Primera Estación

Te adoramos oh Cristo y te bendecimos.

Que por tu Santa Cruz redimiste al mundo.
Jesús condenado a muerte.
Alabado sea la Pasión y Muerte de Nuestro Señor
Jesucristo; y los dolores de su Santísima Madre.
Lectura del Santo Evangelio
(Jn.19) -(Luc.21)
Pilato preguntó a Jesús: ¿Eres tú el Rey de los Judíos?
Jesús respondió: Mi reino no es de este mundo.
Dijo Pilatos: ¿luego tú eres Rey?
Jesús respondió: Si, Yo soy Rey; para esto nací y para esto vine al mundo,
para dar testimonio de la verdad.
Y todo el pueblo se puso a gritar: ¨Quita de en medio a éste y suéltanos a
Barrabás. (Barrabás era un asesino).
Pilatos les dijo: Pero ¿qué mal ha hecho éste?
Yo no encuentro en él ninguna culpa.
Más ellos gritaron a grandes voces: Crucifícalo, crucifícalo!
Y Pilatos dio libertas a Barrabás, y en cambio a Jesús lo entregó a los judíos para
que lo crucificaran. Palabra de Dios.
Pilatos, por miedo a los judíos, condenó a muerte a Jesús. Oh señor, que no
juzguemos a nadie y no seamos juzgados nosotros. Que no condenemos a nadie, y
no seamos condenados por Dios. Amen. Padre nuestro…
Por tu sentencia injusta: Perdón señor, piedad.
Si grandes son mis culpas: mayor es tu bondad.
 Segunda Estación
Te adoramos oh Cristo y te bendecimos.
Que por tu Santa Cruz redimiste al mundo.
Jesús con la cruz a cuestas.
Alabado sea la Pasión y Muerte de Nuestro Señor
Jesucristo; y los dolores de su Santísima Madre.

Lectura del Santo Evangelio

Según San Juan.
Pilato mandó azotar a Jesús. Los soldados tejieron una corona de espinas y
se la pusieron en la cabeza. Le colocaron un traje de burlas y acercándose a
Él le decían:
¨Salve, Rey de los Judíos¨, y le daban puñetazos.
Pilatos lo presentó al pueblo: Jesús salió llevando la corona de espinas y el
manto de burlas, y Pilatos dijo:
¨ He aquí al hombre¨.
Pero ellos gritaban: ¨Si sueltas a este no eres amigo del César¨. Y Pilatos se
asustó y se lo entregó para que lo crucificaran.
Los judíos se apoderaron de Jesús, y Él llevando su cruz, salió en dirección
al llamado Calvario o Gólgota. Palabra de Dios.

Oh Señor: que también nosotros aceptemos la cruz de nuestros sufrimientos de

cada día, por amor tuyo y por la salvación de nuestras almas. Amen.
Padre nuestro…
Por tu cruz y tus clavos: Perdón señor, piedad.
Si grandes son mis culpas: mayor es tu bondad.
 Tercera Estación
Te adoramos oh Cristo y te bendecimos.
Que por tu Santa Cruz redimiste al mundo.
Jesús cae por primera vez.
Alabado sea la Pasión y Muerte de Nuestro Señor
Jesucristo; y los dolores de su Santísima Madre.

Descripción De Jesús en su pasión:

Profeta Isaías. (Cap.53)

Hemos visto al siervo de Dios sin figura y sin belleza, sin aspecto atrayente,
despreciado y evitado de los hombres, como un hombre de dolores,
acostumbrado a sufrimientos, ante el cual se ocultan los rostros,
despreciado y desestimado.
Él soportó nuestros sufrimientos y aguantó nuestros dolores. Lo
contemplamos como a un enfermo, herido de Dios y humillado; pero Él fue
traspasado por nuestras rebeliones, triturado por nuestros pecados; nuestro
castigo saludable cayó Él, y sus heridas nos curaron. Palabra de Dios.

Oh Señor: nosotros también somos tremendamente débiles. Ayuda con tu poder

nuestra gran debilidad para que no caigamos en pecados ni vicios. Amen.
Padre nuestro…

Por tu primera caída, Perdón señor, piedad.

Si grandes son mis culpas: mayor es tu bondad.
 Cuarto Estación
Te adoramos oh Cristo y te bendecimos.
Que por tu Santa Cruz redimiste al mundo.
Jesús se encuentra con su Santísima Madre.
Alabado sea la Pasión y Muerte de Nuestro Señor
Jesucristo; y los dolores de su Santísima Madre.
¿Cómo encontró la madre de Dios a su Santísimo hijo?

Lectura del profeta Isaías. (Cap.53)

Así hemos visto al siervo de Dios: maltratado, se humillaba y no abría la
boca.
Como cordero llevado al matadero, como oveja ante el esquilador,
enmudecía y no abría la boca.
Todos errábamos como ovejas, cada uno siguiendo su camino. Y el Señor
cargó sobre Él todos nuestros pecados.
El Señor quiso triturarlo con el sufrimiento, y entregar su vida como
expiación.
Él cargó con el pecado de muchos, e intercedió por los pecadores.
Palabra de Dios.
Porque María amaba más que todas las demás madres, por eso Ella sufría
más que todas las demás, al perder a su Hijo. Al ver a María con tantos
sufrimientos, nos quejaremos todavía de nuestras penas? Oh Madre
Dolorosa, enséñanos a sufrir con paciencia como Tú. Amen.
Dios te salve María…

Por tu divina Madre, Perdón señor, piedad.

Si grandes son mis culpas: mayor es tu bondad.

Quinta Estación
Te adoramos oh Cristo y te bendecimos.
Que por tu Santa Cruz redimiste al mundo.
El cireneo ayuda a Jesús a llevar la cruz.
Alabado sea la Pasión y Muerte de Nuestro Señor
Jesucristo; y los dolores de su Santísima Madre.
Por qué estaba Jesús tan débil que fue necesario que
Simón de Cirene le ayudara a llevar la cruz? Una de las razones
Porque había sufrido una espantosa agonía la noche anterior. El evangelista
nos la refiere así:
Lectura del Santo Evangelio
Fue Jesús al Huerto de Getsemaní, a orar. Y empezó a entristecerse y
angustiarse. Entonces dijo a sus discípulos: ¨Me muero de tristeza¨. Cayo
rostro en tierra y se puso a orar diciendo: ¨padre mío: si es posible que se
aleje de mí este cáliz de amargura, pero que no se haga lo que yo quiero,
sino lo que quieres Tú. ¨
´´Padre mío, si no es posible que pase de mí este cáliz de amargura, hágase
tu Voluntad´´. Y oró por tercera vez repitiendo las mismas palabras.
Transido de angustia oraba más intensamente. Y su sudor se convirtió en
gotas de sangre que caían hasta el suelo. Palabra de Dios.
Oh Jesús: haz que también nosotros ayudemos generosamente a todos los
que necesitan de nuestros servicios y favores. Amen. Padre nuestro…
Por tu agonía en el huerto, Perdón señor, piedad.
Si grandes son mis culpas: mayor es tu bondad.

Sexta Estación
Te adoramos oh Cristo y te bendecimos.
Que por tu Santa Cruz redimiste al mundo.
La verónica enjuaga el rostro de Jesús
Alabado sea la Pasión y Muerte de Nuestro Señor
Jesucristo; y los dolores de su Santísima Madre.
El rostro del señor estaba destrozado por los golpes
recibidos en la casa de Caifás

Lectura del Santo Evangelio según San Marcos

El sumo sacerdote le preguntó: ´´ ¿Eres tú el Mesías, el Hijo de Dios
bendito? ¨ Jesús respondió: -Si, yo soy. Y veréis a este hombre sentado a la
derecha de Dios Todo poderoso, venir entre las nubes del cielo.
El sumo sacerdote se rasgó las vestiduras diciendo: - ¿Qué más hace falta?
Habéis oído la blasfemia ¿Qué os parece? Y todos contestaron:
Reo es de muerte. ´´Y se pusieron a escupirle. Y tapándole los ojos le daban
golpes diciéndole: ´´adivina profeta´´´. Y también los guardias lo llenaron de
puñetazos. Palabra de Dios.
La verónica con la mejor toalla de su casa le seca el rostro. Y Jesús deja su
retrato santísimo en aquella tela. Oh Jesús que bien pagas los favores que
se hacen a los demás.
Bendito seas. Amén. Padre nuestro…

Por tu sentencia injusta, Perdón señor, piedad.

Si grandes son mis culpas: mayor es tu bondad.
 Séptima Estación
Te adoramos oh Cristo y te bendecimos.
Que por tu Santa Cruz redimiste al mundo.
Jesús cae por segunda vez
Alabado sea la Pasión y Muerte de Nuestro Señor
Jesucristo; y los dolores de su Santísima Madre.

Lectura del Santo Evangelio según San Mateo

Los dolores Jesús tenían un agravante y es que Él sabía perfectamente de
antemano todo lo que iba a suceder. Así lo había anunciado.
´´Jesús empezó a anunciar a sus discípulos que tenía que ir a Jerusalén,
padecer mucho de manos de los jefes de la nación, ser azotado y morir, y al
tercer día resucitar.
Pedro trato de disuadirlo, pero Jesús le contestó: ´´apártate de mí Satanás,
porque no piensas como Dios sino como los hombres´´.
Y decía a los discípulos: ´´Si alguno quiere venir conmigo, que se niegue así
mismo, acepte su cruz cada día y me siga. Porque el que pierda su vida por
mí la salvará´´.
´´Pues de qué le sirve a una persona ganar el mundo entero si pierde su alma
´´. Palabra de Dios…
Oh Jesús, manso y humilde de corazón, has nuestro corazón semejante al
tuyo. Amén. Padre nuestro…

Por tu paciencia inmensa, Perdón señor, piedad.

Si grandes son mis culpas: mayor es tu bondad.

Octava Estación
Te adoramos oh Cristo y te bendecimos.
Que por tu Santa Cruz redimiste al mundo.
Jesús se encuentra con las santas mujeres
Alabado sea la Pasión y Muerte de Nuestro Señor
Jesucristo; y los dolores de su Santísima Madre.

Lectura del Santo Evangelio según San Lucas

(Capítulo 23)
Los seguía gran gentío del pueblo y muchas mujeres que se golpeaban el
pecho y gritaban llorando por él.
Jesús se volvió hacia ellas y les dijo: ´´Mujeres de Jerusalén: no lloréis por
mí, llorad por vosotras y por vuestros hijos, porque van a llegar tiempos tan
terribles que dirán: ´´Dichosas las mujeres que no tuvieron hijos´´. Entonces
pedirán a los montes: ´´Caed sobre nosotras´´. Y a las colinas:
¨Sepultadnos¨. Porque si al árbol verde lo tratan así, ¿qué les ira a pasar los
árboles secos? Palabra de Dios…

Oh Jesús, manso y humilde de corazón, has nuestro corazón semejante al

tuyo. Amén. Padre nuestro…

Por tu gran inocencia, Perdón señor, piedad.

Si grandes son mis culpas: mayor es tu bondad.
 Novena Estación
Te adoramos oh Cristo y te bendecimos.
Que por tu Santa Cruz redimiste al mundo.
Jesús cae por tercera vez
Alabado sea la Pasión y Muerte de Nuestro Señor
Jesucristo; y los dolores de su Santísima Madre.
Jesús se humilló hasta el extremo y por eso Dios lo
exaltó más que a todos los demás

Lectura De San Pablo a los filipenses

Tened los mismos sentimientos que tuvo Cristo Jesús, el cual, a pesar de su
condición divina, no quiso insistir en pedir los hombres de su condición de
Dios, y tomó la naturaleza de esclavo.
Y presentándose como uno de tantos, se humilló, obedeciendo hasta la
muerte y muerte de cruz.
Por eso Dios lo exaltó, y le dio un nombre que está sobre todo nombre, de
manera que al nombre de Jesús, toda rodilla se doble en el cielo, en la tierra
y en los abismos y toda lengua proclame que Jesús, EL MESÍAS, es señor,
para la gloria de Dios padre. Palabra de Dios.

Mil veces bendito seas oh Cristo que has querido sufrir tanto para borrar
nuestras culpas. Haz que tu pasión y muerte no sea inútil para ninguno de
nosotros. Amén. Padre nuestro…

Por tu humildad profunda: Perdón señor, piedad.

Si grandes son mis culpas: mayor es tu bondad.

Décima Estación
Te adoramos oh Cristo y te bendecimos.
Que por tu Santa Cruz redimiste al mundo.
Jesús es despojado de sus vestiduras
Alabado sea la Pasión y Muerte de Nuestro Señor
Jesucristo; y los dolores de su Santísima Madre.

Lectura del Salmo 21

Donde el profeta anuncia lo que habría de suceder a Jesús
Dios mío. Dios mío ¿Por qué me has abandonado?
Yo soy ya como un gusano, no como un hombre.
Mi garganta está seca como una teja en el horno, y se me pega la lengua al
paladar. Me acorralan como perros rabiosos. Han taladrado mis manos y mis
pies y se pueden contar todos mis huesos. Se repartieron mis vestidos, y mi
túnica la repartieron a la suerte. Palabra de Dios.

Oh Cristo: Que el padre Dios reciba tus terribles sufrimientos por nuestras
faltas, y como pago de todas las ofensas que hemos hecho. Amén.
Padre nuestro…

Por tu pasión y Muerte: Perdón Señor, piedad.

Si grandes son mis culpas: mayor es tu bondad.
 Undécima Estación
Te adoramos oh Cristo y te bendecimos.
Que por tu Santa Cruz redimiste al mundo.
Jesús es clavado en la cruz
Alabado sea la Pasión y Muerte de Nuestro Señor
Jesucristo; y los dolores de su Santísima Madre.

Lectura del Santo Evangelio

Llegados al calvario lo crucificaron, a Él y dos malhechores: uno a la
derecha y otro a la izquierda. Jesús decía: ´´Padre, perdónales porque no
saben lo que hacen´´. Le dieron a beber vino mezclado con hiel, pero Él
después de probarlo no quiso tomarlo. El pueblo estaba mirando, y los jefes
haciendo muecas le decían: A otros salvó? Que se salve así mismo, si es el
Cristo de Dios.
También los soldados se burlaban de Él.
Uno de los malhechores colgados le insultaba diciéndole: ´´ No eres Tú el
Cristo? Pues sálvate a Ti y a nosotros´´. Pero el otro decía: ´´Jesús acuérdate
de mí, cuando estés en tú reino´´.
Jesús le dijo: ´´yo te aseguro: hoy mismo estarás conmigo en el paraíso´´.
Palabra de Dios.
´´Nadie tiene mayor amor que el que da la vida por sus amigos´´. Gracias
Señor. Enséñanos a sufrir como Tú: con paciencia, y ofreciendo todo a Dios.
Amén.
Padre nuestro…
Por tu cruz y tus clavos: Perdón Señor, piedad.
Si grandes son mis culpas: mayor es tu bondad.

Duodécima Estación
Te adoramos oh Cristo y te bendecimos.
Que por tu Santa Cruz redimiste al mundo.
Jesús muere en la cruz
Alabado sea la Pasión y Muerte de Nuestro Señor
Jesucristo; y los dolores de su Santísima Madre.

Lectura del Santo Evangelio

Jesús viendo a su madre, y junto a ella el discípulo a quien amaba, dice a su
Madre: ´´Mujer, ahí tienes a tu hijo ´´. Luego dice al discípulo ´´Ahí tienes a tu
madre´´. Y desde aquel momento el discípulo la recibió en su casa.
Luego dijo: ´´Tengo sed´´. Los soldados le acercaron una esponja con
vinagre y Él lo tomó. Después viendo que todo estaba cumplido dijo:
´´Todo esta consumado´´.
Era cerca del medio día cuando lo crucificaron. Y desde medio día hasta las
tres de la tarde, el sol se eclipsó, y la oscuridad reino sobre la tierra. Jesús
decía: ´´Dios mío, Dios mío, por qué me has abandonado? ¨ A eso de las tres
de tarde Jesús dio un gran grito diciendo: ´´Padre en tus manos encomiendo
mi espíritu´´ e inclinando la cabeza expiró. Palabra de Dios…
Oh Padre Celestial: recibe la pasión y muerte de tu amado hijo, y su
preciosa Sangre por el perdón de los pecados de todos nosotros y de todo
el mundo. Amén. Padre nuestro…

Por tu Pasión Y Muerte: Perdón Señor, piedad.

Si grandes son mis culpas: mayor es tu bondad.
 Décima Tercera Estación
Te adoramos oh Cristo y te bendecimos.
Que por tu Santa Cruz redimiste al mundo.
Jesús es bajado de la cruz y colgado en brazos de su
santísima madre.
Alabado sea la Pasión y Muerte de Nuestro Señor
Jesucristo; y los dolores de su Santísima Madre.
Lectura del Santo Evangelio según San Juan
Los judíos rogaron a Pilatos que les quebraran las piernas a los crucificados
y los tiraran.
Fueron pues los soldados y les quebraron las piernas a golpes al primero y
al otro crucificado con él. Pero al llegar a Jesús, como encontraron que ya
estaba muerto no le quebraron las piernas, sino que uno de los soldados le
atravesó el pecho con una lanza, y al instante salió sangre y agua. Lo
atestigua el que lo vio y su testimonio es verdadero.
Y esto sucedió para que se cumpliera la Escritura que había anunciado: ´´No
le quebrantaréis ningún hueso ¨. Y´´ Mirarán al que traspasaron´´.
José de Arimatea y Nicodemo, bajaron el cuerpo de Jesús, lo ungieron con
unas cien libras de mirra y aromas finas y lo envolvieron en unas sábanas
para enterrarlo. Palabra de Dios…
Ea oh Madre, de amor copiosa fuente haz que al llorar contigo experimente-
de tu pena el poder. - Haz que en amor se encienda el pecho frio-para que
amando a Cristo Dueño mío, -le pueda complacer. Amén. Padre nuestro…

Por tu Madre santísima: Perdón Señor, piedad.

Si grandes son mis culpas: mayor es tu bondad.

Décima Cuarta Estación

Te adoramos oh Cristo y te bendecimos.
Que por tu Santa Cruz redimiste al mundo.
Jesús muere en la cruz
Alabado sea la Pasión y Muerte de Nuestro Señor
Jesucristo; y los dolores de su Santísima Madre.

Lectura del Santo Evangelio según San Marcos

José de Arimatea colocó el cuerpo de Jesús en su sepulcro nuevo, labrado
en la roca, en el cual nadie había sido sepultado, y luego hizo rodar una gran
piedra a la entrada del sepulcro. El primer día de la semana, María
Magdalena, María de Santiago y Mará Salomé, muy de madrugada, antes de
salir el sol, llegaron al sepulcro, con aromas para embalsamar el cuerpo de
Jesús. Y se decían unas a otras: ¿Quién nos correrá la piedra de la entrada?
Pero al levantar la mirada vieron que la piedra ya estaba retirada, y eso que
era muy grande. Entraron al sepulcro y vieron un ángel vestido de blanco
que les dijo: ´´No asustéis. Buscáis a Jesús Nazareno? El Crucificado? No
está aquí. Ha resucitado. Id a decir a sus discípulos y a Pedro que irá delante
de vosotros a Galilea y allí le veréis. Palabra de Dios.
Que también nosotros todos seamos un día resucitados por Ti y llevados a
la gloria del cielo cantar las alabanzas de Dios.
Padre nuestro…

Por tu Sagradas Llagas: Perdón Señor, piedad.

Si grandes son mis culpas: mayor es tu bondad.