Argumentos Sobre El Marxismo

Actividad de aprendizaje. Argumentos sobre el marxismo.
La inmensa cantidad de información, estudios y obras que dejó Karl H. Marx (1818-
1883) es basta como la de pocos filósofos (filósofo, economista, sociólogo, periodista e
intelectual), trascendiendo de forma considerable las fronteras y, más impresionantemente, el
tiempo. A lo largo de los años ha sido centro de estudios y debates, existen quienes están
completamente a favor de sus ideas e ideales, otros que toman de su obra algunos puntos
específicos y muchos que diferían de su pensamiento e incluso lo ridiculizan.
ARGUMENTOS A FAVOR DEL MARXISMO.
Al dedicarse de lleno a sus estudios, ya en Berlín, y después de desistir de su obra “Filosofía

del derecho”, se introdujo a una atmósfera cultural dominada por la filosofía de Hegel. Los problemas
que más apasionaban a los jóvenes intelectuales eran los de la crítica de la religión, del Estado y de la
relación entre idea y realidad.
En sus primeras colaboraciones con la Gaceta Renana, Marx defendía con argumentación
contundente y estilo vigoroso la libertad de prensa (“la libertad de prensa fundamental consiste en el
hecho de que la prensa no se convierta en una industria”) y atacaba la censura (“la única manera de
solucionar el problema de la censura es aboliéndola”). En pocos meses la Gaceta Renana como el
órgano más radical de la oposición, contra cual no tardó en lanzarse la acusación de “comunismo”.
En otros artículos atacó “la sofística de la propiedad privada”.
Al ser censurada la revista, en el último número donde intervino Marx cerró con estos versos:
“Nos volveremos a encontrar un día a bordo de otros navíos / pues en el naufragio nuestro coraje se
mantiene entero”. Científico y revolucionario inflexible, contemplaba con desdén los compromisos
ideológicos y prácticos estipulados en nombre de la pereza intelectual o de la vida tranquila, ligado a la
lucha por una vida científica, moral y práctica.
En 1841 desarrolló una crítica científica y precisa del idealismo especulativo de Hegel,
destacando que éste no se resuelve en modo alguno subordinando la realidad a la idea, sino
restaurando acríticamente, sin ningún control y al margen de la historia, la realidad inmediata que se
ha deseado trascender.
Estando en París publicó un número de la revista Anales francoalemanes en donde desarrolla

la crítica del Estado político proclamando la necesidad de que la emancipación puramente política
vaya seguida de la emancipación humana y social. En otro artículo Marx identifica por primera vez cuál
es esa parte de la sociedad burguesa a la que el carácter de la explotación a que se ve sometida la
empuja a una revolución radical: el proletariado. En 1844 Marx había llegado ya a la proclamación del
comunismo como una forma nueva de la sociedad. La fuerza a cuyo cargo debía correr la destrucción
de la sociedad actual para construir la sociedad del autogobierno de los trabajadores, la sociedad
comunista, era el proletariado.
A partir de su crítica al idealismo, Marx llegó a la conclusión de que solo el estudio científico de
una sociedad determinada, la sociedad burguesa moderna, podía aclarar el problema mismo de la
evolución de las ideas y la propia evolución de la historia pasada. Marx afirmaba que quien se dirigía a
los obreros sin tener asentadas sus ideas sobre bases sólidas no hacía sino engañarlos.
En 1847 Marx proclamó que los comunistas rechazaban disimular sus ideas y sus intenciones y
en 1848 envió a Londres el manuscrito de El Manifiesto comunista y tres días después París se
cubre de banderas rojas. Estuvo presente en París, Bélgica y Alemania alimentando la propaganda
socialista y la maduración orgánica del movimiento obrero alemán. Al ser desterrado de Prusia publica
por última vez en la revista: “Vuestra calma será la desesperación de los prusianos”.
Durante su exilio en Londres (1850) aportó su visión del proceso revolucionario como un
proceso de maduración social y no como una explosión social de un día. “La minoría sustituye la
consideración crítica por la dogmática, la consideración materialista por la idealista. Ellos depositan su
confianza no en las condiciones objetivas sino en la mera voluntad”.
A partir de 1864 dirigió la Primera Internacional y mantuvo contacto con centenares de
militantes de todos los países. Era el líder más respetado y temido del movimiento socialista mundial.
Hacia 1870 luchó contra el anarquismo de Bakunin y en la defensa de la Comuna de París. Aun siendo
contrario a la insurrección de los comuneros fue el primero en defenderlos.
El capital (1867). Fue su contribución más grande al desarrollo teórico del comunismo científico
que, en palabras del propio Marx, fue la razón de todos sus sacrificios de salud, felicidad de la vida y la
familia. Así su obra cumbre constituyó la revolución teórica más importante experimentada por la
cultura moderna, la denuncia más implacable de la “esclavitud moderna”.

ARGUMENTOS ANTIMARXISTAS.
La mayoría de los teóricos estadounidenses descartaron a Marx, a quien consideraban un
ideólogo que apenas había contribuido al desarrollo de la teoría sociológica científica, tal vez debido a
que Marx nunca intentó ocultar su carga ideológica de sus teorías. Además del reciente fracaso de las
sociedades socialistas a lo largo del mundo. Aunque Marx mencionaba una sociedad en donde el
capitalismo fuera derrotado, nunca describió mucho ese mundo. Eso, para muchos, significaba lo
improbable de dicha idea.
La dialéctica de Marx es controversial debido a que era opuesta en algunos aspectos de la
forma general de los sociólogos. Para Marx las influencias sociales no se dan en una sola dirección, un
factor puede afectar sobre otro y este último puede influir sobre el primero, es decir que cuando
pensaba en causalidad se refería a las relaciones recíprocas entre los factores sociales, esta idea es
contraria al pensamiento general de Causa-Efecto. Además, dentro de esta dialéctica, los valores
sociales no son separables de los hechos sociales, puesto que se crearía una sociología inhumana y
desapasionada; la mayoría de los sociólogos creen que sus valores pueden y deben separarse de su
estudio de los hechos del mundo social.
Otro factor fue el que pensaba que pensaba que el futuro es una posibilidad de lo que hoy
existe y los marxistas esperaban que se produciría el socialismo. Este modelo implicaba que un
fenómeno social generaría otro opuesto y que el choque entre ambas daría lugar a uno nuevo. Pero
para los sociólogos contrarios a Marx en el mundo real, no existe lo inevitable.
Marx fue atacado porque criticaba fuertemente el sistema capitalista en base a lo que creía que
los seres humanos podían llegar a ser una vez liberados de las garras del capitalismo y pudieran
expresarse en el entorno más libre del comunismo, sin embargo, esto nunca fue tangible y lo contra
argumentan con el hecho de que el sistema capitalista había solventado algunos problemas de la
sociedad (conseguir comida, alojamiento y protección).

Aún dentro de su crítica al capitalismo, Marx solía relegar el nivel cultural a la condición de
epifenómeno (fenómeno secundario y derivado de otro principal) determinado por las estructuras
sociales y económicas. De hecho, en algunas obras llegó a reducir todo cambio social a un cambio de
índole material sobre el que se erigía la superestructura cultural.
El mayor problema que encuentra, en vida y póstumamente, fue el hecho de ser muy
displicente con todo lo que representaba la sociedad capitalista, sin tener la sutileza de rescatar
algunos factores pues en repetidas ocasiones minimizó y desecho algunos logros obvios del
capitalismo. Todo lo anterior es motivo de que sea criticado y apartado del mundo de la sociología
científica.
Conclusiones. Después de leer ambas bibliografías sugeridas encontramos que están
principalmente enfocadas a reivindicar la vasta obra de Marx dentro del enfoque sociológico. La lectura
es rica en sucesos, obras, ideas, ideales, percepciones, teorías, investigaciones y argumentos de este
gran filósofo.
Cabe mencionar que dentro de los argumentos a favor de Marx fue necesario incluir algunas
acciones y citas que realizó a lo largo de su vida para poder tener una idea un poco más amplia de lo
que buscaba comunicar y que, dentro de los argumentos antimarxistas están expresadas también
algunas de las ideas de Marx, las cuales no son del todo aceptadas, históricamente, por los sociólogos
y teóricos.
BIBLIOGRAFIA
Ritzer, G (1993). "Karl Marx" en Teoría sociológica clásica (pp. 165-203). México: MacGraw-Hill.
Cerroni, U (compilador). (1980). "Una vida al servicio de la ciencia y la emancipación de los trabajadores"
en El pensamiento de Marx (pp. 17-35). Barcelona: Ediciones del Serbal.

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ARGUMENTOS A FAVOR DEL MARXISMO.

Al dedicarse de lleno a sus estudios, ya en Berlín, y después de desistir de su obra “Filosofía

Estando en París publicó un número de la revista Anales francoalemanes en donde desarrolla

confianza no en las condiciones objetivas sino en la mera voluntad”.

A partir de 1864 dirigió la Primera Internacional y mantuvo contacto con centenares de

contrario a la insurrección de los comuneros fue el primero en defenderlos.

cultura moderna, la denuncia más implacable de la “esclavitud moderna”.

La mayoría de los teóricos estadounidenses descartaron a Marx, a quien consideraban un

improbable de dicha idea.

La dialéctica de Marx es controversial debido a que era opuesta en algunos aspectos de la

estudio de los hechos del mundo social.

para los sociólogos contrarios a Marx en el mundo real, no existe lo inevitable.

sociedad (conseguir comida, alojamiento y protección).

índole material sobre el que se erigía la superestructura cultural.

Conclusiones. Después de leer ambas bibliografías sugeridas encontramos que están

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