Michael Jackson y Elvis Presley Biografias
Michael Jackson y Elvis Presley Biografias
Michael Jackson y Elvis Presley Biografias
Michael Jackson
Arropado por Diana Ross y otros artistas de categoría, The Jackson Five
experimentó un ascenso fulgurante: tras un primer sencillo en 1967, Berry
Gody los contrató para el sello Motown, que hasta 1975 editó los sucesivos
y exitosos singles que, junto con las apariciones televisivas y los conciertos,
lanzaron el grupo al estrellato. Sin llegar a desvincularse de sus hermanos,
con quienes seguiría compartiendo grabaciones y escenarios, Michael
Jackson inició una trayectoria individual en 1971, año en que editó Got to
Be There (1971), al que siguió Ben(1972). Ambos álbumes entraron con
fuerza en las listas; con la canción que dio título al segundo álbum, Ben,
alcanzó su primer número uno en Estados Unidos. Con la discográfica
Motown grabó todavía dos álbumes más (Music and Me, 1973, y Forever,
Michael, 1975), de menor éxito.
En 1975, tras romper con Motown y fichar por Epic Records, The Jackson
Five pasaron a llamarse The Jacksons. Aunque hasta 1985, y tanto en sus
giras y conciertos como en las grabaciones en estudio, el grupo pudo contar
con la presencia y aportaciones de su líder, Michael Jackson fue
progresivamente concentrándose en su carrera en solitario, especialmente
después de la fama que le reportó su intervención en la película musical de
Sidney Lumet El Mago (1978), un remake de El Mago de Oz en el que,
interpretando el papel de Espantapájaros, cantó a dúo con Diana Ross.
Aunque el filme no fue un gran éxito de taquilla, su director
musical, Quincy Jones, quedó fascinado por el talento de aquel joven de
veinte años y se convirtió en el principal artífice de la meteórica carrera que
impulsaría a Michael Jackson hasta cotas de popularidad nunca vistas. La
importancia del respaldo de Quincy Jones se puso en evidencia con los
resultados del álbum Off the Wall (1979), que daría al nuevo ídolo del pop
la nada despreciable cantidad de cinco singles de éxito consecutivos, con
temas como Rock with You o Don't Stop 'Til You Get Enough. El álbum en sí
no llegó a ser número uno, pero superó los ocho millones de copias
vendidas antes de que acabase ese año.
A partir de entonces empezaron a conocerse algunas de las manías y
extravagancias de las que Michael Jackson haría gala a lo largo de toda su
carrera, como sus personales ideas religiosas o la desmedida atención que
prestaba a su salud y a su apariencia física; fueron, sin embargo, los años
en que mejor concentró su talento y energías en la creación artística. El
éxito de Off the Wallpropició una nueva colaboración de Jackson con Quincy
Jones, cuyo resultado, tras un largo e intenso trabajo, fue Thriller, que no
salió al mercado hasta 1982.
Caracterizado como zombi en un fragmento de Thriller (1982)
Thriller registró un éxito abrumador, pasando en poco tiempo a ser el disco
de un solo artista más vendido de la historia de la música. Siete de sus
nueve canciones se auparon como sencillos en las listas tanto americanas
como británicas, y dos de sus temas, Billie Jean y Beat It, acompañados de
atractivos vídeos, llegaron a ocupar sucesivamente el primer lugar del
ranking de ventas en Estados Unidos. En Inglaterra lograría aún más fama
con dos temas cantados con el ex miembro de The Beatles Paul
McCartney, The Girl Is Mine (incluido en Thriller) y Say Say Say, que formó
parte del álbum de McCartney Pipes of Peace (1983).
Michael Jackson demostró su instinto comercial al idear la creación de un
vídeo para potenciar la canción que daba título al álbum y que todavía no
había aparecido en forma de single. Para su dirección contrató a John
Landis, y lo produjo, en gran parte, pagándolo de su bolsillo, ya que la
discográfica no creía que la inversión fuese necesaria; los responsables de
la compañía opinaban, muy equivocadamente, que el disco estaba ya en su
límite de ventas. La aparición del vídeo de Thriller, con sus novedosos
efectos especiales y su elaborada coreografía, sacudió las estructuras
habituales del mercado de la música. El álbum se disparó hasta los
cuarenta millones de copias, doblando casi las ventas anteriores al vídeo. El
propio vídeo en formato doméstico alcanzó también ventas millonarias,
dejando de ser un mero instrumento de promoción del álbum para
convertirse en un negocio en sí mismo.
Tras recibir ocho premios Grammy por Thriller, todavía acompañó Michael
Jackson a sus hermanos en los conciertos promocionales del penúltimo
álbum de la banda, Victory (1984), así como en la gira final de The
Jacksons en 1985, patrocinada por una importante compañía de refrescos.
Junto a una impresionante nómina de consagrados artistas
estadounidenses (Bruce Springsteen, Stevie Wonder, Ray Charles, Bob
Dylan, Tina Turner, entre otros), ese mismo año participó en la grabación
del single We Are the World (tema compuesto por el propio Jackson y Lionel
Richie), cuyos beneficios se destinaron a combatir el hambre y las
enfermedades en África. No fue éste el primero ni el último de los
proyectos altruistas en que colaboró el cantante; pero sus conocidas
excentricidades, a menudo deformadas, y sobre todo las sospechas de
pedofilia, por las que nunca llegó a ser condenado, pesarían luego como
una losa sobre su imagen, haciendo olvidar que ninguna estrella musical
entregó a organizaciones humanitarias tantas donaciones y recaudaciones
de conciertos y discos como Michael Jackson.
Elvis Presley