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INSTRUMENTOS
I. ENSE1i)ANZA
n. BIBLIOTECAS
111. ARCHIVOS
Primera sección
1) Minutas de las actas de cabildo (1564-1642), relativas a la junta
de cada día primero del año para la instalación del municipio. Está en
I volumen de 249 folios. Los folios 50-59 y 63-67 contienen la cédula de)
virrey don Alvaro Manrique de Zúñiga, marqués de Villa Manrique (11
de febrero de 1856), ratificando el derecho de la ciudad de Antequera
para elegir alcaldes ordinarios dentro de las reformas establecidas, que
depuraban ei voto de ciertas corruptelas. Como el caso se hizo contencio-
SO, las notas giradas por el municipio y las contestaciones del virreinato
son numerosas.
2) Actas de sesiones de cabildo (1728-1733), en 1 volumen de 710 folios.
3) Actas de sesiones de cabildo (1746-1748), en 1 volumen de 187
folios.
4) Libro de acuerdos (1820), en 1 volumen de 557 folios. Contiene muy
importantes disposiciones y circulares.
5) Actas de sesiones de cabildo (1824), en 1 volumen de 611 folios.
Contiene los documentos relativos a la organización de la administración
pública (no sólo municipal) después de la consumación de la Independen-
ción, y un interesantísimo padrón de las casas de la ciudad de Oaxaca, 4;le
sus propietarios y del impuesto predial que se pagaba.
6) Actas de sesiones de cabildo (1829) , en 1 volumen de 328 folios.
En el folio 234 hay una proclama del cabildo para resistir la invasión
española de Barradas. Incluye documentación sobre la municipalidad de
Xochímilco (más tarde incorporada a la ciudad), arrendamientos y litigios
de tierras y un avalúo de la hacienda de Panzacola.
7) Documentos de la tesorería municipal, en 2 volúmenes que datan
de 1764 y llegan a 1848, con grandes lagunas. Hay do.cumentación mez-
clada sobre la leva y la organización de la milicia nacional.
8) Protocolos de escrituras y testamentos, en 1 volumen q ue comprende
el período 1881-1895.
9) Secretaría municipal (1874-1875), en 2 volúmenes.
10) Actas de cabildo (1934-1937), en 10 volúmenes, sobre administración
de las agencias municipales.
OAXACA
Segunda sección
1) Miscelánea, de documentos relacionados con el período de la Inde-
pendencia, y otros de muy diversos ramos e índole, hasta el año de 1938.
2) Actas de sesiones de cabildo (1861-1933), en 130 volúmenes, con
grandes lagunas en el período 1861-1900.
3) Documentación de tesorería municipal (1848-1871), en 15 vo-
lúmenes.
4) Documentos varios (1823-1824), en 1 volumen.
5) Alhóndiga municipal (1772-1783), con documentación de la entrega
de maíz por los indios en el almacén municipal, para su venta a precios
ííjos.
6) Documentación miscelánea (178O--1S4S), en 1 volumen, sobre ne-
gocios de carácter administrativo.
7) Copiador de oficios (IS22-1S25), en 3 volúmenes. Contiene órde-
nes y estatutos municipales corespondientes a la constitución del Imperio
de Iturbide y del régimen federalista.
8) Secretaría municipal (1872-19°5), en 600 volúmenes.
9) Secretaríw municipal (19°6-1938), en 200 volúmenes.
10) Copiadores de cartas (1900--1921), en 100 volúmenes. Contiene
documentación sobre obras públicas, escuelas y rentas municipales.
1I) Manifestaciones del catastro (1917), en 5 volúmenes. Serie muy
incompleta por la resistencia de los propietarios a declarar susperte-
nencias.
12) Registro de fierros de ganado y otros documentos, en 1 volumen.
13) Memorias e informes anuales de los presidentes municiPales (IS72-
1920). Después del último año citado se omitió la publicación; pero los
originales, a máquina, se conservaron.
14) Legajos de bandos municipales (IS10--1S65), en 66 bultos.
15) Inventario general del Archivo de la Secretaría (1564-1906), en
una carpeta.
Tercera, sección
Está form ada por doscientos legajos de frecuente y actual consulta
de todas las dependencias municipales, a partir del año de 1930, para
proporcionar antecedentes a la presidencia, secretaría, tesorería y co-
misiones.
IV. SOCIEDADES
Aunque se han realizado diversos intentos para organizar algunas
sociedades de estudios históricos, estos esfuerzos no han podido cristalizar
hasta ahora, pese a que Oaxaca es uno de los Estados del país más carga-
dos de tradición. Todavía son pocas las personas interesadas en los
estudios históricos y menos aún los investigadores, debido probablemente
a las dificultades prácticas de consulta del Archivo General del Estado,
que carece de un sistema de clasificación por asuntos, y a la poca accesi-
bilidad del archivo del cabildo eclesiástico, que no es posible consultar sin
autorización especial, aunque sus legajos se encuentran colocados en orden
cronológico.
Actualmente sólo funciona en Oaxaca la Junta Auxiliar de la Socie-
dad Mexicana de Geografía y Estadística, instalada a principios de 1952.
Sus miembros se reúnen mensualmente en el local que facilita el Institu-
to de Ciencias y Artes. La mayor parte de los trabajos presentados hasta
hoy versan sobre temas de historia nacional o local. Saludablemente se
ha impuesto el sistema de no admitir sino trabajos de investigación.
V. PUBLICACIONES RECIENTES
VI. ENCUESTA
Entrevistamos a varios distinguidos intelectuales oaxaqueños para
conocer su opinión sobre la forma de impulsar los estudios de nuestra
historia local y de estimular a la juventud a emprender estudios de in-
vestigación y crítica, y hemos obtenido las respuestas siguientes:
LIC. LUIS CASTAÑEDA GUZMÁN:-"Los estudios históricos en Oaxaca
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adolecen, en general, de tres defectos: no se han hecho en orden, ni
siguiendo un sistema, ni en forma exhaustiva. Desde los tiempos de la
Colonia hemos tenido algunos compiladores de datos, de material histó-
rico. Al padre Burgoa, dominico y panegirista de su Orden, le ha faltado
la técnica y el sentido crítico; pero hay que agradecerle que nos haya
dejado un acervo valioso de informes, sin abandonar el estilo de la cróni-
ca, que es el de su tiempo.
"Encontramos algunos estimables intentos de sistematización ya en
don José María Murguía y Galardi, y posteriormente en don Manuel
:\lartínez Gracida, aunque este historiador nos da la impresión de estar
más preocupado por el dato que por la crítica.
"En el presbítero don José Antonio Gay se advierte una intención
meticulosa y algo de sentido crítico; desgraciadamente adolece de algunos
defectos comunes a Burgoa y a don Juan Bautista Carriedo: esboza la
crítica, la insinúa, pero no la realiza.
"El mejor y más serio intento de la historia moderna es el realizado
por Iturribarría, aunque con los defectos de toda obra para la que se
carece de la bibliografía necesaria, del tiempo suficiente para consultar
las fuentes, sin archivos ordenados para servir a los fines de la historia.
Estos defectos se compensan con el deseo de servir a la verdad y de apun-
tar hacia una crítica sistemática, independientemente de los puntos en
que pudiera disentirse de ella.
"La obra histórica del Lic. Manuel Brioso y Candiani no merece
ser considerada desde el punto de vista científico; pero sí desde el del
método.
"Creo que el espíritu investigador y el sentido de critica podrían des-
arrollarse, restableciendo la cátedra de Historia de Oaxaca en el Instituto
de Ciencias y Artes del Estado -inopinadamente desaparecida del actual
programa- y con el establecimiento obligatorio de esta materia en· la
Escuela Normal del propio Estado y Seminario Conciliar, no sólo para
formarnos un equipo de investigadores, sino porque es obvio que aboga-
dos, médicos, maestros y sacerdotes necesitan apoyar sus tareas profesio-
nales en el conocimiento de la psicología de nuestras razas autóctonas
y en el pretérito de la vida oaxaqueña, pues somos un pueblo cargado
de tradición.
"Se requiere también que los oaxaqueños (el Estado, la Iglesia y los
particulares) abran sus archivos a los estudiosos, que los pongan en manos
de técnicos para que los ordenen, clasifiquen y depuren, con ánimo de
servir a la historia de Oaxaca y del país y que se dé protección oficial
o privada para subvenir a esta clase de trabajos.
"El gobierno podría establecer una sección en la biblioteca general
del Estado, que contenga la mayor cantidad posible de fuentes históricas,
poniéndose de acuerdo con el Instituto y con el Patronato de la "Biblio-
teca Manuel Brioso y Candiani", legada a Oaxaca, para que este rico
acervo de publicaciones en libros y periódicos quede a la disposición de
los estudiosos de nuestra historia local.
"Por otra parte, debe formarse una agrupación de amigos de la
historia de Oaxaca. Si surgen quienes lleguen a ser escritores con senti-
JORGE FERNANDO ITURRIBARRÍA
do de crítica y de análisis de nuestros fenómenos del pasado, en buena
hora que haya historiadores; si no, que sólo se limiten a aportar los
datos útiles a quienes sean capaces de manejarlos.
"Necesitamos, además, que se reanude la publicación de libros de
carácter histórico regional, siguiendo la misma idea del régimen del
Lic. Eduardo Vasconcelos, como alguna vez lo planeó el Instituto. Debe
publicarse anualmente todo lo que valga como aportación, por modesta
que sea, de datos históricos, documentos, impresos raros, epistolarios.
etc., para formar el acervo que nos permita reanudar la tarea de fijar
el pasado y divulgarlo, reanudando así esta obra que puede malograrse
por un abandono punible de nuestras posibilidades.
"La guarda y conservación de los archivos de Oaxaca sería previsión
de un carácter impostergable, que hasta hoy se ha omitido. Si no se
atiende a este aspecto fundamental, nuestras fuentes históricas, ya muchas
de ellas truncas por la incuria, desaparecerán con el tiempo. El antece-
dente podría hallarse en la ley que expidió el doctor Héctor Pérez Martí-
nez siendo gobernador de Campeche."