El Vivero Agroforestal
El Vivero Agroforestal
El Vivero Agroforestal
AREA DE VIVERO
Instalaciones de protección
Cercas perimetrales, es necesario o conveniente que el lugar donde va a estar
ubicado el vivero este protegido por una cerca perimetral, que impida la entrada de
animales y de personas ajenas que puedan causar daños. Las cercas pueden
construirse con alambre de púa, bloques, tallos de bambú, troncos de árboles,
láminas para techos, entre otros materiales disponibles en la zona; contra vientos,
se recomienda establecer cortinas rompevientos usando árboles o arbustos de la
zona; coberturas, en las áreas destinadas a los semilleros, canteros y envases se
deben poner coberturas sobre los mismos, con una altura mínima de 1,5 metros,
para evitar la exposición solar directa, lluvias intensas y daños por pájaros.
Pueden usarse paja de vetiver, hojas de palmas y mallas para umbráculos.
Instalaciones de producción.
Semilleros o germinadores, son lugares preparados para la germinación y
desarrollo inicial de las plantas. La mayoría de las veces son de forma rectangular,
de 100 a 110 centímetros de ancho con largos variables, según las necesidades
de producción. Pueden construirse con bloques, ladrillos, piedra, tablas, troncos
de árboles, tallos de bambú, camellones de tierra, entre otros materiales de la
zona. En las zonas secas pueden construirse al nivel del suelo y en las zonas
lluviosas deben estar sobre el nivel del suelo, para permitir el drenaje del agua y
evitar encharcamientos.
Canteros o envases de crecimiento, son los lugares donde se trasplantan y
crecen las plántulas, después que salen del semillero, hasta que estén lista para
ser plantada en campo. Pueden tener de 100 a 110 centímetros de ancho por 10 a
50 metros de largo. Los canteros, al igual que los semilleros, pueden construirse al
nivel o sobre el nivel del suelo, dependiendo las condiciones de drenaje del suelo.
Cuando se usan envases como bolsas de polietileno, empaques plásticos de
harinas, granos y mitades de botellas plásticas con huecos en el fondo, estos
envases deben arreglarse sobre el suelo en hileras, agrupadas en bloques
compactos. Sí los envases son tubetes, éstos pueden colocarse en bandejas para
tubetes sobre el suelo o en estructuras elevadas o también en mallas colgantes.
Instalaciones de acceso
Espacios destinados para los pasillos y calles. El ancho de los pasillos debe
permitir el paso fácilmente con una carretilla y el ancho de las calles debe permitir
el fácil acceso de vehículos de carga y tractores.
Instalaciones de riego
Área para el almacenamiento de agua de riego, con sistema de bombeo y
mangueras de distribución de agua. El riego puede ser por aspersión, micro
aspersión, goteo y con regaderas manuales.
Otras instalaciones
Área de preparación, donde se coloca la tierra, el abono orgánico y el
compostero. Allí se realiza el cernido, mezclado del sustrato y el llenado de los
envases.
Área de oficinas y galpones para el resguardo de los equipos, herramientas de
trabajo y para el almacenamiento seguro de agroquímicos (fertilizantes, fungicidas,
insecticidas, etc.), oficina y otras.
Materiales y herramientas
La cantidad y tipo de herramientas a utilizar dependen del tamaño y tipo de vivero.
Deben ser fáciles de conseguir en la zona, adecuadas para el trabajo diario y para
hacer las reparaciones que se requieran. Las herramientas y materiales que se
requieren comúnmente son: carretillas, picos, escardillas, rastrillos, palines, tijeras
de podar, asperjadoras de espalda, desmalezadoras, machetes, regaderas de
mano, estacas, tamices (cedazo o zaranda) para cernir la tierra, mallas para
umbráculos, mecatillo, alambre para amarrar, envases (bolsas, tubetes), cestas,
bandejas, repuestos y accesorios para la bomba de agua, mangueras, aspersores,
guantes, navajas y materiales de reposición para canteros, semilleros y cercas
(tablas, bloques, alambre de púa, etc.); tierra negra, arena, abono orgánico, entre
otros.
PREPARACIÓN DEL SUSTRATO
Los sustratos utilizados pueden ser de origen orgánico tales como turba, aserrín,
fibra de coco, cascarilla de arroz, compost, bocashi y de origen inorgánico como
arena, perlita y vermiculita. La tierra debe colarse antes de usarla para eliminar
raíces, terrones y otros elementos extraños. La mezcla comúnmente utilizada en
semilleros o germinadores es una parte de materia orgánica o compost y tres
partes de arena o tierra cernida (relación 1:3), lo que es igual a una carretilla de
materia orgánica o compost y tres de arena o tierra. En envases (bolsas o tubetes)
la relación es de 1:2, es decir una carretilla de materia orgánica o compost y dos
de arena o tierra. Adicionalmente se puede agregar hasta 300 gramos de
fertilizante fórmula completa (nitrógeno + fósforo + potasio).
Para la desinfección del sustrato se usa agua hirviendo como método físico y el
Dazomet, como método químico.
Desinfección de sustrato por métodos químico y físico
DAZOMET: En los semilleros, se humedece el sustrato, se aplican 40 gramos de
producto por metro cuadrado, se cubre por 5 días, se remueve varias veces y se
espera de 10 a 15 días para sembrar.
AGUA HIRVIENDO: Se aplica agua hirviendo al sustrato, se cubre con algún
material que permita mantener el calor durante algún tiempo y luego se siembra.
No contamina y es de bajo costo, es aconsejable su uso en viveros pequeños.
LA SIEMBRA
En semilleros, cuando las semillas son pequeñas la siembra se hace al voleo;
cuando son semillas medianas, se realiza en surcos separados a 2 a 5
centímetros; y cuando las semillas son grandes en hoyos individuales. Por lo
general la siembra se realiza a una profundidad igual o dos veces el tamaño de la
semilla.
En algunos casos se puede realizar la siembra directa en los envases, sobre todo
si las semillas son grandes, de rápida germinación y buen vigor como la semilla de
teca. La cantidad de semillas a sembrar debe ser mayor que la cantidad de
plantas necesaria, tomando en cuenta el porcentaje de germinación y las posibles
pérdidas por transporte, enfermedades o mal formaciones.
MANEJO DE PLANTULAS EN SEMILLERO
Riego: De una a dos veces al día, preferiblemente a primeras horas de la mañana
o al atardecer. El volumen de agua a aplicar por riego debe ser aproximadamente
de 3 a 5 litros por cada metro cuadrado de semillero.
Fertilización: Aplicando de 2 a 5 gramos de fórmula completa por planta, cada 2
meses. Las aspersiones foliares deben realizarse cada 15 a 22 días. Las dosis a
aplicar dependen del tipo de producto a utilizar.
Sombreamiento: Proporcionar sombra los primeros 30 días de desarrollo de las
plántulas en el semillero y luego al momento del trasplante.
Desmalezado: Dentro del semillero, en forma manual una vez por semana y en
los pasillos, una vez al mes, con desmalezadora, machete u otra herramienta
manual.
Control de plagas y enfermedades: Contra daños físicos ocasionado
principalmente por hongos e insectos. Durante la germinación es muy común el
salcocho o mal del talluelo, causado por exceso de humedad y por falta de
aireación en el sustrato. Esto se previene con una buena ubicación del semillero y
adecuada preparación y desinfección del sustrato.
Trasplante en envases
Consiste en llevar las plántulas desde los semilleros hasta los envases (bolsas,
tubetes, otros) cuando las plántulas tienen 4 nudos y de 7 a 10 centímetros de
altura.
Durante el trasplante se debe asegurar:
Riego: Abundantemente, sin encharcamiento, en el semillero y en los envases a
donde se trasplantarán las plántulas.
Remoción de la tierra: alrededor de la plántula, se toma esta con cuidado, se
saca del semillero y se pone en un recipiente con agua hasta que se desprenda la
tierra.
Poda de raíces: se cortan las raíces que sean mayores a 5 centímetros de largo.
La poda no debe ser mayor del 30 por ciento del tamaño de la raíz.
Elección de las mejores plántulas: Se eliminan las plántulas enfermas,
malformadas y pequeñas, dejando solo las mejores.
En el envase: Se hace un hoyo en el centro del sustrato contenido en el envase,
lo suficientemente profundo para introducir una plántula sin que se doble la raíz;
luego se introduce la plántula en el hoyo hasta el nivel del tallo, cuidando que no
se doblen las raíces; y por último se rellena el hoyo con sustrato y se apisona con
los dedos. La edad de trasplante difiere entre especies.
MANEJO DE PLANTAS EN LOS ENVASES
Riego: Diariamente después del trasplante, temprano en la mañana y al
atardecer. Luego espaciar los riegos para mantener humedecido el sustrato sin
encharcamiento.
Sombreamiento: Proveer sombra hasta que enraícen las plántulas, que es
cuando les crecen hojitas nuevas.
Poda de raíz: Se hace para evitar el enrollamiento de la raíz principal y para
estimular el crecimiento de raíces secundarias.
Desmalezado: Se arrancan las malezas de cada envase de forma manual; y con
desmalezadora u otra herramienta manual en las caminarías y áreas de trabajo.
Manejo de plantas en los envases: Esta práctica es recomendada cuando se
usan bolsas y las plantas pasan mucho tiempo en vivero. Una vez organizadas en
hileras para facilitar su manejo, las bolsas se deben cambiar regularmente de
lugar en las hileras para evitar que las plantas echen raíces fuera de ellas.
ACLIMATACIÓN
Práctica recomendada para que las plantas toleren los cambios ambientales
bruscos y puedan sobrevivir una vez que sean plantadas en campo. Cuando las
plantas alcancen el tamaño de trasplante a campo, se debe disminuir la frecuencia
de los riegos dos meses antes y también se deben eliminar de forma gradual la
fertilización y la sombra.
PLANTACIONES EN CAMPO
Antes de llevar las plantas al campo se debe asegurar:
Selección: Se descartan todas las plantas inferiores al tamaño requerido de
plantación, enfermas o muertas.
Riego: El día del traslado a campo, para que las plantas soporten las condiciones
de campo.
Traslado a campo: Debe hacerse en las primeras horas de la mañana o al
atardecer, para evitar el exceso de sol.
Método de plantación: En el vivero se producen plantas que deben ser
preparadas previamente, considerando el método de plantación seleccionado: raíz
desnuda o con tierra (cepellón) para la reforestación y plantaciones forestales
comerciales.
Uso de plantas de calidad:
Una planta de calidad es el punto final de un buen trabajo de vivero y el punto de
inicio de una plantación exitosa. Debe reunir las siguientes características:
de 30 a 40 centímetro de altura
grosor del tallo de un centímetro
abundante raíces y hojas
parte aérea y raíces equilibradas (aproximadamente del mismo tamaño
sanas y vigorosas