TE OFREZCO MI CORAZÓN

Letra y Música: Carlos Alfredo Peñaloza. ©2007

Mírame, Señor, de nuevo aquí ante Ti; dispuesto a entregar mi corazón

para que con tu luz, te busque tan solo a Ti.
He allí a Francisco, tu hijo el menor, quién lo dejó todo por seguir tu amor;
permíteme encontrarte como lo hizo él.
Y ante Ti, mi Señor, he venido a traer mi ofrenda hoy;
este pan y este vino que serán tu cuerpo y tu sangre
y que serán también nuestra salvación.
Ayúdame a buscarte y servirte mejor; como Francisco, tu hijo el menor.
Hoy he venido a ofrendar este pan y este vino,
—pero además te ofrezco mi corazón. (2)
ALABADO SEAS MI SEÑOR
Letra y Música: Cesáreo Gabaráin ©1981

A E A D A
Alabado seas mi Señor, Alabado seas mi Señor;
D E C#m
el sol y las estrellas proclaman tu grandeza,
F#m7 Bm7 E A
─las flores y la luna nos cantan tu poder. (2)
E A D E
Alabado seas mi Señor, Alabado seas mi Señor.
A
Cantando el universo te ofrece su hermosura,
F#m7 Bm7 E A
─pues toda criatura es cántico de amor. (2)

2.- Alabado seas mi Señor, Alabado seas mi Señor.

Los pájaros y el bosque, los árboles y el viento,
─los ríos y los mares nos cantan tu poder. (2)
3.- Alabado seas mi Señor, Alabado seas mi Señor.
Por todos los hermanos que acogen y perdonan,
─por todos los que rezan en su tribulación. (2)
LA DICHA PERFECTA

C Am
León, mi buen fraile, de Dios el buen cordero,
F
recuerda que aunque un santo logre
G
hacer que vean los ciegos,
C Am
hacer que los sordos oigan, sanar a los leprosos
F G
o bien realice otros milagros prodigiosos.
C Am F G C
Tú escribe_ que esa no es la Dicha Perfecta.
Am F G
La Dicha Perfecta. La Dicha Perfecta a a aa.

2.- León, mi buen fraile, de Dios el buen cordero,

recuerda que aunque un santo logre
poder andar sobre las aguas,
y pueda amansar los lobos,
hablar con peces y animales,
curar a los enfermos y erradicar los males.
Tú escribe que esa no es la Dicha Perfecta.

C Am C Am
3.- _Si en medio _del invierno, _bajo una cruel tormenta.
Al caminar por los caminos se ve a lo lejos una casa.
Con fe tocaras a esa puerta,
hambriento, harto y muy cansado.
Si el dueño a golpes te corriera
a padecer de frío y de viento,
en solitaria compañía de hermana sed y hermana hambre.
Si aún amaras a esa gente, hambriento, harto y apaleado.
Si aún amaras a esa gente por ser la ley que Dios te ha dado.
Tú escribe que esa sí es la Dicha Perfecta. (3)
PADRE BUENO, DIOS HERMANO
Letra y Música: Cesáreo Gabaráin ©1981

A A7 D E A
Tú, Señor que enciendes las estrellas, Tú, que al sol le das su resplandor,
D E C#m F#m D B7 E
Tú, que cuidas del pájaro perdido que va buscando un nido guiado por tu amor.
A A7 D E A
Tú, que siembras rosas y trigales, tú que al lirio vistes de esplendor,
D E A F#m Bm D E A
nos proteges, Señor, con más cariño pues quieres más a un niño que al pájaro y la flor.

Padre bueno, Dios alegre, primavera y manantial.

Dios hermano, Dios amigo, Padre nuestro celestial.

Tú, Señor, que velas por el pobre, y al humilde das tu protección,

al que amas le ofreces un tesoro que vale más que el oro: le das tu corazón.
Tú, Señor, que alumbras mi camino, tú que escuchas siempre mi oración,
en tu amor pongo yo mi confianza, renace mi esperanza se acuna mi canción.

QUIERO LLAMAR HERMANO A TODOS

Letra y Música: Cesáreo Gabaráin ©1981

Soy heraldo del rey, de un Señor inmortal y conmigo canta el amor, soy hermano del
agua, del viento y el sol, mi bandera es la libertad. Mi tesoro es la pobreza, Mi alegría
que florece, el amor que Dios me ofrece y tu amor, soy heraldo del rey de un Señor
inmortal mi bandera es la libertad. Son hermanos los hombres, el lobo y el mar, las
montañas y el ruiseñor. Es mi hermana la muerte, la oveja y la flor. Todos somos
fraternidad. Mi tesoro es la pobreza, Mi alegría que florece, el amor que Dios me
ofrece y tu amor, son hermanos los hombres, el lobo y el mar, todos somos fraternidad.
HERMANO LOBO
Letra y Música: Cesáreo Gabaráin ©1981

¿Por qué te volviste lobo? Tal vez no te amé bastante. ¿Por qué te volviste lobo? Tal vez
no te supe amar.
¿Por qué con rencor me acechas y quieres morder mi mano? Tal vez yo no fui tu
hermano y nunca te abrí mi hogar.
- ¿Por qué tú nos odias tanto? Tal vez yo te odié primero. ¿Por qué nos acosas fiero? Tal
vez te enseñé a acosar.
- ¿Por qué vives en tinieblas? Tal vez te negué mi lumbre, y toda tu pesadumbre nació
de mi crueldad.
- Hoy vengo a llamarte hermano y darte la paz y el bien. Hoy vengo a llamarte hermano
y juntos volver a amar. Los hombres a veces somos más fieros que el lobo fiero.
Hoy darte mi mano quiero y abrirte por fin mi hogar.

30.- Cántico al hermano Sol

A tu paso alegras el cielo y nos traes luz y calor.

Por tu sol de alegre vuelo, loado mi Señor.
Te deslizas por las praderas y en los campos pintas verdor, por tus luces placenteras;
loado mi Señor.
Hermano sol, tú nos traes alegría,
y del Señor el amor,
por tu bello día, loado mi Señor.
- No distingues malos y buenos, para todos es tu calor. Quieres tú que nos amemos,
loado mi Señor.
Con tu mano todos los días, pobre y rico cubren dolor, aprendemos tu alegría, loado mi
Señor.
- Tú maduras frutos y mieses y a las flores das el color. Por el paso de los meses, loado
mi Señor.
En los campos haces fecundos
los sudores del labrador que dan pan a todo el mundo, loado mi Señor.
- Recorriendo la hermana tierra, a los hombres sin amor, por los que no quieren guerra,
loado mi Señor. Por aquellos que son pacientes, y perdonan sin rencor, por la fe de los
valientes; loado mi Señor.

33.- Dos buscadores del absoluto

Letra y Música: Cesáreo Gabaráin ©1981
- Como el arroyo busca la mar, busco yo en mi inquietud. Todo mi ser ansía volar,
busco tu plenitud. (Bis)
Suenan dos voces como un cantar en mi corazón: “Mira hacia el cielo Dios es tu
hogar”, Clara y Francisco son.
- Buscan los hombres en su dolor fuentes de juventud. Yo solo tengo sed de tu amor,
busco tu plenitud. (Bis)
- Tu lo eres todo tu eres el bien, eres el sumo Bien. Eres paciencia, eres quietud, eres mi
plenitud. (Bis)

81.- Cántico de las criaturas

Bendito seas mi Señor, por todas tus criaturas, especialmente por el hermano Sol, que se
parece a ti. Bendito seas mi Señor, por la luna y las estrellas, las has formado preciosas y
bellas, claras en la oscuridad.
Omnipotente altísimo, mi buen Señor; tuyos son la gloria y el honor y toda
bendición. (bis)
- Bendito seas mi Señor, por el tiempo nublado y sereno y por el viento que nos despeja
golpeando en nuestra cara. Bendito seas mi Señor, por la limpia hermana agua, ella es
útil humilde y casta se cuela por nuestro interior.
- Bendito seas mi Señor, por nuestro hermano fuego, él es alegre, robusto y bello, nos da
luz y calor. Bendito seas mi Señor, por la hermana Madre tierra; produce frutos, flores y
hierba, nos sostiene y nos lleva.
- Bendito seas mi Señor, por nuestra hermana muerte, de la que nadie puede escapar,
alabad y bendecid. Bendito seas mi Señor, por la hermana amistad, la cual es muy
necesaria para el corazón del hombre.

94.- Instrumento de tu paz

Letra y Música: Cesáreo Gabaráin ©1981

- Hazme un instrumento de tu paz, donde haya odio lleve yo tu amor, donde haya
injuria tu perdón, Señor, donde haya duda fe en ti.
Maestro ayúdame a nunca buscar querer ser consolado como consolar, ser
comprendido como comprender, ser amado como yo amar.
- Hazme un instrumento de tu paz, que lleve tu esperanza por doquier, donde haya
oscuridad lleve tu luz, donde haya pena tu gozo Señor.
- Hazme un instrumento de tu paz, es perdonando que nos das perdón, es dando a
todos que Tú te nos das, muriendo es que volvemos a nacer.
137.- La Iglesia se está cayendo
Letra: Cesáreo Gabaráin Adap. mus.: Carlos A. Peñaloza©2005

La Iglesia se está cayendo, ya ves. Sus muros rotos están. Así le habló a Francisco el
Señor en la ermita de San Damián.
Yo puedo cerrar tus grietas, Señor, mis manos te ayudarán. Verás que limpia y hermosa
estará nuestra ermita de San Damián.
Iglesia humana y divina a la vez, que en luz y sombras ya la ves. Viviendo el
evangelio, más pobre y libre ha de ser.
- La Iglesia que nos preocupa no es de piedra ni es material. La Iglesia somos los
hombres y Dios, no la ermita de San Damián
- Queriendo ser hoy mejores que ayer la vamos a reparar, cumpliendo lo que el Señor
nos pidió en la ermita de San Damián.

159.- Con la tristeza en la mirada

Letra: Rodmary Figallo Música: Carlos Peñaloza ©2007

Con la tristeza en la mirada y con el alma llena de dolor, me presento ante ti, Señor,
altísimo, para llenar mi vida de amor.
Con los ojos de la carne no te veo, Tu inmensa gloria no puedo contemplar. Ven
ilumíname con tus ojos, con tu cielo. Ven y dame esa luz que sólo Tú me puedes dar.
Y con los ojos del Espíritu ver, como Francisco te veía al caminar. Y con los ojos
del Espíritu sentir que estoy cumpliendo, Cristo, tu voluntad.

179.- Loado seas mi Señor

Omnipotente, altísimo, bondadoso, Señor,

Tuya es la alabanza, la gloria y el honor.
Tan solo Tú eres digno de toda bendición,
Nunca es digno el hombre de hacer de ti mención.
Loado seas mi Señor, por toda criatura, por el hermano sol. Loado seas mi Señor,
por la hermana tierra, las flores de color.
- Y por la hermana luna de blanca luz menor
Y las estrellas claras que Tu poder creó,
Tan limpias tan hermosas, tan vivas como son
Y brillan en los cielos, Loado mi Señor.
- Y por la hermana agua, preciosa en su candor,
que es útil, casta, humilde, loado mi Señor
Por el hermano fuego que alumbra al irse el sol
y es fuerte, hermoso, alegre loado mi Señor.
- Y por la hermana tierra que es toda bendición
la hermana, madre tierra, que da en toda ocasión las hierbas y los fruto y flores de color,
y nos sustenta y rige, loado mi Señor.
- Y por los que perdonan y aguantan por tu amor los males corporales y la tribulación
¡Felices los que sufren en paz con el dolor
porque les llega el tiempo de la consolación!
- Y por la hermana muerte, loado mi Señor.
Ningún viviente escapa de su persecución
¡Ay, si en pecado grave sorprende al pecador!
¡Dichosos los que cumplen la voluntad de Dios.
No probarán la muerte de la condenación
¡Servidle con ternura y humilde corazón!
¡Agradeced sus dones, cantad su creación!
Todas las criaturas load a mi Señor.

208.- Amarte como Francisco de Asís

Como Francisco de Asís amarte quiero, amando como él todas las cosas; tan
llenas de Tu Amor y tan hermosas, para seguir amándote en el cielo.
- Gracias, Señor, por el sol que nos alumbra; gracias, Señor, por las noches estrelladas,
por la luna que brilla en la penumbra, por los ríos y cascadas.
Gracias, Señor por los pájaros que cantan alabándote a Ti todos los días; gracias, Señor,
por las frutas y las plantas, por las lluvias y los vientos.
- Gracias, Señor, por el pan que Tú nos diste, convertido en el Dios Eucaristía. Gracias,
Señor, por el mar embravecido que mandaste a calmar en la tormenta; gracias, Señor,
por los peces que allí viven para dármelos a mí por alimento; gracias, Señor, por el mar
que se agiganta, por las olas que levanta.

216.- La fraternidad
Francisco, mira nuestro mundo, ¿por qué falta paz, por qué la injusticia, —por qué el
desamor? (2)
Amigo, Dios todo ha creado; Él nos hizo hermanos y nos dio a su Hijo. —Practicó el
amor. (2)
Nada te apropies porque nada es tuyo; ésta es la base de toda justicia, de toda
paz —y de la fraternidad. (2)
- Hermano, asume el proyecto del Dios de los cielos que nos dio al maestro, —nos
quiere hombres nuevos. (2)
Justicia, implantar el Reino, así habrá paz; predica sin miedo, —construye hermandad.
(2)
- Cristiano, sigue a Jesucristo el crucificado; Él es el camino —a un mundo mejor. (2)
Dios Padre y todos hermanos; así habrá vida, tarea y regalo —de nuestro Señor. (2)

225.- Hazme, Señor, instrumento de tu paz

Hazme, tú, Señor, instrumento de tu paz. (2)

De esa paz, Señor, que tú sólo puede dar. (2)
Quiero dar amor, quiero dar fraternidad. (2)
- No quiero buscar ser amado, sino amar. (2)
Quiero iluminar, sonreír y consolar. (2)
Quiero confiar, comprender y perdonar. (2)

1.- Oración de San Francisco

Quiero sentir en mi corazón, silencio santo eco de mi amor. Como Francisco quiero yo
cantar las alabanzas al Dios de bondad.
Que mi alma cante como el serafín: “Tu eres mi Dios por ti quiero vivir”
- En el silencio del bosque dormido, su alma se eleva alabando a Dios. Quiero cantar la
gracia divina, el don amigo que el Señor le dio.
- Al contemplar todas las bellezas piensas en Dios y lo ves en ellas. Miras la luna y al
hermano Sol, todo te dice: “alabad a Dios”

2.- Libres como Francisco

Libres como Francisco, ir por el mundo cantando amor; pobres como Francisco,
ser los menores de corazón.
- El sol que todo sabe alumbrar es nuestro guía al pasar. Paz y amistad por el mundo
dar, siempre a todos por igual.
- Ver una flor que sabe adornar, ser un adorno de Dios; ver a las aves, oír su cantar, ser
instrumento de paz.
- Canto la gloria del Creador, canto mi alegre ilusión. Canto al hermano, canto al Señor,
canto la gloria de Dios.

3.- El loco de Asís

Letra y Música: Jean Carlos ©19??

En un pueblo llamado Asís, hubo un hombre que sintió la plena libertad; viviendo el
evangelio en fraternidad como Cristo amo a los demás. Con su vida quiso demostrar que
el dinero y las riquezas no dan felicidad; lo importante es el amor que nos da la libertad,
San Francisco te queremos imitar.
Le llamaban el loco de Asís que ha dejado todo sin mirar atrás, viviendo como pobre,
gritando libertad, con su vida predicaba la verdad.
A los pobres miraba con amor, a un leproso lo besó en señal de compasión, lo que le era
tan amargo en dulzura se tornó, su gran obra comenzó con ilusión. Sus amigos le
quisieron seguir, cuando Cristo les llamó sus corazones despertó, dejaron sus riquezas,
nada les importó, como pobres honraron al Señor.

4.- Francisco, evangelio viviente

Letra y Música: Cesáreo Gabaráin. ©1981

Fui trovador, me llamaban Francisco. Cantaba alegre en las noches de Asís, mas ya no
quiero cantar a Rolando ni las proezas del gran Amadís. Fui descubriendo un camino
distinto, sentí en mi alma un vacío total. No quiero amores que pasan y mueren, hoy
solo canto a mi Rey Inmortal.
Yo quiero ser evangelio viviente, abandonarme en tus brazos, Señor. Ser como un niño
que juega o se duerme mientras su Padre lo envuelve en amor. (Bis)
Vestía trajes lujosos de seda, lucía al cinto un precioso puñal. Hoy mis señores son esos
leprosos, y mi vestido este pobre sayal. Cambié tesoros por dama Pobreza, placer y
honores por la santidad; y soy feliz como nunca lo he sido. ¡Dios es mi gozo, mi
felicidad!

6.- Las huellas del crucificado

Letra y Música: Cesáreo Gabaráin. ©1981

Rosas de sangre han florecido, reviven en tu cuerpo la pasión. Francisco de amor estás
herido; las manos, los pies y el corazón.
- Tus manos que acogen a los pobres y parten su pan con el mendigo, yo quiero también
amar a todos; ¡Ya puedes Señor contar conmigo!
- Sembrando la paz y el bien caminas, y yo, sembrador iré a tu lado. En ti el Evangelio es
carne viva, y Cristo otra vez crucificado.

12.- Como Francisco de Asís

Andando entre la gente del pueblo, proclamando hermandad. Los pies descalzos y
manos vacías; su vocación la humildad.
Iba Francisco de Asís, siempre dispuesto a servir. El cielo y la tierra lo cobijaba y su
morada era Dios. Y con las aves del campo cantaba unidos en una sola voz: Hagamos de
nuestras vidas la voluntad del Señor.
Yo quiero ser Jesús, como Francisco de Asís. De un corazón pleno, lleno de
humildad para poder ser un instrumento de paz, un testimonio de amor. Hasta
lograr compartir la comunión junto a ti, como Francisco de Asís.
Y ahora que voy caminando sin rumbo escucho a mi alrededor que ya no existe la fe en
este mundo, que dónde puede estar Dios.
Y escucho hablar a Francisco que grita a mi corazón. Tomar mi cruz y seguirte sin miedo
y continuar su misión. Y proclamar que Tú vives, que Tú eres la Salvación.
Yo quiero ser Jesús, como Francisco de Asís. De un corazón pleno, lleno de
humildad para poder ser un instrumento de paz, un testimonio de amor. Hasta
lograr compartir la comunión junto a ti, como Francisco de Asís.
Un instrumento de paz, un testimonio de amor. Hasta lograrte sentir, todo tu
amor recibir, la comunión compartir como Francisco de Asís, como Francisco de
Asís.
Yo quiero ser como él.

14.- Francisco, ayúdanos

El varón que tiene el corazón de lis, el mínimo y pobre Francisco de Asís, que siguió las
huellas de Cristo el Señor, como nadie al Maestro se asemejó. (Bis)
Padre Francisco, ayúdanos a seguir a Jesús; padre Francisco, queremos amarlo
como tú. Padre Francisco, alcánzanos ese mismo amor.