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Cardozo - La Conversión de Saulo de Tarso
Cardozo - La Conversión de Saulo de Tarso
Cardozo - La Conversión de Saulo de Tarso
Cochabamba – Bolivia
Octubre 2021
1
ÍNDICE…………………………….…………………………………….…...……2
INTRODUCCIÓN………………………………………………..…………....…..3
PRIMERA PARTE
1.1. Saulo………………………………………………………………………........5
SEGUNDA PARTE
TERCERA PARTE
CONCLUSIÓN……………………………………………………………………...13
BIBLIOGRAFÍA……………………………………………………………………14
2
INTRODUCCIÓN
El objetivo de este trabajo es indagar en los sucesos, palabras, actos y acciones que
se presenta en Hechos 9,1-19 que nos dicta la conversión de Saulo, para ello
pretendemos por medio de una aproximación exegética conocer de manera general los
aspectos que suscitan en dicha conversión.
Este trabajo está estructurado en tres partes y al inicio de cada parte se presenta de
manera textual la cita bíblica concorde a cada parte.
3
seguidamente la imposición de manos, el bautismo como acto de purificación de los
pecados y la sanación de Saulo, pues recobra la vista y se predispone a un descanso
para luego iniciar la misión que se le asignó.
Al final del trabajo adjuntaremos una conclusión, seguida de una bibliografía que
fue utilizada para el desarrollo de este trabajo
4
PRIMERA PARTE
9 1 Entretanto Saulo, respirando todavía amenazas y muerte contra los discípulos del
Señor, se presentó al Sumo Sacerdote 2 y le pidió cartas para las sinagogas de Damasco,
con el fin de obtener permiso para llevar presos a Jerusalén a los hombres o mujeres
que encontrase, seguidores del Camino*.
1.1. Saulo
Saulo de Tarso era de una ciudad culta, por ende, no es equívoco afirmar que sus
padres siendo fariseos emigrados de Palestina, siguieron estrictamente la observancia
judía, por ende, restringen a Saulo de ir a las escuelas griegas. Cumplidos los catorce
años, Saulo fue enviado a Jerusalén, donde cursó estudios rabínicos, formado a los pies
de Gamaliel, maestro de la escuela más ilustre de la época1.
1
Cf. J. M. GONZALES, El Evangelio de Pablo, Madrid 1977, 7.
2
Cf. R. FABRIS, Pablo, el Apóstol de las gentes, Caracas 1999, 70-71.
5
1.3. Permiso para llevar presos a Jerusalén
Quizá uno de los puntos a favor de Saulo, es que, mientras las sinagogas no rompían
vínculos, los judíos que se convirtieron seguían sujetos a dicha jurisdicción, siendo el
caso, la sinagoga tenía la potestad de castigar e incluso la de expulsar de la sinagoga a
quienes vieran conveniente. Por ello, el sanedrín ejercía poder de modo coercitivo
sobre las comunidades hebreas ubicadas fuera de Judea, por esta misma razón, la carta
pedida se signa necesaria para Saulo a la hora de actuar4.
Los que perseguían a los discípulos de Jesús los reconocían por el camino que
seguían, es decir, tomaban un camino distinto de lo que estipulaba judaísmo es sus
reglas, además esta corriente se estaba esparciendo gradualmente en Damasco. Por tal
motivo que resonaba la preocupación de Saulo y su inminente decisión de apresar a
los discípulos de Jesús, ya que los discípulos tenían claro que Jesús es el Camino y
además tenían presente que él murió, resucitó y subió a los cielos con el propósito de
abrirles las puertas del Cielo (Cf. Hc 18,26). Por ello, los discípulos tenían claro que
seguir a Jesús implicaba un estilo de vida diferente, por tal razón “la «nueva doctrina»
se llama literalmente, en el texto original, «camino», es decir, mentalidad y modo de
vivir, «norma de vida que regía la sociedad cristiana»” 5.
3
Cf. A. WIKENBAUSER, Los Hechos de los Apóstoles, Barcelona 1967,159.
4
Cf. Ibid., 160.
5
Ibid., 159.
6
SEGUNDA PARTE
3
Pero yendo de camino, cuando estaba cerca de Damasco, lo envolvió de pronto una
luz venida del cielo, 4 cayó en tierra y oyó una voz que le decía: «Saúl, Saúl*, ¿Por qué
me persigues?» 5 Él preguntó: «¿Quién eres, Señor?» Y él: «Yo soy Jesús, a quien tú
persigues*. 6 Pero levántate, entra en la ciudad y te dirán lo que debes hacer.» 7 Los
hombres que iban con él se habían detenido mudos de espanto, pues oían la voz, pero
no veían a nadie. 8 Saulo se levantó del suelo, y, aunque tenía sus ojos bien abiertos,
no veía nada. Le llevaron de la mano y le introdujeron a Damasco. 9 Paso tres días sin
ver, sin comer y sin beber.
La luz venida del cielo en ese momento significó para Saulo; la gloria de Dios, pues
como conocedor del Antiguo Testamento manifestaba una Presencia Divina, y quizá
pensando en Yahveh a quien servía e incluso cometiendo fechorías, la respuesta “Yo
soy Jesús” le trajo al momento sentimientos dramáticos, pues hasta antes de este
momento luchaba contra todos los discípulos de Jesús e incluso consideraba que Jesús
era un Mesías impostor. Todo este momento dio un golpe duro en lo más profundo del
7
ser de Saulo, pues queriendo servir a Dios, al ponerse en contra de Jesús, estaba
luchando contra Dios6.
Por otra parte, la pregunta ¿Por qué me persigues? debe denotar un aspecto muy
importante ya que este “me” enfatiza que Jesús es el camino, que Saulo al perseguir a
los discípulos, también persigue a Jesús, es así que, la comunidad cristiana se
identificará con su Señor, aunque aún no sea mirada como iglesia7.
Seguidamente recibido el mandato, Saulo emprendió camino, pero tuvo que recibir
la ayuda de sus compañeros, ya que no podía ver, fue llevado a la casa de un judío
llamado Judas que se ubicaba en la calle Recta, una suntuosa vía romana., a su llegada
pasó tres días sin poder ver, además no comió ni bebió, pue su afán estaba centrado en
la meditación del encuentro, pues su vida tuvo un golpe fuerte, sentía añicos su vida
pasada, pero se consolaba con el recuerdo del encuentro y esto fue preparando a Saulo
para el encuentro con Ananías9.
6
Cf. R. FABRIS, Pablo, el Apóstol de las gentes, Caracas 1999,100.
7
Cf. R. DILLON – J. FITZMYER, “Hechos de los Apóstoles”, en R. BROWN – J. FITZMYER – R. MURPHY
(dirs.), Comentario Bíblico San Jerónimo, III, Madrid 1972, 475.
8
Cf. R. FABRIS, Pablo, el Apóstol de las gentes, Caracas 1999, 101-102.
9
Cf. O. KUSS, San Pablo, la aportación del apóstol a la teología de la Iglesia primitiva, Barcelona
1975, 47.
8
TERCERA PARTE
10
Había en Damasco un discípulo llamado Ananías. El Señor le llamó en una visión:
«Ananías.» Él respondió: «Aquí estoy, Señor.» 11 El Señor le dijo: «Prepárate y vete a
la calle Recta. Una vez allí, pregunta en casa de Judas por uno de Tarso llamado Saulo.
En este momento está en oración12 y ha visto* que un hombre llamado Ananías entraba
y le imponía las manos para para recobrar la vista.» 13 Respondió Ananías: «Señor, he
oído a muchos hablar de ese hombre y de los muchos males que ha causado a tus
santos* en Jerusalén, 14 y que aquí tiene poderes de los sumos sacerdotes para apresar
a todos los que invocan tu nombre.» 15 El Señor respondió: «Vete, pues he elegido a
éste hombre como instrumento para llevar mi nombre a los gentiles, a los reyes
16 17
israelitas*. Yo le mostraré cuánto tendrá que padecer por mi nombre.» Fue
Ananías, entró en la casa le impuso las manos y le dijo: «Saúl, hermano, me ha enviado
a ti el Señor Jesús, el que se te apareció en el camino por donde venías, para que
recobres la vista y te llenes del Espíritu Santo*.» 18 Al instante cayeron de sus ojos una
19
especie de escamas y recobró la vista; se levantó y fue bautizado. Tomó alimento y
recobró las fuerzas.
Ananías era un cristiano ordinario, pero no era un apóstol, sin embargo, recibió el
encargo de buscar a Saulo, ya que el Señor, al momento de comunicarle lo que debía
de hacer le dijo que aquel a quien tenía que ir a buscar se encontraba en situación de
oración.
En este punto podemos denotar una diferencia entre la forma de hablar a Saulo y la
forma de hablar a Ananías, pues este último, denota una voz suave a la que responde:
9
Heme aquí, siendo esta respuesta una de las más perfectas para responder a la voz del
Dios, por otra parte, la respuesta de Saulo, puede denotar una resistencia e incluso
cuestionamientos entorno a la palabra de Dios10.
Quizá la visión que tienen Ananías, refleje unas instrucciones mucho más claras y
precisas, puesto que al indicarle que se dirija a la calle Recta y precise el domicilio en
el cual se encontraba Saulo, implica no equívocos para llegar al encuentro de Saulo,
pues Ananías sentía incomodidad por dicho encargo, ya que iba al encuentro del gran
perseguidor.
10
Cf. R. FABRIS, Pablo, el Apóstol de las gentes, Caracas 1999,105.
11
Cf. A. WIKENBAUSER, Los Hechos de los Apóstoles, Barcelona 1967, 162.
12
Cf. R. FABRIS, Pablo, el Apóstol de las gentes, Caracas 1999,106.
13
Cf. Ibid., 107.
10
Por otra parte, el Señor expresa a Ananías que comunicara a Saulo su misión, ya
que en adelante estará destinado a predicar y a anunciar la obra del Señor por todo el
mundo, pero sobre todo anunciar la Buena Nueva a los gentiles, ya que esa habría de
ser su misión principal y posteriormente a los reyes quienes se revisten de autoridad e
incluso a los mismos israelitas14.
Además, este momento remarca que, si bien Saulo tendrá una gran misión, los
sufrimientos estarán ligados juntamente con el cumplimiento de esta misión y el Señor
refleja que no se pueden llevar adelante grandes empresas sin sacrificios; “Jesús mismo
mostrará a aquel que hasta ahora ha sido perseguidor cuánto deberá sufrir en adelante
por él, pero esos sufrimientos los señalan como instrumento de selección para la
difusión del Evangelio”15.
Después de las objeciones y las palabras de aliento del Señor, Ananías toma un
poco de aliento más tranquilo y parte en busca de Saulo, este encuentro requiere un
gran valor puesto que, a pesar del aliento, Ananías debe enfrentar y superar sus
sospechas en torno a Saulo y llevar el mensaje que se le encargó.
Después de la imposición de manos Saulo lleno del Espíritu Santo recobró la vista,
pues en ese momento Saulo denota una sensación de que de sus ojos se desprenden
unas escamas, predisponiéndose a recibir el bautismo, este rito emana en Saulo la
purificación de sus pecados por la invocación del nombre del Señor17.
14
Cf. A. WIKENBAUSER, Los Hechos de los Apóstoles, Barcelona 1967, 163.
15
Ibid.
16
Cf. R. Fabris, Pablo, el Apóstol de las gentes, Caracas 1999, 107.
17
Cf. Ibid., 108.
11
Es así que, la función mediadora de Ananías para dar a conocer a Saulo tanto su
destino como su futura misión emana el inicio de uno de los grandes evangelizadores
de la Buena Nueva de Jesús, pues después de la imposición de manos y el retorno de
su vista, Saulo de Tarso tomó un descanso y recobra fuerzas para asumir su destino
que le traerá muchas vicisitudes e incluso dudas en los discípulos entorno a su
conversión y detractores sobre lo que anuncia, pero Saulo tocado por el Señor seguirá
su misión conforme a la voluntad de Dios, pues si antes era el gran perseguidor ahora
será el gran perseguido por su inclinación a la doctrina de los del Camino.
12
CONCLUSIÓN
Saulo a raíz de su diálogo con el Señor, atravesará una gran crisis interior, ya que
fue un golpe duro para él darse cuenta que cuando luchaba contra los cristianos,
luchaba contra Dios, a quien intentaba servir toda su vida.
13
BIBLIOGRAFÍA
Sagrada Escritura
Bibliografía general
a) Libros
KUSS Otto, San Pablo, la aportación del apóstol a la teología de la Iglesia primitiva,
Herder, Barcelona 1975.
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