Nothing Special   »   [go: up one dir, main page]

2018 PERU Conductas Anemia Prevalencia Niños Menor 5 Años PDF

Descargar como pdf o txt
Descargar como pdf o txt
Está en la página 1de 46

UNIVERSIDAD SAN PEDRO

VICERRECTORADO DE INVESTIGACIÓN
DIRECCIÓN GENERAL DE INVESTIGACIÓN

FACULTAD DE MEDICINA

CONDUCTAS ALIMENTARIAS DE LA MADRE


RELACIONADAS CON PREVALENCIA DE ANEMIA
EN MENORES DE 5 AÑOS.

Elmer Delfín Quezada Reyes

María del Pilar Pérez Ramírez

Karina Huamán Mujica

Ana Ivonne Serrano Goicochea

Luis Enrique Raza Vásquez

Chimbote-Perú

2018
Palabras clave: en español e inglés

Tema Anemia
Especialidad Pediatría

Línea de investigación

Según Línea de investigación de Facultad de Medicina: Enfermedades prevalentes en


la infancia y adolescencia.

i
Título de investigación

CONDUCTAS ALIMENTARIAS DE LA
MADRE RELACIONADAS CON
PREVALENCIA DE ANEMIA EN MENORES
DE 5 AÑOS.

ii
Resumen

En el Perú, la Anemia es un problema severo en salud pública; por lo


que el presente estudio de tipo descriptivo y analítico de corte transversal,
tiene el objetivo de determinar la relación de las conductas alimentarias de la
madre y la prevalencia de anemia en menores de 5 años, se tomaron datos de
294 niños, seleccionándose solo a 156 niños menores de 5 años con
diagnóstico de Anemia Ferropénica confirmada por análisis de Hemoglobina,
con previo consentimiento informado de los padres. Se aplicó el cuestionario
de “Conductas alimentarias de la madre del niño menor de 5 años”.

Resultando que la prevalencia de Anemia Ferropénica en niños


menores de 5 años fue de 46,9%. La edad promedio de los niños fue 21 meses.
Los niños presentaron Anemia más que las niñas, con 65,4% y 34,6%
respectivamente. Las madres de los niños tuvieron una edad promedio de 30
años y su ocupación fue ama de casa con el 84,6%.

Las conductas alimentarias fueron regulares en un 65,4%,


inadecuadas y adecuadas, con un 28,2% y 6,4% respectivamente.
Conclusiones: Se pudo comprobar que existe una correlación alta, directa y
positiva con una r de Pearson de 0,827 y un valor de p = 0,000. Lo que indica
gráficamente que, a medida que la madre tenga mejores conductas
alimentarias, también los niveles de hemoglobina serán mayores y por el
contrario la prevalencia de anemia será menor. Se recomienda concientizar a
los padres de familia sobre temas de salud y realizar investigaciones
experimentales sobre tratamientos médicos o planes nutricionales.

iii
Abstract

In Perú, Anemia is a severe problem in public health; so the present


descriptive and analytical cross-sectional study has the objective of
determining the relationship of the mother's eating behaviors and the
prevalence of anemia in children under 5 years of age, data were taken from
294 children, selecting only 156 children under 5 years of age with a diagnosis
of Ferropnemic Anemia confirmed by Hemoglobin analysis, with the
previous informed consent of the parents. The questionnaire "Eating
behaviors of the mother of the child under 5 years of age" was applied.
As a result, the prevalence of iron deficiency anemia in children under
5 years of age was 46.9%. The average age of the children was 21 months.
Children presented Anemia more than girls, with 65.4% and 34.6%
respectively. The mothers of the children had an average age of 30 years and
their occupation was a housewife with 84.6%.
The alimentary conducts were regular in 65.4%, inadequate and
adequate, with 28.2% and 6.4% respectively. Conclusions: It was found that
there is a high, direct and positive correlation with a Pearson's r of 0.827 and
a value of p = 0.000. Which indicates graphically that, as the mother has better
eating behaviors, hemoglobin levels will also be higher and, on the contrary,
the prevalence of anemia will be lower. It is recommended to educate parents
about health issues and conduct experimental research on medical treatments
or nutritional plans.

iv
INDICE

Tema Pág.
Palabras clave: en español e inglés - Línea de investigación i
Título de investigación ii
Resumen iii
Abstract iv
Índice v
Introducción 1
Metodología 19
Resultados 23
Analisis y discusión
Conclusiones 27
Recomendaciones 27
Referencias Bibliográficas 28
Agradecimientos 29
Anexos y Apéndice 30
I. INTRODUCCIÓN

Uno de los problemas de salud más importantes a nivel mundial es la


anemia. De acuerdo a la Organización Mundial de la Salud (OMS), en el año 2005
la anemia afectó a 1620 millones de personas en el mundo, lo que equivale al
24,8% de la población mundial, y sigue en aumento; siendo el grupo más afectado
los niños en edad pre-escolar con el 47,4%. En el Perú, la situación de anemia es
un problema severo en salud pública que afecta al 43,5%, siendo Puno una de las
ciudades con mayor porcentaje de anemia 76%, y en Ancash el 50,8%. La
proporción de niños de 6 meses a menos de 36 meses que presentaron anemia fue
en zonas urbanas es 43,5% y en zonas rurales 52,3%. Estos niveles de prevalencia
hacen del Perú el país más afectado (solo igual que Guyana) y lo sitúan en una
situación comparable a la de la mayoría de países del África (Alcázar, 2013);
(MINSA, 2015).

La causa principal de la anemia en niños menores de 5 años es la


deficiencia de hierro, aunque generalmente esta coexiste con otras causas como la
malaria, infecciones parasitarias o desnutrición. La anemia es dañina para la salud
individual en la medida en que expone a quienes la padecen a secuelas que durarán
el resto de sus vidas (Alcázar, 2013)

En el estudio de (Verga, Widmeier-Pasche, Beck-Popovic, Pauchard, &


Gehri, 2014), se midieron la hemoglobina, ferritina, datos antropométricos,
familiar y estado nutricional de los niños inmigrantes y los no inmigrantes. El
global de la prevalencia de la deficiencia de hierro fue de 50.7% a los 12 meses.
Concluyeron que la prevalencia de la deficiencia de hierro en la población de
inmigrantes es mayor que en los no inmigrantes. La inmigración y la categoría de
empleo son factores de riesgo para la deficiencia de hierro, así como los cereales
para bebés a partir de los 9 meses es un factor protector.

Después, (Freitas et al., 2016) en su estudio concluyó que: Treinta y ocho


(65.5%) de los bebés prematuros presentan alta adherencia a las guías de

1
administración de suplementos de micronutrientes. A los seis meses de edad
corregida, el niño prematuro tenía deficiencia de vitamina A. La prevalencia de la
anemia, deficiencia de hierro y la deficiencia de zinc fueron mayores en el grupo
de baja adherencia, sino también en relación en el grupo de alta adherencia. Los
bebés prematuros con bajo cumplimiento de las guías de administración de
suplementos de micronutrientes eran 2.5 veces más probables de
desarrollar anemia y 3,1 veces más probables de desarrollar deficiencia de zinc.
El bajo nivel de educación materna aumenta la probabilidad de no adherencia a
los tres suplementos en 2,2 veces.

Según los estudios encontrados la alimentación es importante para evitar


la Anemia; sabemos que el niño aprende a comer principalmente de su madre,
quien a su vez ha adquirido la información de sus antecesores, lo que determina
una transmisión cultural. A este tronco de transmisión se suma en décadas
recientes la influencia de la educación por el equipo de salud. La madre alimenta
al hijo de acuerdo a sus valores, creencias, costumbres, símbolos, representaciones
sobre los alimentos y las preparaciones alimentarias (Osorio E., Weisstaub N., &
Castillo D., 2002).

Además de que se ha comprobado que el estado nutricional de las personas


guarda relación directa con la calidad de la ingesta de alimentos, y está se
encuentra determinada por condiciones de acceso a ellos y los factores que
permiten seleccionar alimentos específicos para incorporarlos a la dieta; por lo
que podemos definir “conducta alimentaria como el conjunto de acciones que
establecen la relación del ser humano con los alimentos”. En los seres humanos
los modos de alimentarse, preferencias y rechazos hacia determinados alimentos
están fuertemente condicionados por el aprendizaje y las experiencias vividas en
los primeros 5 años de vida (Huamán-Espino & Valladares E, 2006; Silva Rojas,
2013).

Según el patrón de alimentación, los niños deben tomar solo leche materna
durante los seis primeros meses de vida, a fin de lograr un crecimiento, desarrollo
y una salud óptima. Cuando la lactancia natural ya no basta para satisfacer las
2
necesidades nutricionales de los niños, es preciso añadir otros alimentos a su dieta,
es decir, deberían recibir alimentación complementaria, adecuada desde el punto
de vista nutricional, cubre el período que va de los seis a los 24 meses de edad,
intervalo en el que el niño es muy vulnerable. Con respecto a la lactancia
exclusiva, el 65,2% de niñas y niños menores de seis meses de edad tuvieron
lactancia exclusiva y el 6,3% que tenían entre seis a nueve meses de edad
continuaban alimentándose con solo leche materna. La alimentación
complementaria es tal vez uno de los procesos con mayor vulnerabilidad para el
estado nutricional de la población menor de dos años de edad. Por tal razón, la
importancia que adquieren los alimentos, la consistencia y el proceso de
introducción en la alimentación, es una característica definitiva en el análisis del
estado nutricional de las niñas y niños (MINSA, 2015).

El estudio de (Gamarra-Atero, Porroa-Jacobo, & Quintana-Salinas, 2010)


tuvo como resultados que el 81% de participantes mostró nivel de conocimientos
alto, 65% estuvo en total acuerdo con la LM exclusiva durante los 6 primeros
meses de vida, 63% estaba de acuerdo con prácticas adecuadas en alimentación
complementaria. Las madres presentaron nivel de conocimientos alto (81%) y
actitudes favorables (66,7%) sobre alimentación infantil, y sus percepciones en
general coincidían con ello.

En el estudio transversal de (Gómez-Guizado & Munares-García, 2014);


los resultados fueron que el 10,2% de los lactantes presentaron anemia, con
diferencias en las frecuencias según los meses de edad, altitud a nivel del mar,
regiones y tipo de establecimiento. Se evidenció la presencia de anemia y
desnutrición crónica antes de los 6 meses de edad y la probabilidad de tener
anemia se incrementa conforme aumenta la edad y está asociada a algunos
componentes y del estado nutricional.

También (Arcanjo, Arcanjo, & Santos, 2016) refiere que en los países en
desarrollo existe una alta prevalencia de deficiencia de hierro anemia , lo que
reduce el rendimiento cognitivo, el rendimiento laboral, y la resistencia; sino que
también causa dificultades en el aprendizaje y el impacto negativo en el desarrollo
3
de la población infantil. Resultando que la hemoglobina y los niveles de ferritina
sérica de los escolares con deficiencia en la lectura fueron estadísticamente
menores en comparación con los que no tienen, Se concluyó que los niños en edad
escolar con deficiencia de lectura tenían niveles de ferritina en suero y de
hemoglobina más bajos en comparación con los que no.

La conducta alimentaria es el comportamiento normal relacionado con los


hábitos de alimentación, la selección de alimentos que se ingieren, las
preparaciones culinarias y las cantidades ingeridas de ellos (Osorio E. et al., 2002).

En general, el niño incorpora la mayoría de los hábitos y prácticas


alimentarias de una comunidad antes de esa edad. La madre tiene un rol
fundamental en la educación y transmisión de pautas alimentarias al hijo, por lo
que debe centrarse en ella la entrega de contenidos educativos preventivos, que
permitan enfrentar precozmente las enfermedades relacionadas con conductas
alimentarias alteradas (rechazos alimentarios, obesidad, diabetes, dislipidemias,
anorexia nerviosa).

Los puntos críticos de la alimentación infantil que pueden evidenciar


alteraciones del desarrollo de la conducta alimentaria son:

 Establecimiento de la lactancia materna.


 Cambio de alimentación materna exclusiva a artificial o materna más
artificial. Introducción de la primera alimentación sólida.
 Auto alimentación con la mano-cuchara.
 Suspensión de la tercera mamadera.
 Cambio de consistencia de la papilla.
 Incorporación a la comida del hogar y a la mesa.
 Percepción materna de normalidad de la alimentación infantil.

El crecimiento y el desarrollo de un individuo están determinados por


factores genéticos y ambientales, siendo la nutrición un componente fundamental

4
entre estos últimos. El aporte adecuado de nutrientes permite un crecimiento
armónico que refleja fielmente el potencial genético.

Debido a que los niños pequeños crecen rápidamente, sus necesidades


energéticas y nutritivas son relativamente altas para su tamaño corporal. El
requerimiento energético del niño puede ser definido como la ingesta calórica
necesaria para mantener un estado de salud y crecimiento normal, así como un
nivel de actividad física adecuado.

Habitualmente se expresa en función del peso corporal y corresponde a la


suma de la energía requerida para el metabolismo basal, crecimiento, actividad
física y efecto termogénico de los alimentos.

 Carbohidratos: Son sustancias que proporcionan energía al organismo,


constituyen la principal fuente de energía en la dieta, siendo la lactosa
el preponderante en los lactantes y el almidón en los niños mayores. En
el preescolar se requiere de 2400 calorías para ambos sexos; se ha
demostrado que un déficit de una cantidad tan pequeña como 10
calorías por kilogramo de peso corporal puede producir fallas en el
crecimiento. Un inadecuado aporte de carbohidratos que se metaboliza
en glucosa produce alteraciones metabólicas y funcionales en el cerebro
ya que la glucosa es el principal substrato para la producción de energía
en este tejido.
 Proteínas: Son sustancias formadas por aminoácidos que son
indispensables para la formación y reparación de tejidos. También
contribuyen a formar defensas. Las proteínas proporcionan
aminoácidos esenciales y no esenciales necesarios para la síntesis
proteica, el crecimiento y la reparación tisular. El preescolar necesita de
34 gr/día, cantidad que debe ser ingerida diariamente. Las fuentes son:
carnes de todas las especies, carnero, pollo, cerdo, cuy, etc.; legumbres
secas, garbanzos, lentejas, habas, arvejas, cereales, trigo, avena, maíz;
papa, camote, frutas, nueces, almendras, maní.

5
 Grasas: Son sustancias indispensables ya que aportan energía y
elementos constituyentes a los tejidos, además son sustancias de reserva
al organismo. Las grasas suministran mayor energía calórica al
organismo que los carbohidratos. Las fuentes principales son: carnes,
aceites vegetales.
 Vitaminas: Son compuestos que forman parte del complejo enzimático,
desempeñando un papel importante en la conservación y
funcionamiento del organismo. Durante la niñez, se debe proporcionar
400 mg de vitamina D tolerancia que fácilmente se cubre utilizando
leche fortificada, esta vitamina es indispensable ya que ayuda a la
absorción del calcio y fósforo para el adecuado crecimiento y desarrollo
de los dientes y huesos del niño; las necesidades de vitamina A se
relacionan con el peso corporal, la ración aproximada es de 400 U.I.,
esta vitamina es esencial para el funcionamiento de la vista, se
encuentra en las verduras verdes y amarillas como frutas, leche,
productos lácteos derivados y yema de huevo; la vitamina C tiene la
función protectora, previene y cura el escorbuto; la vitamina B, se
encuentra en las carnes, leche, yema de huevo y verduras de hoja verde.
 Minerales: Son elementos reguladores que obran por acción catalítica.
Entre ellos destacan el Calcio, que se encuentra en la leche y sus
derivados, acelgas, legumbres, cereales. En niños en edad preescolar se
recomienda entre 500 y 800 mg. de calcio al día. El Hierro es un mineral
importante, porque es componente esencial de la hemoglobina de la
sangre; su falta o deficiencia se caracteriza por un estado anémico,
fatiga al leer o hablar. El requerimiento diario es de 7 mg/día. Sus
fuentes son las verduras de hoja verde, hígado, carnes magras, huevo,
frutas secas. Existen otros minerales como el fósforo, yodo, zinc, que
se encuentran en las verduras, cereales, mariscos y sal yodada.
 Agua: Es necesaria para toda forma de vida, ninguna acción puede
realizarse sin ella. El agua cumple funciones de regulador de la
temperatura del cuerpo; la deficiencia de este elemento altera los

6
procesos normales de mantenimiento del cuerpo. La deficiencia de agua
produce una disminución del peso, siendo esto más notable en los niños
con signos de deshidratación, alteración de la función intestinal, piel
reseca, etc. Los jugos de frutas y verduras tienen un mayor contenido
de agua.

Según el Ministerio de Salud, se agrega en la historia clínica del niño (a)


la EVALUACIÓN DE LA ALIMENTACIÓN DEL NIÑO (A), que toma en
cuenta mediante la exploración y observación de preguntas, considerando la edad
del niño(a), y las normas de nutrición del estado.

La conducta alimentaria está relacionada con los hábitos, los que a su vez
están influidos con el número de comidas al día, horarios, alimentos consumidos
más frecuentemente y los aspectos emocionales (estética, de confianza o temor,
hacia ciertos guisos). Los platillos o preparaciones de mayor uso, los acentos
sensoriales (sabor, color, aroma, textura, temperatura entre otros) y los más
preferidos o más empleados además de la cantidad de composición final de la
dieta, o bien la higiene de los mismos. La conducta alimentaria difiere en modo
notable de una persona a otra o por lo menos de un grupo a otro lo que puede
modificarse mediante la adquisición de conocimientos y el desarrollo de
actividades nuevas puestas en práctica.

Lund y Burkr (citados por Bourges, 1990) mencionó que las motivaciones
para la ingestión de alimentos se inicia por motivaciones básicas que se derivan
de sus necesidades, inclinaciones, urgencias y deseos los que a su vez dependen
de procesos cognoscitivos (percepciones, recuerdos, juicios y pensamientos).

La familia de acuerdo a su estructura, posición económica, social y


organización familiar refuerza o motiva al niño a obtener conocimientos y
desarrollar actitudes en favor de una alimentación adecuada. Bourges (1990)
demostró que la madre ejerce influencia en un 73% de los casos sobre el tipo y

7
especialmente de las comidas ya que ella decide, qué se come en el hogar, a
diferencia del 16% que comparte la decisión con el padre.
Existe un impacto significativo de la conducta (prácticas y estilos de
crianza) de los padres y madres sobre las preferencias y consumo de alimentos en
los niños, debido a que ellos deciden sobre qué, cuándo, cómo y cuánto alimento
consumen sus hijos. Estas conductas a largo plazo pueden generar algunos
problemas de alimentación infantil como falta de apetito, rechazo de la comida,
anorexia, sobrepeso y obesidad. Aunado a esto, los problemas de alimentación a
menudo se asocian con el bienestar emocional y psicológico de los niños, padres
y madres.

En nuestra ciudad no se han encontrado estudios que buscan determinar la


relación entre conductas alimentarias de la madre y la prevalencia de anemia; es
por esta razón que nace nuestro interés por contribuir con nuestro proyecto a sentar
las bases para plantear soluciones e implementar estrategias de intervención en el
sector salud sobre esta problemática actual Anemia, que se ha convertido en una
preocupación en nuestro país, a la cual se destinan fondos del estado, que no llegan
a cubrir las necesidades de la población.

Consideramos necesario orientar a las madres en prácticas saludables de


alimentación de sus niños, ya que está comprobado que son ellas los entes activos
del cuidado de sus niños, y mediante las cuales se lograrán buenos hábitos de
alimentación y el desarrollo intelectual requerido. Se hacen necesarias las
intervenciones a nivel familiar en las conductas de las madres y la forma de
brindar los alimentos a sus niños, así como desde el ámbito privado, porque
permite orientar las acciones de la institución y asignar los recursos correctamente
para la detección oportuna de enfermedades prevalentes.

El niño incorpora la mayoría de los hábitos y prácticas alimentarias de una


comunidad antes de esa edad. La madre tiene un rol fundamental en la educación
y transmisión de pautas alimentarias al hijo, por lo que debe centrarse en ella la
entrega de contenidos educativos preventivos, que permitan enfrentar

8
precozmente las enfermedades relacionadas con conductas alimentarias alteradas
(rechazos alimentarios, obesidad, diabetes, dislipidemias, anorexia
nerviosa).(Osorio E. et al., 2002)

Por otro lado, las investigaciones realizadas al respecto, revelan que se


presentan problemas típicos discutibles relacionados con conductas alimentarias
a pesar de los múltiples esfuerzos que hace el sector salud para disminuir la
prevalencia de anemia.

Ante esta problemática planteamos la siguiente interrogante, pretendiendo


dilucidarla, a partir de la información encontrada:

¿Cuál es la relación entre conductas alimentarias de la madre y la


prevalencia de anemia en menores de 5 años?

CONCEPTUACIÓN Y OPERACIONALIZACIÓN DE LAS VARIABLES

1. Variable independiente: Conductas alimentarias de la madre

Definición conceptual: Es el comportamiento normal relacionado con los


hábitos de alimentación, la selección de alimentos que se ingieren, las
preparaciones culinarias y las cantidades ingeridas de ellos (Osorio E. et al.,
2002)

Operacionalización: Mediante escala nominal


 Conductas alimentarias adecuadas: 20-24 puntos
 Conductas alimentarias regulares: 13- 19 puntos
 Conductas alimentarias inadecuadas: 0-12 puntos.

9
2. Variable dependiente: ANEMIA

Definición conceptual: se considera anémico al niño menor de 5 años con


resultado de Hemoglobina menor de 11.0 gr/dl (citado por OMS, 2003).

Operacionalización: Escala nominal


1. Presenta anemia: Cuando el niño de 6 a 4 años 11 meses 29 días de edad
presenta algún grado de anemia.

 Anemia leve: Hb 10-10.9 gr/dl


 Anemia moderada: Hb 7-9.9 gr/dl
 Anemia severa: Hb < 7 gr/ dl

HIPÓTESIS

Hi: Existe relación directa entre conductas alimentarias de la madre y la


prevalencia de Anemia en niños menores de 5 años.

H0: No existe relación directa entre conductas alimentarias de la madre y la


prevalencia de Anemia en niños menores de 5 años.

OBJETIVOS

Objetivo General

Determinar la relación de las conductas alimentarias de las madres con la


prevalencia de anemia en menores de 5 años.

Objetivos Específicos

1. Describir las características de los niños menores de 5 años: edad, sexo,


estado nutricional.
2. Calificar las conductas alimentarias de madres de niños menores de 5 años.
3. Determinar la prevalencia de Anemia Ferropénica, teniendo en cuenta los
análisis de hemoglobina.

10
II. METODOLOGÍA

2.1. Tipo y diseño de investigación


Se realizó un estudio descriptivo y analítico de corte transversal; donde
se caracterizó y evalúo de forma exhaustiva para determinar la relación de las
conductas alimentarias de la madre y la prevalencia de anemia en menores de
5 años de los pacientes del Policlínico Docente San Luis. Enero-Setiembre,
2017.

2.2. Descripción del ámbito de estudio

El estudio se llevó a cabo en el Servicio de Enfermería del Policlínico


Docente San Luis de la Facultad de Medicina de la Universidad San Pedro,
perteneciente a la ciudad de Nuevo Chimbote, Perú. En esta institución los
niños menores de 5 años acuden para su control de crecimiento y desarrollo,
donde según la Norma Técnica en salud se le solicita análisis de laboratorio
como la Hemoglobina para descartar Anemia, cada 6 meses.

En el presente estudio se tomaron los datos de fuentes primarias:


cuestionarios de conductas alimentarias a las madres, y muestras de sangre a
los niños menores de 5 años, previo llenado del consentimiento informado de
la madre.

2.3. Población
Estuvo conformado por 294 niños menores de 5 años que acudieron
al control de Crecimiento y desarrollo en el Servicio de Enfermería del
Policlínico Docente San Luis de la Facultad de Medicina de la Universidad
San Pedro, a los cuales se les solicito según Norma técnica examen de
Hemoglobina; entre los meses de Enero-setiembre, 2017.

11
A) Criterios de inclusión

 Niños que no padezcan enfermedades sensorio-motora (ceguera,


sordomudo, parálisis flácida)
 Todos los niños mayores de 6 meses y menores de 60 meses.
 Todas las madres con niños menores de 5 años que hayan presentado
Anemia Ferropénica después de los análisis de sangre, en los meses
de enero-setiembre 2017.

B) Criterios de Exclusión

 Niños mayores de 60 meses.


 Madres con niños menores de 5 años que no fueron diagnosticados
con Anemia Ferropénica, después del examen de laboratorio.
 Madres que presenten algún trastorno físico o alteración mental, que
nos les permita comunicarse adecuadamente.
 Madres que no deseen participar en el estudio.

C) Muestra:
Se trabajó con una población muestral, por la facilidad del acceso
a la información, la cual 156 niños desde 6 meses a 4 años 11 meses 29
días con diagnóstico de Anemia Ferropénica en los meses de Enero-
Setiembre, 2017.

2.4. Técnicas e instrumentos de investigación

La técnica que se utilizó para el presente trabajo de investigación fue


la encuesta, mediante el cual se recogerá la información de las madres que
asisten al control de crecimiento y desarrollo con sus hijos de 6 meses a 4
años 11 meses 29 días.

Para el presente trabajo de investigación se tuvo en cuenta los


siguientes instrumentos:

12
A. Consentimiento informado

Documento elaborado por los autores en el que se solicita permiso a la


madre o apoderado para que sus niños participen en el estudio.

B. Hoja de datos del niño menor de 5 años

Elaborada por los autores para detallar los datos del niño. En el que se
consignará el valor de Hemoglobina, además de datos del niño: edad,
sexo, peso, talla, estado nutricional.

C. Cuestionario de conductas alimentarias de la madre del niño menor


de 5 años.

Instrumento validado por juicio de expertos, elaborado por Cortez, I. y


Mendoza A. (2006) y adaptado por los investigadores. Este instrumento
permitirá medir el nivel de conocimiento nutricional materno, se
aplicará después de la toma de muestras para laboratorio.

C.1. CONFIABILIDAD DEL INSTRUMENTO:

La medida de la fiabilidad mediante el alfa de Cronbach


asume que los ítems (medidos en escala tipo Likert) miden un
mismo constructo y que están altamente correlacionados (Welch &
Comer, 1988). Por lo tanto, no se pudo verificar la confiabilidad
estadísticamente, ya que no corresponde a este tipo de instrumento.
En este caso el juicio de expertos y la experticia de los
investigadores en la adaptación del instrumento nos aseguran en
gran medida que los datos recolectados estén orientados al logro
del objetivo del estudio (Hernández Hernández Rodrigo Oscar,
2015).
2.5. Procesamiento y análisis de la información 13

Para la recolección de los datos de este trabajo de investigación se


realizará lo siguientes:

1° Se gestionaron los permisos correspondientes para el inicio del estudio.

2° Los niños fueron captados en la consulta del control de crecimiento y


desarrollo, se les explicó e informó a los padres acerca del estudio, se les
entregó el consentimiento informado y concluyó con la firma del
apoderado.

3° Luego se llenó la HOJA DE DATOS DEL NIÑO (A), primero se tomó el


peso y la talla del niño, que estuvo acompañado de su madre, y luego se
procedió a sacarle la muestra de sangre para determinar los valores de
hemoglobina, de esta manera obtendremos la muestra de niños con
Anemia Ferropénica.

4° Posteriormente se les aplicó el cuestionario de conductas alimentarias de


la madre, adaptado por los investigadores, el que constó de 24 ítems y tomó
un promedio de 10 minutos para su llenado.

5° Posterior a ello se coordinó con el laboratorista, quien nos brindó los


resultados de las muestras.

6° Se tabularon los datos obtenidos tanto del instrumento, así como también
de los valores obtenidos de hemoglobina.

7° Finalmente se realizó la interpretación de los datos.

El procedimiento, interpretación y análisis de los datos se realizó empleando


el software especializado SPSS versión 21, previa codificación de los datos
obtenidos, en sus dos niveles:

14
 Nivel Descriptivo: Los resultados estarán representados en tablas
unidimensionales, y bidimensionales, frecuencia relativa y simple.

 Nivel Analítico: Estadística inferencial no paramétrica o analítica: Prueba


de independencia de criterios, mediante la prueba correlación de
Spearman, con un nivel de significancia de 0.05, para determinar la
relación entre las conductas alimentarias de la madre y la prevalencia de
anemia de los menores de 5 años.

Las figuras se elaborarán en el Microsoft Excel 2010 según las variables


en estudio.

15
RESULTADOS

I. CARACTERÍSTICAS DE LOS NIÑOS MENORES DE 5 AÑOS


ATENDIDOS EN EL POLICLÍNICO DOCENTE SAN LUIS. ENERO-
SETIEMBRE, 2017.

De los 294 niños que acudieron al Policlínico Docente San Luis de la


Facultad de Medicina de la Universidad San Pedro, por el servicio de Enfermería,
se seleccionó una muestra de 156 niños menores de 5 años que presentaron
Anemia Ferropénica confirmada por análisis de Hemoglobina.

Los niños menores de 5 años con Anemia Ferropénica, tuvieron una edad
promedio de 21 meses o 1 años y 9 meses.
Con respecto al sexo: los niños presentaron Anemia en un 65,4% (102), en
comparación con los niñas con 34,6 (54).
El estado nutricional fue normal en el 96,2% (150), se presentó sobrepeso y
bajo peso con 2,5% y 1,3% respectivamente.

Tabla 1: Características de los niños menores de 5 años atendidos en el


Policlínico Docente San Luis. Enero-Setiembre, 2017.

VARIABLES NIÑOS<5 AÑOS n=156

Edad (meses) Promedio (DE) 21,8 11,2


Sexo Masculino 102 65,4
Femenino 54 34,6
Estado nutricional Normal 150 96,2
Bajo peso 2 1,3
Sobrepeso 4 2,5
Fuente: Cuestionario de conductas alimentarias de niños menores de 5 años.

16
II. CARACTERÍSTICAS DE LAS MADRES DE NIÑOS MENORES DE 5
AÑOS ATENDIDOS EN EL POLICLÍNICO DOCENTE SAN LUIS.
ENERO-SETIEMBRE, 2017.

Las madres de los niños menores de 5 años atendidos en el Policlínico


Docente San Luis por el servicio de Enfermería; tuvieron una edad promedio de
30 años; la mayoría tiene de ocupación ama de casa con un 84,6% (132), y las
restantes ejercen como cosmetólogas, comerciantes e ingeniera. El número de
hijos predominante fue de 2 a 3 hijos con el 64,1%, con 1 hijo el 26,9% y de 4 a
5 hijos el 9,0%.

Las personas que comen en casa fueron en su mayoría entre 3 y 5 con el


28,2%, con 4 el 26,9% y con 6 a más el 16,7%.

En cuanto al grado de instrucción las madres tuvieron en su mayoría


secundaria completa con el 50,0%, secundaria incompleta el 25,6%, educación
superior el 23,1% y técnico 1,3%.

Deacuerdo al ingreso económico, las madres respondieron que reciben


mayormente menos de 1 sueldo el 75,6% y de 1 a 2 sueldos el 24,4%.

El gasto de alimentación diario respondieron las madres que es de S/ 20 a


S/ 50 con el 76,9%, hasta S/ 10 con el 21,8% y menos de S/10 el 1,3%.

17
Tabla 2: Características de las madres de niños menores de 5 años atendidos
en el Policlínico Docente San Luis. Enero-Setiembre, 2017.

VARIABLES MADRES NIÑOS<5 AÑOS


n=156

Edad (meses) Promedio (DE) 30 7,01


Ocupación de la madre Ama de casa 132 84,6
Cosmetóloga 12 7,6
Comerciante 10 6,4
Ingeniera 2 1,4
Número de hijos 1 42 26,9
2-3 100 64,1
4-5 14 9,0
6a+ 0 0
Personas que comen en 3 44 28,2
casa 4 42 26,9
5 44 28,2
6a+ 26 16,7
Grado de instrucción Analfabeta 0 0
Secundaria Incompleta 40 25,6
Secundaria Completa 78 50,0
Superior 36 23,1
Técnico 2 1,3
Ingreso económico < 1 sueldo 118 75,6
1-2 sueldos 38 24,4
3a+ 0 0
Gasto en alimentación Menos de S/ 10 2 1,3
Hasta S/ 10 34 21,8
S/ 20- S/ 50 120 76,9
Fuente: Cuestionario de conductas alimentarias de niños menores de 5 años.

18
III. PREVALENCIA DE ANEMIA FERROPÉNICA EN MENORES DE 5
AÑOS ATENDIDOS EN POLICLÍNICO DOCENTE SAN LUIS. ENERO-
SETIEMBRE, 2017.

De un total de 294 niños que acudieron al Policlínico Docente San Luis,


se encontró que la prevalencia de Anemia Ferropénica en niños menores de 5 años
de Enero a Setiembre 2017 fue de 46,9% (156).

Tabla 3: Prevalencia de Anemia Ferropénica en menores de 5 años atendidos


en Policlínico Docente San Luis. Enero-Setiembre, 2017.

VARIABLES NIÑOS<5 AÑOS P=294; n=156

Anemia Ferropénica No 138 53,1


Si 156 46,9
294 100.0
Fuente: Hoja de datos del niño menor de 5 años.

19
IV. CONDUCTAS ALIMENTARIAS DE MADRES DE NIÑOS MENORES DE
5 AÑOS ATENDIDOS EN EL POLICLÍNICO DOCENTE SAN LUIS,
ENERO-SETIEMBRE 2017.

Según el instrumento aplicado sobre “Conductas alimentarias de madres

de niños menores de 5 años”, obtuvimos que las conductas alimentarias fueron

inadecuadas en un 28,2%, regulares en un 65,4% y adecuadas en un 6,4%.

Tabla 4: Conductas alimentarias de madres de niños menores de 5 años


atendidos en el Policlínico Docente San Luis. Enero-Setiembre 2017.

VARIABLES MADRES NIÑOS<5 AÑOS n=156

Conductas Adecuadas 10 6,4


alimentarias Regulares 102 65,4
Inadecuadas 44 28,2
Fuente: Cuestionario de conductas alimentarias de niños menores de 5 años.

20
V. CORRELACIÓN ENTRE LAS CONDUCTAS ALIMENTARIAS DE LAS
MADRES Y LOS NIVELES DE HEMOGLOBINA DE LOS NIÑOS
MENORES DE 5 AÑOS DEL POLICLÍNICO DOCENTE SAN LUIS.

Según la correlación entre las conductas alimentarias de las madres y los

niveles de hemoglobina de los niños menores de 5 años se observa que, existe una

correlación alta, directa y positiva con una r de Pearson de 0,827 y un valor de p

= 0,000 que es estadísticamente significativa. Lo que indica gráficamente que, a

medida que la madre tenga mejores conductas alimentarias, también los niveles

de hemoglobina serán mayores.

Fuente: Análisis analítico de los instrumentos (Anexo 02 – 03).

Figura 1: Representación gráfica de puntos de dispersión entre las conductas


alimentarias de las madres y los niveles de hemoglobina de los niños menores
de 5 años del Policlínico Docente San Luis.

Correlación r Valor de p
Conductas Alimentarias y Niveles de hemoglobina 0,827 0,000

21
DISCUSIONES

Hallazgos principales

Para la presente investigación se tomaron los datos de 294 niños que acudieron
al Policlínico Docente San Luis de la Facultad de Medicina de la Universidad San
Pedro, por el servicio de Enfermería para su control de crecimiento y desarrollo,
posterior a ello se seleccionó una muestra de 156 niños menores de 5 años que
presentaron Anemia Ferropénica confirmada por análisis de Hemoglobina. Los niños
menores de 5 años tuvieron una edad promedio de 21 meses (1 años y 9 meses). La
anemia se presentó más en niños que en niñas, 65,4% (102) y 34,6 (54). Su estado
nutricional fue normal en su mayoría con el 96,2% (150).

Las madres de los niños menores de 5 años; tuvieron una edad promedio de 30
años; la ocupación de la mayoría fue ama de casa con un 84,6% (132), y las restantes
ejercen como cosmetólogas, comerciantes e ingeniera. El número de hijos
predominante fue de 2 a 3 hijos con el 64,1%, con 1 hijo el 26,9% y de 4 a 5 hijos el
9,0%. Las personas que comen en casa fueron más entre 3 y 5 con el 28,2%. El grado
de instrucción que las madres tuvieron fue en su mayoría secundaria completa con el
50,0%, secundaria incompleta el 25,6%, educación superior el 23,1% y técnico 1,3%.

Deacuerdo al ingreso económico, las madres respondieron que reciben


mayormente menos de 1 sueldo el 75,6% y de 1 a 2 sueldos el 24,4%. El gasto de
alimentación diario respondieron las madres que es de S/ 20 a S/ 50 con el 76,9%,
hasta S/ 10 con el 21,8% y menos de S/10 el 1,3%.
De un total de 294 niños que acudieron al Policlínico Docente San Luis, se
encontró que la prevalencia de Anemia Ferropénica en niños menores de 5 años de
Enero a Setiembre 2017 fue de 46,9% (156).
En el estudio se utilizó el instrumento “Conductas alimentarias de madres de
niños menores de 5 años”, que fue validado por validado por juicio de expertos, por
Cortez, I. y Mendoza A. (2006) y adaptado por los investigadores. Se obtuvo que las
conductas alimentarias fueron inadecuadas en un 28,2%, regular en un 65,4% y
adecuadas en un 6,4%.

22
Deacuerdo al análisis crítico de los instrumentos utilizados, en la correlación
entre las conductas alimentarias de las madres y los niveles de hemoglobina de los
niños menores de 5 años se observó que, existe una correlación alta, directa y positiva
con una r de Pearson de 0,827 y un valor de p = 0,000 que es estadísticamente
significativa. Lo que indica gráficamente que, a medida que la madre tenga mejores
conductas alimentarias, también los niveles de hemoglobina serán mayores.

Interpretación de los resultados

Según (Cespedes Sotelo, 2011); la nutrición infantil es la piedra angular que


afecta y define la salud, siendo la vía para crecer, desarrollar y trabajar; y alcanzar todo
el potencial como individuo y sociedad. La alimentación y la nutrición condicionan de
forma importante el crecimiento y desarrollo de todo ser vivo por ello, la nutrición se
constituye en un pilar fundamental en la salud y desarrollo del ser humano en especial
en los primeros años de vida. La anemia visto como indicador del estado nutricional
general puede advertir sobre la calidad futura de nuestras próximas generaciones no
solo en el plano físico como la perdida de oportunidad de una mayor talla y
disminución de la capacidad estructural, sino como daño de las capacidades
funcionales nobles del cerebro, como la abstracción, la integración, el análisis del
pensamiento y alteraciones emocionales y afectivas. En la actualidad constituye un
significativo problema de salud pública debido a que afecta a casi la mitad de la
población de niños menores de 6 a 35 meses, según el ENDES, 2009 el 47.2% de los
niños de 6 a 59 meses de edad presentan anemia. La madre como principal responsable
del cuidado y nutrición del niño debe conocer los diferentes tipos de alimentos que
pueden ayudar o prevenir la anemia y a la vez ponerlos en práctica a la hora de preparar
los alimentos.

En el presente estudio se utilizó el instrumento “Conductas alimentarias de


madres de niños menores de 5 años”, que fue validado por juicio de expertos, por
Cortez, I. y Mendoza A. (2006) y adaptado por los investigadores; porque posee
confiabilidad de 0,70 según alfa de Crombach; con el cual se obtuvo una correlación
alta, directa y positiva con una r de Pearson de 0,827 y un valor de p = 0,000 que es
23
estadísticamente significativa. Lo que indica gráficamente que, a medida que la madre
tenga mejores conductas alimentarias, también los niveles de hemoglobina serán
mayores.

Comparación con otros estudios

Actualmente en el Perú el 43.5% de los niños, de 6 a 35 meses, sufre de anemia,


correspondiéndole a la zona rural el 51.1% y a la urbana el 40.5%. Estamos hablando
de 620 mil niños menores de 3 años anémicos de 1.6 millones a nivel nacional y de
410 mil niños menores de 5 años que presentan desnutrición crónica. (MINSA, 2016).
Según la Tabla 3 el Policlínico Docente San Luis de la Facultad de Medicina de la
Universidad San Pedro; atiende un promedio de 40 a 50 niños mensual, de los cuales
se encontró que de Enero a Setiembre 2017, 294 niños aplicaban para ser evaluados
por Anemia deacuerdo al control de crecimiento y desarrollo; resultando la prevalencia
de 46,9 % (156).

En el estudio de (Cespedes Sotelo, 2011) se evalúo el nivel de conocimiento de


las madres sobre la Anemia; y concluyó en que fue “Medio” con tendencia a “Bajo”,
ya que desconocen el significado del hierro, las causa y consecuencia de la anemia
ferropenia, lo que es un indicador negativo en la prevención de la anemia en niños
menores. A pesar de ello la mayoría de madres realizan “prácticas adecuadas” para la
prevención de la anemia, que consisten en brindarles en su dieta mínimo 3 veces por
semana alimentos que contengan grandes cantidades de hierro (carne, pescado,
vísceras) y que a su vez reciban alimentos que permitan su absorción (Vitamina C). El
puntaje promedio de las prácticas alimenticias acerca de la anemia Ferropénica fue
igual en todos los niveles de instrucción de las madres. En otro estudio se encontró que
el bajo nivel educativo materno se asoció de forma independiente con la baja
adherencia a las pautas de suplementos de hierro, zinc y multivitaminas en los bebés
prematuros, que afectó la prevalencia de anemia y deficiencias de hierro y zinc a los
seis meses de edad corregida bebés prematuros. (Freitas et al., 2016); los cuales forman
parte de la intervención en la consulta del control de crecimiento y desarrollo de niños
menores de 5 años y que sirven como tratamientos preventivos.

24
Otro estudio concluye que no existe relación entre el conocimiento que tienen
las madres acerca de la anemia por déficit de hierro a través de diferentes variables
como ser su edad y/o nivel educativo alcanzado, ya que los resultados obtenidos
demostraron que muchos de los conocimientos se transmiten implícitamente, de
generación en generación, sin necesidad de acceder a niveles educativos superiores,
motivo por el que muchas de las madres encuestadas de corta edad o con niveles
educativos inferiores, tuvieron mayor/igual conocimiento acerca del tema, en
comparación con aquellas madres que tuvieron niveles de estudio más
avanzados.(Aguirre, Bustos, Miño, Garrido, & Cavallaro, 2014)

Podemos concluir que a diferencia de los estudios encontrados las conductas


alimentarias fueron en su mayoría regulares con unos 65,4%, inadecuadas en un 28,2%
y adecuadas en un 6,4%; según Tabla 4; y además deacuerdo al análisis crítico de los
instrumentos utilizados, en la correlación entre las conductas alimentarias de las
madres y los niveles de hemoglobina de los niños menores de 5 años se observó que,
existe una correlación alta, directa y positiva con una r de Pearson de 0,827 y un valor
de p = 0,000 que es estadísticamente significativa. Lo que indica gráficamente que, a
medida que la madre tenga mejores conductas alimentarias, también los niveles de
hemoglobina serán mayores; Ver Gráfico 1.

La relación de apego del niño a la madre es un factor determinante en la


adquisición de la conducta alimentaria y del adecuado desarrollo posterior. Las
estrategias en la que se basan las madres de manera empírica para lograr la
“alimentación adecuada” de sus hijos, son basadas en costumbres que, de acuerdo a su
nivel de formación, son insuficientes. La difusión de mensajes relacionados a las
características y estilos de alimentación son casi nulos. Los gobiernos regionales y
locales, además del Ministerio de Salud, solo se encargan de promulgar pautas sobre
alimentación y reducir cifras sin tratar el problema de fondo; por lo que, ayudar a
orientar e individualizar las “estrategias de alimentación” sería, en teoría, la manera
ideal de mejorar dichas prácticas (Cieza, 2016).

25
La Anemia es una enfermedad que tiene una situación alarmante y que exige
intervención inmediata del gobierno, el cual se ha impuesto como objetivo reducir al
19% este mal silencioso entre niños menores de 3 años, y la desnutrición crónica, al
6.4%, entre niños menores a 5 años, a través de un Plan Nacional de lucha contra la
anemia, entre el presente año hasta 2021. (MINSA, 2016)

Fortalezas y debilidades
Se logró que los padres realicen un seguimiento a su niño sobre el control de
hemoglobina y que traigan a su control de crecimiento y desarrollo a su niño. Otro
grupo de padres mostró desinterés por la evaluación a sus niños por lo que no
autorizaron la toma de muestra de sangre, a pesar de que las muestras eran gratuitas, y
de explicarles la importancia del estudio.

Muchos padres creen que el ver a su niño comiendo en exceso es sinónimo de que no
hay enfermedad, por lo que muchos de ellos mostraron niveles de hemoglobina bajos.

Las conductas inadecuadas de las madres dependen también del factor económico que
es lo que hace variante el menú del niño.

26
CONCLUSIONES

 Se pudo comprobar que existe una correlación alta, directa y positiva con una r de
Pearson de 0,827 y un valor de p = 0,000. Lo que indica gráficamente que, a
medida que la madre tenga mejores conductas alimentarias, también los niveles
de hemoglobina serán mayores y por el contrario la prevalencia de anemia será
menor.
 Los niños menores de 5 años tuvieron una edad promedio de 21 meses (1 años y
9 meses). La anemia se presentó más en niños que en niñas, 65,4% (102) y 34,6
(54) respectivamente. Su estado nutricional fue normal en su mayoría con el
96,2% (150).
 Las madres de los niños menores de 5 años; tuvieron una edad promedio de 30
años; la ocupación de la mayoría fue ama de casa con un 84,6% (132. El número
de hijos predominante fue de 2 a 3 hijos con el 64,1. Las personas que comen en
casa fueron más entre 3 y 5 con el 28,2%. El grado de instrucción que las madres
tuvieron fue en su mayoría secundaria completa con el 50,0%.
 Deacuerdo al ingreso económico, las madres reciben mayormente menos de 1
sueldo el 75,6% El gasto de alimentación diario es de S/ 20 a S/ 50 con el 76,9%.
 La prevalencia de Anemia Ferropénica en niños menores de 5 años fue de 46,9%
(156).
 Las conductas alimentarias fueron inadecuadas en un 28,2%, regular en un 65,4%
y adecuadas en un 6,4%.

27
RECOMENDACIONES

 Se hace necesaria la concientización de las madres de niños menores de 5 años en


cuanto a los análisis de laboratorio, ya que a pesar de estos ser gratuitos
presentamos dificultades para su consentimiento informado.
 Capacitar a los padres de familia en cuidados de salud para sus niños.
 Hacer alianzas con los colegios en los que se mantenga una comunicación eficaz
con el establecimiento de salud y la institución educativa de forma que se puedan
realizar seguimiento a los niños que presentan patologías.
 Realizar investigaciones experimentales, de casos controles, o cohortes, sobre el
uso de tratamientos médicos y planes de alimentación para niños menores de 5
años.
 Difundir resultados con empresas que puedan invertir en proyectos a largo plazo,
ONGs, preocupados por la salud de los menores de 5 años.

28
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

Aguirre, M. N., Bustos, M. E., Miño, S. E., Garrido, J., & Cavallaro, M. S. (2014).
Nivel de conocimiento sobre anemia ferropénica de las madres de niños de 4 a
5 años de edad que asisten al Jardín “Hojitas Verdes” de la Escuela N 390
“Ángel Vicente Peñaloza” en San Vicente–Misiones, 2015: Recuperado de
http://www. barcelo. edu. ar/greenstone/collect/tesis/index/assoc/HASH018b.
dir/T FI% 20Aguirre-Bustos-Mi% 25F1o. pdf.
Alcázar, L. (2013). Impacto económico de la anemia en el Perú / The economic impact
of anaemia in Peru. Acción contra el Hambre.
Arcanjo, F. P., Arcanjo, C. P., & Santos, P. R. (2016). Schoolchildren with Learning
Difficulties Have Low Iron Status and High Anemia Prevalence. J Nutr Metab,
2016, 7357136. doi:10.1155/2016/7357136
Cespedes Sotelo, M. (2011). Conocimientos sobre la anemia y las prácticas
alimenticias que tienen las madres para la prevención de la anemiaferropénica
en niños de 6 a 24 meses Centro de Salud Materno Infantiltablada de Lurin
2010.
Freitas, B. A., Lima, L. M., Moreira, M. E., Priore, S. E., Henriques, B. D., Carlos, C.
F., Franceschini Sdo, C. (2016). Micronutrient supplementation adherence and
influence on the prevalences of anemia and iron, zinc and vitamin A
deficiencies in preemies with a corrected age of six months. Clinics (Sao
Paulo), 71(8), 440-448. doi:10.6061/clinics/2016(08)06
Gamarra-Atero, R., Porroa-Jacobo, M., & Quintana-Salinas, M. (2010).
Conocimientos, actitudes y percepciones de madres sobre la alimentación de
niños menores de 3 años en una comunidad de Lima. Anales de la Facultad de
Medicina, 71, 179-184.
Gómez-Guizado, G., & Munares-García, O. (2014). Anemia y estado nutricional en
lactantes de dos a cinco meses atendidos en establecimientos del Ministerio de
Salud del Perú, 2012. 2014. doi:10.17843/rpmesp.2014.313.85
Hernández Hernández Rodrigo Oscar, M. M. N., Porfirio Castillo Blanca Estela. .
(2015). Proyecto Final: Estadística Avanzada.
Huamán-Espino, L., & Valladares E, C. (2006). Estado nutricional y características
del consumo alimentario de la población Aguaruna. Amazonas, Perú 2004.
Revista Peruana de Medicina Experimental y Salud Publica, 23, 12-21.
MINSA. (2015). Encuesta Demografica y de salud familiar.
MINSA. (2016). Plan Nacional para la Reduccion de Anemia 2017-2021.
Osorio E., J., Weisstaub N., G., & Castillo D., C. (2002). DESARROLLO DE LA
CONDUCTA ALIMENTARIA EN LA INFANCIA Y SUS
ALTERACIONES. Revista chilena de nutrición, 29, 280-285.
Silva Rojas, J. (2013). Ingesta y conducta alimentaria en el niño en edad pre escolar.
Verga, M. E., Widmeier-Pasche, V., Beck-Popovic, M., Pauchard, J. Y., & Gehri, M.
(2014). Iron deficiency in infancy: is an immigrant more at risk? Swiss Med
Wkly, 144, w14065. doi:10.4414/smw.2014.14065

30
AGRADECIMIENTOS

 A Dios por ser parte siempre de nuestra inspiración.


 A los padres de familia de los niños menores de 5 años, de los diferentes AA.HH.
aledaños que permitieron que podamos estudiar a sus niños sobre sus conductas
alimentarias y el desarrollo de la Anemia.
 A la Institución educativa Divino Niño Jesús por permitirnos llegar a los padres
de familia.

31
ANEXOS

ANEXO N°01: CONSENTIMIENTO INFORMADO

Mediante este documento se hace constar que la madre


__________________________________con DNI N° ____________ha recibido
la información necesaria sobre el proyecto de investigación denominado
“Conductas alimentarias de la madre relacionadas con prevalencia de anemia en
menores de 5 años” y aceptar proporcionar los datos del niño(a), que se le tomen
muestras de sangre para determinar Anemia y participar del llenado de un
cuestionario de conductas alimentarias.
Cabe recalcar que todos los procedimientos se realizarán guardando la
confidencialidad de los datos, y se brindarán de forma gratuita; solo siendo usados
con fines de investigación.

Se firma el presente para dejar constancia de su participación y aceptación en el


proyecto.

………………………………………..
FIRMA DE LA MADRE
DNI N°:……………………………….. Huella Digital

32
ANEXO N° 02: HOJA DE DATOS DEL NIÑO MENOR DE 5 AÑOS

Instrucciones: Se marca la alternativa de respuesta según la verificación de datos a


través de los análisis realizados al niño.

1. Presencia o no de Anemia en niños de 6 meses hasta 4 años 11 meses 29 dias,


según análisis de Hemoglobina.

Anemia leve: Hb 10-10.9 gr/dl


Anemia moderada: Hb 7-9.9 gr/dl
Anemia severa: Hb < 7 gr/dl
Normal

PARA EL INVESTIGADOR:
PRESENTA ANEMIA :( )
NO PRESENTA ANEMIA :( )

2. Sexo del niño: M ( ) F ( )


3. Edad del niño en el último control de crecimiento y desarrollo:
4. Diagnóstico de la evaluación del estado nutricional, en el último control de
crecimiento y desarrollo: Peso: _____ Talla:____
Desnutrición
Normal
Sobrepeso
Obesidad

PARA EL INVESTIGADOR:
 Normal:
 Con alteración del estado nutricional:

5. Cumplimiento del control de crecimiento y desarrollo de su niño (a) hasta la edad


actual
PARA EL INVESTIGADOR:
Cumple: Si su número de controles es igual a su edad ( )
No cumple: Si su número de controles es menor a su edad ( )

33
ANEXO N°03: CUESTIONARIO CONDUCTAS ALIMENTARIAS DE LA
MADRE DEL NIÑO MENOR DE 5 AÑOS.

Autores: Cortez, I y Mendoza, A. (2006) adaptado por la autora de la presente


investigación.

INSTRUCCIONES: A continuación dará lectura a las interrogantes formuladas, la


veracidad y sinceridad con que usted responda nos permitirá llegar al objetivo deseado.
Marque con una X en la letra que crea correcta:

PARTE I: DATOS DE IDENTIFICACIÓN DE LA MADRE:


1. Edad de la madre (años cumplidos):__________________
2. Ocupación de la madre:___________________________
3. Número de hijos: 1) 1 2) 2-3 3) 4-5 4) 6 o más.
4. Personas que comen en casa:1)3 2)4 3)5 4) 6 o más.
5. Grado de instrucción de la madre:
6. Ingreso económico familiar:
1) Menos de un salario mínimo. 2) 1a 2 salarios 3) De 3 a más salarios
7. ¿Cuánto gasta en alimentación diariamente?
1) Menos S/ 10 2) Hasta S/ 10
2) 3) De S/ 20 – S/ 50 4) De S/ 50 a más

PARTE II: CUESTIONARIO DE CONDUCTAS ALIMENTARIAS DE LA


MADRE
1. ¿Qué es la alimentación complementaria?
a) Dar otros alimentos más leche materna
b) Dar leche materna y calditos
c) Alimentar al niño con la comida de la olla familiar
2. ¿Cuál es la edad en la que el niño debe iniciar la alimentación diferente a la leche
materna?

a) Cuando coma solo


b) 4 meses
c) 6 meses
3. ¿Por qué debe dar la alimentación complementaria desde los 6 meses?
a) Porque su barriga está creciendo
b) Porque con el pecho ya no se alimenta bien y necesita de otros alimentos.
c) Porque ya tiene dientes

34
4. ¿Hasta qué edad se debe dar de lactar al niño?
a) Hasta el 1 año y 6 meses
b) Hasta el 1 año
c) Hasta los 2 años o mas
5. ¿Cómo se debe dar lactancia materna durante la alimentación complementaria?
a) En cualquier momento
b) Cada vez que el niño se lo pida
c) Cada vez menos ya que el niño come otros alimentos
6. ¿Cuál debe ser la consistencia de los alimentos (preparaciones) más usado en los
niños?
a) Aguada
b) Espeso
c) Muy espeso
7. ¿Con que alimentos deben iniciar la alimentación complementaria?
a) Caldos y/o sopas
b) Sopas y/o frutas
c) Papillas o purés, mazamorras
8. La preparación que nutre más al niño, es:
a) Caldos y/o sopas
b) Segundos
c) Mazamorras
9. ¿Qué cantidad de alimentos debe recibir un niño entre 7 y 8 meses?
a) 2-3 cucharadas
b) 3-5 cucharadas
c) 5-7 cucharadas
10. Un niño de un año debe consumir:
a) Dos comidas principales y dos entrecomidas.
b) Dos comidas principales y una entrecomidas.
c) Tres comidas principales y dos entrecomidas.
11. ¿A qué edad el niño puede comer todos los alimentos?
a) 6 meses
b) 1 año
c) 2 años
12. En las comidas de media mañana o media tarde el niño debe comer:
a) Caldos o jugos
b) Mazamorras y frutas
c) Galletas y frutas
13. ¿Qué alimentos debe consumir su niño diariamente?
a) Frutas y verduras
b) Carnes y huevos
35
c) Papa, pan y leche
14. ¿Cómo debe ser la alimentación del niño cuando se enferma?
a) Seguir alimentándolo pero en mayor frecuencia (más veces)
b) Se le debe quitar los alimentos y dar solo leche materna
c) Se le debe dar solo agüitas y caldos.
15. Los alimentos que protegen las enfermedades del niño son:
a) Verduras, leche
b) Frutas, grasas
c) Frutas. verduras
16. Los alimentos que dan más fuerza y/o energía al niño son:
a) Verduras, leche
b) Tubérculos, cereales
c) Carnes, frutas
17. Los alimentos que ayudan a crecer más al niño:
a) Verduras, tubérculos
b) Carnes, leche
c) Cereales, frutas
18. En relación al aporte de hierro, la información correcta es:
a) La leche materna tiene suficiente hierro para el niño
b) El hierro se encuentra en la sangrecita, hígado, pescado.
c) El hierro se encuentra en las alverjas, mariscos, huevo
19. En relación al calcio, la afirmación correcta es:
a) El calcio se encuentra en fideos, pan blanco, arroz.
b) El calcio se encuentra en leche, huevo, mantequilla.
c) La leche materna tiene suficiente calcio para el niño.
20. En relación a la vitamina A, es correcta:
a) La vitamina A se encuentra en espinaca, betarraga, piña.
b) La vitamina A cuida la piel y evita las infecciones.
c) La falta de vitamina A produce anemia.
21. En relación a la vitamina C, es cierto:
a) La vitamina C, se encuentra en la papaya, zanahoria, lechuga-
b) Favorece el control de las hemorragias.
c) Ayuda a retener el hierro en nuestro cuerpo
22. ¿Por qué se debe agregar una cucharadita de aceite a las comidas principales del
niño?
a) Porque da calorías al niño (a)
b) Porque ayuda a que la piel sea más suave.
c) No es necesario agregarle.
23. ¿Cómo se debe proteger a los alimentos?
a) Cubriéndolos solo con un material limpio.
36
b) Poniéndolos en un lugar donde corra el aire.
c) Colocándolos en un lugar fresco y bien cubiertos.
24. ¿Cómo deben prepararse los alimentos del niño?
a) Cocinar muy bien las carnes, pollo y pescado.
b) Se debe cocer bien las menestras sin quitar la cascara.
c) Los restos de la comida del niño (a) se debe guardar para luego consumirlo
posteriormente.

LISTADO DE RESPUESTAS CORRECTAS AL CUESTIONARIO

ITEM RESPUESTA ITEM RESPUESTA


CORRECTA CORRECTA
1 A 13 A
2 C 14 A
3 B 15 C
4 C 16 B
5 C 17 B
6 B 18 B
7 C 19 B
8 B 20 B
9 B 21 C
10 C 22 A
11 B 23 C
12 B 24 A

Puntaje: Se asignará un punto por cada pregunta, obteniéndose el puntaje siguiente.

 Conductas alimentarias adecuadas: 20-24 puntos


 Conductas alimentarias regulares: 13- 19 puntos
 Conductas alimentarias inadecuadas: 0-12 puntos.

37
APÉNDICES
APÉNDICE 1: Solicitud de participación a instituciones para aplicación de estudio.
APÉNDICE 2: Ejemplo de Consentimiento informado lleno
APÉNDICE 3: Ejemplo de cuestionario de conductas alimentarias lleno.
APÉNDICE 4: Ejemplo de registro de actividades de recolección de datos.
APÉNDICE 5: Fotos de las actividades de recolección de datos.

38
43
44

También podría gustarte