Loch Ness Monster">
Nothing Special   »   [go: up one dir, main page]

El Monstruo Del Lago Ness

Descargar como docx, pdf o txt
Descargar como docx, pdf o txt
Está en la página 1de 3

EL MONSTRUO DEL LAGO NESS 

El lago Ness, conocido en Escocia como Loch Ness, ubicado cerca de la ciudad de


Inverness, es una gran falla geológica de aproximadamente 40 kilómetros de longitud por
unos 2 kilómetros de anchura y, en su parte más ancha 2.8 km. Se sabe que es muy
profundo pues en varios sitios alcanza hasta los doscientos veinticinco metros de
profundidad.

El lago está relleno con el agua dulce que le suministra el río Ness, que desemboca no
lejos de uno de sus extremos, y por profundos canales subterráneos que lo comunican con
el mar.

Se estima que tanto la falla como el lago se formaron hace 300 millones de años, pero
hace 12.000 el suelo de la región se elevó y el lago también unos metros más sobre el
nivel del mar.

El lago no posee orillas, pues se encuentra encajado dentro de un corte profundo del
terreno cuyas paredes descienden a las profundidades casi verticalmente, con un grado de
inclinación agudo. Sus aguas son muy oscuras, porque llevan gran cantidad de turba así
que a muy pocos metros bajo la superficie la visibilidad es nula. Así mismo, las montañas
le bordean con acantilados que proyectan una imponente sombra sobre las aguas.

Es en el relato de la Vida de San Columba donde se hace la primera referencia


al monstruo del Lago Ness, conocido popularmente como Nessie; en el año 565 San
Columba había salvado a alguien que estaba siendo atacado por un monstruo en el río
Ness. Igualmente, algunas personas han asociado como primeras referencias, a antiguas
leyendas locales sobre unos míticos caballos acuáticos llamados kelpies; que se dicen
habitarían en las profundidades de este lago. Muchos han sido los testimonios posteriores
de personas relatando su visión del monstruo pero la primera descripción moderna data
de 1868. Un artículo publicado en el Inverness Courier, es el primero en referir rumores
acerca de la existencia de un "pez enorme u otra criatura" en la profundidad de las aguas.

En 1930, el periódico Northern Chronicle publicó una noticia titulada "Una extraña
experiencia en el lago Ness" en la que se detallaba la historia de dos pescadores que
se refirieron a un animal que produjo un gran remolino cerca de Tore Point. El artículo
definitivo sobre la teoría del monstruo del lago Ness, fue el avistamiento que habría tenido
lugar el 2 de mayo de 1933; otra vez el periódico Inverness Courier publicó la noticia de
una pareja local que dijo haber visto "un enorme animal rodando y hundiéndose en la
superficie".

El informe del "monstruo", título elegido por el editor del Courier, se convirtió en una
sensación entre los medios. Las editoriales de Londres comenzaron a enviar reporteros a
Escocia, e incluso un Circo ofrecía una recompensa de 20.000 libras esterlinas por la
captura de la bestia. A.H. Palmer atestiguó que vio a Nessie el 11 de agosto de 1933 a las
siete de la mañana, describiendo a la criatura con su cabeza al ras del agua. Su boca, de
una anchura de entre 30 a 45 centímetros, y que se abría y se cerraba; la abertura
máxima de su boca de unos 15 centímetros. Hasta este momento los periódicos hablaban
simplemente de un pez misterioso o extraña criatura, no se referían a la criatura como  un
ser prehistórico.

Pero es el 19 de abril de 1934 cuando el cirujano R.K. Wilson publicó la fotografía más
conocida del monstruo, presuntamente tomada por Marmaduke Wetherell. Una enorme
criatura de cuello largo se deslizaba por el agua del lago, lo cual colocó definitivamente en
la cultura popular, la leyenda del Monstruo del lago Ness de Escocia.

A principio de los años setenta, una expedición de la Academia de Ciencias Aplicadas de


Boston, dirigida por el doctor Robert H. Rines obtuvo algunas fotografías subacuáticas.

Fue la noche del 8 de agosto, la superficie del lago estaba lisa y tranquila y los miembros
del equipo investigador esperaban en embarcaciones ancladas en la bahía de Urquhart;
hacia la una de la madrugada el equipo empezó a ver en la pantalla del sonar las pesadas
y oscuras señales de un gran objeto en movimiento, la cámara estroboscópica fotografió
las manchas captadas por las ondas del sonar pero, debido a lo turbio del agua, las
fotografías no fueron muy nítidas, sin embargo al ser procesadas por computadora se
pudieron definir varias imágenes.

Dos de las tomas mostraban una aleta, una tercera foto mostraba dos objetos que
parecían ser grandes animales. Los resultados de los análisis de los hallazgos señalaban
una aleta que media entre 1.20 a 1.80 metros de largo y dos cuerpos separados por 3.5
metros, esto fue por fin una evidencia palpable de la existencia de uno o algunos seres
acuáticos que habitaban el legendario lago.

Una de las fotos de la aleta sirvió como base a Sir Peter Scott, uno de los naturalistas más
conocidos de Gran Bretaña, para anunciar en 1975 que el nombre científico del monstruo
sería en adelante Nessiteras rhombopteryx, del griego "Monstruo de Ness con aleta de
forma diamantada". Pero los indicios de la presencia de esta extraña criatura no se
limitan sólo a sus difusas imágenes gráficas; también ha sido posible escuchar gruñidos o
gemidos. El diario Dundee Courier publicó el 19 de julio de 1995 que varios de los
tripulantes de un mini submarino que operaba en el lago habían podido escuchar unos
sonidos inexplicables. Según uno de los pilotos del navío, Bill Bolton, él y otros cuatro
tripulantes se encontraban a unos 135 metros de profundidad cuando escucharon esos
ruidos. «Sólo oímos un par de gruñidos y nada más», dijo Bolton, pero añadió que «unas
semanas atrás escuchamos en esta misma zona unos sonidos extraños a los que no dimos
más importancia en el momento».

Otro piloto de este mini submarino, Allen Whitfield, aseguró que él había buceado por
todo el mundo y había escuchado en diversas ocasiones el sonido que producen los
delfines y las ballenas, pero que lo que oyó no era nada comparable. «He escuchado
frecuentemente a los mamíferos marinos, pero esos gruñidos eran algo raro, diferente»,
aseguró.

Estos extraños sonidos se oyeron cerca del pueblo de Abriachan, en la orilla oeste, y
fueron recogidos por una serie de micrófonos que tenía el submarino a lo largo de toda su
estructura, y enviados a la base que se hallaban en la orilla del lago. Todas estas
descripciones sobre el aspecto del monstruo, indican que existiría una criatura que se
asemejaría a los extintos plesiosaurios, una criatura acuática prehistórica. Los fósiles
encontrados en otros lugares del mundo indican que este animal prehistórico debió ser un
animal físicamente enorme, con un cuello alargado, una cabeza pequeña y dos pares de
aletas de propulsión bajo el agua.

La debatida hipótesis de la conexión de un supuesto plesiosaurio con el monstruo del Lago


Ness, hizo que se convirtiera en un asunto popular y un inicio del campo de la
criptozoología.

De tratarse de Plesiosaurios tendría que haber más de uno para poder reproducirse a lo
largo de los siglos. Adicionalmente…. algunos miembros de la Comunidad Científica
atribuyen a los avistamientos de Nessie a la identificación errónea de focas o leones
marinos, peces, troncos, o grupos de animales formando filas, o al producto de un
espejismo o distorsiones de luz, a efectos en el agua como olas u ondulaciones
provocadas por embarcaciones.

Incluso hay una teoría reciente que postula que el monstruo es realmente solo el efecto
de burbujas causadas por actividad volcánica en el fondo del lago.

Adrian Shine, responsable del Proyecto Loch Ness, opina que se trataría nada más de
grandes esturiones, unos peces que pueden alcanzar los tres metros de longitud y pesar
más de 200 kilos.

Sin embargo, los esturiones no pueden explicar el largo cuello característico que sobresale
de la superficie del lago, según la mayoría de los testigos y de las fotografías obtenidas.
Otros investigadores consideran que habría que pensar en otro tipo de animales,
desconocidos en la actualidad, para explicar las apariciones de este ser. En este punto las
hipótesis se disparan, pues mientras que zoólogos tan conocidos en el estudio de los
animales misteriosos como el doctor Bernard Heuvelmans apoya que el origen más
probable habría que buscarlo en la existencia de un enorme Pinnípedo de largo cuello, un
pariente gigante de las focas que este científico ha bautizado como Megalotaria
Longicollis, otros creen más probable que se trate de un antepasado de las ballenas, de
aspecto serpentiforme, llamado Zeugledón, o de una anguila gigante.

Lo que si es cierto es que, sin importar si cualquier criatura extraña vive realmente en el
lago o no, el monstruo del Lago Ness es importante para la economía local. Docenas de
hoteles, operadores de tours en bote, y comerciantes de baratijas, deben parte de su
sustento a Nessie formando ya parte de los mitos y leyendas de Escocia. 

También podría gustarte