La Descripción
La Descripción
La Descripción
En sentido más amplio, es hacer una relación oral o escrita de los detalles
o características de una realidad.
Manuela, en una mujer ejemplar, aunque vive sola, nadie puede hablar
mal de ella, tiene un amplio apego a las responsabilidades, manejas sus
relaciones con los demás con mucha discreción. Es apacible con todos,
lleva a desesperar a cualquiera de sus amigos que, contrario a ella, son
muy emotivos.
Retrato: Es una descripción combinada en la que se describen las
características físicas y morales de las personas. Une la prosopografía y la
epopeya.
El tío Lucas era más feo que Picio. Lo había sido toda su vida, y ya
tenía cerca de cuarenta años. Sin embargo, pocos hombres tan
simpáticos y agradables habrán echado Dios al mundo. Lucas era
en aquel entonces de pequeña estatura, un poco cargado de
espaldas, muy moreno, barbilampiño, narigón, orejudo y picado
de viruelas. En cambio, su boca era regular y su dentadura
inmejorable. Dijérase que sólo la corteza de aquel hombre era
tosca y fea; que tan pronto como empezaba a penetrarse dentro
de él aparecían sus perfecciones, y estas perfecciones
principiaban por los dientes. Luego venía la voz, vibrante, elástica,
atractiva.
Llegaba después lo que aquella voz decía: todo oportuno,
discreto, ingenioso, persuasivo. El tío Lucas (Pedro Antonio de
Alarcón. El sombrero de tres picos)
¡qué airosa!, ¡qué elegante!, nos parecía a todos, que en toda la fuente
con su remate figurada un niño desnudo, con su bañera toda rizada al
borde, como las cosechas de los romeros. En la plaza estaba el
ayuntamiento, que era grande y cuadrado como un cajón de tabaco, con
una torre en medio, y en la torre un reloj, blanco como una hostia, parado
siempre en la nueve como si el pueblo no necesitase de su servicio, sino
solo de su adorno”. (Camilo José Cela, La familia de Pascual Duarte).
Era el inicio del alba cuando el astro rey no asomaba sus abrazadores
rayos, en ese momento, don Pedro dejó de exhalar el oxígeno necesario
para mantener la vida.
Los pies delanteros son ligeras columnillas negras con capiteles clásicos…
sobre esta mesa yacen libros grandes y libros pequeños, un cuadernito de
dibujos de Gavarnie, cartapacios repletos de papeles, números de la Revue
Blanche y de la Revue Philosophique, fascículos de un censo electoral,
mapas locales y mapas generales…” Azorín
“Aquella tarde de aquel día, un día de un año del que no quiero acordarme,
salí a recorrer las calles de Tegucigalpa, ciudad que no veía desde hacía
mucho tiempo. Caía una lluvia fina, monótona y desesperante. Mojando los
tejados de las casas, las ruinosas aceras sin nivel, las calles empedradas
con guijarros, esos guijarros puntiagudos que hacen pensar en horribles
galopes de caballos con herraduras y en carretas chillonas, rodando sobre
ellos. Crucé el puente, alargado sobre el río, y recorrí varias calles
desiertas, presas ya de un hastío sin límites, que traía a la memoria
recuerdos melancólicos y fúnebres”.
Texto descriptivo
Bibliografía