Nothing Special   »   [go: up one dir, main page]

Herramientas Del Pensamiento Concreto

Descargar como pdf o txt
Descargar como pdf o txt
Está en la página 1de 27

Miriam Dominguez Juarico

Inhibidor de dolor físico: Cuando se produce un daño físico, los receptores del
dolor de los tejidos del cuerpo emiten una señal que va directa al cerebro. Cuando
el cerebro recibe esta señal se liberan endorfinas. Esta función tiene un valor
adaptativo. Gracias a que no sentimos el dolor de manera tan abrupta al inicio,
tenemos la posibilidad de llevar a cabo una respuesta más adaptativa. Esta es la
explicación a que sintamos un dolor más fuerte pasadas unas horas tras un golpe,
por ejemplo.
Inhibidor del dolor emocional: El funcionamiento de las endorfinas con el dolor
emocional es exactamente el mismo que con el dolor físico. Al igual que no
sentimos el dolor físico en su totalidad hasta horas después del suceso, ante un
acontecimiento traumático o estresante se produciría lo mismo: en este caso
tendríamos la sensación de sentirnos anestesiados, lo que se conoce
habitualmente como “estado de shock”. Esto nos permitiría no enfrentarnos al
hecho doloroso de forma inmediata si no que, a lo largo de las horas (o días),
iríamos procesándolo poco a poco.
La dopamina, al igual que la serotonina y las endorfinas, está
relacionada con el placer. En este caso, es el neurotransmisor
que genera el “enganche” a la situación que te ha generado ese
bienestar. La dopamina sería la responsable de que las sustancias
o acciones que generan placer sean susceptibles de convertirse en
adictivas. Aunque, en su justa medida, este es el neurotransmisor
que consigue motivarnos para que volvamos a repetir una acción a
pesar de que podamos sentir cierta pereza antes de hacerla.
Como, por ejemplo, levantarnos por la mañana para hacer deporte.

También podría gustarte