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Patologías de La Percepción
Patologías de La Percepción
Patologías de La Percepción
RESUMEN
AO5TRACI-
Perception aud learning have a close relation and their study make clear tbe im-
portant role of the perception activity in ILe leaming process. Accordingly, the
study of the perception has a great interest on the educational field. These paper is
a perception review making a special point of bis basic caracteristics and psycho-
pathology as well it ernphasizc sorne possibilities lo improve the learning.
¿Qué es la percepción?
El proceso de la percepción
además, por otra parte, la memoria es, al mismo tiempo, punto de referen-
cia de la actividad perceptiva y vía final de los productos de la percepción.
La memoria aporta material de contraste y comparación con la información
procesada en la actividad perceptiva y, además, lo percibido se integrará en
la memoria cenando, de esta manera, el complejo circulo de relación me-
mona-percepción.
Tenemos datos experimentales que ponen de manifiesto que el cortex
temporal antero-inferior no sólo juega un importante papel en el reconoci-
miento de imágenes, mediante la detección de lo novedoso o familiar y la
codificación de la información visual para la memoria asociativa, sino que
también, dentro del proceso perceptivo de clasificación sensorial, modifica
la respuesta de las neuronas al estimulo, interviniendo, de este modo, en el
aprendizaje visual (Eacott y Heywood, 1995).
Junto con la atención y la memoria, hay aún otras funciones que com-
plementan y complican más la actividad perceptiva. En estrecha relación
con el proceso perceptivo, se ponen en marcha mecanismos de retroali-
mentación de la propia percepción que dependen de niveles cognitivos su-
periores, como los que forman parte de las funciones ejecutivas, y de la es-
fera afectiva. Tanto los factores cognitivos como los afectivos influyen en el
proceso perceptivo. Tanto unos como otros pueden hacer más eficiente la
percepción o distorsionaría. Es evidente que la actividad perceptiva es rea-
lizada por un sujeto determinado con unos estilos cognitivos propios, una
situación afectiva particular y una historia personal concreta. Todos ellos
son elementos que influyen en el modo cómo percibimos el mundo que nos
rodea. Con todo, dejando al margen situaciones extremas de sugestionabi-
lidad o de sobrecarga afectiva, la actividad perceptiva conserva su indepen-
dencia y no se ve esencialmente modificada por estos factores. El soporte
más claro de esta afirmación es que sustancialmente todos percibimos igual
lo que nos rodea. Las diferencias, cuando existen, están fundamentalmente
en la carga significativa que se le adjudica al resultado de la percepción pe-
ro ésta ya no forma parte de la percepción en sí misma y, en cualquier ca-
so, no llega a alterar la esencia de lo percibido. La única excepción a este
hecho es la presencia de un trastorno perceptivo, donde, por definición, la
percepción está alterada. Además, nos encontramos con situaciones en las
que la independencia de la percepción se pone especialmente de manifies-
to al chocar claramente lo percibido con lo conocido, como cuando com-
probamos que a pesar de saber que lo que se mueve son las nubes la expe-
riencia perceptiva que tenemos es que se mueve la luna, o cuando
determinados contrastes de líneas nos hacen percibir curvas que sabemos
que son rectas (Rock, 1985).
26 Revista Complutense de Educación
2000, vol. lío.’ 1:15-37
Javier Cabanyes Tn4ffino Percepción nonnal ypatológica...
Dimensiones de la percepción
La imagen perceptiva
Tabla 1
Notas distintivas de las imágenes mentales
Características de la imagen Imagen Perceptiva Representación
Alteraciones perceptivas
Tabla 2
Características de los trastornos perceptivos
Objeto Espacio Conciencia de irrealidad
pleta distorsión del estímulo hasta generar una imagen perceptiva que es
aberrante. Este tipo de trastornos se pueden dar en situaciones de depriva-
ción sensorial y, con frecuencia, suelen acompañar a procesos degenerati-
vos del sistema nervioso central.
En las alucinosis se genera una imagen perceptiva, con todos los atribu-
tos de una auténtica percepción, pero sobre la que el individuo tiene la vi-
vencia de subjetividad, es decir, de ser generada por su mente y, por tanto,
de no tener existencia en el mundo físico. Sin embargo, la frescura senso-
rial de la alucinosis es muy grande y puede hacer plantearse su existencia
real. Generalmente, este tipo de trastorno suele asociarse a lesiones del en-
céfalo y, particularmente, a un daño en los pedúnculos cerebrales (Cutting,
1997).
Finalmente, los dos tipos restantes de trastornos perceptivos, las pseu-
doalucinaciones y las alucinaciones, no serian auténticas percepciones por-
que en ellas no existen un claro estimulo que ponga en marcha el proceso
perceptivo y si lo hay la adecuación entre éste y la imagen perceptiva es nu-
la. Sin embargo, el sujeto experimenta la imagen generada como fruto de
una auténtica percepción y, consecuentemente, está convencido de la reali-
dad de lo que cree percibir La diferencia entre las pseudoalucinacioncs y
las alucinaciones reside en el lugar donde aparece la imagen perceptiva: el
espacio interior o el exterior Cualquiera de los dos trastornos se asocia, ha-
bitualmente, a una psicopatología grave, englobable dentro de los trastornos
psicóticos, y que con frecuencia suele corresponder a esquizofrenia. La fi-
siopatologia de las alucinaciones y pseudoalucinaciones está aún por acla-
rar pero las hipótesis que se manejan son extraordinariamente sugerentes,
desde el punto de vista del estudio de la percepción, hablándose de falsas
atribuciones, representaciones autónomas, falsos reconocimientos o meca-
nismos de liberación que suponen la implicación de diferentes estructuras
cerebrales y el fracaso en algunos circuitos neuronales con la participación
de neurotransmisores específicos tales como la dopamina, la serotonina o el
glutamatc (Cutting; 1997>.
Como fácilmente se puede deducir, las alteraciones perceptivas llevan
consigo dificultades, más o menos graves, en el manejo de la información
contenida en el medio circundante. En este sentido, la detección precoz de
estos problemas contribuirá a evitar o solventar otros mayores. Por otra par-
te, el estudio y la profundización en estas alteraciones permite ir conocien-
do mejor los mecanismos del propio proceso perceptivo.
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1: I5~37
2000, vol. 11, o.
Javier Cabanyes Trufjfino Percepción normal y patológica...
La percepción y el aprendizaje
Bibliografía