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Riesgos Laborales de Carácter Medioambiental

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Riesgos laborales de carácter medioambiental

 Climatización
 Aspecto general del centro de trabajo
 Contaminantes biológicos
 Contaminantes químicos
 Distancia al centro de trabajo
 Iluminación
 Radiaciones
 Ruidos
 Ventilación industrial

Las condiciones ambientales pueden resultar nocivas tanto para la salud física como para la salud
psíquica en función de una serie de perturbaciones, algunas de las cuales son de una gran
agresividad, como son las derivadas de la presencia en el medio ambiente de trabajo de agentes
químicos, físicos o biológicos que pueden entrar en contacto con las personas que trabajan y afectar
negativamente a la salud de las mismas; estas condiciones son las que se conocen como riesgo
higiénico.

Hay condiciones de trabajo cuya presencia puede provocar sensaciones negativas que también han
de ser consideradas y, en la medida de lo posible, corregidas. En este apartado cabe citar, por
ejemplo, el aspecto general que tenga el centro de trabajo, la distancia que exista desde el domicilio
del trabajador hasta el centro de trabajo, el entorno donde esté ubicado el centro de trabajo, los
problemas personales ajenos al trabajo que pueda tener el trabajador, la ubicación geográfica que
tenga la empresa e incluso la valoración social de la empresa. Si estas condiciones son
desfavorables para los trabajadores, los trabajadores pueden sentir malestar que les incite al menos
a intentar cambiar de empresa.

 Aspecto general del centro de trabajo

El aspecto general de un centro de trabajo viene definido por la seguridad estructural que ofrezcan
sus edificios, es decir, ausencia de riesgos de desprendimientos o hundimientos por ser
excesivamente antiguos o estar sobrecargados; no estar afectado por el síndrome del edificio
enfermo; ausencia de riesgos medioambientales tanto con emisión de contaminantes a la atmósfera
como contaminación de aguas o tierras por residuos o emisiones en los desagües; control de los
riesgos físicos que puedan sufrir los trabajadores en sus puestos de trabajo donde estén dotados de
sus equipos de protección individual (EPI); señalización adecuada de los accesos al centro de
trabajo; luminosidad y cuidado del entorno y tener señalizados y organizados planes de evacuación
rápidos y seguros.

 Climatización

Las condiciones de trabajo climáticas son la temperatura y la humedad en las que se desarrolla un
trabajo. El trabajo físico genera calor en el cuerpo. Para regularlo, el organismo humano posee un
sistema que permite mantener una temperatura corporal constante en torno a los 37 °C. La
regulación térmica y sensación de confort térmico depende del calor producido por el cuerpo y de los
intercambios con el medio ambiente. Todo ello está en función de:

o Temperatura del ambiente.


o Humedad del ambiente.
o Actividad física que se desarrolle.
o Clase de vestimenta.

Unas malas condiciones termohigrométricas pueden ocasionar efectos negativos en la salud que
variarán en función de las características de cada persona y su capacidad de aclimatación, así
podemos encontrar resfriados, congelación, deshidratación, golpes de calor y aumento de la fatiga,
lo que puede incidir en la aparición de accidentes.

Las condiciones ambientales de los lugares de trabajo, en concreto la temperatura del aire, la
radiación, la humedad y la velocidad del aire, junto con la "intensidad" o nivel de actividad del trabajo
y la ropa que se lleve, pueden originar situaciones de riesgo para la salud de los trabajadores, que se
conocen como estrés térmico, bien por calor o por frío.

Se puede producir riesgo de estrés térmico por calor en ambientes con temperatura del aire alta
(zonas de clima caluroso, verano), radiación térmica elevada (fundiciones, acerías, fábricas de
ladrillos y de cerámica, plantas de cemento, hornos, panaderías, etc.), altos niveles de humedad
(minas, lavanderías, fábricas de conservas, etc.), en lugares donde se realiza una actividad intensa o
donde es necesario llevar prendas de protección que impiden la evaporación del sudor.

 Contaminantes biológicos

Las condiciones de trabajo pueden resultar negativas si se realizan en presencia de contaminantes


biológicos. Estos contaminantes son aquellos agentes biológicos que cuando se introducen en el
cuerpo humano ocasionan enfermedades de tipo infeccioso o parasitario.

El concepto de agente biológico incluye, pero no está limitado, a bacterias, hongos, virus, protozoos,
rickettsias, clamidias, endoparásitos humanos, productos de recombinación, cultivos celulares
humanos o de animales y los agentes biológicos potencialmente infecciosos que estas células
puedan contener, priones y otros agentes infecciosos.
Las principales vías de penetración en el cuerpo humano son:

 Vía respiratoria: a través de la inhalación. Las sustancias tóxicas que penetran por esta vía
normalmente se encuentran en el ambiente difundidas o en suspensión (gases, vapores o
aerosoles). Es la vía mayoritaria de penetración de sustancias tóxicas.

 Vía dérmica: por contacto con la piel, en muchas ocasiones sin causar erupciones ni
alteraciones notables.

 Vía digestiva: a través de la boca, esófago, estómago y los intestinos, generalmente cuando
existe el hábito de ingerir alimentos, bebidas o fumar en el puesto de trabajo.

 Vía parenteral: por contacto con heridas que no han sido protegidas debidamente.

Cuando la sustancia tóxica pasa a la sangre, ésta la difunde por todo el organismo con una rapidez
que depende de la vía de entrada y de su incorporación a la sangre.

Cuando las condiciones de trabajo puedan ocasionar que se introduzcan en el cuerpo humano, los
contaminantes biológicos pueden provocar en el mismo un daño de forma inmediata o a largo plazo
generando una intoxicación aguda, o una enfermedad profesional al cabo de los años.

Las tres condiciones que deben cumplirse para favorecer la actividad de los contaminantes
biológicos son la presencia de nutrientes, humedad y temperatura.
Criterios preventivos básicos

 Identificación de riesgos y evaluación de riesgos, determinando la índole, el grado y la


duración de la exposición de los trabajadores.

 Sustitución los agentes biológicos peligrosos por otros que no lo sean o lo sean en menor
grado.

 Reducción de riesgos

o Reducir al mínimo posible del número de trabajadores expuestos a un agente biológico


patógeno.
o Establecer procedimientos de trabajo y medidas técnicas adecuadas de protección, de
gestión de residuos, de manipulación y transporte de agentes biológicos en el lugar de
trabajo y de planes de emergencia frente a los accidentes que incluyan agentes
biológicos.
o Adopción de medidas seguras para la recepción, manipulación y transporte de los
agentes biológicos y residuos, incluyendo los recipientes seguros e identificables.
o Adopción de medidas de protección colectiva o, en su defecto, de protección individual,
cuando la exposición no pueda evitarse por otros medios.
o Utilización de medidas de higiene que eviten o dificulten la dispersión del agente
biológico fuera de lugar de trabajo. Existencia de servicios sanitarios apropiados, en los
que se incluyan productos para lavarse los ojos o antisépticos para lavarse la piel.
o Utilización de la señal de peligro biológico y otras señales de aviso pertinentes.
o Utilización de medidas de higiene que eviten o dificulten la dispersión del agente
biológico fuera de lugar de trabajo
o Verificación, cuando sea necesaria y técnicamente posible, de la presencia de los
agentes biológicos utilizados en el trabajo fuera del confinamiento físico primario.

Formación e información a los trabajadores o a sus representantes en relación con: los riesgos
potenciales para la salud, las disposiciones en materia de seguridad e higiene, la utilización de los
equipos de protección, las medidas que se han de adoptar en caso de incidente y para su
prevención.

Establecimiento de un control sanitario previo y continuado.

 Contaminantes químicos

Se denomina contaminante químico al elemento o compuesto químico cuyas características de


estado le permiten entrar en el organismo humano, pudiendo originar un efecto adverso para su
salud

Las vías principales de penetración en el cuerpo humano son: inhalatoria, absorción cutánea y por
ingestión.

Cuando las condiciones de trabajo puedan ocasionar que se introduzcan en el cuerpo humano
contaminantes químicos pueden provocar al trabajador un daño de forma inmediata o a largo plazo
generando una intoxicación aguda, o una enfermedad profesional al cabo de los años.
En términos amplios, se entiende por acción tóxica o toxicidad a la capacidad relativa de un
compuesto para ocasionar daños mediante efectos biológicos adversos, una vez ha alcanzado un
punto susceptible del cuerpo. Esta posible acción tóxica significa que la exposición a los
contaminantes comporta un riesgo, el cual se puede definir como la probabilidad de que produzcan
los efectos adversos señalados, bajo las circunstancias concretas de la exposición.

La toxicidad es pues uno de los factores que determinan el riesgo, pero éste responde además a
otros varios factores, como la intensidad y la duración de la exposición, la volatilidad del compuesto y
el tamaño de las partículas. El concepto de toxicidad se refiere a los efectos biológicos adversos que
pueden aparecer tras la interacción de la sustancia con el cuerpo, mientras que el concepto del
riesgo incluye además la probabilidad de que se produzca una interacción efectiva.
NTP 108: Criterios toxicológicos generales para los contaminantes químicos

El trabajar en lugares de riesgo de contaminación química hace necesario realizar un control


preventivo muy riguroso de los trabajadores expuestos a tales riesgos, para poder determinar la
magnitud y el tiempo reales de su exposición y vigilar su estado de salud mediante técnicas
diagnósticas capaces de revelar cualquier alteración en la salud lo antes posible.

El control biológico de un determinado contaminante en una población dada, se conoce a través de


la cadena de correlaciones

EXPOSICIÓN → DOSIS → EFECTO

La determinación de estas correlaciones es básica para poder seleccionar unos indicadores válidos
tanto de dosis como de los efectos que producen.

Criterios de prevención básicos

La prevención de posibles riesgos originados por la exposición a contaminantes químicos se basa en


la actuación sobre el foco de contaminación, sobre el medio y sobre el receptor (individuo expuesto).

Como medidas generales de actuación, prioritariamente debe tratarse de eliminar los riesgos para la
salud y la seguridad en las actividades con agentes químicos peligrosos, ya sea por sustitución del
agente químico o del proceso químico.
Medidas de ventilación u otras medidas de protección colectiva, aplicadas preferentemente en el
origen del riesgo, y medidas adecuadas de organización del trabajo.

Adopción de medidas higiénicas adecuadas, tanto personales como de orden y limpieza.

 Reducción al mínimo de las cantidades de agentes químicos peligrosos presentes en el lugar


de trabajo.
 Reducción al mínimo del número de trabajadores expuestos o que puedan estarlo.
 Reducción al mínimo de la duración e intensidad de las exposiciones.
 Uso de equipos de protección individual (EPI) adecuados cuando las medidas anteriores sean
insuficientes y la exposición o contacto con el agente no pueda evitarse por otros medios.

 Iluminación

La fatiga visual se ocasiona si los lugares de trabajo y las vías de circulación no disponen de
suficiente iluminación, ya sea natural o artificial, adecuada y suficiente durante la noche y cuando no
sea suficiente la luz natural.
Las instalaciones de iluminación de los locales, de los puestos de trabajo y de las vías de circulación
deberían estar colocadas de tal manera que el tipo de iluminación previsto no suponga riesgo de
accidente para los trabajadores.

Los locales, los lugares de trabajo y las vías de circulación en los que los trabajadores estén
particularmente expuestos a riesgos en caso de avería de la iluminación artificial deben poseer una
iluminación de seguridad de intensidad suficiente.

La iluminación deficiente ocasiona fatiga visual en los ojos, perjudica el sistema nervioso, ayuda a la
deficiente calidad de trabajo y es responsable de una buena parte de los accidentes de trabajo. Un
sistema de iluminación debe cumplir los siguientes requisitos:

 La iluminación tiene que ser suficiente y la necesaria para cada tipo de trabajo.
 La iluminación tiene que ser constante y uniformemente distribuida para evitar la fatiga de los
ojos, que deben acomodarse a la intensidad variable de la luz. Deben evitarse contrastes
violentos de luz y sombra, y las oposiciones de claro y oscuro.
 Los focos luminosos tienen que estar colocados de manera que no deslumbren ni produzcan
fatiga a la vista debido a las constantes acomodaciones.

 Ondas electromagnéticas

Las radiaciones son ondas electromagnéticas de energía o partículas cargadas que, al incidir sobre
el organismo humano, pueden llegar a producir efectos dañinos para la salud de los trabajadores.

Los efectos para la salud dependen de la dosis absorbida por el organismo pudiendo afectar a
distintos tejidos y órganos (médula ósea, órganos genitales…) provocando desde náuseas, vómitos
o cefaleas hasta alteraciones cutáneas y cáncer.
Para protegerse de las radiaciones se utilizan diversos medios, siendo los más eficaces: reducir al
máximo la exposición a la radiación, añadir blindajes interpuestos entre las radiaciones y el
trabajador y aumentar la distancia al foco de la radiación, ya que la intensidad de la radiación
decrece con el cuadrado de la distancia.

 Radiaciones ionizantes

La radiación ionizante consiste en partículas, incluidos los fotones, que causan la separación de
electrones de átomos y moléculas. Pero algunos tipos de radiación de energía relativamente baja,
como la luz ultravioleta, sólo puede originar ionización en determinadas circunstancias. Para
distinguir estos tipos de radiación de la radiación que siempre causa ionización, se establece un
límite energético inferior arbitrario para la radiación ionizante, que se suele situar en torno a 10
kiloelectronvoltios (keV).

. La radiación ionizante directa consta de partículas cargadas, que son los electrones energéticos
(llamados a veces negatrones), los positrones, los protones, las partículas alfa, los mesones
cargados, los muones y los iones pesados (átomos ionizados). Este tipo de radiación ionizante
interactúa con la materia sobre todo mediante la fuerza de Coulomb, que les hace repeler o atraer
electrones de átomos y moléculas en función de sus cargas.

Radiaciones no ionizantes
Se entiende por radiación no ionizante aquella onda o partícula que no es capaz de arrancar
electrones de la materia que ilumina produciendo, como mucho, excitaciones electrónicas.
Ciñéndose a la radiación electromagnética, la capacidad de arrancar electrones (ionizar átomos o
moléculas) vendrá dada, en el caso lineal, por la frecuencia de la radiación, que determina la energía
por fotón, y en el caso no-lineal también por la "fluencia" (energía por unidad de superficie) de dicha
radiación; en este caso se habla de ionización no lineal.

El término radiación no ionizante hace referencia a la interacción de ésta con la materia; al tratarse
de frecuencias consideradas 'bajas' y por lo tanto también energías bajas por fotón, en general, su
efecto es potencialmente menos peligroso que las radiaciones ionizantes.

Las principales radiaciones no ionizantes son:

o Rayos infrarrojos
o Rayos ultravioletas
o Microondas
o Luz láser

La frecuencia de la radiación no ionizante determinará en gran medida el efecto sobre la materia o


tejido irradiado; por ejemplo, las microondas portan frecuencias próximas a los estados vibracionales
de las moléculas del agua, grasa o azúcar, al 'acoplarse' con las microondas se calientan. La región
infrarroja también excita modos vibracionales; esta parte del espectro corresponde a la llamada
radiación térmica. Por último la región visible del espectro por su frecuencia es capaz de excitar
electrones, sin llegar a arrancarlos.

Riesgos y protección. La exposición a flujo de neutrones, provenientes de fuentes selladas de


elementos radiactivos, conjuntamente con emisores de neutrones como cadmio y berilio, requiere de
medidas radiológicas de extrema importancia.

La radiación óptica (no ionizante) puede producir hasta cinco efectos sobre el ojo humano:
quemaduras de retina, fotorretinitis o Blue-Light Hazard, fotoqueratitis, fotoconjuntivitis e inducir la
aparición de cataratas. También produce efectos negativos sobre la piel.

 Ruidos

Los trabajadores sometidos a altos niveles de ruido en su puesto de trabajo, aparte de sufrir pérdidas
de su capacidad auditiva pueden llegar a la sordera, acusan una fatiga nerviosa que es origen de
una disminución de la eficiencia humana tanto en el trabajo intelectual como en el manual.

Se puede definir al ruido como un sonido no deseado e intempestivo y por lo tanto molesto,
desagradable y perturbador. El nivel de ruido se mide en decibelios (dB). Hay un nivel de ruido a
partir del cual se considera peligrosa y se hace necesario protegerse del mismo con los elementos
de seguridad adecuados.

Disposiciones relativas a la exposición al ruido

Los riesgos derivados de la exposición al ruido deberán eliminarse en su origen o reducirse al nivel
más bajo posible, teniendo en cuenta los avances técnicos y la disponibilidad de medidas de control
del riesgo en su origen.
 Utilizar elementos de protección de ruido adecuados que amortigüen la mayor cantidad de
ruido posible.
 Limitar la exposición al ruido.
 Adecuar la concepción y disposición de los lugares y puestos de trabajo.
 Ofrecer información y formación adecuadas para enseñar a los trabajadores a utilizar
correctamente el equipo de trabajo con vistas a reducir al mínimo su exposición al ruido.

Para la reducción técnica del ruido deberá procederse a:


 Reducir el ruido aéreo, por ejemplo, por medio de pantallas, cerramientos, recubrimientos con
material acústicamente absorbente.
 Reducir el ruido transmitido por cuerpos sólidos, por ejemplo mediante amortiguamiento o
aislamiento.
 Establecer programas apropiados de mantenimiento de los equipos de trabajo, del lugar de
trabajo y de los puestos de trabajo.
 Reducir del ruido mediante una nueva organización del trabajo.

Normativa básica:
 Directiva 2003/10/CE del Parlamento Europeo y del Consejo, de 6 de febrero de 2003, sobre
las disposiciones mínimas de seguridad y de salud relativas a la exposición de los
trabajadores a los riesgos derivados de los agentes físicos (ruido).
 REAL DECRETO 286/2006, de 10 de marzo, sobre la protección de la salud y la seguridad de
los trabajadores contra los riesgos relacionados con la exposición al ruido.

Ventilación industrial

La ventilación industrial se refiere al conjunto de tecnologías que se utilizan para neutralizar y


eliminar la presencia de calor, polvo, humo, gases, condensaciones, olores, etc. en los lugares de
trabajo, que puedan resultar nocivos para la salud de los trabajadores. Muchas de estas partículas
disueltas en la atmósfera no pueden ser evacuadas al exterior porque pueden dañar el medio
ambiente.

En esos casos surge la necesidad, de reciclar estas partículas para disminuir las emisiones nocivas
al exterior, o en su caso, proceder a su recuperación para reincorporarlas al proceso productivo. Ello
se consigue mediante un equipo adecuado de captación y filtración. Según sean las partículas, sus
componentes y las cantidades generadas exigen soluciones técnicas específicas.

Para evitar que los vapores y humos se disipen por todo el recinto de las naves industriales se
realiza la instalación de campanas adaptadas al mismo foco de producción de residuos para su total
captación. El caudal procedente de la zona de captación se conduce hacia el filtro correspondiente
según el producto e instalación, donde se separan las partículas del aire limpio.

Los sistemas de ventilación industrial pueden ser:

 Ventilación estática o natural: mediante la colocación de extractores estáticos situados en las


cubiertas de las plantas industriales aprovechan el aire exterior para ventilar el interior de las
naves industriales y funcionan por el efecto Venturi (Principio de Bernoulli)
 Ventilación dinámica o forzada: se produce mediante ventiladores extractores colocados en
lugares estratégicos de las cubiertas de las plantas industriales.

Cuando la concentración de un agente nocivo en el ambiente del puesto de trabajo supere el valor
límite ambiental los trabajadores tienen que utilizar los equipos de protección individual adecuados
para proteger las vías respiratorias.

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