Juliana de Norwich (1343-1413)

INTRODUCCIÓN A LA AUTORA

Juliana es la más popular de los místicos ingleses. Vivió como una monja benedictina en
Norwich, al lado de la Iglesia de San Juan, de donde es muy posible que agarró su
nombre. Poco se conoce de la vida de Juliana, aunque es mencionada por su
contemporánea, Margery Kempe.
El libro de Juliana Revelations of Divine Love [Revelaciones del Amor Divino] le
autoriza ser la primera gran escritora femenina en el lenguaje inglés. A pesar de su
modestia de ser una autora sin habilidades, escribió una prosa muy viva en un estilo
muy propio. Estaba bien entrenada en la Biblia y en las enseñanzas de la Iglesia.
Su teología se basa en sus experiencias místicas. Se enfermó seriamente a la edad
de treinta y en medio de sus sufrimientos oró pidiendo una visión de la pasión de Cristo.
Una ocasión en un tiempo de oración Juliana escuchó las palabras, “Yo soy el
fundamento de tu oración” —palabras que influenciaron grandemente su vida espiritual.
Siempre señaló la bondad y el amor de Dios, una luz en un tiempo de tinieblas para
Juliana, quien vivía en una época de inquietud social y temor de la Plaga Negra.
Quizás la nota clave de sus escritos es el gozo. Ella escribió el famoso dicho,
“Todo estará bien y todo estará bien, y todas las maneras de las cosas estarán bien.” Se le
ha llamado a sus escritos “el fruto más perfecto del misticismo tardío medieval en
Inglaterra.” La siguiente selección muestra su intenso deseo y su sano razonamiento.
Aunque sus “revelaciones” pudieran ser difíciles de identificarse con ellas
completamente en el día moderno, contienen discernimientos significantes de donde
todos podemos aprender.

PORCIONES DE REVELACIONES DEL AMOR DIVINO

1. Todavía Deseo Más

En el año 1373, mayo 13, Dios me dio una La primera fue un profundo recuerdo de
triple revelación. Esta fue su don de gracia su pasión. La segunda fue una enfermedad
para mí en respuesta a mi deseo de física. La tercera era tener, del don de Dios,
conocerle más. tres heridas.
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Con respecto a la primera, me parece Con respecto a la tercera, por la gracia de
que tuve algún sentimiento por la Pasión de Dios y la enseñanza de la Iglesia concebí un
Cristo, pero todavía deseaba tener más por gran deseo de recibir tres heridas en mi
la gracia de Dios. Mi deseo era haber estado vida. Ellas eran: la herida de la verdadera
presente con aquellos que aman a Cristo y contrición; la herida de la compasión
estuvieron con él en su pasión de tal manera amante; y la herida de anhelar por Dios con
que, con mis propios ojos, pudiera ver la mi voluntad.
pasión que nuestro Señor sufrió por mí, y Aunque pedí las otras dos
para que pudiera sufrir con él como los condicionalmente, pedí urgentemente por
otros que le amaban lo hicieron. Nunca esta tercera sin ninguna condición. Estos
deseé otra visión o revelación de Dios. dos deseos que mencioné primero pasaron
de mi mente, pero la tercera permanecía allí
2. Purgada por la Misericordia de Dios continuamente.

Con respecto a la segunda gracia, vino a mi 4. Vivir para Amar a Dios Mejor
mente un deseo de mi voluntad de tener por
el don de Dios una enfermedad física. Cuando tenía treinta años, Dios me envió
Quería que la enfermedad fuera tan severa una enfermedad física que fuí confinada a la
que pareciera mortal. Esto era para que cama por tres días y tres noches. En la
pudiera recibir todos los ritos de la Iglesia y tercera noche recibí todos los ritos de la
que pensara que en realidad me iba a morir. Iglesia, y no esperaba vivir para la mañana.
Quería experimentar toda clase de dolor, Después de esto permanecí en cama por
físico y espiritual, que tendría como si me dos días más, y en la sexta noche pensé que
fuera a morir—cada temor y tentación. estaba al borde de la muerte como también
Intentaba esto porque quería ser purgada los que estaban conmigo. Y sin embargo,
por la misericordia de Dios y después vivir sentía una repulsa fuerte de no morir, no
más para su gloria a causa de esa por alguna cosa que en la tierra me
enfermedad. detuviera o a causa de algún temor o dolor,
Estos dos deseos sobre la Pasión y la porque confiaba en la misericordia de Dios.
enfermedad que deseaba de él eran con una Pero era porque quería vivir para amar a
condición porque me parecía que no era una Dios mejor y más tiempo, de tal manera que
clase de oración ordinaria. Por tanto oré, pudiera, a través de la gracia de esa vida,
“Señor, tú sabes qué quiero. Si es tu tener más conocimiento y amor de Dios ¡qué
voluntad que lo tenga, o si no es tu lo que pudiera tener aún en el cielo!
voluntad, no te desagrades de mi oración, Me dí cuenta que todo el tiempo que
porque no quiero nada que tú no quieras.” había vivido aquí era muy poco y muy corto
en comparación con la bendición de la vida
3. Tres Heridas eterna en el cielo. Pensé, “Buen
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Señor, ¿mi vida ya no es para tu gloria?” tener la compasión que pensaba un alma en
Con toda la voluntad de mi corazón asentí amor debería tener por Jesús al observar sus
en ser totalmente de Dios. sufrimientos.
Fue en aquel momento que vi la sangre
5. La Imagen de Tu Salvador
roja que corría de debajo de la corona,
caliente y fluyendo libremente, tal y como
Permanecí así hasta el séptimo día, y para
hubiera sido debajo de la corona de espinas
entonces mi cuerpo se sentía muerto desde
que presionaba su cabeza. Plenamente
adentro. Se envió al cura para que estuviera
percibí en aquel momento que era Jesús,
presente en mi muerte. Antes de que
Dios y hombre, quien sufría por mí, y ahora
entrara al cuarto, mis ojos estaban fijos hacia
lo conocía directamente sin que nadie me lo
arriba, y no podía hablar. Puso la cruz
contara.
frente a mi rostro y dijo, “He puesto la
En aquella misma revelación, de pronto
imagen de tu Salvador delante de ti; míralo
la Trinidad llenó mi corazón por completo
y toma consuelo en él.”
del gozo más grande, y entendí que se
Me parecía que estaba bien, aunque mis
sentirá así en el cielo. Porque la Trinidad es
ojos estaban fijos hacia arriba, y me parecía
Dios; Dios es la Trinidad. La Trinidad es
que era rumbo al cielo que iba. Sin
nuestro hacedor, la Trinidad es nuestro
embargo, acepté fijar mis ojos en el rostro
Protector, la Trinidad es nuestra amante
del Crucifijo si podía. Lo hice, pero
eterna, la Trinidad es nuestro gozo sin fin y
inmediatamente mi visión empezó a fallar, y
bendición, por nuestro Señor Jesucristo y en
el cuarto se puso oscuro a mi alrededor. Al
nuestro Señor Jesucristo.
enfocarse mis ojos en la cruz, todo a mi
Allí donde Jesús aparece, la Trinidad
alrededor parecía horrible como si todo
bendita se entiende. Dije, “¡Bendito sea el
alrededor eran demonios aterradores.
Señor!” en voz alta. Me sorprendí que
Después de esto la parte de arriba de mi
nuestro Dios que es temido y reverenciado
cuerpo principió a morir. No podía sentir
tuviera tanta intimidad con una creatura
nada. Mi dolor más grande era la falta de
pecaminosa como yo.
aire. Verdaderamente creí que estaba al
borde de mi muerte cuando de pronto, en
7. No más Grande que Una Avellana
ese momento, todo el dolor fue quitado y
estaba bien, tan bien como me había sentido
Al mismo tiempo que miraba esta visión de
antes. Me sentí inquieta, pues deseaba que
la cabeza sangrante, nuestro buen Señor me
hubiera sido librada de este mundo para
mostró una visión de su amor familiar. Vi
estar con Dios, como mi corazón anhelaba.
que él es para nosotros todo lo que es bueno
y consolador para nuestra ayuda. Él es
6. Caliente y Fluyendo Libremente
nuestro vestido que nos rodea y abraza por
su amor, nos abraza y nos protege, nos
Entonces de repente vino a mi mente que
rodea por su amor que es tan tierno para
debería desear por aquella primera gracia,
que nunca nos abandone. Y así en esta
que mi cuerpo pudiera ser llena con aquella
visión vi que él es todo lo que es bueno,
memoria de la pasión de Cristo. Me parecía
como entiendo.
que también podía recibir las heridas por las
Y con esto me mostró algo pequeño, no
que había estado orando también. Sin
mayor que una avellana, puesta allí en la
embargo, nunca pedí por ninguna clase de
palma de mi mano, como me parecía, y era
revelación o visión de Dios—sólo quería
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tan redonda como una pelota. La miré nuestros hábitos de oración fueron
con el ojo de mi entendimiento y pensé: traídos a mi mente, y cómo, en nuestra
¿Qué puede ser esto? Me sorprendí que ignorancia de amor, estamos
podía durar, porque pensé que por su acostumbrados a usar intermediarios en
pequeñez, pronto debería volverse nuestras oraciones. Entonces vi que trae
nada. Y se me contestó en mi más honor a Dios y más verdadero
entendimiento: dura y siempre durará, deleite si fielmente le oramos por su
porque Dios la ama; y así todo lo que ha bondad que si empleamos todos los
sido a través del amor de Dios. intermediarios en el mundo. ¿Por qué?
En esta pequeña cosa, vi tres Porque su bondad está llena y completa,
propiedades. La primera es que Dios la y en ella no hace falta nada.
hizo, la segunda es que Dios la ama, la Oramos a Dios para conocer su
tercera es que Dios la preserva. Pero pasión, muerte, y resurrección—que
¿qué vi en ella? Que Dios es el Creador viene de la bondad de Dios. Oramos a
y el protector y el amante. Porque hasta Dios por la fortaleza que viene de su
que esté substancialmente unida con él, cruz—lo cual también viene de la
nunca puedo descansar perfectamente o bondad de Dios. Oramos a Dios con
tener verdadera felicidad, hasta que, esto toda la ayuda de los santos que se han
es, esté apegada a él de tal manera que ido antes de nosotros— que, de nuevo,
no exista cosa creada entre mi Dios y yo. viene de la bondad de Dios. Toda la
Y también nuestro buen Señor me fortaleza que pudiera venir a través de la
reveló que es de muy grande placer para oración viene de la bondad de Dios,
él que un alma sencilla venga desnuda, porque él es la bondad en todo.
abierta y familiarmente. Y con amor te Porque la forma más alta de oración
oro a ti, oh Dios, por tu bondad es a la bondad de Dios. Viene hasta
entrégate a mí, porque tú eres suficiente nosotros para encontrarnos en nuestras
para mí. más humildes necesidades. Da vida a
Y estas palabras de la bondad de nuestras almas y nos hace vivir y crecer
Dios son muy queridas al alma y muy en gracia y virtud. Está cerca a la
cercanas al toque de la voluntad de naturaleza y rápido en la gracia, porque
nuestro Señor, porque su bondad llena a es la misma gracia que nuestras almas
todas sus criaturas y todas sus benditas buscan y siempre quieren.
obras plenas y sin fin fluye en ellas.
Porque él es la eternidad, y él nos hizo 9. Inmensurable Amor
sólo para sí y nos restaura por su
preciosa Pasión y siempre nos preserva Así como nuestra carne se cubre con la
en su bendito amor; y todo esto es de su ropa, y nuestra sangre está cubierta con
bondad. nuestra carne, de igual manera nosotros,
alma y cuerpo, estamos cubiertos y
8. La Forma Más Alta de Oración abarcados por la bondad de Dios. Sin
embargo, la ropa y la carne pasan, pero
Esta revelación fue dada a mi la bondad de Dios siempre permanece y
entendimiento para enseñar a nuestras siempre permanecerá más cercana a
almas a adherirse sabiamente a la nosotros que nuestra propia carne.
bondad de Dios. Al mismo tiempo,
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Dios sólo desea que nuestra alma se inmensurable que nuestro Señor en su
apegue a él con todas sus fuerzas, y en bondad tiene por nosotros.
particular, que se apegue a su bondad. Por tanto, tenemos que pedir de
Porque de todas las cosas que nuestras nuestro Amante tener todo lo que
mentes puedan pensar de Dios, es el deseamos. Porque es nuestra naturaleza
pensar de su bondad que más le agrada anhelarlo, y es su naturaleza anhelarnos.
y que trae más fruto a nuestra alma. En esta vida nunca podemos parar de
Porque nosotros somos tan amarle.
preciosamente amados por Dios que no Aprendí una gran lección del amor
podemos ni siquiera comprenderlo. en esta visión bendita. Porque de todas
Ninguna cosa creada puede alguna vez las cosas, contemplar y amar al Creador
saber qué tanto y cuán dulce y hizo a mi alma parecerse menos a sí
tiernamente Dios la ama. Es sólo con la misma y llenarla por completo con el
ayuda de su gracia que somos capaces temor reverente y la verdadera
de perseverar en la contemplación mansedumbre y con mucho amor por
espiritual con asombro interminable de mis hermanos cristianos
su amor alto, más allá de todo,
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.SELECCIÓN BÍBLICA: SALMOS 8
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¡Oh Jehová, Señor nuestro, cuán glorioso es tu 5 Le has hecho poco menor que los ángeles, y lo
nombre en toda la tierra! Has puesto tu gloria coronaste de gloria y de honra. 6 Le hiciste
sobre los cielos; 2 De la boca de los niños y de los señorear sobre las obras de tus manos; todo lo
que maman, fundaste la fortaleza, a causa de tus pusiste debajo de sus pies: 7 Ovejas y bueyes, todo
enemigos, para hacer callar al enemigo y al ello, y asimismo las bestias del campo, 8 las aves
vengativo. 3 Cuando veo tus cielos, obra de tus de los cielos y los peces del mar; todo cuanto pasa
dedos, la luna y las estrellas que tú formaste, 4 por los senderos del mar. 9 ¡Oh Jehová, Señor
digo: ¿Qué es el hombre, para tengas de él nuestro, cuán grande es tu nombre en toda la tierra
memoria, y el hijo del hombre, para que lo visites?
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!
PREGUNTAS DE REFLEXIÓN

Las siguientes preguntas se pueden usar para la discusión dentro de un pequeño grupo,
o para la reflexión individual en un diario.

1.
¿Has experimentado alguna cosa parecida como lo que Juliana llama una
“revelación?” Si es así, describe. Si no, ¿crees que estas experiencias son reales?
2. La oración de Juliana, como ella nota, no era una oración ordinaria, y por eso añadió
una protesta (“si no es tu voluntad...”). ¿Qué clase de cosas has ansiado tener y te
sientes inseguro de pedirlas a Dios, inseguro de si estás en línea con los deseos de
Dios?
3. ¿Por qué Juliana anhelaba una enfermedad? ¿Qué logró en su vida espiritual?
¿Alguna vez las enfermedades te han llevado o llevado a alguien que conoce a una
conciencia más grande de Dios?
4. ¿Qué crees que significa orar de acuerdo a “la bondad de Dios”, como Juliana
prescribe? Si esto fuera el fundamento de tus oraciones, ¿de qué manera serías
cambiado de la forma en que oras actualmente?
5. ¿Qué nos enseña el Salmo 8 sobre la naturaleza de Dios? ¿Sobre la naturaleza e
importancia de los seres humanos?
EJERCICIOS SUGERIDOS

Los siguientes ejercicios se pueden hacer individualmente, compartirse entre amigos

1. Juliana fue inspirada a una temprana edad con un deseo de tres cosas de Dios.
Gaste algún tiempo reflexionando sobre esta pregunta: ¿Qué tres cosas deseo más
de Dios? Hágalas el asunto de su oración esta semana.
2. Experimentar la Pasión o muerte de Jesús era un deseo central de Juliana, y ha sido
el objeto fructífero de la reflexión cristiana por siglos. Esta semana centre su tiempo
de oración sobre la pasión de Cristo, enfocándose cada día en un aspecto diferente
de la muerte de Cristo.
3. La meditación de Juliana sobre la “avellana” le llevó a considerar cómo Dios es el
que crea, ama, y preserva. Dé una caminata por la naturaleza; permítase
maravillarse en la creación, de cómo Dios estaba agradado en hacer cada árbol, cada
hoja del césped, y cómo Dios, en su gracia, preserva todo lo que existe.
4. Juliana escribe, “Es el pensar de su bondad [de Dios] que le agrada más”. Esta
semana enfoque sus pensamientos en la bondad de Dios. Agarre cualquier
oportunidad para hablar sobre la bondad de Dios entre sus amigos. Mantenga los
pensamientos de la bondad de Dios presentes en donde quiera que vaya.

REFLEXIONES

¿Notaste que el resultado final de las experiencias de Juliana fue el ser atraída a un entendimiento
más profundo de la bondad de Dios? Ella, de hecho, llamó la experiencia de la bondad de Dios “la
forma más alta de oración”.
Esta es una realidad dura para que nosotros los modernos entremos. Hemos sido enseñados
que “la buena vida” reside en todo y en cualquier cosa menos en Dios. El discipulado, la cruz, la
obediencia, —estas son palabras que difícilmente asociamos con la bondad. Y porque no podemos
ver la bondad de la justicia, fallamos en ver la bondad de Dios. Pero quizás, sólo quizás, podemos
agarrar la insinuación de Juliana—y el salmista—para “probar y ver que el Señor es bueno”.
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Richard J. Foster

PROFUNDIZANDO
Julian of Norwich. Showings [Demostra- ciones].
Traducido por Edmund Colledge y James
Walsh. Nueva York: Paulist, 1978. Este es
parte de la serie The Classics of Western
Spirituality [Los Clásicos Espirituales del
Occidente]. Contiene el texto corto y el largo,
y es la mejor en inglés. La Introducción es de
valor especial, como muchas de las
introducciones en esta serie. (En ocasiones
este libro lo titulan Revelations of Divine Love
[Revelaciones del Amor Divino])
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