Tipos de conocimientos

1. Conocimiento acientífico:
Es el tipo de conocimiento no científico llamado vulgar, ordinario o de
sentido común. Es la base del sentido inmediato entre los individuos de
una misma cultura, y opera como una especie de entendimiento
práctico que compone un sistema de esquemas incorporados que,
constituidos en el curso de la historia colectiva, son adquiridos en el
curso de la historia individual y funcionan “en la práctica y para la
práctica”.

En tanto que ser gnoseológico mediado por su sociedad y su cultura, el


hombre no puede vivir en medio de las cosas sin formular sus ideas
sobre ellas y de acuerdo a las cuales arregla su conducta. Pero como
estas nociones están más cerca y más a nuestro alcance que las
realidades a que corresponden, tendemos naturalmente a sustituirlas a
estas últimas y a hacer de ellas la materia prima de nuestras
especulaciones.

Este tipo de conocimiento suele confundir las cosas que le rodean con
las ideas que se forma acerca de ellas. El pensamiento mítico-religioso,
el especulativo, el fetichismo, el animismo, el totemismo, entre otros tipos
de explicaciones sobre el mundo, así como la filosofía y la sabiduría
sapiencial de los pueblos en sus proverbios y leyendas, etcétera.

El conocimiento acientífico es omnipresente y ejerce una enorme


influencia en todo agente socializado por haberse arraigado en los
sedimentos más profundos de sus estructuras subjetivas (cognitivas,
emocionales, volitivas, éticas o estéticas) como producto de un fuerte
gasto de inculcación en los primeros años de su vida que, como tatuajes
hechos sobre los organismos biológicos por su cultura, suelen ser
inseparables del agente social durante el resto de su vida, aún dentro del
sistema escolar: individuos escolarmente equivalentes (los alumnos de
las grandes escuelas, por ejemplo) pueden estar profundamente
separados desde el punto de vista de la hexis corporal, de la
pronunciación, de la manera de vestirse, de la relación de familiaridad
con la cultura legítima, por no hablar de todo el conjunto de
competencias y capacidades específicas que funcionan como derechos
de entrada en el universo burgués

De este modo, las estructuras vitales ya mencionadas tienden a


funcionar como estructuras estructuradas y estructurantes de acuerdo
con los cánones y estándares de la sociedad en la que es socializado
cada cuerpo biológico que la habita, lo cual produce los haberes
informacionales más rudimentarios como un conocimiento a la mano,
según Alfred Schütz. El hombre sencillo de la vida diaria suele no sentir
necesidad de trascender este nivel cognitivo, pues con éste resuelve sus
“problemas” cotidianos.

2. Conocimiento pre científico:


Todo terreno limítrofe es impreciso, inexacto; lo anterior es propio del
conocimiento precientífico. Al estar en los límites de la ciencia moderna,
el conocimiento precientífico es un híbrido Informacional que no siempre
desemboca hacia el conocimiento científico propiamente dicho.
En el conocimiento precientífico podrían identificarse dos subespecies:
el conocimiento pseudocientífico y el conocimiento protocientífico . No hay una
separación tajante entre estas dos subclasificaciones arbitrarias, pues están
amparadas por alto grado de credulidad (que sería credibilidad en su nivel más
bajo) y de especulación entre sus adeptos.

2.1. Conocimiento pseudocientífico:


Todo campo de conocimiento que no sea científico, pero se anuncia
como tal es pseudocientífico o falsa Ciencia. La pseudociencia se
distingue por basarse en un cuerpo de creencias y prácticas cuyos
cultivadores desean, ingenua o maliciosamente, dar como ciencia,
aunque no comparte con ésta ni el planteamiento, ni las técnicas, ni el
cuerpo de conocimientos. Pseudociencias aún influyentes son, por
ejemplo, la de los zahoríes, la investigación espiritista y el psicoanálisis
.Se les podrían sumar, entre otras, la parapsicología (nombre moderno
del espiritismo), la ufología y teorías de la conspiración que se basan
en la creencia de que los gobiernos mundiales ocultan de manera
intencional información a sus gobernados.
La pseudociencia es más fácil de inventar que la ciencia, porque hay una
mayor disposición a evitar confrontaciones perturbadoras con la realidad que
no permiten controlar el resultado de la comparación. Los niveles de
argumentación, lo que pasa por pruebas, son mucho más relajados. En parte
por las mismas razones,es mucho más fácil presentar al público en general la
pseudociencia que la ciencia. Pero eso no basta para explicar su popularidad.
Por ello, y de acuerdo con lo anterior, la clara ausencia de rigurosidad y de
fundamentación probada es otra característica de este tipo de conocimiento.
Las pseudociencias están impedidas a generar mecanismos de autocorrección
por estar orientadas a influir en la credulidad de los seres humanos, no en
demostrar sistemáticamente lo que pretenden decir, por lo que en relación con
la ciencia no podría ser considerado su conocimiento como científico

2. 2. C ONOCIMIENTO PROTOCIENTÍFICO
La protociencia posee un rango mayor que el conocimiento pseudocientífico y
se caracteriza por su condición embrionaria de ciencia que puede tener un
objeto serio de estudio tomado de forma cuidadosa, pero sin un corpus ni un
objeto teorético ni experimental claro, lo que no le permite llegar a cuajar en
aquella. “La diferencia entre la ciencia y la protociencia es una cuestión de
grado, la diferencia entre protociencia y pseudociencia es cualitativa”.

Ejemplos enclasables de protociencia pudieran ser la herbolaria, el vitalismo, el


biomagnetismo, la homeopatía, la frenología, la grafología, la alquimia, por
mencionar algunas, los cuales son igualmente debatibles como se muestra a
continuación: “el caso de la alquimia es completamente diferente. No creo que
haya funcionado «de manera semejante a una protociencia de la química»,
como afirma Blitz. En mi opinión, la alquimia fue pseudocientífica desde el
principio”. Bunge debate a Blitz sobre dónde ubicar a la alquimia, lo que sólo
devela la falta de consenso de qué focalizar en la alquimia para considerarla
pseudociencia o protociencia. A diferencia de Bunge, la toma de posición en
este artículo es mirarla como protociencia.

El uso de herramientas o conceptos científicos de forma asistemática o sin


un corpus teorético caracteriza a las protociencias. Si se consideran las
prácticas de las agencias encuestadoras, y los informes oficiales de las
instituciones tan plagados de numerarías, todo ello produce la sensación de
algo respetable y hasta sincero, pero no hay que perder de vista que se puede
estar sinceramente equivocado. Por ello es que llamó a los sondeos de opinión
“una ciencia sin sabio”, y por la que el Estado moderno ha buscado agenciar el
monopolio de la información por la representación oficial que produce el
amañado uso de la estadística (por ejemplo, el “descenso” en el porcentaje de
las tasas de violencia y de delincuencia por casos reales no registrados o en el
aumento porcentual del bienestar económico de la sociedad, cuya muestra son
preferentemente sectores favorecidos).
3. Conocimiento científico:
El conocimiento científico es el conjunto de saberes comprobables dados por
ciertos gracias a los pasos contemplados en el método cientifico. Es decir,
aquellos saberes que se obtienen mediante el estudio riguroso, metódico y
verificable de los fenómenos de la naturaleza.

El conocimiento científico se sustenta en evidencias y se recogen en teorías


científicas: conjuntos consistentes y deductivamente completos de
proposiciones en torno a un tema de interes científico, que lo describen y le dan
una explicación verificable. Dichas teorías pueden ser renovadas, modificadas
o incluso sustituidas por otra en la medida en que sus resultados o
interpretaciones respondan de mejor manera a la realidad y sean cónsonos con
otros postulados científicos demostrados como ciertos.

A menudo se piensa que el conocimiento científico, así como el religioso o el


místico, se sustenta en la pura fe en la interpretación de los hechos; lo cual no
es realmente cierto, dado que a diferencia de los discursos mágicos,
pseudocientíficos o religiosos, la ciencia se sustenta en la comprobabilidad de
sus apreciaciones, aplicando mecanismos experimentales, repetibles y
debidamente acotados.

Este conocimiento se genera a través de una serie de pasos y tiene unas


propiedades y características que no tienen otros tipos de conocimientos. Los
pasos del método científico son los siguientes: observación, inducción,
hipótesis, experimentación, análisis y conclusión.

Características del conocimiento científico


El conocimiento científico se sustenta en la investigación: la recopilación de
datos a partir de experiencias científicas previas, así como de procedimientos
experimentales propios, que al ser replicados bajo condiciones controladas,
pueden ser comprendidos más cabalmente.

El conocimiento científico se clasifica en dos categorías:

 Conocimiento tácito. Se trata de los conocimientos técnicos, tecnológicos


o teóricos que son propios de la persona, es decir, que forman parte de su
enciclopedia de mundo y de la perspectiva que le ha entregado la cultura a
la que pertenece. No son aprendidos formalmente mediante el estudio o la
educación.
 Conocimiento explícito. Son aquellos conocimientos científicos formales,
especializados, que deben adquirirse mediante bibliografías, cursos
formales o instituciones educativas, ya que tienen que ver con el
conocimiento científico acumulado.
Ejemplos de conocimiento científico
Algunos ejemplos concretos de conocimiento científico pueden ser:

 Los teoremas matemáticos de Pitágoras, filósofo griego de la antigüedad,


que siguen siendo vigentes más de 2000 años después y se imparten
formalmente en la escuela.
 La comprensión bioquímica de los antibióticos a partir del descubrimiento de
la penicilina en el siglo XX y su administración médica para combatir
infecciones.
 Las formulaciones de Isaac Newton sobre el movimiento, que hoy en día
tienen el rango de leyes y se imparten en la asignatura de física.
 La descripción de los procesos de respiración y de fotosíntesis llevados a
cabo por seres animales y vegetales respectivamente.
 La comprensión de la anatomía humana a nivel tal que permita la práctica
de los trasplantes.
 El estudio de la conformación del sistema solar y de los movimientos
del planeta tierra, así como de su impacto en nuestra vida cotidiana: día y
noche, estaciones climáticas, solsticios, etc.
 El descubrimiento de la electricidad y de la capacidad de transmisión,
acumulación y aprovechamiento de la misma, que dio pie a una verdadera
revolución industrial y tecnológica.
 La explicación detallada el ciclo hídrico o ciclo del agua en sus diversas
fases.
 La comprensión del átomo y de las fuerzas que encierra, puestas en
marcha en la energía atómica pacífica y en las bombas atómicas del siglo
XX.
 La explicación del origen de los temblores y terremotos en las placas
tectónicas de la corteza terrestre.
 El descubrimiento de la vida microscópica que dio pie a la pasteurización y
preservación de los alimentos a largo plazo, cambiando para siempre el
modo en que nos alimentamos.

La ciencia moderna y sus producciones, a pesar de lo que pareciera, es una


empresa muy reciente y su objeto de estudio es la realidad empírica, tangible y
es el ulterior desarrollo del género humano en los últimos dos siglos. Sin
ahondar en el problema de lo que sea la realidad empírica, se puede partir de
un supuesto ontológico fundamental: toda realidad posee existencia, pero no
todo lo que existe es real. Como señala “la realidad, tal como la conocemos,
hoy, no es un sólido bloque homogéneo, sino que se divide en varios niveles o
sectores, caracterizado cada uno de ellos por un conjunto de propiedades y
leyes propias”. Podría ejemplificarse lo anterior con algo muy sencillo.

Los rayos infrarrojos y los ultravioleta siempre han existido, pero sólo han sido
una realidad cognoscible para la humanidad a partir de su detección y posterior
estudio a partir de 1800 y 1801 por las investigaciones de Herschel y Ritter,
respectivamente.
La ciencia tampoco es ajena a su contexto, pues “en el campo de la ciencia
moderna toda la actividad científica está fuertemente mediatizada por la
sociedad, y no sólo por la comunidad científica”.

No obstante que el conocimiento científico es objetivo, sistemático, metódico,


riguroso, fundamentado, explicativo, y hasta predictivo, hay diferentes formas
de concebirlo, producirlo y de practicarlo, lo que a la vez lleva a tomar posturas
consideradas no pocas veces como excluyentes entre sí, aunque todas ellas
posean el reconocimiento de científico .

También la ciencia está influida por su desarrollo sociohistórico y cultural. En


este sentido, existen al menos tres visiones dominantes respecto a la ciencia
en occidente: a ) la sajona, b ) la francesa y c ) la alemana. Sin perder de vista
que han sido potencias mundiales rivales en distintos periodos históricos, esta
rivalidad ha trascendido también hacia distintas concepciones de ciencia y en
sus maneras de producirla y practicarla. Con base en lo anterior, se puede
echar mano de la propuesta de jürgue habermas sobre la caracterización de
tres tipos de conocimiento que orientan y rigen las prácticas científicas actuales
(información, interpretación y análisis) con sus respectivos intereses (técnico,
práctico y emancipatorio), y se desarrolla una propuesta sintética e integradora
de ellos que los agrupa de forma analítica. La razón de elegir a este autor es
por su exposición sistemática y rigurosa, muy propia de la perspectiva científica
alemana.

Se distinguen tres tipos de conocimiento guiados a su vez por tres tipos de


intereses:

a. El informacional que es guiado por el interés técnico, y se refiere al


conocimiento suficiente para adaptarse al medioambiente que rodea al
ser humano y que posibilita su control técnico una vez poseído ese
dispositivo informacional; de ahí que desarrolle disposiciones técnicas
por medio del trabajo socialmente aprendido. Con este conocimiento el
ser humano ha trascendido de su condición animal a la humana. La
noción de problema es tratada como déficit a resolver . Una empresa
enfrenta un problema cuando por alguna razón se ausenta o renuncia de
forma definitiva un directivo, por lo que se buscará la manera de
sustituirlo por otro con características similares. En una investigación
educativa se entenderá que se está frente a un “problema” cuando las
cosas no funcionan según lo previsto; por ello habría que buscar la
solución por medio de intervenciones que incidan en las metas y
coadyuven a la mejora.
b. El conocimiento interpretativo opera a nivel de los grupos humanos
socializados por medio del lenguaje. Aquí ya es el ser humano
trascendental que no sólo posee una cultura inculcada, sino que es
poseído por ella promoviendo disposiciones comunicativas que, no
obstante ser aprendidas socioculturalmente, precisamente por ello se
provocan distorsiones en la comunicación, pues al estar adheridas a un
estrato social particular sólo es posible hablar de lo que está
profundamente vinculado a éste. De modo que este tipo de conocimiento
científico está orientado por un interés práctico, o sea, hacia las
prácticas socioculturales de sentido, los significados, las intenciones y
las motivaciones de sus practicantes. Por eso, el objetivo de este tipo de
conocimiento es comprender al otro en su horizonte cultural. La noción
de problema aquí es abordada como un dilema axiológico en tanto que
generalmente hay que elegir entre dos posibilidades para tomar una
decisión. Retomando el mismo ejemplo de la empresa que requiere una
persona especialista para un puesto, un dilema aparece cuando entre
todos los candidatos posibles hay dos opciones igualmente elegibles,
pero sólo hay un puesto a ocupar. La dimensión valoral orientará la
elección. En una investigación educativa, el problema estaría focalizado
en comprender el sentido subjetivo que los actores dan a sus acciones
recíprocas en un contexto particular.
c. El tercer tipo de conocimiento científico es el analítico. Este
conocimiento trasciende a los otros dos mencionados, pues al inculcar
disposiciones reflexivas por medio de la socialización crítica está
orientado por un interés emancipatorio capaz de percibir las
contradicciones propias de su entorno social por la distribución desigual
de los bienes socialmente producidos (materiales, económicos,
culturales, simbólicos, jurídicos, etcétera). El ser humano trascendental ,
culturalizado, requiere trascender su propia trascendenciacultural para
no quedar atrapado en ella y así evitar los etnocentrismos culturales, de
clase, etarios, ocupacionales y de género, entre otros. La fragmentación
de las subjetividades desde esta perspectiva ocurre desde el momento
que un sujeto vive para otro, no siendo-para-sí sino siendo-para-el-otro
o, como el marxismo clásico lo promovía, estando alienado, enajenado,
viviendo en y para lo ajeno. Aquí el “problema” es la búsqueda
de emancipación por la develación de los mecanismos de dominación,
visualizada desde su dimensión dialéctica dominación-resistencia con
orientaciones de praxis política, aunque no necesariamente sobre la
política misma. En el mismo caso de la empresa, el empleado que
contra argumenta que se seleccione a un nuevo directivo sólo por tener
credenciales escolares, pero carente de experiencia previa, sugiere a
otros trabajadores internos que demuestran de forma práctica cómo
enfrentar y resolver dificultades, actúa de forma crítica. En una
investigación educativa el “problema” consistiría en vincular el sentido
subjetivo de los agentes sociales y las condiciones objetivas del campo
en las que se desarrollan las prácticas como influidas y a la
vez influyentes en su contexto.

De estos tres tipos de conocimiento y sus respectivos intereses


cognitivos, considera que son el soporte de tres tipos de ciencias: a )
las empírico-analíticas , b ) las histórico-hermenéuticas y c ) las críticas o de la
acción. Las primeras están relacionadas con el modo de proceder del
paradigma positivista, las segundas con el paradigma interpretativo y las
terceras con el paradigma crítico. Pero, ¿qué es un paradigma? “Los
paradigmas son entendidos en el sentido amplio, y se refieren al consenso de
la comunidad en torno a supuestos, teóricos o metodológicos, muy básicos que
se afirman como paradigmas de la disciplina completa, no de áreas
especializadas de ésta”. Estos supuestos pueden ser explícitos o implícitos,
pues se aprende más con el ejemplo práctico que con las normas escritas; si
no se practican éstas, quedan como letra muerta. Por lo tanto, un paradigma,
una vez elegido y practicado se convierte en un hipodigma , es decir, en una
forma consistente de obrar las prácticas científicas en todas las etapas del
proceso de investigación tratando de ajustarlas en lo posible al modelo
paradigmático escogido. De ahí que haya diferentes modos de operar
científicamente, aún al interior de una misma disciplina, pues la adscripción
paradigmática es un compromiso de ver y entender el mundo.

Conocimiento meta científico


La meta ciencia como la práctica de la metodología científica para estudiar el
método científico y la filosofía de la ciencia; en otras palabras, la ciencia
estudiándose a sí misma.

La metaciencia o meta-investigación es el uso de metodología científica para


estudiar la propia ciencia. La metaciencia busca mejorar la calidad de
la investigación científica a la par que reducir la ineficiencia. En el mundo
anglosajón también es conocida como "investigación de la investigación" y
"ciencia de la ciencia", ya que emplea métodos de investigación para estudiar
cómo se hace la investigación y dónde se pueden hacer mejoras.

La metaciencia se preocupa de todas las áreas de investigación y ha sido


descrita como "una visión de la ciencia a vista de pájaro". En palabras de John
Ioannidis: "la ciencia es lo mejor que les haya ocurrido a los seres humanos.

En 1966 un artículo de meta-investigación, examinó los métodos


estadísticos de 295 artículos publicados en diez revistas médicas. Casi el 73%
de los informes extrajeron conclusiones, cuando la justificación para estas
conclusiones no era válida. En las siguientes décadas, la meta investigación
encontró muchos defectos metodológicos, ineficiencias, y malas prácticas en
investigación en numerosos campos de la ciencia. Muchos de los estudios
científicos no podían ser reproducidos, particularmente en medicina y
las ciencias blandas. El término "crisis de replicación" fue acuñado a principios
de la década de 2010 como parte de una mayor conciencia.

Se han implementado medidas para abordar los problemas revelados por la


metaciencia. Estas medidas incluyen la preinscripción de estudios científicos y
pruebas clínicas, así como la fundación de organizaciones como CONSORT y
la Red ECUATOR, que proporcionan informes con directrices para la
metodología y para "informar y publicar investigaciones". Hay esfuerzos
continuados para reducir el mal uso de las estadísticas, para eliminar
los incentivos perversos del mundo académico, para mejorar el proceso de
revisión académica por pares, para combatir los sesgos en la literatura
científica, y para incrementar globalmente la calidad y la eficacia del proceso
científico.

Un cuarto tipo de conocimiento detectado en relación con el conocimiento


científico es el que puede denominarse como metacientífico al tener como
objeto de sus reflexiones, no la realidad empírica dada en bruto, sino a la
realidad científica considera que la metaciencia se puede dividir en tres:

a) la lógica de la ciencia

b) la metodología de la ciencia

c) la filosofía de la ciencia.

Y en vez de metaciencia, prefiere conceder el título de ciencia de la ciencia a


las disciplinas que toman por objeto de estudio las prácticas científicas y
subdividirla en dos rubros:

a) la ciencia de la ciencia externa (psicología de ciencia, sociología y


antropología de la ciencia, historia de la ciencia)

b) la ciencia de la ciencia interna (lógica de la ciencia, metodología de la


ciencia, filosofía de la ciencia).

No obstante esta sugerencia taxonómica de se puede disentir con esta porque


para él la metaciencia sigue siendo esencialmente una protociencia , y no una
ciencia plenamente desarrollada: adopta el planteamiento científico, pero, hasta
el momento, ha producido pocos resultados científicos.

Se puede contrargumentar mencionando que la metaciencia no debería tener


necesariamente resultados utilitaristas en el sentido del positivismo, ya que se
constituye a sí misma en una constante invitación a reflexionar sobre de los
procesos, definiciones, productos, elecciones y rechazos, que
ocurren dentro del quehacer científico puesto en contexto.

Hay una serie de disciplinas que toman como objeto de estudio a la ciencia y
que cumplen con el objetivo de ser esa invitación a reflexionar sobre ella: la
filosofía de la ciencia, la sociología de la ciencia, la historia de la ciencia, la
metodología de las ciencias, la antropología de la ciencia, la epistemología, la
teoría de la ciencia, las cuales son bastante cercanas a otras disciplinas como
la gnoseología, la sociología del conocimiento, la teoría del conocimiento;
incluso, hay diversos trabajos que tienden a homologar todas estas disciplinas
no mirando diferencias tácitas. No obstante, se pueden dar algunas
características generales al respecto.

La sociología de la ciencia estaría interesada en vincular las prácticas


científicas con su contexto social, ya que el conocimiento científico no sólo
depende de los intereses de sus practicantes, sino también influyen los
intereses externos a la misma ciencia. De ahí que haya investigación realizada
por encargo, la cual focalice ciertos problemas e ignore a otros. Algunos
autores más prominentes en este campo son Merton, Bloor, Barnes, Collins,
Pinch, Latour, Woolgar, Knorr-Cetina, Mulkay, Gilbert, Garfinkel o Lynch.

Por su parte, la metodología de la ciencia “reflexiona acerca de los métodos


que son utilizados para generar conocimiento científico y las implicancias de
usar determinados procedimientos” con el fin de explicitar la lógica de la
investigación científica en el proceso de investigación. La perspectiva
metacientífica de esta disciplina identifica y describe los componentes de una
investigación como son “la formulación del problema, el marco teórico y los
objetivos de la investigación social, las hipótesis, las variables, indicadores e
índices, los diseños de investigación, las unidades de análisis y la población”
Sin las precauciones debidas, el conocimiento ofrecido por las metodologías de
las ciencias podría operar como un cúmulo de “recetas de cocina” que tienden
a imponerse como maneras rígidas (no necesariamente rigurosas) de obrar en
la investigación, por lo que suelen usarse como manuales recurrentes en los
cursos de investigación dentro de los sistemas escolarizados.

La filosofía de la ciencia es una disciplina de carácter analítico que tiene como


objeto de su reflexión a la ciencia: que puede o no llamarse ciencia, método,
hipótesis, si ella misma cumple una función sólo descriptiva o es más bien
prescriptiva, los tipos de ciencias que hay, así como sus distintas
clasificaciones. De este modo, la filosofía de la ciencia es una reflexión sobre la
ciencia ya realizada. Bajo este rubro se amparan con más especificidad la
filosofía de las ciencias sociales, la filosofía de las ciencias naturales, y a su
vez ramas más particulares como la filosofía de las matemáticas o la filosofía
de la biología o de la medicina. En pocas palabras, primero debe existir la
evidencia de una práctica científica para poder entonces hacer una reflexión
sobre ella. Uno de los dilemas es que “numerosos científicos, sin embargo, se
han dado por satisfechos dejando la filosofía de la ciencia a los filósofos y han
preferido seguir «haciendo ciencia» en vez de dedicar más tiempo a considerar
en términos generales cómo «se hace la ciencia»”

La historia de la ciencia se distingue de la historiografía de las ciencias en tanto


que la primera es una relatoría cronológica de anécdotas sobre el desarrollo de
las prácticas científicas en el acontecer histórico del hombre, mientras que la
segunda focalizaría los enfoques metodológicos para realizar dicha labor
descriptiva. Algunos pensadores insignes aquí son Koyré, Canguilhem,
Foucault, Cavaillès, entre otros.

La antropología de la ciencia es la dimensión etnográfica de esta metaciencia.


Es decir, la práctica del antropólogo de la ciencia consiste en observar las
prácticas de los científicos in situ , como lo hacen Woolgar y Latour, entre otros.
Como en cualquier práctica de campo, la observación y la descripción son
herramientas privilegiadas en esta disciplina, como aquí se ejemplifica:

el laboratorio no era más que una gran máquina productora de


inscripciones, de registros codificados que representaban los
acontecimientos que en él sucedían; unos registros sólo accesibles con
plena inteligibilidad a científicos especializados en las mismas materias en
las que lo estaban quienes convivían cotidianamente en el laboratorio.

La teoría de la ciencia es considerada como una teoría sobre la ciencia en


general y sus procedimientos y aborda cuestiones sobre la relación entre lo
universal y lo particular en la ciencia, a veces traducido como la relación entre
holismo e individualismo, el problema de los valores y el fin último de la ciencia
respecto a sus usos sociales, donde el científico investiga pero no le
correspondería a él el uso que se le dé en su contexto a sus aportaciones, por
ejemplo.

Finalmente, la epistemología posee un rasgo que la distingue de las otras


metaciencias: en vez de ser una filosofía especulativa sobre la ciencia es una
filosofía que se aplica por el sujeto que la practica (a diferencia de la
antropología de la ciencia que toma por objeto lo que los otros realizan). Esta
sería la metaciencia más útil a todo aquel que pretende estar realizando una
investigación. Y el lugar institucionalizado más recurrente donde se efectúa es
el de la escuela y la academia. Por eso, se ha privilegiado considerar a la
investigación educativa en este artículo. Pero paradójicamente suele ocurrir
que quienes están al frente de seminarios de investigación no investigan y lo
que hacen es endosar ficciones profesorales sobre falsos dilemas
(cuantitativo vs. cualitativo, macro vs . micro, determinismo vs . voluntarismo,
causalidad vs. teleología) que se abordan como posturas excluyentes entre sí
de las cuales el alumno debe elegir una u otra, en vez de mirarlas como
complementarias.

Para superar las discusiones académicas y las formas académicas de


superarlas, es necesario someter la práctica científica a una reflexión que, a
diferencia de la filosofía clásica del conocimiento, se aplique no a la ciencia
hecha, ciencia verdadera cuyas condiciones de posibilidad y de coherencia,
cuyos títulos de legitimidad sería necesario establecer, sino a la ciencia que se
está haciendo.

Sin tener necesariamente la claridad por parte de quienes lo proclaman, se


suele decir que “a investigar se aprende investigando”. De ahí que, “cualquiera
que sea el punto de partida de la actividad científica, esta actividad puede
convencer totalmente sólo si abandona el dominio de base: “si experimenta, es
preciso razonar; si razona, es necesario experimentar”.
Conclusión:………………………………….:)
El conocimiento es la acción y efecto de conocer, es decir, de adquirir
información valiosa para comprender la realidad por medio de la razón, el
entendimiento y la inteligencia. Es la base del sentido inmediato entre los
individuos de una misma cultura, y opera como una especie de entendimiento
práctico que compone un sistema de esquemas incorporados que,
ensamblados en el curso de la historia colectiva, son adquiridos en el curso de
la historia individual y funcionan “en la práctica y para la práctica”. En tanto que
ser gnoseológico mediado por su sociedad y su cultura, el hombre no puede
vivir en medio de las cosas sin formular sus ideas sobre ellas y de acuerdo a
las cuales arregla su conducta. Este tipo de conocimiento suele confundir las
cosas que le rodean con las ideas que se forma acerca de ellas. el
conocimiento acientífico es omnipresente y ejerce una enorme influencia en
todo agente socializado por haber arraigado en los sedimentos más profundos
de sus estructuras subjetivas (cognitivas, emocionales, volitivas , éticas o
estéticas) como producto de un fuerte gasto de inculcación en los primeros
años de su vida que, como tatuajes hechos sobre los organismos biológicos
por su cultura, suelen ser inseparables del agente social durante el resto de su
vida, aún dentro del sistema escolar:
individuos escolarmente equivalentes (los alumnos de las grandes escuelas,
por ejemplo) pueden estar profundamente separados desde el punto de vista
de la hexis corporal, de la pronunciación, de la manera de vestirse, de la
relación de familiaridad con la cultura legítima, por no hablar de todo el
conjunto de competencias y capacidades específicas que funcionan como
derechos de entrada en el universo burgués Delaware este modo, las
estructuras vitales ya mencionadas tienden a funcionar como estructuras
estructuradas y estructurantes de acuerdo con los cánones y estándares de la
sociedad en la que es socializado cada cuerpo biológico que la habita, lo cual
produce los haberes informacionales más rudimentarios como un Conocimiento
a la mano, según Alfred Schütz. Estas dos subclasificaciones arbitrarias están
protegidas por un alto grado de credibilidad (el nivel más bajo de credibilidad) y
la especulación entre sus partidarios, por lo que no existe una distinción clara .
Cualquier campo de conocimiento que no sea científico pero que se publicite
como tal es pseudociencia o pseudociencia. La pseudociencia se caracteriza
por estar basada en un conjunto de creencias y prácticas que los cultivadores,
ingenua o maliciosamente , desean disfrazar de ciencia, aunque no comparten
ningún enfoque , técnica o conjunto de conocimientos . es. Las pseudociencias
que siguen siendo influyentes son, por ejemplo, varillas de radiestesia ,
estudios espirituales y psicoanálisis. A esto se podría agregar, entre otros, la
parapsicología (el nombre moderno del espiritismo), los estudios de ovnis y las
teorías de conspiración basadas en la creencia de que el Gobierno Mundial
está ocultando información deliberadamente a sus gobernantes. . La
pseudociencia es más fácil inventar que la ciencia . porque están más
dispuestos a evitar confrontaciones inquietantes con la realidad, lo que no les
permite controlar los resultados de la comparación . El nivel de debate sobre lo
que cuenta como evidencia es mucho más relajado. En parte por la misma
razón, la pseudociencia es mucho más fácil de presentar al público en general
que la ciencia. Hay una clara falta de evidencia comprobada . La pseudociencia
se ve impedida de generar mecanismos de autocorrección porque pretende
influir en la credibilidad de las personas.

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