Daniel y El Anticristo PDF
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CONCERNIENTES AL ANTICRISTO
¡Un Estudio que retará sus convicciones Presentes!
Sin embargo, la llave para entender Revelación son las profecías del Antiguo
Testamento. Detrás de las visiones elaboradas de Revelación descansan las
cinco visiones de Daniel. Sin entender Daniel es difícil entender Revelación. El
propósito de este estudio es colocar un cimiento o fundamento para el
adecuado entendimiento de la profecía Neo Testamentaria, comenzando con
Daniel.
Como está indicado por este título, el foco de este libro es el anticristo. “Anti”
significa “contra”, así tenemos “contra Cristo”.
1
La palabra “anticristo” nunca aparece en Daniel, o en cualquier libro del
Antiguo Testamento. Aparece exclusivamente en las cartas de Juan, pero el
significado de ella es claro. “Hijitos, ya es el último tiempo; y según vosotros
oísteis que el anticristo viene, así ahora han surgido muchos anticristos; por eso
conocemos que es el último tiempo” (1 Juan 2:18). Aquí Juan reconoce que su
audiencia ha oído del anticristo, un único y simple hombre perverso que se
opondrá a Cristo en los últimos días; y desde que “muchos anticristos”
(personas que enseñan cosas “contra Cristo”) han surgido, Juan se dio cuenta
que la venida de ese anticristo individual estaba cerca. Y él está aún más cerca
que lo que estaba en la época de Juan, y para estar seguros; el espíritu del
venidero anticristo puede ser visto en muchos cines, TV, libros, cultos
religiosos, políticos, etc (ver 1 Juan 4:3-6).
Capítulo 1
Los Antecedentes
Daniel fue profeta que vivió en el siglo VI AC (1:1). El fue uno de los muchos
jóvenes judíos que fue capturado y llevado a Babilonia para servir en la corte
del rey Nabucodonosor (1:3-4,6). Su situación fue muy similar a José en Egipto
(Gén. 41:40), porque él tenía dotes para dirigir los asuntos de un reino gentil
(Dan. 6:2,3) y ayudó a fomentar la esperanza entre los Judíos que estuvieron en
cautiverio.
La Imagen
2
La primera profecía se encuentra en el segundo capítulo de Daniel, Allí leemos
que una imagen (estatua) apareció a Nabucodonosor, rey de Babilonia, en un
sueño. Daniel le contó al rey lo que éste soñó y lo que significa el sueño.
Tú, oh rey, veías, y he aquí una gran imagen. Esta imagen, que era muy grande,
y cuya gloria era muy sublime, estaba en pie delante de ti, y su aspecto era
terrible. La cabeza de esta imagen era de oro fino; su pecho y sus brazos, de
plata; su vientre y sus muslos, de bronce; sus piernas, de hierro; sus pies, en
parte de hierro y en parte de barro cocido. Estabas mirando, hasta que una
piedra fue cortada, no con mano, e hirió a la imagen en sus pies de hierro y de
barro cocido, y los desmenuzó. Entonces fueron desmenuzados también el
hierro, el barro cocido, el bronce, la plata y el oro, y fueron como tamo de las
eras del verano, y se los llevó el viento sin que de ellos quedara rastro alguno.
Mas la piedra que hirió a la imagen fue hecha un gran monte que llenó toda la
tierra (Daniel 2:31-35).
Daniel no identificó al segundo imperio hasta este punto. Este será revelado
después. Por ahora necesitamos reconocer que el segundo reino representado
por el pecho y brazos de plata iba a seguir a Babilonia.
El cuarto reino es representado tanto por las piernas de hierro y los pies hechos
de hierro y barro (vv.40-43).
“Y en los días de estos reyes el Dios del cielo levantará un reino que no será
jamás destruido, ni será el reino dejado a otro pueblo; desmenuzará y
consumirá a todos estos reinos, pero él permanecerá para siempre” (v.44).
Capítulo 2
3
Acabamos de ver que cuatro reinos preceden el Reino de Dios. Estos fueron
mostrados a Nabucodonosor en la forma de estatua. La cabeza de oro, se
mostró, fue Babilonia (2:38). Tres reinos más harían de sucederlo, y luego el
reino de Dios aparecería en la tierra (2:44). El Capítulo 2 no identifica al
segundo, tercero, o cuarto reinos. Es al segundo y tercer reinos que nos
volvemos ahora.
Los Antecedentes
El Segundo Reino
“…y miré, y he aquí un carnero y tenía dos cuernos, uno era más alto que el
otro…” (v.3).
“En cuanto al carnero que viste, que tenía dos cuernos, éstos son los reyes de
Media y de Persia.”
El Tercer Reino
“Mientras yo consideraba esto, he aquí un macho cabrío venía del lado del
poniente sobre la faz de toda la tierra, sin tocar tierra; y aquel macho cabrío
tenía un cuerno notable entre sus ojos. Y vino hasta el carnero de dos cuernos,
que yo había visto en la ribera del río, y corrió contra él con la furia de su
fuerza. Y lo vi que llegó junto al carnero, y se levantó contra él y lo hirió, y le
quebró sus dos cuernos, y el carnero no tenía fuerzas para pararse delante de él;
lo derribó, por tanto, en tierra, y lo pisoteó, y no hubo quien librase al carnero
de su poder. Y el macho cabrío se engrandeció sobremanera; pero estando en
su mayor fuerza, aquel gran cuerno fue quebrado, y en su lugar salieron otros
cuatro cuernos notables hacia los cuatro vientos del cielo”. (Dan. 8:5-8)
4
Esto también fue interpretado por Daniel:
“El macho cabrío es el rey de Grecia, y el cuerno grande que tenía entre sus ojos
es el rey primero” (v. 21).
Daniel no vivió lo suficiente para ver esto cumplido, sin embargo ocurrió justo
como la visión lo había mostrado. Desde el 334 al 331 AC Alejandro el Grande
vino velozmente del oeste (Grecia) y conquistó todo el Medio-Este hasta lo más
lejano como la India.
Capítulo 3
Hasta este punto nos hemos ocupado en identificar los reinos de Daniel 2. La
cabeza de oro, vimos, fue Nabucodonosor (2:38). El pecho y brazos de plata era
Medo-Persia, visto en el capítulo 8 como un carnero con dos cuernos (8:20). La
cintura y caderas de bronce era Grecia, vista en el capítulo 8 como un macho
cabrío (8:21). El cuarto reino, de las piernas y hierro, no es nombrado.
Por esta razón nos abstendremos en la identificación del cuarto reino hasta que
exploremos el resto del estudio con más detalle. El contexto por sí mismo debe
dictar la identificación de los reinos.
5
Por ahora volveremos nuestra atención a las bestias del capítulo 7.
Las Bestias
“La primera era como león, y tenía alas de águila. Yo estaba mirando hasta que
sus alas fueron arrancadas, y fue levantada del suelo y se puso enhiesta sobre
los pies a manera de hombre, y le fue dado corazón de hombre. Y he aquí otra
segunda bestia, semejante a un oso, la cual se alzaba de un costado más que del
otro, y tenía en su boca tres costillas entre los dientes; y le fue dicho así:
Levántate, devora mucha carne. Después de esto miré, y he aquí otra,
semejante a un leopardo, con cuatro alas de ave en sus espaldas; tenía también
esta bestia cuatro cabezas; y le fue dado dominio. Después de esto miraba yo en
las visiones de la noche, y he aquí la cuarta bestia, espantosa y terrible y en gran
manera fuerte, la cual tenía unos dientes grandes de hierro; devoraba y
desmenuzaba, y las sobras hollaba con sus pies, y era muy diferente de todas
las bestias que vi antes de ella, y tenía diez cuernos” (7:4-7).
La mayor parte de los eruditos creen que las cuatro bestias del capítulo 7 son
paralelas a los cuatro metales del capítulo 2; por ejemplo, la primera bestia es
Babilonia, la segunda bestia es Medo-Persia, la tercera es Grecia, etc. Esto es
posible, pero otra interpretación es tal vez más probable. Nuestra pregunta es:
¿Corresponden las cuatro bestias del capítulo 7 con los cuatro metales del
capítulo 2?
El verso uno nos dice que la visión ocurrió “en el primer año que Belsasar era
rey de Babilonia, y Daniel…está hablando de algo todavía por ocurrir;
mientras…el imperio Babilónico no es algo que va a levantarse sino algo que se
levantó hace mucho y está ahora acercándose a su fin.1
La interpretación informó a Daniel que las cuatro bestias serán aún futuras: “se
levantarán”. Pero Babilonia ya se había alzado a la supremacía mundial, y
estaba realmente bastante cerca a su fin, porque la visión fue en el primer año
del breve reinado de su último rey.2
6
El punto es, si las cuatro bestias serían aún futuras (en el tiempo de Daniel) y
Babilonia estaba cerca a caer, entonces parece que Babilonia parece no ser la
primera bestia.
…continuará
Otra cuestión que debemos preguntar es: ¿Son los cuatro reinos vistos en orden
(p.e., el primer reino es conquistado por el segundo, el cual es conquistado por
el tercero, etc) o son ellos vistos existiendo contemporáneamente (es decir, al
mismo tiempo)?
“Habían también quitado a las otras bestias su dominio, pero les había sido
prolongada la vida hasta cierto tiempo (v.12).”
Hemos visto, entonces, que las cuatro bestias del capítulo 7 no parecen
corresponder como un “guante en la mano” con los cuatro metales del capítulo
2. Debido 1). La primera bestia no es Babilonia y 2) los primeros tres reinos
duran más que el cuarto. ¿Qué significa entonces esta visión de las bestias?
El verso 2 nos dice que los cuatro vientos del cielo combatían en el gran mar.
¿Qué es el “gran mar”?
7
cual cuatro reinos se levantarán, cada uno luchando por la supremacía. Los
versos 19 y 20 indican que la cuarta bestia terrible con diez cuernos someterá a
otros tres. Esto puede ser visto en Revelación 13:1,2 donde todas las cuatro
bestias son vistas como que la cuarta bestia ha conquistado a las otras tres y
formado con ellas su propio reino.
Aunque parezca que las tres primeras bestias no son idénticas con los tres
primeros reinos del Capítulo 2, hay cualquier razón para creer que la cuarta
bestia de Daniel 7 es idéntica con el cuarto reino de Daniel 2. Compare:
Daniel 2:40
Daniel 7:7
Es también claro que los diez cuernos de la cuarta bestia, los cuales representan
diez reyes (v.24), son idénticos a los diez dedos de la estatua en el capítulo 2.
Puesto que este cuarto reino del capítulo 7 es el más fuerte de los cuatro, hay
cualquier razón para creer que ese es el reino que es visto seguir a Grecia en el
capítulo 2.
El Anticristo
8
Altísimo (Dios) y a los santos del Altísimo quebrantará”- el perseguirá al
pueblo de Dios. También “el pensará cambiar los tiempos y la ley (tal vez un
intento de cambiar las costumbres y rituales de los Judíos, y por extensión, los
de la iglesia); y serán entregados en su mano hasta tiempo, y tiempos y medio
tiempo, o sea tres y medio años. Compare 9:27 y Apo. 13:5.
El cuerno pequeño, o anticristo, emergió como el onceavo entre los diez cuernos
de la cuarta bestia (7:7,8,24) y desgarró tres cuernos (o reyes), de modo que
quedaron ocho (incluyendo al anticristo).
Capítulo 4
Antíoco Epífanes
Antíoco IV Epífanes, quien fue ciertamente un tipo del anticristo por venir,
reinó en Siria desde 175-164 AC. El fue un Seleucida. Seleucida, como vimos
(cap. 2), fue una de las cuatro divisiones del imperio de Alejandro. Antíoco fue
un verdadero Hitler. El persiguió a los Judíos, combatió la religión Judía, y paró
los sacrificios del templo.
La Profecía de Daniel 8
La primera cosa que quisiera señalar es que Daniel 8:17b dice: “La visión
pertenece al tiempo del fin”. El verso 19b también habla del “tiempo señalado
del fin”. Claramente ALGO acerca del capítulo 8 tiene que ver con el fin, el cual
ciertamente es todavía futuro. Encuentro difícil que esta conclusión pueda ser
eludida. El fin es el fin! 4
Daniel 8:11 dice que “él (el cuerno pequeño) se engrandecerá contra el príncipe
de los ejércitos”. El Príncipe de los ejércitos es Dios 5. El capítulo 11:36 también
habla de esto, como lo hace 2 Tes. 2:4. Esta persona se engrandecerá a sí mismo
como Dios. De modo que sabemos que esto hará el anticristo.
9
3. C.G Oznne, El Cuarto Reino Gentil (West Sussex: H.E. Walter Ltd.) 1982,
p.34.
4. Ver Interpreter’s Bible, vol.6. pp.478-479
5. Ver Brown, Driver, & Briggs, Hebrew and English Lexicon of the old
Testament., Pág. 979.
Leemos en 8:14 que “hasta dos mil trescientas tardes y mañanas; luego el
santuario será purificado”. 2,300 días equivale a seis años, cuatro meses y veinte
días. En la historia, sólo tomó tres años para los Judíos restituir los sacrificios.
Así, esto debe ser aún futuro. Desde el tiempo que el templo es destruido (este
debe ser el tiempo de la “abominación de la desolación” o del “horror
espantoso” sea puesta en el santuario; Dan. 9:27; 11:31; 12:11, Mateo 24:15) hasta
su construcción, pasan aproximadamente seis años. Esto extenderá cerca de tres
años dentro de los mil años de Cristo. Así, el templo será reconstruido algunos
años después de haber comenzado el reino milenario de Cristo.
El anticristo
Hasta donde hemos visto, la visión del capítulo 8 “pertenece al tiempo del fin”
(v.17). Hemos visto también que Antíoco Epífanes nunca destruyó el templo
como el cuerno pequeño va a hacer (v.11), y una vez que el templo sea
destruido tomará seis años, cuatro meses, y veinte días para reconstruirlo.
Los versículos 23-25 nos dicen más acerca del cuerno pequeño:
Es interesante notar que este gobernante perverso aparecerá cuando “el fin de
aquellos reinos esté cerca”. “Aquellos reinos” se refiere a los cuatro reinos del v.
22 que reemplazaron a Alejandro el Grande, aquellos de Casandro, Lisímaco,
Seleuco, y Ptolomeo. Desde este punto en adelante nos referiremos como los
imperios Helenísticos”. El cuerno pequeño de este capítulo, está escrito,
aparecerá cuando esté cerca el fin de la historia, porque Antíoco Epífanes
10
apareció en el medio del periodo Helenístico—no en el final. Este hecho milita
en contra de un cumplimiento histórico (es decir, ya realizado).
De otro lado, note las similitudes entre el cuerno pequeño del capítulo 7 y la del
capítulo 8. Ambos se opondrán al Altísimo, ambos perseguirán a sus santos, y
ambos serán conquistados por medios sobrenaturales (compare 7:25 y 8:23-25).
Capítulo V
Antecedentes
11
“En el año primero de su reinado, yo Daniel miré atentamente en los libros el
número de los años de que habló Jehová al profeta Jeremías, que habían de
cumplirse las desolaciones de Jerusalén en setenta años”.
“Porque así dijo Jehová: Cuando en Babilonia se cumplan los setenta años, yo os
visitaré, y despertaré sobre vosotros mi buena palabra, para haceros volver a
este lugar”.
Hasta este punto setenta años estaba cerca a cumplirse, de modo que Daniel
ayunó y oró por Jerusalén. El ángel Gabriel vino a él aún antes que terminara de
orar.
Gabriel entonces le dijo a Daniel que setenta semanas habían sido decretadas
para su pueblo. La palabra hebrea para “semana” Shabua es un grupo
indefinido de siete, y debió ser traducida “siete”. El contexto necesita decirnos
si el grupo de siete significa siete días (una semana), siete meses, siete años, o lo
que sea. Por ejemplo, Daniel 10:2, dice:
“En aquellos días yo Daniel estuve afligido por espacio de tres semanas” (tres
sietes completos).
¿Debe leerse Daniel 9:24 leerse: “setenta semanas” o “setenta periodos de siete
años? En el contexto encontramos que el verso 2 habla de “setenta años”. Así,
debemos aceptar la Traducción Buenas Nuevas de la Biblia aquí: “Siete veces
setenta años es la longitud de tiempo que Dios ha fijado para…tu pueblo.”
7x70=490. Así, 490 años han sido decretados para el pueblo de Daniel.
Algunos tal vez puedan preguntar por qué Daniel no fue directo en decir “490
años es el periodo de tiempo que Dios ha establecido para tu pueblo”. ¿Por qué
el usa imágenes mentales secretas? La respuesta es que en el Cercano Este
antiguo, los números frecuentemente tiene un valor simbólico. El número 6 es
menos que completo, y 8, por otro lado, es más que completo, entonces 7 es
perfecto completo. En Revelación hay 7 sellos, 7 trompetas, etc que significan
que la tierra está por recibir la completa medida de la cólera de Dios.
Daniel 9:24 nos dice que estaba por ocurrir al final de los 490 años:
12
“Setenta semanas están determinadas sobre tu pueblo y sobre tu santa ciudad,
para terminar la prevaricación, y poner fin al pecado, y expiar la iniquidad,
para traer la justicia perdurable, y sellar la visión y la profecía, y ungir al Santo
de los santos”.
Esta es claramente la era del Reino. Al final de los 490 años, entonces, el reino
sería establecido. Pero, ¿cuándo comienzan los 490 años? Capítulo 9:25:
“Sabe, pues, y entiende, que desde la salida de la orden para restaurar y edificar
a Jerusalén hasta el Mesías Príncipe, habrá siete semanas, y sesenta y dos
semanas; se volverá a edificar la plaza y el muro en tiempos angustiosos”.
Sería un error sugerir que los detalles de este versículo son fáciles de
interpretar. Sin embargo, una de las mejores teorías que he oído es que 457 AC
es el punto de partida de la profecía. Por el final de los siete sietes, o 49 años del
decreto de 457 AC (Esdras 7:6), la plaza pública y muro han sido completados.
Setenta y dos sietes, o 434 años después, el Mesías Jesús de Nazaret comenzó su
ministerio en el 27AD.
Daniel luego prosigue para describir un evento que ocurrió después de los 69
sietes, pero no necesariamente en la 70ava semana. Esto indica una ruptura
entre la 69 y 70 sietes. “El mesías será cortado (muerto); y no será más suyo el
pueblo…” (V:M). Esto ocurrió en la crucifixión de Jesús.
El versículo 27 describe el periodo de los siete años del gobierno del anticristo o
la “70ava semana de Daniel”. El anticristo (el príncipe que ha de venir, v.26)
hará la paz con Israel pero romperá el acuerdo en la mitad de la semana (del
siete) es decir, tres y medio años. Este es el tiempo donde coloca la abominación
desoladora (Mat. 24:15).
La Destrucción del 70 DC
13
“Después de 62 semanas el Mesías será muerto, de modo que nada queda para
él, y la ciudad y el santuario serán destruidos por el pueblo de un príncipe que
ha de venir, quien hallará su fin en la inundación; pero la guerra continuará
hasta el fin”.
Así, la destrucción debe ser aún futura, porque Tito no vino a su fin en la
destrucción del año 70 DC, y menos, con inundación.
Capítulo 6
Persia y Grecia
“Y ahora yo te mostraré la verdad. He aquí que aún habrá tres reyes en Persia,
y el cuarto se hará de grandes riquezas
más que todos ellos; y al hacerse fuerte con sus riquezas, levantará a todos
contra el reino de Grecia” (Dan. 11:2).
14
Los versículos 5-45 describen las guerras producidas entre el rey del Norte
(Siria) y el Rey del Sur (Egipto). La Biblia “Buenas Nuevas” (inglesa)
apropiadamente traduce “norte” como Siria y “sur” como Egipto, y esto en
dirección y en relación con Israel.
Para resumir los eventos del capítulo, el rey del Sur crece más fuerte como uno
de los “príncipes” o “generales” quien funda aún un reino más magnífico que el
norte (V.5). Después de un tiempo, es arreglado un matrimonio político en
donde la hija del rey del Sur se casa con el rey del Norte. Ella es asesinada junto
con sus sirvientes y su padre (v.6). Un descendiente del rey del Sur invade
victoriosamente el Norte y toma gran tesoro y lo lleva a Egipto (vv.7,8). El rey
del Norte invade el Sur, pero sin resultado (v.9). El hijo del rey del Norte
entonces invade (v.10) y el rey del Sur vuelve a invadir. Muchos, incluyendo
Judíos apóstatas, se reúnen en contra del rey del Sur. La invasión del Norte
aumenta en intensidad y el rey del Sur se encuentra indefenso (vv. 11-15). El
victorioso rey del Norte gobierna como le place e ingresa a la tierra santa
(Israel) con intención de destruirla (v.16). Luego él se vuelve al Sur y ofrece la
paz por medio de un matrimonio político entre su hija y el rey del Sur-sólo para
su destrucción (v.17). Luego èl ataca las islas del oeste, pero es afligido por sus
comandantes (v.18). El regresa a su casa, pero cae (v.19). Otro rey se levanta en
su lugar, pero para ser destruido dentro de pocos días (v.20).
Es claro que la visión alcanza hasta el fin del siglo. La resurrección es futura
(12:2), como también la gran tribulación (12:1; citado por Jesús en Mateo 24:21).
Es también claro que los últimos versos del capítulo 11 son futuros y describen
al anticristo. Y la totalidad de 11:5-45, como hemos cisto, trata con los reyes del
Norte y del Sur.
El Asunto
15
40 describe el conflicto entre el rey del Norte y el rey del Sur “en el tiempo del
fin”:
“Pero al cabo del tiempo el rey del sur contenderá con él; y el rey del norte se
levantará contra él como una tempestad (el rey del Sur), con carros y gente de a
caballo, y muchas naves; y entrará por las tierras, e inundará, y pasará”.
“Cuando la hora final del rey de Siria haya casi llegado, el rey de Egipto le
atacará, y el rey de Siria volverá a pelear…” (Biblia Buenas Nuevas, en inglés).
Es también claro que el verso 36 es todavía futuro, porque Pablo hace alusión a
él en 2 Tes. 2:4, señalando que este terrible rey se exaltará a sí mismo sobre Dios.
Este debe referirse atrás a la visión que fue dada hace unos minutos. ¿Por qué
12:11, el cual es parte de la postdata a Daniel 11 no debe referirse a esa visión
sino a otra que fue dada dos años atrás? Simplemente no tiene sentido. El
capítulo 11:31 debe ser aún futuro, junto con 9:27 y 12:11. El libro de Daniel
conoce sólo una abominación desoladora, así como conoce a un solo cuerno
pequeño, y sólo un anticristo final.
El versículo 31 está apretado entre dos versículos que hablan de “los que
abandonan el santo pacto” (vv.30,32). Esta rebelión religiosa es referida por
Pablo como la apostasía o caída (2 Tes. 2:3) y está asociada con el anticristo
(mismo verso).
Hemos visto en un capítulo anterior que Antíoco Epífanes fue un Sirio histórico
rey del Norte. Muchos comentaristas, deseando desvincular el anticristo del rey
del Norte dicen que 11:36-12:3 es futuro, pero 11:21-35 fue cumplido por
Antíoco en la historia. Un nuevo rey, dicen, es introducido, y este rey, el
anticristo, es una persona separada del rey del norte.
16
Esta maniobra es contraria al contexto de Daniel 11. El capítulo entero, desde el
5-45, trata de ocurrencias entre los reyes de Norte y del Sur. Una tercera
persona simplemente no puede ser introducida.
La teoría dada aquí es que 11:21-45 describen al anticristo, quien es el rey del
norte, porque ellos no han sido exactamente cumplidos por Antíoco.
Comentando sobre el v. 21, el PULPIT COMMENTARY dice:
Daniel 11:21-45 es aún futuro y describe al anticristo, quien es también el rey del
Norte. El va a obtener el reino con astucia (v.21), y destruirá a sus enemigos
(v.22), y abrazará la apostasía de la rebelión religiosa (11:30,32; compare con
Mateo 24:15). Perseguirá a los santos (11:33-35), se exaltará a sí mismo sobre
todo dios (11:36; compare con 2 Tes. 2:4).
Capítulo 7
El Cuarto reino
Argumento de Daniel 2
17
área de Mesopotamia (ésta fue también la que Asiria cubrió). Persia existió
mucho antes que conquistara Babilonia, pero no fue hasta que conquistara
Babilonia e hiciera el área Mesopotámica el centro de su poder mundial que éste
vino a ser el segundo reino de la profecía de Daniel.
De igual manera, Grecia existió mucho antes de que existiera Persia; sin
embargo, éste no vino a ser el tercer reino de la profecía de Daniel hasta que
hizo del área Mesopotámica el centro de su poder mundial. Esta es la única
forma que podemos explicar el hecho de que Alejandro el Grande fue el primer
rey (8:21). Alejandro no fue el primer rey de Grecia, sin embargo él fue el
primer rey de Grecia con el área de Mesopotamia como el centro mundial de su
imperio.
¿Es Roma el cuarto imperio? Es verdad que por un periodo de siete años Roma
alcanzó el río Indo, pero ésta fue débil posesión por algunos años y Roma nunca
estableció su poder mundial en el área de Mesopotamia. Roma nunca fue
asiática, nunca fue oriental; nunca por lo tanto fue un legítimo sucesor de los
tres primeros imperios de estos grandes imperios (Cowless, Ezekiel and Daniel,
N.Y: D. Appleton, 1868, pág. 355.)
Si para el cuarto reino debemos mirar a Europa, y desde allí, la venida del
anticristo; los hechos, sin embargo, apuntan hacia el Medio Este para este
evento daniélico y apocalíptico.
Argumento de Daniel 7 y 8
Hemos visto que el cuarto reino del capítulo 2 es el mismo cuarto reino del
capítulo 7. Hemos visto el cuerno pequeño o anticristo en ambos informes (cps.
7 y 8) y hemos visto que él sale del cuarto reino (cp.7), específicamente aquella
parte que cubre el territorio Sirio (Seleucida) del dividido Imperio Griego (Cp.
8) C.G Ozanne ha remarcado correctamente esto, con estas palabras:
“Si este reino es Roma, es difícil ver cómo un retoño de Grecia pueda referirse al
anticristo” (Ozanne, The Fourth Gentile Kingdom, p. 37)
Argumento de Daniel 11
18
En Daniel 11 es claro que el anticristo será “el rey del Norte” (vv. 21-45), o,
como traduce la versión inglesa “Buenas Nuevas”, “El rey de Siria”. A través
del pasaje encontramos inconsistencias con el relato y el Antíoco Epífanes de la
historia. El Rey del Norte aquí va a necesitar ganar el reino con truco (v.21),
mientras Antíoco ya era rey. El rey del Norte destruirá a todos los que se le
opongan (v.22), mientras que Antíoco careció de ese poder. El rey del Norte
realizará lo que sus padres nunca hicieron (v.24), pero Antíoco no lo hizo. El rey
del Norte colocará la abominación desoladora (v.31) lo cual es futuro (12:11;
Mat. 24:15). Todas las evidencias apuntan a un cumplimiento futuro.
Y, muy natural, si el anticristo tiene que aparecer del área de Mesopotamia, así
también su reino.
Una Objeción
Se ha dicho que Daniel 9:26 indica que el anticristo será un romano, porque la
ciudad y el santuario fueron destruidos por el “pueblo de un príncipe que ha de
venir”. Puesto que Jerusalén fue destruido en el año 70 DC por los romanos, “el
príncipe que ha de venir” será un romano. Sin embargo, como hemos visto, el
General Tito no “llegó a su fin” en esa invasión. Este versículo no describe la
caída de Jerusalén en el año 70 DC.
Conclusión
Montgomery señala que “todas las cuatro visiones de la segunda mitad del
libro (Daniel) culminan en uno y el mismo execrable tirano, en una y la misma
catástrofe esperada de la nación y la Santa Ciudad” (International Critical
Commentary, Edinburg: T&T Clark, 1926, p.60).
El libro de Daniel, como los otros libros, señala a un anticristo futuro que se
levantará de esta área (Asiria revivida, no Roma revivida).
Mark M. Mattison.
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