Esquirol y La Construcción de La Clínica Psiquiátrica Memoria de La Locura y Sus Variedades

ESQUIROL Y LA CONSTRUCCIÓN
DE LA CLINICA PSIQUIÁTRICA
Memoria de la locura
y sus variedades
Jean-Etienne-Dominique Esquirol
Esquirol (1772-1840), principal discípulo de Pinel y uno de los

fundadores de la psiquiatría se edito en España por primera vez en la
colección Clásicos de la Psiquiatria (Madrid, Dor), en 1991, como
Memorias sobre la locura y sus variedades, traducción de buena parte
de los capítulos de libro Des maladies mentales ( París, Chez J.-B.
Bailliêre, 1838), con prólogo de Rafael Huertas. Reproducimos a
continuación la nota del director de la colección justificando la razón de
su publicación y el enlace con la Biblioteca Atopos, donde se puede
descargar el libro completo (las páginas dedicadas al tratamiento son
de la 92 a 122). Hay que tener en cuenta que esta obra, fundamental
en los inicios de la construcción de la teoría y la clínica psiquiátrica, se
introduce en España en tiempos de la reforma psiquiátrica, en la
consciencia de la absoluta necesidad de no ignorar las bases teóricas y
la historia de las especialidades de la salud mental, en este proceso.
143
Décadas después, la fragilidad del discurso psiquiátrico psicológico
demuestra esa necesidad. Y la urgencia de atenderla.
NOTA A LA EDICIÓN (1990)
Recuperar a Esquirol tiene, en estos

momentos, en pleno debate sobre la
reforma psiquiátrica, y en especial sobre
la clínica, a veces tan abandonada, que
debe dar contenido a las nuevas formas
de atención, un interés que transciende
la curiosidad histórica. En Esquirol
(junto con Pinel y los primeros alienistas)
se une el origen de la psiquiatría como
especialidad médica, esa atenta
observación, que funda la clínica
psiquiátrica, con la constitución del
manicomio –institución creada como
elemento terapéutico, aunque pronto se
manifestaría su fracaso -y la formalización de una legislación sobre el
internamiento de los enajenados que va a perdurar prácticamente
hasta nuestros días. Son tiempos míticos, constituyentes de nuestra
época (De la Revolución Francesa al fracaso de la revolución obrera de
1848, de los ilustrados al positivismo de Auguste Comte, por cierto
paciente de Esquirol), en los que el nuevo orden social no puede sino
rescatar la atención a la locura de la promiscua asistencia de los
albergues de pobres, los hospitales generales donde encerraba la
miseria el absolutismo. Con la Declaración de los Derechos del
Hombre y del Ciudadano, la nueva soberanía civil - libre circulación de
personas y bienes- tiene que reflexionar sobre los límites de la libertad:
el enajenado ya no puede ser encerrado arbitrariamente, por una orden
real, sin garantías. El encierro de los enajenados se convierte en
internamiento; en una medida terapéutica. El aislamiento es condición
144
de posibilidad del tratamiento alienista, del tratamiento moral. El
aislamiento actúa directamente sobre el cerebro y condena a este
órgano al reposo sustrayéndole de las imágenes irritantes, reprimiendo
la vivacidad y movilidad de las impresiones y moderando la exaltación
de las ideas ( Esquirol: Memorias de la locura, pág. 104) Viajes a
climas cálidos, o internamientos para alejarse de las pasiones, de las
"causas" de la
enajenación.Locura que ya es
una entidad morbosa, una
enfermedad que es preciso
describir y atender
médicamente, procurando su
curación. La observación, la
investigación de los fenómenos
perceptibles de la enfermedad
de los alienados de Bicêtre, la
Salpêtrière o Charenton, se
convierte con Pinel y Esquirol en
clínica, estableciendo las bases
de la construcción teórica de la
psiquiatría clásica.
Son precisamente los capítulos dedicados a la clínica, a la descripción

de la locura y sus formas (variedades) de presentación -sobre todo
aquellos que suponen una mayor aportación de Esquirol a partir de la
nosología de Pinel [Tratado de la enajenación mental o manía, Paris
1801; Madrid, 1988]-, los que hemos seleccionado de la obra de
Esquirol Des maladies mentales considerées sous le rapport medical,
hygiennique et médico-legal. Texto que aparece en 1838, el mismo
año en que se promulga la Ley sobre el Régimen de los Asilos - en la
que interviene decisivamente Esquirol- que consagra el alienismo y el
tratamiento moral.
145
En esta obra, ilustrada con notables observaciones clínicas, Esquirol
separa las alucinaciones de las ilusiones, y se adentra en la búsqueda
de un sentido en la locura. Para Marcel Gauchet y Gladys Swain [La
practique de l esprit humain, édition Gallimard, 1980, p.28], si Pinel
introduce un cierto optimismo al reconcer una subjetividad y una parte
de razón en el alienado, Esquirol llega más lejos al considerar que
detrás de lo que aparece como sin sentido, debe de haber una razón
oculta de la sinrazón, una "idée-mére" según su propia terminología, o
un punto de partida al cual hay que volver para poder comprender la
locura. De eslabón en eslabón este regreso nos llevará la falla
alucinatoria.
(…)
Manuel Desviat
noviembre 1990
El libro completo se puede descargar en la página web de Atopos
(www.atopos.es).
http://www.atopos.es/images/biblioteca/clasicos/memorias_locura_esquirol.pdf 
146

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ESQUIROL Y LA CONSTRUCCIÓN

Esquirol (1772-1840), principal discípulo de Pinel y uno de los

NOTA A LA EDICIÓN (1990)

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Son precisamente los capítulos dedicados a la clínica, a la descripción

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