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2014 Revista Anti

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N ISSN: 1852-4915

ANTI
Revista del Centro de Investigaciones Precolombinas
Núm. 12 • Diciembre de 2013

Centro de Investigaciones Precolombinas


N ISSN: 1852-4915 Directoras Editoras Responsables

ANTI
Alicia Campos
Ana María Rocchietti

Coordinadora de Redacción
María Andrea Runcio (Universidad de Buenos Aires)

Coordinación de Edición
Revista del Centro de Investigaciones Precolombinas María Victoria Fernández (I.S.P. Dr. Joaquín V. González)

Núm. 12 • Diciembre de 2013 Asesora Editorial


María Cecilia Stroppa (Universidad Nacional de Rosario)

Comité Científico
ANTI es una publicación anual del Centro de Dr. Antonio Austral
Investigaciones Precolombinas que tiene como Dra. Martha Bechis
objetivos: 1. Conformar un lugar e intercambio entre Prof. María Teresa Carrara
diferentes especialistas a nivel nacional e internacio- Lic. César Gálvez Mora
nal, así como también diferentes instituciones del Dr. Luis Guillermo Lumbreras
campo de la historia, antropología, arqueología, etno- Lic. Lutgarda Reyes Álvarez
logía, y ciencias sociales en general; 2. Ofrecer un Dra. Ruth Shady Solís
espacio para que investigadores y académicos pue- Dra. Teresa Vega
dan publicar sus producciones; 3. Construir un medio
de comunicación a través de la difusión de investi- Comité Editorial
gaciones y ensayos; y 4. Jerarquizar la actividad aca- María Teresita de Haro (Centro de Investigaciones
démica. Precolombinas)
María Concepción Godoy (I.S.P. Dr. Joaquín V. González)
Rubén Blanco (I.S.P. Dr. Joaquín V. González)
Dirección postal
Ayacucho 630. Ciudad Autónoma de
Coordinadores de Sección de Reseñas Bibliográficas
Buenos Aires.
Flavio Ribero (Universidad Nacional de Río Cuarto)
CP. C1026AAF. Argentina.
César Borzone (I.S.P. Dr. Joaquín V. González)
E-mail: anticip2008@yahoo.com.ar
Evaluadores
Celia Basconzuelo (CONICET. Universidad Nacional de
Río Cuarto)
Los artículos reflejan exclusivamente la opinión de Alicia Lodeserto (Universidad Nacional de Río Cuarto)
los autores María Elena Lucero (Universidad Nacional de Rosario)
Víctor Piminchumo (Dirección Desconcentrada de
Cultura de La Libertad, Ministerio de Cultura)
Andrea Recalde (CONICET. Centro de Estudios
Revisión de Edición
Históricos “Prof. Carlos S. A. Segreti” -Área de
Silvana Salerno (Centro de Investigaciones
Arqueología y Etnohistoria- y Universidad Nacional de
Precolombinas)
Córdoba)
Ana María Rocchietti (Centro de Investigaciones
Diseño y Diagramación
Precolombinas)
Odlanyer Hernández de Lara (Cuba Arqueológica)
Marcela Tamagnini (Universidad Nacional de Río Cuarto)
Mónica Valentini (Universidad Nacional de Rosario)

© Anti. Centro de Investigaciones Precolombinas. Tapa: Imagen del texto en este número de María Andrea
Runcio y César Gálvez Mora..
A
mérica del Sur se caracteriza por la singularidad de sus pai-
sajes y de sus sociedades. Desde los remotos tiempos en que
solamente vagaban por ella los cazadores hasta las naciones
modernas cuya vastedad apenas conoce paragón en el planeta, con
sus desgarros y sus logros, con sus pasados tormentosos, sus histo-
rias de pasiones y desventuras, no ha dejado de constituir un desafío
para los investigadores nativos y extranjeros en sus abordajes de la
naturaleza y la cultura. Publicar Anti implica un desafío particular:
encontrar a los que anuncian nuevas ideas, a quienes son minuciosos
registradores de datos, a los diseñadores de modelos de avanzada
epistemológica y a los que exploran los terrenos en los que florecen
las obras humanas.
Anti intenta denotar un campo intelectual que integre el pen-
samiento y la experiencia: los más contrastantes enfoques y desarro-
llos argumentativos.
La fórmula es: la seducción de lo complejo.

Los editores
Información etnográfica sobre el cultivo 92
de maíz en el desierto del sector medio del
5 Simetría, simplicidad y armonía en
Valle de Chicama, Perú, durante eventos
arqueología
ENOS (El Niño, la oscilación del sur)
María Virginia Elisa Ferro
María Andrea Runcio y César A. Gálvez
Mora
11 La Comarca de Achiras como camino
patrimonial y su política de planeamiento
Estigmatización y sociedad: inmigración 105
(Córdoba-Argentina)
boliviana en Argentina
Yanina Aguilar y Luis Alaníz
Mauro Brebbia
17 Políticas de preservación y valorización
patrimonial sobre los petroglifos del
La educación y el trabajo: un caso en la 117
comunidad boliviana de Río Cuarto
“Sector Escuela Hernández” Villa el
Romina Núñez Ozan, Denis Reinoso y
Chacay (Córdoba-Argentina)
Mariano Yedro
Arabela Ponzio y Denis Reinoso

29 Manufacturas rurales coloniales: los


Historias de frontera. Una aproximación 125
al proceso inmigratorio peruano en
obrajes-haciendas de Huamachuco en los
Buenos Aires a partir de la construcción
siglos XVII y XVIII
de relatos biográficos
Frank Manuel Díaz Pretel
Martín Álvarez Litke y Facundo Petit de
Murat
41 Ley, delito y castigo. Mecanismos de
control social y represión penal. Trujillo,
Un día sin peruanos 134
1824-1862
Nicolás Graziano y Agustina F. Juncos
Victoria Dieguez Deza

51 Símbolos de poder, protección y


Liminalidad identitaria. El estado 140
transicional de la identidad dentro del
fecundidad en la ornamentación de los
proceso de migración laboral peruano
muebles de embalaje de cuero coloniales
hacia la Argentina
y republicanos
María Laura Pey y Bruno Vindrola Padrós
Estela Angélica Miranda Castillo
Educación intercultural. Acercamiento a 150
62 Trayectoria de la vara de mando popular
la vida cotidiana de una niña peruana en
y tradicional en el Perú
la escuela argentina
Luis César Ramírez León
Nazareth Sánchez y María Sposato
76 Pobreza Latinoamericana, desafío de la
La dicotomía civilización y barbarie. Una 158
praxis cristiana. Una aproximación desde
mirada sobre algunos “procedimientos
la teología de la liberación
escriturarios de despolitización” en el
Romina Núñez Ozán
Facundo de Sarmiento
Juan Manuel Borgatello y Gustavo Darío
82 Hombres del napo: experiencia de la
Torres
cultura en la Amazonía peruana
Ana María Rocchietti
Normas editoriales 166
ANTI • Núm. 12 • Diciembre de 2013

SIMETRÍA, SIMPLICIDAD Y ARMONÍA


EN ARQUEOLOGÍA

María Virginia Elisa Ferro


Universidad Nacional de Río Cuarto, Facultad de Ciencias Humanas, Departamento de Educación
Inicial y Facultad de Ciencias Exactas, Físico-Químicas y Naturales.
mveferro@gmail.com; mferro@hum.unrc.edu.ar

RESUMEN

En el presente trabajo se abordará la pertinencia de considerar aspectos estéticos tales como simetría,
simplicidad y armonía en estudios arqueológicos. Conceptos que originariamente emergieron del ámbi-
to de la geometría y matemática, han sido considerados desde una mirada “fuerte” de la Filosofía de la
Ciencia contemporánea como alejados de cualquier pretensión de verdad, y por lo tanto de cientifici-
dad; sin embargo siguen jugando un papel central en el marco de las teorías científicas ligadas a la Físi-
ca. No menor es el peso que tienen al ser considerados en la investigación arqueológica, instando siem-
pre al debate entre evidencia empírica y arte, y puntualmente en el momento de analizar e interpretar
información del pasado a nivel tanto conceptual como ontológico.
Palabras clave: simetría, simplicidad, Filosofía de la Ciencia, Estética.

ABSTRACT

In the present work will be approached the relevancy of considering aesthetic aspects such as sym-
metry, simplicity and harmony in archaeological studies. Concepts that originally emerged in the area
of the geometry and mathematics have been considered from a “strong” look of the contemporary Phi-
losophy of the Science as far from any pretension of truth, and therefore of science; nevertheless they
continue playing a central paper in the frame of the scientific theories tied to the Physics. Not minor is
the weight that they have when they are considered in the archaeological investigation, urging to the
debate between empirical evidence and art, and punctually at the moment to analyze and interpret in-
formation of the past to both conceptual and ontological level.
Key words: symmetry, simplicity, Philosophy of Science, Aesthetic.

INTRODUCCIÓN jados de cualquier pretensión de verdad, y por lo

E
tanto de cientificidad; sin embargo siguen jugan-
n el presente trabajo se abordará la perti- do un papel central en el marco de las teorías
nencia de considerar aspectos estéticos científicas ligadas a la Física.
tales como simetría, simplicidad y armonía No menor es el peso que tienen al ser con-
en estudios arqueológicos y antropológicos. siderados en la investigación arqueológica, ins-
Conceptos que originariamente emergie- tando siempre al debate entre evidencia empírica
ron del ámbito de la geometría y matemática han y arte, y puntualmente en el momento de analizar
sido considerados desde una mirada “fuerte” de la e interpretar información del pasado a nivel tanto
Filosofía de la Ciencia contemporánea como ale- conceptual como ontológico.

5 • Centro de Investigaciones Precolombinas


Simetría, simplicidad y armonía en arqueología M. V. Ferro

ESTÉTICA Y CIENCIA gados y se manifiestan en las relaciones de las


distancias como en la producción de sonidos de
“Mi idea de ti es un cadáver que el mar trae a la las mismas.
playa…, y mientras tanto El concepto de “medida”, puede enten-
Tu eres la tela irreal en la que hago vagar en derse como:
color a mi arte…” 1- La medida en sentido numérico: como ex-
(Hora absurda, Pesoa, 2003: 17). presión comparativa de dimensiones o
cantidades, o como la expresión de una re-
Tres áreas disciplinares tradicionalmente lación entre la dimensión o cantidad y un
se han disputado la posesión de la “belleza” como determinado patrón adoptado al efecto: la
objeto de estudio: la Filosofía del Arte, la Estética llamada “unidad de medida”.
y la Metafísica (Bayer 1965). Claro está que tam- 2- La medida en sentido ontológico o no
bién ha sido parte de las discusiones engendradas numérica: utilizada en doctrinas filosófi-
en geometría y matemática desde tiempos remo- cas como patrón de realidad con el fin de
tos. El sentido de “belleza” puede entenderse li- “medir” otras realidades, con el fin de de-
gado fuertemente a la noción de armonía (propor- terminar en qué proporción estas últimas
ción o medida), simetría y simplicidad o elegan- realidades se acercan al patrón elegido.
cia/parsimonia. Ligada a las nociones de “orden” y “jerar-
Siguiendo a Yarza (1972), etimológica- quía”.
mente, es posible relacionar cadenas de términos 3- La medida como “buena proporción”: re-
en torno al concepto de “armonía”, tales como: lacionada con la noción de “justo medio”,
unión; ajustamiento, ensambladura, proporción; como justo medio entre las cosas, y en
bien ajustado, proporcionado, conveniente; pro- particular las actividades humanas. La
porcionadamente; juntar, adaptar, ajustar, ensam- medida indica cuál es la posición que debe
blar, acomodar, unir o templar (un instrumento); adoptarse entre dos posibles extremos; in-
ajuste, encajamiento, juntura, soldadura, unión, dica además, que ningún extremo es acep-
orden, proporción, simetría; Armonía o Harmon- table. Ligada a la noción de medio, como
ía, hija de Ares y de Afrodita. Armonioso, armó- punto entre dos puntos dados, especial-
nico. Experto en música. mente como punto central, y en virtud de
En el caso de la “medida”, cabe entender- la cuál puede considerarse como un medio
se como: distancia, métrico, moderado, medida, entre extremos, pudiendo ser moral (indi-
modo, metro/ espacio medido o mensurable; ex- vidual) como cósmica (universal); tanto
tensión, dimensión, longitud. como a justicia en Platón. Igualmente in-
Desde la definición etimológica, el con- cluye la distinción entre “medida real”
cepto de armonía subsume al de medida (desde la (relación entre diversos tamaños, es decir,
proporción, o desde aquello que tiene extensión, proporción) y “medida ontológica” (en re-
dimensión) lación con diversas inclinaciones).
Siguiendo a Ferrater Mora (2004), el con- Desde el punto de vista de la definición,
cepto de armonía, originariamente estuvo ligado a se refuerza la conexión entre armonía y medida,
conexión y orden (como también a jerarquía). apareciendo en el caso del segundo concepto una
Posteriormente los pitagóricos sostendrán la exis- forma de entenderse en términos comparativos e
tencia de una armonía del universo relacionando indicando aplicaciones que no sólo pueden orde-
numéricamente los sonidos de la escala musical narse, sino también jerarquizarse. Los conceptos
con las longitudes de cuerdas de la lira. La ar- de simetría, de armonía o consonancia y de ritmo
monía representa un sistema de relaciones que hablan de la afinidad con la proporción en cuanto
reconcilia los opuestos (lo Limitado e Ilimitado). se emplean en sentido análogo. Su fundamento
A nivel cosmológico (armonía de las esferas), proviene del orden matemático, y expresa la rela-
tiene su expresión en los movimientos de las esfe- ción resultante entre dos razones que, sin ser
ras celestes que se hallan armónicamente conju- iguales, tienen cierta convivencia (Lobato 1965).

Centro de Investigaciones Precolombinas • 6


ANTI • Núm. 12 • Diciembre de 2013

Así, podemos entender a la simetría como: “me- atributo, cualidad esencial), que de criterios (co-
dida exacta de los elementos, da intuibilidad al mo norma, regla o pauta para conocer la verdad o
compuesto (…) Por este carácter mensurativo y falsedad de una cosa; o como juicio para discer-
visual, tiene mayor aplicación en las artes del nir, clarificar o relacionar una cosa; o como capa-
espacio, en los cuerpos geométricos. La perfecta cidad o facultad que se tiene para comprender
simetría se da en la esfera. En los demás cuerpos algo o formar una opinión). Como tampoco lo es
se entiende a partir de un eje en torno al cual se el de aspecto (como apariencia o semblanza; ma-
distribuyen las partes” (Lobato 1965: 93). tices o rasgos de una cosa).
Rosenvasser Feher (2009), sostiene que
puede hablarse de “simetría” en dos sentidos: uno FILOSOFÍA DE LA CIENCIA Y ASPECTOS
en relación con la armonía de las proporciones, el ESTÉTICOS
equilibrio de la forma, la belleza; y otro que es
propio de la matemática (dónde en realidad los “El cielo duerme. Cuando el alma está viuda de
términos mencionados son resultados estéticos de lo que no sabe, el sentimiento es ciego. Llueve.
la simetría). “La simetría en sí se define mediante Mi ser (quien soy) reniego…” (Pesoa 2003: 49).
operaciones geométricas: decimos que una cosa Siguiendo a Ferrater Mora, “criterio” pue-
es simétrica si, después de actuar sobre ella que- de entenderse como: “…generalmente como el
da igual que antes. La ‘cosa’ puede ser un objeto, signo, marca, característica o nota mediante la
un diseño, un sonido, un movimiento o una ley de cual algo es reconocido como verdadero. Criterio
la naturaleza” (RosenvasserFeher 2009: 29). es, pues, en este sentido el criterio de verdad. En
Amster (2004) sostiene que la matemática el vocabulario tradicional, el criterio se aproxi-
produce belleza matemática, que se puede pensar ma a lo que los escolásticos llamaban el objeto
la matemática por fuera del campo de las cien- formal. El criterio sería, por consiguiente, algo
cias, en el aspecto de creación y allí se parece al distinto no sólo del objeto propio conocido, sino
arte. también de la facultad cognoscitiva, que exigiría
Parte de toda la historia que liga a ma- un criterio para determinar lo verdadero. El pro-
temática y geometría a aspectos estéticos y al blema del criterio ha sido examinado, por un
concepto de arte (no importa cuál), ha sido la lado, en estrecha relación con el problema de
vinculación entre arte, lingüística, matemática y verdad (sobre todo por las direcciones que han
antropología plasmados bajo el rótulo de “estruc- supuesto que sólo la verdad puede ser el criterio
turalismo”, lo que en matemática llamaríamos para lo verdadero), y por otro lado, en relación
“Bourbaki” (Aczel 2006). con las cuestiones suscitadas por el grado de
La simplicidad puede ser entendida de dos veracidad de las distintas fuentes del conocimien-
maneras; por un lado, sintácticamente (la que to, en particular los llamados sentidos externos”
mide el grado de consistencia de la teoría con los (Ferrater Mora 2004: 735).
sus principios básicos) y por otro, como principio Una “propiedad” puede definirse como:
ontológico o parsimonia, que mide el número de “lo propio es lo que sin expresar la esencia de la
cosas que pueden ser postuladas por una teoría. cosa pertenece a esta cosa sola y puede recipro-
Esta última se relaciona con el Principio de Oc- carse con ella” (…) “Se trata, en suma de conocer
cam (Baker 2004). cuáles son los “lugares comunes” de la propiedad
El principio de economía o de parsimonia con el fin de determinar si un predicado dado es o
es un tipo de razonamiento que establece que en no propio. Así, la propiedad puede ser o por sí y
igualdad de condiciones la solución más sencilla siempre, o relativamente a otra cosa y por un
es probablemente la correcta, o “no ha de presu- tiempo” (Ferrater Mora 2004: 2927).
mirse la existencia de más cosas que las absolu- Echeverría (2002) propone la discusión en
tamente necesarias”. términos de valores epistémicos y valores prácti-
Pero demos un paso más adelante. Cuando cos, es decir una axiología de la actividad cientí-
tenemos en cuenta los significados de los térmi- fica, considerando a la ciencia como plural. Para
nos, no es lo mismo hablar de propiedades (como él no basta en ciencia con enfatizar valores

7 • Centro de Investigaciones Precolombinas


Simetría, simplicidad y armonía en arqueología M. V. Ferro

epistémicos tales como la capacidad predictiva, la La simetría está estrechamente vinculada


corroborabilidad, la falsabilidad, la aptitud para con el poder predictivo de una teoría y con su
generar hechos nuevos o sorprendentes, o por su poder explicativo.
capacidad para resolver problemas. Aunque muy “No hay fórmula lógica que establezca
importantes, desde las matemáticas los criterios una nítida línea divisoria entre una bella teoría
de consistencia, coherencia, decidibilidad, inde- explicativa y una simple lista de datos, pero co-
pendencia o categoricidad de los sistemas forma- nocemos la diferencia cuando la vemos: deman-
les, no se ha hecho más que volver a enunciar damos una simplicidad y rigidez en nuestros
cuestiones vinculadas a los valores epistémicos. principios antes de estar dispuestos a tomarlos
En el contexto de innovación se hacen pre- seriamente. Por consiguiente, nuestro juicio esté-
sentes valores de índole pragmáticos de aplicación tico no es sólo un medio para el fin de encontrar
general: objetividad, (entendida en el sentido pop- explicaciones científicas y juzgar su validez: es
periano como intersubjetividad); utilidad (teórica y parte de lo que entendemos por explicación”
práctica); honestidad (no apropiación de descu- (Weinberg 1994: 121).
brimientos o invenciones) y competencia en el uso Para Weinberg en “El Sueño de una Teor-
de instrumentos científicos, como también libertad ía Final”, los juicios de valor estéticos del arte y
de investigación. Sólo nombra muy brevemente: de la ciencia no están al mismo nivel. La belleza
hay otros valores, como la simplicidad, la genera- no se puede definir, sino que se la conoce cuando
lidad, la simetría o la belleza, que han jugado un se siente.
importante papel en muchos momentos claves de
la historia de la ciencia (Echeverría 2002). ASPECTOS ESTÉTICOS EN ANTROPO-
Weimberg, desde la Física distingue be- LOGÍA Y ARQUEOLOGÍA
lleza de elegancia. Define elegancia como: “Una
prueba o cálculo elegante es aquel que consigue “Las almas de las cosas muertas y pasadas
un resultado poderoso con un mínimo de compli- Rondan las apariencias de las cosas vivas” (Pe-
caciones irrelevantes” (Weinberg 1994: 111). La soa 2003:65).
belleza está vinculada a simplicidad de ideas: “La
simplicidad es parte de lo que yo entiendo por César Velandia (2000) nos propone en su
belleza, pero se trata de una simplicidad de ide- texto plantearnos las dificultades y problemas que
as, no de la simplicidad de tipo mecánico que acarrea relacionar Estética y Arqueología, en el
puede medirse contando ecuaciones o símbolos” marco del análisis arqueológico para manejar la
(Weinberg 1994: 111). información de la cual se puede presumir que
La belleza está vinculada con el sentido de tiene un valor significativo, y entenderla en su
inevitabilidad de una teoría y ésta a su vez se re- dimensión estética.
laciona con principios de simetría. Para él es imprescindible el abordaje de
“Un principio de simetría es simplemente los objetos culturales y de su contexto en el regis-
una afirmación de que algo se ve igual desde tro arqueológico desde la perspectiva de la condi-
diferentes puntos de vista (…) Las simetrías que ción estética de las producciones culturales en
son realmente importantes en la naturaleza no contexto. Para este tipo de abordaje propone: “la
son las simetrías de las cosas, sino las simetrías condición estética de los objetos puestos en dis-
de las leyes. Una simetría de las leyes es una cusión y que hacen parte del registro arqueológi-
afirmación de que seguimos descubriendo las co y dos, la postura crítica de quien intenta dicha
mismas leyes de la naturaleza cuando hacemos lectura. En el primer caso la discusión sería si el
ciertos cambios en el punto de vista desde el que objeto en cuestión es o no producido mediante un
observamos los fenómenos naturales. Tales si- proceso que le confirió tal carácter y en el se-
metrías se denominan a veces principios de inva- gundo, desde qué criterios se definen las categor-
riancia (…) Cualquier principio de simetría es al ías de lo estético o, cómo es que se define a algu-
mismo tiempo un principio de simplicidad” na cosa como estética” (Velandia 2000: 1).
(Weinberg 1994: 112-113).

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ANTI • Núm. 12 • Diciembre de 2013

Todo su discurso se sostiene sobre la teor- la misma recta). Las combinaciones posibles,
ía estética de Adorno, Markus y Marx, en térmi- proporcionan por un lado, un criterio de clasifica-
nos de interpretación de contrariedades: “la pre- ción arqueológica y abren un camino en la inves-
gunta aquí sería, que si tenemos en cuenta el ma- tigación arqueológica comparada. Algunos de los
drinazgo que la antropología ejerce en muchas objetivos de su programa contemplan:
partes sobre la arqueología por aquello de que - Entender y aceptar la importancia de la
‘al no ser antropología no sería nada’, ¿con qué matemática en el estudio de situaciones
mentalidad procede un arqueólogo ordinario al que interesan al antropólogo.
acceder a una información que no coincide con - Reconocer y manejar la estructura de gru-
los modelos de las tipologías acostumbradas?” po abstracto.
(Velandia 2000: 10). - Reconocer y manejar las relaciones bina-
Epistemológicamente hablando el trabajo rias, los grafos y los juegos.
de Venlandia discurre por senderos no enuncia- - Clasificar la ornamentación lineal y plana
dos: ¿se puede analizar e interpretar en una inves- de objetos y utensilios de origen arque-
tigación de índole arqueológica, en contexto si- ológico.
guiendo una postura estética determinada y surgi- También el trabajo de Albis y Valencia-
da en el presente? Le queda por resolver cuestio- Oviedo (1990), nos muestra cómo se puede reali-
nes harto discutidas: objetividad/subjetividad; zar una investigación en la región central de Pa-
antropología/arqueología; demarcaciones profun- namá, dividiéndolo cronológicamente en etapas y
das en las que la simetría aparece articulada con en períodos estilísticos y subperiodos. Se analizan
lo bipolar de su postura, y la simplicidad es lo en grupos, las simetrías ya descriptas anterior-
último que se alcanza. mente, pero ahora observando la periodicidad
Albis (1984), en “Arte prehispánico y ma- sistemática en la repetición de un motivo (fre-
temáticas”, muestra cómo se pueden articular la cuencias), con el objetivo de confirmar o no la
historia de la matemática con la antropología en validez de las divisiones periódicas de una deco-
una mirada claramente interdisciplinar que cum- ración estilística. La idea es elaborar criterios
ple con el propósito de enseñar matemática en el clasificatorios según grupos de simetría.
marco de culturas prehispánicas.
“Nuestro conocimiento actual del pensa- CONCLUSIÓN
miento arcaico y la información etnológica, ar-
queológica e histórica, han permitido, en la se- Se han considerado aspectos estéticos ta-
gunda mitad de este siglo, historiar la matemáti- les como simetría, simplicidad y armonía en una
ca pre-euclídea de una manera coherente, dentro primera parte teniendo en cuenta las relaciones
del marco de teorías, estrechamente relacionadas entre Estética y Ciencia, en la segunda desde la
con el origen de la matemática” (Albis 1984: 29). Filosofía de la Ciencia (y particularmente desde
Lo suyo ha sido una investigación exhaus- la Física) y en la tercera, las discusiones que se
tiva sobre la matemática subyacente en el diseño pueden plantear en estudios arqueológicos y an-
ornamental utilizando álgebras de Lie, es decir, tropológicos.
viendo en un grupo de simetrías planas al diseño Gran parte de la discusión tiene su eje en
como una realización geométrica concreta, que el uso de términos tales como criterio (ligado al
llevan el nombre de grupo de simetrías del diseño concepto de racionalidad epistémico y por lo tan-
y que está compuesto por movimientos rígidos o to a la pretensión de verdad) y aspecto (ligado a
isometrías, o por reflexiones o simetrías bilatera- cuestiones valorativas de índole estético).
les. El peso que tienen al ser considerados en
Claramente distingue tipos de simetrías dentro la investigación la simplicidad, simetría y armon-
del diseño: reflexión respecto de una recta (si- ía en investigaciones arqueológicas y antropoló-
metría bilateral); traslación, rotación alrededor de gicas, hacen que vuelvan a enlazarse las contien-
un punto y reflexión deslizante (respecto de una das a nivel teórico epistemológico entre evidencia
recta, seguida de una traslación en la dirección de empírica y arte, y puntualmente en el momento de

9 • Centro de Investigaciones Precolombinas


Simetría, simplicidad y armonía en arqueología M. V. Ferro

analizar e interpretar información del pasado a Ferrater Mora, J.


nivel tanto conceptual como ontológico. 2004. Diccionario de filosofía. Editorial Ariel.
En el trabajo se han comentado investiga- Barcelona.
ciones del ámbito arqueológico y antropológico
que en más de una manera utilizan aspectos esté- Lobato, A.
ticos. Por un lado, propia de una discusión teórica 1965. Ser y belleza. Editorial Herder. Barcelona.
dónde se pone en juego el concepto de estética en
sí misma y de análisis e interpretación en función Pesoa, F.
de enfoques estéticos puntuales. Por otro, en el 2003. Antología esencial. Andrómeda Ediciones.
uso de aspectos estéticos vinculados con la ma- Buenos Aires.
temática en un esfuerzo interdisciplinar en con-
texto. Rosenvasser Feher, E.
2009. Simetría. Siglo XXI Editores. Buenos Ai-
BIBLIOGRAFIA res.
Velandia, C.
Aczel, A. 2000. Estética y arqueología: dificultades y pro-
2006. El artista y el matemático. Editorial Gedi- blemas. En: Segunda Reunión Internacional de
sa. Barcelona. Teoría Arqueológica en América del Sur (TAAS
II). Departamento de Arqueología, Facultad de
Albis, V. Ciencias Sociales, Universidad Nacional del Cen-
1984. Arte prehispánico y matemáticas. tro de la Provincia de Buenos Aires. Olavarría.
Revista de la Universidad Nacional de Colombia
Segunda Época Vol. II, N° 7: 29-34. Bogotá. Weinberg, S.
1994. El sueño de una teoría final. Editorial
Albis, V. y J. Valencia-Oviedo Crítica. Barcelona.
1990. Una aplicación de los grupos de simetría a
la confirmación de períodos y subperiodos estilís- Yarza, F.S.
ticos en la cerámica de la región Central de Pa- 1972. Diccionario Griego-Español. Editorial
namá. Revista de la Academia Colombiana de Ramón Sopena S.A. Barcelona.
Ciencias 17(67): 703-714. Bogotá.

Amster, P.
2004. La matemática como una de las bellas ar-
tes. Siglo XXI Editores. Buenos Aires.

Baker, A.
2004. Simplicity. En: Stanford Encyclopedia of
Philosophy. pp. 8-24. University of Stanford.
http://plato.stanford.edu/archives/fall20097entries
/simplicity.

Bayer, R.
1965. Historia de la estética. Fondo de Cultura
Económica. México.

Echeverría, J.
2002. Filosofía de la ciencia. Editorial Akal. Bar-
celona.

Centro de Investigaciones Precolombinas • 10


ANTI • Núm. 12 • Diciembre de 2013

LA COMARCA DE ACHIRAS
COMO CAMINO PATRIMONIAL Y SU POLÍTICA DE
PLANEAMIENTO (CÓRDOBA-ARGENTINA)

Yanina Aguilar y Luis Alaníz


Centro de Investigaciones Precolombinas, Delegación Río Cuarto
feryanin@yahoo.com.ar; luisceferinoalaniz@yahoo.com.ar

RESUMEN

Los caminos patrimoniales pueden ser parte de una política de planeamiento, como una forma de orde-
namiento territorial que todos los Estados deben tener presente al momento de considerar la intervención
integral del territorio que administran. El territorio constituido en paisaje cultural, en tanto manifiesta las
expresiones materiales y simbólicas del hombre y la naturaleza, es el resultado de la evolución de la so-
ciedad y de los asentamientos humanos a lo largo de los años, bajo la influencia de las limitaciones y/o de
las ventajas que presenta el entorno natural y de las luchas sociales, políticas, económicas y culturales que
en él se manifiestan. A partir de este marco conceptual, presentamos la Comarca de Achiras, dentro del
área Sierras del Sur de la provincia de Córdoba, como un paisaje cultural que a través del tiempo se ha
ido construyendo cualitativamente como tal. A tal punto consideramos que la Comarca puede ser parte de
una política de planeamiento y conformar un camino patrimonial desde los criterios de conectividad, que
permita generar conexiones entre puntos geográficos próximos y la propiedad de constituir interrelacio-
nes, entre los pueblos y comunas ubicados en su zona de influencia.
Palabras clave: camino patrimonial, ordenamiento territorial, comarca, paisaje cultural, desarrollo
sostenible.

ABSTRACT

The patrimonial roads can be part of a policy of planning, like a form of territorial planning that all
States should bear in mind to consider the comprehensive intervention of the territory that they manage.
The territory formed in cultural landscape, manifests itself in both the material and the symbolic ex-
pressions of man and nature, it is the result of the evolution of society and of human settlements over
the years, under the influence of the limitations and/or advantages of the natural environment and of
social, political, economic and cultural struggles that manifest in it. From this conceptual framework,
we present the Comarca of Achiras, in the area of the Sierras del Sur of the province of Córdoba, as a
cultural landscape that through time has been building qualitatively as such. To this point we believe
that the region can be part of a policy of planning and shaping a patrimonial road from the criteria of
connectivity, that make possible to generate connections between geographical points and has the prop-
erty of constitute interrelationships, between the villages and communes located in its area of influence.
Key words: patrimonial roads, land use, region, cultural landscape, sustainable development.

INTRODUCCIÓN cultural y ecológica de toda sociedad, mediante el

S
cual se pretende lograr, a través de instrumentos
egún la Carta Europea de Ordenación del de planeamiento, el desarrollo equilibrado de las
Territorio, 1983, el ordenamiento territorial economías regionales y la mejora de la calidad de
suele ser conceptualizado como la expre- vida y el medio ambiente, mediante usos y activi-
sión espacial de la política económica, social, dades sobre el territorio.

11 • Centro de Investigaciones Precolombinas


La Comarca de Achiras como camino patrimonial… Y. Aguilar y L. Alaníz

Fuente: Wikpedia.org. Provincia de Córdoba Argentina

A partir de este marco conceptual presen- La justificación está en su larga historia,


tamos la Comarca de Achiras, dentro del área en tanto fue nudo de caminos, especialmente ex-
Sierras del Sur de la provincia de Córdoba, como presado en su capacidad de conectividad de arre-
un paisaje cultural que a través del tiempo se ha os, pasajeros y mercancías entre Buenos Aires y
ido construyendo cualitativamente como tal, en Santiago de Chile. Nació como posta colonial en
tanto los bienes que la conforman, representan las El Pantanillo, paraje donde existió un estableci-
obras conjuntas del hombre y la naturaleza. Ilus- miento de alojamiento y correos así como una
tran la evolución de la sociedad y de los asenta- capilla, hacia 1774. También fue población y
mientos humanos a lo largo de los años, bajo la Fuerte de Frontera, frente a las tribus ranqueles.
influencia de las limitaciones y/o de las ventajas Según Rocchietti et al (2011), como resul-
que presenta el entorno natural y de las fuerzas tado de ello, existen muchos sitios arqueológicos
sociales, económicas y culturales sucesivas, tanto de asentamiento doméstico de la época indígena,
internas como externas. sitios rupestres y sitios históricos con numerosos y
Por ello, consideramos la posibilidad de significativos vestigios.
que la Comarca de Achiras forme parte de un ca- De esta manera toda la comarca se con-
mino patrimonial que genere conexiones entre vierte en un paisaje cultural que al ser incorporada
puntos geográficos próximos, e interrelaciones como camino patrimonial, favorecería a una polí-
entre los pueblos y comunas, ubicados en un tra- tica de ordenamiento territorial, en este caso en el
mo específico o en la zona de influencia de un área de las Sierras del sur de la Provincia de
camino patrimonial, como parte de una política de Córdoba.
ordenamiento territorial. “En primer término se podría determinar
Nuestro objetivo es hacer hincapié pun- a partir de ello, un recorrido que implique un
tualmente en la localidad de Achiras, ya que la contenido histórico, un vínculo cultural y una
proponemos como nodo potencial del Camino utilización determinada del territorio, que se re-
Patrimonial de toda la Comarca. fleje en un recorrido físico, expresado en los ele-

Centro de Investigaciones Precolombinas • 12


ANTI • Núm. 12 • Diciembre de 2013

mentos materiales y simbólicos que permitan re- contrastándolo con lo distante, lo lejano” (Ma-
construir el trazado histórico” (Martorell Carreño doery 2008: 58). En relación con lo local, lo na-
2010: 203). cional se impone por unicidad. En referencia a lo
Por lo tanto, los campos prioritarios de ac- global, lo nacional asume características de local,
ción son la investigación y el desarrollo ante la es decir, de diversidad, autenticidad e identidad.
prudencia en el uso social de las expresiones cul- Siguiendo a Boisier (1996) lo regional, por
turales, las prácticas y consumo cultural, el turis- su parte, es una categoría tan genérica como difusa,
mo cultural y el desarrollo cultural sostenible. por su carácter polisémico. En principio es una ca-
De esta manera el camino patrimonial pro- tegoría intermedia, podemos hablar de región sub-
cura delinear los factores de la estructura espacial nacional, internacional, supranacional, etc. Una
y temporal de toda la comarca, en tanto sistema región es una estructura compleja e interactiva, en la
de tierras que en el pasado y en el presente ha cual el contenido define el continente en cuanto a
favorecido la instalación humana, se compone de límites, dimensiones y otros atributos geográficos.
sitios, monumentos, construcciones y áreas de Es por ello que resulta necesario interpre-
influencia con un uso, fin, intensidad y variacio- tar la idea de región como una estructura flexible,
nes en torno a un sistema dinámico de relaciones cuyos límites no necesariamente deben ser fijados
históricas y el patrimonio integral asociado a su en términos jurisdiccionales (ya que, de esta ma-
existencia. nera, solamente se atendería a uno de sus elemen-
tos constitutivos), sino en función de un abanico
LA COMARCA DE ACHIRAS COMO CA- de aspectos: eslabonamiento de procesos produc-
MINO PATRIMONIAL tivos, formas organizativas, factores productivos
predominantes, emprendimientos comunes, pro-
Primero empezaremos por describir nues- blemáticas concretas, etc. La flexibilidad, la elas-
tro universo de estudio desde su caracterización ticidad y la maleabilidad se convierten en los
como comarca, para luego referenciar en él, los elementos indispensables de toda región moderna.
objetivos y la metodología de aplicación como “En definitiva, cualquiera sea la cantidad y
posible camino patrimonial. el tipo de escalas geográficas que identifiquemos,
“La construcción del espacio está dada siempre estaremos hablando de escalas espaciales
por las prácticas materiales de la reproducción diferenciadas que se relacionan entre sí, de planos
social y, si tenemos en cuenta que estas varían atravesados por procesos sociales diferenciados y
geográfica e históricamente, sabremos que el envolventes” (Ortiz 1998: 34).
espacio social está construido de manera diferen- Teniendo en cuenta la división administra-
cial: a cada formación social le corresponde una tiva de la provincia de Córdoba (Argentina), el
división del trabajo, relaciones de poder y una área de estudio mencionada pertenece a la Pedanía
determinada estructuración del espacio” Achiras y a la Pedanía San Bartolomé, como una
(Sánchez 1991, citado por Madoery 2008: 57). de las sub-divisiones del departamento de Río
Dentro de los procesos sociales, los esce- Cuarto.
narios espaciales se dividen, siguiendo a Marcelo Ahora bien ¿bajo qué criterios asignamos
Escolar (1993), en tres escalas geográficas de a la localidad de Achiras y al resto de las locali-
referencia: local, nacional y global, en el contexto dades que trascienden los límites de la pedanía del
contemporáneo. mismo nombre, la categoría de Comarca?
Para Renato Ortiz (1998) lo local se refie- Nuestro criterio a utilizar ha sido entender
re a un espacio restringido, bien delimitado, de- primeramente a la Comarca como una división
ntro del cual se desenvuelve la vida de un grupo o regional en función de dos variables predominan-
conjunto de personas, territorio de hábitos coti- tes, el medio y el hombre, como partes integrantes
dianos, de relaciones de proximidad. “Lo local de un territorio en continuo desarrollo.
tiene también la cualidad de la diversidad, de la A su vez, la comarca encarna las propias
particularidad, por eso correspondería hablar de peculiaridades físicas, ambientales, naturales y
lugar del arraigo, de los lazos sociales concretos, culturales que determinan el entorno y en buenas

13 • Centro de Investigaciones Precolombinas


La Comarca de Achiras como camino patrimonial… Y. Aguilar y L. Alaníz

partes otras estructuras como la económica, la del turismo de naturaleza o aventura y otras moda-
dimensión histórica y su desarrollo. lidades no tradicionales como el turismo rural o
agroturismo. Posee la segunda ciudad en importan-
cia de la provincia de Córdoba, Río Cuarto.
Además conforman el circuito otras localidades
como Río de los Sauces, Alpa Corral, Las Alba-
hacas, Villa El Chacay con ofertas variadas para el
descanso y la práctica de turismo alternativo.
De esta manera, consideramos que el terri-
torio que estamos estudiando comprende una co-
marca en tanto, de acuerdo a la Ley Provincial
9206 sancionada en el año 2004 que divide a la
provincia de Córdoba en 26 comunidades regio-
nales, integra una de las mismas con cabecera en
la ciudad de Río Cuarto. Dicha comunidad regio-
nal está integrada no solo por el municipio de
Achiras sino también por el de Alpa Corral, Los
Cóndores y Río de los Sauces. Y en cuanto a las
comunas, Cañada del Sauce, Las Albahacas, Lutti
y Villa El Chacay.
Fuente: Plan Estratégico de Turismo Sustentable de A su vez, teniendo en cuenta los Decretos
Córdoba de Regionalización Nº 552/86 y Nº 554/86, la
provincia de Córdoba se divide de acuerdo a sus
Según Rocchietti et al (2011) puntualmen- características turísticas, en diez áreas que han
te la comarca de Achiras está caracterizada por sido delimitadas en función de la presencia de
dos bio y geoambientes diferenciados: sierra de localidades con tierras disponibles con costos
Comechingones (Sierras Pampeanas Orientales) y relativamente accesibles y con alto potencial de
llanura pampeana. Los límites establecidos de la revalorización. La diversidad de recursos natura-
Comarca son: al norte, Río Piedras Blancas (Pe- les y culturales preservados con posibilidad de
danía San Bartolomé) que engloba a las localida- aprovechamiento, la accesibilidad adecuada y
des de El Chacay y Las Albahacas, al sur hasta la planificación de obras públicas viales que incre-
jurisdicción de la localidad de Chaján (Cerro mentan significativamente dicha accesibilidad, la
Blanco-Cerro Negro), hacia el este Cuatro Vien- existencia de zonas vírgenes con espacio para
tos y hacia el oeste la localidad de la Punilla nuevos emprendimientos y la posibilidad de apli-
(límite con la provincia de San Luis). car la Ley de Fomento Turístico Nº 7232 que
De esta manera sin dejar de lado la divi- promueve las inversiones y el desarrollo del sec-
sión política jurisdiccional de la provincia de tor turismo en todas las áreas turísticas y rutas de
Córdoba, nuestra delimitación comarcal se ajusta acceso de la provincia.
a los criterios de regionalización de la provincia a “Regiones con alto potencial y perfil defi-
partir de sus recursos económicos, naturales y nido que ayuda a orientar las inversiones en di-
culturales. versas actividades turísticas. Actitud proactiva
El área Sierras del Sur de la provincia de hacia la conformación de entidades intermedias
Córdoba, está situada en la línea de encuentro de representativas del sector turístico, privilegiada
la montaña y la llanura, al este del Cordón de ubicación geográfica central que favorece la in-
Comenchingones, del cual descienden numerosos terconectividad con otros grandes centros urba-
cursos de agua. nos, que propicia no solo el turismo recreativo,
Provee una sucesión paisajística donde se sino también el desarrollo de importantes activi-
va articulando lo serrano y lo rural. Es rico en po- dades comerciales, orientando las inversiones
tencialidad ya que el área es apta para el ejercicio hacia nuevos nichos de mercado, reconocimiento

Centro de Investigaciones Precolombinas • 14


ANTI • Núm. 12 • Diciembre de 2013

público y privado sobre la importancia del sector la práctica arqueológica, museológica-patrimonial,


turismo en el marco de la economía provincial y histórica, etnohistórica, geográfica y turística.
estrechos vínculos entre el sector público y priva- Cada una de estas ciencias y disciplinas
do para favorecer nuevas formas de organización han observado y registrado por más de veinte
del mercado” (Plan Estratégico de Turismo Sus- años, las cualidades científicas, históricas, natura-
tentable de Córdoba 2005: 21). les y culturales de la comarca.
Se ha estudiado el proceso de larga dura-
PLAN DE ACCIÓN PARA CONSTITUIR LA ción de ocupación del territorio de dicha comarca,
COMARCA DE ACHIRAS COMO UN CA- entendiendo que los valores perceptuales (estéti-
MINO PATRIMONIAL cos, de diversidad o de singularidad) contenidos
en aquél, constituyen un patrimonio natural y cul-
Objetivos tural que precisa ser conservado y protegido,
- Determinar el Camino Patrimonial de la razón que ha motivado la inclusión de la dimen-
Comarca de Achiras como una propuesta sión territorio-ambiente en la planificación de un
de interpretación de políticas de Desarro- camino patrimonial como estrategia de ordena-
llo Endógeno. miento territorial a recomendar para el área de
- Incorporar la dinámica de la sociedad local Sierras del Sur de la provincia de Córdoba.
a la hora de diagnosticar la realidad y ela- De esta manera tendremos en cuenta un sis-
borar políticas de planeamiento específicas. tema dinámico de análisis, basado en considerar el
- Considerar a la Comarca como un paisaje sustrato histórico, material y cultural que hace an-
cultural de expresión concreta y percepti- claje en el patrimonio integral de la comarca.
ble de un sistema territorial, integrado por Se tendrá en cuenta que la misma forma
los elementos y procesos del medio am- parte de un amplio espacio territorial que com-
biente, la población y sus actividades, la prende intercambios de bienes, ideas, conocimien-
evolución organizativa del poblamiento de tos, valores y movimiento interactivos de personas.
la comarca en el tiempo y en el espacio, y
el marco legal e institucional que ya ad- CONSIDERACIONES FINALES
ministran los municipios.
- Lograr que el Camino Patrimonial forme Es importante aclarar que hasta el momen-
parte de una política de ordenamiento te- to nuestros estudios se han focalizado en las rela-
rritorial con bases técnicas y normativas, ciones entre medio ambiente y paisaje y sus con-
haciendo partícipe a todos los actores que dicionamientos y la posibilidad de riesgo del pa-
intervienen en la planificación turística de trimonio arqueológico por la falta de un accionar
la comarca. intersectorial en el área mencionada.
- Establecer que el Camino Patrimonial con- Ello nos ha permitido pensar en futuras re-
temple el mantenimiento de las expresio- comendaciones estratégicas con la intención de
nes culturales con el correcto uso de la or- presentar dicha propuesta a los organismos gu-
ganización espacial donde se encuentran. bernamentales que conforman a la comarca, en
- Recomendar un Turismo Sostenible en la tanto es el Estado a nivel multiescalar quién debe
línea de la Agenda 21 Local y en la Con- considerar las políticas de planeamiento de mane-
vención Europea sobre los Paisajes Cultu- ra integral y sostenible conjuntamente con las
rales formulada por UNESCO-ICOMOS entidades científicas y la población local.
en el año 2000. Dichas recomendaciones se fundamentan
en las condiciones espaciales que rodean a los
METODOLOGÍA sitios (localización, desplazamiento, distancia),
paisajístico-perceptuales, usos del suelo, conser-
La formulación de un Camino Patrimonial vación, valoración de escenarios no cotidianos y
que proponemos para la Comarca de Achiras, se medioambientales (invierno-verano, urbano-rural,
ajusta a los principios metodológicos derivados de modernidad).

15 • Centro de Investigaciones Precolombinas


La Comarca de Achiras como camino patrimonial… Y. Aguilar y L. Alaníz

Existe una capacidad paisajística en torno a AGRADECIMIENTOS


los sitios arqueológicos determinada por los atribu-
tos de calidad, visibilidad y fragilidad, complemen- Al incondicional apoyo brindado a lo largo
tarios entre sí. Un paisaje es de calidad cuando de todos estos años del equipo de docentes y es-
contiene valores ecológicos, perceptuales o cultu- tudiantes del Laboratorio de Arqueología y Et-
rales que le confieren excelencia o mérito para no nohistoria del Departamento de Historia de la
ser alterado o destruido, lo que no significa que Facultad de Ciencias Humanas de la Universidad
paisajes de escasa calidad no merezcan ser prote- Nacional de Río Cuarto. Al Centro de Investiga-
gidos. La evaluación de la calidad paisajística, ciones Precolombinas y al Municipio de Achiras
siempre cargada de subjetividad, permite conocer por el sostén a las investigaciones realizadas des-
la aptitud que presenta un paisaje para acoger de- de hace dos décadas.
terminados usos o actuaciones.
La visibilidad de un territorio y, en conse- BIBLIOGRAFIA
cuencia, de su expresión perceptible o paisaje,
depende tanto de condiciones naturales (topográ- Boisier, S.
ficas y atmosféricas) como de la cantidad de ob- 1996. Modernidad y Territorio. Cuadernos del
servadores que lo contemplan, por lo que en pla- ILPES N° 42. Santiago.
nificación se suele considerar, además de la visi-
bilidad topográfica, una visibilidad real que varía Carta Europea de Ordenación del Territorio.
con la accesibilidad y se incrementa con la fre- 1983. Comunidades autónomas de España. Casti-
cuencia de observadores. lla y León.
Así los caminos patrimoniales se inscriben
en un contexto natural y/o cultural en el que inci- Escolar, M.
den y que contribuyen a caracterizar y a enrique- 1993. Territorios de dominacao estatal e fronteiras
cer con nuevas dimensiones, un proceso interacti- nacionais: a mediacao geográfica da representa-
vo. Un camino patrimonial conecta e interrelacio- cao e da soberanía política. En: Otro Desarrollo.
na geografía y bienes patrimoniales muy diversos, El cambio desde las ciudades y regiones. O. Ma-
formando un todo unitario. Desde esta perspectiva doery. Ed. UNSAM. San Martín.
se aborda de manera directa los factores de conec-
tividad e interrelación inherentes a las políticas de Madoery, O.
ordenamiento territorial. 2008. Otro Desarrollo. El cambio desde las ciu-
“Los caminos patrimoniales pueden dotar- dades y regiones. Ed. UNSAM. San Martín.
le a la política de preservación, una amplitud te-
rritorial y una integración cultural sometidos a Martorell Carreño, A.
medidas de protección para conservar debidamen- 2010. Itinerarios culturales y patrimonio mun-
te el camino propuesto y aplicar un tratamiento dial. Fondo editorial Universidad de San Martín
integral de las expresiones culturales que incluye” de Porres. Lima.
(Martorell Carreño 2010: 238-239).
Ortiz, R.
Esperamos poner en praxis la propuesta
1998. Otro territorio. Ensayos sobre el mundo con-
formulada, una vez que los estudios de investiga-
temporáneo. Convenio Andrés Bello, Colección
ción científica (arqueológicos, patrimoniales y
Pensamiento Latinoamericano. Santa Fe de Bogotá.
urbanísticos) nos permitan visibilizar las políticas
culturales en relación a las capacidades y conflic- Plan Estratégico de Turismo Sustentable de Córdoba.
tos que presenta toda la comarca, ya que a partir 2005. Agencia Córdoba Turismo. Córdoba, Ar-
de fortalecer sus capacidades y trabajar sus con- gentina.
flictos podamos elaborar un plan director que
considere la importancia del camino patrimonial Rocchietti, A. M., F. Ribero y Y. Aguilar
para el sur de la provincia de Córdoba en el plano 2011. Modelo arqueológico para la Comarca de
de la cultura y la estrategia. Achiras. Jornadas de Historia de Córdoba. Inédito.
Centro de Investigaciones Precolombinas • 16
ANTI • Núm. 12 • Diciembre de 2013

POLÍTICAS DE PRESERVACIÓN Y
VALORIZACIÓN PATRIMONIAL SOBRE LOS
PETROGLIFOS DEL “SECTOR ESCUELA HERNÁNDEZ”
VILLA EL CHACAY (CÓRDOBA-ARGENTINA)

Arabela Ponzio y Denis Reinoso


Laboratorio de Arqueología y Etnohistoria, Universidad Nacional de Río Cuarto
Centro de Investigaciones Precolombinas
ponzioarabela@gmail.com; denisreinoso@gmail.com

RESUMEN

Éste trabajo aborda la problemática patrimonial sobre un sector específico de arte rupestre en la comu-
na Villa El Chacay (Departamento de Río Cuarto, Córdoba), compuesto por un petroglifo de conside-
rable dimensión, que presenta numerosos hoyuelos o cupuliformes, y otros menores, ubicados al aire
libre en relación a un cauce seco, en un actual contexto de semi-urbanización en las inmediaciones de
la Escuela Hernández. Se parte de la necesidad urgente de poner a consideración las políticas de pro-
tección y valorización ya que se encuentran insertos en un contexto inmediato de urbanización. Se pre-
sentan aquí las características de los petroglifos, se explora su configuración como arte, así como la
organización interna de los sitios y su articulación espacial en un contexto más amplio. Se evalúan, a su
vez, las problemáticas relacionadas a su preservación y valor patrimonial enunciando algunos posibles
cursos de acción.
Palabras clave: patrimonio, petroglifos, arqueología, Sierras de Comechingones Sur, cupuliforme, arte
rupestre.

ABSTRACT

This paper addresses the heritage problem of a specific site of rock art in the commune Villa El Chacay
(Departamento de Río Cuarto, Córdoba), form by a petroglyph of considerable dimension, which has
numerous pits or dome-shaped and other minor, located outdoors on a dry riverbed in a context of
semi-urbanization in the vicinity of the Hernandez School. It is proposed the urgent need to consider
policies of protection and valorization, as they are embedded in an immediate context of urbanization.
We present here the characteristics of the petroglyphs, we explore its configuration as art as well as the
internal organization of the sites and their spatial relations in a broader context. There are evaluated, in
turn, the problems related to their preservation and heritage value stating some possible courses of ac-
tion.
Key words: patrimony, petroglyphs, archeology, Sierras de Comechingones Sur, dome shaped, rock
art.

INTRODUCCIÓN presenta un estudio minucioso de los sitios, aten-

E
diendo a las condiciones de exposición y riesgo
l siguiente trabajo aborda la problemática en las que se encuentran, procurando poner en
patrimonial de varios sitios rupestres de la consideración políticas de protección y valoriza-
serrana localidad de Villa El Chacay. Se ción posibles sobre los mismos, particularmente

17 • Centro de Investigaciones Precolombinas


Políticas de preservación y valorización patrimonial… A. Ponzio y D. Reinoso

en relación a aquellos que se encuentran insertos vas problemáticas de comprensión y análisis de


en un contexto inmediato de urbanización1. casos por la ampliación de las fronteras de su
Primeramente se exponen, las nociones de objeto de estudio, de acuerdo a lo expresado so-
Patrimonio Integral y Patrimonio Arqueológico, bre el concepto de Patrimonio Integral. La reali-
explicitando las características del arte rupestre dad es que hoy en día los bienes culturales que
como una variante de éste último que reviste sin- busca preservar el Patrimonio Arqueológico
gular importancia, por la complejidad que repre- afrontan duras condiciones para su supervivencia,
senta la interpretación de su significación y valor ya que las políticas de mercado y la prioridad
social en el contexto de su producción. dada al desarrollo económico, industrial y urbano,
En segundo lugar, se describen las reco- sumado a una falta de educación y concientiza-
mendaciones internacionales y el marco legal que ción sobre su valor cultural atentan contra la pro-
rige para el patrimonio en Argentina y en la pro- tección del mismo. La educación es un tema cen-
vincia de Córdoba y se exponen algunas conside- tral ya que: “Promoviendo la adquisición y utili-
raciones sobre el análisis de estos documentos. zación de los saberes necesarios para formular
Ubicados en el espacio de la Sierra de estrategias educativas, formales y no formales,
Comechingones Sur, se caracterizan las particula- que generen en la escuela una pedagogía más
ridades del arte rupestre de los petroglifos objeto realista y más progresista, y en los medios de
de estudio y las variables teóricas que se disponen comunicación un discurso responsable que acer-
para una posible interpretación. que a los educandos, en el caso de la escuela y a
Finalmente, se aborda el análisis de la si- la gente en el caso de los medios, al Patrimonio
tuación de los petroglifos del Sector Escuela Cultural, para conocerlo y protegerlo pero, lo
Hernández desde sus características arqueológicas que es más importante aún, aprendan a usarlo
y su valor patrimonial, enunciándose algunas re- como herramienta de afirmación colectiva”
comendaciones sobre los cursos posibles de acción (Martini 2007: 351-352).
a seguir, orientados a garantizar su protección. El arte rupestre, como Patrimonio Arque-
ológico, en forma de pinturas y grabados, consti-
PATRIMONIO INTEGRAL Y PATRIMO- tuye en vestigio claro y duradero de la transmisión
NIO ARQUEOLÓGICO, EL VALOR DEL de pensamientos y creencias del ser humano a
ARTE RUPESTRE través del arte y las representaciones gráficas. En
cualquier latitud este tipo de registro se comporta
El concepto de Patrimonio Integral (Mar- como un gran portador/receptor de memoria, per-
tini 2007) supone una gran herramienta teórica y mitiendo descubrir historias originarias propias.
analítica para el estudio del conjunto de manifes- De esta manera, atender a la significación posible
taciones tangibles e intangibles de la cultura, que del arte, permite a los investigadores acercarse a la
se producen y reproducen históricamente (Patri- trama de relaciones sociales de la cultura que lo
monio Cultural) y se articulan en torno a un de- produjo. Se trataría entonces de un archivo históri-
terminado ambiente natural (Patrimonio Natural). co de los pueblos sin escritura que abarca un
Esta interrelación de variables contribuye a un enorme abanico espacio-temporal. Nos acerca a la
acercamiento mayor a la dimensión de sentido y ideología de los llamados hombres prehistóricos y
valor social del patrimonio. como tal su valor patrimonial es de suma impor-
El Patrimonio Arqueológico, tradicional- tancia ya que, en la mayoría de los casos, constitu-
mente implicado en la noción de Patrimonio Cul- yen uno de los pocos o únicos vestigios cultural-
tural, encuentra ahora nuevas posibilidades de mente simbólicos de estas sociedades.
desarrollo para su aplicación, pero también nue- En los últimos años se ha dado una fuerte
importancia a la vinculación del arte rupestre y la
1
Los petroglifos fueron estudiados en el marco del proyecto totalidad de su entorno, como configuración de una
de investigación “Achiras Histórica: Nuevo enfoque para el escenografía natural que da lugar y significado a la
planeamiento de su desarrollo cultural” (Rocchietti et al.
2011) dirigido por Ana María Rocchietti, Marcela Tamagnini representación, de acuerdo a los intereses de los
y Yoli Martini. productores de las obras y las percepciones de los

Centro de Investigaciones Precolombinas • 18


ANTI • Núm. 12 • Diciembre de 2013

destinatarios inmediatos. Rocchietti (2009) define Establecer instrumentos legales e imple-


ciertos criterios para su estudio: comprensión, dis- mentar acciones de protección del patrimonio
tinción, definición, sistematización y criticidad. El cultural por medio de inventarios, registros, catá-
estilo como herramienta de análisis propone algu- logos y todo tipo de actividades de promoción y
nos supuestos de investigación: acumulación de difusión. Garantizar el respeto a la idiosincrasia
actos de dibujo, repetición ritual de una ideología, cultural, social, económica y política del contexto
relictos sucesivos y autónomos de arte o de ideolog- local definiendo planes de acción local a medio
ía. Como ya se ha planteado, el arte sugiere la ex- plazo, que promuevan, en sus contenidos la inter-
presión ideológica, y en este sentido la presente acción entre medio ambiente, sociedad, economía
propuesta adhiere a la definición que Marc Angenot y participación de la población en todos los nive-
toma de Bajtín (Bajtín/Voloshinov 1977: 27, citado les de su desarrollo. Considerar los parámetros
en Angenot, 2010: 28) donde: “El ámbito de la culturales en la gestión urbanística y en toda pla-
ideología coincide con el de los signos, se corres- nificación territorial y urbana, estableciendo le-
ponden mutuamente, allí donde se encuentra el yes, normas y reglamentos necesarios que asegu-
signo se encuentra también la ideología”. ren la protección del patrimonio cultural local y la
Esta breve caracterización del objeto y las herencia de las generaciones antecesoras. Promo-
problemáticas del estudio del arte rupestre, nos ver las relaciones entre equipamientos culturales
acerca a un planteo general de las dificultades que y entidades que trabajan con el conocimiento, con
presenta para el encuadramiento y la definición las universidades, los centros de investigación,
de las variables de análisis y acción de las políti- entre otros (Agenda 21 de la Cultura 2004).
cas patrimoniales sobre estos vestigios. El estudio En el ámbito nacional, la adopción de es-
y la reflexión patrimonial sobre tales sitios es tas disposiciones se implementó en el PFETS que
fruto del arduo trabajo de investigadores en ar- fue presentado por la Secretaría de Turismo de la
queología que se esmeran por descifrar los enig- Nación, en el Congreso Federal de Turismo de
mas que presentan tales manifestaciones, dada su Córdoba en junio del año 2005. El mismo se pro-
importancia significativa para la comprensión del yectó para ser realizado durante 10 años con el
pasado indígena. objetivo principal de articular distintos factores
que impiden el desarrollo de la actividad turística
POLÍTICAS DE GESTIÓN PATRIMONIAL. de manera integrada incidiendo directamente en
LAS REFERENCIAS DE LA AGENDA 21 Y la calidad y eficiencia total de los servicios. El
EL PLAN ESTRATÉGICO DE TURISMO principal inconveniente en Argentina respecto al
SUSTENTABLE DE LA PROVINCIA DE turismo, sería la desequilibrada asignación de
CÓRDOBA EN EL MARCO DEL PLAN FE- recursos que ha configurado un territorio que pre-
DERAL ESTRATÉGICO DE TURISMO senta una amplia diversidad de desarrollos loca-
SUSTENTABLE (PFETS) les. El PFETS tiene como objetivos: la coordina-
ción intersectorial e interjurisdiccional para la
La Agenda 21 de la Cultura fue firmada y planificación estratégica; la planificación de la
ratificada por diversos organismos en Barcelona inversión en turismo sustentable; la planificación
el 8 de mayo de 2004. Es un plan que hace énfa- y puesta en valor de atractivos y productos; mejo-
sis en la acción pública en el marco de la cultura ramiento de la infraestructura; optimización de la
y es el primer documento internacional que reco- calidad integral de los destinos turísticos provin-
noce el aspecto local en la planificación de políti- ciales; comunicación, marketing y promoción.
cas culturales. Referiremos brevemente los aspec- En la provincia de Córdoba, el Plan Es-
tos centrales de su contenido para ver su articula- tratégico de Turismo Sustentable de la Provincia
ción en los planes del PFETS y, esencialmente el de Córdoba forma parte del proceso de desarrollo
Plan Estratégico de Turismo Sustentable de la regional de la provincia, que se inicia bajo la Ley
Provincia de Córdoba. provincial N° 9206, Ley Orgánica de Regionali-
La A21 plantea, para el desarrollo de polí- zación sancionada en el año 2004 durante la go-
ticas culturales en el ámbito local: bernación del Dr. José Manuel de la Sota.

19 • Centro de Investigaciones Precolombinas


Políticas de preservación y valorización patrimonial… A. Ponzio y D. Reinoso

Bajo el criterio de sustentabilidad que pro- culo 1° en la preservación, protección y tutela de


pugna la ley en tanto indicador de desarrollo re- objetos y bienes arqueológicos y paleontológicos
gional de gestión en cada una de las comunidades con su adecuado aprovechamiento científico y
regionales es que un año después el gobierno de la cultural. Para tal caso la respectiva ley aclara en su
provincia de Córdoba, a través de la Agencia artículo 2° que integran el Patrimonio Arqueológi-
Córdoba Turismo, toma la decisión de facilitar los co de la Nación las cosas muebles e inmuebles que
medios para la elaboración de un plan estratégico se encuentren en la superficie, subsuelo o sumer-
que se convirtiera en una herramienta fundamental gidas en aguas jurisdiccionales, que puedan pro-
para el diseño de una política de estado orientada porcionar información sobre los grupos sociocultu-
hacia el desarrollo integrado de cada sector. rales que habitaron el país desde épocas precolom-
Si bien la provincia cuenta con anteceden- binas hasta épocas históricas recientes. A su vez en
tes jurídicos en torno a la planificación turística los artículos 4°, 7° y 8° manifiesta el rol del Esta-
integral y han servido de antecedentes al plan do, a nivel nacional y provincial, en su facultad
estratégico, el basamento del mismo está centrado para el ejercicio de tutela sobre el Patrimonio Ar-
en los principios que propugna las Naciones Uni- queológico teniendo en cuenta la preservación,
das a partir de la definición que adopta la Organi- investigación y divulgación, como así también en
zación Mundial del Turismo (OMT) en 1987 so- la adopción de políticas y medidas tendientes a
bre lo que implica el desarrollo sustentable y en alcanzar una legislación y organización adminis-
un marco general de aplicación que se encuadra trativa uniforme en todo el territorio nacional, con
en las disposiciones contenidas en la Ley Federal el objeto de facilitar la protección e investigación
de Turismo N° 25.997 y en la Ley Provincial de del Patrimonio Arqueológico y Paleontológico. En
Turismo N° 9124. esta instancia queda claro que el poder de policía,
El plan, sin embargo, sostiene la idea de es del Estado Nacional el cual podrá ejercerlo en
un “producto turístico-cultural especializado”. Se forma concurrente con las provincias a solicitud de
trata de una concepción del patrimonio de corte éstas.
elitista que justifica un orden cultural y político, En los artículos 9° y 10° se menciona el
basado en un ideal de asimilación del patrimonio dominio sobre los bienes arqueológicos; estos son
a la categoría de complejo monumental y em- del dominio público del Estado Nacional, provin-
blemático. De esta manera se uniformizan las cial o municipal, según el ámbito territorial en que
particularidades regionales de la provincia con se encuentre y a su vez los materiales arqueológi-
identidad de idiosincrasia propia. cos procedentes de excavaciones realizadas pasan
Todas estas aéreas que en su interior pose- a poder del Estado nacional, provincial o munici-
en referentes patrimoniales dignos de ser conser- pal, quedando los organismos de aplicación facul-
vados, se revalorizan por sus recursos naturales y tados a darle el destino que consideren más ade-
culturales siempre que estos últimos sean eso, es cuado para su preservación.
decir, recursos que posibiliten solo una potencia- De esta manera, la protección del patri-
lidad económica; así, el patrimonio deja de ser monio en Argentina se basa en una lógica de pa-
interpretado desde su carácter identitario e inte- trimonio nacional fundada en la custodia del Es-
gral, en donde el criterio de desigualdad marca la tado, pero este sistema de protección tiene impor-
exclusión y un ocultamiento de las diversidades, tantes fallas en su funcionamiento (Berberián
creando un contexto de negación y perdida de la 1992; Endere 2002). Respecto a la Ley Nacional
identidad cultural. N° 25.743, Eduardo Berberián (2009) señala el
sinuoso camino que recorrió el proyecto previo
SOBRE EL MARCO LEGAL EN ARGENTINA (Proyecto Solana) desde el momento de su elabo-
ración, entre septiembre de 1997 y mayo de 1998,
En Argentina el marco legal que manifiesta pasando por distintas instancias que terminaron
lo dicho, se suscribe en la sanción en el año 2004 alterando la propuesta inicial, hasta la concreción
de la Ley de Patrimonio Arqueológico y Paleon- de la ley, tergiversando el sentido orgánico y
tológico N° 25.743, la cual se vertebra en su artí- armónico buscado y generando confusión entre

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ANTI • Núm. 12 • Diciembre de 2013

las competencias nacionales y provinciales. Asi- un sustento legal y normativo que asegure su pro-
mismo, en el contenido de la ley, queda claro el tección efectiva. Algunas alternativas plantean así
lugar del poder o el rol de ciertos actores, en tanto mismo que frente a un estado nacional que se
activadores de patrimonio, para evaluar y selec- desdibuja es necesario revalorizar el rol que debe
cionar aquellos elementos que resultan relevantes jugar la sociedad civil asumiendo una mayor par-
a la hora de representar a la nación. En este senti- ticipación en los procesos decisorios. Sostiene
do, la misma fue pensada para conocer y valorar Endere que “No sería aventurado pensar en una
críticamente nuestra tradición y patrimonio cultu- ‘reingeniería’ de la protección del patrimonio
ral. Y de este modo poder optar por aquellos ele- arqueológico, insistiendo en calificar como ‘daño
mentos que mejor favorezcan al desarrollo nacio- ambiental’ al deterioro de los sitios, tornando
nal. Por otro lado, la rentabilidad de la explota- más ‘pública’ a la arqueología, más participativa
ción turística de los sitios y las posibilidades que a la gestión, más democrática a la toma de deci-
ofrece la legislación vigente, constituyen una siones y más autogestiva a la búsqueda de recur-
problemática patrimonial que frecuentemente sos técnicos y financieros. Pero al mismo tiempo
favorece a los intereses privados o estatales que propiciando instancias de regulación, evaluación
responden a expectativas de desarrollo meramen- y control en ámbitos subnacionales, nacionales
te económico y limitan la capacidad de la socie- y/o supranacionales, así como en asociaciones
dad en general de apropiarse del valor social y profesionales” (Endere 2002: 75).
cultural que pueden revestir los sitios.
Este acercamiento a la normativa sobre el EL ESPACIO
patrimonio arqueológico, denota su falta de in-
terés por el significado y la apropiación del valor Sierra de Comechingones Sur
cultural que los visitantes hacen de los sitios, por
lo tanto las prioridades en el destino de fondos El espacio regional que abarca el Arte Ru-
para la preservación de tales lugares no tiene que pestre objeto de estudio está enmarcado en la
ver, necesariamente, con la importancia patrimo- Sierra de Comechingones Sur. Esta corresponde
nial en tanto re-significación (siempre es así al tramo austral de las Sierra Grande de Córdoba
cuando nos acercamos a las representaciones de y forma parte del sistema de las Sierras Pampea-
otras culturas) de una identidad pasada, comparti- nas. Morfológicamente el sector Sur de la Sierra
da o no, sino con el valor estético y monumental de Comechingones está conformado por cordones
de tales vestigios. Actualmente, sin embargo, al orográficos de dirección meridiana a submeridia-
menos desde el trabajo científico, se está avan- na, divididos estos por valles longitudinales ma-
zando hacia una política de clausura de los sitios yores (N-S) y transversales (E-O) parcialmente
para su estudio sistemático y se opta por la expo- rellenos por depósitos cuaternarios. Las serranías
sición de imágenes y espacios virtuales que pro- tienen una altura que varía entre los 600 y 900
tegen el sitio y brindan la debida información al m.s.n.m. (Fagiano et al. 1995: 89).
visitante. Evidentemente, asistimos a un cambio Está constituida litológicamente por rocas
en el acercamiento a los bienes patrimoniales y a ígneas y metamórficas, denominado en su conjun-
la concepción tradicional de museo y, por supues- to como basamento cristalino. Las rocas me-
to entonces, esta situación es fuente de profundos tamórficas, ocupan algo más del 70 % de los aflo-
debates donde se discute el derecho o no de la ramientos, siendo los más comunes esquistos y
población en general de acceder a tales sitios. gneises. Las rocas ígneas son esencialmente de
Desde el análisis de la normativa vigente, composición granítica, y configuran el típico pai-
en tanto las políticas gubernamentales sobre el saje granítico dónde son frecuentes las formacio-
acceso y el uso social del patrimonio arqueológi- nes de aleros, taffonis y bolas en distintos grados
co no se modifiquen sustancialmente y a tono con de evolución.
los nuevos aportes de las distintas disciplinas que Hidrográficamente la región tiene abun-
estudian la situación patrimonial del arte rupestre, dancia ríos y arroyos, con cursos de escaso cau-
los sitios en general se encuentran desprovistos de dal. Estos descienden de la Sierra de Comechin-

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Políticas de preservación y valorización patrimonial… A. Ponzio y D. Reinoso

gones, y mientras algunos se infiltran en la llanu- partes otras estructuras como la económica, la
ra, o se unen entre ellos, los ríos Barrancas, San dimensión histórica y su desarrollo.
Bartolome, Las Tapias y Piedra Blanca forman el Entonces si bien no dejamos de lado la di-
río Cuarto (Conchancharava), tributario de la visión política administrativa de la provincia de
cuenca del Paraná. Córdoba, nuestra delimitación comarcal se ajusta
Fitogeográficamente pertenece a la pro- a los criterios de regionalización de la provincia a
vincia del Espinal, dónde el tipo de vegetación partir de sus recursos económicos, naturales y
dominante es el bosque xerófilo caducifolio. Sin culturales.
embargo este bosque fue progresivamente des- De esta manera, consideramos que el terri-
apareciendo por la actividad maderera y la intro- torio que estamos estudiando comprende la co-
ducción de especies exóticas. A la vez que gran marca de Achiras en tanto -de acuerdo a la Ley
parte de esta vegetación que cubría todo el pie- Provincial 9206 sancionada en el año 2004, que
demonte hace varios siglos fue reemplazado por divide a la provincia de Córdoba en 26 comunida-
el pastizal que creció en los espacios abiertos para des regionales- integra una de las mismas con ca-
la agricultura y el pastoreo de vacunos. becera en la ciudad de Río Cuarto. Dicha comuni-
dad regional está integrada no solo por el munici-
La comuna Villa El Chacay como integrante pio de Achiras sino también por el de Alpa Corral,
de la Comarca de Achiras Los Cóndores y Río de los Sauces. Y en cuanto a
las comunas, Cañada del Sauce, Las Albahacas,
Solo a 3,5 km. de la localidad de Las Al- Lutti y Villa El Chacay.
bahacas se encuentra Villa El Chacay, en el sector A su vez teniendo en cuenta los Decretos
donde se destaca el cerro El Chacay. Posee una de Regionalización Nº 552/86 y Nº 554/86 la
población que ronda el centenar de habitantes y provincia de Córdoba se divide de acuerdo a sus
se encuentra situada a 50 km. de la ciudad de Río características turísticas, en diez zonas que han
Cuarto. El primer asentamiento del pueblo se sido delimitadas en función de la presencia de
produce en 1920. La villa lleva el nombre que los localidades con tierras disponibles con costos
aborígenes le dieron al cerro Chacay, que signifi- relativamente accesibles y con alto potencial de
ca “Volcán Muerto”. Es un pintoresco lugar turís- revalorización, la diversidad de recursos naturales
tico, conformado por casas de veraneo en su ma- y culturales preservados con posibilidad de apro-
yoría. En él, el Arroyo San Antonio con su dique vechamiento, la accesibilidad adecuada y planifi-
y balneario forma parte de uno de los atractivos cación de obras públicas viales que incrementan
turísticos que esta comuna posee. significativamente dicha accesibilidad, la existen-
Teniendo en cuenta la división administra- cia de zonas vírgenes con espacio para nuevos
tiva de la provincia de Córdoba, el área de estudio emprendimientos y la posibilidad de aplicar la
mencionada pertenece a la Pedanía de San Barto- Ley de Fomento Turístico Nº 7232. Regiones con
lomé, como una de las subdivisiones del depar- alto potencial y perfil definido que ayuda a orien-
tamento de Río Cuarto. tar las inversiones en diversas actividades turísti-
Sin embargo, tomando como unidad de cas (Dirección de Inversiones y Servicios Turísti-
espacio la comarca de Achiras, de acuerdo al cos, área inversiones 2005). Dentro de esas diez
criterio de su comprensión o contención objetiva zonas, y teniendo en cuenta las características
en escala geográfica entre 1: 25.000 y 1: 50.000 mencionadas, la localidad de Villa el Chacay
partiendo del pueblo del mismo nombre, identifi- queda integrada en la comarca de Achiras bajo la
cado por su importancia histórica (Cf. Gómez delimitación regional de Área de Sierras del Sur
Orea et al. 2012, citado en Rocchietti et al. 2013) de la provincia de Córdoba (Fig. 1).
la localidad queda comprendida en un espacio Por otro lado, resulta pertinente para el es-
regional amplio. La comarca encarna las propias tudio y la comprensión del registro arqueológico
peculiaridades físicas, ambientales, naturales y y su valor patrimonial, entender a la Comuna El
culturales que determinan el entorno y en buenas Chacay desde las características distintivas del

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ANTI • Núm. 12 • Diciembre de 2013

Figura 1: Localización Administrativa de Villa El Chacay, dentro del Departamento de Río Cuarto,
Provincia de Córdoba, República Argentina

Modelo Arqueológico para la Comarca Achiras LOS PETROGLIFOS DEL SECTOR ES-
que plantea Rocchietti (Rocchietti et al. 2011). El CUELA HERNÁNDEZ
modelo arqueológico fundamental correspondería
al denominado Ceramolítico (Austral y Rocchietti En Villa El Chacay se identifican numero-
2004), con presencia de Arte Rupestre. El am- sos petroglifos, la gran mayoría de éstos se en-
biente litológico (que tiene vital importancia en el cuentran a la vera del Arroyo San Antonio, o a
estudio del arte rupestre por su valor sígnico y escasa distancia del mismo -treinta metros
estilístico) corresponde al distrito Cerro Áspero. aproximadamente los más lejanos-. Los petrogli-
Finalmente el paisaje cultural se corresponde con fos del Arroyo San Antonio, como otros en la
el de Sierra de Comechingones y Pampas, y entre cuenca alta del río Cuarto, tienen como motivo
las unidades sistemáticas de valor escenográfico unánime cupuliformes (es decir, depresiones cir-
del mismo cabe nombrar: aguas superficiales, culares obtenidas por pulido conocidas también
bosque del espinal, y tipos de suelo. como piedras tacita en todo el mundo). El sector

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Políticas de preservación y valorización patrimonial… A. Ponzio y D. Reinoso

objeto de estudio del presente trabajo, se encuen- de diámetro y una profundidad que varía desde 7
tra unos 150 m. hacia el norte de este arroyo, so- a 2 cm. El segundo subconjunto, posee un morte-
bre el camino al Cerro Chacay Norte. El terreno, ro de 18 cm. de diámetro y 9 cm. de profundidad,
en este sector tiene un buzamiento de Norte a Sur en torno al cual se ubican 5 cupuliformes que
y de Oeste a Este, encontrándose hacia el norte el poseen un diámetro que oscila desde los 15 a los
Cerro Chacay Norte, hacia el Oeste el antiguo 7 cm. y profundidades desde los 7 a los 3 cm. El
monte modificado, al Sur el Arroyo San Antonio bloque 2 posee tres cupuliformes de diámetro de
y al Este un cauce de gran tamaño, actualmente 12, 10 y 8 cm., con una profundidad de 4, 3 y 2
seco. El contexto actual es de semi-urbanización: cm. respectivamente. El bloque 3 posee 1 mortero
se encuentran en el sector tres viviendas particu- y 5 cupuliformes. El Petroglifo 2, ubicado a 3 m.
lares y una escuela-albergue. hacia el Sur del primero, consiste en un conjunto
Los registros de arte en el lugar, se com- de cuatro rocas, de las cuales una sola presenta un
ponen de cuatro obras: El primero constituido por hoyuelo. En el caso del Petroglifo 3, sobre el cos-
un petroglifo de considerable dimensión (Petro- tado Noreste de la escuela, es una sola roca con
glifo 1) (Fig. 2) ubicado a escasos centímetros de un cupuliforme pequeño. Hacia el Oeste, en el
una vivienda (hacia el sur de la Escuela), que patio de la escuela se emplazan cuatro esquistos
presenta numerosos hoyuelos o cupuliformes. con un mortero cada uno, y una de ellos posee
Está acompañado de otro de menor dimensión también un hoyuelo.
(Petroglifo 2) a unos 3 m. al sur del mismo que A fines de ampliar la información sobre el
presenta un solo cupuliforme. El tercer petroglifo registro rupestre, se practicaron en el sector cinco
(Petroglifo 3), se encuentra ubicado al interior del sondeos que, sin embargo, resultaron estériles en
patio de la Escuela, y consta de un solo cupuli- cuanto a material arqueológico. En tanto, en la
forme. Hacia el este, se localiza el cuarto registro, prospección se encontraron en superficie una ma-
un conjunto de rocas con morteros y hoyuelos no de mortero, un raspador nucleiforme y un per-
(Morteros 1). Todos están realizados sobre es- cutor.
quistos, son sitios al aire libre y se encuentran en
cercanía del cauce seco que se observa hacia el La interpretación de los petroglifos
oeste. Las construcciones actuales se encuentran
en una cercanía absoluta a las piedras grabadas, Rocchietti (2010) para la Comarca de
sin embargo no los han afectado en su integridad Achiras, tras el estudio prolongado y sistemático
aunque sí en su escenografía. La disposición de de la representaciones y sus contextos, estableció
las obras rupestres, y su contexto se grafica en el una correspondencia entre las expresiones rupes-
esquema que se presenta a continuación. tres y el soporte material (la roca base sobre la
El denominado Petroglifo 1 se inscribe sobre un que se inscriben). Ha identificado que, en el am-
gran esquisto, que se inclina de Este a Oeste (le- biente batolítico con sus aleros y taffoni -sus for-
vantado por la compresión lateral). Posee nume- mas típicas- se encuentran sitios con pinturas ru-
rosos cupuliformes de dimensiones y ubicaciones pestres mientras que en las rocas metamórficas,
disimiles. El esquisto tiene un perímetro total de con sus grandes bloques de textura esquistosa se
5,10 por 3,10 m. hallan los petroglifos.
Se estudió la roca soporte esquematizán- De acuerdo a las características intrínsecas
dola a partir de los tres bloques que la conforman, de las manifestaciones se identifica que las pintu-
siguiendo la disposición de las diaclasas, sin dejar ras giran en torno a una temática común: anima-
de considerar a las inscripciones como parte de les en actitud dinámica, humanos cazadores o
un mismo conjunto. El bloque 1, mide 2,10 por tirando de un camélido doméstico, pumas atacan-
3,10 m. y tiene 11 cavidades pulidas. Fue dividi- do manadas, humanos enmascarados, poligonales
do en dos subconjuntos. El primero posee un cerradas y abiertas, quebradas u ondulantes;
mortero con un diámetro de 13 por 21 cm. y una mientras que todos los Petroglifos del Distrito
profundidad de 12 cm., acompañado de 4 cupuli- Áspero, en cambio, despliegan un único tema:
formes a su alrededor que no superan los 12 cm. cupuliformes que describen patas de puma, cons-

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ANTI • Núm. 12 • Diciembre de 2013

telaciones caóticas dispersas sobre la roca o com- tran en un espacio doméstico, y nos acerca a la
binaciones diversas con morteros aislados o en idea de un posible uso ritual del espacio en que se
planchadas pétreas. emplazan, vinculado a un ambiente de bosque en
las inmediaciones de un cauce actualmente seco.
Siguiendo las características de la relación entre
roca-agua sostenida por Rocchietti, los petrogli-
fos podrían corresponder a un periodo cálido y
húmedo, en el que por dicho cauce habría discu-
rrido agua. El estudio de la composición de las
unidades edafológicas aportaría las fechas de las
últimas etapas de humedad, ayudando a circuns-
cribir el marco cronológico posible de producción
de las obras. Los signos vinculados a un ambiente
natural característico (presencia de agua y com-
posición de la roca) no pueden pensarse, para su
interpretación, sin entrar en relación con el resul-
tante de la modificación de la roca. A partir de
este momento hoyuelo y base lítica conforman
una significación particular, única (Ponzio y Re-
inoso 2012).
La disposición de las inscripciones, en es-
te caso, se percibe como una conjunción de mor-
teros y cupuliformes, pudiéndose establecer en
algunos conjuntos una predominancia visual de
los morteros, en torno a los cuales se articulan en
círculo los cupuliformes. Se evidencia a la vez un
juego entre los grabados y las diaclasas que el
Figura 2: Petroglifo 1. Julio de 2011 esquisto posee.
Estos diseños gráficos no configuran, o al
menos no permiten elucidarlo concluyentemente,
Las rocas con signos grabados estudiadas
presentan situaciones gráficas que van desde un una “parte del todo” definida, como suele ser el
caso de las llamadas patas de puma. Tampoco se
cupuliforme aislado, cupuliformes y morteros, cu-
evidencian los “rostros marcados” en otros regis-
puliformes que diseñan un signo figurativo y cons-
tros de la zona.
telación de cupuliformes como si fueran puntos.
Se puede pensar la disposición de los
En su interpretación, Rocchietti (2012)
mismos en función de ciertas características re-
sostiene que las rocas con huellas, son rocas feli-
presentativas de la bóveda celeste, suponiendo
no, mientras que las rocas que tienen cupulifor-
una correlación con la astronomía de las constela-
mes pueden mostrar juego entre cupuliformes y
ciones que se ven en el cielo nocturno. También
diaclasas (rostro o máscara). A la vez que corro-
como elementos comunicativos (vaginas, anos,
bora la existencia de una correspondencia entre
agujeros) entre los mundos, inferior y superior,
roca y agua.
que permitirían el viaje o trance del shamán.
En el caso del arte del Sector Escuela
Hernández, a partir de la esterilidad arrojada por ANÁLISIS DE LA SITUACIÓN Y RECO-
los sondeos practicados en las inmediaciones de MENDACIONES
los sitios, resulta difícil asociar la realización de
los cupuliformes y morteros a una determinada El esquema turístico de la Provincia de
cronología. Esta ausencia de materiales arqueoló- Córdoba no indica sitios rupestres, a excepción de
gicos indicaría que los petroglifos no se encuen- la valiosa localidad de Cerro Colorado, dónde la

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Políticas de preservación y valorización patrimonial… A. Ponzio y D. Reinoso

política patrimonial se orienta a la explotación cuenta de los riesgos de la exposición de


turística, con resultados no felices. La protección los petroglifos.
del Patrimonio Arqueológico, sin embargo, debe c) Diseñar políticas de protección, de acuer-
procurar un conocimiento exhaustivo de su exis- do a las posibilidades materiales y legales
tencia, amplitud y naturaleza, para esto los inven- en el medio local, sobre la problemática
tarios generales con delimitación del potencial particular de los sitios orientadas a ser
arqueológico son instrumentos esenciales para aplicadas en la escuela.
perfilar estrategias de protección. d) Presentar iniciativas institucionales que
Para implementar políticas de preserva- fomenten la apropiación y el aprendizaje
ción y valorización patrimonial sobre los sitios significativo sobre este tipo de herencia
del Sector Escuela Hernández (Fig. 3) es funda- cultural (el arte rupestre) y la necesidad de
mental atender a los siguientes aspectos: su protección de los criterios de la deman-
La necesidad de conformar un adecuado da turística.
marco legislativo desde la jurisdicción local que e) Proporcionar a los docentes, conocimien-
favorezca la construcción de una identidad local y tos y herramientas que hagan posible una
regional. Una adecuada y exhaustiva investiga- transposición didáctica de los resultados
ción científica sobre el sitio arqueológico en sí, de la investigación científica sobre los si-
fundamentalmente atendiendo al tratamiento legal tios para dar continuidad y solvencia a las
que deba llevarse sobre él, la intensidad de uso propuestas de protección, a través de la
que pueda tener el sitio, su capacidad de carga y formación de los estudiantes.
la modalidad del uso del suelo en los sectores
aledaños. Por último se debe evaluar el papel que CONSIDERACIONES FINALES
juega la educación formal e informal en la comu-
na El Chacay, como vía de solución ante los fac- Los petroglifos del Sector Escuela
tores que deterioran los sitios. Hernández, como los demás sitios arqueológicos
Promoviendo la apropiación y utilización y rupestres, constituyen una expresión fundamen-
de los conocimientos necesarios para formular tal del pasado de la región ya que dan cuenta de
estrategias educativas que generen en la escuela las prácticas y creencias de los pueblos que la
una pedagogía más realista y progresista, creemos habitaron.
que se puede favorecer la protección del patrimo- Su exposición actual, al haber quedado in-
nio, pero también su utilización como herramien- sertos en medio del proceso de expansión urbana
ta de afirmación colectiva (Martini 2007). De y de división de la tierra, tanto para la construc-
acuerdo a esto, las políticas patrimoniales orien- ción de viviendas turísticas como de instituciones
tadas hacia los petroglifos en inmediata cercanía públicas, los somete a un riesgo constante. Sin
de la Escuela Hernández, ameritan una evidente embargo, se ha evaluado la potencialidad de estas
articulación a los parámetros y posibilidades que vecindades, considerando que son las personas las
ofrece la institución a la comunidad en general. que deben sentirse identificadas y tender a consi-
Enunciamos y recomendamos los siguien- derarlo parte de su identidad para promover y
tes cursos de acción posibles, para una política exigir su protección.
patrimonial con eje en la Institución Educativa La cercanía de la “Escuela Hernández” a
local: los sitios estudiados supone una situación excep-
cional para el diseño de políticas patrimoniales
a) En primer lugar y fundamentalmente, rea- para su protección y el planteo de un plan de ma-
lizar un estudio diagnóstico del conoci- nejo, ya que los petroglifos se encuentran en in-
miento y contacto de los integrantes de la mediato contacto con los actores sociales que
comunidad educativa respecto a los sitios. asisten o están vinculados a la institución. Ante
b) Evaluar el estado de la cuestión de acuer- esta realidad particular, se entiende necesario
do a los resultados obtenidos para dar realizar una labor de concientización y formación

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Figura 3: La Escuela Hernández, en obras de construcción. Julio de 2011

sobre el valor social que portan los petroglifos Berberián, E.


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2013. Los sitios rupestres ante el cambio climáti-
co. Ponencia presentada al XVIII Congreso Na-
cional de Arqueología Argentina. La Rioja.

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ANTI • Núm. 12 • Diciembre de 2013

MANUFACTURAS RURALES COLONIALES:


LOS OBRAJES-HACIENDAS DE HUAMACHUCO EN LOS
SIGLOS XVII Y XVIII

Frank Manuel Díaz Pretel


Universidad Nacional de Trujillo
frank_07_09@hotmail.com

RESUMEN

El presente estudio tiene como objetivo principal determinar y conceptualizar las grandes manufacturas
textiles existentes en la provincia de Huamachuco en los siglos XVII y XVIII. Se demostrará que la
región se constituyó en un centro de producción de tejidos debido a una serie de factores como las con-
diciones favorables del medio geográfico y el ganado lanar. Se argumentará que existieron grandes
unidades denominadas obrajes, instaladas dentro de las haciendas rurales serranas, en las que participa-
ban la mano de obra, la plana mayor y la alta administración, con una compleja división del trabajo. La
producción servía para satisfacer la constante demanda de vestido local, regional y extra-regional. El
artículo se divide en cuatro partes, que corresponden sucesivamente a la contextualización de la zona
de estudio, la conceptualización sobre bases teóricas recientes, la aproximación a los ciclos textiles y la
descripción de las estructuras físicas.
Palabras clave: manufactura textil, obraje-hacienda, tejidos, comercialización.

ABSTRACT

The present study has as main objective to determine and conceptualize the most important textile
manufacturing in Huamachuco province, in the 17th and 18th centuries. I am going to demonstrate that
the region became a center of production of tissues due to a series of factors such as the favorable con-
ditions of the geographical environment and the sheep cattle. It will be argued that there were larger
units called “obrajes”, which were installed within the rural highland estates, involving labor, the staff
and senior management, with a complex division of labor. The production was used to satisfy the con-
stant demand of local, regional and extra-regional dress. The article is divided in four parts, which cor-
respond to the contextualization of the study area, conceptualization on recent theoretical bases, ap-
proach to textile cycles and the description of the physical structures.
Key words: textile manufacturing, obraje-estate, textiles, marketing.

INTRODUCCIÓN región Cajamarca, en Perú. Huamachuco confi-

L
naba por el este con la provincia de Cajamarqui-
a otrora provincia colonial de “Huama- lla, por el noreste con Chachapoyas, por el norte
chuco y el valle del Condebamba”, abarcó con Cajamarca, por el noroeste y oeste con la de
una superficie calculada por el historiador Trujillo y por el sur con la de Conchucos (Bueno
Espinoza Soriano (1971) de 11,366.44 km². 1951: 59). Debido a la cordillera de los Andes,
Comprendió las actuales provincias de Santiago numerosos ríos riegan esta provincia. El más con-
de Chuco, Lucma, Otusco, Usquil y Huamachu- siderable es el Tablachaca. Este río recibe al An-
co, en la región La Libertad, y Cajabamba, en la gasmarca y al Guachaca y corriendo al oeste por

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los confines de la provincia de Conchucos hace Achocamas, el Rico de Carangas y otras de oro,
caudaloso al río Santa. El otro es el que llaman aunque poco; también había vetas de hierro como
Huamachuco, que nace en una laguna vecina al en el cerro de Aupillán, de azufre y piedras imán
pueblo y al norte recibe otros menores que se (Bueno 1951:60). Éstas se trabajaron durante toda
incorporan con el de las Crisnejas en la provincia la colonia, con un mayor flujo de inversiones
de Cajamarca, el cual entra al Marañón corriendo desde la segunda mitad del siglo XVIII, según se
al este, así como el de Chusgón, Sartimbamba, observa en la documentación. En el siglo XIX se
Iracapampa y otros pequeños (Bueno 1951: 59, continuaron las exploraciones en Carabamba,
60). Salpo y Quiruvilca, donde se extrajo oro y plata
Diferentes sectores económicos atrajeron de alta ley (Bueno 1951: 59).
la atención de los primeros conquistadores, como La región de Huamachuco, asimismo, se
la agricultura, la ganadería, la minería y la manu- constituyó en la despensa alimentaria de Trujillo
facturera textil, de los cuales esta última fue la donde se enviaba productos agrícolas como trigo,
actividad principal, según constata el balance maíz, habas, arvejas y ganado mayor y menor.
realizado por el superintendente Jorge Escobedo Por su abundancia, el carnero llegó a ser la comi-
en 1784, que a la letra dice: “Guamachuco tiene da diaria en la canasta familiar de las familias
también minas de plata, y sobre los otros frutos trujillanas. El ganado era arreado desde la sierra a
aventaja a los demás partidos del Obispado en el través del valle de Virú y desde allí se le conducía
ganado lanar, de que es opulentísimo, y por lo a Trujillo para beneficiarlo en el rastro del camal,
consiguiente es mayor el número y más cuantioso ubicado en las afueras de la ciudad por razones de
el giro de sus obrajes […]” (Espinoza Soriano higiene. Según el historiador Castañeda Murga
1971: 7). (1996: 170-171), en el siglo XVII los propios
Geográficamente la provincia de Huama- obrajeros y estancieros comercializaban carneros
chuco comprendió distintos pisos ecológicos, de manera clandestina en la ciudad. Pero en bue-
como valles calurosos e interandinos templados, na medida, este comercio se reguló por el Ramo
donde se plantaban y cosechaban cantidades de Abasto de Carne ya que en todas sus casas los
enormes de algodón. Algunos sembríos eran ocul- obrajeros-hacendados tenían corrales acondicio-
tados, junto con los indios, por los tenientes de nados para la cría de estos animales.
corregidor. Estos valles eran Susanga y Mayasco Fue el desarrollo de la actividad económi-
a diez leguas de Carabamba, Cormot a cuatro ca textil en los “obrajes-haciendas” (Figs. 1 y 2),
leguas de Lúcma y los valles de Cholloc, Con- la que se constituyó en la actividad más importan-
dembamba y Pilcaymarca. De tal suerte que los te de las principales familias criollas-españolas y
grandes talleres contaban en sus proximidades órdenes religiosas que invirtieron en esta región.
con el insumo de algodón, requerido para el pro- El prestigio de los tejidos elaborados en los prin-
ceso de producción de tejidos (Zevallos Quiñones cipales obrajes, como las “bayetas de Chusgón”,
1996: 353-354). medias de alta calidad producidas en Angasmar-
Huamachuco también comprendió territo- ca, bayetas amarillas de calidad superior en Lla-
rio alto y frío, como las regiones naturales que- ray y bayetones del mismo atributo manufactura-
chua y jalca, debido al corte horizontal que efec- dos en Uningambal aseguraban la apertura de
túa la cordillera de Pelagatos, haciendo el territo- mercados y la rentabilidad de la empresa.
rio muy accidentado (Bueno 1951: 57). Cronistas Política y administrativamente Huama-
y viajeros, coloniales y republicanos, coincidieron chuco era una región supeditada a la preeminen-
en señalar que a excepción del clima, la región cia de Trujillo. La región serrana, fuera de sus
era muy parecida a Cajamarca, abundante en fru- seis pueblos arriba mencionados, no tenía una
tos como maíz, trigo, cebada, papas y frutas de ciudad que la articulara, por lo que tanto criollos
sierra y valles “por tener algunos [valles] de como seculares propietarios de tierras se estable-
buen temperamento” (Paz Soldán 1862: 280). cieron en la capital del Obispado. En el siglo XVI
Se explotaron muchas minas de oro y pla- Huamachuco fue una encomienda perteneciente a
ta como las de los cerros Algamarca, San José, Trujillo, no obstante al poco tiempo fue anexada

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Figura 1: Ubicación de los obraje-haciendas en la provincia de Huamachuco en el siglo XVIII


(Fuente: Castro de Trelles 1992: 44)

como provincia al corregimiento de Cajamarca y planteamos, además, un posible manejo político


así permaneció hasta 1760, cuando se constituyó de los principales obrajeros-hacendados para de-
en un corregimiento autónomo. Cabe mencionar sagregar políticamente Huamachuco de Cajamar-
que durante todo el periodo colonial, Huamachu- ca para luego incorporarla a Trujillo, donde te-
co fue encomienda y perteneció a los Duques de nían articuladas sus redes, como en efecto suce-
Osuna, que residían en España. Oficialmente era dió siendo su primer corregidor don Martín de
una encomienda incorporada a la Corona Real, Aranda y de la Torre, señor de Angasmarca. A
cuyas rentas eran enviadas a dichos “Encomende- mediados del siglo XVIII el desarrollo económico
ros de Huamachuco”1. de Huamachuco se contraponía a los problemas
La creación del corregimiento de Huama- estructurales de la región y los pasivos sociales
chuco se realizó en 1760, teniendo como causales que los empresarios cargaban en perjuicio de los
las excesivas revueltas de indios y la enorme dis- indios se fueron agravando; éstos comenzaron a
tancia a Cajamarca para controlarla. Nosotros manifestarse en revueltas abiertas en contra de las
autoridades políticas, militares y eclesiásticas.
1 Sofocarlas significó la intervención de todo el
AGN Tribunal de la Inquisición, contencioso, leg. 195,
exp. 1704. aparato virreinal: los subdelegados primero, los

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corregidores de Cajamarca y Trujillo después, to hidráulico de gruesos mazos movidos por un


hasta la intervención de la propia guardia perso- eje, que servía para el enfurtido de las telas (de-
nal del virrey. En 1784, con la aplicación de las sengrase), siendo el tejido más tupido, fuerte,
reformas administrativas borbónicas, Huamachu- homogéneo y de mejor acabado; además contaba
co pasó a ser una subdelegación perteneciente a la con más de diez telares. Los chorrillos en cambio,
intendencia de Trujillo y así permaneció hasta el eran más pequeños y producían telas de menor
fin del sistema colonial (Espinoza Soriano 1971: calidad, carecían de batán, no pasaban de tener
10-15; Gaitán Pajares 2002: 9-15). seis telares, eran de carácter más bien casero y
comúnmente de propiedad de los indígenas. Es
decir, la distinción se centraba en la existencia o
no del batán, el sistema de trabajo, el tipo de pro-
piedad, el equipamiento, el tamaño y capacidad,
la calidad de los tejidos y de los insumos y el tipo
de mercado (Silva Santisteban 1982: 71-72).
Recientemente la historiadora española
Neus Escandell-Tur ha propuesto una tipología
más compleja rechazando la dicotomía entre
obraje y chorrillo por la presencia o ausencia de
batán y por la calidad de telares en uso. La inves-
tigadora establece cuatro tipos de manufacturas:
1) obraje-hacienda, 2) chorrillo-hacienda, 3) cho-
rrillo-vivienda y 4) unidades domésticas, estas
últimas conformadas principalmente por indios
tributarios. La diferenciación entre estas unidades
textiles se halla en las funciones que cumplían
Figura 2: Clásico obraje-hacienda en Huamachuco
(diseño a partir de las aguadas de Martínez Compañón
como la concentración o especialización de las
1985, ff. 96) fases del proceso productivo, el tipo de propiedad
y el capital invertido, las telas que producían y el
tipo de mano de obra empleada (Escandell-Tur
1. CONCEPTUALIZACIÓN DE LAS 1997: 32).
MANUFACTURAS TEXTILES En Huamachuco los obrajes fueron los ta-
lleres o unidades textiles manufactureras basadas
El obraje fue una institución plenamente en los principios de la división y especialización
colonial, sin precedentes en España. Si bien es del trabajo empleando cientos de personas. Se de-
cierto que la producción textil no alcanzó los dicaron a la producción masiva de tejidos de lana
volúmenes de ingreso que la minería aportó al y, en una proporción menor, también de algodón.
fisco, no por eso dejó de ser una de las activida- Estuvieron ubicados dentro de las haciendas y al
des más importantes en la época colonial, como igual que en el caso cusqueño, podemos denomi-
lo hace notar la abundante legislación. Un estudio nar como “complejos mixtos integrados”2. En
juicioso de las manufacturas textiles en Huama- 1813, por ejemplo, en el obraje-hacienda de San
chuco requiere una visión actualizada de las in- Antonio de Uningambal, se sembraba maíz, ce-
vestigaciones en otras partes del virreinato, para- bada, trigo, papas, habas y frutales, se criaban mi-
lelo al análisis de las particularidades que pudie- les de ovejas, centenares de caprinos y vacunos,
ron haber existido en la zona de estudio, para de existían dos molinos, ahijaderos, corrales y el gal-
esta manera determinar el tipo de manufacturas pón del obraje colindante a la casa-hacienda. En
textiles existentes.
Fernando Silva Santisteban establece dos 2
El término ha sido acuñado originariamente por Escan-
tipos de unidades textiles: los obrajes y los chorri- dell-Tur (1997: 135-142) para denominar el fenómeno de
llos. El primero contaba con un batán, instrumen- integración vertical de los obrajes en Cusco.

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Figura 3: Distribución espacial del proceso productivo en un obraje-hacienda de Huamachuco


(elaboración propia a partir de las aguadas de Martínez Compañón y ARLL In., sub. Ho., leg. 445, exp. s.n.)

Palmaval, un trapiche-hacienda anexo a Uningam- y finalmente el asiento minero de Hualgayoc,


bal, contaba con todas sus oficinas para el proce- donde era destinada buena parte de la producción.
samiento de la caña, un pequeño chorrillo y cente- Un segundo trayecto reunía la producción textil
nares de caprinos. Claro está que la mayoría de las en Santiago de Chuco, y de allí se descendía por
unidades económicas giraban en torno a la activi- Calipuy hasta llegar a Virú, Santa y luego Lima.
dad manufacturera textil, pero también a la diversi- Un tercer recorrido concentraba la producción en
ficación de la producción. Los propietarios, activos Trujillo, descendiendo por Otusco y Simbal. El
empresarios, aseguraban así un autoabastecimiento mercado extraregional era Potosí, que consumía
de alimentos e insumos, disminuían los costos y una gran demanda de tejidos, muchos de los cua-
aumentaban su rentabilidad (Fig. 3). les provenían de los grandes centros textiles qui-
La producción de los obrajes-haciendas de teños, cuya producción seguía la ruta por mar
Huamachuco servía para abastecer una serie de Quito-Guayaquil-Callao. En este derrotero los
mercados local, interregional y extrarregional. El textiles de Huamachuco se enganchaban con los
primero de ellos estaba conformado por la pobla- circuitos del sur hasta llegar al gran yacimiento o
ción de Santiago de Chuco, Huamachuco, Otusco, se conducían por barco hasta Santiago de Chile.
Lúcma, Cajabamba, y Simbal. Participaban en Para establecer el número de “obrajes-
este negocio curas doctrineros, militares y admi- haciendas” en Huamachuco hemos cruzado cua-
nistradores, agentes o socios comerciales de los tro variables: el precio, el pago del impuesto del
empresarios, quienes expendían los textiles a cabezón, el número de indios y las visitas de 1785
“precio de provincia”. Los tejidos eran transpor- y 1816-1817. Sin embargo, este primer cálculo
tados a los mercados interregionales a través de corre el riesgo de incluir algunos grandes chorri-
una extensa red de caminos que hemos denomi- llos-obrajes que se asemejaban mucho a los obra-
nado “la red de transporte textil” con destino a jes-haciendas menores. El número de obrajes-
diferentes partes del virreinato. La primera seguía haciendas en el último tercio del siglo XVIII era
la ruta de Huamachuco, Cajabamba, San Marcos de treinta y uno, éstos fueron: 1) Araqueda, 2)
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Manufacturas rurales coloniales: los obrajes haciendas… F. M. Díaz Pretel

Dimensiones del
Año Nombre Ubicación Valor en pesos
obraje en varas
1737 Iracapampa Huamachuco 12,385 p. 5 r.
1740 Condorchuco Huamachuco 27,821 p. 5r.
1737 Jucusbamba Huamachuco 12,385 p. 5 r.
1747 Llaray Huamachuco 25,821 p. 5r. 50 x 6 ½
1773 Parrapos y Chala Huamachuco 19,909 p.
1733 Angasmarca Huamachuco 105,000 p.
1792 Chuquizongo Huamachuco 50,375 p. 61 ¼ x 6
1818 Chota Huamachuco 42,428 p. 6r.
1818 Motil Huamachuco 4,987 p.
1725 Querétaro México 48,317 p.
1723 San Idelfonso Quito 61,125 p.
1747 Quispicanchis Cusco 40,000 p.
1754 Lucre Cusco 45,000 p.
1760 Pichuichuro Cusco 148,475 p.
Cuadro 1: Valor de algunos obrajes-haciendas en el periodo colonial (elaboración propia a partir de ARC Co-
rregimiento, causa ordinaria, leg. 123, exp. 2763;leg. 125, exp. 2812;leg. 126, exp. 2846. ARLL Corregimiento,
junta de temporalidades,leg. 231, exp. 2048. ARLL Cabildo, compulsas, leg. 96, exp. 1701, c. 3.ARLL Protoco-
lo, Cruz Ortega, Juan, 1818-19 (I) e. 124, ff. 230v-312, Miño Grijalva 1993, p.39)

Numeración Año Precio en pesos


1 1679 40,000
2 1739 44,000
3 1749 50,375
4 1755 50,375
5 1779 50,375
6 1792 50,375
7 1815 47,713
8 1816 49,230
Gráfico 1: Ciclos del obraje de Chuquizongo en función al precio (elaboración propia a partir de ARC Protocolo,
Corregidores y tenientes generales de Huamachuco (1643-1738), e. 419 ff. 947-947 v. ARLL Protocolo Dávila,
Francisco 1779, ff. 11-15v. ARLL Prot., López, Francisco, 1749, ff. 156 v.-162. ARLL Cabildo, compulsa, leg.
96, exp.1701 c. 3. ARLL Protocolo, Concha y Mansubillaga, 1816, ff. 150-158. c.6.

Chichir, 3) Jocos, 4) Sitacocha, 5) Marcamachay, os realizaban en las grandes unidades con una
6) Chusgón, 7) Marcabal Grande, 8) Iracapampa, compleja división del trabajo (en los obrajes) o en
9) Porcón, 10) Llaray, 11) Sangual, 12) Unin- pequeñas unidades especializadas. La tecnología
gambal, 13) Calipuy, 14) Guayatán, 15) Angas- aplicada se estableció en el siglo XVI y se perfec-
marca, 16) Tulpo, 17) Carabamba, 18) Llaugue- cionó y adaptó a las condiciones locales, confor-
da, 19) Colpa, 20) Sacamaca, 21) San Ignacio, me el sistema económico colonial se consolidaba.
22) Párrapos, 23) Chota, 24) Motil, 25) Llaguen, Entre las principales operaciones se encontraba el
26) Sinsicap, 27) Chuyugual, 28) Cerpaquino, 29) lavado de la lana, el manejo del batán, la carda
Caracmaca, 30) Chuquizongo, y 31) Hacienda (limpieza del pelo de los paños con un cardón), la
del Hospital (ver Cuadro 1 y Fig. 1). tintura, la fijación de colores en las telas y mu-
La manufactura textil consistía en nume- chas otras operaciones necesarias para la prepara-
rosas operaciones técnicas que los operarios indi- ción de las telas y los productos semi-acabados
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(Silva Santisteban 1982: 70; Escandell-Tur 1997: junos, el de indios en la hacienda, la adquisición
31-35; Quiroz Chueca 2010: 183). de nuevos instrumentos de trabajo según consta-
El establecimiento de la mayoría de obra- tan los inventarios; e indicadores sociales el enri-
jes en las zonas altas cercanas a los ríos se debió a quecimiento de los propietarios, quienes adquirie-
la necesidad de obtener suficiente torrente de ron cargos político en las instituciones representa-
agua, movilizar los pesados batanes y contar de tivas, educaron a sus hijos en colegios de Lima y
manera permanente con el líquido elemento. La Trujillo, compraron lujosas casas de morada en la
producción se destinaba a satisfacer la permanen- ciudad junto a esclavos y consolidaron sus redes.
te demanda de los nichos de mercado de indíge- A partir de la mitad del siglo XVIII la
nas, mestizos, castas y en ínfima proporción la de producción de los obrajes no parece haber decaí-
criollos y españoles, quienes en ocasiones gusta- do en Huamachuco. Extrapolada nuestra premisa
ban de frazadas, ponchos, alforjas y otras especies a otras realidades, las situaciones resultan harto
(Silva Santisteban 1998: 23-64). Así pues, los desparejas. Para Huamanga, Salas Olivari (1998)
obrajes-haciendas de Huamachuco colonial reba- ha establecido que esta época corresponde al
saron la producción meramente artesanal de momento de quiebre de la producción de los
carácter familiar para abastecer un mercado local obrajes, mientras que para el caso cusqueño Es-
o regional; por el contrario, las ventas se efectua- candell-Tur (1997) ha identificado que esta dis-
ron a grandes distancias, generando una enorme minución productiva de los obrajes, en realidad
cantidad de empleos directos e indirectos, que fue un reacomodo a partir de la producción
repercutieron en la economía local, regional y doméstica con la proliferación de numerosos cho-
colonial. rrillos, es decir, la producción no disminuyó.
Huamachuco, por su parte, no experimentó una
2. APROXIMACIÓN A LOS CICLOS crisis en la producción textil; por el contrario,
TEXTILES DE HUAMACHUCO aumentó su producción apoyada en la pujante
minería de la región y sobre todo Hualgayoc,
En historia económica la estructuración de desde 1771, un rentable mercado para los empre-
ciclos textiles requiere siempre de datos cuantifi- sarios de Huamachuco3.
cables. Una aproximación con la información Zaugg (1993: 184-186) sostiene que la
disponible en la actualidad nos permite proponer rápida expansión de la demanda de los mercados
cuatro ciclos económicos que correlativamente cajamarquinos y los elevados precios desde 1771,
fueron 1) un período de despegue desde 1650 que hicieron que los obrajeros de Huamachuco se
se prolongó hasta 1800 con sus respectivos subci- apropiaran de este mercado, lo que ayudó a que
clos, 2) un período de crisis iniciado en 1800 y Huamachuco no asintiera bajas severas en su pro-
que se prolongó hasta 1820, 3) un período de re- ducción hasta 1820. No obstante que los textiles
cuperación de 1820 a 1850, y finalmente, 4) el experimentaron picos críticos desde finales del
colapso final de las manufacturas textiles huama- siglo XVIII y las primeras décadas del siglo XIX,
chuquinas iniciado en 1850. El análisis de las pues hubo una serie de factores que perjudicaron
fases del obraje-hacienda de Chuquizongo en esporádicamente su productividad, entre ellos,
función a su precio, bien podrían ser un reflejo de las numerosas revueltas indias y criollas que im-
lo que ocurrió en las otras grandes manufacturas plicaban el desabastecimiento de mano de obra4,
de la región (Gráfico 1).
El período de despegue puede establecerse 3
Cheesman (2011) sostiene -de acuerdo al análisis de los
a fines del siglo XVII y comienzos del siglo manuscritos económicos y comerciales de José Ignacio de
XVIII. Personajes venidos de las zonas del norte Lequanda- que los obrajes no estuvieron en crisis a fines
de España invirtieron fuertemente en la adquisi- del siglo XVIII, el libre comercio quebró al tribunal del
ción, reconstrucción y habilitación de los obrajes- Consulado y no a los mercados de los textiles locales, pues
haciendas de Huamachuco y sus oficinas de tra- sus nichos de mercado eran distintos.
4
En 1795 el caudillo mestizo Alejo Zavaleta formó en los
bajo. Son indicadores cuantificadores de esta co- alrededores de la estancia de Chigne un escuadrón de 104
yuntura favorable el aumento de los ganados ove- hombres, muchos mestizos, para atacar Carabamba, res-

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Manufacturas rurales coloniales: los obrajes haciendas… F. M. Díaz Pretel

la mortandad en masa de ovejas debido a fenó- manufacturas bien entrado el siglo XIX, debido a
menos naturales y la “degradación biológica”, los la ausencia de innovaciones tecnológicas y el
cuales produjeron el primer ciclo de crisis. compás de determinadas importaciones de tejidos
Debido a la Constitución de 1812 se abo- extranjeros y por el comercio de exportación de
lieron las mitas y tributos. Los indios de Huama- lanas que impuso a éstas los precios del mercado
chuco habían desertado de sus haciendas, se internacional.
hallaban vagabundos y comenzaron a dedicarse al
latrocinio. El diezmero del partido, don Ramón 3. LAS ESTRUCTURAS FÍSICAS
Noriega, estimó las pérdidas en más de 200,000
cabezas de ganado lanar, más de 50,00 cabezas de 3.1. Un estudio de caso: El obraje-hacienda
ganado vacuno y otras 5,000 de ganado yeguarizo de Angasmarca
y mular; las cementeras, las minas y los obrajes
habían sido abandonados5. El obraje-hacienda de Nuestra Señora del
Otro factor fue el deterioro de la situación Rosario y Santa Rosa de Viterbo de Angasmarca,
económica del régimen debido a la destrucción estuvo ubicado en la jurisdicción del pueblo de
masiva en el interior ocasionada por la guerra, por Santiago de Chuco, a una altitud de 2995
la interrupción del transporte marítimo regular y m.s.n.m. En 1606 Angasmarca y Mayopampa
los costos de un gobierno que estaba haciendo todavía eran un ahijadero con algunas tierras.
demasiados gastos. El virrey Abascal instituyó un Para mediados del siglo XVII habían evoluciona-
programa de impuestos de emergencia; en el año do a una estancia, una unidad económica dedica-
1815 se aplicó una serie completamente nueva de da a la cría de ganado menor. Su evolución a un
impuestos “extraordinarios” sobre los bienes de obraje-hacienda se establece a fines del siglo
consumo, tanto de importación como de exporta- XVII con la adquisición realizada por don Martín
ción, en la región de Lima. Algunos artículos, tales de Aranda y las mejoras, refacciones y nuevas
como los productos hechos en Trujillo (jabón, lana construcciones que realizó. En 1685, fecha del
y tejidos) que nunca habían pagado impuesto, aho- inventario más completo, ya contaba con112 tor-
ra debían pagar la alcabala estándar del 7%. Las nos con usos, cigüeñuelas de hierro, 10 husos
importaciones anuales hacia Lima fueron calcula- sueltos, 14 cardas viejas y 4 nuevas. La casa del
das por la comisión en 47,000 pesos mientras que galpón era grande, corrida de pares de adobes y
con el nuevo impuesto se esperaba recaudar su alto corrido puerta y llaves de loba y muchas
36,000 pesos (Anna 2003: 150-158). ventanas6. Durante los siglos XVII y XVIII y la
El período de recuperación se establece primera mitad del XIX, Angasmarca llegó a ser
tentativamente en años previos al fin de las guerras uno de los más importantes complejos mixtos en
de independencia. En 1820 los obrajes-haciendas la región y el virreinato peruano.
huamachuquinos continuaban funcionando; si bien Los cascos de la hacienda abarcaban una
es cierto, miles de partidas de ropa se destinaron al amplia jurisdicción, cuyo centro organizacional
vestuario de soldados, esta coyuntura debe ser se encontraba en la casa-hacienda-obraje, una
entendida como una disminución de la rentabili- serie de instalaciones todas colindantes entre sí.
dad, mas no de la productividad. La iglesia estaba cubierta de paja con peinadillo,
Futuras investigaciones que incluyan la enmaderada y con dos portadas, además de un
apertura del Archivo Arzobispal de Trujillo, nos campanario de arcos con tres campanas. Conti-
permitirán precisar los rangos de los ciclos guas a la iglesia, dos cuartos con sus puertas, una
económicos y establecer el desenlace de estas casa donde vivía el cura y otra casa que servía de
carpintería al indio Pedro de Villarreal7.
guardada por una Partida de Dragones y asesinar al arrenda-
tario Ignacio de Amoroto. BNP Colección General de Do-
6
cumentos Manuscritos, signatura C3611, código de barras ARC Protocolo, leg. 88 (I), 1684-1686. ARC Corregi-
2000005819, expediente que va del 22/4/1794 al miento, causa ordinaria, leg. 80, exp. 1608
7
12/11/1795, ff. 7v ARLL, Protocolo, Cortijo Quero, leg. 104. ARC Protocolo,
5
ARLL Intendencia, causa ordinaria, leg. 415, exp. 2647. leg. 88 (I), 1684-1686.

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ANTI • Núm. 12 • Diciembre de 2013

A continuación, la casa-hacienda cubierta Una casa grande con la forma de galpón


de paja de peinadillo con dos salas, cuartos bajos corrido y paredes de adobe con puertas y llave de
y los altos con cuatro divisiones. La segunda loba eran las instalaciones del obraje, contaba con
planta funcionaba como almacén de carne, costa- sus respectivas oficinas, la casa de los telares con
les de sal, trigo, maíz, herramientas de agricultu- 9 en uso; la casa de la prensa con dos de estos
ra, alumbre, alcarraposa, 832 arrobas de lana su- instrumentos, una de fuego con plancha de cobre
cia blanca de la trasquila de mayo, 112 arrobas de y otra de manera, en los altos de estas oficinas
lana negra, 40 lib. de lana emborradas merda para había otro almacén; la casa del tinte tenía 2 puer-
pañete, y 280 arrobas de alumbre, 96 arrobas de tas con sus respectivos cuartos, uno de tintes de
alcarraposa, todo registrado en los cuadernos del colores con 3 fondos de cobre y el otro donde está
mayordomo. Otros cuartos “arrimados” a la casa el tinte azul con otros transformados y 14 tinacos.
eran la de fragua, la cocina con horno y la caba- Una guairona que servía de lavadero con 3 arte-
lleriza8 (Figs. 4 y 5). sones de madera y 1 fondo mediano de cobre.
Una casa con puerta y llave de loba que era la
vivienda del mayordomo. Otra donde estaba el
batán con un fondo de cobre. Finalmente la casa
donde estaba un molino de moler trigo 9.

3.2. La percepción de un viajero

En las páginas anteriores hemos proble-


matizado a los obrajes de Huamachuco mediante
una lectura formal, atenta y disciplinada. A conti-
nuación se presentará un minirrelato figurado.
Protagonizan el relato dos personajes principales
llamados don Evaristo, pardo libre trujillano de
Figura 4: Vista desde el patio interior hacia las ofici- profesión maestro mayor de carpinteros y don
nas y dormitorios posteriores, siglo XX Pablo, obrajero y hacendado en Huamachuco:10
(agradezco la gentileza del embajador Gilbert Chauny
El viaje había sido agotador, los caminos
de Porturas-Hoyle)
estaban hecho lodo y los ríos muchas veces se
tornaron invadeables; cuando el viajero al fin se
aproximó a la finca rústica pudo a partir de una
vista de águila, tener clara la noción de la finca de
que tanto se hablaba en Trujillo, no solo por sus
productos de pan-llevar que surtían los mercados
de la ciudad, sino también por la fama de sus teji-
dos. Don Evaristo se aproximó por el sendero que
lo conduciría al corazón de la hacienda, pero de
manera súbita, su trayecto se vio interrumpido
por una tropa de escandalosos carneros que eran
conducidos a la costa por unos indios, para el

Figura 5: Vista desde el patio interior hacia el bloque 9


ARC Protocolo, leg. 88 (I), 1684-1686.
donde se encuentra el zaguán, siglo XX 10
Se ejemplifican distintas situaciones relacionadas con las
(agradezco la gentileza del embajador Gilbert Chauny características del conocimiento histórico o con los reque-
de Porturas-Hoyle) rimientos metodológicos de la obra en cuestión. El minirre-
lato, verdadero o no, pudo haber ocurrido. Su elaboración
ha sido posible gracias a las orientaciones del Dr. Ricardo
Morales Gamarra y la perspectiva de hacer historia de So-
8
ARC Protocolo, leg. 88 (I), 1684-1686. nia Corcuera de Mancera (1997) C.f.

37 • Centro de Investigaciones Precolombinas


Manufacturas rurales coloniales: los obrajes haciendas… F. M. Díaz Pretel

abasto de los mercados. El mayordomo, retrasado Al lado izquierdo, cuartos contiguos con un
también por estos moruecos, hizo señas al viajan- techo de cañón corrido llamado “galpón de obraje”
te para que se introdujera por un corral antiguo; dejaba escapar por las numerosas ventanas sonidos
allí se saludaron e inmediatamente pasaron por acompasados, como si se tratara de una galera.
las húmedas chacras de los indios, que desde sus Eran los cuartos de los hilanderos, de prensa, los
chozas miraban pasmados a nuestro bronceado hornos, la casa de los telares en la que trabajaban
personaje. El último tramo correspondió a las los indios mitayos, en un promedio de noventa,
perfumadas huertas frutales colindantes con la según sus estimados. En la parte opuesta a la por-
casa principal. tada principal, se encontraba la sala principal con
En ese instante, don Pablo, veterano y lina- las habitaciones del señor, del administrador y de
judo amigo, terminaba de rubricar unos brevetes los mayordomos. A la diestra del patio, un bloque
que autorizaban la salida de dos mil partidas de de dos pisos con varios cuartos, en el primero la
bayetas negras, azules y coloradas a la ciudad de cocina, a continuación los almacenes de lanas,
Lima, para luego ser embarcados hacia Iquique, insumos y también la casa de los tintes. En la se-
puerto en zonas meridionales, y desde allí a mer- gunda planta, instrumentos de trabajo nuevos y
cados más al sur. El empresario y nuestro persona- cantidades impresionantes de algodón, lana y añil
je se saludaron cortésmente y pasaron a la sala y costales de maíz, cebada y azúcar. Provisiones
donde conversaron y comieron durante todo el día. necesarias para los centenares de trabajadores,
Sin que Evaristo se percatara, don Pablo se anduvo mandones, administradores y señores.
quejando de fuertes achaques en la cintura y las Otras oficinas que llamaron la atención
rodillas; el maestro pensó que su viaje quizá obe- del pardo libre fueron varias habitaciones para la
decía a un tratamiento médico. En realidad el em- urdidera, para la prensa, para el cardado, enfurti-
presario español casaría en breve con una dama do y otra con dos cobertizos para el tinte. Cinco
criolla, cuyos entronques familiares se remontaban pailas o fondos y peroles donde se hacía hervir el
a la ciudad trujillana, por lo que deseaba hacer la agua para la tintura y lavado de lana, también un
tasación de todos su bienes como una medida pre- batán. Todos instalados junto a una acequia que
via a sus esponsales, de paso que contabilizaba los suministraba el agua necesaria (Silva Santisteban
frutos de su hacienda y dejaba en manos del arte- 1998: 40). El inventario de todo el obraje-hacien-
sano el estudio de la situación de las estructuras y da duró diez días; próxima a la casa-hacienda,
oficinas que nunca dejaba de repararse. que más se parecía a una casa-obraje, se inventa-
A los dos días harían su llegada los peritos riaron una cárcel con instrumentos de punición
tasadores, auxiliares y el juez subdelegado de la como ceposrollos, grillos, una capilla lujosamente
provincia. Al día siguiente, a primera hora de la decorada, una carpintería, desordenadas viviendas
mañana todos estuvieron dispuestos a comenzar la indias, corrales para aves menores, huertas de
tasación. Don Evaristo consideró que un inventario membrillos, manzanas y naranjas, cuarteles de
acucioso debía distinguir las diferentes áreas: pro- cañas, ahijaderos para el ganado menor, montes
ductivas, almacenes y capilla. Todas estrechamen- donde habían bosques de cochinilla y tara, jalcas
te vinculadas, colindantes entre sí y cuya actividad inundadas de ovejas, y más.
principal era claramente la producción de tejidos. Acabamos de leer, a grandes rasgos, los
La casa hacienda tenía un perímetro cercado con lineamientos de la estructura física general de los
murallas reforzadas cuya única entrada y salida era obraje-hacienda de Huamachuco, cuya similitud
una puerta con sus chapas y llaves de loba. Al en toda la región es muy clara, de hecho, existió
abrirla ingresaron por el zaguán que conducía al un modelo constructivo similar para toda el área
patio central, en cuyo centro una pileta dejaba dis- andina, como evidencian las visitas, nuestras re-
currir el líquido elemento ininterrumpidamente. En construcciones, y las realizadas en los edificios de
ese mismo recinto estaban atiborrados muchachos Cusco y Huamanga11.
que parecían tener entre 12 y 14 años, ayudados de
hermanos más pequeños que hacían girar hábil- 11
ARLL Intendencia, subdelegación de Huamachuco, leg.
mente unos tornos de madera. 445, ff. 1-175v.

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ANTI • Núm. 12 • Diciembre de 2013

CONCLUSIONES formaban las naves laterales de la casa hacienda


sirvieron de cuarto de tinacos, almacenes, prensa,
La provincia de Huamachuco fue un área cocina, todas alrededor de un patio. La produc-
geográfica con condiciones favorables para la cría ción servía para abastecer una serie de mercados,
del ganado; sus valles cálidos, interandinos y jal- el interregional y extra-regional. Los productos se
cas, propiciaron el sembrío de algodón y la proli- destinaban a satisfacer la constante demanda de
feración ovejuna. Estas circunstancias fueron los nichos de mercado indígenas, mestizos y en
aprovechadas por las sociedades prehispánicas y menor medida el criollo y español.
por la virreinal, con lo que Huamachuco se confi-
guró en una región obrajera y ejerció un efecto de AGRADECIMIENTOS
arrastre sobre otras áreas vecinas para abastecerse
de insumos, establecer circuitos comerciales y Dr. Ricardo Morales Gamarra, Lic. Juan
satisfacer la demanda de los mercados locales y Castañeda Murga, Dr. Luis Alcalde Ciudad, Ar-
extra-regionales. quitecta Ema Perea Ríos.
Los rebaños de ovejas eran cuidados por
los indios mitayos; con su lana se proveyó el in-
sumo necesario para el proceso productivo textil. ARCHIVOS Y SIGLAS UTILIZADAS
El ganado lanar recibía especial cuidado con la
limpieza de los pastos y abrevaderos, la existen- AGN Archivo General de la Nación
cia de corrales necesarios y el balance de su dieta ARC Archivo Regional de Cajamarca
alimenticia que permitían mantener un delicado ARLL Archivo Regional de La Libertad
balance, muchas veces afectado por la presencia BNP Biblioteca Nacional del Perú
de ladrones, animales salvajes y agotamientos
biológicos o la degeneración. BIBLIOGRAFÍA
Los obrajes de Huamachuco estuvieron
instalados dentro de las haciendas, es decir, eran Anna, T.
complejos mixtos verticalmente integrados de- 2003. La caída del gobierno español en el Perú.
nominados “obrajes-haciendas”, cuya actividad El dilema de la independencia. Instituto de Estu-
principal fue la textil. Los obrajes de Huamachu- dios Peruanos.Lima.
co fueron talleres o unidades textiles basadas en
los principios de la división y especialización del Bueno, C.
trabajo empleando cientos de personas. Se dedi- 1951. Geografìa del Perú virreinal. Siglo XVIII.
caron a la producción masiva de tejidos de lana y Imprenta D.M.Lima.
de algodón conocidos como “ropa de la tierra”.
En Huamachuco existieron treinta y un Castañeda Murga, J.
obrajes-haciendas que se ubicaban cercanos a los 1996. Notas para una historia de la ciudad de
ríos para contar con la energía hidráulica necesa- Trujillo del Perú en el Siglo XVII. En: La tra-
ria para los batanes. La industria textil consistía dición andina en tiempos modernos. L. millones
en numerosas operaciones, entre las que se en- (ed.). pp. 159-189. National Museum of Ethno-
contraban el manejo del batán, la carda o limpieza logy. Osaka.
del pelo de los paños con un cardón, la tintura y
la fijación de colores en las telas y muchas otras Corcuera de Mancera, S.
operaciones necesarias para la preparación de las 1997. Voces y silencios en la historia.Siglos XIX
telas y los productos semiacabados. y XX. Fondo de Cultura Económica.México.
El obraje o “galpón del obraje” tenía una
estructura de cuartos contiguos alrededor de un Cheesman, R.
patio central, dentro de los cuales se llevaban a 2011. Economía y comercio del Perú a fines del
cabo los procesos de producción: el hilado, el siglo XVIII, según el manuscrito de José Ignacio
prensado, la urdiembre. Otros bloques que con- de Lequanda. Conferencia magistral presentada

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Manufacturas rurales coloniales: los obrajes haciendas… F. M. Díaz Pretel

en el III Coloquio “Hacia el Bicentenario de la Quiróz Chueca, F.


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Tardío. En: Economía del periodo colonial tard-
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1997. Producción y comercio de tejidos colo- Instituto de Estudios Peruanos y Banco Central de
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1820. Centro de Estudios Regionales Andinos
“Bartolomé de las Casas”.Cusco. Salas Olivari, M.
1998. Estructura colonial de poder español en el
Espinoza Soriano, W. Perú. Huamanga (Ayacucho) a través de sus
1971. Geografía histórica de Huamachuco. Crea- obrajes, siglos XVI-XVIII. Fondo Editorial de la
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Órgano del Museo Nacional de Historia N° 5: 5- Silva Santisteban, F.
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Paz Soldán, M. chea.Trujillo.
1862. Geografía del Perú. Volúmen I. Librería de
Fermín Didot Hermanos, Hijos y CIA.París.

Centro de Investigaciones Precolombinas • 40


ANTI • Núm. 12 • Diciembre de 2013

LEY, DELITO Y CASTIGO.


MECANISMOS DE CONTROL SOCIAL Y REPRESIÓN PE-
NAL. TRUJILLO, 1824-1862

Victoria Dieguez Deza


Universidad Nacional de Trujillo
vdd_98@hotmail.com

RESUMEN

La criminalidad gira en torno a tres aspectos: legal, delictivo y punitivo. Analizar cada uno de estos tres
aspectos es un puente abierto que nos aproxima a los mecanismos de funcionamiento de la sociedad
republicana trujillana. La historia del delito permite un acercamiento directo a las experiencias de los
sectores populares; hacer una historia desde el otro lado, desde el punto de aquellos que transgredieron
las leyes, pero también de aquellos que fueron víctimas de la justicia estatal. El delito y el castigo cons-
tituyen aspectos reales donde se manifiestan el ejercicio del poder y la resistencia; el primero, encarna-
do en las autoridades locales y nacionales; y la resistencia, personificada en los miembros de los grupos
populares, estando los esclavos y negros libres estrechamente vinculados con la actividad delictiva.
Palabras clave: criminalidad, grupos populares, libertad, represión, república.

ABSTRACT

Criminality turns around three aspects: legal, criminal and punitive. To analyze each of these three as-
pects is an open bridge that approximates us to the mechanisms of operation of the trujillana republican
society. The history of the crime allows a direct approach to the experiences of the popular sectors; to
make a history from the other side, from the point of those whose transgressed law, but also of those
who were victims of state justice. The crime and the punishment constitute real aspects where the exer-
cise of power and resistance are pronounced; the first, personified in the local and national authorities;
and the resistance, personified in the members of the popular groups, being the free black and the
slaves tie with the criminal activity.
Key words: criminality, popular groups, freedom, repression, republic.

INTRODUCCIÓN sultó verdadero sólo en la retórica del discurso

L
más no en el terreno de lo práctico.
as guerras por la independencia y las suce- Las sucesivas guerras civiles, el deterioro
sivas guerras civiles transfiguraron al Perú de la economía, el nuevo lenguaje de libertad y
y a sus provincias dejándolas insertas en la las nuevas prácticas culturales abrirán un escena-
miseria, el caos, la violencia e inseguridad. La rio propicio para el aumento de la criminalidad en
independencia introdujo en los grupos populares, el Perú y la provincia de Trujillo, alcanzando los
el nuevo lenguaje de igualdad, libertad y auto- picos más altos en el período de modernización
nomía, por lo que, en el caso de los esclavos, em- que atravesó el país a partir de 1850. Los intentos
pezaron a demandar más acceso a la “ansiada” por parte de autoridades y clases dominantes por
libertad y en el de los indígenas, a aspirar a ser reprimir las conductas transgresoras de la pobla-
parte integrante de la nación peruana. Lo que re- ción (consideradas transgresoras por el discurso

41 • Centro de Investigaciones Precolombinas


Ley, delito y castigo. Mecanismos de control social y represión… V. Dieguez Deza

hegemónico), fracasaron; pero, al mismo tiempo, durante el período republicano 2. La actividad


queremos demostrar que este fracaso inmediato económica de la provincia se sustentó en el traba-
implicó una conquista posterior: las clases popu- jo agrícola de las haciendas y en la actividad co-
lares1 se mostraron incapaces en proponer un or- mercial en la ciudad. Los grupos populares se
den diferente que pusiera fin a su condición de interrelacionaban en las pulperías, chicherías y
subalternidad. aguardenterías. Estos lugares representaron cen-
La instalación de la nueva república pe- tros donde se ejercían prácticas de sociabilidad
ruana debería en la práctica liquidar los lazos plebeya y la interacción de grupos étnicos dife-
coloniales. En Trujillo se instaló por decreto dado rentes. Las autoridades estuvieron preocupadas
por Bolívar, la Universidad Nacional de Trujillo por el consumo de alcohol debido a que sucesi-
(1824) y la primera Corte Superior de Justicia de vamente acaecían actos delictivos debido al esta-
La Libertad (1824). Sin embargo, estos avances do de ebriedad.
institucionales en materia jurídica-administrativa Los encargados de la seguridad ciudadana
se vieron ensombrecidos por la continuidad de las eran el Intendente de policía, que con ayuda de
antiguas legislaciones y las prácticas punitivas las patrullas rodeaban el campo y la ciudad, sobre
coloniales como el azote, el presidio, la pena de todo, cerca a las pulperías. Si se encontraban a los
muerte y las obras públicas. pobladores a deshoras en la calle, eran remitos a
En el período de modernización, a partir la cárcel hasta el día siguiente, imponiéndoles una
de 1850, surgieron grandes cambios económicos, pena de trabajo en las obras públicas. Esto suce-
sociales, jurídicos e ideológicos, pero se vieron día generalmente en las periferias de la ciudad de
afectados por las crecientes olas de criminalidad Trujillo. La criminalidad en la provincia se
del país y, en particular, de Trujillo. Ante esto, mostró como un problema endémico que afectó a
surge la necesidad de ponerle fin al fenómeno todos los sectores sociales (ricos y pobres) debido
delictivo y optaron por retroceder al pasado y a una defectuosa manera de las autoridades de
utilizar los antiguos mecanismos punitivos basa- encarar el problema. Veamos que pasaba institu-
dos en la ejecución pública, siendo la plaza de cionalmente y jurídicamente con la provincia de
armas de Trujillo, el primer escenario donde se Trujillo.
restablecería la pena de muerte en el Perú con el
caso del soldado Dolores Lara. En este contexto, II. ORDENAMIENTO JURÍDICO E INSTI-
apuntaron las autoridades en la búsqueda de un TUCIONES: CAMBIOS Y CONTINUIDADES
nuevo modelo de control social y represión penal
que disminuyera la crecida de la criminalidad. La ocupación española no solo significó la
Este nuevo instrumento de control social se basó presencia física de un estado español ante una
en la erección de la penitenciaria de Lima sumado colonia conquistada, sino que también representó
a la dación del primer código penal. el sometimiento de un pueblo con obligaciones de
obediencia ante un sistema corporativo jerarqui-
I. CARACTERÍSTICAS GENERALES DE zado. No obstante, esta realidad no pudo ser posi-
LA ÉPOCA (1824-1862) ble sin la aplicación de leyes y adaptación de ins-
tituciones que dieran legitimización al poder. En
La provincia de Trujillo: cuadro social este sentido, el estado español trasladó institucio-
nes castellanas como fue el caso de la Real Au-
La provincia de Trujillo- capital del depar- diencia, órgano político, judicial y administrativo
tamento de La Libertad, ubicado en la costa y colonial. La base jurídica virreinal estaba fusio-
sierra norteñas- estuvo dividida en 14 distritos nada con leyes, costumbres y jurisprudencia. En-

2
La provincia de Trujillo estuvo dividida en catorce distri-
tos: Trujillo y cercado, Mansiche, Huanchaco, Santiago de
1
Dentro de los grupos populares están incluidos los negros Cao, Magdalena de Cao, Paijan, Chocope, Ascope, Chica-
esclavos, negros libres, indígenas y mestizos. ma, Simbal, Moche, Viru, Huamán y Mampuesto.

Centro de Investigaciones Precolombinas • 42


ANTI • Núm. 12 • Diciembre de 2013

tre las leyes tenemos la Novísima Recopilación La pena de muerte: ¿Arma política?
de las leyes de Indias (1805), Recopilación de
leyes de Castilla (1567), las leyes de Toro (1505) Tenemos dos argumentos estrechamente
y las Siete Partidas de Alfonso X “El sabio” vinculados. El primero propone la pena de muer-
(Barbosa Delgado 2007:98-113). Esta misma te como un arma política y, el segundo, la inserta
lógica jurídica fue trasladada al nuevo ordena- dentro de los rituales punitivos. El primer argu-
miento republicano, pero con algunos cambios y mento fue desarrollado por el historiador Carlos
modificaciones. Aguirre (1990) para su estudio de Lima, quien
Las necesidades de un nuevo orden pro- señaló el inevitable uso de la pena de muerte en
ducen nuevas instituciones, así como las mismas momentos de inestabilidad política, extendiéndo-
necesidades producen la continuidad de algunas se, no sólo para delitos políticos sino también
instituciones. El cambio de un sistema político para los delitos de orden común.3 Michel Fou-
colonial a un nuevo ordenamiento republicano cault (1976) indicó que la ejecución pública, por
implicó la adaptación de instituciones, pero, tam- precipitada y cotidiana que sea, se inserta en toda
bién, la continuidad de muchas otras. Tal fue el la serie de los grandes rituales de poder eclipsado
caso de la instalación de la primera Corte Supe- y restaurado.4 Dentro de nuestro contexto, las
rior de Justicia en Trujillo (1824). Este fue uno sucesivas coyunturas políticas dispusieron que los
de los intentos por “modernizar” el sistema jurí- representantes del Estado busquen ejercer todo su
dico en el Perú. La corte fue establecida por de- poder y hacerlo ejemplar y es en esta “necesidad”
creto del 26 de marzo de 1824, dado por Simón (Foucault 1976: 381) que surge la pena de muerte
Bolívar (Alva Castro 2003:70). Este avance en (ejecución pública) como un mecanismo de re-
materia jurídico-administrativa se quedó opacado presión penal ejemplar (que se inserta en los co-
por la continuidad de El Tribunal de La Acorda- razones de todos).
da, que fue una institución penal colonial creada Partiendo en este sentido tenemos un
en las colonias españolas para reprimir el delito a ejemplo claro como lo fue la ejecución pública de
través de juicios sumarios y penas severas. Salaverry. La coyuntura política de 1835 o la
El Tribunal de la Acordada tuvo como mi- “guerra civil” entre Orbegoso y Salaverry generó
sión buscar a los salteadores y cuando los captu- caos y malestar social. El general Orbegoso as-
raba les hacían un juicio sumario y si eran culpa- ciende primero a coronel y luego a general a Sa-
bles, se les colgaba de un árbol para efectos de
ejemplo de raridad (Arranz Lara 2000:88). En el 3
Perú, el Tribunal de la Acordada fue declarado Carlos Aguirre considera que la pena de muerte fue un
arma política. Nos dice “(…) en un período de agitación e
extinguido el 28 de abril de 1828 debido a que inestabilidad política fue inevitable su utilización para
dicha institución contradecía la nueva constitu- castigar delitos de sedición o subversión. Pero también la
ción (Aguirre 1990:63-75). pena de muerte fue un recurso siempre a la mano para
La coyuntura política de 1835 incrementó reprimir el delito común (…)”. En julio de 1823, “(…),
los índices de criminalidad en el Perú, lo que re- ante los peligros que acechaban el orden público en Lima,
el gobernador Tomás Guido dispone entre otras medidas
percutiría en Trujillo, restableciéndose El Tribu- que a todo el que se sorprenda en robo, que pase del valor
nal de La Acordada como un instrumento eficaz de dos reales, o se le convenza de ello, se le quitará la vida
de represión penal que duraría hasta 1836. Como dentro de dos horas, sin distinción de personas ni de sexo,
lo señaló Jorge Basadre (1963:105): “Como los incurriendo en la misma falta el receptador de un hurto o
salteadores habianse en un mal endémico en el de un malhechor” (1993: 63).
4
El autor pone como ejemplos a la coronación, entrada del
territorio de Lima, fue restablecido el tribunal rey en una ciudad conquistada, sumisión de los súbditos
llamado Comisión de la Acordada”. sublevados (Foucault 1976: 381); sería apresurado realizar
No sólo fueron las instituciones coloniales comparaciones entre el contexto descrito por Foucault, es
que perduraron en el período republicano, sino decir, Francia en el siglo XVII y Perú en el siglo XIX, pero
también, las prácticas sociales y punitivas. Estas es preciso recalcar que aunque los contextos sean disímiles
se establece un punto de unión y es que ambos tienen como
fueron la pena de muerte, las obras públicas, el objetivo restablecer el equilibrio que se ha perdido y donde
destierro, la carcelería y la pena de presidio. el representante o las autoridades ejercen toda su fuerza.

43 • Centro de Investigaciones Precolombinas


Ley, delito y castigo. Mecanismos de control social y represión… V. Dieguez Deza

laverry. El primero sin temer algún acto de trai- dre: “(…) parecía entonces (el país) en conmo-
ción por parte del segundo marcha a Arequipa a ción sísmica” (1963: 102). Los procesos políticos
controlar las fuerzas de Santa Cruz o con fines no quedan aislados de los procesos sociales y
electorales. Ante la ausencia de Orbegoso, Sala- culturales, por el contrario, son producto de ellos.
verry da un golpe de estado desde el Callao, el 22 El segundo caso, a nivel local, fue el de la
de febrero, proclamándose Jefe Supremo. La efí- pena de muerte impuesta para un delito de orden
mera administración de Salaverry encarna la ne- común como el homicidio. Esto fue la ejecución
cesidad de imponer un poder autoritario y fuerte; pública del soldado Dolores Lara 6 en la plaza
en este sentido comienza a dar inicio a una serie pública de la ciudad de Trujillo. “El miércoles 11
de disposiciones. Por otro lado, Gamarra, Orbe- del presente a las diez y cinco minutos de la ma-
goso y Santa Cruz estaban interesados en la cabe- ñana fue ejecutado en la plaza pública de esta
za de Salaverry porque representaba una amenaza ciudad (Trujillo) el reo José Dolores Lara, sol-
a sus intereses. Finalmente, Salaverry es captura- dado de policía, por el homicidio del sargento del
do por las partidas de Santa Cruz cuando intenta- mismo cuerpo, Manuel Cerna acaecida en la no-
ba huir a la costa y el 18 de febrero de 1836, a las che de 8 de julio último”7. El caso del soldado
cinco y media de la tarde, se realizaron los fusi- Lara tiene muchas peculiaridades. Primero, por-
lamientos en la plaza de armas de Arequipa. que fue después de 15 años que se aplicaba en
Salaverry fue puesto en la capilla como el Trujillo la pena de muerte siendo la última en
procedimiento lo ordena; mientras esperaba el 1846. Segundo, por el contexto en que fue aplica-
momento de su muerte escribió algunas cartas a da esta pena; había un elevado incremento de la
su esposa.5 Horas después, Salaverry y los demás criminalidad y necesitaban vencer este problema.
sentenciados pasaron a la plaza pública de Are- Finalmente, se suma a todo lo expuesto, los deba-
quipa y se sentaron en unas sillas blancas. Los tes filosóficos acerca de la aplicación o no de la
tiradores “como a seis pasos de distancia de los pena de muerte en el Perú. En 1861 se restableció
reos, miraban hacia ellos, dejando imponerse a la pena de muerte; y en Trujillo, con el caso de la
muchos sacerdotes que auxiliaban” (Basadre ejecución pública del soldado Dolores Lara fue el
1963:102). El objetivo de la pena de muerte no primer ejemplo del restablecimiento de esta pena
sólo fue el de castigar sino también el de vengar en el país.
al que trasgrede las leyes, al que traiciona y al que Un año después de la ejecución de Lara se
representa una amenaza política haciendo del elaboró el primer código procesal penal de 1862
castigo un ritual “espectáculo público” que sirva en el cual se restringió la pena de muerte para tres
de ejemplo. Finalmente, llegó el momento de casos: parricidio, asesinato alevoso y muerte pro-
morir y Salaverry fue el último. Cayeron todos y vocada por incendio. La gran conquista como lo
quedó Salaverry, que se paró y corrió algunos expuso Jorge Basadre fue la abolición de la pena
pasos detrás de la silleta y volvió a hacer la señal de muerte para los delitos políticos (Aguirre
con la mano para que no le tirasen diciendo con 1990:156-158). En 1862, también se dio la erec-
voz gruesa: ¡la ley me ampara! Sus palabras no ción de la primera penitenciaria de Lima que re-
pudieron salvarlo y finalmente los soldados des- presentó un instrumento de control social acorde
cargaron sobre él y cayó muerto.
La muerte de Salaverry es un claro ejem-
6
plo de la utilización de la pena de muerte como Manuel Dolores Lara, natural y vecino de esta ciudad
(Trujillo), de estado soltero, de ejercicio soldado de la gen-
arma política y como ritual punitivo. La necesi-
darmería, y de 22 a 23 años de edad. Se agregan además sus
dad de imponer una pena severa ante la premura referencias físicas: Estatura, 4 pies, 9 pulgadas y 3 líneas;
de un país en crisis, como lo señaló Jorge Basa- cara redonda; color, sambo negro; pelo, crespo; cejas, po-
bladas; ojos, pardos; nariz, ñata; boca, grande; labios, grue-
5
Parte de la carta que escribió Salaverry a su esposa dice: sos; barba, salienta. Archivo Regional de La Libertad, Corte
“Te he querido cuanto se puede querer y llevo a la eternidad superior, Causas criminales, legajo 927, expediente 4144,
un pesar profundo de no haberte hecho feliz. Preferí el bien 1861.
7
de mi patria al de mi familia, y al cabo no me han permitido La Gaceta Judicial. Lima. N ° 103. 23 de setiembre de
hacer ni uno ni otro” (Basadre 1963:100-104). 1861.

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ANTI • Núm. 12 • Diciembre de 2013

al período de modernización donde eran remiti- de la década de 1850, período de transformacio-


dos los reos sentenciados por todas las cortes de nes económicas, políticas y sociales, el problema
justicia del país. del crimen se manifestó de forma preocupante y
alarmante.
III. ASPECTO DELICTIVO El delito en Lima fue presentado como un
fenómeno que iba más allá de la acumulación de
Realidad social del delito incidentes aislados de violación de la ley para
convertirse en una especie de patología social
La criminalidad después de la indepen- resultante de causas múltiples y complejas (Agui-
dencia hasta la segunda mitad del s. XIX se mani- rre 2008:116-117). La criminalidad acarreó otros
festó sobre todo como un subproducto de la situa- vicios mas, como la prostitución, el alcohol, el
ción política que atravesaba el país. 8 Los historia- juego de azar. Estos se convirtieron en una ame-
dores Carlos Aguirre y Charles Walker (1990) naza a la estabilidad y tranquilidad social.
quienes han desarrollado el tema, coinciden en Las décadas de 1850 a 1860 significaron
que la criminalidad representó un problema so- para la sociedad el aumento de los índices de cri-
cial. Esto sumado a la miseria y destrucción minalidad más alarmantes en Lima y en Trujillo.
(Aguirre 2008:3) que trajeron las guerras por la Dentro de este contexto se decretó la abolición de
independencia motivó un impulso de tensiones y la esclavitud (1854) y la abolición de la pena de
violencia que llegaron a alcanzar niveles altos de muerte (1856) que significaron para los juristas
crimen; sin embargo, este no era percibido como republicanos las causales de los niveles altos de
una amenaza sostenida para la naciente república criminalidad. A partir de esto se abre un debate.
(Aguirre 2008:69). Podemos observar (Cuadro 1, Por un lado, estaba José Silva Santisteban quien
Gráfico 1) que los índices de criminalidad des- afirmó que los índices de criminalidad se debían a
pués de proclamada la independencia de Trujillo la falta de trabajo y a la ociosidad: “La mayor
se mantuvieron en relación a la colonia; pero co- parte de los delitos en el Perú eran ocasionados
mo indicamos líneas arribas los índices de crimi- por la vagancia, por la falta de medios de subsis-
nalidad se elevaron tal y como sucedió en el pe- tencia, por estallido de alguna pasión. Los reme-
ríodo que va desde 1828 hasta 1832 con 135 pro- dios verdaderos estaban en dar trabajo, en per-
cesos de los 66 que antecedían al período quin- seguir la ociosidad, en dar los medios con qué
quenal anterior (1823-1832). vivir honradamente” (Basadre 1963:212).
Como se indicó en líneas anteriores, Por otro lado, Antonio Arenas se mostró
además del uso de la violencia y de los castigos más radical y argumentó que los cambios de la
severos, hicieron disponer para reducir los índices reforma (la liquidación de la pena de muerte)
de criminalidad, el restablecimiento del famoso aumentaron la criminalidad (Basadre 1963: 213).
Tribunal colonial de La Acordada. Salaverry Años después, en 1861, Gabriel Gutiérrez expuso
apertura el tribunal y Orbegoso, por su lado, ex- un resumen de las causas principales del aumento
tinguió la Corte Superior de Trujillo hasta 1838. de los delitos, las cuales fueron la inestabilidad
Es preciso indicar el miedo que generó ya que La política y las frecuentes guerras civiles; el cre-
Acordada produjo un descenso significativo en el ciente número de personas ociosas resultante de
número de procesos, porque de 135 se redujo a 86 la declinación local; el consumo de alcohol y los
procesos que corresponden al período que va de juegos de azar; la inclinación compulsiva a buscar
1833 hasta 1837. Este descenso se mantuvo hasta riquezas y lujos; las diversiones públicas (la
la década de 1850. abundancia de festividades); la falta de educación
Si durante la primera mitad del s. XIX la de las clases populares; la reciente abolición de la
criminalidad fue un fenómeno controlado, a partir esclavitud (1854); la abolición de la pena de
muerte (1856) y, finalmente, las deficiencias de la
8 administración de justicia (Basadre 1963: 120-
El desorden social durante las primeras décadas de la
independencia era sinónimo de caos político, montoneras y
122).
guerras civiles (Aguirre 2008:123).

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Ley, delito y castigo. Mecanismos de control social y represión… V. Dieguez Deza

Años Personal Propiedad Estado Otros Total


1778-1782 2 (33,3 %) 2 (33,3%) 1 (16,7%) 1 (16,7%) 6
1783-1787 9 (52,9%) 8 (47,1%) 0 (0,0 %) 0 (0,0 %) 17
1788-1792 32 (64 %) 9 (18 %) 0 (0,0 %) 9 (18 %) 50
1793-1797 41 (58,6%) 23 (32,9%) 1 (1,4 %) 5 (7,1 %) 70
1798-1802 42 (51%) 36 (43%) 0 (0,0%) 5 (6%) 82
1803-1807 58 (55,8%) 32 (30,8%) 0 (0,0%) 14 (13,5%) 104
1808-1812 47 (67,1%) 16 (22,9%) 1 (1,4%) 6 (8,6%) 70
1813-1817 36 (53,7%) 21 (31,3%) 0 (0,0%) 10 (14,9%) 67
1818-1822 29 (56,9%) 16 (31,4%) 2 (3,9%) 4 (7,8%) 51
1823-1827 45 (68,2%) 14 (21,2%) 0 (0,0%) 7 (10,6%) 66
1828-1832 82 (60,7%) 35 (25,9%) 0 (0,0 %) 18 (13,3%) 135
1833-1837 53 (61,6%) 21 (24,4 %) 2 (2,3%) 10 (11,6%) 86
1838-1842 62 (73,8%) 11 (13,1%) 4 (4,8%) 7 (8,3%) 84
1843-1847 55 (73,3%) 17 (22,7%) 0 (0,0%) 3 (4%) 75
1848-1852 107 (65,2%) 40 (24,4%) 4 (2,4%) 13 (7,9%) 164
1853-1857 71 (57,3%) 40 (32,3%) 6 (4,8%) 7 (5,6%) 124
1858-1862 98 (56,6%) 54 (31,2%) 7 (4%) 14 (8,1%) 173
Cuadro 1: Total de casos criminales por categorías. Fuente: Archivo Regional de La Libertad, Corregimiento,
causas criminales 1778-1783/ Intendencia, Causas criminales, 1784-1820/ Presidencia, Causas criminales, 1821-
1823/ Corte Superior, Causas criminales, 1824-1862

Periodos quinquenales
Gráfico 1: Total de procesos criminales. Fuente: Archivo Regional de La Libertad, Corregimiento, causas crimi-
nales 1778-1783/ Intendencia, Causas criminales, 1784-1820/ Presidencia, Causas criminales, 1821-1823/ Corte
Superior, Causas criminales, 1824-1862

¿Qué sucedió en Trujillo con los índices ticas. En el Cuadro 1 se observa que en el período
de criminalidad? La respuesta está en las estadís- que va de 1848 hasta 1852 se duplicó el número

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ANTI • Núm. 12 • Diciembre de 2013

de procesos, de 75 a 164. Es preciso indicar que la expiación de sus pecados (…)” (Torres Vene-
dentro de las causas múltiples expuestas por Ga- gas 2008:263). Fue esta concepción jurídica colo-
briel Gutiérrez, Trujillo no estuvo exento a los nial que se trasladó al sistema republicano, pero
procesos y fue escenario de una rebelión masiva con algunos cambios.
de esclavos del valle de Chicama y de Santa Cata- En base a las legislaciones coloniales te-
lina que tomaron la ciudad de Trujillo por tres nemos una clasificación de penas o castigos que
días en 1851. Esto fue un hecho que repercutió en son las penas corporales, de infamia y pecuniaria.
el aumento de la criminalidad como lo demues- Las primeras incluyen la pena capital, la pena del
tran las estadísticas. Desde 1858 hasta 1862 los presidio, trabajos forzados u obras publicas. De
procesos criminales subieron progresivamente al estas últimas nos ocuparemos a continuación.
número de 173. Las causas de la comisión delic-
tiva seguían siendo las mismas, pero los procedi- Las obras públicas: ¿Represión penal o eco-
mientos de solución fueron más radicales. El de- nomía del castigo?
bate sobre la aplicación o no de la pena de muerte
jugó un papel trascendental en Trujillo. El caso de El historiador Carlos Aguirre sostuvo que
Dolores Lara (véase la pena de muerte como ar- “Uno de los objetivos (…) de control social fue el
ma política descrito líneas más arriba) fue el pri- de transformar las energías disociadoras de la
mer ejemplo del restablecimiento de la pena de “plebe” en fuerza de trabajo (…)” (Aguirre
muerte en el Perú. 1990:85). Las autoridades encargadas del control
social vieron a las obras públicas y los reos como
IV. ASPECTO PUNITIVO fuerza productora y generadora de trabajo. El
gobernador de Santiago de Cao (Trujillo), Este-
Rituales punitivos ban Atocha, dispuso que los reos “Se les pusiese
presos, (…) que sirviesen a las obras publicas
Los castigos, de la colonia a la república: como son composturas de Puentes, Asequias y
Las penas son definidas según las siete partidas limpiesas de las calles, y de adobes que se han
como“(…) la enmienda de pecho o escarmiento hecho para la casa de la Escuela (…)”.10 Esta
que es dado según la ley a algunos por los yerros utilización del reo como instrumento productivo
(delitos) que hicieron”.9 La concepción de esta ha sido denominada como “servidumbre penal”. 11
ley consistió en castigar al transgresor con la fina- El cuerpo es un medio de utilización y produc-
lidad de ejemplarizar, inyectando miedo, a su vez, ción; “(…) a la utilización económica del cuerpo;
a través del castigo; “(…) todos los que vieren y el cuerpo, en buena parte, esta imbuido de rela-
oyeron, tomen de ello ejemplo y apercibimiento ciones de poder y dominación, como fuerza de
para guardase que no yerren por miedo de pe- producción, (…)” (Foucault 1976:18). Las obras
na”. Entiéndase esta disposición de ley como públicas no tuvieron un proyecto de humanizar y
instrumento que genere miedo a la autoridad en- reformar a los reos sino de utilizar y hacerlos
cargada de impartir justicia, a las penas y miedo a fuerza de producción económica.
delinquir. A diferencia de Carlos Aguirre y Michel
Juan Torres Venegas ha descrito: “el obje- Foucault, Sarah Chambers señaló que las cortes
tivo de la pena es aplastarlo psicológicamente, republicanas dispusieron de las obras públicas
humillarlo de acuerdo a la gravedad delictiva como una oportunidad de castigar y a la vez re-
(…)” (Torres Venegas 2008:263). El delito era
considerado un agravio a Dios, a las buenas cos- 10
En Santiago de Cao se dispuso que pasada de las diez de
tumbres, al rey y a las leyes que tenía que ser la noche, los pobladores estuviesen prohibidos a estar en las
aplicado con toda su crudeza. Pero también las tabernas y si se los encontraba en ellas eran conducidos a la
penas eran para la iglesia “(…) un remedio para cárcel de dicho pueblo. Archivo Regional de La Libertad,
Corte superior, Causa criminales, legajo. 901, año 1836.
11
La servidumbre penal fue un mecanismo por el cual se
9
Las siete partidas de Alfonso X EL Sabio, digitalizado en empleaba la energía de los presos para satisfacer las necesi-
www.librodot. com.pe. p. 150. dades laborales del Estado (Aguirre 1990: 99).

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Ley, delito y castigo. Mecanismos de control social y represión… V. Dieguez Deza

habilitar al reo; nos dice, además, que estas sen- aplicarlos al cervicio de la Esquadra (…) resul-
tencias fueron especialmente para delincuentes taría una grande utilidad al estado (…)”.14 Ve-
juveniles, con la esperanza de que, al aprender un mos aquí el claro interés de aprovechar las fuer-
oficio útil, ellos cambiarían de camino y abando- zas debido a que el estado las necesita y tanto
narían la vida criminal (Chambers 2003:18). Si procuradores y jueces saben que es lo más conve-
comparamos lo propuesto por Sarah Chambers niente.
con nuestro estudio de caso (Trujillo) surgirán
muchas variables. Primero, la mayoría de casos Los presidios: de la represión penal a la empre-
encontrados en las causas criminales evidencian sa económica
que los procesados son mayores de 20 años y
solamente uno, de 16 años, a diferencia de La condena a la pena de presidio fue uno
Chambers que identifica casos de jóvenes de 13 a de los tantos mecanismos punitivos que se tras-
14 años de edad. Por lo tanto, la intención de la ladó de la colonia a la república. Los reos acree-
corte de Trujillo al imponer el castigo a las obras dores a la pena de presidio fueron los procesados
públicas no tenía nada que ver con la edad de los por los delitos de homicidio, robos, salteadores de
reos, pero sí, con el oficio como también con el caminos y en ocasiones hasta por el delito de
sexo de los reos. Manuel Pereda (1824), de 25 heridas. Los presidios en el Perú estuvieron ubi-
años, natural de Trujillo y de oficio sastre fue cados en el Callao o la isla de San Lorenzo y el
procesado por haber herido a otro sastre el cual es Cuzco. Al primero, se iban los reos condenados
condenado al servicio de sastre en el cuartel de por las Cortes Superiores de Justicia de La Liber-
Artillería de Trujillo sin que pueda salir. 12 En el tad, Lima y Arequipa (Paz Soldán 1853:90-91).
caso de las mujeres eran destinadas al servicio del Sin embargo, estos presidios no fueron exclusi-
hospital. En 1838, se realizó una de las visitas vos.
semanales a la cárcel pública y preguntaron por Dentro de la provincia de Trujillo se habi-
los reos y contestaron: “Marcelina y Maria Are- litaron presidios alternos, ubicado en los exterio-
valo y Arevalo mujeres que por orden del Ylus- res de la ciudad, denominado con el nombre de
trisimo Señor Jeneral Prefecto han sido destina- cerro “El presidio” que actualmente está ubicado
das por ahora al servicio del Hospital Militar en el distrito de El Porvenir. Es posible que este
que se ha regido provicionalmente en el convento presidio tenga sus antecedentes desde la época
de San Francisco (…)”.13 colonial, sin embargo, esto se convierte en una
Sumada a la consideración de la edad, ofi- especulación al no encontrar evidencias que lo
cio y sexo de los reos para rebajar la condena, la demuestren.
autora agrega, además, la intención de los procu- La habilitación del presidio alterno de
radores al descontar la pena por consideraciones Trujillo responde entre muchas causas al tiempo
de reforma y rehabilitación. Por el contrario, los de condena del reo (días, meses y años) como lo
jueces trujillanos evidencian una intención clara demuestra la siguiente cita: “Juan Manuel Rami-
de aprovechar los recursos. La manifestación del res (sambo libre) qe se haya en esta carcel publi-
procurador de los reos Pablo Sánchez y Sebastián ca (…) pa qe Ynmediatamente se condusca al tra-
Muñoz (1825), ambos procesados por salteadores bajo del corte de piedras del serroqe sirve del
de caminos, quien apela a la sentencia de seis Precidiopr solo los quince días de su condena”.15
años de presidio propuesta por el agente fiscal. El La segunda causa de la habilitación del presidio
procurador, argumentó, lo excesiva que era la estuvo basada en las diversas necesidades de las
pena, y propone lo siguiente “Aun que segn las autoridades locales por hacer de los presidiarios
circunstancias presentes fuera mas conveniente la mano de obra necesitada y escasa. Necesidades

12 14
Archivo Regional de La Libertad, Corte superior, Causas Archivo Regional de La Libertad, Corte superior, Causas
criminales, legajo. 893, 1824. criminales, legajo 894, año 1825.
13 15
Archivo Regional de La Libertad, Intendencia, Visitas de Archivo Regional de La Libertad, Corte superior, Causa
cárcel, legajo 442, 1838. criminales, legajo. 893, expediente. 3103,1824.

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ANTI • Núm. 12 • Diciembre de 2013

como el arreglo físico de la ciudad “(…) labran- tinado pa qe sirva de tal presidio (…)” 19. Como
do y derrocando piedras qe deben servir pa el hemos visto, los presos y los presidiaros respon-
publico enlosado y derrocando piedras de las den sobre todo a las necesidades económicas que
calles de esta ciudad (…)”.16 a un fin de rehabilitación y reforma. En el período
Es preciso, además, señalar que dentro del de modernización marcado por la era del guano
suplicio que debió implicar ser un presidiario, se habilita como presidio las islas de Chincha,
salen a la luz algunas ventajas que tuvieron los donde fueron remitidos muchos presidiaros truji-
presidiarios de Trujillo. Primero, no tuvieron que llanos a extraer el guano.
sufrir los cambios de la geografía y clima de los
otros presidios. Segundo, los presidiarios trujilla- CONCLUSIONES
nos dormían en la cárcel pública de la ciudad;
esto les permitió otro tratamiento y el acceso a los La criminalidad en el Perú y, particular-
mecanismos de negociación y de resistencia co- mente, en la provincia de Trujillo fue un proble-
mo la cercanía a los familiares. ma arrastrado desde la época colonial, pero con
No sólo se dispuso del presidio de Trujillo mayor impulso en el período republicano. Las
sino también se habilitaron otros presidios en autoridades se mostraron incapaces de revertir
Huancavelica y Puno. El primero, surge como esta situación; los índices de criminalidad fueron
respuesta a la necesidad de mano de obra en la una constante que aumentaba y disminuían para-
mina. A Huancavelica debían ir los presidiarios lelamente con los procesos políticos, sociales,
de los departamentos de Cuzco y Ayacucho. Sin económicos e ideológicos.
embargo, esto no necesariamente sucedió así La lógica punitiva estuvo basada en rela-
“(…) por la que se le condeno a Juan de Mata ciones de poder, en una economía del castigo y de
Lagunas a la pena de diez años de presidio en el la utilización del reo como mano de obra produc-
mineral de Huancabelica, (…)” 17. Juan de Mata tiva, activa y necesaria. Los castigos insertos de-
fue condenado por homicidio por la Corte Supe- ntro de los grandes rituales del poder eclipsado y
rior de La Libertad, por lo cual debió ir al presi- restaurado que atravesó el Perú. La venganza,
dio del Callao. Este último era recurrente a los objetivo principal de la represión colonial fue
procesados de la Corte trujillana y de otros tribu- trasladada a la República, y para su ejecución
nales como El Tribunal de la Acordada que con- utilizaron diversos medios e instrumentos como
denó a Nicolás Rotalde a la pena de 6 años de la ejecución pública.
presidio “(…) condenaron al reo ausente Nicolas Los grupos populares que estuvieron al
Rotalde a la pena de seis años de presidio que los margen de la ley no consiguieron sino repetir sus
cumplira en la fortaleza del Callao (…)”18. acciones delictivas; por el contrario, los poblado-
Para finalizar, en la década de 1820 se habilitó el res que se mantuvieron respetando las normas
presidio llamado como la isla de “San Esteves”, consiguieron erosionar muchos aspectos de la
ubicado actualmente a 2 km de Puno. En 1828, vida social trujillana. Sin embargo, lo que fue
José Mercedes Atocha es procesado por homici- inevitable es liquidar el prejuicio; culpables o
dio y ladrón de burros, el cual es condenado a inocentes, muchos fueron vinculados delictiva-
dicho presidio. El juez de primera instancia, Re- mente sólo por la condición social y racial, que
migio Vallejo dice: “(…) se le condena al expre- aún a pesar de los años y de los procesos ha per-
sado Atocha a diez años de presidio qe los guar- durado.
dará, y cumplirá, en la isla de Esteves, lugar des-
AGRADECIMIENTOS
16
Archivo Regional de La Libertad, Corte superior, Causa
criminales, legajo 895, expediente. 3140, 1827. El presente artículo ha sido realizado gra-
17
Archivo Regional de La Libertad, Corte superior, Causa cias a la convergencia de muchas personas e insti-
criminales, legajo. 902, expediente 3489, 1840.
18
Archivo Regional de La Libertad, Corte superior, Tribu-
19
nal de La Acordada, Causas criminales, legajo. 901, expe- Archivo Regional de La Libertad, Corte superior, Causas
diente 3416, 1835. criminales, legajo 896, expediente. 3181, 1828.

49 • Centro de Investigaciones Precolombinas


Ley, delito y castigo. Mecanismos de control social y represión… V. Dieguez Deza

tuciones. Agradecer, en primer lugar, a la Univer- Arranz Lara, N.


sidad Nacional de Trujillo, mi casa de estudios. 2000. Instituciones del derecho indiano en la
Extender el agradecimiento a los maestros, quie- nueva España. Editora Norte-Sur. México DF.
nes uno a uno, contribuyeron en mi formación
profesional y en la realización del presente traba- Barbosa Delgado, F.
jo. Agradecer, además, al Archivo Regional de La 2007. Justicia, rupturas y continuidades: el apa-
Libertad y sus colaboradores, donde he recopila- rato judicial en el proceso de configuración del
do toda la información vertida en el presente. estado-nación en Colombia, 1821-1853. PUJ.
Finalmente dar las gracias al VIII Seminario Bi- Bogotá.
nacional Peruano Argentino por proporcionarnos
la oportunidad de comunicar y de dar a conocer Basadre, J.
parte de la historia de Trujillo. 1963. Historia de la República del Perú. Tomo I,
II, IV. Ed. Universitaria. Lima.
BIBLIOGRAFÍA
Chambers, S.
Aguirre, C. 2003. De Súbditos a ciudadanos: Honor, género
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Federico Villarreal. Lima. sión. Siglo XXI Eds. México DF.
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Alva Castro, L. Revista de Investigaciones Sociales de la
2003. Bolívar en La Libertad. Ediciones Andinas. UNMSM Año XII, N° 20. Lima.
Lima.

Centro de Investigaciones Precolombinas • 50


ANTI • Núm. 12 • Diciembre de 2013

SÍMBOLOS DE PODER, PROTECCIÓN Y FECUNDIDAD EN


LA ORNAMENTACIÓN DE LOS MUEBLES DE EMBALAJE
DE CUERO COLONIALES Y REPUBLICANOS

Estela Angélica Miranda Castillo


Museo Nacional de la Cultura Peruana
stelea.mc@gmail.com

RESUMEN

El artículo trata de la resistencia que tuvieron ciertos íconos relacionados al mundo andino durante el
período del virreinato, pese las ordenanzas del Virrey Toledo en 1580 y del Virrey Jáuregui, luego de la
revolución de 1780, que se dieron en torno a las manifestaciones artísticas de los antiguos peruanos
vinculados al sentimiento religioso panteísta y animista. Quienes reaccionando frente a toda disposi-
ción adoptaron nuevas formas e íconos europeos para incluirlas en el repertorio del mundo andino con-
virtiéndolo en signo o símbolo comunicativo. Para el trabajo descriptivo e iconográfico se ha seguido el
método de la iconografía de E. Panoski, en el que se hace el reconocimiento de los embalajes de cuero
de la colección del Museo Nacional de la Cultura Peruana, se identifica la ornamentación y se continúa
con el estudio de los símbolos encontrados para realizar un estudio comparativo y proceder al análisis e
interpretación de la información recopilada y hacer un estudio de enfoque estético- analítico. Es así que
con este estudio se podrá apreciar las diversas reacciones de las sociedades indígenas frente al dominio
del poder colonial, contra las creencias y los cultos de la población indígena.
Palabras clave: embalaje, ornamentación, símbolos, panteísta, apotropaico.

ABSTRACT

The article is about the resistance that had certain icons related to the Andean world during the period
of the Viceroyalty, despite the Ordinances of the viceroy Toledo in 1580 and Viceroy Jáuregui, after
the revolution of 1780, related to the artistic manifestations of the ancient Peruvians linked to animistic
and pantheistic religious sentiment. Reacting against any provision, they adopted new forms and Euro-
pean icons for inclusion in the repertory of the Andean world transforming them in sign or communica-
tive symbol. For the descriptive and iconographic work it has been followed the method of the icono-
graphy of E. Panoski, by which the recognition of leather packaging from the collection of the National
Museum of Peruvian Culture is made, it is identified the ornamentation and the study of the symbols
found to conduct a comparative study and proceed to the analysis and interpretation of the information
collected to make a study from an aesthetic-analytical approach.
With this study it will appreciate the various reactions of indigenous societies opposite to the colonial
domain, the beliefs and the cults of the indigenous population.
Key words: packaging, ornaments, symbols, pantheist, apotropaic.

D e la corioplastía no se ha tratado mucho y


sobre embalajes de cuero apenas hay
breves notas al respecto como la de Luis
Ramírez y Juan Merino para el catálogo de la
Exposición “La Petaca Peruana” (1999) realiza-
da en el Museo Nacional de la Cultura Peruana,
en el cual se esboza su devenir histórico y su ico-
nografía; y el texto de la autora de este artículo,

51 • Centro de Investigaciones Precolombinas


Símbolos de poder, protección y fecundidad en la ornamentación… E. A. Miranda Castillo

“Algunos alcances para el estudio de la artesanía a) Fichas de registro y catalogación.


en cuero”, en la revista Escritura y Pensamiento b) Fichas de investigación documental.
(2006), en el cual se plantea las bases para el es- c) Fichas de investigación bibliográfica.
tudio de los muebles de embalaje, como preludio d) Registro fotográfico de las piezas.
a este artículo.
El enfoque de la investigación tratará de Para el trabajo descriptivo e iconográfico
una parte de los embalajes de cuero de la colec- se ha seguido el método de la iconología de E.
ción del Museo Nacional de la Cultura Peruana, Panosky (2008). Se realizó el estudio de los
para establecer sus características, así como su símbolos encontrados en los objetos artísticos, se
valor histórico-artístico. Para ejecutarlo se ha ejecutó el estudio comparativo de los mismos, y
seleccionado una muestra de veinticuatro piezas finalmente se procedió al análisis e interpretación
entre un arcón, doce baúles y once petacas, que de la información recopilada para hacer un estu-
corresponden al período virreinal y republicano. dio de enfoque estético-analítico.
Para comprender el valor de estos embala-
jes forrados con cuero es necesario mencionar LA TRADICIÓN DE LA CORIOPLASTÍA
brevemente la tradición de la corioplastía en Es- EN ESPAÑA
paña y de la historia de éstos muebles desde la
antigüedad. El arte de la corioplastía en España, espe-
Se desarrolla la tradición de la corioplastía cialmente en Córdoba, alcanzó gran esplendor
en el Perú prehispánico, virreinal y republicano, desde la época del Califato Omeya (siglo X) y
haciendo énfasis en que si bien los españoles venían continuó siendo un material artístico de impor-
con un proceso de elaboración ya establecido, en la tancia durante el reinado de los Reyes Católicos,
época prehispánica también se logró realizar objetos quienes en 1502 dictaron ordenanzas para prote-
con cuero, ya que este material se utilizaba en la ger y salvaguardar los intereses de los guadamaci-
ejecución de diversos objetos y tenían sus propias leros. Posteriormente, Carlos V mandó a publicar
técnicas de curtido como lo señala la investigadora en 1529 otras ordenanzas: “Ordenanzas que de-
Zivana Meseldzic (1998) en su libro Pieles y cueros ben guardar los curtidores de suela, cordobanes,
del Perú Precolombino. badanas y demás curtidores de este arte” (Ferran-
El estudio de los muebles de embalaje de dis 1955: 5).
cuero de la colección del Museo Nacional de la
Cultura Peruana trata del valor histórico-artístico DESARROLLO HISTÓRICO DEL MUEBLE
del arcón, baúles y petacas que posee la colec- DE EMBALAJE: COFRE Y ARCA
ción. En las descripciones de estos objetos se de-
tallan los materiales que intervienen en la elabo- El mobiliario de embalaje tiene toda una
ración del mueble de embalaje, técnicas y moti- trayectoria en la historia del arte. En el período
vos ornamentales. Continúa con la resistencia de antiguo con la cultura egipcia, en el clásico con la
íconos relacionados al mundo andino, procedien- cultura grecoromana y en la Edad Media donde
do al estudio comparativo con piezas de otras los cofres perduraron con la forma y las ensam-
colecciones que se encuentran en el país y en el bladuras de los modelos antiguos. En el estilo
extranjero, debido a que se han apreciado que románico, el ornamento de la cara principal re-
comparten semejanzas entre unas y otras. presentaba animales fantásticos inscritos en un
La metodología empleada para el desarro- círculo. En el siglo XVI se inicia la ornamenta-
llo de la investigación fue sometida a los criterios ción de paneles y comienza a grabarse las armas
histórico-críticos, llevándose a cabo la búsqueda del dueño entre los paneles, especialmente en las
y análisis de fuentes escritas y gráficas-volumé- llamadas arcas de novia. Mientras tanto durante el
tricas. Los elementos estudiados son una muestra período medieval las arcas cambian de aspecto,
de 24 piezas o muebles de embalaje forrados con transformándose en baúl asiento. Y en el período
cuero. Los instrumentos de investigación que se barroco optan por la preferencia de cubrirlos con
emplearon fueron los siguientes: cuero.

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ANTI • Núm. 12 • Diciembre de 2013

TRAYECTORIA DE LA CORIOPLASTÍA su colección el desarrollo de la cultura peruana


EN PERÚ mediante un estudio del hombre en su producción
artística, tarea desarrollada, con énfasis, desde la
La utilidad que se dio a la piel o cuero du- creación del Instituto de Arte Peruano, dirigido
rante la etapa prehispánica fue por ejemplo la por José Sabogal. En esta labor de recopilación de
realización de botes con piel de lobos marinos, objetos de contenido artístico donde se muestran
como lo menciona Bernabé Cobo (1956 [1653]: las artes populares realizadas por el espíritu crea-
T. 91, 296); en los instrumentos musicales se em- dor de nuestra población, fusión de contenidos
pleó para forrar antaras de cerámica, incluso se ha prehispánico y español, se abrió el ingreso de
hallado un tambor forrado de cuero con diseños objetos como el arcón, los baúles y las petacas.
policromados sobre una armazón de tablillas ata-
das a dos aros de ramas delgadas1. Otra muestra Arcón
es el penacho de cuero, como se demuestra en el
hallazgo de un sacerdote guerrero2 en el complejo El arcón de código 51-89 (Fig. 1), de cuero
arqueológico El Brujo realizado por el arqueólo- repujado, que posee la colección del MNCP tiene
go Régulo Franco (HUANCAS 2008: S/P). en sus representaciones la flor de loto como folla-
Entonces, los españoles trajeron técnicas je, perros cazadores y aves (Fig. 1a). El arcón tiene
asimiladas de los árabes a un territorio que eran un escudo heráldico de un águila bicéfala coronada
desconocidos por estas tierras y objetos con dife- con un corazón en el centro (Fig. 1b). En la tapa
rentes formas y utilidades que contribuyeron a tiene una inscripción: “SOI DE MI SEÑORA DA.
una variedad de artículos. Es necesario anotar que MARIA GABRIELA” (Figs.1c y d). A los costa-
España sólo en casos excepcionales permitía en dos el arcón presenta un macetero con flor de loto
sus colonias la curtición del cuero, y su preferen- (Fig. 1e) y cerradura artísticamente trabajada, es-
cia era la piel de ganado mayor. cuadras y bisagras de hierro (Fig. 1f).
Durante los inicios de la república se con-
tinuó realizando productos de cuero pero la de-
manda fue paulatinamente disminuyendo; los
motivos que ligaban a la identificación con la
dinastía de los Habsburgo o Borbón fueron des-
plazados por temas costumbristas o motivos ge-
ométricos como triángulos, rombos o follajes.

ARCÓN, BAÚLES Y PETACAS DEL MU-


SEO NACIONAL DE LA CULTURA PE-
RUANA
Figura 1: Arcón. Anónimo. Siglo XVII, inicios del
siglo XVIII. Procedencia ignorada. Estructura de ma-
El Museo Nacional de la Cultura Peruana,
dera, cuero repujado e hierro forjado. Código: 51-89.
creado por iniciativa del antropólogo Luis E. Medidas: 47,8 cm. x 1,04 cm. x 51,2 cm. Museo Na-
Valcárcel, desde su fundación en 1946 muestra en cional de la Cultura Peruana. Foto: Estela Miranda
1
Este instrumento musical pertenece a la colección del
La ornamentación que se muestra es, como
MNAAHP, probablemente corresponda al Horizonte medio
(S. VII-XII d.C.) y fue adquirido por el arqueólogo Julio C. en la mayoría de los casos, de especie vegetal,
Tello en el Valle de Huarmey, en 1934 (Falcón y Martínez hecho muy frecuente como se puede apreciar en la
2008).
2
historia general del arte. La flor de loto3 es repre-
Enterrado con menos ornamentos que la Señora de Cao, sentada ya sea de frente o en perfil, forma campa-
sin embargo, hay elementos que refuerzan la importancia
del personaje, como haber sido enterrado en medio de dos
niforme, sea hoja o capullo. El capullo de loto en
individuos y también el haberse encontrado casi a sus pies
3
los restos de una adolescente que habría sido ahorcada para Planta que ha figurado con mucha frecuencia desde el
ser incluida en su entorno funerario. antiguo Egipto.

53 • Centro de Investigaciones Precolombinas


Símbolos de poder, protección y fecundidad en la ornamentación… E. A. Miranda Castillo

el interior tiene cuatro hojas, siendo representado do como símbolo heráldico y evoca el águila
en ocasiones alternadamente con la flor de loto o bicéfala de Carlos V, identificándose de esta ma-
de lo contrario en permanente repetición. nera con el reinado de la dinastía Habsburgo.
También es importante mencionar que las águilas
bicéfalas explayadas tenían la connotación de ser
las guardianas de las entradas a los accesos, en
este caso de los muebles de embalaje.

Figura 1c: “SOI DE MI SEÑORA”

Figura 1a: Perros, aves y flor de loto

Figura 1d: “DA. MARIA GABRIELA”

Figura 1b: Águila bicéfala coronada

El águila bicéfala también fue representa-


do por solicitud del cliente, ya que era considera- Figura 1e: Macetero con flor de loto

Centro de Investigaciones Precolombinas • 54


ANTI • Núm. 12 • Diciembre de 2013

chucllo sua [ladrón de mazorcas] que ellos les


llama este mes zara cauay mitam [mes de vigilar
el maíz], que ya tiene maduro todas las comidas”
(Huamán Poma de Ayala 1615: 1137 [1147]).
En esta escena se plasma este hecho en
que las aves cogen del fruto maduro, mientras el
perro y el faisán están como vigilantes, reforzado
con la imagen del ave bicéfala y que le identifica
con la corona aún vigente.

Figura 1f: Bisagras y escuadras de hierro

Baúl

El baúl encorado4 de código 72-116 (Fig.


2) con la técnica del repujado como ornamenta-
ción nos muestra motivos como la granada que es
de forma redondeada con una corola formada por
tres hojas ubicada en mayor formato en cada
ángulo (Fig. 2a), símbolo de la fecundidad o co- Figura 2: Baúl. Anónimo. Siglo XVII, inicios del siglo
munidad integrada. Entre el follaje se hallan pica- XVIII. Procedencia ignorada. Estructura de madera y
flores, vizcachas y perros cazadores (Fig. 2b). En cuero repujado, plateado, corlado y policromado, e
el recuadro central se muestra el faisán (Fig. 2c) hierro forjado. Código: 72-116. Medidas: 22,5 cm. x
como motivo principal, que simboliza la luz, el 60 cm. x 36 cm. Museo Nacional de la Cultura Perua-
día y la vigilancia. En el cuerpo del baúl se repi- na. Foto: Estela Miranda
ten los mismos elementos (Fig. 2d), pero en los
laterales se encuentra un ave bicéfala como guar-
diana de lo interior, donde están colocadas las
asas de hierro forjado (Fig. 2e). En la parte trasera
presenta el capullo de la flor de granado (Fig. 2f).
Este baúl mantiene la bocallave que tiene forma
de venera (Fig. 2g), escuadras y bisagras de hie-
rro forjado. La policromía que mantiene es de
color verde, rojo bermellón y blanco, sobre pan
de plata y corlado.
Son estas escenas las que destacan y nos
hacen recordar las citas de la crónica de Huamán
Poma de Ayala cuando menciona los meses del
año y se refiere, por ejemplo, al mes de marzo,
mes de maduración de la tierra:

“MARZO, PACHA PVCVI Quilla [mes de la ma-


duración de la tierra]: Este dicho mes se ande
ocupar los yndios de oxear de los loritos y de
otros páxaros y de los zorrillas y zorras y de los
perros y de los yndios y negros, mestizos que hur-
tan los chocllos [mazorca], y ancí se dize mistizo Figura 2a: Granada

4
Cubierto con cuero.

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Símbolos de poder, protección y fecundidad en la ornamentación… E. A. Miranda Castillo

Figura 2b: Tapa del baúl con ornamentos vegetales,


picaflores, vizcachas y perros

Figura 2e: Águila bicéfala explayada y asa

Figura 2c: Faisán

Figura 2f: Capullo de flor de granado

Petaca

En la petaca de código 60-142 (Fig. 3), en


Figura 2d: Faisán la superficie de la tapa se presentan paneles divi-
Centro de Investigaciones Precolombinas • 56
ANTI • Núm. 12 • Diciembre de 2013

didos por líneas pespunteadas con tiras de cuero y RESISTENCIA DE ÍCONOS RELACIONA-
en las esquinas tiene triángulos de cuero a manera DOS AL MUNDO ANDINO
de refuerzo; el alto de la tapa y el cuerpo de la
petaca tienen diseños calados que se encuentran La cultura andina de herencia panteísta y
fijados por el pespunteado. En el frontal de la animista se resistió ante las prohibiciones dicta-
tapa se presenta una serie de cinco flores inscritas das por el virrey Toledo y el virrey Jáuregui. Or-
en un cuadrado donde cruza una línea diagonal y denanzas como la que trata de la enseñanza y
horizontal (Fig. 3). La caja de la petaca cuenta doctrina de los indios es la que marca la ausencia
con dos dragones mordiéndose su cola, ouroboro, de elementos expresamente andinos.
en contrapuesto, enmarcado con motivos calados “ORDENANZA I.- Que sigan la fe católica y de-
de vegetales (Fig. 3). Por la imagen predominante jen los ritos y supersticiones de su gentilidad.
del ouroboro el dueño de la petaca podría haber Primeramente entiendan que han de creer
creído en la idea de continuidad o de renovarse a en un Dios todopoderosos, y han de dejar y olvi-
sí mismo. dar los ritos e ídolos que tenían por sus dioses y
las adoraciones que hacían a piedras y al sol y a
la luna, para las huacas y otra cualquier criatu-
ra, y que no han de hacer sacrificio, ni ofreci-
miento como lo hacían a lo susodicho en tiempo
de su infidelidad, y han de creer y guardar lo que
en la doctrina se les enseña y predica, y cuando
oyeren tocar la campana de la oración, se quiten
los llautos y se hinquen de rodillas en el suelo, y
recen el Ave María como hacen los cristianos”
(Toledo 1986 [1575-1580]: 250- 251).
La vigilancia de ciertas costumbres de los
indios fue cada vez más constante inclusive cuan-
do estaban participando en fiestas religiosas como
el Corpus Christi:
“Que cada parroquia el día del Corpus
Christi saque su danza y andas y vayan en proce-
sión y lo que ha de hacer el sacerdote.
Y que en las fiestas del Corpus Christi sa-
quen sus andas y danzas en cada parroquia y
Figura 2g: Bocallave en forma de venera vayan en procesión con su cruz y banderas y sus
hermanos de la cofradía que los rije y el sacerdo-
te con ellos examinando ante todas cosas las an-
das que llevan por que no lleven escondidos al-
gunos ídolos como se les han hallado en otra
ciudades y el sacerdote antes que salga les diga
en su lengua la razón de aquella fiesta para que
la entiendan y honren con la veneración que son
obligados” (Toledo 1986 [1575-1580]: 168).
Entre las ordenanzas dictadas por el virrey
Jáuregui se establecieron algunas prohibiciones
como leer los Comentarios Reales del Inca Garci-
Figura 3: Petaca. Anónimo. Fines de siglo XVIII.
Posiblemente de Ayacucho. Estructura de madera y
laso. Sin embargo, aquella cosmovisión andina
cuero, calado y cosido con tiras de cuero Código: 60- perduró en los pobladores que se sentían aún en-
142. Medidas: 31 cm. x 64 cm. x 38 cm. Museo Na- trelazados con las deidades que eran de reveren-
cional de la Cultura Peruana. Foto: Estela Miranda cia para sus ancestros, y que aún en la actualidad

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Símbolos de poder, protección y fecundidad en la ornamentación… E. A. Miranda Castillo

se sigue evidenciando como lo menciona Rosa Cusi Chimbo, cuyo escudo de armas se mostró en
María José Nolte en un estudio sobre el arte de- la puerta principal de su palacio. Asimismo se
sarrollado en Sarhua, Ayacucho. tiene referencia de Titu Tupac Amaru, hijo legí-
“Las deidades del panteón andino tienen timo de Tupac Amaru I quien Carlos V le dio
influencia en el desarrollo de diferentes aspectos escudo nobiliario con la presencia del águila real
de la naturaleza: agricultura y ganadería, fenó- con dos cabezas coronadas (Flores Ochoa et al
meno de la naturaleza: lluvias, sequías, etc... En 1998: 211). En otros casos, según los autores, el
orden de importancia podemos mencionar a los Inka y la Coya son reemplazados por uno o dos
apus o wamanis, protectores principales de la animales fantásticos como el águila bicéfala y
ganadería, a pachamama, madre tierra, diosa de sobre sus cabezas aparecen flores y frutos de ají,
la fertilidad para la agricultura; los aukis o espíri- franqueados por pájaros o monos de perfil (Flores
tus protectores; los mallkis o antepasados directos Ochoa et al 1998: 212), como se aprecia en las
o los ancestros y gentiles que viven en pueblos Figuras 4a y b. En la Figura 4, en el baúl de códi-
organizados de manera similar a la del kaypacha. go 60-139 se observa un claro ejemplo de un ob-
El Amaru es un ser movible que vive en las entra- jeto que posiblemente fue encargado por algunos
ñas de los cerros y en los puquiales subterráneos descendientes de las familias de la nobleza incai-
desde donde sale y arrasa con los pueblos produ- ca que si bien asimilaron costumbres occidentales
ciéndose un Pachacuti que no es más que el fin y mantuvieron su esencia andina.
el inicio de un nuevo ciclo” (Nolte 1991: 70)
Frente al panteísmo religioso de los oriun-
dos, la iglesia católica respondió con la persecu-
ción de aquellos que para su concepto practicaban
la idolatría, siendo observables en aspectos ideo-
lógicos como artísticos.
María del Carmen de la Fuente y otros
acotan en referencia al tema: “La represión ejer-
cida por el gobierno español en la producción
artística, no solo se dio eliminando físicamente
los objetos de arte que servían al culto, sino tam-
bién eliminando temas de ornamentación, utiliza-
dos por los indígenas en sus objetos de arte. Así
Toledo dio en 1580 ordenanzas que prohibían al
indígena tejer las figuras que empleaban tradi-
cionalmente y a partir de entonces se reemplazó Figura 4a: Águila bicéfala coronada. Baúl. Anónimo.
estas figuras por el ave bicéfala y el caballo” (de Fines del siglo XVII o inicios del siglo XVIII. Posi-
la Fuente et al 1992: 28). blemente de Ayacucho. Estructura de madera, cuero
De esta manera se explica que algunos repujado e hierro forjado. Código: 60-139 Medidas:
animales fantásticos se incorporen en la heráldica 14 cm. x 41 cm. x 28 cm. Museo Nacional de la Cul-
de los caciques, descendientes de la nobleza pre- tura Peruana. Foto: Estela Miranda
hispánica, que poseían el derecho a usar escudos
nobiliarios. Tal es el caso del águila bicéfala La representación de la flor de granado
símbolo de la dinastía Hadsburgo. Sin embargo, (Fig. 2f) en el baúl de código 72-116, cuyo fruto
en el mundo andino también se identificaba al tiene en el interior abundantes semillas, nos alude
águila bicéfala por medio de una leyenda, en la además de la fertilidad de la tierra, a la referencia
que la muestra como un ave que puede volar tan de la abundante población indígena que había en
alto hasta ser capaz de llegar al sol sin quemarse el territorio.
(Lara 1999: 47). El águila bicéfala (cuchucondor) La presencia del amaru en la ornamenta-
aparece representada en la heráldica colonial de ción, como un elemento apotropaico fue reempla-
los caciques y qoyas, como es el caso de qoya zado por el dragón que al representarlo como

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ANTI • Núm. 12 • Diciembre de 2013

ouroboro (Fig. 3), manifiestó el deseo de conti- des al dragón con la lengua hacia fuera con rema-
nuidad del mundo indígena. te de fuego o flores y adaptaron esa iconografía
con el león al plasmarlo con la lengua con termi-
nación de flores (Fig. 4c), con el fin de mantener
al amaru con el aspecto significativo que tenía
para el hombre andino.

Figura 4b: Vista lateral

Figura 4c: León

Figura 6: Petaca. Anónimo. Fines de siglo XVIII -


Inicios del siglo XIX. Posiblemente de Ayacucho.
Estructura de madera y cuero, calado y cosido con
tiras de cuero. Código: 60-142. Medidas: 31 cm. x 64
cm. x 38 cm. Museo Nacional de la Cultura Peruana.

Fig. 5. Petaca. Anónimo. Siglo XIX. Posiblemente


Ayacucho. Estructura de listones de madera, forrado
con cuero, calado y pespunteado con tireta de cuero
Código: 1.93.12. Medidas: 35 cm. x 65 cm. x 45 cm.
Museo Nacional de la Cultura Peruana.
Foto: Estela Miranda

“Ese fiero amaru que en leyendas está su-


mergido en las lagunas o vigila desde un peñón en
medio de las aguas, cedió, en otros relatos, su
espacio al toro; animal llegado con la conquista e
incorporado a la vida productiva y espiritual indí- Figura 7: Baúl. Anónimo. Fines del siglo XVII o ini-
gena” (Instituto Nacional del Cultura 2009: 9). cios del siglo XVIII. Posiblemente de Ayacucho. Es-
El amaru, que fue tan importante en la tructura de madera, cuero repujado y hierro forjado.
cultura incaica, se mantuvo vigente de manera Código: 60-139. Medidas: 14 cm. x 41cm. x 28 cm.
análoga representado por el dragón, el león y el Museo Nacional de la Cultura Peruana.
toro (Fig. 6, 7 y 8), representando en oportunida- Foto: Estela Miranda

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Símbolos de poder, protección y fecundidad en la ornamentación… E. A. Miranda Castillo

Falcón, V. y R. Martínez
2008. Un tambor de cuero pintado del Museo
Nacional de Arqueología, Antropología e Historia
del Perú. Anales del Museo de América XVI: 9-
27. Ministerio de Cultura. Secretaría General
Técnica, Subdirección General de Publicaciones,
Información y Documentación. Madrid.

Ferrandis Torres, J.
1955. Cordobanes y guadamecíes. Catálogo ilus-
trado de la Exposición. Sociedad Española de
Amigos del Arte. Madrid.

Flores Ochoa, J., E. Kuon Arce y R. Samanez


Argumedo
Figura 8: Petaca. Anónimo. Siglo XIX. Posiblemente 1998. Qeros. Arte inka en vasos ceremoniales.
de Ayacucho. Estructura de listones de madera, forra- Banco de Crédito del Perú. Lima.
do con cuero, calado y pespunteado con tireta de cue-
ro. Código: 1.93.12 Huamán Poma de Ayala, F.
1615. Nueva corónica y buen gobierno. Publica-
AGRADECIMIENTOS ción digital, Biblioteca Real de Dinamarca.
http://www.kb.dk/permalink/2006/poma/titlepage
Agradezco a los catedráticos Adela Pino /es/text/?start=0&operator=and&field=body&q=c
Jordán, Luis Ramírez León y al artesano Pedro uero
González Paucar por los aportes alcanzados, a la (Búsqueda realizada el 20 de junio de 2009)
directora del Museo Nacional de la Cultura Pe-
ruana, Soledad Mujica Bayly, al director del Mu- Instituto Nacional de Cultura
seo de Artes y Tradiciones Populares del Instituto 2009. Del amaru al toro. Instituto Nacional de
Riva-Agüero de la Pontificia Universidad Católi- Cultura. Lima
ca del Perú, don Luis Repetto Málaga, al curador
Claudio Mendoza Castro, a Martha Egan y a la Lara, J.
curadora Bárbara Mauldin del Latin American 1999. Cristo- Helios americano: la inculturación
Folk Art - Museum of International Folk Art del culto al sol en el arte y arquitectura de los
quienes me proporcionaron las facilidades para virreinatos de la Nueva España y del Perú. Anales
conocer la colección de muebles de embalajes de del Instituto de Investigaciones Estéticas Vol.
cuero que poseen los mencionados museos. XXI, N° 74-75: 29-48. Universidad Nacional
Autónoma de México. México DF.
BIBLIOGRAFÍA
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Cobo, B. 1998. Pieles y Cueros del Perú Precolombino.
1956 [1633]. Historia del Nuevo Mundo. Tomo Sociedad Geográfica de Lima. Lima.
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pañoles. Madrid. Miranda, E.
2006. Algunos alcances para el estudio de la arte-
de la Fuente, M. del C. , M. Nolte, L. Rebalta y sanía en cuero. Escritura y Pensamiento. Revista
R. Villegas de Investigación de la Facultad de Letras y
1992. Artesanía peruana. Orígenes y evolución. Ciencias Humanas de la UNMSM Nº 19: 79-100.
Editorial Allpa. Arequipa. Lima.

Centro de Investigaciones Precolombinas • 60


ANTI • Núm. 12 • Diciembre de 2013

Nolte, R. M. J. Toledo, F. de
1991. Qellcay. Arte vida de Sarhua. Comunida- 1986 [1575-1580]. Disposiciones Gubernativas
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el Voluntariado y la Cooperación Internacional. Americanos. Consejo Superior de Investigaciones
Lima. Científicas Monte de Piedad y Caja de Ahorros
de Sevilla. Publicación Conmemorativa del Cen-
Panofsky, E. tenario del Descubrimiento de América. Sevilla.
2008 [1939]. Estudios sobre iconología. Alianza.
Madrid.

Ramírez León, L. y J. Merino


1999. Exposición. La Petaca Peruana. 18 de se-
tiembre-30 de octubre. Museo Nacional de la
Cultura Peruana. Lima.

61 • Centro de Investigaciones Precolombinas


ANTI • Núm. 12 • Diciembre de 2013

TRAYECTORIA DE LA VARA DE MANDO POPULAR Y


TRADICIONAL EN EL PERU

Luis César Ramírez León


Museo Nacional de la Cultura Peruana
hananmayu@hotmail.com

RESUMEN

Se trata de un estudio que busca explicar acerca de las formas y los significados simbólicos que encie-
rra la vara de mando tradicional y popular contemporánea, en uso todavía por los alcaldes campesinos
denominados varayoc. Por ser producto de un sincretismo cultural dado a través de la historia entre lo
andino y lo occidental, es necesario remontarse a dichos ejes culturales y sopesar a cada uno en la con-
formación del modelo. Para ello se verá lo más característico de las varas en el mundo del Perú antiguo,
que incluye el desarrollo cultural hasta los Incas y luego se trata del influjo cultural europeo a través de
España para determinar los componentes formales y significativos que se incorporan en la vara campe-
sina actual o la manera como adquieren un nuevo significado como producto del sincretismo.
Palabras clave: vara, alcalde, varayoc, sincretismo, poder.

ABSTRACT

This is a study that seeks to explain the forms and symbolic meanings that holds the traditional and
popular contemporary rod of command, still in use by the peasant mayors called varayoc. As a product
of cultural syncretism given by the history between the Andean and Western, we need to go back to
these cultural axes and weigh each in the formation of the model. For this it will be observed the most
characteristic of the rods in the world of the old Peru, which includes the cultural development includ-
ing the Incas, and then the European cultural influence through Spain to determine the formal and sig-
nificant components that are incorporated into the current peasant rod or the way they acquire new sig-
nificance as the product of syncretism.
Key words: rod, mayor, varayoc, syncretism, power.

L a vara de mando en general y sus represen-


taciones en el arte presentan una variedad
de características según la idiosincrasia de
los pueblos y según las épocas en que fueron em-
pleadas. Se trata de un objeto de forma alargada y
tamaño más corto que un bastón, lujoso, más
apropiado para los grandes monarcas. El origen
de su uso se pierde en el tiempo, en el periodo
Neolítico.
Si bien es cierto que actualmente muchas
dispuesta de manera vertical, confeccionado de comunidades campesinas, especialmente en el sur
madera, con ornamentación de metales preciosos, andino, cuyas autoridades son conocidas con el
pedrería fina, entre otros adornos, dependiendo nombre de varayoq, palabra compuesta de len-
del grado de riqueza del hombre o grupo social al guas española y quechua que significa “el que
que pertenece. Por su diversidad de formas y ta- tiene la vara”, utilizan estos símbolos de poder, es
maños adopta varias denominaciones como cierto también que muchos de estos objetos son
bastón, que se acomoda al uso del hombre cuando parte de los repertorios de las colecciones de al-
le sirve de apoyo para caminar; bordón, algo más gunos museos y coleccionistas particulares, que
grande que la estatura del hombre; y cetro, de cuentan con importantes ejemplares de origen

62 • Centro de Investigaciones Precolombinas


Trayectoria de la vara de mando popular y tradicional en el Perú L. C. Ramírez León

popular y tradicional provenientes de diversas cortado, el repujado, las incisiones, el calado, el


regiones del Perú. claveteado y el forjado del hierro para el regatón,
Según Alfonsina Barrionuevo (1971: 16), especialmente cuando éste tiene la forma helicoi-
para elaborar las varas de mando en el Cusco o la dal. Los conocimientos respecto a la simbología
Sierra Sur se usaban las maderas que se encuen- de las varas de poder están en función de su tradi-
tran en las quebradas de la selva alta como la ción y en las particularidades que el usuario o
chonta y el lloque o la kukkakuka, las cuales son varayoc dispongan.
talladas, pulidas y adornadas con enchapes de
plata con relieves de cruces, pájaros, flores y mo-
tivos geométricos. Barrionuevo las describe de POMO O
EMPUÑADURA
esta manera: altas, con más de un metro treinta,
empuñadura de plata finamente labrada, cruz o Argolla

crucifijo en la coronación reemplazando a los


fetiches y amuletos de las varas precolombinas, Campanilla
anillos primorosamente cincelados, aro o argolla
que servía para colgarla o para adornarla con flo-
Cadenillas
res y cintas de colores en las grandes manifesta- con crucifijo
ciones públicas y, en el extremo, el regatón de CUERPO
hierro que se colocaba como casquete protector.
Cabe precisar las partes de una vara ob-
servándola de arriba hacia abajo, según se grafica Anillo
en la Figura 1. En primer lugar, la empuñadura,
pomo, cabezal o coronación; ahí se encuentra lo
más sagrado y simbólico del objeto. Luego viene
un aro o una argolla del cual usualmente cuelga
por cada costado una cadenita con su par de cam-
panillas y con un pequeño crucifijo y a veces se
REGATON
ponen unas cintas o flores según sea la ocasión;
en realidad es un elemento que divide el pomo
con el cuerpo de la vara, pero más bien es una
horquilla pequeña movible de plata o bronce en Figura 1: La vara tradicional popular y sus partes
forma semicircular o de media luna, que se sujeta
con un clavo a cada lado de la mitad del grosor de Para emprender el estudio de esta vara de
la vara. En el cuerpo, que es la parte más larga de mando, sobre todo, para saber cómo se creó, qué
la vara, se encuentran los anillos repujados o cin- proceso de mutación o de sincretismo sufrió y
celados de plata, que sirven como refuerzo y de- qué significados posee, es necesario observar que
coración, a base de motivos de vegetales, aves y la cultura tradicional de la que forma parte, espe-
geométricos. Finalmente, está el regatón o cas- cialmente la andina, depende de su pasado ances-
quete según la denominación de Barrionuevo, que tral. Es decir, es producto de su propia cultura
viene a ser la punta de hierro que envuelve el tradicional nativa, de la cual no existe memoria
extremo inferior de la vara para protegerla, darle escrita pero si iconográfica, que la arqueología se
mayor firmeza y para que cumpla su función pe- ha encargado de develar, pues las evidencias ar-
netradora en la tierra. queológicas son también fuentes para la recons-
En realidad, para ejecutar una vara de trucción del pasado y para conocer sobre la con-
mando el artista popular, según lo requiera el sta- cepción actual del mundo en la región andina. De
tus socio-económico del varayoc, necesita gran otra parte, la incursión europea con la conquista
precisión en la talla de la madera y el ensamblaje española ha dejado igualmente una fuerte impron-
con los enchapes de plata, además de la calidad ta cultural, de modo que en el transcurrir del
en el manejo técnico de las láminas al aplicar el tiempo, desde la época del virreinato, ha dado

Centro de Investigaciones Precolombinas • 63


ANTI • Núm. 12 • Diciembre de 2013

origen a la cultura mestiza con fuerte arraigo na- Pléyades y cuyo poder se identifica con los del
tivo. Sol, Rayo o Temblor”. El dios Jaguar manifiesta
su poder con relámpagos y rayos en forma de
serpientes, que son emanaciones de su propia
sustancia, por ello tienen la cabeza idéntica a la
de la divinidad (Tello 1923: 254). El Rayo se
representa con una serpiente y tiene el poder de la
generación o de la fertilidad.
La divinidad suprema viene a ser también
el llamado Lanzón de Chavín (Fig. 3) caracteri-
zado como el rayo. Es el felino antropomorfo
adornado con serpientes y cabezas de felino. La
forma de punta de lanza connota que se trata de la
representación del Rayo, especialmente porque en
el torso cae verticalmente un relieve a modo de
trenza que termina cerca del vértice inferior del
monolito. Esa trenza se hace más aguda, casi co-
mo una punta helicoidal cuando culmina por de-
bajo de los pies del ídolo. Esto confirma la fun-
ción penetradora en la tierra, de una fuerza caída
desde el cielo.

Figura 2: Estela de Raymondi con la “Divinidad de


los Báculos”, Chavín.
(Fuente: Salazar y Burguer 2000: 55)

LA VARA DE MANDO EN EL ANTIGUO


PERÚ

Las referencias de las varas de mando más


notorias y abundantes están en el campo de la
iconografía de las diversas culturas del Perú An-
tiguo. Así, se hallan en la cultura Chavín en la
figura del dios de las varas de la llamada Estela
Raimondi (Fig. 2), en cuyas varas se observan
motivos de serpientes y rasgos felínicos. El par de
báculos presenta un diseño muy estilizado y sinté-
tico de cabezas de aves en la parte inferior y el
cuerpo con elementos de volutas, rostro de felino
y colmillos que culminan con un remate de un par
de cabezas de serpientes (Salazar y Burguer 2000:
29-70). Según Tello (1923: 178): “La divinidad
suprema, padre común de todo lo existente, no es Figura 3: Lanzón de Chavín al interior del Templo
otra cosa que el Jaguar […] engalanado con las Viejo de Chavín de Huantar
estrellas que forman la constelación de las (Fuente: Salazar y Burguer 2000: 45)

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Trayectoria de la vara de mando popular y tradicional en el Perú L. C. Ramírez León

Esta divinidad, algo transformada y por- deidad en cuestión y bajo distintas denominacio-
tando los báculos, aparecerá en la iconografía nes: deidad suprema, dios solar, dios de la fertili-
Paracas y Nazca semejantes a “dioses voladores” dad, dios agrícola o dios del maíz (Fig. 6). Fi-
(Fig. 4). De igual modo, se encuentra en la deidad nalmente, la deidad suprema de los Inca es más
de la Portada del Sol de Tiahuanaco con sus varas abstracta y no se hallado su imagen portando
compuestas de una serpiente coronada con dos báculos ni con rasgos antropomorfos. Para los
cabezas de falcónida (Fig. 5). El programa ico- incas podría haber habido una relación de identi-
nográfico de esta Portada encerraría un complejo dad entre Wiracocha, el Sol y Pachacamac.
calendario en el que el Sol estaría representado en
esta figura de rostro radiante con los dos báculos
que, para Makowski (2001: 87), sería el mes sols-
ticial de la estación húmeda que corresponde al
mes de diciembre. Esta deidad, guardando casi
los mismos rasgos o motivos, se presenta también
con cierta profusión en el arte Wari, en su cerá-
mica y en sus textiles.

Figura 5: Dios de las varas en la Portada del Sol en


Kalasasaya (Makowski 2001: 77)

Figura 4: Divinidad con varas de un manto bordado


Paracas Necrópolis. Museo Nacional de Arqueología
y Antropología e Historia del Perú
(Makowski 2000: 283)

Para los Mochicas es probable que esta


divinidad suprema sea Aiapaec. El ícono se di-
funde también en el ámbito cultural Chimú (Ca- Figura 6: Deidad Solar con rayos en forma de choclos
rrión Cachot 1959), con variantes notables de la (Carrión Cachot 1959: 73)

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En suma, la divinidad suprema se trastoca rrea 1941: 25-50), aunque no se conserva ejem-
en el tiempo pero mantiene su jerarquía. Las va- plar alguno con estas características, el cual se
ras que porta están asociadas a la luz, al sol, al combina con el cetro emplumado, igualmente
rayo, es decir, expresan los atributos de su poder Inca, conocido como sunturpaucar. Del suntur-
de creación y transformación; de su poder fecun- paucar no se conocen vestigios concretos, solo
dante mediante el rayo configurado por la fusión representaciones diversas en la iconografía (Fig.
expresiva de la serpiente y el ave falcónida. La 9). Era un cetro largo, de madera, recubierto de
serpiente simboliza la capacidad de la divinidad menudas plumas de colores y tres de ellas sobre-
como dadora de vida, portadora de agua y luz, y salían en la punta, de tamaño mayor. Estas tres
por ello también símbolo del rayo. Como expre- plumas representarían a Wiracocha y coronan
sión de la fecundación, la vara simboliza también también el morrión o troje que llevan los incas
al árbol sagrado o de la vida expresada en plantas sobre la cabeza. Esta vara lleva, en ocasiones, el
relevantes, especialmente, el maíz. tupayauri en la parte superior, a modo de alabar-
da o hacha, con lo que los Incas, como receptores
de toda la cultura antigua, se convierten por lo
mismo en herederos del poder de los mismos dio-
ses. Si antes los dioses portaban pesadas varas
con motivos zoomórficos o simplemente portaban
la vara y el cuchillo ceremonial tumi, ahora los
Inca tienen ambos en un solo objeto, en el sun-
turpaucar. De una parte, está la vara fecundadora
y símbolo de poder absoluto y, de otra, el cuchillo
sagrado procurador de ofrendas o alimentos para
los mismos dioses. El Inca como ser divinizado o
como principal “asistente” de estos dioses, como
gran rey y sumo sacerdote, era su principal ejecu-
tor para procurar las ofrendas tan requeridas por
estos seres divinos y así mantener el equilibrio en
el mundo.

Figura 7: Dibujo de bastón ceremonial o vara Paracas


(Yacovleff 1933: 157)

Al margen de las representaciones, hay


también evidencias tangibles de estas varas que se
guardan en los museos, las cuales muestran va-
riedad en sus diseños y la continuidad simbólica
del poder (Figs. 7). Sin embargo, por la importan-
cia histórica conviene tratar sobre la vara de po- Figura 8: Inca Manco Capac portando el tupayauri en
der de los incas conocida como yauri o mejor aún la mano derecha (Guamán Poma de Ayala 1980, To-
como tupayauri (Fig. 8) o cetro real, de oro (La- mo I; Larrea 1941)

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Trayectoria de la vara de mando popular y tradicional en el Perú L. C. Ramírez León

de indios en las reducciones, subsiste gran parte


de la organización inca de los ayllus. El modelo
de vara otorgado por los españoles a los alcaldes
indígenas era un simple palo carente de decora-
ción, pero que simbolizaba el poder político de la
corona (Fig. 10). Durante dos siglos el curaca
dominó el cabildo, sin embargo, para Scarlett
O’Phelan (1997: 9) la desarticulación paulatina
del sistema cacical en la segunda mitad del siglo
XVIII permitió más bien que el Cabildo Indígena
se fuese afirmando como vocero oficial ante las
autoridades superiores de gobierno.

Figura 9: Inca con el sunturpaucar, según Fray Martín


de Murúa (1962)

SINCRETISMO EN LA VARA DE MANDO


VIRREINAL

Sumido en el desarrollo de la etnohistoria


Waldemar Espinoza es el primer historiador que
emprende un estudio pionero sobre la Comunidad
o República de Indígenas titulado “El Alcalde Ma- Figura 10: Tocricoc o corregidor de provincias, es
yor Indígena en el Virreinato del Perú” (1960), decir, oficial real o gobernador. (Guamán Poma de
trabajo en el que destaca al cronista Felipe Ayala, 1980, Tomo I: 318)
Guamán Poma de Ayala como el más amplio en
sus informaciones sobre estas autoridades y sus En los gráficos de Guamán Poma Ayala
varas de poder, aunque sin comentar su origen. (1980) se observa que las varas que llevan las
En efecto, luego de una serie de ensayos autoridades son de madera, simples y sin orna-
de la Corona española en el Caribe y México, se mentos. Sin embargo, dada la jerarquía existente
aplica en el Perú la República de Indios con un entre las autoridades, lo más probable es que
sistema de cabildos de indígenas que se consolida hayan portado varas diversas en tamaño y forma,
luego de unas experiencias muy bien documenta- iconografía y decoración, respetando sus jerarqu-
das con el virrey Toledo, quien prácticamente ías. Realmente, ¿dónde y cómo se origina el mo-
inicia el Virreinato del Perú. En dichos cabildos delo de vara que ahora se conoce? Para tratar de

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encontrarlo es menester remitirse a las varas his- Genealogía de los incas con los monarcas espa-
panas y a las de la nobleza inca que se observan ñoles como sucesores de la escuela cusqueña que
en la iconografía de la pintura colonial. La rela- se guarda en el Beaterio de La Virgen de Copaca-
ción entre dominantes y dominados siempre fue bana, Lima (Fig. 12). En la figura de Manco Ca-
permanente, interactiva en el sentido de que se pac, que está de pie, se observa que sostiene con
dio la imposición oficial de un lado y de otro la la mano derecha y por la mitad una pequeña vara
imitación de lo oficial por parte de los domina- o cetro de forma cónica, es decir, con el cabezal
dos, pero con el devenir del tiempo, esta interac- más ancho arriba y puntiagudo en la parte infe-
ción fue adquiriendo una metamorfosis que se rior, como si fuese la antigua barreta de oro que
acomodaba mejor a la idiosincrasia cultural según reseña el mito de fundación de los incas. Las
los estratos sociales nativos, de modo que el mo- imágenes de los otros incas muestran el consabi-
delo de la vara de mando impuesta por las autori- do sunturpaucar o tupacyauri con la borla roja
dades españoles como jueces, corregidores y vi- pero con una terminación en forma de mazorca y
rreyes, se fue combinando con remanentes forma- diversificada en puntas. Lógicamente la sucesión
les de las varas de la nobleza inca. de los reyes españoles en el lienzo muestra otro
En la realidad concreta, el modelo de la tipo de varas.
vara de mando español, inicialmente de tamaño
corto que se sujetaba por el centro, fue impuesto
por las autoridades como jueces, corregidores y
virreyes, el cual se fue combinando con remanen-
tes formales de las varas de la nobleza inca, tal
como aparecen representadas en algunas de las
pinturas coloniales. Una muestra gráfica de mo-
delos de varas del siglo XVII otorgados a los in-
cas, es la que se observa en el grabado de la Por-
tada de la Historia general de los hechos de los
castellanos en las islas y tierra firme del mar
Figura 11: Matrimonio de Don Martín de Loyola con
océano de Antonio de Herrera, 1615 (Fane 1996). Doña Beatriz Ñusta, pintado a fines siglo XVII en el
En el citado grabado figuran los incas que gober- Cusco (Mujica 2002: 208)
naron, portando la mayoría de ellos sus varas o
cetros de poder, las cuales se diferencian sola- En otros lienzos del siglo XVIII que
mente por el remate superior. muestran a incas, se advierte también que los ce-
Tal como ya se ha tratado, una mixtura tros culminan en una forma semejante a la ma-
entre la vara inca tupacyauri y la vara pequeña zorca del maíz, como el Inca sobre el torreón de
española se observa en el lienzo Matrimonio de la colección del Museo Nacional de la Cultura
Don Martín de Loyola con Doña Beatriz Ñusta, Peruana, o en la Ñusta Chanincoricoca en el Cus-
pintado a fines siglo XVII en el Cusco. Con la co, lo cual es muy evidente también en el lienzo
intención de armonizar a la nobleza inca con la que representa a Tupac Amaru I, sito en el Museo
hispana, los jesuitas mandaron representar este Nacional de Arqueología, Antropología e Historia
matrimonio en el que se observa que el capitán del Perú (Fig. 13).
Loyola porta una pequeña vara que sujeta por la La presencia constante del choclo viene en
mitad, en cambio los incas representados en el estos casos a suplantar el símbolo de Wiracocha
lado superior derecho del lienzo como parte de la que se componía de las tres plumas de ave falcó-
ascendencia de la Ñusta Beatriz tienen unos ce- nida y que se colocaban encima de los cetros co-
tros combinados entre el sunturpaucar y el tupa- mo en el sunturpaucar o tupayauri y también en
yauri que culminan en una especie de choclo ra- el llauto de la mascaypacha del Inca, sobre un
diante (Fig. 11 y 11a). tocado cónico de paja denominado por el cronista
De otra parte, en las representaciones de Montesinos como Pirua, una especie de vulva o
los reyes incas en el siglo XVIII, se tiene el lienzo troje en que se encerraba la mazorca del maíz
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Trayectoria de la vara de mando popular y tradicional en el Perú L. C. Ramírez León

(Lafone 1892: 342). Es la abstracción del poder formales locales y de significación religiosa nati-
engendrador de Wiracocha o del Sol sobre la Pa- va, de manera que el nuevo modelo de vara tiene
chamama. un doble origen, es decir, tanto por el lado autóc-
tono como por la imposición del modelo español.

Figura 12: Pormenor del lienzo Genealogía de los


incas con los monarcas españoles como sucesores.
Segunda mitad del siglo XVIII, Cusco. Beaterio de La
Virgen de Copacabana de Lima (Mujica 2002)
Figura 13: Inca Tupac Amaru I. Óleo sobre lienzo.
En suma, las varas incas que se conocen Escuela Cusqueña. Museo Nacional de Arqueología,
en los dibujos de las crónicas de Murúa (1962) y Antropología e Historia del Perú (Majluf 2005: 292)
Guamán Poma de Ayala (1980), sufren leves
transformaciones a partir de entonces. Las sucesi- Precisamente, una de las pocas varas de
vas representaciones de varas otorgadas a los in- alcalde virreinales que se conoce, muestra estas
cas que se observan en grabados y en pinturas, características sincréticas: adornada con motivos
muestran indistintamente la gran estrella solar, naturales encierra significados ligados a la cos-
lanzas, aves, cruces, la borla real. Pero también movisión nativa prehispánica (Fig. 14). Se trata
persisten las representaciones del sunturpaucar de un ejemplar procedente del Alto Perú reprodu-
combinados con el yauri o tupacyauri, pero con cido en la obra de Taullard (1941: 116). Es un
una terminación en forma de mazorca y diversifi- bastón de mando con fuertes semejanzas con la
cada en tres puntas, o también con terminaciones vara popular, tradicional y campesina contem-
en forma de flor de tres pétalos, que no es más poránea, solo que más exornada con plata, pre-
que una estilización del choclo. senta un puño prismático de pirámide trunca in-
Posteriormente, en el siglo XVIII este vertida decorado con hojas y flores, de cuya base
modelo se combinó con materiales y elementos pende un gancho con una cadenilla que sostiene a

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ANTI • Núm. 12 • Diciembre de 2013

su vez un pez articulado, monedas, una figura


antropomorfa de rasgos míticos y con un gran
tocado, una flor radiante repujada y dos enormes
veneras o rocallas; el cuerpo de la vara, por la
textura de líneas verticales y por la tonalidad os-
cura, parece ser de madera de chonta y está deco-
rado y ajustado con anillos llanos de plata con
bordes en relieve con motivos de tipo vegetal; en
la parte inferior, el cuerpo culmina con una deco-
ración globular calada de hojas semejando el glo-
bo terráqueo y regatón puntiagudo que tiene a los
lados un conjunto escultórico floral con dos figu-
rillas antropomorfas. La vara data, por las carac- Figura 14: Pequeño bastón de mando de alcalde con
terísticas del estilo, hacia el primer tercio del si- numerosos amuletos y dijes. Todo de plata. Proceden-
glo XVIII. Por su lujosa decoración debió haber cia Alto Perú, Época colonial. Alto: 52 cm (Taullard
pertenecido a un alcalde mayor o curaca; por su 1941: Fig. 116)
tamaño, pues mide 52 cm, está relacionada a los
cetros españoles que se sujetaban por la mitad, sin
embargo, presenta ya las partes estructurales de la
futura vara popular y tradicional. Se puede seña-
lar que es el prototipo o el eslabón entre la vara
española y los cetros del Perú antiguo, entre los
que se cuenta el yauri inca. En cuanto a su signi-
ficación simbólica cristiana, no se observa la típi-
ca imagen del crucifijo en el puño o coronación,
salvo que esté en el lado opuesto, ni tampoco
cuelga de la referida cadenilla. En cambio, la sig-
nificación relacionada con el mundo andino es
más evidente: hay elementos como el pez suche
que habita el lago Titicaca, elemento ligado al
culto al agua y por ende a Wiracocha como sol de Figura 15: Vara de mando. Alto: 74,6 cm. Madera de
agua (Bouysse-Cassagne 1997: 184), la flor ra- chonta, plata y piedras de colores o esmaltes. Fines
diante que semeja a la deidad solar, las veneras o del XVIII a primera mitad del siglo XIX, Cusco. Co-
conchas como símbolos de la sexualidad femeni- lección Museo Nacional de la Cultura Peruana,
na, el ser antropomorfo que también podría perte- 2.2012.1 (Fotos: Silvana Vargas Machuca)
necer a la divinidad solar especialmente por el
tocado circular que lleva, los motivos vegetales mando perteneciente a la colección del Museo
como representación de la naturaleza o la Pacha- Nacional de la Cultura Peruana (Fig. 15), codifi-
mama y la pareja antropomorfa como representa- cada con el número 2.2012.1. Una vara que es
ción de la dualidad humana. también la conjunción de dos culturas: la nativa y
Por lo visto, queda aquí definida la forma la occidental. La vara en cuestión es de madera de
estructural que tomará la vara de mando campesi- chonta, presenta un modelo muy ligado a la in-
na más adelante, dividida en pomo, empuñadura o fluencia española, pues presenta un tamaño corto
cabezal, el cuerpo con los anillos de plata y el de unos 74.5 cm muy cercano al cetro; está casi
regatón o punta. Modelo de vara que aumentará totalmente forrada de plata, adornada con incrus-
de tamaño y será frecuente a partir de mediados taciones de piedrecillas o esmaltes de colores y
del siglo XIX. termina en una punta de bola retorcida y no en las
Como evidencia de este fenómeno sincré- clásicas puntas de hierro de las varas contem-
tico se conoce también el caso de una vara de poráneas de los varoyoc. El puño o cabezal es un

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Trayectoria de la vara de mando popular y tradicional en el Perú L. C. Ramírez León

prisma hexagonal con remate semiesférico, de- la de la cubierta del pomo, fue también un signo
marcado por filetes en relieve y tiene adosado en simbólico inca conocido como la chakana.
uno de los lados un Cristo crucificado en relieve
que recuerda a la talla medieval, con la cruz con CONSOLIDACIÓN FORMAL Y SIMBÓLI-
rasgos vegetales. A los lados y en el reverso, po- CA DE LA VARA DE MANDO TRADICIO-
see leves incisiones decorativas de líneas zigza- NAL Y POPULAR EN LA REPÚBLICA
gueantes o de roleos de vegetales con volutas y
rombos concatenados en dirección vertical. Sobre En el siglo XX, los estudios etnográficos
la cubierta semiesférica dentro de la forma hexa- no han intensificado el estudio de estas varas
gonal, con el mismo tipo de línea zigzagueante campesinas (Valcárcel 1981). Sin duda, que in-
que recuerda a la hoja de la palma (¿la chonta?), fluenciada por estos estudios la escritora Alfonsi-
se representa en la parte inferior una curva y so- na Barrionuevo elaboró, en 1971, un breve texto
bre ella un trazo quebrado que, al modo conven- titulado: El varayoq equilibrador entre dos mun-
cional, semeja a los rayos del sol; encima van dos dos, donde destaca a las autoridades o alcaldes
líneas curvas dentelladas que se entrecruzan y llamados varayoq de las comunidades campesinas
sobre el medio se levanta una pequeña curva y tradicionales, especialmente de la zona del Cusco,
una cruz latina o cristiana. Es importante destacar centrándose más en la personalidad del varayoq
sobre el cuarto anillo del cuerpo, siguiendo el eje que en las varas propiamente dichas. Sobre la
en el que se encuentra el Cristo Crucificado del aparición de los alcaldes indios o varayoq, Ba-
cabezal o pomo, la incrustación de la representa- rrionuevo expone algunas referencias históricas
ción, en relieve, de la Estrella de David compues- que los remontan a la época colonial y describe
ta de seis puntas o conformada por dos triángulos brevemente las varas de poder. Recientes investi-
equiláteros. Si bien es cierto que la Estrella de gaciones de Beatriz Pérez Galán (2004) son apor-
David simboliza al judaísmo, o también en lo tes valiosos sobre la organización del gobierno de
cabalístico significa la compenetración entre el los varayoq en las comunidades de Pisac, Cusco,
mundo visible y el invisible, en esta oportunidad, denominado localmente como Wachu, en las que
hay que interpretarla en el contexto del mundo se analiza la estructura organizativa, su funcio-
católico virreinal, es decir, la Estrella de David namiento con respecto a la organización del tra-
representa a Jesús, tal como el mismo lo mani- bajo agrícola, de las fiestas religiosas y su inser-
festó: “Yo soy la raíz y el linaje de David, la es- ción en el mundo globalizado y turístico, pero en
trella resplandeciente de la mañana” (Apocalip- las que tampoco hay un estudio formal e ico-
sis 22: 13, 16). En la parte inferior, en el penúlti- nográfico de las varas de mando, aunque sí refe-
mo tramo de la lámina metálica, van ribetes con rencias valiosas sobre los rituales en torno a su
incrustaciones de piedras o esmaltes de colores renovación anual.
similares a los de la empuñadura o pomo. La vara De modo que lo que aquí se trata es hacer
tiene en la parte inferior una cubierta de lámina un estudio formal e iconográfico de estas varas de
incisa que culmina en una semiesfera con una mando. Así, continuando con la trayectoria for-
punta cónica y presenta unas incrustaciones de mal de dicha vara, comprobamos que el modelo
piedras rojas más grandes que las anteriores. actual parece estar consolidado completamente
Si bien es muy evidente la simbología hacia mediados del siglo XIX, tal como lo mues-
cristiana por la presencia del Cristo Crucificado tra una vara procedente de la ciudad de Arequipa
en el pomo de la vara y la Estrella de David sobre (Fig. 16), la cual presenta una empuñadura o ca-
el ribete del cuarto anillo de la vara, los elemen- bezal, seis anillos con decoración, una media luna
tos de la cultura nativa no son ajenos a la signifi- como pendiente, ocho anillos de los cuales cinco
cación de esta vara. La propia madera de chonta son más anchos y decorados y tres solo son de
de la que está hecha denota la impronta inca por refuerzo de la madera y una punta helicoidal de
ser la chonta un elemento simbólico del poder y hierro. El pomo o empuñadura, con las mismas
la sacralidad. La cruz cristiana mayormente de características estructurales que las anteriores
tipo latina, tanto con el Cristo Crucificado como varas, presenta la decoración repujada de una

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ANTI • Núm. 12 • Diciembre de 2013

cruz rodeada de tallos gruesos de vegetales que agrícola, aunada lógicamente a la idea de la plan-
separa la superficie en secciones verticales, cada ta sagrada o árbol de la vida y, a su vez, con una
una de las cuales tiene flores como capullos, que relación intensa con el agua como el líquido vital
estilísticamente recuerdan al gótico. La cruz repo- para ello, por eso la presencia de las jarras como
sa sobre un cuadrado con revoltones en las esqui- contenedores del agua. Es decir, la connotación
nas. La tapa o coronación presenta una flor circu- fálica de la vara es evidente para fecundar a la
lar con pétalos. Pachamama, la cual se completa con la punta de
fierro helicoidal de la vara que, como ya se ha
sostenido anteriormente, es la forma del rayo co-
mo una serpiente ondulante que penetra a la tie-
rra. También la forma helicoidal se observa, en
muchos casos, cuando se derrama el agua a través
del pico de una vasija paccha. Lo que sin duda le
falta a esta vara es la típica cadenilla que, for-
mando rombos, debía envolverla para conectarse
con el regatón de fierro y así, una vez más, con-
notar la idea de paccha o vasija ritual que genera
la corriente de agua para la fecundación de la
tierra.
La presencia de la inscripción en esta vara
es muy importante, primero porque nos reconfir-
ma que ella tiene un único propietario y que no
Figura 16: Vara procedente de Arequipa. Madera, puede ser dada a otra persona aunque le suceda en
plata y fierro. Plata repujada e incisa y punta de fierro.
el cargo y, segundo, la fecha de 1840, aunque el
Dentro hay la siguiente inscripción: “MARZO DE
número cuatro no se muestra con la claridad de-
1840 MAN / NUEL CASA” que alude a su propieta-
rio o alcalde ordinario. Colección privada de Arequipa bida. Con ello se confirma que para mediados del
(Fotos: Martha Barriga) siglo XIX la forma de la vara popular, como aho-
ra se conoce, ya estaba plenamente establecida.
El cuerpo de la vara se inicia con un anillo En adelante, solamente será la continuación de
que presenta un tallo similar al del cabezal, pero este modelo convertido en tradición con muy po-
dispuesto horizontalmente. Seguidamente viene la cas variantes, y tendrá un uso difundido en la
horquilla en forma de medialuna o pendiente, de Sierra Sur y Central, y nula o en menor medida en
ribetes moldurados oblicuos y con nudos. Dentro las regiones norteñas del Perú.
hay la siguiente inscripción: “MARZO DE 1840 Dentro de la continuación del modelo re-
MA / NUEL CASA” que alude a su propietario o señado, destaca, por ejemplo, una de las varas de
alcalde ordinario. El siguiente anillo presenta una mando del Museo Nacional de la Cultura Perua-
jarra de tipo occidental, rodeada por elementos na, codificada con el número: 48/153 (Fig. 17), la
vegetales incisos o flores de seis pétalos con cual tiene 135 cm de alto, 6 cm de diámetro y
hojas. Viene un anillo más delgado, de refuerzo. data de mediados del siglo XX. La vara está con-
Otro anillo fue decorado con, aparentemente, feccionada con madera, probablemente lloque,
unas aves muy abstractas con rasgos vegetales de que ha sido tallada o torneada y pulida, decorada
tendencia vertical. Los anillos delgados presentan con anillos de plata laminada, mayormente incisa,
una fina incisión de cadenetas y de triángulos, en levemente repujada, moldeada y tachonada. El
secuencia alternando con pequeños circulitos. El hierro del yauri es forjado y cubre la punta o re-
penúltimo anillo presenta una decoración muy gatón.
difusa, al parecer de vegetales. Finalmente, la El pomo o cabezal de esta vara es de for-
terminación de hierro de forma helicoidal. ma acampanada, como un vaso kero, y presenta
La exuberante vegetación como decora- decoración incisa dispuesta en dos franjas. En la
ción está en función de la idea de fecundación superior, y más grande, destaca una flor con cua-

72 • Centro de Investigaciones Precolombinas


Trayectoria de la vara de mando popular y tradicional en el Perú L. C. Ramírez León

tro hojas en forma de cruz y, es obvio, que repre- dicional horquilla de la cual penden dos cadeni-
senta a la cruz cristiana. La cubierta del pomo, llas que se juntan con una figurilla singular en
como si fuera la tapa, es circular y tiene inciso un bulto de una campesina que carga a su hijo en una
diseño de estrella, formado por un círculo con manta que lleva en la espalda. Este motivo es
doce triángulos en los bordes, los cuales interca- inusual y constituye un rasgo excepcional en esta
lan flores pequeñas de cuatro pétalos, o cuadrifo- vara. La campesina viste una pollera, sostiene una
lias; a su vez está rodeado por un ribete con circu- olla o bolso. Curiosamente su faz es oscura y tie-
lillos coronados por rayitas a modo de ceja. Al ne el cabello encrespado y con rasgos semejante
interior del círculo un rostro humano con arrugas también el bebé, como si fueran de raza negra.
en la frente y el borde del círculo igualmente ta- Parece ser que forma parte de una adopción ico-
chonado de puntos y rayas curvas que se despla- nográfica que se desarrolla desde fines del siglo
zan oblicuamente en el interior de los triángulos, XVIII y que se consolida en el siglo XX, que con
dando la idea de ser el movimiento de los rayos toda seguridad representa a la Pachamama o Ma-
de luz que emanan. Sin duda, que se trata de la dre Tierra.
representación del Sol con los rasgos de un hom- El cuerpo de la vara se halla dividido, de-
bre adulto, con lo que se está representando al Inti corado y reforzado por doce anillos de plata, al
maduro o Inti Punchao, que corresponde al sols- parecer combinados con altas dosis de cobre, seis
ticio de diciembre y que dura hasta junio. Como anchos con decoración y seis delgados simples
se observa, el pomo es el lugar donde se asientan como refuerzo, además de la cadenilla que se
las máximas divinidades, es decir, se combinan desprende de la parte superior. Los anillos gran-
los símbolos de la cristiandad con los de la reli- des de plata tienen los bordes festoneados acom-
giosidad ancestral andina o inca, pero en la que pañados de miniaturas de segmentos con volutas
prevalecen los contenidos de esta última. en los extremos, hojitas y pequeños círculos, van
claveteados horizontalmente y contienen motivos
de mayor tamaño de flores circulares con bordes
lobulados con dos hojas equidistantes. El cuerpo
culmina con el característico regatón de hierro o
también denominado yauri. Como ya se argu-
mentó en las varas anteriores, estos anillos con
motivos de flores y hojas simbolizan a la natura-
leza o Mamapacha en un estado en que recibe la
fecundación de la máxima divinidad, que en este
caso, para el hombre andino actual está fusionado
entre sus creencias ancestrales y el cristianismo;
de ahí también la presencia de esas formas de
Figura 17: Vara de mando. Primera mitad del siglo volutas que en el arte prehispánico representan a
XX, Cusco. Madera, plata, cobre e hierro, alto: 135 las serpientes bicéfalas, ligadas a la deidad del
cm, diámetro: 6 cm. Colección del Museo Nacional de rayo y los circulitos ligados a la caída del agua o
la Cultura Peruana, 48/153 la nieve, tal como se evidencia profusamente en
(Fotos: Silvana Vargas Machuca) las representaciones de los keros (Flores Ochoa et
al 1998). Justamente, el hierro del regatón puntia-
Un ribete independiente como un anillo gudo cumple esa función procreadora al simboli-
divide el cabezal del cuerpo de la vara. Se obser- zar la penetración en el suelo fértil transfiriendo
va el color marrón oscuro de la madera, que aun- el líquido fecundante de la divinidad suprema,
que no es la chonta trata de imitarla, y los anillos mayormente ejemplarizada por el Sol.
anchos que la decoran y ajustan. En el cuerpo de A pesar de que las formas de la varas son
la vara, del primer anillo decorado con incisión de hispánicas, sin embargo, por disyunción se es-
motivos de flores circulares lobuladas y hojas, se conde una cosmovisión andina; es decir, como
desprenden dos ganchillos que componen la tra- sostiene Stastny (1981: 67) cuando analiza los

Centro de Investigaciones Precolombinas • 73


ANTI • Núm. 12 • Diciembre de 2013

contenidos de los objetos de arte virreinal o popu- Fane, D. (Ed.).


lar, formas de una cultura dominante pueden 1996. Converging Cultures Art & Identity in
ocultar contenidos culturales de la cultura domi- Spanish America. The Brooklyn Museum in As-
nada, así, la vara puede adquirir toda una signifi- sociation with Harry N. Abrams. INC., Publisher.
cación netamente ancestral o nativa que sobrevive New York.
como si fuera los tiempos del Perú antiguo, de
modo que las partes de la vara conforman su sis- Flores Ochoa, J., E. Kuon Arce y R. Samanez
tema de cosmovisión. Es decir, la vara tradicional Argumedo
y popular campesina es producto del mestizaje, 1998. Qeros. Arte inka en vasos ceremoniales.
del sincretismo y la disyunción. Por un lado, Banco de Crédito del Perú. Lima.
muestra a la divinidad cristiana o a su máximo
símbolo como la cruz latina, y de otro, muestra al Guaman Poma de Ayala, F.
Sol, una deidad suprema en el Perú antiguo, aso- 1980 [1615]. El primer nueva crónica y buen
ciado a la religión de los incas, o a la cruz “de gobierno. Siglo XXI Editores. México.
Malta” que simboliza la chakana, relacionada a
Wiracocha. La vara tradicional campesina actual Lafone Quevedo, S. A.
continúa siendo el instrumento simbólico de la 1892. El culto de Tonapa. Los himnos sagrados
fecundación de la Madre Tierra o Mamapacha. de los reyes del Cuzco según el Yamqui – Pacha-
Es un instrumento donde se encarna la cosmovi- cuti. Ensayo mitológico. Revista del Museo de la
sión andina de los tres estamentos del universo: Plata Vol. III: 323-379. La Plata.
cielo (hanan pacha), suelo (kay pacha) y subsue-
lo (uku pacha), pero por su forma cilíndrica o Larrea, J.
circular se constituye en centro y equilibrio del 1941. El Yauri. Insignia incaica. Revista del
cosmos y que el alcalde campesino o varayoq Museo Nacional X, No. 1: 25-50. Lima.
concentra y armoniza mediante sus acciones; por
ende, él es también el símbolo de poder político y Majluf, N.
religioso que posibilita el orden cosmológico. 2005. De la rebelión al museo: genealogías y
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Centro de Investigaciones Precolombinas • 75


ANTI • Núm. 12 • Diciembre de 2013

POBREZA LATINOAMERICANA,
DESAFIO DE LA PRAXIS CRISTIANA.
UNA APROXIMACION DESDE LA TEOLOGIA DE LA
LIBERACION

Romina Núñez Ozán


Universidad Nacional de Río Cuarto, Centro de Investigaciones Precolombinas
rominaozan@yahoo.com.ar

RESUMEN

El presente trabajo aborda la cuestión de la pobreza latinoamericana bajo la mirada de la Teología de


la Liberación que surge en este continente como la expresión latinoamericana del Concilio Vaticano II
en la década del ’60 del siglo XX. La realidad de pobreza, injusticia y opresión que caracteriza a nues-
tros pueblos es el punto de partida para justificar la existencia de la Teología de la Liberación. El pobre
aparece como la clave para comprender el sentido de la liberación y el desafío o misión de la praxis
cristiana. En primera instancia se contextualizará históricamente el surgimiento de dicha teología, para
luego centrar el análisis en la caracterización del método y el objeto que utiliza. Por último, se trabajará
con la idea de pobreza, tratando de identificar las ambigüedades del término, la significación política
de la misma y la abolición y denuncia de la pobreza como desafío de la Iglesia Latinoamericana.
Palabras clave: teología, Latinoamérica, praxis, liberación, pobreza.

ABSTRACT

The present work approaches the question of the Latin-American poverty under the look of the Theol-
ogy of the Liberation that arises in this continent as the Latin-American expression of the Council Vati-
can II in the decade of ' 60 of the 20th century. The reality of poverty, injustice and oppression that
characterizes our peoples is the point of item to justify the existence of the theology of the liberation.
The poor persons appear as the key to understand the sense of the liberation and the challenge or mis-
sion of the practice christens. In first instance it will be historically contextualised the emergence of the
mentioned theology, then we will centre the analysis on the characterization of the method and the ob-
ject that it uses. Finally, we will work with the idea of poverty, trying to identify the ambiguities of the
term, the political significance of the same one and the abolition and denunciation of the poverty as
challenge of the Latin-American Church.
Key words: theology, Latin America, praxis, liberation, poverty.

TEOLOGIA EN VERSION LATINOAME- la situación de pobreza en Latinoamérica. Dirá


RICANA. CONTEXTO DE SURGIMIENTO Dussel (1989): “libera al pobre”, como precepto

A
ético fundamental de la Teología de la Libera-
l cristianismo se lo puede ubicar dentro ción.
de las éticas materiales, como una ética La Teología de la Liberación, busca partir
emotivista, pasionaria, que intenta produ- del compromiso por abolir la situación de injusti-
cir cambios. El movimiento cristiano de la Teo- cia y por construir una sociedad nueva y debe ser
logía de la Liberación lo que intentará cambiar, es verificada por la práctica de este compromiso.
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La Comarca de Achiras como camino patrimonial… Y. Aguilar y L. Alaníz

Este tipo de teología parte de una problemática se dirige a otra persona, o la relación práctica
determinada y quizás se convirtió por una vía entre personas. En términos de Dussel (1989) una
modesta, pero sólida y permanente, en la teología persona es tal, cuando está en relación de praxis,
en perspectiva latinoamericana. una relación “cara a cara” que convierte al otro en
Surgida en la época de la Contrarreforma, prójimo, lo ubica como un fin de la acción y no
la iglesia en América Latina siempre estuvo en como medio.
una actitud de defensa de la fe y su doctrina. Esta La Teología de la Liberación admite pri-
situación se vio acrecentada ante las críticas del mero la praxis y luego la teología, por lo tanto,
liberalismo de finales del siglo XIX y comienzos toda teología supone una praxis que la determina.
del XX y esto la llevó a ubicarse del lado del po- Propone la insistencia en el compromiso cristiano
der político y económico. con el mundo antes que toda elaboración teológi-
En la década del 60 del siglo XX, hay una ca. En primera instancia está el compromiso con
tendencia a la liberación a nivel mundial que la realidad de injusticia y recién en segunda ins-
abarca todos los ámbitos sociales, incluso el de tancia la teología.
las ciencias. En este marco la Iglesia no queda En este contexto dicha teología se vuelca
fuera de la misma. hacia la ortopraxia, es decir la acción o el verda-
El Concilio Vaticano II significó la prime- dero actuar, sin negar en ningún sentido la orto-
ra instancia de la renovación de la Iglesia Católi- doxia, entendida como la reflexión sobre algunas
ca, “... se dirá que el Concilio más que ocuparse cuestiones consideradas verdades.
de verdades divinas se ha ocupado principalmen- El Evangelio de Juan expresa que “y el
te de la Iglesia, de su naturaleza, de su composi- Verbo sé hizo carne y habitó entre nosotros”
ción, de su vocación ecuménica, de su actividad (Juan 1, 14). Es decir, desde la esencia misma del
pastoral y misionera (...) Tal vez nunca como en evangelio se manifiesta la praxis, es la palabra
esta ocasión ha sentido la necesidad de conocer, que se hace acción y penetra en la historia de ca-
de acercarse, de comprender, de penetrar, de da comunidad.
servir a la sociedad que la rodea...” (Scannone En los Hechos de los Apóstoles, libro de
1982: 22). la Biblia referido a la vida de las primeras comu-
En este intento de la Iglesia de “ventilar- nidades cristianas se hace hincapié en que la
se”, de abrir sus puertas, tanto la Conferencia esencia de la vida cristiana es la comunidad, el
Episcopal de Medellín como la de Puebla fueron estar junto a los demás. Es por ello que el sentido
la lectura del Concilio desde la perspectiva lati- de la praxis apostólica se adquiere en el recono-
noamericana. Una idea clara de ambos documen- cimiento del “otro”, con el cual tenemos un de-
tos es el reconocimiento de la solidaridad y el ber ético. La existencia del pobre solo evidencia
compromiso por la realidad de nuestros pueblos. que el sentido de “praxis comunitaria” no está en
“El pueblo de Dios que vive y sufre en estas tie- funcionamiento. Significa entonces que la situa-
rras (...) quiere escrutar en los signos de los ción es un problema ético. La realidad de pobre-
tiempos lo que el Espíritu desea de la Iglesia” za, el pobre, es el punto de partida para justificar
(Med. I, p. 20) y desea “saber escuchar (...) la la existencia de la Teología de la Liberación. Al
voz del mundo” pues “siempre que escuchamos partir de la realidad tal como es vivida por el
al hombre escuchamos a Cristo” (Med. I, p. 47). pueblo, esto es desde la óptica del pobre, se trans-
“Liberación de todo el hombre y de todos los formará en una teología comprometida, por tal
hombres y una auténtica y vigente reforma de motivo se hace necesario la relación de la teolog-
estructuras” (Med. I, p. 58). ía con las ciencias sociales, sobre todo con la his-
toria con toda su carga de conflictos, ambigüeda-
METODO Y OBJETO des, contradicciones, luchas etc. Lo que se quiere
es hacer valer la importancia del comportamiento
El concepto de praxis es fundamental para concreto, del gesto, de la acción, de la praxis en
definir el método que utiliza la Teología de la la vida cristiana. “Se busca equilibrar, e incluso
Liberación. En rigor praxis es el acto humano que rechazar el primado y casi exclusividad de lo
Centro de Investigaciones Precolombinas • 77
ANTI • Núm. 12 • Diciembre de 2013

doctrinal en la vida cristiana” (Gutiérrez 1972: Oseas 12, 8; Amós 2, 6 y a su vez un claro men-
63). saje de compromiso y también de esperanza, es el
pasaje bíblico de las Bienaventuranzas, donde
LA OPCION POR LOS POBRES Jesús anuncia la Buena Nueva a los pobres, Ma-
teo 5 y Lucas 6-20.
La historia de los pobres suele ser desco- El desafió de la Teología de la Liberación
nocida y es necesario partir de la realidad lati- es encontrar respuestas a la situación de América
noamericana y conocer desde adentro el signifi- Latina y a su vez reconstruir el mensaje liberador
cado que el pobre le da a la historia, a su realidad. de Dios adaptándolo a nuestro pueblo, a nuestro
La realidad de pobreza tiene que ver con las con- presente. Gustavo Gutiérrez nos dice: “Porque en
figuraciones sociales y con situaciones de injusti- este continente seguimos viviendo a diario la vio-
cia, donde la riqueza de una minoría se transfor- lación de los Derechos Humanos, el asesinato, la
ma en una burla hacia la miseria de la mayoría. tortura que rechazamos en el holocausto judío de
La Teología de la Liberación, sujeta a las hace cuarenta años, se trata para nosotros de
leyes del empobrecimiento sistemático del conti- encontrar un lenguaje sobre Dios en medio del
nente latinoamericano, se enfrenta con el conflic- hambre de pan de millones de seres humanos, la
to de un interlocutor al que no se le reconocen los humillación de razas consideradas inferiores, la
derechos elementales de la persona. Sitúa su obje- injusticia social hecha sistema (...) No es un
to en la “no persona”, referida esta a aquellas tiempo pasado, es un cruel presente...” (Gutiérrez
personas que no son consideradas como tal en 1988: 72).
una sociedad basada en la desigualdad y el privi- Pero este presente a través del compromi-
legio de una minoría. so que supone hacerse “pobre” con el pobre pue-
La Teología de la Liberación hace una op- de revertirse. Todo cristiano está llamado a com-
ción por los pobres, el compromiso supone amor prometerse con el sufrimiento humano, desde la
hacia el pobre y rechaza la pobreza que va en praxis, la defensa del pobre traerá su liberación.
contra de los derechos humanos y que castiga la “Optar por el oprimido es optar contra el opre-
dignidad del hombre. Si la teología es un lenguaje sor. En nuestros días y en nuestro continente so-
sobre Dios, si este habla a través de su palabra lidarizarse con el pobre significa correr riesgos
¿qué expresará sobre la situación de los pobres? personales, incluso poner en peligro la vida pro-
Su revelación privilegia a los simples y pia. Es lo que ocurre a muchos cristianos y no
despreciados, como destinatarios primeros de su cristianos comprometidos en el proceso revolu-
palabra; entre esos “simples” y “despreciados” se cionario latinoamericano” (Gutiérrez 1972: 65).
encuentran los pobres, afligidos, pecadores, en-
fermos, todo aquel en situación de carencia. DIMENSIONES CONCEPTUALES DE LA
Ser destinatario privilegiado de la Revela- POBREZA
ción no implica una cuestión de méritos, de valo-
res, que Dios evalúa. “...la gratuidad del amor de Pobreza es un término ambiguo, es nece-
Dios ningún mérito humano la condiciona” sario entonces poder determinar los diferentes
(Dussel 1989: 38). fines de su uso, para poder precisar lo que enten-
El sufrimiento humano supone un com- demos por pobreza o en que sentido estamos uti-
promiso por parte del cristiano y un reto al que lizando el vocablo.
intenta responder la Teología de la Liberación. Una primera distinción puede ser la de
Establecer la justicia y el derecho permite liberar pobreza material y pobreza espiritual. La pobre-
al pobre de la situación inhumana en que vive. za material, es aquella referida a la carencia de
La pobreza en la Biblia es un estado que bienes económicos necesarios para llevar una
atenta contra la dignidad humana y va en contra vida digna. Desde este enfoque la pobreza es una
de la voluntad de Dios. En varias partes de la Bi- situación contra la cual hay que luchar, es un
blia se denuncia estas situaciones de desigualdad. hecho inhumano y por tal repudiable. Hay que
Miquéas 3,1-4; Amós 4,1; Jeremías 22,13-17; tener en cuenta además que el concepto de pobre-
78 • Centro de Investigaciones Precolombinas
La Comarca de Achiras como camino patrimonial… Y. Aguilar y L. Alaníz

za material cobra dinamismo en el tiempo, ya que a) Implicancia socioeconómica: pobres son


en la actualidad no tener acceso a ciertos valores aquellos que carecen de bienes materiales, sea
culturales, sociales y políticos forma parte de la en referencia a las necesidades biológicas y
pobreza material. Gustavo Gutiérrez dice al res- culturales fundamentales, sea en referencia a
pecto que: “La pobreza material está pues al ni- lo que es un mínimo aceptable en una socie-
vel de lo infrahumano (…) En concreto ser pobre dad determinada, sea en referencia a otras
quiere decir morir de hambre, ser analfabeto, ser personas o grupos sociales, que son conside-
explotado por otros hombres, no saber que se es rados ricos.
explotado, no saber que se es hombre. Frente a la b) Implicancia dialéctica: se establece una rela-
pobreza material y cultural, colectiva y combati- ción dialéctica de causa y efecto, entre el po-
va tendrá que definirse el sentido de la pobreza bre y el rico. Hay pobres porque hay ricos y
evangélica” (Gutiérrez 1972: 56). hay ricos porque hay pobres. Pobre en este
En los ambientes cristianos se ha idealiza- sentido no es solamente el que carece de algo
do la pobreza material, como un signo de austeri- sino el que es privado, el que es desposeído
dad, simpleza espiritual y desprendimiento de lo de lo que tiene o debería tener. Privado de lo
mundano. Se produce así una contradicción, por que exige la dignidad humana, privado de lo
un lado la pobreza material atenta la dignidad del que es fruto de su trabajo. Es precisamente
hombre y es una situación contra la cual hay que esta relación causa-efecto entre ricos y pobres
luchar, pero por otro lado, la pobreza material es la que es característica específica del concep-
el símbolo visible de la grandeza espiritual. Esta to de pobre en América Latina.
noción de pobreza espiritual entendida como una c) Implicancia política: los pobres, aun en su
actitud interior de desprendimiento frente a los realidad anterior a constituirse en clase en sí y
bienes del mundo, de austeridad, conduce a equí- para sí, son en sí mismos una fuerza política.
vocos a la hora de interpretarla y de actuar ante “Lo que queremos subrayar en nuestro con-
ella. La pobreza, entonces, la entendemos ¿como texto presente es que en algunos casos, sobre
una situación degradante o como un valor a se- todo en América latina, los pobres han empe-
guir? zado a constituirse en sujetos de su propia
La pobreza espiritual está vinculada a al- historia. Ahora bien no se puede ser colecti-
go abstracto, es una actitud de apertura a Dios, es vamente sujetos de la historia sin cobrar cier-
lo opuesto al orgullo, a las actitudes de suficien- to carácter político, independientemente de
cia, es sinónimo de confianza y entrega a Dios. cuales sean los canales por los que pueda
Gutiérrez vincula por un lado a la pobreza discurrir ese caudal popular” (Ellacuría
material como un estado escandaloso, y a la po- 1983: 44).
breza espiritual como una infancia espiritual. Leonardo Boff prefiere usar el concepto
Sostiene que: “El pobre hoy es el oprimido el de política en sentido englobante, en el cual en-
marginado por la sociedad, el proletario que tran los partidos políticos y las organizaciones
lucha por sus más elementales derechos, la clase intermedias, como los sindicatos y la Iglesia con
social explotada y despojada, el país que comba- sus comunidades eclesiales de base.
te por su liberación” (Gutiérrez 1972: 79). Sin entrar en el ámbito de la política parti-
Tener clara la intención que se pone en el dista, pero también sin excluirlo, toda opción por
término pobreza es central, porque alrededor de los pobres trae de suyo una opción de alcance
ella se construyen las preocupaciones principales político. Es aquí donde la Teología de la Libera-
del buen funcionamiento del sistema social y de ción tiene un inevitable peso político que debería
sus integrantes. Sin embargo, muchas veces se no ser interpretada en clave ideológica. Su meta
opera sobre la base de sobreentendidos, como si inmediata apunta a la liberación del pobre del
la conceptualización de la pobreza fuese parte del peso provocado por la opresión injusta. Dirá so-
“sentido común” y, por tanto, fácil de resolver. Se bre el tema Clodovis Boff: “...ha habido en Amé-
propone un concepto de pobreza que abarca las rica Latina un creciente despertar de los pobres
siguientes implicancias: en organizaciones campesinas, indígenas, sindi-
Centro de Investigaciones Precolombinas • 79
ANTI • Núm. 12 • Diciembre de 2013

cales, etc. Los pobres cobran conciencia de su En Medellín se aprobó como línea pasto-
desventaja dentro de una sociedad que se basa en ral “alentar y favorecer todos los esfuerzos del
la desigualdad...” (Boff 1986: 67). pueblo por crear y desarrollar sus propias orga-
d) Implicancia ético-política y ético-personal: la nizaciones de base, por la reivindicación y conso-
realidad de pobreza tiene que ver con las con- lidación de sus derechos y por la búsqueda de
figuraciones sociales y con las situaciones de una verdadera justicia”. Esto dio sustento, entre
injusticia y padecimiento de las personas in- otras corrientes de pensamiento político-social
dividuales. “La pobreza tiene que ver con el nacidas en esta región, a grandes movimientos
bien y el mal, la justicia y la injusticia con la sociales que surgen en Latinoamérica a partir de
realización del hombre y la estructura de la la transformación neoliberal de la década del 80,
sociedad (…) Y es que la pobreza teniendo como el MST en Brasil, y el EZLN en México,
raíces culturales como cualquier otro fenó- entre otros. “…Las comunidades eclesiales de
meno individual o colectivo, es una realidad base vinculadas a la teología de la liberación
histórica, algo ocasionado por factores histó- conformaron el armazón ético y cultural de gran-
ricos que debe ser superado por factores des movimientos latinoamericanos” (Zibechi
históricos en los que tienen parte principal la 2003: 4).
libertad y la capacidad de proyección y crea- La Teología de la Liberación al centrar su
ción de las personas y de los grupos huma- eje en la pobreza hizo grandes aportes conceptua-
nos” (Ellacuría 1983: 45). La presencia del les en lo que se refiere a la interpretación de la
pobre ante nosotros, se presenta como un pro- misma, poniendo en evidencia las ambigüedades
blema ético, reconocer al “otro” con el cual y contradicciones.
tenemos un deber ético. Pocos cambios ha habido en estos años en
la situación de pobreza en América Latina. En
APRECIACIONES FINALES muchos países la opresión política se ha hecho
más refinada y la represión económica cada vez
La Teología de la Liberación nos propuso más violenta. El nacimiento y la permanencia de
no tanto un nuevo tema para reflexionar pero sí la Teología de la Liberación se deben a que sus
significó una nueva manera de hacer teología. causas sociales, políticas y económicas siguen en
“…La teología como una reflexión critica de la pie.
praxis histórica es así una teología liberadora de
la historia de la humanidad” (Gutiérrez 1972:
115). BIBLIOGRAFIA
Queda claro que el punto de partida de es-
ta teología es la realidad de injusticia, pobreza Boff, L.
opresión, desigualdad y explotación característi- 1986. Do lugar do pobre. Vozes. Petrópolis.
cas de los pueblos latinoamericanos, por tal po-
demos decir que es una teología propia, latinoa- Dussel, E.
mericana ya que surge a raíz de la lectura de 1989. La ética comunitaria. Paulinas. Buenos
nuestra historia. Es así que debería considerarse Aires.
parte de la corriente de las ideas latinoamericanas
Dicha teología penetró más que otras co- Ellacuría, I.
rrientes de liberación, como la filosofía de la libe- 1983. Los pobres, lugar teológico en América
ración, porque logró salir hacia fuera de las uni- Latina. Cristiandad. Madrid.
versidades, por la simple razón de que muchas
parroquias, especialmente las situadas en los ba- Gutiérrez, G.
rrios periféricos y zonas campesinas, tomaron los 1972. Teología de la Liberación. Perspectivas.
elementos de esta teología y les dieron gran difu- Sígueme. Salamanca.
sión. Ese es un hecho empírico-sociológico que 1987. Desde el reverso de la historia. En: La fuer-
nadie puede negar. za histórica de los pobres. Sígueme. Salamanca.
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Social de América Latina Nº 14: 2-5. CLACSO.
Buenos Aires.

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ANTI • Núm. 12 • Diciembre de 2013

HOMBRES DEL NAPO:


EXPERIENCIA DE LA CULTURA EN LA
AMAZONÍA PERUANA

Ana María Rocchietti


Centro de Investigaciones Precolombinas
anaau2002@yahoo.com.ar

RESUMEN

Este trabajo analiza la socialización de los hombres y mujeres que viven en los caseríos “nativos” del
río Napo, Departamento Loreto, Amazonía Peruana y los cambios que han tenido lugar, en ella, en los
últimos quince años. Toma como centro del análisis la iniciativa de la comunidad Yagua de Urco Mi-
raño relacionada con la construcción de un museo que honra a su cultura. La obra toma todo su signifi-
cado en el marco de migraciones hacia la ciudad y del acceso a la televisión.
Palabras clave: Urco Miraño, socialización tradicional, Museo Yagua, objetos museables Yagua,
perspectiva trágica de la cultura.

ABSTRACT

This paper examines socialization of men and women living in the “native” villages of the Napo River,
Loreto Department, in Peruvian Amazon and the changes that have taken place there, during last fifteen
years. It has been taken as analysis’ center Yagua community at Urco Miraño about a Museum honor-
ing their culture. It takes full meaning in the context of migration to the city and television access.
Key words: Urco Miraño, traditional socialization, Yagua Museum, Yagua museum objects, tragic
perspective about culture.

INTRODUCCIÓN selva pero en un paisaje social miserable y triste.

E
Eso era Mazán. Después de trámites y espera in-
stuve por vez primera en Urco Miraño en terminable, en un largo bote con motor fuera de
1999. Como esta vez, tuvimos que viajar borda y sin techo, llegamos de noche a Urco Mi-
desde el puerto de Bella Vista, sobre el raño. El jefe -por entonces era Antonio Kawachi-
Nanay, en las afueras de Iquitos, en una lancha nos ubicó en una de las casas sobre tarima de
rápida, hasta Mazán; antes atravesamos una cinta palma pona, nos dio comida y nos dejó acomodar
estrecha de cemento en moto desde el Amazonas las bolsas de dormir. La noche era tremendamen-
hasta el Napo para acortar camino y días de nave- te oscura. Al subir la alta y barrosa barranca sobre
gación. Agarrada de la cintura del motoquero de el río, no pudimos ver nada. Solamente nuestro
entonces, a extrema velocidad, cuidando que no guía-profesor Augusto Cárdenas Greffa conocía
se me cayera la carga de mochila y portafolios, el paraje y dispuso con habilidad dónde colocar
las colinas cubiertas de vegetación y las viviendas los bultos y los cuerpos cansados.
-dispersas y muy pobres- se sucedían como imá- Casi sin dormir por la tensión y por la ex-
genes fantasmáticas de humedad y sopor de me- pectativa, llegó el día cuando una radio comunita-
diodía. Después, apareció el caserío caótico, ria dio los buenos días y los preceptos religiosos
hacinado con arquitecturas que repetían las de la del buen vivir. La luz tenue del sol iluminó una

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Hombres del Napo: experiencia de la cultura en la Amazonía peruana A. Rocchietti

estatua en la que un Yagua idealizado miraba el ofrece una vista mucho menos amedrentadora.
río y tenía a sus espaldas la cancha de futbol, las Las vacunas han hecho su milagro y la gente se
casas y la maloca. ve más gallarda y atareada. La estatua al Yagua
sigue en su lugar pero la maloca es ahora un local
de concreto con baños internos y televisor y en un
rincón de la plaza las nuevas autoridades nativas
han construido una casa-museo y pretenden reci-
bir turistas y cobrar entrada para verlo. La vida de
todos los días necesita soles1, explican.
La televisión proyecta a la comunidad
hacia una realidad que algunos conocen bien por
ir a vender madera, productos de la chacra o del
bosque a Mazán pero para la mayoría de las fami-
lias es un mundo encantado, una experiencia que
atraviesa la fantasía y que expatria las ansiedades
de los jovencitos por partir.
El museo sintetiza, para mí, un tipo de
experiencia trágica de la cultura. Ya la estatua al
Yagua, regalada hace mucho tiempo –no es claro
si fue por el Instituto Lingüístico de Verano o por
alguna otra institución externa- tiene la virtud
trágica de exhibir la solidez histórica de la exis-
tencia de los Yagua mientras, contradictoriamen-
te, ellos ya empiezan a no tenerla en su proceso
paulatino pero persistente de riberización, en un
contexto que se asemeja a una Frontera que se
fue domesticando paulatinamente (Barclay 2002).
Figura 1: La estatua al nativo Yagua En ese sentido, es notable y conmovedor el es-
fuerzo realizado para integrar toda su cultura en
LOS RETORNOS una modesta habitación.

Tornamos cuatro veces en años despare- EL MUSEO HUACAMAYO COLORADO


jos. Más o menos siempre todo era igual. Don
Antonio seguía siendo jefe (curaca) y los yagua El Museo Huacamayo Colorado es un
vivían deprimidos por la malaria, desganados y emprendimiento comunal yagua que ha llegado a
lentos. Los más pobres de los pobres. la existencia por iniciativa docente con lo cual se
Hubo algunas transformaciones, sin em- trata de un Museo Comunal y Pedagógico. Re-
bargo. Casi invisible, la AIDESEP (Asociación quiere aporte municipal para poder desarrollarse.
Interétnica de Desarrollo de la Selva Peruana) Existiendo ya la arquitectura y las colecciones
aportó proyectos y algún subsidio para mejorar la fundadoras sólo hay que darle impulso para que
vida pública del asentamiento. El gobierno perua- los padres de familia yagua puedan obtener de él -
no construyó un puente y cintas de cemento, como es su voluntad- algunos recursos económi-
agregó a la escuela primaria otra secundaria y un cos basados en la atracción turística de su identi-
jardín de infantes, introdujo algunas vacas y ac- dad cultural.
tualmente está tratando de llevar luz eléctrica con El Museo estará dedicado al desarrollo de
poco éxito. Ya no se sube resbalando por la ba- las siguientes actividades:
rranca porque una escalera prolija facilita la tre- 1. Recibirá turistas
pada y algo semejante al urbanismo con bancos
de madera, una plazoleta y canteros con flores 1
El sol es la unidad monetaria peruana.

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2. Realizará talleres de capacitación en la lengua gringos y para conseguir fondos para la comuni-
yagua dad”.
3. Ofrecerá espectáculos costumbristas yagua
4. Reunirá a los niños y adolescentes en la con-
fección de redes, canastos, cerámicas, arte ya-
gua, etc.
El Museo Comunitario Huacamayo Colo-
rado tiene sede en una construcción al estilo tra-
dicional levantada sobre el piso de cemento el
cual resulta de un aprovechamiento anterior. Tie-
ne paredes de madera y techo del mismo material
cubierto con hojas de irapay tejidas. Fue cons-
truido a partir de una convocatoria a la minga o
trabajo colectivo. En su interior, en torno de una
pequeña sala se disponen elementos de la cultura
material yagua y productos de la selva, además de
modelados en arcilla hechos por los alumnos de
la escuela. Una serie de láminas colocadas en
paneles explican las características de las cos-
tumbres yagua. Se puede apreciar el esmero de la
confección de los textos explicativos como la
prolijidad de la disposición de los objetos exhibi-
dos.
Su organización y exhibición estuvo a
cargo del profesor Riquelme Bardales.
El Apu manifiesta la importancia de la
obra y su trascendencia para la identidad y sobre-
vivencia de la comunidad. Esta afirmación da
fundamentos a esta presentación.

Figura 3: Los niños Yagua


Figura 2: Navegación Yagua en la quebrada
de Urco Miraño
Actualmente el Museo contiene los si-
El propósito del Museo es afirmado por el guientes ejes temáticos:
Apu, don Víctor, de la manera siguiente: “El Mu- 1. Naturaleza muerta
seo servirá para los escolares, para atraer a los 2. Instrumentos de música
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Hombres del Napo: experiencia de la cultura en la Amazonía peruana A. Rocchietti

3. Pieles El derecho a la cultura es reconocido en la


4. Vestimenta originaria actualidad como una dimensión de la calidad de
5. Materiales de casa y pesca vida y del bienestar. Dicho reconocimiento com-
6. Materiales de cocina prende la valoración positiva de la propia lengua
7. Artesanías y adornos y tradición. La iniciativa de los comuneros da
8. Materiales de los ritos respuesta a una perspectiva sobre sí mismos y un
medio de ayuda económica.
No deja de ser una experiencia extraña. La
pequeña casa en donde están esos objetos, los
carteles que acompañan su clasificación e identi-
ficación didáctica, la posibilidad de explicar al
visitante esas muestras de cultura y de ambiente
acomodadas con prolijidad y, más que nada, la
desesperada esperanza de que alguien llegue has-
ta ahí para contemplarlo no evocan solamente la
dedicación del maestro para que la obra tuviera
orden y riqueza sino también la encrucijada de la
historia Yagua: depositar en los objetos su propia
existencia social, tipo de acción que nunca los
preocupó.
Esa transferencia es, asimismo, política.
El Apu, el Agente Municipal y la Teniente Go-
bernador (una madre de familia), el triunvirato
que conduce a la comunidad de Urco Miraño,
estima que el museo será fuente de dinero para
desarrollar al caserío de 500 pobladores comune-
ros “nativos”.
Cuando pienso en sus creencias sobre la
naturaleza centradas en los poderes y espíritus,
configuradas en postulados que sostienen que lo
vivo y lo inerte son intercambiables así como en
la confianza en la mediación shamánica con ellos,
creo advertir una cierta fatalidad en la elección de
Figura 4: Imágenes Yagua de Urco Miraño en esos objetos: su revelación como portadores de la
una “minga” del año 2010 indeterminación ontológica fundamental de la
religión yagua activa conduce a un realismo
práctico mediante el cual adquieren la capacidad
de volverse una fuente de otros objetos no menos
mágicos, los soles. Es como si los actuales Yagua
se debatieran entre la experiencia y el océano
tormentoso de la ilusión (Cf. Zupancic 2010),
entre el pathos de las cosas trágicas que su propio
mundo propone para entender la realidad y una
realidad avasallante que viene “desde otro mun-
do” con su propia lógica y objetos de deseo.
La epistemología de los hombres de la
selva amazónica se funda en las madres: la ma-
dre del agua que atrae hacia sí las almas de los
Figura 5: El Museo niños cuando se los lleva en brazos en el peque-

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peque, en las lanchas colectivas, en las barcazas 2; comuneros se sentaban en las banquetas de ma-
la madre de las plantas o plantas-maestras (los dera colocadas contra las paredes (antes en la
alucinógenos, especialmente la ayawaska) con un maloca, hoy en este edificio confortable pero ca-
valor de planta-saber o de planta-poder, origina- luroso) formando un casi círculo, en silencio,
riamente no ligadas a las terapias como ahora - mirando con atención y curiosidad a los visitan-
cuando ha pasado a ser patrimonio de los curan- tes, escuchando las presentaciones y las razones
deros mestizos y urbanos- sino que “enseñan” esbozadas para la visita. Después, una vez termi-
constituyendo un modo de aprendizaje y un sis- nadas, se acercaban amistosos y sonrientes a sa-
tema de pensamiento (Chaumeil 2007). En ese ludar provocando el contacto corporal y, espe-
marco de concepciones, la enfermedad (rango de cialmente, el de la mirada. Ahora, las autoridades
realidad en la que el shamán se vuelve experto) es se suben al estrado colocado por arriba del nivel
una relación social, una consecuencia de vínculos de la Asamblea. Allí mismo se encuentra -entro-
interpersonales dañados, conflictivos, envidiosos, nizado- el aparato de televisión; de ese modo, las
malintencionados en los que el sistema de parien- banquetas se disponen como una platea y la gente
tes posee un rol fundamental. se sienta en ellas con la vista puesta en un pro-
grama de juegos que consisten en participantes
que deben hacer equilibrio sobre una cuerda ten-
dida sobre una pileta con agua en la que fatalmen-
te caen. Están fascinados por los movimientos de
los equilibristas y ríen cada vez que eso pasa. La
presentación de los visitantes ocurre ahora casi de
espaldas a la gente pero no importa. El disfrute de
la TV ocurre durante dos horas diarias racionando
la electricidad provista por un equipo electrógeno.
De ahí la importancia crucial de obtener servicio
eléctrico. Parecía cercano cuando el alcalde de
Mazán les exigió cambiar la disposición distri-
buida de las casas de la ribera por otra lineal para
facilitar la instalación de los cables. Pero la luz no
vino porque es muy caro su transporte a través del
Napo. Algún día será.

PODER, IDEOLOGÍA Y RITUALES

En la visita de 1999, Angelita, me pidió


esmalte para las uñas para detener el daño que
una prima estaba haciendo sobre su salud. Le
dolía terriblemente la cabeza y ella lo atribuía a
esa intención maligna; la otra mujer lo había lo-
Figura 6: Los objetos de la cultura Yagua grado por magia. En el verano del 2010, habían
muerto un niño y una mujer (muertes indepen-
ASAMBLEA DE LA TELEVISIÓN dientes entre sí); don Antonio me informó que se
consideraban muertes por daño. Entonces el
En la ceremonia de recibimiento, ellos shamán debía indicar quién era el culpable en
presidieron desde un estrado de madera la reunión cada caso: lo haría adivinando las causas y el cau-
y las presentaciones. Las cosas han cambiado sador, soñando. Una vez detectado el culpable,
mucho aquí. En todos los viajes anteriores, los las familias adquirían el derecho de matar al da-
ñoso. Me lo decía serio y tranquilo sentado a la
2
Testimonio de Julissa Rondon. mesa, en el local comunal (reemplazo moderno

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Hombres del Napo: experiencia de la cultura en la Amazonía peruana A. Rocchietti

de la maloca, mucho más un salón de baile y es- ne el concepto de medios místicos de producción
parcimiento que un ámbito de asamblea política que salvaguardan la vida en las sociedades sin
como antaño). Nadie me pudo decir cuál fue el Estado. Los rituales constituirían una organiza-
desenlace, en este verano del 2012, porque sobre ción para fomentar la vida, la fertilidad y la pros-
esas cosas informa solamente el shamán y está de peridad por medio de la transferencia de la vida
viaje. desde objetos abundantes en vitalidad a otros ob-
jetos deficientes en ella. El poder político, así, se
vincula a la posesión y monopolio del conoci-
miento y a los términos rituales que dan la vida a
través de la intervención mística de los líderes en
los procesos productivos y reproductivos, siem-
pre a partir de su privilegio económico. Dejando
de lado su discusión sobre qué precede a qué (el
poder político al económico y viceversa), pode-
mos prestar atención a su diferenciación entre
“rituales de producción” y “rituales de reproduc-
ción” y en esa transferencia mística de vida. En
ese contexto, su señalamiento de que el conoci-
miento ritual es necesario para reproducir la
energía vital que da vida tanto al mundo social
Figura 7: Los objetos de la cultura Yagua como al mundo natural. La ideología -la cultura-
crea realidad a partir de sus esfuerzos por repre-
sentarla y establece el tipo de relaciones que se
establecen entre las personas y entre ellas con el
ambiente.

Figura 8: Los objetos de la cultura Yagua

Un trabajo sobre las sociedades amazóni-


cas Santos Granero (1990) ofrece una perspectiva
sobre la sociología amazónica 3. Refiriéndose al Figura 9: Los objetos de la cultura Yagua
poder político del shamán, el cual tendría en rea-
lidad carácter económico, Santos Granero propo- El ambiente resulta, así, una persona: está
formado por madres y padres de animales y plan-
3
El autor contradice a Pierre Clastrés (1974) cuya muy tas. Sin las operaciones y conocimientos rituales
conocida hipótesis sostiene que la política precede a la del shaman, la existencia y la perpetuación de la
economía y crea la relación de explotación; antes que colectividad misma estarían en peligro. Sobre
económica la alienación sería política. En base a ese su-
todo, la diferencia material entre realidad y sueño
puesto, sobre la naturaleza de las sociedades “primitivas”,
afirma que las divisiones de clase devienen de la emergen- no existe.
cia histórica del Estado.

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actual sociedad Yagua: primero, la mediación


mística permite salvaguardar la vida individual y
colectiva en una sociedad sin Estado, sin la cual
ella quedaría a merced de las relaciones sociales
de fuerte matriz de violencia y, segundo, la po-
tencia de los objetos para transferir vida y repro-
ducirla. Uno es de carácter histórico-social (ya
que la ley está sujeta a las perspectivas de unos
sobre otros y a la adivinación que señala y esta-
blece las desconfianzas y las “culpas”) y el otro
enuncia una tesis sobre la manera en que está
constituida la realidad.

Figura 10: Los objetos de la cultura Yagua

Figura 12: Los objetos de la cultura Yagua

Figura 11: Los objetos de la cultura Yagua

La espiritualización de la naturaleza, su
concepción alrededor de la presencia de los ante- Figura 13: Los objetos de la cultura Yagua
pasados y las transformaciones de las cosas y los
peligros sociales que persiguen a las personas, ¿Qué inspiraría a los actuales Yagua su
especialmente la muerte, es un contenido que al colección de objetos culturales? A primera vista
menos en el lenguaje, en el relato y en las expli- un impulso histórico-etnográfico llevado a cabo
caciones pude constatar. Tendríamos, entonces, por maestros transculturados. Pero quizá haya
dos principios muy sugerentes para analizar a la más.

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Hombres del Napo: experiencia de la cultura en la Amazonía peruana A. Rocchietti

de vida y un estilo de desarrollo social: la riberi-


zación. Todos los caseríos de los ríos -y el Napo
es un río activamente transitado porque represen-
ta una vía de conexión con Ecuador y este proce-
so es particularmente notable en él- mestizos y
“nativos” tienen el mismo patrón de asentamien-
to, las mismas funciones estatales radicadas en
ellos (escuela, autoridades ratificadas por el go-
bierno, agente o sala de salud), las mismas fuen-
tes de subsistencia y parecidas creencias. Los
caseríos “nativos” reconocidos tienen propiedad
sobre una proporción de selva, los otros se la to-
man por sí mismos.
Figura 14: Los objetos de la cultura Yagua La riberización ha avanzado enormemente
en los últimos cuarenta años y es fuente de prole-
tarios para trabajar en los fundos. Antes, un
patrón violentaba un grupo de indios para poner-
los a trabajar para él o los convencía de trasladar-
se a su fundo o el Instituto Lingüístico de Verano
los recogía para enseñarles la Biblia y para llevar
a cabo registros de sus lenguas ancestrales. Éste
último es el caso de Urco Miraño. La riberización
se convierte en una suerte de expatriación del
nativo cuyo destino final es afincarse en las casas
acuáticas de Belén.
Es muy probable que la riberización tras-
torne finalmente los principios que he menciona-
do -la mediación mística para no ser muertos por
Figura 15: Los objetos de la cultura Yagua la comunidad y la vaguedad de las fronteras entre
realidad y sueño, entre ambiente y personas- en el
primer caso porque en la ciudad o en las urbani-
zaciones existe la policía y en el segundo porque
la mercantilización del trabajo va disolviendo la
diferencia brumosa en un realismo violento, pro-
pio de las relaciones capitalistas de producción y
reproducción.
Vivir estas circunstancias requiere expe-
rimentar la cultura en el caserío nativo como un
crepúsculo indefinido, enrarecido por la tragedia
de la pérdida de las fuentes tradicionales de la
ideología o el decaimiento de su creencia activa.
Los actores enfrentan la forma dramática en que
desaparece la selva por la tala, se dispersan o
Figura 16: Los objetos de la cultura Yagua mueren sus animales, se expatrian sus parientes y
se contaminan las aguas por exploración aurífera
RIBERIZACIÓN Y REALISMO con mercurio y adquiere, en estas comunidades,
una elaboración superficialmente escolar y turís-
La penetración del capitalismo en todos tica e íntimamente una celebración de objetos
los rincones de la selva ha estandarizado un modo almacenados para vivificar la cultura. Ya no se

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trata de aquellas operaciones y saberes que per- pleno, son existencias potentes, ya sea que ellos
mitían mediante el ritual asegurar la vida y alejar puedan ser utilizados para la magia, ya sea que
los peligros de su colapso sino de una solución a provengan de la cacería o de la pesca (“naturaleza
mitad de camino: la taxonomía de objetos y de muerta”). Éstos últimos, especialmente, expresan
seres en el museo está animada de un afán ilustra- el residuo exánime del pacto entre el cazador y su
tivo y comprobatorio pero también de una pre- presa o de la voluntad de esos seres de dejarse
ocupación cósmica. atrapar y morir.
El surrealismo antiguo -la noción de que
las cosas tienen una realidad diferente a la sensi-
ble- se ha transformado en un realismo expositivo
que aspira a describir una identidad, la yagua,
ahora encarnada en los objetos. Es decir, portado-
res de una vida que, en otro lugar, se escapa.
Estimo que el valor de los estudios
amazónicos radica en su capacidad interpeladora,
revulsiva. La Amazonía no deja de alimentar el
inconsciente político latinoamericano aún cuando
su destino concreto no ocupa el centro de la aten-
ción comunicativa salvo cuando estallan los con-
flictos fronterizos. Siempre retorna como parte de
Figura 17: Los objetos de la cultura Yagua lo reprimido, como fenómeno de “malestar de la
cultura”, como magmática región de nacionalidad
compartida, como un campo de veracidad y pers-
pectiva inagotable pero desoladora (Rocchietti
2007).

HARRY

Su madre lo llama Harry. Ha nacido en el


curso del río Napo, en un caserío ribereño, mesti-
zo. Pero tiene rostro y piel “nativos”. Lo lleva en
sus brazos porque solamente tiene once meses en
febrero del año 2010. Lo mece y le da de mamar
en un estrecho bote de madera que flota en las
aguas de una quebrada del río. Ésta lleva el nom-
Figura 18: Los objetos de la cultura Yagua bre de Urco Miraño. Aguas arriba mora una co-
munidad indígena. La sangre de Harry tiene sus-
El Museo Huacamayo Colorado -iniciati- tancia yagua.
va apoyada generosa y fervientemente por el clan Es pequeño, extremadamente serio -casi
de ese nombre, el más alto de la comunidad de adusto- para su tierna edad. Debe vivir más allá
Urco Miraño- podría tomarse como el adveni- del primer año porque lo acechan la diarrea, la
miento de una era de avance escolar con uso so- fiebre, las infecciones. Precisamente tiene la tier-
cial en el turismo. Pero hay más: casi todos esos na cabecita con picaduras con pus. Su madre dice
objetos de exposición que se encuentran en las que lo cura con una resina de plantas que crecen
mesas poseen afuera, en la montaña4, en la cha- cerca de la casa. Lleva una ropa muy pulcra aún
cra, en las aguas madre, una dueña o dueño espi- cuando ella lava en el río. Un pequeño pantalón
ritual que los anima. No son objetos en sentido blanco -blanquísimo- de algodón y una camiseta.
Ella no lo protege con sombrero. El sol de la ma-
4
La montaña es la selva, el monte grande. ñana, prácticamente ecuatorial, cae sobre esa ca-

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Hombres del Napo: experiencia de la cultura en la Amazonía peruana A. Rocchietti

beza levemente achatada por el occipital. Harry Harry no debe sortear únicamente las en-
no llora, no bebe nada pero después de tres horas fermedades del trópico; también debe eludir la
pronuncia papa (papá dice la madre que dice). desnutrición y las huellas de incapacidad intelec-
tual que ella deja. Aunque nunca será tan tremen-
da como la de la malaria.
Harry tiene tan corta edad que no es posi-
ble aventurar todavía qué otros obstáculos habrá
de superar (y éstos no son pocos). Sin embargo,
mirarlo ayuda a comprender el estilo de vida y de
contexto en el que alguien se hace hombre o mu-
jer en el Napo.

AGRADECIMIENTOS

A Antonio Kawachi. A Augusto Cárdenas


Greffa. A Teodulio Grandez Cárdenas. A la Uni-
versidad Nacional de la Amazonía Peruana.

BIBLIOGRAFIA

Barclay, F.
2002. La frontera domesticada. Historia econó-
mica y social de Loreto, 1850-2000. Pontificia
Universidad Católica del Perú. Lima.

Clastres, P.
1974. La sociedad contra el Estado. Índice. Bar-
Figura 19: El Apu y su Agente de salud celona.

Ella es muy joven. Tan joven que parece Chaumell, J-P.


su hermana mayor. Delgada, casi esquelética, 2007. Las plantas maestro y sus discípulos. Cu-
pero como todas las mujeres del Napo tiene una randerismo en el Amazonas.
extraña flexibilidad corporal que le permite estar www.mercurialis.com
sentada con Harry a cuestas con la facilidad de un
elástico. Debe viajar a Mazán. Tendrá que hacer Rocchietti, A. M.
alguna averiguación o trámite porque lleva una 2007. El último hombre. Universidad Nacional de
carpeta de plástico naranja con la que a veces tapa la Amazonía Peruana. Iquitos.
a Harry para defenderlo del sol. Ni ella ni Harry
se quejan del largo y pesado viaje. Harry será Santos Granero, F.
hombre de río. Yagua. No escapará a ese destino 1990. Poder, ideología y rituales de producción
ni siquiera con su extraño nombre de gringo. en las sociedades indígenas amazónicas. Amazon-
Harry se socializará en el Napo. Se hará ía Peruana Tomo X, N° 19: 27-61.
hombre en esa soledad acuática. Si vive, quizá
emigre algún día a la ciudad. Aunque no lo sepa Zupancic, A.
esta temprana convivencia con la urbanización 2010. Ética de lo real. Kant, Lacan. Prometeo.
ciertamente caótica y mercantil de Mazán se infil- Buenos Aires.
trará en su espíritu y como otros, quizá, se mar-
che.

Centro de Investigaciones Precolombinas • 91


ANTI • Núm. 12 • Diciembre de 2013

INFORMACIÓN ETNOGRÁFICA SOBRE EL CULTIVO DE


MAÍZ EN EL DESIERTO DEL SECTOR MEDIO DEL
VALLE DE CHICAMA, PERÚ, DURANTE EVENTOS ENOS
(EL NIÑO, LA OSCILACIÓN DEL SUR)

María Andrea Runcio


Centro de Investigaciones Precolombinas
andrearuncio@hotmail.com

César A. Gálvez Mora


Ministerio de Cultura (Dirección Regional de Cultura-La Libertad) (Perú), Centro de Investigaciones
Precolombinas (Argentina) e Instituto de Estudios Andinos (Berkeley, EE. UU.)
cgmsepam@yahoo.es

RESUMEN

El trabajo describe una experiencia contemporánea de cultivo de maíz durante la ocupación del área
quebradeña en el sector medio del valle de Chicama, gracias a la disponibilidad de fuentes de agua y
recursos locales de flora y fauna, como consecuencia de los cambios climáticos y ambientales genera-
dos por El Niño, la Oscilación del Sur (ENOS). Además, se menciona el cultivo de otras especies, así
como varias actividades de subsistencia y la estrategia de ocupación del espacio, comparándolas con el
dato arqueológico.
Palabras clave: El Niño, la Oscilación del Sur, área quebradeña, fuentes de agua, agricultura, maíz.

ABSTRACT

A contemporary experience of maize cultivation in the middle Chicama Valley is described, focusing
on the availability of water sources and local faunal and floral remains due to climatic and environmen-
tal changes caused by El Niño, Southern Oscillation (ENSO). Moreover, the cultivation of other plants,
the developing of other subsistence activities and the strategy for human settlement are mentioned.
Some comparisons with archaeological data are done.
Key words: El Niño, Southern Oscillation, quebradas area, water sources, agriculture, maize.

INTRODUCCIÓN La crisis, relacionada a condiciones adver-

E
sas para la subsistencia de los grupos humanos
l Niño, la Oscilación del Sur (ENOS) se asentados en el valle cultivado, impacta negati-
caracteriza por -entre otras anomalías cli- vamente en la actividad agrícola debido a la des-
máticas- la anormal aparición de agua ca- trucción parcial de la infraestructura de riego y
liente a lo largo de la costa nor-peruana y por los campos de cultivo. En el océano, ocurre la
intensas precipitaciones pluviales tierra adentro desaparición de especies de aguas frías, que son
en el verano (Fig. 1) (Ortlieb y Macharé 1989), lo reemplazadas por otras propias de la provincia
cual ha venido generando situaciones de crisis en Panameña (Paredes et al 2004; Gárate y Pacheco
las sociedades del pasado y actuales, incluyendo 2004). Y como consecuencia de los episodios
las del valle de Chicama. anormales de grandes precipitaciones pluviales en

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Información etnográfica sobre el cultivo del maíz… M. A. Runcio y C. Gálvez Mora

Figura 1: Episodio de lluvias intensas en el área desértica (ENOS 1997-1998)

el verano, ocurre el crecimiento inusual de vege- En esta perspectiva, el propósito de este


tación en la costa (Bonavia 1991: 29-30; Erd- artículo es presentar y discutir la información
mann et al 2008). etnográfica recopilada por los autores en el valle
Sin embargo, esta crisis no es total, debido de Chicama en relación al cultivo del maíz a pos-
a que mediante la experiencia adquirida por las teriori del evento pluvial asociado a ENOS y pre-
sociedades en respuesta a ese evento catastrófico sentar antecedentes arqueológicos.
a través del tiempo, se planificaron y desarrolla-
ron estrategias de contingencia. Una de éstas es el EL ÁREA DE INTERÉS
desarrollo de la agricultura en el desierto, en es-
pecial en el área quebradeña. En esta área acon- El ámbito del trabajo son las nacientes de
tecía un cambio importante en el paisaje a partir las quebradas Santa María, Cuculicote, de la Ca-
de la ocurrencia de precipitaciones pluviales in- motera y San Nicolás (margen derecha del valle
tensas, continuando con el incremento inusual del de Chicama), así como el río Quirripano (margen
acuífero subterráneo, lo cual traía como resultado izquierda) (Fig. 3), donde se ha identificado las
un mayor volumen hídrico en los manantiales zonas de vida desierto perárido-Premontano Tro-
existentes, el surgimiento de nuevas fuentes de pical (dp-PT)1 y matorral desértico-Premontano
agua y el flujo de agua corriente por las quebra- Tropical (md-PT)2 (ONERN 1976).
das más importantes. Paralelamente, el notable
incremento de la flora favorecía una mayor cober- 1
Dd-PT tiene una temperatura anual que varía de 23,4ºC
tura vegetal que rebasaba la extensión de su dis- (máxima) a 20,8ºC (mínima); el promedio de precipitación
tribución en años normales, aparejada a la prolife- total por año es de 104,2 mm (máximo) a 73,5 mm (míni-
ración de la fauna local (Fig. 2). mo) El relieve varía entre suave plano, colinado y muy
accidentado; el molde edáfico es muy heterogéneo, y pre-
senta suelos relativamente profundos, de texturas variadas

Centro de Investigaciones Precolombinas • 93


ANTI • Núm. 12 • Diciembre de 2013

En dd-PT se encuentran las quebradas de


la Camotera, de La Calera, Cuculicote, Santa
María (sector medio e inferior) y el Río Quirripa-
no (sector inferior). En md-PT se ubica el sector
alto (nacientes) de la Quebrada Santa María y el
sector medio del Río Quirripano.
Una aspecto importante es la presencia de
manantiales en varias quebradas del área de estu-
dio (Fig. 4), las cuales al ocurrir ENOS adquieren
una importancia excepcional para la subsistencia
humana, en la medida que esta oferta hídrica sub-
terránea -que proviene del aporte de la cuenca
húmeda del río Chicama- es el soporte de la agri-
cultura y de varias actividades de subsistencia.

OCUPACIÓN HUMANA ASOCIADA A


FUENTES DE AGUA Y AGRICULTURA
OPORTUNISTA

Durante la ocupación más temprana del


área (Paijanense, ca. 13.000 a.P.) las nacientes de
quebradas y, en particular, el entorno de los ma-
nantiales ofrecieron condiciones importantes para
la habitación y el temprano sedentarismo (Brice-
ño 1994, 1995; Gálvez 1999), así como para el
Figura 2: Desierto florecido y flujo de agua en la cultivo de cucurbitáceas (Rossen 2011: 180; Di-
Quebrada Santa María llehay 2011: 17). La secuencia ocupacional de
tales espacios refleja una recurrencia en la elec-
que acumulan calcio y yeso, así como muy arcillosos y ción de las superficies habitables en situaciones
profundos, sueltos arenosos; además, suelos de morfología atípicas (ENOS), cuando hubo condiciones ex-
netamente estratificada, que tienen origen aluviónico y cepcionales para el desarrollo de diversas activi-
texturas variadas, mientras que los suelos de las vertientes dades productivas (Chauchat et al 1998; Gálvez y
occidentales andinas son rocosos o peñascosos y muy so-
meros. Finalmente, cuando cuentan con irrigación estos Briceño 2001; Gálvez 2004, 2011; Gálvez y Run-
suelos tienen alto valor agrícola. La flora característica de cio 2010) durante el lapso en que el sistema del
esta zona incluye, entre otros, manchales de “algarrobo” Canal de Ascope (margen derecha) y el Canal
(Prosopis pallida), “bichayo” (Capparis ovalifolia), “sapo- Intervalles (Kosok 1965; Watson 1979; Larco
te” (Capparis angulata) y “gigantón” (Cereus macrostibas) 2001; Gálvez 2009) se encontraban inoperativo
(ONERN 1976: 45-46).
2
md-PT Presenta una temperatura media anual de 25,5ºC por acción de las riadas.
(máxima) a 22,3ºC (mínima); el promedio de precipitación En esta área desértica, se dan dos estrate-
total por año es de 242,1 mm (máximo) a 100,9 mm (míni- gias complementarias en la tecnología del abrigo:
mo) El relieve varía entre ondulado a quebrado con algunas construcciones elaboradas con materiales orgáni-
áreas de pendiente; el escenario edáfico es muy similar a las cos (perecederos) y con materiales mixtos (piedra
zonas de vida monte espinoso-Tropical y matorral desérti-
co-Tropical. El uso actual de esta zona de vida se relaciona
y materiales orgánicos) (Gálvez y Runcio 2010;
al pastoreo, aprovechando los pastos estacionales que pros- Gálvez 2011). Parte de las aldeas se asocian a
peran durante las lluvias del verano. Cuando existe irriga- espacios de función ceremonial (montañas, cami-
ción, es posible realizar agricultura de pequeña escala con nos, geoglifos y petroglifos) (Chauchat et al
carácter de subsistencia. La flora típica de esta zona es 1998; Gálvez 2011) conforme también sucede en
similar a la mencionada para dd-PT, a lo cual se suma una
vegetación herbácea rala (gramíneas pequeñas y de corto
otros escenarios, como la Quebrada Alto de Gui-
período vegetativo) (ONERN 1976: 53-54). tarras y su entorno (valle de Moche) (Runcio y

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Información etnográfica sobre el cultivo del maíz… M. A. Runcio y C. Gálvez Mora

Figura 3: Mapa del área de estudio: Quebrada Santa María (1), Quebrada San Nicolás (2), Quebrada de
la Camotera (3), Quebrada de la Calera (4), Quebrada Cuculicote (5) Río Quirripano (6)

Gálvez 2006). Además, existen aldeas -como el profundidad) fue una consecuencia del ascenso
sitio Quebrada San Nicolás- que incluyen estruc- del nivel del acuífero subterráneo debido a EN-
turas de mampostería de piedra, que se asocian a OS. Estas condiciones propiciaron que dos agri-
las construcciones antes indicadas y a evidencias cultores se asentaran al sur del manantial, donde
rupestres, hecho que les da un particular signifi- ocuparon una pequeña vivienda de caña brava
cado y diferenciación, por cuanto son asentamien- (Gynerium sagittatum) e inea (Typha angustifo-
tos más formales que ocupan posiciones estraté- lia). Ellos habían rehabilitado un estrecho canal
gicas en relación a las rutas de intercambio y ac- antiguo apoyado en la ladera de una colina del
ceso a las fuentes de agua, así como a espacios de borde derecho de la quebrada, con la finalidad de
evidente función ceremonial. conducir el agua del manantial hasta una chacra.
El primer registro de una fuente de agua Y aunque al momento de nuestra visita no hubo
en el área desértica del valle de Chicama fue rea- cultivos en pie, en cambio verificamos que el
lizado en las nacientes de la Quebrada Cuculicote manantial era aprovechado para el cultivo de la
y cerca del sitio PV23-64 entre 1984 y 1985 inea y para la piscicultura.
(Figs. 4 y 5), es decir, a posteriori de ENOS de El segundo registro tuvo lugar en la Que-
1982/83 (Gálvez 1992: 32, 39). El incremento brada Santa María, y correspondió a un conjunto
excepcional de su volumen hídrico (1.00 m de de manantiales ubicados en pequeñas quebradas

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ANTI • Núm. 12 • Diciembre de 2013

Figura 4: Mapa con ubicación de manantiales en el desierto del sector medio del valle de Chicama,
margen derecha

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Información etnográfica sobre el cultivo del maíz… M. A. Runcio y C. Gálvez Mora

tributarias de ésta (Fig. 4). En tales condiciones Después de ENOS de 1997/98, se docu-
un grupo de ascopanos3, que ocupaba una vivien- mentó evidencias de ocupación temporal moderna
da cerca del manantial ubicado en las inmedia- (estructuras habitacionales construidas con made-
ciones de los sitios PV23-150 y PV23-152, utili- ra y arbustos locales) en las quebradas de San
zaba los manantiales y su entorno para cultivo y Nicolás y Santa María en diciembre de 1998. La
pastoreo (Briceño 1995: 145, 146). No existe du- presencia humana estuvo asociada a cultivos de
da que este es el manantial de cuya importancia menor escala; así, en la Quebrada San Nicolás
hemos sido informados por uno de estos agricul- hubo lenteja (Dolichos lablab), papaya (Carica
tores en noviembre de 2011. papaya) y tomate silvestre (Lycopersicum pimpi-
nellifolium).

Figura 6: Manantial en el sector noreste de la


Quebrada de la Camotera

Posteriormente, en una visita al río Qui-


rripano, un afluente del río Chicama, se com-
probó la presencia de agua corriente y abundante
vegetación nativa (Fig. 7), la existencia de una
choza elaborada con materiales mixtos que estaba
ocupada por agricultores temporales, así como
evidencias de actividad agrícola en los bordes de
ese río, en enero de 1999 (vide Gálvez y Briceño
2001).
Figura 5: Manantial en las nacientes de la Que- Según el dato etnográfico documentado
brada Cuculicote hasta el presente, a posteriori del evento pluvial
asociado a ENOS hay agua disponible entre 4 a 8
Además, se reportaron otros manantiales: años -según los casos- en el desierto del valle de
uno en la Quebrada San Nicolás -tributaria de la Chicama. Este hecho hace posible que los grupos
Quebrada Santa María- que fue utilizado para humanos, que se desplazan desde el valle cultiva-
faenas agrícolas modernas y otro en la Quebrada do a las tierras altas del área quebradeña, desarro-
de la Camotera (Figs. 4 y 6), el cual había sido llen una agricultura oportunista en especial en las
desecado por un inadecuado manejo, subsistiendo nacientes de las quebradas más importantes -
plantas de inea (Typha angustifolia) (Briceño como Santa María y Cuculicote- y las tributarias -
1995: 146). como San Nicolás-, entre otras. Al parecer, este
mismo escenario se daba en otros ríos temporales,
como el río Santanero (tributario del valle de
3
Lugareños de la ciudad de Ascope, capital de la provincia Chicama), donde el evento ENOS de 1982-1983
del mismo nombre en el valle de Chicama.

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ANTI • Núm. 12 • Diciembre de 2013

hizo que condujera agua incluso hasta el mes de adaptables a las condiciones climáticas del desier-
setiembre de 1983 (Briceño 1994: 6). to florecido.
En la actualidad los agricultores pueden
cultivar de manera eficiente hasta cinco hectáreas,
con un rendimiento de varias cosechas al año que
incluyen por lo menos dos cosechas de maíz. Este
dato es relevante cuando se analiza el radio de
acción y el rendimiento ejercido desde estructuras
habitacionales actuales similares en morfología y
ubicación a las prehispánicas, en un escenario
generado por ENOS. Además, el comportamiento
de los agricultores oportunistas demuestra que
una vez crecidos los sembríos no es necesaria una
permanencia ininterrumpida en el desierto. Más
bien, el flujo del movimiento de los agricultores
del desierto al valle cultivado y viceversa permite
-como en los tiempos antiguos- la reconstrucción
de la infraestructura dañada y el inicio de cultivos
regulares cuando pasa la crisis. La producción de
estos cultivos complementa las cosechas del área
quebradeña y permite disponer de excedentes
para compensar la crisis (Gálvez y Runcio 2010;
Gálvez 2011).
Como lo indicaremos, el dato etnográfico
que hemos registrado demuestra que el rendi-
miento del maíz no difiere de la producción en el
valle cultivado. Incluso en algunos casos la cose-
cha es mayor, y no es necesario utilizar abono e
insecticidas por lo cual el producto tiene mejor
calidad y es más saludable para el consumo
humano. Nos referiremos a tres áreas donde fue
Figura 7: Flujo de agua corriente en el río Quirri- posible documentar el cultivo de maíz.
pano
a. Quebrada Santa María
CULTIVO DE MAÍZ La información más detallada registrada
hasta el momento corresponde a esta área (Figs. 3
Existen datos etnográficos significativos y 4), y fue obtenida en una entrevista realizada
acerca del cultivo del maíz en el área quebradeña por nosotros al Sr. Julio Flores Vigo, de 61 años
en escenario de ENOS, los cuales han sido reco- de edad, natural de Ascope y residente del Barrio
pilados por otros investigadores y nosotros en el Portada de la Sierra, el 13 de noviembre de 2011.
valle de Chicama. Como hemos explicado, la Esta información la contrastaremos con la dispo-
agricultura oportunista depende del recurso hídri- nible para el Río Quirripano (margen izquierda
co de los manantiales (Fig. 5) y del agua corriente del valle de Chicama).
disponible de modo eventual en las quebradas
(Fig. 8). En casos como las quebradas Santa Mar- El recurso hídrico: Nuestro informante refiere
ía y Cuculicote el agua de los manantiales fue que en 1984, después de las lluvias generadas de
conducida mediante canales hasta los campos ENOS 1982-1983, aprovechó el agua de un pu-
agrícolas. Sin duda, el maíz es uno de los cultivos quio (“manantial Los Limos”) ubicado en las na-
más usuales, que generalmente se asocia a otros cientes de la Quebrada Santa María, durante 8

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Información etnográfica sobre el cultivo del maíz… M. A. Runcio y C. Gálvez Mora

Figura 8: Riachuelo en las nacientes de la Quebrada Cuculicote

años ininterrumpidos. El agua de este manantial da con el dato de nuestro informante en cuanto a
era apta para el consumo y tenía carácter perma- la menor disponibilidad de agua en ENOS de
nente. Antes del evento climático indicado él iba 1997-1998. Además, encontramos viviendas pre-
a ese lugar para cazar, y cuando verificó la pre- carias armadas con materiales perecederos.
sencia del recurso hídrico empezó a utilizarlo Cabe indicar que en el caso del Río Qui-
para sembrar. rripano (margen izquierda del valle de Chicama)
Un hecho importante es la mención acerca los agricultores oportunistas aprovecharon el área
del insuficiente volumen hídrico para sembrar en desértica colindante al cauce del río a posteriori
la quebrada en ENOS de 1998, a diferencia del de las lluvias de ENOS 1997-98, aprovechando el
evento climático de 1982-1983. De lo cual se riachuelo temporal que descendía de sureste a
concluye que no todos los eventos ENOS ofrecen noroeste para tributar al río Chicama (Fig. 7)
condiciones óptimas para la agricultura, sin em- (Gálvez y Briceño 2001).
bargo, esta actividad puede realizarse aún en estas
condiciones. Infraestructura de riego: Debido a la distancia
Este hecho fue verificado en una visita existente entre la fuente de agua y el área apta
(con participación de uno de los autores) realiza- para el cultivo, Flores construyó una acequia de
da en diciembre de 1998 a esta quebrada donde 330 m de longitud, la cual inicialmente excavó a
fueron halladas pequeñas parcelas de maíz (Zea pico ayudado por dos personas y al cabo de tres
mays), camote (Ipomoea batatas), zapallo (Cu- años la revistió con cemento, lo cual permitió que
curbita spp.), papaya (Carica papaya) y mara- pudiera regar cuando era necesario y sin pérdida
cuyá (Passiflora edulis) (Fig. 9), lo cual concuer- del líquido por filtración, a diferencia del valle

Centro de Investigaciones Precolombinas • 99


ANTI • Núm. 12 • Diciembre de 2013

Figura 9: Campo de cultivo en riego cercano al manantial más importante de la Quebrada Santa María
(ENOS 1997-1998)

donde el riego es programado por turnos para Estrategia del cultivo: Durante el lapso que tra-
todos los agricultores. bajó Flores en las nacientes de la quebrada, cul-
El canal captaba agua del manantial y la tivó maíz (Zea mays), yuca (Manihot esculenta),
conducía hasta un reservorio que él había cons- camote (Ipomoea batatas), fréjol (Phaseolus vul-
truido con la finalidad de disponer del recurso garis), repollo (Brassica oleracea), tomate (Sola-
hídrico (Fig. 10). Y esta técnica para almacenar num lycopersicum), zapallo (Cucurbita spp.), ají
agua es semejante a la definida como “cocha” (Capsicum spp.), pepino (Solanum muricatum) y
(Sabogal 1975: 272), constituyendo un requisito soya (Glycine max), en la chacra de 3 hás. (Fig.
imprescindible debido a que además de remojar el 10). En cada hectárea se combinaban los cultivos
grano de maíz previamente a la siembra, se nece- y practicaba la rotación de los mismos: por ejem-
sita “…realizar el surqueo y primer riego sobre plo, luego de cosechar maíz podía cultivar yuca
terreno blando, por el riego previo a la labranza. en ese mismo espacio.
En consecuencia las operaciones agrícolas res- Es importante destacar que, en el caso del
pectivas deben efectuarse oportunamente, para lo maíz, él lo barbechaba y no tuvo la necesidad de
cual es necesario disponer de agua de riego” emplear abono ni insecticidas porque la tierra estaba
(Sabogal 1975: 275); asimismo, tradicionalmente descansada y en ese sector no había plagas que
el maíz exige un segundo riego a los 40 días de afectaran la cosecha. Los agricultores oportunistas -
sembrado (Sabogal 1975: 271). ya mencionados- de tierras colindantes al Río Qui-
rripano, informaron también que para el cultivo de
Preparación de la chacra: La habilitación del maíz no necesitaron utilizar abono e insecticida.
campo de cultivo fue realizada a mano por nues-
tro informante, con el auxilio de un asno. El área Cosecha: Nuestro informante pudo obtener dos
preparada tuvo una extensión de 3 hectáreas. cosechas (cada una después de cuatro meses) al

100 • Centro de Investigaciones Precolombinas


Información etnográfica sobre el cultivo del maíz… M. A. Runcio y C. Gálvez Mora

Con fines comparativos, mencionaremos


que en el caso del Río Quirripano, en enero de
1999 agricultores locales informaron que el año
1998 el rendimiento de maíz fue de aproximada-
mente 4500 kg por hectárea, en comparación con
la producción de 6000 kg por hectárea en las cha-
cras cultivadas del valle colindante en condicio-
nes climáticas normales, lo cual confirma la im-
portancia que tuvieron los suelos no cultivados
antes de ENOS así como la ausencia de plagas
que afectaran los campos, conforme también su-
cedió en la Quebrada Santa María (Gálvez y Bri-
ceño 2001).

Actividades complementarias: Para facilitar su


permanencia en la quebrada nuestro informante
construyó una vivienda de adobe junto al campo
de cultivo, y criaba vacas y asnos en un potrero,
aves de corral (pavos, patos y pollos) en la chacra
y truchas en el reservorio. También participaba en
la caza de venados de cola blanca (Odocoileus
virginianus) que aparecían frecuentemente y pa-
lomas de campo (Zenaida asiatica).
En cuanto al potencial de esta área para el
pastoreo, el informante refirió que su padre le
había comentado que en ese ámbito había una
Figura 10: Croquis de la infraestructura de riego y criadora de cabras hacia 1925, año en que aconte-
campos de cultivo utilizado por el Sr. Julio Flores ció un evento ENOS catastrófico, donde pudo
Vigo (dibujo elaborado con participación del in- contar hasta 300 cabezas de ganado caprino.
formante)
b. Otras áreas
año, a razón de 5000 kg de maíz por cada media A partir del ENOS de 1982-1983, las te-
hectárea en cada cosecha. Por el contrario, en un rrazas aluviales del Cuaternario localizadas en las
año normal obtenía 5000 kg por hectárea en su desembocaduras de las quebradas de La Camote-
chacra del valle cultivado. En la quebrada a veces ra, de La Calera y Cuculicote fueron transforma-
una cosecha rendía 100 kg más que lo usual o a das en campos agrícolas por agricultores de As-
veces 100 kg menos, dependiendo de la variedad cope. Desde esa época, y debido al acondiciona-
de maíz. De acuerdo a Flores, este rendimiento miento de una infraestructura de riego superficial
se debía a que en la quebrada había mejor tierra. que depende del antiguo Canal de Ascope, se
El maíz era previamente desgranado (la tu- inició un proceso de ampliación del área cultivada
za la usaba para cocinar) antes del transporte del lo cual ha generado una extraordinaria modifica-
producto hasta su vivienda de Ascope, para lo cual ción del paisaje, si se tiene en cuenta que antes
utilizaba cuatro acémilas. El trayecto hacia Ascope del mencionado evento climático en este sector
duraba 4 horas y en un día podía hacer dos viajes, sólo había vegetación arbustiva propia tierras
a lo largo de una semana que duraba el traslado de áridas, y ahora se cultiva preferentemente maíz,
cada cosecha. Una parte del maíz era destinado al aunque también algodón. Este cambio del paisaje
consumo familiar y la otra para vender. Los demás iniciado con la práctica de la agricultura oportu-
cultivos tenían una finalidad similar. nista, ha propiciado que esta área que se venga

Centro de Investigaciones Precolombinas • 101


ANTI • Núm. 12 • Diciembre de 2013

integrando a la planicie colindante al valle culti- campos de cultivo habilitados en la superficie de


vado. las terrazas aluviales del Cuaternario se hace ne-
En general, la información que correspon- cesaria la construcción de una elemental infraes-
de al desierto del valle de Chicama tiene notables tructura de riego. Además, un aspecto fundamen-
coincidencia con los datos brindados por Daniel tal es el hecho que los suelos utilizados tienen
Oloya Oliva en una entrevista que realizamos en características edáficas y nutrientes que garanti-
2006 sobre los cambios ocurridos en el escenario zan un buen rendimiento de los cultivos de maíz y
desértico de la Quebrada y Cerro Alto de Guita- otros sin necesidad de abono, ofreciendo el eco-
rras y del Río Las Salinas, en el valle de Moche, sistema en el cual se insertan las chacras condi-
durante ENOS de 1997/98 (Runcio y Gálvez ciones de salubridad suficientes como para anular
2006; Gálvez y Runcio 2009). la presencia de plagas, a diferencia del valle cul-
Oloya hizo una importante referencia a las tivado.
fuentes de agua (puquios) que aparecieron en ese Un aspecto interesante es la movilidad de
entonces, e informó que el cauce de la quebrada los ocupantes temporales del área quebradeña,
presentaba agua corriente en todo su trayecto y - porque cuando las siembras están encaminadas
coincidiendo con los datos para el valle de Chi- pueden trasladarse al valle cultivado y viceversa.
cama- estas condiciones anormales se mantuvie- Es posible que en la época prehispánica, esta mo-
ron entre 3 a 4 años después, permitiendo que vilidad haya facilitado la reparación de la infraes-
varios lugareños realizaran cultivos temporales en tructura dañada así como el desarrollo de cultivos
pequeñas chacras donde sembraron maíz (Zea a posteriori de las grandes lluvias en el valle cul-
mays), camote (Ipomoea batatas) y zapallo (Cu- tivado, manteniendo una reserva potencial de
curbita spp.). Debemos destacar el hecho que productos agrícolas en el área quebradeña.
ninguno de estos cultivos fue fumigado y el ren- De esta manera, el comportamiento de los
dimiento equivalió al de las chacras de la parte grupos contemporáneos nos permite una aproxi-
baja en años normales4. mación para comprender la ocupación del desier-
to en la época prehispánica, sin perder de vista
COMENTARIO FINAL que se trata de distintos escenarios en el tiempo y
el espacio. Pero también demuestra que concebir
La existencia de fuentes de agua proce- la ocurrencia de ENOS como un evento totalmen-
dentes de la escorrentía subterránea de la cuenca te catastrófico es un planteamiento que debe ser
del Chicama, tiene una importancia crucial para revisado a la luz del dato etnohistórico y, en par-
el desarrollo de la agricultura durante la ocurren- ticular, etnográfico.
cia de El Niño, la Oscilación del Sur (ENOS). La
ocupación contemporánea del área quebradeña AGRADECIMIENTO
para el desarrollo de la agricultura y otras activi-
dades ocurre en espacios donde existen eviden- Nuestro reconocimiento a Julio Flores Vi-
cias de ocupaciones prehispánicas previas. go (valle de Chicama), a Daniel Oloya Oliva (va-
Además, la actual tecnología del abrigo mantiene lle de Moche) y a varios informantes anónimos
fuertes vinculaciones en relación a su contraparte por compartir su conocimiento ancestral sobre la
prehispánica, que aprovecha la disponibilidad de agricultura en el desierto. Asimismo, a Leoncio
materiales de construcción en esta área y, en par- Carrión Flores por su apoyo incondicional duran-
ticular, las nacientes de las quebradas que devie- te el registro etnográfico realizado en la ciudad de
nen escenarios privilegiados por la presencia de Ascope.
agua, flora y fauna.
Para garantizar la captación y conducción BIBLIOGRAFIA
del recurso hídrico, desde un manantial hasta los
Bonavia, D.
4
En este caso, el informante no dio un dato cuantitativo de 1991. Perú, hombre e historia I. De los orígenes
utilidad en cuanto al rendimiento de las cosechas. al siglo XVI. Ediciones EDUBANCO. Lima.

102 • Centro de Investigaciones Precolombinas


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ANTI • Núm. 12 • Diciembre de 2013

ESTIGMATIZACION Y SOCIEDAD:
INMIGRACION BOLIVIANA EN ARGENTINA

Mauro Brebbia
Centro de Investigaciones Precolombinas,
Instituto Superior del Profesorado Dr. Joaquín V. González
maurobrebbia@hotmail.com

RESUMEN

El presente trabajo es una aproximación al proceso de la inmigración boliviana en Argentina. Partimos de la


irrefutabilidad de los números migratorios. La población de origen limítrofe nunca ha superado el 3% de la
población total en Argentina. Planteamos que hay un proceso de mayor visibilización de la migración boli-
viana por un doble factor: primero, por un proceso de concentración demográfica, como consecuencia de
una necesidad laboral de acercarse a las fuentes de trabajo (concentración territorial en las ciudades). Ese
traslado se produce hacia la zona que históricamente hegemonizó discursivamente al país por lo que la con-
centración geográfica, junto con las estrategias frente a la necesidad laboral, llevan a un aumento en la visi-
bilidad de estos grupos migrantes. El segundo factor tiene que ver con un proceso de estigmatización deli-
berada por parte del gobierno durante la década del 90´ y de los medios de comunicación en el afán de cul-
par a alguien por la crisis que se vivía. Esta conjunción de factores, sumado a que la visibilidad de estos
migrantes pone en tela de juicio el discurso hegemónico sobre la conformación étnica de los argentinos,
determina la gran visibilidad que tienen y el surgimiento de ciertos discursos xenófobos.
Palabras clave: inmigración, concentración, visibilización, estigmatización, xenofobia.

ABSTRACT
The present work is an approach to the process of Bolivian immigration in Argentina. We left from the
irrefutables numbers. The population of bordering origin never has surpassed 3% of the total popula-
tion in Argentina. We pose that there is a process of greater visualization of the Bolivian migration by a
double factor: first, by a process of demographic concentration, as a result of a labor necessity to ap-
proach to the work sources (territorial concentration in cities). That transfer takes place towards the
zone that´s historically have the hegemonic speech to all the country. That reason plus the strategies as
opposed to the labor necessity, take to an increase in the visibility of these migrants groups. The second
factor has to do with a process of deliberate stigmatization from the government during the decade of
90´ and from the mass media in the eagerness to blame somebody for the crisis that was taking place.
To this conjunction of factors, must be added the reason that the visibility of these migrants puts in
judgment the hegemonic speech on the ethnic conformation of the Argentineans, watch determines the
great visibility they have and the sprouting of certain xenophobic speeches.
Key words: immigration, concentration, visualization, stigmatization, xenophobia.

APROXIMACION A LA INMIGRACION Tomaremos en cuenta los discursos, ya sean de


BOLIVIANA los nativos como de los migrantes, para intentar

P
elaborar sobre ellos, un análisis de los procesos
retendemos estructurar este trabajo en tor- que determinan la relación inmigración boliviana
no a los procesos discursivos de los secto- - sociedad receptora e intentaremos marcar como
res migrantes bolivianos en Buenos Aires y esta inmigración sufrió diferentes procesos estig-
los discursos de la propia sociedad receptora. matizadores deliberados con fines políticos con-

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Estigmatización y sociedad: inmigración boliviana en Argentina M. Brebbia

cretos. Para los fines propuestos usaremos como Frente a ese proceso de crisis, concentra-
fuentes, entrevistas llevadas a cabo entre los me- ción y estigmatización, los inmigrantes bolivianos
ses de noviembre y diciembre del 2011 tanto a elaboraron estrategias para contrarrestarlas; se
argentinos como a bolivianos residentes en la organizaron para posicionarse frente a la sociedad
Argentina. Igualmente utilizaremos los datos cen- receptora (lo que aumentó el proceso de visibili-
sales de la Argentina como también las notas en zación) y también creemos que los inmigrantes
los medios gráficos de prensa. Desde 1869 (pri- bolivianos utilizaron y utilizan ciertas herramien-
mer dato censal cierto en la Argentina) hasta el tas discursivas provenientes de la sociedad recep-
último censo realizado en octubre de 2010 hay tora a fin de diferenciarse frente a los demás in-
una cantidad medianamente constante de inmi- migrantes latinoamericanos y así contrarrestar las
grantes limítrofes en el territorio argentino que no prácticas discursivas xenofóbicas. La estructura-
supera el 3% del total de la población. A pesar de ción de ese discurso que niega la herencia lati-
este dato, hay una percepción creciente eviden- noamericana en Argentina, tiene tal fuerza en la
ciada en los discursos de los argentinos sobre el sociedad, que imposibilita la inserción social de
problema de la supuesta “inmigración descontro- los inmigrantes bolivianos en el tejido social ar-
lada” en la Argentina desde los países limítrofes. gentino. Como consecuencia de ello muchos de
Es frente a estos discursos que se plantea este los logros económicos obtenidos por los inmi-
trabajo. El propósito es demostrar las intenciones grantes bolivianos no se ven reflejados en las
de la construcción de ese discurso, su utilidad posiciones sociales que detentan en la sociedad
política en determinados momentos históricos receptora.
argentinos y como dicho discurso muchas veces
impone posiciones discursivas a los propios mi- INMIGRACION, CONCENTRACION DE-
grantes. La intención es mostrar las causas de ese MOGRAFICA Y VISIBILIZACION
proceso de visibilización de los migrantes y cómo
se articularon estrategias frente a ese discurso Teniendo en cuenta los datos censales de
estigmatizador. Entonces, la hipótesis planteada, 1991, 2001 y 2010 la cantidad total de inmigran-
a la cual tendremos solamente una aproximación, tes en Argentina en relación a la población total
es que el proceso de visibilización de la migra- varió de un 5,7% en 1991, a 4,21% en el 2001 y a
ción boliviana en Argentina se debe a un doble 4,45% en el último censo de 2010. De ese 5,7%
movimiento. Por un lado, se produjo un proceso de la población migrante de 1991, solamente
de concentración demográfica de esta inmigra- 8,7% era de origen boliviano. En el censo de
ción frente al traspaso territorial de la economía 2001, 15,23% de la totalidad migrante (4,21%)
del campo a la ciudad y por ende la necesidad de era de origen boliviano, mientras que en el censo
acercamiento a las fuentes de trabajo. Por otro 2010 el 18,11% de la totalidad de migrantes
lado, la visibilización/estigmatización surge como (4,45%) era de origen boliviano. Teniendo en
consecuencia de un posicionamiento político des- cuenta esos números se aprecia un aumento del
de el gobierno central en la década del 90´ como peso (aunque relativo) de la migración boliviana
respuesta a una crisis de la cual el gobierno era el sobre el total de la inmigración en el país 1. Si
único responsable. Frente a esa crisis el gobierno tomamos en cuenta esas cantidades en relación al
estigmatizó a los grupos migrantes limítrofes a fin total de la población notamos que en 1991 la can-
de encontrar un “chivo expiatorio” frente a la
mencionada crisis. Ese proceso de estigmatiza- 1
Para tener una real dimensión de estos datos debemos
ción fue acompañado y fomentado desde los me- recordar que desde mediados de la década del 30´ la canti-
dios masivos de comunicación, lo que generó dad de inmigrantes nacidos en el continente europeo (hasta
repercusiones en la población nativa que, a su esa década representaba el mayor caudal) no tuvo sino un
vez, veía peligrar su “argentinidad” por la contra- retroceso continuo, condición obvia si tenemos en cuenta
posición entre el discurso hegemónico histórico que desde mediados de la década mencionada no hubo
migraciones considerables de europeos hacia la Argentina;
sobre la inmigración en Argentina y la realidad mientras que la inmigración boliviana particularmente, se
que se imponía con todo el peso de la misma. mantuvo constante a través de los años.

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tidad de población de origen boliviano era de te presenta un carácter rural-urbano. Incluso


0,44% sobre el total de la población, en 2001 re- desde los años 80´ es posible que el proceso sea,
presentaba un 0,64%, mientras que en el 2010 en parte, urbano-urbano, al provenir los migran-
representaba un 0,85% del total; estas variaciones tes de ciudades bolivianas” (Grimson 2005: 40).
son muy pequeñas si las comparamos con el au- La población boliviana residente en el Gran Bue-
mento de la población total en el país; la pobla- nos Aires (área metropolitana con mayor densi-
ción total del país en 1991 era de 32.615.528, en dad demográfica del territorio argentino) repre-
2001 era de 36.260.130, lo que representa un au- senta, según el último censo realizado en 2010,
mento de 11,20% y el último censo de 2010 un 0.73% de la población total del mencionado
marcó una población total de 40.518.951, lo que territorio, mientras que en los censos previos, no
representa un aumento intercensal de 10,60%. A llegó a representar ni un 0,50% en relación a la
pesar de lo que los números evidencian (que son población total en el mismo lugar de residencia. 2
insoslayables) hay una percepción social crecien- En Argentina al igual que en el resto del
te sobre un supuesto aumento de la población mundo sucedió, y aun continua sucediendo, un
boliviana residente en la Argentina; posiciona- proceso de consolidación del espacio urbano en el
miento que se volvió hegemónico y que tuvo su desplazamiento territorial de la economía y por
auge durante la década del 90´y aun en muchos ende de las fuentes de trabajo del campo a los
sectores medios continua vigente. grandes centros urbanos. Este proceso tuvo como
“(…) ¿los bolivianos?, nos invadieron, consecuencia la conformación de conglomerados
vienen acá, encima del gobierno les dan los pla- urbanos (no planificados) de trabajadores. Igual
nes [se refiere a los planes sociales que el gobier- que cualquiera de los trabajadores argentinos, los
no argentino otorga], cada vez hay más, en cual- trabajadores bolivianos se concentraron en los
quier momento cambian la bandera Argentina por grandes centros urbanos, principalmente en el
la de ellos (…)” (Daniel - argentino). Gran Buenos Aires. “(…) los migrantes estaban
“(…) cada vez hay más bolivianos acá. históricamente asentados en zona de fronteras, y
Están por todos lados, antes estaban solo en la se han desplazado a los centros urbanos, y son
construcción pero ahora están por todos lados ahora visibles para las clases medias, los medios
(…)” (Juan Carlos - argentino). de comunicación y el poder político” (Grimson
Históricamente hubo un desplazamiento 2005: 13).
de los ciudadanos bolivianos hacia la Argentina. “Yo tenía un montón de paisanos reparti-
Las primeras migraciones se realizaban en el con- dos en toda la Argentina. Ahora andan todos por
texto que podríamos denominar rural-rural donde acá (Gran Buenos Aires). Ya casi no hay trabajo
los inmigrantes bolivianos se trasladaban a la en el campo, todos se están viniendo para acá
Argentina para la época de cosechas e iban como (…)” (Primitivo – boliviano).
“trabajadores golondrinas” siguiendo el derrotero El ámbito citadino representa un ambiente
del trabajo durante la época de cosechas. En la conocido por todos aquellos que habitaron por un
actualidad hay una clara tendencia de que la mi- cierto periodo de tiempo en los grandes conglo-
gración se da en sentido urbano-urbano, migran merados urbanos denominados “ciudades”. Si
de las grandes ciudades bolivianas directamente bien es cierto que las condiciones de las mismas
hacia las grandes ciudades argentinas. “Para varían y estas pueden determinar cambios sustan-
1980, la cantidad de inmigrantes provenientes de tivos entre ellas, hay ciertas constantes que son
la Republica de Bolivia que se asentaban en la compartidas por todas la ciudades. Las condicio-
Capital Federal y el Gran Buenos Aires había nes a las que se deben enfrentar las inmigraciones
crecido significativamente y alcanzaba o super- bolivianas varían dependiendo del lugar de resi-
aba a los que vivían en Salta y Jujuy [provincias
2
argentinas limítrofes con Bolivia]. Esto implicaba Vale la pena recordar que en ningún momento la cantidad
un cambio en relación a las primeras etapas que de bolivianos residente en toda la Argentina aumentó signi-
ficativamente; nunca, en la historia censal de la Argentina
eran de carácter rural-rural. Desde mediados de (desde 1869), la población limítrofe supero el 3% de la
siglo, y de manera creciente, una parte importan- población total.

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Estigmatización y sociedad: inmigración boliviana en Argentina M. Brebbia

dencia que elijan como también la elección del te a la necesidad de trabajo en las grandes ciuda-
lugar de residencia hará privilegiar unas identifi- des, la organización colectiva de la comunidad es
caciones y solidaridades frente a otras. En Bolivia una alternativa viable; estas organizaciones fo-
los regionalismos son muy fuertes pero frente al mentan, a su vez, la visibilidad de esta inmigra-
desarraigo que implica una emigración, el senti- ción.
miento de un mismo origen nacional prima como Toda esta situación de concentración en
factótum de cooperación sobre todo frente a pa- las grandes ciudades y de ruptura de las diferen-
decimientos comunes (Grimson 2005). En el caso cias regionales entre los propios bolivianos, hace
de Buenos Aires, como gran urbe que incluye a ver en el discurso “nativo” una gran masa
los territorios del Gran Buenos Aires, la dinámica homogénea de sujetos, indiferentes entre sí, con
propia de esta ciudad hace necesaria cierta “orien- modos de vida y costumbres parecidos que los
tación” de los migrantes bolivianos frente a este lleva a englobarlos en la única categoría de “boli-
territorio desconocido y hostil. La tendencia a la vianos”. El proceso de concentración geográfica
concentración de migrantes “implicó una crecien- mencionado tiene una evidente repercusión en los
te organización social de los migrantes limítrofes sectores locales, que de esta forma sienten una
en cuanto tales, básicamente para reclamar y “presión demográfica” sobre su territorio habitual
gestionar su legalización y la documentación, así por un supuesto “otro”, que pone en discusión el
como revertir la valoración negativa de sus iden- discurso hegemónico nacional de un país “sin
tidades” (Grimson 2005: 12). negros ni indios” (Grimson 2006).
“En (Buenos Aires), la diferencia entre
cambas y kollas ya no (se da), ya se hermanan PROCESO DE ESTIGMATIZACION
directamente kollas y cambas, y ya no son kollas
ni nada. Ya todos somos paisanos bolivianos. Ya El segundo factor que promovió la visibi-
aquí tenemos que unirnos para defendernos, y no lización de las inmigraciones bolivianas es fun-
existe mas eso (…) Aquí somos todos de Bolivia y damentalmente una consecuencia del proceso
ya, (porque) no nos conviene estar divididos” económico padecido por Argentina en la segunda
(Caggiano 2005: 118) mitad de la década de 1990. Durante esa segunda
“(…) en su mayoría la gente que viene pa- mitad se dio un proceso de deterioro en toda la
ra acá lo hace teniendo algún pariente en Buenos economía Argentina. Hubo un aumento conside-
Aires. Si no tienen parientes, seguro tienen algún rable de la desocupación, la pobreza y la indigen-
conocido donde parar. Todos en Bolivia tenemos cia. Esto fue como consecuencia de las políticas
algún conocido que vive en Argentina. Sin ese públicas llevadas adelante desde 1976 por los
contacto que oriente sería prácticamente imposi- sucesivos gobiernos pero que terminó haciendo
ble sumarse a la vida (Argentina).” (Primitivo - eclosión ante un gobierno neoliberal que debía su
boliviano)3 subsistencia económica al otorgamiento de
Teniendo en cuenta lo expuesto, sabemos empréstitos (cuando se agotaron las empresas
que frente a una gran ciudad y en un proceso de públicas para privatizar) de parte de organismos
inserción social marcado muchas veces por un internacionales que exigían para el otorgamiento
discurso local xenófobo, el apoyo, ya sea en la de los mismos (siguiendo las políticas neolibera-
búsqueda de trabajo, de documentación, de vi- les) el achicamiento del estado y consecuente-
vienda ante la necesidad económica, de apoyo mente con ello el estrangulamiento de la pobla-
moral frente al fracaso, representa para el emi- ción. Cuando el mundo entró en problemas de
grado, en este caso boliviano, una cuestión que liquidez (típicas crisis cíclicas del capitalismo), la
podría hacer fracasar o prosperar su intento. Fren- Argentina no dispuso más de esa recurrente en-
trada de divisas basada en el endeudamiento y la
3
Argentina representa históricamente el mayor “polo” de economía Argentina sufrió un proceso de deterio-
atracción para la emigración boliviana. Aunque el caudal se ro creciente que culminó con la denominada “Cri-
modifica según los contextos locales, la emigración boli-
viana que elije como destino Argentina sigue siendo la más
sis del 2001”. En ese proceso de continuo deterio-
caudalosa de todas las emigraciones bolivianas. ro económico, los órganos gubernamentales es-

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tigmatizaban a los inmigrantes limítrofes y, en argentinos y no bolitas”. Un trabajador declaró al


especial, a los bolivianos y peruanos; los señala- diario Clarín: “Ellos (los extranjeros) son los
ban como los responsables del aumento de la culpables de que nosotros cada vez ganemos me-
desocupación y de la inseguridad que toda crisis nos” (Grimson 2006: 83). Es así como el gobier-
económica trae consigo. Cada vez que una crisis no Argentino había encontrado a su “chivo expia-
azotaba al país, sea sanitaria, económica o delic- torio”, y fomentaba desde los medios masivos de
tiva el “chivo expiatorio” de los inmigrantes lati- comunicación un discurso xenófobo, que en una
noamericanos funcionaba como discurso para la situación de crisis económica, servía como argu-
justificación de la inacción del gobierno o para la mento y justificación para la misma.
justificación de los sucesos. “Es posible identifi- Como mencionamos, los medios de co-
car tres escenarios ejemplificadores [donde los municación sirvieron a los fines del gobierno e
inmigrantes funcionaron como ‘chivo expiato- impulsaron desde sus editoriales estos procesos
rio’] a) en 1992, con la crisis del sistema de sa- de estigmatización, que sobre una sociedad en
lud y de potabilización del agua y la detección de crisis, fomentaron en la población discursos
casos de cólera y de enfermedades que se supon- xenófobos. Un ejemplo que evidencia el paroxis-
ían desaparecidas del país desde hacía años; b) mo alcanzado desde los medios de comunicación
en 1994, con el crecimiento del índice de desocu- de este enunciado fue una nota publicada en el
pación que alcanzó ese año el 18%; c) en 1999, semanario “La primera de la Semana” el 4-04-
con las explosiones delictivas en Buenos Aires y 2000 que denominaba a esta inmigración como
los recurrentes discursos sobre la ‘inseguridad “La Invasión Silenciosa”.
urbana’. En cada uno de estos momentos los ‘in- “Los inmigrantes indocumentados: -solo
migrantes limítrofes’ fueron visibilizados como consiguen emplearse en la economía informal,
responsables o culpables de los problemas. Pre- deprimiendo los salarios.- Utilizan el sistema de
suntamente el cólera se ocasionaba en Bolivia, el salud pública que pagamos todos.- Lo mismo
desempleo en la ‘inmigración ilegal’ y la violen- hacen con la educación pública.- Según estadísti-
cia urbana en la ‘extranjerización de la delin- cas oficiales cometen más delitos que el promedio
cuencia’” (Caggiano 2005: 17). Desde las altas de la población, y en algunos casos lo hacen para
esferas del gobierno se promocionaba, mediante quedarse definitivamente en el país. Todo esto
discursos, esta estigmatización. El presidente Car- cuesta dinero. Y la Argentina dejó de ser hace
los Menem atribuyó la inseguridad a que “llegan mucho el hermano mayor, rico y poderoso que
indocumentados de otras partes de nuestro conti- podía subsidiar a su familia desgraciada” (La
nente, que se organizan en bandas” (Página/12, Primera de la Semana, 04-04-2000).4
21-01-1999). El director de Migraciones durante Esta última transcripción basta para mar-
el gobierno menemista, Hugo Franco, aseguró car el tenor de los embates contra la inmigración
que “(…) en la Capital Federal se extranjerizó el en el afán de estigmatizar a los inmigrantes limí-
delito” (Página/12, 21-01-1999). La asociación trofes como los culpables de los problemas que
entre la desocupación y la inmigración fue muy acuciaban al país.
habitual en la época; es más, el sindicato de obre-
ros de la construcción (U.O.C.R.A) llevó adelante CONSTRUCCION DEL DISCURSO HIS-
campañas públicas contra el trabajo inmigrante TORICO
aduciendo que eran los culpables del deterioro del
salario real de los trabajadores. En una protesta El discurso mencionado sobre la composi-
contra la inseguridad en las obras de construcción ción étnica Argentina como una nación “sin ne-
los trabajadores inmigrantes tuvieron que hacer gros ni indios” se gestó como una construcción
una columna diferenciada de la de los argentinos histórica desde el centro de las esferas de poder.
ya que estos les proferían insultos por su supuesta
condición de “roba trabajos”. Desde las columnas 4
Nota editorial de la revista mencionada publicada bajo el
del sindicato se escuchaban cánticos como “so- titulo “La invasión silenciosa”. Medio gráfico propiedad del
mos argentinos y peronistas” y también “somos empresario menemista Daniel Hadad.

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Estigmatización y sociedad: inmigración boliviana en Argentina M. Brebbia

Argentina es un conjunto de población que en el lle, todos tienen un antepasado europeo, es una
discurso oficial histórico “descendió de los bar- realidad” (Daniel - argentino).
cos”. Habitualmente se menciona a este discurso “Siempre fuimos la Europa de América.
como el “crisol de razas”. Esta versión incluye, Ahora las cosas están cambiando, y están cam-
obviamente, a los descendientes europeos pero biando para mal” (Juan Carlos - argentino).
silencia específicamente la posibilidad de la cons- “Argentina es hija de los barcos, no me
trucción identitaria nacional desde una variable vengan ahora con los hermanos latinoamericanos,
latinoamericana. Negar la abrumadora inmigra- fuimos, somos y seremos hijos de la inmigración
ción europea recibida desde 1890 hasta mediados europea” (Jorge - argentino).
de la década del 60´ (aunque el principal caudal Para intentar dimensionar la disrupción
se dio hasta la década del 30´) en Argentina sería que significa para “el argentino” la visibilización
una necedad, pero creer que esa es la exclusiva de los migrantes limítrofes en el centro del país
composición étnica de toda la población Argenti- (lugar desde el que construyó su argentinidad)6
na, es una necedad mucho mayor. La construc- primero debemos conocer las intenciones de la
ción de una nación “sin indios ni negros” fue una conformación de ese discurso homogenizante
construcción histórica desde centro del país, que desde Buenos Aires (por las elites) para todo el
consiguió erigirse como discurso hegemónico país. La intención de la elite porteña (constructora
sobre todo el territorio. Desde la pluralidad de del discurso hegemónico desde Buenos Aires),
personas con orígenes y costumbres diferentes era la homogenización de las diferencias internas,
(como consecuencia de las migraciones masivas para conseguir sumar al proyecto nacional que la
recibidas entre 1890 y 1960)5, y en el afán elite porteña pretendía imponer, a las demás pro-
hegemónico y vertical del estado nación, se cons- vincias. Para tal fin era necesario romper los re-
truyeron herramientas a fin de reducir las identi- gionalismos (tan fuertes durante las guerras inter-
dades e identificaciones varias, en una única (a nas pos-independencia), por lo que se debía insti-
partir de entonces “la Argentina”). El aparato tuir un discurso totalizante que englobara a todos
estatal funcionó para tal fin consiguiendo instau- dentro de “la Argentina”. La fuerza para la impo-
rar el discurso, como hegemónico desde Buenos sición de dicho discurso fue planteada y articula-
Aires, sobre un país “sin negros, ni indios”, en el da desde la prosperidad económica que detentaba
que todos somos “descendientes de los barcos”. Buenos Aires (por poseer el puerto) frente al de-
El estado Argentino desde su proceso de consoli- terioro económico de las demás provincias argen-
dación (1880) utilizó diversas herramientas para tinas.
consolidar ese discurso. La herramienta más Para tal fin analizaremos brevemente a
fructífera para la construcción de este discurso una personalidad histórica que escribió “las ba-
totalizante fue sin duda la escuela, fundamental- ses” para la sanción de la primera Constitución
mente con la sanción de una ley que establecía a Argentina en 1853. Dicho proyecto luego fue
esta como obligatoria, gratuita y laica, mientras impulsado y llevado a la práctica por la denomi-
que a su vez uniformaba a todos (obligaba al uso nada “generación del 80´” y constituyó la base
de una misma vestimenta en la escuela) a fin de sobre la cual se diagramó el entramado social,
evitar las diferencias visibles; esta ley fue sancio- político y demográfico del discurso sobre la com-
nada en 1884, y si tenemos en cuenta el discurso posición étnica Argentina.
nativo en la actualidad es innegable el logro obte- Juan Bautista Alberdi nació en la provin-
nido. cia de Tucumán en 1810, abogado de profesión,
“Nosotros somos hijos de la cultura euro- luchó toda su vida por llevar a la práctica su pro-
pea, descendemos de ahí. Si preguntas por la ca-
6
Denominamos aquí “centro del país” a Buenos Aires co-
mo Capital Federal de todo el territorio argentino y a los
alrededores, ya que es el lugar donde reside tanto el poder
5
Argentina ocupó el segundo lugar, a escala mundial, en político, como el económico y que históricamente predo-
cantidad de inmigrantes europeos en el periodo 1890-1930, minó, ya sea política como económicamente sobre el resto
y el primero en proporción a la población nativa. del territorio.

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yecto político. Si bien tiene muchos libros escri- productivas, pero el lema evidencia el principal
tos, su obra “Bases y Puntos de Partida para la problema que tenía nuestro país según su opinión:
Organización Política de la Republica Argenti- lo extenso de su territorio en relación al total de
na” publicado en 1852 marca la síntesis de todo población; es por ello que cree necesario el fo-
su pensamiento. Alberdi desea, a la luz de los mento de la inmigración por parte del estado.
antecedentes históricos, transmitir a las realidades Alberdi no tiene ningún problema, en asu-
del presente que vivía como las del futuro que mir (según su visión) el “atraso” que vive el país, y
anhelaba, cuál debía ser a su entender la vertebra- en general Latinoamérica. Sostiene que todo el
ción axio-ideológica del proceso constituyente de continente vive en un atraso considerable y que se
la Argentina, es decir, sus valores, sus ideas, sus debe fundamentalmente a la falta de industrializa-
fines. En él pone de manifiesto todo su plan polí- ción; que se conseguirá mediante la inmigración
tico que influirá en forma determinante en la pri- que se debe fomentar desde el propio estado; prin-
mera constitución Argentina sancionada en Santa cipio que se encuentra plasmado en el artículo 25
Fe en 1853 y que será la posterior base de todos de la Constitución Argentina sancionada en 1853;
los proyectos constitucionales. artículo que hoy sigue vigente. “El gobierno fede-
Alberdi siempre fue congruente con su ral fomentará la inmigración europea; y no podrá
premisa mayor de la necesidad de un proceso de restringir limitar ni gravar con impuesto alguno la
civilización y progreso necesario para los pueblos entrada al territorio argentino de los extranjeros
de América. “Las inmigraciones europeas serán que traigan por objeto labrar la tierra, mejorar
el único medio de que América, hoy desierta, las industrias e introducir y enseñar las ciencias y
llegue a ser un mundo opulento en poco tiempo, las artes” (Constitución de la Nación Argentina
pues la reproducción de sus habitantes por si 1853). Su programa deriva de las grandes ideas del
sola es un medio lentísimo, pues sin grandes po- liberalismo de la época y plantea que era posible
blaciones no hay desarrollo de cultura, no hay transformar a la Argentina en una nación moderna.
progreso considerable; todo es mezquino y pe- Cree que debe fomentarse la inmigración europea
queño. No tendremos orden ni educación sino por para conseguir los niveles alcanzados por otros
el influjo de masas introducidas con hábitos países. Sostiene la indispensable necesidad de fir-
arraigados de ese orden y buena educación” mar tratados con los países europeos por los que,
(Alberdi 1981: 39-40). Este es otro de los temas en resumen, se asegure a los inmigrantes que, los
obsesivos que configuran el conjunto de ideas derechos y garantías de la Constitución, no serán
rectoras y preeminentes de su pensamiento, y es derogados para los extranjeros por la legislación
por ello que menciona a la población como el fin común que sancione el congreso, y así como para
y el medio al mismo tiempo. Por ello, “en Améri- los nacionales, tendrán plena vigencia las garantías
ca gobernar es poblar; sin población para la sobre sus derechos naturales de propiedad, de li-
industria y el gobierno libre, la mejor constitu- bertad civil, de adquisición, de tránsito, y de tole-
ción política será ineficaz” (Alberdi 1981: 118- rancia religiosa; todos estos derechos están plas-
120). “Para poblar el desierto son necesarias dos mados en el artículo 20 de la Constitución Nacio-
cosas capitales: abrir las puertas de él para que nal Argentina, artículo que aun sigue vigente en la
todos entren, y asegurar el bienestar de los que actual Constitución. De lo expuesto se deduce que
en él penetran; la libertad en la puerta y la liber- el fomento de la inmigración no es solamente para
tad dentro” (Alberdi 1981: 121). promover el desarrollo de las fuerzas productivas,
El lema fundamental de Alberdi, que ma- sino también, para propiciar el aprendizaje, por
nifestó a lo largo de toda su obra, pero en especial emulación, de los nativos de las formas de com-
en las bases, es: “gobernar es poblar”. Este repre- portamiento de los extranjeros que posibilitarían
senta la necesidad imperiosa de poblar el territo- un mayor desarrollo de las fuerzas productivas por
rio para poder alcanzar un nivel de desarrollo parte de los locales. Ve en Estados Unidos e Ingla-
industrial. Su ideal de país pretendía la homoge- terra los ejemplos de paradigmas a alcanzar.
nización de toda la población en el objetivo “¿Queremos plantar y aclimatar en América la
común de prosperidad y desarrollo de las fuerzas libertad inglesa, la cultura francesa, la laboriosi-

111 • Centro de Investigaciones Precolombinas


Estigmatización y sociedad: inmigración boliviana en Argentina M. Brebbia

dad del hombre de Europa y de los Estados Uni- LA “NO” INSERCION SOCIAL, INSER-
dos? Traigamos pedazos vivos de ellas en las cos- CION LABORAL Y VISIBILIDAD
tumbres de sus habitantes y radiquémosla aquí
(…) llenémosla (a América) de gentes que posean “Ellos no están integrados con nosotros,
hondamente esos hábitos. Ellos son comunicati- son diferentes, ellos tienen sus cosas y nosotros
vos; al lado del industrial europeo pronto se forma tenemos las nuestras (…) somos diferentes” (Da-
el americano. La planta de la civilización no se niel - argentino).
propaga de semilla. Es como la viña, prende de “No me parece mal que les den trabajo y
gajo” (Di Tella 1987: 78). oportunidades (…), pero que ocupen nuestras
La fomentación de la inmigración europea instituciones, es otra cosa, es una locura, que se
por parte del estado fue una constante durante hagan las de ellos (…), a ver si uno va allá y tiene
fines del siglo XIX y principios del XX. Sobre la esa posibilidad” (Jorge - argentino).
base de estas disposiciones legales (fijadas en la Teniendo en cuenta estos ejemplos discur-
Constitución Nacional), es que se estructuró el sivos es que sostenemos que los inmigrantes boli-
discurso sobre el origen étnico de la población vianos no consiguieron insertarse en el tejido so-
Argentina. Este fomento de la inmigración euro- cial argentino. Si tomamos en cuenta la conquista
pea, como citamos, tuvo su correlato en cantidad de posiciones de decisión como el ámbito natural
de inmigrantes recibidos. Articulado sobre esa para la demostración de conquistas de posiciones
realidad es que este discurso se planteó como de poder en la sociedad receptora, la inmigración
hegemónico desde las altas esferas que domina- boliviana mantiene un alto grado de marginación
ban el poder político de Buenos Aires y que se en su inserción dentro de la sociedad Argentina,
impusieron en el resto del país. Como consecuen- sin importar su condición económica o la posi-
cia de la legislación y de lo sucedido (las migra- ción social que detentaran en su país de origen.
ciones europeas a Argentina) la idea de una Ar- Hay una carga peyorativa surgida desde los ar-
gentina “descendiente de los barcos” fue el enun- gentinos por su doble condición: de inmigrante y
ciado que primó discursivamente en los poblado- de boliviano, que les imposibilita a estos conquis-
res de Buenos Aires, y de allí, tornase en discurso tar posiciones de poder por más que en su país de
hegemónico para todo el país. Este discurso, me- origen las hayan tenido. “(Históricamente), el
diante diversas herramientas, caló hondo en la ingreso de los migrantes en el mercado de traba-
conformación de la “argentinidad” por lo que jo argentino se ha ido adecuando a las demandas
cualquier cosa que se visibilice como disruptiva coyunturales: áreas limítrofes y trabajos tempo-
frente a este discurso homogéneo y totalizante rarios en cosechas, en un principio, para pasar
será tema de controversia entre “los argentinos”. posteriormente a zonas urbanizadas y al área
En una realidad que se hace presente (la visibili- metropolitana de Buenos Aires, para desempeñar
zación de las históricas inmigraciones latinoame- básicamente actividades en la construcción los
ricanas –recordemos que el 3% de la población hombres y en trabajo domestico las mujeres”
históricamente provino desde los países fronteri- (Ceva 2006: 39). Esta situación histórica llevó a
zos) y en un discurso donde la versión del euro- plantear para los bolivianos, desde el universo
peo como portavoz de la “civilización” (Alberdi) discursivo argentino, una supuesta realidad inca-
y el desprestigio que implicaba con ello, los ori- paz de ser alterada que estigmatiza a los bolivia-
ginarios de Latinoamérica, no puede sino poner nos migrantes en determinadas posiciones labora-
en discusión toda una matriz ideológica y discur- les y consecuentemente con ello, en ciertas posi-
siva del supuesto “atraso” que traen consigo las ciones socio-económicas. Reproduzco aquí un
inmigraciones latinoamericanas. Esta visibiliza- extracto de una entrevista realizada a un inmi-
ción pone en jaque todo el discurso histórico grante boliviano, Licenciado en Administración
construido desde Buenos Aires sobre el resto de de Empresas, egresado en Bolivia donde queda
la Argentina, lo que implica que los sujetos ar- evidenciado su situación laboral en la Argentina.
gentinos interpelados tengan rasgos xenofóbicos “P: Por tu educación allá en Bolivia, yo quería
frente a esa supuesta disrupción. que me cuentes un poco ¿cómo fue tu escolariza-

Centro de Investigaciones Precolombinas • 112


ANTI • Núm. 12 • Diciembre de 2013

ción allá y si te costó asimilarte, un poco, a la mericanos comparten, en su mayoría, las mismas
cultura y a la educación propia del Argentino? condiciones de trabajo y de vida; la mayoría están
R: Mira, te digo, me costó un poco asimilarla y es sometidos a un ambiente laboral precario, con
más, te digo, el hecho de ser boliviano, ante los bajos sueldos, y sin amparo social o sindical; por
organismos acá en la Argentina, mis documentos todo esto muchas veces están sometidos a condi-
universitarios no tuvieron ningún valor, ningún ciones de semi-esclavitud o de explotación forzo-
asidero. Y como estamos acostumbrados a respe- sa que pone en peligro hasta sus vidas por un sa-
tar y a trabajar, y yo necesitaba llevar el pan para lario menos que módico. Esta, también es una
mis hijos, yo trabaje de albañil (…) causa que los lleva a fundarse en organizaciones
P: ¡De albañil siendo [universitario]! constituidas legalmente para articular la represen-
R: (…) Siendo licenciado en administración de tación de todos frente a la sociedad mayor o fren-
empresas. No tenía otra alternativa, se nos vino la te al estado receptor.
crisis encima peor. Trabajé de albañil para una La organización de los inmigrantes boli-
empresa de Techint hasta que me conozcan, in- vianos fue tardía en relación a su historicidad en el
cluso yo les presenté todos mis papeles y todo, territorio argentino, pero durante la década del 90’
pero no”.7 la necesidad de agruparse ante las diversas dificul-
La intención del presente trabajo no es tades que implicaba ser inmigrante en esa Argenti-
problematizar el acceso a las fuentes laborales de na xenófoba y con cada vez mayor desempleo fue
los migrantes bolivianos sino poner en evidencia una estrategia para articular formas diferentes fren-
la falta de inserción social en ámbitos de poder te a esos escollos. La gestión de la documentación
por parte de sectores bolivianos por más que su necesaria para estar legalmente en el país (y así
situación educativa sea muchas veces mejor que poder conseguir empleo en “blanco”), fue un gran
la de muchos sujetos de la sociedad receptora. factor de comunión inicialmente entre compatrio-
Los inmigrantes bolivianos, portan un es- tas latinoamericanos (Canevaro 2006).
tigma por ser inmigrantes bolivianos que les im-
posibilita la obtención de trabajo calificado por ESTRATEGIAS FRENTE A LA DISCRIMI-
más que por sus estudios o conocimientos así lo NACION
ameriten. La transcripción arriba expuesta vasta
como ejemplo para apreciar lo mencionado. La formación de organizaciones sociales
Además del estigma que portan, los inmigrantes para representarse frente a la sociedad mayor es
en su mayoría, no cuentan con estudios que facili- una estrategia, a nuestro criterio, colectiva frente
ten su inserción laboral en la sociedad Argentina. 8 a los discursos xenófobos de la sociedad recepto-
Su inserción laboral se basa fundamentalmente en ra; sin embargo, los inmigrantes bolivianos, tam-
industrias de mano de obra intensiva sin ningún bién establecen estrategias individuales para posi-
amparo que les garantice las mínimas condiciones cionarse frente a esos discursos. El inmigrante
de seguridad e higiene. Los inmigrantes latinoa- boliviano construye discursivamente una alterna-
tiva frente a las prácticas discriminatorias que
7
En el fragmento de la entrevista transcripta P significa
surgen para con ellos desde la sociedad Argenti-
pregunta (entrevistador) y R respuesta (entrevistado). na. Utiliza ciertos discursos “nativos” que le son
8
Según los datos del INDEC disponibles (censo 2001), el convenientes para conseguir su aceptación en la
32,4% de los residentes bolivianos en la Provincia de Bue- sociedad receptora. El propio boliviano migrante,
nos Aires, no terminaron el nivel primario de educación o consecuencia de su historicidad propia, ha des-
carecen de instrucción alguna. El 27,4% tiene el primario
completo; el 16,6% tienen el secundario incompleto, el
arrollado una relación discursiva muy particular
16,4% tiene el secundario completo, el 4,6% tiene un estu- con el trabajo en la sociedad Argentina. El boli-
dio de nivel terciario o universitario incompleto y solamen- viano ha encontrado una forma discursiva de in-
te el 2,7% tiene algún título terciario o universitario. Estos serción en la sociedad Argentina basada en su
valores están muy por debajo de los promedio para la po- supuesta forma de trabajar. La caracterización
blación Argentina que tiene un total de graduados terciarios
o universitario de 18% para los varones y un 23% para la
que hay de los propios bolivianos hace referencia,
mujeres. a que “son muy trabajadores”. Esta caracteriza-

113 • Centro de Investigaciones Precolombinas


Estigmatización y sociedad: inmigración boliviana en Argentina M. Brebbia

ción es vista por muchos empresarios argentinos ciudad nos cuesta (...) (Vladimir)” (Caggiano
como positiva ya que es aprovechada para “ex- 2005: 66).
plotarlos” laboralmente. Los bolivianos han asu- “Los bolivianos son muy callados, son
mido esa condición de trabajadores de jornada muy trabajadores, tengo alguno en la obra y ni le
completa (“muy trabajadores”) y la asumen con conozco la voz” (Jorge - argentino).
orgullo. Si instituyen la categorización de inmi- “(…) acá el boliviano viene y trabaja, tra-
grantes “muy trabajadores” implica que hay in- baja, y trabaja de callado. Yo he visto muchos
migrantes que no lo son. Esto es un intento por compatriotas (…) incluso les dije que paren con
desplazar el discurso xenófobo hacia otros inmi- el trabajo y nos decían: vamos a seguir. Así es la
grantes, para ellos poder ampararse en el lema de forma de trabajo que tenemos, como aprendimos
“muy trabajadores”. Esta situación tiene impli- a hacerlo y, es más, siempre el Boliviano por su
cancias diferentes para quien lo aprecie, porque (…) vas a encontrar al boliviano muy introverti-
también esta caracterización ayuda a construir el do, muy callado siempre, solo entre nosotros sí
discurso “nativo” bastante presente, de que los nos gritamos, pero el boliviano autóctono es ca-
bolivianos les “roban el trabajo” a los argentinos. llado” (Wilbert - boliviano).
“Se sabe que el peruano no está bien visto acá. La asociación entre “cerrados” y “trabaja-
Nos comparan con los peruanos y a nosotros nos dores” como se expone en la última transcripción,
molesta. El caso de los peruanos es muy distinto en mi opinión, es una estrategia discursiva plan-
(del de los bolivianos), tienen otro tipo de vida. teada por la inmigración boliviana frente a los
(…) Ellos mismo dicen no estas cosas que pasan discursos xenófobos desde la sociedad receptora.
(…) que los robos. Los peruanos tienen otro tipo Los bolivianos migrantes se proponen como
de vida. El boliviano es muy trabajador (…) “muy trabajadores” y a su vez “introvertidos”
Cuando se habla (del boliviano) es distinto” (cerrados), lo que los caracteriza en forma dife-
(Johnny - boliviano). rente frente a los demás inmigrantes latinoameri-
“Lo que hay que reconocer es que el boli- canos. Plantean de esta forma algunas caracterís-
viano es muy trabajador. Cuando tengo que elegir ticas que facilitarían su inserción social en la Ar-
trabajadores para la obra, elijo argentinos. Es gentina. Sin embargo, no consiguen insertarse en
cierto que no trabajan tanto, pero prefiero darle la sociabilidad Argentina si tomamos en cuenta
trabajo a mi gente” (Daniel - argentino). los enunciados citados de algunos miembros de la
Hay otra caracterización sobre los boli- sociedad receptora.
vianos hechas por los argentinos y asumida, aun-
que con otras implicancias, por los propios boli- CONSIDERACONES FINALES
vianos. La caracterización a la que hacemos refe-
rencia es que los bolivianos son “cerrados”. Esta Por todo lo escrito, la migración de países
caracterización la asumen los bolivianos, en mi limítrofes tiene una visibilidad mediática grande
opinión, desde la construcción discursiva hecha en un proceso de continua estigmatización. Hoy
por los propios argentinos. Por más que no sean sigue funcionando en parte así por la memoria
los propios bolivianos los que se hayan caracteri- histórica de las clases medias (lectoras y repro-
zado de la mencionada forma, la auto-percepción ductoras de los grandes titulares mediáticos) que
de ello implica la asunción y aceptación de dicha siguen creyendo reconocer en la inmigración una
caracterización. competencia por la demanda de trabajo. A pesar
“Los argentinos dicen que somos muy ce- del relato que aun mantiene gran parte de la clase
rrados y todo eso. Es cierto eso que dicen, que media Argentina, el estado argentino sancionó en
somos muy cerrados (…) ya sé que para que nos diciembre de 2003 una nueva “Ley de Migracio-
entiendan debemos poner un poco mas (…) Al ser nes”, que facilita la documentación a todos los
del mismo campo y (por) el ambiente de Bolivia extranjeros, lo que posibilita la igualdad de dere-
no somos fáciles de relacionarnos; no somos de chos que la Constitución Argentina establece en
fácil hablar. Inclusive a nosotros que somos de la su Preámbulo.

Centro de Investigaciones Precolombinas • 114


ANTI • Núm. 12 • Diciembre de 2013

Argentina históricamente se constituyó particular no consiguieron “insertarse” en la so-


como un país de inmigrantes, pero se instauró un ciabilidad local, por lo que quedan marginados a
discurso (sobre todo en la década del 90´) sobre la sus propias formas de sociabilidad que se da entre
diferenciación fenotípica del inmigrante; mientras los mismos inmigrantes bolivianos. Las posibles
los europeos (inmigrantes en Argentina desde mejoras económicas consecuencia de un esfuerzo
fines del siglo XIX a principios del XX) traían denodado no se traducen en un mayor nivel de-
consigo la “civilización”, los inmigrantes de paí- ntro del status social argentino (aunque si en su
ses limítrofes traían consigo la delincuencia y la propio lugar de sociabilidad) por lo que las mejo-
pobreza (Grimson 2006). En un país como Ar- ras económicas tienen un alcance limitado en su
gentina que siempre se sintió la “Europa de Su- función como forma de inserción social (Grimson
damérica” la visibilización de la variable “lati- 2005). Los inmigrantes bolivianos frente a la im-
noamericana” de Argentina traía consigo la ruptu- posibilidad de inserción social, establecen estra-
ra de una visión de la Argentina que ocultaba a tegias, ya sean discursivas u organizativas para
las minorías y a las diferencias homogenizando y así afrontar las problemáticas que los aquejan.
ocultando la pobreza en una ficción de progreso y
“primer mundo”. El paroxismo de la visión pri- BIBLIOGRAFIA
mermundista de la Argentina la ejemplificaremos
mediante un discurso del entonces presidente Alberdi, J. B.
Carlos Menem a alumnos de una escuela en la 1981. Bases y Puntos de Partida para la Organi-
provincia de Salta (provincia limítrofe con Boli- zación Política de la República Argentina. Edito-
via, con altos índices de pobreza e indigencia) en rial Plus Ultra. Buenos Aires.
la inauguración del ciclo lectivo escolar: “Dentro
Canevaro, S.
de poco tiempo se va a licitar un sistema de vue-
2006. Experiencias individuales y acción colecti-
los espaciales mediante el cual desde una plata-
va en contextos migratorios: el caso de los jóve-
forma, que quizá se instale en Córdoba [provin-
nes peruanos y el ingreso a la Universidad de
cia mediterránea Argentina], esas naves van a
Buenos Aires. En: Migraciones regionales hacia
salir de la atmósfera, se van a remontar a la es-
la Argentina: diferencia, desigualdad y derechos.
tratosfera, y desde ahí elegirán el lugar donde
A. Grimson y E. Jelin (comps.). pp. 285-323.
quieran ir, de tal forma que en una hora y media
Prometeo Libros. Buenos Aires.
podremos estar en Japón, Corea o en cualquier
parte del mundo” (Clarín, 06-03-1996). Caggiano, S.
El proceso de concentración demográfica, 2005. Lo que no entra en el crisol: inmigración
sumado a los procesos organizativos propios de boliviana, comunicación intercultural y procesos
los inmigrantes bolivianos frente a sus necesida- identitarios. Prometeo Libros. Buenos Aires.
des, volvió “visible” lo que estaba “invisible”
(recordemos que la población de origen limítrofe Ceva, M.
en Argentina nunca superó el 3% de la población 2006. La inmigración limítrofe hacia la Argentina
total). Esta visibilización provocó la puesta en en la larga duración. En: Migraciones regionales
tela de juicio del discurso hegemónico sobre el hacia la Argentina: diferencia, desigualdad y
origen étnico argentino, lo que ocasionó la puesta derechos. A. Grimson y E. Jelin (comps.). pp. 17-
en práctica de mecanismos discursivos xenófobos 46. Prometeo Libros. Buenos Aires.
frente a la supuesta amenaza disruptiva de dicha
inmigración, que impulsados desde el gobierno Constitución de la Nación Argentina. Santa Fe.
central (década del 90´) y desde los medios masi- 1853.
vos de comunicación tomaron el carácter de
hegemónicos. Todo esto implicó una estigmatiza- Di Tella, T.
ción creciente sobre esos sectores migrantes. Co- 1987. Alberdi y Sarmiento ante la organización
mo consecuencia de esto creemos que la inmigra- Nacional. En: Sociedad y Estado en América La-
ción latinoamericana en general y la boliviana en tina. Cap. VIII. Eudeba. Buenos Aires.

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Estigmatización y sociedad: inmigración boliviana en Argentina M. Brebbia

Grimson, A. A. Grimson y E. Jelin (comps.). pp. 69-97. Pro-


2005. Relatos de la diferencia y la igualdad: los meteo Libros. Buenos Aires.
bolivianos en Buenos Aires. Eudeba. Buenos Aires.
2006. Nuevas xenofobias, nuevas políticas étnicas Instituto Nacional de Estadísticas y Censos
en Argentina. En: Migraciones regionales hacia (I.N.D.E.C) – Censo 2001. Censo 2010.
la Argentina: diferencia, desigualdad y derechos. (http://www.indec.gov.ar/)

Centro de Investigaciones Precolombinas • 116


ANTI • Núm. 12 • Diciembre de 2013

LA EDUCACIÓN Y EL TRABAJO: UN CASO EN LA


COMUNIDAD BOLIVIANA DE RÍO CUARTO

Romina Núñez Ozan, Denis Reinoso y Mariano Yedro


Universidad Nacional de Río Cuarto. Centro de Investigaciones Precolombinas
rominaozan@yahoo.com.ar; denisreinoso@gmail.com; marianoyedro@hotmail.com

RESUMEN

La presente investigación se encuadra en el marco de los trabajos de campo de la cátedra de Antropo-


logía Social, Departamento de Historia, Facultad de Ciencias Humanas de la Universidad Nacional de
Río Cuarto, realizados en “Los Hornos” y en el barrio Las Quintas ubicados al noroeste de la ciudad de
Río Cuarto, donde se concentran algunas familias bolivianas. En dicho barrio se ubica la escuela de
nivel primario Bernardino Rivadavia y el colegio secundario IPEM 29. El trabajo se centra en la pro-
blemática de la deserción escolar que se produce en la transición del nivel primario al secundario, por
parte de muchos niños bolivianos. Cuando se analiza la trayectoria escolar de éstos se observa el buen
desempeño que la mayoría desarrolla. Los condicionamientos por la continuidad escolar no provienen,
entonces, de dificultades exclusivamente escolares. La realidad de trabajo y asentamiento de los inmi-
grantes en el barrio Las Quintas, constituyen una variable central de nuestro análisis, puesto que mu-
chos de los entrevistados manifiestan que los estudiantes abandonan la escuela para integrarse al traba-
jo en la ladrillera.
Palabras clave: inmigración, deserción escolar, ladrillera.

ABSTRACT

The present investigation fits in the frame of the fieldworks of the chair of Social Anthropology, De-
partment of History, and Faculty of Human Sciences of the National University of Río Cuarto that was
realized at “Los Hornos” and in the neighborhood of Las Quintas, both located at the northwest of the
city of Río Cuarto, where some Bolivian families concentrate.
In the mentioned neighborhood it is located the school of primary level Bernardino Rivadavia and the
secondary college IPEM 29. The central problems approached will be the school desertion that is pro-
duced in the transition from the primary level to the secondary one by many Bolivian children. When
the school trajectory of these children is analyzed, it is observed the good performance that the majority
develops. The conditionings for the school continuity do not come, then, from exclusively school diffi-
culties. The reality of work and settlement of the immigrants in the neighborhood of Las Quintas, con-
stitute a central variable of our analysis, because many of the interviewed people demonstrate that the
students leave the school to join to the work the brickyard.
Key words: immigration, school desertion, brickyard.

E l presente trabajo aborda la problemática


de la deserción escolar de los adolescentes
de la comunidad boliviana de una ladrille-
ra del barrio “Las Quintas”, en la periferia de Río
Cuarto (Córdoba) y sus vinculaciones con la acti-
A través del trabajo de campo en dicha la-
drillera y las entrevistas a miembros de la comu-
nidad educativa del barrio, se procura realizar un
registro de las problemáticas más comunes que
llevan a la deserción escolar a los adolescentes
vidad productiva de la misma. que concurren a los establecimientos del colegio

117 • Centro de Investigaciones Precolombinas


La educación y el trabajo: un caso en la comunidad boliviana… R. Núñez Ozan, D. Reinoso y M. Yedro

secundario IPEM 29 “Felipe Galizia” y la escuela dad, en el contacto con las personas e instituciones
primaria “Bernardino Rivadavia”. de nuestro país deben ir, de alguna manera, resig-
En un primer apartado, se hace mención nificando su cultura al constituirse como parte
de algunas de las características de los procesos “minoritaria” de la estructura demográfica.
migratorios de los bolivianos en Río Cuarto y su Esta resignificación, puede pensarse un
estrecha vinculación a determinadas demandas proceso natural o necesario para la vida social en
del mercado de trabajo local, destacando aspectos un contexto de intercambios culturales, donde la
sobre su inserción a la sociedad riocuartense en el identificación social se actualiza y se refuerza en
plano político y económico. el contexto, en la comunicación, en el intercam-
Luego se procede a describir la situación bio con el otro, con lo diferente (Gerlero y Car-
laboral y humana registrada en la visita a las la- dinaux 2000: 108). Sin embargo, en gran medida
drilleras a través de las voces de los propios tra- esta resignificación está marcada por procesos
bajadores, para ir construyendo interpretaciones discriminatorios, que generan la adaptación de las
sobre la situación allí presente, a los fines de des- formas de vida que los migrantes traen de su país,
cifrar una parte inherente a la problemática social o simplemente su abandono en favor de las carac-
que se manifiesta a través de la deserción escolar terísticas de las formas culturales en Argentina.
en los adolescentes de la comunidad. Sobre las condiciones económicas de los
Finalmente se ofrece un panorama de la inmigrantes bolivianos en Río Cuarto, cabe decir
situación educativa general de las instituciones que la mayoría de los estudios se han centrado en
del medio y la problemática de la deserción, a aquellos que trabajan en el sector hortícola. Por
través de los testimonios de los docentes del lugar otro lado es necesario mencionar la continuidad
y las relaciones que se pueden establecer con los productiva en torno a la zona periurbana noroeste
resultados del trabajo de campo en la ladrillera. de Río Cuarto, de huertas y quintas de este tipo,
colindante con la ladrillera que es objeto de nues-
ALGUNOS TRAZOS SOBRE LA INMIGRA- tro estudio.
CION DE BOLIVIANOS A RÍO CUARTO… Como se hacía mención, las relaciones so-
ciales subyacentes a la inserción económica de
A través del tiempo, la inserción de los los recién llegados no pueden ser dejadas de lado,
inmigrantes bolivianos en el mercado de trabajo ya que los lazos familiares, los vínculos o redes
argentino se ha ido adecuando a las demandas sociales que ayudan a la supervivencia de las co-
coyunturales; en Río Cuarto, se han articulado munidades que se constituyen en torno a los luga-
fundamentalmente en base a la producción hortí- res de trabajo, configuran la realidad productiva
cola, representando esta circunstancia una varia- de los inmigrantes (Benencia 2009).
ble frecuente de los patrones de asentamiento y Las características de crecimiento econó-
producción en Argentina (Benencia y Geymonat mico o movilidad social, son muy variadas y de-
2005). Sin embargo, el caso que nos ocupa en penden de un sinnúmero de factores, por lo cual
este trabajo, se corresponde a un tipo de produc- no consideramos pertinente hacer observaciones
ción diferente: la de ladrillos para la construcción generales sobre la situación económica de los
por parte de inmigrantes bolivianos. bolivianos en Río Cuarto y limitaremos nuestras
Para llegar a la ciudad, los migrantes tienen observaciones al trabajo en la ladrillera y las con-
contacto con algún familiar o amigo que les pro- diciones de vida de quienes allí habitan.
porciona trabajo y un lugar habitacional proviso-
rio, por lo cual generalmente las personas que tra- UNA LADRILLERA EN LA PERIFERIA
bajan en un mismo lugar también comparten vi- RIOCUARTENSE
viendas o barrios. Por otro lado, esto genera situa-
ciones difusas en la pervivencia de sus prácticas Una primera impresión
culturales, ya que si bien en los círculos más o
menos cerrados en los que residen suelen realizar En la periferia Noroeste de Río Cuarto,
festividades u otras manifestaciones de su identi- camino a Tres Acequias se encuentra el barrio

Centro de Investigaciones Precolombinas • 118


ANTI • Núm. 12 • Diciembre de 2013

“Las Quintas” uno de los principales focos de de una señora, a quién conoceríamos como Ce-
recepción de inmigrantes bolivianos y dónde se gondena.
encuentra la ladrillera en la que realizamos nues- La señora nos saluda y dialoga con noso-
tro trabajo de campo. tros mientras vigila a sus nietas. Llegó a la Ar-
Ingresando por el camino de tierra que nos gentina desde Potosí, primero a Mendoza, donde
lleva al lugar, a ambos lados se observan las de- trabajó en horticultura. Desde hace unos años
presiones dónde se han realizado las excavacio- vive en Río Cuarto a donde, bajo expectativas de
nes de tierra, con la cual se producen los ladrillos. mejores condiciones de vida, su familia vino a
En general, se observan modestas casas y varias trabajar directamente en la ladrillera. Nos comen-
quintas que pertenecen tanto a los bolivianos co- ta de la dureza de las condiciones de trabajo en
mo a otros vecinos no inmigrantes. En la entrada los ladrillos, pero ya no quiere regresar a Bolivia.
principal de la ladrillera se encuentran las oficinas Nos manifiesta estar “bien” en Argentina,
y demás dependencias, además de la casa del que conservan pocas tradiciones pero ella habla
patrón. quechua, al menos en su casa. En cuanto a su
Ya adentrándonos en el lugar comienza el familia, nos comenta que sus nietos asisten todos
área de producción, donde se puede observar las a la escuela, les gusta, y considera importante que
pilas de ladrillos, los grandes pozos donde se ex- ellos asistan.
trae la tierra, los hornos y desde muy temprano y La saludamos y continuamos unos pocos
hasta muy tarde, la labor permanente de los em- metros más al frente de la vivienda de Cegondena
pleados del lugar. donde encontramos a Benito, de 24 años, traba-
Las condiciones de trabajo en la ladrillera jando en tareas de albañilería sobre la casa de su
son duras, las herramientas, las ropas y los ele- hermana; nos saluda y recibe con la misma sonri-
mentos de prevención, no favorecen la labor de sa y cordialidad de Octavio.
los bolivianos, que deben compensar estas falen- Benito nos cuenta de su vida, entre Boli-
cias en la productividad extendiendo su trabajo en via y Argentina. Oriundo de Sucre, terminó sus
horas y un esfuerzo físico desmesurado, sorpren- estudios secundarios y vino a Argentina a “hacer
dente, si vemos el peso de las carretillas repletas plata”, para poder estudiar ingeniería económica
de ladrillos que cargan en decenas de viajes al en alguna universidad de Bolivia. Estuvo un bre-
día, jóvenes que apenas son adolescentes. ve tiempo en 2006 en Río Cuarto, luego migró a
Octavio, uno de estos adolescentes, nos Esquel a trabajar en la cosecha de frutilla. Final-
recibe con una sonrisa y una cortesía que no pue- mente volvió a Bolivia pero no logró ingresar a la
de dejar de llamar la atención, enterrado como universidad así que regresó, hace unos meses, a
está hasta la cintura en barro y trabajando con la Río Cuarto. Ahora realiza labores de albañilería,
pala, a pleno sol de la siesta. Nos sugiere que fundamentalmente en las viviendas de la ladrille-
visitemos la zona de las viviendas, ya que la ma- ra. Sus sueños de estudiar quedaron marginados.
yoría de los hombres se encuentran trabajando en Amigos suyos que viven en Mendoza le dijeron
los hornos u en otra ocupación. que era en vano, que luego la gente no tomaba a
Una serie de caminos estrechos por las los universitarios bolivianos para trabajar. Le
elevaciones del lugar, nos lleva hacia las vivien- dejamos continuar su labor y continuamos con
das de los trabajadores. Abandonadas o sin techo, nuestro recorrido.
aparecen las primeras viviendas que los alberga-
ron al llegar al lugar, por lo general bajas y pe- ALGUNAS INTREPRETACIONES SOBRE
queñas, características del altiplano. La mayoría EL TRABAJO Y LA VIDA DE LOS INMI-
de las casas actuales, están en condiciones de GRANTES EN LAS LADRILLERAS
construcción, son tradicionales, de trazado rec-
tangular, algunas de dos pisos. Se observan algu- Estas impresiones y testimonios registra-
nos albañiles trabajando al calor de la siesta, va- dos en la ladrillera, se complementarían y enri-
rios niños juegan con destartalados autos y muñe- quecerían con sucesivas visitas y entrevistas a los
cas, vigilados por la atenta pero silenciosa mirada trabajadores, patrones y otros actores sociales

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La educación y el trabajo: un caso en la comunidad boliviana… R. Núñez Ozan, D. Reinoso y M. Yedro

involucrados indirectamente con el lugar a partir para ayudar en las tareas domésticas o en la ladri-
de instituciones educativas o de servicios asisten- llera, y llegada cierta edad muchos adolescentes
ciales. dejan sus estudios para pasar a trabajar en la
En general los inmigrantes manifiestan misma.
haber llegado a la Argentina en búsqueda de me- En general, los residentes y trabajadores
jores condiciones económicas, muchas veces para nos manifiestan estar, en mayor o menor medida,
ahorrar y regresar a su país para invertir en otras conformes con la vida que llevan en Argentina,
producciones o simplemente para ayudar a su pero es recurrente escuchar también la familiar
familia. Pero hay quienes también llegan espe- frase: “es lo que hay”. Benito nos narraba un po-
rando asentarse en nuestro país y desarrollar su co de su sensación de resignación a las condicio-
vida aquí. nes de vida actuales, de falta de expectativas para
En general los bolivianos asentados en la mejorar su situación económica, y de tristeza o la
ladrillera, logran mantenerse en condiciones desilusión frente a las esperanzas que traía a su
económicas al menos aceptables, gozan de vi- arribo a la Argentina. Al final, ahorrar es cada vez
vienda (los terrenos se los provee el propio patrón más difícil y requiere más trabajo, por lo cual la
para el que trabajan) y servicios básicos. Suelen diferencia económica con Bolivia no es tan gran-
vivir familias ampliadas, de hasta 6 o 7 siete de; sin embargo, ya han establecido su vida aquí,
miembros por casa, según nos manifestaban algu- por lo cual se contentan con viajar al menos una
nos de los entrevistados. En muchos casos poseen vez al año, para los carnavales.
vehículos, pero también el transporte urbano Con todo esto, podemos considerar que
público llega hasta unas pocas cuadras del lugar. los trabajadores bolivianos de la ladrillera y sus
La realidad económica de los bolivianos familias se encuentran en condiciones de pobreza
esconde muchos matices. En general, el acceso a integrada (Rocchietti 2000), esto debido a que en
estas condiciones mínimas de vida está ligado a general poseen trabajos estables y se desenvuel-
un trabajo sumamente duro y de grandes exigen- ven en vínculos sociales sostenidos, que en mu-
cias en la ladrillera, en condiciones deplorables. chos casos están relacionados por vínculos de
Su supervivencia está ligada a una estrecha de- parentesco. Sin embargo, la reducida demanda de
pendencia del patrón y el ingreso apenas alcanza trabajo en otros sectores y la escasa o nula capa-
para satisfacer necesidades básicas1. cidad técnica de los inmigrantes al llegar al país,
Los bolivianos, hombres y también muje- los pone inmediatamente en lo más bajo de la
res, trabajan durante todo el día en la ladrillera o escala productiva y en estrecha dependencia a las
en labores de albañilería en el barrio y luego sue- vicisitudes del patrón. “En todo ello emerge algo
len volver a trabajar en la construcción de sus así como una legitimidad de la desigualdad, a
propias casas también. Las mujeres por lo general través de la generosidad, a la vez que esta gene-
se ocupan de las labores hogareñas, pero como se rosidad legitima y perpetua esta desigualdad a
hacía mención, también las vimos “colaborar” través de los vínculos de reciprocidad (…) la
junto a sus esposos en las labores con el barro. generosidad de las autoridades comunales es
Los niños se encuentran mal vestidos y parte de la forma de ejercicio de su autoridad
jugando en peligrosas condiciones de higiene, sobre la sociedad, al tiempo que su legitimación
entre las construcciones y pozos negros abiertos como autoridad” (García Linera 2009: 347). Esta
por sus padres. Las madres entrevistadas nos ma- situación, en general, condiciona sus metas de
nifiestan que envían sus niños al colegio y cuidan movilidad social y los ata a una realidad suma-
de sus estudios, sin embargo, algunos de los pro- mente dura, con grandes dificultades para inser-
fesores nos dicen que, pese a ser en general muy tarse en una sociedad extraña a sus costumbres. A
buenos alumnos, recurrentemente faltan a clases decir de Benencia y Karasik (1995: 41): “Los
migrantes bolivianos -quizá más que otros de
1 países limítrofes- ocupan posiciones sociales su-
TESTA, F. para: LV16.COM. (5/07/2009) Rostros de
Cobre. Disponible en: http://www.lv16.com/r5/notas/ver_ bordinadas en el mercado de trabajo argentino,
nota.php?id=002371. Consultado el: 10/12/2011. mientras que en la vida cotidiana son también

Centro de Investigaciones Precolombinas • 120


ANTI • Núm. 12 • Diciembre de 2013

objeto de prácticas discriminatorias y frecuente- público es una demanda recurrente a la que debi-
mente hostiles”. eran darle una solución “Más que todo estamos
Frente a esta problemática general, pre- peleando para que el colectivo amplíe su recorri-
tendemos enfocar nuestro trabajo en uno de los do, porque hay muchos chicos que tienen que
aspectos de contacto entre la comunidad bolivia- caminar unos cuantos kilómetros hasta la garita,
na de la ladrillera y sus características de vida y llegan muy retrasados a la escuela y se complica
trabajo, frente a la sociedad y las instituciones de mucho cuando llueve, acá hay mucho peligro en
nuestro país. Nos centraremos en las instituciones la calle, pasan camiones y es angosto el camino”
educativas del medio, para abordar la problemáti- En la Escuela Rivadavia, estudian niños
ca de la deserción escolar, pues consideramos que de la comunidad boliviana. En la actualidad, son
ésta se encuentra estrechamente vinculada con las alrededor de noventa los chicos que aprenden en
condiciones laborales de los inmigrantes residen- el establecimiento educativo, representando a un
tes en la ladrillera y el barrio Las Quintas en ge- 30% de la población escolar. Se trabaja pedagó-
neral. gicamente con la convivencia de niños que tienen
diferentes valores y costumbres. Al ingresar al
APROXIMACIONES A LA PROBLEMÁTI- establecimiento las banderas de Bolivia y Argen-
CA DE LA DESERCION EN EL NIVEL tina dan la bienvenida a un lugar donde lo que
MEDIO prima es la interculturalidad. María Rosa Rissati,
vice-directora de la Escuela Bernardino Rivada-
La deserción escolar es un problema que via, comentó que la escuela ha crecido mucho y
afecta todos los niveles educativos de nuestro demostró su satisfacción por el largo camino re-
país. En el caso de los migrantes bolivianos o corrido. Mencionó que la institución cuenta con
hijos de bolivianos una de las razones principales 280 alumnos aproximadamente, de los cuales un
de la deserción escolar en el nivel medio, está 30% corresponde a niños de la comunidad boli-
dada por la inserción temprana de los niños en el viana.
mundo laboral. Javier, de 13 años, cuenta que Aseguró que los niños bolivianos hablan
llegó en camión con sus padres bolivianos desde muy bien el español, aunque quieren y respetan
Mendoza. Va a primer año del IPEM 29. Ayuda su lengua. “Ellos mantienen vivas sus costumbres
en el cortadero. Ayer pasó media mañana bombe- ancestrales que son hermosísimas. Además, tie-
ando agua para regar una quinta diminuta de le- nen un fuerte sentido de familia”, manifestó;
chugas y repollos, asediada por perros sueltos.2 también que “eso es algo que en la escuela y en el
Las instituciones educativas más cercanas interactuar de los chicos se nota mucho. Es algo
a “Los Hornos” funcionan en un mismo terreno, para revalorizar dentro de esta cuestión de la cul-
la de nivel primario “Bernardino Rivadavia” y la tura altiplánica. La institución de la familia sigue
de nivel medio IPEM 29 “Felipe Galizia”. Para mucho más firme”.
acceder es necesario caminar un largo tramo des- La matrícula en el secundario se mantiene
de la última parada que realiza el colectivo y si se en el mismo porcentaje en el primer año, luego
quiere llegar a la escuela desde el barrio, la dis- cae a un 15% aproximadamente. Personal admi-
tancia es considerable. Margarita, mamá bolivia- nistrativo del IPEM 29 declaraba que por curso
na, manifiesta mientras camina por una de las asisten entre 3 y 5 chicos bolivianos. Norma, do-
polvorientas calles del barrio Las Quintas, que cente del IPEM 29, desde su experiencia nos de-
necesita que los colectivos alarguen su recorrido cía: “Soy profesora de Geografía en el IPEM 29 e
para que los niños no tengan que caminar tanto IPEM 27, en los dos hay presencia de alumnos
para ir a la escuela. Para Felisa, la del transporte bolivianos, la verdad es que mi experiencia ha
sido siempre positiva, son chicos respetuosos y
2
muy aplicados en el estudio, muchos de ellos so-
PUNTAL.COM.AR (03-12-2008) Amplían el diccionario bresalientes, los que llegan a terminar el secunda-
Quechua del Jardín Rivadavia. Disponible en:
http://www.puntal.com.ar/noticia.php?id=47467. Consulta- rio, toman las costumbres de los ‘nuestros’ y ge-
do el 10-12-2011. neralmente dejan de ser calladitos y tan respetuo-

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La educación y el trabajo: un caso en la comunidad boliviana… R. Núñez Ozan, D. Reinoso y M. Yedro

sos (risas), es que los nuestros son terribles a ve- didácticos del sistema educativo en estas institu-
ces. Si bien la matrícula de niños bolivianos en la ciones, al menos no que se manifiesten en las
escuela primaria es grande, en el secundario des- evaluaciones docentes. Sin embargo, la problemá-
ciende de manera importante, no he indagado tica de la discriminación podría generar algunos
mucho en el tema, pero es sabido que estos niños concomitantes negativos en la vida escolar de los
ni bien terminan el primario, comienzan a trabajar niños bolivianos.
con la familia, en los hornos de ladrillo. A los La razón que generalmente trae a migran-
padres se los ve interesados en que se alfabeticen, tes de países limítrofes a nuestro país es mejorar
que aprendan a leer y a escribir. Pero una vez que su situación económica. Muchos migrantes ex-
salen del primario, muchos comienzan a trabajar presan que la vida en Bolivia solo permite la sub-
en la ladrillera junto a su familia, y algunos en la sistencia y aquí pueden “progresar” gracias al
construcción” ahorro, lo cual implica una priorización del traba-
En entrevista con la vicedirectora de la jo, y nuclea a la totalidad del grupo familiar. Pro-
escuela Bernardino Rivadavia, nos decía que el bablemente, de acuerdo a los avances de nuestra
tema de la discriminación fue crucial como impe- investigación exploratoria, la causa principal de la
dimento para que los chicos bolivianos se integra- deserción en las instituciones del lugar, espe-
ran a la vida escolar: “Empezamos a armar un cialmente en el nivel medio, esté dada por la in-
proyectito así de ‘entre-casa’, pero que tenía co- serción de los adolescentes bolivianos e hijos de
mo su objetivo principal, esto de poder dar res- bolivianos a la actividad laboral.
puesta a esta problemática que veíamos que ten-
íamos, que no podíamos tener… ‘como dos es- CONSIDERACIONES FINALES
cuelas en una’. Porque los chicos no lograban
relacionarse, los chicos bolivianos y los argenti- Los procesos de migraciones limítrofes
nos. Y tampoco nos animábamos de alguna ma- son instancias sumamente complejas, que adquie-
nera… ni los chicos ni nosotros, a hablar de esto, ren nuevas dimensiones para su comprensión, en
a decir somos bolivianos y somos argentinos, el marco de una realidad cultural globalizante. En
estamos juntos acá y ¿qué hacemos con esto? Era la Argentina y en nuestro Río Cuarto, la afluencia
como que cada uno en su lugar y si bien trato de de bolivianos en las últimas décadas ha sido una
no decirte nada, pero por ahí se me escapa y muestra de estas instancias de movimientos po-
¿cómo lo resolvemos?”. Luego nos comentó qué blacionales que se insertan al mercado laboral,
tipo de proyectos de convivencia e integración fundamentalmente ocupando espacios producti-
llevaron a cabo y nos decía que los resultados vos que la oferta de mano de obra locales no lo-
fueron positivos. “Pudieron crecer como grupo y gran satisfacer por distintas causas. Esta posición,
nos pareció que esto era un buen broche, para si bien adquiere muchos matices para su explica-
esto de poder decir ‘bueno estamos convencidos ción, nos parece mucho más acertada que la tradi-
que se puede’. Siempre en la escuela le decimos cional visión popular que suele identificar a los
esto a los docentes que ingresan o en cada año migrantes bolivianos o de otros países limítrofes
que empezamos: si estás convencido que este como una amenaza potencial para el sustento
niño puede aprender, va a aprender, si estamos económico de la población local, cuando de ma-
convencidos que podemos convivir, vamos a nera injusta y agraviante se afirma que vienen a
convivir”. “robar trabajo” o a “parasitar el país”.
Del testimonio de los directivos y docen- Lejos de esta realidad, los trabajadores bo-
tes podríamos decir que generalmente no se ob- livianos se destacan por su laboriosidad y su in-
servan problemas de adaptación al sistema esco- fluencia positiva en el crecimiento económico de
lar, destacan el desempeño escolar de los niños y nuestro país, aún así, estas nuevas instancias pro-
adolescentes y remarcan que son sobresalientes. ductivas y sociales, distan mucho de ser efecti-
Por lo tanto no identificamos como causa princi- vamente contempladas dentro de marcos legisla-
pal de la deserción en el nivel medio, las cuestio- tivos o políticos que favorezcan su integración y
nes de adaptación a los contenidos o esquemas desarrollo económico y cultural como habitantes

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ANTI • Núm. 12 • Diciembre de 2013

y/o ciudadanos de Argentina. Esta situación glo- dónde consideramos necesario evaluar, de aquí en
bal sobre todo en lo concerniente a las circuns- más, las políticas del municipio, las formas de
tancias laborales y de asentamiento, afecta direc- organización y ayuda mutua por parte de los ve-
tamente otras esferas de la vida del inmigrante, cinos y el rol de la Universidad Nacional de Río
como por ejemplo, en la inserción escolar de los Cuarto y nosotros mismos, para favorecer la solu-
niños, sector más vulnerable pero uno de los más ción de la problemática concreta de la deserción
ricos para el surgimiento de una nueva realidad escolar, pero también, como entendemos necesa-
que favorezca el respeto y tolerancia a la diversi- rio, la realidad global de los inmigrantes bolivia-
dad cultural, bases para una integración económi- nos en Río Cuarto.
ca regional, consciente y sustentable, frente a los
avances de los intereses de los grandes capitales BIBLIOGRAFIA
internacionales.
La vida en la ladrillera es sumamente du- Benencia, R.
ra; los núcleos familiares deben colaborar perma- 2009. Inserción de bolivianos en el mercado de
nentemente para no caer en situaciones de extre- trabajo en Argentina. En: Congreso 2009, Aso-
ma pobreza. Sin embargo, el hecho de que pue- ciación de Estudios Latinoamericanos (LASA).
dan subsistir con los bienes y servicios mínimos y pp. 1-20. Río de Janeiro.
necesarios, suele esconder una realidad oscura, http://www.aset.org.ar/congresos/7/15011.pdf
eludida en el discurso político, pero totalmente
expuesta a la vista en las ropas andrajosas de los Benencia, R y M. Geymonat
niños y en las manos marcadas por el amasijo del 2005. Migración trasnacional y redes sociales en
barro de los jóvenes trabajadores. la creación de territorios productivos en la Argen-
Estas situaciones límites, son sobrelleva- tina. Río Cuarto, Córdoba. Cuadernos de Desa-
das con el esfuerzo y la voluntad que caracteriza a rrollo Rural N° 55. 9-26. Pontificia Universidad
todos los integrantes de la comunidad, pero los Javeriana. Bogotá.
sacrificios son grandes y nocivos a largo plazo.
Los niños son los principales afectados de esta Benencia, R. y G. Karasik
realidad. Cuando sus brazos son necesarios para 1995. Inmigración limítrofe: los bolivianos en
el trabajo no pueden eludir la responsabilidad que Buenos Aires. CEAL. Buenos Aires.
les da su pertenencia social y su condición
económica en la ladrillera, debiendo resignar la García Linera, A.
educación por el estómago y el techo. Como se- 2009. Forma valor y forma comunidad.
ñala Koldorf (2010: 83): “Los adolescentes ex- CLACSO. Buenos Aires.
cluidos van quedando en peores condiciones, al
no contar con una formación básica suficiente Gerlero, M. y N. Cardinaux
para insertarse en el mercado de trabajo formal, 2000. Sociología Argentina. Docencia. Fundación
agudizándose su situación de vulnerabilidad y Hernandarias. Buenos Aires.
exclusión”.
Nuestra investigación avanzó en las entre- Koldorf, A.
vistas y en la recolección de información favore- 2010. Las relaciones de género y las diversidades
ciendo una mirada general sobre las problemáti- de la pobreza. En: Multiculturalismo y diversi-
cas más acuciantes de los inmigrantes de la ladri- dad. Un debate actual. A. Koldorf (comp.). pp.
llera y su vínculo con las instituciones educativas 75-87. Protohistoria. Rosario.
del medio. Si bien la escuela y los docentes mani-
fiestan apertura y predisposición para el trabajo Rocchietti, A.
desde propuestas innovadoras y desde la intercul- 2000. La cultura como verdad: pobreza latinoa-
turalidad, la problemática de la deserción escolar mericana. Revista Herramienta N° 12: 4-14.
escapa o sobrepasa la capacidad y el ámbito de Buenos Aires.
acción de estas instituciones. En este lugar es

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La educación y el trabajo: un caso en la comunidad boliviana… R. Núñez Ozan, D. Reinoso y M. Yedro

Notas periodísticas Diario La Voz del Interior (28-08-2008) No die-


ron abasto para censar los inmigrantes bolivia-
Testa, F. para: LV16.COM. (05-07-2009) Rostros nos.
de Cobre. http://archivo.lavoz.com.ar/08/08/28/secciones/so
http://www.lv16.com/r5/notas/ver_nota.php?id=0 ciedad/nota.asp?nota_id=234995 Consultado el
02371. Consultado el: 10-12-2011. 10-12-2011.

Diario Puntal (03-12-2008) Amplían el dicciona- Diario Puntal (27-7-2009) En dos años se dupli-
rio Quechua del Jardín Rivadavia. caron los bolivianos que viven en la ciudad.
http://www.puntal.com.ar/noticia.php?id=47467. http://www.puntal.com.ar/noticia.php?id=60693.
Consultado el 10-12-2011. Consultado el 13-11-11.

Centro de Investigaciones Precolombinas • 124


ANTI • Núm. 12 • Diciembre de 2013

HISTORIAS DE FRONTERA.
UNA APROXIMACIÓN AL PROCESO INMIGRATORIO
PERUANO EN BUENOS AIRES A PARTIR DE LA
CONSTRUCCIÓN DE RELATOS BIOGRÁFICOS

Martín Álvarez Litke y Facundo Petit de Murat


Facultad de Filosofía y Letras, Universidad de Buenos Aires / Centro de Investigaciones Precolombi-
nas, Instituto Superior del Profesorado Dr. Joaquín V. González
esnowel@hotmail.com; facundo_petit@hotmail.com

RESUMEN

La gran afluencia de inmigrantes peruanos a la Argentina que se ha producido principalmente desde los
años ’80, ha sido convertida, tanto por el ámbito académico como por los medios masivos de comuni-
cación, en uno de los principales ejes de debate de las últimas décadas. Junto a este debate, se observan
aparejadas ciertas ideas homogeneizantes de la identidad peruana, conformadas mediante una serie de
objetivaciones peyorativas tales como asociaciones del “ser peruano” con el narcotráfico o el robo. El
objetivo del siguiente trabajo será discutir estos postulados a partir de la construcción de relatos de vida
de peruanos instalados en Buenos Aires para dar cuenta de la multiplicidad de causas, procesos y expe-
riencias que conlleva este tipo de migración. Consideramos que el relato biográfico constituye un nue-
vo acercamiento a este tipo de problemática para desenmascarar los comentarios discriminatorios que
circulan cotidianamente, producto de la desinformación y el desconocimiento. De tal manera, se han
realizado entrevistas a migrantes de distintas partes del Perú, con el objetivo de generar relatos de vida
que nos den la posibilidad de contrastar empíricamente la imagen homogénea del peruano y de vincular
estos relatos con procesos más generales.
Palabras clave: relato biográfico, migración, identidad.

ABSTRACT

The large influx of Peruvian immigrants to the Argentina which has occurred mainly since the 1980s
has been converted, by both academic field and the mass media into one of the main axis of debate in
recent decades. Alogside this debate, there are generalizing ideas of Peruvian identity, formed through
a series of derogatory commentaries, such as associations of “being Peruvian” with drug trafficking or
theft. The objective of this paper will be to discuss these ideas by constructing life stories of Peruvians
installed in Buenos Aires, to account for the multiplicity of causes, processes and experiences resulting
from this type of migration. We believe that the biographical account constitutes a new approach to this
type of problem, to unmask the discriminatory comments circulating on a daily basis, product of
misinformation and ignorance. To achieve this, we have interviewed migrants from different parts of
Peru, with the goal of generating life stories that give us the possibility to empirically compare the
homogeneous image of the Peruvian and link these stories with more general processes.
Key words: life story, migration, identity.

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Historias de frontera. Una aproximación al proceso inmigratorio… M. Álvarez Litke y F. Petit de Murat

INTRODUCCIÓN un gran espacio verde ubicado en el suroeste de la

L
Ciudad de Buenos Aires, junto a barrios como
a inmigración peruana en Argentina y, Villa Soldati y Villa Lugano. Durante ese episo-
más específicamente, en la Ciudad de dio, se puso en juego la política habitacional del
Buenos Aires y sus alrededores, ha consti- gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, ya que
tuido un eje de numerosos debates tanto académi- cientos de personas reclamaron su derecho a obte-
cos como públicos, que de ninguna forma han ner una vivienda digna. Lo resultante de este con-
quedado saldados, como se observa en su reitera- flicto fueron varios enfrentamientos entre los ma-
da aparición en los medios de comunicación. Esta nifestantes, los vecinos y la policía. En ese con-
discusión se ha venido desarrollando principal- texto, el jefe de gobierno de la ciudad, Mauricio
mente desde los años 80, década desde la cual la Macri, sostuvo que uno de los principales factores
cantidad de migrantes ha crecido considerable- que causaban el conflicto era la “política inmigra-
mente, convirtiendo a la comunidad peruana en la toria descontrolada”3, concluyendo su razonamien-
cuarta mayor población inmigrante en Argentina to con el argumento de que la Ciudad de Buenos
según el censo nacional del 20101. Esto supone Aires no tiene por qué hacerse cargo de todos los
un crecimiento desde el año 2001, donde las ci- problemas habitacionales de los países limítrofes y
fras de la comunidad peruana en Argentina se otros países de América. Al mismo tiempo, asoció
elevaban a 88.260 personas, ubicándola por deba- esta inmigración con un aumento del narcotráfico
jo de Uruguay, España e Italia, que hoy en día y la delincuencia.
han sido superados. Advertimos que la cantidad A partir de estos ejemplos, cabe decir que
de gente puede incluso ser mayor, teniendo en suponemos que todas estas ideas asociadas al “ser
cuenta la situación irregular en la que muchos peruano”, derivan de una homogeneización que
inmigrantes viven en nuestro país. se tiene de aquellos migrantes provenientes de
Es sabido que, más allá de la recepción distintos países de Latinoamérica. Tanto en la
legislativa que nuestro país tiene con las pobla- calle, en algunos medios, en las canchas de
ciones extranjeras a partir de lo consignado en el fútbol, generalmente se enuncia la nacionalidad
Preámbulo de la Constitución Nacional Argenti- como un insulto, como si fuera un estigma en sí
na2, no sucede lo mismo con las percepciones, mismo. Siguiendo a Erving Goffman, el estigma
leyendas y el imaginario colectivo que se ha es un atributo “profundamente desacreditador”
creado en torno a la mayoría de los inmigrantes (Goffman 1995: 13), a partir del cual, a simple
de países latinoamericanos en Buenos Aires. Así vista, un sujeto categoriza e identifica socialmen-
es que tanto los bolivianos, como los paraguayos te al otro. El discurso xenofóbico parte de estos
y los peruanos, es decir, los principales países de estigmas y asocia un estereotipo fenotípico con
origen de la mayoría de los inmigrantes, son re- rasgos de personalidad negativos y antisociales,
ceptores de múltiples comentarios y acciones tales como el robo y el narcotráfico, entre otros.
discriminatorias, generalizadoras y construidas a Más aún, estos estereotipos negativos sirven para
partir del desconocimiento. justificar las precarias condiciones laborales y
El acontecimiento más reciente que desató habitacionales a las que son sometidos los inmi-
la polémica en torno a este tema tuvo lugar durante grantes, al no poder acceder fácilmente a un esta-
el conflicto que se produjo en el Parque Indoame- tus legal de ciudadanía.
ricano a fines del 2010, cuando cientos de familias
argentinas, bolivianas y paraguayas efectuaron un MARCO TEÓRICO
reclamo para terminar con el hacinamiento en el
que viven. El Parque Indoamericano consiste en En oposición a estos supuestos, conside-
ramos que es de vital importancia deconstruir este
1
En el censo del 2010 se registraron 550.713 paraguayos,
345.272 bolivianos, 191.147 chilenos y 157.514 peruanos.
2 3
“(…) asegurar los beneficios de la libertad para nosotros, Ver http://www.lanacion.com.ar/1332327-macri-califico-
para nuestra posteridad, y para todos los hombres del mun- la-politica-migratoria-de-descontrolada (Obtenida el 18 de
do que quieran habitar el suelo argentino (…)”. enero de 2012).

Centro de Investigaciones Precolombinas • 126


ANTI • Núm. 12 • Diciembre de 2013

tipo de imaginario cargado de prejuicios y muy allá, aunque no al margen, de las trabas de los
presente en grandes sectores de la sociedad aún sistemas prescriptivos y opresivamente normati-
hoy en día, el cual no compartimos pero tampoco vos” (Levi 1996: 121).
nos es extraño, a partir de la pertenencia a un con- Así, la actividad humana no es tomada por
texto en el que abunda la posibilidad de escuchar la microhistoria como determinada por causas
y conocer este tipo de comentarios peyorativos. sociales, sino que más bien la acción se ve condi-
Para abordar este tema nos parece apro- cionada por la estructura, pero siempre con un
piada la aproximación antropológica a través del margen que permite que los sujetos tengan la po-
relato de vida, ya que éste permite el acceso a sibilidad de actuar de otra forma. Existen induda-
historias concretas que sirven para ejemplificar blemente condicionamientos externos que prece-
procesos y experiencias y mostrar su heteroge- den a los sujetos y su accionar, pero asimismo, las
neidad, lo cual permitirá contraponer estas histo- acciones de los sujetos pueden producir condicio-
rias de vida a la visión homogénea del inmigrante nes nuevas, no previstas. Entonces, resulta acer-
peruano. En este sentido, resulta de suma utilidad tado el planteo de Levi de que hasta la más pe-
retomar los aportes de la microhistoria italiana, a queña acción implica necesariamente al sistema
partir de las ideas de Carlo Ginzburg y Giovanni más amplio en el cual está inserta.
Levi. Lo interesante de la postura de estos autores Por este motivo, un enfoque micro como
es que proponen una historia que no pone el foco el que proponemos resulta válido en tanto la vida
en los procesos generales y los grandes aconteci- cotidiana de los sujetos se vuelve problematiza-
mientos, y en su lugar llevan a cabo una investi- ble. Tal como plantea Rossana Reguillo Cruz, “la
gación minuciosa de sucesos a una escala mucho vida cotidiana es histórica, es decir, no puede
menor. Coincidimos con Ginzburg en que la im- pensarse al margen de las estructuras que la
portancia de la investigación no está inexorable- producen y que son simultáneamente producidas
mente ligada a las dimensiones del objeto, sino (y legitimadas) por ella” (Reguillo Cruz 1998: 2).
que más bien es definida por la calidad de las La vida cotidiana puede funcionar como espejo
preguntas formuladas a la documentación (Ginz- de la historia, en tanto grandes acontecimientos
burg 2004:186). De esta forma, al hablar de mi- como guerras pueden modificar dramáticamente
crohistoria no nos referimos a un objeto pequeño la cotidianeidad y dejar sus huellas en los aspec-
o marginal, sino más bien a una perspectiva analí- tos más íntimos de la vida de los sujetos; pero
tica, a una forma particular de enfocar el proble- también la vida cotidiana puede ser el fermento
ma de investigación (Ginzburg 2004: 188). Tal de la historia, ya que los grandes cambios sociales
como plantean Bourdieu y Wacquant, la impor- a menudo se expresan en primera instancia en lo
tancia social o política del objeto no basta para cotidiano (Salgueiro 1998: 6).
justificar el discurso científico que se le dedique, Vinculado a esto, el relato de vida ha sido
ya que la cuestión radica más bien en “construir la forma en la que decidimos sistematizar las en-
objetos socialmente insignificantes en objetos trevistas realizadas. Los primeros usos de esta
científicos” (Bourdieu y Wacquant 1995: 163). metodología estuvieron restringidos a la recons-
Así, se evita abordar el problema tal como se pre- trucción biográfica de individuos relevantes o
senta al sentido común, permitiendo estudiar las personajes ilustres, debido a que los autores esta-
distintas dimensiones analíticas del objeto de es- ban fuertemente influenciados por una corriente
tudio. historiográfica europea más tradicionalista que
Con estas consideraciones en mente, la centraba su escritura en la descripción de lo que
microhistoria nos parece un punto de partida inte- ellos consideraban grandes eventos y personas.
resante para realizar nuestra investigación, ya que En las últimas décadas, sin embargo, se produjo
la misma está focalizada en: “buscar una des- un giro, probablemente signado por un encuentro
cripción más realista del comportamiento huma- interdisciplinar entre la Antropología y la Histo-
no, recurriendo a un modelo de la conducta ria, a partir del cual se comenzó a considerar la
humana en el mundo basado en la acción y el posibilidad de ilustrar grandes procesos a partir
conflicto y que reconoce su -relativa- liberad más de historias de sujetos individuales, lo cual resue-

127 • Centro de Investigaciones Precolombinas


Historias de frontera. Una aproximación al proceso inmigratorio… M. Álvarez Litke y F. Petit de Murat

na a la microhistoria anteriormente desarrollada. de sucesos, procesos y discursos que moldean su


Lo que los actores sociales pueden proporcionar “situación biográfica” (Schutz 1974: 93 citado en
es la manera en la que la realidad repercute sobre Piña 1989: 4), es decir, su sincronía, su ubicación
ellos y cómo ellos actúan sobre esa realidad, de- espacio-temporal. Por último, es importante des-
safiando aquellos enfoques demasiado estructura- tacar las “condiciones materiales y simbólicas de
listas que le quitaban la posibilidad de agencia al generación del relato autobiográfico” (Piña
sujeto. De esta manera, consideramos que el rela- 1989: 9), que determinan, de alguna manera, el
to de vida de migrantes peruanos a la Argentina, fluir de la entrevista que da lugar al relato de vi-
puede resultar una aproximación sumamente es- da. Desarrollaremos brevemente este punto en la
clarecedora del proceso migratorio más amplio. siguiente sección.
La multiplicidad de causas que llevan a una per-
sona a migrar a otro país no puede encerrarse en METODOLOGÍA
un estereotipo, sino que detrás de cada instancia
existe una historia particular. En esta investigación la técnica de campo
Lo que buscamos mediante el relato de utilizada fue la entrevista antropológica, llevada a
vida no es una reconstrucción literal de las entre- cabo con el objetivo de conocer las situaciones
vistas ya que, como indica Carlos Piña, “la natu- particulares que atravesaron los entrevistados en
raleza y especificidad del relato autobiográfico su migración desde Perú hacia la Argentina. La
es la de un discurso particular, de carácter inter- particularidad de la entrevista etnográfica consiste
pretativo, y no la reconstrucción verbal de ciertos en que, a diferencia de lo que constituye un cues-
acontecimientos pasados” (Piña 1989: 1). Así, la tionario estandarizado, se trata de una práctica de
labor del investigador reside en tomar estos rela- investigación no directiva (Guber 1991: 205).
tos a la manera de descripciones densas, tal como Esto no significa una negación de la inevitable
lo ha expuesto el antropólogo Clifford Geertz. asimetría que se genera entre el investigador y el
Mediante este concepto, lo que Geertz hace es entrevistado, pero alude a una forma de encarar la
comprender que un hecho observado a simple entrevista que intenta enfocarse en el informante,
vista puede ser plausible de múltiples interpreta- permitiendo que el mismo introduzca sus priori-
ciones, pero que es labor del antropólogo meterse dades en forma de temas de conversación y
entre las tramas de los significados y ver cuál es prácticas. Lo fundamental es que el investigador
el sentido que el sujeto busca darle al discurso. se mantenga atento a cualquier información que
Esto es así debido a que “la mayor parte de lo le proporcione el entrevistado, por más superflua
que necesitamos para comprender un suceso par- que pareciera en el momento de la entrevista
ticular, un rito, una costumbre, una idea o cual- (Guber 1991: 214-215). Así, el investigador no
quier otra cosa se insinúa como información de debe privilegiar a priori ningún punto del discur-
fondo” (Geertz 1987: 23). Retomando a Piña, es so, ya que los elementos más interesantes para el
importante destacar la salvedad que él realiza análisis pueden surgir de situaciones no previstas
cuando afirma que “el relato construye una vida, por el entrevistador. De esta forma, lo que carac-
inventa un recorrido” (Piña 1989: 3) (el resaltado teriza a la entrevista antropológica es su dinámi-
es nuestro). Así, a la usanza del psicoanálisis, lo ca, en la cual las respuestas del informante se
que importa no es el proceso visto como real en sí transforman en nuevas preguntas. Entendiendo la
mismo en un relato, sino las interpretaciones y lo entrevista como una relación social, considera-
que el sujeto dice acerca de ese proceso. El histo- mos que ésta constituye al mismo tiempo una
riador Ralph Samuel indica que no existe una instancia de observación, en la cual lo no dicho y
correlación entre la realidad y el discurso, sino las acciones o los gestos que acompañan a las
que hay que ser “consciente de los mecanismos palabras son tan importantes como el contenido
de censura y ruptura que existen en todo indivi- de las formulaciones.
duo” (Samuel 1991: 104). Así, los individuos no Las entrevistas realizadas para este trabajo
existen en tanto entes separados de su proceso de investigación se llevaron a cabo en el ámbito
histórico, sino que son parte de una acumulación cotidiano de los informantes, ya que considera-

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ANTI • Núm. 12 • Diciembre de 2013

mos, siguiendo a Guber, que el sentido de las tierra. Tras haber sido aconsejada por una vecina
verbalizaciones de los sujetos sólo puede ser suya que vivía en Buenos Aires hacía varios años,
comprendido a partir de sus situaciones cotidia- decidió subirse a un micro y emprender su viaje
nas (Guber 1991: 239). De esta forma, realizamos hacia allí, ya que el testimonio de varios conoci-
las entrevistas en ámbitos en los cuales los sujetos dos coincidía en que era posible conseguir trabajo
se sintieran cómodos, para explayarse respecto de y establecerse rápidamente en la Argentina. Sin
sus representaciones en cuanto a su vida como embargo, al desconocer las condiciones de vi-
peruanos en la Argentina. En el primer caso que vienda y de trabajo en Buenos Aires, decidió de-
desarrollaremos a continuación, entrevistamos a jar a su hija, Verónica, con su madrina, hasta que
María en su ámbito de trabajo, como empleada ella pudiera conseguir empleo y casa. Verónica
doméstica en la casa de la novia de uno de los en ese momento tenía doce años y, según cuenta
autores de este artículo. En el caso de Rafael, en su madre, aún le recrimina el no haberla llevado
cambio, la entrevista fue realizada en su casa en consigo en ese momento. No obstante, María re-
una fecha previamente estipulada. La charla se cuerda ese momento como el más difícil del via-
llevó a cabo en la cocina de su casa, en presencia je: Me costó un montón. Todas las noches llora-
de su esposa Victoria y de su hijo Salvador, quien ba, no lo haría de nuevo, la verdad. No se podía
jugaba mientras los demás tomábamos mate. Ca- casi hablar porque salía carísimo la llamada.
be destacar que en ambos casos la predisposición El viaje constó de nueve días, entre micros
de los entrevistados fue óptima y se permitió un y trenes. Salió de Trujillo un 23 de Abril y llegó a
buen desarrollo de la entrevista. La tecnología Buenos Aires el 1 de Mayo, el día del trabajador,
utilizada para tener un soporte material de las comenta María. Su condición de “ilegal”, de
entrevistas fue un pequeño grabador de audio, acuerdo a los estatutos de migración, obligaron a
cuyo uso fue aceptado previamente por ambos que tuviera que pagar trescientos dólares tan sólo
entrevistados. el micro hasta Bolivia, ya que servía para que me
pasen, firmaba todo una chica porque decían que
RELATOS DE VIDA era todo un quilombo, que no dejaban pasar,
trescientos dólares era un montón en ese momen-
María to, básicamente nos afanaron. Luego de Bolivia,
se subió a un tren que finalmente la llevó hasta
María es una mujer de nacionalidad perua- Buenos Aires.
na de cuarenta y tres años de edad. Ella nació y Finalmente, cuando arribó, se dirigió hacia
vivió hasta los veintiocho años en Trujillo, ciudad una pensión que le habían indicado las personas
ubicada en la costa norte de Perú. Sin embargo, en con las que mantenía contacto desde Perú. La pen-
el año 1998, debió emigrar a la Argentina, luego sión, según nos comentó María, se encontraba
de que una catástrofe natural conocida como el ubicada en Pompeya, un barrio en el Sur de la
fenómeno de “El Niño”, destruyera la fábrica en la Ciudad de Buenos Aires. Constaba de una galería
que se desenvolvía como ensambladora de zapa- que estaba por ser rematada, en la cual varios pe-
tos: Yo vine porque allá hubo el fenómeno del Ni- ruanos subalquilaban piezas en las que vivían cua-
ño, en Perú. Se dañaron todos los trabajos, se tro o cinco personas de una manera relativamente
juntaron cosas, salieron del cementerio los muer- precaria. Cuando recuerda esa pensión, María
tos. De esta manera, hace catorce años que reside agradece el no haber llevado a su hija, ya que la
de forma permanente en la Ciudad Autónoma de mayoría del tiempo ella trabajaba con el fin de
Buenos Aires, donde se desempeña como emplea- conseguir un lugar mejor. Es interesante escuchar
da doméstica en varias casas de los barrios porte- acerca del tipo de comunidad que se genera en un
ños de Villa Devoto y Villa del Parque, ubicados mismo espacio a partir de la posesión común de
en el centro-este de la Ciudad. una nacionalidad. Al preguntarle a María por otro
La decisión de emigrar a la Argentina es- tipo de encuentros que se generasen entre peruanos
tuvo signada por la espontaneidad y la frustración en Buenos Aires, ella comentó haber visto celebra-
de haber perdido su modo de subsistencia en su ciones del “Señor de los Milagros”, donde un de-

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Historias de frontera. Una aproximación al proceso inmigratorio… M. Álvarez Litke y F. Petit de Murat

terminado día de Octubre, muchos peruanos y ar- sólo volvió una vez a Trujillo hace tres años, tras
gentinos sacan en andas por la calle una estatua de un expreso pedido de su hija mayor. No obstante,
Cristo para agradecer los milagros. María ya no posee familia en Perú, razón por la
Al mes de haber llegado, consiguió su cual la estabilidad laboral y la independencia
primer trabajo en una casa de una familia de clase económica conseguida en Argentina tras todos
media de Villa Devoto, lugar donde se realizó la estos años, que le permiten mantenerse a ella y a
entrevista. El contacto le fue facilitado por una sus hijas, va en desmedro de sus intenciones de
mujer que vivía en la pensión, quien trabajaba volver a su Perú natal.
como fonoaudióloga en un hospital público de
Buenos Aires: Rafael
Como hablamos con todos los de la pen-
sión, en la galería nos hicimos conocidas con una Rafael es oriundo de Lima, tiene 34 años
chica y yo le comentaba que necesitaba trabajo y es hijo de un médico y una sociológa. Vivió en
para mandar [dinero] para mi hija, que no sabía Lima hasta el año 1993, cuando, a la edad de 16
cómo estaba. Y me dijo que tenía una señora que años, se trasladó a Buenos Aires para continuar
estaba necesitando pero decile, porque acá no te sus estudios luego de finalizar la secundaria. Hab-
toman cualquiera, tenés que ser conocida, reco- ía empezado el conservatorio cuando vivía en
mendada. Me dijo que diga que ella era mi co- Perú, y quiso continuar su educación musical,
madre. Pero yo no la conocía, la conocía hace un perfeccionando su técnica con el violoncello. Le
día nomás. Y me tomó. Después ya le dije la ver- pareció una buena posibilidad seguir estudiando
dad, a los dos, tres meses. Porque me pregunta- en otro país, ya que las posibilidades en Perú
ban y yo ni la veía a la chica. eran bastante limitadas para lo que yo quería
De esta manera, fue consiguiendo varios hacer. Teniendo la posibilidad de ir a otro lugar,
trabajos por recomendación de las distintas fami- Argentina se vislumbraba como una muy buena
lias. Así, en el año 2000 logró conseguir un mejor posibilidad. Además, Rafael tenía algunos cono-
lugar para vivir en el barrio de Pompeya. Se tra- cidos en el país, a partir de un viaje que había
taba de una pensión pero de un estilo más fami- realizado en el año 1991, en el cual había tomado
liar. En cuanto a su antigua residencia, María lecciones de violoncello con quien luego sería su
cuenta cómo los sábados y domingos trabajaba en maestro a partir del año 1993. En este sentido,
la casa de una señora, para evitar estar allí ya que Rafael sostiene que se dieron todas las condicio-
se armaban fiestas con mucho alcohol, las cuales nes para facilitar su arribo a la Argentina: en par-
generalmente terminaban siendo una excusa para ticular se le facilitaron los trámites administrati-
que la policía pida documentos a los residentes. vos ya que los rectores de los conservatorios de
María pudo lograr que su hija Verónica Lima y Buenos Aires resolvieron su pase.
viaje a Argentina en el año 2000. En ese momento De esta forma, la decisión de Rafael de
tenía catorce años, por lo que se inscribió en una viajar a la Argentina fue premeditada, de manera
secundaria y la terminó cuatro años más tarde. En que desembarcó en el país ya preparado para ins-
el año 2006, María tuvo otra hija, Geraldine. talarse definitivamente, con todas sus pertinen-
Actualmente, María cuenta que se siente cias, sus libros y sus instrumentos. Durante un
más estable, a pesar de la inflación que cada vez año vivió en una pensión, y luego se trasladó a
le complica más el poder comprar cosas con su una casa de familia donde vivió durante 6 meses.
salario, el cual se vio reducido luego de tener a su Posteriormente alquiló un departamento junto a
segunda hija ya que debió resignar sus trabajos otros estudiantes, donde la convivencia resultó
vespertinos para sólo dedicarse a labores matuti- difícil debido a las exigencias de la carrera de
nas. Sin embargo, ante la pregunta de si le gustar- Rafael, ya que debía ensayar piezas musicales en
ía volver a Perú en algún momento, su gesto fue un departamento pequeño con otros 3 ocupantes,
principalmente negativo, ya que el tener que vol- lo cual complicaba sus estudios aunque no impi-
ver a construir una carrera laboral disminuye sus dió que él se abocara de lleno a su carrera sin
ambiciones de regresar. En estos catorce años, prestar atención al entorno.

Centro de Investigaciones Precolombinas • 130


ANTI • Núm. 12 • Diciembre de 2013

Rafael agradece haber tenido la posibili- es de Ayacucho, en la zona centro-sur de Perú, y


dad de que sus padres pudieran suministrarle la la familia paterna de mi madre es de Huancayo.
ayuda económica necesaria para poder costear sus Generalmente, Rafael y su esposa viajan
estudios, aunque también aclara que siempre tra- una vez al año a Perú, permitiendo que su hijo
bajó para complementar el aporte de sus padres. Salvador pueda ver a sus abuelos.
En particular, cuenta cómo ellos le enviaban arte- En esos viajes anuales, se lleva a cabo un
sanías desde Perú para que él las vendiera en las evento que fue lo que más nos llamó la atención
ferias de Buenos Aires, así como piedras de Perú en el relato de Rafael, relacionado con la historia
que eran compradas por los artesanos argentinos de la obtención de su familia materna de un Niño
para ser utilizadas como materia prima. Sin em- Jesús de Praga:
bargo, al obtener escasos ingresos por esta activi- No se sabe bien pero aparentemente se lo
dad, discontinuó esta práctica en cuanto pudo dejó a la familia de mi abuelo materno, una fami-
obtener réditos de su profesión como músico. Así, lia que estaba huyendo durante la época de la
comenzó a tocar en orquestas y a hacer amistades guerra con Chile. Les dejó ese niño que es un
en el ámbito musical. De hecho, conoció a su Niño Jesús de naranjo, que por la simbología que
actual esposa en el año 2005, tocando en un gru- tiene, por los objetos que tiene, uno reconoce que
po de música latinoamericana. es un Niño Jesús de Praga: tiene una cruz, y un
Rafael compara su experiencia relativa- globo terráqueo en la mano. Durante los veranos
mente exenta de problemas en lo que respecta a se hace una novena de ese niño, que es una nove-
los aspectos legales y a la documentación migra- na de rezos con cantos4, durante nueve tardes, y
toria con los problemas que otros peruanos tienen al décimo día se hace una misa y una fiesta.
en la Argentina. Así, dice conocer gente que tiene En esta fiesta participa la familia extendida
problemas habitacionales y de documentación, ya de Rafael: toda la rama de la familia de su abuelo
que para vivir en Argentina es necesario para los materno, Julio Espinoza; todos sus hermanos, con
peruanos renovar periódicamente el documento sus hijos, nietos y tataranietos, se juntan para hacer
que certifica que son “peruanos residentes en Ar- la fiesta. Son todos descendientes de Espinoza de
gentina”, un trámite que Rafael considera bastan- Lacalle. La novena, casualmente como eran nueve
te caro. Al mismo tiempo, dice que los peruanos hermanos, cada día le toca a un descendiente de
que conoce en Argentina no tienen problemas Espinoza de Lacalle. Originalmente se hacía en
para trabajar, pero aclara que la razón de esto es Huancayo, donde todos vivían en la misma man-
que aceptan trabajar en negro, sin recibir los be- zana, que le pertenecía a su bisabuela. Pero cuando
neficios sociales estipulados por la ley: hay mu- la mayoría de la familia emigró a Lima, el ritual
cho trabajo informal, son pocos los que tienen comenzó a realizarse allí, excepto en algunas oca-
trabajo formal. Aún así, reconoce que realizando siones en las que se hace toda la novena en Lima,
estos trabajos informales (vendiendo comida en la pero luego se lleva el Niño Jesús a Huancayo, co-
calle, trabajando como empleadas de limpieza) se mo es el caso de este año 2012.
gana más dinero en Argentina que en Perú, ya Rafael cuenta que la fiesta es un sincre-
que el sueldo mínimo en Perú es muy bajo. tismo, donde conviven algunos ritos católicos con
Rafael nos dijo durante la entrevista que él prácticas indígenas:
reúne a todo el Perú adentro suyo, debido a los Cada día de la novena consiste en distin-
orígenes de su familia: tas partes, de una duración de aproximadamente
La familia materna de la rama de mi padre 2 horas: en la primera parte se reza un rosario
proviene de la zona sur de Perú, actualmente el completo, y la segunda parte se llama adoración,
norte de Chile, que se llama Iquique. Ellos emi- en la cual las tías mayores cantan canciones en
gran a Lima cuando se produce la Guerra del castellano, que conocen de memoria, que forman
Pacífico, aunque una parte de la familia emigró parte de la tradición oral y supuestamente muy
hacia otra zona y se le perdió el rastro. La familia
paterna de mi padre es de la zona de Cajamarca, 4
La novena es un ejercicio de devoción que se practica
al norte de Perú. La familia materna de mi madre durante nueve días.

131 • Centro de Investigaciones Precolombinas


Historias de frontera. Una aproximación al proceso inmigratorio… M. Álvarez Litke y F. Petit de Murat

antiguas, y las cantan mientras el resto de la fa- el son muy diferentes y muestran a las claras que
milia adora al niño, bailando y haciendo reve- el rótulo de “migrantes peruanos” homogeneíza y
rencias frente a él. Suponemos que hay algún reduce las particularidades de la vida de cada uno
sincretismo con algunas fiestas familiares huan- de ellos. Las etiquetas estereotipadoras y deni-
cas, hay cantos huancas. Luego se hace una misa grantes que designan a los peruanos y otros mi-
que es convencional occidental, y después de la grantes latinoamericanos como “vagos”, “narco-
misa, el último día, se hace una fiesta con instru- traficantes” o “ladrones” no podrían alejarse más
mentos típicos de la zona, un cuarteto de arpa, de las historias que nosotros hemos construido.
violín, saxofón y clarinete, una combinación rarí- Al mismo tiempo, tal como hemos expuesto, las
sima. Se hacen bailes, se toma mucha cerveza, y experiencias que nos han sido relatadas muestran
algunas otras bebidas como la chicha. dos caras de un mismo proceso migratorio.
Además, durante la fiesta, se hace el “corta- En el caso de María, el disparador de su
monte”, donde se planta un árbol que funciona como viaje fue una catástrofe natural que trastocó sus
piñata, en el cual se cuelgan pequeños regalos: medios de vida, al punto de obligarla a dejar su
Se va haciendo al son de la música vas país de forma espontánea e inesperada, en busca
bailando alrededor del árbol con un hacha… ¡es de trabajo. Rafael, por el contrario, tuvo la posibi-
todo muy primitivo eh! [risas], esto no lo leíste en lidad de planear su viaje con anticipación, cono-
ningún libro… y se le va dando pequeños hacha- ciendo el país al que estaba migrando. A su vez, la
zos, y se le va dando cerveza al árbol, así hasta causa de este viaje fue por una decisión personal y
que se cae el árbol. El árbol es plantado por el no motivada por determinantes externos, como en
mayordomo de la fiesta, que es un pariente que es el caso de María. Coincidentemente con esto, la
el que se encarga de bancar la fiesta, que es mu- llegada al país de ambos fue en condiciones admi-
cho gasto, hay que pagar la comida, tiene que nistrativas opuestas, ya que Rafael ingresó a la
poner el árbol, la cerveza, mucha bebida porque Argentina de forma legal, con toda la documenta-
son alrededor de 200 personas, hay que contratar ción en regla, mientras que María debió recurrir a
músicos, pagar la misa… en realidad, el último ayudas paralegales con el fin de ingresar al país.
que corta el árbol debería ser el mayordomo del Esta diferencia ha sido determinante en el desarro-
año siguiente. Pero no se da así necesariamente. llo de la vida de ambos sujetos en la Argentina,
Al terminar la fiesta, se entrega en custodia el debido a que la posesión de documentación legal
Niño Jesús al próximo mayordomo. posibilita el acceso a beneficios y derechos fun-
Su familia paterna, que vive en Lima, no damentales para una vida digna.
lleva a cabo una fiesta como esta, pero también Un factor que nos parece relevante es el
poseen un Niño Jesús de madera, que fue lo único hecho de que Rafael aún mantiene fuertes contac-
que rescataron cuando huyeron de la Guerra del tos en Lima y Huancayo. Posee una gran familia
Pacífico. Según él, en la costa esas fiestas no son cuyos lazos de pertenencia y reciprocidad son
tan frecuentes como en la sierra. reactualizados anualmente en la fiesta dedicada al
Para finalizar, Rafael cuenta que, gracias a Niño Jesús de Praga. A su vez, esta familia tan
las facilidades otorgadas por su familia, pudo vasta le proporciona a Rafael un reaseguro
comprar una casa grande en un barrio central de económico que María no tiene. De hecho, ella
Buenos Aires, donde criar a su hijo de 4 años, y misma nos afirmó que no le queda ningún lazo
puede dedicarse a lo que a él más le gusta: la en- familiar en Trujillo, su ciudad natal. Por este mo-
señanza musical. tivo, se ve menos incitada a visitar Perú, teniendo
en cuenta la relativa estabilidad económica que ha
REFLEXIONES FINALES forjado durante catorce años en Buenos Aires.
Estos relatos de vida han posibilitado que
Como podemos observar en los relatos de comprendamos mejor el fenómeno de la migra-
vida desarrollados en el apartado anterior, cada ción peruana a la Argentina desde la perspectiva
historia goza de sus especificidades que la hacen de los migrantes. Consideramos que el enfoque
única. Las experiencias vividas por María y Rafa- que hemos elegido aporta datos nuevos, a partir

Centro de Investigaciones Precolombinas • 132


ANTI • Núm. 12 • Diciembre de 2013

de un marco de análisis micro, centrado en las Geertz, C.


vidas particulares de los sujetos. Sustentamos esta 1987. La interpretación de las culturas. Gedisa.
elección metodológica en la convicción de que en Barcelona.
la vida cotidiana de las personas se plasman los
acontecimientos más importantes a nivel social e Ginzburg, C.
histórico. En los relatos de María y de Rafael se 2004). Acerca de la historia local y la microhisto-
pueden observar las huellas que han dejado dis- ria. En: Tentativas, Prohistoria, Rosario.
tintos sucesos históricos en sus vidas personales.
Así, la historia de la familia de Rafael está fuer- Goffman, E.
temente vinculada a la de la Guerra del Pacífico, 1995. Estigma. La identidad deteriorada. Amo-
ya que la migración de su familia a Lima fue mo- rrortu Editores. Buenos Aires.
tivada por este conflicto bélico. Al mismo tiempo,
el Niño Jesús que es el centro de las fiestas anua- Guber, R.
les de su familia, también es producto de las mi- 1991. El salvaje metropolitano. A la vuelta de la
graciones que se dieron en esa época para huir de Antropología Posmoderna. Legasa. Buenos Aires.
la guerra. Por otro lado, la vida de María fue
completamente alterada por el fenómeno climáti- INDEC
co de El Niño, el cual es recurrente en la costa 2001. Censo Nacional del 2001.
peruana y caracteriza la historia del país. http://www.indec.gov.ar/censo2001s2/ampliada_i
Para finalizar, cabe destacar que estos dos ndex.asp?mode=01 (consultado el 18 de Enero de
relatos de vida no alcanzan para describir todo el 2012).
proceso migratorio en cuestión, con su multiplici- 2010. Censo Nacional del 2010.
dad de causas y factores, sino que es responsabi- http://www.censo2010.indec.gov.ar/resultadosdef
lidad de los investigadores continuar esta tarea, initivos_totalpais.asp (consultado el 18 de Enero
para arrojar cada vez más luz sobre hechos que, de 2012).
de otra manera, quedan invisibilizados detrás de
generalizaciones prejuiciosas. Así, advertimos Levi, G.
que en cada historia se pone en juego la identidad 1996. Sobre microhistoria. En: Formas de hacer
de las personas, por lo que no se puede hablar historia. P. Burke. (ed.). Alianza. Madrid.
simplemente de “peruanos” o “argentinos”. Estas
son construcciones que ocultan las innumerables Piña, C.
diferencias que pueden observarse al fijar la mi- 1989. Aproximaciones metodológicas al relato
rada en la vida cotidiana de los sujetos que com- autobiográfico. Revista Opciones Nº16: 107-125.
ponen estos colectivos. No es lo mismo un perua- Santiago de Chile.
no nacido en Trujillo o en Lima, así como no es
lo mismo un argentino de la Ciudad de Buenos Reguillo Cruz, R.
Aires o de Catamarca. Existen diferencias en las 1998. La clandestina centralidad de la vida coti-
costumbres, en el estilo de vida, diferencias de diana. Causas y azares Nº7: 98-110. Buenos Aires.
clase social, de edad, sexuales, las cuales hacen
que la historia de la vida de cada persona sea úni- Salgueiro, A. M.
ca. Bajo el manto de la nacionalidad se esconden 1998. Referentes para el estudio de la cotidianidad
numerosas vidas que merecen ser contadas. desde una perspectiva etnográfica. En: Saber do-
cente y práctica educativa. Octaedro. Barcelona.
BIBLIOGRAFÍA
Samuels, R.
Bourdieu, P. y L. Wacquant 1991. Desprofesionalizar la historia. En: La histo-
1995. Respuestas por una antropología reflexiva. ria oral. D. Schwarztein (comp.). CEAL. Buenos
Grijalbo. México. Aires.

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ANTI • Núm. 12 • Diciembre de 2013

UN DÍA SIN PERUANOS

Nicolás Graziano* y Agustina F. Juncos**


* Sociedad Luz ** Facultad de Filosofía y Letras, Universidad de Buenos Aires
ticokm20@hotmail.com; agush_fj@hotmail.com

RESUMEN

El presente trabajo se basará en una investigación que tendrá por objetivo demostrar el grado en el que
se verían afectados ciertos sectores de la economía argentina si no tuvieran el valioso aporte de la fuer-
za de trabajo peruana. Y, desde una perspectiva marxista, analizaremos cómo esto llevaría a una dismi-
nución del ejército de reserva laboral, lo cual tendría como consecuencia un golpe a los salarios. Vere-
mos que el trabajador peruano está mal posicionado en la pirámide laboral, y esto en relación a la ima-
gen que se tiene de ellos en la Argentina, la cual se corresponde con un estereotipo: el peruano es al-
cohólico, ladrón y muchas veces drogadicto. A causa de esto, este trabajador ejercerá generalmente en
condiciones precarias y/o en negro. Ahora bien, ¿qué sucede cuando consiguen trabajos calificados?
También son discriminados. Aquí vemos entonces que el trabajador peruano está entre los estratos más
bajos, por su situación laboral y material, pero también (y empeorando esta situación) por ser un tipo de
extranjero no deseado. Aquí revisaremos el racismo hacia ciertos inmigrantes en la Argentina, apoyán-
donos en bibliografía respecto a la temática.
Palabras clave: economía argentina, fuerza de trabajo peruana, perspectiva marxista, ejército de reser-
va laboral, salarios, pirámide laboral, estereotipo, discriminación, extranjero no deseado, racismo.

ABSTRACT

The present work is based on an investigation that has the objective of demonstrate the importance of
the Peruvian workers in the Argentinean economy. And, in a Marxist perspective, we will analyze the
fact that if we will not have the work of the Peruvian immigrants, the army of laborer reserve would
decrease. Also, that it will have consequences in a shock in the salaries. We will see that the Peruvian
worker is bad positioned in the laborer pyramid, and in relation with the image that the people has of
them in Argentina, that it is a stereotype: the Peruvian is alcoholic, thief and many times drug consum-
er. Because of that, the worker will have jobs, most of the times in bad conditions and maybe in an ille-
gal way. But, ¿what happens when they can work in certificated jobs? They are also discriminated.
Here we observe that the Peruvian immigrant is in a lower place in the laborer pyramid, because of the
bad work situation and a bad material situation, but also (and making the situation even worst) because
of being a type of unwanted stranger. Here we will review the racism to certain immigrants in the Ar-
gentina, basing this in the texts about the theme.
Key words: Argentinean economy, Peruvian workers, Marxist perspective, army of laborer reserve,
salaries, work pyramid, stereotype, discrimination, unwanted stranger, racism.

“Espero (…) ver el día en que una carrera de Antropología social, incluyendo algún traba-
jo de campo considerado como un medio y no como un fin en sí mismo, pueda ser aceptada
como parte válida en la preparación de un historiador”.
E. E. Evans-Pritchard (1957: 59)

134 • Centro de Investigaciones Precolombinas


Un día sin peruanos N. Graciano y A. F. Juncos

INTRODUCCIÓN A LA INVESTIGACIÓN residente de Retiro), que hoy en día es empleada

L
en un local de comidas peruanas. Con ella pudi-
a finalidad de este trabajo de investigación mos relevar datos para saber, de forma aproxima-
es llegar a una aproximación demostrativa, tiva, cómo es la vida de un inmigrante “tipo” pe-
donde la fuerza de trabajo peruana es de ruano en nuestro país. También realizamos cues-
importancia para ciertos sectores de la economía tionarios cerrados a argentinos: a Olga (76 años,
argentina. Ahora bien, en cuanto a los puestos residente en Lanús), a Carlos (62 años, residente
que ocupan los inmigrantes peruanos, están mal de Belgrano) y a Ana (49 años, residente de la
posicionados en la pirámide laboral (consiguen Recoleta). Junto a ellos, y teniendo en cuenta la
los puestos menos calificados o trabajan en con- bibliografía y nuestra hipótesis al respecto, pudi-
diciones precarias y/o en negro). Esto es así mu- mos examinar cuál es la imagen que generalmen-
chas veces porque son inmigrantes ilegales (sin te se tiene de los inmigrantes, en nuestro caso,
documentación) y porque los trámites para con- peruanos. Esta imagen también podemos asociar-
seguir la ciudadanía son siempre arduos (aunque la a la opinión pública y al discurso hegemónico
en estos últimos años esto se haya flexibilizado, de la sociedad, ambos moldeados desde los apara-
en beneficio de los migrantes que quieren asen- tos ideológicos del estado: culturales, escolares,
tarse en el país, a causa del crecimiento económi- políticos, comunicativos, etc. Aquí se puede ver
co que vive el país desde el 2004 en adelante). la conexión indisociable entre las prácticas estata-
Además, es de importancia mencionar que aun- les y las políticas exclusivas empresariales. Cu-
que muchas veces consiguen trabajos más califi- rioso consortium que pondría en evidencia la
cados, no suelen desarrollarlos sin contratiempos, razón de clase del estado.
ya que sufren discriminación directa o indirecta. Ahora bien, en cuanto a las técnicas de in-
Tema que persiste en la sociedad civil, aunque vestigación, las planteamos desde la articulación
haya sido superado en el ámbito científico. de la Antropología y la Historia. Por eso mismo, a
En cuanto a la hipótesis que trabajaremos, partir de estas entrevistas, a las que fuimos con
y teniendo en cuenta que la población inmigrante preguntas concretas y claramente teorizados (en
peruana está entre las primeras en cuanto a su relación con los objetivos planteados en nuestra
tamaño, postulamos que sin el aporte de la mano guía para la investigación), examinamos los datos
de obra peruana, la economía argentina se vería relevados para luego interpretarlos y justificarlos
afectada en la disminución de su ejército de re- con documentos escritos desde los dos campos
serva laboral (lo cual repercutiría en un golpe a anteriormente nombrados, para seguir desarro-
los salarios). Así es que desde una perspectiva llando futuras hipótesis, ponerlas en tensión y
marxista, analizaremos al inmigrante peruano aumentar el número de entrevistados que enri-
como enmarcado en los estratos sociales más ba- quezcan nuestro trabajo en un futuro.
jos, no sólo teniendo en cuenta su situación labo-
ral y material, sino también porque son aún más BREVE RESEÑA SOBRE LA MIGRACIÓN
marginados y aislados por ser extranjeros (no PERUANA
deseados).
En la historia de la migración peruana, se
METODOLOGÍA, TÉCNICAS Y ACTIVI- destacan dos grandes flujos migratorios (Caneva-
DADES DE INVESTIGACIÓN ro 2006):
1. 1940-1980: Los migrantes eran de clase me-
En base a nuestra hipótesis principal, ana- dia/media alta y llegaban a la Argentina con
lizaremos percepciones, actitudes, representacio- el fin de estudiar carreras universitarias o para
nes, opiniones, evaluaciones, etc., relevados de profesionalizarse y desarrollar una carrera la-
nuestra experiencia en la cotidianeidad de la Ar- boral estable. Estos hombres fueron al país
gentina, y mediante trabajo de campo específico. respaldados económicamente por familiares.
Realizamos una entrevista a una inmigrante pe- 2. Desde 1990 el flujo migratorio se acrecienta.
ruana en la Argentina llamada Nelly (35 años, Los migrantes peruanos que llegaban al país

Centro de Investigaciones Precolombinas • 135


ANTI • Núm. 12 • Diciembre de 2013

buscaban oportunidades laborales. Eran mi-  Derecho al acceso, no discriminatorio, del


grantes económicos clásicos y mayormente inmigrante y su familia, a servicios socia-
eran mujeres que buscaban trabajar en el área les, bienes públicos, salud, educación, jus-
de servicio doméstico. Más recientemente la ticia, trabajo, empleo y seguridad social.
migración se intensificó a causa del enfrenta-  Derecho a la información.
miento entre el Estado y Sendero Luminoso, y Entonces, antes de la sanción de esta nue-
también luego del conflicto bélico con Ecua- va ley, la obtención del DNI era complicada y
dor. tenía un costo de entre $500 y $800, por lo que la
Ahora bien, la Argentina es un destino al mayoría de los migrantes peruanos que llegaban
que se accede fácilmente, sólo con el pasaporte, al país lo hacían con un permiso temporal y ter-
pero que permite un plazo de estadía en el país minaban cayendo en una situación de irregulari-
(generalmente entre tres y seis meses), lo que no dad. Tengamos en cuenta para hacer las conside-
permite a los migrantes emplearse. Además, en raciones pertinentes de la situación actual, y de
esta instancia tampoco se puede acceder al siste- acuerdo con el aumento de la inflación y el ajuste
ma educativo, ya que se requiere de la presenta- a destiempo del salario real del peruano medio,
ción del documento de identidad nacional (DNI). que un estudio universitario en el Perú, en el
Siguiendo esta línea, aclaramos que los peruanos ámbito privado, equivaldría a dos salarios míni-
no fueron beneficiados por la amnistía migratoria mos que se tendrían que percibir y que se gastar-
otorgada entre 1992 y 1994, que fue dirigida sólo ían exclusivamente en forma de renta para sus
a migrantes limítrofes. estudios.
A continuación, expondremos un testimo- El censo 2001 registró 88.260 peruanos,
nio en cuanto a esta situación, citado de un testi- que significa el 5,76% de los extranjeros, convir-
monio de la historia de vida peruana: tiéndola en ese momento en la séptima comuni-
“(…) mi situación empezó mal porque a dad (bolivianos, paraguayos, chilenos, italianos,
mi padre cuando él vino solo por primera vez acá españoles, uruguayos, peruanos). Y en el censo
le dieron documentos falsificados y cuando en- más reciente, en el año 2010, se registraron
tramos por la frontera la segunda vez lo agarra- 157.514 migrantes peruanos en la Argentina2.
ron a él. Tuve que seguir con mi mamá y a él le Ahora bien, en los años en los que la si-
abrieron como una causa penal, no sé. Por eso yo tuación del país es estable o tiene algún tipo de
tengo miedo de si voy a poder conseguir mi DNI, crecimiento, las migraciones se incrementan (por
porque imagino que si salta eso capaz que por el ejemplo en la década del ´90 con el 1 a 1, y tam-
apellido, no sé, no me dan nada; por eso también bién con el fenómeno de crecimiento económico
quiero ir, para que me vean y explicarles que no que vive la Argentina desde el año 2003 aproxi-
hicimos nada (…)” (Canevaro 2006: 299). madamente).
La normativa migratoria se mantuvo por
ese camino hasta la sanción de la nueva ley de INMIGRANTES PERUANOS EN LA AR-
migraciones (2003-2004)1. En esta ley, entre otras GENTINA: UNA HISTORIA DE ESFUER-
cosas, se establece que los derechos de los extran- ZO, MARGINACIÓN Y RACISMO
jeros son:
 Derecho a la migración. Estos nuevos empleados pasan a ocupar
 Derecho a la igualdad de trato. los puestos que los trabajadores argentinos dejan
a un lado. En general, los hombres trabajan en la
construcción y las mujeres como empleadas
1
La Ley Nº 25.871, aprobada en diciembre de 2003 y pro- domésticas, entre otras cosas. Además, la incor-
mulgada por el Poder Ejecutivo el 20 de enero de 2004, se poración de los migrantes peruanos al mercado
resume en los siguientes criterios: la Ley regula la admi- laboral argentino es con una mala remuneración.
sión, ingreso, permanencia y egreso de personas en la Ar-
gentina. Establece que la autoridad argentina competente
2
para atender estos casos es la Dirección Nacional de Migra- Censos realizados por el INDEC, años 2001 y 2010.
ción junto a la Policía Migratoria Auxiliar. http://www.indec.gov.ar

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Un día sin peruanos N. Graciano y A. F. Juncos

Y la relación laboral es muy frecuentemente en un peor lugar entre las filas de las masas explota-
condiciones contractuales poco beneficiosas y das, por debajo de los hombres. Cabe aclarar que
precarias y/o en condiciones de trabajo duras, la migración peruana femenina en porcentaje fue
peligrosas y poco saludables. Ahora bien, en épo- siempre mayor que la masculina, aunque los da-
cas de crisis, en la que el empleo escasea, los mi- tos del censo del 2010 nos muestren que esa dife-
grantes en su mayoría pasan a formar parte del rencia en tamaño se ha equilibrado.
ejército de reserva laboral. Siguiendo esta línea, Por otro lado, más allá de lo que sucede en
también podemos agregar que el hecho de que la realidad con respecto a las creencias del senti-
exista un ejército de reserva quiere decir que los do común, desde una perspectiva científica el
trabajadores del país en cuestión son dependien- racismo es insostenible. En la Argentina, al inmi-
tes de su salario (no realizan otra actividad) y que grante peruano se lo ve desde un estereotipo: es
los capitalistas pueden emplear y desemplear gen- alcohólico, ladrón, y muchas veces, drogadicto.
te de acuerdo a su conveniencia. Así, los patrones Además, sabemos que muchas de las veces, estos
emplean fuerza de trabajo a cambio de un bajo estereotipos se justifican justamente desde la
salario, a causa de que la demanda laboral es alta ciencia, desde la genética. Pero, también sabemos
y la oferta limitada. Entonces, como sucede gene- que la mayoría de las clasificaciones, incluso las
ralmente, el capitalista aprovecha para pagar poco que utilizan los genetistas, son culturales o tienen
por la jornada laboral y consumir la mayor canti- un factor que lo es. Es decir que con las clasifica-
dad de tiempo de sus trabajadores. ciones damos sentido a nuestro lugar en la natura-
Como sabemos, siempre que la ocasión lo leza, aunque las mismas no necesariamente deri-
permite, el patrón intenta, por decirlo de alguna van de hechos naturales y, aunque deriven de
manera, explotar la fuerza de trabajo de un día ellos, también contienen códigos culturales. Ci-
para consumir la de tres (Marx 1992). tando a J. Marks (1997: 11): “Las categorías de-
Por otro lado, aunque los peruanos obten- finidas por la historia y la sociedad, las categor-
gan trabajo, e incluso documentación, sufren de ías de la invención humana son mucho más im-
discriminación. Este factor, que a veces les impi- portantes para nuestra vida cotidiana que los
de ser empleados, cuando tienen la posibilidad de gradientes naturales presentes en el género
comenzar a trabajar en algún espacio se ven im- humano”.
posibilitados a desarrollar su labor normalmente. Entonces, como sabemos, los estereotipos
Esta discriminación parte muchas veces de sus raciales reflejan diferencias superficiales no con-
mismos pares de clase, de los trabajadores asala- firmadas por el análisis genético. Aquí también
riados de nacionalidad argentina. Y es aquí donde podríamos citar a A. Piazza (1997) quien dice
podemos exponer la investigación del reconocido que: “Esta hostilidad social para cualquiera que
profesor de trabajo social y etnografía Paul Willis difiera de uno persiste. La fobia hacia los demás,
(1988), quien en su trabajo “Aprendiendo a traba- el cálculo político y otras muchas razones total-
jar” expresó que la clase obrera, desde su co- mente ajenas a la ciencia -como el impacto de la
mienzo en la escuela tiene ciertas características coyuntura económica, el malestar social, la des-
como la valoración de las actividades manuales confianza hacia los inmigrados, las diferencias
(relacionadas con lo masculino) por encima de lo de religión- están en la base del racismo. Es un
intelectual (relacionado con lo femenino), el ma- hecho reconocido que la creencia en una supe-
chismo y el racismo. Este último punto, que en el rioridad genéticamente establecida de una pobla-
trabajo de Willis es parte de las llamadas limita- ción sobre otra carece de toda base científica. La
ciones de la clase obrera, es de relevancia para ‘superioridad’ es un concepto político y socioe-
nuestra investigación, ya que es sufrida por los conómico ligado, como el de ‘raza’, a la historia
migrantes peruanos. Ahora bien, en cuanto al política, militar y económica y a las tradiciones
machismo, tengamos en cuenta entonces el rol de culturales del país o de los grupos”.
la mujer peruana, por su condición de migrante Sin embargo, más allá de lo que postule la
no deseada, pero además por ser mujer. Aquí ve- ciencia, en la calle suceden otras cosas. El racis-
mos cómo la cuestión de género las posiciona en mo es realmente frecuente, y las prácticas discri-

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ANTI • Núm. 12 • Diciembre de 2013

minatorias son corrientes hasta entre gente de la “No estoy de acuerdo porque vienen acá a
misma nacionalidad. Uno esperaría que los traba- ocupar nuestros trabajos. Nosotros tenemos genera-
jadores estuvieran unidos y que se sintieran todos ciones y generaciones. Mis padres eran italianos y
proletarios de la misma manera, ya que ocupan la valoraban el trabajo, el esfuerzo, el progreso. Ellos
misma posición de clase, lo que indefectiblemen- no tienen esa cultura”. Ana, Recoleta, 49 años.
te genera que sus experiencias tengan mucho en A partir de estos tres fragmentos de entre-
común. Entonces, y siguiendo esta línea, deberían vistas, vemos cómo se articula el discurso
pregonar por una identidad común y, en conse- hegemónico en nuestro país. Es decir que el ar-
cuencia, luchar por las mismas causas. Ahora gentino promedio ve al inmigrante como su com-
bien, basándonos en la bibliografía sobre el tema, petencia a la hora de conseguir un trabajo y como
y en las experiencias cotidianas que vivimos en la el que utiliza sus servicios y recursos. Además,
Argentina, también pudimos confirmar este tipo como ya mencionamos, es un extranjero no de-
de prácticas discriminatorias en el testimonio de seado, ya que el argentino sigue añorando aquella
nuestra entrevistada, Nelly. Esta mujer de 35 inmigración europea que, en el sentido común,
años, es inmigrante peruana en la Argentina des- representa el progreso. Entonces, de acuerdo a
de hace tres años. Luego de un intento fallido de nuestra perspectiva, es la variable política-econó-
radicarse en nuestro país (cuando tenía 26 años), mica la que es determinante a la hora de construir
hoy en día trabaja en una casa de comidas con su este tipo de discursos.
familia. Y aunque actualmente está radicada en la
Argentina, sufre y sufrió situaciones de discrimi- CONCLUSIONES FINALES
nación. Nelly nos decía al respecto que:
“(…) trabajando en el restaurante tenía- Para finalizar este trabajo de investiga-
mos un cadete… para que llevara las comidas, ción, decimos que hemos podido aproximarnos a
¿no? Pero no resultó. Así que tuvo que irse. Y esta problemática y validar nuestra hipótesis,
luego nos insultó, ‘peruanos de mierda’, nos dijo. aunque de seguro falta mucho por trabajar.
Claro, y también en el hospital. Fuimos a la guar- Es decir que hemos podido confirmar que
dia porque mi hija tenía fiebre y un señor mayor, la población peruana inmigrante en la Argentina,
que estaba esperando allí junto con nosotros nos y específicamente en el caso estudiado de la ciu-
insultó. Decía que ocupábamos sus puestos, que dad de Buenos Aires, es de gran importancia por-
ellos pagaban por eso…”. que son empleados en puestos necesarios y que
A partir de este testimonio, podemos ver no son deseados por los argentinos. Ahora bien,
las situaciones que viven los peruanos que residen como dijimos, los inmigrantes peruanos, por to-
en la Argentina. Los argentinos ven al inmigrante das las causas anteriormente citadas como la difi-
como al que viene a ocupar sus puestos de traba- cultad para conseguir la documentación y funda-
jo, el que viene a utilizar sus servicios, es decir, mentalmente la discriminación que sufren, for-
los que vienen a aprovechar aquello que les cues- man parte de los estratos más bajos de la sociedad
ta tanto trabajo y esfuerzo. En cuanto a este tema argentina, trabajando en condiciones generalmen-
en particular, a continuación analizaremos tres te precarias, a veces en negro y muy frecuente-
fragmentos de las breves entrevistas realizadas a mente con salarios bajos. Por eso mismo, en épo-
argentinos: Olga, Carlos y Ana. cas de crisis, se ven en gran parte desempleados,
“Bueno, a mí no me molesta. Quizás sólo pasando a formar parte del ejército de reserva
que usen el hospital que pagamos todos, porque laboral argentino. Por otro lado, en nuestro traba-
están abarrotados”. Olga, Lanús, 76 años. jo mencionamos el factor racismo (consecuencia
“Creo que hay que restringirla. Los argen- superestructural que potencia la sociedad política
tinos estamos siempre en crisis y no hay plata y la sociedad civil a través de sus aparatos de
para todos. Primero deberían solucionar las cosas estado) que tiene incidencia directa en la desfavo-
acá y después pensar en la migración peruana o rable situación laboral de los inmigrantes en cues-
de cualquier país”. Carlos, Belgrano, 62 años. tión. Y, junto al racismo, encontramos otro factor

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Un día sin peruanos N. Graciano y A. F. Juncos

que incide en esta situación, que es el machismo Marks, J.


de la sociedad, que por supuesto afecta directa- 1997. La raza, teoría popular de la herencia.
mente a las mujeres peruanas. Estas mujeres, co- Mundo Científico N° 185: 1045-1051.
mo dijimos en el transcurso de nuestra investiga-
ción, sufren una doble discriminación: son muje- Marx, Karl.
res y son extranjeras (no deseadas). ”El capital”, en “El proceso de producción del
capital, libro primero”. México: Editorial sigo
BIBLIOGRAFIA XXI, 1992, capítulos 5, 8, 15, 17, 18, 23 y 25.

Canevaro, S. Piazza, A.
2006. Experiencias individuales y acción colecti- 1997. Un concepto sin fundamento biológico.
va en contextos migratorios: el caso de los jóve- Mundo Científico N° 185: 1052-1056.
nes peruanos y el ingreso a la Universidad de
Buenos Aires. En: Migraciones regionales hacia Willis, P.
la Argentina: diferencia, desigualdad y derechos. 1988. Cómo los chicos de la clase obrera consi-
A. Grimson y E. Jelin (comps.). pp. 285-323. guen trabajos de clase obrera. Akal. Madrid.
Prometeo Libros. Buenos Aires.

Evans-Pritchard, E. E.
1957. Antropología social. Nueva Visión. Buenos
Aires.

Centro de Investigaciones Precolombinas • 139


ANTI • Núm. 12 • Diciembre de 2013

LIMINALIDAD IDENTITARIA.
EL ESTADO TRANSICIONAL DE LA IDENTIDAD DENTRO
DEL PROCESO DE MIGRACIÓN LABORAL PERUANO
HACIA LA ARGENTINA

María Laura Pey y Bruno Vindrola Padrós


Facultad de Filosofía y Letras, Universidad de Buenos Aires / Centro de Investigaciones Precolombi-
nas, Instituto Superior del Profesorado Dr. Joaquín V. González
laurapey@hotmail.com; brunovindrola@hotmail.com

RESUMEN

En el marco de la controversia que ha generado la inmigración de grandes poblaciones de países veci-


nos hacia la Argentina en los últimos años, nos preguntamos acerca de la problemática identitaria que
esta migración laboral conlleva. Es a través de la reconstrucción del relato de vida de un hombre perua-
no en la actualidad residente en la Argentina que buscamos ampliar y profundizar este panorama.
Creemos que un análisis de las tendencias migratorias desde esta perspectiva nos brindará una visión
más crítica sobre el discurso imperante en los medios de comunicación respecto a la formación de ex-
periencias de los migrantes. Vale aclarar, que dicho discurso y otras tantas construcciones del imagina-
rio social teñidas por una fuerte xenofobia se vinculan con el sistema económico imperante, sistema
económico que a su vez propicia estas migraciones. Por este motivo nos valemos de un marco teórico
materialista que nos permita dar cuenta de cómo la relocalización laboral contribuye a la formación de
nuevas identidades. Por otro lado, también nos acercamos a la Psicología Social, disciplina de la cual
empleamos el concepto de duelo migratorio para explicar la situación que padece gran parte de los mi-
grantes peruanos acercándolos a lo que consideramos un estadio liminal o transicional en lo que respec-
ta a su conformación identitaria.
Palabras clave: liminalidad, migración laboral, identidad, lugar.

ABSTRACT

Within the controversy that has generated the immigration of huge amounts of people from neighboring
countries towards Argentina in the last years, we inquire about the identity conflict that this working
migration produces. It is through the reconstruction of a Peruvian man’s biography that lives in Argen-
tina that we wish to shed light on this issue. We think that analyzing migration trends from this per-
spective will help us to achieve a more critical position on the role played by dominant discourses in
mass media in the shaping of individual migration experiences. Furthermore, this discourse and many
other constructions of the social imagery marked by xenophobia are linked to the dominant economic
system, the same economic system that generates these migration flows. It is because of this that we
use a materialist theoretical approach which allows us to explore how labor relocations contribute to
the formation of new identities. In addition, we also use a concept of Social Psychology, migrant grief
(our translation), to explain the situation that the majority of Peruvian migrants suffer, referring mainly
to what we consider to be a liminal or transitional state in the process of identity formation.
Key words: liminality, labor migration, identity, place.

“Quien ha renunciado a su tierra natal, también ha renunciado a su Dios”


(Dostoievski 2006: 510)
140 • Centro de Investigaciones Precolombinas
Liminalidad identitaria. El estado transicional de la identidad… M. L. Pey y B. Vindrola Padrós

INTRODUCCIÓN 2010), y las remesas1 generadas durante el 2011

L
alcanzaron los US$2.696 millones, según informó
as migraciones no han sido algo nuevo en el Banco Central (Agencia Peruana de Noticias
la historia de la humanidad, el ser humano 2012). Por ello no es sorprendente que esta es-
viene experimentando los efectos de la tructura económica neoliberal persista en dicho
migración desde su aparición hace ca. 200 mil país. Con esta política de migración forzosa, pero
años. Durante ese tiempo ha sido una medida a la vez sin ningún respaldo monetario por parte
efectiva para aliviar tensiones (entre otros moti- del Estado a aquellos que emigran, es con que
vos), pero en el contexto que explicitaremos más estos individuos llegan a su nuevo destino; en es-
bien parece generarlas, especialmente a nivel in- te caso a la Argentina.
dividual. Actualmente en el planeta existen poco Ahora bien, considerando que el individuo
más de 200 millones de emigrantes, cifra que la no es un agente pasivo sino un actor más en la
ONU pronostica se duplicará en las próximas transformación o reproducción de esas estructuras
décadas desarrollando lo que se denomina el (Giddens 1984), es que nos acercamos a una mi-
‘Sexto Continente’, que consiste en un continente rada más ideológica. El sujeto es condicionado en
de gente en movimiento (Achotegui 2009: 167). su relación con la estructura, pero a su vez genera
Sin embargo, las migraciones actuales pa- su propia perspectiva del entorno que lo rodea.
recen tener mayor grado de estrés a pesar de la Durante este proceso se da la construcción de la
eliminación de ciertas barreras en la comunica- identidad, sin embargo, con la migración a un
ción y transporte, o mejor dicho especialmente nuevo entorno y a una nueva estructura se produ-
debido a ello. Así expresa Achotegui (2009: 167): ce una transformación de esa identidad. Este es-
“la realidad a la que nos enfrentamos es que tado liminal de la identidad es lo que aquí nos
nunca, en nuestro trabajo en la atención en salud concierne.
mental a los inmigrantes desde los años ochenta, Nuestra propuesta consiste en vincular un
habíamos presenciado situaciones tan dramáticas marco que describe un proceso ideológico con un
como las actuales”. Se genera entonces una para- marco materialista que nos acerca a un contexto
doja con el avance de las comunicaciones y socioeconómico (basado en las condiciones de
transportes, ya que por un lado acercan a la po- explotación laboral). Es decir, nos proponemos
blación migrante a su lugar de proveniencia, pero vincular la escala del individuo con la escala so-
por otro lado continua siendo una relación intan- cial para poder visualizar cómo la toma de deci-
gible y retrasa el proceso adaptativo al nuevo en- siones y el proceso de construcción identitaria son
torno. En el caso de la migración peruana a la Ar- fuertemente afectados por las estructuras socioe-
gentina, si bien ha existido desde hace ya varias conómicas imperantes que tienen una profunda
décadas, las políticas de exclusión migratorias trayectoria histórica. Consideramos que el proce-
que han sido impulsadas durante la década del so de migración incluye procesos identitarios, y
setenta y la generación del discurso xenófobo du- que estos procesos están claramente ligados a la
rante el menemismo, han creado un escenario relación entre el agente (en este caso el individuo)
muy distinto. y aquello que lo rodea.
La migración laboral, es decir, la migra- Por este motivo, en lo que respecta a lo
ción por la búsqueda de empleo en otras regiones, metodológico hemos optado por realizar una en-
es prácticamente una cualidad única del sistema
económico imperante durante los últimos tres si- 1
“En términos generales, las remesas constituyen parte del
glos. Consideramos que la migración laboral es ingreso de los emigrantes internacionales con residencia
un fenómeno estructural, es decir, producto de permanente o temporal en el país de acogida que se trans-
estructuras económicas que potencian el traslado fieren al país de origen del migrante y puede incorporar, en
masivo de poblaciones en búsqueda de una mejor algunos casos las jubilaciones pagadas a los trabajadores
calidad de vida a regiones culturalmente distintas. retornantes. Las remesas constituyen, en el plano financie-
ro, transferencias corrientes de residentes de países distin-
En el caso de Perú, el 70% de los migrantes pe- tos, es decir transferencias entre familiares con el objeto de
ruanos emigran por razones laborales (INEI aportar a la manutención familiar” (INEI 2010: 22).

Centro de Investigaciones Precolombinas • 141


ANTI • Núm. 12 • Diciembre de 2013

trevista antropológica (Guber 2004; Rockwell y se expresan en las experiencias cotidianas. Esto
2009) donde prima la no-directividad y a través implica que la “identidad personal y cultural está
de la cual buscamos documentar lo “no documen- ligada al lugar…” (Tilley 1994: 15, traducción
tado”, o sea, escuchar aquellas voces que perma- nuestra) y por lo tanto los lugares son fundamen-
necen fuera del discurso oficial y de los medios tales para el establecimiento de estas identidades
de comunicación. De esta manera nos acercamos y biografías particulares (Tilley 1994).
a Miguel Ángel, un hombre de origen peruano La fuerte vinculación a estos lugares se
que reside en la Argentina hace más de quince deriva de los significados que se encuentran aso-
años y que, a través de su experiencia de vida ciados a éstos, que provocan sentimientos de per-
como migrante, nos brinda otra perspectiva para tenencia y familiaridad. Los lugares existen en
encarar esta problemática. A partir de dicho rela- diferentes escalas espaciales (ya sea espacio per-
to, y aplicando un análisis desde el materialismo sonal, comunitario, regional, etc.) y son siempre
y la fenomenología del paisaje, es que nos propo- entendidos en relación a otros. Esto deriva en que
nemos discutir como se ve afectada y transforma- no es probable que exista una experiencia iguali-
da la conformación identitaria de aquellos indivi- taria de ese espacio ya que es de carácter indivi-
duos que vivencian la migración laboral en la ac- dual (Tilley 1994). Yendo aún más lejos, esta
tualidad. dinámica de acción y percepción involucra distin-
tas relaciones de poder, tanto el poder de acción y
IDENTIDAD COMO LUGAR DE AUTO- relación (poder productivo, el “poder para”) como
RREPRESENTACION el poder de dominación (“poder sobre”) (Miller y
Tilley 1984). Por lo tanto, a pesar de que la expe-
La identidad es “el conjunto de las auto- riencia, percepción y perspectiva del lugar sea
rrepresentaciones que permiten que el sujeto se individual, existen ciertas estructuras de domina-
sienta, por un lado como semejante y pertene- ción que permean esa relación del individuo con
ciente a determinadas comunidades que compar- el espacio y es aquí donde queremos reparar.
ten ciertos valores o ideas y, por otro lado, dife- En base a lo expuesto, se puede ver cómo
rente y no perteneciente a otras” (Achotegui las relaciones de dominación (en este caso de
2002, citado en Achotegui 2009: 165). Una de carácter económico) influencian la perspectiva
estas autorrepresentaciones es el espacio donde que posee el individuo de su propio lugar, y por
tanto el individuo como la comunidad construyen ende de las autorrepresentaciones que genere y
y habitan (dwell), un espacio al que Tilley (1994) reproduzca.
ha denominado lugar, y es donde las demás auto- Ahora bien, ¿qué sucede cuando el sujeto
rrepresentaciones son formadas. es forzado a migrar a un nuevo lugar?
Este concepto proviene de la Fenomeno-
logía del Paisaje, un marco centrado en la manera MIGRACION Y MATERIALISMO
en la que la gente experimenta y comprende al
mundo, es decir, en la relación entre ser y ser-en- Nos basaremos en el antropólogo Meilla-
el-mundo (Tilley 1994). Esta relación implica un soux para explicar el fenómeno de la migración
proceso de objetivación donde el sujeto objetiva laboral dentro del sistema capitalista. En cuanto a
al mundo, es decir, establece una distancia con este sistema económico resulta fundamental en-
aquello que es externo a él. También remite a una tender el empleo de un doble mercado de trabajo.
percepción espacial que no es completamente na- Esto consiste en la categorización de los trabaja-
tural (objetividad) ni completamente cognitiva dores en: aquellos provenientes de otras regiones
(subjetividad), sino que está mediada por el cuer- por migración temporaria y aquellos trabajadores
po. Es únicamente mediante este proceso, el de que se consideran ya integrados o estables (que se
habitar (Pedragosa 2011), que el espacio adquiere reproducen dentro del sistema) (Meillasoux
significado. Estos lugares son “centros de la sig- 1972). Esta categorización apunta a la segrega-
nificación humana, actividad corporal y fijación ción de los trabajadores en los dos grupos men-
emocional” (Tilley 1994: 15, traducción nuestra) cionados, y lo establece a nivel práctico mediante
142 • Centro de Investigaciones Precolombinas
Liminalidad identitaria. El estado transicional de la identidad… M. L. Pey y B. Vindrola Padrós

dos tipos de discriminación. Una de ellas es sala- países limítrofes, quienes llegaron al país princi-
rial (se refiere a una distinción entre el salario di- palmente a partir de la segunda mitad del siglo
recto y el indirecto), donde “los beneficios socia- XX. Ambas poblaciones “recibieron tratamientos
les por familiares y por paros, la asistencia a los notoriamente divergentes por parte de las agen-
enfermos o los incapacitados por razones de tra- cias estatales, especialmente en lo concerniente
bajo, son concedidos de manera discriminatoria” al trabajo como derecho” (Pacecca 2005: 4),
(Meillasoux 1972: 170), perjudicando a los traba- donde las poblaciones europeas eran las benefi-
jadores inmigrantes. ciadas a nivel teórico. Ocurre un escenario similar
El segundo tipo de discriminación se re- con la emisión de la “Ley Videla” (N° 22.439) en
fiere al uso, por parte de las empresas, de la ines- 1976, en la cual se instaura a nivel institucional
tabilidad del empleo y los bajos salarios como un una fuerte política discriminatoria y represora que
medio para únicamente utilizar a los trabajadores atentaba contra aquel que no coincidiese con los
inmigrantes, manteniendo al margen a los traba- “parámetros de moral, procedencia y legalidad”
jadores integrados que no pueden sustentarse con esperables.
tan bajo salario. De esta manera, en distintos momentos de
Para reforzar y controlar esta diferencia- la historia socioeconómica de la Argentina la in-
ción, entre los trabajadores se establece “el man- migración se construyó discursivamente como
tenimiento […] de prejuicios racistas y xenófo- una amenaza. Se utilizó a la población inmigrante
nos, prejuicios que permiten considerar a los tra- como chivo expiatorio para explicar la creciente
bajadores de origen extranjero como menos cali- situación de desempleo, la inseguridad y hasta la
ficados a priori, y dirigirlos así arbitrariamente, propagación de enfermedades varias (por ejem-
mediante este juego tramposo, hacia los empleos plo, el cólera) siendo en su mayoría efectos socia-
peor pagados y menos estables” (Meillasoux les y económicos de las políticas neoliberales im-
1972: 171). La ideología juega, entonces, un rol plementadas.2
fundamental para el funcionamiento y reproduc- Sin embargo, con la nueva ley de migra-
ción del doble mercado de trabajo, y es algo que ción (N° 25.871) aprobada en el 2004 se estable-
permea al discurso cotidiano. Como enfatiza ce un cambio fundamental, muy positivo en com-
Bauman: paración con las leyes anteriores migratorias.
‘No hables con extraños’ -que era antes Básicamente esta ley expresa la obligación estatal
una advertencia de los padres a sus hijos indefen- de garantizar la igualdad de trato a los extranjeros
sos- se ha convertido ahora en un precepto es- siempre que se cumplan con las condiciones de
tratégico de la normalidad adulta. Este precepto ingreso al país y, aunque no se hayan cumplido,
da nueva forma, […] a la realidad de una vida en no se le ha de negar el acceso a atención social,
la que los extraños son personas con las que nos educación o salud. Estas nuevas leyes han impul-
rehusamos a hablar. Los gobiernos, impotentes sado la migración de países limítrofes al país ga-
para modificar de raíz la inseguridad y la angustia rantizando estas cuestiones básicas. No obstante,
existenciales de sus súbditos, respaldan con gusto los mecanismos económicos, el incumplimiento
este precepto […] determinando así una de las de estas leyes, trabas burocráticas y el discurso
pocas tareas que los gobiernos actuales son capa- ideológico cotidiano que permanece desde siglos
ces de llevar a cabo (Bauman 2005: 118). pasados, afectan a las poblaciones migrantes en
En el caso de la Argentina, se ha estable- su adaptación al nuevo lugar.
cido históricamente además una categorización El sistema económico capitalista afecta así
de las poblaciones migrantes (distintos tipos de a la construcción y transformación de identidades.
extranjeros), que puede rastrearse a partir de las
políticas migratorias diferenciales del siglo XIX. 2
En la década del 90 se dictaron sucesivos decretos a través
Esta clasificación consiste en la división de las del Reglamento de Migraciones sancionado en 1994 (Ce-
poblaciones provenientes de Europa, cuya oleada riani Cernadas y Morales 2004). Acompañando dicha polí-
tica pudo leerse en diarios locales un fuerte discurso oficial
migratoria llego al país a partir de finales del si- que endilgaba a los inmigrantes la responsabilidad por la
glo XIX y principios del XX, y aquellas de los precarización laboral.

Centro de Investigaciones Precolombinas • 143


ANTI • Núm. 12 • Diciembre de 2013

De manera directa, obliga al migrante a salir de potencian o apaciguan el estrés del migrante que
su país de procedencia en búsqueda de mejores no son considerados3. Sin embargo, permanece
oportunidades de empleo en otros países (dejando como un concepto útil dentro de los parámetros
a la gente y al lugar donde había ya construido que explicitamos.
una identidad), y de manera indirecta afecta la
transformación identitaria por la alteración de la LIMIDALIDAD E IDENTIDAD
nueva localización mediante la ideología racista y
las medidas de discriminación salarial. La liminalidad es un concepto que permite
describir el proceso de cambio identitario en la
MIGRACION Y PSICOLOGIA SOCIAL: LA inmigración de estos individuos a otras regiones.
MIGRACION DESDE EL INDIVIDUO Es un concepto que involucra un estado transicio-
nal entre una posición y otra posición, y es este
Coincidimos con Joseba Achotegui en que estado intermedio el que claramente está presente
la migración no es algo completamente negativo, en poblaciones ubicadas en un nuevo lugar. De
ya que se obtienen beneficios de esta situación, esta manera establecemos una analogía con lo que
sin embargo, es una “solución que encierra parte Turner presenta sobre los ritos de transición.
de un problema” (Achotegui 2009: 163). Este Para Victor Turner todos los ritos de pasa-
problema se denomina estrés o duelo migratorio. je conllevan tres fases: separación, limen y agre-
Según Achotegui, el duelo migratorio gación (Turner 1988). La primera tiene que ver
(distinto a otros tipos de duelo), es un duelo con la desvinculación del individuo o grupo de
múltiple, parcial y recurrente. Parcial porque el “un conjunto de condiciones culturales” (Turner
ser querido, en este caso el lugar, no desaparece 1988: 101), en resumidas cuentas la emigración.
ni tampoco la posibilidad de un regreso al lugar La segunda fase, la que nos interesa, implica un
de origen. Recurrente porque constantemente el estado intermedio, donde las “características del
sujeto se contacta con el lugar de procedencia, y sujeto ritual son ambiguas, ya que atraviesa un
por lo tanto el duelo permanece vivo durante la entorno cultural que tiene pocos, o ninguno, de
vida del sujeto. Finalmente el duelo también es los atributos del estado pasado o venidero” (Tur-
múltiple porque todo aquello que rodea a la per- ner 1988: 101). La última fase consiste en la in-
sona cambia, y afecta no sólo al que viaja sino corporación del sujeto al nuevo mundo, donde
también a los que se quedan en el lugar de origen “tiene derechos y obligaciones vis a vis otros de
y a los grupos autóctonos. Como dice Achotegui un tipo claramente definido y estructural” (Tur-
“la migración es un hecho social y, como todo ner 1988: 102). Esto último es algo que es conti-
hecho social, tiene repercusiones sobre el conjun- nuamente bloqueado por los procesos discrimina-
to de la sociedad” (Achotegui 2009: 166). torios del sistema económico. En resumen, la li-
La idea del síndrome de Ulises surgió a minalidad es un estado de ambigüedad, ya que
partir de que los estresores se han potenciado en involucra una condición de difícil definición, tan-
las últimas décadas, muchos de ellos producto del to para el sujeto como para los diferentes grupos
sistema económico imperante. Este síndrome se con los que se desenvuelve el sujeto; como des-
da generalmente en situaciones tan extremas que cribe Turner (1988: 102) “estas persones eluden
no hay momento para el duelo, y el sujeto entra o se escapan del sistema de clasificaciones que
en un estado de crisis. normalmente establecen las situaciones y posi-
La multiplicidad de aspectos que lleva la ciones en el espacio cultural”.
elaboración del duelo migratorio da lugar a pro- Ahora bien, en la adultez, la personalidad
fundos cambios en la personalidad del inmigran- e identidad ya se encuentran construidas, es decir
te, hasta tal punto que modifican su propia identi-
dad (Achotegui 2009: 165). 3
Es importante también destacar que este Tales pueden ser, por ejemplo, características culturales de
la comunidad a la cual pertenece la persona, posición so-
concepto posee sus limitaciones al ser tan genera- cioeconómica, razones de la migración, el entorno social al
lizado, ya que existen numerosos factores que que se muda la persona, etc.

144 • Centro de Investigaciones Precolombinas


Liminalidad identitaria. El estado transicional de la identidad… M. L. Pey y B. Vindrola Padrós

que “cuando la persona emigra, ya está condi- úa trabajando esporádicamente en negro y el sus-
cionada por lo que ha vivido en la infancia” y tento familiar proviene del trabajo de su esposa
por lo tanto “tendrá dificultades para adaptarse como empleada doméstica.
plenamente a la nueva situación” (Achotegui Su historia de inmigrante comenzó a partir
2009: 164). Los lugares que son parte de este de las condiciones políticas y económicas de Perú
proceso de construcción identitaria, “se convier- tras la asunción al poder de Alberto Fujimori. Las
ten en parte de la memoria del sujeto […] y son políticas de corte neoliberal implantadas por el
constitutivos de sus presentes” (Tilley 1994: 27, mandatario, incluyendo la privatización de em-
traducción nuestra). Posterior a la migración es presas, cierre de fábricas completas, aumento de
requerido cierto tiempo de memoria para lidiar la tasa de desempleo e inflación, generaron un
con la hostilidad de un nuevo lugar, implicando clima inestable para el desarrollo de gran parte de
una transición, en la que el individuo se adapta a la población. Fue allí cuando comenzó a oírse la
estos nuevos valores e instaura también los suyos. posibilidad de irse a otros países:
Sin embargo, es el duelo migratorio (este recordar Las empresas privadas fueron cerrando los
de la comunidad, el lugar y las autorrepresenta- mercados y dejaban sin trabajo a la gente. La sequ-
ciones) el que mantiene este estado liminal por ía también es un factor importante […] Y tienen
más tiempo. que salir a la capital. Y también se iban al exterior,
Cabe aclarar que no nos referimos a una llegaba que se ganaban miles de dólares en Europa
identidad nacional, ya que sería polarizar la pro- […] Así que una amiga me dice: ‘mira en Argen-
blemática identitaria en un interjuego entre dos tina las cosas están bien, ¡se gana en dólares!’. El
identidades nacionales y también homogeneizar uno a uno (entrevista con Miguel Ángel).
en una categoría las distintas identidades grupales Fue así como, a través de una oferta labo-
que conforman esta comunidad imaginada deno- ral que nunca se concretó, el entrevistado decide
minada Nación (Anderson 1993). Más bien nos trasladarse a la ciudad de Buenos Aires. Tras di-
referimos a la transición de una identidad perso- cho desengaño no tuvo más remedio que instalar-
nal producto de una movilización a un nuevo lu- se en el barrio de Flores y, al cabo de un año de
gar y a una nueva comunidad. búsqueda, comenzar a trabajar en un taller textil
Mediante el relato de Miguel Ángel pre- junto a un grupo de inmigrantes bolivianos. Allí
tendemos mostrar cómo a través de la experiencia dice haber conocido lo que es la esclavitud siendo
del duelo migratorio y los niveles de estrés que su jornada laboral de 12 horas, en negro y con
conlleva (que fueron catalizados por un sistema una remuneración mínima. Esta situación refleja
económico que contradictoriamente impulsa la claramente aquello que Meillasoux (1972) deno-
migración pero también la restringe), se modifica mina doble mercado de trabajo, donde los sujetos
y se mantiene la identidad del individuo migrante foráneos que migran temporáneamente son ex-
en un estado liminal permanente. cluidos del mercado laboral formal teniendo que
atenerse a condiciones extremas de precarización
UN RELATO MIGRANTE laboral. Vale aclarar que Miguel Ángel ya venía
con un historial de precarización laboral habiendo
Siendo oriundo de Palpa, departamento de trabajado en Perú también en negro, inclusive en
Ica, Miguel Ángel reside en Buenos Aires hace organismos estatales.
más de quince años junto a su esposa y su hija Con el tiempo, el entrevistado cuenta
adolescente. Su caso nos resulta de especial in- haber percibido una mayor población peruana
terés ya que formó parte de una temprana oleada migrante en la capital junto con la cual ingresa al
migratoria peruana allá por 1993. Por otro lado, país su hermano. Ambos consiguen empleo en un
desde aquel entonces ha fundado una agrupación restaurante chino y fue allí donde se percató de
dentro de la colectividad para el asesoramiento las políticas diferenciales en cuanto a migración
del inmigrante en nuestro país y en la actualidad que emplean los distintos países de origen.
se encuentra cursando la carrera de Psicología Ellos también eran inmigrantes [los chinos
Social. A pesar de los años de residencia, contin- del tenedor libre], pero con una particularidad de
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que ellos venían en equipo y con una cierta canti- dianidad se ven modificadas: desde la comida has-
dad de dinero. Porque cada uno viene con sus ta las normas sociales. Uno de los cambios más
50.000 dólares que les da el Estado. Ellos vienen, notorios que menciona Miguel Ángel fue el plano
o sea, en grupo y se juntan. Así como las colecti- musical. Criado en un entorno en donde la música
vidades. A los chinos el Estado les da el incenti- jugaba un rol esencial en la recreación de lo coti-
vo, a que vayan a otro lado y se instalen, que se diano (música en la calle, música en su casa, y has-
vayan. Entonces ellos se juntan, un grupo, y ta la conformación de su propia banda musical en
hacen un capital. Es una cadena. Están bien orga- su temprana edad), el contraste con el paisaje so-
nizados. [Los peruanos] no se pueden ver, no se noro porteño fue impactante. “La peruanidad nos
juntan. ¡No se pueden asociar ni organizar! (en- buscamos a través de la música”, afirma el inmi-
trevista con Miguel Ángel). grante quien al concurrir a discotecas de salsa ha
Por un lado, tenemos estados como el de logrado contactar a muchos de sus pares. Y fue
China que ante la necesidad de sus pobladores de gracias a estos primeros contactos que con el tiem-
emigrar para un mejor desarrollo económico, res- po lograron organizarse independientemente como
ponde por ellos otorgándoles un incentivo mone- asociación deportiva y luego presentarse ante la
tario. Claramente se trata de un cierto respaldo colectividad como un espacio de conexión con el
estatal que les permite apaciguar las dificultades viejo lugar. A su vez se ha ido conformando como
de la inserción en el nuevo lugar. En cambio, por una red social que brinda apoyo, contención y asis-
otro lado, gobiernos neoliberales como lo fue el tencia a todo aquel inmigrante informal que haya
fujimorato y los subsiguientes generaron otras ingresado al país y que por miedo o desinforma-
condiciones de partida siendo su repercusión des- ción no se acerca a las instituciones estatales perti-
favorable para sus emigrantes y deviniendo en un nentes para realizar trámites y/o consultas. Según
sentimiento de desarraigo y desprotección. Eduardo Domenech, coordinador del proyecto de
La comunidad cuando viene se siente des- investigación “Multiculturalismo, migraciones y
protegida por el Estado. O sea, ¿por qué me tengo desigualdad en América Latina”, este tipo de orga-
que ir yo de Perú a buscar trabajo en otras partes? nizaciones están adquiriendo cada vez mayor peso
Y ¿por qué no hay salud pública gratis en ningún político. Esto se debe a que: …hacia los organis-
otro lado? ¿Por qué si tienes una changuita no mos del Estado en general hay miedo. La doctrina
puedes darle a tu hijo desayuno, almuerzo y cena? de la seguridad nacional ha calado hondo. Si me
(entrevista con Miguel Ángel). guío por la propia voz de los inmigrantes, el Esta-
A este sentimiento de desprotección estatal do está asociado al control migratorio, a la policía
habría que sumarle aquel rechazo que se comenzó migratoria. Entonces es muy difícil. Quizás eso se
a percibir por parte de la población argentina. Esta comience a revertir pero por ahora en el imagina-
fue fuertemente influenciada por la retórica de ex- rio el Estado está representado de esa manera.
clusión promovida por un Estado, que pretendía Después habría que ver cuáles son los canales de
enmascarar la verdadera razón de la crisis. participación que promueve el Estado (Domenech
Acompañando dicho discurso se comenzó 2007).
a aplicar con mayor insistencia la antigua “ley Vi- Por estos motivos este tipo de agrupacio-
dela”, que se tradujo en detenciones sin justificati- nes se transforman en un hecho social clave para
vo, extorciones de dinero, y hasta deportaciones. generar nuevos espacios de contención y sobre
Lo que aquí vemos expresado, es la acción todo de autorrepresentación. No es casual que el
directa del sistema económico que forzó a Miguel nombre de la agrupación de Miguel se llame
a salir de su lugar de origen y que repercute en su PALPA, y que actualmente su blog sea visitado
inserción al nuevo lugar. por muchos de sus pares.
En lo que respecta a dicha inserción existen El buscar permanente contacto con sus
varias cuestiones a destacar. Una de ellas es que paisanos y el asociarse para diferentes activida-
dicho proceso implica una adaptación al nuevo des bajo un nombre tan distintivo y significativo,
lugar, con todo lo que esto trae aparejado. Al mi- refleja la característica recurrente del duelo mi-
grar de un lugar a otro, todas las esferas de la coti- gratorio con el cual se está continuamente en
146 • Centro de Investigaciones Precolombinas
Liminalidad identitaria. El estado transicional de la identidad… M. L. Pey y B. Vindrola Padrós

contacto con las representaciones del lugar aban- múltiples ángulos para su comprensión. Una pro-
donado. Sin embargo esta PALPA, como agrupa- puesta que surge como necesaria es la inclusión en
ción de contención y consejo, reside en Argenti- el relato de las voces de aquellos que atravesaron y
na. Y es a través de este constante duelo que sos- atraviesan a diario esta experiencia, experiencia
tenemos que el sujeto permanece en un estado de permeada por múltiples factores y que transforma
liminalidad identitaria. Se trata de un estado de constantemente al ser y la sociedad que lo acom-
constante búsqueda en la que el individuo no se paña. Es en este proceso de transformación en
siente completamente parte del país residente pe- donde nos encontramos con ciertas incongruencias
ro tampoco se reconoce como aquel yo que otrora que creemos propias del sistema económico que
emigró; búsqueda de un nuevo yo que se recrea nos acontece y atraviesa, nos condiciona y nos
día a día en la práctica tomando nuevos elemen- propicia, nos abre un camino pero nos dificulta su
tos de su entorno y a su vez transformando lo que transitar. Y es en este interjuego donde surgen ne-
lo rodea. Quizá sea por este motivo que Miguel cesidades como las de abandonar el lugar de ori-
Ángel reflexiona: gen en búsqueda de mayores posibilidades de de-
Patria no es el lugar donde uno nace, sino sarrollo. Sin embargo, al arribar a aquel nuevo es-
donde uno se cría […] El sentimiento es diario. O pacio son otras las dificultades que emergen, en su
sea, yo vivo acá, pero soy peruano. Si me pregun- mayoría producto de un discurso hegemónico que
tas cual sería el segundo lugar del mundo ¡digo no permite la plena inserción del inmigrante con
Argentina! En Perú tengo a mis afectos, mi fami- motivos meramente estratégicos.
lia, pero vivo aquí […] Uno viene y se va ama- Este es el marco socioeconómico en el
mantando y se va compenetrando donde te vas cual el inmigrante, los inmigrantes, deben des-
criando, alimentando, viviendo (entrevista con arrollarse y en el cual el estado liminal de su con-
Miguel Ángel). dición social, sumado al duelo que implica la
No obstante, esta búsqueda se vuelve un adaptación a un nuevo sitio, permean sus configu-
camino minado de contradicciones, contradiccio- raciones identitarias constantemente.
nes propias de las relaciones de dominación que Así mismo, en la actualidad el discurso gu-
permean la vivencia del sujeto en el lugar e in- bernamental argentino parece haberse situado en la
congruencias intrínsecas del mismo sujeto. Un vereda de la inclusión, brindando el acceso a salud,
ejemplo que nos habla de la corporalización de educación y empleo a todo aquel que ingrese en
dichas incongruencias es la experiencia que tuvo términos legales al territorio y/o esté en proceso de
el entrevistado cuando sus dos equipos favoritos hacerlo. Sin embargo, si bien se reconocen estos
se enfrentaron en un partido. El encuentro se dio derechos de igualdad formal, junto a una retórica
en Buenos Aires, siendo el Sporting Cristal el que valora la multiculturalidad y multietnicidad de
contrincante de Boca Juniors. Ambos equipos re- la sociedad contemporánea, podría decirse que en
presentaban a Miguel futbolísticamente, uno en la práctica estos postulados aún permanecen a mo-
Perú y el otro en Argentina. El entrevistado sos- do de proyecto. El incumplimiento de muchas de
tiene que tuvo un ataque de pánico ni bien se estas leyes, las trabas burocráticas aún vigentes, el
aproximaba al estadio, y expresó que en ese mo- remanente discurso xenofóbico que se percibe en
mento sus “sentimientos estaban encontrados”. lo cotidiano y el miedo y la desconfianza que todo
Inesperadamente le fue negado el acceso por una esto genera en el inmigrante a la hora de acercarse
bandera del Sporting muy grande, lo que le ge- a los organismos estatales, se vuelven claro ejem-
neró un inexplicable alivio. “Me di cuenta de que plo de ello.
había empezado a amar a la Argentina, la tierra Sin ir más lejos, quizá esto se deba a que
de mi hija”, afirma Miguel. por más que se plantee desde lo formal la igual-
dad, tolerancia e inclusión como un cambio radi-
PALABRAS FINALES Y UNA RELEXIÓN cal en políticas migratorias, la estructura de po-
der que produce y reproduce las condiciones ma-
Evidentemente la cuestión migratoria es teriales y simbólicas de desigualdad y exclusión
sumamente compleja y debe ser abordada desde social se mantiene inalterada.
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ANTI • Núm. 12 • Diciembre de 2013

Como afirma Bauman (2005: 116): “No Bauman, Z.


es raro, entonces, que la etnicidad sea la primera 2005. Modernidad líquida. Fondo de Cultura
opción cuando se trata de aislarse del aterrador Económica. Buenos Aires.
espacio polifónico donde ‘nadie sabe hablar con
nadie’, ocultándose en un ‘nicho seguro’ donde Ceriani Cernadas, P. y D. Morales
‘todos son iguales’ y donde, por lo tanto, no hay 2004. Ley de Migraciones: los derechos de todos.
mucho de qué hablar y de lo poco qué queda se Clarín, 5 de enero de 2004. Documento electróni-
puede hablar fácilmente”. co, http://edant.clarin.com/diario/2004/01/05/o-
Por último, creemos imperativo enfatizar 02502.htm
que la elección de continuar con políticas que
fomentan la reproducción del modelo económico Domenech, E.
neoliberal, tiene fuertes efectos sobre las pobla- 2007. La inmigración es un hecho social total, cla-
ciones de ambos países. Sobre todo, afecta a indi- ve en nuestro tiempo. Desafíos Urbanos N° 54.
viduos migrantes no solo a nivel material sino
también a un nivel muy íntimo y profundo de su Dostoievski, F.
ser, el de su propia identidad. Por ello, conside- 2006. El Idiota. Terramar Ediciones. Buenos Aires.
ramos que se debe considerar el fenómeno de la
liminalidad identitaria y el estrés migratorio por Giddens, A.
parte de las distintas autoridades antes de conti- 1984. La constitución de la sociedad. Bases para
nuar reproduciendo estas políticas económicas. la teoría de la estructuración. Amorrortu edicio-
nes. Buenos Aires.
AGRADECIMIENTOS
Guber, R.
Queremos agradecer al Centro de Investi- 2004. El salvaje metropolitano. Paidós. Buenos
gaciones Precolombinas (CIP) por su apoyo en el Aires.
desarrollo de nuestro trabajo. Agradecemos tam-
bién Miguel Ángel y a su familia por haber brin- Instituto Nacional de Estadística e Informática
dado su tiempo y palabras para reflexionar. Fi- (INEI)
nalmente queremos agradecer a Cecilia Vindrola 2010. Perú: Remesas y Desarrollo. Organización
Padrós quien nos ayudó a plasmar muchas de las Internacional para las Migraciones. Lima.
reflexiones que hemos tenido.
Meillassoux, C.
BIBLIOGRAFIA 1972. Mujeres, graneros y capitales (II parte).
Ed. Siglo XXI. México.
Achotegui, J.
2009. Migración y salud mental. El síndrome del Miller, D. y C. Tilley (eds.)
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me de Ulises). Zerbitzuan N° 46. ge University Press. Cambridge.

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2012. Perú: remesas enviadas al país alcanzan 2005. El Mercosur y la normativa migratoria ar-
los US$2.696M en 2011. América Economía, 25 gentina (2000-2005). Trabajo presentado en el
de Febrero de 2012. Documento electrónico, VII Congreso de Ciencia Política de la Sociedad
http://www.americaeconomia.com/economia- Argentina de Análisis Político. 15 al 18 de no-
mercados/finanzas/peru-remesas-enviadas-al- viembre de 2006. Buenos Aires.
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1993. Comunidades imaginadas. Fondo de Cultu- nológico. Investigaciones Fenomenológicas, Vo-
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148 • Centro de Investigaciones Precolombinas
Liminalidad identitaria. El estado transicional de la identidad… M. L. Pey y B. Vindrola Padrós

Rockwell, E. nology of Landscape. Places, Paths and Monu-


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Centro de Investigaciones Precolombinas • 149


ANTI • Núm. 12 • Diciembre de 2013

EDUCACIÓN INTERCULTURAL. ACERCAMIENTO A LA


VIDA COTIDIANA DE UNA NIÑA PERUANA EN LA
ESCUELA ARGENTINA

Nazareth Sánchez y María Sposato


Facultad de Filosofía y Letras, Universidad de Buenos Aires / Centro de Investigaciones Precolombi-
nas, Instituto Superior del Profesorado Dr. Joaquín V. González
cheztorun@hotmail.com; baijol@hotmail.com

RESUMEN

La migración peruana en la Argentina tuvo su auge a mediados de la década de los ochenta y desde
entonces, cientos de peruanos vienen anualmente a nuestro país a residir de forma permanente. Este
fenómeno, así como el afluente migratorio de diversos países limítrofes, se encuentra en el foco de la
arena pública y política, ya que es objeto de múltiples debates respecto a la permanencia o no de perso-
nas que no pertenecen al país, en tanto originarios de otro punto geográfico. En este sentido, nos pro-
ponemos investigar la forma en que las construcciones peyorativas podrían incidir en la escolarización
de niños y jóvenes inmigrantes rodeados de un mundo simbólico diferente en lo que a referencias iden-
titarias respecta. Así, intentaremos abordar distintos aspectos de la vida cotidiana de una joven migran-
te peruana escolarizada en Argentina, con el fin de conocer en profundidad la puesta en práctica de
políticas interculturales. Por último, trataremos de problematizar la noción estática de identidad toman-
do en consideración el carácter dinámico y construido de la identidad al dar cuenta que la joven mi-
grante construyó, y construye, su subjetividad en un país que no es el de origen y atravesó su escolari-
zación en una institución cargada de emblemas que exaltan una nacionalidad que no es la propia.
Palabras clave: interculturalidad, migración, educación, identidad, vida cotidiana

ABSTRACT

Peruvian immigration in Argentina had its boom in the mid-eighties and since then, hundreds of Peru-
vians come to the country every year looking to find a permanent residence. This phenomenon, in addi-
tion to the migratory affluence from other neighboring countries, is in the focus of public and political
discussion, being the subject of many debates regarding the right of people from other geographical
locations to reside in the country. In this sense, our goal is to investigate how derogatory constructions
could affect the schooling of immigrant children and youngsters, who are that influence immersed in a
new world, full of different symbolic references as far as the construction of their identity. Thus, we
will try to address the different aspects of the daily life of a young Peruvian immigrant schooled in Ar-
gentina, in order to obtain a thorough knowledge regarding the application of cultural policies. Finally,
we will try to question the static notion of identity, considering it as a dynamic process in which the
young migrant constructs her subjectivity, in a country which is not her own, through out an education
in an institution full of emblems that exalt a foreign nationality.
Key words: interculturality, migration, education, identity, daily life.

150 • Centro de Investigaciones Precolombinas


Educación intercultural. Acercamiento a la vida cotidiana… N. Sánchez y M. Sposato

INTRODUCCIÓN tes. Es decir, dado el carácter relacional de las

L
construcciones identitarias y su conflictividad
a migración peruana en la Argentina tuvo inherente, consideramos que aunque “la escuela
su auge a mediados de la década de los como institución funcional de la cultura repre-
ochenta y, desde entonces, cientos de pe- senta fielmente sus valores y pautas, y las impone
ruanos migran anualmente a nuestro país a residir o requiere de los educandos de culturas diferen-
de forma permanente. Este fenómeno, así como el tes” (Neufeld y Thisted 1999: 35), no constituye
afluente migratorio de diversos países limítrofes, por sí misma el pilar de la formación educativa ni
se encuentra en el foco de la arena pública y polí- supone una absorción pasiva por parte de los su-
tica, ya que es objeto de múltiples debates respec- jetos.
to a la permanencia o no de personas no nativas
del país, en tanto originarios de otros puntos ge- MODOS DE RE-PENSAR UNA TRAYEC-
ográficos. En este sentido, el objetivo central de TORIA EDUCATIVA
nuestro trabajo es abordar distintos aspectos de la
vida cotidiana de una migrante peruana escolari- En el presente trabajo de investigación se
zada en una institución argentina, con el fin de pretende abordar el problema señalado desde el
conocer más en profundidad la puesta en práctica marco teórico de la Antropología de la Educación
de políticas interculturales. A su vez, intentare- y, sobre todo, desde el enfoque de la intercultura-
mos problematizar la noción estática de identidad lidad. Para ello consideramos significativo tomar
considerando que durante su niñez, y en la actua- como punto de partida la concepción de cultura
lidad, la joven migrante construye su subjetividad que presenta la antropóloga mexicana Elsie
en un país que no es el de origen y ha atravesado Rockwell, la cual nos permite poner de relieve las
su educación secundaria en una institución carga- relaciones de poder en pugna en un espacio parti-
da de emblemas que exaltan una nacionalidad cular y dar cuenta de la historicidad de los proce-
que no es la propia. Por otro lado, intentaremos sos. A su vez, utilizaremos los aportes de Rossana
reconocer de qué manera prácticas escolares habi- Reguillo Cruz y Ana María Salgueiro, que reto-
tuales (entonación del himno, saludo matinal a la man las ideas de Agnes Heller sobre vida cotidia-
bandera, etc.) influyeron en la construcción iden- na, a partir de las cuales intentaremos desentrañar
titaria de una niña peruana, informando a su co- las relaciones entre la capacidad de agencia de los
munidad de origen acerca de algunas característi- sujetos y las limitaciones estructurales que condi-
cas generales de la inserción escolar de los niños cionan este accionar. Finalmente, en lo que res-
y niñas que han migrado con sus familias a Ar- pecta a políticas educativas retomaremos las teo-
gentina. rizaciones de las antropólogas argentinas Gabriela
Teniendo en cuenta que la vida cotidiana Novaro, María Rosa Neufeld y María Laura Diez,
es el espacio en el que se empiezan a gestar los quienes analizan los alcances y limitaciones de la
grandes cambios y, al mismo tiempo, es el lugar interculturalidad en el ámbito escolar puntuali-
en el que los procesos históricos dejan sus hue- zando en migrantes de países limítrofes y comu-
llas, proponemos, a modo de hipótesis, que las nidades aborígenes. Este enfoque nos permitirá
relaciones interpersonales que se establecen a lo repensar la forma en que las prácticas cotidianas
largo de la educación primaria y secundaria son escolares son concebidas por los migrantes que
aquellas de mayor incidencia en las transforma- constituyen una minoría en el sistema educativo
ciones identitarias de personas cuyas trayectorias argentino.
de vida están signadas por el desarraigo migrato-
rio y su consecuente re-inserción en un universo PASOS HACIA UNA ENTREVISTA ET-
simbólico y social diferente. De este modo resta- NOGRÁFICA
mos importancia, aunque no descartamos, las
prácticas escolares rituales propias del país de Para llevar a cabo esta investigación parti-
arribo como principales transformadoras de las remos del relato de vida de una joven peruana
trayectorias de vida de los niños o niñas migran- residente en Argentina, registrado mediante la

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utilización de la entrevista antropológica como vas han ido variando junto con las transformacio-
herramienta metodológica, a partir de la cual pro- nes socio-históricas del momento. De hecho, con-
blematizaremos los objetivos arriba mencionados. sideramos que toda normativa es legislada desde
Esta técnica se caracteriza por ser no directiva, en una postura ideológico-política determinada y en
el sentido de que no existió un cuestionario a res- pos de los intereses de quienes detentan el poder.
ponder por la entrevistada, aunque se optó por En este sentido, creemos importante resaltar que
tomar como puntos de referencia ciertos ejes de desde la Constitución de 1853 se proclama como
trabajo a modo de organizadores del encuentro. rasgo identitario de la Nación Argentina la pro-
Por otro lado, al momento de formular las pre- moción de políticas migratorias quedando de ma-
guntas no se perdió de vista el futuro público de nifiesto este sentimiento en el Preámbulo de dicha
la investigación, con lo cual se dejaron fluir las Constitución al “promover el bienestar general, y
narraciones de la interlocutora, haciendo caso a asegurar los beneficios de la libertad para noso-
algunos procedimientos sugeridos por Guber co- tros, para nuestra posteridad y para todos los
mo son la atención flotante y la asociación libre hombres del mundo que quieran habitar el suelo
de la entrevistada (Guber 1991: 212-213). El pri- argentino” (el subrayado es nuestro). El sentido
mer procedimiento pretende no privilegiar a prio- de esta apertura fue propiciar una migración pre-
ri aspectos de la entrevista que resulten relevantes ferentemente europea, la cual se llevó a cabo has-
a los ojos del investigador, mientras que el se- ta 1930, a partir de concepciones eurocéntricas
gundo permite al interlocutor introducir temas que consideran la inmigración como un importan-
que probablemente escapen a los intereses teóri- te factor en el proyecto modernizador, ya que de
cos de la entrevista pero que pueden resultar su- la mano de los europeos vendría el progreso
mamente pertinentes y reveladores, más aún si se técnico o industrial, la mayor productividad de la
trata de un análisis de la vida cotidiana. En este tierra al multiplicarse la mano de obra disponible
caso, el diálogo fue grabado en formato de audio y un mayor desarrollo en el campo de las ciencias
y luego desgrabado para una posterior selección y las artes. Además, se buscó un brusco reempla-
de fragmentos significativos a los objetivos del zo de la población nativa, en su mayoría indígena,
trabajo de investigación. la cual era considerada bárbara e inútil en el pro-
Además, quisiéramos dar cuenta de una ceso de modernización impidiendo la expansión
decisión metodológica y ético-política que toma- económica que se proyectaba para el país.
mos al momento de realizar este trabajo, la cual A partir de la década del 30´ el flujo de
consistió en cambiar el nombre de la entrevistada inmigrantes europeos comenzó a disminuir y
a fin de resguardar su identidad. tomó mayor relevancia la inmigración de países
Finalmente se recabó información estadís- limítrofes, proceso acentuado hacia la década del
tica sobre la inmigración peruana en Argentina y 60´, con la expansión del mercado de trabajo ar-
sobre las normativas institucionales existentes a gentino, situación que conlleva la implementa-
nivel nacional, con el fin de dar cuenta de un es- ción de mano de obra temporaria. La situación de
tado de la cuestión en torno al problema enuncia- los inmigrantes comienza a ser considerada como
do y al marco teórico elegido. A su vez, se coteja- un “problema” en tanto son tomados como “chivo
ron los datos seleccionados de fuentes escritas expiatorio” frente a los conflictos sociales y el
(textos académicos, documentos oficiales de Es- clima de continuo cuestionamiento social que
tado) con aquellos aportados por la persona en- atraviesa Argentina durante ese período histórico.
trevistada. Las situaciones injustas y violentas a las que son
sometidos muchos de los inmigrantes por parte de
DEL CRISOL DE RAZAS A LA INTER- sus empleadores son reconocidas tardíamente en
CULTURALIDAD EN EL AULA un decreto (Decreto Nº 87 del 11-1-1974) de am-
nistía dictado durante el tercer gobierno peronista
Desde la constitución de Argentina como mediante el cual se permite a los inmigrantes ile-
país hasta la actualidad, las normativas que res- gales sometidos al trabajo en negro obtener la
pectan a migración así como las políticas educati- radicación definitiva. Tras un impasse en la mi-

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Educación intercultural. Acercamiento a la vida cotidiana… N. Sánchez y M. Sposato

gración fruto de las políticas de Estado del go- ciedad en la que conviven y se “toleran” diferen-
bierno de facto del período 1976-1983, las nuevas tes culturas. Luego tuvieron lugar conceptos co-
normativas surgidas con la vuelta de la democra- mo pluriculturalidad e interculturalidad en Lati-
cia sólo acentuaron las restricciones vinculadas a noamérica, que profundizaban el análisis anterior
menudo con factores económicos (Orlog y Vives dando cuenta de la complejidad de las relaciones
1999). humanas y los contextos socio-históricos en los
De esta manera, las primeras políticas de que éstas tienen lugar. Con respecto a estos con-
Estado se habían mostrado optimistas con el in- ceptos, María Laura Diez (2004) aporta una inte-
greso de extranjeros en nuestro territorio, pero resante síntesis realizada por Aguado Odina:
con el correr de los años, y a medida que el nivel “Con el término multicultural se define la situa-
demográfico se estabilizaba y las condiciones ción de las sociedades, grupos o entidades socia-
básicas de existencia (salud, educación, trabajo) les en las que muchos grupos o individuos que
se mantenían constantes, las políticas de ingreso pertenecen a diferentes culturas viven juntos. (…)
al país eran restrictivas y sólo era posible para Pluricultural es casi un sinónimo, indica simple-
aquellos que contaran con capital material propio mente la existencia de una situación particular.
o con un contrato de trabajo previo a la emigra- (…) Transcultural implica un movimiento, indica
ción del país de origen. Así, podemos pensar que el paso de una situación cultural a otra. Final-
siempre se tomó en consideración el capital del mente, intercultural no se limita a describir una
inmigrante al momento de pensar el poblamiento situación particular, sino que define un enfoque,
del país, aunque en un primer momento tomaba procedimiento, proceso dinámico de naturaleza
relevancia el capital simbólico por sobre el mate- social en el que los participantes son positiva-
rial. Durante la década del ’90, las políticas neo- mente impulsados a ser conscientes de su inter-
liberales del gobierno menemista llevaron a una dependencia” (Aguado Odina 1991: 83 citado en
valoración excesiva del capital material invertido Diez 2004: 193-194).
en territorio nacional, privatizando muchas de las De acuerdo con esto, optamos por la utili-
empresas en manos del Estado y facilitando la zación del término interculturalidad apelando a la
inversión de capitales extranjeros en zonas e in- noción de diálogo y relación, inherente a los di-
dustrias consideradas fundamentales para el desa- versos grupos sociales y étnicos que comparten
rrollo económico del país. El contexto de desfon- un mismo territorio en la era actual de la globali-
damiento de las instituciones y el aumento de la zación, sin dejar de lado las condiciones asimétri-
brecha entre ricos y pobres dio lugar a una serie cas y desiguales en las que interactúan. A su vez,
de discursos xenófobos que buscaban culpar a los este término, es fuertemente utilizado en América
extranjeros de las fallas del sistema económico y Latina ya que expresa un posicionamiento ide-
del amplio sector de la población que subsistía en ológico en el que no sólo es un marco de referen-
condiciones por debajo de la línea de la pobreza. cia teórica sino que debe ser asumido como una
Durante las oleadas migratorias de la se- praxis política, asociada a la gestión y al rol del
gunda mitad del siglo XIX y principios del XX se Estado desde la creación y aplicación de políticas
creía en la asimilación o integración de diversas horizontales que permitan dicho diálogo intercul-
colectividades recientemente instaladas en el te- tural. En este sentido, el Estado cumple un rol
rritorio nacional, las cuales se amalgamarían en fundamental en tanto promotor y garante de la
un crisol de razas, dejando de lado las diferencias educación para todos los habitantes del territorio
culturales, étnicas y sociales que en un principio nacional, afrontando la responsabilidad del respe-
las distinguían (Neufeld y Thisted 1999). Ahora to a la diversidad sociocultural sin que se trans-
bien, a partir del reconocimiento de la imposibili- forme en un reconocimiento de las desigualdades
dad de una fusión completa surgen en el ámbito a “tolerar”. Esta situación de tolerancia entre gru-
académico teorizaciones respecto a la diversidad pos culturales diversos es la que proclama el mul-
sociocultural y sus posteriores usos. El primero ticulturalismo cuando imagina una sociedad con-
de los conceptos, multiculturalismo, surge en formada por múltiples mosaicos que comparten
Estados Unidos a partir de la creencia de una so- un espacio común sin reconocer las relaciones

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ANTI • Núm. 12 • Diciembre de 2013

dialógicas y la conflictividad implícita en la dife- estas actividades las que, en una mirada retros-
rencia. pectiva de la joven, hicieron disminuir su rendi-
miento académico, ya que le dedicaba menos
EDUCACIÓN Y MIGRACIÓN DESDE EL tiempo al estudio durante el secundario. Fue tam-
ANÁLISIS DE UN CASO bién durante el secundario que Sara comenzó a
trabajar en pequeños trabajos informales, no por
Sara es una mujer joven de 31 años, del- necesidad sino para tener su propio dinero. Al
gada, de estatura media y tez morena; tiene cabe- finalizar sus estudios la joven comienza a trabajar
llo negro, largo y espeso, y ojos color marrón. El formalmente en distintos ámbitos: en una fábrica,
día de nuestro encuentro viste unas babuchas ne- como telemarketer y vendedora de seguros médi-
gras y una musculosa blanca con un collar de cos a domicilio; mientras que a la par estudiaba
cuentas rojas que cae sobre su pecho. Nos recibe canto con un profesor particular y piano.
en el living-comedor de su departamento en el Luego, a los 21 años, decide ingresar a la
barrio de San Cristóbal (CABA) donde vive con Escuela de Música Popular de Avellaneda (EM-
su novio. La sala amplia, no por su extensión sino PA) donde se recibe de instrumentista y donde
por la escasez de muebles, tiene en un extremo actualmente se desempeña como docente de can-
(junto a la ventana) una mesa con sillas y una to. Además Sara es cantante, dicta clases particu-
pequeña repisa, mientras que en el otro extremo lares en su domicilio y dedica su vida a la docen-
hay dos sillas de respaldo alto, un baúl grande y cia a pesar de no tener un título habilitante de
sobre el escritorio, un pequeño altar budista. profesora.
La mujer hace mate y mientras limpia el
piso comienza a contarnos que nació en un pe- TRANSITAR LAS FRONTERAS: ENTRE
queño pueblo del norte de Perú pero a la edad de VIDA COTIDIANA, CULTURA E IDENTI-
11 años, en 1990, sus padres decidieron emigrar a DAD
la Argentina para que sus hijos estudien allí, tal
como había hecho el padre en su juventud, y así La vida cotidiana es el tiempo y espacio
evitar la disgregación de la familia al llegar ese en el que los agentes construyen el mundo social
momento. Fue así que la familia de Sara se instala en el que desarrollan su existencia, y tratar de
en la ciudad de Ramos Mejía (partido de La Ma- comprender la lógica que la caracteriza es propio
tanza en la zona oeste del Conurbano Bonaeren- de la tradición antropológica al intentar documen-
se) donde inscriben a sus hijos en “el Don Bos- tar una realidad que no suele ser documentada
co”, colegio católico y de escolaridad simple de la (Rockwell 2001). En este sentido, la escuela co-
congregación salesiana para recibir una educación mo institución de lo cotidiano, y cuya asistencia
privada y religiosa. pertenece al ámbito de lo socialmente obligatorio,
Al terminar su sexto año de escuela en limita la capacidad de acción de los sujetos a par-
Perú, Sara esperaba iniciar la educación secunda- tir de ciertas rutinas y hábitos que los educandos
ria pero al arribar a Argentina, y de acuerdo a la deben adquirir y respetar para permanecer en ella.
estructura del sistema educativo de aquel enton- Éste es el caso de la división entre horas de clase
ces, aún le quedaba un año de primaria (séptimo según asignaturas, el recreo, los turnos de habla,
año) para el cual tuvo que rendir algunas materias la disposición corporal, etc., así como también la
en condición de “libre”. Este fue el caso de algu- imposición de ciertos rituales escolares, como son
nos contenidos de matemáticas e historia argenti- los actos patrios, la entonación del himno nacio-
na, según recuerda. nal, el izado diario de la bandera, entre otros. Sin
Su paso por esta institución se encuentra embargo, a pesar de las restricciones impuestas
repleto de “buenos recuerdos”, asociándolo, en por la estructura, la vida cotidiana tiene también
sus propias palabras, al “ámbito de contención un aspecto habilitante que permite a los sujetos
afectivo”, ya que en el colegio realizaba múltiples improvisar y resignificar las prácticas antes enun-
actividades extracurriculares como la participa- ciadas de acuerdo a su experiencia. Así, “la vi-
ción en deportes, coro y un grupo misionero. Son sión de las instituciones como instancias que se

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Educación intercultural. Acercamiento a la vida cotidiana… N. Sánchez y M. Sposato

actualizan y concretan en la interacción y capa- eran bromas de nenes y se pasaban (…) la tonada
cidad de negociación de sus agentes, abre un sí te digo que fue una cuestión que me la saqué.
campo interesante para pensar los procesos so- Lo decidí a los 11 años (…) No quería oírme di-
ciales dentro de la escuela y sus posibilidades de ferente, bueno de chica… ahora sí querría tener
transformación” (Batallán 2007: 33). el tono divino pero de chica no, no querés. Re-
En el caso de nuestra experiencia de cam- cuerdo yo estar haciendo el esfuerzo por hablar
po pudimos identificar este doble efecto de la con menos tono.
vida cotidiana, que habilita y limita, en la narra- - ¿Y para qué lo hacías?
ción de Sara: - Para no llamar la atención. Para pasar des-
- ¿Qué sentías cuando escuchabas el himno, iza- apercibida. Era agobiante a veces: ´Ay! como
ban la bandera o tenías actos escolares en gene- habla´ ´mira cómo dice…´ y era horrible”.
ral? De este modo, algo tan distintivo como la
- No sé, la verdad a mi me gustaba. Pero, ¿por tonada con la que se habla se vuelve estandarte de
qué me preguntás eso? la otredad y rasgo identificatorio frente a un “no-
- No, porque conocí casos de chicos inmigrantes sotros”, y resulta descartada por Sara con el fin de
que no podían jurar la bandera o que eran el ser aceptada y “formar parte”. Este fragmento del
mejor promedio del colegio y no podían o no diálogo pone de relieve que “las fronteras y lími-
querían llevar la bandera argentina. tes entre unos y otros no son tales, o al menos,
- ¡Ah, no! ¡A mi eso nunca me pasó! Todo lo con- son permanentemente transitadas, cruzadas y
trario en realidad, para mi era un orgullo cantar alteradas” (Novaro 2006: 7-8), y que en ese
el himno de otro país, era conocer otro himno, transitar de las fronteras algunas de las caracterís-
otra historia. Yo lo tomaba como un proceso de ticas identificatorias son modificadas por la capa-
aprendizaje y conocimiento del otro. Nunca pensé cidad de agencia de los actores, aunque la entre-
en no cantarlo, era un acto bellísimo. vistada reconoce que ahora querría recuperar ese
Aquí nuestra interlocutora da cuenta de las rasgo que la distinguía en nuestro país.
diferentes significaciones y resignificaciones que En la disciplina antropológica el concepto
pueden tener los mismos actos rituales institucio- de identidad se encuentra fuertemente ligado al
nalizados y nos remite a Reguillo Cruz quien concepto de cultura, el cual es tomado por la an-
plantea que es en el ritual donde se interrumpe la tropología de la educación a partir del reconoci-
vida cotidiana y donde ésta “encuentra su sentido miento de las limitaciones teóricas que enfrenta
y renueva su gestión” (Reguillo Cruz 1998: 99) su uso explicativo, ya que mantiene el sesgo de
dado que es histórica y no puede pensarse separa- las tradiciones clásicas (evolucionismo y estructu-
da de las estructuras de las que es producto y pro- ral-funcionalismo) donde el concepto era utiliza-
ductora. Es decir, la vida cotidiana no puede exis- do para demarcar como totalidad acotada a un
tir sin un discurso que la sustente y la cargue de grupo social definido, con una lógica interna y
sentido para los sujetos que la viven. A simple capaz de explicarse a sí mismo. Esta rigidez y
vista, la entonación del himno patrio sería un cla- homogeneidad del concepto cultura no manifes-
ro ejemplo de la homogeneización cultural pre- taba las transformaciones y el cambio que son
tendida por la escuela en sus orígenes al reunir propios de la vida social. Por ello Rockwell
bajo la identidad nacional a todos los habitantes (1980), retomando a Gramsci, propone resaltar el
del territorio, sin embargo, Sara considera este carácter histórico de la cultura y pensarlo como
hecho como formativo y como símbolo de unión un concepto descriptivo permeable a las dinámi-
a su nuevo país de residencia. Otro es el signifi- cas de producción y reproducción, que permite a
cado que tenían para ella los comentarios despec- su vez una reflexión por parte de los sujetos res-
tivos que recibía por parte de niños del colegio, pecto a su entorno y su realidad.
así como la tonada que remite a su lugar de ori- A nuestro entender, tanto cultura como
gen: identidad son términos relacionales de carácter
“- Nunca me sentí excluida, viste los chicos que dinámico y construido, que no pueden ser defini-
te gastan y te dicen ´peruana´ ´bolita´ pero que dos de una vez y para siempre sino que deben ser

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ANTI • Núm. 12 • Diciembre de 2013

ubicados socio-históricamente en tanto son pro- co como la de cada ser humano socio-histórica-
ducto, y productores, de diversas realidades so- mente situado. En este sentido, hemos intentado
ciales. De acuerdo con esto, Sara cuenta: dar cuenta del carácter dinámico y construido de
“(…) el hacer el primer disco de música peruana, la identidad contraponiéndolo a las nociones
fue como una especie de rebuscar, de darle como esencializadoras de cultura que estigmatizan y
un cierre. Está bien esto de ser de acá, de allá y denigran a la comunidad peruana residente en
sentir, bueno soy YO. No importa de acá de allá, Argentina, poniendo de manifiesto la arbitrarie-
de donde sea pero SOY. Porque te da esa cosa, dad de las fronteras nacionales en la constitución
bueno soy de acá, soy de allá. Voy allá y soy de de la subjetividad de cada individuo. Así, consi-
acá. Pero estoy acá y soy de allá”. deramos que los hechos cotidianos, “el ámbito
Los sentimientos que la entrevistada ma- afectivo” de inserción y contención de los niños y
nifiesta respecto a su propia identidad hacen que niñas migrantes, es el factor principal en la conso-
ésta no parezca inscripta en un territorio determi- lidación de la identidad, tal como narra nuestra
nado, ni por el nacimiento ni por la residencia, entrevistada “está bien esto de ser de acá, de allá
sino que es presentada como una reelaboración de y sentir, bueno… soy YO. No importa de acá de
su propia historia en el presente. En oposición a allá, de donde sea pero SOY.” Esta frase habla de
estos sentimientos de adulta, cuando relata sus una permeabilidad de las fronteras nacionales que
primeras experiencias siendo niña en Argentina, han sido, por un lado, diluidas con los procesos
Sara recuerda algunas diferenciaciones entre am- de globalización, mientras que por otro lado, han
bas sociedades: sido resignificadas, volviéndose estandartes de la
“Yo me sentía como en otra realidad, yo tenía 11 otredad, que diferencian a las personas cuando
años y acá una nena de 11 años era otra cosa. traspasan las fronteras de su país.
Digamos, como que allá era todo muy educadito, Para finalizar, quisiéramos rescatar la im-
muy formalito, muy tapadito, todo recatado. Para portancia de los estudios sobre vida cotidiana en
mí eso era mi realidad y estaba bárbaro. Pero la conformación de relatos etnográficos que dan
estaba acá y me sentía la más boluda del univer- cuenta de los procesos interculturales desde el
so. Yo me quería peinar con una cinta y una nena reconocimiento de las particularidades, diferen-
me gastaba ´ay no esto no se usa acá, sacate eso´ cias y semejanzas que entrañan los pueblos de
y con la ropa lo mismo y algo que para mí era Latinoamérica. En este sentido y siguiendo a
bellísimo se empezó a convertir en algo muy es- Rockwell (2001), es que creemos que los inter-
pantoso. Era tremendo. Yo me lo ponía igual pe- cambios teóricos y disciplinares de estudios loca-
ro se ve que asumía que tenía esa realidad.” lizados constituyen pequeños granos de arena en
En este sentido, podemos pensar a la iden- la construcción de nuestras subjetividades y de un
tidad y a la cultura funcionando al nivel de las mundo donde el conocimiento del otro sea más
relaciones interpersonales en tanto la interacción simétrico y respetuoso, donde la interculturalidad
de la pequeña Sara con las niñas argentinas pro- sea una práctica del día a día y no sólo una dispo-
picia una resignificación de aquellos habitus sición estatal.
(Bourdieu 1979) socialmente aprehendidos du-
rante los primeros años de su socialización.
BIBLIOGRAFÍA
CONSIDERACIONES FINALES
Batallán, G.
A lo largo de este trabajo nos hemos pro- 2007. Docentes de infancia. Antropología del
puesto problematizar la idea homogeneizadora y trabajo en la escuela primaria. Ed. Paidós. Bue-
discriminatoria que gira en torno a los inmigran- nos Aires.
tes peruanos, apelando a los sucesos cotidianos
que pudieron haber modificado el modo de inser- Bourdieu, P.
ción social de una joven peruana escolarizada en 1979. Los tres estados del capital cultural. En:
Argentina, y que hacen de su vida un suceso úni- Actes de la Recherche de Sciences Sociales. París.

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Educación intercultural. Acercamiento a la vida cotidiana… N. Sánchez y M. Sposato

Diez, M. L. Reguillo Cruz, R.


2004. Reflexiones en torno a la interculturalidad. 1998. La clandestina centralidad de la vida coti-
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ción Antropología Social, Facultad de Filosofía y
Letras, Universidad de Buenos Aires. Rockwell, E.
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Guber, R. del concepto de cultura. DIE. México.
1991. El salvaje metropolitano. A la vuelta de la 2001. Caminos y rumbos de la investigación et-
antropología posmoderna. Legasa. Buenos Aires. nográfica en América Latina. Cuadernos de An-
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Neufeld, M. R. y J. A. Thisted Social, Facultad de Filosofía y Letras, Universi-
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los inmigrantes. En: “De eso no se habla…”. Los
Novaro, G. usos de la diversidad sociocultural en la escuela.
2006. Educación intercultural en la Argentina: M. R. Neufeld y J. A. Thisted (comps.). Eudeba.
Potencialidades y riesgos. Cuadernos Intercultu- Buenos Aires.
rales. Centro de Estudios Interculturales y del
Patrimonio. Universidad de Valparaíso.

Centro de Investigaciones Precolombinas • 157


ANTI • Núm. 12 • Diciembre de 2013

LA DICOTOMÍA CIVILIZACIÓN Y BARBARIE.


UNA MIRADA SOBRE ALGUNOS “PROCEDIMIENTOS
ESCRITURARIOS DE DESPOLITIZACIÓN” EN EL
FACUNDO DE SARMIENTO

Juan Manuel Borgatello y Gustavo Darío Torres


Universidad Nacional de Río Cuarto
juanmanuelborgatello@yahoo.com.ar; gustavotorres7@hotmail.com

RESUMEN

El conflicto entre Unitarios y Federales por la Organización Nacional del país tomó todas las formas de
la violencia, incluso el de una violencia discursiva llevada a cabo por ambas facciones en los discursos
de la época. Circunscribiéndonos a este contexto y a la literatura de la época podemos advertir que el
proceso histórico argentino del siglo XIX muestra en sus entrañas un conflicto entre politizados y des-
politizados. La lectura que hace Sarmiento en el Facundo del gaucho, de ese “otro” político con el que
se disputa el poder, puede mostrar ese conflicto discursivo, y es susceptible de advertirse en las estrate-
gias discursivas que están funcionando sobre la superficie textual para lograr la despolitización del
enemigo político. Dos planos como son el biológico y el jurídico nos permiten vislumbrar algunas de
esas estrategias discursivas que se ponen en juego en el Facundo.
Palabras clave: Unitarios y Federales, violencia discursiva, despolitización, estrategias discursivas.

ABSTRACT

The conflict between Unitary and Federal by the National Organization of the country took all forms of
violence, including a discursive violence carried out by both factions in the speeches of the time. Cir-
cumscribing to this context and to the literature of the time we can see that the Argentine historical pro-
cess of the nineteenth century shows in its wombs a conflict between politicized and depoliticized. The
reading that Sarmiento makes of the gaucho in the Facundo, of that “other” that dispute power, can
show that conflictive discourse, and it is likely to be seen in the discursive strategies that are working
on the textual surface to achieve despolitization of the political enemy. Two areas such as biological
and legal allow showing some of these discursive strategies that come into play in Facundo.
Key words: Unitary and Federal, discursive violence, despolitization, discursive strategies.

INTRODUCCIÓN el folleto… en fin, en los discursos de la época.

L
Un conflicto que muestra en sus entrañas una dis-
a guerra civil, llevada a cabo a lo largo del puta entre quienes se asumen como herederos y
siglo XIX, la que se disputó el destino de patrones de la política y, por otro lado, aquellos
la Organización Nacional de la República que debían reclamar su derecho negado a través
Argentina tomó todas las formas de la violencia. del ejercicio de la mecánica de la violencia, como
En este trabajo nos importa lo que puede llamarse es el caso del gaucho rioplatense.
“violencia discursiva”, un conflicto entre “politi- Existen múltiples miradas críticas sobre el
zados” y “despolitizados” que no se definía sólo “Facundo o civilización y barbarie” como tam-
en el campo de batalla sino en el libro, la prensa, bién sobre su controvertido autor D. F. Sarmien-

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La dicotomía civilización y barbarie. Una mirada… J. M. Borgatello y G. D. Torres

to. Podemos mencionar, entre otras, las que prio- del ’80. La Generación del ’80 se caracterizó por
rizan un enfoque decididamente autobiográfico estar conformada por un grupo de hombres que
como es el trabajo de Alberto Palcos1; o, ya más proporcionaron un nuevo carácter a los diferentes
cerca en el tiempo, y desde un enfoque más bien ámbitos en donde desarrollaron su influencia co-
político, los ensayos de José P. Feinnman recogi- mo lo en la política, la enseñanza, la literatura, la
dos en “Filosofía y Nación”2. A su vez, no pode- economía, etc. Este nuevo carácter estaba im-
mos dejar de mencionar los aportes, siempre pregnado de un fuerte tinte europeo, pero a la vez
valiosísimos, de Noé Jitrik sobre este autor y su con sello nacional.
obra3. Natalio Botana (1977) identifica en El or-
El propósito de este trabajo será advertir y den conservador, la integridad territorial, la iden-
analizar algunas de las estrategias discursivas tidad nacional y la organización de un régimen
que operarían en el cuerpo discursivo del Facun- político. Se darían nítidos los rasgos propios de
do y que tenderían a des/politizar al gaucho. En una oligarquía funcional y capaz de controlar la
este caso, el abordaje se orienta hacia lo que es el rotación del poder: presidentes, ministros, gober-
análisis del discurso; ya que entendemos, moder- nadores y senadores operarían con las reglas del
namente, que ésta es una obra del lenguaje y juego de la “alianza de los notables”, para quienes
como tal está construida y funciona con fines de el club era sede para la relación política y ámbito
tipo performativo. De esta manera, se trabajará para el reclutamiento dirigente.
sobre su textualidad con el objetivo de desentra- Siguiendo a Olmedo (2002), quien en su
ñar algunas de las estrategias discursivas que el trabajo realiza una breve reseña histórica sobre
autor ha implementado intencionadamente para estos años, podemos decir que el proceso de or-
conseguir sus fines políticos. ganización nacional fue protagonizado por dife-
A continuación, en una primera instancia rentes fuerzas sociales y sectores económicos en
se realizará una acotada conceptualización del constante conflicto. Luego del triunfo de Justo J.
marco histórico; luego, en una segunda instancia, de Urquiza en la Batalla de Caseros (1852) sobre
se procederá al abordaje del Facundo. las tropas de Juan M. Rosas, se produce un im-
portante avance en la organización nacional. Justo
BREVE MARCO HISTÓRICO J. de Urquiza intentó una unificación nacional, a
partir de un nuevo orden, mediante un acuerdo
En la segunda mitad del siglo XIX co- inter-oligárquico plasmado en una constitución y
mienza en Argentina la consolidación del orden un gobierno nacional. Sin embargo, la Provincia
institucional de una república unificada y el cam- de Buenos Aires se oponía al proyecto político de
bio de la estructura social y económica de la na- Urquiza, debido a que el nuevo rumbo político
ción. afectaba sus beneficios aduaneros y la residencia
El proceso organizativo de Estado que del poder central en Buenos Aires. Es de este
había comenzado con las presidencias de Mitre modo que la década de 1850 quedó marcada por
(1862 a 1868), Sarmiento (1868 a 1874) y Ave- la puja entre la Confederación Argentina y la
llaneda (1874 a 1880) se plasma en 1880 con la Provincia de Buenos Aires, ambas en procura de
designación de Buenos Aires como capital de la lograr la hegemonía en el país.
República y con el General Julio A. Roca como En el período 1852 a 1880, luego del
presidente (1880 a 1886). triunfo de las fuerzas porteñas de Bartolomé Mi-
A los hombres que vivieron alrededor de tre sobre las de Urquiza en la Batalla de Pavón
la década de 1880 se los denominó Generación (1861), se comienza a superar la etapa denomina-
da por Halperin Donghi (2006) como la larga
1
Palcos, A. “El Facundo. Rasgos de Sarmiento”.Ed. Eleva- espera. Se abordan nuevos objetivos con la fina-
ción. Bs. As. 1945.
2
lidad de consolidar un Estado-Nación para su
Feinnman, J. “Filosofía y nación, Estudios sobre el pen- inserción en la economía mundial.
samiento argentino”. Seix Barral, Bs. As. 2010.
3
Jitrik, N. “Panorama histórico de la literatura argentina”. Según Hobsbawm (1998), se deben enten-
Ed. El Ateneo, Bs. As. 2009. der ciertos parámetros para aventurarnos a anali-

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zar la identidad nacional. La nación es un fenó- nación para el desierto argentino como dirá Hal-
meno reciente en los últimos siglos de la historia; perin Donghi (1974), constituyéndose como un
el sentido moderno de la palabra, en principio, imperativo categórico de aquella clase.
nos remonta no más allá del siglo XVII, con al- A través de los iluministas, racionalistas o
gunas excepciones precisas. Para Hobsbawm positivistas, esa línea se anuda en el pensamiento
(1998), al hablar de Estado-Nación, debemos de Alberdi y su “gobernar es poblar” o con Sar-
saber de antemano que se trata de una entidad miento y su “civilización y barbarie”, quienes ven
social ligada a cierto tipo de Estado territorial en las ciudades una ampliación de los espacios
moderno. Para nuestras necesidades del análisis, múltiples y superpuestos que permiten un mejor
el nacionalismo es anterior a la nación. No son las ejercicio de las libertades, traducida en mayor
naciones las que hacen a los Estados y al naciona- control y orden que hacen posible la democracia
lismo, es a la inversa. y la civilización.
Así, en este caso, la construcción y repro- Vemos que para Sarmiento, el producto de
ducción del discurso está apoyada sobre un ima- esa sociedad ideal estaba obstaculizado por el
ginario identitario, encuadrado por las concien- “otro”, esa sociedad bárbara, que a su vez era
cias prácticas de grupos étnicos y societarios es- factible de ser conquistada.
pecíficos. El gaucho definiría al sujeto identitario
que es visto bajo una operación cultural de dico- EL FACUNDO Y ALGUNOS PROCEDI-
tomía de grupos antagónicos: peón/patrón, po- MIENTOS ESCRITURARIOS DE DESPO-
bre/rico, bárbaro/civilizado. LITIZACIÓN DEL “OTRO”
Cataruzza y Eujenian (2003) advierten la
presencia de un público popular, que la cultura Sarmiento como uno de los intelectuales
letrada rioplatense despreciaba potencialmente y del siglo XIX y parte de aquella elite letrada his-
según Gelman (1995) la construcción del gaucho panoamericana pensó su realidad, la realidad de
en el imaginario está fundada en la infinidad de la América española, desde Europa y Estados
escritos de funcionarios y estancieros, denotando Unidos, que era la encarnación de la “civiliza-
que ésta es una operación perteneciente a las eli- ción”, particularmente Francia e Inglaterra. Con
tes. esto implantaron un aparato de pensamiento ex-
Para la cultura occidental se ha planteado tranjero y ajeno a las realidades concretas de una
desde sus orígenes el problema de la “otredad”, América recientemente libre de la misma Europa.
presentada como otro tipo de cultura distinta de la Digamos que se ubicaron desde el aparato occi-
sociedad dominante. Este conflicto fue tan impor- dental europeo de pensamiento para interpretarla,
tante porque, en cierto sentido a diferencia de la específicamente desde la ciencia moderna, el ra-
cultura oriental, el hombre de occidente siempre cionalismo y el ideal de progreso. Sin embargo,
ha establecido su propia identidad cultural a partir lo más importante es la traslación que hicieron de
de sus diferencias con el otro. la noción de “hombre” con la que interpretaron y
Para Eduardo Grüner (2005), luego de la juzgaron al hombre americano; en el caso particu-
Batalla de Caseros, se produce el triunfo de una lar del Facundo ese hombre americano es el
facción liberal, sobre otra federal y autóctona. A “gaucho”.
partir de allí y sobre todo en las ideas de Sarmien- Si bien desde Aristóteles al hombre se lo
to y Alberdi es donde debemos encontrar el mo- define como “animal racional” con las Luces se lo
delo de país que se quiso construir, en definitiva, empezará a definir como “animal perfectible”
cuál fue la Utopía. Justamente Grüner dice que (Svampa 1994), imponiéndose gradualmente esta
Argentina es un país “pobre en utopías”, estable- última. El progreso reforzará la creencia en la
ciendo que la burguesía argentina constituyó en la razón y la perfección, y con ello la confianza en
cabeza de Sarmiento, Alberdi y Roca la sociedad las leyes y en las instituciones que son las que
que nunca pudo concretar en la realidad, y si Ar- moldean a los hombres.
gentina entró rápidamente en la modernidad fue Esta noción de hombre se convertirá en
por la ideología que propugnaba construir una América en un “dogma” con la que se pretenderá

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desterrar los monstruos de los que está poblada, y 1. Desde lo biológico, el gaucho en el
que constituyen un problema tanto para la consti- Facundo no será definido en términos de una
tución de los estados nacionales como para la “excepción a la naturaleza” como podría suceder
imposición de la civilización. Sarmiento hará una con la “monstruosidad medieval” que Foucault
lectura del “otro”, de ese otro político con el que analiza en los Anormales (2007), sino que irá más
se disputa el poder: el Federalismo y por exten- lejos, será definido en términos de un “producto
sión el gaucho rioplatense. Una lectura totalmente de la naturaleza”. Porque se está poniendo en
estratégica e intencionada, porque en su escritura juego la noción de hombre, tal como la concibe
nada es sólo mera palabra sino acción. Y, preci- Europa. Entonces la barbarie aplicada al cuerpo
samente, son los procedimientos o estrategias del gaucho, y no ya tanto a un estado gradual de
discursivas que utiliza en su texto con el fin últi- evolución, se debe a una violación a la noción de
mo de despolitizar al enemigo político lo que hombre como sujeto racional y perfectible. En la
trasparenta esta operativa. medida en que se le sustraigan los atributos de
Una de esas estrategias, quizás la más su- “razón” e “inteligencia” y se le adicionen rasgos
perficial, en el sentido de que es a la que llega el antagónicos como “salvaje”, “inhumano o anima-
lector por el mismo título del libro es a la de lidad” e “intuición”.
“bárbaro”. Y como lo explica Svampa (1994) este “Aquí se eslabona insensiblemente el lema
término ha ido resignificándose históricamente y de este capítulo: ‘Es el hombre de la naturaleza
cobra su valor definitivo al incluirse en una dico- que no ha aprendido aún a contener o a disfrazar
tomía que funciona por oposición y por exclu- sus pasiones, que las muestra en toda su energía,
sión, la de “civilización y barbarie”. entregándose a toda su impetuosidad. Ese es el
Al respecto, José Anadón (1993), al hablar carácter original del género humano’ (...) Facundo
de “colonialismo lingüístico” y al abordar histó- es un tipo de la barbarie primitiva: no conoció
ricamente el término bárbaro, nos dice en princi- sujeción de ningún género; su cólera era el de las
pio que es un término antiquísimo y que durante fieras (...) En todos sus actos, mostrábase el hom-
las empresas colonizadoras de Europa, ya funcio- bre bestia aún, sin ser por eso estúpido, sin carecer
naba como una “fórmula de tratamiento”; se lo de elevación de miras...” (Sarmiento2009:148).
utilizaba como un modo para referirse o iden- La mixtura hombre-bestia que se da en
tificar a “personas diferentes”. Más allá de esto, Quiroga es un ejemplo del funcionamiento de esta
el autor reflexiona sobre lo dicho y nos alerta de estrategia discursiva. Porque Sarmiento no cuenta
“que los nombres engendran reglas de conducta e la narración del tigre sólo por ornamentar el capí-
infunden poder al designador” (Anadón 1993: tulo, lo hace porque después tiene preparado rea-
177). Pero, quizás el gran aporte lo constituye la lizar la comparación de lo salvaje, de la animali-
valiosa información que da sobre elconcepto y el dad del tigre con Facundo. Y para que esta com-
origen de su marco de definición, a saber: el teo- paración no se inscriba en la mera “literalidad” o
lógico - moral - jurídico, que está soportado por en el discurso de la simple injuria, lo hará apoya-
discursos como el legal, el religioso, el político, el do sobre el soporte de la Ciencia, es decir sobre el
comercial y el económico. discurso de la verdad. Es el caso de la utilización
Es en este sentido que en el plano textual el del discurso de la Frenología y la Anatomía.
hecho de pegar a los nombres propios nociones “También a él le llamaron Tigre de los
como la de bárbaro o salvaje, constituya una cues- Llanos, y no le sentaba mal esta denominación,
tión argumental del poder del escritor letrado-culto. doy fe. La Frenología y la Anatomía comparada
Un posible análisis del funcionamiento de han demostrado, en efecto, las relaciones que
la categoría “bárbaro” a nivel discursivo, es decir, existen en las formas exteriores y las disposicio-
los mecanismos que pone a funcionar el texto nes morales, entre la fisonomía del hombre y de
para construir la representación del gaucho, nos algunos animales, a quienes se asemeja en su
lleva a dos ámbitos de definición de la barbarie, carácter” (Sarmiento2009:138).
que estarían operando en el texto sarmientino, Acaso no es el monstruo de la Edad Me-
como son lo biológico y lo jurídico. dia, esa mixtura entre hombre y bestia, pero ex-

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plicada sutilmente por el discurso de la verdad, la lo que dice un provinciano autodidacta en un me-
Ciencia de la época, y no por la oscuridad es- ro panfleto político, en una tierra bárbara llena de
colástica y teológica de la Edad Media. Sarmiento analfabetos. Son abrumadoras la gran cantidad de
ya había dicho que sobre una misma tierra había citas y fragmentos que sobrecargan la prosa retar-
dos sociedades, una civilizada, adelantada en los dando su fluidez. Surgen nombres como los de
progresos de la época y otra atrasada, bárbara, Humboldt, Michelet, Tocqueville, Herder, entre
medieval. El siglo XII y el XIX conviviendo. Y otros.
esa animalidad se revela tanto a nivel morfológi- En la primera parte del libro (la parte
co como en sus disposiciones morales, como lue- general que comprende los primeros cuatro capí-
go lo explica: tulos), es donde Sarmiento hace un estudio bioló-
“Facundo es un tipo de la barbarie primi- gico (sobre todo en el aspecto racial), social, his-
tiva: no conoció sujeción de ningún género; su tórico y cultural del gaucho. Sarmiento utiliza la
cólera era el de las fieras; la melena de sus rene- Teoría del Determinismo (de Taine) para explicar
gridos y ensortijados cabellos caía sobre su frente el hombre americano a través de la relación me-
y sobre sus ojos, en guedejas como las serpientes dio-raza. La operación a nivel discursivo es clara
de la cabeza de Meduza; su voz se enronquecía y por no decir armoniosa. Primero atenderá al “me-
sus miradas se convertían en puñaladas. Domina- dio”, el “espacio salvaje”, al que aplica el sistema
do por la cólera, mataba a patadas…” (Sarmien- de oposiciones: “el esquema civilización-barba-
to2009:148). rie”, para luego correrse hacia los cuerpos indivi-
Animalidad y bárbaro en el texto de Sar- duales que bajo esta lógica determinista serían un
miento funcionan como sinónimos. No sólo a ni- producto del medio en el que habitan. Un posible
vel semántico, sino que ambos son términos con esquema sería el que sigue:
los que se “califica”, no se define, y con los que - Buenos Aires - Provincias del Interior
se “estigmatiza” a ese otro al que se lo mira desde - Ciudad - Campaña, y dentro de ésta:
un “criterio incuestionable”: la “civilización” - Campaña Agrícola - Campaña Pastora
(Svampa 1994). - Hombre de la ciudad - Hombre del campo (el
Este cuadro podría extenderse a todo el hombre de la campaña pastora: el Gaucho)
texto y siempre encontraríamos los mismos Entonces tenemos un espacio barbarizan-
procedimientos de animalización (“fieras”, te, “la campaña pastora”, contenida en una aso-
“bestia”) y de barbarización del cuerpo y de las ciación de estancias a cuatro leguas de distancia
conductas de los gauchos. Por citar otro ejemplo: entre ellas, cuya consecuencia es la falta de socie-
“...Facundo no es cruel, no es sanguinario; dad y la diseminación de la población: el aisla-
es el bárbaro no más, que no sabe contener sus miento de las familias al modo del sistema feudal.
pasiones, y que, una vez irritadas, no conocen En este orden de cosas es imposible el funciona-
freno ni medida; es el terrorista que a la entrada miento de las instituciones de la civilización: el
de una ciudad fusila a uno y azota a otro, pero municipio, las escuelas, el gobierno regular, las
con economía, muchas veces con discernimiento” leyes. Al no haber sociedad reunida es imposible
(Sarmiento2009: 274). todo gobierno como progreso moral o cultura de
Es en este sentido que puede hacerse del la inteligencia, dirá Sarmiento. La diferencia
libro una doble lectura. Una horizontal, que no es entre campaña agrícola y campaña pastora reside
sino la lectura del continuum de la prosa y otra sólo en el hecho de que la primera implica nece-
vertical, lectura de nombres propios que a la vez sa-riamente el sedentarismo y la segunda no; del
representan el saber de la época y funcionan co- mismo modo que esta última no exige del trabajo
mo instituciones con poder de legitimar. Nombres ni de la inteligencia, sino que permite al hombre
propios, eminencias de la cultura y del conoci- de campo vivir en la completa ociosidad, afirma
miento legitimado por los círculos de la intelec- Sarmiento.
tualidad, que se leen a nivel textual como epígra- Y tenemos un cuerpo humano barbari-
fes o citas de autoridad que acompañan una com- zado, que se “ha educado” en las fuerzas físicas,
paración, un argumento para conferirle verdad a en la destreza con el caballo, en el valor, y lo ha

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La dicotomía civilización y barbarie. Una mirada… J. M. Borgatello y G. D. Torres

hecho desafiando la naturaleza y triunfando sobre doble utilización del cuerpo del gaucho sostenido
ella, lo que desenvuelve un sentimiento de la en el plano jurídico.
importancia individual y de la superioridad. Y si Aquí surge la noción de “delincuencia cam-
algunos ambicionaban el cuerpo del gaucho como pesina” o la “ilegalidad popular” (Ludmer 1988:17).
una máquina productiva, Sarmiento se encarga de Según Foucault (2007) el criminal se
contradecirlos afirmando que no se puede esperar define desde el derecho penal como tal en cuanto
de esos cuerpos “docilidad política y utilidad eco- se sustrae del Pacto Social, el que nunca aceptó,
nómica”. Mirado desde la dimensión política no que es el contrato al que está obligado cada indi-
tiene “ideas de gobierno” y “vive libre de toda viduo que vive o quiera formar parte de la socie-
necesidad y de toda sujeción”. Mirado desde lo dad. Transgredir el conjunto de normas que hacen
económico, “el gaucho no trabaja”, “no tiene al Pacto Social es estar fuera de la Ley, por lo
medios de subsistencia”, “es feliz en medio de su tanto es ser un criminal. Es la libertad entendida
pobreza y de las privaciones”. en su plenitud como la no sujeción a ningún
2. Desde lo jurídico, se define al gaucho orden que la pueda restringir.
sometiéndolo a las leyes de la sociedad ordenada. Esta definición que nos da Foucault con-
Sarmiento en el capítulo IV explica que la dice con los límites que traza Sarmiento entre le-
guerra civil había retardado el proyecto de afir- galidad e ilegalidad; quizás el ejemplo más repre-
mar las instituciones en el país, y la constitución sentativo del libro sea:
de un estado nacional “republicano y liberal” exi- “Más tarde, fue reclutado para el ejército
gía de instituciones como las conocía el mundo de los Andes y enrolado en los Granaderos a
civilizado. La lucha de la civilización y la barba- caballo: un teniente García, lo tomó de asistente,
rie enfrentaba a dos ámbitos: la ciudad y la cam- y bien pronto, la deserción dejó un vacío en
pa-ña. La primera es considerada el “centro de la aquellas gloriosos filas...” (Sarmiento 2009: 145).
civilización europea”, donde estaban compendia- Según Ludmer (1988) la institución del
das todas las instituciones: leyes, derechos, me- ejército es quién sustituye a la Ley en cuanto
dios de instrucción, organización municipal, juz- constituye una forma de “ser moralizado y enno-
gados, gobierno regular; entretanto en la campaña blecido”, una de las altas formas de domestica-
predominaba la fuerza brutal, la preponderancia ción, de integración a la civilización. La deser-
del más fuerte, la autoridad sin límites y una ción es la vuelta a la ilegalidad y a la delincuen-
justicia administrada sin formas ni debates. cia. Sólo por el hecho de estar fuera, el gaucho se
Es Sarmiento quien señala que antes de convierte en delincuente. En este sentido el
1810 había dos sociedades rivales e incompa- gaucho representa un peligro para la “sociedad
tibles en un mismo espacio: una civilizada, espa- ordenada” como la llama Sarmiento.
ñola, europea y la otra bárbara, americana, casi Sin embargo, como lo señala Josefina
indígena. La revolución lo que hizo fue acercar- Ludmer (1988) hay que poner en duda la noción
las, enfrentarlas y en ese enfrentamiento, surgió de “delincuencia” en el momento de aplicársela al
una dualidad en la que se revelaría un “doble gaucho. La existencia del “doble sistema de jus-
sistema de justicia”, dice Ludmer (1988). La ciu- ticia”: por un lado, la Ley institucionalizada y
dad tenía una ley central, escrita y el campo un escrita y por otro el “código consuetudinario”.
código consuetudinario, oral y tradicional que Por lo que la “delincuencia” del gaucho debe de-
fundaba la comunidad campesina. finírsela en términos de una diferencia del doble
En este orden de cosas el gaucho se sistema de justicia, en el sentido de que se produ-
manifestaba como una fuerza no productiva, en el ce un efecto de diferencia entre dos ordenamien-
sentido que no era ni propietario ni trabajaba: era tos jurídicos y entre las aplicaciones diferenciales
un “vago”. Los sectores de poder aprovechaban de uno de ellos. Pues, sólo mirado desde uno de
esta situación en la que veían una forma propicia los sistemas jurídicos, el de la Ley escrita e insti-
de someter esas fuerzas productivas ociosas, ya tucionalizada, y en la medida de que produzca
sea como mano de obra para los hacendados o violaciones a la aplicación de esta normativa es
como soldados para el ejército. Es decir, una que es entendido el gaucho como “delincuente”.

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La delincuencia es un eje de lectura que De esta manera, podemos advertir que se


atravesaría todo el libro, como lo es la “arbitra- pueden leer en el Facundo un conjunto de estra-
riedad”, que se van articulando progresivamente tegias discursivas que operarían por medio de una
en el texto. Arbitrariedad que se construye por la gradación negativa y totalmente intencionada, y
superposición del plano individual sobre el colec- que tendrían como meta la despolitización del
tivo que es el de la sociedad. No es sino el discur- “otro”. En fin, una exclusión política, una exclu-
so de la desmedida libertad y la no sujeción a las sión del poder, encerrado en las fronteras de un
normas de la sociedad ordenada por parte del conflicto discursivo.
gaucho. Porque para Sarmiento la arbitrariedad
conduce a la criminalidad y el individuo arbitrario BIBLIOGRAFÍA
al criminal; como el gobernante arbitrario condu-
ce al tirano, al déspota. No son sino violaciones a Anadón. J.
las “formas”: violaciones de las formas militares, 1993. Colonialismo lingüístico y defensa del
sociales y políticas. indígena: el concepto bárbaro. En: Ruptura de la
conciencia hispanoamericana. pp. 173-209. Fon-
CONCLUSIÓN do de Cultura Económica. México.

Botana, N.
En una primera lectura del “Facundo”,
1977. El orden conservador. La política argenti-
podríamos pensar apresuradamente que para
na entre 1880-1916. Ed.Sudamericana. Buenos
Sarmiento el gaucho es un ser apolítico, es decir
Aires.
que no tendría voluntad política o que le vendría
negada por natura. Sin embargo lo que se esconde Cataruzza, A. y A.Eujenian
en el fondo de todo esto no es sino la des- 2003. Héroes patricios y gauchos rebeldes. Tra-
politización ya que se busca la exclusión política, diciones en pugna. Ed. Alianza. Buenos Aires.
la exclusión al poder del otro. En otras palabras:
constituye un mecanismo discursivo, a nivel tex- Foucault, M.
tual, que opera en el sentido de una gradación 2007. Los Anormales. Fondo de Cultura Econó-
negativa y totalmente intencionada que tiene co- mica. Buenos Aires.
mo meta la des-politización del enemigo político.
En primer lugar, en el plano biológico se Gelman, J.
intentó demostrar la construcción que hace Sar- 1995. El gaucho que supimos construir. Determi-
miento de la representación del gaucho y sobre la nismo y conflictos en la historia argentina. Entre-
que opera el desvío en relación con el concepto pasados Año V, Nº 9: 27-37. Buenos Aires.
de hombre que se maneja en la época: animal
racional, perfectible. Aquí la exclusión del gau- Grüner, E.
cho del ámbito de la política se cumple por medio 2005. La cosa política o el acecho de lo real. Ed.
de la negación de la condición humana. Paidos. Buenos Aires.
En segundo lugar, en el plano jurídico se
problematizó la noción de “delincuencia campe- Halperin Donghi, T.
sina”. Los límites entre legalidad e ilegalidad. La 2006. Historia contemporánea de América Lati-
supuesta delincuencia del gaucho era el resultado na. Ed. Alianza. Buenos Aires.
de la diferencia de un “doble sistema de justicia”
Hobsbawn, E.
y de la aplicación diferencial de uno de ellos. En
1998. Naciones y nacionalismos desde 1780. Ed.
este caso, la negación de la condición política del
Crítica. Barcelona.
gaucho se justifica sobre la noción de delincuen-
cia. Y el delincuente es aquel que se sustrae de Ludmer, J.
toda norma social, es el sujeto peligroso que 1988. El género gauchesco. Un tratado sobre la
amenaza con desintegrar la “sociedad ordenada”. patria. Ed. Sudamericana. Buenos Aires.

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La dicotomía civilización y barbarie. Una mirada… J. M. Borgatello y G. D. Torres

Olmedo, E. Svampa, M.
2002. Fuertes, ejércitos y milicias en la frontera 1994. El dilema argentino “Civilización o Barba-
del río cuarto (1852-1869). Tesis final de Licen- rie”. Del Facundo al revisionismo peronista. Ed.
ciatura en Historia. Universidad Nacional de Río El cielo por asalto. Buenos Aires.
Cuarto.

Sarmiento, D.
2009. Facundo. Ed. EDUVIM. Córdoba.

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NORMAS EDITORIALES

Los trabajos deben presentarse de acuer- 12. Bibliografía: todas las referencias cita-
do a las siguientes normas editoriales: das en el texto deben aparecer en la lista
bibliográfica y viceversa. La lista bi-
1. Título en mayúsculas, margen izquier- bliográfica debe estar en orden alfabéti-
do, sin subrayar, negrita, Times New co, ordenada de acuerdo al apellido del
Roman 12 primer autor. Dos o más trabajos del
2. Autor/es en el margen izquierdo, ma- mismo autor se ordenan cronológica-
yúscula-minúscula, negrita. mente y a los trabajos del mismo año se
3. Pertenencia Institucional: en el margen le agrega una letra minúscula.
izquierdo, cursiva, sin abreviaturas. Debe seguirse el siguiente orden: Autor
4. Correo electrónico: en el margen iz- /es. Año. Título. Publicación. Número. Pá-
quierdo ginas. Editorial. Lugar de edición.
5. Resumen de no más de 200 palabras en Deben ir en cursiva los títulos de los li-
castellano y en inglés y cinco palabras bros o los nombres de las publicaciones
clave en castellano e inglés. periódicas.
6. Texto: Times New Roman 12, interli-
neado 1,5, justificado de ambos lados. Ejemplos:
7. Subtítulos primarios en el margen iz-
quierdo, en mayúsculas, sin subrayar, Raffino, R. (ed.).
negrita. Subtítulos secundarios, en el 1993. Inka. Arqueología, historia y urba-
margen izquierdo, en minúsculas, sin nismo del Altiplano Andino. Ed. Corregi-
subrayar, negrita. dor. Buenos Aires.
8. Las referencias bibliográficas irán en el
texto siguiendo el sistema autor-año. Madero, C.
Ejemplos: 1993. Explotación faunística, tafonomía y
economía en Humahuaca antes y después
(Costin 1986) de los Yupanki. En: Inka. Arqueología,
(Costin 1986: 21) historia y urbanismo del Altiplano Andino.
(Costin 1986, 1988) R. Raffino (ed.). pp. 145-168. Ed. Corregi-
(Hodder 1985; Costin 1986; Patterson dor. Buenos Aires.
1990).
Nielsen, A.
Se citan hasta dos autores, si son más de 1996. Demografía y cambio sociocultural
dos se nombra al primer autor y et al. en la Quebrada de Humahuaca. Relaciones
9. Las tablas, figuras, mapas y fotos de- de la Sociedad Argentina de Antropología
ben ir con numeración y epígrafes al fi- XXI: 307-385.
nal del texto, para lo cual se solicita en-
viarlos en archivo aparte, indicando en Hodder, I.
el texto su ubicación. Deben estar cita- 1982a. Symbolic and Structural Archaeolo-
das en el texto. gy. Cambridge University Press. Cam-
10. Agradecimientos bridge.
11. Notas: numeradas correlativamente a 1982b. Symbols in Action. Cambridge Uni-
continuación de los agradecimientos. versity Press. Cambridge.
MECANISMOS DE SELECCIÓN DE autor quien deberá enviar la versión defini-
ARTÍCULOS tiva en el plazo que se acuerde entre el au-
tor y el Comité Editorial. Todas las comu-
La recepción de los trabajos no implica nicaciones se realizarán por correo electró-
compromiso de publicación. El Comité Edi- nico.
torial procederá a la selección de los traba- Los artículos deberán enviarse a:
jos que cumplan con los criterios formales y anticip2008@yahoo.com.ar
de contenidos de esta publicación.
Los artículos seleccionados serán eva- CONSTANCIA DE ORIGINALIDAD
luados por un miembro del Comité Evalua-
dor, que actuará como árbitro. Todos los artículos deberán ser enviados
Se comunicará a los autores la acepta- con una nota de autorización de publicación
ción o no de los trabajos. Si se sugieren por parte de los autores.
modificaciones, éstas serán comunicadas al

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