Mexico">
Nothing Special   »   [go: up one dir, main page]

Instrucciones A Don Joseph Rincón de Gallardo

Descargar como pdf o txt
Descargar como pdf o txt
Está en la página 1de 17

DOCU MENTO

RELACIONES 102, P R I M AV E R A 2005, VOL. XXVI


MEMORIA DE JOSÉ RINCÓN GALLARDO

UN DOCUMENTO DE PRINCIPIOS DEL SIGLO XVIII SOBRE


ADMINISTRACIÓN DE HACIENDAS. LA MEMORIA
DE JOSÉ RINCÓN GALLARDO, 1704

osé Rincón Gallardo nació en la hacienda de Tayagua,


cerca de la villa de San Miguel, y fue bautizado en la
J capilla de esa misma hacienda el 14 de julio de 1651.1
Era hijo del capitán Nicolás Gallardo y de Juana Rin-
cón de Ortega. Ésta era sobrina y heredera del presbíte-
ro Pedro Rincón de Ortega, quien en 1657 había ordenado la fundación,
mediante cláusula de su testamento, de un mayorazgo sobre todas las
haciendas y demás bienes vinculados a la casa de Ciénega de Mata.
Aunque sus apellidos eran Gallardo Rincón tuvo que invertir su orden,
acatando lo dispuesto por el fundador del mayorazgo, quien había es-
tablecido que el apellido Rincón y las armas de ese linaje tendrían prefe-
rencia. Fue, así, el primer miembro de la familia que usó el apellido Rin-
cón Gallardo, que desde entonces se ha conservado y que fue durante
casi dos siglos representativo como pocos de los extremos de riqueza y
poder acumulados en manos de los grandes latifundistas mexicanos.
En 1681 José Rincón Gallardo se casó con María Antonia de Luna,
hija del doctor Gerónimo de Luna, oidor en la audiencia de Guadalajara
y después gobernador y capitán general del reino de la Nueva Vizcaya.2
En mayo de 1683 tomó posesión de sus haciendas, que durante algunos
años habían sido administradas por su padre. Su gestión se caracterizó
por la consolidación de los derechos familiares sobre haciendas muy ex-
tensas, la masiva incorporación de tierras al aprovechamiento producti-
vo y la introducción de criterios racionales en los ámbitos de la adminis-
tración y la gestión. También se hicieron durante esos años grandes
esfuerzos para sanear la situación financiera de las haciendas, pero da-
dos el monto y las características del los compromisos heredados fue

1
Archivo Colonial de la Familia Rincón Gallardo (en lo sucesivo, ACFRG), caja 10, ex-
pediente 5, s.f.
2
Ricardo Ortega y Pérez Gallardo, “Marqueses de Guadalupe Gallardo”, en Historia
genealógica de las familias más antiguas de México, Imprenta de A. Carranza y compañía,
México, Tomo II, 1908, 58.

1 3 1
DOCUMENTO MEMORIA DE JOSÉ RINCÓN GALLARDO

imposible pagar todas las deudas. Las dudas que hasta entonces habían estado al frente de las haciendas, se puso a redactar una Memoria o Ins-
existido sobre el carácter legal del mayorazgo fundado sobre las hacien- trucción, un compendio de consejos útiles y observaciones relacionadas
das de Ciénega de Mata se desvanecieron gracias a todas las medidas le- con la administración de sus haciendas.
gales que se adoptaron. En el ámbito de las estrategias tendientes a con- El documento está redactado como si fuera una carta personal que
solidar la posición familiar, la maniobra más exitosa de José Rincón dirige un padre a su hijo, en la que en un tono afectuoso pero claro y por
Gallardo fue el matrimonio que concertó para su hijo primogénito Ma- momentos enérgico, le instruye sobre la mejor manera de conducir los
nuel con Micaela Feijoo y Moya, hija de Francisco Feijoo y Centellas, pre- negocios, sobre los “corrientes” o cuidados “que se deben observar en la
sidente de la audiencia de Guadalajara. Para Rincón Gallardo, su con- Ciénega de Mata y las demás haciendas”. José Rincón Gallardo enfatiza
suegro era la “aldaba” de la que él y su hijo estaban agarrados y de la que tiene “treinta años de asistencia” en las haciendas, lo que le permite
que éste obtendría “todo el amparo y alivio”.3 Por estas razones, Cheva- hablar con autoridad y conocimiento de causa. En este sentido, la memo-
lier pudo definir a José Rincón como “el tipo perfecto del gran hacen- ria no debe ser leída como el mandato que le impone un padre a su hijo
dado mexicano, bienhechor de la Iglesia y capitán de un ejército parti- al heredarlo, sino como un compendio de consejos relacionados con la
cular”.4 Familia, prestigio y ocupación son también las categorías de administración del latifundio. José Rincón Gallardo apela a su experien-
análisis que propone Ganster para definir el estatus de una familia den- cia, al conocimiento detallado que tiene de todas y cada una de sus ha-
tro de la elite en el México colonial.5 ciendas, a lo que ha aprendido a lo largo de los años consagrados a la de-
En 1703, “por sus achaques y no poder asistir a las haciendas”,6 José fensa y mejoramiento de esas fincas. En el fondo, lo que le dice a su hijo
Rincón Gallardo renunció en su hijo Manuel la posesión del vínculo y la con insistencia es que, si quiere conservar e incrementar su fortuna, debe
administración de sus haciendas. Se estableció en la ciudad de Puebla, comprometerse en forma personal y directa con su administración.
pero no se desentendió por completo de los negocios. De manera parti- Nadie puede cuidar mejor que él sus caudales, lo que queda claro desde
cular, le preocupaba que su primogénito tomara conciencia de la grave- el encabezamiento del documento, en el que José Rincón le indica a su
dad de sus responsabilidades. Con el propósito de ayudarlo y de trans- hijo que “hará todo lo que conviniere como quien tiene las cosas patentes”,
mitirle el aprendizaje que había acumulado durante los años que había es decir, con evidencia o experiencia clara, visible y directa.

3
Según dice en la Memoria de la que nos ocupamos enseguida.
4
François Chevalier, La formación de los latifundios en México. Tierra y sociedad en PORTADOR DE UNA TRADICIÓN
México durante los siglos XVI y XVII, México, Fondo de Cultura Económica, 1876, 221.
5
Paul Ganster, “La familia Gómez de Cervantes. Linaje y sociedad en el México co-
Probablemente la Memoria fue escrita de puño y letra del capitán José
lonial”, en Historia Mexicana, Volumen XXXI, núm. 2, [122], octubre-diciembre de 1981,
198-203.
Rincón Gallardo, pero eso sólo se podría determinar mediante un análi-
6
Sebastián Manzano, Infórmase en derecho por el que asiste a Don Francisco Xavier sis caligráfico. Lo que sí es claro es que el documento no fue redactado
Rincón Gallardo, a la propiedad de el vínculo de las haciendas de Ciénega de Mata, para que se de un solo tirón. La primera parte incluye un total de 34 parágrafos o pe-
declare inmediato, legítimo y verdadero sucesor en él, y se le retribuya la posesión real y actual queños capítulos, al término de los cuales se indican el lugar –“en la ciu-
que tenía, por medio de su tutor y curador ad bona Don Diego de Arteaga; contra Doña María dad de los Ángeles”– y la fecha –“a 16 de octubre del año de 1704”– en
Theresa Rincón Gallardo, su hermana mayor, en el pleito que le ha puesto, y movido pretendien-
la que fue redactado. Se añade como fórmula de despedida la leyenda
do la sucesión que afirma, y defiende tocarle inmediatamente, por muerte de Don Manuel Rincón
Gallardo, último poseedor y padre natural y legítimo de ambos, con licencia del superior “tu padre que te desea bien” y enseguida el nombre y la firma de su au-
gobierno, en México, por Joseph Bernardo de Hogal, en la Calle de la Monterilla, Año de tor. Sin embargo, a renglón seguido se agrega un nuevo parágrafo, el 35,
1728, foja 3f. sobre ciertos cuidados que eran necesario tener con “el rancho de borre-

1 3 2 1 3 3
DOCUMENTO MEMORIA DE JOSÉ RINCÓN GALLARDO

gos”, seguido de una segunda rúbrica. Enseguida, sin aclaración de por En estas líneas es clarísima la confluencia de la tradición familiar y la
medio, se añade un parágrafo sobre la cantidad de frijol que debía sem- vocación personal, la experiencia heredada de los ancestros y la que pro-
brarse en la hacienda de Peñuelas y después, con otra letra, una serie de viene de la dedicación o “asistencia” personal, lo que dio como resulta-
parágrafos que evidentemente fueron pensados con posterioridad. La do la redacción de un documento que condensa la sabiduría acumulada
forma abrupta en que termina la Memoria, con una entrada donde se lee por varias generaciones de propietarios ligados en forma entrañable e
“una fanega de maíz tiene de costos y cogida cuarenta pesos”, sugiere inteligente a la administración de sus haciendas.
que Rincón Gallardo siguió trabajando en la ampliación del documento En contra de esa imagen de los grandes latifundistas como hombres
durante algún tiempo y que a la postre quedó inconcluso. ajenos a las rutinas, exigencias y rigores de la vida del campo, de la que
El documento no está redactado en forma apresurada ni improvisa- la literatura histórica se hace eco con frecuencia, esta Memoria constituye
da, sino que claramente es resultado de una experiencia decantada y el autorretrato de un propietario que maneja con inteligencia sus hacien-
bien asimilada. Cabe aclarar, sin embargo, que en general la segunda das; que ha recorrido palmo a palmo y hasta el último rincón sus tierras;
parte (parágrafos 35 a 53) parece pensada en forma menos cuidadosa y que usa criterios de racionalidad en los campos de la inversión y el gas-
está redactada con menos aliño que la primera, habiendo incluso algu- to; que conoce la forma de ser de los pastores, vaqueros, mayordomos y
nos pasajes que resultan de difícil comprensión. Como documento histo- demás trabajadores, lo que impide ser víctima de sus engaños; finalmen-
riográfico es valioso no sólo por su carácter excepcional, sino sobre todo te, un propietario que tiene una idea muy clara de la potencia producti-
porque plasma la experiencia que la familia Rincón Gallardo acumuló a va de las fincas y de la forma de obtener de ellas un beneficio óptimo.
lo largo del siglo XVII en el manejo de sus haciendas. Cabe señalar el he- Por eso puede decir con seguridad que si su hijo sigue con puntualidad
cho de que el capitán José Rincón Gallardo no fue uno de esos mineros sus consejos, “con eso te levantarás con el reino y serás dueño de todos
que labraron en el curso de unas pocas décadas fortunas inmensas, im- los caudales”. Se trata sin duda de un documento notable, que por sí mis-
pulsados por el descubrimiento casual de una veta, sino el heredero de mo pone en entredicho muchos de los mitos y prejuicios con que los his-
un patrimonio acumulado lenta y pacientemente a lo largo de todo un toriadores abordamos a veces el estudio de la vida rural novohispana.
siglo. Esta convicción de no un ser un nuevo rico improvisado, sino el
portador de una tradición familiar, es expresada con absoluta nitidez en
el parágrafo 33 de la memoria, donde el autor remite a “LO DEMÁS ES EMBROMARSE…”

las experiencias y gobierno que adquirí de mi padre, que de Dios goza, el José Rincón Gallardo ocupa la mayor parte de la Memoria en dar instruc-
cual [a su vez] las adquirió de más de cuarenta años de mi tío el General ciones precisas acerca de la forma en que se debía criar el ganado para
Agustín Rincón, el cual fue dueño de dichas haciendas y las crió, y yo que colocarlo en el mercado al mejor precio posible. Así, se extiende amplia-
tengo vivido todo esto de treinta años de asistencia, y no ha quedado palmo mente en detalles como el traslado de los rebaños de un lugar a otro; la
de tierra ni rincón que no he andado, y se lo mucho que me tienen ocultado cantidad y el tipo de animales que se debían tener en cada hacienda; los
y perdido en razón de tierras...7 cuidados que había que tener a la hora de llevar las ovejas a los ahijade-
ros y realizar las cruzas, etcétera. Aconseja, por ejemplo, que durante el
7
Tomada al pie de la letra, la alusión a los “treinta años de asistencia” que tenía en
las haciendas, indicaría que José Rincón se hizo cargo de su administración desde 1674. Como ya se dijo, la toma formal de posesión de las fincas se llevó a cabo en 1683, pero es
Pensamos que se trata de una frase retórica y que el número de años expresado es sólo muy probable que desde algunos años antes José Rincón hubiera ido compenetrándose
indicativo del mucho tiempo y del conocimiento detallado que tenía de las haciendas. de sus asuntos.

1 3 4 1 3 5
DOCUMENTO MEMORIA DE JOSÉ RINCÓN GALLARDO

estiaje las ovejas se mantuvieran en los llanos del Tecuán, pero que si se dicha hacienda siempre se coge, por cuanto los húmedos que tiene, y que
presentara “alguna enfermedad por los calores de marzo” fueran lleva- con dos mil y quinientos pesos se avía dicha hacienda, y teniendo dicha ha-
das a las mesas altas y se les diera salitre, “que con eso las he escapado”. cienda a las demás haciendas no necesitan de más labor porque con las de
Como remedio también prescribe que se hagan traer dos cargas de ceba- las Encinillas y la de las Peñuelas se bastan.
dilla de Tepatitlán
Sobre el carácter crucial que tenía esta semilla en la economía del la-
que allí la cogen los indios y la venden a los pastores, y es menester que la tifundio, agrega que era muy conveniente tener dos cosechas de maíz
agencies y la tengan los pastores [...]que todos los que son de a pie la traen “resagadas” o almacenadas en las trojes, “porque teniendo siempre una
en costalitos molida para curar el ganado que le cae gusanos, y con eso ex- cosecha de resago no se mercará un grano de maíz en las haciendas ni pa-
cusarás dar tabaco para que curen los gusanos, porque con la cebadilla es decerán necesidad de maíz, que es lo principal para mantener el gentío
mejor curar. de ellas”. En Peñuelas la calidad de las tierras era excepcional, pues se
Durante el tiempo de aguas, recomienda que las ovejas fueran lleva- calculaba que con 50 fanegas sembradas se cosechaban “ordinariamente”
das “a gozar de los pastos y lagunas”, reservando los agostaderos de 5 000, lo que establece una relación de 100 granos cosechados por cada
Chinampas y Bocas “para en tiempo de la rigurosidad de la seca”. Se de- uno que se sembraba.8 Aparte de maíz, debía sembrarse en las haciendas
bía tener cuidado de que en estos lugares no pastaran vacas ni yeguas, “bastante frijol”, pues repartiendo entre los peones de las haciendas bue-
“porque es la causa de enfermar los ganados de papilla”. En cuanto al nas raciones de esta semilla “excusarás el matar reses para ración”. Cuan-
gran peligro que representaban los lobos y coyotes que tenían sus guari- do escaseaban el frijol y el maíz, sobre todo este último, era inevitable que
das en las montañas y parajes apartados, se indica en muchos pasajes la las raciones se pagaran con borregas, vacas y terneras, “porque se las co-
forma de mantenerlos alejados y de asegurar “los ahijaderos”. Para ase- men [los peones y pastores] no teniendo raciones de maíz”.
gurar la blancura y calidad de la lana, sugiere “que los padres que se hu-
bieren de echar en las haciendas [...] sean todos carneros blancos”, sin
manchas ni vetas negras, “porque de tener cualquier pinta echará toda HOMBRES “DE BIEN Y DE BIENES”
la cría pinta de colores de negro y blanco, o acollonado, o plateado…”
Sobre la cantidad de ovejas que era deseable tener en las haciendas ob- La misma lógica se aplicaba en el caso de las mercancías que se daban a
serva: “para la conservación de las haciendas [y] para que no se sobre- los trabajadores, las cuales debían salir del obraje, la tenería y la fragua
carguen [procura] tener en ellas [...] treinta mil ovejas en Bocas, se en- de la hacienda de Ciénega de Mata. Así, al hablar del obraje de la hacien-
tiende de vientre, y en Chinampas otras tantas de vientre”. Y agrega en
forma cáustica: “lo demás es embromarse”, para aclarar que cualquier
8
intento de tener más cabezas de ganado menor sería contraproducente. Claude Morin ha calculado que en las haciendas del Bajío en el siglo XVIII el rendi-
También concede gran importancia al cultivo de maíz, frijol y trigo, miento promedio del maíz era de 80 por 1 (Michoacán en la Nueva España del siglo XVIII.
Crecimiento y desigualdad en una economía colonial, México, Fondo de Cultura Económica,
pues de esa manera se conseguían los insumos necesarios para aviar las
1979, 238-240). En el valle de Aguascalientes las mejores haciendas producían 60 fanegas
haciendas sin tener que desembolsar dinero comprándolos en otras par- de maíz por cada una que se sembraba, o un poco más (Jesús Gómez Serrano, Haciendas
tes. Por esta razón le recomienda a su hijo: y ranchos de Aguascalientes, Estudio regional sobre la tenencia de la tierra y el desarrollo agríco-
la en el siglo XIX, México, Universidad Autónoma de Aguascalientes-Fomento Cultural
Lo primero es recaudar la hacienda de las Peñuelas, que es la llave de las Banamex, 2000, 357.) Ello quiere decir que la productividad de la hacienda de Peñuelas
demás haciendas, por cuanto que cuando en el mundo no se coge maíz, en a principios del siglo XVIII era notable.

1 3 6 1 3 7
DOCUMENTO MEMORIA DE JOSÉ RINCÓN GALLARDO

da, Rincón recomendaba “poner en corriente tus cuatro telares en el La importancia de un matrimonio bien concertado como el mejor
obraje, dos de frazadas y uno de jerga y otro de sayal, pues estos tenía medio para ampliar las relaciones familiares y conseguir mayor influen-
en un tiempo que con la lana de las ovejas viejas se avía con trescientas cia queda de manifiesto en las alusiones que se hacen a Francisco Feijoo,
arrobas, que con esto tendrás suficientes frazadas, así para darles a los oidor de la Audiencia de Nueva Galicia y suegro de Manuel Rincón
muchachos a el tiempo de los ahijaderos, como para excusar el renglón Gallardo, precisamente el destinatario de la Memoria:
en los avíos de frazadas”. Lo mismo se aplicaba en el caso de la tenería,
la cual debía estar “con el corriente de vaquetas para tener arrimados en […] Y no ha quedado palmo de tierra ni rincón que no he andado y se lo mu-
el almacén mil y quinientos pares de zapatos que se le pagan al curtidor cho que me tienen ocultado y perdido en razón de tierras, que con el tiem-
a real y dan a cuatro reales a la cuenta”. po y la ayuda de Dios y del señor Don Francisco Feijoo, tu padre, que es per-
Esta tendencia hacia la autosuficiencia y la búsqueda de mayores ga- sona de bastante empeño para dejarte muy redondeado y muy en corriente
nancias no llevaba a José Rincón a menospreciar los intercambios con el todo, que así lo espero de su grandeza, que mirará con piedad esas pobres
exterior. Así, además de recomendar a su hijo tener siempre listas varias haciendas que tantos enemigos han tenido y han sido tan codiciadas de tan-
recuas de mulas para llevar y traer toda clase de mercancías –principal- tos, que yo te aseguro que si hubiera tenido salud y las pudiera yo haber
mente lana, pero también vaquetas, fustes, tabaco, cebadilla, chicharrón, asistido y no haber tenido tantos pleitos me sobraran hoy más de ciento y
harina y chile– hacía énfasis en algo crucial: tener gente de confianza en cincuenta mil pesos.
diversos sitios que se hiciera cargo de manejar los asuntos relacionados
con la venta de mercancías y el pago de deudas. Consciente de la influencia del oidor Feijoo y de los favores que de
La importancia que le concedía a las redes de influencia, los lazos de éste podían recibirse, Rincón no dudaba en recomendarle a su hijo que
clientelazgo y la necesidad de relacionarse con hombres “de bien y de fuera solícito y obediente con su suegro, procurando “darle gusto en
bienes” en diversas plazas comerciales, se expresa con claridad en la si- todo lo que te mandare y ordenare, que con eso no podrás errar nada,
guiente indicación, que además está formulada como mandato: pues yo he tenido a mucha fortuna el habernos agarrado de esa aldaba
para que tu tengas todo el amparo y alivio, que así lo espero de su mu-
procurarás granjear un amigo en San Luis Potosí para lo que se te ofreciere, cha nobleza, amor y cariño que te tiene”. La metáfora es elocuente: el pa-
como tal vez se ofrece enviar la recua con harina y porque no se te detenga rentesco como hecho afortunado y el oidor como aldaba con la que se to-
y hagan más gastos los arrieros les dejan la harina y de allí a veinte días caban puertas que se abrían, lo que facilitaba toda clase de negocios.
despachas por el dinero y dos mulas aparejadas para que te vuelvan tres
costales.
AMO ESTRICTO Y PADRE BONDADOSO
Y añadía:
El tema de la fuerza de trabajo también es motivo de muchas reflexiones.
Te digo que en Zacatecas, de tener necesitas otro amigo que haga lo mismo Se previene sobre el monto y el tipo de paga que se debía dar a cada uno
y así para que pagues las huérfanas y festividades de la Concepción y San de los trabajadores. Específicamente son mencionados mayordomos, va-
Ignacio, y para lo más que se te ofreciere y que sea este amigo hombre de queros, rancheros, pastores, sirvientes e indios, indicándose la clase de
bien y de bienes, porque con eso te podrá suplir hasta en tanto que tu pue- relación que debía establecerse con cada uno de ellos, lo que en forma
das satisfacer o en harinas o en lo que te pareciere; y en Guadalajara es lo obvia alude a la división del trabajo, pero también a la compleja jerarqui-
mismo, que esos teníamos nosotros para el alivio de nuestros cuidados. zación social que existía en el México rural de la época. Los administra-

1 3 8 1 3 9
DOCUMENTO MEMORIA DE JOSÉ RINCÓN GALLARDO

dores de las haciendas desempeñaban un rol crucial y José Rincón la- uno de sus engaños. Sin duda eran buenas personas, pero había que te-
menta haberse topado “con administradores que no han querido seguir ner cuidado con ellos y no creerse todo lo que decían. Por ejemplo, cuan-
mi dictamen, porque si hubieran seguido los corrientes que pongo aquí do indica que salían 30 raciones de una “res grande” y 27 de una “res pe-
no se hubieran menoscabado dichas haciendas”. queña”, subraya que esa precisión la hacía “porque no te den a entender
Sin salirse un ápice del rol paternalista que jugaba como gran hacen- otra cosa”. Y en forma aún más explícita, al hablar de la forma correcta
dado, general de su ejército particular y patrón de un gran número de de trasquilar y capar a las ovejas, anota: “y si los pastores dijeren otra
campesinos, José Rincón se muestra exigente y cuidadoso con las cuen- cosa diles que tu padre te ha mandado esto y que muy bien sabe lo que
tas, recelando siempre de la honestidad de los trabajadores, a todos los manda y que tú no ignoras nada, que estás bastantemente industriado
cuales se debía pedir “cuenta muy estrecha” de los bienes confiados a su de pastores del reino”.
cuidado. Al referirse a los pastores, no duda en recomendar que se les Pero además de amo estricto y un poco desconfiado, Rincón era tam-
hicieran cuentas muy minuciosas, pues el más pequeño de los hurtos bién un padre bondadoso, consciente de su obligación de mantener con-
podía, a la larga, asumir la forma de un cuantioso desfalco: tentos a los trabajadores de sus haciendas, por lo cual le aconsejaba a su
hijo:
es menester hacer el cómputo de las borregas que gastan los pastores en ra-
zón cada semana; también es muy necesario que te entreguen todas las za- Si quieres tener gente que te sirva a gusto, has de procurar que se les de sus
leas y cueros de las ovejas que se mueren, pidiéndoles cuenta muy estrecha raciones de maíz y que anden bien comidos y vestidos, y con eso andarán
de todo esto, y asimismo de los carneros que se murieren en el rancho de bo- gustosos y no te robarán y cuidarán de la hacienda, doliéndose de ella, y en
rregos, y cada hacienda que tenga su cuaderno de todo esto; y asimismo en especial te encargo a tus pobres esclavos pastores que los procures tener ves-
el Tecuán de las reses que mataren para ración, que te den cuenta de los cue- tidos y que sus raciones no les falten, y su tabaco [...] y cuando te vayas a di-
ros y del cebo de dichas reses, como asimismo en La Punta y en la labor de vertir a los ahijaderos procura llevar diez manojos e tabaco para darles.
Encinillas, y esto que parece nada es un renglón considerable al cabo del año.
Claramente, estos pasajes de la Memoria aluden a la necesidad de ob-
En el terreno de eso que a veces se llama “economía moral”, Rincón tener el mayor provecho posible del trabajo de los pastores y vaqueros,
se muestra preocupado por la ociosidad de los vaqueros y rancheros. lo que remite a la racionalidad y el espíritu de lucro del hacendado, pero
Con un ojo puesto en evitar los vicios y otro en la forma de hacer traba- también es evidente que muchas indicaciones y reflexiones están per-
jar a los rancheros y vaqueros “ociosos”, sentenciaba: meadas por un espíritu paternalista, la convicción que tiene el patrón de
ser en parte el responsable de las buenas costumbres y la moralidad
que los ratos desocupados que no hay tanto que hacer la seca es muy de sus esclavos y trabajadores. En el ámbito tan delicado de la enseñan-
bien que los vaqueros que hubiere de sobra se ocupen en hacer adobes en el za de la religión, Rincón Gallardo llega al extremo de mostrar el celo y
Tecuán, o en cavar alguna cal para lo necesario de reparos de las casas, pues la preocupación propias de un pastor de almas, pues en forma muy en-
tengo hornos hechos allí; también lo mismo pueden hacer en dicho tiempo carecida le recomienda a su hijo:
de seca los rancheros de Chinampas, porque estos hay temporadas de dos
meses en que están ociosos y es bueno que se ocupen en esto y ganen el sa- [procura] que en la Ciénega de Mata como así en las demás haciendas man-
lario y no estén ociosos. des se continúe el rezar el rosario de la Santísima Virgen, como asimismo
que se tenga mucho cuidado los mayordomos en recoger todos los mucha-
En esta misma línea se inscriben algunas curiosas indicaciones sobre chos en los ranchos y que de parte de tarde les enseñen las cuatro oraciones,
el carácter de los pastores y la posibilidad siempre presente de caer en credo, mandamientos y artículos de la fe y la doctrina cristiana breve del pa-

1 4 0 1 4 1
DOCUMENTO MEMORIA DE JOSÉ RINCÓN GALLARDO

dre Castaño, y esto encargo más que todas cuantas cosas hay que se hagan sentido de sabiduría decantada por la experiencia y transmitida de una
con toda vigilancia y no haya descuido, pues es obligación de los padres que generación a la siguiente, o por un mandatario a su sucesor, esta memo-
tenemos familia; procura todo lo posible en todas tus haciendas que se evite ria recuerda las instrucciones que escribían los virreyes al término de su
todo aquello que fuere ofensa de Dios no se permita; y a los mayordomos gestión.9 Inclusive, si se disculpa la desmesura de la comparación, remite
encargarles la conciencia en esto, que con esto descargarás la tuya en algu- también el conjunto de cuatro instrucciones que entre 1529 y 1556 redac-
na manera remediando tú por tu parte y ellos por la suya y con eso te ayu- tó Carlos V para su hijo Felipe II, “en el caso de que la muerte le llamase
dará Dios y te aumentará los bienes temporales y tendrás felices sucesos. repentinamente”.10 En un plano más inmediato, parafraseando a Cheva-
lier, podemos afirmar que esta Memoria habla de una familia que cierta-
De la misma manera que muchos hacendados de la época, José Rin- mente estaba afanada en acumular tierras y “señorear” a todo lo largo y
cón Gallardo se concebía como un padre de familia responsable del bien- ancho de una extensa región, pero que también estaba lúcidamente
estar material y espiritual de sus hijos, los trabajadores. Eso suponía el preocupada por “el rendimiento económico de sus propiedades”. A prin-
ejercicio cotidiano de la autoridad, en el cual se combinaban las “buenas cipios del siglo XVIII, los Rincón Gallardo no sólo estaban empeñados en
razones” con un claro sentido de superioridad étnica y social. Por eso re- ampliar sus haciendas y pelear la posesión de cada sitio mercedado,
comendaba a su hijo “mandar con entereza y con buenas razones, que como lo atestigua con elocuencia la composición general de sus tierras
con eso [los pastores] te tendrán respeto y te obedecerán, y en ocasiones que negoció José Rincón Gallardo en 1697, sino también en “desarrollar
es menester mostrar seriedad y mucha entereza con algunos, pero en el sus rentas, aumentar sus capitales [y] multiplicar sus recursos”.11
mandar procura que te obedezcan con puntualidad”. El autor de esta Memoria es claramente un individuo que aplica cri-
En la visión del capitán Rincón no había riña entre la búsqueda de terios racionales a los cultivos y la cría de ganados, que exhibe un co-
ganancias, incluso valiéndose de la administración de los diezmos, y el nocimiento acucioso de las condiciones del lugar (clima, calidad de las
deber que como buen cristiano tenía de darle lo suyo a la Iglesia. A su tierras, aguajes, pastos, etc.), que tiene una clara idea de la forma de or-
hijo le hace ver que “es muy bueno quedarse con [la administración de] ganizar y aprovechar la mano de obra y que, en suma, se inscribe de ma-
los diezmos de las haciendas, como asimismo si se pudiera meter un
diezmo como es el de Aguascalientes o el de los Lagos, que con eso en 9
Vienen a colación las razones que esgrimió Felipe IV en 1628 para ordenar que se
poco tiempo se duplicarán así los ganados menores de las haciendas redactaran esas instrucciones: “siendo tan conveniente a nuestro servicio saber el estado
como los mayores y caballadas”. Pero enseguida aclara que él es un en que dejan los virreyes, cuando acaban sus gobiernos, los reinos donde lo han sido,
hombre piadoso y que “con esto de [los] diezmos es menester el pagár- para que según la noticia que dieren se pueda ayudar a la conservación de lo que la buen
disposición de las cosas pidiere, o prevenir no lleguen a peor estado si se le tuvieren de
selos a Dios para que multiplique lo demás”. En forma muy clara, Rin-
inconveniente, y saber con particularidad lo que pasa en todas partes para que se consi-
cón hace suya la doctrina evangélica según la cual hay que darle a Dios ga el fruto que esperamos…” (Ignacio Rubio Mañé, El Virreinato, México, UNAM-FCE, 1983,
lo que es de Dios, conservando él como hacendado lo suyo. tomo I: Orígenes y jurisdicciones, y dinámica social de los virreyes, 86-87).
10
Para Geoffrey Parker, estas instrucciones “son una síntesis del arte de gobernar y
un modelo para los actos de un buen príncipe”; y citando al erudito belga L. P. Gachard,
SEÑORES DE TIERRAS Y HOMBRES DE NEGOCIOS agrega que constituyen “un monumento de prudencia, previsión, experiencia consuma-
da en gobernar, de profundo conocimiento de los hombres y del mundo” (Felipe II, Ma-
drid, Alianza Editorial, 1991, 51-52). Por su parte, Peter Pierson afirma que “estas instruc-
En resumen, podemos decir que la Memoria que preparó José Rincón Ga- ciones constituyen uno de los documentos políticos más admirables que se conozcan”
llardo para su hijo condensa el conocimiento acumulado por la familia a (Felipe II de España, Madrid, Fondo de Cultura Económica, 1998, 23).
lo largo de todo un siglo en la administración de sus haciendas. En su 11
Chevalier, La formación de los latifundios en México, 303.

1 4 2 1 4 3
DOCUMENTO MEMORIA DE JOSÉ RINCÓN GALLARDO

nera notable en esa tradición novohispana, insuficientemente estudiada DOCUMENTO


todavía, que tiene que ver con la introducción de criterios positivos en
la agricultura y con la colocación de los cimientos de lo que andando el Año de 1704. Instrucción que Don José Rincón Gallardo dio a Don Manuel
tiempo sería la economía agrícola. Con frecuencia se han enfatizado la Rincón Gallardo su hijo en la ciudad de la Puebla en 16 de octubre de dicho año
tendencia a la acumulación de tierras y el desinterés de los hacendados de 1704 para el gobierno de las haciendas de la Ciénega de Mata que le tenía re-
con respecto a los aspectos prácticos de la administración de sus bienes. nunciadas siendo la primera de ellas la Labor de San Isidro de las Peñuelas Ju-
Este documento apunta en un sentido completamente diferente, pues risdicción de Aguascalientes.13
demuestra que dichos aspectos no excluían los principios de explotación Memoria de los corrientes que se deben observar en la Ciénega de Mata y en las
racional de las grandes haciendas. Con un espíritu que anticipa la Ins- demás haciendas que mi hijo Don Manuel ha de procurar observar para conser-
trucción redactada por los jesuitas hacia mediados del siglo XVIII,12 la Me- vación y buen corriente de ellas y en esto hará todo lo que conviniere como quien
moria que preparó José Rincón Gallardo resume la experiencia que ha- tiene las cosas patentes.14
bían acumulado tres generaciones de propietarios en todos los asuntos
relacionados con la administración de sus haciendas. [1] Lo primero es recaudar la hacienda de las Peñuelas, que es la llave de
las demás haciendas, por cuanto que cuando en el mundo no se coge
Jesús Gómez Serrano maíz, en dicha hacienda siempre se coge, por cuanto los húmedos que
DEPARTAMENTO DE HISTORIA/UAA tiene y que con dos mil y quinientos pesos se avía dicha hacienda y te-
jgomez@correo.uaa.mx niendo dicha hacienda a las demás haciendas no necesitan de más labor
porque con las de las Encinillas y la de las Peñuelas les bastan. Para po-
Francisco Javier Delgado Aguilar der resagar dos cosechas en una porque teniendo siempre una cosecha
ARCHIVO HISTÓRICO DEL ESTADO DE AGUASCALIENTES de resago no se mercará un grano de maíz en las haciendas ni padecerán
fjda75@yahoo.com.mx necesidad de maíz que es lo principal para mantener el gentío de ellas.15
[2] Que en la Ciénega de Mata y en las cañadas de dicha hacienda es
muy conveniente que no se siembre grano de maíz, por cuanto si hay un
temporal de aguas nieves o aires recios tengan las desdichadas ovejas
donde las puedan meter por el cordelaje y tengan esos abrigos, para que
no les cause enfermedad.

13
Título de la carátula del documento, tal como se conserva en el Archivo Colonial de
la Familia Rincón Gallardo, caja 12, expediente 22, 12 fs. El título y la carátula parecen aña-
didos a fines del siglo XVIII, con motivo de la organización de los papeles de la familia.
12 14
Instrucciones a los hermanos jesuitas administradores de haciendas (Manuscrito mexicano Título o encabezado del documento original.
15
del siglo XVIII). Prólogo y notas de F. Chevalier, México, UNAM, 1950. El mismo autor glosa La transcripción es literal. Con el propósito de facilitar la lectura y el trabajo de
el documento en La formación de los latifundios en México, 302-306. Herman W. Honrad de- otros historiadores, se han modernizado la ortografía y la puntuación y se han añadido
fine estas instrucciones como “un manual de operación”; véase su libro Una hacienda de los números de los capítulos o parágrafos, sustituyendo con estos la voz ittem, usada en
los jesuitas en el México colonial: Santa Lucía, 1576-1767, México, Fondo de Cultura Econó- el original para distinguir cada entrada. Se indican expresamente algunos pequeños pa-
mica, 1989, 141-145. sajes que resultaron ilegibles.

1 4 4 1 4 5
DOCUMENTO MEMORIA DE JOSÉ RINCÓN GALLARDO

[3] Que en tiempo de seca gozan las ovejas los llanos del Tecuán y si tantas de vientre, lo demás es embromarse; ahora digo que esto siempre
acaso hubiera alguna enfermedad por los calores de marzo procurar sa- ha de estar en esta cabeza porque con eso se hacen mejores las pariciones
carlas de dichos llanos y echarlas de los altos que son las mesas y darles y no con tanta ofuscación; que como en esto tengas buenos ahijadores es
algún salitre, que con eso las he escapado. materia para apartar todos los años veinte mil borregos.
[4] Que las ovejas en tiempo de aguas se han de retirar todo lo posi- [9] También digo y soy de parecer que si pudieras no sacar en cuatro
ble a gozar de los pastos y lagunas para reservar los agostaderos de Chi- años ninguna res del Tecuán ni ningunos caballos, porque con eso a los
nampas y Bocas y ahijaderos, para en tiempo de la rigurosidad de la cuatro años pudieras poner un hilo de sacar dos mil novillos cada un
seca; procura que en dichos agostaderos, como es Chinampas y Bocas, año y quinientas o mil mulas, esto era teniendo mucho cuidado en que
no se permita vacas ni yeguas porque es la causa de enfermar los gana- todos los vaqueros trabajasen en mulas y en caballos y que ninguno en-
dos de papilla, porque cogen las aguas vacadas que llaman y así enfer- sillara yeguas de manada, sólo que todas las manadas se tusaran y con
man los ganados menores y es muy necesario tener este cuidado. eso a los cuatro años podías sacar dos o tres mil caballos, procurando
[5] Que antes que paran las ovejas un mes antes procurarás mandar aburrar dos mil yeguas, pues las tienes, y ahijar bastantes burros, pues
se eche yerba por todas partes así a los lobos como coyotes, que con eso se tienes burras que paran, pues en esta forma lo tenía yo mientras tuve sa-
aseguran los corderos que nacieren; y esto es menester muchísimo cui- lud y mientras las asistí.
dado que con eso tendrás logro de muy buenos ahijaderos. [10] También te digo que es corriente de las haciendas en que si se
[6] También es muy necesario que los padres de las ovejas se saquen apartan tres mil [¿ovejas?] viejas se suelen rescatar otras dos mil para ha-
a su tiempo y que procures que coman rastrojos de los maíces que se co- cer una matanza de cinco mil, que este dinero luego se dobla; que me pa-
gen se (ilegible) y estén gordos para cuando llegue el caso de echarlos en rece que será de alguna ayuda esto con los trigos que en dicha hacienda
las ovejas; procura tener cuidado que los mayordomos siguieren pues lo de Encinillas para ayuda de la paga de censos en Guadalajara y Zacate-
entienden cuando hayan de sacar los padres de las ovejas sea a su tiem- cas, y con tus carneros y lanas te podrás aviar y pagar los censos de Mé-
po y no que hay algunos mayordomos tan descuidados y flojos que por xico, suspendiendo el no sacar nada del Tecuán, sólo antes sí meterle
no hacerlo dejan un mes en las ovejas los padres y con eso es suficiente añejas lo más que; con que se cierre el camino del atajo que llaman los
para que con eso estén chorreando las ovejas corderos todo el año, y esto arrieros del puesto de Salsipuedes quedará hecho una caja El Tecuán
no les conviene nada a las ovejas ni a su dueño porque de aquí demana porque es muy poca la que tiene de echarla de cerca; y que los arrieros
no poderse emparejar pastorías para las buenas ventas, porque si va una viéndolo tapado se irán por el camino más antiguo pues es razón y se les
pastoría de primales dispareja se da a menos precio, lo que no tiene quita este camino de atajo que por la conveniencia de las terneras y
cuando es pareja. vacas del Tecuán lo han hecho que siempre estuve si no me vengo en pe-
[7] Que los padres que se hubieren de echar en las haciendas procu- dir a la Audiencia Real Provisión para notificarles a dichos arrieros con
ra que sean todos carneros blancos y estos que no tengan pintas dentro pena de multa o perdidas las mulas se fuesen al camino real antiguo y
de la lengua ni vetas negras en las llaves, porque de tener cualquiera que no me cruzasen por las haciendas por el mucho daño y perjuicio que
pinta echará toda la cría pinta de colores de negro y blanco o acollotado se siguen a mis ganados.
o plateado y así es menester que cualesquieran sean líquidos o blancos [11] Es advertencia que todos los pastores que tuvieres traigan sus
del todo, o prietos del todo; esto en cuanto a materias de ovejas. perros de a pie y con eso guardarán los ganados de noche porque el pas-
[8] Procura para la conservación de las haciendas, para que no se so- tor que no tiene perros no es pastor y cuando se hubiere de echar yerba
brecarguen, tener en ellas así en las Bocas como en Chinampas tener es menester tener mucho cuidado porque la yerba y huesos salados que
treinta mil ovejas en Bocas, se entiende de vientre, y en Chinampas otras se tira con ella la vayan a resquistrar (¿?) si ha quedado alguna en el

1 4 6 1 4 7
DOCUMENTO MEMORIA DE JOSÉ RINCÓN GALLARDO

campo, para que la levanten y quemen los huesos porque no topen los [14] También es menester hacer el cómputo de las borregas que gas-
perros de los pastores con ellos, que es necesario este cuidado y todo lo tan los pastores en razón cada semana; también es muy necesario que te
más del año es menester estar echando yerba porque todos los lobos que entreguen todas las zaleas y cueros de las ovejas que se mueren, pidién-
vienen del Nuevo Reino de León cuando salen a las trasquilas afuera se doles cuenta muy estrecha de todo esto, y asimismo de los carneros que
quedan en los agostaderos de las haciendas que por eso tenía un escla- se murieren en el rancho de borregos, y cada hacienda que tenga su cua-
vo que en tanates cargaba la yerba y tenía ese oficio y no tenía otro oficio. derno de todo esto, y asimismo en el Tecuán de las reses que mataren
[12] También es advertencia que todos los potros que tuvieren dos para ración que te den cuenta de los cueros y del cebo de dichas reses,
años y seis meses, y así los machos y mulas, han de ir a cumplir los como asimismo en La Punta y en la labor de Encinillas, y esto que pare-
tres años a el potrero de la mesa de San Miguel o a el potrero de la Ciéne- ce nada es un renglón considerable al cabo del año.
ga de Mata, porque todo esto se aparta de las manadas de esta edad de [15] Y fuera del maíz has de darles para el gasto del año una carga de
dos años y seis meses, porque ya está descollado y criado en las mana- sal, una de jabón, unos manojos de tabaco para que les de a su cuenta el
das con que el apartarlos de dichas manadas es porque los potros no mayordomo, porque no tengan [ilegible] los pastores de dejar las ovejas
descuadernen las manadas y los machos y mulas no maten lo potrillos y venir a la Ciénega por esto.
recién nacidos y por obviar este inconveniente y así esto se aparta y se [16] También te advierto que es necesario todos los años meter en las
cuida separado para que en cumpliendo los tres años los mandes capar, haciendas de labor cincuenta novillos para renovarlas y todos los bueyes
y con eso tendrás todas las manadas con sus caballos padres sin que nin- viejos sacarlos para venderlos; asimismo todas las vacas viejas que hu-
guna se te descuaderne; también es disposición de estos machos es me- biere en el rodeo del Tecuán se reservan para irles dando de ración a los
ter todas la secas en los ranchos de Chinampas cuarenta machos o mulas indios de la trasquila como a los de la hacienda y no consentir que maten
para que las domen los rancheros, pues en la seca no tienen que hacer y vaca nueva que me dicen han dejado bastantes vacas viejas en el Tecuán.
con eso no ganan el salario de balde, y tener ordinariamente aviado el [17] También digo que en los rodeos es costumbre si el becerraje está
rancho de Chinampas con doscientos caballos metiéndole todos los años recio el dar el primer rodeo que llaman asentallo seis días después de
cuarenta potros, y con eso cuando quieras hacer partida para vender po- Santiago, y esto es reconociendo ya el becerraje recio porque casi hasta
drás sacar caballos ya de siete años y de seis y mulas y machos para re- ese tiempo esta pariendo algún ganado por lo tarde que se picó.
cuas o para vender del dicho rancho. dejando renovados tus ranchos y [18] También es advertencia que cuando se haya de hacer partida se
aviados y por no dilatarme digo que lo mismo puedes hacer con el rancho saque poco a poco orillando toros y novillos, y si acaso está pariendo el
de las Bocas y con la hacienda del Tecuán y Punta, que con eso todo el ganado no te metas jamás solo, que por pie suelto el ganado se cargue
mundo andará en mulas, machos y caballos y ninguno andará en yeguas, en dicho pie de los vaqueros que anduvieren vaqueando que cuando di-
que todo lo que toca a la hembra se ha de dar para el multiplico de crías. cen vaqueadas se parten cuatro cuadrillas cada cuadrilla con su pie de
[13] También te digo que hagas el cómputo del maíz que gastan Las doce bueyes o cabestros y se van a vaquear a donde andan los toros y
Chinampas y Las Bocas para que con cuenta y razón se entregue a el ma- novillos ariscos y esto se dan reparos para ello y esto es cuando urge pre-
yordomo y se le ponga en su troje de dicho rancho cada un año su gasto, cisión el hacer partida.
como así mismo es forzoso tener cuaderno de todo lo que entregares de [19] También digo que en todo caso es mejor hacer partida un año an-
maíz, potros y machos y mulas, para pedirles cuenta y que si muriere al- tes que salga, porque del otro modo que te digo se siguen muchos daños
guna bestia te entreguen los hierros para que no haya que esperar días, los cuales refiero aquí. El uno es de seijar becerros, el otro de dar reparos
y este cuidado ha de tener el mayordomo, y asimismo a todos los demás para apartar los toros y novillos que andan retirados es causa de levan-
que tuvieren a cargo alguna cosa. tarse los ganados y que no reconozcan en el rodeo y se levanten; que este

1 4 8 1 4 9
DOCUMENTO MEMORIA DE JOSÉ RINCÓN GALLARDO

año que se hizo la partida no lo harás con más de quinientos becerros de mismo como dos o tres mil estacas y mucho sotoli que sirve de mecates
perdida por ser el tiempo tan riguroso y estar actualmente pariendo el para amarrar las ovejas en tiempo de ahijaderos; que esto se tiene preve-
ganado y así en esto es menester mucho cuidado. nido un mes antes que llegue el ahijadero y un poco de almagre para se-
[20] También digo que hablando de Ciénega de Mata si quisieres te- ñalar las ovejas y corderos, que esta señal sirve mientras dura el ahijade-
ner todos los años tres mil pesos que dar a la cuenta de tus sirvientes has ro que quiera Dios no sean necesarias las estacas; que será señal que está
de procurar usar de estas industrias procurando tener en tu almacén dos gordo el ganado y abundante de leche; y si por contingencia está flaco el
cargas de tabaco de [ilegible], tener treinta cargas de sal, tener diez car- ganado y no puede criar el cordero será muy acertado el matar la cría
gas de panela de la manteca que te sobrare de la matanza y de los huesos porque quede la oveja de vientre porque si se ha de morir la oveja y se
puedes hacer dos mil pesos de jabón. ha de morir la cría es perderlo todo esto rara vez sucede pero porque
[21] Tener tu tenería con el corriente de vaquetas para tener arrima- estés advertido.
dos en el almacén mil y quinientos pares de zapatos que se le pagan al [25] El decirte que recaudes la hacienda de Peñuelas es porque te-
curtidor a real y dan a cuatro reales a la cuenta; y ten de rezago cuarenta niendo dicha hacienda en una seca por tener inmediato el monte te bajan
o cincuenta fustes que en enviando un atajo de mulas a Michoacán con a dicha hacienda todas las maderas necesarias como son vigas de marca
chicharrones y zaleas te traerán de Chamaquero y Celaya fustes sufi- mayor, morrillos, camas para las carretas, pértigos y limones, y de dicha
cientes, chile para todo el año para dar a tus indios trasquiladores y a los hacienda se proveen todas las demás- asimismo en dicha hacienda de
demás a tu servicio que todos lo sacan a su cuenta. Peñuelas se suelen quemar todas las secas ochocientas y mil y quinien-
[22] Pondrás en corriente tu fragua pues hay fuelles y lo necesario en tas anegas de cal y es grande alivio para el reparo de todas las demás.
ella para calzar rejas y alino de tijeras y más que se ofreciere porque de [26] En la Ciénega de Mata necesitas tener una recua de sesenta y
hacer cualquiera cosa de estas fuera cuesta a el doble. cinco mulas aparejadas que con facilidad teniendo de cosecha la jerga
[23] Asimismo puedes poner en corriente tus cuatro telares en el como asimismo las vaquetas la puedes hacer dentro de dos meses, pues
obraje, dos de frazadas y uno de jerga y otro de sayal, pues estos tenía yo la hice en el mismo tiempo, pues en Las Bocas hay bastante [ilegible]
en un tiempo que con la lana de las ovejas viejas se avía con trescientas de aparejos yen Lagos hay tule amén de aparejos, y puedes tener dicha
arrobas, que con esto tendrás suficientes frazadas, así para darles a los recua con su rienda de sesenta mulas; y fuera de esta recua has de tener
muchachos a el tiempo de los ahijaderos como para excusar el renglón como treinta mulas separadas aparejadas para lo necesario de la misma
en los avíos de frazadas, esa advertencia que de una res grande salen de hacienda; porque acaece el enviar la recua grande con lana a México y
ración treinta raciones y de una res pequeña salen veinte y siete raciones; quedan en la hacienda estas treinta mulas aparejadas para enviarlas a
esto pongo porque no te den a entender otra cosa; también es adverten- Zacatecas con harina y enviarlas por [ilegible] a Jalpa para el avío de tu
cia que los ratos desocupados que no hay tanto que hacer la seca es muy curtiduría, enviarlas a Chamacuero cargadas de chicharrón y zaleas
bien que los vaqueros que hubiere de sobra se ocupen en hacer adobes para que lo traigan convertido en chile, fuestes y corazas u otras cosas
en el Tecuán o en cavar alguna cal para lo necesario de reparos de las ca- que tu quisieres.
sas pues tengo hornos hechos allí; también lo mismo pueden hacer en [27] Es advertencia que en la villa de León vive Antonio de Salavedra
dicho tiempo de seca los rancheros de Chinampas, porque estos hay o en el Zapote de La Sauceda; a ese lo has de enviar a llamar para que te
temporadas de dos meses en que están ociosos y es bueno que se ocupen haga el jabón para el gasto de la hacienda, y advierte que antes de en-
en esto y ganen el salario y no estén ociosos. viarlo a llamar has de tener prevenidas como cuarenta o cincuenta fane-
[24] Volviendo a los ahijaderos es necesario que le digas a el mayor- gas de cal y asimismo como veinticinco o treinta fanegas de tequesquite
domo que tenga prevenidos otates suficientes para ganchos; o como asi- y esta prevención ha de ser un mes antes que llegue la matanza.

1 5 0 1 5 1
DOCUMENTO MEMORIA DE JOSÉ RINCÓN GALLARDO

[28] Una carga de sal tierra para los cueros de chivos que se mataren cuantas cosas hay que se hagan con toda vigilancia y no haya descuido,
los mandes untar para que no se resequen y tengas buena venta de ellos. pues es obligación de los padres que tenemos familia; procura todo lo
[29] Es menester que mandes a el caporal que fuere de La Punta y posible en todas tus haciendas que se eviten todo aquello que fuere ofen-
Tecuán o mayordomos que no dejen el dar corral a las manadas porque sa de Dios no se permita; y a los mayordomos encárgales la conciencia
reconozcan los corrales y no juigan de ellos, porque parece esto nada y en esto, que con esto descargarás la tuya en alguna manera, remediando
es daño considerable, porque no haciendo así se te levantará la caballa- tú por tu parte y ellos por la suya, y con eso te ayudará Dios y te aumen-
da; y es utilidad porque con eso los burros asisten en sus manadas y no tará los bienes temporales y tendrás felices sucesos.
se van a las ajenas; tener mucho cuidado que en tiempo de seca se reco- [33] Y por no confundirte más en materias y disposiciones de campo
jan los burros porque se salen de sus manadas pues hay conveniencia de no te pongo mucho más que por instantes se me ofrecen que pudiera de-
paja y maíz y tener cuidado se registren en las menguantes los caballos cirte, pero a bien que dándome Dios vida lo que se ofreciere de dudas
abiertos porque se suelen cerrar y en lugar de tener muletos las manadas que me lo escribas y te saco de ellas, que con las experiencias y gobier-
tienen potrillos. no que adquirí de mi padre que [de] Dios goza, el cual las adquirió de
[30] Has de tener cuidado de que la cría de ganados de cerda vaya en más de cuarenta años de mi tío el General Agustín Rincón, el cual fue
aumento, que es también un renglón en las haciendas muy considerable dueño de dichas haciendas y las crió, y yo que tengo vivido todo esto de
y que no se excusa el tener bastantes marranos para cebar, pues en la treinta años de asistencia y no ha quedado palmo de tierra ni rincón que
Ciénega de Mata se crían como chinches sin darles maíz pues con las tu- no he andado y se lo mucho que me tienen ocultado y perdido en razón
nas, con la bellota, con el [ilegible] y raíces se mantienen y engordan; de tierras, que con el tiempo y la ayuda de Dios y del señor Don Fran-
porque Dios hasta en eso ha obrado con su providencia en dicha hacien- cisco Feijoo, tu padre, que es persona de bastante empeño para dejarte
da; que aun maíz no necesitas para ellos, sino es para cuando los eches muy redondeado y muy en corriente, todo que así lo espero de su gran-
en cebo. deza que mirará con piedad esas pobres haciendas que tantos enemigos
[31] Si quisieres sembrar alguna cebada lo puedes hacer en los planes han tenido y han sido tan codiciadas de tantos, que yo te aseguro que si
que están entre el molino y el batán y antes de llegar a el molino desde hubiera tenido salud y las pudiera yo haber asistido y no haber tenido
la huerta para dicho molino, que todas son tablas de riego en donde yo tantos pleitos, me sobraran hoy más de ciento y cincuenta mil pesos,
solía sembrar cebada, arvejón, lenteja y todo se daba muy bien, y deba- pero mi infelicidad ha sido haber topado con administradores que no
jo de riego procurarás aliñar tu molino para moler tus harinas que con han querido seguir mi dictamen, porque si hubieran seguido los corrien-
eso darás corriente a todo lo que se le ha quitado, que esto es de utilidad; tes que pongo aquí no se hubieran menoscabado dichas haciendas, pero
procura que la huerta la asista un hortelano porque te aseguro que me no es mal tiempo el presente que por lo menos se pueden reparar y vol-
costó mucho trabajo el conducir plantas y es lástima que ya que se hizo ver a sus corrientes; pon un poco de cuidado y con meter hembras para
y los administradores han perdido mucho de ello, que no se acabe de el multiplico de ellas; que también es muy bueno quedarse con los diez-
perder por un poquito de cuidado. mos de las haciendas, como asimismo si se pudiera meter un diezmo
[32] Procura que en la Ciénega de Mata como así en las demás ha- como es el de Aguascalientes o el de los Lagos, que con eso en poco tiem-
ciendas mandes se continúe el rezar el rosario de la Santísima Virgen, po se duplicarán así los ganados menores de las haciendas como los ma-
como asimismo que se tenga mucho cuidado los mayordomos en reco- yores y caballadas; yo me holgara tener salud solo para estarme siquiera
ger todos los muchachos en los ranchos y que de parte de tarde les ense- tres años en tu compañía, aunque fuera metido en un aposento, para
ñen las cuatro oraciones, credo, mandamientos y artículos de la fe y la darte suficiente luz de todas las experiencias que tengo, pero bastante te
doctrina cristiana breve del padre Castaño, y esto encargo más que todas doy en estos papeles, que con tu buen entendimiento y discurso que

1 5 2 1 5 3
DOCUMENTO MEMORIA DE JOSÉ RINCÓN GALLARDO

Dios te ha dado espero en el Señor que es suficiente esto para que tú ade- gos quince mulas aparejadas porque este rancho no para; es muy dife-
lantes mucho con la ayuda de tu padre el Señor Presidente, procurando rente que los ranchos de ovejas que están de asiento.
darle gusto en todo lo que te mandare y ordenare, que con eso no podrás
errar nada pues yo he tenido a mucha fortuna el habernos agarrado de [Otra rúbrica.]
esa aldaba para que tu tengas todo el amparo y alivio que así lo espero
de su mucha nobleza, amor y cariño que te tiene. [36] Es menester que mandes sembrar bastante fríjol en las haciendas
[34] Y ya digo que si acaso quisiere volver Ignacio Rosales por ma- porque dando ración de frijol excusarás el matar reses para ración; pro-
yordomo de la hacienda de Las Bocas ha de ser asignándole trescientos cura y ten cuidado que tu gente ande bien comida y aviada y con eso los
pesos de salario y no más, y asimismo si Francisco Pérez quisiere volver harán los mayordomos trabajar bien; y es advertencia que en faltando el
se le asignen otros trescientos pesos y no más, porque son buenos pasto- maíz de ración en las haciendas y raciones, los pagan las borregas, vacas
res y de más de cincuenta años de asistencia en las haciendas, con cargo y terneras porque se las comen no teniendo raciones de maíz.
y calidad si se admiten que no han de tener uno ni otro mayordomo, ye- [37] Digo que en las Peñuelas se siembran cincuenta fanegas de maíz
gua ni vacas en el rancho ni chinchorros de ovejas, solo líquidamente su sobre tres yerros, y esto se beneficia en tiempo, y se espera de esto ordi-
salario de trescientos pesos cada uno y su ración de maíz y no otra cosa, nariamente de cosecha cinco mil anegas de maíz; asimismo diez anegas
ni se les ha de permitir ni consientas en las haciendas que ninguno tenga de fríjol; trigo no tienes que sembrar porque la harina que dan aquellas
chinchorros de ovejas ni de puercos ni de otras cosas, porque habiendo tierras es una harina muy prieta que parece tierra; avía siempre con
esto no es más sino para aumentar sus chinchorros y vayan a menos los treinta yuntas y estas se entienden continuas. Tu cuadrilla bien aviada
de las haciendas, ni consientas arrimados, porque estos no sirven si no de doce carretas.
es para hurtar caballos y mulas; y mas [ilegible] tenerlos de salario que [38] En la labor de Encinillas procura mandar que todo lo que se
no arrimados; también digo que es muy necesario tener cuatro o seis pe- sembrare sea sobre barbecho de doe yerros, esto se entiende para maíz;
rros de rastro que en Guajúcar16 se pueden adquirir para si acaso mata- para lo que toca a los trigos de riego ha de ser la siembra en barbecho de
ren los leones o tigres tener esta cuadrilla de perros para seguirlos. cuatro yerros bien arado, y esto has de tener dispuesto que así que lo ha-
Y con esto es fecha a 16 de octubre del año de 1704 años en la ciudad yas sembrado luego a el instante a que arterrarlo (¿?) y echarle sus rega-
de los Ángeles. deras madres para regarlo si está la tierra algo seca; y si no lo estuviere
Tu padre que desea tu bien, seca dejarlo y de allí a siete días se pueden meter los riegos; en esta for-
José Rincón Gallardo. ma cuando llegues de hacer esto has de tener veinte días antes cogida el
[Rúbrica.] agua de las presas y limpias las acequias y acequia principal; esto ha de
estar como digo veinte días antes limpio y prevenido; y lo que has de
[35] Se me había pasado que el rancho de borregos lo has de tener traer ordinariamente seis regadores que aunque yo solía echar de parte
siempre aviado con cien caballos y algunos machos y con quince mulas de noche cuatro y cuatro de día, digo que mejor será echar los seis de
aparejadas con sus costales, porque este rancho es movedizo y a una día; se entiende que en dicha labor se siembran cincuenta fanegas de
temporada están en una parte cinco meses y en otra cuatro meses y en maíz, esto es en todo caso escogiendo las semillas que se han de sembrar
otra tres meses, y por eso es necesario que tenga dicho rancho de borre- que sea del mejor maíz y que no se desgrane sino es hasta la mitad de la
mazorca, porque la punta siempre es mal maíz; también digo que se
16
Debe referirse a Huejúcar, que a fines del siglo XVIII sería convertida en cabecera de siembran de riego de cinco a seis fanegas de maíz que con esas serán
una nueva parroquia. cincuenta y cinco, esto se avía con treinta yuntas, procurar en cada labor

1 5 4 1 5 5
DOCUMENTO MEMORIA DE JOSÉ RINCÓN GALLARDO

de estas tener continuamente doscientos y cincuenta bueyes que este es [42] Digo que a las viejas se le echan sus padres a el tiempo de la en-
el apero ordinario de ellas; también se siembran en dicha labor de Enci- gorda para cuando vengan a la matanza traigan todas sus corderos y
nillas en el barbecho que llaman de Roldán veinticinco o treinta fanegas que estos vengan ya grandes dentro del vientre de las ovejas que tengan
de frijol. dichos corderos dentro del vientre criado ya el que [ilegible] que en
[39] Procurarás que juigan los borregos de los altos de Comanja por- estando ya de este modo está de punto para matarlas y rinde entonces
que acaece en algunos pedazos de tierra algunas tapazones en los carne- más manteca y rinde más cebo. Y digo también que de estos corderos
ros y el modo de destaparse es cogiéndolos de uno en uno y tirándoles que vienen en el vientre de las ovejas se paga el diezmo que llaman de
las vergas (¿?) afuera. lo amachorrado en esta forma a diez pesos el millar que si matas cinco
[40] […]17 que de esas podrás coger como trescientas fanegas porque mil viejas corresponde cincuenta pesos.
acude; también en la huerta puedes sembrar una anega de lenteja y dos [43] Con esto de diezmos es menester el pagárselos a Dios para que
de haba para irse asemillando que eso allí el hortelano y los muchachos multiplique lo demás.
las siembran; no te digo que siembres chile porque es cosa muy cansa- [44] Si quieres tener gente que te sirva a gusto has de procurar el que
da, que ese se trae con el chicharrón de Chamacuero. se les de sus raciones de maíz y que anden bien comidos y vestidos y con
[41] Siempre que apartes los borregos de las ovejas es necesario de- eso andarán gustosos y no te robarán y cuidarán de la hacienda dolién-
jarlos descollar hasta que tengan ya echado todo el renuevo de fuera, dose de ella, y en esencial te encargo a tus pobres esclavos pastores que
que llamamos renuevo el nacimiento de las llaves que hace un género de los procures tener vestidos y que sus raciones no les falte y su tabaco que
colorado, que estando ya fuera todo y habiendo ya dado primera y se- con eso no [ilegible] una borrega por tener que [ilegible] y cuando te va-
gunda vuelta la llave; entonces se dispone el emparejar pastorías; con yas a divertir a los ahijaderos procura llevar diez manojos de tabaco para
advertencia que lo parejo se capa y lo que llamamos entre pastores corto darles y si acaso fueres a divertir hacia los ranchos has de mandar te lle-
ese se trae en pastorías separadas por haber sido el desecho de las em- ven tabaco, has de procurar que te corten dos cargas de cebadilla que la
parejadas y este derecho no se capa sino es aguardándole como un mes, hay en el pueblo de Tepatitlán, camino de Guadalajara, que allí la cogen
que en esa retención decuella echa todo el renuevo y tiene las dos vuel- los indios y la venden a los pastores, y es menester que la agencies y la
tas de la llave y echado ya todo el renuevo se vuelve a emparejar y en- tengan los pastores y en la Ciénega de Mata, para que la mandes repar-
tonces se capa; y si los pastores dijeren otra cosa diles que tu padre te ha tir a tus pastores, que todos los que son de a pie la traen en costalitos mo-
mandado esto y que muy bien sabe lo que manda y que tú no ignoras lida para curar el ganado que le cae gusanos, y con eso excusarás dar ta-
nada que estás bastantemente industriado de pastores del reino. En baco para que curen los gusanos porque con la cebadilla es mejor curar.
cuanto en apartar las ovejas viejas de las haciendas para las matanzas [45] Procura el mandar con entereza y con buenas razones, que con
has de procurar con todo cuidado que se les registre las bocas porque eso te tendrán respeto y te obedecerán, y en ocasiones es menester mos-
luego demuestran en los dientes si son viejas, no te aparten ovejas que trar seriedad y mucha entereza con algunos, pero en el mandar procura
pueden dar el fruto de dos años por viejas, esto te advierto porque es que te obedezcan con puntualidad, se preciso en algunas cosas; lo que
materia de conciencia. tuvieres que hacer aquel día si pudiere ser concluye, no aguantes queha-
cer el día que se sigue porque esto de decir mañana hará el dilatarse y
17
Faltan algunas líneas en el texto original o, probablemente, el parágrafo 40 deba así lo preciso es bueno y advierto en todas las cosas que se prevengan
leerse como continuación del 38, pues de esa manera sí hace sentido. En este segundo con algún tiempo para que no sobrecarguen todas a un mismo tiempo
caso, el parágrafo 39 constituiría una interpolación. porque es ofuscación.

1 5 6 1 5 7
DOCUMENTO MEMORIA DE JOSÉ RINCÓN GALLARDO

[46] Te digo que necesitas tener de ordinario dos correos en la hacien- prevenir cuatro o seis botijas de vino, dos o tres pesos de panela, ocho o
da y estos has de procurar que tengan sus tres machos capones y gordos, diez libras de chocolate, dos o tres pesos de pan y con esto están conten-
para si se te ofreciese enviar a México o Guadalajara no sea necesario en- tos, este es el corriente de pastores; en el rancho de Chinampas has de
viarlo aviar a La Punta porque estén en la Ciénega o donde tu estuvieres procurar tener en dicho rancho cuando más siete rancheros porque bien
siempre prevenidos; porque digo que han de ser machos los de los corre- los necesitas: sobresalientes, mayordomo, cinco vasieros, conforme estu-
os es por excusar los caballos, porque los venden con más facilidad y en viere la hacienda; vuelvo a la capazón de carneros que se ha de procurar
viendo un caballo cansado un correo los vende y un macho no es fácil de caparlos muy a la mano el agua y si acaso en el plan donde se hiciera
cansarse; en tiempo de aguas a dichos correos se les da su itacate en casa la capazón ha de tener la turra algún retoño y los han de dejar estar en
y cuatro pesos para el viaje y en tiempos de secas se les da seis pesos y cama hasta los tres días que los comienzan a menear para que beban
su itacate. agua y esto no arrearlos recio porque se harán torunos; si uno se acomo-
[47] Procurarás granjear un amigo en San Luis Potosí para lo que se dare y fuere casado y trujere cuatro hijos a estos se les da a medio almud
te ofreciere como tal vez se ofrece enviar la recua con harina y porque no de maíz de ración mientras se van criando en la misma hacienda porque
se te detenga y hagan más gastos los arrieros les dejan la harina y de allí sirven por último a ella en los ahijaderos y obraje a hilar; los vasieros or-
a veinte días despachas por el dinero y dos mulas aparejadas para que dinariamente son a nueve pesos y los demás a ocho y a siete pesos; y si
te vuelvan tres costales. quieres mandar que los vaqueros como habían de tener una manada de
[48] Te digo que en Zacatecas de tener necesitas otro amigo que haga yeguas en que andar tengan su atajo de quince o veinte caballos capones
lo mismo y así para que pagues las huérfanas y festividades de la Con- con sus dos yeguas y un caballo entero, para que este caballo recoja los
cepción y San Ignacio y para lo más que se te ofreciere, y que sea este demás con sus dos yeguas, y con eso excusan manadas de yeguas que
amigo hombre de bien y de bienes porque con eso te podrá suplir hasta ya digo atrás no se ensille ninguna sino que se aburren; y cuando hagas
en tanto que tú puedas satisfacer o en harinas o en lo que te pareciere; trasquila has de poner cuidado de que el carbón sea bien molido con sal
y en Guadalajara es lo mismo, que esos teníamos nosotros para el alivio para las cortaduras de las ovejas; procura que conforme van entrando en
de nuestros cuidados; procura en todo ser puntual que con eso te levan- trasquila antes de entrar llamar a el mayordomo y a el sobresaliente y
tarás con el reino y serás dueño de todos los caudales; volviendo a pasto- preguntarle que cuantas cabezas trae así de vientre como de cría para
rías y disposición de ranchos digo que en cuanto al rancho de borregos que te de la cuenta; y has de hacer otra diligencia que es teniendo perso-
que así que se aparten dichos borregos también se apartan doscientas na de tu satisfacción a tu lado la primera vasiada que entrare que la
borregas que estas se entienden para el gasto del año porque no te maten cuente, no fiándose de la cuenta de los mayordomos, y la personas que
borregos porque si te matan borregos tendrás menos que vender; en el tuvieres ha de contar toda esta hacienda para ver si viene bien la cuenta
rancho de borregos necesitas tener por ahora cinco rancheros, de estos que te dio el mayordomo con la del que tienes a tu lado; también se en-
cinco rancheros el uno se señala por ranchero mayor a cuyo cargo esta la tiende que cuando van saliendo de trasquila se van asentando en un plie-
caballada y mulas de dicho rancho, que este jamás se despega del rancho. go de papel vasiada por vasiada, asentando también de por sí las mana-
[49] Te digo que también cuida de los aparejos del rancho y también das de los corderos y después de salida toda esta hacienda puerca, que
te digo que en cada pastoría de primales andan tres pastores de a pie y llaman los pastores, haces la cuenta en el todo y después de apartados los
en este rancho necesitas de dos vasieros y su mayordomo; también te borregos lo que queda líquido es limpio y eso se reputa por cabeza.
digo que estando parejas las pastorías y ya para capar veinte días antes [50] Es costumbre de los trasquiladores todos los días darles su jícara
se previene enviándoles a convidar algunos vecinos capadores para que de maíz, así a ellos como a sus mujeres, no a sus hijos, también se les da
capen los ganados, que a estos no se les paga nada, lo que si se hace es su chile que será en una jicarita y una tasita de sal y esta cada tercero día,

1 5 8 1 5 9
DOCUMENTO

que Sebastián el Gachupín sabe muy bien de esto; y si quisiere acomodar


Sebastián el Gachupín por lo fiel y porque te descuidará mucho en la
matanza; y en los telares de frazadas y jerga que pusieres te puedes fiar
de él con mucha seguridad porque ha más de cuarenta años que asiste
en las haciendas. Si acaso en la majada de las chivas dieren alguna noche
alguna estampida por haberlas espantado algún animal y acaeciere no
hallar algún atajo al cabo de dos días se ha de ir a buscar dicho atajo a
las majadas que se les han dado antiguas recorriéndolas todas y de esto
sirven los rancheros.
[51] En la Ciénega de Mata tenía una manada de cincuenta yeguas
todas mansas y de camino y la cual manada llamaba de la comunidad,
y esta manada es necesaria tenerla en la hacienda porque esté a la mano
por si acaso, que por instantes sucede el que haya un tisonaso a desho-
ra de la noche o de día, entonces se junta toda la gente que hubiere y mu-
chos salen a caballo a tajar dicho tisonaso y si el pajonal de dicho fuego
fuere violento procuran echarle guardaraya se entiende media legua an-
tes donde está el fuego que con eso en llegando el tisonaso como topa
con esta guardaraya que está quemada se libra lo demás del campo y se
aseguran los becerros y ovejas que no se quemen y más si el becerraje
está pariendo el ganado.
[52] Volviendo a la Ciénega de Mata digo que el intento con que ha-
bía hecho aquella atraviesa de calicanto, la cual está por acabar, fue por
la experiencia que tuve el año de 85 que se me secaron todos los ojos de
agua de dicha hacienda, y mediante a esta atraviesa volvieron en sí por-
que los ganados no tenían que beber en dicha hacienda que con un burro
obligaba a acarrearla, y hoy esta en cimientos dicha atraviesa aunque
debajo de tierra tiene dos estados y una vara para la fortaleza no se la
lleve y esto está en bastante fijeza; y ahora cuando hubiere oportunidad
levantándola dos varas y una cuarta formándole sus tres compuertas de-
jándole el ladrón que hoy tiene y dejándole el ladroncillo a el plan que
hoy tiene, que ese se hizo para limpiarla cuando se aterre de arena, que
en estando del todo acabada a salidas de aguas puedes echar tus tres
compuertas y avanzar tres o cuatro avenidas, y con eso tendrás agua
bastante para molinos, para maíces de riego y harás lo dicho cuando ten-
gas algún descanso.
[53] Una fanega de maíz tiene de costos y cogida cuarenta pesos.

1 6 0

También podría gustarte