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Cómo Saber Si Se Ha Roto La Cadena Del Frío

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Cómo saber si se ha roto la cadena del frío

10:11am - el 12 de Jul, 2016

Hoy hablaremos sobre cómo saber si se ha roto o no la cadena del frío en los alimentos congelados. Es
fundamental que cuando vayamos a meter un alimento al congelador, lo hagamos en las condiciones
adecuadas para evitar que se rompa la cadena del frío del alimento congelado. En Productos
Congelados hemos mencionado varias veces la importancia que tiene el hecho de que no se rompa la
cadena del frío en los alimentos puesto que si no, es muy probable que se echen a perder. Lo cierto es
que no existen pruebas evidentes que se repitan en todos los casos de productos congelados para poder
confirmar si se ha roto o no la cadena del frío, ya que cada alimento reacciona de una forma diferente.
Pero hay ciertos detalles que sí podemos analizar a simple vista, como por ejemplo cuando observamos
que el envoltorio de nuestro alimento congelado está envuelto de escarcha. Esto nos indica que se ha
producido una descongelación parcial de nuestro alimento y posteriormente se ha vuelto a congelar, por
lo que es probable que se haya roto la cadena del frío, aunque en varias ocasiones se ha comprobado que
los alimentos seguían en buen estado. Primeramente hablaremos de los riesgos que se corren al romper
la cadena del frío. Como ya hemos comentado varias veces, cuando congelamos un alimento estamos
evitando que aparezcan organismos bacteriológicos que puedan estropear nuestro alimento, haciendo así
que este pueda durar más tiempo sin tener que consumirlo, pero ¡ojo! Estas bacterias no se destruyen,
solamente dejan de actuar, como si se hubieran quedado dormidas por el frío, por lo que si
descongelamos el alimento, estas bacterias reaparecen, y si no ponemos cuidado, son las que finalmente
actuarán por naturaleza y contaminarán nuestra comida. Como también hemos comentado más veces, es
fundamental llevar a cabo un proceso adecuado de congelado y descongelado para que estos se
conserven de forma correcta.

Riesgos que corremos al romperse la cadena del frío

¿Os habéis fijado alguna vez por ejemplo al abrir un helado que su envoltorio tiene como escarcha? Esto
se debe a que por ejemplo durante el traslado del supermercado al congelador de nuestra casa el
producto ha sufrido una descongelación parcial y después lo hemos vuelto a congelar. Por lo tanto se ha
roto la cadena del frío; pero no os preocupéis porque en la mayoría de ocasiones el helado sigue estando
en buen estado. Aunque he de añadir que al tratarse de otros alimentos, podemos no tener tanta suerte e
intoxicarnos si los ingerimos ya que se han puesto en mal estado aunque no podamos verlo a simple
vista porque no haya sufrido alteraciones en su aspecto, textura u olor todavía. Esto suele pasar sobre
todo en carnes y pescados. Otro de los síntomas que podemos analizar para saber si se ha roto la cadena
de frío es comprobar que el alimento se ha reblandecido.

Recomendaciones para evitar que se rompa la cadena


del frío

Es fundamental tener cuidado a la hora de transportar los alimentos de un sitio a otro puesto que, como
ya hemos comentado antes, hay alimentos a los que no tiene por qué afectarles que se rompa
parcialmente la cadena del frío como en el caso de los helados, pero hay otros alimentos que sí que
pueden echarse a perder como es el caso de las carnes y los pescados. Es importante también que
mantengamos nuestro refrigerador y congelador a una temperatura constante y adecuada para evitar que
los alimentos que guardamos en su interior puedan deteriorarse. Por último, debemos asegurarnos de
descongelar de forma correcta los alimentos que vayamos a consumir. Puedes echarle un vistazo a este
otro post de productos congelados sobre cómo descongelar alimentos para evitar que se estropeen.
http://www.productoscongelados.com/saber-si-roto-cadena-frio/
CONSUMO
Advierten sobre los peligros de
consumir un helado en mal
estado
La Dirección de Higiene y Seguridad Alimentaria del Gobierno
porteño aconseja no comprar los helados que tengan poca
consistencia y colores muy fuertes. Guía para saber dónde y cómo
comprar un helado para evitar riesgos.

Comer un helado siempre es placentero, sobre todo en los


calurosos veranos porteños. Sin embargo, elegir en qué heladería
comprar un vasito o cucurucho no es tan sencillo. La Dirección
General de Higiene y Seguridad Alimentaria del Gobierno porteño
advirtió que no hay que consumir los que expiden las máquinas o
conservadoras de helados expuestas al medio ambiente. Tampoco,
los que tengan colores muy fuertes y consistencia poco firme. Y los
que estén cristalizados o tengan pedacitos de hielo en la crema.

El peligro de consumir un helado en mal estado es el de sufrir una


gastroenteritis con vómitos y diarreas, que en esta época del año
conllevan un alto riesgo de deshidratación.
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Según la directora de Higiene porteña, Marta López Barrios, las


heladerías siempre deben exhibir la habilitación en un lugar
visible; tener mesadas, pisos y paredes limpias (sin humedad ni
alfombras); los vendedores no deben usar anillos ni relojes, pero sí
uniformes claros y gorros; y las cucharas para servir el helado no
deben estar almacenados en baldes con agua.

La Asociación de Fabricantes Artesanales de Helados certifica con


su logo (HA) las heladerías que fabrican sus productos. Según
detallan los expertos, hay 3 clases de helados. El industrial
(empresas con tecnología de producción masiva), el artificial (con
materias primas de muy bajo costo) y el artesanal (con
ingredientes naturales de primera calidad).

"El helado artesanal se elabora diariamente y se vende sólo en las


heladerías artesanales, que tienen visible el logo", explica el
presidente de la Asociación, Gabriel Famá. La entidad nuclea a
300 heladerías.

"Hay muchos factores que inciden en la elaboración de un helado


en mal estado. La higiene es, tal vez, el factor más importante.
Otro es la consistencia. En general, un helado blando puede haber
perdido la cadena de frío", describe Famá.
En la Dirección de Higiene afirman: "Los helados deben poseer
consistencia firme y uniforme, y carecer de olores y sabores
desagradables".

El jefe de calidad y desarrollo de heladerías Freddo, Diego


Ledesma Arocena, explica que "no es fácil detectar un helado en
malas condiciones ya que se encuentra conservado a una
temperatura en la cual se producen muy pocos cambios
fisicoquímicos y microbiológicos. Un parámetro puede ser la
cristalización. Si se sienten pequeños cristales de hielo, se debe a
que se rompió la cadena de frío y la ingesta puede ser peligrosa
porque se favoreció el desarrollo microbiano".

Lo mismo señalan los creadores de los helados Pérsico, Federico


Aversa y Juan Martín Guarracino, quien además aconsejan tener
cuidado "con los colores demasiado llamativos en los helados".

El precio del kilo de helado difiere mucho de un local a otro: se


ofrece desde $6 a $18. "Puede deberse a la diferencia de calidad de
productos aunque no necesariamente se relaciona con que sean
inseguros o peligrosos para la salud", aclaran en la Dirección de
Higiene porteña. En el precio influyen fundamentalmente los
insumos utilizados y el marketing.

"Todo helado debidamente cerrado en su paquete y rotulado es


inocuo. Se debe prestar más atención a los que se venden en las
heladerías, porque es allí donde interviene la manipulación
humana que puede causar riesgos de contaminación. La gente no
debe comprar helados si advierte en el local un intenso olor a
humedad y problemas de higiene ", alertan en la asociación
Proconsumer.

Para los helados envasados que se compran en supermercados y


almacenes, la recomendación es "verificar que la tapa del pote no
esté abombada, que no tenga escarchas y que se indique fecha de
elaboración y de vencimiento".
https://www.clarin.com/sociedad/advierten-peligros-consumir-helado-mal_0_SyaZXozeCKe.html

27/01/2003 - 0:00
 Clarín.com
 Sociedad
Cadena de Frío en la Industria Alimentaria
Con frecuencia, nuestros clientes nos preguntan respecto al concepto de Cadena de Frío, acá
las respuestas a las principales dudas:

¿Por qué “Cadena” de Frío?

Es una cadena porque no debe romperse, cada eslabón es primordial, y la cadena será tan
fuerte como el eslabón más débil.

¿Qué quiere decir esto? Que si pierdo la cadena de frío, permitiré que ocurran dos fenómenos
primordiales en el alimento: crecimiento microbiológico y actividad metabólica en los
productos. Ambos fenómenos afectarán la calidad (crecimiento de microorganismos
alterantes, reacciones químicas, enzimáticas y metabólicas no deseadas) e inocuidad
(crecimiento microorganismos patógenos) del producto, y así disminuirá su vida útil.

Es importante mencionar que las bajas temperaturas no destruyen a los microorganismos,


como sí lo hacen las altas temperaturas; la refrigeración ralentiza el metabolismo de las
bacterias, mientras que la congelación lo inhibe; pero siguen en el alimento, si se rompe la
cadena de frío, y entra en la temperatura de “zona de peligro”, se activan y se reproducen.

Perder la cadena de frío es importante en helados, si se rompe la cadena de frío y se produce


una descongelación, aunque sea parcial, y una posterior re-congelación, se provocará la
aparición de cristales mayores, afectando la calidad del producto y algunas veces,
resquebrajamiento de los empaques.

¿Debemos pre-enfriar los camiones que llevan carga con control de temperatura?

¡Por supuesto! La función del camión de transporte refrigerado/congelado es “mantener las


condiciones de refrigeración/congelación de los productos, no es “bajar la temperatura”. El
pre-enfriamiento es clave, para asegurar la “Cadena de Frío”.

¿Debemos dejar encendida o apagada la unidad de refrigeración de mi vagón cuando


realizo una carga/descarga de producto?.

Depende, si se cuenta con andén refrigerado, es ideal dejarla encendida; pero, basándonos
en el funcionamiento de las unidades de refrigeración, éstas “enfrían el aire caliente”; si no se
cuenta con andén refrigerado y la temperatura ambiente exterior es alta, al abrir las puertas
del vagón, se succionará el aire caliente hacia el interior del vagón y se “forzará” la unidad de
refrigeración.
https://www.afi.com.pa/cadena-de-frio-en-la-industria-alimentaria/

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